Teatro Sobre Drogas

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 3

Ttulo de la obra: Pedro Desorientad0

1. Narrador (Voz en off)


2. Pedro (Nio inocente y desorientado)
3. Ral (Joven adicto)
4. Jos (Amigo de Ral)
5. Anthony (Amigo de Ral)
6. Esteban (Nio astuto)
7. Karen (Madre de Pedro-voz en off)
8. Isaas (Hombre sabio y consejero)

Acto I
Narrador: Pedro, un nio de tan solo 10 aos de edad, se encontraba un da andando por
las calles de su barrio, desorientado en el mundo, sin nada que comer, sin amigos, sin
nadie que entendiera la situacin por la que estaba pasando. Pues, recientemente acaba de
perder a su madre, su gran tesoro irreemplazable, debido a una grave enfermedad que la
haba acogido durante ms de siete aos.

(Pedro caminando por la calle, con las manos en el bolsillo mirando en todas las
direcciones)

Pedro: Madre!, cmo no he de extraarte, si fuiste quien me dio la vida. Mi nica


familia!.

Narrador: Con una gran tristeza en su rostro, y muy pensativo, Pedro observ con
detenimiento a tres jvenes sentados en una de las aceras de la calle, quienes no paraban
de fumar exageradamente.

Ral: Oye t!
Pedro: Quin, yo?
Ral: S, tu. No quieres un poco?, mira que te quitar ese pesar que tienes en tus ojos.

Narrador: Pedro muy inocente ante las realidades existentes en la vida, se acerc a ellos,
sin saber lo que le habra de acontecer.

(Pedro camina hacia Ral y sus dos amigos)


Pedro: Dime, tienes algo de comer?, tengo mucha hambre no he comido nada en todo el
da.
Ral: Tranquilo, en un rato conseguimos algo por ah, peroven! sintate con nosotros.
(Pedro se sienta al lado de Ral)
Ral: Cuntanos que te paso.
(Pedro mira al suelo con una gran tristeza en su rostro)
Pedro: Estoy muy triste!, porque el da de ayer falleci mi madre, y era la nica persona
que tena en el mundo.
Ral: Que mal amigo!, pero ven fuma un poco nada te pasar, al contrario te aliviar la
pena.
(Los amigos de Ral hacen seas a Pedro a modo de invitacin)
Jos y Anthony: Ven nio!, no te pasar nada.
Narrador: Pedro, ante la insistencia de Ral y la vociferacin de sus amigos, decide
aceptar la propuesta.

(Pedro comienza a rerse sin medida)


Ral: Cmo te sientes ahora?
Pedro: Siento como si me hicieran mil cosquillas en la pansa (Risas)
Ral: Ja ja ja!, bien amigo, bien.
(Ral y su grupo de amigos comienzan a rer al unsono)

Narrador: Al pasar los das, meses y aos, Pedro todo un joven ya quinceaero, se
situaba sumergido en una adiccin que a lo lejos pareca irreversible.

Acto II
(Pedro sentado con dos amigos en la acera, mientras por la calle pasaba un nio
desorientado como l hace unos aos)
Pedro: Hey amigo!, ven y comparte con nosotros, para que te relajes un poco.
Esteban: No amigo, pero gracias.
Pedro: Qu, me vas a decir que no quieres rerte un poco?, se nota a leguas que has
pasado una pena.
Esteban: S amigo, mi madre acaba de fallecer
Pedro: Con mayor razn, ven aqu muchacho, sintate un rato.
Esteban: Gracias amigo, es muy tentativa tu oferta, pero s que a mi madre le hubiese
gustado que luchase por mis sueos, y as lo har; aunque tenga que esforzarme y trabajar,
pero no me rendir.
(Esteban sigue caminando sin mirar atrs, mientras Pedro se queda pensativo)

Narrador: Ante las profundas palabras de aquel muchacho, inmediatamente Pedro


record la imagen de su bella madre, quien le dijo estas palabras minutos antes de su
muerte.

Karen: Hijo mo, promteme que nunca dejars de luchar por tus sueos. Recuerda que
aunque yo no este fsicamente en este mundo jams te abandonar!, siempre morare all
en tu hermoso corazn. No mires atrs, ms si adelante, recorriendo cada da el camino
correcto hacia la meta.

(Pedro cae en un profundo llanto)


Pedro: Madre!, como fue que olvid tus ltimas palabras y tu mayor deseo. Perdname!

Narrador: Aquel llanto de Pedro fue tan sincero, que al pasar por ah un hombre sabio de
edad ya avanzada, se detuvo a reconfortarlo.

Isaas: Joven, no s lo que te ha pasado, pero lo que hoy mi corazn te dice: es que nunca
es tarde para volver a empezar.

Narrador: Al or esas palabras, un gran gozo recorri el cuerpo de aquel joven, que un da
siendo nio, tomo la decisin equivocada.
(Pedro se levanta y abraza al caballero en agradecimiento)
Pedro: En mi inocencia, hace aos ca en un gran vicio, pero hoy decido levantarme con
mucho fervor, y animar aquellos nios como yo o como Ral, para que nunca permitan que
la situacin los lleve a caer en una irreparable adiccin.
FIN.

También podría gustarte