Enemigos Del Comercio
Enemigos Del Comercio
Enemigos Del Comercio
com
ANTONIO
ESCOHOTADO
Los
enemigos
del comercio
Una historia moral
de la propiedad
II
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 5
26/07/13 11:22
www.elboomeran.com
www.espasa.com
www.planetadelibros.com
El papel utilizado para la impresin de este libro es cien por cien libre de cloro
y est calicado como papel ecolgico.
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 6
26/07/13 13:27
www.elboomeran.com
NDICE
SECCIN PRIMERA
19
20
24
27
28
30
2. LO RELATIVO Y LO ABSOLUTO................................................
I. El absolutismo laico .....................................................
1. Nuevos fundamentos para la omnipotencia .........
2. El arquetipo proyectivo .........................................
3. Lo inmutable y lo cambiante .................................
II. Neutralidad valorativa y condiciones de contorno .....
1. El reto de una realidad progresivamente densa....
2. Los ingredientes del juicio.....................................
35
37
39
41
44
47
50
53
57
58
61
63
65
66
68
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 9
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
71
72
74
75
77
81
82
84
88
90
94
98
102
104
5. LO PRCTICO Y LO SUBLIME...................................................
I. Hacia una exasperacin del sentido comn ...............
1. Un placer desvinculado de Afrodita y Dioniso ....
2. La gentica como ilusin .......................................
II. Los deberes de lo sublime ...........................................
1. La autarqua como alternativa ...............................
2. El ideal irrealizable ................................................
109
111
113
115
118
120
122
127
128
128
130
134
139
141
143
145
150
155
157
160
162
10
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 10
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
165
167
169
170
175
176
177
181
184
187
188
191
194
196
199
200
203
205
207
211
213
217
219
220
221
225
226
229
231
234
236
237
241
244
246
11
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 11
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
250
254
257
258
259
263
268
271
273
275
278
280
SECCIN SEGUNDA
285
288
291
293
297
301
302
305
307
308
311
317
318
320
322
323
327
12
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 12
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
333
334
337
339
342
345
349
351
369
370
373
377
379
381
383
387
390
392
395
398
400
403
407
413
415
418
422
424
353
357
361
365
13
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 13
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
427
428
431
434
435
438
441
442
445
449
452
456
459
460
464
469
471
475
476
480
481
483
484
489
490
492
494
498
501
505
506
508
14
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 14
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
510
512
519
520
521
523
528
533
537
538
540
541
542
546
551
553
557
565
569
571
575
579
583
585
588
591
594
596
598
600
603
15
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 15
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
NDICE
607
609
612
616
619
620
624
626
628
633
637
640
643
645
647
651
653
654
658
661
665
670
675
693
16
22867_LosEnemigosDelComercioII.indd 16
26/07/13 11:03
www.elboomeran.com
www.elboomeran.com
4.-Irrumpe
con
fuerza
la
figura
del
intelectual,
profesional
sin
profesin,
como
portavoz
del
resentimiento:
"El hecho de que Engels y l [Marx] omitan la sociologa del intelectual no nos
obliga a hacer lo mismo, y basta plantear el tema para caer en la cuenta de que su figura no nace a
mediados del siglo XIX, con algunas personas tuteladas ms all de la juventud por sus respectivas
familias. Atenindonos al contenido de su mensaje, que revierte crnicamente sobre cuadros de
esclavitud y martirio, el intelectualismo anima ya el medievo a travs de clrigos insumisos que
predican el Milenio; prosigue con los humanistas menos destacados por erudicin y se renueva con
el ilustrado a la francesa, igualmente ligero de equipaje tcnico si se le compara con el ilustrado
ingls y el alemn, hasta alcanzar su primer brote de gloria a travs de Marat. [] el comunismo
moderno es la primera revolucin llevada al xito por intelectuales. El nico apoyo previo para
hacer esa afirmacin era el anlisis ofrecido por Schumpeter en 1942, donde define esa figura como
profesin del no profesional, especializado en alimentar y organizar el resentimiento, cuyo rasgo
comn es soslayar sistemticamente la formacin en profundidad. (Captulo 18, pg. 354-356).
5.-Cuanto
mayor
es
el
pormenor
sobre
Marx,
ms
se
aleja
su
figura
de
las
ideas
preconcebidas:
"El hecho de que Marx sea el gran terico de la propiedad comn y a la vez un
hombre siempre desamparado contribuye a precisar su tesis de que la fuente de ingresos
determina la conciencia. Todos sus bigrafos subrayan una prodigalidad que [] le llevaba a
superar ampliamente el gasto de colegas con familias ms prsperas [] se abstuvo de trabajos
remunerados, [] mediando adversidades externas como ver morir a cuatro de sus seis hijos, y
perder finalmente a un cnyuge minado por el agotamiento y la angustia del pobre vergonzante.
Atroz fue la muerte de Edgar a los seis aos, cuando ya se haba acostumbrado a la picaresca de que
le fiasen el pan o la leche, o a quedarse en cama no solo porque tena empeados los zapatos y el
abrigo, como su padre, sino porque el carbonero se negaba a seguir fiando, y las frazadas eran su
nico cobijo. El Capital dedica uno de sus sarcasmos ms amenazadores al trabajo infantil,
aparentemente ajeno a que todo resulta preferible antes de dejar que los nios sucumban por
desnutricin y fro. Puede considerarse un golpe de buena suerte no saber que Laura y Eleonora, las
dos hijas supervivientes, acabaran suicidndose. De los ocho miembros de su familia solo l
cumpli los sesenta aos [] y al aguijn de la miseria cabe atribuir al menos parte del impulso
requerido para demostrar que la economa es la ciencia de la renuncia, de la privacin, del
ascetismo. (Captulo 20, pgs. 391-395)
6.-Marx
no
existe
como
socilogo:
"Durante la dcada siguiente se convierte en un economista
erudito, coincidiendo con el dramtico empeoramiento en sus condiciones de vida, y abandona
prcticamente el trabajo de investigacin aparejado a confirmar que la pauta del progreso histrico
gira sobre la lucha de clases. Seguir postulando esa ley, desde luego, pero a la objecin
fundamental el nexo de dicho principio con el los ltimos sern los primeros de la promesa
mesinica iba a aadirse la irona de que muriese cuando iba a hacer un anlisis sistemtico del
concepto de clase o en palabras de otro historiador que fuera postergando la tarea hasta
cuando result demasiado tarde [] Vimos ya que la sociologa del intelectual tampoco mereci la
atencin de Marx, y el malentendido de considerarle socilogo cuando la diferencia entre simple
y complejo fue lo menos desarrollado de su pensamiento culmina en el carcter puramente ideal
de su clase obrera, a la que no corresponde el deseo de abolir la propiedad y el comercio." (Captulo
20, pgs. 387-388)
2
www.elboomeran.com
7.-El
Marx
economista
se
basa
en
una
teora
del
beneficio
insostenible,
pero
adems
es
Engels
quien
escribe
la
mayor
parte
de
El
Capital:
"Cuando el lector empieza a temer que el
tratado quiz siga sin entrar en teora econmica propiamente dicha, la seccin tercera introduce el
plusvalor (surplus-value, Mehrwert) como exceso del valor del producto sobre la suma del valor de sus
elementos, entendiendo que todo beneficio es una forma transfigurada del hurto de trabajo,
gracias a la cual la mercanca desdibuja y borra su origen y el secreto de su existencia." (Captulo
20, pg. 402). "Trabajando sobre la parte menos desordenada, Engels logra componer para 1885 un
libro II (La circulacin del capital) prologado con su habitual magnanimidad, alegando que
representan exclusivamente el trabajo de su autor, no el de su editor [] Aunque el tercer
volumen era mucho ms importante que el segundo, pues al fin abordaba el problema de convertir
los valores en precios, y la tasa de plusvalor en tasa de beneficio, editarlo result esencialmente
distinto [] A tal punto es as que sencillamente debe escribir de principio a trmino algn
captulo como el IV, ponindolo por eso entre corchetes. Ya no puede negar que el resultado
le debe algo a su editor, pero la dcada empleada en ello es tanto ms conmovedora considerando
que Marx abandon su plan expositivo original algo antes de imponrselo realmente la salud,
coincidiendo con el momento en que el hasta entonces indiscutido principio del valor/trabajo top
con el de la utilidad marginal." (Captulo 18, pgs. 365-366).
8.-La
dinamita
es
el
ingrediente
esencial
para
los
revolucionarios
eslavos
y
latinos:
"Del
Catecismo revolucionario [de Bakunin] se conservan dos versiones, una escrita con Nechayev que se
concentra en destruir todo lo establecido" (Captulo 16, pgs. 327-329). "El hroe siguiente es
el Rakmetov del Qu hacer?, un ngel de la venganza popular que para curtirse solo come carne
cruda y duerme sobre un lecho de clavos, a la manera del fakir hind, cuya versin del socialismo
est en las antpodas de la resistencia pasiva, [] un hallazgo de lo negativo/aniquilador como
recurso higinico supremo, que no tarda en hallar su aliado providencial en la dinamita. Esa
transicin estaba implcita ya desde los aos cincuenta, cuando Bakunin propuso que los eslavos (y
los latinos) tienen un destino revolucionario distinto de todos los ensayados, donde lo esencial es
recomenzar desde cero. [] El revolucionario ha roto cualquier vnculo con el orden, las leyes, las
buenas maneras, las convenciones y la moralidad del mundo civilizado. Es su inmisericorde
enemigo, y sigue habitndolo con un nico propsito: destruirlo [Nechayev]" ((Captulo 24, pgs.
465-469)
9.-La
revolucin
cantonalista
de
1873
aporta
a
la
memoria
histrica
nuevos
datos
para
el
anlisis
del
cainismo
ibrico:
"Pero veamos en primer trmino qu parentesco podra tener la
revolucin cantonal con iniciativas como Venganza Popular, y ante todo con la tesis de que latinos
y eslavos coinciden por querer destruir hasta los cimientos, aprovechando fuentes como el informe
redactado entonces por Lafargue y Pablo Iglesias y un ensayo de Engels, que pasa revista a la prensa
libertaria del momento. Una huelga general no pareca la mejor forma de saludar al gobierno de Pi,
ni algo vagamente factible, y de ah la sorpresa de socialistas y comunistas ante el Solidaridad
Revolucionaria del 3 de julio [1873], que convoca una huelga general de cuatro semanas ante el
profundo horror que nos produce ver al gobierno desatendiendo la lucha contra los carlistas.
Madrid, Bilbao y sobre todo Barcelona, donde se concentran nueve de cada diez obreros
industriales, desoyen el llamamiento, aunque la Alianza Bakuninista demuestra su vitalidad
provocando la aparicin de hasta 35 cantones. []" (Captulo 26, pg. 492).
www.elboomeran.com
www.elboomeran.com
caso de modo tangencial. Lo mismo ocurre a lo largo del siglo siguiente, cuando de grado o por
fuerza lo antes raro se torna tan habitual como vivir de un sueldo, pues la figura sobre la cual gira el
progreso del profesionalismo el fabricante/inventor sigue siendo invisible para el pblico
general, e incluso para Ricardo y Marx, que lo confunden con el capitalista y el rentista. Ni la
sociologa del trabajo concreto ni pesquisas sobre el impacto del empresario creativo llegan antes de
acercarse el siglo XX, y en el nterin el tema sigue dominado por una rentable avalancha de
versiones melodramticas, cuyo denominador comn es ignorar la variable de trabajar por vocacin
o contra ella." (Captulo 23, pg. 444)
14.-Una
historia
concreta
de
las
crisis
cclicas
de
la
economa
desarrollada:
"Ningn
economista en sus cabales ha propuesto que la inversin pblica pueda suplir sine die una creacin
privada de recursos, y la Depresin Larga evoca de un modo u otro la crisis tambin planetaria y
quiz no menos duradera iniciada formalmente en 2008, que el banquero de los banqueros A.
Greenspan atribuy un ao antes a la exuberancia irracional de dcadas previas. En aquel caso,
como hoy, los atentados a la confianza vuelven a mostrar que lo vital es la confianza misma, un
punto de apoyo maravillosamente elstico mientras no lo congele alguna secuencia de estafas, cuyo
resultado es siempre evaporar la liquidez. Sin abusos de confianza se observa el efecto inverso en
medios donde hayan arraigado el espritu de iniciativa y el librecambio, aunque ni lo uno ni lo otro
previenen la irrupcin en algn momento del estafador, una criatura comn a todos los sistemas
econmicos." (Captulo 29, pgs. 538-539).
15.
Lenin
es
el
culmen
de
una
aterradora
secuencia
de
revolucionarios
profesionales
que
comienza
con
Blanqui:
"Su propio retrato de Blanqui [el de Tocqueville] muestra hasta qu punto
toparse con un vengador mesinico no evoca reflexiones sobre la evolucin del mesianismo sino
algo ms prximo al escalofro." (Captulo 2, pg. 48). "Aunque disolver la Asamblea Constituyente
era decretar la guerra civil, Lenin acaricia ese proyecto desde los veinte aos, cuando vecinos de su
ciudad, Samara, le denunciaron por no sumarse a la campaa nacional montada para mitigar la
hambruna de 1891, en la cual moriran medio milln de personas. Entonces explic a un camarada
que la inanicin destruye a la desfasada economa, anticipando el socialismo, y ahora est en su
mano dinamitar el valor de cambio con la orden de acuar papel moneda en cantidades gigantescas,
algo fugazmente til como liquidez y ante todo capaz de forzar el paso hacia una sociedad libre del
dinero. Lo que en 1917 vala dos cntimos valdr en 1919 cien mil rublos, y morirn de indefensin
ese ao unos cinco millones de personas, si bien no hay a su juicio otro modo de renovar
saludablemente la vida social." (Captulo 35, pg. 667).