Las Villas Del Renacimiento
Las Villas Del Renacimiento
Las Villas Del Renacimiento
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SUMMARY
This paper constitutes the Jirst purt of u stu& on the villa of the Renaissance in
generul, anti rnore in particular on the Palladiun villa.
Hi.storica1 untece<lents alreac- existing in Eg,vpt, Bahvlon and Persia are corn-
rnentetl upon. with speciul refirence to the Rotnun villa, because of the iinportance it
wus to have in the irnplerneniation of the later t.vpologv of the villas.
Suh.sequent1.v. the different tvpes establishetl hv Vitrubio, Ackerrnann, Francesco
Doni and Frornrnel are exurnined, as well as the r6le of authors such as Alberti or
Francesco d i Giorgio, who wrote on this subject.
Futher on, the article comprises a socio-econornic study on the circumstances
artending the developrnent of villas in the XVZth century, Jinally grouping in three
sections the basic conditions that form the typology of the villas.
These groups are the following:
1st: The group constituted by historical conditions.
2nd: The group constitured hv cultural conditions.
3J: The group constituted bv socioeconotnic contiitions.
ANTECEDENTES
I Del mismo modo que el clasicismo arquitectónico estuvo preicnte, con más o menos
intensidad, durante la Edad Media, en Italia, no es menos ciei-to que las costumbres romanas
hacia la vida bucólica y apacible del campo también peivivieron de modo latente.
6 M." DEL CARMEN SANCHEZ-ROJAS FENOLL
El ideal bucólico que enlazaba la vida rústica con el encanto de las flores, de los bosques y de
las aguas quedó relacionado con la recreación mitológica. en temas tan frecuentes en la pintura y
escultura renacentistas, como los relativos al dios Pan y los Sátiros. los Faunos y las Ninfas;
tampoco hay que olvidar la influencia que ejerció la poesía bucólica y las novelas pastoriles. Esta
visión poética de la naturaleza tuvo un buen exponente en Luigi Alamani (que compuso en verso
un tratado sobre Agricultura, mezclando preceptos literarios y bucólicos de Virgilio, Varrón,
Hesiodo y Lucreco). por no citar los poemas más tardíos de T. Tasso (Arninta y el Pastor Fido) y
de J . Sannazaro (La Arcadia).
2 En el pleno Renacimiento serán, además, Varrón y Columela, los que darán nueva instru-
mentación teórica para el desarrollo de nuevas formas y elementos.
3 Los autores italianos, en general, califican a la villa como un hecho peculiar de la romani-
dad. Cf.. por ejemplo. el DEAU. dirigido por Portoghesi, Roma 1969, s. v. villa, vol. V.
4 VITRUBIO, M. L.: Los Diez Libros de Arquiteciura, libro IV, cap. IX. Esta idea de la
proporción entre la edificación y las tierras está presente también en Catón (De Agricultura, 111,
1) y Colurnela (De Re Rústica, 1, 6, 1 y 1, 4, 8).
5 Vitrubio, op. cit., VI, XI.
6 La bibliografía sobre las villas romanas e s bastante extensa. por lo que sólo vamos a citar
los textos fundamentales:
CARRINGTON, R. G.: «Studies in the Campaniam Villae Rusticae., en JRS, XXI, 1931.
DRERUP, M.: Die rornische Villa, Marburger W . 1959.
MANSUELLI, G. A.: Le ville del mondo romano, Milán 1958.
PAINTER, R.: Roman Villas in Italy, British Museum, Occ. Papers, 24 1980.
PERClVAL, J.: The Rornan Villa, Londres 1976.
SKYDSGAARD. J. E.: .Nueve ricerche sulla villa rustica romana fino all'epoca di Traianon.
en ARID 1969.
STUCHI, S.: ([Villa rústica romana*, en Notiziario Scientifico, 1, 1951.
7 O sea. la heredad completa. En el Digesto se lee que (cal campo con edificio se le llama
fundusl) (1. 16, 21 1).
LA VILLA RENACENTISTA (1) 7
tales como Cicerón en las Tusculanas, Tácito en los Anales o el propio Plinio
en su Carta a Gallus.
La villa, por tanto, desde época romana, se presenta como un complejo
arquitectónico rodeado por un terreno agrícola que tiene la doble función de
ser la base de una explotación campesina y de ambientar paisajísticamente el
lugar.
Varrón, por ejemplo en su libro aconsejaba el dedicar una pequeña parte
del «hortus» al cultivo de las flores que luego se habían de usar para ornar los
altares de los dioses y las tumbas de los difuntos. Fue prácticamente en el
siglo 11 a. d. C., cuando empezó a hacer la distinción entre la villa rústica de
servicio a la agricultura (Ilamada comúnmente .hortus», en singular) y la villa
señorial muy ligada a la ciudad (Ilamada por lo general «horti», en plural) 17.
Esta última será la que evolucionará hacia los grandes complejos de enor-
mes dimensiones en los que se suceden construcciones y jardines, a la manera
de la citada villa Adriana.
De estas villas urbanas, además de los grandes complejos ya señalados de
Tivoli y Roma (la Domus Aurea) nos han llegado algunas reproducciones de
otros modelos más simples, en la Forma Urbis de Roma: normalmente se
organizaban según desarrollos axiales asimétricos. La única villa de este tipo
elemental urbano conocida en el Renacimiento fue la villa de Sette Bassi en la
vía Latina, pues sabemos que fue dibujada por fra Giocondo.
De esos dos grandes grupos nos interesa fundamentalmente el primero, el
~hortusn,por su doble vertiente de centro de explotación agrícola y residen-
cia señorial, a veces embellecido con el xars toparian. De este grupo Swoboda
ha diferenciado un conjunto cuya característica común es la de disponer de un
pórtico entre dos avant-corps torreados, y que arquitectónicamente se le co-
noce como «Portikusvilla mit Eckrisaliten~14, importante, como veremos, en
la búsqueda de precedentes de las villas italianas del 400 y del 500.
Fue Swoboda el que fijó el origen de la villa renacentista a partir de este
cuasi-tipo tardoclásico, pero no a través de una relación directa, sino por
medio de un puente histórico que se basa en un doble proceso:
1 .O) El «Portikusvilla mit Eckrisaliten- fue evolucionando a lo largo de la
Edad Media hasta llegar al «castello» con torres de flanqueo en las esquinas.
2 . O ) Estas arquitecturas influirán en la concepción de algunas construc-
ciones urbanas, cuyo mejor ejemplo es el Fondaco dei Turchi de Venecia, que
asimilando la geometría compos'tiva del plano central incluido entre las dos
torres del «castello~,al faltar la condición que exigía el cierre del frente. se
pudo abrir, reapareciendo una logia entre los dos salientes.
13 Plinio dice que en Ias <<leyesde las XII tablas nunca se habla de villa sino en sentido de
horius, y heredium en el de hortin, y más adelante afirma que %hoycon el nombre de horti se
poseen en las ciudades lugares d e placer, campos y villas. (XIX, 60).
14 SWOBODA, K . M.: Romische und rornanische Palast, Viena 1924. La referencia la to-
mamos de BIERMAR, H.: <<Losviluppo della villa toscana sotto I'influenza umanistica deIla
corte di Lorenzo il Magnifico>>,en e1 Boll. del CISA, XI. 1969.
M.a DEL. CARMEN SANCHEZ-ROJAS FENOLL
-
Figura 4.- Castello alle quattro torri. Siena.
M." DEL CARMEN SANCHEZ-ROJAS FENOLL
17 La paloma, como también veremos más adelante, e s un ave ligada, al menos desde época
romana a la vida rústica; este animal fue mantenido como elemento simbólico e incluso material
de la villa. Alberti, por ejemplo, en su De Re Aedificaroria dedica en el Libro V. cap. XV una
buena extensión al cuidado y situación del palomar, el cual ha de estar algo elevado porque
.mientras más trabajo y camino hubiera pasado [la paloma] volviendo [a traer el alimento] a sus
hijos, tanto cna mejor y engorda más sus palominos, y esto porque con la tardanza ha medio
cocido las semillas en el papo, con las cuales alimenta a los palominos*, además el levantar el
palomar sirve para separarlo de la humedad de los suelos y evitar que sean molestadas por %los
gatos, el ratón, la comadreja y semejantes bestiecillas)) (traducción tomada de Francisco Lozano,
Madrid 1582).
LA VILLA RENACENTISTA (1) 13
18 RUPRECHT. B.: -Ville Venete del '400 e del primo '500.. en el Boll. del CISA.
19 Estos procesos de marcha inversa de la evolución de las formas. en la Historia, se dan
con cierta frecuencia en el Renacimiento; recordemos. por ejemplo, la incorporación que Brune-
lleschi hizo de los -pulvinos>.,o trozo3 de entablamento, sobre las columnas d e sus dos basílicas,
y el desarrollo que luego tuvo el orden completo en la arquitectura posterior. todo ello en un
camino inverso a como había sucedido su propia historia desde la época romana a la bizantina
(Tabularium. Foro de Nerva. Spalato. Bizancio).
14 M.a D E L C A R M E N S A N C H E Z - R O J A S F E N O L L
TIPOS
más significativos, muy complejo (villa Adriana), lo que dio lugar a que esta
forma arquitectónica se prestara más a la experimentación que la residencia
urbana o el palacio, pues la busca de un clasicismo y el intento de una
erenovatio~se hacía más fácil en esta clase de construcciones libres de con-
dicionantes. Alberti reconoce 2 ' que en la villa «todas las cosas son más
libres» que en el palacio, y que «son más desembarazadas y además los
propietarios están más inclinados al gasto en la villa. 22. Se puede decir que el
elemento definitorio de la villa es la ~loggia)), presentándose tanto en el exte-
rior como en el interior, siendo raros los ejemplos que carecen de ella (por
ejemplo, la villa Trivulzio). Por el contrario las soluciones arquitectónicas son
muy variadas: en bloque cerrado o en bloque abierto, plantas centralizadas o
plantas heterogéneas, etcétera, aunque en todas ellas hay un invariante: la
doble influencia de la naturaleza, la snatura libera)) y la xnatura fermata,), en
una ambivalencia que recoge el dualismo arquitectónico de las formas compo-
sitivas derivadas de las «opere di naturan y de las (copere di mano» 23.
El primero que fijó una tipología fue Vitrubio 2 4 cuando agrupó funcional-
mente a las villas en dos clases:
- la villa rústica, y
- la villa suburbana
cuyas características fundamentales ya han sido apuntadas.
- La villa padronale, que viene a ser como el punto intermedio entre los
dos casos anteriores, pues en ellas el propietario fija su residencia para con-
trolar la actividad pi.oductiva. Es la «casa del risparmio» definida por Doni,
con ejemplos en las villas de Poggio a Caiano, la Sforzesca de Vigevano o la
Cascina sita en los alrededores de Poggio a Caiano.
- La villa-palazzo, de residencia permanente, ligada a la ciudad y enten-
dida como la «villa civilen de Doni. Los ejemplos más significativos son del
Cinquecento: la Farnesina, la villa Pisani de Montagnana, etc.
Frommel también ha dado otra clasificación formal, obtenida de los as-
pectos compositivos de las villas, distinguiendo los casos siguientes:
- Villa con logia central flanqueada por dos avant-corps o por torres.
Ejemplos: villas Magliana de Innozenzo VIII, Trissino en Cricoli (figura lo),
algunos proyectos de Peruzzi (figura 11).
TRATADISTAS
Los primeros intentos para recrear la vivienda de los antiguos surge con la
edición princeps de Vitrubio hecha por G. Sulpicio en 1486 (.Lucio Vitrubio
Pollionis ad Cesarem Augustum De Architettura liber primus [ac decem])),
Roma 1486). aunque los primeros intentos serios sólo se inician con el estudio
del vocabulario y de los elementos arquitectónicos descritos por Vitrubio
hecho por Grapaldus en su .De partibus a e i d i u m ~(Parma 1494) y con el
primer intento de recomposición gráfica de las descripciones vitrubianas de-
bido a fra Giocondo (. Marcus Vitrubius per Jocumdum solito Castigatior
factus, cum figuris et t a b u l a ~ ,Venecia 15 1 1).
Sin embargo serán Alberti y Francesco di Giorgio los autores que de una
manera más significativa se van a ocupar del tema.
Alberti que en su Libro V se ocupa extensamente de la ubicación y distri-
bución de la villa, asumía su tipología como la resultante de un agregado de
funciones que había que satisfacer: las primeras eran referentes a las necesi-
dades agrícolas (precisaban de locales adecuados para las necesidades agrí-
colas - d e l orden de unos quince- para las herramientas, los animales de
servicio, los animales de crianza, para el almacenamiento del grano y de la
mies, etcétera), y las segundas relacionadas con la función de residencia de
verano del propietario .porque del campo toman toda la recreación de la luz,
del fresco. del espacio, y de la vista, y de la ciudad siguen las reglas de la
sombra» 40.
Alberti retomó muchas de sus ideas de Plinio, e incluso de Marcial, en
todo lo relativo a este placer de la «vita in villa». Uno de los problemas
permanentes en toda la tratadística es el referente a la ubicación de las vi-
con el <<salonepasante,, del palacio veneciano. De la síntesis de esas dos formas surge el gran
salón que centraliza la planta de la villa, y que se convierte, en muchos casos, como la forma final
de una gradación d e espacios, cada vez más cerrados que empiezan en el huerto, siguen en el
jardín. luego en la logia semiabierta, y finalmente termina en el .oecusx compacto.
39 Cf. nota 4. 'fodo4 los tratadistas De Agricultura inciden sobr-e la pi-oporción relativa que
han de mantener el hueito y el jardín en función d e la importancia del «fundus,). La importancia
del huerto también la señala MARCIAL en sus Epígramus (VII, 49). La presencia de las flores
incide en el <<amoenitateslocorum,> (Varrón, 1, 16, 3).
40 ALBERTI. L. B.: O p . cit., Libro V. caps. X V y XVIII.
22 M." DEL CARMEN SANCHEZ-ROJAS FENOLL
CONDICIONES SOCIOECONOMICAS
41 Cf. FORSMAN, E.: ((Delsito da eleggersi per le fabriche di villa», en Boll. del CISA, XI,
1969.
42 Sobre este asunto también incide AUSONIO (111. 1, 29 a 30).
43 ALBERTI, L. B.: Della famiglia, Libro 111.
44 Di Giorgio. F.: Codex Magliabecchiano, 11, 1 fol. 16 V.O
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