Las Motivaciones de Mi Padre BRF
Las Motivaciones de Mi Padre BRF
Las Motivaciones de Mi Padre BRF
Es el jardín soñado
que entre cafetales ofrece la paz
es Canchaque hermoso,
romántico cielo donde nace el sol
en el mar de Colán,
feliz descansa el sol arrullado por las olas
en Piura nace el sol,
en Piura duerme el sol con todo su calor
Es el jardín soñado
que entre cafetales ofrece la paz
es Cachaque hermoso, romántico cielo
donde nace el sol en el mar de Colán, felíz descansa el sol
arrullado por las olas
en Piura nace el sol, en Piura duerme el sol...
De Piura el eterno calor !!!
CAPITULO II: Himnos
HIMNO A PIURA
Letra: Enrique del Carmen Ramos
Elevemos, elevemos...
HIMNO MELENDISTA
ESTROFAS
Somos jóvenes, bravos y fuertes
Somos ímpetu, impulso, altivez
Y llevamos por sola divisa,
Trabajar, estudiar y vencer
Juguetón de nacimiento,
por dedicarme al recreo
sacaba Diez en Aseo
y Once en Aprovechamiento.
De la Conducta ni cuento
pues, para colmo de mal
era mi voz general
?¡chócala pa la salida!?
dejando a veces perdida
mi labor de colegial.
Y la culpa la tengo yo
porque creí que ese amor
cuando se quiere de veraz
no se fija en el color.
Fue bandera
la bandera roja y blanca,
la que altiva allá en el Morro
un adiós de muerte diera a la estrella solitaria,
la que allí fue sacrificio;
la que allí cayó en el ara
bautizada con la sangre del guerrero más heroico
que inmolóse, como un Cristo, por la redención peruana.
Fue bandera la que al tope
de la nave legendaria
por tres veces cayó herida,
como un ave ensangrentada,
y tres veces alzó el vuelo
entre nubes, entre truenos, entre rayos y entre salvas;
y cayó porque no había
ya una mano que la alzara
y cayó porque era justo
que a los cuerpos de sus hijos les sirviera de mortaja.
¡Ah, Jesús también un día siete veces da en el suelo,
y las siete veces, triste, pero heroico, se levanta...
LAS ABANDONADAS
Cómo, me dan pena las abandonadas,
que amaron creyendo ser también amadas.
Y van por la vida llorando un cariño,
recordando a un hombre y arrastrando un niño.
Patria idolatrada
Patria idolatrada
Centro de mi amor
Numen de mis himnos
Alma de mi voz
Cuando será el día
Cuando querrá Dios
Que feliz te brinde
Mi esfuerzo, y mi dolor.
A tus ojos bellos
Mudos de aflicción
Llanto ya no acude
Todo se agoto
Otros en tus duelos
Olviden tu dolor
Que cuando más tu sufras
Mas te quiero yo.
...BRF..... 1932_2013.
Verdades Amargas de Ramón Ortega
"Quiso Dios de salvajes formar un gran imperio y creó a Manco Cápac; pecó su raza y lanzó a Pizarro.
Después de tres siglos de expiaciones ha tenido piedad de la América y os ha creado a vos. Sois pues, el
hombre de un designio providencial. Nada de lo hecho hasta ahora se asemeja a lo que habéis hecho, y
para que alguno pueda imitaros será preciso que haya un mundo por libertar. Habeis fundado tres
repúblicas que en el inmenso desarrollo a que están llamadas, elevan vuestra estatua a donde ninguna ha
llegado. Con los siglos crecerá vuestra gloria como crece la sombra cuando el sol declina".
Sin gente que le removiera la conciencia y estorbase en sus planes, Pizarro ordenó rápidamente el
proceso en contra del monarca del Tahuantinsuyo. Un juicio grotesco conformado por los “jueces” Pizarro y
Almagro; el secretario era Sancho de Cuéllar. Al pequeño grupo de hidalgos descontentos se les permite
nombrar como defensor a Juan de Herrada. Por supuesto, Atahualpa perdió “el juicio”. En medio de la
celebración de la escena montada por Pizarro, hizo su aparición un grupo de indígenas azuzados por el
indio Felipillo, quienes llorando se acercaron al estrado para acusar a Atahualpa de haber mandado
asesinar a su hermano en el río Anyamarca, con la escolta que lo conducía. Ya De Soto había partido para
averiguar la verdad, pero los jueces no esperaron su regreso para empezar el proceso.
Lo acusaron entonces formalmente de: bastardo, usurpador, asesino de su hermano, también de disipar
las rentas del estado al empobrecer a su reino con el pago de su rescate, también lo acusaron por el delito
de idolatría, por adúltero, por incitación a los pueblos a revelarse contra España... etc.
El cura Valverde no podía perderse de un último discurso de odio irracional hacia Atahualpa, acusándole
de los peores crímenes, citando los más lúgubres textos bíblicos, pidiendo la muerte contra el salvaje,
encarnación viviente del demonio porque se hacía idolatrar públicamente por su pueblo, y porque
practicaba descaradamente uno de los pecados más horrendos: la poligamia.
Inútilmente el defensor Juan de Herrada invocó a todas las leyes divinas y humanas a favor del inca.
También fue inútil que dijera que el único que tenía jurisdicción para juzgar a un rey vencido era el propio
emperador de España. Ya tenían la sentencia. Juan de Herrada defendió con vehemencia la inocencia de
un hombre que ha vivido de acuerdo con sus leyes, sin haber podido infringir leyes ni practicar religiones
que no conocía. Pero la causa estaba juzgada de antemano. Pizarro y Almagro, llenando hipócritamente
las fórmulas, condenaron sin remordimientos a Atahualpa a ser quemado vivo, a menos que se convirtiera
al cristianismo, en cuyo caso le sería conmutada la hoguera por el garrote.
Es ahí, cuando Atahualpa pide hablar. Todos en el recinto escogido como juzgado, se quedaron en
silencio. El inca se puso de pie, y con voz serena sabiendo ya su destino, se dirigió a Pizarro:
– Es a ti, extranjero, a quien recibí como un amigo que quiero dirigir estas palabras; no he cometido más
faltas que las que ustedes han cometido con mi pueblo. Yo los acuso de traidores, mentirosos, ladrones,
idólatras, porque andan por ahí “bautizando” con un libro y una cruz... un dios que es el símbolo del ultraje
y la mentira, porque en su nombre hacen toda esta mentira en mi contra, ¿dicen que soy polígamo? Estoy
cansado de escuchar esa palabra. Sin embargo, ustedes, han tomado las mujeres que han querido y
deseado, y no son acusados de nada. Me han engañado y yo soy al que culpan. ¿Cómo pueden ser tan
hipócritas? Y tú... – señalando al cura, - ¿Cómo sé que no eres un polígamo? Te he visto mirando con
deseo a mis mujeres... y ellas me han contado que las has acariciado cuando les propagabas tu fe. Tú,
que dices representar a ese dios que dice que son pecados las cosas buenas como el tener los deseos de
estar con una mujer. ¿Cómo lo llamas? “Lujuria”. Dime, cura Valverde. ¿Cómo fue que viniste al mundo?
acaso tu padre no deseó a tu madre?
Valverde estaba lívido. Gritó:
– ¡Blasfemia! ¡Este hombre personifica a Satanás! no tiene derecho a hablar... ¡Callad, os lo ordeno!
– Tú ya no me puedes ordenar nada. Yo soy el rey de este imperio, ahora soy prisionero, pero no dejo de
ser el emperador del Tahuantinsuyo. – Contestó Atahualpa con la impavidez que confiere el saber que su
vida acabaría dijera lo que dijese. – Ahora desean quemarme vivo, para que no queden rastros de mí en
esta, mi tierra, y no pueda ir a reunirme con mi dios Inti. Si de eso se trata, cura Valverde, bautízame para
cumplir con tus ritos, te lo ordeno. Prefiero morir con el garrote.
Un pesado silencio se cernió sobre todos los presentes. Valverde estaba rojo de ira y de vergüenza.
Almagro deseaba que termine de una vez aquella farsa, y Pizarro tenía los ojos clavados en el piso.
– Como ya no me queda nada más por hacer en esta tierra, te haré una última petición, a ver si puedes
cumplirla. – Dijo el inca dirigiéndose a Pizarro: - Cuida de mis hijos, mujeres y parientes.
– Está bien, lo prometo, - dijo Pizarro, tratando de salvar en algo su honra. Luego agregó: - No fue nuestra
la culpa que vuestro pueblo no os haya apoyado... esta guerra la gané en buena lid.
– “Usos son de la guerra, vencer y ser vencidos...” – dijo Atahualpa y reprimiendo un suspiro quedó
en silencio. Aquella hermosa frase quedaría para la posteridad.
Aquella misma noche, Atahualpa fue bautizado con el nombre de José Francisco. El cura Valverde, de esa
forma cumplía con su último deseo de venganza. Seguidamente fue agarrotado, que era como se llamaba
a la muerte por la horca. Era el 26 de julio de 1533.
Napoleón Bonaparte
“El método más seguro de permanecer pobre es, sin duda, ser una persona franca.”
“No hay que temer a los que tienen otra opinión, sino a aquellos que tienen otra opinión pero son
demasiado cobardes para manifestarla.”
BRF
“Dios perdona el pecado, pero no el escándalo”
“Nunca digas que el día está triste, mientras no concluya la tarde, porque he visto días tristes pero tardes
felices”
René Descartes
“Daria todo lo que sé por la mitad de lo que ignoro”
Tulio Ramos
“Donde pisa Tulio Ramos no crece la yerba”
CAPITULO V: Miscelaneos
1. “Solo seis te acepto”.
2. “So cojudo para ti será bonita tarde pero para mí nó”. (BRF a Aguirre).
3. Pasaba don machete por la casa que venía de su chacra y don BRF lo invita a refrescarse con un
vaso de cerveza y nuevamente a que repita y así sucesivamente, pero éste se llenaba los vasos, hasta
que don BRF le dijo “suave gordo que este no es chicha”
4. bb
CAPITULO VI