Soluciones A La Multipropiedad
Soluciones A La Multipropiedad
Soluciones A La Multipropiedad
DOCTRINA
SOLUCIONES NOTARIALES AL FENMENO DE LA LLAMADA
MULTIPROPIEDAD O PROPIEDAD A TIEMPO COMPARTIDO(*)(179)
Por MARA T. ACQUARONE (Capital Federal), ALBERTO M. AZPEITA (abogado),
LIDIA E. BELMES (Capital Federal), NGELA V. BONETTO DE CIMA (Prov. de
Crdoba), ALICIA BONFANTI (Capital Federal), ROSARIO BUSACCHIO (Capital
Federal), ADA GRACIELA CARRER (Prov. de Crdoba), JORGE RAL CAUSSE
(Prov. de Buenos Aires), MARCELO DE HOZ (Capital Federal ), RAL ECHEVARRA
(Prov. de Ro Negro), MARA G. FOUSSATS DE FEULLASSIER (Capital Federal),
NGEL AGUSTN FRONTINI (Pov. de Buenos Aires), ANA MARA GNECCO (Capital
Federal) NATALIA GODOY (Prov. de Crdoba), MELITA NORA LANFRANCO
SUMARIO
Primera Parte. Introduccin. Consideraciones previas acerca de la
propiedad. Encuadre pragmtico del negocio. Segunda Parte. Doctrina
nacional. 1. Denominacin. Tendencias. 2. Posibilidad de encuadramiento
como derecho real o personal. 2. 1. El tiempo compartido o multipropiedad
como derecho personal. 2.1.1. Posibilidad de su encuadre en contratos de
cesin de uso o locacin. 2.1. 2. Posibilidad de su encuadre en contratos
societarios. 2.1. 3. Esquema de utilizacin de la sociedad civil. 2. 1. 4.
Esquema de utilizacin de la sociedad annima. 2.1.5. Crticas a ambos
sistemas. 2. 2. El tiempo compartido o multipropiedad como derecho real.
2.2. a. El tiempo compartido como condominio. 2. 2. b. El condominio como
solucin al sistema de multipropiedad. 2. 2. c. Encuadre del negocio de
multipropiedad en la normativa de los derechos de usufructo y uso y
habitacin. Inconvenientes de su aplicacin. 2. 2. d. Autonoma del derecho
real de multipropiedad. 2. 2. e. Multipropiedad inmobiliaria. Nueva figura
dominial autnoma sobre un ncleo fundamental de imputacin y
convergencia de mltiples intereses individuales. 2. 2.1. Anlisis del
derecho sobre embarcaciones. 2.2.1. a. Multipropiedad o propiedad de
tiempo compartido en embarcaciones. Tercera Parte. Derechos y
obligaciones derivadas de la contratacin para el funcionamiento de los
complejos. 3. 1. Administracin. 3.1.a Naturaleza del contrato de
administrador de edificios en multipropiedad o tiempo compartido. 3.2. 3.2.a. Reflexiones notariales sobre "sistemas de intercambio" en materia de
multipropiedad. 3.3. - 3.3.a. Ensayo sobre derecho aplicable en materia de
derecho internacional privado. Cuarta Parte. 4.1. Encuentros jurdicos. 4.1.
a. Anlisis de su carcter. Conclusiones. Anlisis de la doctrina elaborada.
4. 2. Proyectos de leyes. 4.2. a. Comentarios sobre algunos aspectos. 4.2.
b. Addenda de los autores del anteproyecto Fonte - Terrile. Conclusiones.
Bibliografa. Anexo. Proyectos de leyes con estado parlamentario. Proyecto
Fonte - Terrile. Proyecto Natale.
"En la elaboracin de esta ponencia han intervenido notarios de todas las
latitudes de nuestro pas. Para el notario argentino, la cabida de sus ideas,
la expansin geogrfica de los conocimientos, la tarea conjunta de los
notarios en todas las vertientes posibles, es un valor de la ms alta
jerarqua."
Mara T. Acquarone
Coordinadora nacional
Sistema utilizado
Condominio indiviso
Condominio subdiviso
Derecho de uso y habitacin
Sociedades por acciones
Club
Sociedad civil
SEGUNDA PARTE
"La eleccin de la terminologa adecuada se presenta como un captulo en
la historia de las disensiones entre los juristas de todos los tiempos,
enfrentndose muchas veces la que aparece ,como ms correcta desde el
punto de vista tcnico con aquella otra que, sin tales atributos, ha logrado un
uso ms extendido.
"El libre albedro para seleccionar nos persuade de que las calificaciones
demasiado esquemticas no son, en rigor, definitivamente verdaderas ni
definitivamente falsas. Sirven o no sirven, son ventajosas o no lo son. La
modalidad operativa y el derecho emergente debern de las propias
1. DENOMINACIN - TENDENCIAS
MARCELA H. TRANCHINI DE DI MARCO Y JORGE R. CAUSSE
Una de las primeras cuestiones que se abord tuvo que ver con la
denominacin que caba asignarle a este fenmeno contractual.
Aquel que en el plano internacional pareca haber logrado mayor adhesin
era el de multipropiedad.
En el VI Congreso Nacional de Derecho Registral (Misiones, Argentina, ao
1986), una ajustada mayora prefiri aquella denominacin, la que tambin
aparece adoptada en algn proyecto legislativo.
En nuestro medio, de acuerdo con el rtulo que le asignaron sus
desarrollistas o comercializadores, se le conoce y difunde como "tiempo
compartido" y su prctica no aparece limitada a la cosa inmobiliaria con
destino turstico o vacacional, sino que se extiende tambin a objetos
mobiliarios.
La eleccin de la terminologa adecuada se presenta como un captulo en la
historia de las disensiones entre los juristas de todos los tiempos,
enfrentndose muchas veces la que aparece como ms correcta desde el
punto de vista tcnico con aquella otra que, sin tales atributos, ha logrado un
uso extendido.
Multipropiedad aparece doctrinariamente como mejor avalada, pero queda
circunscripta a la caracterizacin del instituto como un derecho real sobre la
cosa propia.
Tiempo compartido agrega a la difusin de su uso en los negocios
inmobiliarios, la posibilidad de adaptarse a otras modalidades de
contratacin. Por ejemplo, cuando lo que se comercializa mediante oferta
es una participacin societaria, vinculante con la facultad de usar y gozar
sucesiva y alternadamente un determinado bien en un turno previamente
establecido, limitada temporalmente a la duracin de la persona jurdica
titular de dominio del objeto de que se trate.
Los criterios diferenciables en cuanto a la denominacin que se le debera
asignar a esta novsima variante contractual, se mantuvieron al ingresar en
el captulo de la calificacin del derecho emergente y, consecuentemente,
qu rgimen resultara aplicable.
Para una tendencia, la atribucin de uso y goce de un determinado bien
importa una relacin entre el sujeto y el objeto tal cual es tpica en los
derechos reales. Esta tipificacin, para sus sostenedores, excluye la
posibilidad de su encuadramiento como derecho personal, en tanto los
MARA T. ACQUARONE
Creo que es importante - aun cuando siempre nos colocamos en un
esquema societario en que el adquirente ser propietario de
participaciones societarias que quedarn en el campo de lo obligacional realizar la distincin entre la utilizacin de la sociedad civil y el esquema de
la sociedad annima.
Sus sostenedores afirman que, dado el rgimen de numerus clausus de los
derechos reales, y la imposibilidad de configurar dentro de ellos la figura en
anlisis, nuestro sistema admite perfectamente su encuadre dentro de la
sociedad civil, no necesitndose en consecuencia reforma legislativa
alguna.
De este modo, Mario Carregal(11)(190)dice que su posicin filosfica ante
el problema parte de la base de que todo lo que es esencialmente lcito y
ticamente sostenible debe ser legalmente posible. As, al regular los arts.
1648 y sigtes. del Cd. Civil se ajusta a la regulacin de ese conjunto de
personas que van a utilizar en comn un complejo recreativo. En la
definicin de la misma el Cdigo dice: "Habr sociedad, cuando dos o ms
personas se hubiesen mutuamente obligado, cada una con una prestacin,
con el fin de obtener alguna utilidad apreciable en dinero que dividirn entre
s del empleo que hicieren de lo que cada uno hubiere aportado." La
primera impresin, dice este autor, que puede dar esta definicin, es que la
sociedad civil conlleva un fin de lucro, por lo que quizs el rgimen podra
ms bien ajustarse al objetivo de una asociacin civil que carece de
propsito de lucro. Pero cuando sta se disuelve sus bienes pasan al
Estado. modalidad que no se ajusta a los deseos ni a los intereses de quien
se decide a realizar una inversin de este tipo(12)(191).
Analiza a continuacin el concepto de lucro en las sociedades civiles, ya
que el Cdigo se refiere a "alguna utilidad apreciable en dinero". Esta
utilidad estara representada por el gasto que el adquirente no desembolsa
para disfrutar de la unidad en un complejo(13)(192). Otros civilistas afirman
que no se debe interpretar en forma literal la apreciacin en dinero del
artculo del Cdigo, ya que indudablemente la inversin que se realiza tiene
contenido patrimonial. Por otra parte destacan la posibilidad de regular la
administracin con la amplia libertad que establece el Cdigo Civil. En este
sentido se podrn establecer en el contrato social toda clase de clusulas
que impidan al administrador societario la realizacin de actos que afecten
LILIANA LIPSCHITZ
Si bien en la sociedad civil resulta difcil la interpretacin del requisito de
utilidad apreciable en dinero, se podra aceptar alguna similitud; en el caso
de las sociedades comerciales creemos que es imposible. Faltara la causa
misma del contrato plurilateral de organizacin tal como est planteado en
nuestra legislacin en el art. 1 de la ley de sociedades. En este sentido
Marcela Tranchini expresa que es en la propia exposicin de motivos de la
ley donde se aclara que la frmula adoptada, al exigir que las sociedades
prosigan la produccin o intercambio de bienes y servicios, obvia todo
problema cuando la actividad no sea productiva en el sentido econmico,
como sera el caso de las sociedades constituidas para la mera
administracin o conservacin de sus bienes(15)(194).
Los sostenedores de este encuadre no explican este aspecto, van
directamente a la estructura del negocio(16)(195). Dice Fiorito(17)(196)que
teniendo en mira el resguardo de los intereses del adquirente y de sus
relaciones con el propietario y con los dems adquirentes, se realiza un
contrato de venta de una accin de una sociedad annima que da a su
titular el derecho de usar y disponer de una unidad determinada, de un
inmueble tambin determinado por un perodo de tiempo perfectamente
especificado. Se incorpora al activo de la sociedad annima el inmueble
que se afecta en el estatuto social a la explotacin por el sistema de uso por
"tiempo compartido". Al mismo tiempo, en el estatuto de la sociedad se
limita el objeto de la misma a la administracin del inmueble para evitar que
el directorio de la sociedad annima pueda involucrar a la sociedad en otro
tipo de actividades que puedan poner en peligro la estabilidad econmica
de la misma. El capital social se divide en la cantidad de acciones como
cantidad de unidades estn afectadas multiplicadas por 52, es decir, por el
numero de semanas que tiene el ao. Se establece, tambin
estatutariamente, que la titularidad de la accin da derecho al uso indefinido
de un perodo de tiempo determinado y la necesidad del voto unnime del
capital social para poder establecer modificaciones que afecten estos
puntos(18)(197).
La principal objecin a la utilizacin de la sociedad annima relacionada
con la seguridad al adquirente est basada en que para nuestra ley de
sociedades el presidente como representante societario puede realizar
LILIANA LIPSCHITZ
Para finalizar diremos que el meollo de la cuestin reside en la relacin
mediata que se establece entre el adquirente y la cosa que va a ser objeto
de disfrute. La titularidad a nombre de la sociedad har que el adquirente
pierda toda vocacin de registrar su derecho, que es lo que en definitiva lo
har oponible frente a actos que no sean los ejecutados por l.
En este sentido, Marcela Tranchini expresa que el hecho de que en nuestro
pas el tiempo compartido pueda legalmente canalizarse a travs de la
forma societaria, no significa que tal configuracin nos parezca la ms
conveniente sino por el contrario propugnamos la necesidad de su
estructuracin como derecho real. Alude razones, que se refieren: 1) a la
esencia misma del tiempo compartido, ya que la intencin del titular del
derecho es usar y gozar directamente el inmueble sin necesidad de la
intervencin de otra persona, y no la de asociarse que encerrara la voluntad
de colaborar en la empresa comn y participar en el rea negocial; 2) por la
funcionalidad social que acusa este derecho. Opina que por el
aprovechamiento ptimo de los bienes inmuebles que la sociedad requiere
deben regularse por normas nominadas por el orden pblico que impera en
el campo de los derechos reales y que deja un estrecho margen a la
voluntad de los particulares(19)(198).
Con relacin a la ventaja que puede presentar en cuanto a la organizacin
de la administracin - entendemos el funcionamiento del multiconsorcio o
del consorcio de tiempo compartidista - se puede estructurar en forma
similar a la societaria, ya que, en cuanto se refiere al aspecto dinmico, una
vez agotada la adquisicin a travs del acto jurdico causal que le d origen
ste debe tener caracteres similares, aunque no idnticos.
2.2. EL TIEMPO COMPARTIDO O MULTIPROPIEDAD COMO DERECHO REAL
DEL
COLEGIO
DE
Los derechos reales en nuestro sistema jurdico slo pueden ser creados
por ley (art. 2502). Se establece el principio llamado en doctrina como de
numerus clausus, a travs del cual la libertad individual sufre una seria
restriccin que es la necesaria consecuencia jurdica de las normas de
orden pblico que rigen la materia. Dice Allende(27)(206)que "si los
particulares pudieran a su voluntad crear derechos reales no podra
sostenerse que las normas que los rigen fueran de orden pblico...".
Nuestro Cdigo Civil contina diciendo:..."Todo contrato o disposicin de
ltima voluntad que constituyese otros derechos reales, o modificase los
que por este Cdigo se reconocen, valdr slo como constitucin de
derechos personales, si como tal pudiese valer."
La doctrina nacional est conteste con esta concepcin, siendo muy
reducida la doctrina que discute de jure condendo la posibilidad de
establecer un sistema diferente con relacin al orden pblico afectado.
As se expresa, citando a Planiol(28)(207), que las leyes que determinan el
derecho de propiedad, sus efectos, sus lmites, sobre todo cuando se trata
de la propiedad inmueble, toca muy de cerca la organizacin social del pas
como para que se la pueda abandonar a la libertad de las convenciones.
Por su parte nuestro Cdigo en la nota al art. 2507 recoge este concepto
cuando dice:... "El Estado tiene, respecto a los bienes que estn en el
territorio, un poder, un derecho superior de legislacin, de jurisdiccin y de
contribucin, que aplicado a los inmuebles, no es otra cosa que una parte
de la soberana territorial interior, de suerte que los propietarios vern
sometidos "sus derechos a las restricciones necesarias al inters general".
Sin embargo, al admitirse en la interpretacin de las normas cierta rea de
los derechos reales que no pertenece al orden pblico, se admitira una
rbita de su regulacin que operara como derecho supletorio y, en
consecuencia, podra estar librada a la voluntad de las partes.
Segn una parte de la doctrina nacional(29)(208), dentro de ella podran
estar ciertas modalidades tomadas en una acepcin muy amplias del
derecho real de condominio, que caracterizaran el tiempo compartido o
multipropiedad. Una de ellas sera la particin del uso y goce en fracciones
de tiempo, lo que impedira la accin de divisin propia del condominio
regulado en el Cdigo Civil. No obstante, los autores admiten que nuestro
ordenamiento se rige por el numerus clausus y en virtud de este principio se
debe asimilar el negocio a uno de los derechos reales establecidos en el
Cdigo. En virtud de la situacin de comunidad, es decir, pluralidad de
sujetos relacionados con un nico objeto, se lo asimilara al condominio.
Otro aspecto que cobra singular importancia para el desarrollo exitoso del
presente es la posible ayuda impositiva de los entes oficiales.
Entendemos que habr que persuadir de la importancia que tal instituto
tiene y de sus posibilidades de desarrollo, no slo en materia de buques,
sino de bienes muebles, de aeronaves, de transporte martimo y areo, de
las posibilidades de utilizacin para fines comerciales internacionales, de
exportacin e importacin. Evidentemente dicho estmulo puede lograrse a
travs de una poltica de desgravacin y estmulo para las empresas que
desarrollen tal actividad.
7. Conclusiones