Escalas de Dolor
Escalas de Dolor
Escalas de Dolor
ESCALAS DE DOLOR
Generalmente se usan los diferentes métodos de medida del dolor en función de la edad
del niño, y se puede considerar las siguientes normas de modo orientativo:
• De 1 mes a 3-4 años: métodos conductuales.
• De 3-4 a 7 años: escalas autovalorativas cotejando con conductuales.
• Mayores de 7 años: escalas autovalorativas.
• Si se duda de la valoración, pasar a un grupo de edad menor.
• Los métodos conductuales se pueden usar en niños mayores con conciencia disminuida
o déficit neurológico. La utilización de los diferentes instrumentos según la edad,
dependerá del nivel evolutivo del niño.
El autoinforme “Diario de dolor”, con formato de diario, que incluye una escala de
respuesta tipo Likert con la siguiente gradación: 0=nada de dolor, 1= dolor ligero, 2=
dolor medio, 3= dolor moderado, 4= dolor severo; 5= dolor muy severo y la pregunta:
¿Cuánto dolor estás experimentando ahora?
El Cuestionario del dolor de McGill evalúa aspectos cuantitativos y cualitativos del dolor,
como son localización, cualidad, propiedades temporales e intensidad.
Subjetiva: Escala de Campbell - Behavioral pain assessment scale
En la escala visual analógica (EVA) la intensidad del dolor se representa en una línea de
10 cm. En uno de los extremos consta la frase de “no dolor” y en el extremo
opuesto “el peor dolor imaginable”. La distancia en centímetros desde el
punto de «no dolor» a la marcada por el paciente representa la intensidad
del dolor. Puede disponer o no de marcas cada centímetro, aunque para
algunos autores la presencia de estas marcas disminuye su precisión. La
EVA es confiable y válida para muchas poblaciones de pacientes. Aunque
la escala no ha sido específicamente testeada para
pacientes en terapia intensiva, ésta es frecuentemente
utilizada con esta población. Para algunos autores
tiene ventajas con respecto a otras. Es una
herramienta válida, fácilmente comprensible,
correlaciona bien con la escala numérica verbal. Los
resultados de las mediciones deben considerarse con un error de ±2mm. Por otro lado,
tiene algunas desventajas: se necesita que el paciente tenga buena coordinación motora y
visual, por lo que tiene limitaciones en el paciente anciano, con alteraciones visuales y en
el paciente sedado. Para algunos autores, la forma en la que se presenta al paciente, ya
sea horizontal o vertical, no afecta el resultado. Para otros, una escala vertical presenta
menores dificultades de interpretación para los adultos mayores, porque le recuerda a un
termómetro. 9 Un valor inferior a 4 en la EVA significa dolor leve o leve-moderado, un
valor entre 4 y 6 implica la presencia de dolor moderado-grave, y un valor superior a 6
implica la presencia de un dolor muy intenso. En algunos estudios definen la presencia
de Dolor cuando la EVA es mayor a 3.
La escala Critical-Care Pain Observation Tool (CPOT) fue desarrollada en base a una
serie de estudios dirigidos por Gélinas y col. (2004, 2005 y 2006). Incluye cuatro
categorías de comportamiento: expresión facial, movimiento corporal, tensión muscular
y asincronía con el ventilador / vocalización (según el paciente). Los ítems se puntúan de
0 al 2, con un total posible entre 0 y 8. Esta escala provee un score de intensidad de las
reacciones conductuales generadas por el paciente y no un score de intensidad de dolor
en sí mismo.
El CPOT debe ser utilizado de la siguiente manera. Se debe observar al paciente en reposo
durante un minuto para obtener el valor basal de CPOT. Luego, observar al paciente
durante maniobras que puedan resultar dolorosas (rolado, aspiración de secreciones,
higiene de heridas, etc) para detectar cualquier cambio de la respuesta ante el dolor. Se
debe anotar la mayor puntuación obtenida en cada categoría durante el período de
observación (que incluye el reposo y la maniobra dolorosa). El paciente debe ser evaluado
antes y en el momento de máximo efecto de la droga analgésica administrada para evaluar
si el tratamiento fue efectivo para lograr analgesia.
Idealmente esta escala descripta debe ser utilizada, al menos, cada 4 horas, respetando el
sueño, en todos los pacientes ingresados y más frecuentemente en los que refieren dolor,
para así poder evaluar la respuesta al tratamiento
Bibliografía:
M. J. Quiles Et Al. Rev.Soc. Esp. del Dolor, Vol. 11, N° 6, Agosto - Septiembre
2004.
Melzack, R., Katz, J. y Jeans, M.E. (1985). El papel de la compensación en el
dolor crónico: Análisis utilizando un nuevo método de puntuación del
Cuestionario McGill Pain. Pag, 23, 101-112.
Clarett, M. (2012). Escalas de evaluación del dolor y protocolo de analgesia en
terapia intensiva. Instituto argentino de diagnóstico y tratamiento.