Emancipación Femenina
Emancipación Femenina
Emancipación Femenina
La funcin materna que antes daba identidad a las mujeres ha sido relegada por la
bsqueda de autonoma y realizacin personal (Beets, 2011). El trabajo ha
obligado a competir en un mercado dominado por varones, para ello se hizo
imprescindible el alcance de logros acadmicos, incrementndose la poblacin
femenina en las universidades (Dwyer, & Bruce, 1988).
Estos procesos socio histricos han producido tres identidades femeninas: la
madre-esposa (Lagarde, 1990), la mujer que trabaja para el marido y la mujer
emancipada (Zarco, 1997).
En una investigacin realizada en la ciudad de La Paz, se evidenci la diferencia
del discurso femenino entre tres generaciones de mujeres. La primera
comprendida por mujeres entre 26 y 31 aos se centraba en temas de
autorrealizacin, amor y trabajo. La segunda entre 51 y 62 se concentr en los
hijos, el hogar y los problemas con los maridos y la tercera entre 71 y 80 aos lo
haca sobre la salud, y problemas con los hijos (Medina, 2013).
Indudablemente las mujeres han cambiado la definicin de s mismas. No toleran
la dominacin masculina (Rodriguez, & Ganacim, 2014) y exigen vehementemente
la equidad con los varones (Molyneux, 2011).
Los varones estamos en crisis al no saber cmo adaptarnos a los cambios
femeninos (Vlads,& Olavarra, 1997; Clare, 2001). Ante la incapacidad de
aceptacin de la emancipacin femenina un recurso infortunado es la violencia. En
Bolivia se seala que 7 de cada 10 de mujeres son vctimas de algn tipo de
violencia (Lagrava, 2010; Coordinadora de la Mujer, 2014). 284 mil casos de
violencia domstica han sido registrados por la Polica en un perodo de cinco
aos. Eso quiere decir que se han dado alrededor de 56.800 casos por ao, entre
violencia fsica, psicolgica y sexual (Observatorio Nacional de Seguridad
Ciudadana, 2013).
Los cambios en las funciones de la mujer latinoamericana involucran
transformaciones en su identidad, situacin que trae consigo resistencia al cambio
en pases con tradicin patriarcal. Sin embargo las mujeres han incursionado en la
poltica promoviendo debates sobre temas concernientes a las mujeres, nunca
ambigua, con la presencia de rabia y tristeza (Sbarra, & Ferrer, 2006). Estas
emociones pueden promover la violencia hacia la pareja (Zanville, & Cattaneo,
2012).
La autonoma femenina ha tenido un importante impacto en la decisin de la
maternidad, a mayor empoderamiento femenino menor la posibilidad de
embarazos no deseados (Abadian, 1996). Las mujeres se han reapropiado de su
cuerpo, arrancndolo de la posesividad masculina, ha sido una conmocin para la
sexualidad egosta de los varones (Holland, Ramazanoglu,Sharpe, & Thomson,
1996). La tendencia de las mujeres hacia la recuperacin del placer fsico se hizo
evidente en un estudio sobre el concepto del placer realizado en la ciudad de La
Paz (Pinto & Villarroel, 2011).
Los cambios en las actitudes sexuales de las mujeres (Eagly, 2013) y las
exigencias de equidad en las labores domsticas (Anderson, 2000) han
determinado la modificacin de los acuerdos conyugales (Meraz, Garca, &
Saldaa, 2012), el disernimiento entre los componentes del vnculo amoroso para
establecer el tipo de convivencia y la tenencia de hijos (Matthews, & Tiedeman,
1964; Katz, Priess, & Hyde, 2010).
El cambio progresivo o repentino de la mujer en el vnculo amoroso conlleva el
desencadenamiento de una crisis que puede poner en riesgo la estabilidad de la
relacin por lo que es probable el surgimiento de sntomas en uno o ambos
cnyuges (Pinto, 2012; Davis, Lebow, & Sprenkle, 2012). Es frecuente la
manifestacin de cuadros depresivos (Montesano, Feixas, Muoz, & Compa,
2014), problemas en la respuesta sexual (Giddens, 2013), estrs (Bodenmann,
Ledermann, & Bradbury, 2007) y ansiedad (Eswaran, & Malhotra, 2011).
Es inevitable la presencia de cambios en la organizacin conyugal y familiar
cuando la madre se emancipa a travs del trabajo, se explicita el abandono del
marido y de los hijos, favoreciendo sentimientos de culpa alimentados por los
mitos familiares de la madre-esposa (Nutt, 2005; Pinto, & Benitez, 2011).
Es comn que la mujer busque ayuda psicolgica debido a sntomas depresivos o
situaciones de estrs. La terapia individual puede promover el empoderamiento de
la mujer en los espacios conyugales, familiares y laborales (Hare-Mustin, &
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Marecek, 1986; Chester, & Bretherton, 2001). Sin embargo, la terapia de la mujer
aislada de su vnculo conyugal puede precipitar el divorcio y la manifestacin de
trastornos psicolgicos en el esposo ( Brooks, 1991; Allen, Gordon, Feldman, L. &
Gordon,1991; Bograd, 2014).
2. Terapia de pareja centrada en soluciones
En la terapia de pareja es donde ms se juegan los prejuicios hacia los roles
femeninos (Hare-Mustin, & Marecek, 1986; Bograd, 1986; Hare-Mustin, 1987;
Goodrich, Rampage, Ellman, & Halstead, 1989; Knudson, 2008). Razn por la que
se requiere una revisin de la formacin de los y las terapeutas de pareja que
permita la toma de conciencia de la poltica en relacin al sexo femenino (Mitchell,
2014).
Siendo imposible la neutralidad del terapeuta, es imprescindible la reflexin sobre
sus valores ante el proceso de liberacin femenina, promoviendo de esa manera
la revisin moral en el dilogo teraputico, siendo sta una actitud indispensable
en la tica de las y los psicoterapeutas (Durtschi, & McClellan, 2010).
El enfoque sistmico favorece la comprensin de los procesos relacionales
cuando se producen crisis en los elementos que componen un sistema (Bateson,
1991). Se entiende la manifestacin del sntoma como un proceso de bsqueda de
la homeostasis: un sntoma es apropiado: este sntoma es el comportamiento
adaptado al contexto social de la persona, y de ninguna manera un
comportamiento inadaptado que provenga del pasado sin ninguna funcin en el
presente (Haley, 1998, p.84). En ese sentido, el sntoma equilibra al sistema, por
lo tanto, la psicoterapia sistmica al dirigirse al promover el cambio del contexto
elimina al sntoma.
En la terapia sistmica se comprende al contexto teraputico como un sistema del
cual el terapeuta tambin es parte, por ello es imposible que el terapeuta no
influya, su presencia es un factor de modificacin de la organizacin (Maturana,
1997). El contexto teraputico est definido por el dilogo que sostienen los y las
el uno al otro sin esperar cambiarlo, asumiendo ser testigo de la existencia del
otro. Se plantean tres posibilidades: mantenerse en crisis, plantear la separacin,
definir un nuevo contrato matrimonial.
La crisis es activacin del cambio (Bray, 2009), empuja a la relacin hacia la
urgencia de asumir la soledad en la que se han involucrado ambos desde la
negacin del desarrollo de la emancipacin. Los conflictos se centran usualmente
en las funciones domsticas y parentales, descuidando superlativamente el
espacio amoroso y el impacto en la psicologa personal de los cnyuges. Se
asumen estrategias de solucin dirigidas a los problemas matrimoniales como si
fuesen dificultades personales o amorosas.
La consecuencia es que los problemas domsticos no se resuelven, muchas
veces empeoran y se produce una distancia relacional abismal, disminuyendo
paulatinamente las actividades amorosas, incrementando las parentales. Este
contexto es propicio para el surgimiento de la violencia, conmocin que fomenta
que sea el crculo vicioso de las peleas lo que llene el espacio relacional (Garca,
Aburto,Fuentes, 2013).
El plantear la terapia centrada en el problema puede obviar la concepcin de la
crisis como resultante de los cambios a partir de la emancipacin femenina y
propiciar una terapia favorable para el esposo al fomentar la ideologa machista
(Goodrich, Rampage, Ellman, & Halstead,1989).
La terapia narrativa (White, & Epston, 1990) en el afn de reescribir la historia
puede hacerlo desde la perspectiva del discurso conyugal fundado en los mitos de
los roles masculino y femenino tradicionales sin ser capaz de promover la
consolidacin de la emancipacin y centrarse en la historia amorosa.
Ante esas opciones es preferible el enfoque en las soluciones. La terapia centrada
en soluciones (De Shazer, 1986; O'Hanlon, & Weiner, 1990) adopta la postura
colaborativa de la tradicin narrativa, el pragmatismo de la terapia centrada en el
problema y el optimismo de la filosofa positiva.
Los supuestos de la terapia centrada en soluciones son los siguientes: es una
postura que normaliza los padrones patolgicos del comportamiento de los
clientes, utiliza los recursos del bagaje de alternativas de solucin que traen
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consigo, considera cada caso como singular por lo que evita la imposicin terica,
busca soluciones simples y directas para economizar los medios teraputicos para
alcanzar los fines establecidos en el dilogo, se asume que el cambio es
inevitable, se orienta hacia el presente y el futuro, fomenta la cooperacin entre el
terapeuta y los clientes (Garca, 2013).
Si el conflicto conyugal ha ocasionado la triangulacin de los hijos (Guerin,
Fogarty, & Gilbert, 1996), la pareja se presenta en la consulta con un problema de
padres, la indicacin inicial ser terapia familiar. Con el tiempo o con la solucin
del problema, los padres solicitan abordar sus problemas conyugales o durante la
terapia familiar se vislumbra el cambio en la organizacin a partir de la
emancipacin de la madre.
La pareja suele manifestar sus problemas dentro de las siguientes dimensiones:
comportamientos voluntarios versus involuntarios; impotencia versus poder;
secuencias metafricas versus literales; jerarqua versus igualdad; hostilidad
versus amor; egosmo versus altruismo (Madanes, 1991). Al centrarnos en la
solucin cambiamos el marco referencial del problema pidiendo a la pareja que
imagine su vida sin el problema y que identifiquen las situaciones en las que no
estuvo presente para ubicar las excepciones, con ellas las pautas de enmienda.
La terapia fomentar la colaboracin desde el presente, centrados en el proceso
relacional, buscando precisin en las alternativas, recurriendo a soluciones
prcticas, asumiendo que el control de la situacin pertenence a la pareja,
utilizando el lenguaje de cada uno de los cnyuges (Cheung, 2005).
Cheung (ob,cit.) elabora una sntesis de las tcnicas utilizadas en la terapia
centrada en soluciones: el terapeuta o la terapeuta evitarn concentrarse en los
problemas a pesar de que los clientes redunden en ellos. Debe quedar claro el
objetivo y analizarse las consecuencias del cambio. Es importante reconocer que
existieron excepciones lo cual conlleva a considerar de que existen los recursos
previos. La pareja debe comprender que a pesar de lo difcil de su situacin
pudieron seguir adelante.Es til recurrir a una escala que permita evaluar el
impacto de los cambios. Tambin lo es plantear la pregunta del milagro: Imaginen
que esta noche se van a dormir, mientras lo hacen ha ocurrido un milagro y el
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Al develar los juegos y apuntalar hacia el desarrollo del ciclo vital de cada una de
las muchachas, el proceso teraputico con la familia fue exitoso. Nancy empez
una terapia cognitiva comportamental con una colega. Manos a la obra! Comenc
el tratamiento con la pareja.
La terapia inicialmente se dirigi al perdn por la infidelidad de Xavier. Si bien
qued claro que sus visitas a los burdeles estaban relacionados con la envidia
que le produca Bertha al crear espacios personales independientes y que
empezara a lograr sus metas acadmicas, mientras l no pudo acabar el
bachillerato. La ltima jugada que hizo fue salir de la casa.
Durante los tres meses que estuvieron separados, mantuve sendas sesiones
individuales. Xavier era preso de la prdida ambigua que le producan los diversos
cambios de Bertha, mientras que ella se senta culpable por ir en contra de la
tradicin de las mujeres de su familia: todas abnegadas esposas, adems por el
estrs que representaba hacerse cargo de sus estudios, del orden en la casa y la
educacin de sus hijas.
Ambos coincidieron en que lo que deseaban era seguir juntos y realizar varios
planes pendientes como pareja, uno de ellos, viajar solos a la Argentina para tener
la luna de miel que no tuvieron. Ante la pregunta del milagro, l esperaba que
Bertha volviese a ser cariosa y fogosa sexualmente; ella, que l la apoyara en
sus metas acadmicas. El obstculo para alcanzar sus objetivos era aceptar la
infidelidad y perdonarla.
Se trabaj con objetivos concretos antecedentes de las grandes metas. Hice
elogios a los pequeos avances que daban, enfatic sus habilidades para los
negocios aplicadas a la empresa del matrimonio. Aprendieron a valorar los logros
en vez de concentrarse en los errores, a comprender los esfuerzos de cada uno
para retomar las riendas de su relacin.
El primer paso importante que dieron, fue el retorno de Xavier a casa, obligndolos
a reformular su contrato matrimonial, haciendo equitativo el trabajo domstico y la
educacin de Nancy. A fin de ao Xavier sorprendi a su esposa con un tour para
dos en Buenos Aires. Durante el viaje, Bertha expres que sinti que lo
perdonaba, volvieron a apasionarse el uno por el otro.
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Todo mejor hasta que Bertha retom sus clases en la universidad. Xavier empez
a celarla con un docente. Esa fue la oportunidad para mostrarles la importancia de
protegerse el uno al otro de las personas que envidiaban su relacin. Xavier fue a
esperar a su esposa a la puerta de su clase con un gigantesco ramo de flores.
Para hacerlo tuvo que vencer su complejo de inferioridad y su orgullo. Fue el inicio
de una nueva historia de amor.
3.2. Lo peor que le puede pasar a un hombre
Despus de enamorar pocos meses Esteban se cas con Daniela cuando ambos
eran muy jvenes. Al poco tiempo naci Jaime, actualmente con 22 aos. Esteban
concluy sus estudios universitarios, Daniela los tuvo que dejar para hacerse
cargo de su hijo y de las labores de casa. Cinco aos despus naci Luciana. La
vida familiar se redujo a un marido trabajador y a una madre-esposa abnegada.
Segn la perspectiva de Esteban tenan una familia y un matrimonio feliz. No era
la misma opinin de Daniela, quien se hallaba insatisfecha debido a la soledad y a
la frustracin personal.
Esteban solicita atencin psicolgica urgente, anunciando que estaba al borde del
suicidio. En la sesin expres su desazn despus de que perdi el control y
agredi ferozmente a su esposa hacindola rodar por las gradas ante la mirada
pasmada de su hija adolescente. Llorando expres que jams haba sido violento
con Daniela, no se reconoca a s mismo. Como consecuencia del acto violento, la
esposa decidi dejar la casa junto a su hija. La agresin fue consecuencia del
descubrimiento que hizo Esteban se la infidelidad de su esposa.
Resulta que hace dos aos aproximadamente, Daniela decidi ir al gimnasio, esta
actividad se torn parte de una nueva rutina que al parecer de Esteban mejor
sobremanera el estado de nimo de su esposa. En el transcurso de los meses
Daniela comenz una amistad con una colega (Mercedes) del gimnasio. Al poco
tiempo, su amiga le propuso trabajar juntas en su boutique. Para Esteban fue una
excelente opcin que permitira a su esposa tener actividades ajenas a las
domsticas y poseer ingresos propios. Al cabo de un tiempo, Daniela decidi viajar
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con Mercedes para traer mercadera. Jams haba viajado sola! Esteban
entusiasmado la apoy. As se produjeron tres viajes ms. Para el cuarto, Daniela
pidi que Esteban hiciera revisar su telfono mvil. El tcnico le pregunt al
esposo si era pertinente borrar los mensajes, fue entonces que descubri
conversaciones amorosas entre su esposa y Mercedes.
Al confrontarla con la infidelidad, Daniela reconoci su romance y manifest su
orientacin homosexual. Fue cuando Esteban perdi el control, porque segn su
parecer era lo peor que poda pasarle a un hombre.
Al poco tiempo de iniciada la terapia individual, Daniela junto a Mercedes
decidieron vivir juntas en Lima. Esteban se qued con sus dos hijos que no
conocan la relacin amorosa de su madre. Para Esteban fueron seis meses
tormentosos, tuvo que organizarse en su tienda y con los deberes de casa. La hija
estaba claramente enfadada con l, no ayudaba y vez que se daba la oportunidad
reclamaba al padre por la violencia que ejerci contra su madre. Por su parte
Jaime pasaba ms tiempo con sus amigos y en la universidad.
La terapia permiti que Esteban asumiera la ruptura amorosa y se adaptara a las
nuevas circunstancias de su vida. Al poco tiempo pidi una sesin extraordinaria
porque descubri que Jaime estaba consumiendo marihuana.
Al cabo de los seis meses de ausencia de Daniela, sta resolvi retornar al pas,
puesto que haba terminado su relacin con Mercedes. Fue entonces que inici la
terapia de pareja.
Daniela estaba confundida con su orientacin sexual, afirm que Esteban fue el
nico hombre con quien tuvo relaciones coitales, su educacin sexual fue
conservadora, enmarcada en creencias rgidamente catlicas. Confes que jams
tuvo un orgasmo con su esposo. Relat que con Mercedes descubri su
sensualidad y disfrut plenamente de su sexualidad.
Posteriormente remarc su profunda insatisfaccin con el matrimonio, jams sinti
que hubiese tenido oportunidades para realizarse como persona, lament el
abandono de sus estudios aunque lo justific porque tuvo todo el tiempo para
disfrutar de sus hijos. El corolario fue afirmar que haca mucho tiempo dej de
amar a Esteban porque no soportaba su seriedad y el afn obsesivo que tena con
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su novio. Suelen separarse por algunos das y al reconciliarse hacen planes para
casarse. Al ao de comenzar su relacin decidieron vivir juntos, fue muy difcil la
adaptacin de Gustavo por la presencia de Camila, a la par que Beatriz no soport
la intromisin de la familia de Gustavo: la madre y el hermano menor. Dos meses
fueron suficientes para que Gustavo retorne a la casa materna.
Beatriz trabaja en una institucin financiera donde se siente a gusto, tiene un
grupo de amigas con las que sale a boliches todos los fines de semana, adems
practica deportes con ellas. Gustavo hace un ao fue nombrado gerente de la
empresa donde trabaja, mejorando notablemente sus ingresos econmicos.
Al inicio de la terapia ambos concordaron en que el objetivo sera esclarecer si se
separan o se casan. Les pregunt si se trataba de una situacin de esto o
aquello. Reconocieron que su relacin es apasionada y buena mientras no
debaten sobre qu hacer con ella. Ella manifest que mientras no est segura de
la fidelidad de Gustavo, preferira no seguir con l; l plante que mientras ella no
acepte a su madre y hermano, tampoco valdra la pena seguir juntos. La respuesta
a la pregunta del milagro fue coincidente: se vean juntos sin interferencias
externas.
Fue interesante descubrir un patrn en el vnculo amoroso: romance-qu
hacemos con la relacin?-celos-violencia-reconciliacin-romance -qu hacemos
con la relacin? celos-etc.
Estaba claro que Beatriz no quera abandonar su libertad, la cual era cuestionada
por su familia y por Gustavo. No senta que comprendieran que a ella no le
importaba quedarse sola, ms an despus de haber luchado para lograr su
independencia.
Comprendieron que la solucin se convirti en el problema, al abandonar la
conviccin de casarse, definieron que ambos estaban conformes con la forma de
relacionarse: juntos pero no revueltos.
El siguiente paso fue trabajar sobre los celos. Redefinidos como miedo a ser
abandonada porque la amiga de Gustavo es una mujer convencional capaz de
encadenarse al matrimonio. El novio reconoci que utilizaba los celos para
provocar distanciamiento. De esa forma ambos alimentaban el juego persecutorio.
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