La Liebre y La Tortuga

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La liebre y la tortuga

Hoy les vengo a contar una hermosa fábula que es un pequeño cuento con una
enseñanza, esta se llama “la liebre y la tortuga” un día estos dos animalitos decidieron
competir en una carrera. Uds se preguntarán como una tortuga conocida por ser muy
lenta podría competir con una liebre la mas rápida del bosque?! Aquí comienza esta
historia…

Era un lindo día soleado en el bosque (entra el sol y queda pegado en la pared) y se
escuchaba un gran silencio hasta que una voz muy especial irrumpió…

Liebre: (entra la liebre jactándose de su rapidez y planteando el desafío de competir con


ella)

Los animales del bosque (entran los otros animales) comenzaron a reunirse para escuchar
los alardes de la liebre, pero como era de esperar ninguno se atrevía a desafiarla hasta
que en medio del murmullo se oyó un voz……

Tortuga: (la tortuga temerosa levanta su mano y acepta el desafío) “esta bien liebre,
echare una carrera contigo”

Liebre: (al escuchar que alguien aceptaba competir con ella se dio vuelta y fuerte
pregunto ) ¿quién será el valiente?

Tortuga: (con voz tímida y temblorosa) Yo

Liebre: (mira a la tortuga y comienza a burlarse cayendo al suelo de rodillas y golpeando


el suelo con los puños) “Queeeeeeee? Tú eres la mas lenta de todo el bosque! No tienes
nada que hacer conmigo.

Tortuga: (segura) puede que seas rápida pero la velocidad no es todo, antes de presumir
tendrás que ganarme.

(mientras la liebre y la tortuga se retiran de escena)

Liebre: jajaja nunca escuche algo tan ridículo!

Aquella noche los animales prepararon la pista (pegar la meta). La tortuga se fue a dormir
para preparar su cuerpo para tener energía el día siguiente, mientras que la liebre se
quedo despierta hasta tarde boxeando con sus amigos (la liebre se acerca a boxear con un
animal peluche)
A la mañana siguiente el bosque vibraba de emoción hasta ese día nadie había desafiado a
la liebre “esto estará muy interesante” decían entres si los animales, quienes se
amontonaron en la línea de salida para ver como comenzaba la carrera.

(animales se ubican en la partida, la liebre y la tortuga con cintillo también)

Todos querían que la tortuga ganase pero sabían que era casi imposible. La tortuga estaba
tranquila en la línea de salida, miraba a su alrededor buscando a la liebre la que acababa
de llegar y la cual no perdió el tiempo de burlarse y recordarles a todos que era la mas
veloz.

Comenzó la cuenta regresiva 3, 2, 1 listos ya! Comenzó la carrera los animales vociferaban
alentando a los competidores: “guau”, “Grrrr”, “auuuuu”

La liebre salió disparada, la tortuga con lento caminar. La rápida liebre al ver que la
tortuga andaba leeeeeeeeenta y se veía muy lejos (la liebre mira hacia atrás con gesto de
búsqueda) decidió detenerse.

Liebre: (se acomoda a un costado de la pista se recuesta come, aprovecha de burlarse de


la tortuga y luego decide descansar.)

Y como tenia tanto sueño se puso a dormir como un tronco. Un rato después la tortuga
llego hasta donde estaba la liebre durmiendo y pensó….

Tortuga: (se detiene y mira la liebre) “quizás debería despertarla, pero seguro que con lo
malhumorada que es lo mas se moleste conmigo” ( sigue su camino).

Y así la tortuga siguió su camino des-pa-ci-to paso a pasito, mientras la liebre dormía y
soñaba que todos los animales le aplaudían y animaban a cruzar la meta.

Ya casi anochecía y la liebre se despertó sobresalta…

Liebre: se pone de pie de un salto “¡No puede ser!” y se echo a correr

Y corrió tan rápido, pero tan rápido que ni las patas se le veían…y no me van a creer por
mas que se esforzó ya era demasiado tarde la tortuga cruzo la meta justo antes que lo
hiciera la liebre. La tortuga había ganado sin hacer burlas y así se convirtió en la heroína
del bosque (animales se acercan a celebrar), la liebre aunque molesta le entrego la
medalla del triunfo y molesta se fue a su casa.

Liebre: (caminando derrotada) “¿Como es posible que me haya ganado si yo soy mas
veloz?”
De ahí en adelante cada vez que la liebre quería presumir de su rapidez alguien le
recordaba que lento sin burlas y esforzándose la tortuga la había vencido.

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