Criterios Jurisprudenciales
Criterios Jurisprudenciales
Criterios Jurisprudenciales
CRITERIOS JURISPRUDENCIALES
RECIENTES EN DERECHO DE FAMILIA
CONTENIDO: Obligacin de Alimentos, Acciones de Filiacin,
Cuidado Personal de los Hijos y Relacin Directa y Regular
(Incluye Estudio de La Ley N 20.680 de junio de 2013)
Derechos Reservados. Prohibida la reproduccin total o parcial de esta obra por cualquier
medio, especialmente fotocopia. La infraccin se encuentra sancionada como delito contra
la propiedad intelectual por la Ley N 17.336.
INTRODUCCIN
La obra que presentamos al lector, corresponde al primer volumen, de una serie de tres, que tienen por objeto recoger los criterios
jurisprudenciales recientes, de nuestra Corte Suprema, del Tribunal
Constitucional y de las Cortes de Apelaciones, atinentes a las materias propias del Derecho de Familia. Este primer volumen, se contrae a cuatro materias: la obligacin de alimentos, las acciones de
filiacin, el cuidado personal de los menores y la relacin directa
y regular entre los hijos y el padre o madre que no fuere titular de
dicho cuidado personal. En un segundo volumen, abordaremos lo
concerniente al divorcio, la nulidad matrimonial y la compensacin
econmica. El tercero, se abocar a la sociedad conyugal, los bienes familiares, las guardas, los derechos, deberes y obligaciones que
emanan de la filiacin y del reconocimiento voluntario de la misma,
el concubinato y la adopcin de menores. De esta manera, el plan
de la obra que se inicia con el presente volumen, tiene por objetivo
abarcar con la mayor amplitud posible, las materias ms relevantes
del Derecho de Familia, desde la perspectiva de su aplicacin por
nuestros Tribunales superiores de justicia. El punto de vista que asumimos nos parece que tiene la mayor trascendencia para el estudio
de las instituciones jurdicas en general y de aquellas propias del
Derecho de Familia, en particular. En efecto, la jurisprudencia esto
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es, el criterio sobre un problema jurdico establecido por una pluralidad de sentencias concordes- deviene en un tercer plano para
el estudio del Derecho, que complementa los otros dos, a saber, el
conocimiento de la legislacin positiva y el anlisis de los textos elaborados por la doctrina. La ley, de suyo suele ser escueta y redactada
en trminos generales y abstractos, lo que se explica dado su alcance general. La sentencia judicial, en cambio, debe explayarse en la
exposicin de los hechos, en la seleccin del Derecho aplicable a
tales hechos y en las consideraciones, fundamentos o motivos que
expliquen de qu manera el Juez respectivo arriba a una determinada conclusin. La sentencia judicial, pone as en movimiento la norma legal, y la traslada al plano real y concreto, con el fin de dirimir
las contiendas entre personas. Por eso es que toda operacin intelectual emprendida por un abogado en ejercicio de su profesin, sea
que se trate de un litigante, de un asesor, de un magistrado o de un
acadmico, debe considerar estos tres planos de anlisis: qu dice
la ley, qu alcances postula la doctrina acerca de los textos positivos
y cmo la ley se ha aplicado a los casos concretos que deben resolverse con su mrito. La norma positiva, en este sentido, debe considerarse y estudiarse de consuno con la interpretacin doctrinaria y
judicial de la primera. La obra que presentamos, responde entonces
al objetivo de facilitar el estudio de la tercera de las vertientes mencionadas. Creemos que puede ser un trabajo til, particularmente
para los abogados litigantes y para quienes cursen estudios de pregrado y posgrado, pues muchas veces los manuales, por completos
que sean, slo contienen referencias breves, casi siempre al pi de
pgina, acerca de los criterios jurisprudenciales en ellos tratados.
Por ello, nuestra pretensin es que el volumen que hoy ofrecemos,
venga a complementar las reflexiones contenidas en los libros que
nuestros autores han escrito en torno a los cuatro temas que aqu
se exponen. Adicionalmente, la utilidad de un trabajo como el que
presentamos aparece de manifiesto, si tenemos presente que los criterios jurisprudenciales van mutando en el tiempo, de manera que
aquello que pareca una verdad forense inconcusa hasta hace algunos aos, hoy se nos presenta con otra faz, de manera que las soluciones asentadas por nuestros tribunales hace treinta o ms aos, no
se condicen con aquellas que en la actualidad prevalecen. Ello se
explica, pues la sociedad cambia, y consecuentemente, el Derecho
sustantivo y su aplicacin jurisprudencial. An ms, en ocasiones
las conclusiones a que arriban nuestras Cortes varan, aunque las
normas positivas que les sirven de sustento no hayan experimentado
mayores cambios. Sirva como ejemplo de esta aseveracin, lo relativo a la procedencia de la accin de reclamacin de la filiacin en
contra de los herederos del supuesto progenitor.
Cada uno de los captulos, se inicia con un listado de materias de
que tratan los fallos que luego se exponen. A su vez, en cada una de
las sentencias transcritas, se indican las normas legales decisorias o
que se mencionan en los considerandos como principales preceptos que orientan la solucin de la contienda. En algunos casos, para
facilitar la lectura, se reproduce al pi de pgina el tenor de dichos
preceptos legales -salvo si ellos ya hubieren sido citados en relacin
a una sentencia previa-, con un breve comentario, cuando fuere
pertinente, acerca de su contenido. En cada sentencia, se incluye
tambin un acpite sealando cul es, a nuestro juicio, la cuestin
medular debatida en los autos y la respectiva conclusin de la Corte. En lo que respecta al texto de cada uno de los fallos, en general
se mantiene su tenor, pero resumindolo, de manera de hacer ms
ostensible las cuestiones principales de las sentencias compiladas.
Debemos advertir, en todo caso, que las divisiones al interior de las
sentencias en numerales y smbolos, no corresponden en ocasiones
exactamente al fallo respectivo, y las hacemos para la mayor fluidez
en la lectura, sin que por ello, por cierto, se altere en modo alguno
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El autor.
Santiago de Chile, febrero de 2014.
CAPTULO I
CRITERIOS JURISPRUDENCIALES RECIENTES,
EN MATERIA DE DERECHO DE ALIMENTOS
Seguidamente, se revisan sentencias recientes1, en las que se exponen diversos criterios de la Corte Suprema y de algunas Cortes de
Apelaciones, conforme a los cuales se han resuelto causas atinentes
al derecho y obligacin de alimentos, sea que sta materia haya sido
la cuestin principal debatida en autos, sea que indirectamente una
o ambas partes hayan invocado disposiciones legales concernientes
a la misma, y la respectiva sentencia las consider en la decisin del
asunto.
Las sentencias se pronuncian acerca de las siguientes materias:
A. Cuidado personal de los menores y cumplimiento de la obligacin de alimentos (sentencia I).
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A. Cuidado
la obligacin de alimentos
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Cuestin medular: alcances del artculo 225, inciso 3 del Cdigo Civil, que priva del cuidado personal del hijo, al padre o madre
que no hubiese contribuido a su mantencin mientras estuvo bajo
el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo. Comparacin entre el
artculo 225, inciso 3 del Cdigo Civil, y el artculo 55, inciso 3,
de la Ley de Matrimonio Civil.
Conclusin de la Corte: el juez del fondo puede atribuir el cuidado personal del menor a uno de los padres, aunque ste adeude
alguna suma por pensiones alimenticias. Norma del artculo 225
del Cdigo Civil no tiene la rigidez de aquella contemplada en el
artculo 55, inciso 3, de la Ley de Matrimonio Civil.
1.- Ante el 1 Juzgado de Familia de San Miguel, el padre de un
menor dedujo demanda contra la madre de dicho menor, solicitando que se le conceda el cuidado personal de su hijo D. T. L., nacido
en enero de 2005. A la fecha de la demanda, el menor se encontraba habitando la residencia de su padre, en virtud de un acuerdo
privado con la madre.
2.- Por sentencia de primer grado de 19 de agosto de 2011, se
acogi la demanda, declarndose que el menor deber permanecer
al cuidado del padre, reconocindole a la demandada el derecho a
mantener una relacin directa y regular con su hijo.
3.- Se alz la parte demandada y una de las Salas de la Corte de
Apelaciones de San Miguel, por fallo de 21 de octubre de 2011,
confirm el de primer grado.
4.- En contra de esta ltima decisin, la parte demandada dedujo
casacin en el fondo, conforme a los siguientes argumentos: afirma
que la sentencia recurrida infringi los artculos 2254 del Cdigo
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El artculo 225 del Cdigo Civil regula el cuidado personal de los menores,
si los padres vivieren separados. Este artculo tena el siguiente tenor, a la
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fecha en que se dict la sentencia (el nfasis es nuestro): Si los padres viven
separados, a la madre toca el cuidado personal de los hijos. / No obstante,
mediante escritura pblica, o acta extendida ante cualquier oficial del Registro
Civil, subinscrita al margen de la inscripcin de nacimiento del hijo dentro
de los treinta das siguientes a su otorgamiento, ambos padres, actuando
de comn acuerdo, podrn determinar que el cuidado personal de uno o
ms hijos corresponda al padre. Este acuerdo podr revocarse, cumpliendo
las mismas solemnidades. / En todo caso, cuando el inters del hijo lo haga
indispensable, sea por maltrato, descuido u otra causa calificada, el juez podr
entregar su cuidado personal al otro de los padres. Pero no podr confiar
el cuidado personal al padre o madre que no hubiese contribuido a la
mantencin del hijo mientras estuvo bajo el cuidado del otro padre, pudiendo
hacerlo. / Mientras una subinscripcin relativa al cuidado personal no sea
cancelada por otra posterior, todo nuevo acuerdo o resolucin ser inoponible
a terceros. Como se expone ms adelante, en el captulo que concierne a
la jurisprudencia relativa al cuidado personal de los menores, el precepto
transcrito fue modificado por la Ley nmero 20.680, publicada en el Diario
Oficial de fecha 21 de junio de 2013.
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grave y reiteradamente la obligacin de pagar la pensin decretada a favor del menor de autos. Respecto de la segunda disposicin
legal, sostiene que la opinin del nio debi ser escuchada y que
al no haberse acreditado inhabilidad de la madre debi aplicarse el
principio de inters superior del nio para concluir que el cuidado
personal del menor deba mantenerse a cargo de ella.
5.- Se dej constancia en la sentencia impugnada de los siguientes hechos:
Por medio de declaracin jurada suscrita por la demandada el 22
de junio de 2010, sta entreg el cuidado personal de su hijo a la
abuela paterna por los das lunes a viernes, y al padre y demandante por el da sbado.
A la fecha de la sentencia de primer grado, el nio llevaba varios
meses viviendo con su padre, siendo la abuela paterna la que colaboraba con los cuidados del menor, quien se encuentra inserto
en el sistema educacional, contando el padre con los recursos
econmicos, afectivos y familia extendida para mantener a su
cargo satisfactoriamente a su hijo.
Se tuvo a la vista liquidacin de pensin de alimentos realizada
en una causa del ao 2006, en que el actor aparece con una deuda de $ 1.854.065.-, con un total de depsitos de $ 4.865.546. Sobre la base de los hechos reseados, con el mrito de los informes proteccionales con nfasis en competencias parentales
efectuados a ambos padres, los sentenciadores recurridos consideraron que si bien no se encuentra totalmente acreditado que
exista inhabilidad por parte de la madre para ejercer el cuidado
de su hijo, una interpretacin armnica de las normas sobre cuidado personal y de la Convencin de los derechos del Nio nos
hace estimar que actualmente el menor D.A.T.L. se encuentra en
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mejores condiciones bajo el cuidado de su padre, teniendo presente para ello que aparece conveniente estabilizar su situacin
habitacional.
6.- La Corte Suprema, despus de aludir a los artculos 225, 226 y
228 del Cdigo Civil, y referirse a las causales que pueden afectar a
los progenitores e impedir el ejercicio del cuidado personal respecto
de sus hijos, manifiesta que El legislador seal causales especficas
en virtud de las cuales es dable modificar la norma legal, contenida
en el mencionado artculo 225, pero tambin consagr una causal
genrica: otra causa calificada; es decir, qued entregado al juez
del fondo, en cada caso concreto, determinar si es conveniente para
el nio privar a los padres de su cuidado para entregarlo a un tercero. (o al otro de los padres, agregamos nosotros). Se tiene presente
tambin el artculo 42 de la Ley de Menores, que para los efectos del
artculo 226 del Cdigo Civil, detalla los casos de inhabilidad de los
padres. Agrega luego Que si bien el cuidado personal de los hijos
corresponde a la madre cuando los padres viven separados, una
interpretacin armnica de las normas citadas como lo propone el
fallo recurrido- permite concluir que el juez de la causa puede modificar la regla del artculo 225 del Cdigo Civil y privar a la madre
de dicho cuidado, entregndolo al otro padre o a un tercero ()
al configurarse algunas de las situaciones descritas en los motivos
anteriores que los inhabilitan para ello o porque el inters superior
del menor as lo aconseje. Consigna la Corte que En la especie, no
puede dejar de advertirse que fue un hecho establecido en la causa
que la madre del menor otorg, mediante un documento notarial, el
cuidado personal de ste al padre y a la abuela paterna, que existen
sospechas de maltrato fsico de ella hacia su hijo, que la situacin
habitacional de la madre ha sido inestable cambindose reiteradamente de domicilios, que el nio lleva a esta fecha- ms de un ao
viviendo con su padre y, finalmente, que odo el menor manifest
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que vive con su padre y abuela paterna, situacin que dice gustarle. Acto seguido, alude la Corte al principio del inters superior del
nio, y afirma que los jueces del fondo han concluido de acuerdo
al mismo, siendo necesario mantener al menor bajo el cuidado de
su padre en beneficio de su desarrollo social, afectivo y psquico,
teniendo especialmente presente para ello, el extenso tiempo que ha
permanecido con el actor en condiciones generales de estabilidad.
Se hace cargo la Corte, a continuacin, de la supuesta infraccin al
artculo 225, inciso 3, del Cdigo Civil, razonando de la manera
siguiente: Que en lo referente a la infraccin a la segunda parte
del inciso 3 de artculo 225 del Cdigo Civil, en cuanto dispone:
Pero no podr confiar el cuidado personal al padre o madre que no
hubiese contribuido a la mantencin del hijo mientras estuvo bajo
el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo () en la especie, se
ha establecido como hecho de la causa que el padre mantiene slo
una deuda por pensin de alimentos de un monto no significativo
en comparacin a sus aportes, lo que significa que el actor s contribuy a los gastos de su hijo mientras estuvo bajo el cuidado de la
demandada y, por ende, que no estamos en presencia de una situacin fctica que justifique la aplicacin de la prohibicin alegada.
No puede sino advertirse, en este mismo sentido, que la redaccin
de la norma en comento difiere de aquella usada por el legislador
de la Ley de Matrimonio Civil en el artculo 55 inciso 36 que en
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B. Obligacin
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El artculo 321 del Cdigo Civil enumera (desde la perspectiva del potencial
obligado) las personas que pueden reclamar alimentos. Se trata de la ms
importante fuente legal del derecho de alimentos: Se deben alimentos:
1 Al cnyuge;
2 A los descendientes;
3 A los ascendientes;
4 A los hermanos, y
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El artculo 232 del Cdigo Civil dispone en qu casos, los abuelos deben asumir la obligacin de alimentos, en subsidio de los progenitores del alimentario: La obligacin de alimentar al hijo que carece de bienes pasa, por la falta
o insuficiencia de ambos padres, a sus abuelos, por una y otra lnea conjuntamente. / En caso de insuficiencia de uno de los padres, la obligacin indicada
precedentemente pasar en primer lugar a los abuelos de la lnea del padre o
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contra del abuelo paterno. Que en este mismo orden de ideas lo que debi
acreditarse por la demandante es la carencia de bienes por parte del obligado
principal de la pensin alimenticia y al efecto ninguna prueba se ofreci y le
bast a la actora con sealar que la suma de $ 50.000.- le es insuficiente para
solventar los gastos relacionados con su hija y al no probarse ninguna circunstancia relativa a la capacidad econmica de aqul que justificara la insuficiencia del ttulo, no se ajusta a derecho la sentencia al condenar al abuelo paterno
al pago de una suma de dinero. (www.legisnews.com, Boletn diario de Jurisprudencia Chilena, autos Rol nmero 209-2007). En la misma lnea, una sentencia de la Corte de Apelaciones de Concepcin, de fecha 1 de febrero de
2007, invalid un fallo del Juzgado de Menores de Caete, que admiti una
demanda de alimentos en contra del abuelo de un menor, condenndolo al
pago de un sueldo vital mensual, no obstante que en el juicio, se haba controvertido la circunstancia de faltar el padre, obligado preferente. Lo anterior no
se consider en el auto de prueba. Por ello, razon la sentencia, deba anularse lo obrado retrotrayndose la causa al estado de dictar auto de prueba. Expresa la sentencia Que () contestada que sea la demanda, si hay hechos
sustanciales, pertinentes y controvertidos, el tribunal debe recibir de inmediato
la causa a prueba y fijar los puntos sobre los que debe recaer. Que, en el caso
de autos, el tribunal a quo no dio cumplimiento a esta exigencia pues a pesar
de estar controvertida la circunstancia ya expresada, no la contempl en el
auto de prueba, lo que perjudic a las partes al dejarlos en la imposibilidad de
rendir prueba sobre ese aspecto decisivo para sus pretensiones; pues segn lo
prescribe el artculo 3 de la Ley nmero 14.908, sobre abandono de familia y
pago de pensiones alimenticias, slo cuando los alimentos decretados no fueren pagados o no fueren suficientes para solventar las necesidades del hijo, el
alimentario podr demandar a los abuelos. (www.legisnews.com, Boletn diario de Jurisprudencia Chilena, autos Rol nmero 2.415-2006). En cuanto a la
misma hiptesis de una demanda deducida en contra del abuelo paterno,
cuando es el padre quin no provee los alimentos, es necesario armonizar el
artculo 232, que contempla el derecho a dirigirse en primer lugar contra el
referido abuelo, con el artculo 326, inciso 2. En efecto, si bien el artculo 232
consigna que entre varios ascendientes, debe recurrirse a los de prximo grado, el artculo 326 dispone que entre los de un mismo grado, el juez distribuir la obligacin de proporcionar alimentos en proporcin a sus facultades. Por
ello, en la citada sentencia de la Corte de Apelaciones de Concepcin de fecha
10 de abril de 2006, se resuelve que el abuelo paterno se encuentra obligado
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Abogado Integrante seor Jaime Guerrero Pavez. Redactora: Ministro Suplente seora Mara Eugenia Campos Alcayaga.
IV.- Sentencia de la Corte Suprema de fecha 4 de julio de 2011,
autos Rol nmero 2.906-2011.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculo 232 del Cdigo Civil; artculo 67 de la Ley nmero
19.968; artculos 764, 765, 767, 772 y 783 del Cdigo de Procedimiento Civil.
Cuestin medular: Puede demandarse a un abuelo de los alimentarios, cuando el alimentante se encuentra cumpliendo su obligacin alimenticia, aunque en un plazo adicional conferido por el
Tribunal de Familia?
Conclusin de la Corte: no es procedente la demanda en contra
de un abuelo, si el alimentante se encuentra cumpliendo su obligacin alimenticia; se desprende de la sentencia de la Corte de Apelaciones de Santiago, que si se estimare que el monto que se paga por
el alimentante no es suficiente para cubrir la totalidad de las necesidades de las alimentarias, sera necesario demandar de aumento
de pensin, y acogida la accin y no pagndose el monto decretado, sera factible accionar contra los abuelos. La Corte Suprema no
puede pronunciarse sobre la materia va casacin en el fondo, pues
el determinar si es procedente la demanda de alimentos en contra
de una abuela de los alimentarios por falta o insuficiencia del padre
que debe proporcionarlos, es una cuestin de hecho que corresponde determinar a los tribunales del fondo.
1.- Por sentencia de fecha 30 de abril de 2010, el Primer Juzgado de Familia de Santiago acogi una demanda interpuesta
por la madre de las menores y en representacin de las mismas,
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en contra de la abuela paterna de stas. La demandada fue condenada a pagar una pensin de alimentos de $ 150.000.- mensuales.
2.- Se alz la demandada, y la Corte de Apelaciones de Santiago,
por fallo de fecha 27 de diciembre de 2010, revoc la sentencia
apelada, rechazando la demanda. En esta sentencia, se establecieron los siguientes hechos:
La madre de las dos menores alimentarias dedujo demanda de
alimentos en contra de la abuela por lnea paterna de stas, basada en que el padre de las nias no ha pagado la pensin de
alimentos a que est obligado, ascendente a $ 150.000.-, existiendo una deuda pendiente por este concepto.
El monto impago de las pensiones alimenticias, ascendente
a $ 2.074.092.-, se pag con la cantidad de $ 1.293.786.-,
que su empleador ING le pag directa y oportunamente a la
demandante y que el Tribunal acept rebajar de tal cantidad
y el resto, de $ 786.006.-, se autoriz pagar en seis cuotas de
$ 130.000.-, encontrndose actualmente al da en el pago de
ellas.
Que sobre la base de tales hechos, la Corte de Apelaciones concluye que no se configuraba en la especie el presupuesto de la
insuficiencia del alimentante, para imponer a la demandada la
carga de contribuir a la satisfaccin de las necesidades de sus
nietas, no bastando para estos efectos el simple retardo ocasional
o circunstancial en que pudiera haber incurrido ste, al encontrarse en la actualidad al da en el pago de la obligacin alimenticia.
3.- En contra de la decisin de la Corte de Apelaciones, la
demandante dedujo recurso de casacin en el fondo, que fue
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rechazado por la Corte Suprema conforme al siguiente razonamiento: los jueces del grado, en uso de las facultades que son de
su exclusiva competencia la ponderacin de la prueba y el establecimiento de los hechos-, asentaron los elementos y decidieron
en la forma expuesta. Por tal razn, las alegaciones formuladas
en el recurso, resultan improcedentes, desde que ellas contraran
los presupuestos establecidos en segunda instancia, pretendiendo su alteracin, toda vez que la recurrente se sustenta en la
configuracin del presupuesto bsico para accionar en contra de
la demandada en su calidad de abuela paterna, al estimar la recurrente que qued demostrada la insuficiencia del primer obligado
al pago de los alimentos, lo que el fallo atacado desconoce. Tal
planteamiento no considera que los hechos de la causa son aquellos establecidos por los jueces del fondo en la correspondiente
sentencia, una vez apreciada la prueba conforme a sus atribuciones privativas y los mismos slo pueden ser modificados si existe
infraccin a las normas reguladoras de la prueba, lo que no ha
sido denunciado, lo que impide al Tribunal de Casacin revisar
y/o modificar los hechos conforme a los cuales ha sido resuelta
la controversia.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada
por los Ministros seor Patricio Valds A., seoras Gabriela Prez
P., Rosa Mara Maggi D., Rosa Egnem S., y el Ministro seor Roberto Jacob Ch. Redaccin a cargo de la Ministra seora Gabriela
Prez P.
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El artculo 332 del Cdigo Civil contiene tres reglas: conforme a la primera,
los alimentos son vitalicios, mientras no cambien las circunstancias que
justificaron establecerlos; la segunda, limita el plazo de vigencia de la
obligacin, tratndose de descendientes o hermanos; y la tercera, restablece el
carcter vitalicio de la pensin alimenticia , an en favor de los descendientes
y hermanos: Los alimentos que se deben por ley se entienden concedidos para
toda la vida del alimentario, continuando las circunstancias que legitimaron la
demanda. / Con todo, los alimentos concedidos a los descendientes y a los
hermanos se devengarn hasta que cumplan veintin aos, salvo que estn
estudiando una profesin u oficio, caso en el cual cesarn a los veintiocho
aos; que les afecte una incapacidad fsica o mental que les impida subsistir
por s mismos, o que, por circunstancias calificadas, el juez los considere
indispensables para su subsistencia.
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3.- En contra de este ltimo fallo, los demandados dedujeron recurso de casacin en el fondo, en el que formularon los siguientes
planteamientos:
Se funda el recurso en la infraccin de los artculos 232, 321 nmero 2, 323 y 332 del Cdigo Civil; artculo 3, inciso final, de
la Ley nmero 14.908; y artculo 32 de la Ley nmero 19.968,
argumentndose que los sentenciadores incurrieron en error de
derecho al acoger la accin intentada, desde que no se encuentra acreditada en autos la falta o insuficiencia del padre de los
menores para dar alimentos a sus hijos.
Sostienen los recurrentes que el padre es el primer obligado por
la ley a proporcionar alimentos a sus hijos, y que los jueces del
fondo no han dado aplicacin a la norma del artculo 3 de la
Ley nmero 14.908, al no haberse dictado previamente sentencia condenatoria en contra de ste, que estableciera una pensin
alimenticia que sea insuficiente o que ste deje de cumplir, en
trminos de hacer procedente la obligacin respecto de los ascendientes, la cual la ley slo ha previsto en forma subsidiaria.
Se alega que la ley contempla la posibilidad de presentar demanda, incluso desconociendo el paradero del alimentante, y
que establece adems medidas para determinarlo, herramientas
que la actora no ha empleado para emplazar al alimentante natural.
Se plantea tambin la vulneracin del artculo 32 de la Ley nmero 19.968, argumentando que los jueces del grado no han
cumplido con las exigencias de la sana crtica en cuanto a hacerse cargo de la prueba rendida en su integridad, indicando
las razones tenidas en consideracin para resolver como lo han
hecho. Lo anterior no se cumple adecuadamente en el caso sub-
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Que sobre la base de los hechos reseados, los jueces del fondo
estimaron que se configuraban las exigencias legales previstas
en los artculos 232, 321 nmero 2, 323 y 332 del Cdigo Civil,
para imponer a los demandados la carga de contribuir a la satisfaccin de las necesidades de sus nietos, atendida la circunstancia de que el primer obligado, el padre de los alimentarios, no
contribuye ni provee de ayuda alguna a su subsistencia, siendo
insuficientes los ingresos que la madre percibe para cubrir sus
necesidades.
5.- Agreg el fallo de la Corte Suprema que caba sealar que los
jueces del grado, en uso de sus facultades que son de su exclusiva competencia la ponderacin de la prueba y el establecimiento
de los hechos-asentaron los elementos indicados y decidieron en
la forma como se ha dicho. Por tal razn, las alegaciones formuladas en el recurso, resultan improcedentes desde que ellas contraran
los presupuestos establecidos, pretendiendo su alteracin, toda vez
que los recurrentes desconocen la existencia del presupuesto bsico para accionar en su contra, esto es, la falta del primero de los
obligados al pago de los alimentos, que el fallo atacado s consigna. Tal planteamiento no considera que los hechos de la causa son
aquellos establecidos por los jueces del fondo en la correspondiente
sentencia, una vez apreciada la prueba conforme a sus atribuciones
privativas y los mismos no pueden ser modificados si no se denuncia
y constata infraccin a las normas reguladoras de la prueba.
6.- Destaca el fallo de la Corte Suprema que tampoco se aprecia
que la sentencia recurrida no se haya sujetado a las normas y exigencias del sistema de la sana crtica. Por el contrario, concluye la Corte
Suprema, de su lectura fluye que los sentenciadores han analizado
las probanzas rendidas, expresando las razones en cuya virtud han
arribado a las conclusiones que indican, no evidencindose falta
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es procedente la demanda directa contra los abuelos. Hay voto disidente, respecto de la primera conclusin.
1.- Por sentencia de fecha 15 de diciembre de 2011, se acogi la
demanda de alimentos menores interpuesta por la madre de cuatro
menores, en contra de sus abuelos paternos. stos fueron condenados al pago de una pensin conjunta de $ 378.452.- Para arribar a
este monto, el Tribunal de Familia consider que habiendo quedado
establecido que los ingresos de la madre cubren el 75% de las necesidades de los menores y los ingresos del padre le permiten cubrirlas
en un 25%, y que siendo su aporte efectivo slo por 15,5%, corresponde a los abuelos paternos hacerse cargo del 9,5% hasta completar el 25% que le corresponde a su hijo y padre de los menores.
2.- En contra de esta sentencia, se alz la parte demandada, solicitando su revocacin y que en su reemplazo se dicte una que
rechace la demanda de alimentos en todas sus partes, con costas.
Argumenta la parte demandada en el recurso:
Los abuelos slo pueden ser condenados ante la insuficiencia de
ambos padres, quienes son los principales obligados para satisfacer las necesidades de los alimentarios de autos.
Seala que se demand directamente a los abuelos, sin existir
ninguna sentencia que haya decretado alimentos ni tampoco un
proceso que hubiere dejado establecido la insuficiencia de su
aporte en relacin con las necesidades de las alimentarias, habiendo acreditado que los padres siempre llegaron a acuerdos
al respecto, por lo que no existen alimentos decretados, de
modo que la sentenciadora infringe el artculo 3 de la Ley nmero 14.908.17
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Dispone el ltimo inciso del artculo 3 de la Ley nmero 14.908 (el nfasis
es nuestro): Cuando los alimentos decretados no fueren pagados o no
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Sostiene que el padre jams ha dejado de pagar pensin alimenticia ni ha sido objeto de rdenes de arresto o apercibimiento.
Discrepa de los montos establecidos en la sentencia tanto para
el aporte mensual que realiza el padre como tambin para los
ingresos de la madre, siendo en su parecer superiores en ambos
casos.
Indica que el informe social de autos reconoce que los ingresos de la madre junto con los del padre cubren las necesidades
de los hijos y que la obligacin de alimentar y educar al hijo
que carece de bienes, conforme al artculo 232 del Cdigo Civil,
pasa por la falta o insuficiencia de ambos padres, a sus abuelos,
no siendo el caso de autos, en que las necesidades de los menores se encuentran cubiertas por sus padres, en proporcin a sus
facultades econmicas tal como lo establece el artculo 160 del
Cdigo Civil.
En cuanto a la situacin socioeconmica de los abuelos paternos, sostiene que es efectivo que cuentan con un importante patrimonio, pero ste no da rentas sino gastos, y que sus ingresos
son inferiores a los de la actora.
3.- A su vez, la parte demandante tambin apel, solicitando que
se condene a los demandados al pago del 35% de las necesidades de los alimentarios, equivalente a $ 1.400.000.- Fundamenta
fueren suficientes para solventar las necesidades del hijo, el alimentario podr
demandar a los abuelos, de conformidad con lo que establece el artculo 232
del Cdigo Civil. El razonamiento de la recurrente apunta a que segn se
desprendera del tenor literal del precepto, para demandar a los abuelos es
imprescindible que los alimentos se encuentren decretados, sea por una
sentencia judicial, sea por una transaccin aprobada por la justicia. De no
estar ante ninguna de estas situaciones, argumenta la recurrente, no sera
admisible demandar directamente a los abuelos.
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iv) Los ingresos de la madre y de su hija provienen de las respectivas pensiones de viudez y orfandad que reciben, por un total
aproximado de $ 108.000.-;
v) La demandada es abuela por lnea paterna de la alimentaria,
y empresaria en el rea de transporte y parte de una sociedad que
posee varios microbuses;
vi) Las necesidades de la nia no pueden ser cubiertas en su integridad por la madre y la demandada tiene capacidad econmica
para contribuir con la mantencin de su nieta.
Que del anlisis de los artculos 321 y 232 del Cdigo Civil, se
desprende que la obligacin de proporcionar alimentos que la
ley establece respecto de los abuelos, se encuentra supeditada a
la verificacin de los presupuestos que ella misma dispone. En
efecto, esta responsabilidad slo puede reclamarse respecto de
las personas indicadas cuando los alimentos decretados no fueren pagados o no fueren suficientes para solventar las necesidades del hijo, es decir, ante la falta o insuficiencia de los progenitores como principales y naturales obligados a la mantencin de
sus hijos. Que en este sentido, cabe tener presente que los presupuestos fcticos establecidos en el fallo impugnado, como son la
muerte del padre de la alimentaria, que ste era quien provea a
su manutencin y que la madre con los ingresos que percibe no
alcanza a cubrir sus necesidades, satisfacen las hiptesis legales
que autorizan para accionar en contra de los abuelos, ante la
evidente falta del progenitor y la insuficiencia de la madre sobreviviente por la situacin econmica en que se encuentra.
Que, por otra parte, si bien la obligacin legal de los abuelos
es subsidiaria a la de los padres, pues opera slo ante la falta o
insuficiencia de stos y que entre varios obligados en un mismo
orden todos deben contribuir, lo cierto es que tal carcter no
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impone la obligacin de entablar demandas sucesivas en contra de cada uno de stos y que exista una sentencia previa que
establezca su imposibilidad total o parcial de contribuir, como
requisito previo para reclamar alimentos respecto de una persona legalmente obligada a ello. En efecto, tal exigencia no ha sido
establecida por la ley y es contraria por lo dems a la naturaleza
asistencial y de subsistencia del derecho de alimentos y a los
principios que regulan el procedimiento en juicio para hacerlo
procedente, como el de la concentracin, desformalizacin, colaboracin, actuacin de oficio y el propio principio del inters
superior del nio, base sustancial y procesal de toda la legislacin de menores y de familia. La interpretacin que armoniza
con dichos principios y con las caractersticas antes anotadas
del derecho de alimentos plantea que lo realmente importante y
concluyente para resolver sobre la materia es que se determine
si los dems obligados preferentes o del mismo orden se encuentran capacitados para satisfacer la exigencia de alimentos y que
los padres carecen de recursos para estos efectos o ellos no son
suficientes, lo que puede acreditarse en el mismo juicio, como
ocurre en el caso sub-lite al haberse demostrado la falta del padre e insuficiencia de la madre y tambin de la abuela por lnea
materna, para satisfacer las reales necesidades de la menor.
Que lo concluido no se ve alterado por lo dispuesto en el inciso
final del artculo 3 de la Ley nmero 14.90820, norma que se
refiere a una hiptesis distinta a la de autos, pues no se est ante
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C. Demanda
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D. Medios
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Tribunal, de oficio, debe arbitrar las medidas que permitan determinar la efectividad del pago que alega haber realizado el alimentante.
1.- Se dedujo por el abogado de don O. A. G. una accin o recurso de amparo en contra de la Juez Titular del Juzgado de Familia
de Antofagasta, a consecuencia de haber decretado, en virtud de lo
dispuesto en el artculo 14 de la Ley nmero 14.908, orden de arresto nocturno por el no pago de pensin de alimentos, ascendiendo lo
adeudado a la suma de $ 1.102.920.- y apercibir al deudor con la
suspensin de su licencia de conducir, de conformidad a lo previsto
en el artculo 16 del mismo cuerpo legal.
2.- Expone el abogado recurrente que la resolucin del Tribunal
de Familia le fue notificada a su correo electrnico el 30 de abril de
2012. Agrega que de inmediato se comunic con su cliente, para
que hiciera la transferencia a la cuenta de la demandante, del Banco del Estado, lo que se hizo el mismo da, para luego enviar, en la
misma fecha, un correo electrnico al Tribunal de Familia, dando
cuenta del depsito, y solicitando que se dejaran sin efecto los apercibimientos legales.
3.- El Tribunal de Familia, con fecha 3 de mayo de 2012, provey,
ordenando que previo a resolver la peticin de dejar sin efecto los
apercibimientos, deba acompaarse documento con logo, timbre o
firma que acreditare la transferencia sealada, por cuanto el correo
electrnico no tiene valor probatorio alguno para dichos efectos,
resolucin que fue notificada el 4 del mismo mes.
4.- La parte demandada dedujo entonces el citado recurso de
amparo, aduciendo que en su correo se aluda a un nmero de transaccin, y que el Tribunal, al no dejar sin efecto la orden de arresto,
haba incurrido en un acto ilegal y arbitrario, pues el demandado
nada deba. Invoc los artculos 19 nmero 7 y 21, inciso 3, de la
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E. Posibilidad
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2.- La demandante apel, pidiendo en su recurso que se condenase al demandado a pagar a ttulo de alimentos un porcentaje
correspondiente al 50% de los ingresos de ste, sean ordinarios o
extraordinarios.
3.- La Corte acogi el recurso, disponiendo que el demandado
deber pagar por concepto de pensin la cantidad en pesos equivalente al 50% de los ingresos ordinarios o extraordinarios que obtenga del empleo o empleos que actualmente desempea, agregando
la sentencia que la cantidad sera fijada en la etapa de cumplimiento
del fallo.
Pronunciada por la Segunda Sala de la Corte de Apelaciones de
Temuco, integrada por el Ministro seor lvaro Mesa Latorre, la Fiscal
Judicial seora Tatiana Romn Beltramn y el Abogado Integrante seor Fernando Mellado Diez. Redactor: seor Fernando Mellado Diez.
F. Exigencias
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El artculo 230 del Cdigo Civil se refiere a dos de los aspectos concernidos en
la obligacin de alimentos que los padres tienen para con sus hijos: educacin
y crianza; en cambio, creemos que el financiamiento del establecimiento de
los hijos no obedece al cumplimiento de un deber legal, sino que es facultativo
de los padres: Los gastos de educacin, crianza y establecimiento de los hijos
son de cargo de la sociedad conyugal, segn las reglas que tratando de ella se
dirn. Si no la hubiere, los padres contribuirn en proporcin a sus respectivas
facultades econmicas. / En caso de fallecimiento del padre o madre, dichos
gastos corresponden al sobreviviente.
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examinar si la sentencia haba sido extendida en forma legal, arribando en su estudio a las siguientes conclusiones:
Que el artculo 170 del Cdigo de Procedimiento Civil establece: Las sentencias definitivas de primera o de nica instancia y
las de segunda que modifiquen o revoquen en su parte dispositiva las de otros tribunales, contendrn () 4 Las consideraciones de hecho o de derecho que sirven de fundamento a la
sentencia.
Tal exigencia es reiterada por el artculo 66, nmeros 4 y 5 de
la Ley nmero 19.968, que regulan el contenido de la sentencia
definitiva dictada en el procedimiento de familia: 4) El anlisis
de la prueba rendida, los hechos que estime probados y el razonamiento que conduce a esa conclusin; 5) Las razones legales
y doctrinarias que sirvieren para fundar el fallo.
Que como se ha dejado constancia, la sentencia de primera instancia acogi la demanda de alimentos regulando su cuanta en
$ 1.000.000.- y los jueces de alzada resolvieron aumentarla a $
2.000.000. Que el fallo de segundo grado, si bien seala como motivo para
fundar su decisin de elevar el quantum de la pensin alimenticia que las necesidades de la demandante, conforme a su edad
y posicin social, requieren para ser satisfechas de una cantidad
mayor a aquella fijada por el tribunal de primera instancia,
no contiene razonamientos ni motivaciones que den cuenta de
cules son las necesidades superiores de la alimentaria, ni de la
capacidad econmica del alimentante y sus circunstancias domsticas, que justifiquen la modificacin que introduce al fallo
de primer grado.
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Que de este modo se concluye que el fallo impugnado no cumple con la exigencia de contener los fundamentos necesarios que
deben servir de base y justificar la decisin adoptada, la que ha
debido comprender el anlisis de las probanzas del juicio, el establecimiento de los hechos que se estimen probados y los razonamientos que conducen a tales conclusiones, como lo prescribe
el artculo 66 de la Ley nmero 19.968 en sus numerales 4 y 5
en relacin con el artculo 170 nmero 4 del Cdigo de Procedimiento Civil, normas que tienden a asegurar la justicia y legalidad
de los fallos y a proporcionar a los litigantes los antecedentes que
les permitan conocer los motivos de la decisin del litigio, constituyendo tal requerimiento, ms all de una simple regla procesal,
un aspecto fundamental del derecho al debido proceso.
Que la exigencia de una debida fundamentacin rige an cuando la materia debatida diga relacin con un aspecto prudencial,
como es la regulacin de la obligacin alimenticia, puesto que
en su determinacin deben respetarse los parmetros que la ley
establece, como las necesidades de la alimentaria, la capacidad
econmica del alimentante y la limitacin de no superar sta
el 50% de sus ingresos, cuestin cuya observancia slo puede
garantizarse y demostrarse en la medida que los sentenciadores
cumplan con el deber de dar suficiente razn de su decisin,
sobre la base del anlisis de los elementos probatorios allegados
al proceso y de las motivaciones extradas de stos.
Que, en estas condiciones, al no cumplir la sentencia atacada
con los requisitos indicados, se configura en la especie el vicio
de nulidad previsto en el numeral 5 del artculo 768 del Cdigo
de Procedimiento Civil, lo que autoriza su invalidacin, puesto
que el mismo ha influido sustancialmente en lo dispositivo del
fallo, ya que ha hecho posible que se aumente el monto fijado en
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El artculo 160 del Cdigo Civil deja en claro que la obligacin de socorro que
tienen los cnyuges subsiste si ellos se encuentran separados: En el estado de
separacin, ambos cnyuges deben proveer a las necesidades de la familia comn
a proporcin de sus facultades. / El juez en caso necesario reglar la contribucin.
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El artculo 19, inciso final, de la Ley nmero 19.968 (agregado por la Ley
nmero 20.152, publicada en el Diario Oficial de fecha 9 de enero de 2007),
confiere legitimacin activa al padre o madre del alimentario mayor de edad,
siempre que ste viva con uno de aquellos: En los casos del inciso segundo
del artculo 332 del Cdigo Civil, aqul de los padres en cuyo hogar vive el
alimentario mayor de edad, se entender legitimado, por el solo ministerio de la
ley, para demandar, cobrar y percibir alimentos de quien corresponda, en inters
del alimentario, sin perjuicio del derecho de ste para actuar personalmente, si
lo estima conveniente. Si el alimentario no acta personalmente se entender
que acepta la legitimacin activa del padre o madre junto a quien vive. Por
su parte, el referido inciso 2 del artculo 332 del Cdigo Civil, despus de
aludir el inciso precedente a que los alimentos se entienden concedidos por
toda la vida del alimentario, establece: Con todo, los alimentos concedidos a
los descendientes y a los hermanos se devengarn hasta que cumplan veintin
aos, salvo que estn estudiando una profesin u oficio, caso en el cual cesarn
a los veintiocho aos; que les afecte una incapacidad fsica o mental que les
impida subsistir por s mismos, o que, por circunstancias calificadas, el juez los
considere indispensables para su subsistencia.
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Conclusin de la Corte: aunque la madre de los alimentarios tiene legitimacin activa para demandar el pago de las pensiones de
alimentos adeudadas, los alimentarios, siendo mayores de edad,
pueden disponer, compensar o renunciar a tales pensiones, o declarar que nada se les debe por tal concepto, otorgando el respectivo
finiquito al alimentante. Aunque la administracin de las pensiones
alimenticias corresponda a la madre, los titulares de las mismas son
los hijos y por ende ellos pueden pronunciarse acerca de su pago
o renunciar a las pensiones devengadas a su favor. Asimismo, si los
jueces del fondo dieron por establecido el pago de las pensiones
reclamadas, no puede modificarse esa conclusin a travs de un
recurso de casacin en el fondo, salvo si se denuncia y acredita que
se infringieron las normas reguladoras de la prueba.
1.- En causa radicada ante el Juzgado de Familia de Via del Mar,
sobre cumplimiento de pago de pensin de alimentos, promovido
por la madre de cuatro alimentarios mayores de edad que viven con
la primera, por resolucin de 18 de marzo de 2011 se rechaz la
excepcin de pago opuesta por el alimentante y padre de los alimentarios.
2.- Se alz el ejecutado y una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Valparaso, por fallo de 13 de junio de 2011, revoc la
resolucin apelada y acogi la excepcin de pago. El fundamento
de la apelacin consisti en la existencia de una escritura pblica
suscrita por los cuatro hijos del demandado, en la que dan cuenta
que ste pag ntegramente las pensiones que les adeudaba a los
primeros, otorgando el respectivo finiquito.
3.- En contra de esta ltima sentencia, la parte demandante dedujo recurso de casacin en el fondo, denunciando la infraccin
del artculo 336, en relacin con los artculos 160 y 323, todos del
Cdigo Civil, y artculo 19 de la Ley nmero 19.968, argumentando
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clusin, sin que el recurrente haya denunciado como conculcadas las normas reguladoras de la prueba, en la especie, de la
sana crtica.
Que, por lo antes razonado, no habindose demostrado por el
recurrente los errores de derecho denunciados, el recurso en
examen debe ser desestimado.
Sentencia pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema,
integrada por los Ministros seor Patricio Valds A., seora Rosa Egnem S., seor Juan Fuentes B., Ministro Suplente seor Alfredo Pfeiffer R., y el Abogado Integrante seor Patricio Figueroa S. Redaccin
de Ministra seora Rosa Egnem S.
I. Distribucin
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cesario citar a una audiencia, la que deber efectuarse dentro de los diez das
siguientes. / Si en el plazo indicado en el inciso segundo no existe oposicin,
la resolucin que fija los alimentos provisorios causar ejecutoria. / El tribunal
podr acceder provisionalmente a la solicitud de aumento, rebaja o cese de
una pensin alimenticia, cuando estime que existen antecedentes suficientes
que lo justifiquen. / La resolucin que decrete los alimentos provisorios o la
que se pronuncie provisionalmente sobre la solicitud de aumento, rebaja o
cese de una pensin alimenticia, ser susceptible del recurso de reposicin
con apelacin subsidiaria, la que se conceder en el solo efecto devolutivo y
gozar de preferencia para su vista y fallo. / El juez que no d cumplimiento a
lo previsto en el inciso primero incurrir en falta o abuso que la parte agraviada
podr perseguir conforme al artculo 536 del Cdigo Orgnico de Tribunales.
Este artculo debemos vincularlo con el artculo 327 del Cdigo Civil, que tambin regla los alimentos provisorios; dispone al efecto: Mientras se ventila la
obligacin de prestar alimentos, deber el juez ordenar que se den provisoriamente, con el solo mrito de los documentos y antecedentes presentados; sin
perjuicio de la restitucin, si la persona a quien se demanda obtiene sentencia
absolutoria. / Cesa este derecho a la restitucin, contra el que, de buena fe y
con algn fundamento plausible, haya intentado la demanda. La actual redaccin del artculo 327 del Cdigo Civil se aviene con la naturaleza asistencial
del derecho de alimentos, que no admite demora en su ejercicio, pues est
comprometida la existencia misma de su titular. La expresin deber hoy
empleada en el precepto, se incorpor al tipo legal por la Ley nmero 19.741,
publicada en el Diario Oficial de fecha 24 de julio de 2001. Antes, el artculo
consignaba que Mientras se ventila la obligacin de prestar alimentos, podr
el juez ordenar, lo que no pocas veces suscit criterios dispares en los tribunales de justicia, aunque las Cortes solan asentar el principio actualmente
consagrado en la ley. El artculo fue nuevamente modificado por la Ley nmero 20.152, publicada en el Diario Oficial de fecha 9 de enero de 2007, en el
sentido de reemplazar la frase desde que en la secuela del juicio se le ofrezca
fundamento plausible por la oracin con el solo mrito de los antecedentes
y documentos presentados, frmula que, segn referimos, se emplea igualmente en el artculo 4 citado. Ahora bien, se ha planteado que existira una
contradiccin entre los dos artculos, pues mientras el primero dice que el
juez deber pronunciarse sobre los alimentos provisorios, el segundo seala
que el juez deber ordenar que se den provisoriamente. Pienso que no hay
contradiccin: el juez no puede dejar de decretar un monto; ahora bien, el
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Que, por otro lado, la madre debe solventar en parte los gastos
de mantencin de otras dos hijas, cargas que en cambio no tiene
el demandado, quien vive solo, debiendo sobrellevar nicamente
los gastos propios de tal circunstancia. En consecuencia, las facultades econmicas del padre superan las de la madre, razn por la
cual corresponde hacer un ajuste adicional por dicho concepto,
estimando prudente alzar el monto de la pensin alimenticia fijada a un 110% de un ingreso mnimo remuneracional mensual.
Que, de acuerdo al artculo 331 del Cdigo Civil, los alimentos se
deben desde la fecha de la primera demanda, entendiendo que ello
se produce desde la notificacin de dicho acto procesal al demandado. En cuanto a los alimentos provisorios fijados cautelarmente por
el Tribunal, de conformidad al artculo 4 de la Ley nmero 14.908,
stos tienen vigencia desde la poca en que fueron fijados hasta la
fecha en que la sentencia definitiva quede ejecutoriada, pues desde
ah en adelante se deben pagar los alimentos definitivos. En razn de
lo sealado, resultaba errnea la decisin que determinaba que los
alimentos definitivos se devengaban desde el mes en que quedara
ejecutoriado el fallo y aquella otra que dejaba sin efecto los alimentos
provisorios desde la fecha de la sentencia de primer grado.
Por lo razonado, mrito de los antecedentes, disposiciones legales
citadas y de conformidad a lo establecido en los artculos 7 de la
Ley nmero 14.908 y 67 de la Ley nmero 19.968, se confirma la
sentencia apelada, con las siguientes declaraciones: que la pensin
alimenticia ser equivalente a un 110% de un ingreso mnimo remuneracional mensual (a mayo de 2012, $ 200.200.-), a contar de la fecha de la notificacin de la demanda; y que los alimentos provisorios
quedarn sin efecto una vez ejecutoriada la presente sentencia.46
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Dictada por la Corte de Apelaciones de Arica (no se indica Ministros y abogados integrantes). Redaccin del Ministro seor Rodrigo
Cerda San Martn.
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Cuestin medular: desde qu momento rige la sentencia que decreta los alimentos definitivos, si stos fueren inferiores a los alimentos provisorios?
Conclusin de la Corte: la sentencia puede establecer vlidamente que los alimentos definitivos se deben slo desde que quede ejecutoriada la sentencia que los establezca, y no desde la notificacin
de la demanda, pues estando los jueces facultados para fijar la forma
y cuanta en que hayan de prestarse los alimentos, una decisin
como la sealada no contraviene el artculo 331 del Cdigo Civil,
en cuanto declara que los alimentos se deben desde la primera demanda. Cabe entonces la posibilidad de establecer una regulacin
diferenciada en cuanto a la data desde la que se debe los alimentos provisorios y definitivos. Adicionalmente, una decisin como
la mencionada, beneficia a los alimentarios, es decir, a quienes la
propia ley, en esta materia, pretende proteger (ello, porque segn
veremos, en este caso los alimentos provisorios eran superiores a los
definitivos). En consecuencia, los alimentarios no estn obligados a
restituir el exceso.
1.- Don A. D. S. interpuso una demanda ante el 1 Juzgado de
Familia de Santiago, en contra de su cnyuge K. A. H., para que se
determinare la relacin directa y regular que debe existir entre el actor y sus cuatro hijos menores de edad. La demandada, por su parte,
dedujo demanda reconvencional de alimentos.
2.- Mientras se resolva la demanda reconvencional, el tribunal
de familia, por resolucin de 23 de marzo de 2007, fij por concepto de alimentos provisorios la suma de $ 3.190.000.- mensuales.
3.- Por sentencia de fecha 28 de abril de 2008, el citado Juzgado
acogi la demanda reconvencional, condenndose a don A. D. S. al
pago de una pensin alimenticia a favor de sus hijos, consistente en
la suma de $ 500.000.-, ms gastos de colegiatura y matrculas de
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El fundamento del fallo nos parece discutible. No creemos que el artculo 333,
que alude efectivamente a la facultad del juez para reglar la forma y cuanta
de la pensin, pueda servir para dejar de aplicar la regla del artculo 331, en
cuanto ste dispone que los alimentos se deben desde la primera demanda. La
forma pareciera aludir a lo que comprenden los alimentos, es decir, podra
tratarse slo de una suma de dinero (sea que se disponga lisa y llanamente el
pago de una cierta cantidad, o que los alimentos correspondan a un porcentaje
de las rentas del alimentante, o que la pensin consista en cierta cantidad de
ingresos mnimos remuneracionales, o confiera derecho a percibir los intereses
de un capital o se traduzca en la retencin de rentas de arrendamiento, por
ejemplo), o simultneamente de una suma de dinero y la titularidad de un
derecho real de usufructo, uso o habitacin; o slo de un derecho real como los
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K. Determinacin
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170, nmero 4, del Cdigo de Procedimiento Civil y en particular las sentencias definitivas dictadas en el procedimiento de
familia, conforme al artculo 66, nmero 4, de la Ley nmero
19.968.
Que la decisin que se contiene en la sentencia definitiva debe
fundarse en un anlisis lgico y racional por parte de los sentenciadores que la pronuncian, que debe comprender toda la prueba rendida y hacerse cargo de aqullos aspectos que han sido
discutidos por las partes y su acreditacin procesal, y, adems,
debe extenderse al examen o verificacin del cumplimiento de
las condiciones legales de procedencia de la accin o de las excepciones formuladas.
Que, en este sentido, cabe consignar que del examen del fallo
impugnado se desprende que ste no se hace cargo de las alegaciones formuladas por el demandado, tanto en primera como
en segunda instancia, y que dicen relacin con la verificacin de
los presupuestos de la accin de alimentos impetrada, esto es, la
situacin de los alimentarios en cuanto al cuidado bajo quien se
encuentran y, por ende, la legitimidad de la actora para reclamar
alimentos a su respecto.
Que de este modo se concluye que el fallo impugnado no cumple con lo exigido por los artculos 66 nmeros 4 y 5 de la Ley
nmero 19.968 y 170 nmero 4 del Cdigo de Procedimiento
Civil, normas que tienden a asegurar la justicia y legalidad de los
fallos y a proporcionar a los litigantes los antecedentes que les
permitan conocer los motivos de la decisin del litigio, constituyendo tal requerimiento ms all de una simple regla procesal,
un aspecto fundamental del derecho al debido proceso.
Que en estas condiciones, no puede sino concluirse que la sentencia atacada no cumple con las exigencias legales antes refe101
sin alimenticia a favor de sus dos hijos que estn bajo el cuidado de la demandante.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada
por los Ministros seores Patricio Valds A., Guillermo Silva G., Roberto Jacob Ch., y los Abogados Integrantes seores Rafael Gmez
B. y Patricio Figueroa S. Redaccin del seor Rafael Gmez B.
L. Prestaciones
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Cuestin medular: prestaciones que deben considerarse, para determinar que la pensin de alimentos no excede del mximo legal.
Conclusin de la Corte: pago del dividendo de un mutuo hipotecario, debe incluirse dentro del porcentaje mximo de las rentas del
alimentante a que puede ascender la pensin de alimentos.
1.- En el caso, el alimentante haba sido condenado por sentencia de fecha 13 de abril de 2006, al pago de una pensin alimenticia equivalente al cuarenta por ciento de sus emolumentos lquidos
(disponindose su retencin por el empleador), y adems, al pago
mensual del dividendo de la casa habitacin en la que vivan sus
tres hijos (que al mes de enero de 2006, ascenda a $ 320.000.mensuales).
2.- Ambos padres son mdicos cirujanos, pero la madre registra
ingresos por $ 350.000.- mensuales, porque se encuentra haciendo
una beca.
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3.- El condenado, al apelar, aleg que el pago del aludido dividendo, deba incluirse dentro del citado cuarenta por ciento, y que
al hacerlo as, sera posible determinar que la pensin a la que est
condenado supera el mximo legal previsto en el artculo 7 de la
Ley nmero 14.908.
4.- La Corte de Apelaciones, por fallo de fecha 25 de agosto de
2006, concluy Que la suma del dividendo que debe soportar el
demandado como pensin de alimentos, adems del 40% de retencin que le fue impuesto por sentencia definitiva, excede de acuerdo
con los antecedentes probatorios allegados al proceso, el mximo
legal que la ley regula en un 50% de sus ingresos. Que dado que
la casa que ocupan los menores es de propiedad del demandado, a
l compete el pago de los dividendos. Su asignacin a los alimentarios, en calidad de pensin de alimentos, debe serlo, de conformidad
con la Ley nmero 14.908, a ttulo de derecho de uso y habitacin
y que corresponder tener en consideracin al momento de tasar
los alimentos, saldr de los ingresos del padre alimentante. Que de
acuerdo con los antecedentes corresponder regular por concepto
de derecho de alimentos el derecho de uso sobre la propiedad del
demandado, en que habitan sus hijos menores con su madre ()
ms el 25% de sus emolumentos lquidos estrictamente legales del
demandado, en los trminos en que ha quedado dicho en la sentencia de primer grado. En mrito de lo considerado () Se declara:
que se confirma la sentencia apelada con declaracin de que don
() queda obligado a proporcionar, en calidad de pensin de alimentos a sus hijos menores () el pago de los dividendos de la
casa habitacin que ocupan los menores alimentarios y que stos
forman parte de la pensin de alimentos regulados en este procedimiento. En consecuencia se rebajan a un 25% los emolumentos
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M. Condiciones
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1.- Por sentencia de fecha 24 de mayo de 2010, del Tercer Juzgado de Familia de Santiago, se rechaz una demanda de cese de pensin alimenticia, interpuesta por el padre del alimentario, fundada
en ser ste mayor de 21 aos y no estar cursando estudios.
2.- La parte demandante, dedujo recurso de casacin en la forma,
fundado en el artculo 795 nmero 4 del Cdigo de Procedimiento Civil en relacin con el artculo 67 nmero 6 de la Ley nmero
19.968, por cuanto durante el proceso no se accedi por el Tribunal
a rendir prueba confesional solicitada por el recurrente, lo que lo
dej en la indefensin, y que tena por objeto determinar si efectivamente el demandado se encontraba legitimado para recibir o no una
pensin alimenticia. La misma parte solicit la anulacin del fallo,
fundado esta vez en la causal del artculo 67 nmero 6 letra b) de la
Ley nmero 19.968 en relacin con el artculo 63 nmero 3 de la
misma y con los artculos 766 y 768 del Cdigo de Procedimiento
Civil, argumentando que la sentencia no posee consideraciones de
hecho y, adems, en el considerando segundo hace razonamientos
absolutamente contradictorios ya que por un lado se seala que el
demandado compareci en el proceso a las dos audiencias, rindi
prueba y ejerci sus derechos mediante mandatario judicial, todos
actos jurdicos supuestamente vlidos, y por otro lado se agrega que
el demandado se encuentra inhabilitado mentalmente para subsistir
por s mismo. El demandado, asimismo, dedujo recurso de apelacin.
3.- La Corte rechaz el recurso de casacin en la forma, en virtud
de lo dispuesto en el inciso penltimo del artculo 768 del Cdigo
de Procedimiento Civil, por cuanto el alimentario concurri al juicio y pudo ser visto por el juez, dando por el fallo su apreciacin al
respecto, lo que no es contradictorio con el hecho que lo considere
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. Acerca
la obligacin de alimentos
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El artculo 329 del Cdigo Civil establece uno de los tres requisitos esenciales
(adems de texto legal que confiera el derecho para reclamar alimentos
y necesidad de quien los reciba) para que puedan decretarse alimentos en
favor de las personas sealadas por la ley: En la tasacin de los alimentos
se debern tomar siempre en consideracin las facultades del deudor y sus
circunstancias domsticas.
55
El artculo 333 del Cdigo Civil, en su primera parte, otorga al juez la facultad
para establecer el monto de la pensin de alimentos y cmo ha de pagarse; la
segunda parte, se aplica preferentemente a los herederos del alimentante (la
referencia a una caja de ahorros, ha de entenderse hoy da a un Banco): El
juez reglar la forma y cuanta en que hayan de prestarse los alimentos, y podr
disponer que se conviertan en los intereses de un capital que se consigne a este
efecto en una caja de ahorros o en otro establecimiento anlogo, y se restituya
al alimentante o sus herederos luego que cese la obligacin.
112
951,
959
nmero
456,
109757,
1167
nmero
158,
El artculo 959 del Cdigo Civil, contempla las bajas generales de la herencia,
y su nmero 4, alude a los alimentos forzosos: En toda sucesin por causa
de muerte, para llevar a efecto las disposiciones del difunto o de la ley, se
deducirn del acervo o masa de bienes que el difunto ha dejado, inclusos los
crditos hereditarios: () 4. Las asignaciones alimenticias forzosas.
56
57
El artculo 1167, nmero 1 del Cdigo Civil, incluye los alimentos con fuente legal,
entre las asignaciones forzosas que la ley le impone al causante: Asignaciones
forzosas son las que el testador es obligado a hacer, y que se suplen cuando no
las ha hecho, aun con perjuicio de sus disposiciones testamentarias expresas. /
Asignaciones forzosas son: 1. Los alimentos que se deben por ley a ciertas personas.
Esta asignacin ha sido objeto de arduas discusiones en la doctrina chilena,
particularmente en lo que se refiere a si la obligacin de alimentos se transmite con
la muerte del alimentante o si se extingue, de la misma manera que ocurre si muriese
el titular del derecho de alimentos (hiptesis sta ltima en la que nadie discute
la extincin del derecho, habida cuenta de su carcter personalsimo). Las dudas
en cuanto a la transmisibilidad (opinin de la minora) o de la intransmisibilidad
(opinin de la mayora) de la obligacin alimenticia, surgen por la doble naturaleza
que el Cdigo Civil atribuye a los alimentos que el causante pagaba a su muerte a
quienes por ley tenan derecho a obtenerlos: baja general de la herencia (artculo
959, nmero 4) y asignacin forzosa (artculo 1167, nmero 1). Las opiniones
podran resumirse de la siguiente manera: 1. Para algunos (los menos), la obligacin
alimenticia se transmite, pues tal es la regla general a la muerte del causante, y la ley
no seal expresamente su intransmisibilidad. Muerto el alimentante, la obligacin
se radicar en los herederos que acepten la herencia, entendindose que no se trata
de pagar slo pensiones atrasadas, es decir devengadas a la muerte del causante pero
que no estaban solucionadas (pues stas pensiones corresponderan a una deuda
hereditaria, a la que alude el Cdigo Civil en el artculo 959, nmero 2, mientras
58
113
114
59
60
El artculo 1170 del Cdigo Civil contiene dos reglas: la primera, deja a salvo a
los asignatarios de alimentos, de toda responsabilidad por el pasivo del causante,
en cuanto los primeros no pueden ser obligados a pagar deudas hereditarias
o testamentarias; la segunda regla, permite a los herederos que se encuentran
pagando la obligacin alimenticia, demandar la rebaja de la misma; cabe sealar
que aunque la ley no lo diga, parece lgico concluir que los herederos tambin
podran demandar el cese del pago de la pensin, si acreditan que el alimentario
ha incrementado su patrimonio en condiciones tales que no puede entenderse que
se encuentra en estado de necesidad que justifique que otras personas solventen
sus gastos ms esenciales para la vida; en cambio, tal como concluye la mayora
de los Ministros en la sentencia a la que nos referimos en el cuerpo de este trabajo,
pareciera no ser posible demandar el aumento de la pensin (no slo porque la ley
nada diga, pues no sera suficiente argumento, sino tambin porque la obligacin
no sera transmisible, como entiende la sentencia). Con todo, el voto de minora,
115
de la misma. Constituye sin embargo una baja general de la herencia, que grava la misma y que puede hacerse efectiva sobre la
masa hereditaria. Voto de minora que estima admisible la accin,
porque sin perjuicio de coincidir en la intransmisibilidad de la obligacin alimenticia, a la muerte del causante sta se transform en
una asignacin forzosa que grava la masa hereditaria, y a cuyo pago
estn obligados los herederos, en conformidad al artculo 1168 del
Cdigo Civil. Asimismo, la posibilidad de que la asignacin forzosa
alimenticia vare en el futuro, se admite en el artculo 1170 del Cdigo Civil.
1.- Ante el Segundo Juzgado de Familia de Santiago, doa C. G.
R. P. dedujo a favor de su hijo S. H. R., demanda de aumento de
alimentos, en contra de cuatro personas, en su calidad de herederos
del alimentante (quien era padre del menor alimentario), fallecido el
5 de febrero de 2008.
116
si se tratare de una norma excluyente de la del artculo 959 nmero 4, que tambin resulta infringida, ya que esta disposicin
se limita a determinar que a partir de esa fecha, la obligacin de
alimentos constituye una baja general de la herencia, acorde con
lo que seala el artculo 332 del mismo texto legal, en orden a
que los alimentos que se deben por ley se entienden concedidos
para toda la vida del alimentario, continuando las circunstancias
que legitimaron la demanda.
Sostiene la recurrente que lo que se plantea no est dado por la
intransmisibilidad de las obligaciones alimenticias, desde que
lo que se pide en autos no es el reconocimiento del derecho de
alimentos, pues el padre fue condenado en vida al pago de una
pensin alimenticia en favor de su hijo. Precisa que lo reclamado
ha sido simplemente la adecuacin del monto de esa pensin, ya
que la obligacin se encuentra vigente por disposicin expresa
de la ley, al constituir los alimentos que el difunto ha debido por
ley una asignacin forzosa que grava la masa hereditaria, correspondiendo a una baja general de la herencia del difunto alimentante. Por esto, estima errada la conclusin de los jueces del
fondo en orden a que con su muerte se extingui la obligacin
alimenticia. Plantea que la infraccin del artculo 959 nmero
4 debe relacionarse con la del artculo 1167 del mismo cuerpo
legal que define el concepto de asignacin forzosa, estableciendo como una especie de ella los alimentos que se deben por ley.
Debe tenerse presente tambin la vulneracin del artculo 1168
del Cdigo Civil, en cuanto el fallo atacado desatiende lo que
dicha norma establece, al estimar que la pensin de alimentos
se extingui con la muerte del alimentante, por lo que no sera procedente un aumento de la misma, en circunstancias que
ella grava la masa hereditaria. Invoca tambin la conculcacin
del artculo 1170 del Cdigo Civil, disposicin que establece la
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122
123
124
O. Condiciones
que
posibilitan
acoger
un
recurso
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127
129
cierto que el artculo 336 del mismo Cdigo, permite que las
pensiones alimenticias atrasadas puedan renunciarse y compensarse, sin perjuicio de la prescripcin que compete al deudor.
Por lo anterior, y tomando en consideracin que el arresto y el
arraigo que afecta al amparado tienen su origen en pensiones
alimenticias que se establecieron el 10 de octubre de 2003, sin
que se haya interrumpido la prescripcin, corresponde que sta
se acoja, ya que se cumple con creces el mximo legal que permite la ley.
2.- Informando la Polica de Investigaciones, a peticin del recurrente, seala que ste registra dos arraigos vigentes, de fechas 2 de
enero y 11 de marzo de 2004, emanados del Segundo Juzgado de
Menores de Antofagasta, por Alimentos.
3.- Informando la Juez del Juzgado de Familia de Antofagasta,
manifiesta:
Que en los autos Rol 13.918-2003 seguidos ante el Segundo Juzgado de Menores de Antofagasta, con fecha 30 de abril de 2003
doa C. C. L. pidi alimentos para la menor C. C. C., al padre de
sta, don J. C. V.
El 17 de junio de 2003 se fijaron alimentos provisorios en favor
de la menor, en la suma equivalente al 40% de un ingreso mnimo mensual incrementado a contar de junio de 2002.
Que notificado el demandado, fue apercibido con arresto a dar
cumplimiento a los alimentos provisorios, con fecha 8 de junio
de 2003.
Con fecha 10 de octubre de 2003, la actora solicita el arresto
del alimentante, por adeudar alimentos provisorios y, previa cer-
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133
61
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Letelier Ferrada y Fiscal Judicial Sra. Juana Latham Fuenzalida. Redaccin de la ltima.
Q. Presupuestos
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139
puesto que se desarrolla a partir de premisas distintas a las establecidas en la sentencia que se revisa y que dicen relacin con
la capacidad econmica de las partes y las necesidades de los
alimentarios. Tal planteamiento, sin embargo, desconoce que los
hechos de la causa son slo los establecidos por los jueces del
fondo en su sentencia y que stos nicamente pueden modificarse si el recurrente denuncia y se constata infraccin de las
normas reguladoras de la prueba.
Que en este contexto, las denuncias que se formulan por el recurrente como vulneracin de los principios de la sana crtica,
constituyen ms bien discrepancias con la apreciacin y valoracin que han realizado los jueces del grado respecto de los
antecedentes allegados al juicio, por no resultar acordes a la posicin que dicha parte ha sustentado durante la litis.
Que cabe sealar que la demanda aparece fundada en circunstancias que existan al momento en que se determin la pensin
de alimentos a favor de las demandadas, tales como la existencia
de hijos de un matrimonio anterior e ingresos percibidos por la
cnyuge, sin que se acreditara variacin de ellos ni de otras condiciones que puedan afectar las necesidades y facultades de las
partes. No debe olvidarse que si bien en materia de alimentos
la sentencia produce slo la denominada cosa juzgada formal,
no es menos cierto que la nica manera de destruir o desvirtuar
dicho efecto es mediante la prueba de la variacin en las circunstancias que se tuvieron en vista al momento de adoptar la
decisin cuyo cambio se pretende, cambio o variacin que no
concurre en la especie.
Que tampoco puede sostenerse que se haya infraccionado el artculo 7 de la Ley nmero 14.908, por cuanto la pensin de
alimentos cuestionada fue fijada en una causa anterior y se ha
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143
144
alimentaria han ido en aumento y que su grupo familiar se encuentra en una precaria situacin, no sindole posible soportar
una rebaja de la obligacin alimenticia.
Que, sobre el particular, cabe sealar que los jueces del grado,
en uso de las facultades que son de su exclusiva competencia la
ponderacin de la prueba y el establecimiento de los hechosasentaron los elementos antes indicados y decidieron como se
ha dicho. Por tal razn, las alegaciones formuladas en el recurso
resultan improcedentes, desde que ellas contraran los presupuestos establecidos, pretendiendo su alteracin, toda vez que
el recurrente alega la disminucin de sus ingresos y la imposibilidad de contribuir a la mantencin de la alimentaria mediante
el pago de los alimentos decretados a su favor. Tal planteamiento
no considera que los hechos de la causa son aquellos establecidos por los jueces del fondo en la correspondiente sentencia,
una vez apreciada la prueba conforme a sus atribuciones privativas y que los mismos no pueden ser modificados si no se denuncia y constata infraccin a las normas reguladoras de la prueba,
cuestin que no se evidencia en la especie.
Que, en efecto, del estudio de los antecedentes, no se advierte
que los jueces del grado, al establecer los presupuestos fcticos
de la causa, hayan quebrantado las normas de la sana crtica,
toda vez que expusieron y explicaron sus reflexiones en torno
a la prueba aportada, que fue la que les permiti arribar a las
conclusiones antes referidas. Circunstancia diversa es que el recurrente no las comparta.
Que respecto a las dems faltas atribuidas al fallo atacado, en
cuanto a que no se habra sujetado a las normas y exigencias del
sistema de la sana crtica, lo cierto es que, de su atenta lectura,
fluye que los sentenciadores han analizado las probanzas ren145
R. Lmite
del
50%
armonizacin
con
la
obligacin
de
proporcionar
146
pagar por concepto de pensin alimenticia a favor de tales hijos mayores de edad la suma ascendente al 35% de su remuneracin bruta.
Considerndose lo anterior, la sentencia que se dict en el juicio
iniciado por los dos hijos de 18 y 16 aos, slo decret el pago de
una pensin ascendente al 15% de la remuneracin, pues en caso
de fijar un porcentaje mayor, se habra excedido el 50% mximo
previsto en la ley.
3.- Contra la ltima sentencia, la parte demandante dedujo recurso de apelacin, solicitando el aumento de la pensin. Dicho
recurso fue acogido por la Corte de Valparaso, que en sus considerandos, advierte:
Que nuestra legislacin no prev el caso a tratar, esto es, en
que un mismo obligado tiene una pluralidad de personas que
pueden solicitarle alimentos y sus recursos no le alcanzan para
satisfacer a todas. Ante esta situacin la doctrina estima que la
solucin ha de buscarse acudiendo a los principios de equidad
(Cdigo de Procedimiento Civil, artculo 170 nmero 5), para
lo cual deben considerarse las circunstancias de cada caso, tales como la proximidad del parentesco y las respectivas necesidades, como as tambin, la posibilidad de alguno de los
acreedores de conseguir alimentos de otros obligados de grado
ulterior y por ltimo, el inters superior del nio, en el caso a
tratar.
La Corte estima que el demandado se expuso voluntariamente a exceder del lmite permitido por la ley, a sabiendas que
tena cuatro hijos de filiacin matrimonial, discriminando de
esta manera, respecto de los dos que eran menores, los cuales
en definitiva resultaron perjudicados por el propio actuar del
obligado, pues no poda por el monto de la pensin alimenticia
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S. Acerca
de la obligacin del
Juez
de
Familia
de
64
Artculo 11 de la Ley nmero 14.908: Toda resolucin judicial que fijare una
pensin alimenticia, o que aprobare una transaccin bajo las condiciones
establecidas en el inciso tercero, tendr mrito ejecutivo. Ser competente
para conocer de la ejecucin el tribunal que la dict en nica o en primera
instancia o el del nuevo domicilio del alimentario. / En las transacciones sobre
alimentos futuros tendrn la calidad de ministros de fe, adems de aquellos
sealados en otras disposiciones legales, los Abogados Jefes o Coordinadores
de los Consultorios de la respectiva Corporacin de Asistencia Judicial, para
el solo efecto de autorizar las firmas que se estamparen en su presencia. / El
juez slo podr dar su aprobacin a las transacciones sobre alimentos futuros,
a que hace referencia el artculo 2.451 del Cdigo Civil, cuando se sealare
en ellas la fecha y lugar de pago de la pensin, y el monto acordado no sea
inferior al establecido en el artculo 3 de la presente ley. La mencin de la
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150
151
4.- La sentencia de la Corte de Apelaciones de Concepcin expresa las siguientes ideas, para concluir acogiendo el recurso:
Que mediante la transaccin se acord que el cuidado personal
de la menor, de actuales 14 aos, hija del seor L. C. M. y sobrina de la seora S. C. C., quedaba entregado a esta ltima. En este
aspecto declara la Corte- la ley no exige la aprobacin judicial
para su validez.
Que, si uno de los padres hubiere fallecido, siguiendo el mismo
principio (autonoma de los padres) ser la voluntad del sobreviviente la que podr adoptar las decisiones respecto de la tuicin
del hijo menor, asumiendo el mismo el cuidado personal, o bien,
otorgando la tuicin a un tercero. Si bien este supuesto no fue
considerado expresamente por el legislador, no existe razn alguna
para que en este evento primare la decisin judicial por sobre la
voluntad manifestada del padre sobreviviente (Corte de Santiago,
Rol nmero 4.105-2004). Agrega el fallo, repasando jurisprudencia al respecto, que la Corte de Temuco, resolvi que el cuidado
del menor debe concederse a tercero, si la madre lo dej a su
cuidado y conviene a su inters superior (Rol nmero 13-2009).
Que el inters del nio alude a asegurar al menor el ejercicio
y proteccin de sus derechos fundamentales y a posibilitar la
mayor suma de ventajas en todos los aspectos de su vida, en
perspectiva de su autonoma y orientado a asegurar el libre desarrollo de su personalidad. Este principio se ha transformado en
un criterio relevante de interpretacin judicial.
Tambin debe tenerse en cuenta el derecho del nio a ser odo,
que no se restringe nicamente a un plano procesal, adquiriendo
naturaleza de derecho humano. Este principio dice relacin con
el derecho que posee todo nio, nia o adolescente, a manifestar
su opinin en los diversos mbitos de su vida, sea familiar, so152
de 7 de diciembre pasado, y se pronunciar respecto de la transaccin sobre alimentos futuros, contenida en el segundo otros
del referido escrito, aprobndola o rechazndola, mediante resolucin fundada.
Pronunciada por la Primera Sala de Verano de la Corte de Apelaciones de Concepcin, integrada por los Ministros Sr. Fredy Vsquez
Zavala, Sra. Mara Leonor Sanhueza Ojeda y la Abogado Integrante
Sra. Gabriela Lanata Fuenzalida. Redaccin a cargo de Ministro Sra.
Mara Leonor Sanhueza Ojeda.
T. Exigencias
a prueba debi fijar como hechos a probar aquellos que correspondan a las dos materias demandadas, y no slo a la primera.
1.- Por sentencia de fecha 3 de abril de 2012, del Tribunal de
Familia de Arica, se hizo lugar a la demanda de cese de alimentos
deducida por don J. L. M. O. en contra de doa K. G. V., decretndose el cese de la pensin de alimentos regulada en una causa del Juzgado de Menores de Arica. En cambio, no se hizo lugar a la rebaja
proporcional solicitada. No se conden en costas a la demandada,
por no haber resultado totalmente vencida.
2.- En contra de esta decisin, la parte demandante dedujo recursos de casacin en la forma y de apelacin (lo que se explica, pues
segn veremos, aunque se decret el cese de la pensin respecto
de la ex cnyuge del demandante, no se accedi a rebajar la misma
proporcionalmente, de manera que el monto de la pensin, esta vez
slo para las dos hijas del actor, se mantuvo en su integridad).
3.- La Corte de Apelaciones de Arica tuvo presente las siguientes
consideraciones:
Que el inciso 1 del artculo 775 del Cdigo de Procedimiento
Civil faculta a los tribunales de alzada para invalidar de oficio la
sentencia, cuando del estudio de los antecedentes aparezca que,
sea durante el proceso o con motivo de la dictacin del fallo, se
haya cometido algn vicio que autorice la casacin formal del
mismo. Ello es afirma el fallo de segundo grado- lo que precisamente ocurri en este caso, advirtindose al respecto al compareciente en la vista e instndolo a pronunciarse sobre el eventual
vicio.
Que, la demanda de autos, se interpuso nicamente en contra de
la alimentaria K. G. V., en circunstancias que la pensin fijada en
la causa Rol nmero 56.167 del Juzgado de Menores de Arica,
156
Pronunciada por la Corte de Apelaciones de Arica (no se indica integracin). Redaccin a cargo de Ministro Sr. Rodrigo Cerda San Martn.
66
Artculo 233 del Cdigo Civil: En caso de desacuerdo entre los obligados a
la contribucin de los gastos de crianza, educacin y establecimiento del hijo,
sta ser determinada de acuerdo a sus facultades econmicas por el juez,
el que podr de tiempo en tiempo modificarla, segn las circunstancias que
sobrevengan.
159
exprese la sentencia, que la posicin social del padre es determinante para fijar la del hijo y por tanto la cuanta de los alimentos.67
Concordamos con esta conclusin. Reiteraremos en las lneas que siguen de
esta nota algunas reflexiones de la doctrina nacional, que consignamos sobre
el particular en nuestro libro Los alimentos en el Derecho Chileno: aunque
es cierto que en algunas oportunidades, puede resultar difcil determinar cul
es la posicin social del alimentario, en ocasiones la posicin social est
determinada generalmente por la profesin del sujeto demandado, sus bienes,
sus condiciones de vida, etc. Al respecto, se ha considerado, por ejemplo, que
la posicin social de la mujer casada es la del marido y la de los hijos, la de sus
padres. (Pea Gonzlez, Carlos; Etcheberry Court, Leonor; y Montero Iglesis,
Marcelo, Nueva regulacin del derecho de alimentos. Primera parte. Aspectos
sustantivos, publicacin del Servicio Nacional de la Mujer y la Universidad
Diego Portales, Santiago de Chile, ao 2003, segunda edicin, pp. 50 y 51). En
una sentencia de la Corte de Apelaciones de Concepcin, de fecha 16 de
enero de 2008, se ratifica este criterio, afirmndose: Que, conforme con lo
dispuesto en el artculo 323 del Cdigo Civil en relacin con los artculos 329
y 330 del mismo texto legal, el derecho de alimentos comprende lo que una
persona necesita para subsistir de un modo correspondiente a su posicin
social, que debe cubrir a lo menos el sustento, la habitacin, vestuario, salud y
movilizacin. Por posicin social se entiende el rango o jerarqua que se
reconoce a un individuo en relacin con los dems miembros de la sociedad.
Se considera que la posicin social de la mujer casada es la del marido y en el
caso sublitis el alimentante es un empresario que posee bienes importantes
como lo ha confesado en juicio. Que, es un hecho no discutido en el proceso
y por ende acreditado, que la alimentaria tiene cubiertas sus necesidades
bsicas de alimentacin, vivienda y salud; no obstante, no se encuentran
satisfechas las necesidades de vestuario, locomocin y recreacin, ya que no
posee un ingreso mensual ni su cnyuge se lo otorga, que le permita solventarlas.
Que, se ha establecido que el alimentante tiene los ingresos necesarios para
ello, y el juez de la causa ha fijado la pensin alimenticia en una suma modesta
que no constituye el gravamen injusto que denuncia, sino por el contrario el
cumplimiento ntegro y cabal de la obligacin alimenticia que tiene con su
cnyuge. An cuando se encuentren separados de bienes () por mandato
del artculo 160 del Cdigo Civil el cnyuge con recursos econmicos debe
suministrar alimentos al otro que, por carecer de bienes suficientes, se halla en
estado de necesidad. Agregan los autores citados: En otras palabras, la
67
160
161
162
1.- Por sentencia del Juzgado de Familia de Calama (no se indica fecha), se conden a don L. A. S. V. al pago de una pensin de
alimentos de $ 200.000.-, en favor de su hijo de filiacin no matrimonial.
2.- Se alz el demandado y por sentencia de fecha 31 de mayo
de 2013, de una Sala de la Corte de Apelaciones de Antofagasta, se
confirm la de primer grado.
3.- En contra de este ltimo fallo, el demandado dedujo recurso
de casacin en el fondo. El recurso se fund en los siguientes argumentos:
Se sostiene en el recurso que la sentencia impugnada ha sido
dictada con infraccin de los artculos 230, 233 y 323 del Cdigo Civil. Seala el recurrente que en la fijacin del monto de
la pensin, los sentenciadores desatendieron las razones de la
lgica y las mximas de la experiencia, toda vez que del informe
socioeconmico acompaado por la demandante, se colige que
todo el grupo familiar en el que vive el nio tiene un gasto mensual de $ 468.000.-, lo que matemticamente hablando dara un
costo de $ 156.216.- por cada uno de sus integrantes. Expone
el recurrente que, de acuerdo con ello, y teniendo adems en
consideracin que la madre del menor tambin trabaja y que
conforme a los artculos 230 y 233 del Cdigo de Bello debe
primero o la primera, transmita su posicin social al segundo; ii) el hijo, al
ser procreado, pasa a formar parte de la familia de su padre, conforme al
derecho a la identidad que al primero le asiste, y por ende, debe gozar de la
posicin social de la familia de su progenitor, a la que se adscribe; y iii)
finalmente, si se objetare el argumento precedente aludiendo a la posicin
social ms modesta que pueda tener la madre que aquella que ostenta el
padre, debiramos resolver esta situacin aplicando el principio del inters
superior del nio, y haciendo prevalecer, por tanto, la posicin social de aqul
a quien se demanda alimentos.
163
contribuir a solventar los costos del nio, la pensin a determinar no debiera exceder de $ 120.000.- mensuales.
Agrega el recurrente que respecto de la posicin social del alimentario, a la que alude el artculo 323 del Cdigo Civil, debe
tenerse en consideracin que su paternidad fue determinada recin en 2012 y que el hermano que vive con el menor slo recibe una pensin de $ 70.000.- por parte de su padre, por lo que
no resulta lgico que los costos del alimentario casi tripliquen a
los de su hermano.
Solicita finalmente el recurrente que se invalide el fallo y se dicte
sentencia de reemplazo que fije una pensin de alimentos de $
100.000.- mensuales, a favor del nio F. I. S. V.
4.- La sentencia de la Corte Suprema consigna seguidamente que
los jueces de la instancia dieron por establecidos los siguientes hechos:
El menor F. I. S. V. es hijo de filiacin no matrimonial del demandado, vive con su madre y con su hermano de simple conjuncin en una pieza y es alumno regular de octavo bsico en un
colegio municipal de Calama.
Los ingresos del grupo familiar del menor estn constituidos por
los $ 290.122.- mensuales que la madre percibe por su trabajo, ms los $ 70.000.- mensuales que recibe como pensin de
alimentos voluntarios proporcionados por el padre de su hijo
menor D. A. T. V.
De esos ingresos, $ 120.000.- mensuales se destinan para el
arriendo de la pieza habitacin donde vive la demandante y sus
dos hijos menores de edad.
164
167
CAPTTULO II
CRITERIOS JURISPRUDENCIALES RECIENTES,
EN MATERIA DE ACCIONES DE FILIACIN68
68
169
170
171
172
A. Pericia
biolgica de
ADN
Cundo
es procedente que el
Tribunal
presuma la
71
Artculo 199 del Cdigo Civil: Las pruebas periciales de carcter biolgico
se practicarn por el Servicio Mdico Legal o por laboratorios idneos para
173
inciso 1, 786, inciso 1 y 795 nmero 4, todos del Cdigo de Procedimiento Civil.
Cuestin medular: efecto que produce en una sentencia, el haber
omitido en un juicio de filiacin, la segunda citacin prevista en el
artculo 199 del Cdigo Civil, para practicar al demandado un examen de ADN.
Conclusin de la Corte: la omisin de la sealada citacin, constituye una diligencia probatoria que puede, eventualmente, provocar la indefensin de la parte demandante, procediendo por tanto
la invalidacin de la sentencia y debiendo retrotraerse los autos al
estado de citar a las partes a la segunda citacin, bajo el apercibimiento prescrito en el artculo 199, inciso 4, del Cdigo Civil.
1.- La sentencia de primera instancia del Juzgado de Familia, desestim la demanda de reclamacin de filiacin, excluyendo la paternidad del demandado.
2.- La Corte de Apelaciones de Temuco, conociendo de un recurso de apelacin deducido por la parte demandante, aplic la
facultad prevista en el artculo 775, inciso 1, del Cdigo de Procedimiento Civil, invitando a las partes a alegar sobre la existencia de
ello, designados por el juez. Las partes siempre, y por una sola vez, tendrn
derecho a solicitar un nuevo informe pericial biolgico. / El juez podr dar
a estas pruebas periciales, por s solas, valor suficiente para establecer la
paternidad o la maternidad, o para excluirla. / En todo caso, el juez recabar
por la va ms expedita posible, antes de dictar sentencia, los resultados
de las pericias practicadas que no hubieren sido informados al tribunal. /
La negativa injustificada de una de las partes a practicarse el examen har
presumir legalmente la paternidad o la maternidad, o la ausencia de ella,
segn corresponda. / Se entender que hay negativa injustificada si, citada la
parte dos veces, no concurre a la realizacin del examen. Para este efecto, las
citaciones debern efectuarse bajo apercibimiento de aplicarse la presuncin
sealada en el inciso anterior.
174
175
6.- Que, as las cosas, concluye la Corte, concurre en los autos una causal de casacin prevista en el artculo 768 nmero 973
en relacin con el artculo 795 nmero 474, ambos del Cdigo de
Procedimiento Civil, por cuanto se ha faltado a un trmite esencial
contemplado en la ley, que acarrea precisamente la imposibilidad
de aplicar una presuncin en beneficio de la demandante, cuestin
que debe ser corregida por esta va.
7.- Que fundado en lo sealado, y segn lo ordena el artculo
786, inciso 1, del Cdigo de Procedimiento Civil75, resulta necesario invalidar de oficio la sentencia y el proceso seguido en primera
instancia, retrotrayndose la causa al estado de citar a las partes, en
segunda citacin, a la pericia biolgica de ADN, bajo el apercibimiento descrito en el artculo 199 inciso 4 (sic)76 del Cdigo Civil,
y realizar las diligencias necesarias para llevar a trmino el proceso
dictndose sentencia definitiva por Juez no inhabilitado.
8.- Por ltimo, puntualiza el fallo de la Corte, desestimando un
argumento esgrimido por la parte demandada, resulta necesario
Artculo 768, nmero 9 del Cdigo de Procedimiento Civil: El recurso de
casacin en la forma ha de fundarse precisamente en alguna de las causas
siguientes: () 9 En haberse faltado a algn trmite o diligencia declarados
esenciales por la ley o a cualquier otro requisito por cuyo defecto las leyes
prevengan expresamente que hay nulidad.
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consignar que la segunda citacin y por ende el referido apercibimiento, s es procedente respecto del segundo examen previsto en
el inciso 1 de la norma, atendiendo a dos razones: primero, por
cuanto el legislador trata la segunda prueba pericial (en el inciso 1)
antes de la forma en como sta debe ejecutarse (inciso 5), con el
consecuente efecto sobre la inasistencia a las mismas (que hecho el
apercibimiento, opere la presuncin contemplada en el inciso 4);
segundo, porque las normas deben ser interpretadas desde la perspectiva que estas produzcan efectos.
Pronunciada por la segunda Sala de la Corte de Apelaciones de
Temuco, integrada por la Ministra Sra. Cecilia Aravena Lpez, el
Ministro (s) Sr. Carlos Gutirrez Zavala y Abogado Integrante Sr. Manuel Contreras Lagos. Redactor: no se indica.
II.- Sentencia de la Corte de apelaciones de Puerto Montt de
fecha 23 de abril de 2008, autos Rol nmero 60-2006.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculos 199 y 199 bis77 del Cdigo Civil, artculo 67 de la Ley
nmero 19.96878 y artculos 768 nmero 9, 775 y 795 nmero 4 del
Cdigo de Procedimiento Civil.
Artculo 199 bis del Cdigo Civil: Entablada la accin de reclamacin de
filiacin, si la persona demandada no comparece a la audiencia preparatoria o si
negare o manifestare dudas sobre su paternidad o maternidad, el juez ordenar,
de inmediato, la prctica de la prueba pericial biolgica, lo que se notificar
personalmente o por cualquier medio que garantice la debida informacin
del demandado. / El reconocimiento judicial de la paternidad o maternidad se
reducir a acta que se subinscribir al margen de la inscripcin de nacimiento
del hijo o hija, para lo cual el tribunal remitir al Registro Civil copia autntica.
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Recurdese que el inciso 4 del artculo 199 del Cdigo Civil fue agregado por
la Ley nmero 20.030, publicada en el Diario Oficial de fecha 5 de julio de
2005. Antes de la reforma, deca el inciso 2 (ahora inciso 4) que La negativa
injustificada de una de las partes a someterse a peritaje biolgico configura
una presuncin grave en su contra, que el juez apreciar en los trminos del
artculo 426 del Cdigo de Procedimiento Civil. Con la actual redaccin
del inciso 4 del artculo 199 (La negativa injustificada de una de las partes a
practicarse el examen har presumir legalmente la paternidad o la maternidad,
o la ausencia de ella, segn corresponda), el juez est obligado a presumir
legalmente la paternidad o maternidad, si el demandado en su calidad de
supuesto progenitor del demandante, se niega injustificadamente a practicarse
el referido examen, presumiendo el inciso 5 la negativa, cuando citado dos
veces, no concurre a la realizacin del examen.
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9.- Concluye el fallo de primer grado subrayando que el derecho a conocer la identidad de los progenitores debe ser reconocido
como un derecho esencial que corresponde a toda persona, cualquiera sea su raza, sexo, edad o forma de nacimiento, es decir, es
un derecho derivado de la naturaleza humana, que el ordenamiento
jurdico est llamado a proteger y facilitar, y no impedir o dificultar.
En caso contrario, se estara infiriendo un dao al nio en su integridad psquica, todo lo cual entraara una vulneracin de los textos
internacionales y constitucionales, siendo el texto ms cercano el
del artculo 7 de la Convencin de los Derechos del Nio.
10.- En contra de la sentencia de primera instancia, el demandado dedujo recurso de apelacin, argumentando al efecto:
Solicita se revoque la sentencia apelada, fundando su peticin
en que las partes, en la audiencia respectiva, celebraron como
convencin probatoria que mantuvieron una relacin sexual,
nica e incompleta. Respecto de la presuncin del artculo 199
del Cdigo Civil, hace presente el apelante que el examen de
ADN no se realiz, toda vez que ninguna de las partes concurri
a practicrselo.
Respecto de la aludida convencin probatoria, agrega que al no
estar controvertida por las partes que la relacin sexual no se
complet, ella no puede servir de base para dar por acreditada
la paternidad del hijo que la demandante le atribuye al demandado.
Que por otra parte, se acredit en autos que ninguna de las partes, ni el hijo de la actora, concurrieron a realizarse la prueba pericial biolgica, es decir, el examen de ADN, razn por la cual,
en este caso, resulta inaplicable el artculo 199 del Cdigo Civil.
Agrega que distinto habra sido si hubiese concurrido al examen
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de los Derechos del Nio; y artculos 384 y 772 del Cdigo de Procedimiento Civil.
Cuestin medular: puede entenderse configurada la presuncin
de paternidad establecida en el artculo 199 del Cdigo Civil, por la
sola circunstancia de haberse negado injustificadamente el demandado a practicarse el examen biolgico de ADN?
Conclusin de la Corte: si la negativa del demandado a concurrir
a tomarse el examen ha sido injustificada, tal comportamiento, de
acuerdo al artculo 199 inciso 2 del Cdigo Civil, constituye una
presuncin grave en su contra que puede constituir plena prueba.
1.- Ante el Juzgado de Familia de La Serena, doa M. V. T. interpuso demanda en contra de don J. A. G., poniendo en ejercicio la
accin de reclamacin de paternidad. Funda su demanda en la circunstancia que fruto de la relacin que mantuvo con el demandado
J. A. G. entre agosto y diciembre de 1998, naci su hija F. A. V.
2.- Contestando la demanda, don J. A. G. expresa que jams ha
mantenido una relacin sentimental con la demandante y que por
lo tanto no es el padre de la menor.
3.- Por sentencia de fecha 16 de julio de 2004, se rechaz la
demanda, indicndose en el fallo: que en orden a acreditar la paternidad no matrimonial del demandado respecto de la menor F. A. V.,
se cuenta como nico antecedente probatorio la circunstancia de
haber sido citado en seis ocasiones el demandado para la prctica
de la prueba de ADN, sin que ste asistiera ni justificara la no concurrencia a dicho examen, lo que configura una presuncin grave
en su contra, pero sta no se encuentra unida a ningn otro antecedente en la causa, por cuanto el demandado neg haber mantenido
relaciones sentimentales con la demandante, y sta no rindi prueba alguna sobre este punto, no logrando la nica prueba existente la
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B. Limitaciones
Cdigo Civil
contenidas
en
el
artculo
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del
la
identidad, ambos
Procedencia
de
rango
improcedencia
para
constitucional.
demandar
de
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Artculo 206 del Cdigo Civil: Si el hijo es pstumo, o si alguno de los padres
fallece dentro de los ciento ochenta das siguientes al parto, la accin podr
dirigirse en contra de los herederos del padre o de la madre fallecidos, dentro
del plazo de tres aos, contados desde su muerte o, si el hijo es incapaz, desde
que ste haya alcanzado la plena capacidad.
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Recurdese que el artculo 208 del Cdigo Civil exige la interposicin conjunta
de las acciones de impugnacin y de reclamacin de filiacin, cuando sta
estuviere determinada: Si estuviese determinada la filiacin de una persona
y quisiere reclamarse otra distinta, debern ejercerse simultneamente las
acciones de impugnacin de la filiacin existente y de reclamacin de la nueva
filiacin. / En este caso, no regirn para la accin de impugnacin los plazos
sealados en el prrafo 3 de este Ttulo. Se comprende la prevencin final,
pues si bien por regla general las acciones de reclamacin de filiacin (y en
general, de estado civil), pueden interponerse en cualquier tiempo (el artculo
320 establece que ni prescripcin ni fallo alguno, entre cualesquiera otras
personas que se haya pronunciado, podr oponerse a quien se presente como
verdadero padre o madre del que pasa por hijo de otros, o como verdadero
hijo del padre o madre que le desconoce. En el mismo sentido, el artculo 195,
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cedi con celeridad, impidiendo con ello la prctica de la pertinente prueba pericial.
3.- El requirente estima que de aplicarse las normas impugnadas
se vulnerara la garanta constitucional de la igualdad ante la ley,
como tambin el derecho a la identidad, configurado a partir de la
Convencin Amrica sobre Derechos Humanos y del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos, y reconocido por el Tribunal
Constitucional en una sentencia previa (autos Rol nmero 1.340),
por cuanto se priva a los hijos de las acciones procesales para determinar su filiacin, ocasionando una diferencia de trato que no
supera un test de proporcionalidad. De manera ms pormenorizada,
los argumentos del requirente son los siguientes:
Sostiene que la aplicacin de los artculos 206 del Cdigo Civil y
5 transitorio de la Ley nmero 19.585, vulnerara, por una parte,
el artculo 5, inciso 2, de la Carta Fundamental, en relacin con
los artculos 3, 5.1 y 11.1 de la Convencin Americana de Derechos Humanos y los artculos 16 y 17.1 del Pacto Internacional
de Derechos Civiles y Polticos. Por otra parte, transgredira asimismo el artculo 19, nmero 2, de la Constitucin Poltica de
la Repblica.
En cuanto a la primera infraccin constitucional, aduce el requirente que ella se producira porque los artculos 206 del Cdigo
Civil y 5 transitorio, incisos 3 y 4, de la Ley nmero 19.585,
vedaran a sus representados, de modo absoluto, la posibilidad
de ejercer su derecho a la identidad, en tanto cuanto los privan
de las acciones procesales idneas para ese efecto.
En lo que respecta al segundo reproche constitucional, precisa
el requerimiento que el anlisis del artculo 206 del Cdigo Civil
conlleva necesariamente a la conclusin de que ste levanta una
discriminacin entre aquellos hijos cuyo presunto padre o ma207
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padre, agrega el Tribunal que no cabe sino concluir que el mismo es resultado de una extrapolacin impropia de dicho plazo
desde la regulacin de la paternidad presuntiva derivada del artculo 76 del Cdigo Civil (base de la presuncin de pater is est,
en relacin con lo dispuesto en el inciso 1 del artculo 180 del
mismo Cdigo), plenamente aplicable para determinar la filiacin matrimonial, a una situacin de posible filiacin no matrimonial, como es la planteada en autos. De all que determinar
la procedencia de la accin de filiacin contra los herederos en
funcin de la muerte del padre dentro de un cierto plazo, por lo
dems exiguo, contado desde el nacimiento del hijo, resulte ser
un condicionamiento sin base lgica, y por lo mismo contrario
al estndar de razonabilidad con el que debe confrontarse cualquier diferencia de trato por parte del legislador.
Seala a continuacin la sentencia que en cambio, el otro requisito impuesto por el artculo 206, cual es que la accin se
deduzca dentro de los tres aos siguientes a la muerte del padre
o a la fecha en que el presunto hijo haya alcanzado la plena
capacidad, es enteramente razonable, por consideraciones elementales de certeza jurdica, atendido lo cual los sentenciadores
no lo estiman susceptible de reproche de inconstitucionalidad.
Que, en atencin a lo razonado, el requerimiento de inaplicabilidad en contra del artculo 206 debe acogerse parcialmente,
slo en lo que atinge a la exigencia de que el presunto padre
haya debido fallecer dentro del plazo de 180 das posteriores al
nacimiento del hijo para que sea procedente la reclamacin de
la filiacin respecto de los herederos de aqul.
Que, en lo que respecta a los incisos 3 y 4 del artculo 5 transitorio de la Ley nmero 19.585, debe considerarse en cambio
justificado, por razones de certeza jurdica, el plazo de un ao
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(contado desde que entr en vigencia dicha Ley) para la procedencia de los reclamos de filiacin en contra de los herederos de
quienes fallecieron antes de que se introdujera en nuestro ordenamiento la posibilidad de demandar vnculos de filiacin con
posterioridad al fallecimiento del presunto progenitor. En efecto,
tal plazo impide que estas relevantes relaciones de parentesco
puedan permanecer indefinidas por largo tiempo y, ms an,
que las pericias biolgicas indispensables para acreditar tales
vnculos pretendan practicarse sobre restos humanos de antigua
data.
El Tribunal resolvi en definitiva, en voto de mayora, acoger el
requerimiento slo en cuanto se declara inaplicable, en la especie, la frase dentro de los ciento ochenta das siguientes al
parto, contenida en el artculo 206 del Cdigo Civil, y rechazar
en todo lo dems el recurso del requirente.
6.- Se previene que los Ministros Sr. Hernn Vodanovic Schnake,
Sra. Marisol Pea Torres, Sr. Jos Antonio Viera-Gallo Quesney y Sr.
Gonzalo Garca Pino, concurren a la decisin de acoger el requerimiento pero no en forma parcial, sino respecto de todo el contenido
normativo del artculo 206 del Cdigo Civil y adems del inciso 3
del artculo 5 transitorio de la Ley nmero 19.585, que estiman
contrarios a la Constitucin, por las siguientes razones:
Que, como ha sostenido previamente esta Magistratura, en materia de acciones de filiacin, la regla general es conferirlas al
hijo contra el padre, madre o ambos, o a stos contra el hijo y
sus padres aparentes. Ahora bien, el artculo 206 constituye una
excepcin, pues permite dirigir la accin del hijo ya no contra
el padre o madre, sino contra sus herederos, cuando uno u otro
han fallecido y siempre que se cumpla alguno de los siguientes
presupuestos: i) que el hijo sea pstumo; o, ii) que alguno de los
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en vigencia la Ley nmero 19.585. La ley permiti entonces demandar, aunque dentro del expresado plazo. El artculo 5 transitorio consagr un derecho para reclamar la filiacin de padres
muertos (derecho que antes no exista), aunque deba hacerse
dentro de cierto plazo.
Es cierto que el artculo 195 del Cdigo Civil establece que el
derecho a reclamar la filiacin es imprescriptible, pero este es
un derecho legal, y por ende, otra norma legal, en este caso el
artculo 5 transitorio, puede establecer reglas de caducidad.
Esta regla de entablar la demanda dentro de un plazo, es parte
de otra serie de medidas destinadas a consolidar situaciones que
la Ley nmero 19.585 estableci sobre todo en materia patrimonial.
El artculo 5 transitorio es claramente favorable. Salvo las situaciones de los artculos 206 y 207 del Cdigo Civil, todos los dems hijos no pueden demandar el reconocimiento de paternidad
o maternidad a los padres muertos.
El citado artculo 5 transitorio no impidi demandar. No prohibi hacerlo, sino que slo estableci un plazo para ello. Y en
nada se contrapone a lo anterior el que los requirentes hayan
sido menores de edad cuando entr en vigencia la Ley nmero
19.585, pues por ellos pudieron actuar sus representantes legales.
8.- Los Ministros seores Marcelo Venegas Palacios e Ivn Arstica Maldonado, dejaron constancia que continan juzgando que
el artculo 206 del Cdigo Civil no es contrario a la Constitucin,
como tampoco lo es el artculo 5 transitorio de la Ley nmero
19.585, por los mismos motivos que han expuesto en disidencias
anteriores (sentencias roles nmeros 1.537, 1.563 y 1.656). Subra-
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herederos, por disposicin del artculo 317 del Cdigo Civil: Court Murasso,
Eduardo, Nueva Ley de Filiacin, Santiago de Chile, Editorial Jurdica
Conosur Ltda., 2 edicin actualizada, ao 2000, pp. 102 a 104. Carlos Lpez
Daz, adhiere implcitamente a la misma tesis, pues al referirse a la accin de
reclamacin de filiacin no matrimonial y a los sujetos contra los que debe
dirigirse, seala que excepcionalmente podr interponerse en contra de los
herederos del padre o madre en los dos casos previstos en el artculo 206:
Lpez Daz, Carlos, Manual de Derecho de Familia y Tribunales de Familia,
Santiago de Chile, Librotecnia, Tomo II, ao 2005, p. 468. Ren Abeliuk
Manasevich, inicialmente, tambin se enmarc dentro de la tesis restrictiva,
afirmando que Los herederos de las partes slo intervienen por excepcin en
los casos de los artculos 206 (legitimacin pasiva en caso de fallecimiento del
o los progenitores) y 207 (legitimacin activa en caso de fallecimiento del
hijo). Ms adelante, al referirse al artculo 206, afirmaba lo siguiente: Como
la norma es de excepcin, prima sobre el art. 317, y, en consecuencia, el hijo
slo puede accionar de reclamacin tanto matrimonial como no matrimonial,
ya que el precepto no distingue, cumpliendo los requisitos del art. 206, esto es,
no podr hacerlo si el fallecimiento se produjo despus de los ciento ochenta
das siguientes al parto.: Abeliuk Manasevich, Ren, La Filiacin y sus
Efectos, Tomo I, La Filiacin, Santiago de Chile, Editorial Jurdica de Chile,
ao 2000, pp. 162 y 163. Con todo, mut despus su criterio y se adscribi a
la tesis amplia, segn consta de una sentencia de fecha 2 de noviembre de
2004 de la Corte Suprema, en la que formando parte de la misma en su calidad
de abogado integrante, suscribi el voto de minora que acoge dicha tesis
(causa Rol 2.820-3). Ren Ramos Pazos, por su parte, sin pronunciarse
explcitamente sobre la materia (aunque en forma implcita, parece suscribir la
admisibilidad de la demanda contra los herederos, pues al resear los
argumentos de la tesis amplia, habla de la tesis que venimos defendiendo),
recoge los argumentos planteados por quienes estiman posible demandar a los
herederos del presunto padre o madre: i) Es cierto que el artculo 205 dice que
la accin le corresponder slo al hijo contra su padre o madre, pero bajo el
supuesto que el progenitor respectivo est vivo; si falleci, opera el artculo
1097, segn el cual los herederos representan al causante; ii) Cuando la ley
quiere impedir que se demande a los herederos, lo dice: as, el antiguo artculo
272 (anterior a la reforma de la Ley nmero 19.585), al referirse a la demanda
para reconocer la calidad de hijo natural del actor, exiga notificar la demanda
en vida del supuesto padre o madre; as tambin, el artculo 47 de la Ley de
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nadie discute), sino contra los cuales puede dirigir la accin, se estara
sealando que la muerte del supuesto padre o madre no extingue la accin del
hijo y que en tal evento la accin de reclamacin puede ejercerse, en cualquier
tiempo, contra los herederos del padre o madre fallecidos. El artculo 206 se
entiende entonces como una excepcin a la regla general de la transmisibilidad
e imprescriptibilidad de la accin de reclamacin, pues slo norma la situacin
particular del hijo pstumo o del hijo cuyo padre o madre fallece dentro de los
180 das siguientes al parto, sin que de esa norma pueda hacerse una
interpretacin extensiva, o bien restringir el sentido de las normas contenidas
en los artculos 205 y 317. A este argumento principal, dice Corral, se agregan
los siguientes: 1) Esta interpretacin protege de mejor manera el derecho a
la identidad del hijo. 2) Otorgar esta facultad al hijo es ms concordante con
los principios de la reforma de la filiacin que establecen la posibilidad de
investigar la paternidad y que declaran que la accin de reclamacin es
imprescriptible. 3) El art. 5 transitorio de la ley N 19.585 dispone que No
obstante, no podr reclamarse la paternidad o maternidad respecto de las
personas fallecidas con anterioridad a la entrada en vigencia de la presente
ley, lo que, a contrario sensu, indicara que si el demandado ha fallecido con
posterioridad a esa fecha (27 de octubre de 1999) los herederos pueden ser
emplazados. 4) Debe aplicarse la norma general de la transmisibilidad de los
derechos y el art. 1097 CC que dispone que los herederos representan al
causante. 5) Si la ley quera que la accin de reclamacin se extinguiera con
la muerte del padre o madre deba haberlo sealado expresamente como
suceda con el antiguo art. 272 del Cdigo Civil, lo que no hizo. En la segunda
parte de su trabajo, Corral despliega sus argumentos tendientes a refutar la
conclusin que admite la accin en contra de los herederos como regla
general, sealando en primer lugar que el intrprete ha de saber distinguir
entre una opinin que pretende describir lo que el derecho vigente dispone
(interpretacin de lege data) y una opinin que pretende valorar como
inconveniente o injusto lo que el derecho vigente dispone, por lo que debiera
ser derogado o modificado (interpretacin de lege ferenda). Afirma que se
desprende de la historia de la ley y del contexto de los artculos mencionados,
que la posibilidad de accionar en contra de los herederos del supuesto
progenitor es algo excepcional, que slo puede ocurrir en los casos previstos
en los artculos 206 y 207. Para Corral, el ncleo central del problema consiste
en la transmisibilidad o intransmisibilidad de las acciones de filiacin,
concluyendo que puede desprenderse del tenor de los artculos 1097 y 951 del
226
Cdigo Civil que los derechos y obligaciones transmisibles, por regla general,
son aquellos de carcter patrimonial, y no extrapatrimonial, como ocurre con
los que pertenecen al Derecho de Familia. Que la intransmisibilidad es la regla
general en materia de acciones de filiacin seala- lo demuestran los
preceptos que expresamente confieren acciones a los herederos, como por
ejemplo el art. 207, el art. 213, el art. 216 y el art. 218 del Cdigo Civil. Todos
estos preceptos se refieren a la transmisibilidad activa. A su vez, slo el art. 206
CC se refiere a la transmisibilidad pasiva, es decir, que se pueda demandar a
los herederos en representacin de su causante. Estas normas, razona, que
junto con establecer excepcionalmente la transmisibilidad de las acciones de
filiacin establecen requisitos especiales para su procedencia, no tendran
sentido si se acepta como regla general que los herederos del hijo son
legitimados activos para todas las acciones de filiacin, y que los herederos de
los padres son legitimados pasivos de las acciones que el hijo pretenda deducir,
de acuerdo al tenor del art. 317 inc. 2 CC. En cuanto al rol que cabe atribuirle
al artculo 317, inciso 2, afirma que no puede tener el papel que la doctrina
que l impugna le ha asignado, a saber, la de regla general y sustantiva sobre
la legitimacin activa y pasiva de las acciones de filiacin. Y esto, dice, por las
siguientes razones: 1 Por la historia del establecimiento de la ley: la historia
del precepto es categrica e indudable sobre la intencin del poder legislativo
de no darle a la norma el carcter de regla de legitimacin y menos de
ampliacin de las titularidades contenidas en el ttulo VIII del libro I. Atribuirle
otra interpretacin es claramente en este caso modificar la intencin de la
norma claramente establecida por el Poder Legislativo en uso de sus atribuciones
exclusivas. 2 Por su mismo texto: el tenor del art. 317 inc. 2 CC desmiente la
idea de que se trate de un precepto cuyo fin sea regular la legitimacin de las
acciones de filiacin. Ella se refiere slo a quienes son legtimos contradictores
en los juicios de filiacin para los efectos de que ellos produzcan cosa juzgada
general y siempre bajo el entendido de que se respetan las reglas de legitimacin,
plazos y dems condiciones establecidas en el ttulo VIII del libro I, es decir, la
normativa de legitimacin de las acciones de filiacin (...)No se trata de una
norma autnoma y desgajada de las dems que est destinada a regular la
legitimacin de las acciones de filiacin, sino nicamente una norma
complementaria y meramente aclaratoria de los efectos erga omnes que tienen
los fallos pronunciados conforme a las reglas de legitimacin previstas en el
referido ttulo VIII. 3 Por el sentido total del artculo: La interpretacin que
cuestionamos separa injustificadamente el inciso 2 del art. 317 CC de su
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primer inciso. Es efectivo que el inciso 2 se refiere a los herederos, pero antes
el inciso primero comienza diciendo que Legtimo contradictor en la cuestin
de paternidad es el padre contra el hijo, o el hijo contra el padre, y en la
cuestin de maternidad el hijo contra la madre, o la madre contra el hijo.
Ahora bien, si el inciso segundo fuera una norma sustantiva y general de
legitimacin activa pasiva, tambin debera serlo el inciso primero. Sera
absurdo que la norma tuviera finalidades distintas para cada uno de sus dos
incisos. Pero si consideramos que el inciso primero es la regla general de
legitimacin de las acciones de filiacin, entonces pierden sentido todos los
preceptos que se encuentran en el ttulo VIII y que regulan pormenorizadamente
la legitimacin de las acciones de impugnacin y de reclamacin. No puede
sostenerse que se trata de normas especiales, porque regulan en forma general
y completa esta titularidad. La nica conclusin posible es que el inciso primero,
como tambin el inciso 2, no es una norma de legitimacin propia e
independiente, sino nicamente una aclaracin que viene a clausurar el sistema
pero teniendo como antecedente sustantivo la regulacin de la legitimacin
efectuada por las normas del ttulo VIII del libro I. A ello se suma lo dispuesto
en el art. 320 CC, el ltimo de esta serie de normas que, nuevamente, se refiere
a legitimacin en acciones de filiacin (esta vez para permitir la impugnacin
de una filiacin establecida por sentencia pasada en autoridad de cosa
juzgada), y que aclara expresamente que Las acciones que correspondan se
ejercern en conformidad con las reglas establecidas en el Ttulo VIII (art.
320 inc. 2). Reafirma, pues, que todas estas normas sobre el estado civil de
padre, madre e hijo, estn referidas a los requisitos y condiciones de procedencia
y legitimacin previstas en el Ttulo VIII del libro I que trata de las acciones de
filiacin. 4 Por su ubicacin sistemtica y el contexto normativo: El argumento
ad rubricam nos sirve tambin para negar que el art. 317 CC tenga el rol de
norma sustantiva y principal de legitimacin de las acciones de filiacin. Si as
fuera debi haberse encontrado entre los preceptos que integran el ttulo VIII
del libro I, dedicado justamente a las acciones de filiacin, y no en el ttulo XVII
que trata claramente de una materia adjetiva y no sustantiva: De las pruebas
del estado civil. Es claro que estas normas se encuentran subordinadas a la
regulacin sustantiva tanto de la filiacin y de sus acciones, como a la del
matrimonio. Respecto de la subordinacin a las normas sustantivas de la
filiacin, puede verse que dos preceptos: el art. 309 y el art. 315 CC se remiten
en forma expresa a las acciones de filiacin reguladas en el ttulo VIII del libro
I. Pareciera, en consecuencia, que el art. 317 inc. 2 CC se refiere solamente a
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los casos en los que los herederos pueden ser legitimados pasivos de la accin
de reclamacin del hijo contra el padre o madre fallecido, en las condiciones
previstas en el art. 206 CC, y a los casos en los que los herederos del hijo
fallecido son legitimados activos para demandar de reclamacin o de
impugnacin (arts. 207 y 216 inc. 3 CC). En cuanto al rol del artculo 206,
agrega Corral que si el art. 317 CC fuera una norma sustantiva de legitimacin
pierden significacin todas las normas propias de titularidad contenidas en el
ttulo VIII del libro I, pero sobre todo no se entiende cul es la razn de la
especialidad del art. 206 CC. Resultara el absurdo de que precisamente en los
casos en los que sera ms justificado conceder la accin de reclamacin en
contra de los herederos del padre difunto, esto es, cuando el hijo no ha tenido
oportunidad de interponer una accin en este sentido: si es pstumo o si el
padre fallece en breve plazo despus de su nacimiento, la ley lo restringira
imponiendo un plazo breve de caducidad. La especialidad adolecera de una
razn que la hiciera coherente y legtima como tal. El argumento esgrimido de
que en los casos del art. 206 CC habra ms dudas de la paternidad no es
sustentable, puesto que estamos en el caso de aplicacin de pruebas periciales
biolgicas que disiparan cualquier incertidumbre. No podra la ley ni el
legislador haber discriminado en funcin de supuestos ms o menos dudosos
de paternidad, cosa que no hace en ninguna otra parte de la regulacin de la
filiacin. Se refiere finalmente Corral al derecho a la identidad y a la libre
investigacin de la paternidad, sosteniendo que le parece que estos argumentos
pueden ser ms apropiados para la discusin de una interpretacin de lege
ferenda o de reforma legislativa, pero que no son convincentes, dado el claro
tenor e intencin de las normas positivas vigentes, como argumentos de lege
lata. Por lo dems, expresa, tanto la investigacin de la paternidad o maternidad
y el principio de la verdad biolgica como el aseguramiento del derecho a la
identidad, fueron acogidos por la reforma de la ley N 19.585 como principios
inspiradores y matrices, pero no sin matizaciones, lmites y restricciones.
Respecto del derecho a la identidad, afirma que no absoluto, tiene limitaciones
sobre todo cuando se presenta en conflicto con otros derechos, como el
derecho de la familia del fallecido a su vida privada y el dolor que significa
reabrir tumbas y exhumar cadveres despus de aos de ocurrida la muerte,
as como la estabilidad de la sucesin hereditaria. Parece sensato igualmente
limitar el derecho a la identidad en caso de fallecimiento previo del supuesto
padre ya que es imposible que en estos casos pueda lograrse una efectiva
relacin entre el hijo y su padre, y ms bien puede suponerse que el propsito
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siempre que sea este inters el que se persiga por el demandante. De esta
manera, de modo semejante a lo que previ la ley, en el art. 5 transitorio para
los fallecidos antes de la entrada en vigor de la ley 19.585, se podra sealar
que en tales casos la accin slo tendr los efectos de determinar la filiacin
pero no consecuencias o beneficios patrimoniales. Tambin si se hace esta
reforma debera aceptarse como justificada la negativa de los herederos que
sean familiares del causante a que se realice prueba biolgica por medio de la
exhumacin de sus restos. Finalmente, es necesario refutar la tesis que han
propiciado algunos autores y que ha sido aceptada por fallos recientes de la
Corte Suprema, sobre la legitimacin pasiva de los herederos para enfrentar
una accin de reclamacin de la paternidad o maternidad de un supuesto
progenitor difunto. Ante el conflicto de intereses, hemos de constatar que la
actual legislacin, sin perjuicio del juicio crtico que su opcin pueda merecer
a algunos, se inclina decidida y claramente por proteger el inters de la
estabilidad y la vida privada de la familia del difunto. Slo en los casos
expresamente autorizados por el art. 206 CC, (hijo pstumo o fallecimiento del
padre en el plazo de 180 das siguientes al parto), la ley valora ms el derecho
a la verdad biolgica y autoriza la demanda contra los herederos del supuesto
progenitor fallecido.Qu se establece al respecto en el Derecho Comparado?
El Cdigo Civil espaol regula lo concerniente a las acciones de reclamacin
en los artculos 131 a 134, dentro del captulo III, correspondiente a las
acciones de filiacin, del Ttulo V (De la paternidad y filiacin) del Libro I
(De las personas). El artculo 131 otorga accin de reclamacin a cualquier
persona con inters legtimo, cuando la filiacin se funda en posesin de
estado (la posesin notoria de estado civil de que habla el Cdigo Civil
chileno). Ahora bien, a pesar de los trminos tan generales del precepto en lo
que se refiere a los sujetos con legitimacin activa, se ha entendido que la
accin slo la pueden deducir los parientes del hijo o del progenitor, y siempre
y cuando el hijo o padre o madre en cuyo inters se acciona, haya fallecido.
En caso contrario, slo el hijo o el progenitor dispondrn de accin. Los dos
artculos siguientes, regulan la interposicin de la accin, a falta de posesin
de estado. El artculo 132 se refiere a reclamar una filiacin matrimonial.
Dispone este artculo que A falta de la correspondiente posesin de estado, la
accin de reclamacin de la filiacin matrimonial, que es imprescriptible,
corresponde al padre, a la madre o al hijo. / Si el hijo falleciere antes de
transcurrir cuatro aos desde que alcanzase plena capacidad, o durante el ao
siguiente al descubrimiento de las pruebas en que se haya de fundar la
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Lo anterior tiene relevancia, porque para construir la inconstitucionalidad, el requerimiento no se hace cargo de la tesis amplia.
El requirente ha obviado la tesis que hace viable las posibles
demandas y que elimina los reproches de infraccin a la Constitucin. Tomada esa opcin, el requirente afirma que hay una vulneracin a la Constitucin. Lo anterior, a juicio de los Ministros
disidentes, implica tomar partido en un conflicto de nivel legal,
invadiendo las atribuciones de los tribunales ordinarios y provocando con ello que el Tribunal Constitucional se convierta en
rbitro de disputas legales. El hecho de que exista jurisprudencia
de diversos tribunales, incluida la Corte Suprema, resolviendo el
conflicto, sin necesidad de recurrir a normas constitucionales,
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demuestra la existencia de dicho conflicto legal.93 No le corresponde al Tribunal Constitucional sustituir al juez ordinario definiendo una interpretacin legal correcta. Una intervencin en
ese sentido lo convierte en un juez de casacin, o sea, de guardin de la correcta aplicacin de la ley, y desnaturaliza el reparto
de competencias que nuestro ordenamiento jurdico establece
entre los distintos rganos jurisdiccionales.
Que, la presuncin de constitucionalidad de la ley y el principio de interpretacin conforme, tienen plena aplicacin en
este caso, pues existe una interpretacin (la tesis amplia) que
armoniza el texto impugnado con la Carta Fundamental. Ello
impide al Tribunal Constitucional declarar la inaplicabilidad por
inconstitucionalidad del precepto legal impugnado, pues existe
una duda ms que razonable para proceder en este sentido. No
es definitivo que exista una incompatibilidad indudable entre el
artculo impugnado y la Carta Fundamental.
Discurren finalmente los dos Ministros disidentes acerca de la
utilidad que tendra declarar la inaplicabilidad en este caso. Sostienen que tomar opcin por la tesis restrictiva, como la nica
posible para construir la declaracin de inconstitucionalidad,
implica restringir la utilidad de la inaplicabilidad. En efecto, si se
ordena por el Tribunal Constitucional dejar de considerar el precepto objetado para la resolucin del asunto, quedan subsistentes todas las normas que permiten construir la tesis amplia de
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la accin de reclamacin. Por lo mismo, lo que se estara haciendo al acoger la inaplicabilidad, es eliminar slo un obstculo
interpretativo para que los jueces lleguen a la misma conclusin
si hicieran un esfuerzo de armonizacin razonable.
En cuanto al artculo 5, inciso 2, de la Constitucin, el voto
disidente subraya que el deber de respeto y promocin a los
derechos esenciales que emanan de la naturaleza humana y que
estn establecidos en tratados internacionales ratificados por
nuestro pas es un mandato para todos los rganos del Estado,
pero actuando cada uno conforme a sus propias atribuciones, de
manera que ninguno de ellos puede invadir la competencia de
los otros. As las cosas, este mandato no es slo para el Tribunal
Constitucional. ste no tiene el monopolio de respetar y promover tales derechos esenciales. En tal sentido, los jueces ordinarios encargados de resolver la gestin pendiente tienen ms que
una orientacin para buscar una salida al conflicto interpretativo
que nos ocupa y que concilie los textos legales con los preceptos
internacionales. En el presente caso, a juicio de los disidentes,
puede perfectamente armonizarse ley y tratados, sin poner entre
medio la Constitucin.
Finalmente, manifiestan los ministros disidentes que no estn en
contra de la imprescriptibilidad de la accin de reclamacin,
pero precisan que esa es una decisin que le corresponde tomar
al legislador. El constituyente considera que es materia de ley
definir cundo y por qu plazo debe establecerse una regla de
prescripcin o de caducidad. As lo ha hecho nuestro sistema
civil, penal, etc. No hay normas constitucionales que prohban
establecer reglas de prescripcin. A esta Magistratura, sealan
los Ministros disidentes, no le corresponde sustituir al legislador
en esa materia, quien tiene ms flexibilidad para moverse en los
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distintos mbitos del sistema jurdico, ponderando cuando la seguridad jurdica, la consolidacin de determinadas situaciones,
justifica establecer una regla de prescripcin o de caducidad.
Pronunciada por el Pleno del Tribunal Constitucional, integrado
por su Presidente, Ministro seor Ral Bertelsen Repetto, los Ministros seores Marcelo Venegas Palacios, Hernn Vodanovic Schnake,
la Ministra seora Marisol Pea Torres y los Ministros seores Enrique Navarro Beltrn, Francisco Fernndez Fredes, Carlos Carmona
Santander, Jos Antonio Viera-gallo Quesney, Ivn Arstica Maldonado y Gonzalo Garca Pino. Redact la sentencia el Ministro Sr.
Francisco Fernndez Fredes, las prevenciones la Ministra Sra. Marisol Pea Torres y el Ministro Sr. Carlos Carmona Santander, respectivamente, y las disidencias el Ministro Sr. Marcelo Venegas Palacios y
el Ministro Sr. Carlos Carmona Santander, respectivamente.
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mente los artculos 206 y 317 del Cdigo Civil, lo que influy
sustancialmente en lo dispositivo del fallo, desde que condujo
a los sentenciadores recurridos a confirmar la sentencia en alzada.
Que, por lo antes reflexionado, el recurso en estudio debe ser
acogido.
Pronunciada por los Ministros seores Marco Libedinsky T.,
Urbano Marn V., la Fiscal Judicial Seora Mnica Maldonado C.
y los Abogados Integrantes seores scar Herrera V. y Ricardo
Peralta V.
VIII.- Sentencia de la Corte Suprema de fecha 28 de enero de
2011, autos Rol nmero 7.065-2010.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculos 205, 206, 20895, 316, 317 y 31896 del Cdigo Civil y
artculo 5 transitorio de la Ley nmero 19.585.
Cuestin medular: procede demandar de accin de reclamacin de filiacin a los herederos del presunto padre, si ste falleci con posterioridad a la entrada en vigencia de la Ley nmero
19.585?
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Refiere la recurrente en su libelo las posiciones doctrinarias existentes sobre la materia97 y cita tambin la historia fidedigna del
establecimiento de la ley, en apoyo de su tesis interpretativa sobre las normas del sistema filiativo actual.
4.- Los jueces de segunda instancia resolvieron acoger la accin
intentada, considerando para tales efectos que el derecho a reclamar la filiacin es imprescriptible e irrenunciable, y que es procedente deducir la accin de que se trata en contra de los herederos
del supuesto padre, cuando ste ha fallecido, de acuerdo con lo
dispuesto en el artculo 317 del Cdigo Civil. En relacin con la situacin planteada en el artculo 206 del mismo Cdigo, concluyen
que dicha norma contempla una hiptesis de excepcin que no se
configura en la especie, por lo que no puede aplicarse el plazo all
previsto para accionar, siendo por ello improcedente la alegacin de
caducidad invocada por los demandados.
5.- La Corte Suprema rechaz el recurso de casacin en el fondo,
sealando en su sentencia:
Nuestro Cdigo Civil inicialmente distingua entre hijos legtimos e ilegtimos, constituido este ltimo grupo por los naturales
y simplemente ilegtimos. La Ley nmero 10.271, si bien mantuvo las categoras sealadas, ampli el reconocimiento voluntario
del hijo natural e introdujo el reconocimiento forzoso, limitndolo a determinados casos taxativos y de difcil acreditacin. La
Ley nmero 19.585, vigente a partir del 27 de octubre de 1999,
introdujo importantes cambios en materia de filiacin, terminando con las anteriores categoras de hijos y las diferencias existentes entre ellos. El nuevo sistema se funda en principios como
Se trata, esencialmente, de los mismos argumentos en los que se funda la
sentencia de primera instancia a que aludimos en el nmero VII que precede.
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En verdad, este plazo de 180 das, tal como concluye el Tribunal Constitucional,
es del todo arbitrario, y en esta parte, resulta confuso el argumento de la
sentencia de la Corte Suprema. En efecto, por qu no podra haber sido la
persona fallecida padre del menor, si hubiese muerto en el da 181 o 220 o
250, contado desde el parto? En realidad, la norma del artculo 206 tiene en
nuestra opinin una redaccin defectuosa y slo tendra sentido, si dijera que
no podr intentarse la accin si el supuesto padre hubiere fallecido antes de los
300 das, contados hacia atrs, desde la medianoche del da en que principia
el nacimiento. De esta manera, el artculo 206 habra guardado coherencia
con el artculo 76, que establece la poca mxima en que pudo producirse la
concepcin. A su vez, el precepto no debiera aludir a la muerte de la madre,
rigiendo en ese caso la regla general que posibilita accionar en contra de los
herederos. Finalmente, el artculo 206 tampoco debiera contemplar plazo
alguno de caducidad o prescripcin de la accin en contra de los herederos,
para que guarde armona con los artculos 195 y 208. La redaccin, entonces,
debi ser a nuestro juicio la siguiente: Si el hijo es pstumo, y siempre que
el supuesto padre no hubiere fallecido antes de los trescientos das, contados
hacia atrs, desde la medianoche del da en que principia el nacimiento, la
accin podr dirigirse en contra de los herederos del padre fallecido.
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establece que los herederos representan a la persona del causante, y con la nocin general de que los derechos y obligaciones
son transmisibles.
Que este planteamiento se ve adems corroborado con la circunstancia que cuando la ley ha querido impedir que se accione
en contra de los herederos, lo ha sealado expresamente, como
ocurra con el antiguo artculo 272 del Cdigo Civil, anterior
a la Ley nmero 19.585, que exiga, para establecer la calidad
de hijo natural, que la demanda se haya notificado en vida del
supuesto padre o madre. Situacin similar se produce en el artculo 47 de la Ley de Matrimonio Civil, al establecer que la
accin de nulidad de matrimonio slo podr intentarse mientras
vivan ambos cnyuges, salvo algunas excepciones que la misma ley menciona.
Que en este mismo sentido, reafirma la conclusin a la que se
ha arribado en orden a la procedencia de dirigir la accin de
reclamacin de filiacin en contra de los herederos del supuesto
padre o madre fallecidos, lo dispuesto en el inciso 3 del artculo
5 transitorio de la Ley nmero 19.585, al prescribir que no podr reclamarse la paternidad o maternidad respecto de personas
fallecidas con anterioridad a la entrada en vigencia de la presente ley, puesto que una interpretacin a contrario sensu, permite
concluir que si a la fecha en que entr en vigencia la referida
ley, esto es, el 27 de octubre de 1999, el padre o madre estaban
vivos, a su muerte los herederos pueden ser demandados.
Que, en consecuencia, los sentenciadores no han incurrido en
los errores de derecho denunciados; por el contrario, su decisin
se sustenta en la correcta interpretacin y aplicacin de las nor-
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Cuestin medular: si el presunto padre del demandante se encuentra fallecido, puede acogerse la accin de reclamacin de paternidad deducida en contra de los herederos, si stos se allanan a
la misma?
Conclusin de la Corte: es procedente acoger la accin y declarar
por tanto la filiacin, si se encuentra acreditado en autos la posesin
notoria del estado civil de hijo, que ostenta la parte demandante.
1.- Doa E. A. M., interpuso ante el Tribunal de Familia de Valdivia, demanda de reclamacin de filiacin en contra de los cuatro
hijos y la cnyuge sobreviviente de don M. A. D., presunto padre de
la actora. Funda su demanda en que conoci a su padre biolgico
en el ao 1984, cuando la actora tena 35 aos de edad. Desde ese
ao, comenz a visitar a su padre y a sus hermanos peridicamente, siendo recibida como una hermana ms y presentada a la cnyuge de su padre y a toda la familia como la hija de don M. A. D.
Agrega adems que todos los veranos visitaba a su padre y dems
integrantes de la familia. sta la recibi como una integrante ms, y
tanto es as, que en el ao 1990 se comenz la construccin de una
casa habitacin para la demandante, en el fundo en el que vive casi
toda la familia, y que hasta el presente sirve de lugar de descanso
a los miembros de la familia de la demandante. De esta manera, la
posesin notoria de su calidad de hija super con creces los cinco
aos continuos establecidos en nuestra legislacin, situacin de hecho avalada por los demandados, que estn de acuerdo en que se
interponga la demanda, pues nunca han desconocido que la actora
es hija de don M. A. D., quien falleci el 5 de agosto de 2005, sin
reconocerla legalmente.
2.- En cuanto al derecho, la parte demandante funda su accin en
las siguientes normas:
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255
Claudia Schmidt y Paulina Veloso (La filiacin en el nuevo derecho de familia, LexisNexis, primera edicin, ao 2001) sealan
que en todo caso, la accin de reclamacin se extingue con la
muerte, salvo casos limitados (pgina 133) y que los herederos
del padre fallecido son titulares pasivos slo en los supuestos
establecidos en la ley () a) que el hijo sea pstumo; b) que
alguno de los padres fallezca dentro de los ciento ochenta das
siguientes al parto (pgina 188). En el mismo sentido, Ren Ramos Pazos (Derecho de Familia, Tomo II, Editorial Jurdica de
Chile, cuarta edicin actualizada), seala que El artculo 206
representa una innovacin con respecto al anterior artculo 272,
que exiga que aqul que pretendiera obtener judicialmente la
calidad de hijo natural, deba intentar su demanda en vida del
supuesto padre o madre (pgina 405).
Respecto del artculo 1097, citado por la parte demandante,
debe tenerse presente que la titularidad pasiva de una reclamacin de filiacin no puede considerarse como un bien, derecho
u obligacin transmisible, en los trminos de la citada disposicin o del artculo 951 del Cdigo Civil.
Las materias relativas al estado civil son indisponibles para las
partes, por lo que a pesar de que los demandados se allanaron
a la demanda, sta debe ser rechazada, resultando inoficioso
pronunciarse sobre la prueba rendida para acreditar la posesin
notoria del estado civil, atendidas las razones ya expresadas.
5.- La parte demandante dedujo recurso de apelacin, que fue
acogido por la Corte de Apelaciones de Valdivia. El Tribunal colegiado expres en su fallo revocatorio:
Que del mrito de los antecedentes, documentos y testimonios
aparejados al proceso, se desprende que la actora detent ms
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D. Imprescriptibilidad
prevalece
por
de
sobre
la
los
accin
plazos
de
reclamacin
de
caducidad
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Artculo 225 del Cdigo Civil, antes de su modificacin por la Ley nmero
20.680 (Diario Oficial de fecha 21 de junio de 2013): Si los padres viven
separados, a la madre toca el cuidado personal de los hijos. / No obstante,
mediante escritura pblica, o acta extendida ante cualquier oficial del Registro
Civil, subinscrita al margen de la inscripcin de nacimiento del hijo dentro
de los treinta das siguientes a su otorgamiento, ambos padres, actuando
de comn acuerdo, podrn determinar que el cuidado personal de uno o
ms hijos corresponda al padre. Este acuerdo podr revocarse, cumpliendo
las mismas solemnidades. / En todo caso, cuando el inters del hijo lo haga
indispensable, sea por maltrato, descuido u otra causa calificada, el juez podr
entregar su cuidado personal al otro de los padres. Pero no podr confiar el
cuidado personal al padre o madre que no hubiese contribuido a la mantencin
del hijo mientras estuvo bajo el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo. /
Mientras una subinscripcin relativa al cuidado personal no sea cancelada por
otra posterior, todo nuevo acuerdo o resolucin ser inoponible a terceros.
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Que tal conclusin sobre la naturaleza de la accin de reclamacin dice relacin con los principios inherentes a la materia,
como son los de la bsqueda de la verdad biolgica y el derecho
a la igualdad y a la identidad de la persona. As lo entienden
tambin las profesoras Claudia Schmidt y Paulina Veloso en su
obra La Filiacin en el Nuevo Derecho de Familia (Editorial Conosur LexisNexis, 2001, pg. 207), al sealar que La accin de
reclamacin es protagnica, est en relieve, sobre la de impugnacin que es slo una necesaria consecuencia, es accesoria.
Que por lo razonado, no resulta procedente la aplicacin que
el recurrente pretende respecto del artculo 5 transitorio de la
Ley nmero 19.585, puesto que la accin de reclamacin, que
conforme a dicha ley, tiene la actora, corresponde a una distinta
a la que estatua la anterior legislacin sobre la materia, la que
se ha visto en el imperativo de ejercer en forma simultnea: la de
impugnacin de la filiacin que cuestiona con la de reclamacin
de la nueva que pretende se le reconozca, conforme con lo prescrito en el artculo 208 del Cdigo Civil, no resultando acorde
con la naturaleza de la accin de reclamacin y con los principios que rigen en la materia que su procedencia quede limitada
a la antigua normativa que regulaba la caducidad, en este caso
de la impugnacin.
Que las dems argumentaciones que en esta sede formula el
demandado respecto del inters superior del nio y de la posesin notoria del estado civil de hija que ha detentado la menor
respecto de su padre legal, resultan improcedentes, puesto que
dicho principio e instituto no han sido previstos para los fines
que el recurrente pretende, esto es, para evitar las consecuencias
jurdicas del reconocimiento de su paternidad.
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Artculo 23 del Cdigo de Procedimiento Civil: Los que, sin ser partes directas
en el juicio, tengan inters actual en sus resultados, podrn en cualquier estado
de l intervenir como coadyuvantes, y tendrn en tal caso los mismos derechos
que concede el artculo 16 a cada una de las partes representadas por un
procurador comn, continuando el juicio en el estado en que se encuentre.
/ Se entender que hay inters actual siempre que exista comprometido un
derecho y no una mera expectativa, salvo que la ley autorice especialmente
la intervencin fuera de estos casos. / Si el inters invocado por el tercero es
independiente del que corresponde en el juicio a las dos partes, se observar
lo dispuesto en el artculo anterior.
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y momento a partir del cual debe computarse el plazo de caducidad previsto en la ley, para deducir dicha accin. Demandante es
hermano de aqul cuya filiacin pretende impugnarse y el inters
actual del primero se funda en el perjuicio que se le ha ocasionado,
a consecuencia de haber sido condenado su padre al pago de una
pensin de alimentos en favor de la persona cuya filiacin se pretende impugnar.
Conclusin de la Corte: el demandante carece del inters actual que exige la ley, habida cuenta que su padre pagaba alimentos
voluntarios al demandado mucho antes de ordenarlo una sentencia
judicial. Por tanto, el plazo de caducidad de la accin de impugnacin de la filiacin, debe contarse desde el momento en que comenzaron a pagarse los alimentos voluntarios, y no desde que el padre
fue condenado a pagarlos. La accin para impugnar, por ende, ha
caducado.
1.- Por sentencia de fecha 22 de julio de 2010, del Juzgado de
Familia de Concepcin, se rechaz la demanda de impugnacin de
filiacin deducida por S. S. R., en contra de E. S. M., representado
por su madre. El demandante impugn la filiacin del demandado
-su hermano-, reconocido por el padre del actor.
2.- Se alz la parte demandante, y la Corte de Apelaciones de
Concepcin, por fallo de fecha 25 de marzo de 2011, confirm la
sentencia apelada.
padre o madre que le desconoce. Este precepto guarda armona a su vez con
el artculo 208 (ya transcrito en este trabajo), que permite reclamar la filiacin
e impugnar la existente, sin que en este caso operen los plazos de caducidad
previstos para la impugnacin. En otras palabras, en este caso la accin ser
imprescriptible o no afecta a caducidad.
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3.- En contra de esta ltima resolucin, la parte demandante dedujo recurso de casacin en el fondo, que fund en los siguientes
argumentos:
Sostiene el recurrente que los jueces del fondo han incurrido en
una errada aplicacin e interpretacin del artculo 216 del Cdigo Civil, al desestimar la demanda de impugnacin de paternidad, por considerar que el inters actual que invoca y que conforme la norma citada, autorizara al actor para impetrar dicha
accin, se verific con anterioridad a la poca en que realmente
surgi, por lo que estiman que la demanda fue deducida fuera
del plazo legal.
Seala el recurrente que dicho inters nace desde el momento
en que su padre fue condenado por sentencia judicial al pago de
alimentos respecto del menor cuya filiacin impugna y no antes,
como se consigna en el fallo impugnado, por el solo hecho que
aqul los hubiera proporcionado en forma voluntaria, ya que dicho presupuesto debe interpretarse como un inters econmico
directamente comprometido y no como una mera expectativa.
Afirma que las sumas de dinero que entregaba su padre al menor
eran pagos voluntarios y eventuales, de modo que no se vea
comprometido el patrimonio del actor, lo que s ha ocurrido
cuando se materializa el derecho de alimentos, mediante una
resolucin judicial que impone la obligacin alimenticia.
Agrega que el artculo 23, inciso 2, del Cdigo de Procedimiento Civil, seala que Se entender que hay inters actual siempre
que exista comprometido un derecho y no una mera expectativa; norma que sirve para aclarar el sentido y alcance de la
expresin inters actual, y de acuerdo a lo dispuesto en ella,
se concluye que ste nace para el actor cuando se concreta y
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Artculo 202 del Cdigo Civil: La accin para impetrar la nulidad del acto de
reconocimiento por vicios de la voluntad prescribir en el plazo de un ao,
contado desde la fecha de su otorgamiento o, en el caso de fuerza, desde el
da en que sta hubiere cesado.
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Artculo 211 del Cdigo Civil: La filiacin queda sin efecto por impugnacin
de la paternidad o de la maternidad conforme con los preceptos que siguen.
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Artculo 213 del Cdigo Civil: Si el marido muere sin conocer el parto, o
antes de vencido el trmino para impugnar sealado en el artculo anterior, la
accin corresponder a sus herederos, y en general, a toda persona a quien
la pretendida paternidad irrogare perjuicio actual, por ese mismo plazo, o el
tiempo que faltare para completarlo. / Cesar este derecho, si el padre hubiere
reconocido al hijo como suyo en su testamento o en otro instrumento pblico.
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G. Condiciones
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H. Acerca
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Artculo 184 del Cdigo Civil: Se presumen hijos del marido los nacidos
despus de la celebracin del matrimonio y dentro de los trescientos das
siguientes a su disolucin o a la separacin judicial de los cnyuges. / No se
aplicar esta presuncin respecto del que nace antes de expirar los ciento
ochenta das subsiguientes al matrimonio, si el marido no tuvo conocimiento
de la preez al tiempo de casarse y desconoce judicialmente su paternidad.
La accin se ejercer en el plazo y forma que se expresa en los artculos 212
y siguientes. Con todo, el marido no podr ejercerla si por actos positivos ha
reconocido al hijo despus de nacido. / Regir, en cambio, la presuncin
de paternidad respecto del nacido trescientos das despus de decretada la
separacin judicial, por el hecho de consignarse como padre el nombre del
marido, a peticin de ambos cnyuges, en la inscripcin de nacimiento del
hijo. / La paternidad as determinada o desconocida podr ser impugnada o
reclamada, respectivamente, de acuerdo con las reglas establecidas en el Ttulo
VIII.
116
Artculo 212 del Cdigo Civil: Artculo 212. La paternidad del hijo concebido
o nacido durante el matrimonio podr ser impugnada por el marido dentro
de los ciento ochenta das siguientes al da en que tuvo conocimiento del
parto, o dentro del plazo de un ao, contado desde esa misma fecha, si prueba
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3.- En contra de esta ltima resolucin los demandados de alimentos y demandantes reconvencionales dedujeron recurso de casacin en el fondo, aduciendo para ello:
Los recurrentes denuncian la infraccin de los artculos 184, 212,
213 y 216 del Cdigo Civil y 7, 8, 9, 12, 16, 29 letra c) y 36 de
la Convencin Internacional sobre Derechos del Nio. Sealan
que se vulneran dichas normas al haberles negado e impedido
su legtimo derecho a impugnar la paternidad obtenida mediante
engao en relacin a dos menores supuestamente descendientes
de su hijo.
Hacen presente que a principios del mes de marzo de 2007 tomaron conocimiento que los hijos de la demandante de alimentos
no son sus nietos. Agregan que en febrero de ese ao se practic
a los nios un examen de ADN, el cual constat que ninguno de
ellos son efectivamente descendientes de los recurrentes, hecho
que fue ocultado por la madre a toda la familia paterna.
Agregan que los menores son adolescentes y durante toda su
vida han recibido la asistencia emocional y econmica de la
presunta familia paterna, lo que al parecer no ha sido suficiente
para la actora, quien dirige accin de alimentos contra los abuelos de sus hijos, que no son tales.
Indican que conforme al artculo 216 del Cdigo Civil, estaran
autorizados los recurrentes para impugnar la paternidad de sus
nietos, al establecer dicho precepto que tiene accin para ello
toda persona que pruebe inters actual, en el plazo de un ao,
contado desde que tuvo ese inters y pudo hacer valer su derecho. Expresan que les asiste un inters actual, que justifica el
ejercicio de la accin, desde que han sido demandados por insuficiencia de pensin de alimentos a favor de menores que no
son sus nietos.
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I. Plazo
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Artculo 217 del Cdigo Civil: La maternidad podr ser impugnada, probndose
falso parto, o suplantacin del pretendido hijo al verdadero. / Tienen derecho
a impugnarla, dentro del ao siguiente al nacimiento, el marido de la supuesta
madre y la misma madre supuesta. / Podrn tambin impugnarla, en cualquier
tiempo, los verdaderos padre o madre del hijo, el verdadero hijo o el que pasa
por tal si se reclama conjuntamente la determinacin de la autntica filiacin
del hijo verdadero o supuesto. Si la accin de impugnacin de la maternidad
del pretendido hijo no se entablare conjuntamente con la de reclamacin,
deber ejercerse dentro del ao contado desde que ste alcance su plena
capacidad. / No obstante haber expirado los plazos establecidos en este
artculo, en el caso de salir inopinadamente a la luz algn hecho incompatible
con la maternidad putativa, podr subsistir o revivir la accin respectiva por un
ao contado desde la revelacin justificada del hecho.
119
289
290
Sostiene la recurrente que la interpretacin realizada por los sentenciadores respecto del artculo 218 del Cdigo Civil es errada,
y que debi atenderse a las dems normas en materia de impugnacin (especficamente el artculo 217) que reconocen la
posibilidad que ante la manifestacin de un hecho que era desconocido, el trmino para deducir la accin correspondiente se
contabilice a partir del momento en que se toma conocimiento
del mismo.
Seala que en el caso sub-lite corresponda considerar que slo
tuvo conocimiento del reconocimiento de la demandada como
hija de su madre, por medio de la tramitacin de la posesin
efectiva y de sa poca debi computarse el plazo que establece
la ley para impugnar dicha maternidad, haciendo extensivo a
esta situacin lo dispuesto en el artculo 217 del mismo cuerpo
legal, en cuanto establece la posibilidad de revivir o subsistir la
accin respectiva por un ao, contado desde la revelacin justificada del hecho.
Expresa que la lgica y la experiencia, as como las normas generales sobre prescripcin, indican que los plazos de hechos
ocultos o desconocidos comienzan a correr desde que se tuvo
conocimiento de ellos, lo que se encuentra acorde con el principio de buena fe y con los elementos de interpretacin de la ley.
Agrega que el criterio interpretativo utilizado por los sentenciadores resulta contrario a los principios que rigen en la materia,
como el de la libre investigacin de la filiacin y la bsqueda de
la verdad biolgica, desconociendo tambin el carcter irrenunciable e imprescriptible de las acciones de impugnacin.
4.- La Corte Suprema expres a su vez en su sentencia que caba
tener presente los siguientes hechos de los autos:
291
Doa L. G. M. dedujo demanda en contra de doa M. P. M., impugnando la maternidad de su madre, C. M. C., fallecida el 14
de junio de 2007.
La actora sustenta su demanda en el perjuicio que a sus derechos
hereditarios provocara la calidad de hija de la demandada.
La demandante ha alegado que slo tuvo conocimiento de que
su madre tena otra hija la demandada-, el 15 de diciembre de
2009, con motivo de la tramitacin de la respectiva posesin
efectiva.
La demanda fue presentada el 12 de abril de 2010.
5.- Agrega el fallo de la Corte Suprema que, sobre la base de los
hechos reseados:
Los sentenciadores concluyeron que la accin incoada se encuentra prescrita120, por haberse deducido transcurrido el plazo
establecido por la ley, esto es, un ao desde el fallecimiento de
la madre, de conformidad a lo dispuesto por el artculo 218 del
Cdigo Civil. Estiman que no es posible aplicar en la especie
el artculo 217 del Cdigo Civil que deja subsistente la accin,
pues dicha figura slo es procedente para los casos que la misma
norma establece, no pudiendo extenderse al caso de autos, donde el fundamento de la impugnacin est dado por el perjuicio
actual en los derechos sobre la sucesin, de conformidad al artculo 218, en el que la ley expresamente ha previsto el trmino
de un ao para impugnar, contado desde la muerte del padre o
madre.
Que dilucidar la controversia pasa por determinar si el plazo
que la ley establece para deducir la accin de impugnacin de
Ms bien ha caducado.
120
292
maternidad por un tercero (un ao, contado desde el fallecimiento de la supuesta madre, artculo 218) puede ser ampliado
en los trminos que establece el inciso final del artculo 217
del Cdigo Civil. En efecto, en este ltimo precepto, despus
de sealar el momento a partir del cual debe computarse el
plazo de un ao para deducir la accin de impugnacin de
maternidad (a contar del nacimiento, si quienes impugnan son
el marido de la supuesta madre y la misma madre supuesta;
o a contar del momento en que el pretendido hijo alcance su
plena capacidad, si l impugnare, a menos que la accin la
dedujere conjuntamente con la de reclamacin, en cuyo caso
no hay plazo121), se indica en su inciso final que No obstante
haber expirado los plazos establecidos en este artculo, en el
caso de salir inopinadamente a la luz algn hecho incompatible
con la maternidad putativa, podr subsistir o revivir la accin
respectiva por un ao contado desde la revelacin justificada
del hecho. A su vez, el artculo 218 reconoce tambin como
titulares de la accin de impugnacin de la maternidad a toda
otra persona (distinta de las mencionadas en el artculo 217),
a quien la maternidad aparente perjudique actualmente en sus
derechos sobre la sucesin, en el caso de autos, de la supuesta
madre, siempre que no exista posesin notoria del estado civil.
Aqu, la accin expirar en un ao, contado desde el fallecimiento de la madre.
Que, como puede apreciarse, la normativa filiativa contempla diversas hiptesis de legitimacin activa, encontrndose
Si la accin de impugnacin de la maternidad se deduce conjuntamente con
la de reclamacin de filiacin por los verdaderos padre o madre del hijo, por
el verdadero hijo o por el que pasa por tal, aquella no est sujeta a caducidad
ni prescripcin.
121
293
294
Que tampoco aparecen preteridos con la decisin que se impugna, los principios de la supremaca de la verdad biolgica y
la libre investigacin de la maternidad, atendida precisamente la
calidad que la ley reconoce a la demandante para actuar, esto es,
en su condicin de heredera y por la afectacin de este tipo de
derechos, circunscribindola a una accin de carcter patrimonial.
Que, en consecuencia, los sentenciadores, no incurrieron en los
errores de derecho denunciados, apareciendo que la interpretacin y aplicacin de las normas del estatuto de la filiacin que
han hecho en el caso sub-lite se ajusta a derecho, lo que conduce al rechazo del recurso interpuesto.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada por los Ministros Sr. Patricio Valds A., Sras. Gabriela
Prez P., Rosa Mara Maggi D., Rosa Egnem S. y Sr. Roberto
Jacob Ch. Redaccin a cargo del Ministro Sr. Patricio Valds
Aldunate.
295
Artculo 6 transitorio de la Ley nmero 19.585: La presente ley no alterar el efecto de cosa juzgada de las sentencias ejecutoriadas con anterioridad
a su entrada en vigencia, aunque resolvieren sobre acciones de estado civil,
de desconocimiento, impugnacin o reclamacin de la filiacin, paternidad o
maternidad, atribucin y suspensin de la patria potestad o emancipacin del
hijo.
123
296
lla que contemplaba la antigua normativa del Cdigo Civil, de manera que no corresponde aplicar la institucin de la cosa juzgada a
que se refiere el artculo 6 transitorio de la Ley nmero 19.585.
1.- Por sentencia de fecha 4 de mayo de 2007, del 20 Juzgado
Civil de Santiago, se rechaz la excepcin de cosa juzgada y se acogi, con costas, la accin intentada, declarndose la paternidad del
demandado J. W. T., respecto de C. W. M.
2.- Se alz el demandado, y una de las salas de la Corte de Apelaciones de Santiago, por sentencia de fecha 19 de diciembre de
2007, confirm el fallo.
3.- En contra de esta ltima sentencia, el demandado dedujo recursos de casacin en la forma y en el fondo.
4.- La Corte Suprema rechaz los recursos. Seguidamente, nos
abocaremos a reproducir lo concerniente a los argumentos esgrimidos para desechar la casacin en el fondo. Tuvo presente la Corte
Suprema:
Que el recurrente sostiene que los jueces del fondo han incurrido en error de derecho al resolver como lo han hecho, desestimando la excepcin de cosa juzgada y de falta de legitimidad
activa del actor para accionar en contra del presunto padre. Seala que la Ley nmero 19.585 aclar y limit la posibilidad de
deducir demandas sobre la materia, a quienes con anterioridad
a su promulgacin, hubieren demandado el reconocimiento de
paternidad. Alega que las disposiciones transitorias de la referida
ley, son las llamadas a resolver los problemas que se originan
con la modificacin de la legislacin que ha tenido lugar y en
este sentido, cita el artculo 2 transitorio, conforme al cual las
personas que a la fecha de entrada en vigencia de la ley no hayan
tenido una filiacin determinada, podrn reclamarla conforme a
297
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299
125
Estableca el antiguo artculo 280, nmero 4, del Cdigo Civil (texto que rigi
hasta el 26 de octubre de 1999): El hijo ilegtimo que no tenga la calidad
de natural slo tendr derecho a pedir alimentos del padre o madre, o de
ambos, segn el caso: () 4. Si el supuesto padre, citado por dos veces a la
presencia judicial para que, bajo juramento, reconozca al hijo y expresndose
en la citacin el objeto, no compareciere sin causa justificada
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301
K. Procedencia
padre
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307
como un hecho, que la diligencia que orden la pericia a practicarse por el Servicio Mdico Legal, se decret encontrndose
an pendiente el trmino probatorio, a la que, por lo dems, no
se opuso la contraria, sin que fuese necesario disponer una nueva exhumacin del cadver del presunto padre a fin de obtener
las muestras necesarias para determinar su paternidad; informe
pericial que, una vez evacuado y agregado a estos autos, con
citacin, no fue objeto de reparo alguno.
Que corresponde mantener la decisin apelada que no hizo lugar a las tachas deducidas en contra de los testigos, desde que
stas no se fundan en hechos concretos y precisamente determinados.
Que la posesin notoria de la calidad de hijo, de conformidad
a lo dispuesto en el artculo 200 del Cdigo Civil, sirve tambin
para tener por suficientemente acreditada la filiacin, siempre
que haya durado a lo menos cinco aos continuos y se pruebe
con un conjunto de testimonios y antecedentes o circunstancias
fidedignos que la establezcan de un modo irrefragable.
Que del mrito de los antecedentes, en especial de la prueba testimonial y documentaria a que se refiere el motivo 18 del fallo
que se revisa129, se encuentra acreditado suficientemente con la
El fallo de la Corte de Apelaciones de San Miguel no alude a tales documentos
aportados por los demandantes, pero debe subrayarse que ellos son esenciales
para la prueba de la posesin notoria del estado civil. En efecto, Para acreditar
la filiacin mediante la posesin notoria, se requiere cumplir, conforme al
artculo 200 del Cdigo Civil, con los siguientes requisitos copulativos: i)
Que la posesin notoria haya durado a lo menos 5 aos continuos; y, ii) Que
se pruebe por un conjunto de testimonios y antecedentes o circunstancias
fidedignos que la establezcan de un modo irrefragable. En relacin a lo que
se estableca en el anterior artculo 271 nmero 3 (previo a la reforma de la
Ley nmero 19.585), a propsito de la posesin notoria como medio para
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308
309
L. Circunstancias
310
Un mes despus, ella le comunic que estaba embarazada, dando por terminada la relacin con el actor el 9 de octubre del
mismo ao.
No obstante lo anterior, agrega que el actor, se hizo responsable
de la menor, pag el parto, corri con todos los gastos, reconocindola voluntariamente en el Registro Civil como su hija el 9
de mayo de 2005, tras el nacimiento, ocurrido el da 7 de ese
mes, o sea, dos semanas antes de la supuesta fecha en que se
enteraban los nueve meses de gestacin, informando el mdico
que se haba tratado de un embarazo de trmino.
Aade que al no presentar la menor ningn rasgo parecido al demandante, llevaron a ste a practicarse un examen de ADN junto
a la nia, cuyo resultado fue de que tena una probabilidad de
0,00% de ser su padre biolgico, lo que le ha provocado dolor,
al sentirse humillado y estafado. Al encarar a la demandada,
sta le confes que dos semanas antes de su relacin sexual,
haba mantenido otra con su ex pareja, que era el verdadero padre de la menor, quien no era querido por su familia por ser un
simple mesero.
Seala que la demandada demostr con su actitud haber montado un ardid para aprovecharse del actor, lo que importa error
que vicia el consentimiento, constituyendo asimismo el dolo o
fuerza (sic) a que se refieren los artculos 202 y 1451 y siguientes, en especial los artculos 1455 y 1456, todos del Cdigo Civil.
Agrega que el artculo 202 del Cdigo Civil otorga esta accin
para impetrar la nulidad del acto de reconocimiento a quien lo
ha efectuado con vicios de la voluntad, dentro del plazo de un
ao, contado desde su otorgamiento.
311
312
ese modo su conformidad, sin que la demandada lo haya requerido de alimentos o le haya solicitado esa colaboracin.
4.- La Corte, en definitiva, rechaz el recurso y confirm la sentencia apelada, fundando su fallo en lo que se expresa:
Que este proceso se inici con demanda de nulidad de reconocimiento de la paternidad de la menor E. M. C., impetrada
por E. M. O. en contra de la madre de la menor, en virtud de lo
dispuesto en el artculo 202 del Cdigo Civil, norma que permite
anular el reconocimiento por vicios en la voluntad de quien lo
ha efectuado, aduciendo el demandante la concurrencia de todos los vicios, esto es, error, fuerza y dolo.
Que en los artculos 186 y siguientes del Cdigo Civil, se establecen las reglas para la determinacin de la filiacin no matrimonial, sealando al efecto que se determina legalmente por el reconocimiento (del padre, de la madre o de ambos) o por sentencia
firme en juicio de filiacin. A su vez, el artculo 187 nmero 1 del
mismo cuerpo legal seala que el reconocimiento del hijo tendr
lugar mediante una declaracin formulada con ese determinado
objeto, ante el Oficial del Registro Civil, al momento de inscribirse
el nacimiento; agrega el artculo 188 que el hecho de consignarse
el nombre del padre o de la madre a peticin de cualquiera de
ellos, al momento de practicarse la inscripcin del nacimiento, es
suficiente reconocimiento de la filiacin.
De conformidad con el mrito del certificado de nacimiento agregado en autos, consta que el demandante figura como padre de la
menor E. M. C., nacida el 7 de mayo de 2005 en Antofagasta.
Que, como acertadamente razona el sentenciador de primer grado, no se divisa la existencia de vicio alguno en el acto de reconocimiento de la menor. Efectivamente, se desprende de los antece-
313
dentes de autos que el demandante, en forma voluntaria, concurri a inscribir a la menor, no obstante estar en conocimiento de
los hechos que resea su abogado, y no conforme con lo anterior,
sigui realizando actos que evidenciaban su paternidad y estrecha
relacin con la menor. Por ende, los vicios de la voluntad que se
han alegado para solicitar en esta causa la nulidad del acto de
reconocimiento, debieron probarse en forma legal durante el proceso, lo que no sucedi. Por lo dems, si bien es cierto que no se
produjo la prueba cientfica que clarificara la paternidad biolgica
como fundamento de la peticin del recurrente, no obstante que
en el actual procedimiento de familia las partes estn obligadas
a cooperar en el esclarecimiento de los hechos, no lo es menos
que la demandante no reiter en la etapa procesal pertinente la
solicitud de la prueba del ADN (el destacado es nuestro).
Que de todo lo precedentemente analizado, se colige que resulta procedente rechazar la apelacin deducida, confirmando la
sentencia de primera instancia.
Pronunciada por la Primera Sala de la Corte de Apelaciones de
Antofagasta, integrada por los Ministros Sr. Enrique lvarez G., Sra.
Gabriela Soto Chanda y Sra. Rosa Mara Pinto E. Redaccin a cargo
de la Sra. Rosa Mara Pinto Eguzquiza.
XIX.- Sentencia de la Corte de Apelaciones de Puerto Montt de
fecha 16 de junio de 2009, autos Rol nmero 37-2009.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculo 202 del Cdigo Civil; artculos 186 y siguientes del Cdigo de Procedimiento Civil y artculo 32 de la Ley nmero 19.968.
314
Cuestin medular: cundo resulta procedente acoger una demanda de nulidad de reconocimiento de paternidad fundada en un
supuesto error de quien formul el expresado reconocimiento?
Conclusin de la Corte: es procedente acoger la accin si se desprende de la prueba pericial biolgica de ADN que el demandante
no es el padre biolgico del menor. El inters superior del nio no
puede implicar atribuirle un padre y un nombre a todo trance, cuando ello pugna con el principio de la verdad biolgica.
1.- Por sentencia de fecha 4 de febrero de 2009, del Juzgado de
Letras y Familia de Maulln, se rechaz la demanda de nulidad de
reconocimiento interpuesta por V. H. D. en contra de G. O. P.
2.- El demandante se alz y una Sala de la Corte de Apelaciones
de Puerto Montt acogi el recurso de apelacin, fundando su fallo
en las siguientes consideraciones:
Que, con la testimonial presentada por el demandante, se acredita que unos das despus de nacido el hijo de la demandada,
de nombre T. H. O., y no obstante que el demandante se haba
practicado un examen de ADN junto con el nio, y teniendo
serias dudas si era el padre del mismo por comentarios que haba escuchado, sin esperar el resultado de ese examen, se sinti presionado anmicamente a reconocerlo como hijo suyo por
actitudes de la familia de la madre y de sta misma, recibiendo
despus la noticia que el examen haba sido negativo.
Que interpuesta la demanda, se solicit por el demandante un
nuevo examen de ADN, que el tribunal ordena, compareciendo
el demandante, la demandada y el hijo de sta, el que result
igualmente negativo.
315
Pronunciada por la Corte de Apelaciones de Puerto Montt, integrada por los Ministros Sres. Jorge Ebensperger Brito y Hernn Crisosto Greisse y por Abogado Integrante Sr. Luis Mansilla Miranda.
Redaccin a cargo de Ministro Sr. Jorge Ebensperger Brito.
XX.- Sentencia de la Corte de Apelaciones de Santiago de fecha
7 de abril de 2009, autos Rol nmero 423-2009.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculos 202, 212, 308130 y 309131 del Cdigo Civil; artculo
32 de la Ley nmero 19.968. Voto disidente: artculos 7 y 8 de la
Convencin sobre los Derechos del Nio; y artculos 2, 5 y 16 de la
130
131
317
para los jueces de la Repblica el derecho internacional ratificado por Chile y en actual vigencia.
En esa situacin se halla la Convencin sobre los Derechos del
Nio, promulgada por Decreto Supremo de Relaciones Exteriores nmero 830 y publicada en el Diario Oficial de 27 de septiembre de 1990. Su artculo 7 consagra el derecho del nio,
desde que nace, a tener un nombre y a conocer a sus padres, al
extremo de exigir a los Estados Partes velar por la debida aplicacin de esas prerrogativas substanciales, a travs de sus respectivas legislaciones (punto 2). Por otra parte, su artculo 8 establece
el compromiso de los Estados Partes a respetar el derecho del
nio a preservar la identidad, incluidos el nombre y las relaciones familiares (punto 1), de tal manera que en el evento de que
sea privado ilegalmente de alguno de ellos, los Estados Partes deben prestar la asistencia destinada a su rpido restablecimiento.
El tratamiento de la temtica toda en torno al status del menor
est insuflado por un principio irrenunciable, cual es el de su
inters superior, que, como consideracin primordial, ha de
presidir y guiar cualquier medida que a su respecto adopten las
autoridades en general y los tribunales en particular.
Que lo dicho en los prrafos precedentes autoriza afirmar que
forma parte del inters superior del nio: i) poseer un nombre;
ii) conocer a sus padres; iii) preservar su identidad, comprensiva
sta del nombre y las relaciones familiares; iv) contar con el amparo del Estado ante actos privativos o impeditivos de su goce; y
v) su ms pronta afirmacin o reposicin, llegado el caso.
Que es cierto que este tema contina regulado en Chile por el
Cdigo Civil, cuyos artculos 202 y 212 han servido al tribunal
de primera instancia para declarar la prescripcin de la accin a
que se refiere el primero y la caducidad que nace del segundo.
319
320
matrimonio, paternidad, maternidad y filiacin- resiste una mirada aislada, como si se tratase de compartimentos estancos.
Que en lo que hace a la prescripcin y caducidad en estudio,
ha de hacerse primar los principios y normas esenciales que inspiran el derecho de familia en su integridad, por sobre disposiciones de carcter puramente funcional, concebidas ms de un
siglo antes de la introduccin en Chile como normativa obligatoria del derecho internacional someramente examinado. En este
sentido, por aplicacin de las reglas de los artculos 52 y 53 del
estatuto privatista, cabe predicar derogacin tcita de los artculos 202 y 212 del Cdigo Civil, por parte de los mencionados
documentos de derecho internacional (el nfasis es nuestro).
Que en lo que hace a la prescripcin de la accin para impetrar la nulidad del acto de reconocimiento de hijo, a que se
refiere el artculo 202, el discrepante se detiene en otros dos
rdenes de ideas: i) Conforme al inciso primero del artculo
320 del Cdigo Civil, nunca podr oponerse prescripcin alguna a quien se presente como verdadero padre o madre del
que pasa por hijo de otro. Es cierto que la disposicin tiene
como sujeto pasivo (en esta parte, creemos que el redactor del
voto de minora quiso decir sujeto activo) al padre tambin a la madre- y atiende a su propia confesin de ser tal, no
siendo ste el caso (pues en los autos no se reclam la calidad
de padre, sino que se repudi). Pero no lo es menos que lo
que por ella se pretende es hacer factible la formalizacin,
por la va jurisdiccional, de una paternidad o maternidad libremente asumidas. En la situacin sub iudice, al haberse la
madre P. A. S. allanado a la demanda, est reconociendo los
hechos en que se funda la pretensin, es decir, que el hijo J. A.
A. no ha sido procreado por quien impugna el acto de recono-
322
del demandante es de un 0,00%, dato que adquiere singular valor, no slo porque est suscrito por una profesional bioqumica,
sino que por resultar del todo congruente con:
i) el reconocimiento por parte de la madre, del hecho que el demandante no es el padre biolgico;
ii) con los testimonios que el mismo argumento analiza; y
iii) con el informe del Servicio Mdico Legal que, sobre la base
de pruebas, concluye que el demandante P. A. A. no es el padre
de J. A. A., dictamen que tiene un 99,99999994% de certeza y
proviene de dos bioqumicos legistas.
Que apreciada la prueba en la forma que corresponde, de
acuerdo con el artculo 32 de la Ley nmero 19.968, no cabe
al disidente sino concluir que es efectivo que se incurri en
error al momento en que P. A. A. reconoci ante el Servicio de
Registro Civil ser el padre biolgico de J. A. A., lo que acarrea
como consecuencia que deba accederse a las acciones de repudio de paternidad y de nulidad del acto de reconocimiento
en cuestin.
Pronunciada por la Segunda Sala de la Corte de Apelaciones de
Santiago, integrada por los Ministros Sres. Carlos Cerda Fernndez y
Patricio Villarroel Valdivia y por el Abogado Integrante Sr. ngel Cruchaga Gandarillas. Redaccin a cargo del Ministro Sr. Carlos Cerda
Fernndez.
324
M. Rol
Cdigo Civil,
1698
del
325
326
vii) Por oficio de 1 de septiembre de 2009, el Servicio Mdico Legal inform que no puede arribarse a resultados concluyentes en
este tipo de pericias, con la muestra de material biolgico de parientes de segundo grado (recurdese que los demandados eran
tos y primos de los dos menores demandantes), requirindose
la exhumacin de los restos del padre fallecido a fin de obtener
muestras seas de ste.
viii) Ante dicha respuesta del aludido Servicio, la parte demandante solicit nuevamente al tribunal de alzada la exhumacin
correspondiente, a lo que ste, sin mayores fundamentos, no accedi, y tuvo por cumplida la medida para mejor resolver por
resolucin de 21 de septiembre de 2010.
ix) Con fecha 3 de noviembre de 2010, se dict sentencia de segundo grado, que revoc la de primera instancia y rechaz la demanda, por no haberse acreditado los fundamentos de la accin.
Que al respecto, cabe tener presente que en el nuevo estatuto filiativo el respeto del principio de igualdad de los seres humanos,
el derecho a la identidad y el inters superior del nio, son las
ideas matrices que inspiran la Ley nmero 19.585 y el legislador
tuvo especial preocupacin por mantener la coherencia y una
lgica armona entre sus disposiciones. En general, el principio
de igualdad se recoge en diversos artculos que eliminan toda
diferencia entre los hijos, pero sin duda se consagra tambin al
permitir que una persona que no tenga determinada su filiacin,
pueda accionar contra quien estima que es su progenitor. En este
sentido, la ley facilita obtener la calidad jurdica de hijo y para
ello admite una total amplitud probatoria y otorga atribuciones
al juez para que indague activamente a objeto de lograr el fin
perseguido, cual es, la bsqueda de la verdad real o biolgica
por sobre la formal o aparente.
328
Que por su parte, el principio del derecho a la identidad se expresa normativamente, entre otros, en los artculos 195, 198 y
199 del Cdigo Civil, y en esta materia, la legislacin interna no
hizo ms que adecuar sus normas a los pactos internacionales
firmados por Chile, entre los cuales se encuentra la Convencin
Internacional sobre los Derechos del Nio, que en sus artculos
7 y 8 recoge la misma inspiracin. En efecto, la ley posibilita
la investigacin de la paternidad o maternidad, en la forma y
con los medios de prueba previstos en las reglas generales de
las acciones de filiacin. El artculo 198 del citado texto legal,
previene que en los juicios sobre determinacin de la filiacin,
la maternidad y la paternidad podrn establecerse mediante toda
clase de pruebas, decretadas de oficio o a peticin de parte. De
lo anterior se infiere que en materia probatoria se altera la pasividad de los tribunales y la norma general contenida en el artculo 1698 del Cdigo Civil, que impone a las partes litigantes la
carga de probar la existencia de las obligaciones o su extincin
(el destacado es nuestro).
Que tal como lo ha destacado la doctrina, el derecho a la identidad (que es lo que en definitiva se reclama en las acciones de
filiacin, sean de reclamacin o de impugnacin), se entiende
inherente a la persona, al desarrollo de su personalidad, a su
integridad y dignidad, y en consecuencia, goza de proteccin
constitucional, y al mismo tiempo, est consagrado en diversos
tratados de derechos humanos vigentes en Chile (Paulina Veloso
Valenzuela, La Filiacin en el Nuevo Derecho de Familia, Santiago de Chile, Editorial ConoSur Ltda., ao 2001, p. 133).
Que, de lo que se viene razonando, es dable concluir que la
intencin del legislador en los procesos originados por acciones
sobre estado civil, est orientada a descubrir la verdad.
329
Que, por otro lado, til resulta sealar que la Constitucin Poltica, asegura a todas las personas, en su artculo 19, numeral
tercero, La igual proteccin de la ley en el ejercicio de sus derechos. En esta garanta se contempla, entre otras, que toda sentencia debe fundarse en un proceso previo legalmente tramitado,
y en su inciso 5, se confiere al legislador la misin de establecer
siempre las garantas de un procedimiento racional y justo. A su
vez, en el derecho a un debido proceso, se comprenden, a lo
menos, los siguientes aspectos: el derecho a ser odo, de presentar pruebas para demostrar las pretensiones de las partes, de que
la decisin sea razonada y de recurrir en su contra, siempre que
se estime agraviante de acuerdo con su contenido.
Que, precisamente, la ley procesal civil, en ejercicio de la indicada garanta constitucional, ha establecido como trmite esencial,
entre otras, la prctica de diligencias probatorias cuya omisin
podra acarrear la indefensin de la parte a quien se niega este
derecho, situacin que al constituir un vicio de carcter formal
autoriza la invalidacin del fallo.
Que en el caso sub-lite, tanto el tribunal de primera instancia
como el de segunda, negaron sistemticamente y, sin fundamento alguno, la autorizacin para la prctica de una medida como
la exhumacin del cadver del supuesto padre biolgico de los
menores- necesaria para la realizacin de la pericia de ADN que
la parte demandante pidi primero durante el trmino probatorio y que reiter, asimismo, con motivo de la tramitacin de la
medida para mejor resolver decretada por el tribunal de alzada,
establecida que fuera por el informe del Servicio Mdico Legal la
imposibilidad de determinar la paternidad por esa va con muestras slo de los colaterales del progenitor.
330
331
209
del
Cdigo Civil,
pueda hoy
332
333
1.- Por sentencia de fecha 31 de agosto de 2009, complementada por la de fecha 23 de enero de 2010, del Juzgado de Familia de
Buin, se acogieron las acciones de impugnacin y reclamacin de
filiacin, y se declar que don P. D. C. no es hijo biolgico de don
P. D. y que s lo es de don J. A. R., disponindose las inscripciones
correspondientes en la partida de nacimiento del actor. Se declar,
adems, que la filiacin ha sido determinada con oposicin del padre, quedando ste privado de todos los derechos que por el ministerio de la ley se le confieren respecto de la persona y bienes de su
hijo.
2.- Se alz el demandado J. A. R. y una de las Salas de la Corte
de Apelaciones de San Miguel, por sentencia de fecha 16 de abril
de 2010, confirm la sentencia apelada, conforme a la siguiente
argumentacin:
Expresa que si bien la accin de impugnacin de la paternidad
tiene plazos de caducidad, al constituir un imperativo su ejercicio en forma conjunta con la de reclamacin de otra distinta, no
es posible extender su aplicacin a esta ltima, pues se trata de
una accin imprescriptible. De lo contrario, es decir, si se acepta
que corren tambin para la reclamacin de filiacin los trminos
de caducidad que la ley ha establecido para impugnarla, sera
ilusorio ejercer la accin de reclamacin de una filiacin distinta a la ya determinada, si ya estuviera caducada la accin para
impugnar dicha filiacin.
Respecto del artculo 5 transitorio de la Ley nmero 19.585,
se considera que dicha norma se refiere a la accin de impugnacin que se ejerce aisladamente, no siendo, en consecuencia, aplicable al caso sub-lite, en el cual es requisito necesario
ejercer la accin de impugnacin en forma conjunta con la de
reclamacin, teniendo en consideracin que la ley seal expre334
336
337
Que por lo razonado, no resulta procedente la aplicacin del citado artculo 5 transitorio, puesto que la accin de reclamacin
que tiene el actor corresponde a una distinta a la que estableca
la anterior legislacin sobre la materia, no resultando acorde con
la naturaleza de la accin y con los principios que rigen hoy en
da, que su procedencia quede limitada a la antigua normativa
que regulaba la caducidad, en este caso, de la impugnacin.
Que de lo razonado, se concluye que el fallo impugnado se sustenta en una correcta interpretacin y aplicacin de las normas
sustantivas del estatuto filiativo actual, no habindose incurrido
por los sentenciadores en los errores de derecho denunciados, lo
que determina el rechazo del recurso de nulidad impetrado.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada
por los Ministros Sres. Urbano Marn V., Patricio Valds A., Ministras
Sras. Gabriela Prez P., Rosa Mara Maggi D. y Rosa Egnem S. Redaccin a cargo de Ministra Sra. Gabriela Prez Paredes.
338
339
340
O. Bajo
irrefragable,
empleada en el artculo 200 del Cdigo Civil. Quienes
biolgica.
Alcance
de la expresin
341
134
Artculo 201 del Cdigo Civil: La posesin notoria del estado civil de hijo,
debidamente acreditada, preferir a las pruebas periciales de carcter biolgico
en caso de que haya contradiccin entre una y otras. / Sin embargo, si hubiese
graves razones que demuestren la inconveniencia para el hijo de aplicar la
regla anterior, prevalecern las pruebas de carcter biolgico.
342
343
344
pruebas periciales, pero los resultados de stas no fueron recibidos oportunamente en el proceso.
Que el actor ha tomado conocimiento que el resultado de la pericia mdico legal, excluye la paternidad biolgica de don F. R.
A.
Que los hechos descritos, provocaron la ruptura del matrimonio
de sus padres, despus de 30 aos de convivencia, afectando el
prestigio de la familia, sin perjuicio del dao econmico producido, toda vez que actualmente, su padre debe pagar por concepto de pensin alimenticia a favor de la menor F. D. D. la suma
de $ 300.000.- mensuales, segn se orden en la respectiva causa de alimentos seguida ante el Primer Juzgado de Menores de
Via del Mar en el ao 2004.
Que en apoyo de su pretensin, invoca los artculos 216 inciso
final y 199 bis, ambos del Cdigo Civil, normas que habilitaran
a los terceros que tengan un inters actual para impugnar la paternidad determinada por reconocimiento.
3.- Por resolucin de fecha 5 de diciembre de 2007, el Juez de
Familia resolvi declarar inadmisible la demanda, sobre la base de
existir una filiacin determinada por sentencia judicial que se encuentra ejecutoriada. Agreg la resolucin que el demandante carece de legitimidad activa para interponer la presente accin.
4.- En contra de esta sentencia, el demandante interpuso recurso de casacin en la forma y apelacin, invocando como motivos
de casacin el vicio de ultra petita contemplado en el artculo 768
nmero 4 del Cdigo de Procedimiento Civil, al haberse extendido
la resolucin a puntos no sometidos al conocimiento de la Juez de
la causa, desde el momento que ninguna de las partes solicit la
declaracin de inadmisibilidad de la demanda; y el vicio de haberse
345
346
347
Que en virtud de lo observado, resulta particularmente inconveniente proseguir con la tramitacin normal de la causa, toda
vez que de acogerse alguno de los recursos interpuestos, deber
esta Corte dictar sentencia, pronuncindose en nica instancia
respecto de la demanda de autos, situacin que contraviene la
garanta del debido proceso al quebrantar el derecho de las partes a que la controversia materia de autos sea juzgada en doble
instancia.
Que por el contrario, si esta Corte de Apelaciones resolviera rechazar los recursos interpuestos, dicha decisin conllevar el
hecho de denegar al demandante la posibilidad de ejercer su
derecho de someter el conflicto de autos, a la decisin de los
tribunales competentes, esto es, su derecho de accin y de defensa, consagrado en el artculo 19, nmero 3, inciso 1, de la
Constitucin Poltica de la Repblica.
Por estas razones y en conformidad con las normas citadas,
actuando de oficio a fin de corregir el error observado en la
tramitacin del proceso y con sujecin a lo que establece el
artculo 84 del Cdigo de Procedimiento Civil, se deja sin
efecto resolucin de 5 de diciembre de 2007, en cuanto declara inadmisible la demanda de autos, retrotrayendo el proceso al estado de fijar da y hora para la continuacin de la
audiencia preparatoria y se tramite la causa hasta la dictacin
de la sentencia definitiva.
Pronunciada por la Corte de Apelaciones de Valparaso, integrada
por los Ministros Sres. Hugo Fuenzalida C., Patricio Martnez S. y
Abogado Integrante Sra. Susana Bont. Redaccin a cargo de sta
ltima.
348
135
349
351
352
Como segunda excepcin o alegacin del demandado para oponerse a las pretensiones del libelo, se argument que la actora
ejerci en su oportunidad la accin de reclamacin, sin entablar
simultneamente la de impugnacin, como corresponda que lo
hiciera, operando la consumacin procesal y preclusin de este
derecho. Esgrime entonces que caduc el plazo para impugnar
la filiacin, no siendo aplicable la norma del artculo 208 del
Cdigo Civil, toda vez que no se plantearon (en aqul juicio)
ambas acciones como lo dispone la ley.
Que los jueces del fondo resolvieron rechazar la excepcin de
cosa juzgada, por considerar que en la especie no se configuran
los presupuestos de la triple identidad, sosteniendo que la causa
de pedir en ambos litigios es diversa, ya que el primero versa
slo sobre la reclamacin de la filiacin no matrimonial y en el
actual se trata del ejercicio conjunto de las acciones de impugnacin (de filiacin matrimonial) y de reclamacin de filiacin
no matrimonial, producindose nicamente el efecto de cosa
juzgada formal, al no haber mediado pronunciamiento sobre el
fondo del asunto debatido (en el primer litigio).
En lo que concierne a la preclusin y caducidad alegadas por
el demandado A. W. S., la sentencia atacada consigna que la
materia de autos dice relacin con el derecho imprescriptible e
irrenunciable de toda persona a investigar su identidad y para reclamar su verdadera filiacin, derecho a cuyo respecto la propia
ley ha hecho exclusin de la limitacin de los plazos previstos
para deducir una accin de impugnacin, en el artculo 208 del
Cdigo Civil, cuando, como en la especie, se deducen conjuntamente las acciones de impugnacin y reclamacin de filiacin.
5.- Se exponen seguidamente en la sentencia de la Corte Suprema los siguientes razonamientos:
353
Que cabe consignar que de la causa tenida a la vista Rit C-1.2612008, y especficamente de la sentencia definitiva dictada, es
posible apreciar que habindose ejercido por la actora en ese
proceso nicamente la accin de reclamacin de paternidad respecto del recurrente de casacin, su pretensin fue desestimada
fundamentalmente por defecto de interposicin de la demanda, toda vez que no se ejerci simultneamente las acciones de
reclamacin e impugnacin como lo precepta el artculo 208
del Cdigo Civil. En consecuencia, no se emiti all pronunciamiento sobre el fondo de lo debatido, por la va de analizar las
pruebas producidas para establecer la pretendida filiacin no
matrimonial (verbigracia, no se analiz ni consider las consecuencias de no haber concurrido el demandado al Servicio Mdico Legal para los efectos del informe de ADN, anlisis que s
contiene el fallo impugnado).
En efecto, si al intentar la accin de reclamacin en el juicio
anterior la demandante tena una filiacin determinada, no era
posible decidir sobre la verdad o no de la filiacin reclamada
en tanto no se estableciera la falsedad de la existente hasta esa
poca. En tales circunstancias, al resolver el fallo dictado en la
causa Rit C-1.261-2008 la mantencin de la situacin imperante
por no haberse deducido conjuntamente, como lo ordena la ley,
las acciones de impugnacin y de reclamacin, no ha cubierto
del todo el espectro de la causa de pedir en este proceso, que, en
el marco de la pretensin de establecer que la actora es hija de
A. W. S., incluye el establecimiento de la falsedad de la filiacin
que la vincula al demandado R. G. A., dando as satisfaccin al
presupuesto de no poder adquirirse una nueva filiacin en tanto
se mantenga la primera.
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357
R. Respecto
de
impugnacin
Compatibilidad
de
reclamacin
de
filiacin.
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138
Artculo 198 del Cdigo Civil: En los juicios sobre determinacin de la filiacin,
la maternidad y la paternidad podrn establecerse mediante toda clase de
pruebas, decretadas de oficio o a peticin de parte. / No obstante, para estos
efectos ser insuficiente por s sola la prueba testimonial, y se aplicarn a la de
presunciones los requisitos del artculo 1712.
358
Conclusin de la Corte: las acciones pueden ser objeto de desistimiento, pues su carcter irrenunciable implica que la ley prohbe declinarlas anticipadamente, pero una vez interpuestas, cabe
la posibilidad de que opere dicha forma de poner fin a un litigio y
que opere el efecto de la cosa juzgada, por remisin expresa del
artculo 27 de la Ley nmero 19.968, a las disposiciones comunes
a todo procedimiento. De esta forma, una vez ejercido el derecho a
deducir las acciones, nada impide disponer del mismo, armonizndose de esta manera los artculos 150 del Cdigo de Procedimiento
Civil y 195 del Cdigo Civil. As, al haberse desistido la actora de
su accin, su derecho precluy por consumacin, encontrndose
impedida de entablarla nuevamente.
1.- Por sentencia de fecha 21 de abril de 2010, del Juzgado de
Familia de La Ligua, se acogi la excepcin de cosa juzgada opuesta y en consecuencia se rechaz la demanda de impugnacin de
filiacin matrimonial y de reclamacin de filiacin no matrimonial,
deducidas por doa R. R. A., en contra de don A. R. F. y de don J. G.
C., respectivamente, con costas.
2.- Se alz la parte demandante y una de las Salas de la Corte de
Apelaciones de Valparaso, por fallo de fecha 6 de julio de 2010,
confirm la resolucin apelada.
3.- Respecto de esta ltima resolucin, la demandante dedujo
recurso de casacin en el fondo, que fundament en las siguientes
consideraciones:
La recurrente denuncia como vulnerados los artculos 18 de la
Convencin Americana sobre Derechos Humanos, 24.2 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Polticos y 7 de la Convencin sobre los Derechos del Nio, todos en relacin al inciso
2 del artculo 5 y artculo 1 de la Constitucin Poltica de la
Repblica; artculos 195, 198 inciso 1 y 199 inciso 2 del C359
digo Civil, en relacin con los artculos 150, 175, 176 y 177 del
Cdigo de Procedimiento Civil, y de las reglas de interpretacin
previstas en los artculos 22 y 24 del Cdigo Civil. Seala que la
aplicacin de los artculos 148 a 150, en relacin con los artculos 174, 175 y 177 del Cdigo de Procedimiento Civil, le veda
la posibilidad de ejercer su derecho a la identidad, el que tiene
la categora de esencial, en tanto se permite la renuncia en el
juicio a una accin irrenunciable, lo que se encuentra en abierta
contradiccin con lo dispuesto en los artculos 1 y 5 de la Carta
Fundamental.
Indica que el artculo 195 del Cdigo Civil establece como principio bsico y piedra angular en materia de filiacin la libre investigacin de la maternidad o paternidad, norma que debe ser
interpretada en armona con lo previsto en el artculo 198 del
mismo texto legal, el cual consagra el principio de la oficialidad, conforme al cual el juez est obligado a decretar toda clase
de pruebas que tiendan a estos objetivos, lo que el tribunal en
el caso sub-lite no cumpli. Agrega que la interpretacin realizada por los jueces del fondo, respecto a la irrenunciabilidad
del derecho a reclamar la filiacin, circunscribindola a la sola
prohibicin de declinarla anticipadamente, pero no cuando ha
sido ejercida, no explica satisfactoriamente la utilidad de dicho
carcter, desde que el desistimiento es un acto de disposicin
de la pretensin que lleva consigo una terminacin anormal del
proceso.
Por otro lado, agrega que se ha hecho una interpretacin equivocada de los artculos 150, 175, 176 y 177 del Cdigo de Procedimiento Civil, los que si bien resultan aplicables a la mayora
de los casos, su alcance es incompatible en materias como la
de autos, donde lo relevante no es la mera certeza jurdica sino
360
que la bsqueda de la verdad. Sostiene que aceptar la interpretacin que los jueces del fondo han realizado significa amparar
el fraude a la ley, ya que se permite la renuncia al ejercicio de
una accin y de este modo a un derecho que no pueden serlo, lo
que significa que estas acciones pueden ser compradas por la va
del desistimiento y con ello el derecho a la identidad, quedando
sin ningn valor los principios que el legislador ha reconocido
en materia de filiacin y el carcter esencial y fundamental del
derecho a la identidad.
4.- La Corte Suprema rechaz en definitiva el recurso de casacin
en el fondo, expresando en su fallo:
Que, para una adecuada comprensin del asunto, cabe tener
presente lo siguiente:
i) En autos, se ha ejercido la accin de impugnacin y reclamacin de filiacin, de conformidad al artculo 206 del Cdigo Civil.
ii) El demandado de impugnacin de paternidad se allan a la
demanda y el de reclamacin aleg la excepcin de cosa juzgada,
basado en que la actora dedujo ante el mismo tribunal idntica accin en contra de los mismos demandados, dando origen a los autos
Rit C65-2005, en la que sta se desisti de la demanda.
iii) En efecto, el 25 de octubre de 2005, doa R. R. A. interpuso
demanda de impugnacin y reclamacin de paternidad en contra de
don A. R. F. y de don J. G. C., respectivamente.
iv) El 1 de febrero de 2007, la actora, asistida por su abogado, y
el abogado del demandado seor G., presentaron un escrito que da
cuenta del desistimiento de la demandante de su demanda de impugnacin y reclamacin de paternidad, en el que declara ser hija
de don A. R. F.
361
362
363
S. Valoracin
de la prueba biolgica de
ADN,
en los
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366
369
CAPTULO III
CRITERIOS JURISPRUDENCIALES RECIENTES,
EN MATERIA DE CUIDADO PERSONAL DE
LOS MENORES139
139
371
En este captulo140 revisaremos sentencias emanadas de la Corte Suprema y de las Cortes de Apelaciones141, que versan acerca de las siguientes
cuestiones, concernientes al cuidado personal de los menores142:
A. Circunstancias que justifican privar a la madre del cuidado
personal de los hijos y confiarlo al padre, cuando los padres vivan
separados (sentencias I, II, III, IV, V, VI, VII y VIII).
B. Acerca de la inhabilidad parental, que justifique declarar a un
menor susceptible de ser adoptado (sentencia X).
C. Sobre la restitucin de una menor a su pas de origen, que demanda el padre, cuando la hija comn se encuentra bajo el cuidado
personal de la madre (sentencias X y XI).
140
141
142
372
D. Exigencias que debe cumplir una sentencia de segunda instancia que revoca la de primer grado, desechando la demanda de cuidado personal de una menor, deducida por su padre (sentencia XII).
E. La medida de proteccin a un menor en virtud de la cual se
decret que el cuidado personal lo tuviere el padre y no la madre,
es por esencia transitoria (sentencia XIII).
F. Circunstancias que justifican atribuir el cuidado personal de los
menores a su abuela o abuelo y no a su madre o a su padre (sentencias
XIV y XV).
Para revisar formularios o esquemas de demandas vinculadas con
el cuidado personal de los menores, as como los fundamentos de
las mismas, sugerimos las obras Tratado de Derecho de Familia y
Prctica Forense de Familia, de Carlos Garrido Chacana.143
A. Circunstancias
Antiguo artculo 225 del Cdigo Civil: Si los padres viven separados, a la
144
373
Cuestin medular: qu circunstancias justifican que el Juez pueda alterar la regla general contenida en el artculo 225 del Cdigo
Civil, y otorgar el cuidado personal de los menores al padre?
Conclusin de la Corte: slo circunstancias que digan relacin
con el inters superior de los menores, afectado por conductas de la
madre, justifican que el Juez altere el principio general del artculo
225, inciso 1, en virtud del cual si los padres viven separados, a la
madre toca el cuidado personal de los hijos. En los autos, no se observan conductas de la madre que as lo justifiquen.
1.- Por sentencia de fecha 15 de mayo de 2011, del Juzgado de
Familia de Colina, se acogi la demanda reconvencional de cuidado
personal que el padre de dos menores dedujo en contra de la madre.
2.- En contra de este fallo, la demandada dedujo recurso de apelacin, que la Corte acogi de conformidad a los siguientes argumentos:
Se refiere la sentencia de segundo grado, en primer lugar, a lo
dispuesto en el artculo 225, inciso 1, norma cuyo tener literal parece evidente y el intrprete no debe desatender, segn se
madre toca el cuidado personal de los hijos. / No obstante, mediante escritura
pblica, o acta extendida ante cualquier oficial del Registro Civil, subinscrita
al margen de la inscripcin de nacimiento del hijo dentro de los treinta das
siguientes a su otorgamiento, ambos padres, actuando de comn acuerdo,
podrn determinar que el cuidado personal de uno o ms hijos corresponda al
padre. Este acuerdo podr revocarse, cumpliendo las mismas solemnidades. /
En todo caso, cuando el inters del hijo lo haga indispensable, sea por maltrato,
descuido u otra causa calificada, el juez podr entregar su cuidado personal al
otro de los padres. Pero no podr confiar el cuidado personal al padre o madre
que no hubiese contribuido a la mantencin del hijo mientras estuvo bajo
el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo. / Mientras una subinscripcin
relativa al cuidado personal no sea cancelada por otra posterior, todo nuevo
acuerdo o resolucin ser inoponible a terceros.
374
146
375
376
confiarse el cuidado personal de todos los hijos de uno y otro sexo al padre.
Por su parte, estableca el artculo 224: Toca al padre, durante el divorcio, el
cuidado personal de los hijos varones, desde que han cumplido cinco aos; salvo
que por la depravacin del padre, o por otras causas de inhabilidad, prefiera el
juez confiarlo a la madre. A su vez, en relacin a los hijos naturales, dispona el
artculo 277: Es obligado a cuidar personalmente de los hijos naturales el padre
o madre que los haya reconocido, en los mismos trminos que lo sera el padre
o madre legtimos, segn el artculo 222. En lo relativo a la patria potestad,
dispona el artculo 240: La patria potestad es el conjunto de derechos que
la ley da al padre legtimo sobre sus hijos no emancipados. Estos derechos no
pertenecen a la madre. / Los hijos de cualquier edad, no emancipados, se llaman
hijos de familia, y el padre con relacin a ellos, padre de familia. Las siguientes
observaciones podran formularse: a. En condiciones normales, los hijos
legtimos se encuentran sometidos al cuidado personal de ambos progenitores.
b. En caso de divorcio, la ley atribuye a la madre el cuidado de las hijas, de
toda edad, segn el Cdigo, pero en verdad, hasta que alcanzaren la mayora
de edad (en el Cdigo Civil originario, ello ocurra cuando cumplan 25 aos;
a partir del ao 1943, cuando cumplan 21 aos, segn la reforma hecha por la
Ley nmero 7.612 del 21 de octubre de 1943; y a partir del ao 1993, cuando
cumplan 18 aos, conforme a la reforma introducida al Cdigo Civil por la Ley
nmero 19.221 del 1 de julio de 1993). En cambio, tratndose de los varones,
la tuicin de la madre cesaba cuando ellos cumplan cinco aos, momento a
partir del cual pasaban al cuidado personal del padre, hasta que alcanzaren
su mayora de edad. c. Se presume de derecho que si el adulterio de la madre
caus el divorcio, sta era depravada, privndosela por ende de la tuicin de sus
hijos menores, de cualquier sexo y edad. d. El adulterio del padre no supona,
necesariamente, depravacin, y por tanto, poda tener la tuicin de sus hijos
a partir de los cinco aos o incluso de sus hijos e hijas menores de cualquier
edad, de haber operado la presuncin de derecho que afectaba a la madre.
Recurdese, adems, que la mujer casada cometa adulterio cuando yaca con
varn que no fuere su marido (antiguo artculo 375 del Cdigo Penal), mientras
que el adulterio del varn casado slo se produca cuando tuviere manceba
dentro de la casa conyugal o fuera de ella con escndalo(antiguo artculo 381
del Cdigo Penal). e. El cuidado personal y la patria potestad no se vinculaban
cuando a la madre corresponda el primero. En tal circunstancia, el padre era
titular de la segunda, excluyndose la posibilidad de que pudiera asumirla la
madre. Estas normas subsistirn, sin reformas, por 78 aos.
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378
por otra causa, podra confiarse el cuidado personal de todos los hijos de uno
u otro sexo al padre. c. La circunstancia de haber sido el adulterio de la madre
lo que haba dado causa al divorcio, deba ser considerada por el juez como
un antecedente de importancia al resolver sobre su inhabilidad (ntese que la
ley ya no establece una presuncin de derecho acerca de la depravacin de la
madre, cuando el divorcio se hubiere decretado por su adulterio). d. Tocaba
al padre, durante el divorcio, el cuidado personal de los hijos varones, desde
que haban cumplido 14 aos, salvo que por la depravacin del padre, o por
otras causas de inhabilidad, hubiera preferido el juez confiarlo a la madre.
e. La circunstancia de haber sido el adulterio del padre lo que haba dado
causa al divorcio, deba ser considerada por el juez como un antecedente de
importancia al resolver sobre su inhabilidad (antes, el adulterio del padre no
era un factor que influyera negativamente en la atribucin del cuidado personal
de los menores). Las normas del Cdigo Civil, deban complementarse con lo
dispuesto en el artculo 46 de la Ley nmero 16.618, Ley de Menores, que
ordenaba aplicar lo dispuesto en los artculos 223 a 227 del Cdigo Civil, a los
casos de nulidad de matrimonio, separacin de hecho o convencional de los
cnyuges y en aquellos en que los padres no estaban unidos en matrimonio.
Agregaba el artculo 46 que si el cnyuge a quien le corresponda la tuicin
del menor hubiese contrado nuevo matrimonio, el juez podra alterar lo
dispuesto en los artculos 223 a 227 del Cdigo Civil, atendida la conveniencia
del menor, y conceder la tuicin al otro de los padres, siempre que ste no se
encontrare en la misma situacin ni le afectare alguna inhabilidad. Sealaba
asimismo la citada norma de la Ley de Menores que perdera el derecho a la
tuicin el padre que no hubiese contribuido a la mantencin del hijo mientras
ste estaba bajo el cuidado de la madre. La solucin consagrada en la Ley
nmero 10.271, regir en Chile por 37 aos.
4. Reforma de la Ley nmero 18.802, de 9 de junio de 1989: reemplaz el
artculo 223 del Cdigo Civil, conforme a lo que seguidamente se expresa: a.
Se dispuso que a la madre divorciada, haya dado o no motivo al divorcio, toca
el cuidar personalmente de los hijos menores; se derog entonces el artculo
224, que confiaba este cuidado personal al padre, cuando los hijos varones
cumplieren 14 aos; b. Sin embargo, no se le confiara el cuidado personal
de los hijos a la madre, cuando por su depravacin fuere de temer que se
pervirtieren, o si se hallaba inhabilitada por otra causa. En estos casos, se
confiara el cuidado personal de los hijos al padre; c. La circunstancia de haber
sido el adulterio de la madre lo que haba dado causa al divorcio, deba ser
379
380
todos del Cdigo Civil. Veamos en que consisti, en lo sustancial, esta reforma,
sin duda la ms importante que ha experimentado el Cdigo Civil durante su
existencia: a. Se reemplaz el tenor del artculo 222, que dispona que tocaba
de consuno a los padres, o al padre o madre sobreviviente, el cuidado personal
de la crianza y educacin de sus hijos legtimos, por el nuevo texto, que dispone
el deber de respeto y de obediencia de los hijos respecto de sus padres (que
antes se consagraban en el artculo 219, con el agregado, ahora derogado,
de que los hijos estaban especialmente sometidos a su padre), y, sin duda un
hecho muy relevante, instala en nuestra legislacin civil, de manera explcita,
el principio del inters superior del hijo, entendido como La preocupacin
fundamental de los padres. Subrayamos la relevancia de este principio, pues
en l se basan, precisamente, quienes cuestionan la atribucin natural que
la ley hace a la madre, como titular del cuidado personal de los menores. b.
Se reemplaz el texto del artculo 223, que, segn vimos, era el medular en lo
relativo al cuidado personal de los menores en situaciones de crisis matrimonial,
desplazando la regulacin de esta materia al artculo 224. El nuevo artculo
223 alude a una cuestin ajena al tema que estamos comentado, como
es el concerniente al deber de socorro que pesa sobre los hijos respecto de
sus padres y dems ascendientes (el nuevo artculo 223, refundi en un solo
precepto, lo que disponan los artculos 220 y 221). c. Se repuso el artculo 224
(que, recordemos, en su antiguo texto confera al padre el cuidado personal
de los hijos varones que hubieren cumplido 14 aos), con un nuevo texto,
que en su inciso 1, corresponde ms o menos al del antiguo artculo 222, y
que se refiere al cuidado personal de los hijos menores, en una situacin de
normalidad, disponiendo que toca de consuno a los padres, o al padre o madre
sobreviviente, el cuidado personal de la crianza y educacin de sus hijos. Dicho
sea de paso, siempre me ha parecido defectuoso el tenor de esta norma, tanto
en el antiguo artculo 222 como en el texto que la Ley nmero 19.585 fij para
el inciso 1 del artculo 224. A mi juicio, debiera decir: Toca de consuno a
los padres, o al padre o madre sobreviviente el cuidado personal de sus hijos.
Dicho cuidado personal comprende la crianza, correccin y educacin de los
hijos. De esta manera, se precisara cules son los tres aspectos fundamentales
o deberes que se contienen en el cuidado personal de los hijos. Veremos que
la reforma hecha al Cdigo por la Ley nmero 20.680 corrigi la frmula legal
criticada, coincidiendo parcialmente con nuestra propuesta. La Ley nmero
19.585 agreg, adems, un inciso 2 al artculo 224, referido a los hijos de
filiacin no matrimonial y a los hijos de filiacin indeterminada, cuestin a
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relacin directa y regular a favor del menor con su madre. La sentencia dispuso tambin la incorporacin de la demandada al Cesfam149
de Rengo para el fortalecimiento de las habilidades parentales, por
el trmino de seis meses, junto con el nio.
2.- Se alz la demandada, y una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Rancagua, por fallo de 14 de julio de 2011, revoc el de
primer grado, y en su lugar, rechaz la demanda de cuidado personal, sin perjuicio de mantener el rgimen comunicacional vigente
con el padre.
3.- En contra de esta ltima decisin, el demandante dedujo recurso de casacin en el fondo, denunciando en l las siguientes
infracciones:
Denuncia el recurrente la infraccin de los artculos 225 del
Cdigo Civil, 16 y 32 de la Ley nmero 19.968 y 3 y 12 de la
Convencin sobre los Derechos del Nio. En primer lugar, argumenta que los sentenciadores, al decidir como lo hicieron,
se han alejado del principio del inters superior del nio, que
debe prevale. En segundo trmino, aade que se ha hecho una
errnea interpretacin del inciso 3 del artculo 225 del Cdigo
Civil, pues la expresin u otra causa calificada, debe necesariamente atender al principio del inters superior del menor.
En un tercer captulo, aduce que se ha prescindido del derecho
del nio a ser odo, al desestimarse su relato.
En otro apartado, afirma tambin que los jueces del fondo, al
restar valor a los informes y opinin de la Consejera Tcnica, han
pasado por alto las mximas de la experiencia y los conocimientos cientficamente afianzados.
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Que sobre la base de los hechos reseados en los acpites anteriores, y teniendo en consideracin que la regla legal prevista en
el inciso primero del artculo 225 del Cdigo Civil otorga preferencia a la madre para el cuidado personal de los hijos y que, en
el presente caso, no existe motivo fundado en el inters superior
del menor, por maltrato, descuido u otra causa calificada que
permita alterarla, los jueces del fondo resolvieron como se ha
dicho, manteniendo el cuidado del nio a cargo de la demandada. Respecto de los informes periciales evacuados en la causa,
estiman que de nada sirve tasar las habilidades parentales de la
madre si no existen antecedentes objetivos y graves que demuestren que la demandada padezca inestabilidad o desviacin de
personalidad que la torne peligrosa para su hijo, como tampoco
prueba clara y objetiva de que lo maltrate. Y si bien entienden
que es necesario someterla a un programa de fortalecimiento de
habilidades parentales, en ningn caso, sus deficiencias revisten
la gravedad suficiente ni constituyen causal que justifique modificar su titularidad legal en el ejercicio del cuidado personal de
su hijo.
Aade el fallo de segunda instancia que ambas partes han sido
causantes de los problemas de su hijo comn, al no haber resuelto hasta la fecha, en forma definitiva, el conflicto conyugal,
lo que se evidencia con la excesiva judicializacin de dicho
conflicto.
5.- En definitiva, la Corte Suprema rechaz el recurso de casacin
en el fondo, agregando para ello:
Cabe sealar que los jueces del grado, en uso de las facultades que son de su exclusiva competencia la ponderacin de
la prueba y el establecimiento de los hechos- asentaron los elementos indicados y decidieron como se indic.
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Que de conformidad a lo que prev el artculo 32 de la Ley nmero 19.968, los jueces de familia deben apreciar la prueba de
acuerdo a las reglas de la sana crtica, y como reiteradamente lo
ha resuelto este Tribunal, tal sistema conduce al descubrimiento
de la verdad, por los medios que aconsejan la razn y el criterio racional puesto en juicio. Las reglas que la constituyen no
estn estudiadas en la ley, y por ende se trata de un proceso
intelectual, interno y subjetivo del que analiza. Es una materia
esencialmente de apreciacin y, por lo mismo, de hecho, cuya
estimacin corresponde exclusiva y privativamente a los jueces
del fondo.
Que las alegaciones en que sustenta el recurrente la vulneracin
de las normas reguladoras de la prueba no son constitutivas de
verdaderos atentados contra la sana crtica, sino que ms bien
corresponden a reproches al proceso de valoracin que han realizado los jueces del fondo en el anlisis de la prueba y sobre la
base del cual arribaron a la decisin que no se comparte. Con
tal planteamiento, pretende el recurrente asentar otros hechos
distintos de aquellos que la sentencia contiene, olvidando que la
ponderacin y la apreciacin de los distintos elementos allegados al proceso corresponde a una facultad privativa de los jueces
del grado, y que se agota en la respectiva instancia del pleito,
salvo que en su establecimiento los sentenciadores hayan incurrido en infraccin a las normas de la sana crtica, cuestin que
no ha acontecido en la especie. En efecto, el recurrente no ha
denunciado de modo eficaz atentados contra las mximas de la
experiencia, de los conocimientos cientficamente afianzados o
las normas de la lgica, que de ser efectivos, faculten a la Corte
Suprema para revisar lo resuelto.
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Que de otro lado, cabe sealar que siendo el inters superior del
nio un principio fundamental en nuestro ordenamiento jurdico, no se advierte de los antecedentes que los sentenciadores
lo hayan desatendido. Por el contrario, se ha respetado la regla
de orden natural prevista en el artculo 225 del Cdigo Civil, en
cuanto a que la crianza de los hijos, en caso de separacin de los
padres, corresponde a la madre, siendo de advertir adems que
no se estableci en el fallo impugnado inhabilidad o causa calificada que impida a sta ejercer su rol, ni tampoco una situacin
de vulneracin, peligro o amenaza para el menor, que justificara
entregar su cuidado a su padre, con quien seguir teniendo una
relacin directa y regular en los trminos dispuestos en el rgimen comunicacional vigente.
Que, por lo antes razonado, y por no haberse configurado los
errores de derecho denunciados, el recurso en examen deber
ser desestimado.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada
por los Ministros Sr. Patricio Valds A., Sras. Gabriela Prez P. y Rosa
Egnem S., Sr. Juan Fuentes B. y el Abogado Integrante Sr. Patricio Figueroa S. Redaccin a cargo de la Ministra Sra. Rosa Egnem Saldas.
III.- Sentencia de la Corte Suprema de fecha 14 de octubre de
2011, autos Rol nmero 4.637-2011.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculos 225 y 226 del Cdigo Civil; artculo 42 de la Ley
nmero 16.618, Ley de Menores; y artculo 32 de la ley nmero
19.968.
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3.- En contra de esta ltima decisin, dedujo el demandante recurso de casacin en el fondo, que fundament en los siguientes
argumentos:
Denuncia la infraccin de los artculos 225 y 226 del Cdigo
Civil, en relacin con los artculos 1 y 19 nmero 2 de la Constitucin Poltica de la Repblica, argumentando que la primera de
las normas citadas, que establece que en caso de vivir los padres
separados, corresponde a la madre el cuidado de los hijos, debe
interpretarse tratando de evitar toda discriminacin arbitraria entre hombres y mujeres y por sobre todo tomando en especial
consideracin el inters superior del nio, desde que la misma
establece la posibilidad de que el juez entregue el cuidado al padre, en razn de dicho principio, existiendo descuido (por parte
de la madre) u otra causa calificada que as lo autorice.
Seala el recurrente que la decisin de los sentenciadores implica el desarraigo de la menor de autos de tan solo once aos
de edad, la cual va a perder la estabilidad emocional alcanzada
durante el tiempo que ha estado bajo el cuidado de su padre,
junto a sus hermanos y su entorno social. Adems agrega el
recurrente-, la madre no tiene ni ha demostrado poseer las condiciones materiales para proporcionarle un lugar donde vivir, ni
las afectivas o espirituales necesarias para garantizar su adecuado desarrollo, las que s estaban aseguradas bajo su custodia con
el padre; habiendo tenido la progenitora una conducta errtica
marcada por su problemtica de alcoholismo, que hacen temer
por la seguridad de la nia.
Indica que el fallo impugnado desconoce todas estas circunstancias, olvidando que en estas materias, la determinacin debe
estar guiada fundamentalmente por el bienestar de la menor,
esto es, la decisin debe buscarse atendiendo al principio del
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carrera diplomtica de su cnyuge, a quien acompaa a diferentes destinaciones como Turqua, Austria y Per.
iii) El matrimonio tuvo tres hijos.
iv) La demandada, encontrndose en Austria y Per, incurri en
abuso de consumo de alcohol, situacin que fue abordada y solucionada personalmente por sta, quien ingres a Alcohlicos
Annimos, en forma ambulatoria, cuando lleg a Chile, logrando
plena abstinencia hasta la fecha.
v) No corresponde discutir la situacin respecto de la hija mayor,
pues ella ya tiene 19 aos y respecto del hijo varn, las partes
arribaron a una conciliacin, el 25 de junio de 2010, acordando
que su cuidado corresponde al padre, atendidas sus circunstancias personales.
vi) La controversia queda circunscrita a la situacin de la hija menor de las partes, F. B. J., de actuales once aos de edad, respecto
de la cual el padre ha reclamado su cuidado personal.
vii) La madre ha contribuido a la mantencin de los hijos, desde
que la misma suscribi pagars y cancel las deudas educacionales de stos, correspondientes al ao 2008 y asegur el pago
de las colegiaturas del ao 2009, una semana antes de su salida
forzosa del hogar comn.
viii) El cuidado personal de los hijos fue entregado provisoriamente al padre, en mayo de 2009.
ix) La madre no se encuentra inhabilitada para ejercer el cuidado
de su hija.
Agrega la sentencia de la Corte Suprema que, sobre la base de
los hechos antes reseados, y teniendo en consideracin que la
regla legal prevista en el inciso 1 del artculo 225 del Cdigo
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salvo que sea relevada judicialmente por las razones que la propia ley contempla.
Que la competencia del rgano judicial se ejercer teniendo
presente lo previsto en los artculos 225, inciso 3, 226 y 228 del
Cdigo Civil, normas que atienden a las siguientes situaciones:
i) cuando el padre o la madre en quien se ha radicado la tuicin
de los hijos, los maltraten;
ii) cuando el padre o la madre en su caso, descuide a los hijos;
iii) cuando respecto de cualquiera de ellos concurra otra causa
calificada;
iv) cuando el padre o la madre hubiere abandonado al hijo;
v) cuando a cualquiera de ellos afecta una inhabilidad fsica o
moral.
Las reglas anteriores deben relacionarse con el artculo 42 de
la Ley nmero 16.618 (Ley de Menores), por cuanto, si bien el
legislador seal causales especficas en virtud de las cuales es
dable modificar la norma legal, tambin lo es la consagracin de
una causal genrica, como es la de otra causa calificada; esto
es, qued entregado al juez de la causa, en cada caso concreto,
determinar si es conveniente para el nio privar a la madre de su
cuidado, para entregarlo al otro progenitor o a un tercero, siempre sobre la base de motivos graves, calificados y debidamente
acreditados.
Que el artculo 42 de la Ley de Menores previene: Para los efectos
del artculo 226 del Cdigo Civil, se entender que uno o ambos
padres se encuentran en el caso de inhabilidad fsica o moral: 1.
Cuando estuvieren incapacitados mentalmente; 2. Cuando padecieren de alcoholismo crnico; 3. Cuando no velaren por la crian-
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Cuestin medular: la misma planteada en la sentencia precedente, esto es, qu circunstancias pueden justificar que se modifique
la regla general que atribuye a la madre el cuidado personal de la
menor, y que ste sea asumido por el padre?
Conclusin de la Corte: si bien ninguno de los padres presenta
inhabilidad y ambos son idneos para ejercer el cuidado personal
de sus hijos, la conducta de la madre ha sido negligente en el ejercicio de dicha tuicin, sin dedicar el tiempo necesario para atender
las necesidades de sus hijos y delegando en terceras personas su
ejercicio. El padre, que ha detentado el cuidado personal de los menores, por el contrario, ha demostrado disponer del tiempo y de la
dedicacin necesaria para responder de modo eficiente a los requerimientos acadmicos y conductuales de los nios, imponindose a
stos sin castigos y sin delegar el rol de crianza en terceras personas.
Asimismo, los menores desean retornar con su padre.
1.- Por sentencia de fecha 24 de enero de 2011, del Juzgado de
Familia de Iquique, se acogi la demanda deducida por don W. S.
S. en contra de doa P. A. M., y en consecuencia, se dispone que el
cuidado personal de los menores R. e I., ser ejercido por su padre.
2.- Se alz la parte demandada, y la Corte de Apelaciones de
Iquique, por sentencia de fecha 10 de marzo de 2011, confirm la
sentencia apelada.
3.- En contra de esta ltima decisin, la demandada dedujo recurso de casacin en el fondo, que fundament de la siguiente manera:
Sostiene en su recurso que los sentenciadores han valorado arbitrariamente la prueba rendida, en forma contraria al razonamiento lgico y a las mximas de la experiencia, lo que los ha
llevado errneamente a acoger la demanda. Objeta que se diga
en el fallo impugnado que el padre cuenta con habilidades pa-
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rentales para hacerse cargo del cuidado de sus hijos, en circunstancias que no consta en autos habrsele practicado a ste una
evaluacin, dndosele valor en este sentido a un informe que la
contraria acompa como prueba instrumental, que fue observado por adolecer de mltiples contradicciones, las que detalla.
Seala que aplicando correctamente los principios de la lgica
y las mximas de la experiencia, debi concluirse que el estado
actual de los menores se debe primero a la separacin de sus
padres y en segundo trmino al cambio de ciudad (el padre vive
en Arica y la madre en Iquique). Adems, agrega que al padre le
pareci bien que los nios vivieran con su madre.
Indica que el (informe de) peritaje realizado en Iquique en noviembre de 2010 expresa que la madre cumple adecuadamente
su rol y que por su trabajo no puede dedicar ms tiempo a sus
hijos, lo que no fue considerado por los jueces del fondo, como
tampoco la prueba testimonial que da cuenta de su preocupacin constante respecto de sus hijos. Manifiesta que en razn
de lo expuesto (su falta de tiempo por motivos laborales) acord
con el actor que los nios se quedaran con ste hasta el trmino
del ao escolar, situacin de la que se ha aprovechado el demandante para reclamar la custodia de los nios.
Denuncia tambin infraccin al artculo 225 del Cdigo Civil,
sosteniendo que los jueces del fondo han incurrido en error de
derecho al resolver como lo han hecho, confirindole al padre el
cuidado personal de menor, ya que no se ha establecido inhabilidad fsica o moral de la madre para detentarlo, ni existe causa o
motivo calificado que permita alterar la regla o principio general
que el inciso 1 de la citada disposicin establece.
4.- En la sentencia de la Corte Suprema, se deja constancia que se
establecieron en la causa los siguientes hechos:
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Que de conformidad a lo que prev el artculo 32 de la Ley nmero 19.968, los jueces de familia deben apreciar la prueba de
acuerdo a las reglas de la sana crtica, y como reiteradamente lo
ha resuelto este tribunal, tal sistema conduce al descubrimiento
de la verdad por los medios que aconseja la razn y el criterio racional puesto en juicio. Las reglas que la constituyen no
estn estudiadas en la ley, y por ende, se trata de un proceso
intelectual, interno y subjetivo del que analiza. Es una materia
esencialmente de apreciacin y, por lo mismo, de hecho, cuya
estimacin corresponde exclusiva y privativamente a los jueces
del fondo.
Que el recurso de casacin deducido se construye sobre la base
de presupuestos fcticos distintos y contrarios a los establecidos
en la sentencia impugnada y que dicen relacin con la existencia
de una causa calificada que permita alterar la regla general en
materia de cuidado personal. Con tal planteamiento, se pretende
asentar otros hechos distintos de aquellos que la sentencia contiene, olvidando que la ponderacin de los distintos elementos
allegados al proceso corresponde a una facultad privativa de los
jueces del grado, y que se agota en las respectivas instancias del
pleito, salvo que en su establecimiento los sentenciadores hayan
incurrido en infraccin a las normas de la sana crtica, cuestin
que no ha sido denunciada, lo que deja a este tribunal impedido
de revisar lo que se ha resuelto, en los trminos pretendidos por
el recurrente.
Que por lo razonado, debe desestimarse el recurso.
5.- El fallo de la Corte Suprema fue pronunciado con el voto en
contra de la Ministro Sra. Egnem, quien fue de parecer de acoger
el recurso de que se trata, por haberse infraccionado en el fallo impugnado el artculo 225 del Cdigo Civil. En efecto, habiendo man409
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contemplado para dichos efectos, de un modo particular, cuando se comprueba maltrato, descuido u otro motivo calificado.
Que si bien el legislador otorgar una prerrogativa a los jueces de
la instancia para determinar si se configura o no alguna de las hiptesis que permiten alterar la titularidad del cuidado personal,
lo cierto es que tambin les ha impuesto el deber de calificar la
entidad y gravedad de los hechos y situaciones del caso concreto
a fin de verificar la necesidad de una medida de la entidad de
que se trata. As, y en razn de este imperativo legal, los sentenciadores determinaron que proceda atribuir dicho derechodeber al padre.
Que, por consiguiente, tratndose de una facultad entregada a
los jueces, con los mrgenes y circunstancias expresadas, (es
decir) de una potestad discrecional encaminada a modificar la
titularidad del cuidado personal del menor, la revisin de su
ejercicio por esta Corte queda limitada a determinar si se han
respetado o no las obligaciones que el ejercicio racional de la
misma impone a los sentenciadores del mrito, y es del caso que
en la especie, no puede desconocerse que la decisin a que se
ha arribado se encuentra fundada y justificada en el anlisis y
valoracin de los elementos de prueba allegados al juicio y en
concordancia con las conclusiones que soberanamente de aqullas se han extrado, en aplicacin del principio rector del inters
superior del menor.
Que en relacin al rgimen de relacin directa y regular establecido en el fallo atacado, cabe sealar que si bien el regulado a
favor de la madre y el hijo, es en trminos mnimos, esta decisin
se funda en la situacin actual del menor y se hace slo temporalmente, pues se deja expresa constancia que conforme a la recomendacin del organismo encargado de desarrollar el trabajo
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quien adeuda una suma considerable por concepto de alimentos, sealando la norma que no se puede confiar el cuidado personal al padre o madre que no hubiese contribuido a la mantencin del hijo mientras estuvo bajo el cuidado del otro padre,
pudiendo hacerlo (se refiere la recurrente a la norma del inciso
3 del antiguo artculo 225 y que ahora se recoge, en trminos
similares aunque menos categricos, en la letra c) del artculo
225-2).
Seala asimismo que la juez a quo no se ha hecho cargo de toda
la prueba rendida, tomando en consideracin slo lo informado
por los peritos.
Sostiene tambin que no se dio cumplimiento (ni podr darse
cumplimiento) al artculo 79 de la Ley nmero 19.968, esto es
que el Juez reciba personalmente al nio que se encuentre bajo
una medida de proteccin, pues ste residir fuera de Chile.
Finalmente, se hace presente que (a raz de la resolucin) se privar al menor de su entorno familiar materno, compuesto por su
madre, su hermana y su abuela.
3.- Manifiesta la sentencia de segundo grado:
Que la sentenciadora de primer grado determin conferir como
medida de proteccin del menor, el cuidado personal del nio a
su padre.
Que el nio debe continuar con la terapia iniciada para prepararlo para el cambio, por un profesional idneo en Noruega.
Que tanto el padre como la madre debern recibir orientacin
familiar.
Que se determin oficiar al seor Director de Servicios Consulares del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile, a fin de
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para el cuidado personal de su hijo, por lo que unido a su trastorno bipolar, llegan a recomendar que el nio sea apartado de su
madre. Todo lo cual es ponderado por la Juez a quo para resolver
en la forma que lo hace.
Que se debe tener presente, como lo seala tambin la sentencia apelada, que separadamente se tramit causa de Medida de
Proteccin a favor de la adolescente L. S., hermana de madre del
menor P. S.
Asimismo, que en la presente causa se tuvo como parte al Servicio Nacional de Menores.
Por estas consideraciones y atendido lo dispuesto en los artculos
67 a 80 de la Ley nmero 19.968, se confirma la sentencia apelada.
5.- Acordada con el voto en contra de la Ministro Sra. Repetto,
quien estuvo por revocar el fallo y no otorgar el cuidado personal
del menor a su padre, tomando en consideracin:
Que habindose acreditado que el padre se encuentra residiendo en Noruega, resultar lesivo para el inters superior del nio
la prcticamente nula posibilidad de poder relacionarse con su
hermana, abuela y madre, con quienes ha vivido durante toda
su vida, lo que naturalmente le ocasionar un menoscabo que
puede resultar imposible de superar, mxime si no existen antecedentes contundentes y ciertos que permitan afirmar que el
nio no desea estar con su madre o con su familia, con la cual
romper su lazo afectivo, esencial para su desarrollo.
Que, por otro lado, el padre ha intervenido nicamente a raz del
proceso judicial, sin que exista otro antecedente de alguna vinculacin afectiva slida con su hijo, pareciendo a esta disidente
ms prudente tomar como medida de proteccin del menor la
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1.- Por sentencia de fecha 30 de marzo de 2010, del Primer Juzgado de Familia de Pudahuel, se rechaz la demanda de divorcio
por culpa impetrada por don M. L. G. en contra de doa P. O. V. y
la de cuidado personal deducida por el primero en contra de la segunda, respecto de la hija de ambos, F. L. O., de seis aos de edad,
regulndose un rgimen de relacin directa y regular entre el padre
y la nia, en la forma que all se indica.
2.- Se alz el demandante y una de las Salas de la Corte de Apelaciones de Santiago, por fallo de fecha 9 de noviembre de 2011,
revoc la sentencia apelada, acogiendo las acciones de divorcio y
cuidado personal y, en consecuencia, declar terminado el matrimonio celebrado entre el actor y la demandada y le confiri al primero el cuidado personal de la menor, regulndose un rgimen de
relacin directa y regular entre la madre y la nia.
3.- En contra de esta ltima decisin la defensa de la demandada
dedujo recurso de casacin en el fondo, que se fundament en los
siguientes trminos:
Denuncia el recurrente la infraccin de los artculos 225 del
Cdigo Civil y 16 de la Ley nmero 19.968, argumentndose
que los sentenciadores han desconocido la titularidad que la ley
asigna a la madre, en caso de separacin de los padres, respecto
del cuidado personal de los hijos. Se sostiene en el recurso que
la madre no se encuentra inhabilitada para detentar dicho cuidado personal y que no existe causa para privarla de tal derecho.
Seala el recurso que no constituye motivo suficiente para resolver como lo han hecho los jueces del grado, el que la menor
haya permanecido en los ltimos aos con su padre, pues la
madre ejerci las acciones pertinentes para reclamar su cuidado
y la demora en su tramitacin no puede constituirse en un elemento en su contra.
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Alega que la decisin de los jueces del grado, en cuanto presume que de alterarse la situacin en materia de cuidado de la menor, ello podra afectar su desarrollo, no encuentra fundamento
alguno en los antecedentes del proceso. Agrega que la decisin
que impugna tampoco considera el inters superior de la nia,
puesto que la priva del amparo materno y del hogar que su madre ha formado, con la presencia de un hermano de la menor.
Asimismo, dicha decisin tampoco de cuenta de la situacin y
condiciones de la familia paterna del actor.
4.- Manifiesta la sentencia de la Corte Suprema que son hechos
establecidos en la sentencia impugnada los siguientes:
La menor F. L. O., nacida el 6 de marzo de 2004, es hija del demandante y de la demandada, quienes se encuentran separados.
El padre detenta el cuidado personal provisorio de la hija comn,
por resolucin de fecha 4 de diciembre de 2007 del Juzgado de
Familia de Pudahuel.
A ninguno de los padres le afecta inhabilidad alguna para ejercer
el cuidado personal de su hija.
La abuela materna permanece a cargo de la nia durante parte
del da, ayudando al padre en el desempeo de su funcin.
La madre ha formado una familia con su nueva pareja, padre de
su segundo hijo.
5.- Consigna a continuacin la sentencia de la Corte Suprema:
Que sobre la base de los presupuestos referidos en el numeral
precedente, los jueces del fondo resolvieron acoger la accin de
cuidado personal intentada por el padre de la menor, considerando especialmente que ste ha detentado ininterrumpidamente dicho derecho-deber desde hace tres aos, sin que exista en
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Que de lo que se viene de decir, fuerza es concluir que los sentenciadores no han incurrido en los yerros denunciados, por lo
que el recurso intentado ser desestimado.
6.- Acordada contra el voto de los Ministros Sr. Valds y Sra. Maggi, quienes estuvieron por acoger el recurso de casacin deducido,
sobre la base de las siguientes consideraciones:
Que la decisin de los sentenciadores importa una infraccin
del artculo 225 del Cdigo Civil, puesto que sin mediar causa
calificada y sin que el inters superior de la menor as lo aconsejara, privaron a la demandante del cuidado de su hija, desconociendo de este modo la regla de orden natural prevista en la
norma citada, en cuanto a que la crianza de los hijos, en caso de
separacin de los padres, corresponde a la madre.
Que, en efecto, no se acredit en autos inhabilidad o causa calificada que impida ejercer a la demandante su rol, ni se estableci una situacin de vulneracin, peligro o amenaza para la
menor, que justificara trasladar su cuidado al padre, no siendo
motivo para ello, el que pueda alterarse su estabilidad emocional
o bienestar fsico, al no sustentarse esta percepcin de los jueces
del grado en antecedentes que as lo demuestren. Por el contrario, los elementos allegados al juicio han permitido concluir que
ninguno de los padres se encuentra inhabilitado para detentar el
cuidado y que ambos constituyen figuras significativas para la
menor, contando la madre incluso con mejores condiciones para
hacerse cargo de la menor, al haber constituido una familia y no
desempear actividad fuera del hogar, de modo que no es posible concluir que su desarrollo puede verse afectado de radicarse
la titularidad de este derecho-deber en quien la ley establece.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada
por los Ministros Sr. Patricio Valds A., Sras. Gabriela Prez P., Rosa
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B. Acerca
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Conclusin del voto de minora de la Corte: no corresponde declarar la susceptibilidad de adopcin de un menor, cuando la abuela
materna tiene inters en asumir el cuidado personal de su nieto y no
exista evidencia que en tal caso, el menor quedar en situacin vulnerable o de riesgo (la sentencia no seala las consideraciones en las
que se apoyaron los restantes integrantes de la Sala, para confirmar
el fallo de primera instancia que declar susceptibilidad de adopcin, aludindose slo a informes que concluyen que los padres y
la abuela materna tendran deterioradas sus habilidades parentales).
1.- Ante el Juzgado de Familia de Valdivia, se present solicitud
del Servicio Regional de Menores, en orden a declarar susceptibilidad de adopcin del menor Y. V. A. A esta solicitud, se opusieron la
madre del nio, la abuela materna -quien adems tiene a su cargo
el cuidado de su nieta mayor, hermana de Y. V. A.-, como asimismo
el padre del menor.
2.- Por sentencia de fecha 22 de agosto de 2012, del Juzgado de
Familia de Valdivia, se hizo lugar a la solicitud del Servicio Regional
de Menores.
3.- En contra de esta sentencia, se alz la abuela materna, solicitando su revocacin. En el recurso, hace presente que la sentencia
recurrida se funda en informes que, al ser estudiados, demuestran
(poseer) defectos en relacin a los hechos y antecedentes consideobedezca a una causa justificada, que la haga ms conveniente para los
intereses del menor que el ejercicio del cuidado personal por el padre, la
madre o las personas a quienes se haya confiado su cuidado. / Se presume,
asimismo, cuando dichas personas no visiten al menor, por lo menos una vez,
durante cada uno de los plazos sealados en el nmero precedente, salvo causa
justificada. Para este efecto, las visitas quedarn registradas en la institucin. /
Los que reciban a un menor en tales circunstancias, debern informar al juez
competente del hecho de la entrega y de lo expresado por el o los padres, o
por las personas que lo tenan a su cuidado.
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legales
en el
decisorias
o
consideradas
fallo: artculos 3 158, 5 159,
prin12 160,
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cualquier decisin relativa a cambiar su residencia habitual deba ser una decisin conjunta de sus progenitores.
En segundo trmino, se denuncia la conculcacin del artculo 12
del Convenio de La Haya, al fundarse la negativa de restitucin
de la menor en el supuesto arraigo de la nia en Chile, puesto
que un argumento de esta naturaleza hace impracticable la aplicacin del Convenio de La Haya y, por lo dems, con ello se
desconoce el dao a que ha sido expuesta la nia al ser sustrada
del medio de su entorno y familia biparental.
En tercer lugar, denuncia la vulneracin del artculo 13 letra b),
del Convenio de La Haya, en relacin al artculo 16, al concluir
los sentenciadores que el regreso de la menor a su pas de origen
le significa un escenario de riesgo, argumentando al respecto
que tal razonamiento excede los mrgenes previstos en la ley,
pues no se puede establecer una conclusin de esta entidad, sin
que existan antecedentes que lo avalen.
En ltimo trmino, se invoca tambin la infraccin de los artculos 3 y 11 de la Convencin sobre los Derechos del Nio por
hacer primar el fallo impugnado el principio del inters superior
del nio, por sobre el de restitucin, en circunstancias que no
existe ninguna contraposicin entre ellos. En efecto, ambos se
encuentran en cuerpos legales de la misma jerarqua y desde el
punto de vista sustantivo, existe armona entre ellos, desde que
la restitucin inmediata de un menor trasladado o retenido ilcitamente, obedece, en principio, a su inters superior.
4.- La Corte Suprema seala en su fallo que se han establecido
como hechos en la sentencia recurrida, los siguientes:
La nia C. B. S. naci el 16 de octubre de 2008, en Villa Regina,
Departamento General Roca, Repblica Argentina, y es hija de
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ordenndose el regreso de la menor S. M. M., de nacionalidad espaola, hija de las partes, a Espaa. Mediante la referida solicitud,
el Secretario Regional Ministerial de Justicia, en representacin del
Estado de Chile, y don F. M. D., solicitaron la aplicacin de la Convencin Sobre los Aspectos Civiles del Secuestro Internacional de
Menores, a fin de que se ordenase el regreso de la menor a su pas
de origen, Espaa. La accin se dirigi en contra de doa M. N. J., la
madre de la nia, y se funda en que la menor estara siendo retenida
en forma ilcita en Chile, dado que ella la traslad a este pas, donde
permanece desde el 10 de junio de 2010, sin el consentimiento del
padre, en circunstancias que la patria potestad de la menor corresponde en forma conjunta a ambos progenitores.
2.- Se alz la parte requerida, madre de la menor, y una de las
Salas de la Corte de Apelaciones de San Miguel, por sentencia de
fecha 26 de enero de 2011, confirm la de primer grado.
3.- En contra de esta ltima decisin, la requerida dedujo recurso
de casacin en el fondo, fundado en los argumentos que se expondrn y denunciando la vulneracin de las siguientes normas:
En primer trmino, denuncia la infraccin, por errada interpretacin, de los artculos 1, 3 y 5 de la Convencin Sobre Aspectos
Civiles del Secuestro Internacional de Nios, argumentando al
respecto que en el caso de autos no hubo traslado ni retencin
ilcita de la menor, pues de acuerdo a lo determinado por la justicia espaola, la madre tiene asignada la guarda y custodia de
sta en forma exclusiva, an cuando la patria potestad, en trminos generales, haya sido otorgada a ambos padres.166 Seala que
166
El artculo 154 del Cdigo Civil espaol dispone: Los hijos no emancipados
estn bajo la potestad del padre y de la madre. / La patria potestad se
ejercer siempre en beneficio de los hijos, de acuerdo con su personalidad, y
comprende los siguientes deberes y facultades: 1 Velar por ellos, tenerlos en
443
El artculo 159 del Cdigo Civil espaol dispone: Si los padres viven separados
y no decidieren de comn acuerdo, el Juez decidir, siempre en beneficio de
los hijos, al cuidado de qu progenitor quedarn los hijos menores de edad. El
Juez oir, antes de tomar esta medida, a los hijos que tuvieran suficiente juicio
y, en todo caso, a los que fueran mayores de doce aos.
444
445
446
Respecto de la configuracin de las causales de oposicin al retorno, estiman los jueces del fondo que no se logr acreditar (por
la madre) la situacin contemplada en la letra a) del artculo 13
de la referida Convencin, es decir, que el padre no ejerca realmente el derecho de custodia, comprensivo del de decidir sobre
el lugar de residencia respecto de su hija, facultad que segn
resolucin judicial espaola fue entregada en forma conjunta a
ambos progenitores, ni que ste consintiera en su salida y posterior permanencia en Chile. Tampoco estiman los jueces del fondo configurada la causal que prev la letra b) del artculo citado,
pues si bien la prueba incorporada da cuenta de una dinmica
familiar compleja entre las partes, con episodios de violencia
intrafamiliar, no existen elementos suficientes para concluir que
dichas circunstancias pongan en grave riego a la nia, quien se
encuentra en buenas condiciones de salud.
6.- La Corte Suprema, no obstante lo expuesto en el acpite previo, y discrepando de las conclusiones de los jueces del fondo, resolvi acoger el recurso de casacin, y dispuso que la menor no
deba retornar a su pas de origen. Resumimos a continuacin los
fundamentos de la sentencia:
Que la citada Convencin tiene por finalidad garantizar la restitucin inmediata de los menores trasladados o retenidos de
manera ilcita en cualquier Estado Contratante y velar porque
los derechos de tuicin y de visita vigentes en uno de estos se
respeten en los dems, estableciendo en su artculo 3 los casos
en que el traslado o la retencin de un nio tendra este carcter.
Que, sin embargo, cabe destacar que en dicho texto, se consignan tambin situaciones que facultan a la autoridad judicial
del Estado requerido para desestimar la peticin del requirente
o de un particular, consistente en ordenar el regreso de un nio,
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449
450
454
E. La
455
Cuestin medular: tiempo por el cual puede prolongarse una medida de proteccin decretada en favor de un menor, que implic
radicar su cuidado personal en el padre.
Conclusin de la Corte: la medida de proteccin a un menor en
virtud de la cual se decret que el cuidado personal lo tuviere el
padre y no la madre, es por esencia transitoria y por tanto no debe
prolongarse ms all del tiempo necesario para subsanar la situacin de vulneracin que afectaba al menor. Adicionalmente, si no
se denuncia por el recurrente la infraccin de las normas reguladoras de la prueba, no puede prosperar un recurso de casacin en el
fondo por el cual se pida anular la sentencia de segunda instancia.
1.- Por sentencia de fecha 18 de diciembre de 2012, dictada por
el Juzgado de Familia de Talagante en audiencia de revisin de medida de proteccin, se dispuso que el cuidado personal del nio L.
E. J. C. se mantiene radicado en su padre.
2.- La madre apel de dicha resolucin, y la Corte de Apelaciones
de San Miguel, por fallo de fecha 24 de enero de 2013, revoc la
resolucin de primera instancia y dispuso que se restituyera el cuidado personal del menor a su madre.
3.- Contra esta ltima resolucin, el padre del menor interpuso recurso de casacin en el fondo, fundado en los siguientes argumentos:
Denuncia el recurrente la infraccin de los artculos 30 y 40, nmero 7170, de la Ley nmero 16.618, as como tambin la vulneracin de los artculos 68, 71, letra b) de la Ley nmero 19.968,
sustituir o dejar sin efecto la medida antes del vencimiento del plazo por el
que la hubiere dispuesto. Como es obvio, la referencia al juez de letras de
menores ha de entenderse hoy da al juez de familia.
170
456
lo que se encontrara cumplido, resolvi en definitiva restituir el cuidado del menor radicado provisoriamente en su padre a su madre.
6.- Agrega la sentencia de la Corte Suprema que los jueces del
grado, en uso de facultades de su exclusiva competencia la ponderacin de la prueba y el establecimiento de los hechos- asentaron
los elementos antes expuestos y decidieron como se ha dicho. Sin
embargo, se hace necesario precisar que el recurrente desarrolla los
planteamientos de su recurso partiendo de una base fctica diferente
a la considerada en la sentencia atacada. Adicionalmente, la omisin
por parte del recurrente de una denuncia sobre vulneracin de las
normas reguladoras de la prueba, esto es, de los principios y normas
que integran el sistema de la sana crtica, impiden a la Corte Suprema,
como tribunal de casacin, entrar a revisar lo que ha sido resuelto en
las respectivas instancias, lo que conducir al rechazo del recurso.
Pronunciada por la Cuarta Sala de la Corte Suprema, integrada
por los Ministros Sr. Patricio Valds A., Sra. Rosa Egnem S., el Ministro Suplente Sr. Alfredo Pfeiffer R., y los Abogados Integrantes Sr.
Alfredo Prieto B. y Sra. Cecily Halpern M. Redaccin a cargo de
Ministro Sra. Cecily Halpern Montecino.
F. Circunstancias
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461
462
Se manifiesta que los jueces del fondo, tal como se indic, negaron lugar a la demanda, por considerar que no afectaba a la
madre inhabilidad alguna para detentar el cuidado personal y
porque el bienestar de stos se aseguraba con la revinculacin
con la madre. Tales conclusiones, sin embargo advierte la sentencia del mximo Tribunal-, desconocen antecedentes que surgen de modo irrefutable del mrito del proceso, que dan cuenta
que la figura materna no cuenta con la capacidad y habilidades
necesarias para asumir el cuidado de los nios, atendidas las
caractersticas de su personalidad e historia de vida y que, en definitiva, no se presenta como una concrecin del inters de stos,
al no ofrecer suficiente garanta de ser capaz de proporcionar la
estabilidad y cuidados necesarios para el adecuado desarrollo de
los nios.
Que, en efecto, de los antecedentes allegados al juicio, es posible
concluir que los menores fueron objeto de abandono y negligencia por parte de su madre, quien no ha sido capaz de brindarles
los requerimientos mnimos en trminos de proteccin filial que
stos requieren, necesidad que ha sido cubierta y satisfecha por
la demandante, su abuela materna, la que instando por legitimar
la situacin que fcticamente se ha prolongado en el tiempo, reclam por el otorgamiento judicial del cuidado personal, lo que
gener la oposicin materna, sin que consten actos precedentes
de la madre para recuperar la custodia de sus hijos.
Adems, la demandada no se vislumbra como una figura que en
forma autnoma e independiente, sea capaz de satisfacer los requerimientos de estabilidad y afectividad de los menores, desde
que la misma necesita del apoyo constante de su actual pareja
para ejercer su rol, con la que si bien ha conformado una familia, no es posible obviar las situaciones de violencia cruzada
463
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Tras la reforma hecha por la Ley nmero 20.680, la referencia debe entenderse
al inciso 4 del artculo 225 del Cdigo Civil.
466
tro Suplente Sr. Alfredo Pfeiffer R. y los Abogados Integrantes Sr. Emilio Pfeffer U. y Sra. Virginia Cecily Halpern M. Redaccin a cargo de
Ministro Suplente Sr. Alfredo Pfeiffer R.
XV.- Sentencia de la Corte Suprema de fecha 18 de junio de 2013,
autos Rol nmero 9.536-2012.
Normas legales decisorias o consideradas principalmente en el
fallo: artculos 225, inciso 3 y 226 del Cdigo Civil; artculo 42 de
la Ley nmero 16.618; y artculos 3 y 9 de la Convencin sobre los
Derechos del Nio.
Cuestin medular: qu circunstancias justifican privar al padre y
a la madre del cuidado personal del hijo y atriburselo a su abuela
materna, descartando con ello el acuerdo de los progenitores, en
virtud del cual la madre del nio confiri dicho cuidado personal al
padre del menor?
Conclusin de la Corte: si el menor ha sido criado por su abuela,
a quien identifica como figura materna, siendo ella quien ha desplegado todas las conductas de trato y cuidado directo del nio con
todas las responsabilidades que ello irroga, asistindolo en todos
los aspectos de su vida, corresponde consolidar jurdicamente tal
situacin de hecho, sobre la base del inters superior del nio. Existe voto disidente de dos Ministros, quienes estuvieron por acoger
el recurso y conferir cuidado personal al padre, al no encontrarse
acreditado que a ste le afectare una causal de inhabilidad, de las
previstas en la ley.
1.- Ante el Juzgado de Familia de Calama, D. C. C. solicita se le
conceda el cuidado personal de su nieto, F. O. C., para lo cual deduce demanda en contra de los padres del menor. Por sentencia de
fecha 30 de agosto de 2012, se acogi la demanda, declarndose en
467
consecuencia que el cuidado personal definitivo del nio lo detentar su abuela materna.
2.- Se alzaron ambos demandados y la Corte de Apelaciones de
Antofagasta, por sentencia de fecha 19 de octubre de 2012, confirm la de primer grado.
3.- En contra de este ltimo fallo, los padres del menor interpusieron recurso de casacin en el fondo, en el que denuncian la vulneracin de diversos preceptos legales. En primer lugar, denuncian
la infraccin de los artculos 3 nmeros 1 y 2 y 9 nmero 1 de la
Convencin de los Derechos del Nio; artculos 225, inciso 3 y
226 del Cdigo Civil, en relacin con el artculo 42 de la Ley nmero 16.618. Argumentan que los jueces del fondo han vulnerado
las disposiciones citadas al resolver como lo han hecho, acogiendo
la accin intentada y confiando el cuidado personal del menor a la
abuela materna, en circunstancias que los recurrentes, sus padres,
se encuentran aptos para ejercerlo. Alegan que lo resuelto priva a
los padres del nio de la posibilidad de intervenir en la crianza y
educacin de su hijo. Sealan que el presupuesto que se requiere
para privar del cuidado personal de un hijo a sus padres, es que al
adoptar esta decisin exista un peligro para el inters superior del
nio, cuestin que no ocurre en la especie. Concluyen que tal como
se establece en la sentencia atacada, no concurre en la especie ninguna causal de inhabilidad, ni fsica ni moral, que imposibilite a los
padres para ejercer el cuidado personal de su hijo y que justifique
confiarlo a un tercero.
4.- Expresa la sentencia de la Corte Suprema que del fallo impugnado es posible desprender los siguientes antecedentes:
Que el nio de autos de actuales 13 aos-, nace de una relacin que mantuvieron N. O. con A. C., siendo sta una menor
de edad y teniendo pleno conocimiento el demandado que se
468
que, para que el juez pueda privar del cuidado personal a los padres
y entregarlo a un tercero, es necesaria la concurrencia de alguna
causal de inhabilidad legal respecto de aqullos, de manera que la
sentencia impugnada incurre en los yerros denunciados en el arbitrio de casacin en el fondo impetrado por los demandados.
A lo anterior, afirman los disidentes, cabe agregar las siguientes
circunstancias:
Que no se acredit inhabilidad ni causal calificada que impida a
los padres y demandados ejercer el cuidado personal de su hijo.
Que los padres, de consuno, celebraron el pacto al que alude el
inciso segundo del artculo 225 del Cdigo Civil, radicando el
cuidado personal del hijo en su padre.
Que segn qued demostrado en autos, es el padre quien ha
vivido con su hijo desde su nacimiento y se ha hecho cargo de
sus necesidades, gracias a lo cual el nio ha logrado un arraigo
familiar y social, estado de cosas que se ver seriamente afectado de trasladarse la actora a una ciudad lejana como La Serena,
sin que se haya acreditado que en dicha ciudad el nio contar
con condiciones de bienestar similares o mayores de las que actualmente disfruta al lado de su padre.
Que lo sealado, se relaciona con el inters superior del nio,
que constituye el principio fundamental en este mbito de nuestro ordenamiento jurdico, de manera que lo mejor para el nio
O. C. es permanecer bajo el cuidado y proteccin paterna, decisin que concuerda y es coherente con dicho principio.
Pronunciada por la Sala de Verano de la Corte Suprema, integrada por los Ministros Sres. Hugo Dolmestch U., Pedro Pierry A., Carlos Knsemller L., Haroldo Brito C. y Sra. Rosa Mara Maggi D. No
se indica Ministro redactor del voto de mayora ni del voto disidente.
472
Antiguo artculo 226 del Cdigo Civil (vigente hasta el 21 de junio de 2013):
Podr el juez, en el caso de inhabilidad fsica o moral de ambos padres, confiar
el cuidado personal de los hijos a otra persona o personas competentes. / En
la eleccin de estas personas se preferir a los consanguneos ms prximos, y
sobre todo, a los ascendientes.
172
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Se le priv de su derecho al cuidado personal de su hijo, no obstante no existir ninguna causal legal de inhabilidad para fundar
esa decisin. No se estableci la existencia de una causal calificada que, en aras del inters superior del nio, haga justificable
alterar la regla contenida en el artculo 225 del Cdigo Civil y en
el artculo 42 de la Ley nmero 16.618.
Agrega que lo anterior consta en el informe pericial elaborado
por psiclogo clnico Luis Espinoza Valenzuela, quien en audiencia seal que la madre posee las capacidades parentales
para hacerse cargo de su hijo, presentando adems la madre estabilidad emocional.
Afirma que las probanzas producidas en el juicio no demuestran
que el menor se ha encontrado respecto de su madre en una situacin de maltrato, descuido u otra causal calificada que haga
procedente la entrega del menor a su abuelo considerando el
inters superior de aqul, lo que se desprende de la propia declaracin del demandante (abuelo paterno) que reconoci que
el menor fue dejado en su poder y de su cnyuge por razones
de salud de la madre, conforme el acuerdo existente entre la
madre y el padre del nio, que tambin consider que ste sera
devuelto cuando la madre superara su problema de salud.
Aduce por otra parte que el hecho de haber estado el menor desde enero de 2010 al cuidado de sus abuelos no puede calificarse
como condiciones de abandono, descuido o baja responsabilidad de la madre.
En definitiva, pide que se revoque la resolucin recurrida y, en su
reemplazo, se rechace en todas sus partes la demanda de cuidado personal.
474
475
Que, de lo expuesto y de los fundamentos de la sentencia, resulta que el menor V. ha permanecido al cuidado personal de su
abuelo paterno y de su cnyuge, y durante ese perodo ha desarrollado un arraigo familiar con ellos y su entorno escolar y social,
considerando que sustraerlo de dicho ambiente para trasladarlo a
casa de su madre implicara un impacto emocional que no estara
de acuerdo con su normal desarrollo, atentando contra el inters
superior del nio, al verse despojado de la presencia permanente de su abuelo paterno y su cnyuge, quienes han velado hasta
ahora por su seguridad, vindose con ello asegurado su derecho
a desarrollarse en un hogar que le brinda seguridad y proteccin,
adems de verse afectado en sus actividades estudiantiles.
Que de los argumentos sustentados por la sentenciadora aparece, adems, que el desarrollo del nio estar mejor resguardado
con el cuidado y proteccin que le da su abuelo paterno y cnyuge, a fin de consolidar una situacin de estabilidad, constituyendo ello razones suficientes para alterar las reglas dispuestas
en el artculo 225 del Cdigo Civil.
Por otra parte, tambin debe considerarse que en estas materias
de cuidado personal, para tener en cuenta el inters superior del
menor, ste deber ser odo, esto es, que el nio pueda expresar sus opiniones en la cuestin debatida en el juicio, diligencia
que se realiz, segn consta en el acpite 8 de la sentencia
impugnada, hecho comprobado adems por la Corte, al conocer
los dichos del menor que aparecen en el audio de la audiencia
reservada realizada con l.
Pronunciada por la Sexta Sala de la Corte de Apelaciones de Concepcin, integrada por las Ministros Sras. Mara Elvira Verdugo Podlech
y Raquel Lermanda Spichiger y Fiscal Judicial Srta. Miriam Barlaro Lagos. Redaccin a cargo de Ministro Sra. Raquel Lermanda Spichiger.
476
CAPTTULO IV
CRITERIOS JURISPRUDENCIALES RECIENTES,
EN MATERIA DE RELACIN DIRECTA Y
REGULAR
En este captulo revisaremos sentencias emanadas de la Corte Suprema y de las Cortes de Apelaciones173, que versan acerca de las
siguientes cuestiones, concernientes a la relacin directa y regular
que ha de mantener el padre o la madre, con su hijo menor de edad
que est bajo el cuidado personal del otro progenitor:
A. Salida de menores del pas. Autorizacin del progenitor a favor
del cual existe un rgimen de relacin directa y regular (sentencia I).
B. Privacin de libertad de la madre como causal de suspensin
del rgimen comunicacional con sus hijos (sentencia II).
C. Procedencia del arresto decretado en contra de la madre, que
de manera contumaz desobedece cumplir con lo resuelto acerca del
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causal del artculo 67 nmero 6 en relacin con el artculo 66 nmeros 4 y 6, todos de la Ley nmero 19.968- y de apelacin.
3.- Ambos recursos fueron desestimados por la Corte de Apelaciones de Iquique, conforme a los siguientes argumentos:
En cuanto a la casacin en la forma, siendo el recurso un medio de impugnacin extraordinario de las sentencias definitivas,
que persigue la invalidacin de la sentencia y/o procedimiento
debido a vicios cometidos durante la tramitacin del respectivo
procedimiento o en la dictacin de la sentencia definitiva, su
naturaleza especialsima y extraordinaria exige un presupuesto
esencial compuesto de dos elementos copulativos, perjuicio e
influencia sustancial en lo dispositivo del fallo, ninguno de los
cuales concurre en la especie, ya que la mera lectura de la sentencia basta para observar cumplidas las exigencias del artculo
66 invocadas.
Respecto de la apelacin, sostiene la Corte que el recurso tampoco puede prosperar, porque de los antecedentes aportados por
las partes, analizados conforme a la regla probatoria procedente
en la materia de que se trata, se desprende que el padre otorg
previamente y en forma coetnea dos permisos escritos, suscritos
ante notario, por treinta das y por seis meses, respectivamente,
lapsos que se estiman absolutamente prudentes, si se considera
que el nio tiene tan solo 6 aos de edad, y que su madre, tal
como se dijera en estrados, es Juez de Familia. En consecuencia,
jams podra gozar de feriados prolongados que hagan necesario un permiso tan extenso para que pasee por el extranjero con
su hijo, ya que, como todos los empleados del Poder Judicial,
cualquiera que sea el Escalafn al que pertenezcan, cuenta con
30 das de feriado anual, que pueden fraccionarse en dos por-
481
B. Privacin
decisorias
o
considerael fallo: artculos 225 y 229178
177
178
An cuando el artculo 229 del Cdigo Civil fue sustituido por uno nuevo por
la Ley nmero 20.680, dicha reforma no alter sin embargo el tenor del inciso
2 del antiguo precepto, que ahora pas a ser inciso 6. Tal inciso 2 (ahora 6)
es el que, junto a otros preceptos contenidos en tratados internacionales, el
482
del Cdigo Civil; artculos 8179 y 9180 de la Convencin de los Derecurso denuncia como vulnerado. El precepto antiguo deca (el destacado es
nuestro): El padre o madre que no tenga el cuidado personal del hijo no ser
privado del derecho ni quedar exento del deber, que consiste en mantener
con l una relacin directa y regular, la que ejercer con la frecuencia y libertad
acordada con quien lo tiene a su cargo, o, en su defecto, con las que el juez
estimare conveniente para el hijo. / Se suspender o restringir el ejercicio de
este derecho cuando manifiestamente perjudique el bienestar del hijo, lo que
declarar el tribunal fundadamente.
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180
1. Los Estados Partes velarn por que el nio no sea separado de sus padres
contra la voluntad de stos, excepto cuando, a reserva de revisin judicial,
las autoridades competentes determinen, de conformidad con la ley y los
procedimientos aplicables, que tal separacin es necesaria en el inters
superior del nio, tal determinacin puede ser necesaria en casos particulares,
por ejemplo, en los casos en que el nio sea objeto de maltrato o descuido
por parte de sus padres o cuando stos viven separados y debe adoptarse una
decisin acerca del lugar de residencia del nio.
3. Los Estados Partes respetarn el derecho del nio que est separado de uno
o de ambos padres a mantener relaciones personales y contacto directo con
ambos padres de modo regular, salvo si ello es contrario al inters superior del
nio.
4. Cuando esa separacin sea resultado de una medida adoptada por un Estado
Parte, como la detencin, el encarcelamiento, el exilio, la deportacin o la
muerte (incluido el fallecimiento debido a cualquier causa mientras la persona
483
rechos del Nio; artculo 6, letras a) y b), de la Convencin Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra
la Mujer181; artculos 170 nmero 4 y 768 nmero 5 del Cdigo de
Procedimiento Civil; y artculo 16 de la Ley nmero 19.968.
Cuestin medular: es procedente suspender la relacin directa y
regular entre los menores y su madre, por encontrarse sta privada
de la libertad?
Conclusin de la Corte: corresponde suspender el rgimen comunicacional entre la madre y sus hijos, por encontrarse la primera
privada de la libertad, cuando as resulte conveniente para el inters
superior de los segundos. Adicionalmente, si el recurso se bas en
la falta de fundamentacin de la sentencia recurrida, dicho vicio
debi atacarse oportunamente mediante el recurso de casacin en
la forma y no en el fondo. Voto disidente estuvo por acoger recurso y
regular la relacin directa y regular entre la madre y sus hijos previa
evaluacin psicolgica de los mismos y limitndola a encuentros
cada seis meses.
est bajo la custodia del Estado) de uno de los padres del nio, o de ambos, o
del nio, el Estado Parte proporcionar, cuando se le pida, a los padres, al nio
o, si procede, a otro familiar, informacin bsica acerca del paradero del familiar
o familiares ausentes, a no ser que ello resultase perjudicial para el bienestar
del nio. Los Estados Partes se cerciorarn, adems, de que la presentacin
de tal peticin no entrae por s misma consecuencias desfavorables para la
persona o personas interesadas.
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Los nios se mantienen desde julio de 2010 y hasta la actualidad bajo la responsabilidad y cuidado personal de su padre y su
pareja, con quien se ha configurado un subsistema parental, validndose ante ellos como figuras de autoridad, quienes ejercen
la parentalidad con ausencia de castigo fsico, ejerciendo debidamente la funcin educativa y satisfaciendo las necesidades de
alimentacin y abrigo, as como las emocionales y de contencin, por lo que tanto el padre como su pareja actual cuentan
con las habilidades parentales necesarias para el desarrollo de
los nios acorde con sus necesidades.
Si bien la figura de la madre se percibe por los nios como significativa dentro de su historia vital, aqulla es incapaz de generar
espacios propicios para el desarrollo de sus hijos, afectando tanto su integridad fsica como emocional.
Los menores presentan niveles de dao emocional moderado,
reactivo a situaciones de abandono, negligencia y conflictos vividos dentro del contexto familiar materno, evidenciando indicadores de ansiedad y angustia y sintiendo falta de seguridad y
proteccin frente a posibles riesgos y/o conductas desadaptativas
de su progenitora y actual pareja.
5.- Conforme al mrito de tales hecho, el Tribunal de segunda instancia concluy que el inters superior de los menores, est conformado por brindar a dichos nios un espacio de proteccin y apego,
estabilidad emocional y seguridad fsica, para el ptimo desarrollo
de su personalidad, por sobre los riesgos a los cuales se han visto expuestos bajo el cuidado de su madre, razones que constituyen causa
calificada y suficiente, de conformidad a lo dispuesto en el inciso 3
del artculo 225 del Cdigo Civil, para alterar el cuidado personal
que ejerca la madre por el solo ministerio de la ley.
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Que con fecha 27 de abril de 2013, no se dio lugar a la suspensin del apremio, fundado en que, conforme al mrito de lo
informado por la Directora del PIB Fundacin Esperanza, se
puede comprobar la nula colaboracin mostrada por la actora
en asistir al proceso de intervencin ordenado y que de los antecedentes de la causa no se vislumbra perjuicio alguno que implique suspender o restringir el derecho que todo padre no custodio
tiene de relacionarse con sus hijos, y concluyendo el Juez que
ms bien se observa que ha sido la demandante quien durante
todo este tiempo lo nico que ha hecho es mantener una actitud
obstinada y persistir en desobedecer las rdenes del Tribunal.
Dicha resolucin, adems, apercibi a la demandante que deber concurrir a todas las citaciones que extienda el citado centro,
so pena de decretar en su contra los apremios establecidos en el
artculo 238 del Cdigo de Procedimiento Civil y orden remitir
los antecedentes a la Fiscala, con el objeto que se persiga el
delito de desacato.
Que con fecha 25 de abril de 2013, se dio inicio a la causa
sobre cumplimiento RIT Z-148-2013. Con fecha 20 de mayo,
la abogado del demandado y demandante reconvencional solicit dar estricto cumplimiento a las medidas de apremio decretadas en contra de doa P. A. P., por entorpecer y frustrar
la relacin directa y regular decretada a favor de don N. N.
y sus hijos, acompaando constancias de tal incumplimiento
emitidas por Carabineros de Chile, Primera Comisara de Punta
Arenas, con fechas 31 de marzo, 7, 14, 21 y 28 de abril y 5 de
mayo de 2013. A esta peticin se le confiri traslado, que se
tuvo por evacuado con fecha 29 de mayo de 2013, citndose
a una audiencia especial el 10 de junio de 2013. Con fecha 8
de junio de 2013, la Ministro de Fe certific que la multa impuesta a doa P. A. P. fue pagada. Se llev a cabo la audiencia
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Artculo 48 de la Ley nmero 16.618: En caso de que los padres del menor
vivan separados, y no hubieren acordado la forma en que el padre o madre
que no tuviere el cuidado personal del hijo mantendr con l una relacin
directa y regular, cualquiera de ellos podr solicitar al juez de letras de menores
que la regule. Asimismo, podr pedir al tribunal que modifique la regulacin
que se haya establecido de comn acuerdo o por resolucin judicial, si fuere
perjudicial para el bienestar del menor. / Si se sometiere a decisin judicial
determinacin de la persona a quien corresponder ejercer el cuidado
personal del menor, y no se debatiere la forma en la que ste se relacionar
con el padre o madre que quede privado de su cuidado personal, la resolucin
se pronunciar de oficio sobre este punto, con el mrito de los antecedentes
que consten en el proceso. / Cuando, por razones imputables a la persona
a cuyo cuidado se encuentre el menor, se frustre, retarde o entorpezca de
cualquier manera la relacin en los trminos en que ha sido establecida, el
padre o madre a quien le corresponde ejercerla podr solicitar la recuperacin
del tiempo no utilizado, lo que el tribunal dispondr prudencialmente. / En
caso de que el padre o madre a quien corresponda mantener la relacin
con el hijo dejase de cumplir, injustificadamente, la forma convenida para
el ejercicio del derecho o la establecida por el tribunal, podr ser instado
a darle cumplimiento, bajo apercibimiento de decretar su suspensin o
restriccin, lo que no obstar a que se decreten apremios cuando procedan
de conformidad al inciso tercero del artculo 66. / Sin perjuicio de lo dispuesto
en el inciso anterior, la suspensin o restriccin del ejercicio del derecho por
el tribunal proceder cuando manifiestamente perjudique el bienestar del hijo.
Si se acompaan antecedentes graves y calificados que lo justifique, podr
accederse provisionalmente a la solicitud. La resolucin del tribunal deber
ser fundada y, cuando sea necesario para su adecuado cumplimiento, podr
solicitarse que se ponga en conocimiento de los terceros que puedan resultar
involucrados, como los encargados del establecimiento educacional en que
estudie el menor. / El juez, luego de or a los padres y a la persona que tenga el
cuidado personal del menor, podr conferir derecho a visitarlo a los parientes
que individualice, en la forma y condiciones que determine, cuando parezca
500
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1.- Doa M. N. O. F., a travs de su representante judicial, recurre de amparo ante la Corte de Apelaciones de Valdivia. Seala el
recurso:
Que con fecha 5 de septiembre de 2008, se dict una orden de
arresto por un da, como medida de apremio, por la Jueza de
Familia de Valdivia, por haber infringido la recurrente el rgimen
de visitas que tendra el padre biolgico O. D. C., respecto de su
hijo menor de edad T. D. O.
Dicho arresto fue decretado a peticin de la parte demandante,
quien solicit la aplicacin del artculo 66 de la Ley nmero
16.618, Sin embargo, afirma la recurrente, cabe destacar que
dicho apremio corporal no procede en este caso, toda vez que la
misma Ley nmero 16.618, en su artculo 48, establece expresamente la sancin aplicable al caso en que sea el padre que tiene
la tuicin, quien no cumpla con las visitas. La consecuencia de
este incumplimiento, se agrega, es que deben recuperarse los
das perdidos (inciso 3 del artculo 48). El apremio de arresto, a
su vez, slo procede contra el padre que tiene el derecho-deber
de mantener la relacin directa y regular y no lo cumple (inciso
4 del artculo 48).
Es necesario destacar adems expresa el recurso-, que tratndose de apremios corporales que limitan la libertad ambulatoria de
las personas, stos deben ser interpretados en forma restrictiva,
por lo que no es posible aplicar este apremio en la situacin que
afecta a la recurrente, pues existe una sancin distinta para el
caso de incumplimiento (recuperar los das perdidos).
503
Por ltimo, expresa el recurso, en los autos no estn debidamente acreditados los das en que supuestamente se habran entorpecido las visitas, pues conforme a resolucin de fecha 26 de
agosto de 2008, la misma Jueza que decret el apremio haba
dispuesto que se citara a una audiencia a fin de verificar los das
de incumplimiento, audiencia que nunca se llev a cabo, procediendo a decretar derechamente el arresto.
2.- A fojas 10, la Juez del Juzgado de Familia de Valdivia informa
el recurso, sealando al efecto:
Se decret una orden de arresto en contra de doa M. N. O. F.
por incumplimiento reiterado a que el padre mantenga una relacin directa y regular con su hijo, situacin que se mantuvo en
el tiempo pese a estar apercibida para su cumplimiento.
Agrega que esa orden fue despachada considerando lo dispuesto
por el artculo 48 de la Ley nmero 16.618 en relacin al artculo
229 del Cdigo Civil, aplicable para el caso que no se cumplan
las resoluciones que ordenan el cumplimiento de ellas, y segn
consta de los antecedentes la relacin directa y regular fue fijada
por conciliacin de ambos padres, lo que posibilita la aplicacin
del artculo 543 del Cdigo de Procedimiento Civil.187
De este modo, ante el incumplimiento injustificado y reiterado
de la madre, y visto el inters superior del nio, se decret la
orden respectiva.
3.- Expresa el fallo de la Corte de Apelaciones de Valdivia:
Que conforme al mrito de la causa Rit 644-07 tenida a la vista,
consta que con fecha 2 de octubre de 2007, las partes del pro187
504
505
Esto es efectivo, conforme al solo tenor del artculo 48, pero no lo es, cuando
complementamos dicha norma con lo dispuesto en el artculo 66 del mismo
cuerpo legal.
506
consecuencia, para el caso en que sea el padre que tiene el cuidado personal quien por una accin imputable impida en alguna
forma las visitas, la posibilidad de recuperacin de los das perdidos, cuestin que corresponde declarar al juez.
El inciso 4 de la misma norma regula a su vez la situacin en que
es el padre a cuyo beneficio est decretado este derecho-deber
quien no cumple, oportunidad en la que, luego de apercibirlo
con la restriccin o suspensin, puede ser apremiado conforme
al artculo 66 del mismo cuerpo legal.
Asimismo, el artculo 66 de la Ley de Menores, seala que en
caso que se incumpla lo previsto por el artculo 229 del Cdigo
Civil, ser posible apercibir conforme al artculo 543 del Cdigo
de Procedimiento Civil.
De este modo, interpretadas armnicamente todas las normas
que regulan la materia, la conclusin a la que debemos necesariamente arribar se afirma en la sentencia-, es que el apremio
de arresto slo procede contra el padre a cuyo beneficio se ha
regulado el derecho-deber y no contra aquel que ejerce el cuidado personal del menor.
Que, de conformidad a lo expuesto, la orden de arresto despachada en contra de la amparada doa M. N. O. F., ha sido dictada fuera de los casos previstos en la ley, infringiendo de este
modo la garanta constitucional del artculo 19 nmero 7 de la
Carta Fundamental, por lo que el recurso ser acogido y se dejar sin efecto la orden de arresto.
Pronunciada por la Segunda Sala de la Corte de Apelaciones de
Valdivia, integrada por el Ministro Sr. Daro Ildemaro Carretta Navea, Fiscal Judicial Sra. Mara Heliana Del Ro Tapia y Abogado Integrante Sra. Helga Steffen Riedemann. Redaccin: no se indica.
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191
516
al proceso, conforme a los cuales es posible concluir que el rgimen fijado, en las actuales circunstancias, es perjudicial para los
nios.
4.- La Corte Suprema seala en su sentencia:
Que la controversia, al tenor de las alegaciones y cuestionamientos formulados en el recurso, dice nicamente relacin con
la decisin contenida en el fallo impugnado, de establecer y permitir un rgimen de relacin directa y regular entre los menores
de autos y su padre y de no impedir sta en el contexto de las
medidas de proteccin dictadas por el tribunal.
Que segn se advierte del texto del recurso, en ste slo se denuncian como vulneradas las disposiciones legales que en el mismo
se consignan y que han sido referidas en el motivo primero de
esta sentencia (artculo 3 de la Convencin de los Derechos del
Nio en relacin con el artculo 5 de la Constitucin Poltica de
la Repblica y artculo 32 de la Ley nmero 19.968), pero no se
acusa el quebrantamiento por falta o indebida aplicacin de las
normas sustantivas que consagran y regulan el derecho-funcin
en cuestin, ni de las propias del estatuto proteccional.192
192
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520
193
521
Cuando la adopcin de cualquier medida cautelar tenga lugar antes del inicio
del procedimiento, el juez fijar desde luego la fecha en que deber llevarse
a cabo la audiencia preparatoria, para dentro de los cinco das siguientes
contados desde la adopcin de la medida.
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524
Por estas consideraciones, disposiciones legales citadas y lo dispuesto en el artculo 227 del Cdigo de Procedimiento Civil, se
declara que se revoca la resolucin apelada y se declara en su
lugar que se mantiene el derecho de F. T. R. a mantener una relacin directa y regular con su hijo menor de edad V. T. E., en los
trminos y condiciones indicados.
Pronunciada por la Primera Sala de la Corte de Apelaciones de
Valdivia, integrada por el Ministro Sr. Daro Carretta Navea, la Ministra Sra. Emma Daz Yvenes y el Abogado Integrante Sr. Juan Carlos Vidal Etcheverry. Acordada con el voto en contra del Ministro Sr.
Daro Carretta Navea, quien estuvo por confirmar la resolucin en
alzada en virtud de sus propios fundamentos. Redaccin a cargo del
Abogado Integrante Sr. Juan Carlos Vidal Etcheverry.
F. Circunstancias
comunicacional con su hija y que tampoco se ha probado la existencia de un supuesto abuso sexual por parte del primero en perjuicio de la segunda, no evidenciando la nia ningn dao asociado a
una experiencia traumtica en la esfera de su sexualidad ni menos
un rechazo hacia el padre, resulta procedente, teniendo presente
la edad de la menor, decretar un aumento de la relacin directa y
regular con su padre.
1.- Por sentencia de fecha 11 de junio de 2010, del Tercer Juzgado de Familia de Santiago, se acogi la demanda de aumento de
relacin directa y regular deducida por don P. W. P. en contra de
doa M. B. L., slo en cuanto se fija como rgimen comunicacional
definitivo con su hija de nueve aos M. W. B., el siguiente:
Fin de semana por medio, desde el viernes a las 18.00 horas al
domingo a las 18.00 horas en invierno y 19.00 horas en verano,
debiendo el padre retirar y entregar a la nia en el domicilio materno.
Vacaciones de verano: 15 das, los primeros 15 das de febrero
de cada ao, a partir del ao 2011.
Vacaciones de invierno: una semana.
Navidad y ao nuevo alternado, partiendo el ao 2010, el 24 de
diciembre con la madre y el 25 de diciembre con el padre desde
las 12.00 horas hasta las 20.00 horas y el 31 de diciembre con el
padre, retirando la nia desde el domicilio materno a las 18.00
horas y reintegrndola el 1 de enero de 2011 a las 11.00 horas.
Da del padre lo pasar con ste desde las 11.00 horas hasta las
18.00 horas y el da de la madre estar con sta.
Cumpleaos de la nia: el padre podr visitarla en su domicilio
o lugar de celebracin entre las 17.00 y las 20.00 horas.
526
527
528
El demandante fundament su peticin de aumento de la relacin directa y regular en el hecho que actualmente su hija tiene
nueve aos y en que el motivo considerado en su oportunidad
para fijar un rgimen comunicacional restrictivo fue solamente
la edad que la menor tena a esa poca, esto es, seis aos.
La demandada se opuso a la accin impetrada, esgrimiendo que
el rgimen de relacin directa y regular deba mantenerse restringido y supervigilado, ya que afirma- el padre demandante
habra abusado sexualmente de la menor.
En causa del 22 Juzgado del Crimen de Santiago, seguida por
supuesto delito de abuso sexual de la menor por parte del padre,
se decret sobreseimiento temporal.
Que son hechos establecidos en la sentencia impugnada los siguientes:
i) Las partes contrajeron matrimonio con fecha 17 de julio de
2000 y cesaron en su convivencia el ao 2003.
ii) El 1 de febrero de 2001 naci la nia M. W. B.
iii) Con fecha 12 de noviembre de 2004, el padre dedujo demanda de relacin directa y regular en contra de la madre, dictndose
sentencia de segunda instancia con fecha 26 de enero de 2007,
que regul el rgimen.
iv) Con fecha 18 de junio de 2007, las partes, en causa de cumplimiento de rgimen comunicacional del 3 Juzgado de Familia
de Santiago, acordaron asistir a terapia familiar y que durante los
dos primeros meses de terapia las visitas se llevaran a cabo en la
forma indicada por la psicloga a cargo de la misma y al cabo de
dos meses, es decir a partir del 19 de agosto de 2007, las visitas
529
se efectuaran de conformidad a lo resuelto por la Corte de Apelaciones de Santiago con fecha 26 de enero de 2007.
v) La madre no ha dado cumplimiento al rgimen comunicacional vigente, siendo apercibida en varias oportunidades por el Tribunal.
5.- Agrega la sentencia de la Corte Suprema en sus considerandos
conclusivos:
Que sobre la base de los hechos reseados, los sentenciadores
recurridos concluyeron que del mrito de los antecedentes, de
las pericias psicolgicas a que fue sometida la menor y en especial la opinin de sta en audiencia reservada, analizados conforme a las reglas de la sana crtica, no se acredita que al demandante le afecte alguna inhabilidad para mantener un rgimen
comunicacional con su hija. Por ello, se estima que debe haber
un rgimen comunicacional acorde a la edad de sta y su etapa
evolutiva, ya que es ella quien ser la principal beneficiaria y no
los padres. Concluyeron tambin los sentenciadores que la nia
no evidencia ningn dao asociado a una experiencia traumtica en la esfera de su sexualidad ni menos un rechazo hacia el
padre, quien sera el supuesto agresor; por el contario, es una
figura de importancia para ella, con quien quiere compartir ms.
Asimismo, se considera que el hecho en que la demandada ha
fundado su oposicin, esto es, la existencia del ilcito de abuso
sexual en contra de la menor por su padre, ha quedado desvirtuado por el sobreseimiento que recay en el correspondiente
proceso penal y que, adems, form parte del debate en el juicio
anterior en que se decidi la procedencia de mantener la menor
una relacin directa y regular con su padre, por lo que, y en
razn de su propio inters superior de la nia, se hizo lugar a la
demanda de aumento de la relacin directa y regular.
530
Que los jueces del grado, en uso de sus facultades privativas para
proceder a la ponderacin de la prueba y el establecimiento de
los hechos, resolvieron como se indic, consignando las razones
que tuvieron para ello, no siendo efectiva la falta de anlisis y
valoracin de ciertas probanzas como lo invoca la recurrente.
Que adems, cabe consignar que de conformidad a lo que prev
el artculo 32 de la Ley nmero 19.968, los jueces de familia
aprecian la prueba de acuerdo a las reglas de la sana crtica. Es
una materia esencialmente de apreciacin y por lo mismo de
hecho, cuya estimacin corresponde exclusiva y privativamente a los jueces del fondo. Que en este sentido, las alegaciones
planteadas por la recurrente, traducen un cuestionamiento de la
valoracin hecha por los sentenciadores y de las conclusiones a
que arribaron, y todo ello con el fin de modificar los presupuestos fcticos establecidos y que han servido de base a la decisin adoptada en el fallo impugnado. En efecto, se pretende una
nueva ponderacin de los medios de conviccin allegados a la
causa, acorde a la posicin jurdica que la demandada y demandante reconvencional ha mantenido en el juicio, sobre todo si se
tiene presente que los atentados denunciados por la recurrente
no constituyen realmente un quebrantamiento de la sana crtica.
Que en el contexto antes descrito, no puede sino concluirse que
los sentenciadores no han incurrido en los yerros denunciados.
En efecto, la fuerza jurdica de las normas que se estiman infringidas no ha sido desconocida ni su interpretacin contrara a la
que procede.
Que conforme a lo razonado, no habindose incurrido por los
sentenciadores en los errores de derecho denunciados, el recurso en examen debe ser desestimado.
531
G. Determinacin
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535
H. Cumplimiento
536
Cuestin medular: cumplimiento del requisito de mediacin previa, tratndose de causas de relacin directa y regular. Circunstancias que justifiquen suspender el rgimen comunicacional entre el
padre y sus hijos.
Conclusin de la Corte: Si consta que se frustr mediacin en
la accin iniciada por la madre para suspender el rgimen comunicacional, no es necesario exigir que se cumpla con tal requisito
de admisibilidad, cuando el padre deduce a su vez une demanda
para modificar la relacin directa y regular con sus hijos. Asimismo,
si no se encuentra acreditada inhabilidad del padre o vulneracin
del inters superior de los menores, no procede suspender rgimen
comunicacional.
1.- Por sentencia de fecha 6 de diciembre de 2010, del Juzgado
de Familia de Arica, se acogi la demanda deducida por don J. M.
R. en contra de doa V. H. U., para modificar el rgimen de relacin
directa y regular fijado de comn acuerdo por las partes, respecto
de los hijos comunes F. y J., ambos de apellidos M. H. Se rechaz
tambin la demanda reconvencional deducida por la demandada,
mediante la cual solicitaba la suspensin de cualquier rgimen comunicacional entre los hijos y el padre, por ser perjudicial para stos
segn afirm la actora reconvencional- el mantener relacin y contacto con su progenitor. Se regul por la citada sentencia un rgimen
de relacin directa y regular entre los menores y su padre, consistente en todos los das sbados, entre las 10.00 y las 18.00 horas, por
un perodo inicial de seis meses, luego del cual, se desarrollar dos
das a la semana, esto es, los das mircoles posterior a la jornada
escolar y hasta las 20.00 horas y los sbados desde las 10.00 horas
hasta las 18.00 horas.
2.- Se alz la demandada y demandante reconvencional, y la
Corte de Apelaciones de Arica, por fallo de fecha 24 de febrero de
537
540
Que en el fallo de segunda instancia, los sentenciadores resolvieron ampliar el rgimen fijado despus de transcurrido el plazo de
seis meses, en el sentido de permitir una mayor vinculacin entre
el padre y sus hijos, fundados en la necesidad que advierten de
realizar los lazos entre stos, los que se han visto quebrantados
en la forma en que sus progenitores han abordado sus conflictos,
atribuyendo en este sentido una conducta inadecuada en la madre, para el desarrollo de los nios. Respecto de la pretensin de
sta ltima, en orden a suspender la relacin comunicacional,
se estima improcedente por los jueces de la instancia, pues para
que ella pudiera prosperar se requiere que manifiestamente se
perjudique el bienestar de los hijos, circunstancia que no ocurre
en la especie, considerando en este sentido que los padres asisten a un programa de intervencin decretado para fortalecer sus
habilidades parentales, no encontrndose el padre afectado por
inhabilidad legal que le impida ejercer este derecho, consagrado
tambin en favor de los propios menores.
Que los jueces del grado, en uso de las facultades que son de su
exclusiva competencia la ponderacin de la prueba y el establecimiento de los hechos- asentaron los elementos de la causa
y decidieron como est dicho. Que al respecto, la recurrente desarrolla los planteamientos de su recurso partiendo de una base
fctica diferente a la establecida en la sentencia reclamada (que
el padre de los menores no se encuentra inhabilitado por causa
legal para ejercer el derecho funcin de mantener con sus hijos
una relacin directa y regular y que el ejercicio de ste no es perjudicial para los mismos, sino que necesario y beneficioso para
su desarrollo), a fin de establecer otros hechos distintos de aquellos contenidos en la sentencia, olvidando que la ponderacin y
la apreciacin de los diferentes elementos allegados al proceso
corresponden a una facultad privativa de los jueces del grado
542
544
I. Acerca
195
546
547
548
4.- Expresa la sentencia de la Corte Suprema que para una adecuada resolucin del asunto que se plantea en el recurso de nulidad,
cabe tener presente lo siguiente:
Doa O. A-V. H., en su calidad de abuela por lnea paterna de la
menor de autos, solicita se regule a su favor un rgimen comunicacional con la nia.
Dicha pretensin se sustenta en que tiene un fuerte vnculo con
su nieta, tras haber colaborado con su cuidado por dos aos,
cuando tena una buena y cercana relacin con su hijo, la que
se ha visto afectada desde que ste, tras la muerte de su cnyuge
madre de la nia-, entablara una nueva relacin sentimental, a
tal punto de encontrarse impedida de poder visitarla.
El demandado se opuso a la demanda, sosteniendo que el distanciamiento con su madre se debe a que ella realiz comentarios en orden a que la nia habra sido abusada sexualmente
por el hijo menor de su actual pareja, lo que result desvirtuado
finalmente por el mrito de las diligencias realizadas en la causa
iniciada para la investigacin de estos hechos, todo lo cual ha
afectado gravemente la relacin al interior de la familia de la que
la nia forma parte.
La madre de la menor falleci en el ao 2007, quedando al cuidado de su padre.
La relacin entre las partes ha resultado afectada como consecuencia del denuncio formulado por la demandante en orden a
que su nieta habra sido vctima de abuso sexual por el hijo de la
actual pareja del padre de la nia, lo que no result demostrado
en el proceso que investig el hecho.
549
552
553
La controversia se centra en la conveniencia de regular un rgimen comunicacional que permita al abuelo materno, quien no
tiene el cuidado de la menor, mantener una relacin directa y regular con su nieta, y en caso de ser aquello positivo, determinar
la frecuencia y extensin adecuada de ste y las dems circunstancias que han de ponderarse en consideracin del inters de la
menor, a los efectos de esa regulacin.
Que analizados los antecedentes que constan en autos, as como
la abundante prueba recogida en otros litigios entre las mismas
partes en relacin a la menor C. B., y de manera particular, lo
obrado ante el Segundo Juzgado de Familia de Santiago, con
ocasin de la causa para revisar el cumplimiento del rgimen
provisorio de visitas decretado por el Juez del Tercer Juzgado
de Menores de Santiago, instancia en que se tuvo nuevamente
oportunidad de escuchar a la menor y en la que por vez primera- tom su representacin una curadora ad litem, en opinin
de esta Corte resulta suficientemente acreditada la conveniencia
de regular un rgimen comunicacional a favor del abuelo de la
menor.
En efecto, la ausencia de la madre crea la necesidad de establecer y promover vnculos entre la menor y su familia extensa, lo
que implica facilitar los espacios para que se puedan desarrollar
y consolidar las relaciones y afectos con sus abuelos maternos,
que no slo representan sus orgenes y, en este sentido, son significativos en la construccin de la propia identidad de la menor,
sino que constituirn su apoyo en el futuro, lo que permitir enfrentar la vida en mejores condiciones.
Por otra parte, el hecho de que el abuelo haya intervenido en una
primera etapa de la crianza teniendo el cuidado de la menor
entre el ao y medio y cerca de los cuatro aos de edad- permite
554
prever que de impedirle mantener una relacin fluida y regular con el mismo, sin que existan antecedentes ciertos que as
lo justifiquen, es introducir una nueva prdida en su desarrollo
emocional, siendo, por el contrario, beneficioso que vuela a ser
recibida en el nuevo hogar constituido por su abuelo materno y
pueda compartir, adems, con quienes identifica como sus tos,
figuras cercanas en edades e intereses.
Que un antecedente importante de considerar, en opinin de
esta Corte, es que las declaraciones de la menor frente a la Juez
del Tercer Juzgado de Menores y ante la Jueza del Segundo Juzgado de Familia (acompaada de la consejera tcnica del tribunal), han generado en ambas una percepcin coincidente, en
el sentido de la conveniencia de mantener el vnculo con su
abuelo, manifestando que no se advierte en la nia ninguna animadversin ni temor frente a su abuelo, sino por el contrario,
que slo expresa cuestiones gratas en cuanto a su relacin. Es la
conviccin que se ha generado tambin en estos jueces, al escuchar el audio proveniente del Juzgado de Familia.
Que despejado el tema de la conveniencia para la menor de
establecer un rgimen comunicacional en favor de su abuelo
materno, para efectos de determinar la frecuencia y modalidades del mismo, es menester ponderar los ritmos necesarios de
adaptacin de la menor a una situacin nueva, dado el hecho
objetivo que se trata de restablecer una relacin que, de alguna
manera, ha estado estancada, y atendida, adems, la corta edad
de la nia, lo que razonablemente le puede generar interrogantes o aprensiones acerca de lo que significa pernoctar fuera de
su casa, en un lugar que no constituye su ambiente habitual y
que por el momento le puede resultar ajeno, cuestiones todas
que son parte de un proceso natural que, necesariamente, toma
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557
J. Pertinencia
559
1.- Ante la Corte de Apelaciones de Temuco, doa P. E. P., representada por su abogado, interpuso recurso de amparo preventivo, en
contra de la resolucin del Tribunal de Familia de Temuco, de fecha
24 de diciembre de 2008, que decret el arresto de la recurrente por
incumplimiento de rgimen de relacin directa y regular establecido a favor de C. D. R., padre de las menores F. y M.
2.- Seala la recurrente, al fundar su recurso de amparo preventivo, lo siguiente:
Que por avenimiento de fecha 15 de mayo de 2008, acordado
ente el Tribunal de Familia de Temuco, se estableci un rgimen
de visitas supervisado a favor de don C. D. R., respecto de sus
hijas F. y M.
Agrega que el rgimen comunicacional del padre de las menores
y cnyuge de la recurrente, se estableci de manera vigilada,
habida consideracin que a la fecha de incoarse los respectivos
autos, exista una denuncia de abusos sexuales en los que habra
incurrido el seor C. D. R. en perjuicio de sus hijas., que an se
encuentra en etapa de investigacin por la Fiscala de Temuco.
En los autos sobre vulneracin de derechos de las menores, se
practicaron una serie de pericias de perfil criminalstico a las
menores, las que si bien no establecieron de manera indubitada
la existencia de los abusos, no los descartan. Seala tambin que
existen informes psicolgicos que establecen la existencia de los
referidos abusos y sugieren la inconveniencia de mantener el
rgimen comunicacional del padre respecto de las menores, por
ser grave y rotundamente perjudicial para el normal desarrollo
emocional y psicolgico de ellas. En este escenario, las visitas
establecidas en el citado avenimiento, se han visto interrumpidas, por una comprensible necesidad y obligacin de proteger a
las menores.
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563
565
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en atencin a que no hay antecedentes que justifiquen variar el rgimen actualmente existente entre la demandante y su hija.
Pronunciada por la Primera Sala de la Corte de Apelaciones de
Rancagua, integrada por los Sres. Ministros Titulares Carlos Baados
Torres y Miguel Vsquez Plaza y por el Abogado Integrante Sr. Juan
Guillermo Briceo Urra. No se indica quien redact el fallo.
567
CAPTULO V
REFORMAS HECHAS AL CDIGO CIVIL, EN
VIRTUD DE LA LEY N 20.680, PUBLICADA EN EL
DIARIO OFICIAL DE FECHA 21 DE JUNIO DE 2013
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571
sobre la Eliminacin de Todas las Formas de Discriminacin contra la Mujer, que seala: 1. Los Estados Partes adoptarn todas
las medidas adecuadas para eliminar la discriminacin contra la
mujer en todos los asuntos relacionados con el matrimonio y las
relaciones familiares y, en particular, asegurarn, en condiciones
de igualdad entre hombres y mujeres: () d) Los mismos derechos y responsabilidades como progenitores, cualquiera que sea
su estado civil, en materias relacionadas con sus hijos; en todos
los casos, los intereses de los hijos sern la consideracin primordial. El principio de corresponsabilidad ha de ejercerse por los
padres en forma activa, equitativa y permanente. Por ende, los
progenitores deben ejecutar todas las conductas necesarias para
asegurar, en la medida de sus posibilidades, el bienestar fsico
y espiritual de sus hijos; al actuar de este modo, ninguno de los
padres puede imponer su parecer por sobre el del otro, pues lo
equitativo supone igualdad entre ambos en la adopcin de las
decisiones que conciernan al hijo comn; y todo ello de manera
sostenida en el tiempo.
Casos especiales: el legislador se ha preocupado de regular en
esta materia algunas circunstancias que implican alteracin de
una situacin normal.196 Tales son:
Admitimos que en nuestros das, resulta difcil o complejo aludir a una
situacin normal en lo concerniente al cuidado personal de los hijos.
Histricamente, tal situacin corresponda, indudablemente, al cuidado
personal de un nio que tena filiacin matrimonial y cuyos padres vivan
juntos. Tal era el modelo que fomentaba nuestro Cdigo Civil y que se
consideraba deseable en nuestra sociedad. Las polticas pblicas en el Chile
republicano (y an ms en los tiempos de la Capitana General), y con mayor
nfasis desde las postrimeras del siglo XIX en adelante (con la aprobacin de
las leyes laicas), propendan a fortalecer la institucin matrimonial y a
incorporar a sta a las personas que convivan al margen de la institucin.
Paralelamente, la Iglesia Catlica desarrollaba un enrgico esfuerzo destinado
196
572
573
nios fuera del matrimonio. Se podra afirmar que en nuestros das, el enfoque
valrico sobre este particular es completamente neutral. No se puede decir
otra cosa, si consideramos que hoy, 7 de cada 10 nios nacen fuera del
matrimonio. Tampoco puede omitirse la influencia que al respecto pueda
haber tenido la Ley nmero 19.585, vigente desde el 27 de octubre del ao
1999, que igual, desde el punto de vista hereditario, a los hijos matrimoniales
y no matrimoniales (aunque bien se podra aseverar que no es la ley la que
influy en la sociedad, sino que sta en el legislador). Dos aos despus de
entrar en vigencia esta reforma (2001), por primera vez en las ltimas dcadas
los nios nacidos fuera del matrimonio superaron a los que nacieron dentro
del matrimonio. Las estadsticas actuales, de esta manera, se asemejan a las
que existan hacia 1920-1930 en Chile. Pero con una importante diferencia:
hoy, la mayora de estos nios son reconocidos por sus dos progenitores, segn
lo hemos visto; hace ochenta aos, en cambio, eran pocos los nios nacidos
fuera del matrimonio reconocidos por sus progenitores y especialmente por el
padre. Esto se explica por razones sociales y jurdicas. Sociales, pues el padre
sola eludir su responsabilidad, enfrentando la crianza slo la madre, muchas
veces en condiciones muy precarias. Jurdicas, por lo engorroso que era el
reconocimiento de un hijo natural, hasta el ao 1952. Al efecto, recurdese
que el antiguo artculo 272 del Cdigo Civil, originario del mismo, dispona
que el reconocimiento de un hijo natural slo deba hacerse por instrumento
pblico entre vivos o por acto testamentario. Agregaba el artculo 273 que
dicho reconocimiento deba ser notificado al reconocido y aceptado por ste.
Por ello, si el reconocido era menor de edad, resultaba necesario pedir a un
Tribunal que le designase al menor un curador, que compareciera a la escritura,
aceptando el reconocimiento. Tan engorroso procedimiento, slo cambi con
la Ley nmero 10.271, de 2 de abril de 1952 (vigente a partir del 2 de junio de
ese ao), que tambin consagr el reconocimiento mediante una declaracin
formulada con ese determinado objeto en la inscripcin de nacimiento del
hijo. Lo expuesto, explica que en nuestros das, numerosas personas de
filiacin no matrimonial nacidas antes del 2 de abril de 1952, tengan muchas
dificultades para obtener que se les reconozca como herederos de sus padres,
por la sencilla razn de que no existe filiacin reconocida por el ordenamiento
jurdico. Ante la ley, no son hijos del causante. Sobre este particular, cfr. una
interesante sentencia dictada por la Corte Suprema con fecha 18 de abril de
2013, autos Rol nmero 6.160-2012, que incide en una persona nacida el 5
de octubre de 1951 y cuyo nacimiento se inscribi el 6 de marzo de 1952. La
574
i) Situacin del hijo que goza de filiacin no matrimonial: el cuidado personal del hijo no concebido ni nacido durante el matrimonio, reconocido por uno de los padres, corresponde al padre
o madre que lo haya reconocido (artculo 224, inciso 2). Si el
hijo de filiacin no matrimonial ha sido reconocido por sus dos
progenitores, las reglas concernientes a su cuidado personal se
contemplan en el artculo 225, que revisaremos en el siguiente
acpite.
ii) Situacin del hijo que tiene filiacin indeterminada: si el hijo
no ha sido reconocido por ninguno de sus padres, la persona que
Corte seal que existe un reconocimiento expreso efectuado por don ()
al momento de la inscripcin de su nacimiento, segn da cuenta el documento
pblico, debidamente legalizado, y que no fuera objetado consistente en la
partida de nacimiento () en el cual se seala la comparecencia personal del
seor () como padre de quien se inscriba. Se agrega en este fallo que
habiendo constancia del reconocimiento del recurrente como hijo del causante
en un instrumento pblico, como lo es su propia partida de nacimiento en el
Registro Civil, nadie podra dudar de la voluntad seria y libre de su padre de
reconocerlo y slo habra faltado, para cumplir con la ley pasada, el acto de
notificacin al interesado. Ahora bien, consigna la sentencia, debe
considerarse que ha sido el propio interesado el que ha reclamado de la
exclusin que ha sido objeto en la herencia de su padre, por lo que es ostensible
la aceptacin que ha hecho de su propio reconocimiento. Concluye la Corte
que no puede desconocerse, por ende, su condicin de hijo del causante.
Pronunciada por la Primera Sala de la Corte Suprema, integrada por los
Ministros Sres. Juan Araya E., Guillermo Silva G., Juan Fuentes B. y Carlos
Cerda F. y Abogado Integrante Sr. Jorge Baraona G. Redaccin del ltimo. Las
dificultades anotadas, con todo, subsisten para quienes fueron inscritos antes
del 2 de junio de 1952, sin que concurriera a dicho acto su padre y su madre.
En estos casos, no existe ningn instrumento pblico al cual recurrir para
fundar la filiacin. Advertimos, tambin, que nuestra jurisprudencia ha sido
restrictiva, para aceptar la posesin notoria del estado civil de hijo natural,
como medio de prueba idneo, en los casos de personas que se encuentran en
la situacin descrita en las lneas precedentes.
575
tendr su cuidado ser determinada por el juez (artculo 224, inciso 2).
iii) Situacin del hijo, cuando sus padres viven separados: nos referiremos a esta situacin al tratar seguidamente del nuevo tenor
del artculo 225.
c. Se reemplaza el artculo 225, poniendo fin con ello nuestro legislador a la doctrina que haba recepcionado en el ao 1989 con
la Ley nmero 18.802, en virtud de la cual el cuidado personal de
los hijos pertenece naturalmente a la madre, y que se recoga
en el antiguo inciso 1 de este artculo. Ahora, en caso de vivir
separados los padres, las reglas sern las siguientes:
Los padres podrn determinar de comn acuerdo que el cuidado
del hijo lo tenga uno u otro o ambos en forma compartida. Dicho
acuerdo deber formalizarse mediante escritura pblica o acta
extendida ante cualquier oficial del Registro Civil, subinscrita al
margen de la inscripcin de nacimiento del hijo dentro de los
30 das siguientes a su otorgamiento. De esta manera, ambos
padres, actuando de comn acuerdo, podrn determinar que el
cuidado personal de uno o ms hijos corresponda: i) al padre; ii)
a la madre; o iii) a ambos en forma compartida.197 Este acuerdo
La profesora Fabiola Lathrop Gmez, en su trabajo La corresponsabilidad
parental, se pronuncia en favor del cuidado personal alternado o compartido
de los hijos. Seala que la custodia compartida, alternada o sucesiva
es un sistema familiar, posterior a la ruptura familiar o de pareja que,
basado en el principio de la corresponsabilidad parental, permite a ambos
progenitores participar activa y equitativamente en el cuidado personal de
sus hijos, pudiendo, en lo que a la residencia se refiere, vivir con cada uno
de ellos durante lapsos sucesivos ms o menos predeterminados. Se trata
de una figura jurdica de gran impacto en la organizacin de las relaciones
familiares pues evita, al menos tericamente, que uno de los progenitores
generalmente el padre- quede desprovisto de injerencia en la vida del hijo.
197
576
577
podr revocarse o modificarse cumpliendo las mismas solemnidades (artculo 225, inciso 1). Se trata en este caso de una atribucin convencional del cuidado personal del hijo. El acuerdo
acerca del cuidado personal del hijo debe establecer tambin la
frecuencia y libertad con que el padre o madre que no tenga el
cuidado personal, mantendr una relacin directa y regular con
los hijos. Agrega la ley que el cuidado personal compartido es
un rgimen de vida que procura estimular la corresponsabilidad
de ambos padres que viven separados, en la crianza y educacin
de los hijos comunes, mediante un sistema de residencia que
por Chile), adicional al Pacto de San Jos de Costa Rica, en el que se declara
que todo nio tiene el derecho a crecer al amparo y bajo la responsabilidad
de sus padres, aunque en l se agrega que salvo circunstancias excepcionales,
reconocidas judicialmente, el nio de corta edad no debe ser separado de su
madre, apegndose as a la doctrina de los aos tiernos. En el contexto regional
europeo, menciona varias resoluciones y recomendaciones emanadas del
Parlamento Europeo y del Comit de Ministros del Consejo de Europa: Lathrop
Gmez, Fabiola, La corresponsabilidad parental, en Estudios de Derecho
Civil IV. Jornadas Nacionales de Derecho Civil, Olmu, 2008, Santiago de
Chile, LegalPublishing, ao 2009, Universidad Diego Portales, Carlos Pizarro
Wilson (coordinador), pp. 207 a 232. Rodrigo Barcia, por su parte, sostiene
que es dudoso que el principio de la corresponsabilidad de los padres sea un
principio autnomo del Derecho de Familia, sino que ms bien, parece ser
una de las aplicaciones del inters superior del nio. Afirma, en efecto, que
el sustento de la corresponsabilidad, ms que la equidad entre los padres, es
una aplicacin del principio del inters superior del nio. Agrega que si bien
la autorregulacin del conflicto es algo deseable, por cuanto los padres son
los que mejor conocen sus capacidades y las necesidades del nio, y que
este proceso slo puede ser exitoso en la medida que los padres estn en un
plano de igualdad, todo ello debe ser funcional al inters superior del hijo; el
principio de igualdad de los padres, tiene importancia porque a travs de l se
vela por el inters superior del nio: Barcia Lhemann, Rodrigo, Fundamentos
del Derecho de Familia y de la Infancia, Santiago de Chile, Thompson Reuters
Puntolex, ao 2011, p. 391.
578
El tenor actual del artculo es el siguiente: Si los padres viven separados podrn determinar de comn acuerdo que el cuidado personal
de los hijos corresponda al padre, a la madre o a ambos en forma compartida. El acuerdo se otorgar por escritura pblica o acta extendida
ante cualquier oficial del Registro Civil y deber ser subinscrito al margen de la inscripcin de nacimiento del hijo dentro de los treinta das
subsiguientes a su otorgamiento. Este acuerdo establecer la frecuencia
y libertad con que el padre o madre que no tiene el cuidado personal
mantendr una relacin directa y regular con los hijos y podr revocarse
o modificarse cumpliendo las mismas solemnidades. / El cuidado personal compartido es un rgimen de vida que procura estimular la corresponsabilidad de ambos padres que viven separados, en la crianza y
educacin de los hijos comunes, mediante un sistema de residencia que
asegure su adecuada estabilidad y continuidad. / A falta del acuerdo del
inciso primero, los hijos continuarn bajo el cuidado personal del padre
o madre con quien estn conviviendo. / En cualesquier de los casos
establecidos en este artculo, cuando las circunstancias lo requieran y
el inters superior del hijo lo haga conveniente, el juez podr atribuir el
cuidado personal del hijo al otro de los padres, o radicarlo en uno solo
de ellos, si por acuerdo existiere alguna forma de ejercicio compartido.
Lo anterior debe entenderse sin perjuicio de lo dispuesto en el artculo
226. En ningn caso el juez podr fundar exclusivamente su decisin en
la capacidad econmica de los padres. / Siempre que el juez atribuya
el cuidado personal del hijo a uno de los padres, deber establecer, de
oficio o a peticin de parte, en la misma resolucin, la frecuencia y libertad con que el otro padre o madre que no tiene el cuidado personal
mantendr una relacin directa y regular con los hijos, considerando
su inters superior, siempre que se cumplan los criterios dispuestos en
el artculo 229. / Mientras una nueva subinscripcin relativa al cuidado
personal no sea cancelada por otra posterior, todo nuevo acuerdo o
resolucin ser inoponible a terceros.
582
Dispone este inciso que el padre o madre que ejerza el cuidado personal del
hijo no obstaculizar el rgimen de relacin directa y regular que se establezca
a favor del otro padre
199
Se entiende que ello ser posible, cuando por su edad y madurez, sea factible
que el hijo manifieste su opinin. Por lo dems, el derecho del nio a ser odo
se encuentra expresamente consagrado en la Convencin sobre los Derechos
583
del Nio, artculo 12, nmeros 1 y 2: Los Estados partes garantizarn al nio
que est en condiciones de formarse un juicio propio el derecho de expresar
su opinin libremente en todos los asuntos que afectan al nio, tenindose
debidamente en cuenta las opiniones del nio, en funcin de la edad y
madurez del nio. (artculo 12, nmero 1); se dar en particular al nio
oportunidad de ser escuchado en todo procedimiento judicial o administrativo
que afecte al nio, ya sea directamente o por medio de un representante o de
un rgano apropiado, en consonancia con las normas de procedimiento de la
ley nacional. (artculo 12, nmero 2). Se trata de una derivacin del derecho
a expresar libremente su opinin. Lo contempla tambin como uno de sus
principios rectores, el artculo 16, inciso 2 de la Ley nmero 19.968, sobre
Tribunales de Familia: El inters superior del nio, nia o adolescente, y su
derecho a ser odo, son principios rectores que el juez de familia debe tener
siempre como consideracin principal en la resolucin del asunto sometido a
su conocimiento. Tratndose de adolescentes (varones o mujeres que hayan
cumplido catorce aos), no cabe duda que siempre deben ser odos, a menos
que les afectare una discapacidad fsica o mental que lo hiciera imposible.
Si se trata de nios o nias, el juez tendr que ponderar si tienen la madurez
suficiente para ser odos. En otras legislaciones, se establece la obligacin del
juez a or al menor, a partir de cierta edad. As, el artculo 159 del Cdigo Civil
espaol dispone: Si los padres viven separados y no decidieren de comn
acuerdo, el Juez decidir, siempre en beneficio de los hijos, al cuidado de qu
progenitor quedarn los hijos menores de edad. El juez oir, antes de tomar
esta medida, a los hijos que tuvieran suficiente juicio y, en todo caso, a los que
fueren mayores de doce aos.
584
585
Estos criterios y circunstancias, ordena el inciso 1 del artculo, se considerarn y se ponderarn, en forma conjunta. Detengmonos en estas expresiones legales. Al decir la ley que los criterios y circunstancias deben considerarse, ordena con ello tenerlas presentes, describirlas, meditarlas o visibilizarlas en el proceso y
en la respectiva sentencia. Acto seguido, la ley manda ponderar
dichos criterios y circunstancias, lo que significa determinar en la
sentencia el peso que tienen en el asunto que el juez debe resolver.
Y todo ello, ha de hacerse en forma conjunta. Por ende, la sentencia respectiva debe referirse a todos y a cada uno de estos criterios
y circunstancias, pero nada obsta a que el juez le atribuya a uno
o algunos de stos un peso o valor mayor que a otro u otros, pues
tiene libertad para ponderarlos (aplicando, eso s, las reglas que conforman el sistema probatorio de la sana crtica, lo que excluye una
ponderacin caprichosa o antojadiza por parte del juez respectivo).
As, por ejemplo, consideradas y ponderadas las conductas del
padre y de la madre podra ocurrir que ambos resulten perfectamente idneos para detentar el cuidado personal de su hijo comn, pero
la opinin de ste exprese claramente una preferencia por uno de
ellos (siempre que por su edad y madurez, esto pudiere deducirse).
El juez, entonces, bien podra resolver a partir de esta ltima circunstancia, inclinando la balanza en favor del padre o de la madre.
Cabe notar tambin que el artculo no incluy directamente el
criterio de la edad del hijo, probablemente para apartarse de la llamada doctrina de los aos tiernos, que serva de fundamento a la
atribucin legal preferente a la madre, en virtud de la cual a menor
edad del hijo, mayor probabilidad de que su cuidado personal corresponda a la madre antes que al padre. Es cierto que en la letra
b) se alude a la edad del hijo, pero ello se hace en el marco de la
aptitud de los padres para garantizarle el bienestar y procurarle un
entorno de vida adecuado. Por lo dems, aunque en el Protocolo de
586
San Salvador (no ratificado por Chile), adicional al Pacto de San Jos
de Costa Rica, se declara que todo nio tiene el derecho a crecer
al amparo y bajo la responsabilidad de sus padres, en l se agrega
que salvo circunstancias excepcionales, reconocidas judicialmente,
el nio de corta edad no debe ser separado de su madre. De cualquier manera, la edad del nio o de la nia puede gravitar en la decisin del Juez, si consideramos que perfectamente podra incluirse
en la letra j) Cualquier otro antecedente que sea relevante atendido
el inters superior del hijo..
Advirtase asimismo que una de las circunstancias dice relacin
a c) La contribucin a la mantencin del hijo mientras estuvo bajo
el cuidado personal del otro padre, pudiendo hacerlo. Esta norma
debe ser comparada con lo que dispona el inciso 3 del antiguo
artculo 225: Pero no podr (el juez) confiar el cuidado personal
al padre o madre que no hubiese contribuido a la mantencin del
hijo mientras estuvo bajo el cuidado del otro padre, pudiendo hacerlo Aunque ahora se recoge esta situacin en la citada letra c), el
legislador lo hizo en trminos menos categricos. En otras palabras,
aunque el progenitor que reclame el cuidado personal del hijo no
hubiese contribuido a su mantencin mientras estuvo bajo el cuidado del otro de los padres, pudiendo hacerlo, tericamente podra
obtener el cuidado personal en cuestin, pues aunque el juez deba
considerar dicha circunstancia, la ley no contempla una prohibicin
similar a la que estableca el antiguo inciso 3 del artculo 225.
e. Se reemplaza el artculo 226, que se refiere a la hiptesis en
virtud de la cual se confa el cuidado personal del menor a terceras
personas, en caso de inhabilidad fsica o moral de ambos padres.
En lo sustancial, con la reforma slo se agrega que al confiar
el cuidado personal del hijo a una persona distinta de sus progenitores, ello ha de ocurrir velando por el inters superior del nio
587
conforme a los criterios (ms bien debi decir la ley conforme a las
circunstancias o conforme a los criterios y circunstancias, antes
que a los criterios, pues segn comentamos, los factores indicados
en el artculo 225-2 corresponden en su gran mayora a circunstancias, antes que a criterios) sealados en el artculo anterior. Su tenor
qued como sigue: Podr el juez, en el caso de inhabilidad fsica
o moral de ambos padres, confiar el cuidado personal de los hijos a
otra persona o personas competentes, velando primordialmente por
el inters superior del nio conforme a los criterios establecidos en
el artculo 225-2. / En la eleccin de estas personas se preferir a los
consanguneos ms prximos y, en especial, a los ascendientes..
El artculo 226 del Cdigo Civil debe vincularse con el artculo
42 de la Ley de Menores, al que aludiremos ms adelante, en cuanto
describe una serie de conductas en las que se presume inhabilidad
fsica o moral del padre o de la madre. Dichas presunciones, en
nuestra opinin, no admiten prueba en contrario.
f. Se agrega un nuevo inciso, tercero, al artculo 227, facultando al
juez para decretar apremios en contra de aqul a quien se le hubiere
ordenado hacer entrega del hijo o de especies del hijo, y no diere
cumplimiento a ello. El precepto tiene ahora el siguiente tenor: En las
materias a que se refieren los artculos precedentes, el juez oir a los
hijos y a los parientes. / Las resoluciones que se dicten, una vez ejecutoriadas, se subinscribirn en la forma y plazo que establece el artculo
225. / El juez podr apremiar en la forma establecida en el artculo
543 del Cdigo de Procedimiento Civil, a quien fuere condenado por
resolucin judicial que cause ejecutoria, a hacer entrega del hijo y no
lo hiciere o se negare a hacerlo en el plazo que se hubiere determinado para estos efectos. En igual apremio incurrir el que retuviere
especies del hijo y se negare a hacer entrega de ellas a requerimiento
del juez..
588
La reforma no hace ms que trasladar al artculo 227 del Cdigo Civil, aquello que dispone el inciso 3 del artculo 66 de la Ley de
Menores, al que hemos hecho referencia en este trabajo200.
Qu debemos entender por la frase especies del hijo contenida en el inciso final del artculo 227? Aunque no existe precisin
alguna en la ley, creemos que se trata, desde ya, de aquellos bienes
que resultan indispensables para la vida del menor, como vestuario, medicamentos que se le hubieren prescrito, utensilios de aseo
personal, tiles escolares, etc. Sin embargo, el menor puede tener
otros bienes, no comprendidos en las categoras anteriores, especialmente aquellos que emplea en sus juegos o recreacin. En este
punto, puede resultar problemtico exigir la entrega de bienes que
corresponden a implementos de video juegos, consolas, computadores personales, monitores, audfonos, etc., aparatos cuyo uso se
ha ido masificando entre los nios, que suelen tener un alto costo, y
que uno de los padres hubiere adquirido para el hijo y que tema que
puedan daarse al retirarse del lugar en que se encuentran.
g. Se derog el artculo 228. Este precepto aluda al caso en que
uno de los cnyuges tena un hijo, cuyo cuidado personal le corresponda, y pretenda que viviera en el hogar que el primero comparta
con su mujer o con su marido, que ciertamente no era a su vez progenitor de ese hijo. En dicha hiptesis, se requera el consentimiento
de ste ltimo cnyuge, para que el nio viviera en el hogar comn.
Artculo 66, inciso 3 de la Ley nmero 16.618: El que fuere condenado en
procedimiento de tuicin, por resolucin judicial que cause ejecutoria, a hacer
entrega de un menor y no lo hiciere o se negare a hacerlo en el plazo sealado
por el tribunal, o bien, infringiere las resoluciones que determinan el ejercicio
del derecho a que se refiere el artculo 229 del Cdigo Civil, ser apremiado en
la forma establecida por el artculo 543 del Cdigo de Procedimiento Civil. En
igual apremio incurrir el que retuviese especies del menor o se negare a hacer
entrega de ellas a requerimiento del tribunal.
200
589
590
El artculo 229 del Cdigo Civil debe vincularse tambin con los
siguientes artculos de la Ley nmero 16.618, Ley de Menores:
i) Artculo 48, que reglamenta la relacin directa y regular, cuando su rgimen fuere establecido por el juez, a falta de acuerdo de
los padres. Sus reglas son las siguientes: si los padres viven separados y no hubieren acordado el ejercicio de la relacin directa y
regular, cualquiera de ellos podr solicitar al juez de menores (hoy,
entindase juez de familia) que la regule. Si el ejercicio del derecho
se hubiere regulado de comn acuerdo o por sentencia judicial,
cualquiera de los padres podr pedir que el rgimen vigente se modifique, si fuere perjudicial para el bienestar del menor (inciso 1); si
se discutiere ante el juez de familia la determinacin de la persona
que tendr el cuidado personal del menor, y no se debatiere lo concerniente a la relacin directa y regular, la resolucin se pronunciar
de oficio sobre este punto, con el mrito de los antecedentes que
pues mientras aqul exige que la relacin sea personal, ste slo exige que la
relacin sea directa y regular. As, siendo el precepto del Cdigo Civil menos
riguroso, la relacin en cuestin bien podra mantenerse directamente pero
por correspondencia. Seala Mara Sara Rodrguez que la norma (el artculo
229) no exige, como lo hace la Convencin que le sirve de antecedente, que
la relacin deba ser personal o de cuerpo presente. En este aspecto dice la
autora citada-, la norma del artculo 229 parece ser una pequea regresin en
relacin al antiguo derecho, pues la visita siempre fue entendida como un
acto de cuerpo presente, personal: Rodrguez Pinto, Mara Sara, Derecho a
mantener una relacin directa y regular con los hijos, en Gaceta Jurdica
232, Santiago de Chile, ao 1999, pp. 31 y ss. Esta observacin se formulaba
tras entrar en vigencia la Ley nmero 19.585. En el texto que la Ley nmero
20.680 ha fijado para el artculo 229, no se innov en el punto, aunque s se
seala ahora que la relacin ha de ser sana y cercana. De cualquier manera,
creemos que el espritu de la ley supone que la vinculacin entre el padre o
madre y su hijo debe ser personal bajo cualquier circunstancia, a pesar de no
expresarlo as el artculo de marras. En la duda, adems, debe prevalecer la
primera de las normas, de rango superior.
591
constan del proceso (inciso 2); si por causa imputable a quien tenga el cuidado personal del menor, se frustra, retarda o entorpece de
cualquier manera la relacin directa y regular, el padre o la madre
a quien le corresponda podr solicitar la recuperacin del tiempo
no utilizado, lo que el tribunal dispondr prudencialmente (inciso
3); si el titular de la relacin directa y regular deja de cumplir con
la forma convenida o establecida para el ejercicio de su derechodeber injustificadamente, podr ser instado a darle cumplimiento,
bajo apercibimiento de decretar su suspensin o restriccin, lo que
no obstar a que se decreten apremios cuando procedan de conformidad al inciso 3 del artculo 66 (inciso 4); sin perjuicio de lo
dispuesto en el inciso anterior, la suspensin o restriccin del ejercicio del derecho proceder cuando manifiestamente perjudique el
bienestar del hijo. Si se acompaan antecedentes graves y calificados que lo justifique, podr accederse provisionalmente a la solicitud. La resolucin del tribunal deber ser fundada y cuando fuere
necesario para su adecuado cumplimiento, podr solicitarse que se
ponga en conocimiento de los terceros que puedan resultar involucrados, como los encargados del establecimiento educacional en
que estudie el menor (inciso 5); el juez, luego de or a los padres y a
la persona que tenga el cuidado personal del menor, podr conferir
derecho a visitarlo a los parientes que individualice, en la forma y
condiciones que determine, cuando parezca de manifiesto la conveniencia para el menor; y podr asimismo, suprimirlo o restringirlo
cuando pudiera perjudicar su bienestar (inciso 6).
ii) Artculo 48 ter, que constituye una manifestacin del principio
de la solucin integral, por el juez, de las diversas materias que afecten la relacin entre los padres y sus hijos, incluyendo entre ellas el
derecho-deber de comunicacin. Se establece en el precepto que en
caso de deducirse una demanda de alimentos a favor de los hijos,
o entre los cnyuges en forma adicional a aqulla, o se solicite la
592
593
Permite mantener con el menor una relacin directa, lo que implica que salvo razones que as lo aconsejen, no deben haber intermediarios que se interpongan entre el progenitor y su hijo menor.
La relacin, adems, ha de ser regular, ha de ejercerse con la
frecuencia que asegure cumplir con el objetivo buscado por el
legislador, y que no es otro que asegurar un vnculo de carcter
constante e indispensable para el desarrollo del menor; y
La relacin, finalmente, ha de ejercerse libremente, sin cortapisas o restricciones, salvo aquellas que resulten indispensables
atendida la edad del menor involucrado.
Carlos Garrido Chacana, por su parte, destaca las siguientes caractersticas:
i) Es un derecho-deber de los padres privados de la tuicin (sin
perjuicio de lo dispuesto en el inciso final del artculo 48 de la Ley
de Menores, en cuanto alude a los parientes). Evidencia de lo
anterior, es el hecho que pueda apremiarse al padre por el incumplimiento del derecho (artculos 48, inciso 4 y 66, inciso 3, de la
Ley nmero 19.968).
ii) Se trata de mantener con el hijo una relacin sin intermediarios
y barreras de ninguna especie y en la medida de lo posible, con una
frecuencia que se asemeje al tiempo que el hijo comparte con el
padre que tiene a su cargo el cuidado personal.
iii) Se puede regular primeramente por acuerdo directo entre los
padres y, supletoriamente, por el juez.
iv) La frecuencia y libertad de la relacin directa y regular con
los hijos, cuando la determina el juez, debe hacerse segn la conveniencia del hijo, no de uno u otro de los padres (artculo 229 del
Cdigo Civil).
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Tambin se vincula con la relacin directa y regular entre los abuelos y sus nietos
el artculo 8 de la Convencin de los Derechos del Nio, al que hemos aludido,
que consagra el derecho a la identidad. Dispone el precepto: 1. Los Estados Partes
se comprometen a respetar el derecho del nio a preservar su identidad, incluidos
la nacionalidad, el nombre y las relaciones familiares de conformidad con la ley sin
injerencias ilcitas. 2. Cuando un nio sea privado ilegalmente de algunos de los
elementos de su identidad o de todos ellos, los Estados Partes debern prestar la
asistencia y proteccin apropiadas con miras a restablecer rpidamente su identidad.
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599
205
206
Rodrguez Pinto, Mara Sara, ob. cit., p. 36, citada a su vez por Pinochet Olave,
Ruperto, ob. cit., p. 327.
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602
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615
NDICE
Introduccin...........................................................................5
Captulo i:
617
618
619
Capitulo ii:
620
621
Captulo iii:
623
Captulo iv:
Criterios jurisprudenciales recientes, en materia de
relacin directa y regular
A. Salida de menores del pas. Autorizacin del progenitor
a favor del cual existe un rgimen de relacin directa y
regular (sentencia I)...........................................................479
B. Privacin de libertad de la madre como causal de
suspensin del rgimen comunicacional con sus hijos
(sentencia II)......................................................................482
C. Procedencia del arresto decretado en contra de la madre,
que de manera contumaz desobedece cumplir con lo
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Captulo v:
reformas hechas al cdigo civil, en virtud de la ley n 20.680,
Publicada en el diario oficial de fecha 21 de junio de 2013......569
Bibliografa..........................................................................611
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