Tesis Artritis Reumatoide
Tesis Artritis Reumatoide
Tesis Artritis Reumatoide
Tesis Doctoral
Sevilla 2015
Eficacia de los marcadores bioquímicos para el
diagnóstico y pronóstico de la Artritis Reumatoide en
pacientes que acuden a una consulta de atención
especializada
Tesis Doctoral
Sevilla 2015
I
ISBN 978-84-608-1897-7
© José Luis García de Veas Silva, Septiembre 2015, Sevilla
II
Universidad de Sevilla
Facultad de Medicina
Departamento de Bioquímica Médica y Biología Molecular
Programa de Doctorado de Bioquímica Médica
Directoras de Tesis
Tutor de Tesis
III
IV
DOÑA CONCEPCIÓN GONZÁLEZ RODRIGUEZ, Facultativa
Especialista de Área en la Unidad de Bioquímica Clínica del Hospital
Universitario Virgen Macarena de Sevilla hace constar que el trabajo
titulado: “Eficacia de los marcadores bioquímicos para el diagnóstico
y pronóstico de la Artritis Reumatoide en pacientes que acuden a
una consulta de atención especializada”, ha sido realizado por JOSÉ
LUIS GARCÍA DE VEAS SILVA bajo mi dirección, en la Unidad de
Bioquímica Clínica del Hospital Universitario Virgen Macarena de la UGC
Intercentro de Laboratorio de los Hospitales Universitarios Virgen
Macarena y Virgen del Rocio de Sevilla.
A mi juicio reúne los méritos suficientes para ser presentado como Tesis
Doctoral ante el tribunal correspondiente en la Facultad de Medicina de la
Universidad de Sevilla.
Y para que así conste a todos los efectos, firmo el presente certificado en
Sevilla a 1 de Julio de dos mil quince.
V
VI
DOÑA BLANCA HERNÁNDEZ CRUZ, Facultativa Especialista de Área
en la Unidad de Gestión Clínica de Reumatología del Hospital
Universitario Virgen Macarena de Sevilla hace constar que el trabajo
titulado: “Eficacia de los marcadores bioquímicos para el diagnóstico
y pronóstico de la Artritis Reumatoide en pacientes que acuden a
una consulta de atención especializada”, ha sido realizado por JOSÉ
LUIS GARCÍA DE VEAS SILVA bajo mi dirección, en la Unidad de
Bioquímica Clínica del Hospital Universitario Virgen Macarena de la UGC
Intercentro de Laboratorio de los Hospitales Universitarios Virgen
Macarena y Virgen del Rocio de Sevilla.
A mi juicio reúne los méritos suficientes para ser presentado como Tesis
Doctoral ante el tribunal correspondiente en la Facultad de Medicina de la
Universidad de Sevilla.
Y para que así conste a todos los efectos, firmo el presente certificado en
Sevilla a 1 de Julio de dos mil quince.
VII
VIII
DON RAIMUNDO GOBERNA ORTIZ, Catedrático del Departamento de
Bioquímica Médica, Biología Molecular e Inmunología de la Facultad de
Medicina de la Universidad de Sevilla hace constar que el trabajo
titulado: “Eficacia de los marcadores bioquímicos para el diagnóstico
y pronóstico de la Artritis Reumatoide en pacientes que acuden a
una consulta de atención especializada”, ha sido realizado por JOSÉ
LUIS GARCÍA DE VEAS SILVA bajo mi tutela, en la Unidad de
Bioquímica Clínica del Hospital Universitario Virgen Macarena de la UGC
Intercentro de Laboratorio de los Hospitales Universitarios Virgen
Macarena y Virgen del Rocio de Sevilla.
A mi juicio reúne los méritos suficientes para ser presentado como Tesis
Doctoral ante el tribunal correspondiente en la Facultad de Medicina de la
Universidad de Sevilla.
Y para que así conste a todos los efectos, firmo el presente certificado en
Sevilla a 1 de Julio de dos mil quince.
IX
X
A mis padres, por darme más de lo que nunca podré agradecer.
XI
XII
Agradecimientos
A mi familia, a quienes debo lo que soy, por enseñarme el valor del trabajo y la
humildad y por su confianza y apoyo. Especialmente a mis padres que me estimularon
a superarme y que son un ejemplo de esfuerzo y dedicación al trabajo.
A las Dras. Concha González y Blanca Hernández por confiar en este proyecto y
darme la oportunidad de realizarlo bajo su dirección, por enseñarme la importancia del
rigor en el trabajo y aconsejarme profesionalmente. También por inculcarme el interés
por la Autoinmunidad y la Bioestadística, sin ellas no hubiera sido posible este trabajo
ni mi desarrollo profesional en el área de la Autoinmunidad.
Al Dr. Víctor Sánchez Margalet por abrime las puertas al campo de la investigación
clínica, guiarme y ayudarme en mis inicios en la investigación con el estudio realizado
sobre el lavado broncoalveolar.
XIII
A mis compañeros residentes durante mi formación en Bioquímica Clínica, por su
ayuda, consejos y compañía en esa etapa, especialmente a Silvia, Vicky, Berta, Rufino
y Carmen. A Elvira y Manu por enseñarme fisiopatología en mis primeros meses en el
hospital y hacerme más fácil la adquisición de conocimientos médicos.
A las técnicos del Laboratorio de Urgencias por la ayuda que nos han prestado a los
residentes en las guardias día a día, haciéndonos más llevadero el trabajo y
permitiéndome aprovechar ratos para recopilar datos de pacientes para la tesis.
A los pacientes incluidos en este estudio ya que sin ellos este trabajo no hubiera sido
posible.
Por último, a todos los compañeros del Hospital Universitario Virgen Macarena, y a
todos aquellos que aunque no aparezcan aquí mencionados, han contribuido de una
forma u otra a que este trabajo se haya hecho realidad, a los que en algún momento
de la elaboración de esta tesis hicieron su aportación.
XIV
XV
XVI
Tabla de Contenidos
ABREVIATURAS Y ACRÓNIMOS 5
FIGURAS 9
TABLAS 13
PARTE I INTRODUCCIÓN 17
1 Artritis Reumatoide 19
1
3 Citrulinización. Hipótesis del epitopo compartido citrulinado 63
3.1 Citrulinización 63
3.2 Hipótesis del Epitopo Compartido Citrulinado 65
3.3 Hábito tabáquico, epitopo compartido y citrulinización 67
3.4 Fenotipos clínicos de la enfermedad 70
3.5 Periodontitis y citrulinización 71
1) Diagnóstico de AR 84
2) Diferenciar la AR de otras patologías 85
3) Diagnóstico de AR precoz o de inicio reciente 87
4) Pronóstico de la AR y predicción de enfermedad severa 89
5) Monitorización de las intervenciones terapéuticas 91
1 Justificación 101
2
PARTE III MATERIALES & MÉTODOS 107
3
6 Valor diagnóstico de los biomarcadores en una consulta especializada de Artritis 163
Precoz
9 Interacción entre el hábito tabáquico y el epitopo compartido sobre los anticuerpos en 175
los pacientes con Artritis Reumatoide
4
ABREVIATURAS Y ACRÓNIMOS
25[OH]D 25-hidroxivitamina D
AC Artritis por cristales
ACR American College of Rheumatology
ACPA Anticuerpos contra proteínas y/o péptidos citrulinados
AFA Anticuerpos anti-filagrina
AI Artritis indiferenciada
AINES Antiinflamatorios no esteroideos
AKA Anticuerpos anti-queratina
ANAs Anticuerpos antinucleares ó anticelulares
ANCAs Anticuerpos anti-citoplasma de neutrófilos
ANOVA Análisis de la varianza
Anti-CCP Anticuerpos anti-péptido citrulinado cíclico
Anti-CCP1 Anticuerpos anti-péptido citrulinado cíclico de primera generación
Anti-CCP2 Anticuerpos anti-péptido citrulinado cíclico de segunda generación
Anti-CCP3 Anticuerpos anti-péptido citrulinado cíclico de tercera generación
Anti-CEP Anticuerpos anti-alfa enolasa péptido-1 citrulinado
Anti-DNA Anticuerpos anti-DNA de doble cadena
Anti-GPI Anticuerpos anti-glucosa-6-fosfato isomerasa
Anti-MCV Anticuerpos anti-vimentina mutada citrulinada
Anti-RA33 Anticuerpos anti-ribonucleoproteína heterogénea nuclear A2
Anti-Sa Anticuerpos anti-vimentina citrulinada
Anti-TNF Fármacos inhibidores del factor de necrosis tumoral
AFP Anticuerpos anti-factor perinuclear
aPL Anticuerpos anti-fosfolípidos
AR Artritis Reumatoide
AT Artromialgias no inflamatorias
AUC Área bajo la curva (Area under curve)
BAL Lavado broncoalveolar
CCP Péptido citrulinado cíclico
CCP1 Péptido citrulinado cíclico de primera generación
CCP2 Péptido citrulinado cíclico de segunda generación
CCP3 Péptido citrulinado cíclico de tercera generación
CPA Péptidos citrulinados
COMP Proteína oligomérica de matriz del cartílago
COXIB Inhibidores selectivos de ciclooxigenasa-2
CV Coeficientes de variación
CTLA4 Antígeno linfocitario citotóxico 4
DAS Disease Activity Score sobre 44 articulaciones y basado en la VSG
DAS-PCR DAS calculado con la formulación basada en la PCR
DAS28 Disease Activity Score sobre 28 articulaciones y basado en la VSG
5
DAS28-PCR DAS28 calculado con la formulación basada en la PCR
DHEA Dehidroepiandrosterona
DE Desviación estándar
DO Densidad óptica
E Especificidad
EA Espondilitis anquilosante
EC Epítopo compartido
EGP Evaluación global de la enfermedad por el paciente
EGM Evaluación global de la enfermedad por el médico
ELISA Ensayo por inmunoabsorción ligado a enzimas
EITC Enfermedad indiferenciada del tejido conectivo
EMTC Enfermedad mixta del tejido conectivo
EPISER Estudio de prevalencia de enfermedades reumáticas en la población española
ET Error típico
EULAR European League Against Rheumatism
EVA Evaluación del dolor por el paciente
Fab Fragmento de unión al antígeno de las inmunoglobulinas
FARMES Fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad
Fc Fracción constante de las inmunoglobulinas
FR Factor reumatoide
GGT Gamma glutamil transferasa
GOT Transaminasa glutámico oxalacético
GPT Transaminasa glutámico pirúvico
GWAS Estudios de asociación de genoma completo (genome wide association studies)
HA Hipotiroidismo autoinmune
HAQ Health Assessment Questionnarie
HLA Antígeno leucocitario humano (Human Leukocyte Antigen)
HLA-DRB1 Región génica codificante de la cadena beta del MHC humano de clase II
hnRNPs Ribonucleoproteínas nucleares heterogéneas
HSPs Proteínas de choque térmico (Heat Shock Proteins)
IC95% Intervalo de confianza al 95%
IFI Inmunofluorescencia indirecta
IL-1 Interleucina 1
IL-6 Interleucina 6
IL-17 Interleucina 17
ILs Interleucinas
IFN-γ Interferon gamma
IRF-5 Factor regulador del interferon 5
IT Índice de Tabaquismo
LES Lupus eritematoso sistémico
LFN Leflunomida
LR+ Razón de verosimilitud positiva (Likelihood ratio positivo)
6
LR- Razón de verosimilitud negativa (Likelihood ratio negativo)
Me (IQR) Mediana (Rango Intercuartílico)
MHC Complejo mayor de histocompatibilidad humano
MMPs Metaloproteinasas
MTX Metotretaxo
NAD Recuento o número de articulaciones dolorosas basado en 28 articulaciones
NAI Recuento o número de articulaciones inflamadas basado en 28 articulaciones
NSC Normal Scores Transformation
OPGL Ligando de unión a la Osteoprotegerina
OR Odd Ratio
P. gingivalis Porphyromonas gingivalis
PAD Peptidil arginil desaminasa
PADI4 Peptidil arginil desaminasa tipo 4
paq. paquetes
PCR Proteína C reactiva
PPAD Peptidil arginil desaminasa bacteriana
PSA Artritis psoriásica
PTPN22 Proteína tirosina fosfatasa no receptor 22
RANKL Ligando de unión al Receptor Activador del Factor Nuclear Kappa-B
RAP Modelo de protección de la AR (RA-protection)
ROC Característica Operativa del Receptor (Receiver Operating Characteristic)
RR Riesgo relativo
RUNX1 Factor de transcripción relacionado con runt 1
S Sensibilidad
SER Sociedad Española de Reumatología
SLC22A4 Transportador soluble de cationes orgánicos 4
SNPs Polimorfismos de un solo nucleótido
snRNPs Ribonucleoproteínas nucleares pequeñas
SS Síndrome de Sjögren
STAT4 Transductor de señal y activador de la transcripción tipo 4
T2T Treat to target
TCR Receptor de células T
TNF-α Factor de necrosis tumoral alfa
TNFR2 Receptor 2 del factor de necrosis tumoral
TRAF1 Factor 1 asociado al receptor del TNF
VHC Virus de la hepatitis C
VSG Velocidad de sedimentación globular
VN Valores normales o de referencia
VPN Valor predictivo negativo
VPP Valor predictivo positivo
WTCCC Welcome Trust Case Control Consorcium
7
8
FIGURAS
Figura 2. Patogénesis de la AR
Figura 6. Curso de la AR
Figura 18. Hipótesis etiológica del modelo de desarrollo de una AR con anti-CCP
positivos desde un estado pre-enfermedad a una poliartritis crónica que cumple los
criterios de AR
Figura 19. Riesgo relativo (RR) para el desarrollo de AR en fumadores actuales con
diferentes número de copias de alelos del EC comparado con no fumadores
9
Figura 24. Detección de anticuerpos anti-factor perinuclear mediante IFI
Figura 30. Escala empleada para la evaluación del dolor por el paciente, la evaluación
global de la enfermedad por el paciente y por el médico
Figura 32. Índice de tabaquismo en los sujetos fumadores de cada grupo estudiado
según el hábito tabáquico
Figura 34. Patrones por IFI observados en los pacientes con ANAs positivos
Figura 37. Frecuencia de las combinaciones alélicas del epitopo compartido en los
grupos AR, NOAR y CONTROL
Figura 39. Curva ROC de los marcadores bioquímicos de los pacientes en el grupo
AR respecto al grupo NOAR+CONTROL
Figura 40. Curva ROC de los marcadores bioquímicos de los pacientes en el grupo
AR respecto al grupo NOAR
Figura 43. Niveles de anti-CCP (U/mL) en pacientes con AR según el hábito tabáquico
10
Figura 46. Niveles de FR (UI/mL) en pacientes con AR según el índice de tabaquismo
Figura 47. Porcentaje de pacientes con anti-CCP positivos y negativos según el hábito
tabáquico en los pacientes diagnosticados de AR y con EC positivo
Figura 48. Porcentaje de pacientes con anti-CCP positivos y negativos según el hábito
tabáquico en los pacientes diagnosticados de AR y con EC negativo
Figura 49. Porcentaje de pacientes con anti-CCP positivos y negativos según el índice
de tabaquismo en los pacientes diagnosticados de AR y con EC negativo
Figura 50. Porcentaje de pacientes con anti-CCP positivos y negativos según el índice
de tabaquismo en los pacientes diagnosticados de AR y con EC positivo
Figura 51. Niveles de anti-CCP (U/mL) en los pacientes con AR según las
combinaciones de las variables epitopo compartido y hábito tabáquico
Figura 52. Niveles de FR (UI/ml) en los pacientes con AR según las combinaciones de
las variables epitopo compartido y hábito tabáquico
Figura 54. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los pacientes
con anti-CCP negativo (<120 U/mL) y con anti-CCP positivo (>120 U/mL)
Figura 55. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los pacientes
con anti-CCP negativo (<120 U/mL) y con anti-CCP positivo (>120 U/mL)
Figura 57. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los pacientes
con FR negativo (<60 UI/mL) y con FR positivo (>60 UI/mL)
Figura 58. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los pacientes
con FR negativo (<60 UI/mL) y con FR positivo (>60 UI/mL)
Figura 60. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los pacientes
con EC negativo y positivo
Figura 61. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los pacientes
con EC negativo y positivo
Figura 65. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los pacientes
con anti-CCP negativo (<40 U/mL) y con anti-CCP positivo (>40 U/mL)
11
Figura 66. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los pacientes
con anti-CCP negativo (<40 U/mL) y con anti-CCP positivo (>40 U/mL)
Figura 68. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los con FR
negativo (<20 UI/mL) y con FR positivo (>20 UI/mL)
Figura 69. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los pacientes
con FR negativo (<20 UI/mL) y con FR positivo (>20 UI/mL)
12
TABLAS
Tabla 4. Riesgo específico para los alelos del EC HLA-DRB1 para AR severa relativo
a DRX/DRX calculado usando la frecuencia observada en controles
Tabla 10. Variables del modelo predictivo de una artritis persistente erosiva
Tabla 17. Índice de tabaquismo en los sujetos fumadores de cada grupo estudiado
según el hábito tabáquico
Tabla 20. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el factor reumatoide en los
pacientes con AR
Tabla 21. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el factor reumatoide en los
pacientes del grupo NOAR
13
Tabla 22. Valores de sensibilidad, especificidad, VPP, VPN, LR+, LR- y OR
diagnóstico de los marcadores bioquímicos en los pacientes del grupo AR respecto al
grupo NOAR+CONTROL
Tabla 23. Área bajo la curva ROC de los marcadores bioquímicos de los pacientes en
el grupo AR respecto al grupo NOAR+CONTROL
Tabla 25. Área bajo la curva ROC de los marcadores bioquímicos de los pacientes en
el grupo AR respecto al grupo NOAR
Tabla 32. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el hábito tabáquico en los
pacientes con AR estratificado según el EC
Tabla 33. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el índice de tabaquismo en los
pacientes con AR estratificado según el EC
Tabla 34. Análisis multivariante por regresión logística de las variables que influyen
independientemente en la presencia de anticuerpos anti-CCP en los pacientes con AR
Tabla 37. Modelo lineal general univariante para el estudio de la interacción entre el
epitopo compartido y el hábito tabáquico sobre los niveles de anti-CCP y de FR
Tabla 39. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados para
los pacientes con anti-CCP negativo (<120 U/mL) y con anti-CCP positivo (>120 U/mL)
durante los 3 años de seguimiento
14
Tabla 40. Características basales de los pacientes con AR estratificados según la
positividad para el FR
Tabla 41. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados para
los pacientes con FR negativo (<60 UI/mL) y con FR positivo (>60 UI/mL) durante los 3
años de seguimiento
Tabla 43. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados para
los pacientes con EC negativo y con EC positivo durante los 3 años de seguimiento
Tabla 45. Preparación de los reactivos para la determinación del epitopo compartido
Tabla 50. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados para
los pacientes con anti-CCP negativo (<40 U/mL) y con anti-CCP positivo (>40 >U/mL)
durante los 3 años de seguimiento
Tabla 52. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados para
los pacientes con FR negativo (<20 UI/mL) y con FR positivo (>20 UI/mL) durante los 3
años de seguimiento
15
16
I
Introducción
18
Artritis
1 Reumatoide
19
1.2 Patogénesis
Además, las células T CD4+ expresan los ligandos RANKL y OPGL que
estimulan la osteoclastogénesis produciendo la degradación del hueso. Los linfocitos,
los macrófagos y los fibrobastos activados pueden estimular también la angiogénesis;
esto explicaría la vascularización incrementada encontrada en el tejido sinovial de
pacientes con AR. Las células endoteliales en el tejido sinovial se activan y expresan
moléculas de adhesión que promueven el reclutamiento de células inflamatorias como
neutrófilos hacia las articulaciones. Los neutrófilos liberan elastasa y proteasa que
degradan los proteoglicanos en la capa superficial del cartílago. La erosión temprana
del cartílago y del hueso está asociada a la formación de un “pannus” proliferativo, es
decir, tejido inflamatorio de granulación vascular de origen sinovial que recubre el
cartílago y que está compuesto por células sinoviales proliferadas, pequeños vasos
sanguíneos, proteínas estructurales, proteoglicanos y células inflamatorias. El pannus
causa destrucción del tejido articular situado en la zona de unión entre la membrana
sinovial y el cartílago produciendo lo que se conoce como erosiones articulares. Las
células T CD4+ activadas también estimulan a las células B para producir
inmunoglobulinas entre las que se incluyen anticuerpos contra proteínas y/o péptidos
20
citrulinados y el FR. El rol patogénico exacto del FR es desconocido pero parece estar
implicado en la activación del complemento a través de la formación de
inmunocomplejos (Figura 1).
21
encuentran en el líquido sinovial junto con un gran número de neutrófilos. En estas
etapas iniciales de la AR, la membrana sinovial empieza a invadir el cartílago. En la
AR establecida, las células sinoviales proliferan en número y estado de activación. El
pannus proliferativo se comporta como una tumoración localmente invasiva que
destruye el cartílago y el hueso subcondral. El pannus consiste de sinoviocitos de tipo
A y B junto a células plasmáticas4. La patogénesis de la AR se resume en la Figura 2.
Figura 2. Patogénesis de la AR. Se muestran los cambios que tienen lugar en una
articulación de un paciente con AR. Imagen tomada de Choy y cols4.
22
1.3 Manifestaciones clínicas
23
1 2
24
alteraciones que afectan a órganos diferentes de las articulaciones se denominan
manifestaciones extraarticulares (Figura 5):
25
g) Síndrome de Felty: triada formada por AR, neutropenia (<2.000/mm3) y
esplenomegalia que se observa en enfermos con larga evolución y
seropositividad. Su tratamiento requiere un control exhaustivo de la actividad
inflamatoria de la AR.
1.4 Diagnóstico
26
Uno de los principales retos del reumatólogo es el diagnóstico precoz de la AR
junto con un inicio del tratamiento rápido e intenso con FARMES. El daño articular
provocado por la AR se inicia de manera temprana y se ha demostrado que los
tratamientos aplicados de forma precoz son más efectivos que cuando se aplican de
forma tardía9,10. Esta instauración precoz del tratamiento aumenta la probabilidad de
controlar la inflamación y el daño estructural. Así, se conoce como “ventana de
oportunidad terapéutica” al tiempo transcurrido desde el inicio de la clínica hasta la
aparición de alteraciones estructurales11,12.
Criterio Definición
Artritis de las
Al menos una articulación de las manos debe estar inflamada
articulaciones de la
(carpo, metacarpofalángicas, interfalángicas proximales).
mano
27
La destrucción articular evidenciada por daño radiológico, discapacidad y
pérdida de la masa ósea axial y periférica ya se produce en estos dos primeros años
siendo en el primer año de evolución donde se evidencia una tasa de progresión
radiológica más acelerada14,15. Este diagnóstico temprano de la AR ayuda a identificar
individuos que pueden desarrollar una enfermedad severa y destructiva para que
pueda ser iniciado el tratamiento adecuado dentro de la ventana de oportunidad
terapéutica y antes que se produzcan daños irreversibles en el paciente.
• Presentar al menos una articulación con sinovitis clínica (al menos una
articulación inflamada).
• Que dicha sinovitis no pueda explicarse por otra enfermedad.
28
Criterios de clasificación para AR de 2010 (ACR/EULAR) Puntos
1. Afectación articular
2. Serología
FR y Anti-CCP negativos 0
FR y/o Anti-CCP positivos bajos (<3 VN) 2
FR y/o Anti-CCP positivos altos (>3 VN) 3
Inferior a 6 semanas 0
Igual o superior a 6 semanas 1
29
Uno de los cambios más significativos de estos criterios es la inclusión de la
valoración de los marcadores serológicos de la AR y de los reactantes de fase aguda.
Dentro de los marcadores serológicos, además del FR se valora por primera vez la
presencia de los anticuerpos anti-peptido citrulinado cíclico (anti-CCP). Pero, no sólo
considera la ausencia o presencia de los mismos (positivo o negativo) sino que
introduce una ponderación según el título de los mismos. Por lo tanto, la ponderación
de los pacientes con los dos marcadores negativos, aquellos pacientes que tienen uno
o ambos marcadores positivos con títulos bajos, y aquellos pacientes que tienen
marcadores positivos con títulos altos es diferente17. Algunas consideraciones
importantes relativas a esos nuevos criterios se exponen a continuación:
30
En un estudio por Lindqvist y cols. realizado en una cohorte de pacientes con
AR temprana y tras 10 años de seguimiento se encontró que a los 5 años de
seguimiento, una VSG elevada era predictor de desarrollo de daño articular en manos
y pies. Junto a la VSG; el FR IgA, COMP y los anti-CCP también predijeron el
desarrollo de daño articular. Sin embargo, a los 10 años de seguimiento, sólo los anti-
CCP y la PCR basales explicaron las variaciones en el índice radiológico de Larsen23.
VSG y PCR han demostrado que son igualmente útiles como componentes
de fase aguda en los criterios de remisión de la ACR. El Disease Activity Score (DAS)
y el Disease Activity Score de 28 articulaciones (DAS28) incluyen la VSG en su
cálculo. La fórmula para calcular el DAS28 con la PCR (DAS28-PCR) subestima la
actividad de la enfermedad y sobreestima la mejora de la actividad de la enfermedad
comparada con el DAS2832.
31
1.6 Evolución clínica y pronóstico
32
- Portador del EC HLA-DRB1 *0401/0404 positivo
- Recuento elevado de articulaciones dolorosas e inflamadas
- Presencia de erosiones radiológicas
- Bajo nivel de estudios
- Elevación de los reactantes de fase aguda (PCR y VSG)
- Anti-CCP positivos
- Presencia de manifestaciones extraarticulares
- HAQ elevado en la visita inicial
Por ejemplo, en un estudio por Kroot y cols. se concluyó que los enfermos con
AR que tienen anti-CCP positivos desarrollan un daño radiológico más severo a los
seis años que en aquellos donde son negativos estos anticuerpos. Otros factores que
influyeron en el daño radiológico fueron la presencia de FR positivo y el índice
radiológico inicial. Sin embargo, en la discapacidad funcional influyeron el sexo, la
edad al inicio, la presencia de FR positivo y el índice de actividad DAS inicial38.
33
Figura 7. Progresión radiográfica en la AR. Las imágenes muestran la evolución de las
lesiones radiográficas y las deformidades en manos del seguimiento de una paciente con AR
durante 21 años y mala respuesta al tratamiento. Debajo del tiempo en años se encuentra el
valor del índice de Sharp para esa fecha. El índice de Sharp se emplea para cuantificar el daño
de la progresión radiográfica causada por la enfermedad. Este índice emplea 27 articulaciones
en cada mano y muñeca y le otorga a cada una de ellas una puntuación distinta para el
estrechamiento del espacio articular y las erosiones articulares.
1.7 Tratamiento
34
2) Tratamiento farmacológico: nuevos medicamentos y nuevas estrategias de
tratamiento, como el tratar dentro de la ventana de oportunidad terapéutica y
siguiendo pautas de control estricto de la actividad inflamatoria y persiguiendo
objetivos terapéuticos determinados.
35
En una AR inicial en la que se prevé un curso especialmente incapacitante por
las características de la enfermedad, del paciente o de la actividad laboral de éste,
puede estar indicada la terapia combinada de inicio con MTX y un agente anti-TNF,
con el objetivo de inducir una rápida remisión e intentar retirar el agente anti-TNF y
mantener la remisión de la AR con el MTX en monoterapia.
Inhibe
Anticuerpos
Anticuerpos anti-TNF activación
anti-IL6
células T
36
Etiologı́a de la
2 Artritis Reumatoide
37
2.1.1 Función de los genes HLA
Presentación de antígeno y
activación de linfocitos T CD4+
38
Estas moléculas son las encargadas de presentar los péptidos a las células T
+
CD4 interviniendo en el mantenimiento de la tolerancia frente a lo propio y la
inducción y regulación de la respuesta inmune adaptativa contra patógenos. Las
cadenas α y β de las moléculas del MHC de clase II son codificadas por los genes
HLA de clase II: HLA-DR, HLA-DP y HLA-DQ que se localizan en el brazo corto del
cromosoma 6 humano47. Esta región tiene una elevada densidad génica con
aproximadamente 220 genes, muchos de ellos con funciones inmuno reguladoras
(Figura 10).
Figura 10. Mapa genético de la región HLA. La región HLA abarca 4·106 nucleótidos en
el cromosoma 6p21.1 a p21.3 con los genes de clase II, III y I localizados desde el centrómero
(Cen) hasta el telómero (Tel). Las moléculas HLA de clase I restringen la función de los
linfocitos CD8+ citotóxicos y median la respuesta inmune contra antígenos endógenos y
objetivos infectados por virus. Las moléculas de clase II están implicadas en la presentación de
antígenos exógenos a las células T ayudadoras o colaboradoras. Por último, las moléculas de
clase III contiene genes que codifican proteínas que no tienen relación con la inmunidad
mediada por células que, sin embargo modulan o regulan la respuesta inmune a través de
varios intermedios como el factor de necrosis tumoral α (TNF- α) o las proteínas del
complemento (C2, C4)47.
39
total hacia el desarrollo de la enfermedad48,49. Las primeras evidencias de la
asociación entre la región HLA y la AR se remontan a la década de los años setenta
donde se observó una mayor frecuencia de individuos con el serotipo HLA-Dw4 en
pacientes con AR comparado con controles sanos. En 1978 Stastny señalo que el
70% de los pacientes caucásicos con AR eran HLA-Dw4 positivos comparados con el
28% de controles sanos. Este serotipo HLA-Dw4 estaba ligado a un conjunto de alelos
del gen HLA-DRB150-52. Desde entonces los genes HLA han sido los más estudiados y
mejor caracterizados en relación a la predisposición al desarrollo de la enfermedad.
Tras esta descripción inicial del serotipo HLA-Dw4 (subtipo de HLA-DR4) se demostró
que no es uno, sino varios de los alelos HLA-DRB1*04 (DRB1*0401, *0404, *0405 y
*0408) los que estaban asociados con la AR. La familia de alelos DR4 contiene al
menos 22 miembros pero sólo algunos están relacionados con la AR. Posteriormente
se describió la asociación de la enfermedad con otros alelos HLA-DRB como *0101,
*0102 y *100153-55.
Estos residuos constituyen uno de los dominios en α-hélice de una región que
es fundamental en el proceso de reconocimiento antigénico y que determina un bolsillo
de unión a péptidos (Figura 11). Los aminoácidos arginina o lisina en la posición 71
tienen carga positiva haciendo que este hueco tenga alta afinidad por residuos con
cargas negativa o polares sin carga.
40
“Secuencia del epitopo compartido”
70
QKRAA74
70
QRRAA74
70
RRRAA74
41
Secuencia Subvariedad
Especificidad Alelos Especificidad
de alelos
DR HLA-DRB1 Dw
Aminoácidos HLA-DRB1
• En los americanos y europeos del norte los alelos con mayor prevalencia son
los HLA DRB1*04 (*0401, *0404) y HLA-DRB1*010168-70.
• En los italianos, judíos israelíes y españoles el alelo DR4 es raro siendo más
frecuente los alelos DR1 y DR10. Dentro de estos alelos, el más característico
en la población española es HLA-DRB1*010156,73-75. En la población húngara,
los subtipos DRB1*0405 y DRB1*0408 del alelo DR4 están involucrados en la
susceptibilidad a la AR76.
42
• En las poblaciones nativas americanas de los indios Yakima, Tlingit y Pima, el
alelo DRB1*1402 confiere susceptibilidad para el desarrollo de AR65,77. En los
indios Chippewa también está presente el alelo DR478.
43
Combinaciones Casos AR Controles
RR Significación
alélicas n (%) n (%)
Tabla 4. Riesgo específico para los alelos del EC HLA-DRB1 para AR severa
relativo a DRX/DRX calculado usando la frecuencia observada en controles92.
• Otro modelo sugiere que estos péptidos alteran las células T específicas que
son positivamente seleccionadas en el timo y conduciría a un repertorio
diferente de células T que podrían incluir células T patogénicas autorreactivas.
44
• Un tercer modelo propone que la molécula HLA es procesada y entonces el EC
sería el antígeno relevante unido por otra molécula HLA.
Aunque todas estas hipótesis son plausibles; son difíciles de conciliar debido a
que los datos que apoyan la respuesta específica a antígenos como evento primario
en la AR son pocos concluyentes en la actualidad como se comentará más adelante.
En el año 1998, Zanelli y cols. sugirieron otro modelo donde los locus DQB1 y
DQA1 determinarían la susceptibilidad a la AR mientras que determinados alelos
DRB1 actuarían como protectores y modularían este efecto. En este modelo de
protección de la AR (RAP o RA-protection) los alelos que predisponen a la
enfermedad son DQB1*0301, *0302, *0303, *0304, *0305, *0401 y *0402 combinados
con DQA1*0301 o *0302 y DQB1*0501 combinado con DQA1*0101 o *0104. Los
alelos protectores DRB1 (*0103, *0402, *1102, *1103, *1301 y *1302) se denominan
70
DERAA74 por presentar esa secuencia de aminoácidos común en la región
hipervariable 70-7499-101 (Figura 12).
70
Esta secuencia DERAA74 corresponde a los aminoácidos Aspártico-
Glutámico-Arginina-Alanina-Alanina y se encuentra presente en el 29% de la población
general. La presencia de la secuencia DERAA confiere un menor riesgo de desarrollar
AR tanto en presencia o ausencia del EC. De este modo, los pacientes DERAA
positivos con una copia del EC comparados con los pacientes DERAA negativos con
una copia del EC presentan una progresión radiográfica menos severa99,102.
45
Alelos protectores Alelos que predisponen
DRB1 DQB1 (DQ3 y DQ5) y DQA1
70
D E R A A74 DQB1*0301
DQB1*0302
Aspártico70Glutámico71 DQB1*0303
Arginina72Alanina73Alanina74 DQB1*0304 DQA1*0301
DQB1*0305
DQB1*0401
X DQA1*0302
DRB1*0103 DQB1*0402
DRB1*0402
DRB1*1102
DRB1*1103
DRB1*1301
DQB1*0501
X DQA1*0101
DQA1*0104
DRB1*1302
46
2.1.6 Otros genes asociados a la Artritis Reumatoide
47
bajo en la predisposición a la enfermedad además de observarse discrepancias entre
los distintos estudios realizados113. Estas discrepancias se deben a que los estudios
incluyen unos pocos cientos de familias y el poder estadístico alcanzado no es
suficiente para detectar los locus de susceptibilidad a AR ya que los locus contribuyen
individualmente con un efecto modesto.
48
Tras este primer estudio se realizó otro estudio donde se incluyeron pacientes
AR con anti-CCP positivos y controles de Suecia y Norteamérica115. Al igual que en el
caso anterior, las señales de asociación más fuertes con la enfermedad se localizaron
en las posiciones 6p21 (HLA-DRB1) y 1p13 (PTPN22). Además, Plenge y
colaboradores encontraron niveles de significación elevados en la región 9p33-34 del
cromosoma 9 correspondiente al locus TRAF1-C5 y que incluye a los genes TRAF1 y
C5. Asimismo, describieron una asociación significativa entre una variante del locus
TRAF1-C5 y un riesgo elevado de AR con anti-CCP positivos (Figura 14).
49
Gen PTPN22: el gen PTPN22 (protein tyrosine phosphatase, non-receptor type 22) se
localiza en el cromosoma 1p13 y codifica una proteína tirosina fosfatasa linfoide (Lyp)
expresada en linfocitos. Esta proteína funciona como un regulador negativo de la
activación espontánea de los linfocitos T mediante desfosforilación e inactivación de
quinasas (tirosina quinasa Csk) y sus sustratos116,117 en las rutas de señalización
intracelular desencadenada por la unión del TCR en los linfocitos T118,119. Esta proteína
Lyp es uno de los más poderosos inhibidores de la activación de linfocitos T.
50
transcripción Stat4127. El factor de transcripción Stat4 también está implicado en la
diferenciación de células Th17 (células T CD4+ que secretan IL-17) que juegan un
papel importante en procesos inflamatorios crónicos a través de señalizaciones
mediadas por IL-12 y IL-23128.
Gen PAD1-4: gen localizado en 1p36 y que codifica para enzimas dependientes de
calcio denominados peptidilarginina desaminasas (PADs) responsables de una
modificación post-traduccional de residuos de peptidilarginina a peptidilcitrulina que
constituye una diana antigénica para anticuerpos anti-CCP presentes en muchos
pacientes con AR. De los tipos de PAD, los tipos 2 y 4 son los que se consideran que
se encuentran más comúnmente en la membrana sinovial donde la citrulinización de
las proteínas de la matriz crearía potenciales péptidos antigénicos132,133. Además, los
niveles de PAD-2 y PAD-4 están correlacionados con el nivel de inflamación del tejido
sinovial en pacientes con AR134.
51
Genes TRAF1-C5: como se ha mencionado previamente, el locus TRAF1-C5 contiene
dos genes relacionados con la inflamación crónica: el gen TRAF1 que codifica el TNF
receptor-associated factor 1 y el gen C5 que codifica el componente 5 del
complemento. Una variante del locus TRAF1-C5 se asoció a un riesgo elevado de AR
con anti-CCP positivos115.
Las mujeres son de dos a tres veces más susceptibles de desarrollar AR que
los hombres, en parte debido a los efectos de estimulación de los estrógenos en el
sistema inmune. Los estrógenos inhiben las células T supresoras y realzan la función
de las células T colaboradores. Además, el receptor de estrógenos se encuentra
presente en las células sinoviales y células T de memoria describiéndose
polimorfismos del receptor que se relacionan con la AR146,148.
52
En mujeres, la presencia de factores hormonales queda reflejada en la mayor
susceptibilidad de desarrollar AR durante los años fértiles observándose una mejora
en un tercio de los casos durante el embarazo149,150. Además, se ha puesto de
manifiesto que una menopausia precoz (edad<45 años) favorece el desarrollo de AR,
señalando la influencia de cambios hormonales durante el periodo fértil en el
desarrollo de AR en mujeres post-menopaúsicas151. En mujeres con una lactancia
prolongada por más de 12 meses se observó una disminución en el riesgo de
desarrollar AR152. El efecto de la lactancia prolongada es dosis dependiente con una
tendencia significativa hacia un menor riesgo cuando mayor es la duración del periodo
de lactancia153.
53
relación inversa entre los niveles del metabolito 25-hidroxivitamina D (25[OH]D) y los
marcadores de gravedad de la enfermedad como el número de articulaciones
inflamadas, el índice de actividad compuesto DAS28 y el índice de discapacidad física
HAQ163. Resultados similares se encontraron en otro estudio donde los niveles de
25[OH]D estaban inversamente relacionados con el DAS28, HAQ y la evaluación
global de la enfermedad por el paciente164. Sin embargo, el papel de la vitamina D en
el desarrollo de la AR no está completamente definido ya que otros estudios no
muestran dicha relación entre el consumo de vitamina D y el desarrollo de AR165.
Se han realizado varios estudios para ver el efecto del consumo de café sobre
la AR. Pero en estos estudios basados en el consumo de café no se han encontrado
resultados concluyentes, sino todo lo contrario ya que son discrepantes. Karlson y
colaboradores en un estudio prospectivo realizado en mujeres y durante un periodo de
20 años no encontraron asociación entre el consumo de café total, café con cafeína,
café descafeinado, té y cafeína con el riesgo de desarrollar AR172.
54
progresión en pacientes con AR evidenciado por una menor progresión radiográfica en
consumidores de alcohol frente a no consumidores178.
55
2.2.7 Agentes infecciosos
• Los pacientes con AR pueden presentar una carga viral de EBV incrementada.
Esto quedó demostrado en un estudio donde se encontró que los pacientes
con AR tenían una carga de DNA de EBV incrementada en 10 veces
comparada con controles sanos. Esta carga de DNA permaneció estable
durante el tiempo y no se modificó durante el tratamiento de los pacientes con
FARMES192.
56
Secuencias de péptidos
idénticos a los autoantígenos
Figura 15. Teoría del mimetismo molecular. Algunos virus o bacterias pueden presentar
una secuencia proteica en su estructura que es similar a autoantígenos presentes en el
individuo. La infección por estos microorganismos activa a las células T dando lugar a una
respuesta inmune por producción de anticuerpos específicos por las células B. Sin embargo,
estos anticuerpos responderán también hacia el autoantígeno como si se tratara del agente
infeccioso mediante un fenómeno de mimetismo molecular al presentar ambos secuencias
peptídicas idénticas.
La hipótesis más factible que implicaría a las HSPs como factor causante de
AR reside en que esas proteínas comparten determinantes antigénicos con otras
proteínas y resultarían en el desarrollo de reactividad cruzada (por mimetismo
57
molecular) con anticuerpos que podrían inducir una respuesta autoinmune. Ejemplos
lo encontramos en dos proteínas que presentan la secuencia QKRAA del EC: gp110
de EBV y dnaJ de Escherichia coli. La molécula dnaJ es una HSPs que es fuertemente
antigénica. Los anticuerpos específicos contra dnaJ presentan una reactividad cruzada
con células positivas para DRB1*0401 pero no para células que expresan otros
alelos194.
Vessey describió por primera vez y de forma inesperada una asociación entre
el hábito tabáquico y la primera derivación al hospital por AR en un estudio sobre el
efecto de los anticonceptivos orales en la enfermedad204. Desde este primer estudio y
hasta la fecha se han realizado múltiples trabajos tanto de cohortes como de casos y
controles que ponen de manifiesto la importancia del tabaquismo en la AR196,205-214.
58
Índice de Tabaquismo (paquetes/año)
Figura 16. Índice de tabaquismo. El índice de tabaquismo (IT) se define como el producto
entre el “número de cigarros fumado al día” y los “años que lleva fumando” dividido por el valor
numérico de 20. Se expresa en paquetes/año y se ha establecido un punto de corte superior a
20 paquetes/años para definir a grandes fumadores.
59
Como destacan estos estudios, tanto los años de consumo de tabaco como la
cantidad diaria de cigarros fumados son factores de riesgo para la AR; pero la
duración del hábito tabáquico (≥20 años) parece ser un factor más decisivo que la
intensidad. No obstante, al menos es necesario 10 años sin fumar para reducir el
riesgo de padecer AR. Incluso se ha observado en algún estudio que se precisarían
20 años sin fumar para reducir el riesgo212,214,216.
60
En los primeros estudios realizados para abordar el efecto del tabaquismo
sobre la progresión radiográfica en pacientes con AR de larga evolución se observó
una mayor progresión de lesiones radiográficas en los pacientes fumadores219,224-226.
En una cohorte de mujeres con AR se observó un mayor daño radiológico evaluado
por el índice de Larsen y un nivel mayor de discapacidad medido por el parámetro
HAQ en pacientes fumadores comparados con pacientes no fumadores227. No
obstante, en estudios posteriores ya se encontraron resultados discordantes donde la
progresión radiológica de la enfermedad no estaba influida por el hábito tabáquico228-
230
.
61
En un estudio posterior, se confirmaron estos resultados en sujetos fumadores
donde el riesgo de desarrollar AR con FR positivo es mayor que el riesgo de
desarrollar AR con FR negativo y además dicho riesgo estaba modificado por el
género235. En otro estudio se observó una correlación positiva entre el hábito tabáquico
y los niveles de FR. El isotipo IgA estuvo asociado a una enfermedad más severa225.
Westwood y colaboradores han sugerido que la AR con FR positivo difiere de aquella
que presenta el FR negativo236.
62
Citrulinizació n.
3 Hipó tesis del epı́topo compartido citrulinado
3.1 Citrulinización
Los anti-CCP son anticuerpos que van dirigidos contra secuencias peptídicas
que han sufrido un proceso de citrulinización. En estas secuencias peptídicas, el
determinante antigénico es un residuo de citrulina que es un aminoácido no esencial
producido vía modificación postraduccional de la arginina por acción de la enzima
peptidil arginil desaminasa (PAD). Dicha enzima se activa en los procesos de
apoptosis e inflamatorios y requiere la movilización de calcio libre (Ca2+) para su
actividad239 (Figura 17).
63
En presencia de altas concentración de calcio (por ejemplo, cuando las células
mueren por apoptosis) esta enzima, que se encuentra presente en monocitos y
granulocitos, convierte el grupo amino con carga positiva de la arginina en un grupo
carbonilo sin carga de la citrulina. De este modo, la citrulinización produce un pequeño
cambio en la masa molecular y la pérdida de una carga positiva en las proteínas
modificadas.
64
Los productos de la citrulinización no sólo se han identificado en la sinovial
inflamada sino también en otros tejidos sometidos a situaciones de estrés como los
pulmones de los fumadores242 y las encías de sujetos con periodontitis243.
65
secundaria a la asociación entre EC y anti-CCP245,246. En una cohorte de pacientes con
Artritis Indiferenciada (AI) se observó que el EC no contribuye independiente hacia la
progresión a AR pero si al desarrollo de anti-CCP. El EC estaba asociado a niveles
más altos de dichos anticuerpos246.
66
apoptosis en múltiples localizaciones del cuerpo254,255. No obstante, la citrulinización
también puede ocurrir durante la inflamación o por acción de factores ambientales y
este proceso resultaría en la generación de neo-epítopos citrulinados que a diferencia
de las proteínas citrulinadas generadas de manera fisiológica ocurren de forma
extracelular247,256. Precisamente, en esta primera etapa la citrulinización de las
proteínas iniciaría una respuesta de las células T restringida a las moléculas de HLA
clase II pero sólo en individuos con EC positivo. Posteriormente, las células T
ayudarían a las células B a secretar anti-CCP249. La presencia de anti-CCP puede
preceder varios años el desarrollo de la AR.
67
Posteriormente, ante la presencia de un proceso inflamatorio articular se
produciría la citrulinización de péptidos y proteínas formándose inmunocomplejos con
los anti-CCP circulantes que desencadenaría una respuesta inmune con liberación de
mediadores de inflamación como interleucinas y TNF-α (que se corresponde con la
segunda etapa del modelo del EC citrulinado)258.
Figura 18. Hipótesis etiológica del modelo de desarrollo de una AR con anti-CCP
positivos desde un estado pre-enfermedad a una poliartritis crónica que cumple
los criterios de AR. 1.La exposición durante un tiempo prolongado al humo de tabaco actúa
como el desencadenante que induce la activación local de enzimas PAD con la consiguiente
citrulinización de péptidos y proteínas presentes en los pulmones. 2.La activación de las células
presentadoras de antígenos en respuesta a señales de peligro derivadas de los componentes
tóxicos del tabaco, conduciría a un aumento en el consumo, procesado y presentación de
péptidos citrulinados (CPA) a las células T CD4+ en el contexto del EC HLA-DRB1 y que
iniciarían una proliferación y diferenciación con producción de citoquinas y formación de células
T de memorias CPA-específicas. 3.Activación de células B CPA-específicas mediado por las
células T CD4+. 4.Proliferación y diferenciación de células B CPA-específicas con producción
de anti-CCP. 5.Formación de células B de memoria CPA-específicas. 6.Un segundo evento
inflamatorio tiene lugar a nivel sinovial en las articulación con activación local de enzimas PAD
y citrulinización de proteínas y péptidos sinoviales. 7.Tras el reclutamiento de anti-CCP de
múltiples especificidades en la articulación tienen lugar la formación de inmunocomplejos CPA-
anti-CCP. Los complejos CPA-anti-CCP se unen a los receptores Fc expresados en las células
presentadoras de antígeno lo que conduce a la producción de citoquinas pro-inflamatorias
(principalmente TNF) y un incremento de la presentación de CPA en el contexto del EC HLA-
DRB1. Esto conduce a una activación adicional de células T patógenas y células B que
incrementan la producción de anti-CCP. 8.Se establece un círculo vicioso con inflamación
259
crónica de la sinovial y el desarrollo de AR. Tomado y traducido de Klareskog y cols .
68
Basándose en dicha hipótesis, se estudió la presencia de proteínas y péptidos
citrulinados en las células del BAL de fumadores (sanos y con inflamación pulmonar)
y no fumadores sanos. Se observó que los fumadores presentaron un mayor
porcentaje de macrófagos que los no fumadores en el BAL (94% vs 89%). En el BAL
de los fumadores sanos se detectó un 13,7% de células positivas para citrulina
mientras que para los fumadores con inflamación pulmonar este porcentaje fue mayor
con un valor de 28,5%. En los no fumadores sanos no se encontraron células positivas
para anticuerpos contra proteínas citrulinadas257. En un estudio posterior, se encontró
un aumento significativo en la expresión de PAD2 en las células bronquioalveolares
del BAL de fumadores frente a no fumadores sanos260.
69
La presencia de dos copias de los alelos del EC multiplica por veinte el riesgo
de AR con anti-CCP positivos en fumadores257. Este riesgo se manifiesta
especialmente en fumadores intensos263. Los alelos HLA-DRB1*0401, *0404, *0405 y
*0408 confieren el mayor riesgo de desarrollar anti-CCP y la interacción entre
tabaquismo y EC fue mayor en el caso de los alelos HLA-DRB1*0101, *0102 y
*1001264. En un estudio llevado a cabo en Francia en un grupo de 274 pacientes con
AR, la presencia de al menos de un alelo del EC (especialmente el alelo DRB1*0401)
se relacionó con la presencia de anti-CCP; el hábito tabáquico estaba asociado con los
anti-CCP sólo en presencia del EC y la dosis acumulada de cigarros fumados estaba
relacionada con el título de los anticuerpos anti-CCP265. Todos estos resultados ponen
de manifiesto la existencia de una asociación entre el hábito tabáquico y la presencia
de los alelos del EC con anti-CCP positivos en pacientes con AR.
70
El gen IRF-5 se asocia con suceptibilidad a la AR y contribuye a la modulación
del fenotipo erosivo de la enfermedad. Las variantes genéticas del gen IRF-5
contribuyen a una etiología y patogénesis única de la enfermedad asociada a
pacientes con anti-CCP negativos. De hecho, la AR se debería considerar como dos
entidades clínicas distintas; una con anti-CCP positivos y otra con anti-CCP negativos
que presentarían distinta patogénesis molecular.
71
Dos de los principales factores de riesgo asociado con la AR, el EC y el tabaco
están asociados con la periodontitis y la infección por P. gingivalis. Los fumadores
presentan un mayor riesgo de desarrollar periodontitis severa y pérdida de masa ósea
en comparación con no fumadores276. El efecto del tabaco en el tejido periodontal
depende del número de cigarros fumados al día y la duración del hábito277. P.
gingivalis se encuentra en niveles significativamente mayores en el periodonto de
fumadores comparado con no fumadores posiblemente como resultado del efecto
deletéreo del tabaco sobre las capacidades inflamatorias del tejido periodontal.
Además, los fumadores responden peor al tratamiento de la enfermedad
275,278,279
periodontal . Es importante señalar que la relación existente entre AR y
periodontitis es independiente del tabaquismo272.
72
Figura 22. Hipótesis etiológica para P. gingivalis y citrulinización y su
participación en la AR. a. Cavidad Oral: la infección por P. gingivalis conduce a una
citrulinización de proteínas humanas y/o bacterianas tanto por PPAD (peptidilarginina
deiminasa de P. gingivalis), PAD (peptidilarginina deiminasa humana) o ambas. Ante la
presencia de señales de peligro como DNA y lipopolisacáridos bacterianos (LPS), las células T
patogénicas son activadas por las células presentadoras de antígenos APCs (antígenos
citrulinados en el contexto del EC HLA-DRB1). Estas células T median la activación de las
células B patogénicas resultando en la producción de anticuerpos específicos dirigidos contra
proteínas citrulinadas (anti-CCP). b. Articulaciones: un segundo evento inflamatorio ocurre en
las articulaciones conduciendo a la citrulinización de proteínas de la articulación por la enzima
PAD (peptidilarginina deiminasa humana) y la producción de inmmunocomplejos en la
articulación. El resultado es la perpetuación de un proceso inflamatorio que causaría AR
282
crónica. Tomado y traducido de Lundberg y cols .
73
Autoanticuerpos
4 en Artritis Reumatoide
74
Figura 23. Isotipos de Factor Reumatoide. El FR son anticuerpos que van dirigidos
contra la porción Fc de la molécula de IgG. Estos anticuerpos son principalmente de isotipo IgM
pero también existen de clase IgG e IgA. Fuente de la imagen: Autor (2015).
75
constitucionales. En este grupo incluimos a la AR, el SS, el LES, la enfermedad mixta
del tejido conectivo (EMTC), la crioglobulinemia mixta (tipos II y III) y la polimiositis y
dermatomiositis (Tabla 6).
76
Para la AR, aunque el FR presenta una sensibilidad razonable entre el 60-80%,
su especificidad es baja (70-80%)299,300. La sensibilidad del FR puede llegar a ser
hasta del 90% pero eso depende tanto del método empleado para determinar el FR
como de la severidad y duración de la enfermedad de los pacientes en los distintos
estudios realizados. Los isotipos IgG e IgA se encuentran ocasionalmente en
pacientes con AR en ausencia de FR IgM301,302. Sin embargo, estos isotipos pueden
presentar valor pronóstico ya que se asocian a una enfermedad más severa303,304.
77
limitado. El 30% de los pacientes con AR tienen el FR negativo, aunque este
porcentaje puede ser superior al 50% en las fases tempranas de la enfermedad311.
Durante las tres últimas décadas se han descrito distintos autoanticuerpos que
reconocen determinantes antigénicos que contienen péptidos y/o proteínas que han
sido modificados mediante citrulinización. Estos anticuerpos incluyen los anticuerpos
78
anti-factor perinuclear (AFP), anti-queratina (AKA), anti-filagrina (AFA), anti-vimentina
citrulinada (anti-Sa) y anti-péptido citrulinado cíclico (anti-CCP)239.
79
Westgeest y colaboradores encontraron que el título de los AFP se correlaciona
con la gravedad de la enfermedad. Entre los pacientes con FR positivo identificó a
pacientes con peor pronóstico y esa asociación con la gravedad de la enfermedad fue
más clara en el grupo de pacientes con FR negativo324.
Sin embargo, aunque los AKA presentaban una elevada especificidad para la
AR; estos anticuerpos y los AFP nunca fueron empleados ampliamente debidos tanto
a la variabilidad en la interpretación y la valoración de las imágenes por IFI como a la
dificultad de estandarización de los sustratos.
80
4.2.3 Anticuerpos anti-filagrina (AFA)
Se han desarrollado ensayos por inmunoblot y por ELISA que emplean filagrina
purificada de piel humana para la detección de AFA. La sensibilidad en la mayoría de
los casos oscila entre el 40 y 50% pero puede variar de forma considerable
probablemente por diferencias en el grado de citrulinización(331-334). Sin embargo,
presentan una alta especificidad para la AR (>90%) comprendida entre el 95 y 99%331-
335
. Vincent y cols. detectaron AFA por inmunoblot en el 41% de pacientes con AR con
una especificidad del 99%. Cuando se combinaba la determinación de AFA con la de
AKA se logró una mayor sensibilidad (64%) sin pérdida de especificidad331. Se ha
encontrado que la determinación de AFA por ELISA es algo más sensible (47-54%)
que el ensayo por inmunoblot336,337. La diferencia en los resultados para los ensayos
AFA, AKA y AFP y la influencia de la preparación del antígeno implica que varios
epítopos son reconocidos.
81
4.2.4 Anticuerpos anti-péptido citrulinado cíclico (anti-CCP)
HQCHQESTXGRSRGRCGRSGS
H = Histidina G = Glicina
Q = Gutamina R = Arginina
C = Cisteína S = Serina
E = Ácido Gutámico T = Treonina
X = Citrulina
82
anti-CCP3) así como ensayos para otros antígenos diana como la vimentina citrulinada
(anticuerpos anti-Sa y anti-MCV).
83
a la hora de determinar los anti-CCP. Sin embargo, en la actualidad, el término ACPA
ha ido reemplazando al de anti-CCP a la hora de designar estos anticuerpos. Este
término es un concepto más general que no sólo englobaría a los anti-CCP sino otras
especificidades dirigidas contra otros péptidos y proteínas citrulinados.
1) Diagnóstico de AR
Anti-CCP FR IgM
Referencias
Generación
S (%) E (%) S (%) E (%)
de péptidos
CCP1 68 96 - - Schellekens y cols.339
CCP1 41 98 62 84 Bizarro y cols.343
CCP1 43 98 50 93 Jansen y cols.344
CCP1 56 90 73 82 Bas y cols.345
CCP1 88 89 70 82 Suzuki y cols.346
CCP1 47 97 - - Zeng y cols.347
CCP2 82 98 80 88 Van Venrooij y cols.341
CCP2 66 90 72 80 Lee y cols.348
CCP2 80 99 - - Van Venrooij y cols.349
CCP2 71 95 91 31 Girelli y cols.350
84
Cuando se analizan las curvas ROC de eficacia diagnóstica; el área bajo la
curva era mayor para los anti-CCP que para otras determinaciones como el FR y los
AFA346. Al presentar los anti-CCP una especificidad bastante superior lo convierten en
un marcador ideal para la AR en vez del FR. De hecho, el 40% de los pacientes con
FR negativo y síntomas clínicos de AR presentan los anti-CCP positivos. Por
consiguiente, el uso combinado del FR con los anti-CCP mejoraría la precisión
diagnóstica en la enfermedad.
Grupo de Anti-CCP2
pacientes N S (%) E (%)
positivo
85
La presencia de anti-CCP se ha reportado en pacientes con LES y SS primario.
Normalmente la presencia de estos anticuerpos se ha asociado con artritis erosiva o
deformante354-359. Por ejemplo, en un estudio, el 17% de una cohorte de 335 pacientes
con LES eran anti-CCP positivos mientras que en otro estudio el 10% de 155
pacientes con SS primario eran anti-CCP positivos355,359. Sin embargo, en tales casos
algunos expertos sugieren que esos pacientes deberían ser reclasificados como
síndromes de solapamiento LES-AR (también conocido como “rhupus”) y SS primario-
AR respectivamente358.
86
fueron positivos los anti-CCP2 en dos pacientes (76% fueron positivos para FR). Esos
dos pacientes presentaban valores de anti-CCP2 en el límite de positividad y se
definieron como falsos positivos por uniones no específicas en el ensayo ELISA367. En
la Tabla 9 se muestra la prevalencia de los anti-CCP2 en presencia de otras
enfermedades reumáticas y no reumáticas obtenidas de tres revisiones sistémicas368-
370
.
87
Los criterios de clasificación para la AR de la ACR (1987) difícilmente se cumplen en
los primeros meses de la enfermedad. En algunos casos, los síntomas de la
enfermedad son leves e inespecíficos y los pacientes no cumplen dichos criterios. Por
lo tanto, es necesaria la detección de un anticuerpo específico de la enfermedad.
88
Los nuevos criterios de clasificación de AR de la ACR/EULAR (2010) que se
emplean en pacientes con AR temprana han incluido a los anti-CCP junto con el FR
como marcadores serológicos de diagnóstico y clasifican según los títulos a los casos
más graves de la enfermedad17. Recientemente Infantino y cols. indicaron que la mejor
combinación para el screening de AR temprana era el empleo de anti-CCP junto con el
FR IgM e IgA377.
89
Criterios Definición
Tabla 10. Variables del modelo predictivo de una artritis persistente erosiva381. La
aplicación del modelo en 524 pacientes consecutivos con artritis precoz tras dos años de
seguimiento dio lugar a tres valores predictivos clínicamente relevantes para cada paciente:
uno para la artritis de evolución limitada, otro para la artritis persistente no erosiva y otro para la
artritis persistente erosiva. El área bajo la curva de eficacia diagnóstica fue de 0,84 para la
distinción entre artritis de evolución limitada y la persistente y de 0,91 entre la artritis
persistente no erosiva y la artritis persistente erosiva. Para los criterios de clasificación de la
ACR (1987) los valores correspondientes eran considerablemente más bajos: 0,78 y 0,79
respectivamente.
90
PCR, VSG, DAS28, evaluación global de la enfermedad por el médico y el recuento de
articulaciones inflamadas385 (Figura 27).
91
los títulos de anti-CCP es menos frecuente y de menor magnitud que la observada
para el FR IgM388 (Tabla 11).
Disminución Disminución
Pacientes Seguimiento
Tratamiento FR IgM Anti CCP Referencias
(n) (semanas)
(%) (%)
No Bobbio-Pallavicini y
Infliximab/MTX 30 78 50 389
apreciable cols.
390
Infliximab/MTX 62 46 65 25 Vis y cols.
Alessandri y cols.
Infliximab/MTX 43 24 20 15 391
Caramaschi y cols.
Infliximab/MTX 27 22 50 Sin efecto 392
De Rycke y cols.
Infliximab/MTX 62 30 50 Sin efecto 393
394
Etanercept/MTX 90 12 36 31 Chen y cols.
395
Adalimumab/MTX 57 48 40 30 Atzeni y cols.
En otro estudio en pacientes con AR, se han observado cambios en los títulos
de los distintos isotipos de FR durante el tratamiento397. Una reducción en el título del
FR se observó tras el tratamiento con infliximab en pacientes con AR refractaria,
mientras que los anticuerpos anti-CCP no se modificaron. En este estudio se concluyó
que los anti-CCP y el FR eran anticuerpos independientes en AR398.
92
enfermedad y el FR IgM lo que parece indicar que es una medida efectiva para
monitorizar el tratamiento. No obstante, en un reciente trabajo por Bohler y cols. se
demostró que los niveles de anti-CCP y FR disminuyeron significativamente tras seis
meses de terapia biológica. Esta reducción de ambos anticuerpos estuvo
estrechamente relacionada con la reducción de la actividad de la enfermedad400.
Los anti-Sa son otros anticuerpos relacionados que reaccionan con una
proteína del citoesqueleto, la vimentina citrulinada. La vimentina citrulinada se ha
descrito como un autoantígeno relevante expresado en el tejido sinovial. Esta proteína
se ha aislado en bazo, placenta y pannus reumatoide402. La sensibilidad de este
anticuerpo es baja en las etapas iniciales pero aumenta conforme avanza la
enfermedad403,404. Estos anticuerpos son tres veces más prevalentes en pacientes con
una enfermedad agresiva y erosiva.
93
3) Los péptidos con vimentina citrulinada se unen mejor a HLA-DR que los alelos
sin vimentina citrulinada.
En base los resultados de esta revisión, los autores concluyeron que los
anticuerpos anti-Sa eran mejor predictores de severidad de la enfermedad al
compararlos con anti-CCP, FR y EC.
94
- En los estudios casos-control, la especificidad de los anti-MCV para AR fue
ligeramente menor que la especificidad para los anti-CCP.
95
4.3.1 Anticuerpos anti-ribonucleoproteína heterogénea nuclear A2 (Anti-RA33)
96
4.3.3 Anticuerpos anti-alfa enolasa
97
enfermedad más agresiva y con más manifestaciones extraarticulares. No se emplean
en el diagnóstico clínico de la AR y su sensibilidad es del 52%.
98
II
Hipótesis & Objetivos
100
1 Justificació n
101
102
2 Hipó tesis del estudio
Hipótesis 1: La utilidad diagnóstica (S, E, VPP, VPN, LR+, LR- y área bajo la curva
ROC) de los marcadores bioquímicos (FR, anti-CCP y EC) en el diagnóstico de la AR
de inicio en una cohorte de enfermos que se atienden en una consulta especializada
de reumatología es elevada.
Hipótesis 3: Los marcadores bioquímicos (FR, anti-CCP y EC) son útiles para
establecer pronóstico ya que permiten identificar subgrupos de pacientes con AR de
inicio con diferentes niveles de gravedad de la enfermedad.
103
104
3 Objetivos del estudio
105
h) Describir la relación existente entre los marcadores bioquímicos y las variables
clínicas de gravedad de la enfermedad al momento del diagnóstico en los
pacientes diagnosticados de AR.
106
III
Materiales & Métodos
108
1 Població n y á mbito de estudio
En una segunda etapa, se plantearon los objetivos específicos del estudio así
como las características de los individuos que compondrían el estudio, las variables de
estudio y los recursos materiales y humanos necesarios para llevarlo a cabo. Se
diseñó un estudio cuyos fundamentos metodológicos están basados en:
109
• Recopilar para cada uno de los sujetos incluidos en el estudio las variables
demográficas, clínicas y bioquímicas potencialmente relacionadas con los
objetivos fijados.
3 Periodos de tiempo
110
4 Aspectos é ticos de la investigació n
Pacientes y controles
5 Criterios de inclusió n y exclusió n
5.1 Pacientes
111
• Criterios de exclusión: se excluyeron aquellos pacientes que presentaron
algunas de las siguientes características:
112
Diagnó stico
6 de los pacientes y grupos de estudio
A los pacientes que acudieron a las Consultas de Artritis Precoz y con objeto
de establecer el diagnóstico de AR, se emplearon como criterios los dos siguientes
“gold standard” o patrones oro:
• Grupo AR: formado por 106 pacientes que fueron diagnosticados de AR según
el juicio clínico del reumatólogo tratante y apoyados en los criterios de
clasificación de la ACR 1987.
A estos dos grupos de pacientes se les sumó el tercer grupo de sujetos controles:
113
Figura 28. Grupos de pacientes incluidos en el estudio.
Evaluació n
7 de los pacientes por el reumató logo
En la historia clínica se anotan los datos personales del paciente, los datos
sociodemográficos y los antecedentes familiares y personales. Los datos
sociodemográficos incluyen el sexo, la edad, el nivel de estudios y la situación laboral.
También se recopila los hábitos tóxicos del paciente; consumo de alcohol, hábito
tabáquico calculando el índice de tabaquismo y consumo de drogas.
114
En los antecedentes familiares y personales se recopilan: antecedentes
familiares de AR y otras patologías reumáticas, intervenciones quirúrgicas, alergias,
transfusiones, etc. El clínico también interroga por la historia previa de la enfermedad
así como el tiempo de evolución, sus manifestaciones clínicas y si ha recibido
tratamiento previo.
a) Recuentos articulares
115
articulaciones” o NAD) y tumefacción (“número de articulaciones tumefactas o
inflamadas basado en 28 articulaciones” o NAI). Las articulaciones dolorosas o
tumefactas se van señalando en homúnculos empleados para ello (Figura 29). Las
articulaciones incluidas en el recuento son las interfalángicas proximales,
metacarpofalángicas, muñecas, codos, hombros y rodillas.
La evaluación del dolor (EVA) la realiza el propio enfermo y con una escala
visual numérica horizontal de 10 cm dividida en 10 segmentos iguales de 1 cm
mediante marcas verticales (Figura 30). En esta escala, los extremos están marcados
con los indicadores que indican “ningún dolor” (0) o “máximo dolor” (10).
Figura 30. Escala empleada para la evaluación del dolor por el paciente, la
evaluación global de la enfermedad por el paciente y por el médico.
116
c) Evaluación global de la enfermedad
Los reactantes de fase aguda (VSG y PCR) están relacionados con la actividad
inflamatoria de la enfermedad. La medición de estos reactantes son de gran ayuda en
el seguimiento de los procesos inflamatorios y sus niveles están asociados a la
intensidad de la inflamación subyacente. Se encuentran incluidos dentro de las
determinaciones de laboratorio rutinarias.
117
Los valores del índice DAS28 varían entre 0 y 10 y constituyen la base de los
criterios de mejoría de la EULAR. La actividad inflamatoria puede variar dependiendo
del paciente, del momento evolutivo o de la respuesta al tratamiento. Se distinguen
cuatro estados de actividad inflamatoria: remisión, actividad baja, moderada o alta.
Según los valores del DAS28 y atendiendo a la definición original o la definición actual
basada en el consenso de reumatólogos experimentados; el clínico clasifica la
actividad inflamatoria del paciente según los puntos de corte definidos a tal efecto
(Tabla 12).
Definición actual
Actividad inflamatoria Definición original
recomendada
Actividad moderada 3,2 < DAS28 < 5,1 3,6 < DAS28 < 5,5
118
intercambiables. El DAS28-PCR parece infravalorar la actividad de la enfermedad de
0,5 a 1 puntos y, consecuentemente, sobrevalora la respuesta a los tratamientos
respecto al DAS28, sobreestimando la mejoría en hasta el 10-12% de casos442,443. En
ambos cálculos es importante introducir en la fórmula la VSG en mm/h y la PCR en
mg/dL.
119
8 Metodologı́a analı́tica
120
se emplea de rutina en nuestro laboratorio por lo que las determinaciones de anti-CCP
se han realizado con dicho ensayo.
a) Procedimiento de trabajo
1) Todos los reactivos han de estar a temperatura ambiente (20-26 ºC) antes de
empezar el ensayo. Poner el número necesario de tiras en el soporte.
2) Agregar 100 µl de los controles prediluidos CCP3 IgG ELISA positivo débil,
CCP3 IgG ELISA positivo fuerte, CCP3 IgG ELISA calibradores, ELISA
negativo y las muestras diluidas en los pocillos correspondientes. Incubar 30
minutos a temperatura ambiente en una superficie plana. El tiempo de
incubación empieza después de la adición de la última muestra.
121
completamente vacío después de cada paso de lavado. Mantener la misma
secuencia para la aspiración que la usada para la adición de muestras.
• La absorbancia del control CCP3 IgG positivo fuerte debe ser superior a la del
control CCP3 IgG positivo débil y la de este debe ser superior a la del control
negativo.
• El control CCP3 IgG positivo fuerte debe tener una absorbancia mayor que 1,0
mientras que la del control negativo no debe exceder de 0,2.
• La absorbancia del control CCP3 IgG positivo débil debe ser superior al doble
del control negativo, u oscilar alrededor de 0,25.
122
• Los controles ELISA negativo y CCP3 IgG positivo fuerte están pensados para
monitorizar problemas de reactivo de magnitud substancial. El control CCP3
IgG positivo fuerte no puede asegurar precisión alguna en el punto de corte del
ensayo. Si lo hará el control positivo débil.
Negativo <20
Positivo débil 20-39
Positivo moderado 40-59
Positivo fuerte ≥60
123
• Un resultado negativo indica la ausencia de anticuerpos anti-CCP3 IgG o
niveles inferiores al punto de corte del ensayo.
b) Valores esperados
124
diagnóstico, cada laboratorio debe establecer su propio rango normal. En el
laboratorio empleamos el punto de corte de 20 UI/mL para considerar un resultado
positivo. El ensayo presentó un CV intra- e interensayo de <3,4% y <3,5%,
respectivamente.
Para ello, el ADN extraído es sometido a una PCR con mezclas de cebadores
preparados de modo que se obtiene la amplificación de la secuencia deseada. En
nuestro caso, consiste en amplificar la gran mayoría de variantes conocidas del gen
HLA DRB1 y otros dos genes comunes (SSB y α-1-antitripsina) que sirven como
control positivo de la PCR.
125
8.5 Determinación de la Proteína C Reactiva
b) Valores esperados
126
flow (flujo interrumpido) para la medida donde los resultados se muestran en mm/h en
el rango desde 2 a 120 mm/h. Este analizador realiza un mezclado de muestras
programable en velocidad (60, 32 y 24 RPM) y en número de rotaciones, de 2 a 1000
rotaciones (recomendado 32 RPM, 96 rotaciones, unos 3 minutos). El primer resultado
está disponible a los 3 minutos y 20 segundos. Cada 20 minutos aparece un nuevo
resultado. El volumen mínimo de muestra necesario son 500 microlitros. Se considera
positivo un valor superior a 20 mm/h para mujeres y superior a 30 mm/h para
hombres. El ensayo presentó un CV intra- e interensayo de <6,6% y <6,8%,
respectivamente.
127
Este ensayo detecta de forma colectiva, en un solo pocillo, la cantidad total de ANAs
respecto de la cromatina (ADN de doble cadena e histonas), Sm/RNP, SS-A, SS-B,
Scl-70, centrómeros y PCNA, así como los anticuerpos respecto de antígenos
citoplasmáticos importantes desde el punto de vista del diagnóstico, como Jo-1,
mitocondrias M2 y proteína P ribosomal. Las muestras de suero que den positivo para
antígenos indefinidos mediante el test tradicional de anticuerpos por
inmunofluorescencia indirecta en células HEp-2 también son detectables.
a) Procedimiento de trabajo
b) Procedimiento de ensayo
1) Todos los reactivos han de estar a temperatura ambiente (20-26 ºC) antes de
empezar el ensayo. Poner el número necesario de tiras en el soporte.
128
2) Agregar 100 µl de los controles prediluidos ANA ELISA positivo débil, ANA
ELISA positivo fuerte, ANA ELISA negativo y las muestras prediluidas en los
pocillos. Cubrir los pocillos e incubar 30 minutos a temperatura ambiente en
una superficie plana. El tiempo de incubación empieza después de la adición
de la última muestra.
129
9) Para considerar válidos los resultados deben considerarse satisfechos todos
los criterios especificados a continuación, si alguno de ellos no se cumple la
prueba debe considerarse inválida y repetirse.
• La absorbancia del control ANA positivo fuerte debe ser superior a la del
control ANA positivo débil y la de este debe ser superior a la del control
negativo.
• El control ANA positivo fuerte debe tener una absorbancia mayor que 1.0
mientras que la del control negativo no debe exceder de 0.15.
• La absorbancia del control ANA positivo débil debe ser superior al doble del
control negativo, u oscilar entre 0.15.
• Los controles ELISA negativo y ANA positivo fuerte están pensados para
monitorizar problemas de reactivo de magnitud substancial. El control ANA
positivo fuerte no puede asegurar precisión alguna en el punto de corte del
ensayo.
130
d) Interpretación de los resultados
131
Nivel de
Variables Sujetos Definición operativa Codificación
medición
Nominal Características fenotípicas del 0 = Masculino
Sexo Todos
Dicotómica sujeto. 1 = Femenino
Cuantitativa
Edad Todos Fecha de nacimiento. No aplicable
Discreta
Grupo AR Nominal Antecedentes familiares de AR en 0 = No
Antecedentes familiares de AR
Grupo NOAR Dicotómica la familia del paciente. 1 = Si
Nominal Hábito tabáquico definido como no 0 = No fumador
Hábito tabáquico Todos
Dicotómica fumador o fumador (ex o activo). 1 = Fumador (ex fumador o fumador activo)
Hábito tabáquico definido como no 0 = No fumador
Nominal
Hábito tabáquico Todos fumador, ex fumador o fumador 1 = Ex fumador
Politómica
activo. 2 = Fumador activo
Cuantitativa Índice de tabaquismo definido por
Índice de tabaquismo Todos paquetes/año: No aplicable
Continua (Nº cigarros al día x Nº años fumando)/20
Índice de tabaquismo definido por 0 = Negativo
Nominal
Índice de tabaquismo Todos paquetes/año: 1 = Bajo (1-20 paquetes/año)
Politómica (Nº cigarros al día x Nº años fumando)/20 2 = Alto (>20 paquetes/año)
Grupo AR Nominal Consumo de alcohol por el 0 = No
Consumo de alcohol
Grupo NOAR Dicotómica paciente. 1 = Si
Grupo AR Nominal Coexistencia en el paciente de otra 0 = No
Enfermedad autoinmune previa
Grupo NOAR Dicotómica autoinmune previa a la AR. 1 = Si
0 = Polimialgias
1 = Poliartralgias
Grupo AR Nominal Forma de debut de la clínica del
Forma de inicio de los síntomas 2 = Monoarticular
Grupo NOAR Politómica paciente
3 = Oligoarticular
4 = Poliarticular
Grupo AR Nominal Tiempo de diagnóstico inferior o 0 = No
Diagnóstico precoz (≤2 años)
Grupo NOAR Dicotómica igual a 2 años. 1 = Si
132
Tiempo transcurrido desde el inicio de
Grupo AR Cuantitativa
Tiempo de diagnóstico los síntomas hasta que el paciente es No aplicable
Grupo NOAR Continua diagnosticado de AR por el clínico
Grupo AR Nominal Rigidez matutina articular que dura 0 = No
Rigidez matutina positiva
Grupo NOAR Dicotómica al menos una hora. 1 = Si
Inflamación simultánea de al
Grupo AR Nominal 0 = No
Artritis ≥3 grupos articulares menos 3 grupos articulares en el
Grupo NOAR Dicotómica 1 = Si
paciente.
Grupo AR Nominal Inflamación al menos de una 0 = No
Artritis de la mano
Grupo NOAR Dicotómica articulación de la mano. 1 = Si
Afectación simultánea del mismo
Grupo AR Nominal 0 = No
Artritis simétrica grupo articular en ambos lados del
Grupo NOAR Dicotómica 1 = Si
cuerpo.
Grupo AR Nominal Presencia de 0 = No
manifestaciones
Manifestaciones extraarticulares extraarticulares de AR en el paciente.
Grupo NOAR Dicotómica 1 = Si
Grupo AR Nominal Presencia de nódulos subcutáneos 0 = No
Nódulos reumatoides
Grupo NOAR Dicotómica y observados por el clínico. 1 = Si
Grupo AR Nominal Cumplimiento por el paciente de ≥4 0 = No
Número de criterios ACR (1987) ≥4
Grupo NOAR Dicotómica criterios ACR (1987). 1 = Si
Descripción por parte del paciente
Grupo AR Nominal 0 = No
Dolor articular nocturno de dolores articulares nocturnos
Grupo NOAR Dicotómica 1 = Si
que lo despiertan del sueño.
Grupo AR Nominal Presencia de erosiones articulares 0 = No
Erosiones articulares
Grupo NOAR Dicotómica evidenciadas en las radiografías. 1 = Si
Grupo AR Nominal Presencia de un HAQ ≥1 como 0 = No
HAQ ≥1
Grupo NOAR Dicotómica marcador de mal pronóstico. 1 = Si
Grupo AR Nominal Presencia de un DAS28 ≥5,5 como 0 = No
DAS28 ≥5,5
Grupo NOAR Dicotómica marcador de mal pronóstico. 1 = Si
Grupo AR Cuantitativa Duración de la rigidez matutina en
Rigidez matutina (minutos) No aplicable
Grupo NOAR Continua minutos.
Número articulaciones inflamadas
Grupo AR Cuantitativa
NAI (sobre 28 articulaciones) en el paciente basado en recuento No aplicable
Grupo NOAR Discreta
de 28 articulaciones. De 0 a 28.
133
Número articulaciones dolorosas
Grupo AR Cuantitativa
NAD (sobre 28 articulaciones) en el paciente basado en recuento No aplicable
Grupo NOAR Discreta
de 28 articulaciones. De 0 a 28.
Número de criterios ACR (1987)
Grupo AR Cuantitativa
Número de criterios ACR (1987) que cumple el paciente. De 0 a 7 No aplicable
Grupo NOAR Discreta
criterios.
Valor del índice de actividad
Grupo AR Cuantitativa
Indice de función física HAQ funcional HAQ obtenido al rellenar No aplicable
Grupo NOAR Continua
el cuestionario HAQ. De 0 a 3.
Valor del índice DAS28 basado en
Grupo AR Cuantitativa
Indice de actividad DAS28 la VSG y que emplea 3 variables No aplicable
Grupo NOAR Continua
en la fórmula. De 0 a 10.
Evaluación global de la
Evaluación global de la Grupo AR Cuantitativa
enfermedad desde la perspectiva No aplicable
enfermedad por el paciente - EGP Grupo NOAR Continua
del paciente (EGP). De 0 a 10 cm.
Evaluación global de la
Evaluación global de la Grupo AR Cuantitativa
enfermedad desde la perspectiva No aplicable
enfermedad por el médico - EGM Grupo NOAR Continua
del médico (EGM). De 0 a 10 cm.
Grupo AR Cuantitativa Evaluación del dolor realizada por
Evaluación del dolor - EVA No aplicable
Grupo NOAR Continua el paciente. De 0 a 10 cm.
0 = Negativo
Nominal Determinación del epitopo 1 = Positivo
Epitopo compartido Todos
Politómica compartido por hibridación reversa. 2 = Heterocigoto
3 = Homocigoto
0 = DRB1*01-QRRAA / Negativo
1 = DRB1*04-QKRAA / Negativo
Determinación del epitopo 2 = DRB1*04-QRRAA / Negativo
Nominal compartido por hibridación reversa 3 = DRB1*01-QRRAA / DRB1*04-QRRAA
Alelos del epitopo compartido Todos
Politómica expresando las combinaciones 4 = DRB1*01-QRRAA / DRB1*04-QKRAA
alélicas obtenidas. 5 = DRB1*04-QKRAA / DRB1*04-QKRAA
6 = DRB1*04-QKRAA / DRB1*04-QRRAA
7 = DRB1*04-QRRAA / DRB1*04-QRRAA
134
Determinación del epitopo
0 = Negativo
Nominal compartido por hibridación reversa
Genotipos del epitopo compartido Todos 1 = HLA DR1 positivo
Politómica expresado como el genotipo (DR1
2 = HLA DR4 positivo
o DR4) que presenta el paciente.
Presencia de anti-CCP positivo
Nominal 0 = No
Anti-CCP positivo (>40 U/mL) Todos definido por un punto de corte >40
Dicotómica 1 = Si
U/mL.
Seropositividad para el FR al
Nominal 0 = No
FR positivo (>20 UI/mL) Todos diagnóstico con un punto de corte
Dicotómica 1 = Si
>20 UI/mL.
Nominal Presencia de anti-CCP y FR 0 = No
Anti-CCP y FR positivos Todos
Dicotómica positivos. 1 = Si
Nominal Presencia de PCR elevada con un 0 = No
PCR elevada (>5 mg/L) Todos
Dicotómica valor superior a 5 mg/L. 1 = Si
Presencia de VSG elevada con
VSG elevada (>30 mm/h en Grupo AR Nominal 0 = No
una valor superior a 30 mm/h en
hombres y >20 mm/h en mujeres) Grupo NOAR Dicotómica 1 = Si
hombres y >20 mm/h en mujeres.
Detección de anticuerpos
Grupo AR Nominal 0 = No
ANA positivo (≥1/80) antinucleares positivos por IFI al
Grupo NOAR Dicotómica 1 = Si
diagnóstico a título≥1/80.
Cuantitativa Concentración de anti-CCP por el
Anti-CCP (U/mL) Todos No aplicable
Continua método ELISA.
Cuantitativa Concentración de FR medido por
FR (UI/mL) Todos No aplicable
Continua método inmunoturbidimétrico.
Cuantitativa Concentración de PCR medido por
PCR (mg/L) Todos No aplicable
Continua método inmunoturbidimétrico.
Grupo AR Cuantitativa Determinación de la VSG por
VSG (mm/h) No aplicable
Grupo NOAR Continua análisis cinético
0 = Corticoides
Nominal Tipo de tratamiento que recibe el
Tratamiento Grupo AR 1 = FARMES
Politómica paciente.
2 = Terapia Biológica
135
9.2 Planificación de las variables durante el estudio
Primer Segund Tercer
Variables Basal
año o año año
Sexo x
Edad x
Antecedentes familiares de AR x
Hábito tabáquico x
Índice de tabaquismo x
Consumo de alcohol x
Enfermedad autoinmune previa x
Tiempo de diagnóstico x
Diagnóstico precoz (≤2 años) x
Forma de inicio de los síntomas x
Rigidez matutina positiva x x x x
Artritis ≥3 grupos articulares x x x x
Artritis de la mano x x x x
Artritis simétrica x x x x
Manifestaciones extraarticulares x x x x
Nódulos reumatoides x x x x
Número de criterios ACR (1987) ≥4 x
Dolor articular nocturno x x x x
Erosiones articulares x x x x
HAQ ≥1 x
DAS28 ≥5,5 x
Rigidez matutina (minutos) x x x x
NAI (sobre 28 articulaciones) x x x x
NAD (sobre 28 articulaciones) x x x x
Número de criterios ACR (1987) x
Índice de función física HAQ x x x x
Índice de actividad DAS28 x x x x
EGP (cm) x x x x
EVA (cm) x x x x
EGM (cm) x x x x
Epitopo compartido positivo x
Alelos del epitopo compartido x
Genotipos del epitopo compartido x
Anti-CCP positivo (>40 U/mL) x
FR positivo (>20 UI/mL) x
Anti-CCP y FR positivos x
PCR elevada (>5 mg/L) x
VSG elevada (>30 mm/h en
x
hombres y >20 mm/h en mujeres)
ANA positivo (≥1/80) x
Anti-CCP (U/mL) x
FR (UI/mL) x
PCR (mg/L) x x x x
VSG (mm/h) x x x x
Tratamiento x x x x
Tabla 14. Planificación de las variables incluidas en el estudio.
136
En la tabla 14 se encuentra la planificación de las variables incluidas en el
estudio. Las variables en el estado basal o año cero se han determinado a los grupos
según consta en la tabla anterior de definición de las variables. Las variables al primer,
segundo y tercer año se han medido sólo para los pacientes pertenecientes al grupo
AR.
Para realizar el análisis estadístico de los datos, se diseñó una base de datos
en el Editor del software SPSS para Windows versión 19 (Chicago, Illinois, USA) para
almacenar los datos. El análisis estadístico se realizó con el mismo programa. La
metodología estadística estuvo formada por una parte descriptiva y otra analítica.
• Estadística descriptiva
137
Para las variables cuantitativas, en primer lugar se comprobó la normalidad en
su distribución mediante la prueba de Kolmogorov-Smirnov aplicándose pruebas no
paramétricas en aquellos casos en los que la variable no cumplía condiciones de
normalidad. Para comparar una variable cuantitativa con una variable cualitativa se
usaron los tests no paramétricos de la U de Mann-Whitney y de Krustal-Wallis si la
variable cualitativa presentaba dos o más categorías respectivamente. En el caso de
variables continuas y/o distribución normal se emplearon pruebas paramétricas (t de
student y análisis de varianza o ANOVA).
138
• Efecto del EC y hábito tabáquico sobre los anticuerpos
139
y edad. Las variables categóricas estudiadas fueron el EC, hábito tabáquico, índice
tabáquico y las interacciones entre ellas.
140
constituyeron el grupo de pacientes para el estudio pronóstico. Los 47 pacientes
restantes no se incluyeron en el estudio pronóstico a 3 años debido a algunas de las
siguientes causas: pérdidas de algunos pacientes durante el seguimiento, tiempo de
seguimiento inferior a 3 años o ausencia de datos esenciales (DAS28, HAQ y
erosiones articulares) en alguno de los puntos de seguimiento. No obstante, tanto los
pacientes incluidos en el estudio pronóstico (n=59) como los excluidos (n=47)
contituyeron un grupo homogéneo al diagnóstico sin encontrarse diferencias
estadísticas significativas entre ambos grupos en cuanto a las variables demográficas,
clínicas y bioquímicas de los mismos.
141
• Cálculo del tamaño de muestra
a) Primer año
b) Segundo año
142
- Petición de las historias clínicas a la Unidad de Archivo del Hospital y recogidas
de las variables demográficas, clínicas y de laboratorio de dichos pacientes.
- Recopilación de las variables en la base de datos.
- Revisión de la base de datos, corrección de errores y completar los datos que
faltan.
AÑO
FASES DEL ESTUDIO
1º 2º 3º 4º
Diseño del proyecto
Revisión de la literatura
Diseño de objetivos, hipótesis y variables del
estudio.
Selección de los pacientes y controles que
cumplen criterios de inclusión.
Recogidas de variables demográficas, clínicas y
de laboratorio en la base de datos.
Revisión de la base de datos, corrección de
errores y completar datos que faltan
Tratamiento estadístico de datos y obtención de
resultados.
Escritura de la tesis doctoral.
143
144
IV
Resultados
146
1 Caracterı́sticas demográ ficas
AT (N=32, 30%)
SUJETOS
CONTROL (N=65, 24%) EITC (N=3, 3%)
(N=276, 100%)
AC (N=1, 1%)
Figura 31. Clasificación de los sujetos incluidos en el estudio. Para el grupo NOAR
los porcentajes hacen referencia al número de pacientes con respecto al grupo NOAR (N=65) y
no con respecto al total de sujetos estudiados (N=276).
147
Las características demográficas de los sujetos estudiados se resumen en la
Tabla 16. De ellos, 209 (76%) fueron mujeres; 76 (72%) en el grupo AR, 83 (79%) en
el grupo NOAR y 50 (76%) en el grupo CONTROL. Se observó un predominio de la
enfermedad (relación 3:1) en el sexo femenino respeto al masculino. No se
encontraron diferencias estadísticamente significativas entre los grupos AR y NOAR
en cuanto al género, antecedentes familiares de AR y consumo de alcohol.
AR NOAR CONTROL
Parámetros (n=106) (n=105) (n=65) Valor p (1)
n (%) n (%) n (%)
(1)
Tabla 16. Características demográficas de los pacientes en la visita basal.
(2)
Prueba de Chi cuadrado entre los grupos AR, NOAR y CONTROL. Prueba no paramétrica de
Krustal-Wallis entre los grupos AR, NOAR y CONTROL.
148
Entre los tres grupos no se observaron diferencias estadísticamente
significativas en relación al hábito tabáquico (no fumador vs. fumador). La prevalencia
de fumadores fue ligeramente superior en el grupo AR (36%) en relación al grupo
NOAR (30%) pero inferior al grupo CONTROL (46%). Al estratificar el hábito tabáquico
como “no fumador”, “ex fumador” y “fumador activo” no se observaron diferencias
significativas entre los grupos. Sin embargo, se encontraron diferencias
estadísticamente significativas para el índice de tabaquismo entre el grupo AR y los
grupos NOAR y CONTROL. Así, el 25% de los pacientes con AR presentaron un IT de
gran fumador (>20 paquetes/año) mientras que en los otros dos grupos este
porcentaje fue del 8% en ambos casos.
AR NOAR CONTROL
Hábito Tabáquico (n=38) (n=31) (n=30)
Me (IQR) Me (IQR) Me (IQR)
149
Figura 32. Índice de tabaquismo en los sujetos fumadores de cada grupo
estudiado (AR, NOAR y CONTROL) según el hábito tabáquico (“ex fumador” y
“fumador activo”).
150
2 Descripció n de variables clı́nicas
AR NOAR
Parámetros (n=106) (n=105) Valor p (1)
n (%) n (%)
(1)
Tabla 18. Características clínicas de los pacientes en la visita basal. Prueba de
(2)
Chi cuadrado entre los grupos AR y NOAR. Prueba no paramétrica U de Mann-Whitney entre
los grupos AR y NOAR.
151
Las manifestaciones extraarticulares estaban presentes en el 21% de los
pacientes AR frente al 9% del grupo NOAR (Figura 33). Los nódulos reumatoides,
característicos de una enfermedad avanzada se encontraron en el 6% de los pacientes
del grupo AR y estuvieron ausentes en el grupo NOAR. La presencia de marcadores
de mal pronóstico como un HAQ>1 ó DAS28≥5,5 fue significativamente mayor en el
grupo AR frente al grupo NOAR. En ambos grupos, los pacientes manifestaron que
experimentaron rigidez matutina en el 50% de los casos del grupo AR y en el 23% de
los casos en grupo NOAR. La duración de la rigidez matutina fue de 45 (0-120)
minutos en el grupo AR.
10
GRUPO AR GRUPO NOAR
Manifestaciones extraarticulares (%)
4 4
3
2
0 1
0
Nódulos Síndrome de Xeroftalmia Xerostomia
reumatoides Sjögren
Tipo de manifestación extraarticular
152
Los pacientes del grupo AR presentaron a la entrada en el estudio una
actividad alta de la enfermedad (DAS28 de 5,2) con un deterioro de la integridad
estructural articular (60% de pacientes con erosiones en la visita inicial) y que
condiciona una importante pérdida de la capacidad funcional (HAQ de 1,3) y de la
calidad de vida.
Las variables bioquímicas (anti-CCP, FR, PCR, VSG, ANA y EC) para cada
uno de los grupos estudiados se resumen en la Tabla 19. Los anti-CCP fueron
positivos en 69 de los 106 pacientes del grupo AR siendo su prevalencia del 65% y en
4 de los 105 pacientes del grupo NOAR con una prevalencia del 4%. Los anti-CCP
positivos no se detectaron en el grupo CONTROL. En el grupo NOAR, el diagnóstico
de los cuatro pacientes con anti-CCP positivos fue de AI que durante su seguimiento
evolucionaron a AR.
El FR fue positivo en 86 de los 106 pacientes del grupo AR con una prevalencia
del 81%. La prevalencia del FR en los grupos NOAR (25 de 105 pacientes) y
CONTROL (7 de 65 sujetos) fue del 24% y 10% respectivamente. Los diagnósticos de
los pacientes con FR positivo en el grupo NOAR correspondieron a 15 AI, 8 AT, 1 PSA
y 1 EITC. De los sujetos estudiados, un 60% presentaron positividad concomitante
para los anti-CCP y FR en el grupo AR. En el grupo NOAR se redujo a un 4% que
corresponde a la positividad de los anticuerpos anti-CCP en dicho grupo mientras que
en el grupo CONTROL no se presentó la positividad simultánea de ambos anticuerpos
(p<0,0001).
Los niveles de los reactantes de fase aguda PCR y VSG fueron mayores en el
grupo AR en relación a los otros dos grupos (NOAR y CONTROL) con diferencias
estadísticamente significativas para ambos parámetros. Setenta y seis pacientes
presentaron cifras elevadas de PCR en el grupo AR con una prevalencia del 72%. En
los grupos NOAR y CONTROL estuvo elevada en 55 (53%) y 14 (21%) pacientes,
respectivamente. Treinta y seis pacientes (34%) presentaron cifras de VSG elevadas
en el grupo AR mientras que para el grupo NOAR ocurrió en 14 pacientes (13%).
153
AR NOAR CONTROL
Parámetros (n=106) (n=105) (n=65) Valor p (1)
n (%) n (%) n (%)
(1)
Tabla 19. Variables bioquímicas de los pacientes en la visita basal. Prueba de
(2)
Chi cuadrado entre los grupos AR, NOAR y CONTROL. Prueba no paramétrica de Krustal-
Wallis entre los grupos AR, NOAR y CONTROL.
154
Figura 34. Patrones por IFI observados en los pacientes con ANAs positivos.
El patrón moteado fue el patrón más frecuente tanto en los pacientes AR como
en los pacientes NOAR. Dentro de los pacientes con AR y que presentaron el patrón
moteado por IFI, tres de ellos presentaron asociados un SS. Una paciente con AR y
patrón homogéneo a título 1/320 por IFI presentó un solapamiento AR y LES que se
conoce como “rhupus” y presentó una combinación de características clínicas típicas
de AR y de LES.
Para los valores cuantitativos de las variables bioquímicas anti-CCP, FR, PCR
y VSG se observaron diferencias estadísticamente significativas siendo éstas variables
más elevadas en el grupo AR en relación a los otros dos grupos. Así, valores
significativamente más elevados de anti-CCP se encontraron en el grupo AR frente a
los grupos NOAR y CONTROL (133 vs. 3,2 vs. 2,8 U/mL respectivamente, p<0,0001).
De manera similar, se encontraron mayores concentraciones para el FR en el grupo
AR frente a los grupos NOAR y CONTROL (61,8 vs. 17 vs. 12 UI/mL respectivamente,
p<0,0001) y para la PCR (11,2 vs. 5,9 vs. 0,9 mg/L respectivamente, p<0,0001). Para
la VSG, las medianas de concentraciones fueron de 20 mm/h para el grupo AR y de 10
mm/h para el grupo NOAR (p<0,0001).
155
La positividad para el EC, secuencia génica ampliamente relacionada con la
fisiopatología de la AR, presentó una mayor prevalencia en el grupo AR comparado
con los grupos NOAR y CONTROL (p<0,0001). La prevalencia del EC fue del 73% (77
pacientes), 62% (65 pacientes) y 26% (17 individuos) en los grupos AR, NOAR y
CONTROL, respectivamente. La presencia del EC positivo se relacionó con el
diagnóstico de AR mientras que el EC negativo se asoció al grupo CONTROL
(p<0,0001).
100%
9% 5% 7%
17% 22%
80%
40%
Porcentaje
20% 38%
27%
0%
CONTROL NOAR AR
156
Al estratificar el EC como negativo, heterocigoto HLA DR1, heterocigoto HLA
DR4 y homocigoto; se observó que la presencia de las formas homocigotas y
heterocigotas HLA DR4 se asociaron con el grupo AR y el heterocigoto HLA DR1 con
el grupo NOAR (p<0,0001) (Figura 36).
100% 5%
9%
16%
17% 22%
80%
31%
Homocigoto
Porcentaje
60%
35%
Heterocigoto DR4
40% 74% 26% Heterocigoto DR1
Negativo
20% 38%
27%
0%
CONTROL NOAR AR
157
La combinación alélica DRB1*01-QRRAA/NEGATIVO, la más frecuente en
nuestra población, predominó en el grupo NOAR (35%) mientras que la combinación
DRB1*04-QRRAA/NEGATIVO presentó una frecuencia similar en los grupos AR (20%)
y NOAR (17%). La forma DRB1*04-QKRAA/NEGATIVO predominó en el grupo AR
(11%) en relación a los otros dos grupos.
Asociació n
4 entre los anticuerpos anti-CCP y FR
Tabla 20. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el factor reumatoide en los
pacientes con AR. Datos expresados como n (%).
158
En el grupo NOAR (χ2=13,3; p<0,0001, Tabla 21), 4 pacientes (4%) tuvieron
positivos ambos anticuerpos (anti-CCP y FR) mientras que ambos anticuerpos fueron
negativos en 80 pacientes (76%). El FR fue positivo en 21 pacientes (20%) con anti-
CCP negativo mientras que los anticuerpos anti-CCP positivos no se presentaron en
pacientes con FR negativo.
Tabla 21. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el factor reumatoide en los
pacientes del grupo NOAR. Datos expresados como n (%).
20%
15%
10%
5% 4%
0% 0% 0% 0% 0% 0%
0%
AI (n=61) AT (n=32) PSA (n=4) EA (n=3) EITC (n=3) LES (n=1) AC (n=1)
159
En el grupo CONTROL, ningún sujeto presentó anti-CCP positivos mientras
que el FR fue positivo en 7 sujetos (11%) y negativo en 58 sujetos (89%) de los 65
individuos que constituyeron este grupo.
Los resultados obtenidos muestran que los anti-CCP tuvieron un VPP del 95%
superior tanto al resto de marcadores y combinaciones. Esto indica que en el 95% de
los pacientes con esa prueba positiva se confirmaría la presencia de AR. El VPN más
alto se obtuvo con la combinación “anti-CCP o FR” llegando a ser del 90%. Para el EC
la sensibilidad fue del 72% similar a la PCR pero presentó la especificidad más baja
(50%) en relación al resto de marcadores. El VPN fue idéntico a la combinación “anti-
CCP+FR+PCR” pero el VPP fue el más bajo de todos los parámetros (48%).
160
Parámetros S E VPP VPN LR+ LR- OR (IC95%) Valor p
Biomarcadores
161
Como se observa en la figura 39, la mayor exactitud corresponde a las
combinaciones “anti-CCP+FR+PCR” y “anti-CCP+FR” con un área bajo la curva de
0,94 y 0,93 respectivamente (Tabla 23). El AUC para los anti-CCP fue de 0,89
mientras que para el FR fue superior con un valor de 0,90. Según la curva ROC, el
punto de corte más apropiado de los anticuerpos anti-CCP para el diagnóstico de AR
fue de 22 U/mL (S=71%, E=94%), mientras que para el FR fue de 26 UI/mL (S=78%,
E=88%).
Para el FR, las diferencias fueron significativas con las curvas de PCR
(p<0,0001), “anti-CCP+FR” (p=0,003) y “anti-CCP+FR+PCR” (p=0,003). Las
diferencias entre las curvas de PCR con “anti-CCP+FR+PCR” y “anti-CCP+FR” fueron
significativas (p<0,0001).
Tabla 23. Área bajo la curva ROC de los marcadores bioquímicos de los
pacientes en el grupo AR respecto al grupo NOAR+CONTROL.
162
Valor diagnó stico de los biomarcadores en
6 consulta especializada de Artritis Precoz
163
El EC presentó una sensibilidad (72%) idéntica a la PCR con E, VPP y VPN
muy bajos siendo estos resultados no significativos (p=0,09). Para los anti-CCP el LR+
fue superior al FR y a las combinaciones entre los marcadores bioquímicos. El FR
presentó el LR- más bajo. El LR+ disminuyó respecto a Atención Primaria para todos
los parámetros presentando los anti-CCP el valor superior. Los LR- no se modificaron
para los anti-CCP y las combinaciones “anti-CCP+FR+PCR”, “anti-CCP+FR” y “anti-
CCP o FR” en relación a Atención Primaria.
Biomarcadores
164
No se encontraron diferencias significativas entre el área bajo las curvas de
“anti-CCP+FR+PCR” con “anti-CCP+FR” (p=0,3), anti-CCP con FR (p=0,8) y PCR con
VSG (p=0,3). La diferencia resultó significativa entre la curvas de los anticuerpos anti-
CCP con las combinaciones “anti-CCP+FR+PCR” (p=0,004) y “anti-CCP+FR” (p=0,01)
mientras que para el FR las diferencias también fueron significativas con ambas
combinaciones; “anti-CCP+FR” (p=0,001) y “anti-CCP+FR+PCR” (p=0,001).
Para los reactantes de fase aguda PCR y VGS, las diferencias resultaron
significativas entre sus curvas y las definidas por “anti-CCP+FR” (p<0,0001), “anti-
CCP+FR+PCR” (p<0,0001), anti-CCP (p<0,0001) y FR (p<0,0001).
Tabla 25. Área bajo la curva ROC de los marcadores bioquímicos de los
pacientes en el grupo AR respecto al grupo NOAR.
165
En aquellos casos donde ambos anticuerpos fueron positivos (“anti-CCP y FR
positivos”), no se encontró asociación significativa entre el EC y la presencia
concomitante de ambos anticuerpos aunque se observó un mayor porcentaje de
pacientes con EC positivo y con “anti-CCP y FR positivos”.
Anti-CCP Anti-CCP
Epitopo compartido negativo positivo OR IC95% Valor p (1)
(n=37) (n=69)
FR negativo FR positivo
Epitopo compartido OR IC95% Valor p (1)
(n=20) (n=86)
166
Para determinar si los niveles de anticuerpos en suero (anti-CCP y FR) estaban
relacionados con la presencia del EC, se estudió la asociación entre el EC y los
niveles de dichos anticuerpos (Tabla 27).
Epitopo compartido
Negativo Heterocigoto Homocigoto Positivo
Valor p
(n=29) (n=60) (n=17) (n=77)
Los niveles de los anticuerpos anti-CCP (Tabla 27 y Figura 41) fueron de 17,5
(7,3-34) U/mL en los pacientes que tenían el EC negativo, 177 (15,9-280) U/mL en
aquellos con EC heterocigoto, 207 (45-320) U/mL en aquellos con EC homocigoto o
con dos alelos del EC y de 177 (16-301) U/mL en pacientes con EC positivo (formado
por la combinación de las categorías heterocigotos y homocigotos). Se encontraron
diferencias significativas en los niveles de anti-CCP entre los grupos del EC definidos
por negativo/positivo (p<0,0001), negativo/heterocigoto (p<0,0001) y
negativo/homocigoto (p=0,001). Entre los grupos heterocigoto/homocigoto no
existieron diferencias estadísticamente significativas (p=0,9).
Del mismo modo, los niveles para el FR (Tabla 27 y Figura 42) fueron de 33,2
(20-59) UI/mL, 77,3 (39,5-225,5) UI/mL, 92 (35-210) UI/mL y 83 (39-224) UI/mL para
los pacientes con EC negativo, heterocigoto, homocigoto y positivo respectivamente.
Las diferencias significativas encontradas entre los niveles de FR se apreciaron entre
los grupos del EC negativo/positivo (p<0,0001), negativo/heterocigoto (p=0,001) y
negativo/homocigoto (p=0,01). Al igual que ocurre con los anti-CCP, entre los grupos
heterocigoto/homocigoto no se observaron diferencias estadísticamente significativas
(p=0,9).
167
Figura 41. Niveles de anti-CCP (U/mL) en pacientes con AR según el EC.
168
Asociació n entre el há bito
tabá quico y los anticuerpos anti-CCP y FR
8 en los pacientes con Artritis Reumatoide
Anti-CCP Anti-CCP
Hábito tabáquico negativo positivo OR IC95% Valor p (2)
(n=37) (N=69)
FR negativo FR positivo
Hábito tabáquico OR IC95% Valor p (2)
(n=20) (n=86)
169
este porcentaje fue del 57%. Para el FR se obtuvo un OR de 3,89 (IC95% 1,06-14,28)
siendo el FR positivo en el 92% y 75% de los pacientes con hábito tabáquico positivo y
negativo respectivamente. En los pacientes con anti-CCP y FR positivos, ambos
anticuerpos fueron positivos simultáneamente en el 74% de los pacientes fumadores
con un OR 2,49 (IC95% 1,05-5,91).
Hábito tabáquico
No Fumador
Ex Fumador Fumador (1)
Fumador activo Valor p
(n=13) (n=38)
(n=68) (n=25)
170
Figura 43. Niveles de anti-CCP (U/mL) en pacientes con AR según el hábito
tabáquico.
171
Para el FR (Tabla 29 y Figura 44), los niveles fueron de 83,5 (41-258) UI/mL y
de 43 (20,5-258) UI/mL para los pacientes fumadores y no fumadores,
respectivamente. Las diferencias encontradas entre los niveles fueron
estadísticamente significativas (p=0,01). Las concentraciones para los ex fumadores
fueron de 78 (67,2-285) UI/mL mientras que para los fumadores activos fueron de 89
(34,6-215) UI/mL. En los test post-hoc sólo se encontraron diferencias significativas en
los niveles de FR entre los pacientes no fumadores y ex fumadores (p=0,03).
Anti-CCP Anti-CCP
Índice de Tabaquismo negativo positivo OR IC95% Valor p (1)
(n=37) (n=69)
FR negativo FR positivo
Índice de Tabaquismo OR IC95% Valor p (1)
(n=20) (n=86)
172
negativo donde los porcentajes descendieron al 50 y 57%, respectivamente. Para el
FR se obtuvo un OR de 8,33 (IC95% 1,05-66,22) siendo el FR positivo en el 96% y
83% de los pacientes con índice de tabaquismo alto y bajo respectivamente. En los
pacientes con anti-CCP y FR positivos, éstos fueron positivos simultáneamente en el
89% de los pacientes con índice de tabaquismo alto (OR 6,82 con IC95% de 1,87-
24,85) mientras que en los pacientes con índice de tabaquismo bajo el porcentaje fue
del 42%.
Índice de tabaquismo
Bajo Alto
Negativo
(1-20 paq./año) (>20 paq./año) Valor p (1)
(n=68)
(n=12) (n=26)
173
Figura 45. Niveles de anti-CCP (U/mL) en pacientes con AR según el índice de
tabaquismo.
174
Interacció n entre el há bito tabá quico
y el epitopo compartido sobre los anticuerpos
9 en los pacientes con Artritis Reumatoide
Anti-CCP Anti-CCP
negativo positivo OR IC95% Valor p (2)
(n=37) (n=69)
EC negativo (N=29)
EC positivo (N=77)
Tabla 32. Asociación entre los anticuerpos anti-CCP y el hábito tabáquico en los
pacientes con AR estratificado según el EC. Datos expresados como n (%). (1) La
(2)
categoría “Fumador” engloba tanto a “ex fumadores” como “fumadores activos”. Prueba de
Chi cuadrado.
175
figura 48), la presencia del hábito tabáquico no se tradujo en un riesgo significativo de
presentar anticuerpos anti-CCP siendo el OR de 1,53 (IC95% 0,31-7,44; p=0,6).
176
A continuación, se estudió además si existía asociación entre el EC y el índice
de tabaquismo sobre la presencia de anticuerpos anti-CCP. En este caso, los
pacientes fueron estratificados de acuerdo a la presencia del EC y se evaluó si el
índice de tabaquismo, definido por “negativo”, “bajo (1-20 paquetes/año)” y “alto (>20
paquetes/año)” aumenta el riesgo de anti-CCP positivos en presencia o ausencia del
EC.
Anti-CCP Anti-CCP
negativo positivo OR IC95% Valor p (1)
(n=37) (n=69)
EC negativo (N=29)
EC positivo (N=77)
177
Figura 49. Porcentaje de pacientes con anti-CCP positivos y negativos según el
índice de tabaquismo en los pacientes diagnosticados de AR y con EC negativo
(n=29). El porcentaje hace referencia a los pacientes con anti-CCP positivos y negativos
dentro de cada categoría del índice de tabaquismo.
178
Por último, para comprobar si los factores estudiados (EC, hábito tabáquico e
índice de tabaquismo) estaban asociados independientemente con la presencia de
anticuerpos anti-CCP y confirmar la existencia de una interacción significativa entre
ellos se obtuvo un modelo de regresión logística. En este modelo (Tabla 34), los
únicos factores independientemente relacionados con la presencia de anti-CCP fueron
la presencia del EC y de un índice de tabaquismo alto. El R2 del modelo fue del 30%.
Términos de
OR (IC95%) Valor p OR (IC95%) Valor p
interacción
Tabla 34. Análisis multivariante por regresión logística de las variables que
influyen independientemente en la presencia de anticuerpos anti-CCP en los
pacientes con AR. (1) La categoría “Fumador” engloba a “ex fumadores” y “fumadores
activos”. En el análisis univariante se resumen las variables independientes asociadas con la
presencia de anti-CCP (Tablas 26, 28 y 30) y que se incluyeron inicialmente en el modelo
multivariante. Variables de confusión: sexo, edad. Variable dependiente: anticuerpos anti-CCP.
179
EC negativo EC negativo EC positivo y EC positivo y
no fumador y fumador no fumador fumador Valor p (1)
(N=20) (N=9) (N=48) (N=29)
Los niveles de los anticuerpos anti-CCP (Tabla 35 y Figura 51) fueron de 23,9
(7-36,5) U/mL en el grupo “EC negativo/No fumador”, 14,6 (8,4-21,8) U/mL para “EC
negativo/Fumador”, 99 (7,1-272,7) U/mL para “EC positivo/No fumador” y 203,8 (84-
318) U/mL para “EC positivo/Fumador”. Se encontraron diferencias significativas entre
el grupo de referencia “EC negativo/No fumador” y los grupos definidos por “EC
positivo/No fumador” (p<0,0001) y “EC positivo/Fumador” (p<0,0001). Las diferencias
también fueron significativas entre el grupo “EC negativo/Fumador” y los grupos
definidos por “EC positivo/No fumador” (p<0,0001) y “EC positivo/Fumador”
(p<0,0001). No se encontraron diferencias estadísticamente significativas entre los
grupos “EC negativo/No fumador” y “EC negativo/Fumador” (p=0,3) y los grupos “EC
positivo/No fumador” y “EC positivo/Fumador” (p=0,2).
180
Figura 51. Niveles de anti-CCP (U/mL) en los pacientes con AR según las
combinaciones de las variables epitopo compartido y hábito tabáquico.
181
Del mismo modo que se procedió para el hábito tabáquico, se estudió si los
niveles de los anticuerpos estaban asociados con el índice de tabaquismo en
presencia del EC. Para ello, las categorías del índice de tabaquismo definidos por
“Negativo” y “1 a 20 paquetes/año” se fusionaron en una nueva categoría para
simplificar los cálculos quedando la variable redefinida como “≤20 paquetes/año” y
“>20 paquetes/año. Los pacientes se agruparon en cuatro grupos definidos por la
combinación de dichas variables y se compararon los niveles de anti-CCP y FR en
cada grupo como primera aproximación (Tabla 36 y figuras 53 y 54).
182
Figura 53. Niveles de anti-CCP (U/mL) en los pacientes con AR según las
combinaciones de las variables epitopo compartido e índice de tabaquismo.
183
En el contexto de los resultados expuestos, con esta primera aproximación se
aprecia una posible interacción entre el hábito tabáquico y el EC y entre el índice de
tabaquismo y el EC sobre los títulos de anticuerpos anti-CCP y FR y por lo tanto, sobre
el grado de respuesta de inmunidad humoral adaptativa específica para la AR. De este
modo, con estos resultados se planteó un modelo lineal general univariante (Tabla 37)
para ver cuáles eran los factores independientes que podrían influir en los niveles
séricos de anti-CCP y FR. Para los niveles de anticuerpos anti-CCP se observaron
diferencias estadísticamente significativas para el EC (p=0,002), el índice de
tabaquismo (p=0,03) y la interacción epitopo compartido-índice de tabaquismo
(p=0,03). En cuanto a la significación práctica del modelo, éste presentó un coeficiente
Eta2 del 32% lo que indica que los factores incluidos en el modelo explican el 32% de
la variable dependiente (niveles séricos de anti-CCP). Dentro del modelo, el EC
explicó el 40% de la varianza de los niveles de anti-CCP mientras que el índice de
tabaquismo y la interacción entre ambos factores explicaron el 68% y 30% de la
variable dependiente, respectivamente.
Coeficiente
Potencia Valor p
Eta2 (%)
Tabla 37. Modelo lineal general univariante para el estudio de la interacción entre
el epitopo compartido y el hábito tabáquico sobre los niveles de anti-CCP y de
FR. Variables independientes incluidas inicialmente en el modelo: epitopo compartido, hábito
tabáquico, índice de tabaquismo y las interacciones entre ellos. Variables de confusión: sexo,
edad. Variable dependiente: anticuerpos anti-CCP para el modelo 1 y FR para el modelo 2.
184
En cuanto a los niveles de FR sólo se observaron diferencias estadísticamente
significativas para el EC (p=0,003) donde este factor explicó el 12% de la varianza de
la variable dependiente presentando también una baja relevancia clínica. La
significación práctica del modelo fue del 21%.
185
El daño radiológico de los pacientes se evaluó mediante la presencia de
erosiones articulares en las radiografías anteroposteriores de manos y pies. Las
erosiones articulares óseas se observaron en el 71% de los pacientes en la visita
basal pero las diferencias no fueron significativas entre pacientes con anti-CCP
positivo y negativo (63% y 78% respectivamente) Del mismo modo, las diferencias
tampoco fueron significativas para la presencia de un marcador de actividad
DAS28≥5,5 y una puntuación en el cuestionario de discapacidad HAQ>1 según la
positividad para los anti-CCP. Sin embargo, se observaron diferencias significativas en
el porcentaje de pacientes que iniciaron terapia con MTX siendo del 47% en pacientes
con anti-CCP negativos frente a un 78% en aquellos con anti-CCP positivos (p=0,02).
100
anti-CCP negativo Anti-CCP positivo
90 90 90
80 84 85
78 79
Erosiones (%)
60
63
40
20
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
186
La actividad de la enfermedad medida por la puntuación DAS28 (Figura 54) fue
similar para los pacientes con y sin anti-CCP positivos en la visita basal. Así, el DAS28
fue de 5,7 (4,0-6,7) para los pacientes con anti-CCP positivos y de 5,7 (4,3-6,7) para
los pacientes con anti-CCP negativos. En los pacientes con anti-CCP positivos; el
DAS28 descendió significativamente desde el valor inicial de 5,7 (4,0-6,7) en la visita
basal a niveles de 3,7 (2,8-4,7), 3,4 (2,6-4,5) y aumentó a 3,7 (2,5-4,2) a los 12, 24 y
36 meses de seguimiento respectivamente (p=0,001). Para aquellos con anti-CCP
negativos, la evolución fue desde un valor inicial de 5,7 (4,3-6,7) a niveles de 3,4 (2,1-
4,9), 2,9 (1,8-3,6) y 2,5 (2,0-3,3) respectivamente (p<0,0001).
6
Anti-CCP negativo
5,5
Anti-CCP positivo
5
4,5
DAS28
p=0,01
4 p=0,04 *
3,5 *
3
2,5
2
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 54. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los
pacientes con anti-CCP negativo (≤120 U/mL) y con anti-CCP positivo (>120
U/mL). Los pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para los anti-CCP al
momento del diagnóstico según el punto de corte definido por 120 U/mL. * Diferencias
estadísticamente significativas encontradas entre grupos con anti-CCP positivo y negativo.
187
positivos el valor del índice HAQ disminuyo continuamente hasta los 24 meses tras lo
que aumentó ligeramente a los 36 meses (p=0,01).
2
1,8 Anti-CCP negativo
1
0,8
0,6
0,4
0,2
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 55. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los
pacientes con anti-CCP negativo (≤120 U/mL) y con anti-CCP positivo (>120
U/mL). Los pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para los anti-CCP al
momento del diagnóstico según el punto de corte definido por 120 U/mL.
188
Anti-CCP Anti-CCP
Parámetros negativo positivo
(n=32) (n=27)
Tabla 39. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados
para los pacientes con anti-CCP negativo (≤120 U/mL) y con anti-CCP positivo
(>120 U/mL) durante los 3 años de seguimiento. Los pacientes fueron divididos en dos
grupos según la positividad para los anti-CCP al momento del diagnóstico para un punto de
corte de 120 U/mL. El valor p hace referencia a la diferencia entre grupos con anti-CCP
negativo y anti-CCP positivo. (1) Prueba de Chi cuadrado. (2) Prueba no paramétrica U de Mann-
Whitney.
189
Se observó un mayor porcentaje de pacientes con una puntuación HAQ>1 en
el grupo con FR positivo (p=0,02). Sin embargo, no se encontraron diferencias
significativas para la presencia de erosiones articulares, la actividad elevada de la
enfermedad definida por un DAS28≥5,5 y el porcentaje de pacientes que inician
terapia con MTX.
Todos los
FR negativo FR positivo
pacientes
Parámetros (n=31) (n=28) Valor p (1)
(N=59)
n (%) n (%)
n (%)
190
100
FR negativo FR positivo
93
80 87 89 87
80 82
Erosiones (%) 71 71
60
40
20
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
6
FR negativo
5,5
FR positivo
5
4,5
DAS28
4
3,5
3
2,5
2
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 57. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los
pacientes con FR negativo (≤60 UI/mL) y con FR positivo (>60 UI/mL). Los
pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para el FR al momento del
diagnóstico según el punto de corte definido por 60 UI/mL.
191
En ambos grupos el valor de DAS28 disminuyo continuamente siendo
significativa tanto para el grupo con FR positivo (p<0,0001) como para el grupo con FR
negativo (p<0,0001). En el primer grupo disminuyó de un valor inicial de 5,9 (4,7-6,6) a
un valor de 3,1 (2,2-3,7) a los 36 meses. Del mismo modo, en el grupo de pacientes
con FR negativo, disminuyó desde un valor de 5,5 (4,1-6,6) hasta 2,7 (2,1-3,7).
2
1,8 FR negativo
1,6 FR positivo
1,4
1,2
HAQ
1
0,8
0,6
0,4
0,2
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 58. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los
pacientes con FR negativo (≤60 UI/mL) y con FR positivo (>60 UI/mL). Los
pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para el FR al momento del
diagnóstico según el punto de corte definido por 60 UI/mL.
192
Los datos relativos al seguimiento de los pacientes para las erosiones
articulares, DAS28 y HAQ se localizan en la tabla 41. Del mismo modo que como se
ha procedido para el punto de corte de 60 UI/mL; el análisis de los datos con el punto
de corte 20 UI/mL para el FR mostró resultados similares sin encontrarse significación
alguna entre grupos con FR positivo y negativo. Los resultados se encuentran en el
Anexo 7.
FR negativo FR positivo
Parámetros
(n=31) (n=28)
Tabla 41. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados
para los pacientes con FR negativo (≤60 UI/mL) y con FR positivo (>60 UI/mL)
durante los 3 años de seguimiento. Los pacientes fueron divididos en dos grupos según
la positividad para el FR al momento del diagnóstico para un punto de corte de 60 UI/mL. El
valor p hace referencia a la diferencia entre grupos con FR negativo y FR positivo. (1) Prueba de
Chi cuadrado. (2) Prueba no paramétrica U de Mann-Whitney.
193
Valor pronó stico
12 del Epitopo Compartido
Todos los
EC negativo EC positivo
pacientes
Parámetros (n=21) (n=38) Valor p (1)
(n=59)
n (%) n (%)
n (%)
194
comparación a aquellos con EC negativo donde dichos anticuerpos fueron de 37 (8-
87) U/mL y de 31 (20-38,5) UI/mL, respectivamente. No se encontraron diferencias
significativas para los marcadores de inflamación (PCR y VSG) y para las variables
clínicas DAS28, HAQ, NAD y NAI entre pacientes con EC positivo y negativo.
100
EC negativo EC positivo
90 90 87 90 90
80
81
76
Erosiones (%)
60 66
40
20
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Para el índice DAS28 se observaron valores similares entre los pacientes con
EC positivo y negativo durante el seguimiento. En ambos grupos, la puntuación del
DAS28 disminuyó a lo largo del tiempo de manera significativa con un nivel de
significación de p<0,0001 para el grupo con EC positivo y de p=0,004 para el grupo
con EC negativo (Figura 60).
195
6
EC negativo
5,5
EC positivo
5
4,5
DAS28
4
3,5
3
2,5
2
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 60. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los
pacientes con EC negativo y positivo. Los pacientes fueron divididos en dos grupos
según la positividad para el EC.
2
1,8 EC negativo
1,6 EC positivo
1,4
1,2
HAQ
1
0,8
0,6
0,4
0,2
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 61. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los
pacientes con EC negativo y positivo. Los pacientes fueron divididos en dos grupos
según la positividad para el EC.
196
Los datos relativos al seguimiento de los pacientes para las erosiones
articulares, DAS28 y HAQ se localizan en la tabla 43.
EC negativo EC positivo
Parámetros
(n=21) (n=38)
Tabla 43. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados
para los pacientes con EC negativo y con EC positivo durante los 3 años de
seguimiento. El valor p hace referencia a la diferencia entre grupos con EC negativo y EC
positivo. (1) Prueba de Chi cuadrado. (2) Prueba no paramétrica U de Mann-Whitney.
197
198
V
Discusión
200
La AR es una enfermedad autoinmune sistémica que afecta entre el 0,5-1% de
la población. La incidencia anual de la enfermedad es de 3 casos por 10.000
habitantes con una prevalencia aproximada del 1%. Su repercusión socioeconómica
es muy elevada con costes directos e indirectos y alrededor del 5% de las bajas
laborales en España se deben a la AR. El daño articular es responsable en gran parte
de la discapacidad de estos pacientes452.
Así, el diagnóstico precoz y, por tanto, la prevención del daño articular con el
tratamiento adecuado es fundamental en los pacientes con AR. Además, la
identificación de marcadores pronósticos de la enfermedad puede ayudar a modificar
el curso de la enfermedad.
201
de fase agua elevados y afectación predominantemente poliarticular. De este modo,
las características principales de los pacientes con AR, tanto demográficas como
clínicas y serológicas, al diagnóstico son similares a otros estudios realizados en
nuestra área geográfica como se encuentra recogido en la literatura científica453.
Destaca que estos pacientes, tanto AR como NOAR, son atendidos por el
reumatólogo, en el 83% y 87% de los casos respectivamente, en un tiempo inferior a
dos años desde la aparición de los primeros síntomas. De ello se deduce que los
pacientes presentaron un diagnóstico precoz de la enfermedad. Este tiempo se ha
reducido de más de 4 años en el periodo 2001-2002 a menos de dos en la fecha en
que se realizó el estudio y representa un claro avance en la estrategia T2T (Treat to
Target) del tratamiento de la enfermedad. Esta estrategia T2T propone que la meta
terapéutica en AR debería ser la remisión clínica o en su defecto, un estado de bajo
nivel de actividad. La reducción en el tiempo se debe principalmente a la creación de
las consultas especializadas de artritis precoz que están enfocadas a pacientes que
presentan artritis de inicio en atención primaria, como una vía de derivación rápida y
fácil en la que el tiempo entre que se manifiesta la artritis y es reconocida por el
médico de atención primaria hasta que lo ve el reumatólogo debe ser menor de dos
202
meses. El tiempo en que el reumatólogo inicia el tratamiento y establece el diagnóstico
no debe superar las seis semanas. Además, esta derivación a las consultas de artritis
precoz en el menor tiempo posible es fundamental para instaurar un tratamiento
precoz con FARMES en pacientes con AR para prevenir el daño articular irreversible
que se produce en las primeras etapas de la enfermedad, de acuerdo con la estrategia
T2T y los actuales protocolos de actuación vigentes.
203
la presencia de manifestaciones extraarticulares fue inferior en porcentaje y se limitaba
a SS, xeroftalmia o xerostomía. Se puede considerar que existe cierto sesgo en la
búsqueda de manifestaciones extraarticulares de forma minuciosa en la consulta de
artritis precoz.
De los 106 pacientes con AR, el 65% de ellos presentaron los anti-CCP
positivos mientras que el 86% presentaron el FR positivo. La presencia de ambos
204
anticuerpos estuvo fuertemente asociado con la AR. Ninguno de los sujetos del grupo
control presentaron valores elevados de anti-CCP mientras que el FR estuvo elevado
en el 10% de los sujetos control, a títulos muy bajos, menos de 2xDE del límite
superior. Resultados similares fueron reportados por Low y cols. y Sockalingam y cols.
donde los anti-CCP fueron negativos en los individuos control457,458. Sin embargo,
Payet y cols. señalaron recientemente que aunque los anti-CCP son anticuerpos
específicos de la AR, pueden observarse en otras enfermedades reumáticas
inflamatorias como la PSA pero en un bajo porcentaje de pacientes459.
Aunque los ANAs están presentes en un 25-30% de los pacientes con AR, la
presencia de estos anticuerpos no figura entre los criterios de la ACR/EULAR del año
2010 para la clasificación de la AR17,462 debido a su pobre sensibilidad y especificidad
diagnóstica. En nuestro estudio, los ANAs estuvieron presentes en el 29% de los
pacientes con AR. Los resultados obtenidos señalan que la detección de ANAs en los
pacientes con AR nos obligaría a descartar la existencia de un SS o de un LES dada la
posibilidad de un síndrome de solapamiento y la dificultad de establecer uno u otro
diagnóstico en algunos pacientes con enfermedad de reciente inicio.
En los pacientes del grupo NOAR, con resultados negativos o positivos débiles
de los anti-CCP, FR o ambos, es útil la valoración de los ANAs y de sus antígenos
específicos para realizar el diagnóstico diferencial con otras enfermedades
autoinmunes sistémicas como LES, SS, esclerodermia y los comentados síndromes
de superposición. Estos hallazgos son de enorme utilidad clínica y permiten al
reumatólogo orientar de modo diferente el diagnóstico, tratamiento y seguimiento de
los enfermos con patología autoinmune.
205
“Hipótesis del EC”58. Respecto al análisis de los alelos implicados en la enfermedad,
concretamente el EC HLA-DRB1, se encontró una mayor frecuencia en el grupo AR en
relación los grupos NOAR y CONTROL. La prevalencia que hemos encontrado en los
pacientes con AR es del 73%, ligeramente superior a la obtenida por Pascual y cols.
en un estudio realizado en Granada en una muestra de 160 pacientes y donde
apreciaron una prevalencia del 60% (IC95% 52,4-67,6%)101. En dicho estudio, el
genotipo Negativo/Negativo apareció en un 40% de los pacientes con AR mientras que
en nuestro estudio fue del 27%. En otro estudio realizado en el área norte de España,
en una cohorte de 187 pacientes con AR y donde estudiaron la relación entre EC,
inflamación y eventos cardiovasculares, encontraron una prevalencia del 67% (IC95%
64-70%) y más próxima al resultado obtenido por nosotros463. Estas diferencias
pueden provenir de sesgos de selección de pacientes estudiados: población general,
consultas de atención primaria, consultas de pacientes con artritis o consultas de
reumatología de hospitales de tercer nivel que agrupan casos muy graves de la
enfermedad.
206
comunes asociados con la AR mientras que el alelo DRB1*0405 predomina en
poblaciones asiáticas y el alelo DRB1*1402 en los indios Yakima65,68,71,445.
Los genes que codifican la severidad de la enfermedad, entre los que destacan
los alelos DRB1*04 que presentan el motivo QKRAA y que juega un rol fundamental
en la predisposición a la AR, tienen una menor prevalencia en España que en otros
países del norte de Europa, lo que podría explicar la menor prevalencia y gravedad de
la enfermedad en el sur de Europa en comparación con las poblaciones del norte101,464.
207
Por otro lado, aunque España y los países europeos más meridionales
presentan una alta prevalencia del hábito tabáquico, es necesaria su interacción con
otros factores como el EC para activar la citrulinización de proteínas y la posterior
aparición de AR235,257. En este estudio se observó que aunque el hábito tabáquico fue
similar en los tres grupos estudiados, en el grupo AR se observó un mayor porcentaje
de pacientes con un IT elevado, y por lo tanto, niveles más altos de dicha variable. Es
interesante señalar que los pacientes con AR y ex fumadores presentaron niveles más
altos del IT que los que eran fumadores activos.
208
que fueron diagnosticados de AI al no cumplir criterios de clasificación de AR, una vez
finalizado el estudio, terminaron cumpliendo los criterios de AR. Este hecho pone de
manifiesto la capacidad pronostica de los anti-CCP en pacientes con AI a la hora de
predecir el desarrollo de AR.
Por último, los anti-CCP no fueron positivos en ningún sujeto del grupo
CONTROL pero el FR fue positivo en 7 sujetos. La ausencia de los anti-CCP en los
individuos sanos y en las enfermedades del grupo NOAR (excepto los 4 casos con AI)
nos confirma su alta asociación con la AR. Aunque la valoración clínica de los
pacientes es fundamental, el empleo de los anticuerpos asociados a la enfermedad
nos ayudaría a diagnosticar a pacientes con manifestaciones clínicas similares en AR
u otras patológicas autoinmunes.
209
derivados a dicha consulta pero que deberían ser previamente derivados a otras
consultas monográficas de enfermedades sistémicas, artropatías, etc. Por ello es
importante, estudiar no sólo el valor de los marcadores bioquímicos en una consulta
de artritis precoz, donde van a acudir pacientes AR y NOAR y que constituye la base
de nuestro estudio, sino también en una consulta de atención primaria. En nuestro
caso, está formada por los dos grupos anteriores de pacientes (AR y NOAR) junto a un
grupo CONTROL como representación conjunta de todos ellos en dicha consulta.
210
más aún en muchas enfermedades no reumáticas que cursan con artritis como
infecciosas, linfoproliferativas, etc.
211
Nuestro estudio mostró que la combinación “anti-CCP o FR” incrementó la
sensibilidad al 86% y la especificidad permaneció similar al FR con un valor del 81%.
Por otro lado, con las combinaciones “anti-CCP+FR” y anti-CCP+FR+PCR” la
sensibilidad disminuyo en ambas combinaciones en relación al FR mientras que la
especificidad aumentó a la de los anti-CCP. Esta disminución en la sensibilidad de las
combinaciones es debido a que estuvo limitada por la sensibilidad de los anti-CCP. Sin
embargo, el uso combinado de estos biomarcadores tiene cierta controversia. Mientras
algunos estudios sugieren que el FR y anti-CCP deberían ser utilizados en
combinación para conseguir unas propiedades diagnósticas óptimas, otros estudios
sólo encontraron un pequeño valor diagnóstico adicional combinando ambos
biomarcadores.
212
En un meta-análisis por Sun y cols.479 concluyeron que tanto el FR como los
anti-CCP son pruebas útiles y complementarias en el diagnóstico de la AR y, como
ocurre en nuestro estudio de una consulta de atención primaria, la combinación de
ambos anticuerpos puede incrementar el valor diagnóstico proporcionando un
importante valor clínico. Por tanto, con los resultados obtenidos la combinación “anti-
CCP o FR” sería la mejor combinación en atención primaria a la hora de realizar un
cribado de pacientes para derivarlos a una consulta especializada de artritis precoz.
213
En otro reciente estudio basado en una consulta especializada de artritis
precoz se obtuvo una sensibilidad y especificidad para el FR de 67 y 79%
respectivamente, mientras que para los anti CCP fue de 79% y 98%,
respectivamente484. Las especificidades obtenidas son similares a las nuestras pero
los valores de sensibilidad difieren entre ambos estudios. Con la presencia de uno u
otro anticuerpo (anti-CCP o FR) la sensibilidad aumento al 85% como ocurre con
nuestro estudio donde dicho aumento fue del 86%.
Las diferencias que se pueden encontrar entre distintos estudios pueden ser
explicadas por las características de las cohortes estudiadas e incluso los distintos
puntos de corte empleados en los ensayos de determinación de anticuerpos y la
generación del ensayo empleado en el caso de los anti-CCP. Con el descubrimiento y
posterior desarrollo de las distintas generaciones de anticuerpos anti-CCP, en la
actualidad nos encontramos con el que podemos considerar como el marcador
serológico específico más adecuado para el diagnóstico precoz de la AR. Los
resultados obtenidos en nuestra población indican que los anti-CCP son en una
herramienta fundamental para confirmar el diagnóstico de AR en los pacientes con
artritis de inicio derivados a una consulta de atención especializada. En cambio, el FR,
dada su inespecificidad, se puede encontrar presente en pacientes con otras
enfermedades autoinmunes e infecciosas como se ha comentado, incluso en una
considerable proporción de pacientes sanos, particularmente en sujetos ancianos236.
214
antígenos citrulinados como de isotipos de FR (IgM, IgG e IgA) o el desarrollo de
nuevos marcadores para estos pacientes. En esta línea encontramos un reciente
trabajo realizado por Melguizo y cols. donde señalaron que la adición de nuevos
marcadores de estrés oxidativo como hidroperóxidos lipídicos o proteínas carboniladas
serían útiles en el diagnóstico de pacientes con anti-CCP negativos485.
En este contexto, la AR queda definida no como una entidad única sino como
una entidad que según la presencia de determinados anticuerpos presentaría una
expresión clínica determinada y un pronóstico distinto. Por último señalar que la alta
especificidad que presentan los anti-CCP es el aspecto más valioso de este ensayo lo
que explicaría uno de los motivos de su inclusión en los criterios diagnósticos de la AR
de la ACR/EULAR (2010)17. Además, la adición de los anti-CCP a estos criterios ha
reforzado el rol del laboratorio clínico en el diagnóstico de la AR.
Efecto del epitopo compartido y del hábito tabáquico sobre los anticuerpos en
los pacientes con Artritis Reumatoide
Los estudios genéticos realizados han demostrado que los alelos HLA están
implicados en un amplio número de enfermedades inflamatorias crónicas. En el caso
que nos ocupa, el principal gen asociado con la AR es el EC HLA-DRB1 que incluye a
los alelos DRB1*01, DRB1*04 y DRB1*1058. La mayoría de estos estudios en AR se
han realizado en el continente europeo, sobre todo en los países de la zona norte,
demostrando una consistencia en sus resultados. La evidencia científica de los últimos
años señala que los alelos del EC HLA-DRB1 están asociados sólo con un subgrupo
de pacientes con AR caracterizados por la presencia de anti-CCP y/o FR235,245,257,488.
Un estudio reciente de GWAS en pacientes con anti-CCP positivos apoya la idea de
que distintos factores genéticos de riesgo intervienen en los distintos subgrupos de
215
pacientes definidos por el estado de los anti-CCP por lo que dichos subgrupos
deberían ser estudiados y tratados como entidades separadas489.
Pero no solo eso, cuando estudiamos los niveles de anti-CCP según el EC,
observamos que aunque los pacientes con EC positivo presentaban niveles superiores
de anti-CCP, al estratificar el EC según la dosis génica, en los pacientes homocigotos
los niveles de anti-CCP fueron superiores a los pacientes heterocigotos. Sin embargo,
las diferencias entre estos dos grupos no llegaron a ser significativas.
Sorprendentemente, para el FR si se observó una asociación entre los niveles de FR
según el EC. Al igual que para los anti-CCP, las diferencias no llegaron a ser
significativas entre los estados heterocigoto y homocigoto.
Esta falta de significación entre los niveles de anticuerpos y la dosis génica que
hemos obtenido en nuestros resultados puede ser debido a tres razones. En primer
lugar a que el EC HLA-DRB1 no es el único factor genético que influye en los
anticuerpos sino que hay otros genes tanto protectores como de susceptibilidad que
no hemos estudiado ya que no se determinan en la práctica clínica diaria. En segundo
lugar, al bajo número de pacientes que constituyen el grupo homocigoto tras la
estratificación lo que limita la interpretación de los resultados y por lo que sería
216
necesario un nuevo estudio incluyendo más pacientes para validar el efecto de la dosis
génica en nuestro entorno. Y por último, que no hemos prescindido de valores
extremos ya que consideramos que no son como tales sino que intervienen varios
factores genéticos y ambientales en sus niveles.
217
señalan que la asociación se da independientemente del estado actual de exposición
al tabaco, afectando tanto a fumadores activos como ex fumadores.
218
Nuestros resultados apoyan estas hipótesis sólo para los pacientes con AR y
anti-CCP positivos, confirmándose que los pacientes fumadores con el EC positivo
tenían asociados una mayor reactividad hacia los anti-CCP positivos con un OR de
3,75 (IC95% 1,12-12,53) (Tabla 32). En el grupo de fumadores hubo un 86% de
pacientes con anti-CCP positivos mientras que en el grupo de no fumadores este
porcentaje descendió al 63%. Sin embargo, en los pacientes con EC negativo no se
encontró una asociación significativa entre el hábito tabáquico y la presencia de anti-
CCP positivos lo cual confirma los resultados de estudios previos174,235,257,262,490.
En los pacientes con AR y sólo en aquellos que eran portadores de los alelos
del EC, se observó también una asociación entre el EC y el IT sobre la presencia de
anti-CCP. En los pacientes con EC positivo y un IT alto se observó un mayor
porcentaje de pacientes con anti-CCP positivos (95%) que en el resto de grupos. Para
los pacientes con EC negativo no se observó una asociación significativa al igual que
ocurrió con el hábito tabáquico. En los pacientes con EC positivo se encontró que el IT
alto (OR=12,00; IC95% 1,48-97,17), y por lo tanto la intensidad del consumo de
tabaco, estuvo más fuertemente asociada que el hábito de fumar en sí (OR=3,75;
IC95% 1,12-12,53) con un riesgo incrementado de anti-CCP positivos.
219
alelos del EC influyeron conjuntamente en los niveles de anti-CCP y FR objetivándose
una interacción entre los dos factores (Tablas 35 y 36). Del mismo modo que nosotros,
van der Helm-van Mil y cols. obtuvieron resultados idénticos para los anti-CCP264. Tras
realizar el correspondiente análisis multivariante identificamos que el EC, el IT y la
interacción entre ambos factores fueron las únicas variables que independientemente
influyeron en los niveles de anti-CCP. Para el FR la única variable independiente que
influyó en sus niveles fue el EC.
220
son necesarios más estudios para entender la complejidad de los distintos subgrupos
serológicos en la AR.
221
Según los resultados que hemos obtenido para un punto de corte de 120
U/mL para los anti-CCP, los pacientes con anti-CCP positivos al diagnóstico no están
exentos de presentar una menor respuesta al tratamiento con MTX valorado a través
de la puntuación del DAS28. Éstos presentaron valores superiores del índice DAS28
pero mientras que en los pacientes con anti-CCP negativos se observó una tendencia
a lo largo del tiempo a disminuir el DAS28; en los pacientes con anti-CCP positivos se
observó la misma tendencia pero a los 36 meses se produjo una inversión con un
aumento de nuevo del DAS28. En estos pacientes sería interesante valorar la inclusión
precoz de terapia biológica para conseguir una mayor respuesta valorada según el
DAS28. Si bien la utilidad pronóstica de los anti-CCP se ha descrito en otras series, en
este estudio, los pacientes con niveles elevados de anti-CCP mostraron mayor
actividad de la enfermedad, pero sin poder obtener conclusiones sólidas debido al
reducido tamaño muestral.
222
En un estudio realizado por Van der Helm-van Mil y cols., donde se
compararon dos grupos de pacientes con anti-CCP positivos y negativos en una
clínica de artritis precoz y durante un periodo de seguimiento de 4 años, no se
encontraron diferencias significativas en la rigidez matutina, actividad de la
enfermedad, PCR, NAI y NAD al diagnóstico. En el seguimiento de los pacientes,
aquellos con los anti-CCP positivos presentaron más articulaciones inflamadas y una
destrucción radiológica más severa concluyendo que el fenotipo de los pacientes con
AR era similar respecto a la presentación clínica pero difiere respecto al curso de la
enfermedad según la positividad para los anti-CCP502. Al igual que en el estudio
realizado por Van der Helm-van Mil y cols., nosotros no hemos encontrado diferencias
en la presentación clínica del fenotipo de los pacientes con AR con respecto a los
parámetros PCR, VSG, NAI, NAD, HAQ, DAS28 y erosiones articulares según los anti-
CCP. Al igual que para los anti-CCP, en la presentación clínica no se encontraron
diferencias para estos parámetros según el FR (punto de corte de 60 UI/mL) y el EC
excepto para la variable HAQ>1.
223
En relación al FR y para un punto de corte de 60 UI/mL no se observaron
diferencias significativas en el DAS28, HAQ y presencia de erosiones a lo largo del
tiempo. Sin embargo, para la variable HAQ se observó que aunque las diferencias no
fueron significativas estadísticamente entre grupos si podría presentar cierto valor
clínico. La diferencia en valor absoluto de la variable HAQ en cada momento del
seguimiento entre los dos grupos fue de 0,6 al diagnóstico, de 0,6 a los 12 meses, de
0,7 a los 24 meses y de 0,1 a los 36 meses. En los tres primeros puntos de
seguimiento se puede considerar esa diferencia relevante desde un punto de vista
clínico mientras que en el último punto llega a ser mínima la diferencia entre ambos
grupos. De estos resultados se desprende que sería necesario aumentar el número de
pacientes para determinar si el FR es capaz de discriminar entre los dos grupos o no.
Considerando un punto de corte de 20 UI/mL para el FR no se observó capacidad
pronostica significativa en relación a las medidas de desenlace de la AR al igual que
ocurrió con el EC cuando se empleó como parámetro pronóstico.
224
que dichos índices no estaban disponibles para un alto porcentaje de los pacientes por
lo que se decidió no hacer un estudio cuantitativo sino de carácter cualitativo. Con el
uso de los índices se podría haber obtenido resultados más esclarecedores en
relación al daño articular. Tampoco pudimos realizar un abordaje pronóstico basado en
un modelo de regresión logística multivariante ya que debido al bajo número de
pacientes en seguimiento durante 3 años sería necesario aumentar la cohorte de
pacientes para que nos permitan introducir un número adecuado de variables
pronosticas en el modelo y obtener un resultado satisfactorio. Si bien no hubo
diferencias entre los 59 pacientes incluidos en el estudio pronóstico y los 47 pacientes
perdidos de seguimiento, la naturaleza de los datos limita las conclusiones.
225
En ese sentido, nuestro estudio longitudinal está formado por pacientes que
iniciaron tratamiento tras el diagnóstico y los estudiamos durante un periodo de tres
años. Sin embargo, no fue posible analizar los cambios en la estrategia terapéutica
empleada dado el tamaño muestral de pacientes en seguimiento. Durante el periodo
de seguimiento, algunos pacientes empezaron terapia con biológicos. Sería deseable
haber incluido los cambios en el tratamiento durante el seguimiento de los pacientes.
Pero debido al tamaño de la muestra y los diversos tratamientos se hubiese generado
varios grupos de pocos pacientes que nos dificultarían el análisis estadístico. Por ello
se optó por prescindir de cambios en el tratamiento de los pacientes y una
interpretación más general de los resultados evolutivos.
Consideraciones finales
226
AR ha sido y sigue siendo una parte importante de este progreso. Las mejoras en el
conocimiento de la etiología de la enfermedad nos han permitido mejorar la habilidad
de los clínicos a la hora de diagnosticar la enfermedad en un estadio precoz.
227
del EC es una prueba que por su coste no aporta mayor utilidad diagnóstica y su uso
se encuentra limitado a ciertos casos precisos como en familias con multicasos de AR
o en pacientes con una rápida progresión radiográfica.
228
VI
Conclusiones
230
1.- La prevalencia de la AR en una consulta especializada de artritis precoz es del
50%.
3.- Las variables demográficas, clínicas y bioquímicas de los pacientes con AR son
similares a las descritas en otros estudios en población mediterránea y española. La
presentación clínica de los pacientes con y sin biomarcadores positivos, referido a los
anti-CCP, FR y EC, fue similar.
4.- Los anticuerpos anti-CCP y FR presentan una alta asociación con la AR aunque el
FR también está presente en un reducido grupo de pacientes del grupo NOAR a títulos
bajos.
6.- El EC presenta una alta asociación la con AR. La presencia del genotipo DR4,
asociado a un peor pronóstico, se asocia fuertemente con la AR en nuestra población.
231
7.- En una consulta de atención primaria, la combinación “anti-CCP o FR” presenta el
mejor valor diagnóstico para realizar un cribado de pacientes con sospecha de AR y
derivarlos a una consulta especializada de artritis precoz.
8.- En una consulta especializada de artritis precoz, los anti-CCP presentan una alta
especificidad para la AR que a su vez resulta en un alto VPP y nos permite confirmar
el diagnóstico de AR en dicha consulta.
232
VII
Anexos
234
Anexo 1
Aprobació n del proyecto de investigació n
235
236
237
238
Anexo 2
Consentimiento informado
239
240
Consentimiento informado del paciente
SERVICIO DE REUMATOLOGÍA
HOSPITAL UNIVERSITARIO VIRGEN MACARENA
AVDA. DR. FEDRIANI S/N
41071 SEVILLA
INTRODUCCIÓN
Antes de tomar una decisión, lea atentamente este documento. Haga tantas preguntas
como desee hasta asegurarse de que lo ha entendido y desea participar. También
puede consultar antes de decidirse con el médico, enfermera, familiares o amigos.
RIESGOS
241
COMPENSACIÓN
Usted no recibirá ningún tipo de compensación económica o de cualquier otro tipo por
su participación.
CONFIDENCIALIDAD
Toda la información que se obtenga, así como la información clínica referente a usted
utilizada en las investigaciones futuras, será considerada confidencial y tratada en
consecuencia. Para garantizar el anonimato de su identidad (asegurar que la
información de sus datos no se relaciona con su identidad), sus resultados en la base
de datos se identificaran con un código numérico y no con su nombre. Sólo este
código, y nunca su identidad, aparecerán en las bases de datos donde figure la
información clínica referida a usted. La relación entre su código y su identidad quedará
custodiada por una persona autorizada del equipo investigador, adoptándose medidas
estrictas para que tal información no esté disponible más que para esa persona
autorizada, que en ningún caso podrá desvelar su identidad a terceros.
Las implicaciones médicas de los resultados de este estudio, si es que las hay, sólo
serán conocidas cuando se haya completado el proyecto de investigación. Es posible
que los resultados de las investigaciones sean publicados en la literatura científica,
pero entendiendo estos resultados como los obtenidos de la totalidad de las muestras,
nunca los resultados individuales. Si este fuera el caso, su identidad permanecerá
completamente confidencial y nunca formará parte de ninguna publicación.
PARTICIPACIÓN VOLUNTARIA
242
DECLARACIÓN DE CONSENTIMIENTO Y FIRMA
1. Cuando quiera.
2. Sin tener que dar explicaciones.
3. Sin que esto repercuta en mis cuidados médicos.
.
FIRMA DEL PACIENTE NOMBRE FECHA
.
FIRMA NOMBRE FECHA
243
244
Anexo 3
Hoja de recogida de datos
245
246
HOJA DE RECOGIDA DE DATOS, AR
Fecha_____________________
Edad____________________.
Tratamiento Actual:
1._______________________________________________________________
2. _______________________________________________________________
3. _______________________________________________________________
4._______________________________________________________________
5._______________________________________________________________
6._______________________________________________________________
7._______________________________________________________________
8._______________________________________________________________
9._______________________________________________________________
10. ______________________________________________________________
Evolución________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
______________________________________________.
RM ___________. DN SI □ NO □
247
RECUENTO DE 28 ARTICULACIONES
DOLOROSAS _______
INFLAMADAS _______
Exploración física
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
Cambios en el tratamiento
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_________________________________________________________________
_____________________.Próxima cita:_______________________.
248
Anexo 4
Cuestionario HAQ
249
250
Cuestionario HAQ (Health Assessment Questionnarie)
0 = sin dificultad
1 = con alguna dificultad
2 = con mucha dificultad
3 = incapaz de hacerlo
La necesidad de ayuda de otra persona puede afectar a todas las áreas. Para rellenar
el cuestionario y evaluar la discapacidad física el paciente sigue las siguientes reglas:
251
Se puntuará como [2], o sea el valor más alto de los tres ítems que componen la
categoría.
1.- Caminar fuera de casa por un terreno llano? [0] (sin dificultad)
2.- Subir cinco escalones? [1] (con alguna dificultad)
Pero más abajo marca una cruz indicando que utiliza muletas, la puntuación del área
“caminar” será [2] en vez de [1].
252
Le rogamos lea atentamente cada pregunta y marque con una X la respuesta que mejor
describa su estado durante la ÚLTIMA SEMANA.
(VESTIRSE Y ASEARSE)
..vestirse solo, incluyendo abrocharse los botones y
atarse los cordones de los zapatos?
...enjabonarse la cabeza?
(LEVANTARSE)
...levantarse de una silla sin brazos?
...acostarse y levantarse de la cama?
(COMER)
...cortar un filete de carne?
...abrir un cartón de leche nuevo?
...servirse bebida?
(CAMINAR-PASEAR)
253
Marque con una X la respuesta que mejor describa su estado durante la ÚLTIMA
SEMANA.
(HIGIENE PERSONAL)
254
Anexo 5
Determinació n del Epitopo Compartido
255
256
Determinación del Epitopo Compartido HLA-DRB1
1. Fundamento de la técnica
257
Tras concluir el proceso de amplificación mediante PCR, el ADN es
desnaturalizado y mezclado con sondas de detección acopladas a biotina. En este
momento, el conjunto es puesto en contacto con tiras en las cuales existen
inmovilizadas, sondas de captura con secuencias correspondientes a los
oligonucleótidos que queremos detectar. Posteriormente, el ADN no hibridado es
lavado. Por último, añadimos anticuerpos antibiotina conjugados con fosfatasa alcalina
y unida a estreptavidina. Añadiendo el sustrato correspondiente (BCIP/NBT) se
observa un cambio de color en la zona donde se produjo la hibridación. De este modo,
obtenemos patrones característicos para cada subtipo de epitopo compartido.
1. Extracción de la muestra
2. Lisis celular
Preparar una gradilla con 6 tubos de plástico para pipetear reactivos y 2xN
eppendorf de 1,5 mL para las muestras (donde N=número de muestras). Rotular los
eppendorfs por pares (1-1´, 2-2´, etc.) ya que se emplearan dos eppendorfs por
muestra. En los 6 tubos de plástico preparar los reactivos necesarios para la
extracción del ADN (Tabla 45).
258
A continuación seguir los siguientes pasos para realizar la lisis celular:
- Añadir 900 µL del tubo 1 (RBC SOL) a un eppendorf de 1,5 mL (rotulado como
1 para el caso de la muestra número 1).
- Añadir 300 µL de sangre total de la muestra del paciente.
- Incubar la mezcla un minuto a temperatura ambiente.
- Invertir 10 veces el tubo con suavidad durante la incubación.
- Centrifugar 20 segundos a 12000 rpm. Tras la centrifugación se obtiene pellet
en el fondo del tubo y un sobrenadante.
- Quitar el sobrenandante usando una pipeta y dejando en el tubo unos 20 µL de
líquido residual.
- Voltear 10 segundos para resuspender el pellet en el líquido residual.
- Añadir 300 µL del tubo 2 (CEL SOL) y homogeneizar bien para producir el
lisado de las células. Llegado a este punto, la técnica se puede detener y
conservar los tubos 18 meses a temperatura ambiente.
3. Precipitación de proteínas
259
- Eliminar el sobrenandante con una pipeta y añadir 300 µL del tubo 5 (ET70).
- Invertir el tubo suavemente varias veces para lavar el pellet de ADN. El pellet
de ADN debe ser visible aunque de forma tenue.
- Centrifugar a 12000 rpm durante 2 minutos y al finalizar invertir el eppendorf
para eliminar el etanol.
PN-SE2 amplifica todos los subtipos DRB1*04 y los raros subtipos DRB1*1122,
DRB1*1410 y DRB9*0101. Estos últimos pueden ser distinguidos de los subtipos
DRB1*04 en la hibridación reversa.
260
Variedad Controles
PN MIX Alelos DRB1 amplificados
serológica amplificados
261
- Gradilla para eppendorf de 100 µL y gradilla para eppenderf de 1,5 mL
- 4 eppendorf de 1,5 mL para pre-pipetear los PN MIXES 1, 2, 3 y 4
- 1 eppendorf para la MASTER MIX
- N eppendorf como muestras para analizar haya
- PN MIXES: PN-SE1, PN-SE2, PN-SE3 y PN-SE4 y TAQ polimerasa
- Buffer de la polimerasa (10X POLYMERASE BUFFER)
- Cloruro de magnesio 50 mM
- Agua bidestilada estéril
- Pipetas automáticas para manejar volúmenes de entre 0,5 y 200 µL
- Puntas de pipetas, eppendorfs de 1,5 mL y 100 µL estériles
- En primer lugar hay que preparar los tubos para los PN MIXES y la MASTER
MIX. Los tubos han de ser estériles. Sacar los reactivos del congelador y del
frigorífico el tiempo imprescindible.
- A continuación rotular 4 eppendorf de 1,5 mL con los rotulos PNSE1, PNSE2,
PNSE3 y PNSE4.
- Añadir en cada uno de estos eppendorf la siguiente cantidad de cada PN MIX:
262
- En una gradilla pequeña para eppendorfs de PCR (100 µL), colocamos 4
eppendorfs estériles numerados del 1 al 4 para cada una de las muestras y un
eppendorf para el blanco (B). Para dos muestras sería:
11 12 13 14 Muestra 1
21 22 23 24 Muestra 2
B Blanco
20 segundos 95ºC
20 ciclos
2 minutos 63ºC
10 segundos 95ºC
20 ciclos 30 segundos 60ºC
30 segundos 72ºC
1 ciclo 8 minutos 72ºC
Final - 4ºC
3. Hibridación SSOP
263
Los reactivos se deben guardar a 4ºC. Además de los reactivos, necesitamos
pipetas de 200-1000 µL, una pipeta de 10-40 µL y un baño con temperatura controlada
(+/- 1ºC) y agitador. Se emplea un termómetro de suficiente precisión para vigilar la
temperatura. Para realizar la hibridación SSOP se siguen los siguientes pasos.
264
- Añadir 1 mL de conjugado diluido (1/100) con la solución 5. Incubar 30 minutos
en el agitador horizontal a temperatura ambiente.
- Quitar el conjugado y lavar tres veces con la solución 6, un minuto cada vez un
agitador horizontal. Tirar la solución 6 y secar con papel absorvente.
- Añadir 1 mL de sustrato (solución 7) e incubar 10-20 minutos a temperatura
ambiente hasta observar las franjas de color de los controles y el test.
- Lavar dos veces con agua destilada para parar la reacción y tomar las tiras de
los pozos de reacción con pinzas y secarlas con papel absorbente.
Control de especificidad
Control de amplificación 1
Control de amplificación 2
Sonda DRB1*01
Sonda DRB1*1001/1002
265
1. Interpretación de los resultados de la primera hibridación de los
productos de la PCR mezcla de PN-SE1 y PN-SE2
266
Columna 7) Alelo 1: DRB1*01-QKRAA
Alelo 2: DRB1*01-QRRAA
Si la sonda DRB1*01 y las sondas 1, 2 y 5 se hibridan o revelan, están presentes
ambos alelos del epitopo compartido.
DRB1*1001/1002-RRRAA
DRB1*14-QKRAA
DRB1*11-/*13-/*14-QRRAA
267
Columna 1) Alelo 2: el segundo alelo es QKRAA
Un alelo DRB1 adicional con el epitopo compartido QKRAA está presente, si las
sondas 1 y 5 junto con el control universal se hibridan.
268
Anexo 6
Determinació n de ANAs por IFI
269
270
Determinación de Anticuerpos Antinucleares por IFI
PATRÓN DE
LOCALIZACIÓN ANTÍGENO
FLUORESCENCIA
Homogéneo/ Periférico ds-DNA, Histonas, Nucleosomas
Lisosómico Lisosómico
Centríolos Enolasa 48
271
1. Fundamento de la técnica
La técnica IFI se basa en la incubación del suero del paciente diluido con un
sustrato tisular o celular para favorecer la unión antígeno-anticuerpo. En un segundo
paso, si esta unión se ha producido al existir anticuerpos en el suero del paciente, al
poner en contacto este complejo antígeno-anticuerpo con una proteína antihumana
marcada con fluoresceína (conjugado), se produce la unión de ellos. Finalmente, se
procede a visualizar las muestras en el microscopio de fluorescencia de modo que
aquellas que son positivas exhibirán un color verde manzana fluorescente que
corresponde a las áreas de la célula donde los anticuerpos del paciente se han unido.
2. Material necesario
Tubos 5 ml
puntas de pipeta desechables
Gradillas
Guantes desechables
Cubreobjetos
Filtro de papel
Cubetas de lavado
3. Reactivos
272
Control de Patrón ANAs Titulable, 1 vial de tampón con un 0.09% de azida
sódica y anticuerpos de suero humano anti-HEp-2, prediluido, 0.5mL.
Control Negativo para Sistemas IFA, 1 vial de tampón con un 0.09% de azida
sódica y sin anticuerpos de suero humano anti-HEp-2, prediluido, 0.5mL.
Concentrado de PBS II (40x), suficiente para 2000 mL.
Medio de Montaje, 0.09% de azida sódica, 7mL.
Cubreobjetos
4. Equipo necesario
Centrífuga
Pipetas automáticas (10-100-200-1000 µl)
Temporizador
Cámara húmeda
Microscopio de fluorescencia
5. Antes de empezar
a. Screening Inicial: Diluya las muestras de los pacientes a 1:80 con un tampón de
PBS II diluido (esto es, añada 50 L de suero a 1.95mL del tampón de PBS II).
273
b. Titulación: La inmunofluorescencia indirecta se realiza a titulación inicial 1/80.
Realice series de diluciones dobles a partir de la dilución inicial de screening para
todas las muestras positivas con el tampón de PBS II diluido (p. ej. 1:160,... 1:2560).
274
b. Aplique el medio de montaje siguiendo una línea continua en el borde inferior del
cubreobjetos.
c. Elimine el exceso de tampón PBS II y ponga en contacto del borde inferior del
portaobjetos con el borde del cubreobjetos. Deje caer suavemente el portaobjetos
sobre el cubreobjetos de forma que el medio de montaje fluya hacia el borde superior
del portaobjetos sin que se formen burbujas de aire ni se queden atrapadas.
7. Procedimiento de lectura
Lectura de resultados
8. Interpretación de resultados
1. Se considera lectura final en una titulación el último título positivo anterior a un título
negativo. Se considera la dilución 1/160 como indicador de patología autoinmune y en
275
ese caso completamos el estudio con parámetros asociados a la patología que
queremos confirmar o descartar.
e) Centromérico: Patrón de tinción con motas discretas. Las motas del núcleo
son muy discretas y normalmente son múltiplos de 46. Antígenos Nucleares
276
presentes: Centrómeros cromosómicos (cinetocoro). Enfermedad asociada:
Altamente indicativa del síndrome de CREST, una variante de la esclerosis
sistémica progresiva. CREST es un tipo de PSS con calcinosis prominente,
además del fenómeno Raynaud, dismotilidad esofágica y lesiones limitadas de
la piel (frecuentemente confinadas a la cara o los dedos), telangiectasia.
g) Aparato mitótico (tipo NuMA): Tinción de los polos del huso mitótico (“patrón
triangular o en forma de plátano”). Las fibras del huso son negativas o
débilmente positivas, con un patrón más lineal en células en telofase. Un
patrón nuclear moteado fino con nucleolos negativos se ve en células en
reposo y telofase pero también pueden ser negativas.
277
a) Perfil de anticuerpos antinucleares: incluye anti-Ro/SSA 60kD, anti-Ro/SSA
52kD, anti-La/SSB, anti-RNP, anti-Sm, anti-Scl70, anti-Jo1, anti-RNP
ribosomal, anti-PCNA, anti-histonas, anti-Pm/Scl, anti-nucleosomas y anti-
proteínas centroméricas B.
278
Anexo 7
Tablas de datos del estudio pronó stico
279
280
Datos para Anti-CCP con un punto de corte de 40 U/mL
100
anti-CCP negativo anti-CCP positivo
90 93
80 85 84 84
73 74
Erosiones (%)
60 68
40
20
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
281
6
Anti-CCP negativo
5,5
Anti-CCP positivo
5
DAS28 4,5
4
3,5
3
2,5
2
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 65. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los
pacientes con anti-CCP negativo (≤40 U/mL) y con anti-CCP positivo (>40 U/mL).
Los pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para los anti-CCP al
momento del diagnóstico según el punto de corte definido por 40 U/mL.
2
1,8 Anti-CCP negativo
1
0,8
0,6
0,4
0,2
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 66. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los
pacientes con anti-CCP negativo (≤40 U/mL) y con anti-CCP positivo (>40 U/mL).
Los pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para los anti-CCP al
momento del diagnóstico según el punto de corte definido por 40 U/mL.
282
Anti-CCP Anti-CCP
Parámetros negativo positivo
(n=19) (n=40)
Tabla 50. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados
para los pacientes con anti-CCP negativo (≤40 U/mL) y con anti-CCP positivo
(>40 U/mL) durante los 3 años de seguimiento. Los pacientes fueron divididos en dos
grupos según la positividad para los anti-CCP al momento del diagnóstico. El valor p hace
referencia a la diferencia entre grupos con anti-CCP negativo y anti-CCP positivo. (1) Prueba de
Chi cuadrado. (2) Prueba no paramétrica U de Mann-Whitney.
283
Datos para FR con un punto de corte de 20 UI/mL
Todos los
FR negativo FR positivo
pacientes
Parámetros (N=15) (N=44) Valor p (1)
(N=59)
n (%) n (%)
n (%)
100
FR negativo FR positivo
91 93
80 84
80 80
73 73
Erosiones (%)
60 67
40
20
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
284
6
FR negativo
5,5
FR positivo
5
DAS28 4,5
4
3,5
3
2,5
2
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 68. Evolución para el índice DAS28 a lo largo del seguimiento en los con
FR negativo (≤20 UI/mL) y con FR positivo (>20 UI/mL). Los pacientes fueron divididos
en dos grupos según la positividad para el FR al momento del diagnóstico según el punto de
corte definido por 20 UI/mL.
2
1,8 FR negativo
1,6 FR positivo
1,4
1,2
HAQ
1
0,8
0,6
0,4
0,2
0
Basal 12 meses 24 meses 36 meses
Tiempo
Figura 69. Evolución para el índice HAQ a lo largo del seguimiento en los
pacientes con FR negativo (≤20 UI/mL) y con FR positivo (>20 UI/mL). Los
pacientes fueron divididos en dos grupos según la positividad para el FR al momento del
diagnóstico según el punto de corte definido por 20 UI/mL.
285
FR FR
Parámetros negativo positivo
(n=15) (n=44)
Tabla 52. Datos de las variables clínicas (erosiones, DAS28 y HAQ) recopilados
para los pacientes con FR negativo (<20 UI/mL) y con FR positivo (>20 UI/mL)
durante los 3 años de seguimiento. Los pacientes fueron divididos en dos grupos según
la positividad para el FR al momento del diagnóstico. El valor p hace referencia a la diferencia
entre grupos con FR negativo y FR positivo. (1) Prueba de Chi cuadrado. (2) Prueba no
paramétrica U de Mann-Whitney.
286
Anexo 8
Comunicaciones a Congresos y Jornadas
287
288
9º Congreso Nacional del Laboratorio Clínico, 7-9 Octubre 2015, Madrid
XII Jornadas del Comité Científico (SEQC), 12-13 Mayo 2014, Madrid
2014 American Association for Clinical Chemistry Annual Meeting, July 27-31,
Chicago (USA)
289
9th International Congress on Autoimmunity, Nice (France), March 26-30, 2014
García de Veas Silva J.; González Rodriguez C.; Hernández Cruz B.; Melguizo Madrid
E.; Navarro Compán V.; Navarro Sarabia F. Diagnostic value Of Anti-cyclic
citrullinated peptide antibodies And HLA-DRB1 Shared Epitope in Andalusian
Patients With Rheumatoid Arthritis
García de Veas Silva J.; González Rodriguez C.; Hernández Cruz B.; Melguizo Madrid
E.; Navarro Compán V.; Navarro Sarabia F. HLA-DRB1 Shared Epitope And
Smoking In The Development Of Anti-cyclic Citrullinated Antibodies
García de Veas Silva JL, González Rodriguez C, Hernández Cruz B, Navarro Sarabia
F. Valor diagnóstico de los anti-CCP y el epitopo compartido HLA-DRB1 en
pacientes andaluces con sospecha de artritis reumatoide. Rev Lab Clin
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2011 American Association for Clinical Chemistry Annual Meeting, July 24-28,
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García de Veas Silva JL, González Rodríguez C, Hernández Cruz B, Navarro Sarabia
F, Sánchez Margalet V, Fabiani Romero F. Diagnostic value of anti-cyclic
citrullinated peptide antibodies and HLA-DRB1 shared epitope in Andalusian
patients with rheumatoid arthritis. Clin Chem 2011;57(s10):A206 (E-106)
290
VIII
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292
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La Artritis Reumatoide es una enfermedad autoinmune
sistémica, inflamatoria y crónica que afecta al 0,5-1% de la población.
Se asocia a daño articular severo y provoca un grave sufrimiento a la
persona que la padece, derivando en una discapacidad importante en
fases evolucionadas de la enfermedad y con pérdida de la calidad de
vida. El diagnóstico y tratamiento precoz de la enfermedad es
fundamental porque reduce la actividad, la progresión y la mortalidad
asociada a la enfermedad. Además, la identificación de marcadores
pronósticos de la enfermedad nos ayudaría a modificar el curso de la
enfermedad. Con ello se evita el deterioro casi inevitable de las
articulaciones del enfermo y por lo tanto se conseguiría una mejora en
su calidad de vida.