Reflexion Cargando El Venado
Reflexion Cargando El Venado
Reflexion Cargando El Venado
Estaba un hombre a la orilla del camino sentado en una piedra, bajo la sombra
de un frondoso Arbol
Aguantar cmo se me mete hasta los huesos el fro de las noches. Luego, por
fin, si la suerte me socorre y logro cazar un venado, todava tengo que cargarlo
en mis espaldas todo el largo camino de regreso al rancho y subir la cuesta de
la loma hasta llegar a mi casa.
Que una pierna pa' doa Juana, Que otra pa' doa Cleo, Que este lomito pa' mi
mam, que esto pa'll, Que las costillitas para mi hermana y a los dos o tres de
nuevo sin nada que comer y ah voy de tonto otra vez de cacera.
Dile que la invitas a la cacera para que los dos disfruten juntos de los bellos
paisajes, del esplendor de las estrellas que te cobijan en la noche, De los
manantiales cristalinos que reflejaran romnticamente sus imgenes,
La mujer, entusiasmada, se fue con la falda larga hasta el tobillo, poco a poco
se le desagarraba con las pas en el camino y al cruzar el primer "aguamal" se
redujo a minifalda porque la prenda qued desgarrada.
Toda vuelta polvo y sin aliento, estuvo a punto de sufrir un infarto al toparse
con una enorme vbora.
--Ahora, mi amor, quiero que cargues el venado para que veas lo bonito que se
siente -- le dijo el hombre masticando con una expresin rabiosa en cada una
de sus palabras.
Vuelta nada, casi muerta con las piernas temblando, jadeando y a punto de
reventarle el corazn, lleg y tir el animal en la sala de su casa.
"REFLEXIN"
Para valorar el esfuerzo ajeno y respetar la real dimensin del trabajo de los
dems, todos debemos aprender a "cargar el venado".
Y muchos otros como la comadre del cuento siempre esperan cual hienas a
que llegue el vecino, el amigo, el conocido o el desconocido con el venado a
cuesta para caerle y desgarrarlo, sin importar el esfuerzo que les ha costado
conseguirlo