Descargue como DOCX, PDF, TXT o lea en línea desde Scribd
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 4
No se puede olvidar que los medios de comunicacin suelen ser la
principal fuente de informacin sobre drogas, sobre todo, de la
gente joven y que, al mismo tiempo, stos constituyen un poderoso instrumento de influencia en la conducta de la gente. Las instituciones pblicas y privadas lo saben muy bien y recurren con facilidad a sus servicios, a pesar de los costos econmicos, para poder conseguir sus objetivos. Pero su poder puede ser utilizado tanto para el bien como para el mal. Pasa lo mismo que con las drogas; no son ni buenas ni malas; todo depende del uso que hagamos de ellas." La comunicacin en masa, en pocas palabras, no es ni buena ni mala; es simplemente una fuerza y, como toda fuerza, puede ser bien y mal utilizada". Por otra parte, la problemtica de las drogas, sobre todo de las ilegales, se presta con facilidad a todo tipo de manipulacin ideolgica y poltica. En este sentido, la informacin sobre las drogas se convierte en un instrumento ms de manipulacin y control social. La historia de las drogas aporta elementos suficientes para demostrar esta tesis. Resulta evidente que las principales fuentes de informacin sobre las drogas, proceden servicios controladores de la sociedad: jueces y policas. Se ofrece, entonces, una informacin con unas caractersticas muy especiales, al responder a una problemtica social desde una perspectiva muy concreta. Con un anlisis ms profundo se descubre con facilidad una grave desinformacin ofrecida por parte de los medios llamados de informacin social, al orientar las noticias sobre las drogas hacia aspectos muy concretos tratados desde enfoques parciales. Todo esto nos hace ver la necesidad de reflexionar sobre el papel de los medios de comunicacin social en relacin con la droga. Una buena utilizacin de este recurso puede facilitar el avance en la solucin de la problemtica de las drogas. Una mala utilizacin, puede agravar todava ms los problemas ya existentes. Est claro que los medios de informacin representan un poderoso medio de accin para formar actitudes y transmitir conocimientos en materia de drogas.
-En este trabajo, se presentar, en primer lugar, la
imagen de las drogas que suelen presentar los medios de comunicacin social, tanto en la noticia como en las campaas o en la publicidad, para, en segundo lugar, ver la influencia que crean sobre ello. Tras los contenidos y actitudes especficos relacionados con las drogas, se ocultan valores e intereses de la cultura dominante, por lo que los medios de comunicacin social se convierten en su relacin con la problemtica de las drogas en un medio ms de control social. Pues el control social no es otra cosa que un despliegue de tcticas, estrategias y fuerzas para la construccin de la hegemona, esto es, para la bsqueda de la legitimacin o aseguramiento del consenso; o en su defecto, para el sometimiento forzado de los que no se integran en la ideologa dominante. Resulta curioso constatar cmo esas mismas empresas que colaboran en campaas de tipo preventivo en relacin con las drogas, no tiene empacho alguno en contribuir al mismo tiempo en la publicidad de cualquier producto capaz de crear dependencia. Incluso, en ocasiones, por iniciativa propia, organizan campaas contra la droga como obra "benfica" en espacios y tiempos libres dentro de su negocio millonario. Tampoco conviene olvidar que son las propias empresas
dedicadas a promocionar productos como alcohol, tabaco, etc.,
quienes lanzan las campaas "preventivas". Mientras nuestra sociedad vive preocupada por la "droga" y se ponen en marcha todo tipo de programas y servicios, el gran negocio de las sustancias legales dispone de abundantes recursos y estrategias para defender y propagar sus intereses, entre los que destaca la publicidad de sus productos a travs de los medios de comunicacin social. Precisamente "el triunfo de la publicidad en la industria cultural consiste en hacer que los consumidores se sientan obligados a comprar y usar sus productos aunque sepan lo que se oculta tras ellos". Tambin hay que tener en cuenta la fuerza y calidad de los anuncios que estos mismos medios de informacin ofrecen continuamente, sobre todo, del alcohol y el tabaco, anuncios que provocan y mantienen su gran aceptacin entre el pblico frente a los anuncios de tipo de preventivo. Precisamente en nuestro pas, en la revisin que hemos realizado aparece claro que la televisin y la publicidad "configuran un mensaje alcohlico global claramente positivo". Segn esta investigacin, desde las perspectivas de la teora del Aprendizaje Social, estos mensajes favorecen un aprendizaje incidental del consumo del alcohol. Desde la teora cognitiva, estos mensajes contribuyen "a la aceptacin e integracin del alcohol como elemento positivo y deseable, as como al mantenimiento de un entorno favorecedor y permisivo que validar el consumo de esta sustancia". Otra alternativa es el modo en el que presentan a las ltimas modas en el estilo de vida, de vestido, y los espectculos" y relacionan su consumo "con el vigor juvenil, el xito social, sexual, profesional, la inteligencia, la belleza, la sofisticacin, la independencia, la masculinidad y la feminidad".
Conviene recordar finalmente cmo
hoy los medios de comunicacin incumplen en pocas ocasiones la legislacin vigente a la hora de vender sus productos con campaas agresivas de todo tipo y con la ocupacin de todo tipo de espacios y tiempos como puede ser en el interior de las emisiones. Los medios de comunicacin, especialmente radio y TV, obsesionados por captar audiencias masivas que permitan absorber ms y ms publicidad que los financie, programan slo entretenimiento popular. Este es el escenario en que la publicidad se interpreta hoy. Precisamente la explotacin publicitaria de los medios es una de las estrategias bsicas para la influencia ante el uso de las drogas.