Abuso Sexual y Alcoholismo
Abuso Sexual y Alcoholismo
Abuso Sexual y Alcoholismo
ABRIL: 2018
JUSTIFICACION
La violencia sexual, incluido el acoso sexual, ocurre con frecuencia en instituciones supuestamente
“seguras”, como las escuelas, donde algunos de los agresores incluyen compane ̃ ros o profesores.
En estudios provenientes de diversas partes del mundo, con inclusión de África, Asia meridional y
América Latina, se ha documentado que proporciones sustanciales de niñas dicen haber sufrido
acoso y abuso sexuales en camino hacia la escuela o de regreso de esta, o bien en instalaciones
de la escuela o la universidad, incluidos bano ̃ s, aulas y dormitorios, y que los perpetradores eran
compañeros o profesores
Las Instituciones de Educación Superior se han convertido en lugares poco seguros, donde la
discriminación y la victimización por motivos sexuales parece ser una práctica recurrente. Hay
que tener en consideración que las escuelas son los lugares de enseñanza de los jóvenes, pero
también el lugar de trabajo de los académicos, de tal modo que los problemas de hostigamiento y
de acoso, en ocasiones, por ser silenciosos, provocan una serie de injusticias y de maltratos
psicológicos.
El Hostigamiento y Acoso Sexual tiene relación con una infinidad de problemas psicosociales y de
salud fiś ica, algunos ejemplos son la ansiedad y la angustia emocional que en ocasiones puede
llevar al suicidio, al consumo de sustancias, al aislamiento social, al nerviosismo y a la
desvinculación académica o laboral.
También puede haber violencia sexual si la persona no está en condiciones de dar su
consentimiento, por ejemplo cuando está ebria, bajo los efectos de un estupefaciente, dormida o
mentalmente incapacitada.
La población universitaria es de alta vulnerabilidad para el consumo de alcohol debido a las
posibilidades de acceso que tienen para la compra de bebidas alcohólicas y al incremento en la
disponibilidad de situaciones de consumo que se presenta una vez ingresan al ambiente
universitario. El desarrollo de programas de prevención en esta población debe ser una prioridad
de las polit́ icas públicas y de la comunidad universitaria.
MARCO TEORICO
Violencia sexual
La Organización Mundial de la Salud (OMS) de ne la violencia sexual como: “todo acto sexual, la
tentativa de consumar un acto sexual, los comentarios o insinuaciones sexuales no deseados, o
las acciones para comercializar o utilizar de cualquier otro modo la sexualidad de una persona
mediante coacción por otra persona, independientemente de la relación de esta con la vić tima, en
cualquier ámbito, incluidos el hogar y el lugar de trabajo”
La violencia sexual, incluido el acoso sexual, ocurre con frecuencia en instituciones supuestamente
“seguras”, como las escuelas, donde algunos de los agresores incluyen compane ̃ ros o profesores.
En estudios provenientes de diversas partes del mundo, con inclusión de África, Asia meridional y
América Latina, se ha documentado que proporciones sustanciales de niñas dicen haber sufrido
acoso y abuso sexuales en camino hacia la escuela o de regreso de esta, o bien en instalaciones
de la escuela o la universidad, incluidos bano ̃ s, aulas y dormitorios, y que los perpetradores eran
compañeros o profesores
Los comportamientos que se califican como acoso sexual son: a) Fiś icos, como violencia fiś ica,
tocamientos o acercamientos innecesarios; b) Verbales, como comentarios y preguntas sobre el
aspecto, estilo de vida u orientación sexual, y c) No verbales, como silbidos, gestos de
connotación sexual o exposición de objetos pornográficos.
Violencia de genero
La violencia de género está definida como todos aquellos comportamientos que hacen evidente la
desigualdad existente en las relaciones interpersonales, que interponen y en ocasiones legitiman
el control del hombre sobre la mujer. En los sistemas sociales patriarcales subsiste la creencia de
que la violencia es una forma bajo la cual los fuertes pueden dominar a los débiles. El objetivo de
la violencia radica en conseguir la sumisión y el control; de algún modo es algo que se aprende y,
al mismo tiempo, simboliza su poder.
La violencia fiś ica, sexual y psicológica a nivel de la comunidad incluye violaciones, los abusos
sexuales, el acoso y la intimidación, lo mismo en el trabajo que en las instituciones de educación
Manifestaciones e Incidencia
Las manifestaciones de la violencia sexual van desde el acoso callejero mediante “piropos” o el
exhibicionismo, hasta el abuso sexual, la violación o la trata de personas con fines sexuales.
Algunos elementos que caracterizan la violencia sexual son:
Prácticas que no son deseadas y no existe un consentimiento de parte de la persona o
este se encuentra viciado.
Prácticas sexuales que estén mediadas por la coacción, que puede establecerse a través
de fuerza fiś ica, intimidación, violencia psicológica, extorsión, amenazas o abuso de una
situación de poder desigual entre la vić tima y quien ejerce la violencia.
La violencia sexual no se limita solo a actos fiś icos sexuales, sino que se consideran también las
tentativas para consumar los actos, los comentarios y las insinuaciones. También puede ocurrir
cuando la persona no se encuentra en condiciones de dar su consentimiento, por ejemplo, si está
bajo los efectos del alcohol o de estupefacientes.
De acuerdo con el Sistema Nacional de Seguridad Pública, de enero a mayo de 2017, se tienen
registradas 12,826 averiguaciones y carpetas de investigación en el fuero común. De las cuales,
5,222 son por violación y 7,604 por delitos como abuso sexual, pederastia y hostigamiento4.
Ocho de cada diez vić timas de delitos sexuales son mujeres5; 26.9% de las mujeres vić timas son
estudiantes; 22.8% empleadas y 12.2% amas de casa.
En México, la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia en su artić ulo
13 señala: “el hostigamiento sexual es el ejercicio del poder en una relación de subordinación en
las esferas laborales y/o escolares, expresándose en conductas verbales, fiś icas, o ambas,
relacionadas con la sexualidad de connotación lasciva”
Especif́ icamente el hostigamiento influye tanto en los ámbitos laborales como los escolares y
aparece como un detonante de algunos factores de riesgo para la salud. Sin embargo, los
prejuicios, los temores y las creencias existentes llevan a que las vić timas no denuncien o
comuniquen su experiencia. Algunas de las razones se relacionan con el temor a hablar de lo
ocurrido, a ser victimizado o revictimizado, a la crit́ ica de los compañeros, el desconocimiento de
los derechos, la ansiedad por no poder comprobar los hechos, la falta de confidencialidad, la mala
interpretación, sentirse culpable, no comprender el hecho o situación, el tipo de relación que se
tiene con el acosador u hostigador, las represalias, la pérdida de oportunidad o de derechos,
entre otras razones.
Son conocidos el hostigamiento, el acoso sexual y otros múltiples tratos indignos que sufren las
mujeres por parte de algunos profesores en diversas universidades del paiś . Sin embargo, son
muy pocos los casos en los que se atreven a de- nunciar tales hechos por la costumbre que
convierte a las vić timas en culpables, sumado a la tendencia tradicional de las autoridades
universitarias de ocultar ese tipo de delitos en nombre del “prestigio de la institución”.
En relación con los procesos de denuncia, persiste la creencia de que los hombres son más
hábiles para aliviar las situaciones de hostigamiento sexual, del mismo modo que son menos
propensos a denunciar debido a que no desean que su masculinidad aparezca como vulnerable.
En el caso de las mujeres sucede lo contrario: se especula que, por su debilidad, el hostigador
varón consigue crear niveles mucho más grandes de temor entre sus vić timas. Además, la mayor
parte de los estudiantes vić timas de acoso no lo denuncian por vergüenza y por la lentitud del
sistema penal para imponer los castigos
El Hostigamiento y Acoso Sexual tiene relación con una infinidad de problemas psicosociales y de
salud fiś ica, algunos ejemplos son la ansiedad y la angustia emocional que en ocasiones puede
llevar al suicidio, al consumo de sustancias, al aislamiento social, al nerviosismo y a la
desvinculación académica o laboral. Son muchas situaciones de victimización con intensidad
variable, que van de las menos agresivas como los chistes y comentarios eróticos hasta el asalto
sexual; algunas de las conductas que se presentan son los avances sexuales no deseados,
solicitar favores sexuales o los comentarios y gestos
Estudios recientes en varias universidades del mundo certifican que el hostigamiento y el aco- so
sexual son prácticas cotidianas en ellas, y que su prevalencia es de entre 20 y 40%, según los
estudiantes que han percibido el fenómeno
Los adolescentes, considerados como personas especialmente vulnerables, tienen el derecho a
que se respete su integridad fiś ica y psicológica, y asimismo de estar protegidos ante cualquier
forma de explotación, maltrato o abuso fiś ico, psicológico o sexual. Por supuesto, tienen también
el derecho de aprender en un clima social positivo. Tales derechos conllevan el deber de la
familia y del profesorado de desarrollar los aspectos necesarios para su protección y garantizar
un contexto escolar seguro y positivo.
Alcohol y violencia
Se ha podido constatar con el paso de los años la gran correlación que existe entre violencia y el
consumo de alcohol, aunque es difić il determi- nar si el alcohol etiĺ ico es el causante o el
desencadenante de algunas de estas reacciones violentas.
METODO
Pregunta de investigacion
Alguien te ha forzado a tener contacto sexual o a tener relaciones sexuales.
En el ultimo mes ¿con que frecuencia tomaste una copa completa de bebida alcoholica?
OBJETIVOS
Objetivo General: Realizar un protocolo de investigacion asociado con la aplicacion del Examen
Medico Automatizado para poder tener una perspectiva de algunos temas en especifico y poder
concluir el servicio universitario.
Objetivos Especificos.
Reflejar el indice de abuso sexual que existe en ciudad universitaria.
Conocer el indice de ingesta de alcohol que presentan los estudiantes de ciudad
universitaria
Averiguar si existe una relacion entre el consumo de alcohol y el abuso sexual.
Hipotesis.
Hay un mayor riesgo de consumo de alcohol por estudiantes que fueron victimas de abuso
sexual.
Instrumento.
Procedimiento.
En cada medición, la aplicación del EMA se realizó en sesiones grupales directamente en cada uno
de los campos participantes, donde se contó con el apoyo de alumnos de licenciatura de las
carreras de medicina, odontología, enfermería y optometría de la UNAM, a quienes se capacitó
para el manejo adecuado del instrumento y la interacción con los participantes, de modo que
pudieran aclarar las dudas que se presentaran durante la aplicación.
Las bases de datos que se utilizaron se construyeron a partir de los archivos electrónicos que emite
el sistema de Integración de reportes del Examen Médico Automatizado de la UNAM (SIREMA), y
además se utilizaron los programas Excel o SPSS , para generar las bases de datos y realizar los
análisis estadísticos correspondientes.
Consideraciones éticas.
Previo a la aplicación del Examen Médico Automatizado a los alumnos se les explicó que toda la
información obtenida sería tratada con total confidencialidad y únicamente se encontraría dentro de
su expediente clínico. Durante el desarrollo de este trabajo los alumnos fueron identificados
mediante un folio. Al obtener los resultados no se expuso a ningún alumno