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partes específicas (hojas, flores, frutos, cortezas, tallos o raíces), para tratar enfermedades
de personas o animales. La acción terapéutica (alivio o mejora), se debe a substancias
químicas llamadas principios activos. El uso de las plantas en la medicina tradicional se
remonta a tiempos prehistóricos, pero la ciencia actual ha permitido identificar, aislar y
producir cientos de principios activos para la elaboración de fármacos utilizados en el
tratamiento de diversas enfermedades. Sin embargo, el uso tradicional de plantas
medicinales aun persiste, especialmente en sociedades poco industrializadas con
dificultades de acceso a medicamentos. Así, la Organización Mundial de la Salud (OMS)
coordina una red para incentivar el uso seguro y racional de la medicina tradicional.1 La
planta medicinal suele prepararse de diferentes formas, en la medicina tradicional se
utilizan en infusiones, cocidas, en cataplasmas o en ensaladas para consumo directo. La
tecnología farmacéutica permite la aplicación de ciertos extractos de plantas medicinales en
presentaciones tipo cápsulas, comprimidos, cremas y jarabes.
El uso de remedios de origen vegetal se remonta a la época prehistórica, y fue una de las
formas más extendidas de medicina, en la que virtualmente todas las culturas conocidas
tienen evidencias del uso medicinal de algunas plantas. Si bien, el uso de especies vegetales
con fines terapéuticos es muy antigua, en un principio estuvo ligado a la magia, cada
población construyó sus creencias en un intento de comprender su medio inmediato,
algunas culturas hasta el día de hoy conservan estas creencias y la ciencia ha venido a
explicar críticamente cada planta cada extracto, cada fórmula, hallando precisamente los
principios activos responsables de la actividad biológica. La industria farmacéutica actual
se ha basado en los conocimientos científicos modernos para la síntesis y elaboración de
algunas moléculas farmacológicas análogas a las presentes en ciertas especies vegetales, y
que muchas sustancias derivadas forman parte de los principios activos de medicamentos
modernos, como la célebre aspirina.
Además, el proceso de verificación científico ha ayudado a encontrar este tipo de moléculas
en varias especies vegetales usadas tradicionalmente como plantas medicinales, explicando
ciertas propiedades terapéuticas de éstas, junto con descubrir compuestos que pueden servir
como base para el desarrollo de nuevos medicamentos para distintas aplicaciones. Muchos
de los fármacos empleados hoy en día —como el opio, la quinina, la aspirina o la digital—
replican sintéticamente o aíslan los principios activos de moléculas iguales presentes en
remedios vegetales tradicionales usados incluso en épocas prehistóricas, aun sin
conocimiento de sus principios activos. Su origen persiste en las etimologías —como el
ácido salicílico, así llamado por extraerse de la corteza del sauce (Salix spp.) o la digital, de
la planta del mismo nombre.
Los médicos tradicionales Kallawayas procedentes de Khanlaya (Bolivia), acudieron a tratar la epidemia de
malaria desencadenada durante la construcción del Canal de Panamá, cerca del año1888. Utilizaron
preparados de corteza de quina (Cinchona calisaya) para tratar la enfermedad.23
En 2012, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés)
publicó un compendio de especies vegetales que contienen sustancias de posible riesgo o
preocupación para la salud humana cuando son utilizadas en alimentos o complementos
alimenticios, que actualiza un listado previo de abril de 2009.11
Índice
1 Historia
o 1.1 Prehistoria
o 1.2 Antigüedad
o 1.3 Edad media
o 1.4 Edad moderna temprana
o 1.5 Siglos XIX y XX
2 Elementos medicinales: bases fitoquímicas
o 2.1 Alcaloides
o 2.2 Glicósidos
o 2.3 Polifenoles
o 2.4 Terpenos
3 Preparación y administración
4 Extracción de principios activos
5 Investigación y síntesis
6 Biodiversidad
7 Uso clínico: factores limitantes
8 Anexos y temas relacionados
9 Notas
10 Referencias
11 Bibliografía
12 Enlaces externos
Historia
Prehistoria
Las plantas fueron utilizadas desde tiempos prehistóricos como medicinas, aunque no
necesariamente con efectividad. Las especias fueron en parte utilizadas para contrarrestar el
deterioro de alimentos causado por bacterias, especialmente en climas cálidos1213 y
especialmente la carne, que es uno de los alimentos que se deterioran con más rapidez.14
Las angiospermas (plantas con flores) fueron originalmente la principal fuente de plantas
medicinales.15 Los asentamientos humanos estaban frecuentemente rodeados por malezas
que se utilizaban como plantas medicinales, tales como diente de león, ortiga y pamplinas.16
17
Se encontraron muestras de plantas en lugares de entierro prehistóricos, lo cual aporta
evidencia de que la gente ya tenía conocimiento del uso de plantas medicinales en el
Paleolítico. Por ejemplo, en el lugar de entierro de Neanderthales, Shanidar IV, en el norte
de Irak, que data de hace 60.000 años, se encontraron grandes cantidades de polen de 8
especies de plantas, 7 de ellas utilizadas en la actualidad como plantas medicinales.18 Por
otra parte, un hongo tipo seta fue encontrado en efectos personales del hombre de las nieves
Ötzi, cuyo cuerpo fue congelado en los Alpes de Ötztal por más de 5000 años. Este hongo
probablemente fue usado contra parásitos tricocéfalos (triquina).19
Antigüedad
Edad media
Este periodo vivió el florecimiento de las hierbas ilustradas a través de Europa, empezando
con la enciclopedia ilustrada Grete Herball (El gran herbario) en 1526. John Gerard
escribió El herbario o Historia General de las Plantas en 1597, basado en Rembert
Dodoens. Nicholas Culpeper publicó The English Physician Enlarged (El medico ingles
ampliado). Muchas plantas medicinales nuevas llegaron a Europa como productos de las
exploraciones. El intercambio colombino permitió la transferencia de ganado, cultivos y
tecnología entre el viejo mundo y las Américas durante los siglos XV y XVI. Las plantas
que llegaron a las Américas incluyen al ajo, jengibre y cúrcuma; mientras que otras como el
tabaco, café y coca viajaron en la otra dirección.3435 El Badianus Manuscript del siglo XVI
describe las hierbas medicinales de América Central.36
Siglos XIX y XX
El lugar de las plantas medicinales en la medicina del siglo XIX fue radicalmente alterado
con las aplicaciones del análisis químico. Los alcaloides fueron aislados de una serie de
plantas, empezando por la morfina, extraído de la amapola (Papaver somniferum) en 1806;
posteriormente se aisló la quinina del árbol de la quina y así muchos otros. Con el progreso
de la química, nuevas clases de substancia farmacológicamente activas fueron descubiertas
en diversas plantas medicinales. La comercialización de alcaloides extraídos y purificados
de plantas empezó en 1826 con la compañía Merck. En el siglo XIX, empezó a acrecentarse
notablemente la preferencia por alcaloides y glicósidos purificados sobre el uso de plantas
enteras.37 La primera síntesis de una substancia descubierta en una planta fue la del ácido
salicílico en 1853.38 El descubrimiento de drogas de plantas continuó siendo importante a lo
largo del siglo XX. Por ejemplo, se descubrieron importantes drogas anti cáncer de tejo y
vinca de Madagascar.38Actualmente, la plantas siguen siendo una de las fuentes más
importantes para el descubrimiento y desarrollo de fármacos.
La Vinblastina es una droga para tratar ciertas clases de cáncer. Robert Noble y Charles
Thomas Beer aislaron la vinblastina de la planta de Catharanthus de Madagascar.
Estos compuestos fitoquímicos tienen potencial uso como drogas . La digoxina, por
ejemplo, que se concentra en las hojas y flores de Digitalis purpurea como tóxico para
evitar su consumo por animales herbívoros, se emplea terapéuticamente como inotrópico
para los pacientes que padecen de arritmia cardíaca.40 Así, la investigación científica sobre
la composición y la actividad farmacológica de éstos compuestos presentes en las plantas,
constituye la base científica para su aplicación en la medicina moderna. Los principales
grupos de compuestos fitoquímicos con actividad farmacológica son los alcaloides,
glicósidos, polifenoles y terpenos.
La quinina era el principal compuesto empleado en el tratamiento de la malaria hasta que
fue sustituido por otros medicamentos sintéticos más eficaces. Se encuentra en la corteza de
la quina (Cinchona calisaya)
Alcaloides
Glicósidos
Los glicósidos son otro grupo altamente diverso de moléculas sintetizadas por las plantas,
se caracterizan por la presencia de al menos un azúcar enlazado a otro grupo funcional. Los
glicósidos de mayor uso medicinal incluyen laxantes y cardiotónicos. Por ejemplo, plantas
como la senna, el ruibarbo y aloe producen glicósidos laxantes.42 Las digitales (Digitalis) y
Convallaria majalis sintetizan potentes cardiotónicos que ayudan a los latidos cardíacos:
digoxina y digitoxina.4344 Además, éstos puden actuar como diuréticos.
El timol es uno de los principales componentes de los aceites esenciales del tomillo
(Thymus vulgaris) y orégano (Origanum majorana).
Polifenoles
Los polifenoles están ampliamente presentes en todo tipo de plantas. Tienen diversas
funciones como la defensa contra fitopatógenos y depredadores. Los fitoestrógenos son
compuestos fenólicos similares a las hormonas estrogénicas humanas45 y las plantas que los
producen se han administrado por centurias para tratar desórdenes ginecológicos asociados
a la fertilidad, menstruación y menopausia. Estas plantas incluyen el hinojo, anís y algunas
especies de los géneros Pueraria, Angelica. Por otra parte, muchos extractos de polifenoles,
tales como extractos de semillas de uva u oliva, se venden como suplementos dietéticos y
cosméticos sin ninguna prueba o estamento legal que demuestre beneficios para la salud.
Terpenos
Preparación y administración
Infusión de hojas de coca (Erythroxylum coca) utilizado para tratar el "mal de altura" en las
zonas altas de los Andes, principalmente en Bolivia y Perú.
Las plantas medicinales se preparan y administran de diversas formas, la más frecuente es
la infusión, así, los principios activos se disuelve en agua mediante una cocción más o
menos larga. La tisana resultante se bebe; plantas empleadas de este modo incluyen la tila
(Tilia platyphyllos), cuyo principio activo es el eugenol, la pasionaria (Passiflora edulis),
cuyos principios activos incluyen el harmol y el harmano, o el mismo café (Coffea
arabica), cuya infusión contiene cafeína. También se pueden administrar en tinturas,
comiendo directamente, inhalando el humo de su combustión, tópicamentenota 1 como
emplastos,nota 2 cataplasmas y otras como se describe a continuación:
1. Selección del material vegetal. Es decir, selección de las plantas o partes de ellas
(hojas, semillas, flores, cortezas, o raíces) que se someterán al estudio.
2. Extracción. El material vegetal es sometido a procesos de extracción de sus
compuestos químicos por diversas técnicas, convencionales y otras en desarrollo. La
extracción convencional es de tipo sólido-líquida, donde se utiliza agua o solventes
orgánicos como por ejemplo hexano, diclorometano, acetato de etilo y metanol.
Recientes técnicas de extracción denominadas no convencionales incluyen el uso de
microondas, utlrasonido, fluidos supercríticos, líquidos presurizados, extracción
hidrotrópica y extracción asistida por enzimas.
3. Ensayo biológico. Se determinan propiedades biológicas del extracto, por ejemplo
actividad contra bacterias, hongos, virus u otros patógenos. Además, se pueden
hacer pruebas bioquímicas in vitro, para determinar actividad inhibitoria de
determinadas enzimas, y actividad antioxidante.
4. Preparación de muestras. Los extractos crudos con actividad biológica se someten
a un tratamiento para eliminar substancias que podrían interferir con las etapas
posteriores de purificación de los principios activos. Así, en esta etapa se eliminan
substancias comunes como pigmentos, lípidos y taninos. Las técnicas más utilizadas
son líquido-líquido, extracción en fase sólida, cromatografía de exclusión molecular
y absorción en resinas macroporosas.
5. Purificación biodirigida. Las muestras pre-tratadas son complejas puesto que
contienen una mezcla de substancia de las cuales debe ser aislado el o los principios
activos. Para ello se integra una serie de técnicas de separación (fraccionamiento),
donde cada fracción obtenida se somete a pruebas de actividad biológica de interés.
Así, la purificación biodirigida implica repetitivos fraccionamientos seguidos de
ensayos biológicos hasta el aislamiento de los compuestos puros de la actividad
biológica de interés.
6. Determinación estructural. Los compuestos aislados y purificados se someten a
estudios instrumentales para elucidar sus estructuras moleculares. La espectrometría
de masas permite determinar la composición química, mientras que la
espectroscopía de resonancia magnética nuclear permite determinar los diferentes
enlaces químicos entre los átomos que constituyen las moléculas aisladas. Además,
se utilizan otras técnicas como la espectrofotometría ultravioleta e infraroja.
Investigación y síntesis
Mientras la medicina herbal tradicional utilizaba partes o extractos vegetales, la necesidad
de comprender con precisión el uso de los distintos componentes, de graduar con precisión
la dosis empleada y de elaborar de manera estandarizada fármacos homogéneos han llevado
a que la mayoría de las drogas producidas por la industria farmacéutica contengan sólo el o
los principios activos. En algunos casos, éstos aún se obtienen del procesamiento de las
plantas medicinales; en otros casos, éstos se investigan para aislar el principio activo, y éste
se sintetiza luego de manera artificial. La investigación de las propiedades medicinales de
una planta es una labor compleja, que abarca desde los informes etnográficos de los
etnólogos hasta el análisis de laboratorio de químicos y médicos.
Biodiversidad
En el curso del siglo XIX, se aislaron los principios activos de las especies vegetales con
mayor impacto en la clínica médica. Hasta entonces, las limitaciones intrínsecas de las
fórmulas vegetales habían impedido la titulación de valores óptimos para dosis activa
mínima, margen de seguridad de la sustancia, y dosis letal media. En este sentido, se veían
incrementados los riesgos de sobredosis agudas o intoxicación accidental. Lo mismo
sucedía con la incidencia de reacciones adversas imprevistas, por causa de alguno de los
innumerables compuestos presentes en los preparados naturales.
Incluso en la actualidad, persiste la predilección del público no especializado por las
formulaciones vegetales. No obstante, estudios sistemáticos han establecido de manera
concluyente la mayor fiabilidad de las moléculas aisladas. Para el caso de sustratos
vegetales administrados con fines terapéuticos, el perfil de eficacia y seguridad es
claramente desventajoso respecto del que cabe atribuir a sus principios activos en forma
pura.
Notas
1.
Referencias
1.
47. Brusotti, G.; Cesari, I.; Dentamaro, A.; Caccialanza, G.; Massolini, G. (2014).
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