(Reseña) La Relacion Paciente-Terapeuta - Coderch
(Reseña) La Relacion Paciente-Terapeuta - Coderch
(Reseña) La Relacion Paciente-Terapeuta - Coderch
primera mitad del siglo XX. Esta concepcin se caracterizaba por el positivismo, la fe
en la razn y en la ciencia, por el convencimiento de que hay verdades esenciales y de
que, mediante la inteligencia y las investigaciones cientficas, la verdad ir siendo
descubierta progresivamente, y la humanidad acabar por dominar a la naturaleza. Las
supersticiones, las religiones y los mitos desaparecern, y el conocimiento cientfico
guiar la vida de los seres humanos de una forma racional para conducirles a la
felicidad. Freud era un tpico representante de este tipo de pensamiento; aunque al final
de su vida, en Anlisis terminable e interminable, parece que haba abandonado gran
parte de este pensamiento. Freud, y los cientficos de esta poca, intentan eliminar el
factor subjetivo en las investigaciones, y se afanan por encontrar leyes universales que
lo explicaran todo de forma objetiva. La insistencia de Freud de neutralidad,
abstinencia, anonimato, objetividad, era una manera rgida de separar el observador de
aquello que era observado. Fueron los fsicos los que cayeron en la cuenta de que el
observador modifica aquello que observa, y que el principio de objetividad no se
sostena. Al mismo tiempo, los avances de la tecnologa en los medios comunicacin
dan lugar a la instauracin de una era en la que predomina la realidad virtual sobre la
realidad y experiencia directa. Todo ello, ha ido originando, lo que conocemos como
cultura o pensamiento posmoderno.
Coderch hace, en este captulo, una sntesis de lo que l considera que es el
pensamiento posmoderno, debido a las divergencias que existen. El pensamiento
posmoderno se opone la fe ciega en la ciencia, en el razonamiento y la metodologa
cientfica. Y desde este punto de vista, la verdad es perspectiva, plural, fragmentada,
discontinua, calidoscpia y siempre cambiante.
Coderch distingue entre posmodernidad para denominar una etapa histrica, y
posmodernidad como concepto para clasificar una cultura. Desde el punto de vista
histrico nos hallamos en la posmodernidad, pero desde el cultural nos hallamos en la
dialctica modernidad/posmodernidad. Y dado que el psicoanlisis tiene muchos
puntos en contacto con el pensamiento posmoderno, dado que los temas de inters
son las relaciones, el self, la subjetividad, el conocimiento y la realidad, es por lo que el
psicoanlisis, paralelamente, se encuentra en la dialctica psicoanlisis tradicional y
psicoanlisis relacional.
Coderch intenta profundizar un poco ms sobre la dialctica modernidad/
posmodernidad. La filosofa moderna conceptualiz el self, como una identidad
diferenciada y estable; en cambio la posmodernidad rechaza la idea de que los seres
humanos tengan un ncleo central y unitario, dada su desconfianza en la cultura de la
Ilustracin, basada en la confianza de que la razn liberara a la humanidad de todos
sus males. No se trata, segn Coderch, de que la cultura posmoderna rechace la
ciencia y la tcnica, sino que no confa que se puedan descubrir verdades universales.
Los pensadores posmodernos son partidarios de una valoracin del self y de la
sociedad basada en las reglas de los sistemas del lenguaje. Los posmodernos de
orientacin construtivismo social, argumentan que los sucesos no tienen otra realidad
que las descripciones lingsticas, lo mismo ocurre con el self individual y con la
identidad. El self, de acuerdo con esta orientacin, slo es una experiencia que se
desarrolla en funcin del entorno social, del momento, de manera que cada sujeto
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posee diversos selfs, segn los diferentes entornos y requerimientos de su vida social y
profesional. Desde este punto de vista, el mundo y la realidad son construcciones a
travs del lenguaje y las convicciones sociales. Esta visin nos conduce a una
creatividad, para jugar con la perspectiva del self y de la propia identidad, por lo que la
vida humana es juego y este es el sucesor de la realidad.
Coderch aclara que el pensamiento posmoderno no es relativista, de lo cual se le
acusa, sino pluralista. Aclara que para el relativismo, una proposicin puede ser
verdadera o falsa, segn la perspectiva desde donde se la mire. Y el pluralismo
sostiene que no existe una nica posible descripcin del mundo, y por lo tanto no hay
una proposicin verdadera o falsa, sino diversas perspectivas o teoras para explicar la
realidad, y no son necesariamente incompatibles. Coderch, de acuerdo con esto,
entiende la posmodernidad como una modernidad sin falsas ilusiones, como un estado
de la mente, donde la ambigedad, el pluralismo, la contingencia, y la incertidumbre, no
son vistas, como distorsiones o patologas que han de ser vencidas, sino como modos
de experiencia social y cientfica que ponen en evidencia la imposibilidad de la
objetividad total y de la verdad absoluta y universal.
Coderch aclara que se ha de distinguir entre el pensamiento posmoderno, cnico y
radical, influido por filsofos europeos ( Nietzsche y Heidegger), del pensamiento
posmoderno positivo emparentado con la cultura angloamericana. Y es en este ltimo
donde se encuentra emparentado con el interpersonalismo de H. S. Sullivan. Adems
los psicoanalistas de orientacin posmoderna se siente atrados por el pensamiento
kleiniano, y especialmente por Bion. Esto no es de extraar, segn Coderch, si se tiene
en cuenta que el denominador comn del psicoanlisis influido por el pensamiento
posmoderno es la interaccin paciente-analista, en el papel que desempea el analista
en la transferencia del analizado y el rechazo del modelo donde el analista es un
observador distante, que interpreta sin tener nada que ver con lo que sucede en la
mente del paciente, propio de la psicologa del yo. Bion ha influido en el pensamiento
posmoderno por la importancia que da a la imaginacin, a la fantasa, a lo desconocido
y al punto 0, equivalente a lo que los psicoanalistas relacionales denominan la
autntica subjetividad. Pese a todo lo expuesto sobre la influencia del pensamiento
posmoderno positivo, Coderch considera que, no se puede abandonar la aspiracin a
la ciencia, pero hay que entenderla como una empresa social en busca de una verdad,
que puede ser evaluada pragmticamente, pero sin poder acceder totalmente a ella.
Para Coderch, la penetracin de la posmodernidad en el psicoanlisis ha dado lugar a
dos tipos de efecto. Por un lado se han desarrollado nuevas orientaciones, que incluso
han creado escuela. Y por otro lado, estas orientaciones, se han introducido en las
escuelas tradicionales y han motivado transformaciones. Una de las transformaciones
ms importantes que se est dando, en la teora y la prctica psicoanaltica, es la
manera de entender la transferencia. Globalmente ha sido vlido para todas las
escuelas, entender la transferencia, como una distorsin de la persona del analista al
serle proyectada las imgenes internas del paciente. El analista, por su parte, siempre
se ha considerado como alguien dotado de una visin objetiva de lo que ocurra para
advertir al paciente de los falseamientos que lleva a cabo en su relacin con l. A partir
de la influencia de lo comentado hasta ahora, cada vez son ms los psicoanalistas que
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consideran el impacto del analista sobre el paciente, y debe examinarse como parte
intrnseca de la transferencia, la cual es vista como basada en la mutua contribucin de
ambos participantes en interaccin. Es decir, la transferencia es vista como un hecho
psquico, que tiene siempre una significante y plausible base en el aqu y ahora de la
realidad del analista. El objetivo principal, en el modelo de transferencia visto, como
una nueva experiencia, es su plena vivencia y comprensin y, en ella la reparacin del
llamado defecto o dficit como huella de un desarrollo alterado. Coderch dice, en el
presente libro que los dos modelos se combinan y complementan.
Por todo ello, Coderch, tambin manifiesta que el tratamiento psicoanaltico, cada vez
ms, se ha comparado con un proceso de desarrollo, similar al que viven los nios en
relacin con sus padres, lo cual ha influido en la manera de discernir la transferencia y
los efectos de las interpretaciones. Con ello, no se trata de adoptar una actitud
parental, sino de utilizar los conocimientos acerca del desarrollo infantil, para
comprender los movimientos transferenciales y las necesidades emocionales del
paciente.
Igualmente Coderch, considera que todas las transformaciones en la teora acaban en
transformaciones en la prctica, y que en lugar de hablar de metas a conseguir en el
proceso analtico, se decanta por hablar de expectativas, y lo enlaza con el siguiente
captulo.
La cuestin que se trata en el Captulo II El Objetivo de la Relacin PacienteTerapeuta: El Cambio Psquico, ha sido siempre una cuestin de mxima importancia
dentro de la teora y la prctica del psicoanlisis. Coderch, a pesar de la gran dificultad
que ello comporta, y las mltiples opiniones y dudas, se ve en la necesidad de
reflexionar sobre el cambio psquico, dado que este es el objetivo que persiguen, tanto
el paciente como el terapeuta, en su relacin. Tambin, por lo tanto, se pregunta por la
relacin de ste, con el concepto de modificacin de estructura.
Coderch cree que, para los psicoanalistas, en relacin con el proceso psicoanaltico, la
idea de que no hay nada inmutable y de que todo se halla en permanente flujo, es
particularmente atractiva, porque se aproxima a nuestro concepto de mente. No
consideramos la mente como algo esttico y fijado, sino como un conjunto de funciones
psquicas en continuo movimiento, el resultado de una constelacin de pulsiones,
fantasas, emociones, deseos y ansiedades que interaccionan constantemente entre s,
y junto con los estmulos externos y del propio organismo. Concebimos la mente como
algo que se halla en estado de movimiento ininterrumpido. Desde este punto de vista,
el cambio es posible porque la mente es dinmica, y a la vez los pacientes continan
siendo ellos mismo, dado que no altera la identidad de una cosa, dado que en s misma
es movimiento. Lo que se ha modificado en los pacientes de los que decimos que han
cambiado, es el sentido, el equilibrio y la configuracin de este constante movimiento
de funciones psquicas que constituyen nuestra mente. Todo ello, segn Coderch, lleva
a la nocin de estructura, puesto que toda funcin revela una determinada estructura
de los elementos que intervienen en ella, y consecuentemente, todo cambio de funcin
refleja una modificacin de la estructura.
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Coderch destaca como antecedentes histricos del modelo relacional a Ferenczi, cuya
obra versa sobre las relaciones entre el paciente y el terapeuta, especialmente de que
el analista no repita la histria infantil de paciente, de no convertirse en un agente
traumatizante y participante de su trauma infantil; por lo que entiende la transferencia
no como algo que surge de la mente del paciente, sino como una co-creacin conjunta
paciente y analista.
Coderch opina que cada vez son ms los psicoanlistas que opinan que, cualquier acto
durante la sesin, ya sean interpretaciones, intervenciones como los silencios, y
comportamientos, son un acto de relacin con el paciente.
El psicoanlisis relacional tiene inters simultneo por lo intrapsquico y lo
interpersonal, pero lo intrapsquico, es visto como la internalizacin de las experiencias
interpersonales, mediatizadas por las disposiciones genticas y neurofisiolgicas. As,
para Coderch, son complementarias, y entendiendo las relaciones tanto internas como
externas, tanto reales como imaginarias, siendo centrales en la formacin y desarrollo
de la mente humana as como en su patologa y, en el tratamiento de esta.
Coderch considera que el psicoanlisis relacional no es una escuela unificada e
integrada, pues parte de diferentes corrientes, si no que ms bien agrupa distintas
maneras de enfatizar la importancia de las relaciones interpersonales y su repercusin
intrapsiquca, tanto en el desarrollo como en el proceso psicoanaltico. Para Coderch el
psicoanlisis relacional aporta un enriquecimiento al psicoanlisis tradicional.
Coderch para profundizar en el concepto de interaccin, diferencia entre enactment,
acting-out, y acting-in, sin confundirse con la totalidad de la interaccin. El concepto de
enactment se utiliza para describir la manera en el que el paciente y el terapeuta
actan verbalmente y no verbalmente, el uno sobre el otro. Es decir como una forma
continuada de comunicacin inconsciente, influencia interpersonal y persuasin entre
paciente y analista. Por otra parte, el acting-out se entiende como una forma de
comportamiento compulsivo del paciente, como una forma de expresar sus conflictos y
ansiedades fuera de la sesin, en lugar de vivirlos en la transferencia con el terapeuta.
Se trata de actuar en lugar de pensar. Coderch diferencia entre acting-out destructivo y
comunicativo. Y la diferencia entre el acting-out y el enactment, es que el primero es un
comportamiento impulsivo abiertamente detectable, y el segundo se trata de una
encubierta y continuada relacin interpersonal dentro del setting. Otra diferencia es que
el acting-out destructivo supone un ataque contra el terapeuta, mientras que en el
enactment forma parte de los matices de dicha relacin. El acting-in viene a significar
algn tipo de actividad, verbal o no verbal, que impide el funcionamiento mental del
analista. Este trmino ha cado en desuso por el de vivir en la transferencia,
entendiendo que el paciente tiene la necesidad de comunicar al analista, a travs del
intercambio emocional, aquellas ansiedades, fantasas y experiencias, pertenecientes a
niveles preverbales y de caractersticas psicticas, que no conoce y no puede expresar
con palabras. Esto enlaza el pensamiento de numerosos analistas poskleinianos,
como Bion, Rosenfeld, con el psicoanlisis relacional.
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momento que se impone un mtodo y una forma bien peculiar de relacin, no cree que
pueda ser un ejemplo de neutralidad.
En el capitulo V, La intersubjetividad en la relacin paciente-terapeuta, Coderch
comenta algunas de las ms relevantes opiniones sobre el trmino intersubjetividad,
dado que se utiliza con diferentes sentidos, para acabar exponiendo su propia opinin.
Stolorow y Atwood fueron quienes introdujeron por primera vez el trmino en el
psicoanlisis norteamericano, y destacan que los fenmenos psicolgicos no se
pueden comprender fuera de los contextos intersubjetivos en los que forman parte. El
objeto de la investigacin analtica, no es la mente aislada, sino el interjuego entre el
mundo subjetivo del paciente y el terapeuta, o del nio y el cuidador. Para ellos, el uso
del trmino intersubjetivismo no presupone la adquisicin del pensamiento simblico,
del concepto de uno mismo como sujeto, o de la relacin intersubjetiva en el sentido
que lo expone D. Stern. Tambin se intenta diferenciar de los que utilizan el trmino en
los estudios de desarrollo infantil, dado que lo utilizan para referirse a campos de
experiencia interactiva en los diferentes niveles de desarrollo.
Una de las autoras que ms ha influido en la difusin es J. Benjamn, que entiende,
tambin, que el proceso psicoanaltico tiene lugar entre dos sujeto ms que en la mente
del analizado. Pero esto nos confronta con el problema de reconocer al otro como
centro de experiencias, a causa del peso en el psicoanlisis tradicional del trmino
objeto, dado que se refiere a la internalizacin psquica y a la representacin de las
interacciones entre el self y los objetos, por lo que se pierde todos aquellos aspectos de
la personalidad que no se estn relacionando con el self de aquel que se est
relacionando con ese otro. Para ella, por lo tanto, donde estaban los objetos han de
devenir sujetos. Considera que las dos dimensiones de la experiencia, con el otro como
objeto y como sujeto, no son opuestas, sino complementarias, refirindose a la
dimensin intrapsquica y a la dimensin intersubjetiva. En la experiencia intersubjetiva
el otro no es nicamente percibido como el objeto de las necesidades, los impulsos o la
cognicin del yo, sino como separado y anlogo self. Por tanto, el concepto de
intersubjetividad nos lleva a un proceso dialctico en que los interlocutores se
reconocen el uno al otro como centro de experiencia subjetiva, pero tambin negando
al otro. Coderch, al igual que esta autora, cree que esta visin de los dos extremos, es
importante, porque si en un proceso no se alcanza la mutualidad de reconocimiento del
otro con facilidad, se establece una relacin de dominancia-sumisin
Para Stern, el concepto de intersubjetividad se refiere a la capacidad, adquirida a
travs del desarrollo, de reconocer al otro como un centro separado de experiencia
subjetiva, con lo que se pueden compartir los propios estados subjetivos, pero tambin
negando al otro como sujeto separado.
Segn Coderch, las diferencias ms significativas para el inters de la terapia
psicoanaltica, se basan en la diferencia que dan estos autores a lo que se denomina el
principio de mutua regulacin y el principio de mutuo reconocimiento. Tambin habla de
la importancia que tiene la identificacin proyectiva, que da lugar a lo que Odgen llama
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