Statistical Theory

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 183

Análisis matemático 1

Fernando García Ruíz


Índice general

Parte 1. Espacios normados y métricos 5

Capítulo 1. Espacios métricos 6


1.1. Introducción y deniciones básicas 6
1.2. Normas 8
1.3. Nociones básicas de topología en espacios métricos 11
1.4. Continuidad e isometrías 12
1.5. Conjuntos cerrados 16
1.6. Conexidad 18

Capítulo 2. Compacidad 20
2.1. Denición topológica de compacidad 20
2.2. Conjuntos totalmente acotados y sucesiones de Cauchy. 21
2.3. Espacios métricos completos 23
2.4. Equivalencias de compacidad. 27

Capítulo 3. Completitud y espacios de Banach. 31


3.1. Convergencia Uniforme 31
3.2. Un par de espacios de funciones que son completos. 33
3.3. El teorema del punto jo de Banach 35
3.4. Compatibilidad de la convergencia uniforme con la derivada y la
integral. 38
3.5. Espacios normados de dimensión nita. 39
3.6. El espacio normado L (V, W ) . 43

Capítulo 4. Espacios de funciones continuas, compacidad y densidad. 46


4.1. Equicontinuidad. 46
4.2. Teorema de aproximación de Weierstraÿ 50
4.3. Álgebras 54
4.4. El teorema de Stone-Weierstraÿ 57
4.5. Separabilidad de C 0 (K) 59

Capítulo 5. Funciones de variación acotada 62


5.1. Denición de función con variación acotada 62
5.2. El espacio (BV [a, b] , k·kBV ) 65
5.3. Caracterización de las funciones de variación acotada. 68

Capítulo 6. La integral de Riemann-Stieltjes 71


6.1. Denición de la integral de Riemann-Stieltjes 71
6.2. El espacio de las funciones integrables 74
6.3. Integrar con respecto a funciones de variación acotada 77

3
Índice general 4

6.4. Relación de la integral de Riemann y la integral de Riemann-Stieltjes. 84

Parte 2. Teoría de la medida 87

Capítulo 7. Espacios y funciones medibles 90


7.1. σ -álgebras 90
7.2. Funciones medibles 95
7.3. Límites de funciones medibles. 101

Capítulo 8. Medida y medida exterior 107


8.1. Medida 107
8.2. Medida exterior 115
8.3. La medida exterior de Lebesgue en R 117
8.4. El teorema de Carathéodory 119
8.5. La medida de Lebesgue 123

Capítulo 9. Conjuntos no Lebesgue medibles y no borel medibles 128


9.1. Vitali 128
9.2. Conjunto no borel pero si Lebesgue medible 129

Capítulo 10. La integral 132


10.1. La integral de funciones medibles 132
10.2. Teorema de convergencia monótona y Lema de Fatou 136
10.3. Integral de funciones no positivas y teorema de convergencia
dominada de Lebesgue 143
10.4. Relación entre integral de Riemann e integral de Lebesgue 148

Capítulo 11. Los espacios de Banach Lp 153


p
11.1. Denición de los espacios L 153
11.2. Teoremas de completud 158
11.3. Tipos de convergencia, en Lp y en medida 161

Capítulo 12. Cargas 168


12.1. Descomposición de Hanh 168
12.2. Descomposición de Jordan 171
12.3. El Teorema de Radon-Nikodým 172
12.4. Teorema de descomposición de Lebesgue 176
12.5. Teorema de representación de Riesz 178
Parte 1

Espacios normados y métricos


Capítulo 1

Espacios métricos

1.1. Introducción y deniciones básicas


Introduciremos uno de los conceptos más importante en el análisis matemático.
Los espacios métricos, gran parte de nuestro curso sera el estudio de estos espacios.
Maurice Fréchet fue el matemático que introdujo el concepto de espacio métrico
en su tesis doctoral e introdujo las primeras nociones de topología.

Definición 1. Sea X un conjunto y d una función tal que d : X ×X −→ [0, ∞).


La pareja (X, d) es llamada espacio métrico si para todo p, q, r ∈ X cumplen que
m1)d (p, q) = 0 si y solamente si p = q ,

m2)d (p, q) = d (q, p) y

m3)d (p, q) ≤ d (p, r) + d (r, q).


Cualquier función con las tres propiedades anteriores es llamada una función
distancia, o una métrica.

Ejemplo 2. El espacio métrico (Rn , d),


donde n ∈ N y
v
u n
  uX
n n 2
d (xi )i=1 , (yj )j=1 := t (xk − yk ) .
k=1

Ejemplo 3. Dado un conjunto X cualquiera, denimos la función distancia


ddis : X × X −→ [0, ∞) como
(
0 si x=y
ddis (x, y) :=
1 si x 6= y.
Claramente ddis cumple m1) y m2). Veamos que dt cumple m3).
Sean x, y, z ∈ X , si x = y es inmediato que
0 = ddis (x, y) ≤ ddis (x, z) + ddis (z, y) .
Si x 6= y entonces x 6= z o y 6= z , por lo que

1 = ddis (x, y) ≤ ddis (x, z) + ddis (z, y) .


Lo anterior demuestra que ddis cumple m3) y por tanto (X, ddis ) es un espacio
métrico. En general a este tipo de espacio métrico se le llama espacio métrico
discreto.

Ejemplo 4. Sea X = Rn y denimos dmax : Rn × Rn −→ [0, ∞) tal que


 
n n
dmax (xi )i=1 , (yj )j=1 := máx {|xk − yk | : k ∈ {1, 2, ..., n}} .

6
1.1. INTRODUCCIÓN Y DEFINICIONES BÁSICAS 7

Claramente dm cumple m1) y m2), por lo que solo demostraremos que cumple
m3).
n n n
Sean (xi )i=1 , (yj )j=1 , (zk )k=1 ∈ Rn , por la desigualdad del triangulo para el
valor absoluto, sabemos que para todo r ∈ {1, 2, ..., n}

|xr − yr | ≤ |xr − zr | + |zr − yr | ,


por lo que
 
n n
dmax (xi )i=1 , (yj )j=1 = máx {|xr − yr | : r ∈ {1, 2, ..., n}}
≤ máx {|xr − zr | + |zr − yr | : r ∈ {1, 2, ..., n}}
≤ máx {|xr − zr | : r ∈ {1, 2, ..., n}} + máx {|zr − yr | : r ∈ {1, 2, ..., n}}
 
n n n n
= dmax ((xi )i=1 , (zk )k=1 ) + dmax (zk )k=1 , (yj )j=1 .
Por lo anterior dmax es una métrica. Más adelante veremos que aunque por
denición de dmax y d son distintas, en cierta manera son iguales.
Ejemplo 5. Sea l1 el conjunto de las sucesiones (xn ) de numeros reales tal que
la serie

X
|xn |
n=1
converge y sea

X
d10 ((xn ) , (yn )) := |xn − yn | .
n=1
Veamos que d10 es una métrica:
De la desigualdad del triangulo para números reales obtenemos que
k
X k
X k
X
|xn − yn | ≤ |xn | + |yn |
n=1 n=1 n=1
X∞ X∞
≤ |xn | + |yn |
n=1 n=1

P
Por lo que si (xn ) y (yn ) ∈ l1 se sigue que |xn − yn | converge y
n=1

X ∞
X ∞
X
|xn − yn | ≤ |xn | + |yn |
n=1 n=1 n=1

De esta desigualdad podemos obtener fácilmente que d10 es una métrica (ejer-
cicio).

Ejemplo 6. Sea l∞ el espacio de todas las secesiones de números reales aco-


tadas ((xn ) ∈ l∞ sii existe c natural tal que |xn | ≤ c para toda n ∈ N).
Denimos
d∞ ((xn ) , (yn )) := sup {|xn − yn | : n ∈ N} .
Entonces d∞ es una métrica:
Es importante primero observar que si (xn ) , (yn ) ∈ l∞ entonces (xn − yn ) ∈ l∞ .
Lo anterior facil de ver, ya que si sup |xn | ≤ c1 y sup |yn | ≤ c2 entonces para todo
i∈N
|xi − yi | ≤ |xi | + |yi | ≤ c1 + c2 := c3 .
1.2. NORMAS 8

De lo anterior es inmediato que el supremo de (xn − yn ) existe y por tanto


(xn − yn ) ∈ l∞ .
Claramente m1) y m2) se cumplen, solo solo nos falta ver que cumple m3).
Sean (xn ) , (yn ) , (zn ) ∈ l∞ , entonces por la desigualdad del triangulo para el
valor absoluto tenemos que

|xi − zi | ≤ |xi − yi | + |yi − zi | ≤ d∞ ((xn ) , (yn )) + d∞ ((yn ) , (zn ))


y por tanto

d∞ ((xn ) , (zn )) ≤ d∞ ((xn ) , (yn )) + d∞ ((yn ) , (zn )) .

1.2. Normas
Observemos que en la sección anterior para hablar de una métrica solo nece-
sitamos tener un conjunto, pero si este conjunto tiene un poco más de estructura
(espacio vectorial) podemos obtener un tipo especial de métricas, las cuales se ob-
tendrán a partir de normas.
Notación: Denotaremos por R+ al conjunto [0, ∞).
Definición 7. Sea V un espacio vectorial sobre R. Una norma en V es una
función k·k : V → R+ que cumple las siguientes propiedades:
n1) kvk = 0 si y solamente si v = 0.

n2) kλvk = |λ| kvk para todo λ ∈ R.

n3) kv + wk ≤ kvk + kwk para todo v, w ∈ V.

Un espacio normado sera un espacio vectorial V provisto por una norma k·k lo
que denotaremos por (V, k·k) y cuando no sea necesario especicar la norma solo lo
denotaremos por k·k.
Todo espacio normado (V, k·k) es un espacio vectorial V, dk·k ,

Proposición 8.
donde
dk·k (v, w) = kv − wk .
Demostración. Es inmediato que n1) ⇒ m1).
Observemos que
dk·k (v, w) = kv − wk
= |−1| kv − wk
= kw − vk
n2)

= dk·k (w, v)
lo que muestra m2).
Por ultimo tenemos que si v, w, u ∈ V entonces

dk·k (v, w) = kv − wk
= kv + (u − u) − wk
≤ kv − uk + ku − wk
n3)

= dk·k (v, u) + dk·k (u, w) .


Con lo anterior demostramos m3) y terminamos la prueba.
1.2. NORMAS 9

La métrica anterior se llama la métrica inducida por la norma k·k .


Todas las métricas que vimos en los ejemplos de la primera sección son inducidas
por normas, veamos ahora otros ejemplos interesantes.
Veremos un nuevo ejemplo de un espacio normado, para todo x ∈ Rn denimos

n
! p1
X p
kxkp = |xi |
i=1

Es fácil ver que k·kp cumple la propiedad n1) y n2). Para demostrar n3) nece-
sitamos demostrar previamente unas desigualdades importantes. 

Lema 9. (Desigualdad de Young) Sean p, q ∈ (1, ∞) tales que 1


p + 1
q = 1,
entonces para cualesquier par de números a, b ≥ 0 se cumple que
1 p 1 q
ab ≤ a + b .
p q
Demostración. Si a o b son 0 entonces la desigualdad es obvia. Supondremos
que ab > 0. Sabemos que la función exponencial es una función convexa, es decir
para cualesquiera x0 , x1 reales y t ∈ [0, 1] se cumple que

(1 − t) ex0 + tex1 ≥ e[(1−t)x0 +tx1 ] .


1
Tomando x0 = lnap , x1 = lnbq y t= q obtenemos

1 p 1 q p q
a + b ≥ e[ p lna + q lnb ] = ab.
1 1

p q
Aplicaremos la desigualdad de Young para demostrar la desigualdad de Hölder.


Proposición 10. (Desigualdad de Hölder) Sean p, q ∈ (1, ∞) tal que p1 + 1q = 1.


Entonces, para cualesquiera x, y ∈ Rn se cumple que
n n
! p1 n
! q1
X X p
X q
|xk yk | ≤ |xk | |yk | ,
k=1 k=1 k=1

es decir
kxyk1 ≤ kxkp kykq
donde xy es el producto punto usual.
Demostración. Nuevamente el caso x = 0 o y = 0 es trivial, por lo que
nuevamente supondremos que los dos son distintos de cero, usando la desigualdad
de Young para
|xk |
ak =
kxkp
|yk |
bk =
kykq
obtenemos
p q
|xk yk | |xk | |yk |
≤ p + q.
kxkp kykq p kxkp q kxkq
1.2. NORMAS 10

Sumando estas desigualdades para k = 1, ..., n obtenemos


n n
! n
!
1 X 1 X p 1 X q
|xk yk | ≤ p |xk | + q |yk |
kxkp kykq p kxkp q kxkq
k=1 k=1 k=1
1 1
= + = 1.
p q
Por lo tanto
kxyk1 ≤ kxkp kykq .

Con lo anterior podemos demostrar que k·kp es una norma

Proposición 11. Para todo p ∈ [0, ∞) la función k·kp es una norma en Rn .


Demostración. El caso p = 1 ya fue demostrado 5, por lo que podemos
suponer que p > 1.
Tenemos que demostrar que para todo x, y ∈ Rn
kx + ykp ≤ kxkp + kykp .
Si x = 0 la desigualdad anterior es trivial, supongamos que
 x no es ceroy
p−1 p−1
apliquemos la desigualdad de Hölder a x y (|x1 | + |y1 |) , ..., (|xn | + |yn |) .
p
Deniendo q := p−1 obtenemos

n n
! q1
X p−1
X p
|xk | (|xk | + |yk |) ≤ kxkp (|xk | + |yk |) .
k=1 k=1
Análogamente,

n n
! q1
X p−1
X p
|yk | (|xk | + |yk |) ≤ kykp (|xk | + |yk |) .
k=1 k=1
Sumando las desigualdades anteriores llegamos a que

n n
! q1
X   X
p p
(|xk | + |yk |) ≤ kxkp + kykp (|xk | + |yk |) .
k=1 k=1
Dividiendo entre
n
! q1
X p
(|xk | + |yk |)
k=1
y usando la desigualdad del triangulo para números reales llegamos a que

n
! p1
X p
kx + ykp = |xi + yi |
i=1
n
! p1
X p
≤ (|xk | + |yk |)
k=1
≤ kxkp + kykp .
Con lo que terminamos la demostración.
1.3. NOCIONES BÁSICAS DE TOPOLOGÍA EN ESPACIOS MÉTRICOS 11

Es importante aquí especicar la notación, para hablar de las normas anteriores


 
usaremos la notación Rn , k·kp menos en el caso donde p = 2, en ese caso usaremos
solo la notación Rn .
Ahora observemos que el conjunto de sucesiones de reales se le puede dar una
estructura de espacio vectorial. La suma esta denida como:

(xn ) + (yn ) = (xn + yn )


y el producto por escalar
λ (xn ) = (λxn ) .

Proposición 12. Si p ≥ 1 el conjunto lp de todas las sucesiones de números
reales (xk ) tales que la serie

X p
|xi |
i=1
converge es un espacio vectorial y

! p1
X p
kxkp := |xi |
i=1
es una norma en lp .
Demostración. Es inmediato que k·kp cumple n1) y n2)y que si x ∈ lp en-
tonces λx ∈ lp para todo λ
 ∈ R . Observermos que por la desigualdad del triangulo

para el espacio normado Rn , k·kp

n
! p1 n
! p1 n
! p1
X p
X p
X p
|xk + yk | ≤ |xk | + |yk | ≤ kxkp + kykp ,
k=1 k=1 k=1

P p
esto para todo n ∈ N, en consecuencia la serie |xk + yk | converge y se cumple
k=1
que
kx + ykp ≤ kxkp + kykp .

Es importante notar que la métrica discreta no esta inducida por ni una norma.
¾Por que?, ¾Sera esta la única?. Esta ultima pregunta sera respondida más adelante.

1.3. Nociones básicas de topología en espacios métricos


Necesitamos establecer una terminología para los conceptos topológicos que
usaremos a lo largo de estas notas. Para esto necesitamos primero hablar de bolas
en espacios métricos.

Definición 13. Sea (X, d) un espacio métrico, dado x ∈ X y r > 0 denimos


la bola abierta centrada en x de radio r (que denotaremos por B (x, r)) como:
B (x, r) := {y ∈ X : d (x, y) < r} .
Con esta denición podemos denir los conjuntos abiertos en un espacio métri-
co.
1.4. CONTINUIDAD E ISOMETRÍAS 12

Definición 14. Sea (X, d) un espacio métrico, Un subconjunto U ⊂ X es un


conjunto abierto si para todo x ∈ U existe un radio r > 0 tal que B (x, r) ⊂ U .
Un resultado interesante es que si la métrica es la discreta, entonces todo sub-
conjunto de espacio total es abierto.

Proposición 15. Toda bola abierta es un abierto.


Definición 16. Sea (X, d) un espacio métrico y C ⊂ X
a) C es un conjunto cerrado si C c es abierto.
b) x es un punto de acumulación de C si para todo r > 0 el conjunto C ∩
B (x, r) \ {x} =
6 ∅.
c) x es punto de la frontera de C (el conjunto de puntos frontera de C es
c
denotado por FrC ) si para todo r > 0 se cumple que C∩B (x, r) 6= ∅ y C ∩B (x, r) 6=
∅.
d) x es punto interior de C (el conjunto de puntos interiores es denotado por
InC ) si existe r > 0 tal que B (x, r) ⊂ C .
e) La cerradura de C que es denotada por C es el conjunto C ∪ FrC .
d) C es acotado si existe x ∈ X y r > 0 tales que C ⊂ B (x, r).
e) C es denso si para todo x ∈ X y r > 0, B (x, r) ∩ C 6= ∅.

Proposición 17. A es cerrado


Proposición 18. x ∈ A si y solo si para todo r > 0 la intersección B (x, r) ∩ A
es no vacía.
Demostración. ⇒) Sea x ∈ A, si x ∈ A entonces para todo r > 0 la inter-
sección B (x, r) ∩ A ⊃ {x} es no vacía. Supongamos que x ∈ FrA, por denición
A ∩ B (x, r) 6= ∅ para todo r > 0.
⇐) Supongamos que para todo r > 0 la intersección B (x, r) ∩ A es no vacía.
/ A entonces ∅ 6= B (x, r) ∩ Ac ⊃ {x} para todo r > 0 y por tanto x ∈ FrA.
Si x ∈
Por lo anterior x ∈ A. 
Definición 19. Una sucesión (xn ) de X converge a x∈X si para todo abierto
U de X tal que x∈U existe N ∈ N con la propiedad de que si n>N entonces
xn ∈ U .
Proposición 20. A es el conjunto de x ∈ X tal que existe una secesión (xn )
de elementos de A tal que (xn ) −→ x.
Proposición 21. C cerrado si y solamente si para toda sucesión (xn ) contenida
en C tal que (xn ) −→ x, entonces x ∈ C .
La demostraciones de la proposiciones anteriores se deja al lector debido a que
sus demostraciones son idénticas a las realizadas en sus cursos de calculo

1.4. Continuidad e isometrías


En esta parte consideraremos dos espacios métricos (X, dx ) y (Y, dy ) .
Definición 22. Una función f : X −→ Y es continua en el punto x0 ∈ X si
para toda >o existe δ>0 tal que si dX (x, y) < δ entonces dy (f (x) , f (y)) < .
Decimos que la función f es continua si lo es para toda x ∈ X.
Veamos algunas equivalencias de que una función sea continua.
1.4. CONTINUIDAD E ISOMETRÍAS 13

Proposición 23. Dada una función f : X −→ Y , las siguientes propiedades


son equivalentes.
a) f es continua.
b) Si (xn ) es una sucesión de X tal que (xn ) −→ x entonces f (xn ) −→ f (x) .
c) Si C es cerrado en Y entonces f −1 (C) es cerrado en X.
d) Si U es abierto en Y entonces f −1 (U ) es abierto en X.
Demostración. a) ⇒ b) Sea f continua y (xn ) es una sucesión de X tal que
(xn ) −→ x, Sea U un abierto de Y tal que f (x) ∈ U , por denición de abierto
existe un radio r > 0 tal que B (x, r) ⊂ U y por continuidad existe δ > 0 con
la propiedad de que si dX (x, z) < δ entonces dY (f (x) , f (z)) < r , por lo que
f (z) ∈ U . Sabemos que (xn ) −→ x, por denición existe N ∈ N tal que si n > N
entonces dX (xn , x) < δ y por tanto si n > N entonces f (xn ) ∈ U . Como U era un
abierto arbitrario podemos concluir que f (xn ) −→ f (x) .
b) ⇒ c) Sean C cerrado de Y y (xn ) una sucesión de f −1 (C) tal que (xn ) −→
x. Tenemos que demostrar que x ∈ f −1 (C). Sabemos que f (xn ) ∈ C y por b),
f (xn ) −→ f (x). Por la Proposición 21 sabemos que f (x) ∈ C de lo que se sigue
−1
que x ∈ f (C). Con lo anterior tenemos que c
c) ⇔ d) Es inmediato ya que f −1 (Ac ) = f −1 (A)
d) ⇒ a) Sea x ∈ X y  > 0. Sabemos que B (f (x) , ) es un abierto de Y ,
−1
por a) sabemos que f (B (f (x) , )) es una abierto de X y x ∈ f −1 (B (f (x) , )).
−1
Por denición de abierto, existe δ > 0 tal que B (x, δ) ⊂ f (B (f (x) , )) o en
−1
otras palabras, si dX (x, z) < δ entonces z ∈ f (B (f (x) , )), lo que implica que
dY (f (x) , f (z)) < . 

Es importante tener una noción de que queremos decir cuando hablemos de la


distancia de un punto a un conjunto dentro de un espacio métrico. De hecho esta
función distancia de un conjunto a un punto sera nuestro primer ejemplo de una
función continua que se puede denir en cualquier espacio métrico.

Definición 24. Sea A⊂X y x ∈ X, denotaremos a la distancia entre x y A


por dX (A, x), la cual estará denida como:

dX (A, x) := inf {dX (x, y) : y ∈ A} .


Claramente 0 ≤ dX (A, ·) < ∞ pero no es necesariamente cierto que dX (A, x) >
0 cuando x ∈ / A. Por ejemplo si X = R y A = Q entonces para todo x ∈ R,
dX (Q, x) = 0.
Proposición 25. dX (A, x) = 0 sii x ∈ A.
Demostración. ⇒) Si dX (A, x) = 0 entonces para todo n ∈ N existe yn ∈ A
tal quedX (yn , x) < n1 , lo que signica que para toda  > 0, B (x, ) ∩ A 6= ∅, por
18 tenemos que x ∈ A.
⇐) Si x ∈ A signica que para toda  > 0, B (x, ) ∩ A 6= ∅ (por 18) es decir
para toda  > 0 existe y ∈ A tal que dX (y, x) <  y por tanto dX (A, x) = 0. 

Proposición 26. |dX (A, x) − dX (A, y)| ≤ dX (x, y) .


Demostración. Por la desigualdad del triangulo se sigue que para todo a∈A
dX (a, x) ≤ dX (a, y) + dX (x, y) .
1.4. CONTINUIDAD E ISOMETRÍAS 14

Por lo que

inf {dX (a, x) : a ∈ A} ≤ inf {dX (a, y) + dX (x, y) : a ∈ A}


= inf {dX (a, y) : a ∈ A} + dX (x, y) .
Por tanto
dX (A, x) − dX (A, y) ≤ dX (x, y) .
De manera totalmente análoga obtenemos que

dX (A, y) − dX (A, x) ≤ dX (x, y)


y por tanto |dX (A, x) − dX (A, y)| ≤ dX (x, y) . 
Corolario 27. La función dX (A, ·) : X −→ R es una función continua (donde
R es considerado con la distancia |·|).
Definición 28. Si A⊂X y denimos la función

dA (x, y) := dX (x, y) ,
para todo x, y ∈ A. Claramente esta es una métrica que se le llama la métrica
inducida por dX . Al espacio métrico (A, dA ) se le llama el subespacio métrico de
(X, dX ) .
Demostración. Es trivial usando la proposición anterior y tomando  = δ.

En ocasiones podemos tener dos distintas métricas en un mismo conjunto X,
digamos d1 y d2 , una pregunta interesante es si las funciones continuas con respecto
a una métrica serán las mismas con respecto a la otra métrica. Como se puede
observar en las equivalencias de continuidad (Proposición 23) la continuidad de
una función solo depende de los abiertos en el conjunto X, pero al mismo tiempo
los abiertos de X solo dependen de quienes son las bolas abiertas en X. Por lo
anterior diremos que dos las métricas d1 y d2 son la misma métrica si los abiertos
generados por cada una en X son los mismos.
Uno podría pensar que X es un subespacio métrico de Y pero con distintas
etiquetas, es decir existe una función inyectiva f : X −→ Y y que además la métrica
dX y la métrica dy (f (·) , f (·)) en f (X) son la misma métrica (en el sentido del
párrafo anterior) entonces bajo un renombramiento de elementos (es decir aplicando
f ) las funciones continuas en X son las mismas que las funciones continuas en f (Y ).
cuando esto pasa se dice que los espacios métricos (X, dX ) y (Y, dy ) son isometrícos y
a f se le llama isometría. De manera más precisa enunciamos la siguiente denición

Definición 29. Sea (X, dX ) y (Y, dY ) dos espacios métricos. Diremos que X
es isometríco a un subespacio métrico de Y si existe una función f : X −→ Y tal
que
dX (x, y) = dy (f (x) , f (y)) .
A f se le llama isometría.

Es fácil ver que bajo la denición anterior, toda isometría es inyectiva.


Veamos un ejemplo de lo anterior.
 
Ejemplo 30. Para cada p≥1 la función i : Rn , k·kp −→ lp tal que

i ((x1 , x2 , ..., xn )) = (x1 , x2 , ..., xn , 0, 0, 0...) .


1.4. CONTINUIDAD E ISOMETRÍAS 15

Definición 31. Una función φ : X −→ Y es un homeomorsmo si es continua,


biyectiva y su inversa es continua. Se dice que X y Y son difeomorfos di existe una
difeomorsmo entre ellos.
   
Ejemplo 32. La función identidad i : Rn , k·kp −→ Rn , k·kq es un home-

omorsmo para todo p, q ∈ [0, ∞].


1
Obsérvese que (max {ap1 , ap2 , ..., apn }) p = max {a1 , a2 , ..., an } si p ≥ 1 y ak ≥ 0
para todo k ∈ {1, 2, ..., n}. Por lo que si p, q ≥ 1 y x ∈ Rn se tiene que
n
! p1
X p
kxkp = |xk |
k=1
1 1
p
≤ n (max {|xk | : k ∈ {1, 2, ..., n}}) p
p

1
= n p max {x1 , x2 , ..., xn }
1
= n p kxk∞
y

kxk∞ = max {x1 , x2 , ..., xn }


1
q
= (max {|xk | : k ∈ {1, 2, ..., n}}) q
n
! q1
X q
≤ |xk |
k=1
= kxkq .
Combinando ambas desigualdades obtenemos que

1
kxkp ≤ n p kxkq
y

kxk∞ ≤ kxkq .
n
para todo x ∈ R , p ∈ [1, ∞], q ∈ [1, ∞).
1
Dado x ∈ Rn y  > 0 denimos δ =n− p  si q <∞ y δ = si p = ∞. De la
desigualdad anterior se sigue que

kx − x0 kq < 

si kx − x0 kp < δ, lo anterior demuestra la continuidad, solo faltaría ver que la


inversa es continua, lo que es totalmente análogo.

Con lo anterior nos damos cuenta que en un sentido topológico los espacios
 
n
R , k·kp son los mismos para p ∈ [0, ∞]. Esto no sucede para los espacios lp , los

cuales estudiaremos con detalle más adelante.

Proposición 33. Sean φ : X −→ Y y ψ : Y −→ Z funciones entre espacios


métricos.
a) Si φ y ψ con continuas entonces ψ ◦ φ es continua.
b) Si φ es un homeomorsmo, entonces ψ es continua sii ψ ◦ φ es continua.
c) Si ψ es un homeomorsmo, entonces φ es continua sii ψ ◦ φ es continua.
1.5. CONJUNTOS CERRADOS 16

−1
(U ) = φ−1 ψ −1 (U )

Demostración. a) Sea U abierto de Z , veamos que (ψ ◦ φ)
es un abierto.
ψ −1 (U ) es un abierto y como φ es continua φ−1 ψ −1 (U )

Como ψ es continua
es un abierto.
b) Si φ es un homeomorsmo, de la armación a) se sigue que si ψ es continua
entonces ψ ◦ φ es continua y si ψ ◦ φ es continua entonces (ψ ◦ φ) ◦ φ−1 = ψ es
continua.
c) Análogamente, si ψ es un homeomorsmo, de la armación a) se sigue que si φ
es continua entonces ψ◦φ es continua y si ψ◦φ es continua entonces ψ −1 ◦(ψ ◦ φ) = φ
es continua. 

1.5. Conjuntos cerrados


Necesitamos establecer otras propiedades basicas de las bolas en espacios métri-
cos, en particular cual es la cerradura de una bola abierta. Nuevamente supon-
dremos que X es un espacio métrico con metrica d.
Definición 34. La bola cerrada de centro x y radio >0 es el conjunto

B̄ (x, ) := {y ∈ X : d (x, y) ≤ } .
Proposición 35. Cualquier bola cerrada es un conjunto cerrado.
c c
Demostración. veamos que B̄ (x, ) es abierto, sea y ∈ B̄ (x, ) , lo que
signica que d (x, y) > . Demostraremos que
c
B̄ (y, d (x, y) − ) ⊂ B̄ (x, ) .
Sea w ∈ B̄ (y, d (x, y) − ), por la desigualdad del triangulo tenemos que

d (x, w) ≥ d (x, y) − d (y, w) ≥ d (x, y) − (d (x, y) − ) = 


por lo que w∈
/ B̄ (x, ) y con esto terminamos la prueba. 

Antes de continuar demostraremos una equivalencia importante para la cer-


radura de un conjunto

Proposición 36. A es el mínimo conjunto cerrado que contiene a A (es decir,


si C es cerrado tal que A ⊂ C , entonces A ⊂ C ).
Demostración. Por 17 sabemos que A es cerrado, ahora veamos que es el
mínimo. Sea C un conjunto cerrado tal que A ⊂ C y sea x ∈ A. Por 20 existe una
sucesión (xn ) de elementos de A tal que (xn ) −→ x, por lo que (xn ) es una sucesión
de elementos de C y por 21 c ∈ C . Con esto demostramos que A ⊂ C y terminamos
la prueba. 

Observación. Es fácil ver que la unión arbitraria de abiertos es abierto y


usando las leyes de morgan se sigue que la intersección de cerrados es cerrado, con
esto en mano obtenemos el siguiente resultado

Proposición 37. Sea A un conjunto, entonces A = ∩ {C : C es cerrado y A ⊂ C} .


Demostración. Por la proposición anterior es claro que ∩ {C : C es cerrado y A ⊂ C}
es un cerrado que contiene a A, por la proposición anterior

A ⊂ ∩ {C : C es cerrado y A ⊂ C} .
1.5. CONJUNTOS CERRADOS 17

Por otro lado, por la Proposición 17, A es un cerrado tal que A ⊂ A, por lo que

∩ {C : C es cerrado y A ⊂ C} ⊂ A.

Con la contención anterior terminamos la prueba.


Por lo anterior uno puede concluir que la cerradura de un conjunto es el mínimo
conjunto cerrado que contiene al conjunto.
En este punto de las notas es importante recordar que existen conjuntos que no
son cerrados ni abiertos (por ejemplo (a, b] en R con la norma usual) y que también
existen conjuntos que son abierto y cerrados (ejercicio, en todo espacio métrico,
el conjunto total y el ∅ son conjuntos cerrados y abiertos. Más aun, en el espacio
normado (Rn , k·k) donde k·k es la norma usual, los unicos conjuntos abiertos y
n
cerrados son R y el conjunto ∅). Veamos un ejemplo. 

Ejemplo 38. En el espacio métrico (X, ddis ) todo subconjunto de X es abierto


y cerrado.

Demostración. Es suciente demostrar que todo subconjunto A ⊂ X es


abierto (¾por que?).
Sea A⊂X un subconjunto de
 Xyx un elemento de A. Por
 ser ddis la métrica
discreta, es fácil ver que B x, 12 = {x}, y por tanto B x, 12 ⊂ A. De lo anterior
concluimos que A es abierto.
Veamos que no siempre la noción de bola cerrada y la cerradura de una bola
abierta coinciden. 

Ejemplo 39. Sea el espacio métrico (X, ddis ) donde X tiene más de dos puntos,
entonces para todo x ∈ X , B (x, 1) = {x}. Lo anterior por el Ejemplo 38. Por otro
lado B̄ (x, 1) = X .

Una parte importante del ejemplo anterior es que el espacio no es normado.


Veamos que en espacios métricos las deniciones coinciden.

Proposición 40. Sea (V, k·k) un espacio normado, entonces la cerradura de


la bola abierta B (v, ) es la bola cerrada B̄ (v, ).

Demostración. Sea v∈V > 0. Por la Proposición 35 el conjunto B̄ (v, )


y
es un cerrado y por la Proposición 36 B (v, ) ⊂ B̄ (v, ). Por lo anterior solo nos
falta demostrar que B̄ (v, ) ⊂ B (v, ).
Tomemos x ∈ B̄ (v, ) . Si u ∈ B (v, ) por denición de cerradura tenemos que
u ∈ B (v, ). Supongamos que u ∈ / B (v, ) , por lo que ku − vk = . Demostraremos
que para todo δ > 0, B (u, δ) ∩ B (v, ) 6= ∅, lo anterior junto la Proposición 18
terminarían la prueba.
Sin perdida de generalidad supongamos que δ < 2, tomemos el punto

δ
wδ := u + (v − u)
2
1.6. CONEXIDAD 18

satisface
δ
kwδ − vk = u − v +
(v − u)
2
 
δ
= 1− ku − vk
2
δ
<−

< .
De lo que se sigue que wδ ∈ B (v, ) . Además

δ
kwδ − uk = kv − uk
2
δ
= .
2
Por tanto wδ ∈ B (u, δ). Con lo anterior terminamos la prueba. 

1.6. Conexidad
Ya que mencionamos en la sección anterior la existencias de espacios métricos
(X, d) donde hay subconjuntos A⊂X tales que A es cerrado, abierto y no es ni
el total ni el vacío, esto nos lleva a la denición de espacios disconexos y conexos.
Para entender un poco mas este concepto veremos algunas deniciones equivalentes
y algunas consecuencias fuertes de que un espacio se conexo o disconexo.

Definición 41. Diremos que un espacio métrico (X, d) es disconexo si existe


un subconjunto A de X tal que ∅=
6 A 6= X y A tanto abierto como cerrado. (X, d)
es conexo si no es disconexo.

Uno puede pensar que el conjunto X se puede separar en dos conjuntos abiertos
(A y Ac ). En cierta manera uno puede estudiar el conjunto A y el conjunto Ac
por separado como dos espacios métricos que no tienen ni una relación entre si.
Es debido a lo anterior que los espacios métricos disconexos no suelen ser tan
interesantes como los espacios conexos.

Ejemplo 42. a) R con la norma usual es conexo.


b) Cualquier espacio con la métrica discreta y con más de un punto es disconexo.
c) El conjunto de Cantor con la métrica del valor absoluto es muy disconexo.
(Cualquier par de elementos x, y del conjunto de cantor, existe un conjunto A
abierto y cerrado tal que x∈Ayy∈ / A).
Dado un espacio X métrico, sabemos que cualquier subconjunto A de X tam-
bién es un espacio métrico con la métrica de X restringida a A.
Definición 43. Un subconjunto A ⊂ X es disconexo si el con la métrica
heredada de X es disconexo. A es conexo si no es disconexo.

En Calculo se demuestra que en R los subconjuntos conexos son de la forma


(a, b), [c, d] (e, f ] y [g, h) donde a, b, e y h pueden ser innitos. Lo anterior es un
trabajo algo complicado, ya que su demostración tiene que ver con el orden y la
completitud de R.
Veamos que estos conjuntos nos permiten tener un resultado en general del
teorema del valor intermedio.
1.6. CONEXIDAD 19

Teorema 44. Sea (X, d) un espacio métrico y f : X −→ [a, b] una función


continua ([a, b] tiene la métrica usual). Si existen x, y ∈ X tales que f (x) = a y
f (y) = b, entonces para todo c ∈ [a, b] existe xc ∈ X tal que f (xc ) = c.
Demostración. La demostración sera por contradicción, supongamos que ex-
iste c ∈ (a, b) tal que c∈
/ f (X). Demostraremos que f −1 [a, c) es cerrado, abierto y
distinto al vacío y al total.
Veamos que [a, c) es un abierto en [a, b], claramente si d ∈ (a, c) existe  > 0
tal que B (d, ) ⊂ (a, c) ⊂ [a, c) . Si d = a entonces B (a, c − a) en el espacio [a, b] es
el conjunto [a, c) . Por lo anterior el conjunto [a, c) es abierto.
Es fácil ver que el conjunto [a, c] es cerrado en [a, d] y como c ∈ / f (X) entonces
A := f −1 ([a, c)) = f −1 ([a, c]) y por continuidad f −1 ([a, c)) es abierto y f −1 ([a, c])
es cerrado. Lo anterior demuestra que A es abierto y cerrado, sabemos además que
x∈Ayy∈ / A, esto prueba que A no es vacío ni el total. Por tanto A disconexa a
X , lo que es una contradicción. Esto termina la prueba. 
Veamos una equivalencia de ser disconexo con respecto a las funciones contin-
uas.

Proposición 45. Sea X un espacio métrico, X es disconexo si y solamente si


existe f : X −→ {0, 1} función continua y suprayectiva ({0, 1} esta dotado de la
métrica discreta)
Demostración. ⇒) Sea A conjunto que disconexa a X, denamos f como:
(
0 si x∈A
f (x) =
1 si x∈
/A
Por ser A un conjunto que disconexa se tiene que f es suprayectiva y que
f −1 {0} = A tanto como f −1 {1} = Ac son abiertos, por la equivalencia d) de
continuidad tenemos que f es continua.
⇐) Sea f : X −→ {0, 1} función continua y suprayectiva esto implica que
f −1 {0} es cerrado, abierto no vacío y no total. 
Veamos por ultimo que toda función continua preserva la propiedad de ser
conexo.

Proposición 46. Sean (X, dX ) y (Y, dY ) dos espacios métricos, X conexo,


f : X −→ Y continua y sobre. Entonces el espacio métrico (Y, dY ) es conexo.
Demostración. Supongamos que (Y, dY ) no es conexo, entonces existe g :
Y −→ {0, 1} función continua y suprayectiva, por lo tanto f ◦ g : X −→ {0, 1}
es continua y suprayectiva. Lo anterior es una contradicción. Por tanto (Y, dY ) es
conexo. 
Más adelante jugaremos con espacios conexos y compactos, funciones denida
sobre este tipo de conjuntos suelen ser estudiadas a gran profundidad.
Capítulo 2

Compacidad

2.1. Denición topológica de compacidad


En este capítulo hablaremos sobre uno de los conceptos mas importantes en la
topología, la compacidad. En Rn se estudiaron los conjuntos cerrados y acotados,
en los cuales se demostró que tienen una propiedad fundamental, toda sucesión
contenida en un conjunto cerrado y acotado tiene una subsucesión convergente en
el. En general si hablamos de espacios métricos, no todo conjunto cerrado y acotado
tiene esta propiedad.
Los conjuntos que tienen la propiedad antes mencionadas se les conocen como
conjuntos compactos. el tener funciones continuas denidas en conjuntos compactos
nos da mucha información valiosa de estas (por ejemplo la función toma su valor
máximo y su valor mínimo). En general en términos de topología no siempre existe
una métrica, es por esto que preferimos dar como denición de compacto una deni-
ción que solo tenga que ver con conjuntos abiertos y posteriormente demostrar la
equivalencia de deniciones en espacios métricos.
Daremos la denición de compacto topológica, i.e. daremos la denición en
términos de abiertos, posterior a estos veremos que equivalencias podemos obtener
a ser el espacio métrico

Definición 47. Una cubierta abierta de un espacio métrico (X, dX ) es una


familia de abiertos F = {Ui ⊂ X : i ∈ I} tal que X ⊂ ∪ Ui . Una subcubierta de F
i∈I
es una subfamilia L⊂F tal que L sigue siendo cubierta abierta de X.
Definición 48. Un subconjunto K de un espacio métrico (X, dX ) es compacto
si para toda cubierta abierta existe una subcubierta nita. Es decir, si dada una
colección de abiertos {Ui : i ∈ I} tal que X ⊂ ∪ Ui entonces existe una colección
i∈I
nita
{Uk : k ∈ {1, 2, ..., n}} ⊂ {Ui : i ∈ I}
tal que X⊂ ∪ Uk .
k∈{1...n}

Ejemplo 49. Rn con la métrica usual es compacto.

Demostración. Sea F = {B (0, n) : n ∈ N}, claramente F es una cubierta


abierta y es imposible cubrir a (Rn ) con una cantidad nita de bolas. 
Ejemplo 50. B (0, 1) ⊂ Rn con la métrica usual no es compacto.
1
 
Demostración. Sea F = B 0, 1 −
2n : n ∈ N es una cubierta abierta de
B (0, 1) y claramente no tiene subcubierta nita. 
Esta primera denición aparentemente es buena para demostra que cosas no
son compactas, pero para demostrar que algo es compacto esta denición no es tan

20
2.2. CONJUNTOS TOTALMENTE ACOTADOS Y SUCESIONES DE CAUCHY. 21

buena, por esto primero nos dedicaremos a encontrar equivalencias de ser compacto
en un espacio métrico.

2.2. Conjuntos totalmente acotados y sucesiones de Cauchy.


Veremos más adelante que en Rn con la métrica usual que es equivalente ser
compacto y ser acotado y cerrado (lo anterior lo demostraremos más adelante), por
esto nos gustaría un resultado idéntico para cualquier espacio métrico. pero de-
safortunadamente el ser acotado no es un concepto que se respeta en la topología,
veamos más exactamente que signica esto.

Sea (X, dX ) un espacio métrico. Denimos la función dX :


0
Proposición 51.
X × X −→ [0, ∞) como:
0 dX (x, y)
dX (x, y) = .
1 + dX (x, y)
 
La función dX es una métrica para X y los espacios (X, dX ) y X, dX son
0 0

homeomorfos.
0
Demostración. Veamos primero que dXes una métrica.
0 dX (x,y)
m1) Claramente 0 = dX (x, y) sii 0= 1+dX (x,y) sii 0 = dX (x, y) sii x = y.
m2) Sean x, y ∈ X , entonces
0 dX (x, y)
dX (x, y) =
1 + dX (x, y)
dX (y, x)
=
1 + dX (y, x)
0
= dX (y, x) .
m3) Veamos que se cumple la desigualdad del triangulo, sean x, y, z ∈ X .
x
Observemos que la función f (x) = 1+x es creciente si x ≥ 0. Para ver lo anterior
derivemos
0 1+x−1 x
f (x) = 2 = 2,
(1 + x) (1 + x)
0
claramente f (x) > si x > 0, por lo que f es creciente. Usando la desigualdad del
triangulo para dX tenemos que

0 dX (x, z)
dX (x, z) =
1 + dX (x, z)
dX (x, y) + dX (y, z)

1 + dX (x, y) + dX (y, z)
dX (x, y) dX (y, z)
= +
1 + dX (x, y) + dX (y, z) 1 + dX (x, y) + dX (y, z)
dX (x, y) dX (y, z)
≤ +
1 + dX (x, y) 1 + dX (y, z)
0 0
= dX (x, y) + dX (y, z) .
0
Con lo anterior obtenemos que
 0
 dX es una métrica. Veamos ahora que la función

identidad i : (X, dX ) −→ X, dX es un homeomorsmo.


2.2. CONJUNTOS TOTALMENTE ACOTADOS Y SUCESIONES DE CAUCHY. 22

Claramente i es biyectiva, solo veamos que es continua y su inversa es con-


0
dX d X
tinua. Sea (xn ) −→ x tenemos que demostrar que (xn ) −→ x. Por denición de
convergencia tenemos que dX (xn , x) −→ 0, lo que implica que

dX (xn , x)
−→ 0,
1 + dX (xn , x)
0
es decir dX (xn , x) −→ 0
0
Xd
Veamos que la inversa es continua. Sea (xn ) −→ x, lo que signica por denición
0 dX (xn ,x)
que dX (xn , x) = 1+dX (xn ,x) −→ 0 lo que sucede si y solamente si dX (xn , x) −→
0. 
0
Observemos que la métrica dX es acotada por 1, lo que signica que todo sub-
0
conjunto de X es acotado con la métrica dX , lo que no es cierto en general para dX .
0
Pero al demostrar que los espacios (X, dX ) y X, dX son homeomorfos, los abier-

tos de los dos espacios métricos coinciden y claramente los subconjuntos compactos
también coinciden (debido a que la denición de compacto esta dado en términos de
abiertos) si el ser acotado y cerrado signica ser compacto, la proposición anterior
 0

nos diría que como en X, dX todo es acotado, entonces todo cubconjunto A⊂X
 0

cerrado es compacto, al ser el espacio X, dX homeomorfo a espacio (X, dX ) , se

podría demostrar que todo subconjunto cerrado A⊂X es compacto. Claramente


lo anterior es falso.
Por lo anterior nosotros necesitamos otro concepto que sustituya el concepto
de ser acotado, ya que este concepto no es importante hablando topológicamente.

Definición 52. Dado un espacio métrico (X, dX ) y A ⊂ X diremos que


A es totalmente acotado si para 
toda
S > 0 existe una familia nita de puntos
{x1 , x2 , ..., xn } ⊂ X tal que A ⊂ B (xk , ) .
k∈{1,...,n}

Proposición 53. Dado un espacio métrico (X, dX ) y A ⊂ X , A es totalmente


acotado si para S
toda  > 0 existe una familia nita de puntos {x1 , x2 , ..., xn } ⊂ A
tal que A ⊂ B (xk , ) .
k∈{1,...,n}

Demostración. Sea  > 0 entonces porShipótesis existe  una familia nita de


puntos {x1 , x2 , ..., xn } ⊂ X tal que A ⊂ B xk , 2 . Podemos suponer sin
k∈{1,...,n}


perdida de generalidad que B xk ,
2 ∩ A 6= ∅ para todo k ∈ {1, ..., n}. Tomemos
yk ∈ B xk , 2 ∩ A, es fácil ver 
 
S por la desigualdad del triangulo que B xk ,
2 ⊂
B (yk , ) y por tanto A ⊂ B (yk , ). 
k∈{1,...,n}

En este punto es importante ver que existe una relación entre los conjuntos
totalmente acotados y un tipo de sucesiones que llamaremos sucesiones de Cauchy.

Definición 54. Una sucesión (xn ) ⊂ (X, dX ) es una sucesión de Cauchy si para
toda  > 0 existe un momento N ∈ N tal que para todo n, m > N , dX (xn , xm ) < .
Lema 55. Sea (xn ) una sucesión de un espacio métrico (X, dX ) y sea A =
{xn : n ∈ N} el conjunto de los elementos de la sucesión (xn ). Entonces
2.3. ESPACIOS MÉTRICOS COMPLETOS 23

a) Si (xn ) es de Cauchy entonces A es totalmente acotado.


b) Si A es totalmente acotado entonces (xn ) tiene una subsucesión de Cauchy.
Demostración. a) Sea  > 0, por ser (xn ) de Cauchy, existe un momento
N ∈ N tal que para todo n, m > N , dX (xn , xm ) <  por lo que la colección de
bolas
{B (xk , ) : k ∈ {1, 2, ..., N + 1}}
cubren a la sucesión.
b) Sabemos que A es totalmente acotado, Si A tiene un número nito de el-
emento entonces es inmediato que A es totalmente acotado. Supongamos que A
tiene una innidad de elementos, por lo que lo puedo cubrir con un numero nito
de bolas de radio 1, por lo menos una de estas bolas (digamos A1 ) debe de tener
una innidad de elementos de A. Ahora, es fácil darse cuenta de la denición que
subconjuntos de conjuntos totalmente acotados son totalmente acotados (la prue-
ba se deja para el lector). Por lo que A1 := A1 ∩ A es totalmente acotado y con
una innidad de elementos, repetimos inductivamente el proceso anterior podemos
obtener una familia de subconjuntos

A ⊃ A1 ⊃ A2 ⊃ ... ⊃ An ⊃ ...
1
Donde Ak k paro todo
es innito y se encuentra contenido en una bola de radio
k ∈ N. Tomando un elemento xnk ∈ Ak obtenemos una subsucesión de (xn ) (tomar
cualquier elemento de Ak no nos da necesariamente una subsucesión, se debe de
hacer una elección cuidadosa para que (xnk ) sea una subsucesión, esto se puede
hacer usando el hecho de que Ak (xnk ) es de
es innito). Veamos por ultimo que
2
Cauchy. Sea  > 0, por el principio Arquimediano existe m ∈ N tal que  > m ,
por lo que si r, l > m, por construcción xnr y xnl son elementos de Am que esta
1
contenida en una bola de radio
m . Es claro por la desigualdad del triangulo que
2
dX (xnr , xnl ) < m < . Por tanto (xnk ) es de Cauchy. 
Usando la proposición anterior podemos obtener una equivalencia de la deni-
ción de conjunto totalmente acotado pero en términos de sucesiones.

Proposición 56. Un Subconjunto A de un espacio métrico (X, dX ) es total-


mente acotado si y solamente si toda sucesión contenida en A tiene una subsucesión
de Cauchy.
Demostración. ⇒) Es inmediata usando el Lema 55 y que subconjuntos de
totalmente acotados es totalmente acotados.
⇐) Supongamos que A no es totalmente acotado, por lo que existe  > 0 tal que
A no se puede cubrir con un número nito de bolas de radio. Sea x1 un elemento
c
de A y sea x2 ∈ A ∩ B (x1 , ) , inductivamente podemos tomar
xn ∈ A − {B (x1 , ) ∪ B (x2 , ) ∪ ... ∪ B (xn−1 , )}
con lo anterior es fácil ver que la sucesión (xn ) cumple con la propiedad de que
dX (xn , xm ) ≥  si n 6= m. Por tanto (xn ) no tiene subsucesiones de Cauchy. 

2.3. Espacios métricos completos


Seguimos en nuestra búsqueda de deniciones equivalentes de compacidad, lo
que nos lleva a la denición de espacios métricos completos, la denición de com-
pletud es importante por si sola, por lo que la estudiaremos posteriormente y en
esta sección solo hablaremos de su denición y algunos resultados básicos
2.3. ESPACIOS MÉTRICOS COMPLETOS 24

Definición 57. Un espacio métrico (X, dX ) es completo si toda sucesión de


Cauchy converge.

Ejemplo 58. a) R con la distancia usual es completo (debido al axioma del


supremo).
b) (Rn , k·k2 ) es completo (debido a que R lo es).
c) Todo espacio métrico discreto es completo (toda sucesión de Cauchy en un
espacio métrico discreto se debe de estacionar en algún punto).
d) (0, 1) con la distancia usual no es completo, y por tanto la completud no se
preserva bajo homeomorsmos.
e) lp con p ∈ [0, ∞] es completo (la demostración es un poco complicada, por
lo que se dejara para más adelante).

Es importante para nuestros intereses poder saber que subconjuntos de un


espacio métrico completo son completos. Para poder ver lo anterior necesitamos
antes un lema.

Lema 59. Sea (xn ) una secesión en un espacio métrico (X, d).
a) Si (xn ) converge a x entonces (xn ) es de Cauchy.
b) Si (xn ) es de Cauchy y (xnk ) es una subsucesión de (xn ) que converge a x,
entonces (xn ) converge a x.
Demostración. a) Sea  > 0, como (xn ) −→ x por denición existe un mo-
mento N ∈N tal que para todo m > n, dX (xm , x) < 2 . Usando la desigualdad del
triangulo obtenemos que para todo m, k > n

dX (xm , xk ) ≤ dX (xm , x) + dX (xk , x) < .


b) Sea (xn ) sucesión de Cauchy y (xnk ) una subsucesión de (xn ) que converge
a x. Sea  > 0, entonces existen momentos N1 , N2 ∈ N tal que si l > N1 y r, s > N2
 
entonces dX (xr , xs ) <
2 y dX (xnl , x) < 2 , si tomamos l sucientemente grande
podemos asegurar que xnl = xp con p > N1 y por tanto

dX (xr , x) ≤ dX (xr , xnl ) + dX (xnl , x) < .


Con lo que concluimos que (xn ) −→ x. 
Proposición 60. Sea (X, dX ) un espacio métrico. Un subconjuto A de X es
completo (con la métrica heredada) si y solo si A es cerrado en (X, dX ).
Demostración. ⇒) Supongamos que (A, dX ) es completo, por lo que toda
sucesión (xn ) A tiene una subsucesión de Cauchy. Demostraremos que A = A,
en
pero sabemos que A ⊂ A por lo que solo demostraremos que A ⊂ A.
Sea x ∈ A. Por la Proposición 20 sabemos que existe una sucesión (xn ) con-
tenida en A tal que (xn ) −→ x. Por el Lema 59 (xn ) es de Cauchy y por hipótesis
(xn ) −→ y con y ∈ A por unicidad del limite (es fácil de demostrar por lo que se le
deja al lector) y = x ∈ A y por tanto A = A.
⇐) Sea A ⊂ X cerrado y (xn ) sucesión de Cauchy contenida en A. Por la
completud del espacio (X, dX ) sabemos que existe x ∈ X tal que (xn ) −→ x.
Nuevamente gracias a la Proposición 20 sabemos que x ∈ A y por ser A cerrado
A = A, con lo que concluimos que (xn ) converge en A. 
Ejemplo 61. Sabemos que el conjunto [a, b] ⊂ R es cerrado, por lo que gracias
a la proposición anterior sabemos que es completo.
2.3. ESPACIOS MÉTRICOS COMPLETOS 25

Queremos ver algunas equivalencias de que un espacio métrico sea completo,


pero para lo anterior necesitamos un lema previo.

Lema 62. Sea (X, dX ) un espacio métrico y denimos la función diam :


P (X) −→ [0, ∞] como:
diam (A) := sup {dX (x, y)} .
x,y∈A

Entonces diam (A) = diam A .




Demostración. Claramente diam (A) ≤ diam A ya que A ⊂ A. Sean x, y ∈
A, por la Proposición 20 existen un par de sucesiones (xn ) y (yn ) de elementos de
A tales que (xn ) −→ x y (yn ) −→ y .
Sea  > 0, entonces existe un momento N ∈ N tal que para toda k > N ,
dX (xk , x) < 2 y dX (yk , y) < 2 . Por lo anterior
dX (x, y) ≤ dX (xk , x) + dX (xk , yk ) + dX (yk , y) < dX (xk , yk ) + .
Lo anterior nos dice que para todo >0 existe un par de elementos x0 , y 0 en A
tales que
dX (x, y) < dX (xk , yk ) +  ≤ sup {dX (x, y)} + 
x,y∈A
de lo que se sigue que
sup {dX (x, y)} ≥ dX (x, y)
x,y∈A

pero esto es cierto para todo x, y ∈ A, por lo tanto sup {dX (x, y)} es una cota
x,y∈A

superior de dX (x, y) : x, y ∈ A y por denición de supremo

diam (A) = sup {dX (x, y)} ≥ sup {dX (x, y)} = diam A
x,y∈A x,y∈A

y por tanto diam (A) = diam A . 
Proposición 63. Para un espacio métrico (X, dX ) los siguientes enunciados
son equivalentes.
a) (X, dX ) es completo.
b) Sean F1 ⊃ F2 ⊃ ... unaTsucesión decreciente de conjuntos cerrados tales
T que
diam (Fn ) −→ 0, entonces Fk 6= ∅. (Aun más, se puede armar que Fk =
n→∞ k∈N k∈N
{x} para algun x ∈ X )
c) (Teorema de Bolzano-Weierstrass) Todo subconjunto innito A de X total-
mente acotado tiene un punto de acumulación.
Demostración. a) ⇒ b) Sea x n ∈ Fn una elección de elementos (aquí se esta
usando el axioma de elección), por construcción xn+k ∈ Fn para toda k ∈ N. Sea
 > 0, sabemos por hipótesis que existe N ∈N diam (Fn ) <  y por tanto
tal que

dX (xN +s , xN +k ) ≤ diam (Fn ) < 


para todo s, k ∈ N. (xn ) es de Cauchy, porser el espacio completo
Por lo anterior
existe un elemento x (xn ) −→ x. Si denimos ynk = (xk+n ), esta es una
tal que
sucesión contenida en Fk y además (xk+n ) −→ x. Por la Proposición 20 tenemos
T
que x ∈ Fk = Fk y por tanto x ∈ Fk 6= ∅. Es fácil ver que x es el único punto
k∈N
que puede estar en la intersección (se le deja al lector).
2.3. ESPACIOS MÉTRICOS COMPLETOS 26

b) ⇒ c) Sea A un subconjunto de X totalmente acotado e innito. Sea (xn )


una sucesión de elementos de A tales que xn 6= xm si n 6= m, esto lo podemos
hacer debido a que A es innito. Por la Proposición 56 sabemos que (xn ) tiene
una subsucesión (yn ) tal que (yn ) es de Cauchy. Denimos los conjuntos Fn =
{yn , yn+1 , yn+2 , ...}, es claro que diam (Fn ) −→ 0 por ser la sucesión (yn ) de
n→∞
Cauchy. Además por el Lema anterior diam Fn = diam (Fn ) −→ 0. Es fácil ver
n→∞
que si A ⊂ B entonces AT⊂ B por lo que F1 ⊃ F2 ⊃ F3 ⊃ ... y por tanto podemos
usar b), i.e., existe x ∈ Fn .
n∈N
Demostraremos que
 (yn ) −→ x. Sea  > 0, sabemos que existe N ∈ N tal que
diam FN < , por lo que si k > N entonces yk , x ∈ Fn y por tanto dX (yk , x) < .
Por lo tanto (yn ) −→ x.
c) ⇒ a) Sea (xn ) una sucesión de Cauchy, por el Lema 55 sabemos que el
conjunto A := {xn : n ∈ N} es totalmente acotado, es inmediato que si A es nito
entonces podemos obtener una subsucesión constante de (xn ) y toda sucesión con-
stante es convergente, usando el Lema 59 obtenemos que la sucesión (xn ) converge.
Suponemos que A es innito, por c) sabemos que A tiene un punto de acu-
mulación y por tanto podemos tomar una subsucesión de (xn ) que converja a x
(¾por que?) y por tanto usando el Lema 55 obtenemos que la sucesión original
converge. 
Si nuestro espacio métrico es normado, podemos obtener información extra de
su estructura, lo que nos permite saber si un espacio es normado observando las
series convergentes que viven dentro de el.

Teorema 64. Un espacio normado X es completo si y solamente si toda serie


absolutamente sumable es sumable. Lo anterior es, X es completo si y solamente
∞ ∞
si siempre que kxn k < ∞ tenemos que la serie xn converge.
P P
n=1 n=1

P
Demostración. ⇒) Primero supongamos que X es completo y que kxn k <
n=1
k
P
∞, si denotamos por sn := xn . Demostraremos que (sn ) es una sucesión de
n=1
Cauchy.

P
Sea  > 0, debido a que kxn k < ∞, sabemos que existe un momento N ∈ N
n=1
l
P
tal que si l>k>N entonces kxn k < . Usando la desigualdad del triangulo
n=k
obtenemos que
l l
X X
ksl − sk k = xn ≤ kxn k < .


n=k n=k
Por lo que (sn ) es de Cauchy y por ser el espacio X completo tenemos que
existe un x∈X tal

X
lim (sn ) = xn = x.
n∈N
n=1
⇐) Veamos que toda sucesión de Cauchy (xn ) converge, por el Lema 59 nos es
suciente demostrar que una subsucesión de (xn ) converge.
2.4. EQUIVALENCIAS DE COMPACIDAD. 27

1
Sea (xnk ) subsucesión de (xn ) tal que xn − xn <
k k+1 2n (lo anterior es fácil
de construir usando que (xn ) es de Cauchy) y por tanto

∞ ∞
X
xn − xn ≤
X 1
k k+1 n
=0
n=1
2
k=1

P
de lo que se sigue que xnk − xnk+1 converge a un x ∈ X, es decir
k=1
m
!
X 
lim xnk − xnk+1 = lim xn1 − x nm ,
m→∞ m→∞
k=1

como x n1 es un punto jo y la función xn1 − (− ) : X −→ X es continua se tiene


que existe lím x nm . Con lo anterior terminamos la prueba. 
m→∞

Veamos que este teorema nos permite ver de una manera más practica cuando
un espacio no es completo

Ejemplo 65. Sea S el espacio de todas las sucesiones (xn ) tal que tienen una
cola de ceros (existe un momento N ∈ N tal que si n > N , xn = 0), es fácil ver
que S es un subespacio vectorial de l∞ y por lo tanto le podemos dar la norma
heredada.
en = 0, 0, ..., 0, 21n , 0, ...

Denamos la sucesión en que tiene en todas las en-
tradas cero menos en la n-sima entrada. Observemos que

∞ ∞
X X 1
ken k1 = = 1.
n=1 n=1
2n
∞ k
1 1 1
P  P
Observamos que en = 2 , 4 , ..., 2n , ... y por tanto en no converge en S
n=1 n=1
(únicidad del limite). Lo anterior es debido a que
k    
X 1 1 1 1
en − , , ..., n , ... = sup : r ∈ {k + 1, k + 2, ...}

2 4 2 2r


n=1 ∞
1
= −→ 0.
2k+1 k→∞
Por el teorema anterior tenemos que S no es completo.

Más adelante veremos que los espacios lp son completos, pero por el momento
los resultados que tenemos sobre completitud nos son suciente para trabajar sobre
conjuntos compactos.

2.4. Equivalencias de compacidad.


Teorema 66. Sea (X, d) un espacio métrico. Los siguientes enunciados son
equivalentes
i) X es compacto.
ii) X es totalmente acotado y completo.
iii) Toda sucesión tiene un subsucesión de Cauchy y toda sucesión de Cauchy
converge.
2.4. EQUIVALENCIAS DE COMPACIDAD. 28

Demostración. i) ⇒ ii). Supongamos que X es compacto. Primero veamos


que X es totalmente acotado.
Sea > 0, Tomamos la cubierta abierta F := {B (x, ) : x ∈ X}, por ser X com-
pacto existen {x1 , x2 , ..., xn } elementos de X tales que L := {B (xk , ) : k ∈ {1, 2, ..., n}}
cubren a X y por tanto X es totalmente acotado.
Supongamos que no es completo, entonces existe una sucesión (xn ) de elementos
de X que es de Cauchy y no converge. Además por el Lema 59 (xn ) no tiene
subsucesiones convergentes. Veamos que el conjunto A := {xn : n ∈ N} es cerrado.
Sea x un elemento de A, entonces para toda  > 0, B (x, )∩A 6= ∅. Si para toda
 > 0, B (x, )∩A−{x} = 6 ∅ entonces es fácil construir una subsucesión de elementos
de A que converjan a x, por lo que existe δx > 0 tal que B (x, δx ) ∩ A = {x} y por
tanto x ∈ A. Con lo anterior demostramos que A ⊂ A y por la caracterización 37
tenemos que A = A y por tanto A es cerrado.
Al no tener (xn ) subsucesiones convergentes se debe de cumplir que A es innito
y como en la construcción anterior, podemos asegurar que para toda x ∈ A existe
δx tal que B (x, δx ) ∩ A = {x}. Además al ser A cerrado, tenemos que Ac es abierto.
c
Tomamos la cubierta abierta F := {B (x, δx ) : x ∈ A} ∪ {A }. Es inmediato que es
una cubierta abierta de X y cada B (x, δx ) es el único elemento de la cubierta que
tiene a x, por lo que si damos una subcubierta abierta que cubra a X no le podemos
quitar ni una de las bolas B (x, δx ). Por tanto F no tiene subcubiertas nitas, lo
que es contradictorio con que X es compacto. Por lo tanto X es completo.
ii) ⇒ iii) Sea (xn ) una sucesión de Cauchy, sabemos que A := {xn : n ∈ N} es
totalmente acotado (subconjuntos de totalmente acotado son totalmente acotados)
y por el Lema 55 (xn ) tiene una subsucesión de Cauchy. Además por ser completo
toda subsucesión de Cauchy converge.
iii) =⇒ ii) Como toda subsucesión de Cauchy converge sabemos que X es
completo y por la Proposición 56 tenemos que X es totalmente acotado.
ii), iii) ⇒ i) Sabemos que X es totalmente acotado. Supongamos que existe
una cubierta abierta F que no tiene subcubiertas nitas. Sabemos que podemos
cubrir a X con un numero nito de bolas abierta de diámetro 1 y por el Lema 62
podemos tomar la cerradura de estas bolas y su diámetro sigue siendo 1. Una de
las cerraduras de las bolas no se puede cubrir con un numero nito de abiertos de
F, ya que de lo contrario F tendría una subcubierta nita. Supongamos que ese
conjunto que no se puede cubrir es A1 .
A1 por ser subconjunto de un conjunto totalmente acotado es totalmente aco-
tado y por esto podemos repetir el procedimiento anterior y encontrar un A2 ⊂ A1
cerrado con diam (A2 ) = 12 y que no se puede cubrir con un numero nito de
abiertos de F . Inductivamente construimos una sucesión de cerrados
A1 ⊃ A2 ⊃ ... ⊃ An ⊃ An+1 ⊃ ...
1
tales que diam (An ) = n .
2
Es fácil ver que si tomamos xn ∈ An tenemos una sucesión de Cauchy (ya que
diam (An ) = 21n ) y por ser X completo existe x tal que (xn ) −→ x, además si k > n
entonces xk ∈ An , por lo que para todo n ∈ N , x ∈ An (por ser An cerrado). Por
T
tanto x∈ An .
n∈N
Como F es una cubierta abierta existe un elemento U ∈ F tal que x ∈ B (x, ) ⊂
1
U y por la construcción de los An existe un momento m ∈ N tal que 2 > m y
por tanto x ∈ Am ⊂ B (x, ) ⊂ U . Lo que es una contradicción ya que a Am
2.4. EQUIVALENCIAS DE COMPACIDAD. 29

no lo podíamos cubrir con un número nito de abiertos de F. Por tanto X es


compacto. 
Obtenidas por n estas equivalencias podemos dar varios resultados para con-
juntos compactos, además de que tenemos formas más fáciles para saber si un
conjunto es compacto o no.
Un resultado que se sigue inmediatamente del Teorema anterior es la caracter-
ización de los conjuntos compactos en Rn con la métrica usual

Teorema 67. A ⊂ (R , k·k2 ) es compacto si y solo si A cerrado y acotado.


n

Demostración. Es fácil ver que en (Rn , k·k2 ) ser acotado es equivalente a


n
ser totalmente acotado (tarea). Si A⊂R es compacto entonces por el Teorema
66 es equivalente a ser totalmente acotado y completo, pero como (Rn , k·k2 ) es
completo, por la Proposición 60 tenemos que lo anterior es equivalente a ser acotado
y cerrado. 
Proposición 68. Sea (X, dX ) un espacio métrico. Si A ⊂ X es compacto
entonces es cerrado. Si X es compacto y A ⊂ X es cerrado entonces A es compacto.
Demostración. Sea A ⊂ X compacto. Sea x ∈ A, por la Proposición 20,
existe una sucesión (xn ) de elementos de A tal que (xn ) −→ x, por el Lema 59 (xn )
es de Cauchy y por El teorema 66 (xn ) converge en A, por tanto x ∈ A, con lo que
tenemos que A es cerrado.
Supongamos que X es compacto y A⊂X es cerrado. Por la proposición 60
sabemos que A es completo y por el Teorema 66 X es completamente acotado, por
lo que A es completamente acotado y nuevamente por el Teorema 66 obtenemos
que A es compacto. 
Veamos que como en el caso de la conexidad, las funciones continuas preservan
la compacidad.

Proposición 69. Sean (X, dX ) y (Y, dY ) dos espacios métricos y K ⊂ X


compacto. Si la función f : (X, dX ) −→ (Y, dY ) es continua entonces f (K) es
compacto.
Demostración. Sea (yn ) sucesión en f (K), veamos que (yn ) tiene una sub-
sucesión convergente. Sea xn ∈ X tal que f (xn ) = yn , por el Teorema 66 existe una
subsucesión (xnk ) de (xn ) tal que (xnk ) −→ x para algun x ∈ X y por continuidad
f (xnk ) = ynk −→ f (x) . 
Proposición 70. Sea (K, dk ) un espacio compacto y f : (K, dk ) −→ (R, |·|)
una función continua, entonces f (K) alcanza su máximo y su mínimo.
Demostración. Por la Proposición anterior f (K) es compacto y por tanto
cerrado y acotado, por lo anterior existe k = sup {f (x) : x ∈ K}.
Por ser k es supremo sabemos que para todo n ∈ N existe xn ∈ K tal que
k − n1 < f (xn ) ≤ k , por lo que f (xn ) −→ k y por ser cerrado entonces k ∈ f (K),
n→∞
es decir, existe x ∈ K tal que f (x) = k . Análogo se demuestra que existe y∈K
tal que f (y) = inf {f (x) : x ∈ K}. 
Corolario 71. Sea f : [a, b] −→ R una función continua (se considera la
métrica del valor absoluto), entonces f [a, b] = [c, d] con c ≤ d.
2.4. EQUIVALENCIAS DE COMPACIDAD. 30

Demostración. Primero recordemos que todo espacio conexo en (R, |·|) es un


intervalo (semiabierto, cerrado o abierto), en la tarea se demuestra que estos son
conexos. Ahora si A⊂R no es un intervalo, entonces existe c ∈ Ac y a, b ∈ A tales
que a < c < b, se demuestra que (−∞, c) y (c, ∞) me desconectan el conjunto. Por
lo tanto los conexos de R solo pueden ser intervalos.
Por las Proposición 70 y 46 sabemos que f [a, b] es conexo y compacto, por lo
que es un intervalo acotado y cerrado. Es claro que f [a, b] debe ser un intervalo de
la forma [c, d]. 
Con los resultados anteriores nalizamos los resultados básicos que necesitábamos
sobre conjuntos compacto. Con esto tenemos bases fuertes para poder trabajar so-
bre este tipo de conjunto.
Capítulo 3

Completitud y espacios de Banach.

3.1. Convergencia Uniforme


Normalmente es mucho más interesante el estudio de espacios vectoriales de
dimensión innita y los ejemplos que más se suelen trabajar son espacios vectoriales
donde los elementos son funciones, es por esto que iniciaremos comparando dos tipos
de convergencia entre funciones. Siempre supondremos que el espacio (X, dX ) es un
espacio métrico y S un conjunto.

Definición 72. Sea una sucesión de funciones (fk ) tales que fk : S −→ X .


Entonces la sucesión de funciones (fk ) converge puntualmente a f :: S −→ X en S ,
si para todo z ∈ S , (fk (z)) converge a f (z) .
La función f se llama límite puntual de (fk ).

Lo malo de la convergencia puntual, es que se suele perder mucha información


cuando pasamos al límite. Un ejemplo de esto es que el límite puntual de funciones
continuas no siempre es continua.

Ejemplo 73. Sea fn : [0, 1] −→ (R, |·|) denida como fn (x) = xn . Veamos que
(fn ) converge puntualmente a f , donde
(
0 si x 6= 1
f (x) =
1 si x = 1.
Si x = 1 entonces fn (1) = 1n = 1. es claro que la sucesión constante 1 converge
a 1. Sea x ∈ [0, 1), entonces xn −→ 0 en R cuando n tiende a innito.
En ciertos momentos necesitaremos que la convergencia de funciones contin-
uas no de una función continua, por el ejemplo anterior nos damos cuenta que
necesitamos algo más fuerte que la convergencia puntual.

Definición 74. Sea una sucesión de funciones (fk ) tales quefk : S −→ X .


Entonces la sucesión de funciones (fk ) converge uniformemente a f : S −→ X en
S si para todo >0 existe un momento N ∈N tal que para todo z∈S yn>N
dX (fn (x) , f (x)) < .
La función f se llama límite uniforme de (fk ).
Es fácil ver que si tenemos convergencia uniforme entonces tenemos conver-
gencia puntual, el reciproco no es verdadero, el Ejemplo 73 tenemos convergencia
puntual pero no uniforme.
Veamos ahora que con este tipo de convergencia logramos preservar la con-
tinuidad.

Proposición 75. Sea (Z, dZ ) un espacio métrico, fk : (Z, dZ ) −→ (X, dX )


funciones continuas para k ∈ N y f : (Z, dZ ) −→ (X, dX ) una función tal que (fn )
convergen uniformemente a f . Entonces f es continua.
31
3.1. CONVERGENCIA UNIFORME 32

Demostración. Veamos que f es continua. Sea z∈Z y  > 0, por la conver-


gencia uniforme existe un momento N ∈N tal que para todo z0 ∈ Z y n ≥ N

dX (fn (z 0 ) , f (z 0 )) < .
3
Además fN es continua, por lo que existe δ > 0 tal que si dZ (z, z 0 ) < δ entonces
dX (fN (z) , fN (z 0 )) < 3 y por tanto
dX (f (z) , f (z 0 )) ≤ dX (f (z) , fN (z)) + dX (fN (z) , fN (z 0 )) + dX (fN (z 0 ) , f (z 0 ))
  
≤ + + = .
3 3 3
y por tanto f es continua. 
Es importante ver que este tipo de convergencia es la métrica para un espacio
importante

Definición 76. Sea S un conjunto y (X, dX ) un espacio métrico. Denimos el


conjunto
B (S, X) := {f : S −→ X : f esta acotada}
es decir, B (S, X) es el conjunto de las funciones f : S −→ X tales que existe
x0 ∈ X y c0 > 0 con la propiedad de que
dX (x0 , f (s)) < c0
para todo s ∈ S. Y denimos

d∞ (f, g) := sup {dX (f (s) , g (s)) : s ∈ S} .


No es difícil demostrar que (B (S, X) , d∞ ) es un espacio métrico, solo es nece-
sario usar un poco las propiedades del supremo. Veamos que en este espacio la
convergencia es lo mismo que la convergencia uniforma.

Proposición 77. Sea (fn ) ⊂ B (S, X) una sucesión. Entonces (fn ) converge a
f en (B (S, X) , d∞ ) si y solo si (fn ) converge uniformemente a f en S .
Demostración. ⇒) Supongamos que (fn ) converge a f en (B (S, X) , d∞ ),
esto por denición signica que

lim d∞ (fn , f ) = 0.
n→∞
Es decir, para toda >0 existe un momento N ∈N tal que si k>N entonces

d∞ (fk (x) , f (x)) = sup {dX (fk (s) , f (s)) : s ∈ S} < 


por lo que para todo x ∈ S , dX (fk (s) , f (s)) < . Por tanto (fn ) converge uni-
formemente a f.
⇐) Supongamos que (fn ) converge uniformemente a f en S, tenemos que de-
mostrar primero que f ∈ B (S, X) .
Por denición de convergencia uniforme, para >0 existe un momento N ∈N
tal que para todo z∈S y n>N
(3.1.1) dX (fn (x) , f (x)) < .
Usando la desigualdad el triangulo y el hecho de que existe c0 > 0 y x0 ∈ S tales
que dX (fN +1 (x) , x0 ) < c0 para todo x ∈ S (fN +1 acotado), obtenemos que para
todo x ∈ S

dX (f (x) , x0 ) ≤ dX (f (x) , fN +1 (x)) + dX (fN +1 (x) , x0 ) ≤  + c0 ,


3.2. UN PAR DE ESPACIOS DE FUNCIONES QUE SON COMPLETOS. 33

por lo que f esta acotada y por tanto f ∈ B (S, X) . De la ecuación ( ??) se sigue
que
d∞ (fn (x) , f (x)) = sup {dX (fn (s) , f (s)) : s ∈ S} ≤ 
para todo n > N y por tanto (fn ) converge a f en (B (S, X) , d∞ ). 
Podemos ahora introducir un nuevo espacio, el cual sera un subespacio vectorial
de (B (S, X) , d∞ )
Definición 78. Sean X y Y espacios métricos. Denimos el espacio de las
funciones continuas y acotadas de X en Y como el conjunto

Cb0 (X, Y ) := {f : X −→ Y : f es continua y acotada}

con la métrica d∞ de B (X, Y ), es decir

d∞ (f, g) := sup {dX (f (x) , g (x)) : x ∈ X}


si f, g ∈ Cb0 (X, Y ).
Corolario 79. El espacio Cb0 (X, Y ) es un subespacio cerrado de (B (X, Y ) , d∞ ).
Demostración. Tomemos f ∈ Cb0 (X, Y ), por lo que existe una sucesión (fn )
contenida en (B (X, Y ) , d∞ ) tal que (fn ) converge con la métrica d∞ a f , por
la proposición (77) sabemos que (fn ) converge uniformemente a f y como cada
fn es continua, por la Proposición (75) sabemos que f es continua y por tanto
f ∈ Cb0 (X, Y ). Con lo anterior obtenemos que Cb0 (X, Y ) es un subespacio cerrado
de (B (X, Y ) , d∞ ). 

3.2. Un par de espacios de funciones que son completos.


El objetivo de esta sección es analizar si los espacios denidos anteriormente,

(B (S, X) , d∞ ) y Cb0 (X, Y ) , d∞ son completos, o que hipótesis extra se necesita
para que lo sean.

Definición 80. Una sucesión de funciones fn : S −→ (X, dX ) es uniforme-


mente de Cauchy en S si para toda  > 0 existe un momento N ∈ N ta que si
k, m > N entonces
dX (fk (s) , fm (s)) < 
para todo s ∈ S.
El siguiente resultado nos da una condición necesaria y suciente para la con-
vergencia uniforme de una sucesión de funciones.

Proposición 81. Sea una sucesión de funciones (fn ) tales que fn : S −→ X ,


donde (X, dX ) es un espacio métrico completo. Entonces (fn ) converge uniforme-
mente en S si y solo si (fn ) es una sucesión uniforme de Cauchy.
Demostración. ⇒) si (fn ) converge uniformemente en S a una función f ,
entonces para >0 existe un momento N ∈N tal que si k > N entonces

dX (fk (s) , f (s)) <
2
para todo s ∈ S. Entonces si k, m > N
dX (fk (s) , fm (s)) ≤ dX (fk (s) , f (s)) + dX (f (s) , fm (s)) < .
es decir (fn ) es uniformemente de Cauchy.
3.2. UN PAR DE ESPACIOS DE FUNCIONES QUE SON COMPLETOS. 34

⇐) Supongamos que (fn ) es una sucesión uniforme de Cauchy, por lo que si


 > 0 entonces la sucesión (fn (s)) es una sucesión de Cauchy en (X, dX ), por
se el espacio (X, dX ) completo entonces (fn (s)) debe de converger a un xs ∈ X ,
denimos la función f : S −→ X como:

f (s) = xs .
Veamos que (fn ) converge uniformemente a f.
Como la sucesión (fn ) es uniforme de Cauchy, si  > 0 entonces existe un
momento N ∈N tal que para todo k, m > N y todo s∈S

dX (fk (s) , fm (s)) <
2
y como (fn (s)) converge a f (s), entonces existe un momento N (s) ∈ N (que
depende de s) tal que si k > N (s) entonces

dX (fk (s) , f (s)) < .
2
Dado s∈S tenemos que si k>N y j > N (s)entonces
dX (fk (s) , f (s)) ≤ dX (fk (s) , fj (s)) + dX (fj (s) , f (s)) < .
Por tanto si k>N entonces

dX (fk (s) , f (s)) < 


para todo s ∈ S. Por tanto (fn ) converge uniformemente a f.
Para observar las consecuencias importantes del resultado anterior necesitamos
denir un espacio muy importante para nuestro curso y en general, muy importante
para el análisis matemático. 
Definición 82. Un espacio de Banach es un espacio normado (V, k·kV ) que
con la norma k·kV es completo.

Es fácil ver que si (V, k·kV ) es un espacio normado, entonces el espacio (B (S, V ) , d∞ )
es un espacio normado (B (S, V ) , k·k ∞ ) donde
kf k∞ := sup kf (s)kV .
s∈S

Además si (Z, dZ ) es un espacio métrico, entonces Cb0 (Z, V ) es un subespacio


vectorial de B (Z, V ). Veamos ahora una consecuencia directa de la Proposición
(81).

Teorema 83. Sea S un conjunto y Z un espacio métrico.


i) Si X es un espacio métrico completo, entonces B (S, X) y Cb0 (Z, X) son
completos.
ii) Si V es un espacio de Banach, entonces B (S, V ) y Cb0 (Z, V ) son de Banach.
Demostración. Solo tenemos que demostrar i). Sea (fk ) una sucesión de
Cauchy en B (S, X). Entonces por las Proposiciones (81) y (77) tenemos que la
sucesión (fk ) converge en B (S, X). esto demuestra que B (S, X) es completo.
0
Ahora por el Corolario (79) sabemos que Cb (Z, X) es un subconjunto cerrado
de B (Z, X), al ser B (S, X) completo sabemos que sus subconjuntos cerrados son
0
completos (Proposición (60)) entonces Cb (Z, X) es completo.
0
Los espacios B (S, X) y Cb (Z, X) al ser completos jugaran un papel muy im-
portante en el siguiente capítulo, en el cual se estudiaran cuando las funciones dejan
puntos jos.
3.3. EL TEOREMA DEL PUNTO FIJO DE BANACH 35

Para terminar esta sección, observemos que si tenemos un espacio métrico com-
pacto K, entonces una función continua

f : (K, dK ) −→ (X, dX )
es acotada, ya que la función dX (_, x0 ) : X −→ R es continua (Un ejercicio que se
le deja al lector) y por tanto la función

dX (_, x0 ) ◦ f : K −→ R
es continua y por la Proposición (70), dX (_, x0 ) ◦ f (K) es un compacto en R, por
lo que es acotado, i.e.

dX (_, x0 ) ◦ f (x) = dX (f (x) , x0 ) < c0


para algún c0 ∈ R . Por lo anterior la función f es acotada.
Si denotamos el espacio de las funciones continuas entre dos espacios métricos
X, Y (de X en Y) por C 0 (X, Y ). La observación anterior nos dice que si X es
compacto entonces
C 0 (X, Y ) = Cb0 (X, Y ) .
Concluimos entonces que si K es compacto y X es un espacio métrico, entonces
el espacio C 0 (X, Y ) es un espacio métrico completo. 

3.3. El teorema del punto jo de Banach


El teorema del punto jo de Banach, que también es llamado principio de
contracción, garantiza la existencia y unicidad de puntos jos de ciertas funciones
de un espacio métrico completo en si mismo. Algo importante de este teorema es
que la demostración de la existencia te da una forma de encontrar el punto jo por
medio de iteraciones, es importante notar que en los teoremas de punto jo son
pocas las veces que se puede encontrar de una manera constructiva el punto jo.
Una de las aplicaciones más importantes es el teorema de Picard-Lindelöf que
asegura la existencia y unicidad de la solución de un sistema de ecuaciones diferen-
ciales ordinarias que satisface una condición inicial prescrita.
Nuevamente supondremos que (X, dX ) y (Y, dY ) son espacios métricos.

Definición 84. Una función f : (X, dX ) −→ (Y, dY ) es Lipschitz continua con


constante de Lipschitz k > 0, si

dY (f (x) , f (y)) ≤ kdX (x, y)


para todo x, y ∈ X.
Proposición 85. Toda función Lipschitz continua es continua.
Demostración. Sea f : (X, dX ) −→ (Y, dY ) Lipschitz continua con constante
de Lipschitz k > 0, sea (xn ) una sucesión en X tal que lim xn = x. Lo anterior
n→∞
signica que para todo  > 0 existe un momento N ∈ N tal que si k > N

dX (xn , x) < .
k
Por lo que
dY (f (xn ) , f (x)) ≤ kdX (xn , x) < .
Por tanto lim f (xn ) = f (x). 
n→∞
3.3. EL TEOREMA DEL PUNTO FIJO DE BANACH 36

Definición 86. Una función φ : X −→ X es una contracción si existe α ∈ (0, 1)


tal que

dX (φ (x) , φ (y)) ≤ αdX (x, y)


para todo x, y ∈ X , en otras palabras es Lipschitz continua con constante de Lips-
chitz menor que 1.
Es importante antes de iniciar la demostración del teorema del punto jo es-
tablecer una notación para la iteración de una función.
Dada una función f : X −→ X , entonces para todo n∈N denimos

n
f (x) = f (f (f... (f (f (x)))))
| {z }
n-veces
0
y f se dene como la función identidad.

Teorema 87. Sean (X, dX ) un espacio métrico completo y f : X −→ X una


contracción, entonces f tiene un único punto jo x ∈ X , es decir existe un único
punto x ∈ X tal que f (x = x). Más aún, todo elemento x0 ∈ X cumple que la
sucesión (f n (x0 )) converge a x.
n
Demostración. Primero veamos que si lim f (x0 ) = x entonces x es un
n→∞
punto jo.
Observemos que al ser f una contracción, f es continua y por tanto puede
conmutar con el límite. Por tanto
 
f (x) = f lim f n (x0 )
n→∞
= lim f (f n (x0 ))
n→∞
n+1
= lim f (x0 )
n→∞
= x.
Ahora demostraremos que no pueden existir dos puntos jos distintos.
Supongamos que x, y ∈ X son puntos jos, por ser f contracción tenemos que
existe α ∈ (0, 1) tal que

dX (x, y) ≤ αdX (f (x) , f (y)) = αdX (x, y)


lo que solo puede pasar si dX (x, y) = 0, por lo que x = y.
n
Solo tenemos que demostrar ahora que para un x0 ∈ X el límite lim f (x0 )
n→∞
existe. Por ser X completo solo es necesario demostrar que (f n (x0 )) es de Cauchy.
Observemos que

dX f n+1 (x0 ) , f n (x0 ) ≤ αdX f n (x0 ) , f n−1 (x0 )


 

≤ α2 dX f n−1 (x0 ) , f n−2 (x0 )




.
.
.

≤ αn dX (f (x0 ) , x0 ) = αn C.
Entonces para m≥n por la desigualdad del triangulo

m m
!
X X
dX f m+1 (x0 ) , f n (x0 ) ≤ f k+1 (x0 ) , f k (x0 ) ≤ C αk
 
dX .
k=n k=n
3.3. EL TEOREMA DEL PUNTO FIJO DE BANACH 37


αk converge, entonces el lado derecho de la desigualdad anterior se puede
P
Como
k=1
n
hacer tan pequeño como uno quiera, por tanto (f (x0 )) es de Cauchy y con esto
terminamos la prueba. 

Es interesante observar que la demostración del teorema anterior nos permite


acotar el error de la aproximación.
 
dX (f n (x0 ) , x) = dX f n (x0 ) , lim f k (x0 )
k→∞

f (x0 ) , f k (x0 )
n

= lim dX
k→∞
m
!
X
k
≤ lim dX (f (x0 ) , x0 ) α
k→∞
k=n

X
= dX (f (x0 ) , x0 ) αk
k=n
n
α
= dX (f (x0 ) , x0 ) .
1−α
Ejemplo 88. Sea f : (0, 1) −→ (0, 1) dada por f (t) = 21 t. f es una contracción
y no tiene puntos jos.

Ejemplo 89. Sea f : R −→ R tada por f (t) = t + 1. Se tiene que

|t − s| = |f (t) − f (s)|
y f no tiene puntos jos, por lo tanto la condición de α<1 es necesaria.

Ejemplo 90. Sea f : [a, b] −→ [a, b] una función continua en [a, b] y derivable
en (a, b) tal que |f (x)| ≤ α < 1. Entonces por el teorema del valor medio para todo
x, y ∈ [a, b] existe un punto z ∈ [a, b] tal que
f (x) − f (y) = f 0 (z) (x − y)
por lo que

|f (x) − f (y)| = |f 0 (z)| |(x − y)| < α |(x − y)| .


Por lo anterior f es una contracción y por tanto f tiene un único punto critico.

Veamos que el el teorema del punto jo de Banach no podemos quitar la hipóte-
sis de que el espacio sea completo.

Ejemplo 91. !Estimando raíces½ Supongamos que queremos aproximar el valor


1
de 5 5 , claramente la raíz quinta de cinco esta en el conjunto [0, 1], y para encontrarla
5
tenemos que resolver la ecuación F (x) = x − 5 = 0, pero esta no es una ecuación
adecuada, por lo que podemos cambiar este problema al problema de encontrar un
punto jo para a ecuación f (x) = x − λF (x) con λ > 0. En particular se puede
encontrar una λ adecuada tal que f : [1, 2] −→ [1, 2] y tal que |f 0 (x)| < α ≤ 1
para todo x ∈ [0, 1], con esto podemos aplicar el Ejemplo 90 y podemos aproximar
1 1
5 5 es fácil darse cuenta que este proceso se puede generalizar para r m para todo
r ∈ (0, ∞) y m ∈ N.
3.4. COMPATIBILIDAD DE LA CONVERGENCIA UNIFORME CON LA DERIVADA Y LA INTEGRAL.
38

3.4. Compatibilidad de la convergencia uniforme con la derivada y la


integral.
Vimos que la convergencia uniforme era compatible con la continuidad de las
funciones, algo que también nos puede interesar es si la convergencia uniforme nos
preserva el ser derivable o el ser integrable, o como se comporta la convergencia
uniforme con respecto a estas dos funciones (integrar y derivar).

Proposición 92. Supongamos que fn : [a, b] −→ R es continua y que la suce-


´b ´b
sión (fn ) converge uniformemente a f : [a, b] −→ R. Entonces lim a fn = a f .
n→∞

Demostración. Por la Proposición 75 sabemos que f es continua, por lo que


f es integrable, además para toda  > 0 existe un momento N ∈ N tal que si k > N
entonces

|fn (x) − f (x)| < 


para todo x ∈ [a, b]. Por tanto

b b
ˆ ˆ
b ˆ

fn − f = fn − f


a a
a
b
ˆ

≤ 


a
= (b − a) .
´ b ´ b ´b ´b
Concluimos que lim a fn − a f = 0, es decir lim fn = f. 

n→∞ n→∞ a a

Ahora nos interesa saber cuando podemos intercambiar la derivada con el limite
cuando tenemos convergencia uniforme.

 0 Sean
Proposición 93.
 fn : R −→ R funciones con derivada continua en [a, b]
y supongamos que fn converge uniformemente a una función g : [a, b] −→ R
en [a, b]. Si la sucesión fn (x0 ) converge en R para algún x0 ∈ [a, b] entonces la
sucesión (fn ) converge a una función f en [a, b] y más aun f = g .
0

Demostración. Sea x0 ∈ [a, b] C :=


lim fn (x0 ), entonces usando el
y sea
n→∞
teorema fundamental del calculo y la Proposición anterior obtenemos que

ˆ x ˆ x
0
fn (x) = fn (x0 ) + fn → C + g.
x0 x0

Por lo anterior tenemos que (fn ) converge puntualmente a una función f tal
´x
que f (x) = C + g. Como ya tenemos la convergencia puntual, podemos tomar
´x ´x
x0

a x0 = a y entonces f (x) = f (a) + a


g para todo x ∈ [a, b]. Como f (a) + a
g es
continuamente diferenciable, entonces f es continuamente diferenciable.
3.5. ESPACIOS NORMADOS DE DIMENSIÓN FINITA. 39

Por último demostraremos que (fn ) converge uniformemente a f.



ˆ x 

0 0
|fn (x) − f (x)| = fn (a) − f (a) + fn − f

a

ˆ x
0 0
≤ |fn (a) − f (a)| + fn − f
a
0 0
≤ |fn (a) − f (a)| + (b − a) fn − f ∞ → 0.
El lado derecho tiende a 0 independientemente de x ∈ [a, b]. Por lo tanto (fn )
converge uniformemente a f en [a, b] . 

3.5. Espacios normados de dimensión nita.


El Objetivo de esta sección es ver que todo espacio normado de dimensión
nita es de Banach y más aún, todas las normas para un espacio normado de
dimensión n son equivalentes. En otras palabras, salvo isomorsmos topológicos
(homeomorsmos lineales), para cada número natural N , existe un único espacio
normado de dimensión N sobre el campo R. Por ejemplo RN con cualquier norma.
N
Para lo anterior necesitamos jar una norma para R , la cual sera la norma
usual (k·k2 ).
Necesitamos trabajar con la continuidad de operadores lineales de espacio nor-
mados en espacios normados, para esto necesitaremos una denición.

Definición 94. Sean dos espacios vectoriales normados (V, k·kV ) y (W, k·kW ),
un operador lineal A : V −→ W es acotado si existe un a > 0 tal que
kA (v)kW ≤ a kvkV
para todo v ∈ V . El conjunto de todos los operadores lineales acotados es denotado
por L (V ; W ).
El estudio de este tipo de operador es muy amplia, debido a que estos operadores
coinciden con los operadores continuos. Veremos más adelante que L (V ; W ) es un
espacio normado.

Proposición 95. Sean dos espacios vectoriales normados (V, k·kV ) y (W, k·kW ),
un operador lineal A : V −→ W , los siguientes enunciados son equivalentes:
i) A es continuo.
ii) A es continuo en 0.
iii) A es acotado.
Demostración. i) ⇒ ii) Evidente.
ii) ⇒ iii) Como A es continua en 0, existe un δ > 0 tal que si kxkV < δ
entonces kA (x)kW < 1, de esto se sigue que
  
v
kA (v)kW = A δ

kvkv
W
≤1
Usando la linealidad de A obtenemos que

1
kA (v)kW ≤ kvkv .
δ
Por tanto A es acotado.
3.5. ESPACIOS NORMADOS DE DIMENSIÓN FINITA. 40

iii) ⇒ i) Como A es acotado, existe a > 0 tal que para todo v, u ∈ V se cumple
que
kA (v) − A (u)kW = kA (v − u)kW
≤ a kv − ukV .
Con lo que se tiene que A es Lipschitz continua y por la Proposición 85 tenemos
que A es continua. 

Sean RN , k·k y (V, k·kV ) dos espacios normados, entonces



Proposición 96.

cualquier operador lineal L : RN −→ V es continuo.


Demostración. Primero necesitamos jar una base para RN , tomamos los
vectores
 

en := 0, 0, ..., 0, |{z}


1 , 0, ..., 0 .
 

lugar n

El conjunto {e1 , e2 , ..., en } RN .


es una base para
1) Veamos que todo operador lineal L : (R, |·|) −→ (V, k·kV ) es continuo, lo que
es muy claro ya que el operador se ve como

L (k) = kL (1) .
Por lo que si kn −→ k entonces L (kn ) = kn L (1) −→ kL (1) = L (k) . Es
n→∞ n→∞
decir, L es continua.

2) Ahora, si L : RN , k·k −→ (v, k·kv ) es un operador lineal, entonces

N
! N
X X
L λ k ek = λk L (ek ) .
k=1 k=1

Por lo que para demostrar la continuidad de


 L, es suciente demostrar la con-
tinuidad del operador Lr : RN , k·k −→ (v, k·kv ) denida como
N
!
X
Lr λk ek = λr L (er )
k=1

donde r ∈ {1, 2, ..., N } . Sea (xn ) sucesión en RN tal que xn −→ x, por lo que
n→∞
si kn y k son las entradas erresimas de xn y x respectivamente, entonces por
N
la denición de la norma en R se tiene que kxn − xkN ≥ kkn − kk1 , por lo que
kn −→ k . En otras palabras, las proyecciones son continuas. Por lo tanto usando
n→∞
lo demostrado en 1) y la continuidad de la proyección, se tiene que la función Lr
es continua (composición de continuas) y por tanto L es continua. 

Con la proposición anterior y la demostración de que todo conjunto cerrado y


acotado en RN es compacto, podemos demostrar que todas las normas en RN son
equivalentes. Pero antes veamos que signica que sean equivalentes.

Definición 97. Dados dos espacios normados (V, k·k1 ) y (V, k·k2 ), diremos que
las normas son equivalentes si existen a, d > 0 tales que

a kxk1 ≤ kxk2 ≤ b kxk1 .


3.5. ESPACIOS NORMADOS DE DIMENSIÓN FINITA. 41

Observación 98. Es fácil ver que si dos normas son equivalentes, entonces se
tiene que la identidad (como operador lineal) es continua y con inversa continua, en
particular nos interesan este tipo de operadores, que son homeomorsmos y lineales
al mismo tiempo.

Definición 99. Sean dos espacios vectoriales normados (V, k·kV ) y (W, k·kW ),
diremos que este par de espacios son isomorfos topológicos si existe un operador
lineal A : V −→ W , que es un homeomorsmo.

Proposición 100. Todas las normas en RN son equivalentes.



Demostración. Sea RN , k·k el espacio normado con la norma usual y k·k1
N
cualquier otra norma para R . Por la Proposición 96 sabemos que La función
N
 N

identidad i : R , k·k −→ R , k·k1 es continua. Además, sabemos que la esfera

k·k
S1 := x ∈ RN : kxk = 1


N
 k·k
es un compacto (cerrado y acotado) en R , k·k y por tanto S1 es un compacto en
N

R , k·k1 (funciones continuas mandan compactos en compacto).
Nuevamente por
N
 k·k
continuidad de la norma k·k1 en R , k·k1 se tiene que S1 en R es compacto
n o 1
k·k
y por tanto acotado. Veamos que a := inf kxk1 : x ∈ S1 > 0.
Sabemos que a ≥ 0. Supongamos que a = 0, entonces existe una sucesión xn
k·k k·k
de elementos de S1 tal que lim kxn k1 = 0, como S1 es compacto, entonces por
n→∞
las equivalencias de compacidad, existe una subsucesión (xnk ) ⊂ (xn ) tal que (xnk )
k·k
converge a x y x ∈ S1 , por continuidad de la norma lim kxnk k1 = kxk1 = 0, por
k→∞
k·k
lo que 0 ∈ S1 nlo que es un contradictorio, por lo que obtenemos que a > 0.
o
k·k x k·k
Si b := sup kxk1 : x ∈ S1 entonces para todo x distinto de cero,
kxk ∈ S1
por lo que

x
a≤
≤b
kxk 1
multiplicando por kxk obtenemos

a kxk ≤ kxk1 ≤ b kxk


y por tanto las normas son equivalentes. 
Dadas dos normas k·k1 y k·k2 para R , entonces R , k·k1
N N

Corolario 101.

y R , k·k2 son isomorfos topológicos.


N


Demostración. Por la demostración anterior y la Observación 98, la identi-


dad es un homeomorsmo lineal. 
Proposición 102. Toda biyección lineal entre dos espacios normados (V, k·kV )
y RN , k·k (la norma k·k es la usual) es un isomorsmo topológico.


Demostración. Sea un operador lineal biyectivo L : RN , k·k −→ (V, k·kV ).
Por la propocisión 96 sabemos que L es continuo, solo tenemos que demostrar que
L−1 es continua.
Denamos la norma k·kL en RN como:

kxkL = kL (x)k1 .
3.5. ESPACIOS NORMADOS DE DIMENSIÓN FINITA. 42

Es fácil ver que k·kL es una norma, n1) se debe a la inyectividad, n2) se debe
a la linealidad de L y que k·k1 es norma y n3) a que k·k1 cumple la desigualdad
del triangulo y que L es lineal. Por la proposición 100 sabemos que existen a, b > 0
tales que
a kxk ≤ kxkL = kL (x)k1 ≤ b kxk .
De lo que se sigue que L es continua. 
Con esto podemos obtener el siguiente resultado, que dice que todo operador
lineal entre espacios de dimensión nita es continua y que si es biyectivo entonces
es un isomorsmo topológico.

Proposición 103. Sean (V, k·kV ) y (W, k·kW ) dos espacios normados de di-
mensión nita y L : V −→ W lineal. Entonces
a) L es continua.
b) Si L es biyectiva entonces es un isomorsmo topológico.
Demostración. a) Sea N la dimensión de V y sea T : RN −→ V una biyección
lineal, entonces por la Proposición 102 T es un isomorsmo topológico. Por la
Proposición 96 L ◦ T : RN −→ W es una función continua y por tanto

L ◦ T ◦ T −1 = L
es continua.
b) De manera parecida a a), Sea N la dimensión de V y sea T : RN −→ V una
biyección lineal, entonces por la Proposición 102 T es un isomorsmo topológico.
Por la misma razón L ◦ T : RN −→ W es un isomorsmo topológico y por tanto

L ◦ T ◦ T −1 = L
es un isomorsmo topológico (composición de homeomorsmos y de funciones lin-
eales es homeomorsmo y lineal). 
El objetivo de esta sección es ver que todo espacio normado de dimensión nito
es de Banach. Por lo que ahora que tenemos que todos son isomorfos topológicos, nos
es suciente demostrar que la completitud se preserva bajo isomorsmos topológicos
si la dimensión es nita.

Proposición 104. Sean (V, k·kV ) un espacios normados de dimensión N , en-


tonces (V, k·kV ) es de Banach.
Demostración. Sea (vn ) una sucesión de Cauchy en V , sabemos que existe L :
RN −→ V isomorsmo topológico y por tanto L es continua con inversa continua,
por lo que L y L−1 son acotadas, es decir existen a, b > 0 tales que
kL (x)kV ≤ a kxk
y
−1
(3.5.1) L (v) ≤ b kvk .
V

Sea  > 0, entonces existe un momento N ∈ N tal que si n, m > N , entonces


kvn − vm kV < .
Sea xn := L −1
(vn ), Usando (3.5.1) obtenemos que
−1
L (vn − vm ) ≤ b kvn − vn k = b.
V
3.6. EL ESPACIO NORMADO L (V, W ) . 43

Con lo anterior tenemos que (xn ) es una sucesión de Cauchy y al ser RN


N
completo, entonces existe x∈R tal que lim xn =x y por la continuidad de L
n→∞
obtenemos que
lim L (xn ) = lim vn = L (x) ,
n→∞ n→∞
por lo que (yn ) converge y por tanto (V, k·kV ) es un espacio de Banach. 

3.6. El espacio normado L (V, W ) .


Daremos una estructura de espacio normado al conjunto L (V, W ) introduci-
do en la sección anterior. En esta sección se consideraran dos espacios normados
(V, k·kV ) y (W, k·kW ).
Definición 105. Denimos la norma de un operador acotado como

kAk := inf {a > 0 : kA (v)kW ≤ a kvkV para todo v ∈ V }.


Proposición 106. Tenemos las siguientes equivalencias para la norma de un
operador lineal.
kA (v)kW
kAk = sup = sup kA (v)kW = sup kA (v)kW .
v6=0 kvkV kvkV ≤1 kvkV =1

kA(v)kW
Demostración. 1)kAk ≥ sup kvkV 6= 0
kvkV . Sabemos que si entonces
v6=0
para todo a>0 tal que kA (v)kW ≤ a kvkV para todo v ∈ V se tiene que
 
kA (v)kW v
≤ a,
= A

kvk V kvk
V W
por lo que
kA (v)kW
sup ≤a
v6=0 kvkV
y por tanto

kA (v)kW
sup ≤ inf {a > 0 : kA (v)kW ≤ a kvkV para todo v ∈ V } = kAk .
v6=0 kvkV
kA(v)kW
2) sup
kvkV ≥ sup kA (v)kW . Si kvkV ≤ 1 entonces
v6=0 kvkV ≤1

kA (v)kW
≥ kA (v)kW
kvkV
y por tanto
kA (v)kW kA (v)kW
sup ≥ sup
v6=0 kvkV 06=kvkV ≤1 kvkV
≥ sup kA (v)kW
kvkV ≤1
3) sup kA (v)kW ≥ sup kA (v)kW . Evidente.
kvkV ≤1 kvkV =1
4) sup kA (v)kW ≥ kAk . Sea  > 0, existe u∈V tal que
kvkV =1

kA (u)kW > (kAk − ) kukV


3.6. EL ESPACIO NORMADO L (V, W ) . 44

(lo anterior por ser kAk un ínmo). Claramente u 6= 0 y por tanto



A (u)
sup kA (v)kW ≥
kuk
kvkV =1 V W
1
= kA (u)kW
kukV
1
> (kAk − ) kukV
kukV
= (kAk − ) .
Como  es cualquier numero positivo obtenemos que

sup kA (v)kW ≥ kAk .


kvkV =1

Por 1), 2), 3) y 4) obtenemos el resultado buscado. 

El resultado anterior nos permite mayor facilidad para calcular normas de oper-
adores continuos. Ahora veamos que en efector la norma de los operadores continuos
es una norma.

Teorema 107. La pareja (L (V, W ) , k·k) es un espacio normado.


Demostración. Claramente L (V, W ) es un espacio vectorial, esto es debido
a que L (V, W ) es un subconjunto del espacio vectorial de las funciones con dominio
V y rango W . Claramente el operador lineal 0 es continuo, por lo que 0 ∈ L (V, W ).
Como suma de operadores lineales continuo es lineal y continuo, y producto escalar
de un operador lineal y continuo es nuevamente lineal y continuo, se tiene que
L (V, W ) es cerrado bajo suma y producto escalar y por tanto es un espacio vectorial.
Veamos que la función k·k cumple las propiedades de una norma.
n1). Sea L ∈ L (V, W ) entonces kLk = 0 si y solamente si (por la Proposición
anterior)

kL (v)kW
sup =0
v6=0 kvkV
lo que sucede si y solamente si

kL (v)kW
=0
kvkV
para todo v 6= 0, y nuevamente esto sucede si y solamente si kL (v)kW = 0 para
todo v 6= 0, lo anterior se cumple si y solamente si L = 0.
n2). Sea λ ∈ R. Entonces
kλL (v)kW
kλLk = sup
v6=0 kvkV
kL (v)kW
= sup |λ|
v6=0 kvkV
kL (v)kW
= |λ| sup
v6=0 kvkV
= |λ| kLk .
3.6. EL ESPACIO NORMADO L (V, W ) . 45

n3). Sean L, T ∈ L (V, W ), por lo que

kL + T k = sup kL + T (v)kW
kvkV =1

≤ sup kL (v)kW + kT (v)kW


kvkV =1

≤ sup kL (v)kW + sup kT (v)kW


kvkV =1 kvkV =1

= kLk + kT k .

Es difícil dar ejemplos de operadores lineales no continuos, pero con los resul-
tados anteriores nos es mucho más fácil dar un ejemplo.

Ejemplo 108. Sea el espacio de las sucesiones con cola de ceros y norma
innito, es decir el espacio normado (S, k·k∞ ). Es fácil ver que si denimos
 

en := 0, 0, ..., 0, |{z}


1 , 0, ... ,
 

lugar n

entonces el conjunto B := {en : n ∈ N} es una base para S. Sabemos que para


denir un operador lineal es suciente denirlo en la base, por lo que denimos
L : S −→ R tal que
L (en ) = n
y como ken k∞ = 1 obtenemos que

sup |L (v)| ≥ sup |L (v)| = ∞.


kvk∞ =1 en ,n∈N

Por lo tanto L no esta acotado y por la Proposición 95 L no es continuo.

Con lo anterior concluimos esta sección y este capítulo.


Capítulo 4

Espacios de funciones continuas, compacidad y

densidad.

En este capítulo estamos interesados por dos resultados importantes en el es-


pacio de funciones continua que van de un espacio métrico compacto K a los reales,
este espacio lo denotamos por C 0 (K). El primero resultado es el Teorema de Arzelà-
0
Ascoli que nos permite saber cuando un subconjunto de C (K) es compacto. El
segundo resultado es el Teorema de Stone-Weierstra, el cual nos dice bajo que condi-
ciones un subconjunto de C 0 (K) es denso. Una aplicación inmediata del Teorema
de Stone-Weierstraÿ, es que los polinomios en C 0 ([0, 1]) son densos.

4.1. Equicontinuidad.
Nuestro primer objetivo es describir los conjuntos compactos del espacio C 0 (K),
donde K es un espacio métrico compacto. Al nal de la sección 3.2, concluimos que
el espacio C 0 (K) es completo, por esto el buscar conjuntos compactos en C 0 (K)
es lo mismo que buscar conjuntos totalmente acotados. Ya que sabemos que en los
espacios completos los compactos son cerrados totalmente acotados.
Estamos interesados entonces en caracterizar cuando una sucesión de funciones
en C 0 (K) tienen una subsucesión convergente, este ingrediente que falta también
responde la pregunta que que le hace falta a la convergencia puntual para que esta
sea uniforme.
En este capítulo consideraremos un espacio métrico compacto (K, dK ) y (X, dX )
, (Y, dY ) cualesquiera par de espacios métricos.

Definición 109. Un subconjunto A ⊂ C 0 (X, Y ) es una familia equicontinuo


en x ∈ X si para toda  > 0 se tiene que existe δ > 0 tal que si dX (x, y) < δ
entonces dY (f (x) , f (y)) <  para toda función f ∈ A. Si A es equicontinua en
todo X , se dice que A es equicontino.

1
Ejemplo 110. Sea la función fn : [0, 1] −→ R denida como fn (t) = n t,
entonces el conjunto A := {fn : n ∈ N } es equicontinuo. Lo anterior es fácil de ver
tomando δ = .
Es importante introducir también un concepto que nos permita manejar un
tipo de acotamiento para un conjunto de funciones continuas.

Definición 111. Diremos que un subconjunto A ⊂ C 0 (X) := C 0 (X, R) es


uniformemente acotado si el conjunto

{f (x) : x ∈ X, f ∈ A}
es acotado. Lo anterior es lo mismo que pedir que

(4.1.1) sup kf k∞ < ∞.


f ∈A

46
4.1. EQUICONTINUIDAD. 47

Lema 112. Si A ⊂ C 0 (X) es totalmente acotado, entonces es uniformemente


acotado y equicontinuo.
Demostración. Sabemos que en cualquier espacio métrico es ser totalmente
acotado implica ser acotado, por esto es inmediato que A es uniformemente acotado
(por 4.1.1).
Veamos ahora que A es equicontinuo. Es fácil probar que una familia nita de
funciones es equicontinua, la demostración de lo anterior se le deja al lector. Sea
 > 0, como A es totalmente acotado, entonces signica que existen un número nito
de funciones f1 , f2 , ..., fn en A tales que para toda f ∈ A, existe i ∈ {1, 2, ..., n} tal

que kfi − f k∞ < . Ahora, debido a que el conjunto {f1 , f2 , ..., fn } es equicontinuo,
3
entonces para x ∈ X jo, existe una δ > 0 tal que si dX (x, y) < δ entonces
|fi (x) − fi (y)| < 3 para todo i ∈ {1, 2, ..., n}. Veamos ahora que esta δ funciona
para toda f ∈ A.
Sea g ∈ A y y tal que dX (x, y) < δ , sabemos que existe i ∈ {1, 2, ..., n} tal que
kfi − gk∞ < 3 . De lo anterior se sigue que
|g (x) − g (y)| ≤ |g (x) − fi (x)| + |fi (x) − fi (y)| + |fi (y) − g (y)|

< kfi − gk∞ + + kfi − gk∞
3
< .
Por tanto A es equicontinua. 
Corolario 113. Si (fn ) es una sucesión en C 0 (X) que converge, entonces
{fn : n ∈ N} es uniformemente acotado y equicontinuo.
Demostración. Esto es debido a que ya demostramos que si una sucesión
converge entonces vista con conjunto de puntos es totalmente acotada. 
Un ejercicio fácil de hacer, es ver que subconjuntos de conjuntos equicontinuos
es equicontinuos. Veamos que practicamente el Lema 112 nos caracteriza a los
compactos en C 0 (K) .
Teorema 114. (Teorema de Arzelà-Ascoli) Un subconjunto A de C 0 (K) es
compacto si y solamente si es cerrado, uniformemente acotado y equicontinuo.
Demostración. ⇒) Es inmediata, ya que todo conjunto A compacto es cer-
rado y totalmente acotado, por el Lema 112 tenemos que A es cerrado y uniforme-
mente acotado y equicontinuo.
⇐) Para demostrar que un subconjunto A es compacto es suciente demostrar
que toda sucesión tiene una subsucesión convergente. Como K es compacto, es
totalmente acotado, por lo que
Sea entonces (fn ) una sucesión en A, esto signica que {fn : n ∈ N} es equicon-
tinua, por lo que dado x ∈ K y  > 0, existe δx > 0 tal que sidK (x, y) <  δx entonces
 δx
K

|fn (x) − fn (y)| < 6 para toda n ∈ N. Ahora, el conjunto B x, 2 : x ∈ K es
una cubierta abierta de K , por lo que existen δx1 , δx2 , ..., δxl tales que el conjunto
n   o
δxi
B K xi , 2 : i ∈ {1, 2, ..., l} es una cubierta de K . Denamos δ := 12 mín {δx1 , δx2 , ..., δxl }.
 
δ
Observemos que si dK (x, y) < δ , entonces x ∈ B K xi , x2i para alguna i ∈

{1, 2, ..., l} por lo que |fn (x) − fn (xi )| < 6 además
1
dK (y, xi ) ≤ dK (y, x) + dK (x, xi ) < (δxi + δxi ) = δxi
2
4.1. EQUICONTINUIDAD. 48


por lo que |fn (y) − fn (xi )| < 6 y por tanto

|fn (x) − fn (y)| ≤ |fn (x) − fn (xı́ )| + |fn (xi ) − fn (y)| < .
3

Por tanto si dK (x, y) < δ entonces |fn (x) − fn (y)| <
3.
Ahora, nuevamente por ser K compacto, entonces es totalmente acotado y por
 K
tanto existen k1 , k2 , ..., ks ∈ K tales que el conjunto B (ki , δ) : i ∈ {1, 2, ..., s}
es una cubierta de K . Como {fn : n ∈ N} es uniformemente acotado (debido a que
A lo es) entonces las sucesiones (fn (ki )) también son acotadas en R. Pasando a una
subsucesión adecuada la cual denotaremos también por (fn ), podemos suponer que
(fn (ki )) converge para toda i ∈ {1, 2, ..., s} (lo anterior se hace inductivamente,
primero se encuentra una subsucesión (fnr ) tal que (fnr (k1 )) converge, después se
repite el procedimiento para k2 pero ahora tomando una subsucesión de (fnr ), esto
para asegurar la convergencia al aplicar k1 , se repite este procedimiento hasta ter-
minar). En particular, podemos encontrar una Ni ∈ N tal que si n, m > Ni entonces
|fn (ki ) − fm (ki )| < 3 . Si tomamos N := máx {Ni : i ∈ {1, 2, ..., s}}, entonces ten-

emos que si n, m > N entonces |fn (ki ) − fm (ki )| <
3 para todo i ∈ {1, 2, ..., s}.
Veamos que esta subsucesión (fn ) es uniforme de Cauchy.
Sea x ∈ K , entonces existe ki tal que dK (x, ki ) < δ . Entonces para todo
n, m > N tenemos que
|fn (x) − fm (x)| ≤ |fn (x) − fn (ki )| + |fn (ki ) − fm (ki )| + |fm (ki ) − fm (x)|
  
< + +
3 3 3
= .
Por tanto (fn ) es uniforme de Cauchy y por ser el espacio C 0 (K) completo,
entonces (fn ) converge. 
Este teorema nos permite trabajar más fácilmente con conjuntos compactos en
C 0 (K). Veamos un corolario del teorema anterior.

Corolario 115. Sea (fn ) una sucesión en C (K) uniformemente acotada y


0

equicontinuo, entonces alguna subsucesión de (fn ) converge uniformemente.


Corolario 116. Sea (fn ) una sucesiónes de funciones en C 0 ([a, b])
tales que
son continuamente diferenciable en (a, b) y existe M > 0 tal que fn (x) < M para
0

todo x ∈ (a, b) y todo n ∈ N. Si (fn ) son uniformemente acotado entonces (fn )


tiene una subsucesión que converge uniformemente en [a, b] .
Demostración. Veamos que (fn ) es equicontinuo (como conjunto). Sea  > 0
y sean además c, d tales que x ∈ (c, d) ⊂ (a, b), por el teorema del valor medio,
0
|fn (d) − fn (c)| = f (e) |d − c|

para algun e ∈ (c, d), por tanto

|fn (d) − fn (c)| ≤ M |d − c| ,



por lo que si tomamos δ= M tenemos que si |d − c| < δ entonces

|fn (d) − fn (c)| ≤ M |d − c| < .


Por lo anteriro (fn ) es equicontinuo, por el corolario 115 concluimos que (fn )
tiene una subsucesión convergente. 
4.1. EQUICONTINUIDAD. 49

Veamos un ultimo corolario del Teorema de Arzelà.

Corolario 117. Sea


A := {f : [0, 1] → R : f es Lipschitz continua con constante de Lipschitz n} .
Entonces A es cerrado, más aun, el subconjunto B ⊂ A denido como B =
{f ∈ A : f (0) = 0} es compacto en C 0 ([0, 1]).
Demostración. Primero veamos que A es cerrado. Sea (fn ) una sucesión en
A tal que converge a f, esto quiere decir que

lim kfn − f k∞ = 0.
n→∞

En particular, si tomamos x, y ∈ [0, 1] tenemos que para toda n∈N


|fn (x) − fn (y)| ≤ n |x − y| ,
por lo que

lim |fn (x) − fn (y)| = |f (x) − f (y)| ≤ n |x − y| .


n→∞

Por lo que f es lipschitz continua, Además si cada fn ∈ B , entonces lim fn (0) =


n→∞
f (0) = 0. Por tanto f ∈ B.
Con lo anterior tenemos que A y B son cerrados, ahora veamos que B es
uniformemente acotado y equicontinuo.
Sea g ∈ B, entonces

|g (x)| = |g (0) − g (x)|


≤ n |x|
≤n
Por tanto B es uniformemente acotado. Ahora solo nos falta demostrar que B es

equicontinuo. Sea >0 y δ= n , por lo que si |x − y| < δ entonces

|f (x) − f (y)| ≤ n |x − y|
<
y por tanto B es equicontinuo. Por el teorema de Arzelà-Ascoli concluimos que
B es compacto. 

En esta parte es importante notar que en la demostración del teorema de


Arzelà-Ascoli, se demuestra que si tenemos una función continua f en un com-
pacto, para  > 0 podemos encontrar una δ>0 tal que si dK (x, y) < δ entonces
|f (x) − f (y)| < . Esto nos introduce una nueva denición y un corolario.

Definición 118. Sea f : X −→ Y . f es uniformemente continua si para


toda para  > 0 podemos δ > 0 tal que si dK (x, y) < δ entonces
encontrar una
dy f ((x) − f (y)) < .
Corolario 119. Si f : K −→ Y es continua y K compacto, entonces f es
uniformemente continua.
Demostración. Esto es demostrado en la demostración del Teorema de Arzelà-
Ascoli. 
4.2. TEOREMA DE APROXIMACIÓN DE WEIERSTRASS 50

4.2. Teorema de aproximación de Weierstraÿ


El objetivo de esta sección es mostrar que toda función continua f : [a, b] −→ R
se puede aproximar uniformemente por una función polinomial. Este resultado se
conoce como el teorema de aproximación de Weierstraÿ. Este teorema es impor-
tante ya que los polinomios son funciones sencillas y estudiando un polinomio ade-
cuadamente próximo a f entonces podemos obtener información sobre f. Más aun,
exhibiremos una sucesión explícita de polinomios que converge uniformemente a f
en [a, b]. Esta sucesión son los polinomios de Bernstein.
Recordemos que los polinomios en R son de la forma

p (t) := a0 + a1 t + a2 t2 + ... + an tn
para algun n ∈ N y ak ∈ R para todo k ∈ {0, 1, ..., n} .
Para cada 0 ≤ k ≤ n consideremos los polinomios
 
n n−k
γn,k (t) := tk (1 − t)
k
donde
 
n n!
=
k k! (n − k)!
es el coeciente binomial. En particular nosotros sabemos que
n  
n
X n
(a + b) = ak bn−k
k
k=0

de lo que se sigue que


n
X n
(4.2.1) γn,k (t) = (t + (1 − t)) = 1.
k=0

En la igualdad (4.2.1) sustituimos a n por n−1 y multiplicamos por t.


n−1
X
t= γn−1,k (t)
k=0
n−1
X 
n−1 n−1−k
= tk+1 (1 − t)
k
k=0
n−1  
X k+1 n n−(k+1)
= tk+1 (1 − t)
n k+1
k=0
n  
X j n n−j
= tj (1 − t)
n j
j=1
n
X j
= γn,,j (t)
j=0
n

despejando la desigualdad anterior obtenemos


n
X
(4.2.2) nt = jγn,,j (t) .
j=0
4.2. TEOREMA DE APROXIMACIÓN DE WEIERSTRASS 51

De manera totalmente análoga, multiplicando por t2 la ecuación (4.2.1) para


n−2 obtenemos
n
X
n2 − n t2 = j 2 − j γn,,j (t) .
 
(4.2.3)
j=0

Con lo anterior podemos denir los polinomios de Bernstein para una función
continua f.
Definición 120. Sea f : [0, 1] −→ R una función continua, denimos el
n−ésimo polinomio de Bernstein de f como
n  
X j
βn (t) = βn,f (t) := f γn,,j (t) .
j=0
n

Denidos estos polinomios, demostraremos que ellos convergen uniformemente


a f.
Teorema 121. (Bernstein) Sea f : [0, 1] −→ R una función continua, entonces
la sucesión (βn,f ) converge uniformemente a f .
Demostración. Como f es continua en un compacto, entonces es uniforme-
mente continua (Corolario 119). Por tanto, para  > 0 existe un δ > 0 tal que si
|x − y| < δ entonces |f (x) − f (y)| < 12 . Fijemos un t ∈ [a, b] y multipliquemos la
igualdad (4.2.1) por f (t). Obtenemos
Xn
f (t) = f (t) γn,k (t) .
k=0
En consecuencia

n   
X k
|f (t) − βn,f (t)| = f (t) − f γn,k (t)

n
k=0
(4.2.4)
n   .
X k
≤ f (t) − f γn,k (t)
n
k=0
Nuestro objetivo es hacer menor que  el lado derecho de la desigualdad anterior
para n sucientemente grande. Lo anterior no es cosa fácil, para esto necesitamos
denir los conjuntos
(   14 )
k 1
I1 := k ∈ N ∪ {0} : 0 ≤ k ≤ n, − t < ,
n n
I2 := {k ∈ N ∪ {0} : 0 ≤ k ≤ n, k ∈
/ I1 } ,
y tomemos una n tal que
( )
2
1 kf k∞
n ≥ máx , 2 .
δ4 
1
 14
Entonces
n < δ y se sigue de la continuidad uniforme y de la igualdad
(4.2.1) que

X   n
f (t) − f t γn,k (t) <
X X 
(4.2.5) γ n,k (t) ≤ γn,k (t) = .
n 2 2 2
k∈I1 k∈I1 k=0
4.2. TEOREMA DE APROXIMACIÓN DE WEIERSTRASS 52

−2 √
Por otra parte, si k ∈ I2 entonces t − nk ≤ n y, en consecuencia,
X  
f (t) − f t γn,k (t) ≤
X
2 kf k∞ γn,k (t)
n
k∈I2 k∈I1

X t − k 2

n
(4.2.6) = 2 kf k∞ γn,k (t)
k 2

k∈I1 t − n

2
√ X

k
≤ 2 kf k∞ n t − n γn,k (t) .

k∈I1

Veamos que
n  2
X k 1
t− γn,k (t) ≤
n 4n
k=0

para todo n ∈ N. Multiplicando (4.2.1) port2 , la igualdad (4.2.2) por −2


n t, y la
1
suma de las igualdades (4.2.2) y (4.2.3) por 2 , obtenemos respectivamente
n
n
X
t2 γn,k (t) = t2
k=0
n
X k
− 2 tγn,,k (t) = −2t2
n
k=0
n
k2
 
X t 1 2
γ (t) =
2 n,k
+ 1− t .
n n n
k=0

Sumando lado a lado obtenemos


n  2
X k 1
t − t2 .

(4.2.7) t− γn,k (t) =
n n
k=0
 0
2
La función f (t) = t − t tiene derivada f (t) = 1 − 2t, por lo que f tiene un
00
1 1
punto critico en t = , pero como f (t) = −2 < 0, entonces en t =
2 2 es el máximo
de f en [0, 1]. Por tanto
n  2  
X k 1 1 1
(4.2.8) t− γn,k (t) ≤ f = .
n n 2 4n
k=0

Que es lo que queríamos demostrar.


kf k∞
Por como tomamos a n tenemos que √
n
≤ . Por la desigualdad (4.2.8) y

(4.2.6) obtenemos que


2
√ X
 
f (t) − f k γn,k (t) ≤ 2 kf k t − k γn,k (t)
X
∞ n
n n
k∈I2 k∈I1

kf k∞ n

(4.2.9) 2n
kf k∞
= √
2 n

≤ .
2
4.2. TEOREMA DE APROXIMACIÓN DE WEIERSTRASS 53

Por ultimo, tomando (4.2.4), (4.2.5) y (4.2.9) concluimos que

n  
X k
|f (t) − βn,f (t)| ≤ f (t) − f n γn,k (t)

k=0
   
X k X k
= f (t) − f n γn,k (t) + f (t) − f n γn,k (t)

k∈I1 k∈I2
< .
para t ∈ [0, 1]. es decir,

kf − βn,f k∞ < 
2
n o
1 kf k∞
si n ≥ máx δ 4 , 2 . 

Es fácil darse cuenta que el teorema anterior también se debe de cumplir para
cualquier intervalo [a, b], este resultado es conocido por el teorema de aproximación
de Weierstraÿ.

Teorema 122. (Teorema de aproximación de Weierstraÿ) Sea f : [a, b] −→


R una función continua, entonces existe una sucesión de polinomios (pn ) tal que
converge uniformemente a f .
Demostración. Este resultado es inmediato del anterior solo enviando el in-
tervalo [0, 1] en el intervalo [a, b] adecuadamente, sea

ρ : [0, 1] −→ [a, b]
la función dada por ρ (t) := (1 − t) a+tb. Aplicamos el teorema anterior a la función
g := f ◦ ρ obteniendo que (βg,n ) converge uniformemente a g en [0, 1]. La función
pn := βg,n ◦ ρ−1 es un polinomio que cumple
kpn − f k∞ = máx |pn (s) − f (s)|
s∈[a,b]
βg,n ◦ ρ−1 (s) − f ◦ ρ ◦ ρ−1 (s)

= máx
s∈[a,b]

= máx |βg,n (t) − g (t)|


t∈[0,1]

= kβg,n − gk∞ .
En consecuencia (pn ) converge uniformemente a f. 

La compacidad es necesaria para usar que una función continua es uniforme-


mente continua, veamos que esto es necesario, es decir que si el dominio no es
compacto entonces existen funciones que no se pueden aproximar por medio de
polinomios.

Proposición 123. Sea f : (a, b] −→ R continua que no to tiene extensión


continua en [a, b]. Es decir, no existe función continua g : [a, b] −→ R continua tal
que f (t) = g (t) pata todo t ∈ (a, b]. Entonces f no se puede aproximar por medio
de polinomios.
Demostración. Supongamos que existe una sucesión de polinomios (pn ) tales
que convergen uniformemente a f en (a, b], entonces tenemos que la sucesión (pn )
4.3. ÁLGEBRAS 54

es de Cauchy en C 0 ((a, b]). Entonces para toda >0 existe un momento N ∈N


tal que si l, m > N entonces
kpl − pm k = máx |pl (t) − pm (t)| < 
t∈(a,b]

pero los polinomios son continuos en R, esto implica que

lim |pl (t) − pm (t)| = |pl (a) − pm (a)| ≤ 


t→a+

y por tanto la sucesión (pn ) es de Cauchy en C 0 ([a, b]), que es un espacio completo.
0
En conclusión existe g ∈ C ([a, b]) tal que los polinomios (pn ) convergen uniforme-
mente a g en [a, b] y por tanto g es una extensión de f en [a, b]. Lo anterior es una
contradicción y por tanto f no se puede aproximar por medio de polinomios. 

Un ejemplo de una función que cumpla las hipótesis del teorema anterior es la
función f : (0, 1] −→ R denida como
 
1
f (t) = sen .
t
Se deja al lector demostrar que esta función no tiene extensión continua al [0, 1]
y que adecuadamente por medio de f se puede dar un ejemplo de una función que
cumpla las hipótesis del teorema anterior para cualquier intervalo (a, b].

4.3. Álgebras
Ya que conocemos el teorema de aproximación de Weierstraÿ, nos preguntamos
si se puede generalizar más, en el sentido de que hipótesis son suciente para que una
familia de funciones sea densa en el espacio C 0 (K) donde K es cualquier espacio
métrico compacto. Una generalización que se da es el teorema de Stone-Weierstraÿ,
para lo anterior se necesita algunos nuevos conceptos.
Hasta el momento cuando trabajamos en los espacios C 0 (K) solo usamos que
las funciones son continuas y que el dominio es compacto, en otras solo estamos
usando propiedades topológicas. Pero es importante notar que el espacio C 0 (K)
tiene un estructura algebraica, de la cual también podemos sacar información sobre
el espacio C 0 (K).
Definición 124. Un álgebra normada A es un espacio vectorial normado donde
existe una multiplicación, es decir, existe una función (_ · _) : A × A −→ A que
cumple las siguientes propiedades para todo f, g, h ∈ A y α ∈ R.
a1) f (gh) = (f g) h.
a2) f (g + h) = f g + f h y (f + g) h = f h + gh.
a3) α (f g) = (αf ) g = f (αg) .
a4) kf gkA ≤ kf kA kgkA .
Si A es un espacio vectorial que cumple a1), a2) y a3) es un álgebra, si además
cumple
a5) f g = gf .
Entonces A es un álgebra conmutativa, Si existe e ∈ A tal que
a6) ef = f e = f .
Entonces A es un álgebra con identidad.
Si B ⊂ A es un álgebra bajo las mismas operaciones que A entonces B es un
subálgebra de A.
4.3. ÁLGEBRAS 55

Es claro que el espacio B (X, R) es un álgebra conmutativa con uno (la función
constante 1). Observemos que

kf gk∞ = sup |f (x) g (x)|


x∈K
≤ sup |f (x)| sup |g (x)|
x∈K x∈K
= kf k∞ kgk∞ .

Definición 125. Un álgebra normada que es completa con la norma es un


álgebra de Banach.

Por la denición anterior, sabemos que el espacio B (X) := B (X, R) es un


álgebra de Banach
Por lo tanto B (X) es un álgebra normada conmutativa con identidad. En par-
ticular C 0 (K) es un álgebra de Banach.

Ejemplo 126. i) Consideremos las funciones f : [a, b] −→ R tales que existe


una partición a = t0 < t1 < ... < tn = b tal que para todo i ∈ {1, 2, 3, ..., n} f es
constante en (ti , ti−1 ] o en [ti , ti−1 ). Este tipo de funciones las llamaremos funciones
escalonadas y al conjunto de todas las funciones escalonadas lo denotaremos por
S [a, b]. Se le dejara al lector demostrar que este conjunto es un subálgebra de B (X)
y por tanto S [a, b] es una álgebra de Banach.
0
ii) los polinomios restringidos al [a, b] son una subálgebra del espacio C ([a, b]).
Más aun, por el Teorema de aproximación de Weierstreÿ este subálgebra es denso
en C 0 ([a, b]).

Denotaremos al máximo y mínimo de dos funciones f, g en B (X) por f ∨g y


f ∧g respectivamente, es decir

f ∨ g (x) := máx {f (x) , g (x)}


f ∧ g (x) := mín {f (x) , g (x)} .

Veamos un lema y un resultado que nos sera de utilidad más adelante.

Lema 127. Sean f, g ∈ B (X) entonces


1) f + g = f ∨ g + f ∧ g .
2) |f − g| = f ∨ g − f ∧ g .
Demostración. 1) Se sigue de que si máx {f (x) , g (x)} = f (x) entonces
mín {f (x) , g (x)} = g (x) y si máx {f (x) , g (x)} = g (x) entonces mín {f (x) , g (x)} =
f (x).
2) Se le dejara al lector como ejercicio, la demostración es directa haciendo
casos. 

Proposición 128. Sea A una subálgebra de B (X), entonces A es una subál-


gebra de B (X). Más aun f ∨ g ,f ∧ g ∈ A (X) para todo f, g ∈ A.
Demostración. Sean f, g ∈ A
α ∈ R, entonces existen sucesiones (fn ) y
y
(gn ) tales que convergen uniformemente a f y g respectivamente, por esto es fácil
ver que la familia {fn : n ∈ N } y {gn : n ∈ N } son uniformemente acotadas (toda
sucesión convergente es acotada en cualquier espacio métrico) por lo que existen M
4.3. ÁLGEBRAS 56

y N naturales tales que


 
sup sup |fn (x)| ≤M
n∈N x∈X
 
sup sup |gn (x)| ≤ N.
n∈N x∈X
Además por la convergencia uniforme, existe K∈N tal que si n>K entonces

|fn (x) − f (x)| < 


|gn (x) − g (x)| < 
para todo x ∈ X. Por ser A un álgebra entonces fn gn ∈ B (X). Veamos que fn gn
converge uniformemente a f g. Sea n > K entonces
|fn gn (x) − f g (x)| ≤ |fn gn (x) − fn g (x)| + |fn g (x) − f g (x)|
≤ |fn (x)| |gn (x) − g (x)| + |g (x)| |fn g (x) − f g (x)|
≤ M |gn (x) − g (x)| + N |fn g (x) − f g (x)| .
<  (N + M ) .
La desigualdad anterior no depende de x, por lo que fn gn converge uniforme-
mente a fg y por tanto f g ∈ A.
Es importante observar que la demostración anterior nos dice que el producto
de vectores es una función continua. Ahora veamos que αf ∈ A, esto se sigue de
que si n>K entonces

|αfn (x) − αf (x)| ≤ |α| |fn (x) − f (x)|


<  |α| .
Lo anterior no depende de x y por tanto (αfn ) converge uniformemente a αf y
αfn ∈ A por ser A un álgebra, con lo anterior tenemos que αf ∈ A. Es importante
observar que la demostración anterior nos dice que el producto de un vector por un
escalar es una función continua.
Para terminar de ver que es una subálgebra, necesitamos demostrar que f +g ∈
A, por ser A una álgebra se sigue que fn + gn ∈ A y observemos que

|fn + gn (x) − (f + g (x))| ≤ |fn (x) − f (x)| + |gn (x) − g (x)|


<  + .
Lo anterior no depende de x y por tanto (fn + gn ) converge uniformemente
a f + g, con lo anterior tenemos que f + g ∈ A. Es importante observar que la
demostración anterior nos dice que la suma de vectores es una función continua.
Demostremos que si logramos demostrar que |f | ∈ A para todo f ∈ A entonces
f ∧ g, f ∨ g ∈ A para todo f, g ∈ A.
Si suponemos que |f | ∈ A para todo f ∈ A entonces

(f + g) + |f − g|
∈A
2
(f + g) − |f − g|
∈ A,
2
por el Lema 127 tenemos que

(f + g) + |f − g| (f ∨ g + f ∧ g) + (f ∨ g − f ∧ g)
= =f ∨g ∈A
2 2
4.4. EL TEOREMA DE STONE-WEIERSTRASS 57

y
(f + g) − |f − g| (f ∨ g + f ∧ g) − (f ∨ g − f ∧ g)
= = f ∧ g ∈ A.
2 2
Por lo anterior solo tenemos que demostrar que |f | ∈ A para todo f ∈ A.
Sea f ∈ A. Veamos que para toda  > 0 existe g ∈ A tal que k|f | − gk∞ < 2 ,
con esto demostraríamos que |f | ∈ A = A. Sea M := kf k∞ y consideremos la
función |t| con dominio [−M, M ], por el teorema de aproximación de Weierstraÿ
existe un polinomio
n
X
p (t) = ak tk
k=0

tal que |p (t) − |t|| <
2 . Observemos que p (0) = |a0 | < 2 .
Tomemos la función g := p◦f y como f (x) ∈ [−M, M ] entonces |p (f (x)) − |f (x)|| <

2 y
n
X n
X
k k
p (f (x)) = ak f (x) = a0 + ak f (x) .
k=0 k=1
n
P k
Denamos g (x) := ak f (x) y debido a que A es un álgebra obtenemos que
k=1
g ∈ A. Por tanto

|g (x) − |f (x)|| = |p (f (x)) − a0 − |f (x)||


≤ |p (f (x)) − |f (x)|| + |a0 |
< .
Por tanto |f | ∈ A y con esto terminamos la prueba. 
Con este resultado podemos obtener un corolario directo.

Sea A una subálgebra de C 0 (K), entonces A es una subálge-


Corolario 129.
bra de C (K). Más aun f ∨ g ,f ∧ g ∈ C 0 (K) para todo f, g ∈ A.
0

Demostración. Como C 0 (K) es un subconjunto cerrado de B (X) (recorde-


mos que un subconjunto de un espacio completo es completo si y sólo si el sub-
conjunto es cerrado), entonces es fácil ver que la cerradura de A en C 0 (K) es la
misma que la cerradura de A en B (X). Usando la proposición anterior terminamos
la prueba del corolario. 

4.4. El teorema de Stone-Weierstraÿ


Con la sección anterior ya prácticamente tenemos los ingredientes para de-
mostrar el teorema de Stone-Weierstraÿ, pero para poderlo necesitar necesitamos
dos conceptos más, los cuales pediremos como hipótesis.

Definición 130. Sea A un conjunto de funciones con dominio un espacio métri-


co X y contradominio el campo R. A separa puntos si para todo x, y ∈ A tales que
x 6= y entonces existe una función f ∈ A tal que f (x) 6= f (y). A no se anula en ni
un punto si para todo x ∈ X existe f ∈ A tal que f (x) 6= 0.

Los dos conceptos nuevos que introducimos son fundamentales para la de-
mostración de teorema de Stone-Weierstraÿ, pero necesitamos un pequeño lema
relacionado con estos nuevos conceptos.
4.4. EL TEOREMA DE STONE-WEIERSTRASS 58

Lema 131. Sea A un álgebra de funciones con dominio un espacio métrico y


contradominio R, además supongamos que A separa puntos y no se anula en ni un
punto de X . Entonces dados x 6= y ∈ A y a, b ∈ R existe una función f ∈ A tal que
f (x) = a y f (y) = b.
Demostración. Como A separa puntos, existe g ∈ A tal que g (x) 6= g (y).
Además, como A no se anula en ni un punto, entonces existen funciones h, k ∈ A
tales que h (x) 6= 0 y k (y) 6= 0. Consideremos las funciones
u := gh − g (y) h
v := gk − g (x) k.
Por ser A álgebra u, v ∈ A. Además

u (y) = v (x) = 0
u (x) 6= 0 6= v (y) .
Finalmente la función
a b
f := u+ v
u (x) v (y)
es un elemento de A y
f (x) = a
f (y) = b.


Estamos por n listos para demostrar el teorema de Stone-Weierstraÿ.

Teorema 132. (teorema de Stone-Weierstraÿ) Sea A una subálgebra de C 0 (K),


K un espacio métrico compacto y además supongamos que A separa puntos y no
se anula en ni un punto de X . Entonces A es denso en C 0 (K).
Demostración. Supondremos que A es cerrado y que f ∨g ,f ∧g ∈ A (X) para
todo f, g ∈ A A = C 0 (K), Esto lo podemos hacer ya que se
y demostraremos que
A cumple las hipótesis entonces también A las cumple (por el Corolario 129). Con
lo anterior terminaremos ya que estaremos demostrando que si A es un álgebra que
0
cumple las hipótesis entonces A = C (K), lo que implica que A es denso.
La demostración la dividiremos en dos pasos.
Paso 1) Dados f ∈ C 0 (K) , k ∈ K y  > 0, entonces existe gk ∈ A tal que
gk (k) = f (k) y gx (y) > f (y) −  para todo y ∈ K .
Por el Lema 131 sabemos que si y 6= k entonces existe hy ∈ A tal que hy (k) =
f (k) y hy (y) = f (y) . La función hy − f es continua y se anula en k y y , por
continuidad, el conjunto

Uy := {x ∈ K : hy (x) > f (x) − }


es un conjunto abierto y además es claro que k, y ∈ Uy . Por tanto el conjunto
{Uy : y ∈ K \ {k}} es una cubierta abierta de K , por ser K compacto sabemos que
existe subcubierta abierta {Uyr : r ∈ {1, 2, 3, ..., n}} de {Uy : y ∈ K \ {k}} y sea

gk := hy1 ∨ hy2 ∨ ... hyn−2 ∨ hyn−1 ∨ hyn
Por inducción tenemos que gk ∈ A (ya que A es cerrado bajo ∨). Veamos que
gk es la función que buscamos.
4.5. SEPARABILIDAD DE C 0 (K) 59

Dado y 6= k, entonces y ∈ Uyr para algún r ∈ {1, 2, 3, ..., n}, por denición de
Uyr nosotros tenemos que

gk (y) ≥ hyr (y) > f (y) − .


Si y = k, entonces por denición hyr (k) = f (k), por lo que gk (k) = f (k) .
Paso 2) Dado f ∈ C 0 (K) y  > 0, existe una función h ∈ A tal que kf − hk∞ ≤
.
Por el paso 1, para todo k∈K existe gk ∈ A tla que gk (k) = f (k) y gk (x) >
f (x) − . Como en el paso 1, por continuidad, el conjunto

Vy := {x ∈ K : gy (x) < f (x) + }


es un conjunto abierto y además es claro que k, y ∈ Vy . Por tanto el conjunto
{Vy : y ∈ K \ {k}} es una cubierta abierta deK , por ser K compacto sabemos que
existe subcubierta abierta {Vyr : r ∈ {1, 2, 3, ..., m}} de {Uy : y ∈ K \ {k}} y sea

h := gy1 ∧ gy2 ∧ ... gym−2 ∧ gym−1 ∧ gym .
Por inducción tenemos que h ∈ A (ya que A es cerrado bajo ∧). Veamos
que h es la función que buscamos. Sea x ∈ K , como h (x) = gyr (x) para algún
r ∈ {1, 2, 3, ..., m}, entonces
(4.4.1) h (x) = gyr (x) > f (x) − .
Además x ∈ Vyr para algún r ∈ {1, 2, 3, ..., m}, por lo que

(4.4.2) h (x) ≤ gyr (x) < f (x) + .


Por (6.3.2) y (5.2.1) tenemos que

kf − hk∞ ≤ .
Por el paso 2 tenemos que f ∈ A = A. 
Una consecuencia directa del Teorema de Stone-Weierstraÿ es el teorema de
aproximación de Weierstraÿ, ya que los polinomios son un álgebra que separa puntos
y no se anulan en ni un punto.

4.5. Separabilidad de C 0 (K)


Una propiedad muy importante de R es que Q es denso y lo importante de esto
es que Q es numerable, esta propiedad se puede generalizar para cualquier espacio
métrico X .

Definición 133. Un espacio métrico (X, dX ) es separable si contiene un sub-


conjunto denso y numerable.

Ejemplo 134. i) Rn es separable, ya que el conjunto Qn es denso en Rn .


ii) Sea un conjunto X de cardinalidad no numerable y ddis la métrica discreta,
entonces (X, ddis ) no es separable. Esto se sigue de que si A ⊂ X es denso entonces
A = X.
Veremos que los espacios C 0 (K) son separable, pero para demostrar esto nece-
sitamos un lema previo.

Lema 135. Sea (K, dK ) un espacio métrico compacto, entonces (K, dK ) es


separable.
4.5. SEPARABILIDAD DE C 0 (K) 60

n ∈ N denimos la cubierta abierta Bn := B x, n1 : n ∈ N


 
Demostración. Para todo
de K, por ser K compacto, existe para toda n ∈ N una subcubierta nita
   
0
n 1
Bn := B xr , : r ∈ {1, 2, ..., sn } .
n
Veamos que el conjunto A := {xnr : r ∈ {1, 2, ..., sn } , n ∈ N} es numerable y
denso en K. Podemos ver al conjunto A como:
[
A := {xnr : r ∈ {1, 2, ..., sn }}
n∈N

Entonces A es unión numerable de conjuntos nitos, por lo tanto A es numerable


(esta es una consecuencia del axioma de elección y su demostración se puede ver
en casi todo libro que contenga teoría de conjuntos).
Solo nos falta demostrar que A es denso. Sea x ∈ K y  > 0, tenemos que
demostrar que A ∩ B (x, ) 6= ∅. Sabemos que existe n ∈ N tal que n1 <  y como
0
n 1

Bn es cubierta abierta, existe r ∈ {1, 2, ..., sn } tal que x ∈ B xr ,
n y por tanto
1
dK (x, xnr ) < <
n
es decir xnr ∈ A ∩ B (x, ). Con esto demostramos que A es denso. 
Con esto podemos demostrar que el espacio C 0 (K) es separable, más aun,
veremos que podemos tomar un subconjunto denso y numerable de funciones Lip-
schitz continuas. Lo importante de esto, es que podemos las funciones en C 0 (K)
por medio de las funciones Lipschitz continuas.

Teorema 136. Sea (K, dK ) un espacio métrico compacto y sea Lip (K) el con-
junto de las funciones Lipschitz continuas, entonces existe subconjunto numerable
A de Lip (K) tal que A es denso en C 0 (K). En particular C 0 (K) es separable.
Demostración. Veamos que el conjunto Lip (K) es una subálgebra de C 0 (K).
Sean f, g ∈ Lip (K) y α∈R y supongamos que a, b > 0 son reales tales que

|f (x) − f (y)| ≤ adK (x, y)


|g (x) − g (y)| ≤ bdK (x, y) .
Entonces

|f (x) + g (x) − (f (y) + g (y))| ≤ |f (x) − f (y)| + |g (x) − g (y)|


≤ (a + b) dK (x, y) .
Por tanto f + g ∈ Lip (K).
Además
|αf (x) − αf (y)| ≤ |α| adK (x, y) .
En consecuencia αf ∈ Lip (K) .
Por ultimo, como f y g son continuas con dominio un compacto, entonces |f |
esta acotado por M y |g| esta acotado por N , entonces
|f (x) g (x) − f (y) g (y)| ≤ |f (x) g (x) − f (x) g (y)| + |f (x) g (y) − f (y) g (y)|
= |f (x)| |g (x) − g (y)| + |g (y)| |f (x) − f (y)|
≤ M bdK (x, y) + N adK (x, y)
= (M b + N a) dK (x, y) ,
4.5. SEPARABILIDAD DE C 0 (K) 61

por lo que fg ∈ Lip (K). Con esto tenemos que Lip (K) es una subálgebra.
Ahora veamos que separa puntos y no se anula en ni un punto.
Dados x 6= y ∈ K , observemos que la función

dK (x, _) : X −→ R
es tal que d (x, x) = 0 y d (x, y) 6= 0, por lo que la función d (x, _) separa a x y a y,
además por la desigualdad del triangulo sabemos que

|dk (x, x1 ) − dk (x, x2 )| ≤ dK (x1 , x2 )


lo que implica que d (x, _) es Lipschitz continua. La función constante 1 también es
Lipschitz continua y no se anula en ni un punto, por el teorema de Stone-Weierstraÿ
Lip (K) es denso.
Para terminar la prueba demostraremos que Lip (K) es separable, con esto
tendremos que existe un subconjunto de Lip (K) que es denso y numerable en
Lip (K) y por tanto este subconjuto sera denso en C 0 (K) (ejercicio, Si A ⊂ B ⊂ C
son tales que A es denso en B y B es denso en C entonces A es denso en C ).
Denamos

An := {f ∈ Lip (K) : kf k∞ ≤ n y f tiene constante de Lipschitz ≤ n} .


El conjunto An es uniformemente acotado, por el Corolario 117 sabemos que si
(fk ) ⊂ An es una sucesión que converge a f , entonces f tiene constante de Lipschitz
≤ n y por continuidad de la norma Lim kfk k = kf k ≤ n. Por tanto f ∈ An , es decir
k→∞
An es cerrado. Es también fácil ver que An es equicontinuo. Dado  > 0, entonces
1
si dK (x, y) <
n  obtenemos que
|f (x) − f (y)| ≤ ndX (x, y) < 
para toda f ∈ An . Por el Teorema de Arzelà-Ascoli An es compacto y por elSlema
anterior An tiene un subconjunto denso y numerable Dn , por lo tanto D := Dn
S n∈N
es un subconjunto denso de An , pero es evidente que
n∈N
[
Lip (K) = An .
n∈N

Por tanto D es denso en C 0 (K).


Con esta pequeña aplicación del Teorema de Stone-Weierstraÿ terminamos este
Capítulo. Es importante decir que el estudio del espacio C 0 (X) tiene hoy en día
muchas preguntas abiertas, por lo que se siguen estudiando estos espacios. 
Capítulo 5

Funciones de variación acotada

Para estudiar la integral de Riemann-Stieltjes necesitamos una noción previa,


la cual aparecerá en muchas ocasiones en el manejo de la integral de Riemann-
Stieltjes. Las funciones de variación acotada, que por si solas tienen mucho interés,
les daremos una estructura de espacio normado, más aun su convergencia implicara
convergencia uniforme, por lo que se pueden estudiar convergencias uniforme desde
el espacio de las funciones con variación acotada.

5.1. Denición de función con variación acotada


Para motivar la denición de función de variación acotada, recordemos un poco
como es que en calculo se mide la longitud de una buena curva. Dada una curva
γ denida por f : [a, b] −→ R2 tal que f (t) = (x (t) , y (t)), (Recordemos que la
curva γ denida por f , es la graca de f ) la manera en que se pretende calcular
su longitud es aproximarla por medio de aproximaciones poligonales, es decir, para
toda partición P del intervalo,

P = {a = t0 < t1 < ... < tn−1 < tn = b}


n
P
deninimos la aproximación polinomial de f bajo P como kf (ti ) − f (ti−1 )k .
i=1
Entonces es natural denir la longitud de la curva γ como el supremo de las aprox-
imaciones polinomiales de f bajo particiones. Se puede observar que esta idea es
fácil de generalizarse a cualquier espacio métrico X, ya que solo necesitamos que
la función f tenga como contradominio un espacio métrico. La pregunta con mayor
interés que uno puede hacer es cuando esta longitud es nita y cuando no lo es, o
que se le debe de pedir a f para que su longitud sea nita.

Definición 137. Dada una función f : [a, b] −→ R y una partición

P = {a = t0 < t1 < ... < tn−1 < tn = b} .


Denimos la variación de f sobre P como
n
X
V (f, P ) := |f (ti ) − f (ti−1 )| .
i=1

Se puede observar que la denicion anterior solo mide la variación de las coor-
denadas y en la graca de la función f.
Proposición 138. Sea f : [a, b] −→ R y Q, P dos particiones de [a, b] y
supongamos que Q ⊃ P , en este caso diremos que Q es un renamiento de P.
Entonces
V (f, P ) ≤ V (f, Q) .

62
5.1. DEFINICIÓN DE FUNCIÓN CON VARIACIÓN ACOTADA 63

Demostración. La prueba se hace por inducción sobre la cardinalidad de


P \ Q, o en otras palabras, sobre la cantidad de puntos que le estamos agregando a
la partición P. Supongamos que Q = P ∪ {x}. Entonces existe k ∈ {1, 2, ..., n} tal
que
P = {a = t0 < t1 < ... < tn−1 < tn = b}
y
Q = {a = t0 < t1 < ...tk−1 < x < tk < ... < tn−1 < tn = b} .
Por tanto
n
X
V (f, P ) = |f (ti ) − f (ti−1 )|
i=1
X
= |f (ti ) − f (ti−1 )| + |f (tk ) − f (tk−1 )|
i∈{1,2,...,n}\{k}
 
X
≤ |f (ti ) − f (ti−1 )| + |f (tk ) − f (x)| + |f (x) − f (tk−1 )|
i∈{1,2,...,n}\{k}

= V (f, Q) .
El paso inductivo es totalmente trivial, ya que es directo de la transitividad del
≤. 
Definición 139. La variación total de una f : [a, b] −→ R se dene como el
supremos de V (f, P ) donde P es una partición de [a, b] y se denota pro Vab f . Si
Vab f < ∞ entonces diremos que la función f es de variación acotada.

Ejemplo 140. a) Toda función f : [a, b] −→ R monótona es de variación


acotada, más aun |f (a) − f (b)|.
b) toda función f : [a, b] −→ R Lipschitz continua, con constante de Lipschitz
k es de variación acotada, más aun, para cualquier partición P del [a, b] se tiene
que
n
X
V (f, P ) = |f (ti ) − f (ti−1 )|
i=1
Xn
≤ k (ti − ti−1 )
i=1
= k (b − a) ,
b
en consecuencia Va f < k (b − a) .
c) Toda función f (t) = (x (t) , y (t)) con longitud nita (recticable) entonces
x y y son de variación acotada, esto es debido a que
n
X n
X
|x (ti ) − x (ti−1 )| ≤ kf (ti ) − f (ti−1 )k
i=1 i=1
y
n
X n
X
|y (ti ) − y (ti−1 )| ≤ kf (ti ) − f (ti−1 )k .
i=1 i=1

Denotemos al conjunto de las funciones de variación acotada con dominio [a, b]


por BV [a, b]. Nos interesa ahora estudiar la estructura de BV [a, b]. Veamos primero
que las funciones de variación acotada son funciones acotas.
5.1. DEFINICIÓN DE FUNCIÓN CON VARIACIÓN ACOTADA 64

Lema 141. Sea f : [a, b] −→ R una función de variación acotada, entonces f


es acotada y más aun
kf k∞ ≤ |f (a)| + Vab f.
Demostración. Sea a≤x≤b y la partición P = {a, x, b}, entonces

|f (x)| − |f (a)| ≤ |f (x) − f (a)|


≤ V (f, P )
≤ Vab f
en consecuencia |f (x)| ≤ |f (a)| + Vab f y por tanto kf k∞ ≤ |f (a)| + Vab f. 
Después del lema anterior nace naturalmente la pregunta de que si toda fun-
ción acotada es de variación acotada, la respuesta es que no, para esto daremos el
siguiente ejemplo.

Ejemplo 142. Denamos una función f tal que f : (0, 1] −→ [0, 1] de la


siguiente manera.
h i
1 1
Para n ∈ N denimos f en el dominio
n+1 , n como la función tal que f
h i
2n+1 1 1

restringida al intervalo
2(n2 +n) , n es la recta que une al punto
n, 1 con el punto
  h i
2n+1 1 2n+1
2 , 0 y f restringida al intervalo ,
n 2(n2 +n) es la recta que une al punto
 2(n +n)  
1 2n+1 2n+1 1
n+1 , 1 con el punto 2(n2 +n) , 0 ( el número 2(n2 +n) es el punto medio de
n+1
1
y
n ). Es fácil ver que f es continua. Ahora denimos la función g : [0, 1] −→ [0, 1]
tal que
(
xf (x) si x ∈ (0, 1]
g (x) =
0 si x = 0.
Claramente g también es acotada y por ser producto de funciones continuas, g es
continua en el intervalo (0, 1]. Si (xn ) es una sucesión contenida en el [0, 1] tal que
Lim xn = 0. Debido a que |g (xn )| ≤ |xn | podemos concluir que Lim g (xn ) = 0 =
n→∞ n→∞
g (0). Lo anterior demuestra la continuidad de g en 0 y por tanto g es continua en
el [0, 1].
Ahora veamos que g no tiene variación acotada. Sea Pn la partición del [0, 1]
tal que
 
1 2n + 1 1 2 (n − 1) + 1 3 
Pn := 0, , 2
, ,   , ..., , 1
 n + 1 2 (n + n) n 2 (n − 1)2 + (n − 1) 4 

entonces  
n+1
 
X
1 2 (k − 1) + 1
V (g, Pn ) ≥ g k − g
  

2
k=1 2 (k − 1) + (k − 1)
n+1
X 1
=
k
k=1
n+1
1
P
Pero como
k se puede hacer tan grande como uno quiera (ya que la serie
k=1
1 1
P
k diverge) entonces V0 g = ∞.
k∈N

5.2. EL ESPACIO BV [a, b] , k·kBV 65

Como el conjunto BV [0, 1] ⊂ B ([0, 1]), uno podría tomarse la norma del supre-
mo, pero esta no es una buena elección ya que el espacio (BV [0, 1] , k·k∞ ) no es un
espació de Banach, lo anterior es debido a que la función g se le podría aproximar
por medio de funciones de variación acotada, para ser más exacto por medio de las
funciones fn denidas como
(
x ∈ n1 , 1
 
g (x) si
fn (x) := 1 
0 si x∈/ n, 1 .
Más adelante argumentaremos por que son de variación acotada, ahora obser-
vamos que
1
kfn − gk∞ = sup |g (x)| ≤ ,
x∈[0, n
1
] n
por lo que fn converge uniformemente a g, y g no es de variación acotada. Por lo
anterior es necesario encontrar otra norma para el espacio B [a, b]

5.2. El espacio (BV [a, b] , k·kBV )


Lema 143. Sean f, g ∈ BV [a, b] y c ∈ R entonces
i) Vab f = 0 si y solo si f es constante.
ii) Vab cf = |c| Vab f .
iii) Vab (f + g) ≤ Vab f + Vab g.
iv) Vab (f g) ≤ kf k∞ Vab g + kgk∞ Vab f.
v) Vab |f | ≤ Vab f.
vi) Vab f = Var f + Vrb f para a < r < b.
Demostración. i) ⇒) supongamos que Vab f = 0, entonces para todo x, y ∈
[a, b], supongamos que x < y , entonces tomamos la partición

P := {a ≤ x < y ≤ b}
por hipótesis sabemos que

0 = V (f, P )
|f (a) − f (x)| + |f (x) − f (y)| + |f (y) − f (b)| ,
lo que implica que f (x) = f (y). Por tanto f es constante.
⇐) si f es constante es inmediato que V (f, P ) = 0 para cualquier partición y
por tanto Vab f = 0.
Sea
P = {a = t0 < t1 < ... < tn−1 < tn = b}
partición de [a, b],
ii) observemos que
n
X
V (cf, P ) = |cf (ti ) − cf (ti−1 )|
i=1
n
X
= |c| |f (ti ) − f (ti−1 )|
i=1
= |c| V (f, P ) .
Por tanto Vab cf = |c| Vab f .

5.2. EL ESPACIO BV [a, b] , k·kBV 66

iii) Observemos que

n
X
V (f + g, P ) = |(f + g) (ti ) − (f + g) (ti−1 )|
i=1
Xn
≤ |f (ti ) − f (ti−1 )| + |g (ti ) − g (ti−1 )|
i=1
Xn n
X
= |f (ti ) − f (ti−1 )| + |g (ti ) − g (ti−1 )|
i=1 i=1
= V (f, P ) + V (g, P ) .

Por tanto Vab (f + g) ≤ Vab f + Vab g.


iv) Observemos que

n
X
V (f g, P ) = |(f g) (ti ) − (f g) (ti−1 )|
i=1
Xn
≤ |f g (ti ) − g (ti ) f (ti−1 )| + |g (ti ) f (ti−1 ) − f g (ti−1 )|
i=1
Xn
= |g (ti )| |f (ti ) − f (ti−1 )| + |f (ti−1 )| |g (ti ) − g (ti−1 )|
i=1
n
X n
X
≤ kgk∞ |f (ti ) − f (ti−1 )| + kf k∞ |g (ti ) − g (ti−1 )|
i=1 i=1
= kgk∞ V (f, P ) + kf k∞ V (g, P ) .

Por tanto (gracias a que el supremo se mete en las sumas de conjuntos) Vab (f g) ≤
b b
kf k∞ Va g + kgk∞ Va f.
v) Sabemos que gracias a la desigualdad del triangulo, para cualesquiera x, y ∈
[a, b]
|f (x) − f (y)| ≥ ||f (x)| − |f (y)|| ,
usando esta desigualdad obtenemos que

n
X
V (f, P ) = |f (ti ) − f (ti−1 )|
i=1
Xn
≥ ||f (ti )| − |f (ti−1 )||
i=1
= V (|f | , P ) .

Con lo que concluimos que Vab |f | ≤ Vab f.


vi) Por la proposición 138 y usando que P ⊂ P ∪ {r} := P 0 obtenemos que

V (f, P ) = V (f, P 0 ) .

Además existe k ∈ {1, 2, ..., n} tal que

Q = {a = t0 < t1 < ...tk−1 ≤ r ≤ tk < ... < tn−1 < tn = b}



5.2. EL ESPACIO BV [a, b] , k·kBV 67

y por tanto

k−1
! !
X
0
V (f, P ) = |f (ti ) − f (ti−1 )| + |f (tk−1 ) − f (r)| +
i=1
n
! !
X
+ |f (ti ) − f (ti−1 )| + |f (r) − f (tk )|
i=k
≤ Var f + Vrb f.
Con lo que concluimos que

(5.2.1) Vab f := sup V (f, P ) ≤ Var f + Vrb f.


P partición
Por otra parte, si Q es partición de [a, r] y Q0 es partición de [r, b] entonces
0
Q∪Q es una partición de [a, b] y además
V f[a,r] , Q + V f[r,b] , Q = V (f, Q ∪ Q0 )
 

por lo que

Var f + Vrb f = sup V (f, P ) + sup V (f, P 0 )


P partición en [a, r] P partición en [r, b]
= sup V (f, P ∪ P 0 )
(5.2.2) 0
P partición en [a, r]y P partición en [r, b]
≤ sup V (f, P ) = Vab f.
P partición en [a, b]
Por las desigualdades 5.2.1 y 5.2.2 concluimos que Vab f = Var f + Vrb f. 
Observemos que las propiedades i) y ii) del lema anterior, Vab f solo tendría
b
que cumplir que Va f = 0 si y solo si f = 0, pero por i) sabemos que esto no pasa.
Lo anterior no es tan grave ya que se puede hacer un pequeño arreglo para poder
obtener una norma.
Denimos la función k·kBV : BV [a, b] −→ R como

kf kBV := |f (a)| + Vab f.


Veamos que k·kBV es una norma.
n1) kf kBV = 0 si y sólo si |f (a)| + Vab f = 0 si y sólo si|f (a)| = 0 y Vab f = 0
por el Lema 143 lo anterior es cierto si y sólo si |f (a)| = 0 y f es constante, si y
f = 0.
sólo si
n2) Usando ii) del Lema 143 obtenemos que para todo λ∈R y f ∈ BV [a, b]
kλf kBV = |λf (a)| + Vab λf
= |λ| |f (a)| + |λ| Vab f
= |λ| |f (a)| + Vab f


= |λ| kf kBV .
n3) Sean f, g ∈ BV [a, b], entonces por iii) del Lema 143

kf + gkBV = |f (a) + g (a)| + Vab (f + g)


≤ |f (a)| + |g (a)| + Vab (f ) + Vab (g)
= kf kBV + kgkBV .
5.3. CARACTERIZACIÓN DE LAS FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA. 68

Con lo anterior obtenemos que k·kBV es una norma. Lo importante es que esta
norma hace que el espacio BV [a, b] sea completo y además si lim fn = f con la
n→∞
norma k·kBV , entonces lim kfn − f kBV = 0 y por el Lema 141 obtenemos que
n→∞
lim kfn − f k∞ = 0, es decir la convergencia en k·kBV implica la convergencia
n→∞
uniforme.

Teorema 144. El espacio normado (BV [a, b] , k·kBV ) es completo.


Demostración. Sea (fn ) una sucesión de Cauchy en BV [a, b], por lo que para
toda >0 existe un momento N ∈ N tal que si m, n > N entonces
kfn − fm kBV < .
Ahora usando el Lema 141 obtenemos que

kfn − fm k∞ < .
fn es de Cauchy en B ([a, b]) que es un espacio completo.
Por tanto la sucesión
Por tanto existe f ∈ B ([a, b]) tal que (fn ) converge uniformemente a f . Veamos
que f ∈ BV [a, b] y que (fn ) converge a f con la norma k·kBV .
Como (fn ) converge uniformemente a f , entonces (fn ) converge puntualmente
a f . Veamos que lim V (fn , P ) = V (f, P ) para cualquier partición.
n→∞
Sea P = {a = t0 < t1 < ... < tn−1 < tn = b}, entonces
n
X
lim V (fn , P ) = lim |fn (ti ) − fn (ti−1 )|
n→∞ n→∞
i=1
n
X
= lim |fn (ti ) − fn (ti−1 )|
n→∞
i=1
Xn
= |f (ti ) − f (ti−1 )|
i=1
= V (f, P ) .
Sea P una partición y n>N

|fn (a) − f (a)| + V (fn − f, P ) = lim (|fn (a) − fm (a)| + V (fn − fm , P ))


m→∞
≤ sup kfn − fm k
n,m>N
≤ .
Por tanto
|fn (a) − f (a)| + Vab (fn − f ) ≤ 
si n > N . observemos que de lo anterior se sigue que fn − f es de variación acotada,
por lo que (fn − f )+fn = f es de variación acotada y usando la ultima desigualdad
obtenemos que lim kfn − f kBV = 0. 
n→∞

5.3. Caracterización de las funciones de variación acotada.


Por el momento dejaremos de lado la estructura de las funciones de variación
acotada. Para poder comprender más que son las funciones de variación acotada
no es muy útil encontrar alguna caracterización adecuada. Lo anterior no es muy
5.3. CARACTERIZACIÓN DE LAS FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA. 69

difícil, uno tiene que observar que dada un función f ∈ BV [a, b] se puede denir la
función vf := v : [a, b] −→ R tal que
(
Vax f x ∈ (a, b]
v (x) =
0 x = 0.
Podemos entonces dar una caracterización de f usando v.
Teorema 145. Sea f ∈ BV [a, b], por tanto v := vf y v − f son funciones
crecientes. Además f es de variación acotada si y solo si es diferencia de funciones
crecientes.
Demostración. Primero demostremos que v := vf y v−f son funciones
crecientes. Sea x < y, entonces

v (y) − v (x) = Vay f − Vax f = Vxy f ≥ |f (x) − f (y)| ≥ 0,


por lo que v es creciente. De la desigualdad anterior también se sigue que

v (y) − v (x) ≥ f (y) − f (x)


es decir

v (y) − f (y) ≥ v (x) − f (x) .


Por tanto v−f es creciente.
Veamos ahora que f es de variación acotada si y solo si es diferencia de funciones
crecientes.
⇒) Por la primera parte de la demostración sabemos que v := vf y v−f son
funciones creciente y ademásf = v − (v − f ) .
⇐) Sea f una función tal que existen g y h funciones crecientes tales que
f = g − h. Sabemos que g, h ∈ BV [a, b] por lo que f = g − h ∈ BV [a, b]. 

La caracterización anterior se le conoce como el Teorema de Jordan.


Veamos ahora que existe una relación fuerte (en términos de continuidad) entre
las funciones f y vf .
Teorema 146. Sea f ∈ BV [a, b], entonces f es continua por la izquierda
(derecha) en x si y solamente v := vf es continua por la izquierda (derecha) en x.
Demostración. ⇐) Sabemos que v (y) − v (x) ≥ |f (y) − f (x)| para y > x,
lo que signica que (denotemos por f (y − ) := lim− f (x) y f (x+ ) := lim+ f (y)):
x→y y→x


− v (x) ≥ f y − − f (x)
 
v y
y

v (y) − v x+ ≥ f (y) − f x+ .
 

Por tanto. Si v es continua por la izquierda (derecha) en x0 implica que f es


continua por la izquierda (derecha) en x0 .
⇒) Ahora supongamos que f es continua por la derecha en x0 (se demuestra de
manera análoga cuando f es continua por la izquierda) entonces dado  > 0 existe
δ > 0 tal que si x0 ≤ t < x0 + δ entonces

|f (t) − f (x0 )| ≤ .
2
5.3. CARACTERIZACIÓN DE LAS FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA. 70


Tomemos una partición P de [x0 , b] tal que Vxb0 f −
2 ≤ V (f, P ) , en particular
como el agregar mas puntos hacemos que la variación crezca, podemos suponer que
P = {x0 = t0 < t1 < ... < tn−1 < tn = b} cumple con que t1 < x0 + δ por lo que

Vxb0 f − ≤ V (f, P )
2

≤ + Vtb1 f
2
y por tanto
 ≥ Vxb0 f − Vtb1 f = Vxt01 f = v (t1 ) − v (x0 ) .
Lo anterior nos garantiza la continuidad de v en x0 por la derecha. 
Aplicando este resultado podemos obtener un corolario importante.

Corolario 147. f ∈ C ([a, b]) ∩ BV [a, b] si y solamente si f se puede escribir


como la diferencia de dos funciones crecientes y continuas.
Con este ultimo resultado obtenemos lo que necesitamos saber sobre funciones
de variación acotada para poder aplicarlo a la integral de Riemann-Stieltjes.
Capítulo 6

La integral de Riemann-Stieltjes

En este capitulo extenderemos la noción de integración. La motivación principal


es que dada una función f : R −→ R la podamos integrar con respecto a otra función
α. Lo anterior tiene muchas aplicaciones, por ejemplo en física para denir el centro
de masa o en la probabilidad para estudiar características numéricas asociadas a
variables aleatorias. En particular, se denen los conceptos de esperanza, varianza
y más generalmente los momentos de una variable aleatoria.

6.1. Denición de la integral de Riemann-Stieltjes


Para iniciar esta sección debemos de jar notación para poder trabajar mas
fácil. Consideraremos funciones α : [a, b] −→ R crecientes no constantes y funciones
f : [a, b] −→ R acotada. Nuestro objetivo es poder denir la integral de Riemann-
Stieltjes
ˆ b
f dα.
a
Dada una partición P = {a0 := t0 < t1 < ... < tn = b} de [a, b] denotamos por
4αi = α (ti ) − α (ti−1 ) para i ∈ {1, 2, ..., n}. Por ser la función α creciente tenemos
Pn
que 4αi ≥ 0 y 4αi = α (b) − α (a). Denimos
i=1
mi := inf (f (x) : x ∈ [ti−1 , ti ]) ,
Mi := sup (f (x) : x ∈ [ti−1 , ti ]) ,
m := inf (f (x) : x ∈ [a, b]) ,
M := sup (f (x) : x ∈ [a, b]) .
Con la notación anterior podemos denir la suma superior de f sobre P y la
suma inferior de f sobre P como:
n
X
U (f, P ) := Uα (f, P ) := Mi 4αi ,
i=1
Xn
L (f, P ) := Lα (f, P ) := mi 4αi
i=1
respectivamente. Es inmediato que U (f, P ) ≥ L (f, P ) y usando propiedades de
supremo también es inmediato que −U (f, P ) = L (−f, P ). El lector podrá adivinar
que estamos interesados en el ínmo de las sumas superiores y el supremo de las
sumas inferiores, más aun lo que nos interesa es cuando estos números coinciden.
Pero para que lo anterior quede mas claro necesitamos un par de lemas.

Lema 148. Sean P ⊂ Q particiones de [a, b] entonces L (f, P ) ≤ L (f, Q) y


U (f, P ) ≥ U (f, Q).
71
6.1. DEFINICIÓN DE LA INTEGRAL DE RIEMANN-STIELTJES 72

Demostración. Solo demostraremos que L (f, P ) ≤ L (f, Q). la demostración


de que U (f, P ) ≥ U (f, Q) es totalmente análoga.
La demostración es por inducción sobre la cantidad de puntos que se le agregan
a P. El paso inductivo es totalmente trivial si demostramos la base de inducción,
por esto solo demostraremos la base de inducción.
Supongamos que

P = {a0 := t0 < t1 < ... < tn = b}


y

Q = {a0 := t0 < t1 < ... < tj−1 < x0 < tj < ... < tn = b} .
Entonces
n
X
L (f, P ) = mi 4αi
i=1
n
(6.1.1) X
= mi 4αi + mj 4αj .
i=1
i6=j

Usando la desigualdad infA ∪ B ≤ infB y (6.4.1) llegamos a que


n
X
L (f, P ) = mi 4αi + mj 4αj
i=1
i6=j
n
X
= mi 4αi + mj (α (ti ) − α (x0 ) + α (x0 ) − α (ti−1 ))
i=1
i6=j
n
X
≤ mi 4αi + inf (f (x) : x ∈ [ti−1 , x0 ]) (α (x0 ) − α (ti−1 )) +
i=1
i6=j

+ inf (f (x) : x ∈ [x0 , ti ]) (α (ti ) − α (x0 ))


= L (f, Q) .
Por lo anterior queda demostrado la base de inducción y por tanto el Lema. 
Corolario 149. Dadas P y Q particiones de [a, b] entonces L (f, P ) ≤ U (f, Q) .
Demostración. L (f, P ) ≤ L (f, P ∪ Q) ≤ U (f, P ∪ Q) ≤ U (f, Q). 
Con lo anterior podemos denir la integral superior de Riemann-Stieltjes como:
ˆ b
f dα := infU (f, P )
a P

y a integral inferior de Riemann-Stieltjes como:


ˆ b
f dα := supL (f, P ) .
a P
6.1. DEFINICIÓN DE LA INTEGRAL DE RIEMANN-STIELTJES 73

´b ´b
Por el corolario anterior es claro que
a
f dα y
a
f dα existe y

ˆ b ˆ b
f dα ≤ f dα.
a a

Si la desigualdad anterior es una igualdad, entonces diremos que la función f


es Riemann-Stieltjes integrable con respecto a α en [a, b] y denimos la integral de
Riemann-Stieltjes de f con respecto a α en [a, b] como:
ˆ b ˆ b ˆ b
f dα = f dα = f dα.
a a a

Observemos el siguientes ejemplo para poder comprender más esta nueva inte-
gral.

Ejemplo 150. a) Sea c una función constante y α cualquier función creciente.


Dada cualquier partición P de [a, b], entonces
n
X
U (f, P ) = Mi 4αi
i=1
Xn
=c 4αi
i=1
= c (α (b) − α (a))
n
X
= mi 4αi
i=1
= L (f, P ) .
Por tanto
ˆ b
cdα = c (α (b) − α (a)) .
a
Denimos el conjunto Rα [a, b] como el conjunto de las funciones acotadas que
son Riemann-Stieltjes en [a, b] con respecto a la función α, en particular si α =
1 entonces solo escribimos R [a, b] que coincide con el conjunto de las funciones
acotadas que son Riemann integrables.
El calculo de la integra de Riemann-Stieltjes no es fácil en general, por esto es
que necesitamos una condición de integrabilidad que nos facilite de alguna forma
el saber si algo f es Riemann-Stilthes integrable con respecto a α.
Teorema 151. (Condición de Riemann) Sea α creciente en [a, b]. Una función
f : [a, b] −→ R acotada esta en Rα [a, b] si y solo si para toda  > 0 existe partición
P tal que U (f, P ) − L (f, P ) < .
Demostración. ⇒) Supongamos que f ∈ Rα [a, b], entonces existen parti-
ciones P y Q tales que
ˆ b ˆ b

U (f, P ∪ Q) − f dα < U (f, P ) − f dα <
a a 2
y
ˆ b ˆ b

f dα − L (f, P ∪ Q) < f dα − L (f, Q) < .
a a 2
6.2. EL ESPACIO DE LAS FUNCIONES INTEGRABLES 74

De lo anterior es inmediato que

U (f, P ∪ Q) − U (f, P ∪ Q) < .


⇐) Sea P partición tal que U (f, P ) − L (f, P ) < , entonces

ˆ b ˆ b
f dα − f dα ≤ U (f, P ) − L (f, P ) < .
a a

Como  es cualquier número positivo, concluimos que

ˆ b ˆ b
f dα = f dα
a a

y por tanto f ∈ Rα [a, b]. 

Un corolario importante es que toda función continua sera Riemann-Stieltjes


integrable con respecto a cualquier función creciente.

Corolario 152. C ([a, b]) ⊂ Rα [a, b] para cualquier función α creciente.


Demostración. Sea f ∈ C ([a, b]), por ser continua en un compacto sabemos
que f es uniformemente continua. Por lo que dado  > 0 existe δ > 0 tal que si
|x − y| < δ entonces |f (x) − f (y)| < . De lo anterior se sigue que si [c, d] ⊂ [a, b]
es un intervalo tal que d − c < δ entonces para todo x, y ∈ [c, d] se sigue que

f (y) − f (x) ≤ |f (x) − f (y)| < 


por tanto

(6.1.2) inf (f (y) : y ∈ [c, d]) <  + sup (f (x) : x ∈ [c, d])
Sea P una partición tal que |ti − ti−1 | < δ para todo ti ∈ P . Usando (6.1.2)
llegamos a que

n
X n
X
U (f, P ) − L (f, P ) = Mi 4αi − mi 4αi
i=1 i=1
n
X
= (Mi − mi ) 4αi
i=1
Xn
< 4αi =  (α (b) − α (a)) .
i=1

Por tanto f cumple la condición de Riemann lo que implica que f ∈ Rα [a, b].


6.2. El espacio de las funciones integrables


Nos interesa ahora darle una estructura al espacio de las funciones integrables
con respecto a una función creciente α. Queremos en particular ver que relación
existe entre la integral de Rieman-Stieltjes y la convergencia uniforme.
Primero veremos varias propiedades básicas de el espacio Rα [a, b], en particular
demostraremos que tiene una estructura de álgebra.
6.2. EL ESPACIO DE LAS FUNCIONES INTEGRABLES 75

Teorema 153. Sean f, g ∈ Rα [a, b] y c ∈ R entonces:


´ ´
i) cf ∈ Rα [a, b] y c ab f dα = ab cf dα.
´ ´ ´
ii) f + g ∈ Rα [a, b] y ab f + gdα = ab f dα + ab gdα.
´ ´
iii) ab f dα ≤ ab gdα si f ≤ g.
´ ´
iv) |f | ∈ Rα [a, b] y ab f dα ≤ ab |f | dα ≤ kf k∞ (α (b) − α (a)) .
´b ´  21 ´  12
v) f g ∈ Rα [a, b] y a
f gdα ≤
b
a
f dα
b
a
gdα .

Demostración. Sea P partición de [a, b]


i) c ≥ 0 entonces U (cf, P ) = cU (f, P ) y L (cf, P ) = cL (f, P ), de esto es
Sea
´b ´b
inmediato que cf ∈ Rα [a, b] y c f dα = a cf dα.
a
Si c < 0 entonces usando que sup (cA) = |c| sup (−A) = − |c| inf (A) = cinf (A)
obtenemos que

U (cf, P ) = |c| U (−f, P ) = − |c| L (f, P ) = cL (f, P )


y de manera análoga

L (cf, P ) = |c| L (−f, P ) = − |c| U (f, P ) = cU (f, P ) ,


restando las igualdades anteriores llegamos a que

U (cf, P ) − L (cf, P ) = c (L (f, P ) − U (f, P )) .


El término de la derecha se puede hacer tan pequeño como uno quiera, por lo
que cf cumple la condición de Riemann y por tanto cf ∈ Rα [a, b]. Además por lo
ya demostrado
ˆ b
cf dα = supL (f, Q)
a Q
= supcU (f, Q)
Q
= |c| sup [−U (f, Q)]
Q
= |c| inf [U (f, Q)]
Q
ˆ b
= |c| f dα.
a
i).
Con la igualdad anterior terminamos
ii) Usando que sup (A + B) ≤ sup (A) + sup (B) y que inf (A + B) ≥ sup (A) +
sup (B) obtenemos que para cualesquiera dos particiones P, Q

L (f, P ) + L (f, Q) ≤ L (f, P ∪ Q) + L (g, P ∪ Q)


≤ L (f + g, P ∪ Q)
≤ U (f + g, P ∪ Q)
≤ U (f, P ∪ Q) + U (g, P ∪ Q)
≤ U (f, P ) + U (g, Q) .

Como podemos tomar a P y Q independientemente, obtenemos (aplicando


supremo e ínmo)
6.2. EL ESPACIO DE LAS FUNCIONES INTEGRABLES 76

ˆ b ˆ b ˆ b
f dα + gdα ≤ f + gdα
a a a
ˆ b
≤ f + gdα
a
ˆ b ˆ b
≤ f dα + gdα
a a
Lo que termina la demostración ya que f, g ∈ Rα [a, b] .
iii) Usando la propiedad de que si dado x ∈ A existe y ∈ B tal que x < y
entonces supA ≤ supB , ya que gracias a esto

U (f, P ) ≤ U (g, p)
y por tanto
ˆ b ˆ b
f dα ≤ gdα.
a a

iv) Usando que ||f (x)| − |f (y)|| ≤ |f (x) − f (y)| obtenemos que sup |f (A)| −
inf |f(B)| ≤ supf (A) − inff (B) y por tanto
U (|f | , P ) − L (|f | , P ) ≤ U (f, P ) − L (f, P ) .
En consecuencia |f | cumple la condición de Riemann y por tanto |f | ∈ Rα [a, b].
Además debido a que −f, f ≤ |f | ≤ kf k∞ y a iii) obtenemos que
ˆ ˆ ˆ b
b b
f dα ≤ |f | dα ≤ kf k∞ dα = kf k∞ (α (b) − α (a)) .


a a a

v) Primero demostremos que f 2 ∈ Rα [a, b]. Debido a que

f 2 (x) − f 2 (y) = (f (x) + f (y)) (f (x) − f (y)) ≤ 2 kf k∞ (f (x) − f (y))




concluimos que

U f 2 , P − L f 2 , P ≤ 2 kf k∞ (U (f, P ) − L (f, P )) ,
 

por lo que f cumple la condición de Riemann y por tantof 2 ∈ Rα [a, b]. Ahora
2 2
observemos que 4f g = (f + g) −(f − g) , por i) y ii) obtenemos que 4f g ∈ Rα [a, b]
y por tanto f g ∈ Rα [a, b]. 

Por el Teorema anterior tenemos que Rα [a, b] es un álgebra, más aun Rα [a, b]
es una subalgebra de B ([a, b]), En este caso contrario con el espacio de funciones de
variación acota, (Rα [a, b] , k·k∞ ) resulta ser un espacio completo. Más aun, la con-
vergencia uniforme implica la convergencia de las integrales de Riemann-Stieltjes.

Teorema 154. Sea (fn ) ∈ Rα [a, b] una sucesión de funciones tales que con-
vergen uniformemente a f , entonces f ∈ Rα [a, b] y
ˆ b ˆ b
lim fn dα = f dα.
n→∞ a a

Demostración. Sea  > 0, entonces existe un momento N ∈ N tal que si n≥


N entonces kfn − f k∞ < . Usando la condición de Riemann sabemos que existe
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 77

una partición P tal que U (fN , p) − L (fN , P ) < . Dados dos puntos t, s ∈ [a, b] por
la desigualdad del triangulo obtenemos

|f (s) − f (t)| ≤ |f (s) − fN (s)| + |fN (s) − fN (t)| + |fN (t) − f (t)|
(6.2.1)
≤ |fN (s) − fN (t)| + 2.
Denotemos
mN
i := inf (fN (x) : x ∈ [ti−1 , ti ]) ,

MiN := sup (fN (x) : x ∈ [ti−1 , ti ]) .


Entonces es directo de la ecuación 6.2.1 que Mi − mi ≤ MiN − mN
i + 2 y por
tanto
n
X
U (f, P ) − L (f, P ) = (Mi − mi ) 4αi
i=1
Xn n
X
MiN − mN

≤ i 4αi + 2 4αi
i=1 i=1
= U (fN , P ) − L (fN , P ) + 2 (α (b) − α (a))
≤  + 2 (α (b) − α (a)) .
Por consiguiente f cumple la propiedad de Riemann y concluimos que f ∈
Rα [a, b].
Para demostrar la última parte de teorema observemos que
ˆ ˆ
b b
fn − f dα ≤ |fn − f | dα


a a
ˆ b
≤ kfn − f k∞ dα
a
= kfn − f k∞ (α (b) − α (a)) −→ 0.
n→∞
´b ´b
Y por tanto lim fn dα = f dα. 
n→∞ a a

Una observación importante del teorema anterior es que el espacio de las fun-
ciones continuas C [a, b] ⊂ Rα [a, b] es un subespacio cerrado.

6.3. Integrar con respecto a funciones de variación acotada


Ya que tenemos estudiado las principales propiedades de la integral de Riemann-
Stieltjes con respecto a funciones creciente, podemos extender esta denición y aho-
ra permitirnos integrar sobre funciones que son diferencias de funciones crecientes,
es decir con respecto a funciones de variación acotada. Un problema es evidente, si
denimos de la misma manera las sumas superiores e inferiores, estas ya no serán
monótonas, lo que trae consigo la necesidad de denir un suevo tipo de sumas
sobre particiones.
Consideremos dos funciones f, α ∈ B ([a, b]). Dada una partición

P = {a = t0 < t1 < ... < tn = b}


y una selección de puntos

T = (r1 , r2 , ..., rn )
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 78

tales que ri ∈ [ti−1 , ti ]. Consideramos la suma

n
X
S (f, P, T ) = f (ri ) 4αi
i=1

la cual es llamada una suma de Riemann-Stieltjes para f con respecto a α.

Definición 155. Dada un par de funciones f, α : [a, b] −→ R, diremos que f es


integrable Riemann-Stieltjes con respecto a α I tal que para toda
si existe un real

>0 existe una partición P tal que para todo renamiento P de P y cualquier
selección de puntos T sobre la partición P∗ se cumple que

|I − S (f, P ∗ , T )| < .
´b
El número I se denota por
a
f dα.

Si la función α es creciente entonces es inmediato que dada cualquier partición


P y cualquier selección de puntos T

L (f, P ) ≤ S (f, P, T ) ≤ U (f, P )

de lo que es inmediato que la primera denición que dimos de integrabilidad implica


la nueva, veamos que si f es Riemann integrable bajo la nueva denición implica
la primera denición.
Sea  > 0, entonces existe una partición P tal que para todo renamiento P∗
de P y cualquier selección de puntos T sobre la partición P∗ se cumple que


|I − S (f, P ∗ , T )| < .
2

En particular si T y T0 son dos selecciones de puntos de P∗ entonces

|S (f, P ∗ , T ) − S (f, P ∗ , T 0 )| < 

Fijemos una selección de puntos de P, entonces

P = {a = t0 < t1 < ... < tn = b}

y podemos denir ri ∈ [t1 , ti − 1] tal que

f (ri ) − inf (f (x) : x ∈ [ti−1 , ti ]) = f (ri ) − mi


(6.3.1) 
< ,
2n
0
para i ∈ {1, 2, 3, ..., n} y ri ∈ [t1 , ti − 1] tal que

 0  0
sup (f (x) : x ∈ [ti−1 , ti ]) − f ri = Mi − f ri
(6.3.2)

< .
2n
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 79

n 0 0 0
o
Denotemos T := {r1 , r2 , ..., rn } y T 0 := r1 , r2 , ..., rn Usando las desigual-

dades 6.3.1 y 6.3.2 concluimos que

n
X
U (f, P ) − L (f, P ) = (Mi − mi ) 4αi
i=1
Xn   0    0   
= Mi − f ri + f ri − f (ri ) + (f (ri ) − mi ) 4αi
i=1
n 
X    0 
≤ + f ri − f (ri ) 4αi
i=1
n
n    
X 0
= (α (b) − α (a))  + f ri − f (ri ) 4αi
i=1
= (α (b) − α (a))  + S (f, P, T ) − S (f, P, T 0 )
≤ (α (b) − α (a))  + .
Por tanto f cumple la condición de Riemann y por tanto es integrable bajo
la primera denición. Lo anterior muestra que nuestra denición de integrabilidad
extiende adecuadamente a nuestra primera denición, en la cual necesitábamos que
α fuera creciente.
Nuevamente queremos obtener los resultados de la sección anterior pero ahora
donde α no es necesariamente creciente. En particular el ver que el espacio Rα [a, b]
es un espacio vectorial es ahora mucho mas fácil, esto es debido a que dadas f, g ∈
Rα [a, b] y c, d ∈ R
S (cf + dg, P, T ) = cS (f, P, T ) + dS (g, P, T )
y por tanto

ˆ b ˆ b
!
ˆ b

S (cf + dg, P, T ) − c f dα + d f dα ≤ cS (f, P, T ) − c f dα +

a a a

ˆ b


+ dS (g, P, T ) − d f dα

a

ˆ b

= |c| S (f, P, T ) − f dα +

a

ˆ b


+ |d| S (g, P, T ) − f dα ,

a

el lado de la derecha de la igualdad se puede hacer tan pequeño como uno quiera,
por tanto
ˆ b ˆ b ˆ b
(cf + dg) dα = c f dα + d gdα.
a a a
Para demostrar otras de las propiedades que podemos esperar de esta integral,
es útil tener una manera de manejar con mayor facilidad la integral, demostraremos
la formula de integración por partes para funciones Riemann-Stieltjes.
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 80

Teorema 156. f ∈ Rα [a, b] si y solo si α ∈ Rf [a, b], en tal caso


ˆ b ˆ b
f dα + αdf = f (b) α (b) − f (a) α (a) .
a a

Demostración. Para demostrar el si y solo si, solo es necesario demostrar


una implicación. Tomemos f ∈ Rα [a, b] y  > 0, entonces sea P∗ la partición tal

que para todo renamiento P de P y toda T

ˆ b

S (f, P, T ) − f dα < .

a
Observemos que
n
X
S (α, P, T ) = α (ri ) (f (ti ) − f (ti−1 ))
i=1
n
X n−1
X
= α (ri ) f (ti ) − α (ri+1 ) f (ti )
i=1 i=0
Xn
=− f (ti ) (α (ri+1 ) − α (ri )) + (f (b) α (rn+1 ) − f (a) α (r0 )) .
i=1

Donde rn+1 = b y r0 = a, si denotamos T 0 = P y P 0 = {a = r0 < r1 ... < rn+1 = b}


entonces
S (α, P, T ) = f (b) α (b) − f (a) α (a) − S (f, P 0 , T 0 ) .
0
Lo anterior es cercano a lo que buscamos, Sea P renamiento de P, entonces
n
X
S (f, P 0 , T 0 ) = f (ri ) (α (ti ) − α (ti−1 ))
i=1
Xn n
X
= f (ri ) (α (ti ) − α (ri )) + f (ri ) (α (ri ) − α (ti−1 ))
i=1 i=1
= S (f, P 00 , T 00 )
donde
P 00 := {t0 , r1 , t1 , ...}
y
T 00 := {r1 , r1 , r2 , r2 , ...} .
Por tanto

ˆ b
! ˆ
b


0 0
S (α, P, T ) − f (b) α (b) − f (a) α (a) − f dα = f dα − S (f, P , T )

a a
ˆ
b
00 00
= f dα − S (f, P , T )

a
< .
Lo que demuestra el teorema. 
Esta formula de integración por partes nos permite obtener resultados intere-
santes de una manera inmediata.
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 81

Corolario 157. a) Si f ∈ Rα [a, b] ∩ Rβ [a, b] entonces f ∈ Rα±β [a, b] y


ˆ b ˆ b ˆ b
f d (α ± β) = f dα ± f dβ.
a a a

b) Si f es monótona y α continua entonces f ∈ Rα [a, b] .


c) Si α ∈ BV [a, b] entonces C ([a, b]) ⊂ Rα [a, b].
d) Si α ∈ C ([a, b]) entonces BV [a, b] ⊂ Rα [a, b].
Demostración. a) f ∈ Rα [a, b] ∩ Rβ [a, b],
Supongamos que entonces por el
Teorema 156 tenemos que α, β ∈ Rf [a, b] y
ˆ b ˆ b
f dα + αdf = f (b) α (b) − f (a) α (a)
a a
ˆ b ˆ b
f dβ + βdf = f (b) β (b) − f (a) β (a) .
a a

Por lo que α ± β ∈ Rf [a, b] y nuevamente por el Teorema 156 concluimos que


f ∈ Rα±β [a, b] y además
ˆ b ˆ b ˆ b
f dα + f dβ = f (b) α (b) − f (a) α (a) − αdf +
a a a
ˆ b
+ f (b) β (b) − f (a) β (a) − βdf
a
= f (b) (α (b) + β (b)) − f (a) (α (a) + β (a)) −
ˆ b
− (α + β) df
a
ˆ b
= f d (α + β) .
a

Análogamente
ˆ b ˆ b ˆ b
f dα − f dβ = f d (α − β) .
a a a
b) Si f es monótona entonces f o −f es creciente, por lo que α ∈ Rf [a, b] o
α ∈ R−f [a, b], por el Teorema 156 obtenemos que f ∈ Rα [a, b] o −f ∈ Rα [a, b], lo
que demuestra el resultado.
c) Siα ∈ BV [a, b] entonces por el teorema de Jordan sabemos que existen
funciones crecientes u y v tales que α = u − v . Tomemos f ∈ C ([a, b]), entonces
al ser u y v monótonas, f ∈ Ru [a, b] y f ∈ Rv [a, b], por el Teorema 156 f ∈
Ru−v [a, b] = f ∈ Rα [a, b] y por tanto C ([a, b]) ⊂ Rα [a, b].
d) Si α ∈ C ([a, b]) y f ∈ BV [a, b] entonces existen funciones monótonas u, v
tales que f = u − v , por b) u, −v ∈ Rα [a, b] y por tanto f = u − v ∈ Rα [a, b]. Con
lo anterior concluimos que BV [a, b] ⊂ Rα [a, b] . 

Por los corolarios anteriores, uno puede esperar obtener información de espacio
Rα [a, b] con α ∈ BV [a, b] a partir de la descomposición de Jordan de α, es decir si
α = u − v con u y v monótonas uno puede esperar obtener información del espacio
Rα [a, b] con los espacios Ru [a, b] y Rv [a, b]. Más aun, demostraremos que
Rα [a, b] = Ru [a, b] ∩ Rv [a, b]
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 82

con lo que demostraremos que Rα [a, b] es un álgebra que es cerrado bajo los máx-
imos y mínimos.

Teorema 158. Sea α ∈ BV [a, b] y v (x) = Vax (α) (recuérdese que v y v − α


son crecientes) entonces
Rα [a, b] = Rv [a, b] ∩ Rv−α [a, b] .

Demostración. Por el Corolario anterior a) sabemos que si f ∈ Rv [a, b] ∩


Rv−α [a, b] entonces f ∈ Rα [a, b]. Por lo que solo es necesario demostrar que

Rα [a, b] ⊂ Rv [a, b] ∩ Rv−α [a, b] .

Más aun, si demostramos que Rα [a, b] ⊂ Rv [a, b], entonces también por el Coro-
lario anterior a) tendríamos que Rα [a, b] ⊂ Rv [a, b]. Por tanto solo demostraremos
que Rα [a, b] ⊂ Rv [a, b].
Sea f ∈ Rα [a, b], al ser α de variación acotada, sabemos que para  > 0
sucientemente pequeña existe una partición P tal que para todo renamiento

P 0 = {a = x0 < x1 <, ..., < xn = b} ⊃ P

se cumple que

v (b) − v (a) = Vab (α) ≥ V (f, α) ≥ Vab (α) −  > 0


ya que α no es constante, de lo anterior concluimos que

0 ≤ v (b) − v (a) − V (f, α)


n
X n
X
= ∆vi − |∆αi |
i=1 i=1
n
X
= (∆vi − |∆αi |)
i=1
< .

Además, como f ∈ Rα [a, b] podemos pedir que la misma partición P cumple


que para todo renamiento P 0 ⊃ P y toda elección de puntos T
ˆ b

0

S (f, P , T ) − f dα < ,

a 2

por lo que para todo P 0 , P 00 renamientos de P y T 0 , T 00 elección de puntos con


0 00
respecto a P y P respectivamente obtenemos

|S (f, P 0 , T 0 ) − S (f, P 00 , T 00 )| < .

Si jamos un renamiento P0 de P y dos elecciones de puntos

T = {t1 , t2 , ..., tn }
T 0 = {t∗1 , t∗2 , ..., t∗n }
6.3. INTEGRAR CON RESPECTO A FUNCIONES DE VARIACIÓN ACOTADA 83

tales que f (ti )−f (t∗i ) tiene el mismo signo que ∆αi y |f (ti ) − f (t∗i )| ≥ Mi −mi −,
entonces
n
X
S (f, P 0 , T ) − S (f, P 0 , T 0 ) = (f (ti ) − f (t∗i )) ∆αi
i=1
n
X
≥ (Mi − mi − ) |∆αi |
i=1
Xn
≥ (Mi − mi ) |∆αi | − Vab α.
i=1

Ahora observemos la diferencia de la suma superior e inferior de v con respecto


a P0
n
X
U (f, P ) − L (f, P ) = (Mi − mi ) ∆vi
i=1
Xn n
X
= (Mi − mi ) (∆vi − |∆αi |) + (Mi − mi ) (|∆αi |)
i=1 i=1
≤ 2 kf k∞  + S (f, P 0 , T ) − S (f, P , T ) + Vab α0 0

≤ 2 kf k∞  +  + Vab α.

Por tanto f ∈ Rv [a, b] . 

Con el teorema anterior tenemos el siguiente resultado.

Corolario 159. Dada α ∈ BV [a, b] entonces el espacio Rα [a, b] es un álgebra


de Banach, además Rα [a, b] es cerrado bajo máximos y mínimos.
Ahora daremos un par de resultados importantes que nos permitirán más ade-
lante obtener resultados análogos a los Teoremas fundamentales del calculo.

Teorema 160. Sea α ∈ BV [a, b], entonces para toda función f ∈ Rα [a, b]
ˆ ˆ
b b
f dα ≤ |f | dv ≤ kf k∞ Vab α.


a a

Demostración. Por el Teorema y Corolario anteriores tenemos que f ∈ Rv [a, b]


´b ´b
y |f | ∈ Rv [a, b], por tanto las integrales
a
f dα, a
|f | dv existen. Es claro que

|α (y) − α (x)| ≤ v (y) − v (x)

para todo x < y, por tanto

n
X
|Sα (f, P, T )| ≤ |f (ti )| |∆αi |
i=1
Xn
≤ |f (ti )| ∆vi
i=1
= Sv (|f | , P, T ) .
6.4. RELACIÓN DE LA INTEGRAL DE RIEMANN Y LA INTEGRAL DE RIEMANN-STIELTJES.
84

Con lo que concluimos que


ˆ ˆ
b b
f dα ≤ |f | dv


a a
ˆ b
≤ kf k∞ dv
a
= kf k∞ (v (b) − v (a))
= kf k∞ Vab α.


Corolario 161. Dada una función α ∈ BV [a, b], la función L : C ([a, b]) −→
R denida como
ˆ b
L (f ) = f dα
a
es continua y lineal.
Dada una función f ∈ C ([a, b]), la función T : BV [a, b] −→ R denida como
ˆ b
T (α) = f dα
a

es continua y lineal.
Demostración. La linealidad de L y T es inmediata con los resultados de
esta sección, solo nos falta ver que son continuas. Por ser funciones lineales lo que
necesitamos demostrar es que son acotadas, usando el teorema anterior tenemos
que
ˆ
b
f dα ≤ kf k∞ Vab α ≤ kf k∞ kαkBV .


a
Lo que demuestra el resultado. 

6.4. Relación de la integral de Riemann y la integral de


Riemann-Stieltjes.
El resultado principal de esta pequeña sección sera el poder reducir una in-
tegral de Riemann-Stieltjes en una integral de Riemann. Para ser mas exactos, si
suponemos que f ∈ Rα [a, b] y α es derivable, entonces
ˆ b ˆ b
(6.4.1) f dα = f (x) α0 (x) dx.
a a

En particular si f es diferenciable tendríamos que


ˆ b ˆ b
0
f dx = 1df = f (b) − f (a) .
a a

La importancia de (6.4.1) es poder en ciertas ocasiones poder trabajar la in-


tegral de Riemann-Stieltjes sin la necesidad de denirla. Ahora pasemos a la de-
mostración de (6.4.1).
6.4. RELACIÓN DE LA INTEGRAL DE RIEMANN Y LA INTEGRAL DE RIEMANN-STIELTJES.
85

Teorema 162. Supongamos que α es derivable y α0 es Riemann integrable (y


acotada) en [a, b]. Entonces dada una función acotada f en [a, b], entonces f ∈
Rα [a, b] si y solo si f α0 es Riemann integrable y en tal caso
ˆ b ˆ b
f dα = f (x) α0 (x) dx.
a a
Denotemos las sumas de Riemann para la integral de Riemann por S (f, P, T ).
Dado  > 0, al ser α0 Riemann integrable existe una partición P tal que todo
renamiento P 0 de P
UId (α0 , P 0 ) − LId (α0 , P 0 ) < .
Demostración. En particular si T = {t1 , ..., tn } y T = {t∗1 , ..., t∗n } son selec-
0
ciones de puntos sobre P tal que el signo de ∆αi es positivo, entonces
n
X
|∆αi0 | ∆xi < .
i=1

Usando el teorema del valor medio observamos que


n
X
Sα (f, P, T ) = f (ti ) ∆αi
i=1
Xn
= f (ti ) α0 (si ) ∆xi
i=1

para si ∈ [xi−1 , xi ] P = {x0 , ..., xn } . Entonces ur


donde
n
X
0 0 0
|Sα (f, P, T ) − S (f α , P, T )| = f (ti ) α (si ) ∆xi − f (ti ) α (ti ) ∆xi


i=1
n
X
≤ kf k∞ |α0 (si ) − α0 (ti )| ∆xi
i=1
< kf k∞ .
Lo que nos dice que la integral de uno existe si y solo si la otra integral existe
y estas deben de coincidir. 
Corolario 163. Si f es diferenciable, y si f 0 es Riemann integrable (y acota-
da) en [a, b], entonces
ˆ b
f 0 dx = f (b) − f (a) .
a

Ahora lo que queremos es recuperar el Teorema fundamental del calculo, pero


para esto necesitamos un resultado previo, el teorema del valor medio para inte-
grales.

Teorema 164. Si f ∈ Rα [a, b], con α creciente y m ≤ f ≤ M , entonces


ˆ b
f dα ≤ c [α (b) − α (a)] .
a
Más aun, si f es continua entonces existe x0 ∈ [a, b] tal que f (x0 ) = c.
La demostración del teorema anterior es rutinaria, por lo que se le deja al lector.
6.4. RELACIÓN DE LA INTEGRAL DE RIEMANN Y LA INTEGRAL DE RIEMANN-STIELTJES.
86

Teorema 165. Sea α creciente y f ∈ Rα [a, b]. Denamos


ˆ x
F (x) := f dα
a
para a ≤ x ≤ b. Entonces:
i) F ∈ BV [a, b],
ii) F es continua en los puntos donde α es continua y
iii) F es diferenciable donde α es diferenciable y f continua, en tal caso
F 0 (x) = f (x) α0 (x) .
Demostración. Al ser α creciente sabemos que para x<y
ˆ y

|F (y) − F (x)| = f dα
(6.4.2) x
≤ kf k∞ [α (y) − α (x)] .
De lo que se sigue ii). Además dada una partición P y usando la desigualdad
(6.4.2) obtenemos que

V (F, P ) ≤ kf k∞ V (α, P )
= kf k∞ [α (b) − α (a)] .
Lo que demuestra i). Demostremos ahora iii).
Al ser f acotada sabemos que para todo x<y existe c ∈ [inff [x, y] , supf [x, y]]
tal que
ˆ y
f dα = cy [α (b) − α (a)] ,
x
Lo anterior por el Teorema (164), sea x un punto en el que α es diferenciable y f
continua, entonces
lim supf [x, y] = f (x) ,
y→x
lim inff [x, y] = f (x) .
y→x
Por tanto ´y
F (x) − F (y) f dα
lim = lim x
y→x x−y y→x x−y
cy [α (b) − α (a)]
= lim
y→x x−y
  
[α (b) − α (a)]
= lim cy lim
y→x y→x x−y
0
= f (x) α (c) .
Por tanto
F 0 (x) = f (x) α0 (x) .

Para terminar esta sección enunciemos un corolario inmediato del teorema an-
terior, ¾Te parece conocido?.
´
Corolario 166. Sea f ∈ R [a, b], y sea F (x) := ax f (t) dt, Entonces F ∈
C [a, b] ∩ BV [a, b], y F 0 (x) = f (x) en cada punto de continuidad de f .
Parte 2

Teoría de la medida
Cuando se creo la integral de Riemann, un problema salio a la luz, en las
demostraciones clásicas de series de Fourier, un problema complicado era saber
cuando una serie de funciones integrables era integrable y la integral es la serie de
las integrales, estos hechos y otros problemas relacionados a la integral de Riemann
fueron escritos en un artículo llamado Über die Darstellbarkeit einer Function
durch eine trigonometrische Reihe (Sobre la posibilidad de la representación de una
función por medio de una serie trigonométrica) escrito por el mismo Riemann en
1854, artículo que en un principio no fue publicado debido a que hacia más preguntas
de las que respondía, hasta 1867 (un año después de la muerte de Riemann) el
artículo fue publicado. Para muchos este Artículo marca un antes y un después
del análisis, ya que es considerado por muchos como el artículo que dio origen a la
creación de la integral de Lebesgue.
El problema con la integral de Riemann no es que este equivocada o calcule
mal las cosas, el problema es como esta denida, su denición que esta basada en
partir el dominio en intervalos es muy débil en dos sentidos. Primero es muy dicíl
saber cuando una función es integrable usando la denición y segundo, el tener
que considerar intervalos en el dominio impide que muchas funciones sean Riemann
integrables, cuando nosotros quisiéramos que estas fueran integrables. Los que se
buscaba entonces era extender la integral de Riemann.
Aquí es donde entra Lebesgue, que en 1902 publica su tesis doctoral, donde se
le ocurre una manera de extender la integral de Riemann, el decidió que deberían
de tomarse particiones del rango de la función en lugar de en el dominio, es decir,
si f : [a, b] −→ [c, d] es una función real y tomamos

P := {t0 = c, t1 , ..., tn = d}
partición del rango, entonces una aproximación de la integral de f en el intervalo
n−1
f (xi ) m f −1 [ti , ti+1 ] m f −1 [ti , ti+1 ]
P  
[a, b] sería donde xi ∈ [ti , ti+1 ] y es la
i=1
longitud del conjunto f −1 [ti , ti+1 ] , aquí es importante resaltar que f −1 [ti , ti+1 ]
no es un intervalo, puede ser cualquier subconjunto de [c, d], entonces lo importante
aquí es poder tener una manera de extender la medida de subconjuntos, pero que
respeten la longitud usual.
Un ejemplo del problema de serie de funciones integrables es si consideramos
las funciones fn : [0, 1] −→ R denidas como
 1 

 0si x ∈ n, 1
n2 − n3 xsi x ∈ 0, n1

fn (x) =

0si x = 0,

para todo n ∈ N y denimos las funciones g1 := f1 y gn := fn −fn−1 , de esta manera


k
P
gn = fk , claramente las funciones fn son integrables para todo n natural (por ser
n=1
continuas salvo en un punto) y por tanto las funciones gn son integrables (diferencia
de integrables. Ahora es de rutina observar que

X k
X
gn (x) = lim gn (x)
k→∞
n=1 n=1
= lim fk (x)
k→∞
= 0.
89

Por lo que la serie existe y es integrable, pero observemos que


∞ ˆ 1 ∞
X X n n−1
gn (x) dx = −
n=1 0 n=1
2 2
= ∞.
´1 ∞
 
P
y por otro lado
0
gn (x) dx = 0, ¾Que condición necesitamos para que la
n=1
integral pueda entrar en una serie?. Otro ejemplo es considerar una enumeración de
los racionales en el intervalo [0, 1], es decir, usando el axioma de elección podemos
escribir al conjunto Q ∩ [0, 1] como {qn : n ∈ N}. Lo anterior lo usamos para denir
las funciones fn : [0, 1] −→ R tales que
0si x 6= qn

fn :=
1si x = qn .
En este caso la serie

(
X 1 si x ∈ Q ∩ [0, 1]
g := fn (x) =
n=1
0 si x∈/ Q ∩ [0, 1] .
∞ ´
P 1
En este caso la serie g no es integrable, pero observemos que f (x) dx = 0
0 n
n=1
y la función es cero en muchos pero muchos más puntos que donde no es cero, por
´#
lo que nos gustaría que existiera una integral que extendiera la integral de
´#
Riemann y que g = 0. En ese caso la integral si entraría en la serie.
Capítulo 7

Espacios y funciones medibles

7.1. σ -álgebras
Como dijimos en nuestra breve introducción, un paso importante es extender
la noción de longitud para conjuntos más complejos, por ejemplo una longitud para
los racionales o para los irracionales, para el conjunto de cantor entre muchos otros
conjuntos. Es importante mencionar que no se lograra tener una longitud adecuada
para todos los subconjuntos de los reales, esto es malo, ya que signicara que existen
funciones que jamas se podrán integrar con nuestra extensión de integral. Pero eso lo
discutiremos más adelante. Por la razón anterior, necesitamos estudiar subconjuntos
de la potencia de los reales donde podremos trabajar con longitudes claro que esta
teoría por cuestiones practicas se puede extender y trabajaremos sobre conjuntos
abstractos.

Definición 167. Sea X un conjunto no vacío, Diremos que R ⊂ P (X) es una


σ -anillo si no es vacío y
A0 1) Si A, B ∈ R entonces A \ B ∈ R.

S
A2) Si An ∈ R para n ∈ N entonces An ∈ R.
n=1
Si además cumple
A3) X ∈ R.
Entonces diremos que R es una σ -álgebra y la denotaremos por A.
Observación. Si A es una σ -álgebra podemos cambiar las condiciones A0 1)
por
A1) Si A∈R entonces Ac ∈ R.
Lo anterior se sigue de que si A cumple las condiciones A0 1), A3) y A ∈ A
entonces
Ac = X \ A ∈ R,
por lo que A cumple A1). Inversamente, si A cumple A1), A2) y A, B ∈ A entonces
c
A \ B = A ∩ B c = (Ac ∪ B) ,
c
pero por A1) Ac ∈ A (Ac ∪ B) ∈ A, es decir A \ A ∈ A.
y por tanto
Además podemos cambiar A2) por

A0 2) Si An ∈ R para n ∈ N entonces
T
An ∈ R.
n=1
Entonces usando que

!c ∞
[ \ c
An = (An )
n=1 n=1
podemos demostrar (se deja al lector) que si A cumple A0 1) o A1), A0 2) o A2) y
A3) entonces es una σ -álgebra.
90
7.1. σ -ÁLGEBRAS 91

Ejemplo 168. 1) Sea X un conjunto no vacío, entonces si denimos a R1 :=


{∅} y R2 := {∅, X} R1 es un σ -anillo pero no una σ -álgebra, y R2 es una σ -álgebra.
2) Sean A $ X conjuntos no vacíos, R := P (A) y A := P (A) entonces es un
R σ -anillo pero no una σ -álgebra y A es una σ -álgebra.
3) Sea X un conjunto no vacío, denimos el conjunto

Q := {A ⊂ X : A o Ac es numerable} .

Entonces Q es σ -álgebra y si X es innito entonces P (X) 6= Q.


Demostración. Veamos primero que Q es σ -álgebra.
A1) es inmediata de la denición de Q.
A2) Sean An ∈ Q para n ∈ N, supongamos que todos son numerables, entonces

S ∞
S
An es numerable y por denición An ∈ Q. Ahora supongamos lo contrario,
n=1 n=1
por lo que existe n1 ∈ N tal que An1 no es numerable, de lo que se sigue usando la
c
denición de Q que (An1 ) es numerable de lo que se sigue que

!c ∞
[ \ c
An = (An ) ⊂ An1
n=1 n=1

S
es numerable y por tanto An ∈ Q.
n=1
Si X es innito, usando teoría de conjuntos, sabemos que existe un subconjunto
c
Y de X tal que la cardinalidad de Y y Y es la misma que X , entonces Y ∈ / Q. 
Proposición 169. Sea A ⊂ P (X) una σ -álgebra, Y un conjunto no vacío y
f : Y −→ X una función, entonces
Af := f −1 (A) : A ∈ A


es una σ -álgebra de Y .
Demostración. A1) Si B ∈ Af , entonces
A2) SeanBn ∈ Af para n ∈ N, por denición de Af sabemos que existen
conjuntos An ∈ A para todo n ∈ N tales que Bn = f −1 (An ) y por tanto

[ ∞
[
Bn = f −1 (An )
n=1 n=1

!
[
−1
=f An .
n=1

S ∞
S
Por ser A σ -álgebra obtenemos que An ∈ A y por tanto Bn ∈ Af .
n=1 n=1
A3) X = f −1 (X) ∈ Af . 
Proposición 170. Sea A ⊂ P (X) una σ -álgebra, Y ⊂ X un conjunto no
vacío, entonces
AY := {A ∩ Y : A ∈ A}
es una σ -álgebra de Y .
Demostración. Es inmediata usando la proposición anterior, ya que podemos
considerar la función f : Y −→ X tal que f (y) = y para todo y ∈ Y, por tanto
AY = Af . 
7.1. σ -ÁLGEBRAS 92

Ahora veremos que las σ -álgebras nitas se pueden caracterizar fácilmente, caso
contrario con las innitas, las cuales ni siquiera son numerables.

Proposición 171. Sea A ⊂ P (X) una σ -álgebra nita, entonces existe n0 ∈ N


tal que A tiene cardinalidad igual a 2n0 . Más aun, existen conjuntos ajenos dos a
dos Ak con k ∈ {1, 2, ..., n0 } tales que
( k
)
[
A := An : k ≤ n 0 .
n=1

Además, si A es innito entonces A no es numerable.


Demostración. Supongamos que A es a lo más numerable, denimos la
relación ∼ X × X de la siguiente manera, x ∼ y si y solo si para todo A ∈ A,
en
x ∈ A si y solo si y ∈ A. Debido a la reexibilidad, simetría y transitividad del si y
solo si la relación ∼ es de equivalencia. Denotemos por [x] la clase de equivalencia
de x generada por ∼.
T
Veamos que [x] = A. Primero si y ∈ [x] por denición de la clase de
x∈A∈A T
equivalencia, si x ∈ A ∈ A se sigue que y ∈ A y por tanto y ∈ A. Ahora si
T x∈A∈A
y∈ A, es inmediato que si x ∈ A ∈ A entonces y ∈ A, nos falta demostrar
x∈A∈A
la implicación al revés. Supongamos lo contrario, si existe A ∈ A tal que y ∈ A y
c
x∈
/A por ser A σ -álgebra sabemos que
T A ∈ A, por tanto y∈/ Ac y x ∈ Ac lo que
es contradictorio. Por tanto [x] = A.
x∈A∈A T
Como A es a lo más numerable, A ∈ A, claramente [x] es el
[x] =
x∈A∈A
elemento de A más pequeño (en contención) que tiene al elemento x. Observemos
S
que todo A∈A se puede escribir como A= [x].
x∈A
⊂) Inmediata ya que
S x ∈ [x] .
⊃) Si y∈ [x] entonces existe z∈A tal que y ∈ [z] y por denición de ∼ se
x∈A
sigue que y ∈ A.
Como la partición generada por ∼ esta formada por elemento de A, esta par-
tición es a lo más numerable. Sea la partición D = {A1 , A2 , ...}, con esto podemos
denir el conjunto D como:
( )
[
D := An : K ⊂ M ,
n∈K

donde M son los naturales o {1, 2, 3, ..., k}


k natural. para algún
Por lo que demostramos previamente (para todo
S A ∈ A se puede escribir como
A= [x]) A = D. Además como An ∩ Am = ∅ si m 6= n (por ser elementos de
x∈A
0 0
S S
una partición) entonces si K, K ∈ P (N), K 6= K se sigue que An 6= An .
n∈K n∈K 0
Es decir la cardinalidad de A es la misma que la de la potencia de M. En el caso de
k
que M es {1, 2, 3, ..., k} por teoría de conjuntos básica A tiene 2 elementos. Si M es
numerable entonces A tiene tantos elementos como los reales (la cardinalidad de los
P (N) es la misma que la de los reales). Pero A es numerable, esto es contradictorio
y por tanto A no puede ser numerable. 
7.1. σ -ÁLGEBRAS 93

Nosotros deniremos nuestra longitud sobres σ -álgebras, en particular en los


reales nos interesaran las σ -álgebras que contengan a los intervalos (y por tanto
a todo abierto). Claramente existe una σ -álgebra mas grande que contiene a los
intervalos, la total i.e. P (R), la pregunta natural es si existe una más pequeña que
contiene a los intervalos.

Proposición 172. Sea Ai con i ∈ I una colección de σ -álgebras de un conjunto


X , entonces A := Ai es una σ álgebra.
T
i∈I

Demostración. A1) Si A ∈ A entonces A ∈ Ai para todo i ∈ I , por lo que


Ac ∈ Ai i ∈ I y por tanto Ac ∈ A.
para todo
A2) Si An ∈ A para todo n ∈ N entonces An ∈ Ai para todo i ∈ I , n ∈ N y
S S
por tanto An ∈ Ai para todo i ∈ I , con lo que concluimos que An ∈ A.
n∈N n∈N
A3) Como X ∈ Ai para todo i∈I es inmediato que X ∈ A. 
Con la proposición anterior podemos construir la σ -álgebra más pequeña que
contiene a una colección de conjuntos. Sea X un conjunto no vacío y K ⊂ P (X),
denimos la σ -álgebra generada por K como
\
A (K) := {A ⊂ P (X) : Aes una σ -álgebra que contiene a K} .
En la intersección siempre se encuentra P (X) por lo que esta bien denida,
por la proposición anterior es una σ -álgebra y claramente sera la más pequeña que
contenga a K. (Ejercicio: Demostrar que la unión de σ -álgebras no es σ -álgebra)
Ejemplo 173. 1) si consideramos un conjunto no vacío X , entonces A ({∅}) =
{∅, X}. Si Y ⊂ X es un subconjunto no vacío, entonces A ({Y }) = {∅, X, Y, Y c }.
2) Sea X un conjunto no vacío y Y := {{x} : x ∈ X}, si D := {A ⊂ X : A o Ac es numerable}
entonces A (Y ) = D . Lo anterior es debido a que

{x} ∈ D,
para todo x ∈ X pero D es una σ -álgebra, por lo que A (Y ) ⊂ D. Sea B ∈ D,
entonces B o B c es numerable y S
como A (Y ) es una σ -álgebra que contiene a todos
{x} o B c =
S
los puntos de X entonces B = {x} es un elemento de A (Y )
x∈B x∈B c
(por ser cerrada bajo uniones numerables. Por tanto B ∈ A (Y ).
Ejercicio 174. Sea X un conjunto no vacío y A, B ⊂ P (X).
1) Si A ⊂ B entonces A (A) ⊂ A (B) .
2) Si A es σ -álgebra entonces A (A) = A.
3) A (A (A)) = A (A).
Podemos construir ahora la σ -álgebra más pequeña que contenga a todos los
abiertos de R, la que denotaremos por B (R) y llamaremos borelianos. Nuestro
objetivo sería crear una longitud que por lo menos pueda medir a los borelieanos.
Observemos que no es necesario tomar a todos los abiertos para construir a los
borelianos. Pero primero demostremos un lema.

Lema 175. Todo abierto en Rn es una unión a lo más numerable de bolas.


Demostración. Sabemos que Qn es denso en Rn . Sea A un abierto de Rn , el
conjunto D := Q ∩ A es numerable, por lo que podemos escribir

D = {q1 , q2 , q3 , ...} .
7.1. σ -ÁLGEBRAS 94

 
Ahora para cada qn ∈ D denimos mn como el primer natural tal que B qn , m1n ⊂
S  
A (Este natural existe por ser A un abierto). demostremos que A = B qn , m1n .
n∈N
S  1

Por construcción A ⊃ B qn , mn . Sea x ∈ A, entonces por ser A abierto
n∈N  
1 1
existe r > 0 tal que B (x, r) ⊂ A, sea n0 ∈ N tal que
n0 < r , por lo que B x, n0 ⊂
 
B (x, r) ⊂ A. Por ser Qn denso en Rn , podemos tomar qk ∈ Qn ∩ B x, 2n1 0 ⊂ D,
 
1
observemos que si z ∈ B qk , entonces
2n0

kz − xk ≤ kz − qk + kq − xk
1 1
< +
2n0 2n0
1
= .
n0
   
1 1
Por tanto n0 ≤ nk y por tanto B qk ,
2n0 ⊂ B q ,
k nk , es decir A ⊂
 
B qn , m1n .
S

n∈N

Proposición 176. Sea τ la colección de todos los intervalos en R, ω el conjunto


formado por los abiertos (a, ∞) con a ∈ R. Entonces A (τ ) = A (ω) = B (R).
Demostración. Es inmediato por 174 que A (ω) ⊂ A (τ ) ⊂ B (R). Veamos
primero que A (ω) = A (τ ). Sea (a, b) un intervalo con a, b reales. Entonces
(a, b) = (a, ∞) ∩ (−∞, b)
[ !
1
= (a, ∞) ∩ −∞, b −
n
n∈N

\ !c
1
= (a, ∞) ∩ b − ,∞ ,
n
n∈N
 c
1 1
T  T 
al ser A (ω) σ -álgebra entonces b− n, ∞ ∈ A (ω), por lo que b− n, ∞ ∈
n∈N n∈N
A (ω) y por tanto

\ !c
1
(a, b) = (a, ∞) ∩ b − ,∞ ∈ A (ω) .
n
n∈N

Con lo anterior todo intervalo se encuentra en A (ω), por el lema previo todo
abierto de R es una unión numerable de intervalos, es decir todo abierto de R
es un elemento de A (ω) σ -álgebra. Por ser B (R) la mínima σ -álgebra
por ser
que contiene a los abierto y por ser A (τ ) la mínima σ -álgebra que contiene a los
intervalos, A (ω) ⊃ A (τ ) y A (ω) ⊃ B (R). Por tanto A (ω) = A (τ ) = B (R) . 
Ejercicio 177. Probar que
1) A ({(a, b] : a, b ∈ R}) = B (R) .
2) A ({[a, b) : a, b ∈ R}) = B (R).
3) A ({[a, ∞) : a ∈ R}) = B (R) .
7.2. FUNCIONES MEDIBLES 95

4) A ({(−∞, a) : a ∈ R}) = B (R) .


5) A ({(−∞, a] : a ∈ R}) = B (R) .
Proposición 178. Los conjuntos {a} con a ∈ R, Q y Qc son borelianos.
a − n1 , a + 1
T 
Demostración. Para todo a ∈ R lo podemos escribir como a = n ,
n∈N
como los borelianos son una σ -álgebra, es cerrada bajo intersecciones numerables,
además todo abierto es un elemento de los borelianos, por tanto
S {a} es boreliano.
Ahora Q = {q} que es una unión numerable de borelianos, por lo que Q es
q∈Q
boreliano, de esto es inmediato también que Qc es boreliano. 

Observación. ¾Todo subconjunto de R es boreliano?, si uno intenta ingen-


uamente demostrar o refutar esto, seguramente solo perdera su tiempo, es una
pregunta que realmente es muy difícil. Existen subconjuntos de R que no son bore-
lianos, pero para dar un ejemplo necesitamos más teoría. Una alternativa de saber
que existen conjunto no borelianos sin la necesidad de dar uno explicito, es contar-
los. Recordemos que un conjunto Gδ es uan intersección numerable de abiertos y un
Fσ es una unión numerable de cerrados, es evidente que Gδ ⊂ B (R) y Fσ ⊂ B (R).
Ahora denimos el conjunto Gδσ como las intersecciones numerables de elementos
de Gδ y el conjuntoFσδ como las uniones numerables de elementos de Fσ . Nueva-
mente Gδσ ⊂ B (R) y Fσδ ⊂ B (R). Uno puede continuar de esta manera y construir
una serie de conjuntos
Gδ ⊂ Gδσ ⊂ Gδσδ ...
Fσ ⊂ Fσδ ⊂ Fσδσ ...,
uno puede creer que Gδ ∪ Gδσ ∪ Gδσδ ∪ ... o Fσ ∪ Fσδ ∪ Fσδσ ∪ ... son los borelianos,
de hecho la unión resulta ser el mismo conjunto, pero no son los borelianos. Lo que
se debe hacer es seguir este procedimiento pero en los ordinales, claro que para esto
necesitamos teoría de conjuntos más avanzada, uno puede también usar inducción
transnita y darse cuenta que en el primer ordinal no numerable obtenemos a los
borelianos y estos son tantos como reales, es decir que faltan aun muchos conjuntos
ya que la cardinalidad de la P (R) es mayor que la de los reales, de esta manera
sabemos que aun existen muchísimos conjuntos que no son borelianos. Lo anterior
no se vera en las notas por ser necesario tener buenos conocimientos en teoría sobre
los ordinales.

7.2. Funciones medibles


Ahora que ya tenemos sobre que conjuntos queremos denir una longitud,
ahora deniremos que funciones son las que nos interesa trabajar, como ejemplo,
en la topología lo que importa son funciones que se lleven bien con la topología de
los espacios, ahora nos interesa funciones que se lleven bien con la σ -álgebra.
Definición 179. Sea X un conjunto no vacío y un subconjunto C ⊂ P (X),
diremos que la pareja (X, C) es un espacio medible si C es una σ -álgebra. Sean (X, A)
0
y (Y, A ) espacios medibles, una función f : X −→ Y es medible con respecto a A
0 −1
y A si f (A) ∈ A para todo A ∈ A0 .
En el caso que consideremos (X, A) espacio medible, (R, B (R)) y f : X −→ R
medible con respecto a B (R) diremos que f es borel medible o solamente medible.
7.2. FUNCIONES MEDIBLES 96

Ejemplo 180. Sea X un conjunto no vacío y A σ -álgebra en X


a) Cualquier función f : X −→ X constante es medible con respecto a A.
b) Cualquier función f : X −→ X es medible con respecto a A y {∅, X}.
c) Sea Y un conjunto no vacío,
Q := {A ⊂ Y : A o Ac es numerable} ,

A = {A ⊂ X : A o Ac es numerable}
y f : X −→ Y inyectiva, entonces f es medible con respecto a A y Q. Lo anterior
−1
c
es debido a que si A ⊂ Y o A ⊂ Y es numerable, entonces f (A) o f −1 (Ac ) es
numerable (por ser f inyectiva).

Proposición 181. Sean (X, A) y (Y, A (K)) espacios medibles con K ⊂ Y ,


una función f : X −→ Y tal que f −1 (A) ∈ A para todo A ∈ Y , entonces f es
medible con respecto a A y A (K).
D := A : f −1 (A) ∈ A es una σ álgebra.

Demostración. Veamos que
c
A1) Si A ∈ D entonces f −1 (A) ∈ A, por lo que f −1 (A) = f −1 (Ac ) ∈ A, es
decir Ac ∈ D.
A2) Si An ∈ D para todo
 n∈N entonces f −1 (An ) ∈ A para todo n ∈ N, por
S −1
f (An ) = f −1
S S
lo que An ∈ A, es decir An ∈ D.
n∈N n∈N n∈N
A3) f −1 (Y ) = X ∈ A, por lo que Y ∈ D.
Por lo anterior D es una σ -álgebra y por hipótesis K ⊂ D , con lo que concluimos
que A (K) ⊂ D , es decir f es medible con respecto a A y A (K).
Usando la proposición anterior podemos facilitar las condiciones para que una
función se borel medible, principalmente porque sabemos varios conjuntos que gen-
eran a los borelianos. 
Corolario 182. Sea (X, A) espacio medible y f : X −→ R medible, son
equivalentes:
i) f es borel medible,
ii) f −1 (a, b) ∈ A para todo a, b ∈ R,
iii) f −1 (a, ∞) ∈ A para todo a ∈ R,
iv) f −1 [a, ∞) ∈ A para todo a ∈ R,
v) f −1 (a, b] ∈ A para todo a, b ∈ R,
vi) f −1 [a, b) ∈ A para todo a, b ∈ R,
vii) f −1 (−∞, b) ∈ A para todo ab ∈ R,
viii) f −1 (−∞, b] ∈ A para todo a, b ∈ R.
Ahora veamos ejemplos de funciones borel medible.

Ejemplo 183. Consideremos a los reales con los borelianos y f : R −→ R.


1) Sea A ⊂ R, entonces la función característica de A, χA : R −→ {0, 1} es
borel medible si y solo si A es boreliano.
χ−1 1

Si suponemos que χA es medible, entonces por el Corolario 182 A 2, ∞ =A
es boreliano. Inversamente Si A es boreliano entonces

 ∅ si a ≥ 1,

χ−1
A (a, ∞) = A si a∈ [0, 1),

 R si a < 0.
7.2. FUNCIONES MEDIBLES 97

En todos los casos es borel medible. Por tanto χA es medible.


2) Si f es monótona (es decir, si a ≤ b entonces f (a) ≤ f (b) para todo a, b ∈ R
o si a ≥ b entonces f (a) ≥ f (b) para todo a, b ∈ R) entonces f medible.
−1
Lo anterior es debido a que si f es monótona creciente entonces f [a, ∞) =
0 −1 0 −1
(a , ∞), f [a, ∞) = [a , ∞) o f [a, ∞) = ∅ donde
a0 := sup {x ∈ R : f (x) < a} .
(Ejercicio: Demostrar lo anterior).
3) Si f es continua entonces es medible. Es fácil ver esto debido a que usando
la equivalencia 23 d) sabemos que f −1 (a, b) es un abierto para todo a, b ∈ R, es
−1
decirf (a, b) es boreliano y por el corolario anterior f es medible.
c
4) Si f esta denida como: x ∈ (Q ∩ [0, 1])
(
1 si x ∈ Q ∩ [0, 1]
f (x) = c
0 si x ∈ (Q ∩ [0, 1]) .
Entonces f es medible ya que f = χQ∩[0,1] .
Con lo anterior ya tenemos muchos ejemplos de funciones medibles, ahora ob-
servemos que ser medible es una propiedad que se preserva con las principales
operaciones de funciones.

Proposición 184. Sea (X, A) espacio medible, f : X −→ R, g : X −→ R y


h : R −→ R medibles, a ∈ R, entonces
a) h ◦ f es medible,
b) af es medible,
c) f + g es medible,
d) f 2 es medible,
e) f g es medible,
f ) |f | es medible.
Demostración. a) Por ser h, f funciones medibles

−1
(B (R)) = f −1 h−1 (B (R))

(h ◦ f )
⊂ f −1 (B (R))
⊂ B (R) .
Por tanto h ◦ f es medible.
b) Sabemos que la función l : R −→ R denida como l (x) = ax es continua, por
tanto es medible, por a) de esta proposición l ◦ f es medible, pero l ◦ f (x) = af (x).
Concluimos que af es medible.
c) Sea a ∈ R, observemos que el conjunto
Sq := {x ∈ R : f (x) > a − q} ∩ {x ∈ R : g (x) > q}
S
es medible para todo q ∈ Q, por lo que Sq es boreliano. Demostremos que
q∈Q
[
{x ∈ R : f (x) + g (x) > a} = Sq .
q∈Q

Sq , entonces existe q 0
S
Claramente si x ∈ ∈ Q tal que x ∈ Sq0 , es decir
q∈Q
f (x) > a − q 0 y g (x) > q 0 , por tanto f (x) + g (x) > a.
7.2. FUNCIONES MEDIBLES 98

Si z ∈ {x ∈ R : f (x) + g (x) > a}, por lo que f (z) + g (z) − a > 0 sea r racional
tal que
g (z) > r,
y
g (z) − r < f (z) + g (z) − a.
Lo anterior se puede hacer gracias a la densidad de los racionales. De la última
desigualdad obtenemos que
a − r < f (z) .
Con lo que concluimos que z ∈ Sr .
−1
d) Sea a ∈ R, si a < 0 entonces f 2 ((a, ∞)) = X . Si a > 0 entonces
−1 −1 √ −1 √ 
f2 ((a, ∞)) = f 2 a, ∞ ∪ f 2
  
−∞, − a ,
que es boreliano por hipótesis.
e) Observemos que

1h 2 2
i 1
f 2 + g 2 + 4f g − f 2 − g 2

(f + g) − (f − g) =
4 4
= f g.
h i
1 2 2
Por los incisos anteriores
4 (f + g) − (f − g) es medible, es decir fg es

medible.
−1
f) Sea a ∈ R, si a<0 entonces |f | ((a, ∞)) = X . Si a>0 entonces
−1 −1 −1
|f | ((a, ∞)) = |f | ((a, ∞)) ∪ |f | ((−∞, −a)) ,
que es boreliano por hipótesis. 
Sea f : X −→ R, denimos la parte positiva de f ( la cual denotaremos por
f +) como la función f + : X −→ R tal que
f + (x) := sup {f (x) , 0}
y denimos la parte negativa de f ( la cual denotaremos por f −) como la función

f : X −→ R tal que
f − (x) := sup {−f (x) , 0} .
La importancia de denir las dos funciones previas radica en que f = f + − f −,
es decir que toda función la podemos ver como la diferencia de dos funciones no
negativas. más adelante cuando denamos la integral de Lebesgue, que sera lineal,
podremos demostrar todas las propiedades para funciones no negativas, las cuales
usando la linealidad de la integral, extenderemos los resultado para funciones que
cambian de signo. Claro para eso debemos ver que una función es integrable si y
solo si su parte positiva y negativa son integrables. Antes de hablar de la integral,
iniciemos de mostrando que:

Proposición 185. Sea (X, A) un espacio medible, entonces f : X −→ R es


medible si y solo si f + y f − son medibles.
Demostración. Observemos que |f | = f + + f − . Si suponemos que f es med-
ible entonces
1 +
f+ = f + f− + f+ − f−

2
1
= [|f | + f ]
2
7.2. FUNCIONES MEDIBLES 99

y
1 +
f− = f + f− − f+ − f−
 
2
1
= [|f | − f ]
2
Que son medibles por la proposición anterior.
Ahora si suponemos que f+ y f− son medibles, entonces es inmediato que
+ −
f =f −f es medible. 

Más adelante trabajaremos con sucesiones de funciones medibles, pero puede


ser que en una sucesión (fn ) de funciones, fn : X −→ R existan puntos x ∈ X tales
que lim f (x) = ∞ o lim f (x) = −∞. Pero más adelante veremos que si son
n−→∞ n−→∞
pocos los puntos con la propiedad previamente mencionada, el tomarse el limite de
las funciones sigue teniendo sentido, es por esto que consideraremos funciones con
valores en ∞ y −∞, es decir, denotemos por R := R ∪ {∞, −∞} donde los símbolos
∞ y −∞ representan el innito, diremos que una función es real-extendida valuada
si f : X −→ R. Es importante ahora denir la suma, resta y multiplicación para
los símbolos ∞ y −∞.
Para todo x ∈ R, y ∈ R ∩ (0, ∞) y z ∈ R ∩ (−∞, 0)

x+∞=∞
x + (−∞) = −∞
∞+∞=∞
−∞ − ∞ = −∞
y×∞=∞
y × −∞ = −∞
z × ∞ = −∞
z × −∞ = ∞
0×∞=0
0 × −∞ = 0
∞ × −∞ = −∞
∞×∞=∞
−∞ × −∞ = ∞.
Las expresiones ∞−∞ y −∞ + ∞ no están denidas. Además ∞ > x > −∞
para todo x ∈ R.
Definición 186. Sea una sucesión (an ) de reales extendidos, diremos que
tiende a innito si para todo x∈R N ∈ N tal que si n > N
existe un momento
entonces an > x, lo que denotaremos por lim an = ∞, análogamente diremos que
n−→∞
tiende a menos innito si para todo x ∈ R existe un momento N ∈ N tal que si
n > N entonces an < x, lo que denotaremos por lim an = −∞.
n−→∞

Por último deniremos la σ -álgebra extendida de borel como la σ -álgebra


 
B R := A (B (R) , {∞} , {−∞}) ⊂ P R
.
7.2. FUNCIONES MEDIBLES 100

Definición 187. Sea (X, A) un espacio medible, entonces f : X −→ R es borel



extendida medible, o solamente medible si es medible con respecto a AyB R .
Observemos que si
 E ⊂ P (R) es tal que A (E) = B (R), entonces A (E, {∞} , {−∞}) =
B R . por lo que obtenemos la siguiente corolario análogo al Corolario 182 que se
le deja al lector.

Corolario 188. Sea (X, A) espacio medible y f : X −→ R medible, son


equivalentes:
i) f es borel medible,
ii) f −1 (a, b) ∈ A y f −1 ({∞}) ∈ A para todo a, b ∈ R,
iii) f −1 (a, ∞] ∈ A para todo a ∈ R,
iv) f −1 [a, ∞] ∈ A para todo a, b ∈ R,
v) f −1 (a, b] ∈ A para todo a, b ∈ R,
vi) f −1 [a, b) ∈ A para todo a, b ∈ R,
vii) f −1 [−∞, b) ∈ A para todo ab ∈ R,
viii) f −1 [−∞, b] ∈ A para todo a, b ∈ R.
Donde si se considera cerrado en −∞ o en ∞, signica que es el intervalo
abierto unión −∞ o ∞ respectivamente.
Trabajaremos de aquí en adelante con funciones real extendidas evaluadas, al
espacio de funciones real evaluadas con dominio X y X con la σ -álgebra A es
denotado por M (X, A).
Lema 189. Sea (X, A) un espacio medible y f : X −→ R una función. f es
borel medible (con respecto a A y B R ) si y solo si f −1 ({−∞}) , f −1 ({∞}) ∈ A


y la función f 0 : X −→ R denida como


f (x)si x ∈
(
0
/ f −1 ({−∞, ∞})
f (x) =
0si x ∈ f −1 ({−∞, ∞}) ,
es medible (con respecto a A y B (R)).
Demostración. Supongamos que f es borel medible, de lo que es inmediato
que f −1 ({−∞}) , f −1 ({∞}) ∈ A. Veamos que f0 es medible, sea a > 0, entonces

0−1 −1 −1
f ((a, ∞)) = f ((a, ∞]) \ f
({∞}) ,
−1
c
pero f ((a, ∞]) \ f −1 ({∞}) = f −1 ((a, ∞]) ∩ f −1 ({∞}) que es un elemento
de A por ser σ -álgebra.
Si a ≤ 0 entonces

f 0−1 ((a, ∞)) = f −1 ((a, ∞]) ∈ A.


Por tanto f0 es medible.
Ahora supongamos que f −1 ({−∞}) , f −1 ({∞}) ∈ A y la función f 0 : X −→ R
denida como (
0
/ f −1 ({−∞, ∞})
f (x)si x ∈
f (x) =
0si x ∈ f −1 ({−∞, ∞}) ,
es medible (con respecto a A y B (R)).
Sea a>0 entonces

f −1 ((a, ∞]) = f 0−1 ((a, ∞)) ∪ f −1 ({∞}) ∈ A.


7.3. LÍMITES DE FUNCIONES MEDIBLES. 101

Si a≤0 entonces

f −1 ((a, ∞]) = f 0−1 ((a, ∞)) \ f −1 ({−∞}) ∈ A.


Es decir f es medible. 
Ahora podemos usar las proposiciones 184 y 185 es fácil demostrar el siguiente
corolario.

Corolario 190. Sea (X, A) un espacio medible y f : X −→ R función medible,


entonces f 2 , |f | , f + y f − son funciones medibles.
f + g tenemos que tener cuidad, ya que podemos tener expresiones
Para denir
como ∞ − ∞, las cuales no están denidas, por lo que es necesario dar una buena
denición de f + g. Sean los conjuntos

M1 := {x ∈ R : f (x) = ∞ g (x) = −∞} ,


M2 := {x ∈ R : f (x) = −∞ g (x) = ∞} .
Denimos la suma para funciones real extendidas como:
(
c
f (x) + g (x) si x ∈ (M1 ∪ M2 )
(f + g) (x) :=
0 si x ∈ M1 ∪ M2 .

Como
−1 c
f −1 ({∞}) ∪ g −1 ({∞}) ∩ (M1 ∪ M2 )

(f + g) ({∞}) =
y
−1 c
({−∞}) = f −1 ({−∞}) ∪ g −1 ({−∞}) ∩ (M1 ∪ M2 )

(f + g)
que son elementos de A por ser σ -álgebra, solo tenemos que ver
−1
(f + g) (a, ∞) ∈ A
lo que se sigue de que
c
(
−1 {x ∈ X : ∞ > f (x) + g (x) > a} ∩ (M1 ∪ M2 ) si a > 0
(f + g) (a, ∞) =
{x ∈ X : ∞ > f (x) + g (x) > a} ∪ M1 ∪ M2 si a ≤ 0.
Antes de demostrar que fg es medible necesitamos trabajar con limites de
funciones y ver que ser medible es una propiedad que se preserva bajo limites.

7.3. Límites de funciones medibles.


En esta sección se verán dos cosas importantes, que ser medible es una propiedad
que se respeta bajo limites puntuales de funciones, que toda función se puede aprox-
imar con una sucesión de funciones muy simples. Antes de iniciar a trabajar en
necesario introducir un nuevo concepto relacionado con los límites de sucesiones.

Definición 191. Sea (an ) una sucesión de reales extendidos, denimos el límite
superio y el límite inferior que los denotaremos por lim (an ) y lim (an ) respec-
n−→∞ n−→∞
tivamente como:
lim (an ) := inf sup {an }
n−→∞ k≥1n≥k

lim (an ) := sup inf {an } .


n−→∞ k≥1n≥k
7.3. LÍMITES DE FUNCIONES MEDIBLES. 102

Observemos que si denimos a sup {an } entonces


bk := (bk ) es una sucesión
n≥k
decreciente, si esta acotada por abajo entonces

lim (an ) = inf (bk ) = lim (bk ) ∈ R ∪ {∞}


n−→∞ k≥1 k−→∞

de lo contrario diremos que lim (an ) = −∞, de manera análoga, si denimos a


n−→∞
ck := ing {an } entonces (ck ) es una sucesión creciente, si esta acotada por arriba
n≥k
entonces

lim (an ) = inf (ck ) = lim (ck ) ∈ R ∪ {−∞}


n−→∞ k≥1 k−→∞

de lo contrario diremos que lim (an ) = ∞.


n−→∞
la relación que existe entre el límite superior, límite inferior y el límite usual de
una sucesión.

Proposición 192. Sea (an ) una sucesión de reales extendidos entonces:


1) lim (an ) ≥ lim (an ) ,
n−→∞ n−→∞
2) la sucesión (an ) tiene como límite a si y solo si lim (an ) = lim (an ) = a.
n−→∞ n−→∞

Demostración. 1) Como inf {ak } ≤ sup {ak } para todo n, m ∈ N, se sigue


n≥k m≥k
que

sup inf {an } ≤ inf sup {an }


k≥1n≥k k≥1n≥k

es decir lim (an ) ≥


lim (an ).
n−→∞ n−→∞
2) Usemos la notación de la observación previa. Primero supongamos que
lim (an ) = a es decir que para toda  > existe un momento N ∈ N tal que
n−→∞
si m > N , |am − a| ≤  de lo que se sigue que


inf {an } − a = |ck − a| ≤ 
n≥k
y


sup {an } − a = |bk − a| ≤ 
n≥k
para todo k > N. Por tanto

lim (ck ) = lim (bk ) = a.


k−→∞ k−→∞

Inversamente, supongamos que lim (an ) = lim (an ) = a, por tanto para
n−→∞ n−→∞
toda >0 existe un momento N ∈N tal que si k≥N
0≤a− inf {an } <
n≥k
y

0≤ sup {an } − a < .


n≥k
Por lo que si m>k entonces

inf {an } ≤ am ≤ sup {an }


n≥N n≥k
7.3. LÍMITES DE FUNCIONES MEDIBLES. 103

entonces

− < inf {an } − a ≤ am − a ≤ sup {an } −a<


n≥N n≥k

es decir

|am − a| < 
y por tanto lim (an ) = a. 
n−→∞

Ahora podemos demostrar que ser función medible se preserva bajo inmos,
supremos, límites inferiores y límites superiores. en particular se preserva bajo
límites.

Proposición 193. Sea (fn ) una sucesión de funciones en M (X, A) entonces:


i) F := sup fn es medible,
n≥1
ii)f := inf fn es medible,
n≥1
iii) f ∗ := lim fn es medible y
n−→∞
iv) f∗ := lim fn es medible.
n−→∞

Demostración. Observemos que


[
F −1 ((a, ∞]) = fn−1 ((a, ∞]) .
n∈N

Si x ∈ F −1 ((a, ∞]) signica que supfn (x) > a, por denición de supremo, a
n≥1
no es cota superior, por lo que existe k ∈ N tal que fk (x) > a, es decir
[
x ∈ fk−1 ((a, ∞]) ⊂ f −1 ((a, ∞]) .
n∈N

fn−1 ((a, ∞]) x ∈ fk−1 ((a, ∞]),


S
Si x∈ entonces existe k∈N tal que es decir
n∈N
fk (x) > a, por lo que supfn (x) > a, con lo que concluimos que x ∈ F −1 ((a, ∞]).
n≥1
Lo anterior demuestra i).
Demostremos que
\
f −1 ([a, ∞]) = fn−1 ([a, ∞])
n∈N

Si x ∈ f −1 ([a, ∞]) signica que inf fn (x) ≥ a, por denición de inmo, a es


n≥1
una cota inferior, por lo que para todo k ∈ N, fk (x) > a, es decir
\
x∈ fn−1 ([a, ∞]) .
n∈N

Si x ∈ ∩ fn−1 ([a, ∞]) entonces para todo k ∈ N, x ∈ fk−1 ([a, ∞]), es decir
n∈N
fk (x) ≥ a, por lo que inf fn (x) ≥ a, con lo que concluimos que x ∈ f −1 ((a, ∞]).
n≥1
Lo anterior demuestra ii).
7.3. LÍMITES DE FUNCIONES MEDIBLES. 104

Con la demostración de que F y f son medibles, es inmediata la demostración


de que f∗ y f∗ son medibles, ya que por denición

f∗ = inf sup {fn }


k≥1n≥k

f∗ = sup inf {fn } ,


k≥1n≥k

si denimos bk := sup {fn } y ck := inf {fn }, por i), ii) tanto bk como ck son
n≥k n≥k
medibles, por lo que nuevamente por i), ii), inf bk y supck son medibles. 
k≥1 k≥1

Corolario 194. Si (fn ) es una sucesión en M (X, A) tal que lim fn = f ,


n→∞
entonces f ∈ M (X, A) .
Demostración. Usando la Proposición 193 sabemos que inf sup {fn } es med-
k≥1n≥k
ible, pero por ser lim fn =f entonces
n→∞
inf sup {fn } = f.
k≥1n≥k


Retomemos lo que dejamos pendiente la sección anterior, la medibilidad de f g.
Primero necesitamos apoyarnos con funciones que aproximen a f y g pero que estas
sean real denidas, esto nos lleva a denir el truncamiento de una función como:

Definición 195. Sea f : X −→ R una función y r ∈> 0, denimos el trun-


camiento r de f como la función fr : X −→ R tal que

 f (x)si f (x) ∈ [−r, r]

fr (x) = rsi f (x) > r

 −rsi f (x) < −r.

Lema 196. Sea f : X −→ R una función tal que f ∈ M (X, A) entonces


fr ∈ M (X, A) para todo r > 0.
Demostración. Es inmediata observando que


 ∅si a ≥ r
fr−1 ((a, ∞]) = f −1
((a, ∞])si r > a ≥ −r

 X si a < −r.
Con lo anterior ya estamos listos para demostrar que producto de funciones
real extendidas medibles es medible. 
Corolario 197. Sea f, g ∈ M (X, A), entonces f g ∈ M (X, A).
Demostración. Por el Lema anterior fn , gm ∈ M (X, A) para todo n, m ∈ N,
por ser funciones borelianas, ya sabemos que su producto si es medible (Proposición
184) es decir fn gm ∈ M (X, A) . Observemos que

f gm = lim fn gm ,
n→∞
pero usando 194 obtenemos que f gm ∈ M (X, A). de manera análoga tomando el
límite sobre m obtenemos que

fg = lim f gm ∈ M (X, A) .
m→∞
7.3. LÍMITES DE FUNCIONES MEDIBLES. 105

Ya observamos previamente que el estudio de funciones medibles lo podemos re-


ducir a estudio de funciones medibles no negativas, (Proposición 185) ahora usando
el Corolario 194 vamos a reducir el estudio de las funciones medibles a un conjunto
de funciones medibles muy sencillo, de tal manera que toda función medible no
negativa sea un limite de estas funciones.

Definición 198. Sea (X, A) un espacio medible y f : X −→ A es una función


simple si existen conjuntos ajenos An ∈ A y reales an ∈ R para n ∈ {1, 2, ..., k}
tales que
k
X
f= an χAn .
n=1

Como en el Ejemplo 183 1) es fácil demostrar que χAn es medible si y solamente


si An ∈ A, como suma de medibles es medible y producto por reales de medibles es
medible, toda función simple es medible. Ahora veamos que toda función medible
se puede ver como límite de funciones medibles. Denotaremos por M+ (X, A) a las
funciones medibles no negativas.

Proposición 199. Sea f ∈ M (X, A), entonces existe una sucesión de fun-
+

ciones simples sn : X −→ R tales que:


1) 0 ≤ sn ≤ sn+1 ≤ f,
2) lim sn = f ,
n→∞
3) Si f es acotada la convergencia es uniforme.
Demostración. Para n∈N ja y k ∈ {1, 2, ..., n2n − 1} denimos los con-
juntos
  
k k+1
En (k) := x ∈ X : f (x) ∈ n , n
2 2
En (n2n ) := {x ∈ X : f (x) ≥ n} .
Claramente los conjuntos En (k) son una partición de X y por hipótesis cada
uno es un elemento de A. Denimos
n
2n
X k
sn := χE (k) .
2n n
k=0

Observemos que si x ∈ En (k) entonces sn (x) = 2kn .


1) Es claro que sn es simple y que 0 ≤ sn ≤ f . Veamos que sn ≤ sn+1 .
n
Si f (x) < n entonces x ∈ En (k) para alguna k < n2 , es decir
 
k k+1
f (x) ∈ n , n
2 2
de lo que se sigue que sn (x) = 2kn y
   
2k 2k + 1 2k + 1 2k + 2
f (x) ∈ n+1 , n+1 ∪ ,
2 2 2n+1 2n+1
k 2k+1
por lo que sn+1 (x) = 2n o sn+1 (x) = 2n+1 , con lo que concluimos que sn (x) ≤
sn+1 (x).
7.3. LÍMITES DE FUNCIONES MEDIBLES. 106

Si n ≤ f (x) < n + 1 tenemos que sn (x) = n y existe k < (n + 1) 2(n+1) tal que
 
k k+1
f (x) ∈ n+1 , n+1 ,
2 2
k0
pero observemos que si k 0 = n2(n+1) entonces
2n+1 = n, por lo que n2(n+1) ≤ k <
(n+1)
(n + 1) 2 , es decir
sn+1 (x) ≥ n = sn (x) .
Por último sif (x) ≥ n + 1 entonces sn (x) = n < n + 1 = sn+1 (x).
2) Sea x ∈ X t entonces por 1) sn (x) ≤ f (x) y sn (x) es una sucesión creciente,
por lo que
lim sn (x) = sup {sn (x)} .
n→∞ n∈N
Sea  > 0, supongamos que f (x) ∈ R, por lo que existe n0 ∈ N tal que
f (x) < n0 , entonces existe k ∈ N tal que k < n0 2n0 y
 
k k+1
f (x) ∈ n0 , n0
2 2
por lo que
|f (x) − sn0 (x)| = f (x) − sn0 (x)
k+1 k
≤ − n0
2n0 2
1
= n0 .
2
1
Si tomamos n0 sucientemente grande, tal que
2n0 <  obtenemos que para
n > n0
|f (x) − sn (x)| = f (x) − sn (x)
≤ f (x) − sn0 (x)
1
= n0
2
< .
Si f (x) = ∞ entonces sn (x) = n, por lo que

lim sn (x) = lim n = ∞ = f (x) .


n→∞ n→∞
3) Supongamos que f es acotada, es decir que existe M ∈ N tal que f (x) < M
para todo x ∈ X. Sea n > M , por lo que existe kx < n2n tal que
 
k k+1
f (x) ∈ n , n
2 2
es decir
1
|f (x) − sn (x)| <
2n
para todo x ∈ X, por tanto es inmediato ver la convergencia uniforme. 
El resultado anterior sera muy importante más adelante, ya que nos permite
trabajar con funciones medibles por medio de las simples que las aproximan.
Capítulo 8

Medida y medida exterior

8.1. Medida
Con la estructura conjuntista y funcional que construimos el capítulo anterior,
estamos listos para dar el siguiente paso en dirección de crear nuestra nueva integral,
ya sabemos que queremos medir, los elementos de una σ -álgebra, ya sabemos que
funciones nos interesa integrar, las funciones integrables. Ahora todo se reduce a
poder medir conjuntos, iniciaremos nuevamente con el concepto en abstracto para
posteriormente concentrarnos en los reales.
Primero debemos de ponernos de acuerdo en que debe de cumplir una longitud,
la que llamaremos medida.

Definición 200. Sea (X, A) un espacio medible, diremos que una función
µ : A −→ R es una medida si cumple las siguientes propiedades:
µ1) µ (A) ≥ 0 para todo A ∈ A,
µ2) µ (∅) = 0,
µ3) Sean An ∈ A para toda n ∈ N, disjuntos por pares, entonces

!
[ X
µ An = µ (An ) .
n∈N n=1

Es claro porque las propiedades µ1) y µ2) las debe de cumplir algo que extienda
la noción de longitud. La propiedad µ3) esta totalmente enfocada para trabajar con
serie de funciones.

Ejemplo 201. 1) Sea (X, A) un espacio medible, entonces µ1 , µ2 : A −→ R


denida como:

µ1 (A) = 0
y
0si A = ∅

µ2 (A) =
∞si A 6= ∅
son medidas.
2) Sea (X, A) un espacio medible, entonces µ# : A −→ R denida como:

|A|si A es

nito
µ# (A) =
∞si A es innito.

es una medida, es inmediato que cumple µ1) y µ2). Sean An ∈ A para toda n ∈ N,
disjuntos por pares, si solo un numero nito de las An no es vacío es inmediato que

!
[ X
µ# An = µ# (An ) .
n∈N n=1

107
8.1. MEDIDA 108

Si una innidad de An son no vacíos, entonces


!
[
µ# An =∞
n∈N
y

X ∞
X
µ# (An ) ≥ 1=∞
n=1 n=1

con lo que queda demostrado µ3).


3) Sea (X, A) un espacio medible y x ∈ X, entonces µx : A −→ R denida
como:
1si x ∈ A

µx (A) =
0si x ∈
/A
es una medida. Nuevamente es inmediato que cumple
S µ1) y µ2). Sean An ∈ A para
toda n ∈ N, disjuntos por pares, si x∈
/ An entonces
n∈N
!
[
µx (Ak ) = µx An =0
n∈N
S
para todo k ∈ N. Si x∈ An , entonces existe k∈N tal que x ∈ Ak y si m 6= k ,
n∈N
x∈
/ Am . Por tanto

X
µx (An ) = 1
n=1
!
[
= µx An .
n∈N

Lo que demuestra µ3).


4) Sea el espacio medible (N, P (N)) y (xn ) una sucesión de reales extendidos
no negativos, denimos µ(xn ) : A −→ R como:
X
µ(xn ) (A) = xn .
n∈A

demostrar que es medida se le deja al lector.

Sea (X, A) un espacio medible y µ : A −→ R una medida, la tripleta (X, A, µ)


sera llamada un espacio de medida. Veamos ahora como a partir de medidas pode-
mos construir nuevas medidas.

Proposición 202. Sea (X, A, µ), (X, A, µ0 ) espacios medibles, Y ∈ A y a, b >


0, entonces
1) aµ + bµ0 es una medida en (X, A)
2) La función µY : AY −→ R denida como
µY (A) = µ (A)
es una medida sobre (Y, AY ) (recordemos que AY = {Y ∩ A : A ∈ A} que es una
σ -álgebra por la Proposición 170)
8.1. MEDIDA 109

Demostración. 1), µ1) es inmediato ya que aµ (A) + bµ0 (A) ≥ 0 para todo
A ∈ A. µ2) aµ + bµ (∅) = aµ (∅) + bµ0 (∅) = 0, por último demostremosµ3). Sean
0

An ∈ A para toda n ∈ N, disjuntos por pares, entonces


! ! !
[ [ [
0 0
(aµ + bµ ) An = aµ An + bµ An
n∈N n∈N n∈N

X ∞
X
=a µ (An ) + b µ0 (An )
n=1 n=1

X ∞
X
= aµ (An ) + bµ0 (An )
n=1 n=1
X∞
= (aµ (An ) + bµ0 (An ))
n=1
X∞
= (aµ + bµ0 ) (An ) .
n=1

2) µ1) es inmediato ya que µY (A) = µ (A) ≥ 0 para todo A ∈ A. µ2) µY (∅) =


µ (∅) = 0, por último demostremosµ3). Sean An ∈ A para toda n ∈ N, disjuntos
por pares, entonces
! !
[ [
µY An =µ An
n∈N n∈N

X
= µ (An )
n=1
X∞
= µY (An ) .
n=1

Con la Proposición anterior tenemos una forma de construir muchas medidas


a partir de medidas ya dadas, ahora veamos algunas de las propiedades basicas de
las medidas.

Proposición 203. Sea (X, A, µ) un espacio medible. Si A, B ∈ A y A ⊂ B


entonces µ (A) ≤ µ (B) y si µ (A) < ∞, µ (B \ A) = µ (B) − µ (A) .
Demostración. Primero por ser A σ -álgebra sabemos que B\A ∈ A y por
µ3) tenemos que

µ (B) = µ (B \ A ∪ A)
= µ (B \ A) + µ (A) ,
por lo que µ (A) ≤ µ (B). Ahora si µ (A) < ∞ podemos despejar la última
desigualdad y obtenemos

µ (B \ A) = µ (B) − µ (A) .

8.1. MEDIDA 110

Observación 204. Sean An elementos de una σ -álgebra A, por µ3) solo nos
interesan uniones disjuntas de elementos de A. Si denimos B 1 = A1 y B n =
n−1
S
An \ Ak para n > 1, entonces
k=1
1) Bn ⊂ An ,
2) BSn ∩ Bm =S∅ para n 6= m y
3) An = Bn .
n∈N n∈N S S
Solo veamos 3) ya que 1) y 2) son equivalentes, por 1) An ⊃ Bn , si
S n∈N n∈N
x∈ An entonces existe un primer momento k ∈N tal que x ∈ Ak y x ∈
/ An
n∈N
para todo n < k.

La construcción anterior sera usada repetidamente, la que llamaremos por aj-


enizar la unión, por lo que es importante que se recuerde, veamos un resultado
donde es necesario ajenizar la unión.

Proposición 205. Sea (X, A, µ) un espacio de


 medida
 y An ∈ A, entonces
1) Si An ⊂ An+1 para todo n ∈ N entonces µ An = lim µ (An ) .
S
n∈N n→∞

 2) Si A
n ⊃ An+1 para todo n ∈ N y existe k ∈ N tal que µ (Ak ) < ∞ entonces
An = lim µ (An ) .
T
µ
n∈N n→∞
S S S
Demostración. 1) Ajenizemos la unión An , es decir An = Bn y
n∈N n∈N n∈N
n−1
S
B n = An \ Ak para n > 1 y B 1 = A1 . Al ser (An ) una sucesión creciente
k=1
n−1
S
An \ Ak = An \ An−1 si n > 1.
k=1
Si µ (Ak ) = ∞ para algún k ∈ N, entonces
!
[
∞=µ An = lim µ (An ) .
n→∞
n∈N

Si µ (An ) < ∞ para todo n ∈ N, entonces µ (Bn ) = µ (An ) − µ (An−1 ) y por


tanto
! !
[ [
µ An =µ Bn
n∈N n∈N

X
= µ (Bn )
n=1
k
X
= lim µ (Bn )
k→∞
n=1
= lim µ (Ak ) .
k→∞

Ahora demostremos 2). Si existe k ∈ N tal que µ (Ak ) < ∞ entonces


T (Ar ) < ∞
µT
para todo r>k y además por ser una sucesión decreciente An = An , por
n∈N n>k
8.1. MEDIDA 111

lo que se puede suponer si perdida de generalidad que


  µ (A1 ) < ∞ y pot tanto
T
µ (An ) < ∞ para todo n ∈ N, además µ An ≤ µ (A1 ) < ∞.
n>k
Observemos que
  A1 \
En := En ⊂ En+1 para todo n ∈ N y
An cumple que
S S
entonces por 1) µ En = lim µ (En ) . Ahora Observemos que (A1 \ An ) =
n∈N n→∞ n∈N
T S
A1 \ (An ) ya que si x ∈ (A1 \ An ) entonces existe k ∈ N tal que x ∈ A1 \ Ak ,
n∈N n∈N T T
por lo que x ∈ / Ak y por tanto x ∈ / (An ). Si x ∈ A1 \ (An ) entonces
T n∈N n∈N
x∈/ (An ), es decir existe k ∈ N tal que x ∈/ Ak y por tanto
n∈N
[
x ∈ A1 \ Ak ⊂ (A1 \ An ) .
n∈N

Por tanto
! !
\ \
µ (A1 ) − µ (An ) = µ A1 \ (An )
n∈N n∈N
!
[
=µ (A1 \ An )
n∈N
!
[
=µ En
n∈N
= lim µ (En )
n→∞
= lim µ (A1 − An )
n→∞
= lim (µ (A1 ) − µ (An ))
n→∞
= µ (A1 ) − lim µ (An ) .
n→∞
   
T T
Como µ (An ) < ∞ despejando tenemos que µ (An ) = lim µ (An ) .
n∈N n∈N n→∞

Proposición 206. Sea (X, A, µ) un espacio de medida, si An ∈ A para todo
n ∈ N entonces

!
[ X
µ (An ) ≤ µ (An ) .
n∈N n=1

Demostración. Recordemos que podemos ajenizar los conjuntos con Bn ⊂


An , entonces
! !
[ [
µ (An ) =µ (Bn )
n∈N n∈N

X
= µ (Bn )
n=1
X∞
≤ µ (An ) .
n=1
8.1. MEDIDA 112


Diremos en un espacio medible (X, A, µ) que una propiedad P sobre X se
cumple casi donde quiera (lo que escribiremos como a.e.) si el conjunto

A := {x ∈ X : x no cumple P}
esta contenido en un conjunto B ∈ A tal que µ (B) = 0. Es importante notar que
no necesariamente porque A ⊂ B y µ (B) = 0 signica que A ∈ A. Por ejemplor la
medida cero en el espacio medible (X, {∅, X}) .

Definición 207. El conjunto nulo de un espacio medible (X, A, µ) es el con-


A ∈ A tales que µ (A) = 0 y lo denotaremos por N (µ). Diremos que el
junto de los
espacio medible (X, A, µ) es completo si para todo B ⊂ A con A ∈ N (µ), se tiene
que B ∈ A.

Ahora veremos que todo espacio medible se puede completar, es decir, dado un

espacio medible (X, A, µ) siempre es posible construir un espacio medible X, A, µ
tal que A ⊂ A y µA = µ. Por lo anterior podemos en general siempre trabajar en
un espacio medible completo.

Proposición 208. Sea un espacio medible (X, A, µ) y denimos el conjunto


A := {(A ∪ M1 ) \ M2 : A ∈ A, Mi ⊂ Ni para Ni ∈ N (µ) con i ∈ {1, 2}} .
Entonces
1) A0 ∈ A si y solo si existen A ∈ A, M ⊂ N , con N ∈ N (µ) tales que
A0 = A ∪ M ,
2) A es una σ -álgebra y A ⊂ A,
3) µ : A −→ R denida como µ (A0 ) = µ (A) donde A ∈ A es tal que existe
M ⊂ N , con N ∈ N (µ) y A0 = A ∪ M , esta bien denida y µA = µ,
4) X, A, µ es completo,


5) Si A ⊂ C ⊂ B , A, B ∈ A tales que µ (B \ A) = 0 entonces C ∈ A.


Demostración. 1) El regreso es inmediato, solo demostraremos la ida. Si
A0 ∈ A entonces por denición A0 = (A ∪ M1 ) \ M2 , A ∈ A, Mi ⊂ Ni para Ni ∈
N (µ) con i ∈ {1, 2}. Observemos que
(A ∪ M1 ) \ M2 = (A ∪ M1 ) ∩ M2c
= (A ∩ M2c ) ∪ (M1 ∩ M2c )
= (A ∩ (N2c ∪ (M2c \ N2c ))) ∪ (M1 \ M2 )
= (A ∩ N2c ) ∪ (A ∩ (M2c \ N2c )) ∪ (M1 \ M2 )
= (A ∩ N2c ) ∪ (A ∩ M2c ∩ N2 ) ∪ (M1 \ M2 ) .
Claramente (A ∩ N2c ) ∈ A, (A ∩ M2c ∩ N2 ) ⊂ N2 y M 1 \ M 2 ⊂ N2 , con lo que
se demuestra la ida.
2) Es inmediato que X ∈ A. Si A ∈ A entonces por 1) A = A0 ∪ M donde
0
A ∈ A y M ⊂ N ∈ N (µ), por lo que
c
Ac = (A0 ∪ M )
c
= (A0 ) ∩ M c
= A0c \ M,
de donde es inmediato que Ac ∈ A por la denición de A.
8.1. MEDIDA 113

0 0
An ∈ A para todo n ∈ N, entonces An = An ∪ Mn
Por último, si donde An ∈ A
y Mn ⊂ Nn ∈ N (µ) para todo n ∈ N. Por tanto
[ [ 0 
(An ) = An ∪ M n
n∈N n∈N
! !
[ 0 [
= An ∪ Mn ,
n∈N n∈N
S 0 S S
el conjunto An ∈ A y Mn ⊂ Nn ∈ N (µ) ya que
n∈N n∈N n∈N


!
[ X
µ Nn ≤ µ (Nn ) = 0.
n∈N n=1
S
por tanto (An ) ∈ A. Como el conjunto ∅ ∈ N (µ) es inmediato que A⊂A
n∈N
3) Veamos que µ esta bien denida, es decir si A ∈ A y A = A1 ∪M1 = A2 ∪M2
donde An ∈ A y Mn ⊂ Nn ∈ N (µ) para n ∈ {1, 2}.
Observemos que A1 ∪ N1 ∪ N2 = A2 ∪ N1 ∪ N2 . Si x ∈ N1 ∪ N2 entonces
x ∈ A2 ∪ N1 ∪ N2 , si x ∈ A2 , entonces

x ∈ A = A2 ∪ M2 ⊂ A2 ∪ N1 ∪ N2 .

Lo que demuestra queA1 ∪N1 ∪N2 ⊂ A2 ∪N1 ∪N2 . Análogamente se demuestra


que A1 ∪ N1 ∪ N2 ⊃ A2 ∪ N1 ∪ N2 . Con lo anterior tenemos que

µ (A1 ) = µ (A1 ∪ N1 ∪ N2 )
= µ (A2 ∪ N1 ∪ N2 )
= µ (A2 )
y por tanto µ µA = µ.
esta bien denida. Es claro que

4) Veamos que X, A, µ es completo. Si A ∈ A y µ (A) = 0 entonces A = A0 ∪M



0 0
donde A ∈ A y M ⊂ N ∈ N (µ) y µ (A ) = 0. Sea F ⊂ A, entonces F = ∅ ∪ F y
0 0
F ⊂ A ∪ N donde µ (A ∪ N ) = 0. Por tanto F ∈ A.
5) Sean A ⊂ C ⊂ B , A, B ∈ A tales que µ (B \ A) = 0, Por lo que C \A ⊂ B \A,
por 4) C \ A ∈ A, con lo que concluimos que

C = C \ A = (C \ A) ∪ A ∈ A.

Veamos un último corolario técnico que usaremos más adelante. Para esto nece-
sitamos introducir el concepto de límite superior y límite inferior de conjuntos.

Definición 209. Sean An ⊂ X conjuntos, entonces denimos el límite superior


de An que lo denotaremos por lim An como
n→∞
 
\ [
 Ak 
n∈N k≥n
8.1. MEDIDA 114

y denimos el límite inferior de An que lo denotaremos por lim An como


n→∞
 
[ \
 Ak  .
n∈N k∈≥n

Ejercicio 210. Sean An ⊂ X conjuntos, entonces el conjunto lim An esta


n→∞
formado por todos los x ∈ X que pertenecen a una innidad de An con n ∈ N, el
conjunto lim An esta formado por los x ∈ X tal que existe un momento k ∈ N,
n→∞
para el cual si n≥k entonces x ∈ An . Concluya que lim An ⊂ lim An .
n→∞ n→∞

Es inmediato que si (X, A) es un espacio medible entonces lim An , lim An ∈


n→∞ n→∞
A. Para terminar la sección veamos el siguiente corolario.

Corolario 211. Sea (X, A, µ) un espacio medible y An ∈ A para toda n ∈ N.


Entonces 
1) µ lim An ≤ lim µ (An ).
n→∞
  n→∞
 
2) Si µ < ∞ entonces lim (An ) ≤ µ lim An .
S
An
n∈N n→∞ n→∞

T T
Demostración. 1) Es claro que Ak ⊂ Ak si n < m, entonces por la
k≥n k≥m
proposición 205
  
  [ \
µ lim An = µ  Ak 
n→∞
n∈N k≥n
 
\
= supµ  Ak 
k≥1
k≥n

≤ sup inf {µ (An )} .


k≥1n≥k
S S
2) Es claro que Ak ⊃ Ak si n < m, entonces por la proposición 205
k≥n k≥m
 
S
(usando que µ An < ∞)
n∈N
  
  \ [
µ lim An = µ  Ak  
n→∞
n∈N k≥n
 
[
= inf µ  Ak 
k≥1
k≥n

≥ inf sup {µ (An )} .


k≥1n≥k


8.2. MEDIDA EXTERIOR 115

8.2. Medida exterior


En esta sección veremos la denición de una medida exterior, de la cual pode-
mos siempre obtener una medida, esto nos da en general una manera de construir
medidas.

Definición 212. Sea X un conjunto no vacío y una función µ : P (X) −→ R,


decimos que µ es una medida exterior si:
e1) µ ≥ 0,
e2) µ (∅) = 0,
e3) Si B ⊂ A entonces µ (B) ≤ µ (A) y

 
S P
e4) µ An ≤ µ (An ) para An ⊂ X .
n∈N n=1

Ejemplo 213. Sea X un conjunto, denimos las funciones

0si A = ∅

µ1 (A) :=
1si A 6= ∅
y
0si A es numerable

µ2 (A) :=
1si A no es numerable.
Tanto
µ1 y µ2son medidas exteriores. Solo demostraremos e4) para µ2 .
S
Si µ2 An = 0 entonces An es numerable para todo n ∈ N y por tanto
n∈N

P
µ2 (An ) = 0.
n=1  
S S
Si µ2 An = 1 An es numerable, pero unión numerable de
entonces
n∈N n∈N
numerables es numerable, por lo que existe k ∈ N tal que Ak no es numerable y
por tanto µ2 (Ak ) = 1, con lo que concluimos que


!
[ X
µ2 An = 1 = µ2 (Ak ) ≤ µ2 (An ) .
n∈N n=1

Ahora necesitaremos denir un nuevo concepto, más débil que una σ -álgebra.
Definición 214. Sea X un conjunto no vacío, y A∗ ⊂ P (X), diremos que A∗
es un álgebra si
a1) Si A, B ∈ A∗ entonces A \ B ∈ A∗ ,
a2) Si A, B ∈ A∗ entonces A ∪ B ∈ A∗ y
a3) X ∈ A∗
Claramente un álgebra es más débil que una σ -álgebra, veamos ahora un ejem-
plo que nos interesara más adelante.

Ejemplo 215. Sea el conjunto

A∗ := {unión disjunta y nita de intervalos de la forma (a, b] , (−∞, b] y (a, ∞)}∪{∅} ,


entoces A∗ es un álgebra en R, la demostración de este hecho se deja al lector.
8.2. MEDIDA EXTERIOR 116

Es claro que A∗ no es una σ -ágebra ya que


\ 1 
{0} = − ,0 ∈ / A∗ .
n
n∈N

Ahora que tenemos algo más débil que una σ -álgebra es natural pensar que
tendremos algo más débil que una medida.

Definición 216. Sea A∗ un álgebra en X, decimos que µ : A∗ −→ R es una


casi medida si
c1) µ (∅) = 0,
c2) µ (A) ≥ 0 para todo A ∈ A∗ y
c3) si An ∈ A∗ para todo n ∈ N, An ∈ A∗ ,
S
son disjuntos por pares y
n∈N
entonces

!
[ X
µ An = µ (An ) .
n∈N n=1

Veremos que si partimos de una casi medida podemos construir una medida
exterior a partir de esta, pero para esto observemos primero que al igual que en la
demostración de medida, si Si An ∈ A∗ para todo n ∈ N, son disjuntos por pares y

S
An ∈ A , entonces
n∈N

!
[ X
µ An ≤ µ (An ) .
n∈N n=1

Teorema 217. Sea X un conjunto no vacío, A∗ un álgebra y µ : A∗ −→ R


una casi medida, denimos µ∗ : P (X) −→ R como:

( )
µ (A) := inf An y An ∈ A
X [
∗ ∗
µ (An ) : A ⊂ ,
n=1 n∈N

si A ⊂ An diremos que la sucesión (An ) es una A∗ cubierta de A. Entonces


S
n∈N
µ∗ es una medida exterior y la llamaremos la medida exterior generada por µ. Más
aun µ∗A∗ = µ.
Demostración. e1) Es inmediata por denición y por ser µ ≥ 0.
e2) Si denimos An = ∅ ∈ A∗ para todo n ∈ N obtenemos que

X
0 ≤ µ∗ (∅) ≤ µ (An ) = 0.
n=1

e3) SiB ⊂ A y (An ) es una A∗ cubierta de A, entonces también es una A∗


cubierta de B , por lo que

µ∗ (B) ≤ µ∗ (A) .
e4) Sean An ⊂ X para n ∈ N. Si µ∗ (An ) = ∞ para algún n∈N entonces es
inmediato que

!
[ X

µ An ≤∞= µ∗ (An ) .
n∈N n=1
8.3. LA MEDIDA EXTERIOR DE LEBESGUE EN R 117

µ∗ (An ) < ∞ para todo


Si
 n ∈ N. Sea >0 entonces para toda k∈N existe

una A cubierta de Ak , Akn tal que

X 
µ Akn ≤ µ∗ (Ak ) + k ,

n=1
2

An : n, k ∈ N es una A∗ cubierta de
 k S
pero la colección An , por lo que
n∈N
∞ ∞
! !
[ X X

Akn

µ An ≤ µ
n∈N k=1 n=1
∞ 
X
∗  
≤ µ (Ak ) +
2k
k=1

X
=+ µ∗ (Ak ) ,
k=1

 

µ∗ (Ak ) .
S P
lo anterior para todo  > 0, por tanto µ An ≤
n∈N k=1
Solo falta demostrar que si A∈ A∗ entonces µ (A) = µ∗ (A). Es inmediato por

la denición de µ que
µ (A) ≥ µ∗ (A) ,
debido a que A, ∅, ∅, ∅... es una cubierta de A.

Sea (An ) una A cubierta de A entonces
!
[
µ (A) = µ (An ∩ A)
n∈N

X
≤ µ (An ∩ A)
n=1
X∞
≤ µ (An )
n=1

y por tanto µ (A) ≤ µ∗ (A). 

8.3. La medida exterior de Lebesgue en R


Construiremos una medida exterior a partir de saber la medida de intervalos
de la forma (a, b], (−∞, b] y (a, ∞) para a, b ∈ R. diremos que la longitud de un
intervalo de los anteriores es l ((a, b]) = b − a, l ((−∞, b]) = ∞, l ((a, ∞)) = ∞ y
l (∅) = 0.
Consideremos el álgebra A∗ del Ejemplo 215. La que denotaremos por I (R).
Proposición 218. Usando la notación previa, A (I (R)) = B (R) .
Demostración. Del Ejercicio 177 sabemos que A ({(a, b] : a, b ∈ R}) = B (R),
por lo que A (I (R)) ⊃ B (R), además I (R) ⊂ B (R), por tanto A (I (R)) ⊂ B (R).

Proposición 219. Sean In y Jn intervalos de la forma (a, b], (−∞, b] y (a, ∞)
o son vacío, para a, b ∈ R. Si Jn y los intervalos In son disjuntos por
S S
In =
n∈N n∈N
8.3. LA MEDIDA EXTERIOR DE LEBESGUE EN R 118

∞ ∞
pares, entonces l (Jn ). Por tanto si los Jn son disjuntos por pares
P P
l (In ) ≤
n=1 n=1
∞ ∞
entonces
P P
l (In ) = l (Jn ) .
n=1 n=1

P ∞
P
Demostración. Supongamos que l (In ) > l (Jn ), entonces existe un
n=1 n=1
M
P ∞
P
M ∈N tal que l (In ) > l (Jn ), sea
n=1 n=1

M
X ∞
X
a= l (In ) − l (Jn ) > 0.
n=1 n=1

Supongamos que In es acotado para toda


0
h i n ∈ N, entonces In = (an , bn ] para
1 1
an , bn ∈ R, consideremos In donde s es tal que an −
= an + sn , bn < bn sn
1 a
y
sn < 2n+1 . Si Jn no es acotado para alguna n ∈ N ya terminamos, por lo
que supongamos que Jn = (cn , dn ] donde dn y cn son reale, entonces denimos
0
 
Jn = cn , dn + s1n
M M
[ 0 [
In ⊂ In
n=1 n=1
[∞
⊂ Jn
n=1

[ 0
⊂ Jn
n=1
y
∞  ∞ ∞
M   M
! !
X 0 X 0
 X 1 XX 1
l In − l Jn = l (In ) − − l (Jn ) +
n=1 n=1 n=1
sn n=1
s
n=1 n
∞ ∞
M
! M
X X X 1 X 1
= l (In ) − l (Jn ) − −
n=1 n=1
s
n=1 n
s
n=1 n

X a
>a−2 n+1
n=1
2
= 0.
0
M
S 0
n 0 o
Cada In es cerrado y acotado, por tanto In es compacto y Jn : n ∈ N es
n=1
una cubierta abierta, pero

M   K  
X 0 X 0
l In − l Jn > 0,
n=1 n=1

M
S 0
K
S M
S 0
por lo que es imposible que In ⊂ Jn , por, es decir In no tiene subcubiertas
n=1 n=1 n=1

P ∞
P
nitas, esto es contradictorio y por tanto l (In ) ≤ l (Jn ).
n=1 n=1
8.4. EL TEOREMA DE CARATHÉODORY 119

Ahora supongamos hay In que son no acotados, estos se pueden ver como
uniones numerables de intervalos de la forma (ak , bk ] y más aun

X
∞ = l (In ) = l ((ak , bk ]) ,
k=1

por lo que al nal de cuentas podemos suponer que todos los In son acotados y la
prueba queda completa. 
Corolario 220. La función λ∗ : I (R) −→ R denida como
M
! M
[ 0 X

λ In = l (An )
n=1 n=1

donde An es un intervalo de la forma (a, b] , (−∞, b] y (a, ∞) y λ∗ (∅) = 0 es una


casi medida.
Demostración. c1) λ∗ (∅) = 0.

c2) Claramente λ (A) ≥ 0 para todo A ∈ I (R). 
An ∈ A∗ ,
S
c3) Si An ∈ I (R) para todo n ∈ N, son disjuntos por pares y
n∈N
entonces existen Bn intervalos de la forma (a, b] , (−∞, b] y (a, ∞) para n ∈
{1, 2, ..., k} tales que

[ k
[
An = Bn
n∈N n=1
y por tanto usando la proposición anterior obtenemos que
! k
!
[ [
λ∗ An = λ∗ Bn
n∈N n=1
k
X
= I (Bn )
n=1
X∞
= I (An ) .
n=1

Ahora por la sección anterior sabemos que λ∗ crea una medida exterior λ : P (R) −→

R que extiende a la medida λ , es decir que conserva la longitud de los intervalos.
Ahora el siguiente paso sera ltrar el conjunto P (R) para obtener una medida que
denotaremos por λ.

8.4. El teorema de Carathéodory


Ahora procederemos a obtener una σ -álgebra a partir de una medida exterior,
de tal forma que la restricción de la medida exterior a la σ -álgebra sea una medida.
Definición 221. Sea µ : P (X) −→ R medida exterior, diremos que A⊂X es
µ medible si
µ (B) = µ (B ∩ A) + µ (B ∩ Ac ) ,
para todo B ⊂ X. El conjunto de los subconjuntos µ medibles lo denotaremos por
Aµ .
8.4. EL TEOREMA DE CARATHÉODORY 120

Antes de continuar demostraremos un lema que nos ayudara a demostrar el


teorema principal de esta sección.

Lema 222. Sea A un álgebra de un conjunto X , tal que para toda colección

disjunta 2 a 2 de conjuntos An ∈ A∗ se tiene que An ∈ A∗ , entonces A∗ es una


S
n∈N
σ -álgebra.
Demostración. Sea una colección de conjuntos An ∈ A∗ para n ∈ N, entonces
∗ ∗
podemos desjuntar la unión, en conjuntos Bn ∈ A por ser A álgebra y
[ [
An = Bn .
n∈N n∈N

Bn ∈ A ∗ , An ∈ A ∗
S S
Por hipótesis por tanto con lo que terminamos la
n∈N n∈N
demostración. 
Teorema 223. (Carathéodory) Sea µ : P (X) −→ R medida exterior, denote-
mos por µ la restricción de µ a Aµ , entonces:
a) Aµ es una σ -álgebra,
b) La tripleta (X, Aµ , µ) es un espacio medible compreto y
c) Si µ es la medida exterior generada por la casi medida µ∗ en el algrabra A∗ ,
entonces A (A∗ ) ⊂ Aµ y µ = µ∗ en A∗ .
Demostración. a) A1) Observemos que si A ∈ Aµ , entonces para todo B⊂
X
µ (B) = µ (B ∩ A) + µ (B ∩ Ac )
c
= µ (B ∩ (Ac ) ) + µ (B ∩ Ac ) .
c
Con lo que obtenemos que A ∈ Aµ .
A3) Claramente
µ (B) = µ (B ∩ X) + µ (B ∩ ∅)
para todo B ⊂ X. X ∈ Aµ .
Por tanto
A2) Primero demostremos que si A1 y A2 son ajenos y elementos de Aµ entonces
A1 ∪ A2 ∈ Aµ . Observemos que
µ (B ∩ A1 ) = µ ((B ∩ A1 ) ∩ A2 ) + µ ((B ∩ A1 ) ∩ Ac2 )
= µ ((B ∩ A1 ) ∩ Ac2 )
y
µ (B ∩ Ac1 ) = µ ((B ∩ Ac1 ) ∩ A2 ) + µ ((B ∩ Ac1 ) ∩ Ac2 )
por lo que

µ (B) = µ (B ∩ A1 ) + µ (B ∩ Ac1 )
(8.4.1) = µ ((B ∩ A1 ) ∩ Ac2 ) + µ ((B ∩ Ac1 ) ∩ A2 ) + µ (B ∩ (Ac1 ∩ Ac2 )) .
= µ (B ∩ A1 ) + µ (B ∩ A2 ) + µ (B ∩ (Ac1 ∩ Ac2 ))
Sustituyendo en (8.4.1) a B por B ∩ (A1 ∪ A2 ) obtenemos que

(8.4.2) µ (B ∩ (A1 ∪ A2 )) = µ (B ∩ A1 ) + µ (B ∩ A2 )
y por tanto

µ (B) = µ (B ∩ A1 ) + µ (B ∩ A2 ) + µ (B ∩ (Ac1 ∩ Ac2 ))


= µ (B ∩ (A1 ∪ A2 )) + µ (B ∩ (Ac1 ∩ Ac2 ))
c
= µ (B ∩ (A1 ∪ A2 )) + µ (B ∩ (A1 ∪ A2 ) ) .
8.4. EL TEOREMA DE CARATHÉODORY 121

Recordemos por el lema anterior que es suciente demostrar que la unión dis-
junta y numerable de elementos de Aµ que queda en Aµ .
Usando inducción en la ecuación (8.4.2) obtenemos que

k
! k
[ X
µ B∩ An = µ (B ∩ A1 )
n=1 n=1

k
An ∈ A∗ )
S
para todo k ∈ N, por tanto (usando que µ es medida exterior y que
n=1

k
! k
!c !
[ [
µ (B) = µ B ∩ An +µ B∩ An
n=1 n=1
k k
!c !
X [
= µ (B ∩ A1 ) + µ B ∩ An
n=1 n=1
k ∞
!c !
X [
≥ µ (B ∩ A1 ) + µ B ∩ An
n=1 n=1

para todo k ∈ N, con lo que concluimos que

∞ ∞
!c !
X [
µ (B) ≥ µ (B ∩ A1 ) + µ B ∩ An
n=1 n=1

! ∞
!c !
[ [
≥µ B∩ An +µ B∩ An
n=1 n=1
≥ µ (B) .

b) Veamos que µ es una medida.


m1) µ ≥ 0 por ser restricción de una medida exterior.
m2) µ (∅) = µ (∅) = 0.
m3) Sea An ∈ Aµ para todo n ∈ N y disjuntos por pares, entonces por lo

S
demostrado en a) si tomamos a B = An tenemos que
n=1

∞ ∞
! !
[ [
µ An =µ B∩ An
n=1 n=1

X
≥ µ (B ∩ A1 )
n=1
X∞
= µ (A1 )
n=1

!
[
≥µ An .
n=1
8.4. EL TEOREMA DE CARATHÉODORY 122

Ahora veamos que es completa, sea N ∈ Aµ tal que µ (N ) = 0, entonces para


A⊂N y B⊂X
µ (B) ≤ µ (B ∩ A) + µ (B ∩ Ac )
≤ µ (N ) + µ (B)
= µ (B) .
Con lo que concluimos que A ∈ Aµ .
c) Por último, si A ∈ A∗ , por ser µ la extensión de la casi medida µ∗ , sea
B ⊂ X , si µ (B) = ∞ es inmediato que
µ (B) = µ (B ∩ A) + µ (B ∩ Ac ) .
Supongamos que µ (B) < ∞, por lo que para toda  > 0 existe una A∗ cubierta
An tal que

X
µ∗ (A1 ) ≤ µ (B) + ,
n=1
por lo que existe k∈N tal que
∞ ∞
! !
[ [
µ (B ∩ A) + µ (B ∩ Ac ) ≤ µ An ∩ A +µ An ∩ Ac
n=1 n=1

X ∞
X
≤ µ (An ∩ A) + µ (An ∩ Ac )
n=1 n=1
X∞
= µ (An ) ≤ µ (B) + .
n=1
para toda  > 0. Por tanto A ∈ A∗ . 
Ahora veamos una denición que nos ayudara a demostrar otro teorema im-
portante.

Definición 224. Sea (A, µ) un espacio de medida, diremos que µ σ -nita


es

S
si existen conjuntos An ∈ A para todo n∈N tales que µ (An ) < ∞ y X= An .
n=1
Análogamente denimos casi medidas σ -nitas
Un ejemplo de una medida σ -nita son los naturales con la medida de conteo, un
ejemplo de una medida que no es sigmanita es cualquier σ -álgebra con la medida
µ∞ tal que
0si A = ∅

µ∞ (A) =
∞si A 6= ∅.
Teorema 225. (Hahn) Misma notación que el teorema anterior, sea (X, S, v)
un espacio de medida tal que Aµ ⊂ S y vA∗ = µ∗ , entonces si µ∗ es una casi
medida σ -nita, µ (A) = v (A) para todo A ∈ Aµ .
Demostración. Tomemos conjuntos En ∈ A∗ para todo n ∈ N tales que

µ∗ (En ) < ∞
S
y X= En y denamos. Es inmediato que para todo A ∈ Aµ
n=1
µ (A) = lim µ (A ∩ En )
n→∞
y
v (A) = lim v (A ∩ En )
n→∞
8.5. LA MEDIDA DE LEBESGUE 123

por lo que es suciente demostrar que µ (Fn ) = v (Fn ) donde Fn := A ∩ En .


Sea An una A∗ cubierta de Fm , entonces


!
[
v (Fm ) ≤ v An
n=1

X
≤ v (An )
n=1
X∞
= µ (An )
n=1
 m

S
µ (Fm ) ≥ v (Fm ). De manera análoga se demuestra que µ
por lo que An \ Fm ≥
m  n=1
S
v An \ Fm pero por hipótesis
n=1
m
! m
!
[ [
µ (Fm ) + µ An \ Fm = v (Fm ) + v An \ Fm
n=1 n=1

y al ser los dos nitos concluimos que µ (Fm ) = v (Fm ) .


El resultado anterior demuestra la unicidad de la extensión bajo la suposición
de que la casi medida es σ nita. 

Es fácil ver que la medida sea σ -nita es necesario en el teorema anterior.


Sea el espacio de medida (N, {N, ∅} , µ∞ ), donde
(
0 si A = ∅
µ∞ (A) =
∞ si A = N.
Se puede ver que
(
0 si A=∅
µ∞ =
∞ si A 6= ∅.
y que Aµ = P (N). Pero la medida de conteo µ# también es una extención de µ∞
que no coincide con µ∞ .

8.5. La medida de Lebesgue


Ahora caeremos en el caso de R y la medida generada a partir de la medida
exterior de Lebesgue.

Definición 226. Sea λ∗ la casi medida denida en 220, esta sera llamada
la casi medida de Lebesgue, aplicando el Teorema de Carathéodory generamos la
medida de Lebesgue λ la cual tiene como domino Aλ , esta σ -álgebra sera denotada
por L (R) y si B ∈ L (R), diremos que B es Lebesgue medible.
Corolario 227. B (R) ⊂ L (R).
Demostración. Por el Teorema de Carathéodory sabemos que

A (I (R)) = B (R) ⊂ L (R) .



8.5. LA MEDIDA DE LEBESGUE 124

Proposición 228. Tenemos que para todo E ∈ L (R) y x ∈ R,


1) λ (E + x) = λ (E) ,
2) λ (E) = 0 si E es numerable,
3) λ (E) < ∞ si E es acotado,
4) (R, L (R) , λ) es σ -nito,
∞ m

5) λ (E) = inf (an , bn ) y
P S
(bn − an ) : E ⊂
n=1 n=1
6) λ (a, b) = b − a.
Demostración. 1) Es inmediato debido a que l (a, b) = l (a + x, b + x) y que
m
S
si E⊂ In entonces
n=1
m
[
E+x⊂ In
n=1
para cualquier In ⊂ R.
2) Sea E = {x1 , x2 , ...}, denimos los conjuntos
  i
In := xn − n , xn ,
2

S
entonces E⊂ In y
n=1
∞ 
X   
λ (E) ≤ xn − xn − n
n=1
2

X 
=
n=1
2n
= .
Lo anterior es para toda  > 0, por tanto λ (E) = 0.
3) Si E es acotado, entonces existe n∈N tal que E ⊂ (−n, n) ⊂ (−n, n] y por
tanto λ (E) ≤ 2n.

S
4) Es inmeditato de 3) ya que R= (−n, n] y λ ((−n, n]) = 2n < ∞.
n=1
∞ ∞
 
P S
5) Sea E ⊂R y a= inf (bn − an ) : E ⊂ (an , bn ) . Sea In = (an , bn )
n=1 n=1

S 0
para todo n ∈ N tal que E ⊂ (an , bn ), si denimos In = In si bn = ∞ y
n=1
0
In = (an , bn ] si bn < ∞ entonces
∞ ∞
[ [ 0
E⊂ In ⊂ In ,
n=1 n=1
por lo que
∞   ∞
X 0 X
λ (E) ≤ l In = (bn − an )
n=1 n=1
y por tanto λ (E) ≤ a.

S
Por otra parte, sean In una I (R) cubierta de E, es decir E⊂ In donde In
n=1
es un intervalo de la forma (an , bn ] o (an , ∞) para an ∈ R ∪ {−∞} y bn ∈ R. Sea
8.5. LA MEDIDA DE LEBESGUE 125

0 0


 > 0, denimos In = In si bn = ∞ y In = an , bn + 2n+1 si bn < ∞ , entonces

∞ ∞
[ [ 0
E⊂ In ⊂ In
n=1 n=1
y

∞ 
X  
a≤ bn + − an
n=1
2n+1
∞ ∞
X X 
= (bn − an ) + n+1
n=1 n=1
2
X∞
= (bn − an ) + 
n=1

P
para todo  > 0, entonces a≤ (bn − an ), esto para toda I (R) cubierta de E.
n=1
Por tanto a ≤ λ (E) .
6) Usando 2) tenemos que

λ ((a, b)) = λ ((a, b] \ {b})


= λ ((a, b]) − λ ({b})
= b − a.


Proposición 229. Sea E ⊂ R, entonces son equivalentes:


1) E ∈ L (R),
2) Para toda  > 0 existe abierto E ⊂ O tal que λ (O) − λ (E) < ,
3) Para todo  > 0 existe compacto K ⊂ E tal que λ (E) − λ (K) < ,
4) Existe conjunto Gδ G tal que E ⊂ G y λ (G) = λ (E) ,
5) Existe conjunto Fσ F tal que F ⊂ E y λ (F ) = λ (E) ,
6) Existe conjunto A ∈ L (R) tal que λ (A4E) = 0.
Demostración. Parte de las implicaciones se dejaran al lector.
1) ⇒ 2) Por la Proposición anterior sabemos que para toda  > 0 existen

S
intervalos (an , bn ) para n∈N tal que E⊂ (an , bn ) y
n=1

X
λ (E) +  > (bn − an ) ,
n=1

S
sea O= (an , bn ), entonces
n=1

X
λ (O) − λ (E) ≤ (bn − an ) − λ (E)
n=1
∞ ∞
!
X X
< (bn − an ) − (bn − an ) − 
n=1 n=1
= .
8.5. LA MEDIDA DE LEBESGUE 126

3) ⇒ 5) Recordemos que un conjunto Fσ es una unión numerable de cerrado.


1
Sabemos que para
n existe conjunto Fn que es compacto (por lo que es cerrado),
Fn ⊂ E y
1
λ (E) − λ (Fn ) <
n

S
por lo que F = Fn es Fσ y
n=1

λ (E) − λ (F ) ≤ λ (E) − λ (Fn )


1
<
n
para todo n ∈ N. Por tanto λ (F ) = λ (E).
6) ⇒ 1) Supongamos que existe conjunto A ∈ L (R) tal que λ (A4E) = 0, por
tanto para todo B ⊂ R
c
λ (B) ≤ λ (B ∩ (A4E)) + λ (B ∩ (A4E) )
≤ λ (A4E) + λ (B)
= λ (B) .
Por lo anterior A4E ∈ L (R) y por tanto E \ A ∈ L (R) (por ser una medida
completa). Observemos que
c c
(A4E) ∩ A = (A \ E ∪ E \ A) ∩ A
c c
= (A \ E) ∩ (E \ A) ∩ A
c c
= (A ∩ E c ) ∩ (E ∩ Ac ) ∩ A
= (Ac ∪ E) ∩ (E c ∪ A) ∩ A
= (E ∩ A) ∩ (E c ∪ A) = (E ∩ A)
por lo que E ∩ A ∈ L (R), concluimos que E = E \ A ∪ (A ∩ E) ∈ L (R) . 
Una pregunta que nace naturalmente es si L (R) = P (R), Lebesgue en un
principio estaba totalmente seguro de la igualdad anterior, pero no podía dar un
prueba de este hecho, algo que lo llevaba a pensar que la igual era cierta, era saber
que |L (R)| = |P (R)| . Lo anterior es fácil de ver debido a que el conjunto de cantor
C es Lebesgue medible por ser cerrado, más aun, al construir el conjunto de cantor,
uno construye conjuntos Cn que proviene de quitar el tercio de en medio a todos
los intervalos cerrados de Cn−1 , donde C1 = [0, 1]. Uno dene el conjunto de cantor

2n−1
T
como C= Cn y puede ver que los conjuntos Cn es la unión de intervalos
n=1
1
de longitud n−1 , por lo que
3
λ (C) ≤ λ (Cn )
 n−1
2
= ,
3
haciendo tender n a innito obtenemos que λ (C) = 0. Por ser la medida completa
sabemos que todo subconjunto de C es Lebesgue medible, pero |C| = |R| y con lo
que concluimos que

|P (R)| ≥ |L (R)| ≥ |P (C)| = |P (R)| .


8.5. LA MEDIDA DE LEBESGUE 127

Por tanto suena posible que todo subconjunto de R sea Lebesgue medible, más
aun, como comentamos anteriormente, se puede mostrar que los borelianos son
tantos como reales, por tanto existen muchísimos conjuntos Lebesgue medibles que
no son borel medible.
Capítulo 9

Conjuntos no Lebesgue medibles y no borel

medibles

9.1. Vitali
En 1905 Vitali demostró usando axioma de elección que existía un conjunto
no Lebesgue medible, Lebesgue después de estudiar arduamente el conjunto que
construyo Vitali, el único punto débil que le encontró fue la dependencia del axioma
de elección, por lo que reto al mundo matemático a dar un ejemplo que no necesitara
el axioma de elección.
Años después, Solovay en 1970 muestra que se puede construir un modelo donde
los axiomas de Zermelo Fraenkel sin axioma de elección todo subconjunto de R es
Lebesgue medible. Es decir jamas se podrá dar un ejemplo sin axioma de elección
que no sea medible.
Estudiaremos el ejemplo que dio Vitali de conjunto no medible.

Teorema 230. (Vitali) Existe un subconjunto V ⊂ R que no es Lebesgue


medible.
Demostración. Denamos la relación ∼ en [0, 1] como x ∼ y si y solamente
six−y ∈ Q. Veamos que ∼ es de equivalencia, el unico problema se puede presentar
en la transitividad. Si x ∼ y ∼ z entonces x − y, y − z ∈ Q, por lo que

(x − y) − (y − z) = x − z ∈ Q
y por tanto x ∼ z.
Sea [x] la clase de equivalencia de x bajo ∼, por ser ∼ relación de equivalencia
las clases de equivalencia son una partición de [0, 1], usando axioma de elección
podemos tomar un único elemento de cada partición inducida por ∼, y denotamos
a este conjunto por V.
Observemos primero que si r, s son racionales distintos entonces V +r es disjunto
a V + s. Si

x∈V +s∩V +r
entonces existen v1 , v2 ∈ V tales que

x = v1 + r = v2 + s
y por tanto v1 − v2 = s − r ∈ Q, es decir v1 ∼ v2 , por lo que v1 = v2 con lo que
obtenemos que r = s. Concluimos que r, s son racionales distintos entonces V + r
es disjunto a V + s.
Claramente V + s ⊂ [−1, 2] para s ∈ Q ∩ [−1, 1], además si x ∈ [0, 1], x ∼ z
para algún z ∈ V , es decir x − z = r ∈ Q ∩ [−1, 1] y por tanto

x = z + r ∈ V + r,
128
9.2. CONJUNTO NO BOREL PERO SI LEBESGUE MEDIBLE 129

S
con lo que obtenemos que [0, 1] ⊂ V + r ⊂ [−1, 2]. Si V es Lebesgue
r∈Q∩[−1,1]
medible tenemos las siguientes desigualdades

1 = λ [0, 1]
 
[
≤ λ V + r
r∈Q∩[−1,1]

X
= λ (V + r)
n=1
X∞
= λ (V )
n=1
≤ λ ([−1, 2])
= 3.
Claramente se sigue de la ecuación anterior que no se puede denir λ (V ) y por
tanto V no es medible. 
Uno puede observar que la demostración del teorema anterior solo depende de
que λ sea σ -nita, invariante baja traslaciones y que λ (I) donde I es un intervalo
es su longitud. Obtenemos el siguiente resultado.

Teorema 231. Sea ρ : A −→ R, donde A es una σ -álgebra, ρ es σ -nita,


invarinte baja traslaciones y ρ (I) donde I es un intervalo es su longitud. Entonces
A es un distinto a P (R) .
Con lo anterior tenemos que nunca podremos construir una medida que respete
la medida de los intervalos, que respete las traslaciones y que sea σ -nita que pueda
medir todos los subconjuntos de R.
Ejercicio 232. Muestra que si A ∈ L (R) tal que λ (A) > 0 entonces existe un
subconjunto de A que no es Lebesgue medible.

9.2. Conjunto no borel pero si Lebesgue medible


El protagonista de esta sección es el conjunto de cantor C , recordemos que
todo elemento x de C tiene una única expansión en base 3, x = (0.c1 c2 c3 ...)3 donde
cn ∈ {0, 2} para todo n ∈ N, más aun, si y = (0.c1 c2 c3 ...)3 donde cn ∈ {0, 2} para
todo n ∈ N entonces y ∈ C .
Denamos la función s : C −→ [0, 1] tal que
 c c c 
1 2 3
s ((0.c1 c2 c3 ...)3 ) = 0. ... .
2 2 2 2
 0 0 0 
Claramente si (0.c1 c2 c3 ...)3 , 0.c1 c2 c3 ... ∈ C son tales que
3
 0 0 0 
(0.c1 c2 c3 ...)3 < 0.c1 c2 c3 ...
3
0 0 ck
entonces existe un primer ck < ck , es decir ck = 0 y ck = 2, por tanto
2 =0 y
0
ck
2 = 1, por tanto
!
 c c c  0 0 0
1 2 3 c1 c2 c3
0. ... ≤ 0. ...
2 2 2 2 2 2 2
2
9.2. CONJUNTO NO BOREL PERO SI LEBESGUE MEDIBLE 130

observemos que s puede dar la igualdad, ya que si



x1 = 0.c1 c2 ...ck 20 3

y

x2 = 0.c1 c2 ...ck 02 3
donde ci ∈ {1, 2} para i ∈ {1, 2, ..., k}. Entonces x1 > x2 , más aun, por su forma,
x1 y x2 aparecen como extremos al quitar un tercio de un intervalo, pero
c c c ck 
1 2 3
s (x1 ) = ... 10
2 2 2 2 2
y
c c c ck 
1 2 3
s (x2 ) = ... 01
2 2 2 2 2
por lo que s (x1 ) = s (x2 ). Por tanto s es monótona en C y coincide en los elementos
que aparecen como extremos de intervalos al quitar un tercio de algún intervalo.
Además s es sobre ya que si z = (0.c1 c2 c3 ...)2 ∈ [1, 2] entonces

s ((0 (.2c1 ) (2c2 ) (2c3 ) ...)3 ) = z.


Ahora extenderemos s a todo el [0, 1].
intervalo
denimos ψ : [0, 1] −→ [0, 1]
ψ (x) = s (x) si x ∈ C y si x ∈
como / C entonces x
0
aparece al quitar un tercio, tomamos x un elemento de los extremos que aparece
al quitar ese tercio, entonces ψ (x) = s (x) (recuerden que da igual que extremo
tomamos ya que la función s es idéntica en los extremos).

Lema 233. Sea f : [a, b] −→ [c, d] monótona y sobre, entonces f es continua.


Demostración. Sea  > 0 y x ∈ (a, b). Supongamos que f es monótona
creciente, por ser sobre existen z1 , z2 ∈ (a, b) tales que z1 < x < z2 y
f (x) − f (z1 ) , f (z2 ) − f (x) < .
Sea δ = min {z1 − x, x − z2 }, entonces si |w − x| < δ , implica que z1 < w ≤ x
o x ≤ w < z2 por lo que
f (x) − f (w) ≤ f (x) − f (z1 ) < 
o

f (z2 ) − f (x) ≤ f (z2 ) − f (x) < .


esto demuestra la continuidad en (a, b), la continuidad en a y b y el caso monó-
tona decreciente son totalmente análogos, se le dejan al lector. 

Corolario 234. La función ψ denida en esta sección es continua.


Ahora deniremos la función ϕ : [0, 1] −→ [0, 2] como ϕ (x) = ψ (x) + x, por
ser suma de funciones continuas es continua, además ϕ (0) = 0, ϕ (1) = 2 y
0 ≤ ψ (x) + x ≤ 1 + 1 = 2
para todo x ∈ [1, 2], por lo que Imϕ ⊂ [0, 2] y por continuidad [ϕ (0) , ϕ (1)] =
[0, 2] ⊂ Imϕ. Con lo anterior obtenemos que ϕ es sobre, además es inmediato que
ϕ es creciente e inyectiva (por ser ψ monótona creciente y la función identidad
−1
estrictamente creciente) por lo que existe ϕ : [0, 2] −→ [0, 1] que es también
−1
monótona creciente y sobre, por el Lema 233 sabemos que ϕ es continua.
9.2. CONJUNTO NO BOREL PERO SI LEBESGUE MEDIBLE 131

Sabemos entonces que ϕ manda y regresa abiertos en abiertos, por lo que son
ϕ y ϕ−1 medibles
2 = λ (ϕ [0, 1])
= λ (ϕ (C) ∪ ϕ ([0, 1] \ C))
= λ (ϕ (C)) + λ (ϕ ([0, 1] \ C)) .
Como la función ψ es contante en los intervalos de [0, 1] \ C , cada uno de estos
es enviado a otro intervalo de la misma longitud, por lo que

λ (ϕ ([0, 1] \ C)) = λ ([0, 1] \ C) = 1


y por tanto λ (ϕ (C)) = 1, por lo que el conjunto de medida cero es enviado en un
conjunto de medida 1, por el Ejercicio 232 contiene un subconjunto W no Lebesgue
−1
medible, sea W1 = ϕ (W ) por ser la medida de Lebesgue completa y W1 ⊂ C
entonces W1 es Lebesgue medible, pero no es Boreliano, ya que de serlo, ϕ (W1 ) = W
sería Boreliano.
Lo demostrado previamente se puede escribir como:

Teorema 235. B (R) $ L (R).


Capítulo 10

La integral

10.1. La integral de funciones medibles


Aunque en su momento se dejo todo listo para denir la integral, encontré
conveniente primero terminar de ver los principales resultados y construcciones
referentes a medidas.
El primer paso, que también es el más simple es denir la integral para funciones
simples y medibles.

k
P
Definición 236. Sea (X, A, µ) un espacio de medida y sea an χAn una φ=
n=1
función simple, medible (borel medible) y no negativa (es decir An ∈ A, son ajenos
k
S
dos a dos, X = An y an ≥ 0 distintos dos a dos para todo n ∈ {1, 2, ..., k})
n=1 ´
entonces denimos la integral de φ con respecto a µ que la denotaremos por φdµ
como
ˆ k
X
φdµ = an µ (An ) .
n=1

y
ˆ
0dµ = 0.

La denición anterior es muy natural, además de estar bien denida ya que no


tenemos expresiones de la forma ∞ − ∞, recordemos que 0 × ∞ = 0, pero claro
debemos demostrar todo lo que esperamos que la integral cumpla.

0
k k
Sean φ = an µ (An ) y ψ = a0n χA0n dos funciones
P P
Proposición 237.
n=1 n=1
simples, medibles y no negativas en (X, A, µ), E ∈ A y c ≥ 0 entonces
ˆ ˆ
cφdµ = c φdµ,

ˆ ˆ ˆ
φdµ + ψdµ = (φ + ψ) dµ

y
ˆ
µ (E) = χE dµ.

132
10.1. LA INTEGRAL DE FUNCIONES MEDIBLES 133

Demostración. Observemos que por denición

ˆ k
X
cφdµ = can µ (An )
n=1
k
X
=c an µ (An )
n=1
ˆ
=c cφdµ.

Ahora observemos que l función φ+ψ tiene la forma

k0
k X  
X 0
φ+ψ = an + am χAn ∩A0m .
n=1m=1

El problemas con esta expresión, es que puede ser que


0 0
an + am = ar + as
para(n, m) 6= (r, s), entonces debemos encontrar la expresión adecuada para φ + ψ .
0 0
Denamos Ns la unión de los conjuntos An ∩ Am 6= ∅ tales que an + am = s.
Entonces por ser ajenos los An dos a dos y ser µ una medida
X  0

µ (Ns ) = µ An ∩ Am .
0
an +am =s

La representación adecuada de φ+ψ es


X
φ+ψ = sχNs
{s}

entonces

ˆ X
φ + ψdµ = sµ (Ns )
{s}
X X  0

= s µ An ∩ Am
{s} 0
an +am =s
(10.1.1)
k0 
k X   
X 0 0
= an + am µ An ∩ Am
n=1m=1
0 0
k X
k   k X
k  
X 0 X 0 0
= an µ An ∩ Am + am µ An ∩ Am .
n=1m=1 n=1m=1

Debido a que
0
k k
[ [ 0
X= An = An
n=1 n=1
tenemos que
k0  
X 0
µ (An ) = µ An ∩ Am
m=1
10.1. LA INTEGRAL DE FUNCIONES MEDIBLES 134

y
k
 0  X  
0
µ Am = µ An ∩ Am
n=1
n 0
o
para todo m ∈ 1, 2, ..., k y n ∈ {1, 2, ..., k}, sustituyendo en (10.1.1) obtenemos
que
ˆ k k 0
 0 
X X 0
φ + ψdµ = an µ (An ) + am µ Am
n=1 m=1
ˆ ˆ
= φdµ + ψdµ.
´
Es inmediato que χE dµ = µ (E) . 
De lo anterior es inmediato probar el siguiente resultado, (usando la linealidad
de la integral)

k
P
Ejercicio 238. Sea φ= an χAn medible, donde las An no son disjuntas,
n=1
entonces
ˆ k
X
φdµ = an µ (An ) .
n=1

Recordemos la Proposición (199), sabemos que toda función f ∈ M + (X, A)


se puede aproximar por funciones simples, no negativas sn tales que s ≤ f . Lo
anterior nos sugiere que podemos extender la integral ya denida para funciones
f ∈ M + (X, A).
Definición 239. Sea f ∈ ´M + (X, A), entonces denimos la integral de f con
respecto a µ que denotaremos f dµ como:
ˆ ˆ 
f dµ := sup φdµ : φ es simple, medible y 0 ≤ φ ≤ f .

El conjunto de las funciones φ tales que son medibles, simples y 0≤φ≤f lo


denotaremos por S (f ), por lo que
ˆ ˆ 
f dµ = sup φdµ : φ ∈ S (f ) ,
´
es inmediato que si
´ f ≤g entonces S (f ) ⊂ S (g), lo que demuestra que f dµ ≤
gdµ.
Un punto importante es ver que esta nueva denición en verdad es una extensión
de la denición de integral para funciones simples.

k
Sea f = an χAn simple, medible y no negativa, entonces
P
Proposición 240.
n=1
k
X ˆ 
an µ (An ) = sup φdµ : φ ∈ S (f ) .
n=1

Demostración. Primero como f ∈ S (f ) es inmediato que


ˆ k
X ˆ 
f dµ = an µ (An ) ≤ sup φdµ : φ ∈ S (f ) .
n=1
10.1. LA INTEGRAL DE FUNCIONES MEDIBLES 135

Ahora supongamos que φ ∈ S (f ), entonces

0
k
X 0
φ= a n χA0n
n=1
0 0
como φ≤f entonces am ≤ an si Am ∩ An 6= ∅, por lo que
0
 0   0 
am µ Am ∩ An ≤ an µ Am ∩ An ,

además podemos escribir


X
f= an χA0m ∩An
m,n

y
X 0
φ= an χA0m ∩An .
m,n

Usando el ejercicio anterior obtenemos que


ˆ X  0 
f dµ = an µ Am ∩ An
m,n
X 0
 0 
≤ an µ Am ∩ An
m,n
ˆ
= φdµ.

Es importante también que denamos la integral sobre un conjunto, la integral


de Riemann se dene sobre intervalos, pero ahora, podremos denir la integral sobre
cualquier conjunto medible.

Definición 241. Sea f ∈ M + (X, A) y E∈A entonces denimos la integral


sobre E de f como:
ˆ ˆ
f dµ = f χE dµ.
E

Lo anterior esta bien denido ya que producto de funciones medibles es medible.


Observemos un consecuencia de la monotonía de la integral.

Lema 242. Si E, F ∈ A, f ∈ M + (X, A) y E ⊂ F entonces


ˆ ˆ
f dµ ≤ f dµ.
E F

Demostración. Es inmediata usando el hecho de que f χE ≤ f χF . 

Para poder demostrar las principales propiedades de la integral es necesario


demostrar uno de los resultados más importantes. El teorema de la convergencia
monótona.
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 136

10.2. Teorema de convergencia monótona y Lema de Fatou


Teorema 243. (Convergencia monótona)
Sean fn ∈ M + (X, A) para todo n ∈ N, tal que las fn es una sucesión monótona
creciente de funciones, entonces
ˆ ˆ
lim fn dµ = lim fn dµ.
n→∞ n→∞

Demostración. Sea f := lim fn , que es medible por ser límite de funciones


n→∞
medibles. Sabemos que fn ≤ fn+1 para todo n ∈ N, por lo que fn ≤ f y por la
monotonía de la integral
ˆ ˆ
fn dµ ≤ f dµ,

por tanto
ˆ ˆ
lim fn dµ ≤ f dµ.
n→∞

Sea φ ∈ S (f ) y 0 < a < 1, intentaremos demostrar que


ˆ ˆ
lim fn dµ ≥ a φdµ.
n→∞

para todo 0 < a < 1, por lo que


ˆ ˆ
lim fn dµ ≥ φdµ
n→∞

y con esto concluiremos que


ˆ ˆ
lim fn dµ ≥ f dµ.
n→∞

Denamos

An := {x ∈ X : fn (x) ≥ aφ (x)} ,
S
por lo que X = An y An ⊂ An+1 , nuevamente usando la monotonía de la
n∈N
integral y la linealidad de la integral en funciones simples obtenemos que
ˆ ˆ
aφdµ = aφχAn dµ
An
ˆ
= a φχAn dµ
ˆ
≤ fn dµ
An
ˆ
≤ fn dµ.

Observemos que la función


ˆ
0
µ (E) = ψdµ
E
k
P
donde la función ψ= an χBn ≥ 0 es una función simple, es una medida.
n=1
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 137

Claramente para todo E∈A


ˆ
µ0 (E) = ψdµ
ˆE

= ψχE dµ
ˆ X
k
= an χBn ∩E dµ
n=1
k
X
= an µ (Bn ∩ E)
n=1
k
X
= an µn (E) ,
n=1

donde µn (E) = µ (Bn ∩ E), entonces µ0 es combinación lineal de medidas, por tanto
es una medida. Por lo anterior, usando que la sucesión An es creciente obtenemos
que
ˆ ˆ
aφdµ = a φdµ

= aµ0 (X)
0
=a lim µ (An )
n→∞
ˆ
= lim a φdµ
n→∞ An
ˆ
= lim aφdµ
n→∞ An
ˆ
≤ lim fn dµ.
n→∞
Lo anterior es valido para todo a ∈ (0, 1), por tanto
ˆ ˆ
φdµ ≤ lim fn dµ.
n→∞

Concluimos que
ˆ ˆ
f dµ ≤ lim fn dµ.
n→∞

Una consecuencia importante de este teorema es la linealidad de la integral.

Corolario 244. Sean f, g ∈ M + (X, A) y c ≥ 0 entonces


ˆ ˆ
cf dµ = c f dµ
y ˆ ˆ ˆ
f + gdµ = f dµ + gdµ.

Demostración. Por la Proposición 199 existen sucesiones de funciones sim-


ples (φn ) y (ψn ) tales que
0 ≤ φn ≤ φn+1 ≤ f,
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 138

0 ≤ ψn ≤ ψn+1 ≤ g,

lim φn =f y lim ψn = g. Entonces


n→∞ n→∞

0 ≤ cφn ≤ cφn+1 ≤ cf,

0 ≤ ψn + φn ≤ ψn+1 + φn+1 ≤ f + g,

lim cφn = cf y lim φn + ψn = f + g .


n→∞ n→∞
Por el Teorema de la convergencia monótona
ˆ ˆ
cf dµ = lim cφn dµ
n→∞
ˆ
=c lim φn dµ
n→∞
ˆ
=c f dµ

y
ˆ ˆ
f + gdµ = lim φn + ψn dµ
n→∞
ˆ ˆ
= lim φn dµ + ψn dµ
n→∞
ˆ ˆ
= f dµ + gdµ.

Ahora pasaremos a demostrar una desigualdad importante, el Lema de Fatou.


Este sera nuestro primer resultado donde no se pide que las funciones sean monó-
tonas.

Teorema 245. (Lema de Fatou)


Sean fn ∈ M + (X, A), entonces
ˆ ˆ
lim fn dµ ≤ lim fn dµ.
n→∞ n→∞

Demostración. Sea gn = inf {fk : k ≥ n} , claramente gn ≤ gn+1 y gn ∈


M + (X, A) para todo n ∈ N. Por el Teorema de la convergencia dominada
ˆ ˆ
lim fn dµ = sup (inf {fk : k ≥ n}) dµ
n→∞ n≥0
ˆ
= lim (inf {fk : k ≥ n}) dµ
n→∞
ˆ
= lim gn dµ
n→∞
ˆ
= lim gn dµ
n→∞
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 139

´ ´
Además gn ≤ fr , por lo que gn dµ ≤ fr dµ para todo r ≥ n, por tanto

ˆ ˆ
lim fn dµ = lim gn dµ
n→∞ n→∞
 ˆ 
≤ lim fr dµ : r ≥ n
inf
n→∞
 ˆ 
= sup inf fr dµ : r ≥ n
n≥0
ˆ
= lim fn dµ.
n→∞

Con lo anterior terminamos el Lema de Fatou. 

Veamos ahora corolarios importantes.

Corolario 246. Sea (X, A, µ) un espacio de medida, f ∈ M + (X, A) de-


namos

ˆ
0
µ (E) = f dµ,
E

entonces µ0 es una medida.

Demostración. Es inmediato que µ0 ≥ 0, además

ˆ ˆ
µ0 (∅) = f dµ = 0dµ = 0.

Sean An ∈ A conjuntos disjuntos dos a dos para todo n ∈ N, denamos

n
X
fn = f χAk
k=1
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 140

claramente fn ≤ fn+1 , por linealidad y el Teorema de la convergencia monótona


obtenemos que
[
! ˆ
0
µ An = f dµ
S
An
n∈N
ˆ
n∈N

= fχ S
An dµ
n∈N
ˆ X

= f χAk dµ
k=1
ˆ n
X
= lim f χAk dµ
n→∞
k=1
ˆ
= lim fn dµ
n→∞
ˆ
= lim fn dµ
n→∞
n ˆ
X
= lim f χAk dµ
n→∞
k=1
∞ ˆ
X
= f dµ
k=1 Ak

X∞
= µ0 (Ak ) .
k=1
0
Con lo que concluimos que µ es una medida. 
El siguiente resultado es importante, ya que caracteriza a las funciones no
negativas que tienen integral nula.
´
Corolario 247. Sea f ∈ M + (X, A), entonces f = 0 a.e. si y solo si f dµ =
0.
Demostración. ⇒) Supongamos que f = 0 a.e., entonces A := {x ∈ X : f (x) > 0}
tiene medida cero, denamos fn = nχA , por lo que
lim fn = ∞χA ≥ f,
n→∞

usando la monotonía de la integral y el Lema de Fatou concluimos que


ˆ ˆ
f dµ ≤ lim fn dµ
n→∞
ˆ
≤ lim fn dµ
n→∞
ˆ
= lim nχA dµ
n→∞
= lim nµ (A)
n→∞
= 0.
´
Por lo que f dµ = 0.
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 141

´
⇐) Supongamos que f dµ = 0, denamos el conjunto
 
1
An := x ∈ X : f (x) ≥ ,
n
1
por lo que f≥ n χAn , nuevamente usando monotonía de la integral
ˆ
0= f dµ
ˆ
1
≥ χA dµ
n n
1
= µ (An )
n
≥ 0,
 
S
en consecuencia µ (An ) = 0, lo que implica que µ An = 0. Es claro que
n∈N
[
An = {x ∈ X : f (x) > 0} .
n∈N

Por lo que f es cero a.e. 

Ahora deniremos un nuevo concepto.

Definición 248. Sean (X, A, µ) y (X, A, µ0 ) espacios de medida, µ0 es absolu-


0
tamente continua con respecto a µ si µ (E) = 0 implica que µ (E) = 0.

Corolario 249. La medida µ denida en el Corolario 246 es absolutamente


0

continua con respecto a µ.


Demostración. Sea f ∈ M + (X, A) y
ˆ
µ0 (E) = f dµ,
E

si µ (A) = 0, entonces f χA es igual a cero a.e., por el corolario anterior


ˆ
µ0 (A) = f dµ
ˆA
= f χA dµ
= 0.


Retomaremos más adelante este Corolario, demostraremos el regreso, es decir


que si dos medidas son una absolutamente continua con respecto a la otra, entonces
podemos expresar una como una integral con respecto a la otra.

Corolario 250. Sea fn ∈ M + (X, A) funciones monótonas crecientes tales


que convergen casi donde quiera a f , entonces
ˆ ˆ
lim fn dµ = f dµ.
n→∞
10.2. TEOREMA DE CONVERGENCIA MONÓTONA Y LEMA DE FATOU 142

Demostración. Sea N ∈ A tal que µ (N ) = 0 y lim fn (x) = f (x) si x ∈ N c ,


n→∞
es inmediato que fn χN c ≤ fn+1 χN c y que
lim fn χN c = f χN c ,
n→∞

usando el teorema de convergencia monótona tenemos que


ˆ ˆ
lim fn χN c dµ = f χN c dµ.
n→∞

Como µ (N ) = 0 sabemos que fn χN y f χN son cero a.e., por lo que usando el


Corolario 247 llegamos a que
ˆ ˆ
fn χN dµ = f χN dµ = 0

y por tanto
ˆ ˆ
lim fn dµ = lim fn (χN + χN c ) dµ
n→∞ n→∞
ˆ ˆ
= lim fn χN dµ + fn χN c d
n→∞
ˆ ˆ
= lim fn χN dµ + lim fn χN c dµ
n→∞ n→∞
ˆ
= f χN c dµ + 0
ˆ ˆ
= f χN c dµ + f χN dµ
ˆ
= f dµ.

Durante la demostración anterior se observa un resultado. Sea A, B ∈ A y


B ⊂ A, entonces

χA = χB + χA\B ,
de lo que se sigue que para toda f ∈ M + (X, A)
ˆ ˆ
f dµ = f χA dµ
A
ˆ

= f χB + χA\B dµ
ˆ ˆ
= f χB dµ + f χA\B dµ
ˆ ˆ
= f dµ + f dµ.
B A\B

Corolario 251. Sea fn una sucesión en M + (X, A), entonces


∞ ˆ
X ˆ X

fn dµ = fn dµ.
n=1 n=1
10.3. INTEGRAL DE FUNCIONES NO POSITIVAS Y TEOREMA DE CONVERGENCIA DOMINADA DE LEBESGUE
143

Demostración. La prueba es inmediata usando el Teorema de convergencia


monótona sobre
k
X
gk = fn .
n=1


10.3. Integral de funciones no positivas y teorema de convergencia


dominada de Lebesgue
El objetivo de esta sección es denir la integral para toda función medible,
además de mostrar que la integral de Lebesgue es realmente una extensión de la
integral de Riemann, donde la integral de Lebesgue es la integral denida en la
sección 10.1 pero tomando como espacio de medida (R, L (R) , λ).
Definición 252. Sea (X, A, µ) espacio
´ de medida, f ´∈ M (X, A) entonces por
el Corolario 190, f + , f − ∈ M + (X, A), si f − dµ < ∞ y f + dµ < ∞ diremos que
f es integrable con respecto a µ y denimos la integral con respecto a µ de f como:
ˆ ˆ ˆ
f dµ := f dµ − f − dµ.
+

´ ´
Proposición 253. Si f ∈ M (X, A), f1 , f2 ∈ M + (X, A), f1 dµ < ∞, f2 dµ <
∞ y f = f1 − f2 entonces
ˆ ˆ ˆ
f dµ = f1 dµ − f2 dµ.

Demostración. Como

f + − f − = f = f1 − f2
entonces

f + + f2 = f1 + f − ∈ M + (X, A) ,
por linealidad de integrales de funciones medibles no negativas obtenemos que
ˆ ˆ ˆ
+
f + + f2 dµ

f dµ + f2 dµ =
ˆ
f1 + f − dµ

=
ˆ ˆ
= f1 dµ + f − dµ

y por tanto
ˆ ˆ ˆ
f dµ = f + dµ − f − dµ
ˆ ˆ
= f1 dµ − f2 dµ.

Con el resultado anterior es sencillo mostrar la linealidad de la integral 

Proposición 254. Sean f, g ∈ M (X, A) integrables y c ∈ R, entonces f + g y


cf son integrables, además la integral es una función lineal.
10.3. INTEGRAL DE FUNCIONES NO POSITIVAS Y TEOREMA DE CONVERGENCIA DOMINADA DE LEBESGUE
144

Demostración. Sean f, g ∈ M (X, A) integrables y c ∈ R. Si c≥0 entonces

cf = c f + − f −


= cf + − cf −

y cf + , cf − ∈ M + (X, A), usando la linealidad de la integral de funciones no nega-


tivas llegamos a que

ˆ ˆ
+
cf dµ = c f + dµ <∞
ˆ ˆ
cf − dµ = c f − dµ <∞

y por tanto cf es integrable y

ˆ ˆ ˆ
cf dµ = cf dµ − cf − dµ
+

ˆ ˆ 
=c f + dµ − f − dµ
ˆ
= c f dµ.

De manera análoga se prueba el caso c < 0, solo observando que

cf = c f + − f −


= cf + − cf −
= −cf − − −cf + ,


con−cf − , −cf + ∈ M + (X, A). ´ − ´ ´


Sean f, g ∈ M (X, A) integrables, entonces
´ + f dµ < ∞, f + dµ < ∞, g − dµ <
∞ y g dµ ´ < ∞, por linealidad
´ de la integral para funciones no negativas obten-
emos que f − + g − dµ < ∞ y f + + g + dµ < ∞. Observemos que

±
(f + g) ≤ |f + g|
≤ |f | + |g|
≤ f + + f − + g+ + g−

y por tanto

ˆ ˆ
±
(f + g) dµ ≤ f + + f − + g + + g − dµ < ∞.
10.3. INTEGRAL DE FUNCIONES NO POSITIVAS Y TEOREMA DE CONVERGENCIA DOMINADA DE LEBESGUE
145

Con lo que f +g es integrable y por el corolario anterior concluimos que

ˆ ˆ
f + − f − + g + − g − dµ
 
f + gdµ =
ˆ
f + + g + − f − + g − dµ
 
=
ˆ ˆ
+ +
f − + g − dµ
 
= f + g dµ −
ˆ ˆ ˆ ˆ
= f + dµ + g + dµ − f − dµ + g − dµ
ˆ ˆ ˆ ˆ
= f dµ − f dµ + g dµ − g − dµ
+ − +

ˆ ˆ
= f dµ + gdµ.

Veamos ahora otra propiedad, que en parte ya esta demostrada cuando estudi-
amos las funciones medibles.

Proposición 255. Sea f ∈ M (X, A), entonces f es integrable si y solo si |f |


es integrable y en tal caso
ˆ ˆ

f dµ ≤ |f | dµ.

Demostración. Sea f integrable, por el Corolario 190 sabemos que si f+ y



f son medibles, más aun

|f | = f + + f − ,

por lo que |f | ∈ M + (X, A) y

ˆ ˆ ˆ
|f | dµ = +
f dµ + f − dµ < ∞.

Con lo anterior probamos que |f | es integrable.


Ahora supongamos que |f | es integrable, entonces

ˆ ˆ
+
|f | dµ = |f | dµ
ˆ ˆ
= f + dµ + f − dµ
<∞
´ ´
y por tanto f + dµ, f − dµ < ∞, además por ser f medible, lo es f+ y f −.
Concluimos que f es integrable.
10.3. INTEGRAL DE FUNCIONES NO POSITIVAS Y TEOREMA DE CONVERGENCIA DOMINADA DE LEBESGUE
146

Por último, observamos que


ˆ ˆ ˆ
f dµ = f + dµ − f − dµ


ˆ ˆ
≤ f + dµ + f − dµ

ˆ ˆ
= f + dµ + f − dµ
ˆ
= |f | dµ.


Un corolario importante, inmediato y muy de la proposición anterior es el sigu-
iente.

Corolario 256. Sean f, g ∈ M (X, A) tales que |g| ≤ |f |. Si f es integrable


entonces g es integrable y en tal caso
ˆ ˆ
|g| dµ ≤ |f | dµ.

Demostración. Por la proposición anterior, si f es integrable, entonces |f | es


integrable, además ˆ

|g| dµ = 0 < ∞
y usando la monotonía de la integral de funciones no negativas
ˆ ˆ ˆ
+
|g| dµ = |g| dµ ≤ |f | dµ < ∞.

Por tanto |g| es integrable y por la proposición anterior g es integrable. La


desigualdad ˆ ˆ
|g| dµ ≤ |f | dµ
es una consecuencia directa de la monotonía de la integral para funciones no nega-
tivas. 
Corolario 257. Sean f, g ∈ M (X, A), f integrable y g = f a.e. entonces g
es integrable y ˆ ˆ
f dµ = gdµ.

Demostración. Observemos que |f − g| = 0 a.e. por lo que


ˆ
|f − g| dµ = 0

y por tanto |f − g| es integrable, lo que signica que f − g es integrable y por


linealidad f − (f − g) = g es integrable. Además por el corolario anterior
ˆ ˆ

f − gdµ ≤ f − gdµ
ˆ
≤ |f − g| dµ
= 0.
10.3. INTEGRAL DE FUNCIONES NO POSITIVAS Y TEOREMA DE CONVERGENCIA DOMINADA DE LEBESGUE
147

´ ´
´ De la misma forma se demuestra que g − f dµ ≤ 0 y por tanto f dµ =
gdµ. 
Con lo anterior estamos listos para mostrar el tercer teorema importante de
convergencia.

Teorema 258. (Teorema de convergencia dominada de Lebesgue)


Sean fn ∈ M (X, A) funciones integrables que convergen a.e. a una función f
medible. Si existe una función integrable g tal que |fn | ≤ g , entonces f es integrable
y ˆ ˆ
f dµ = lim fn dµ.
n→∞

Demostración. Redeniendo las funciones fn y f en un conjunto de medida


cero como en el teorema de convergencia monótona a.e. y gracias al Corolario
anterior, podemos suponer que la convergencia de las funciones fn es en todo X.
Por el Corolario 256 sabemos que f es integrable, como

fn + g ≥ 0,
podemos aplicar el Lema de Fatou, por lo que obtenemos que
ˆ ˆ ˆ
f dµ + gdµ = f + gdµ
ˆ
= lim (fn + g) dµ
n→∞
ˆ
≤ lim (fn + g) dµ
n→∞
ˆ ˆ
= lim fn dµ + gdµ
n→∞
´ ´
y por tanto f dµ ≤ lim fn dµ.
n→∞
Usando nuevamente el Lema de Fatou en g −fn ≥ 0 y que − lim an =− lim an
n→∞ n→∞
(se le deja de ejercicio al lector) concluimos que

ˆ ˆ ˆ
gdµ − f dµ = g − f dµ
ˆ
= lim (g − fn ) dµ
n→∞
ˆ
≤ lim (g − fn ) dµ
n→∞
ˆ ˆ
= lim −fn dµ + gdµ
n→∞
ˆ ˆ
= − lim fn dµ + gdµ
n→∞
´ ´
y por tanto f dµ ≥ lim fn dµ, con lo que demostramos que
n→∞
ˆ ˆ
f dµ = lim fn dµ.
n→∞


10.4. RELACIÓN ENTRE INTEGRAL DE RIEMANN E INTEGRAL DE LEBESGUE 148

10.4. Relación entre integral de Riemann e integral de Lebesgue


La funciones que son integrables con respecto a la medida de Lebesgue las
llamaremos funciones Lebesgue medible, nuestro objetivo era extender la integral
usual, por lo que debemos de demostrar que realmente estamos extendiendo la
integral de Riemann. Sea f : [a, b] −→ R, denotamos la integral de Riemann de f
(si existe) como
ˆ b
R f (x) dx,
a
la integral superior de f como
ˆ b
R f (x) dx
a
y la integral inferior de f como
ˆ b
R f (x) dx.
a

Lema 259. Antes de demostrar el Teorema de la sección, enunciaremos una


generalización del teorema de convergencia monótona para funciones decrecientes y
un Lema para la integral
´ de Lebesgue. Sean fn una sucesión decreciente de funciones
medibles tales que f1 dµ < ∞. Pruebe que
ˆ ˆ
lim fn dµ = lim fn dµ.
n→∞ n→∞

Sea f : R −→ R continua a.e., entonces f es Lebesgue medible.


Demostración. Observemos que fN c es continua en N c , por lo que para
x∈N c
y (a, b) abierto que contiene a f (x), f −1 ((a, b)) ∩ N c es un abierto en N c ,
es decir existe un abierto Ux en R tal que

−1
fN c ((a, b)) ∩ N c = U ∩ N c .
Por tanto, si para todo x ∈ (a, ∞) tomamos un intervalo Ix ⊂ (a, ∞) tal que x ∈ Ix
y denotamos por Ux es abierto enR tal que
−1 c
fN c (Ix ) ∩ N = Ux ∩ N c ,
entonces
[
−1 c −1 c
fN c ((a, ∞)) ∩ N = fN c (Ix ) ∩ N

x∈(a,∞)
 
[
= Ux  ∩ N c
x∈(a,∞)

Denamos
f (x)x ∈ N c

f0 =
0x ∈ N,
por lo que fN c = f0N c y por tanto
 
[
−1 −1
f0N c ((a, ∞)) =
 Ux  ∩ N c ∪ f0N c ({0})

x∈(a,∞)
10.4. RELACIÓN ENTRE INTEGRAL DE RIEMANN E INTEGRAL DE LEBESGUE 149

! !
c
∩ N c ∪ {0}
S S
que es Ux ∩N o Ux en ambos casos ontenemos
x∈(a,∞) x∈(a,∞)
un conjunto Lebsgue medible, por lo que f0 es Lebsgue medible, además f0 =
f casi dondequera y por tanto |f − f0 | es integrable (tiene integral cero) por el
Corolario ?? sabemos que f − f0 es integrable y por tanto medible, lo que implica
que (f − f0 ) + f0 = f es medible. 
Teorema 260. (El Teorema de Lebesgue) Para f : [a, b] −→ R y δ > 0 sea
gδ (t) = inf {f (x) : x ∈ (t − δ, t + δ) ∩ [a, b]}
y sea
hδ (t) = sup {f (x) : x ∈ (t − δ, t + δ) ∩ [a, b]} ,
denamos la envoltura superior de f y la envoltura inferior de f como:
g (t) = lim+ gδ (t)
δ→0
y
h (t) = lim hδ (t) .
δ→0+
Entonces:1) g y h son borel medibles,
2) g ≤ f ≤ h y g (t) = f (t) = h (t) si y solo si f es continua en t.
3) Si f es acotada y no negativa entonces
ˆ b ˆ
R f (x) dx = gdλ
a [a,b]
y
ˆ b ˆ
R f (x) dx = hdλ.
a [a,b]
4) f es integrable si y solo si es continua casi donde quiera.
5) Si f es Riemann integrable entonces
ˆ b ˆ
R f (x) dx = f dλ.
a [a,b]

Demostración. 1) Sea a ∈ R, veamos que g −1 ((a, ∞)) es un abierto en [a, b].


Sea z ∈ g −1 ((a, ∞)), por lo que g (z) > a, es claro que gδ (z) ≤ gδ0 (z) si δ ≥ δ 0 y
por tanto
g (z) = supgδ (z) ,
δ≥0
por las propiedades del supremo sabemos que existe δz > 0 tal que gδz (z) > a y
por denición
inf {f (x) : x ∈ (z − δz , z + δz ) ∩ [a, b]} > a
es decir f (x) > gδz (z) > a para todo x ∈ (z − δz , z + δz ) ∩ [a, b] y por tanto
(z − δz , z + δz ) ∩ [a, b] ⊂ g −1 ((a, ∞)), entonces
 
[
g −1 ((a, ∞)) =  (z − δz , z + δz ) ∩ [a, b]
z∈g −1 ((a,∞))

que es un boreliano. Análogamente se demuestra que que h−1 ((−∞, a)) es boreliano
y por tanto g, h son Borel medibles.
10.4. RELACIÓN ENTRE INTEGRAL DE RIEMANN E INTEGRAL DE LEBESGUE 150

2) Es evidente que g ≤ f ≤ h ya que gδ ≤ f ≤ hδ para δ > 0. Supongamos


que g (t) = f (t) = h (t), demostremos la continuidad en t. Sea  > 0, por ser
g (t) = supgδ (t) y h (t) = inf hδ (t), gδ (t) decreciente con respecto a δ y hδ creciente
δ≥0 δ≥0
con respecto a δ sabemos que existe un δ0 > 0 tal que

0 ≤ gδ0 (t) ≤ f (t) ≤ hδ0 (t) .


y

f (t) − gδ0 (t) , hδ0 (t) − f (t) <
2
lo que implica que hδ0 (t) − gδ0 (t) < , además para todo z ∈ (t − δ 0 , t + δ 0 ) ∩ [a, b]
0 ≤ gδ0 (t) ≤ f (z) ≤ hδ0 (t) .
Por tanto

|f (z) − f (t)| ≤ hδ0 (t) − gδ0 (t) < .


Lo que muestra la continuidad en z. Inversamente, supongamos que f es continua
en t, entonces para toda  > 0 existe δ0 > 0 tal que si z ∈ (t − δ 0 , t + δ 0 ) ∩ [a, b]

entonces |f (z) − f (t)| < 2 , con lo que obtenemos que

f (z) > f (t) −
2
y

f (z) < f (t) + ,
2
por tanto

gδ0 (t) = inf {f (x) : x ∈ (t − δ 0 , t + δ 0 ) ∩ [a, b]} ≥ f (t) −
2
y

hδ0 (t) = sup {f (x) : x ∈ (t − δ 0 , t + δ 0 ) ∩ [a, b]} ≤ f (t) + .
2
Con lo anterior concluimos que

f (t) −  < gδ0 (t)


≤ gδ (t)
≤ f (t)
≤ fδ (t)
≤ fδ0 (t)
< f (t) + ,
para todo 0 < δ < δ0 , es decir g (t) = f (t) = h (t).
3) Sean

Pn = a = tn0 < tn1 < ... < tnkn = b




particiones del intervalo [a, b] tal que Pn+1 es un renamiento de Pn y

kPn k := max tni − tni−1 : i ∈ {1, 2, ..., kn } ,




tiende a cero cuando n tiende a innito, denamos las funciones en , En como:


(
n n n n
  
inf f (z) : z ∈ ti , ti+1 si x ∈ ti , ti+1
en (x) :=
g (tni ) si x = tni p.a.i ∈ {0, 1, 2, ..., kn }
10.4. RELACIÓN ENTRE INTEGRAL DE RIEMANN E INTEGRAL DE LEBESGUE 151

y
(
f (z) : z ∈ tni , tni+1 si x ∈ tni , tni+1
  
sup
En (x) :=
h (tni ) si x = tni p.a.i ∈ {0, 1, 2, ..., kn − 1} .

Claramente las funciones en y En son medibles (por ser simples), veamos que
en converge a g de manera creciente. Por ser Pn+1 renamiento de Pn y por la
denición de g es fácil ver que en es una sucesión creciente (se deja esto al lector),
ahora veamos la convergencia. Sea t ∈ [a, b], si t es un punto de alguna partición,
entonces es inmediato (por denición) que lim en (t) = g (t) ya que la sucesión se
n→∞
estaciona en g (t) (Por ser Pn+1 renamiento de Pn ). Supongamos entonces que t
jamas es un punto de ni una partición Pn .
Sea δ > 0, entonces existe N ∈ N tal que si l > N , kPl k < δ, sea i ∈
{0, 1, 2, ..., kl − 1} tal que
t ∈ tli , tli+1 ,


entonces tli+1 − tli ≤ kPl k < δ y por tanto tli , tli+1 ⊂ (t − δ, t + δ), con lo que se
tiene que

f (z) : z ∈ tli , tli+1 ≥ inf {f (z) : z ∈ (t − δ, t + δ)} ,


 
inf

es decir el (t) ≥ gδ (t), es inmediato que se puede encontrar δ0 tan pequeña que

(t − δ 0 , t + δ 0 ) ⊂ tli , tli+1


y por tanto

f (z) : z ∈ tli , tli+1 ≤ inf {f (z) : z ∈ (t − δ 0 , t + δ 0 )} ,


 
inf

es decir el (t) ≤ gδ0 (t), con lo que concluimos que

lim en (t) = lim gδ (t) = g (t) .


n→∞ δ→0+

De manera análoga se demuestra que En son decrecientes y convergen puntual-


mente a h. Por el Teorema de convergencia monótona y el ejercicio anterior tenemos
que
ˆ ˆ ˆ
lim en dλ = lim en dλ = gdλ
n→∞ n→∞ [a,b]
y
ˆ ˆ ˆ
lim En dλ = lim hn dλ = hdλ.
n→∞ n→∞ [a,b]

Observemos que

ˆ n −1
kX
f (z) : z ∈ tlr , tlr+1 tlr+1 − tli
  
en dλ = inf
r=1

y
ˆ n −1
kX
f (z) : z ∈ tlr , tlr+1 tlr+1 − tli ,
  
En dλ = sup
r=0
10.4. RELACIÓN ENTRE INTEGRAL DE RIEMANN E INTEGRAL DE LEBESGUE 152

como kPn k tiende a cero cuando n tiende a innito se sigue que


ˆ b n −1
kX
f (z) : z ∈ tlr , tlr+1
 l
tr+1 − tli
 
R f (x) dx = lim inf
a n→∞
r=1
ˆ
= lim en dλ
n→∞
ˆ
= gdλ
[a,b]
y
ˆ b n −1
kX
f (z) : z ∈ tlr , tlr+1 tlr+1 − tli
  
R f (x) dx = lim sup
a n→∞
r=1
ˆ
= lim En dλ
n→∞
ˆ
= hdλ.
[a,b]
4) f es Riemann integrable si y solo si
ˆ b ˆ b
R f (x) dx = R f (x) dx
a a
si y solo si ˆ ˆ
gdλ = hdλ,
[a,b] [a,b]
como h ≥ g, entonces h−g ≥0 y por tanto la ultima igualdad es equivalente a
ˆ
h − gdλ = 0
[a,b]

si y solo si h−g =0 casi donde quiera, si y solo si h=g casi donde quiera, por 2)
esto es equivalente a que f es continua casi donde quiera.
5) Sea f Riemann integrable, entonces es continua casi donde quiera, por el
último Lema, f es medible y por 2) g = h a.e., por lo que
ˆ ˆ ˆ
gdλ ≤ f dλ ≤ hdλ
[a,b] [a,b] [a,b]
y por tanto
ˆ ˆ ˆ b ˆ b
f dλ = gdλ = R f (x) dx = R f (x) dx.
[a,b] [a,b] a a

Capítulo 11

Los espacios de Banach Lp

11.1. Denición de los espacios Lp


Ahora nos encargaremos de estudiar subconjuntos de funciones medibles, que
sean espacios vectoriales y podamos darle una norma que dependa de la integral.
Por tanto consideremos un espacio de medida (X, A, µ), por lo visto en la sección
anterior.
Sea f una función integrable, sabemos que si g es medible y f = g a.e., entonces
sabemos que g es integrable. En general denimos la clase de equivalencia ∼ en
M+ (X, A) como f ∼g si y solo si f =g a.e., la clase de equivalencia inducida por
esta relación que contiene a f la denotaremos por [f ]
El espacio de las funciones integrables lo denotaremos por L1 (X, A, µ) y sera
denido como:

L1 (X, A, µ) := {[f ] : f es integrable} ,

1
por lo que dijimos ya, toda g ∈ [f ] ∈ L (X, A, µ) es integrable.

Definición 261. Sea 1 ≤ p < ∞, denimos el espacio Lp (X, A, µ) como el


conjunto
p
Lp (X, A, µ) := {[f ] : |f | es integrable} .

La noción de ser acotado se debe de extender para funciones medibles, diremos


que una función medible f es acotada casi donde quiera si existe una conjunto de
medida cero N tal que en su complemente f es acotada por un número M, esta M
sera llamada una casi cota de f.
Definición 262. Denimos el conjunto L∞ (X, A, µ) como el conjunto

L∞ (X, A, µ) := {[f ] : f es acotada a.e.}

Lema 263. Si f es acotada casi donde quiera, entonces toda g ∈ [f ] es acotada


casi donde quiera.
Demostración. Existen conjuntos N1 , N2 ∈ A tales que µ (N1 ) = µ (N2 ) = 0,
tales que f χN1c es acotada y f χN2c = gχN2c , con lo que

gχ(N1c ∪N2c ) = f χ(N1c ∪N2c )


≤ f χ(N c )

1

por lo que gχ(N c ∪N c ) f χ(N c ) ) y µ (N1 ∪ N2 ) = 0.


es acotada a.e. (por ser lo
1 2 1
Cuando escribamos 1 ≤ p ≤ ∞ se entenderá que 1 ≤ p < ∞ o que p = ∞.
p
Veamos primero que los espacios L (X, A, µ) son espacios vectoriales. 

153
11.1. DEFINICIÓN DE LOS ESPACIOS Lp 154

Proposición 264. Sea 1 ≤ p ≤ ∞, entonces los conjuntos Lp (X, A, µ) son


espacios vectoriales (donde se consideran las operaciones [f ] + [g] := [f + g] y para
c ∈ R, c [f ] := [cf ]).

Demostración. Sean [f ] , [g] ∈ Lp (X, A, µ) y c ∈ R. Las propiedades alge-


braicas son heredadas de la linealidad del espacio de funciones real valuadas, solo
debemos ver que esta bien denida la suma y el producto escalar. Se le deja al lector
ver que la suma y producto escalar no dependen del representante, solo veremos la
cerradura bajo la suma y producto escalar.
Primero supongamos que p = 1, en este caso al ser f, g integrables, sabemos
que también lo es |f | y |g|, por lo que
ˆ ˆ
|f + g| dµ ≤ |f | + |g| dµ
ˆ ˆ
= |f | dµ + |g| dµ
< ∞.
Con lo anterior tenemos que la suma esta bien denida, claramente si c∈R
entonces [cf ] ∈ L1 (X, A, µ).
Sea 1 < p < ∞, primero observemos que fp se puede ver como la composición
de dos funciones medibles, por lo que es medible y se puede integrar. Observemos
que
ˆ ˆ
p p
|f + g| dµ ≤ (2max {|f | , |g|}) dµ
ˆ
p p
≤ 2p (|f | + |g| ) dµ
ˆ ˆ 
p p p
=2 |f | dµ + |g| dµ

< ∞.
Con lo anterior tenemos que la suma esta bien denida, claramente si c∈R
entonces [cf ] ∈ Lp (X, A, µ).
Para el caso p = ∞, tomemos dos conjuntos de medida cero N1 , N2 tales que

f χN c ≤ M1
1

y

gχN c ≤ M2 .
2

Por lo anterior,

(f + g) χ(N1c ∪N2c ) = f χ(N1c ∪N2c ) + gχ(N1c ∪N2c )


≤ f χ(N c ∪N c ) + gχ(N c ∪N c )

1 2 1 2

≤ f χN c + gχN c
1 2

≤ M1 + M2 .
Con lo anterior tenemos que f +g es acotada a.e.. Con lo anterior tenemos que la
suma esta bien denida, claramente si c∈R entonces [cf ] ∈ L∞ (X, A, µ). 
11.1. DEFINICIÓN DE LOS ESPACIOS Lp 155

De aquí en adelante solo escribiremos f ∈ Lp (X, A, µ) para 1 ≤ p ≤ ∞, siempre


recordando que esto es bajo una relación de equivalencia. Ahora veremos que a estos
espacios se les puede dar una norma, lo que vamos a hacer en varios pasos.

Definición 265. Denimos la función k_kp : Lp (X, A, µ) −→ R tal que

ˆ
p
kf kp = |f | dµ

si 1 ≤ p < ∞. Si p=∞ denimos

kf k∞ = inf {c ≥ 0 : c es cota a.e. de f } .

Es inmediato que las funciones k_kp no dependen del representante, ya que si


f =g a.e. entonces sus integrales coinciden. Recordemos la desigualdad de Young
(??).
1 1
(Desigualdad de Young) Sean p, q ∈ (1, ∞) tales que
p + q = 1, entonces para
cualesquier par de números a, b ≥ 0 se cumple que

1 p 1 q
ab ≤ a + b .
p q

Con esto podemos demostrar la desigualdad de Hölder para funciones.

Teorema 266. (Desigualdad de Hölder) Sea f ∈ Lp (X, A, µ) y g ∈ Lq (X, A, µ),


donde 1 ≤ p, q ≤ ∞ y p1 + 1q = 1 (o p = 1 y q = ∞). entonces f g ∈ L1 (X, A, µ) y

kf gk1 ≤ kf kp kgkq .

Demostración. Caso 1 < p, q < ∞.


Observemos que

|f |
∈ Lp (X, A, µ)
kf kp

|g|
∈ Lq (X, A, µ) .
kgkq

Por lo anterior, usando la desigualdad de Young y la monotonía de la integral


obtenemos que

ˆ ˆ !p !q
|f g| 1 |f | 1 |g|
dµ ≤ + dµ < ∞
kf kp kgkq p kf kp q kgkq
11.1. DEFINICIÓN DE LOS ESPACIOS Lp 156

por lo que f g ∈ L1 (X, A, µ), además


ˆ ! !
kf gk1 |f | |g|
= dµ
kf kp kgkq kf kp kgkq
ˆ !p !q
1 |f | 1 |g|
≤ + dµ
p kf kp q kgkq
ˆ p ˆ q
1 |f | 1 |g|
= p dµ + q dµ
p kf kp q kgkq
ˆ ˆ
1 p 1 q
= p |f | dµ + q |g| dµ
p kf kp q kgkq
1 p 1 q
= p kf kp + q kgkq
p kf kp q kgkq
1 1
= +
p q
= 1.
Por tanto kf gk1 ≤ kf kp kgkq .
Ahora supongamos que p=1 y q = ∞. Al ser g acotada a.e por una constante
M, se sigue que
|f g| ≤ |f | M ∈ L1 (X, A, µ)
y en consecuencia f g ∈ L1 (X, A, µ). Por tanto
ˆ
kf gk1 = |f g| dµ
ˆ
≤ |f | M dµ

= M kf k1 ,
es decir kf gk1 ≤ M kf k1 para todo M cota a.e. de g, por tanto

kf gk1 ≤ kf k1 kgk∞ .

Antes de continuar, se dejara un ejercicio.

Ejercicio 267. Sea f ∈ L∞ (X, A, µ), entonces kf k∞ es una cota a.e. de f.


Con lo anterior demostraremos la desigualdad de Minkowski, que es la desigual-
dad del triangulo para las funciones k_kp .
Teorema 268. (Desigualdad de Minkowski) Sea 1 ≤ p ≤ ∞, entonces
kf + gkp ≤ kf kp + kgkp .
Demostración. El caso p=1 es un corolario directo de la desigualdad del
triangulo para el valor absoluto.
Supongamos que 1 < p < ∞. Observemos que
p p−1
|f + g| = |f + g| |f + g|
p−1
≤ (|f | + |g|) |f + g|
p−1 p−1
= |f | |f + g| + |g| |f + g| ,
11.1. DEFINICIÓN DE LOS ESPACIOS Lp 157

p
además si q= 1
p−1 entonces p = p1 + p−1
+ 1
q p =1 y
ˆ  q ˆ
p−1 p
|f + g| dµ = |f + g| dµ < ∞
p−1
por lo que |f + g| ∈ Lq (X, A, µ) y por la desigualdad de Hölder
ˆ ˆ  p−1
p
p−1 p
|f | |f + g| dµ ≤ kf kp |f + g| dµ
p−1
= kf kp kf + gkp ,
p−1
obtenemos una desigualdad análoga para |g| |f + g| y por tanto
ˆ
p p
kf + gkp = |f + g| dµ
ˆ  
p−1 p−1
≤ |f | |f + g|
+ |g| |f + g| dµ
ˆ ˆ
p−1 p−1
= |f | |f + g| dµ + |g| |f + g| dµ
p−1 p−1
≤ kf kp kf + gkp + kgkp kf + gkp
 
p−1
= kf kp + kgkp kf + gkp
y por tanto
kf + gkp ≤ kf kp + kgkp .
Falta demostrar el caso p = ∞, Por el ejercicio anterior |f | ≤ kf k∞ y |g| ≤ kgk∞
a.e., con lo que obtenemos que

|f + g| ≤ |f | + |g| ≤ kf k∞ + kgk∞
a.e., y por denición kf + gk∞ ≤ kf k∞ + kgk∞ . 
Con lo anterior es inmediato demostrar que la función k_kp es una norma.
 
Teorema 269. El espacio Lp (X, A, µ) , k_kp para 1 ≤ p ≤ ∞ es un espacio
normado.
Demostración. Por lo ya demostrado Lp (X, A, µ) es un espacio vectorial.
Veamos que k_kp es una norma, claramente kf kp ≥ 0.
q
´ p
Caso 1 ≤ p < ∞. n1) Sea f ∈ L (X, A, µ), kf kp = 0 si y solo si |f | dµ = 0
p
si y solo si |f | = 0 a.e. si y solo si f = 0 a.e. si y solo si f ∈ [0].
n2) Es inmediata debido a la linealidad de la integral (kcf kp = |c| kf kp ).
n3) Es la desigualdad de Minkowski.

Caso p = ∞. n1) Sea f ∈ L (X, A, µ), kf k∞ = 0 si y solo si 0 es una cota
casi donde quiera, si y solo si |f | = 0 a.e. si y solo si f ∈ [0]. 
p
Observemos que si f ∈ L (X, A, µ) para 1 ≤ p ≤ ∞ entonces el conjunto
E := {x ∈ X |: f (x)| = ∞} tiene medida cero, es inmediato para el caso p = ∞.
Para el caso 1 ≤ p < ∞ tenemos que
ˆ ˆ
p p
|f | dµ ≥ |f | dµ
E
= ∞µ (E)
11.2. TEOREMAS DE COMPLETUD 158

por lo que µ (E) = 0. De aquí en adelante supondremos siempre que la función


f ∈ Lp (X, A, µ) es tal que

f : X −→ R,

lo anterior es inmediato haciendo el cambio f χE c .

11.2. Teoremas de completud


En esta sección veremos que los espacios normados denidos en la sección ante-
rior son completos. Dividiremos la demostración en dos teoremas, uno para el caso
p=∞ y otro para el caso 1 ≤ p < ∞.
 
Teorema 270. Sea 1 ≤ p < ∞ entonces el espacio normado Lp (X, A, µ) , k_kp
es un espacio de Banach (espacio normado completo).

Demostración. Sea fn una sucesión de Cauchy en Lp (X, A, µ), sea  > 0


entonces existe un momento M ∈ N tal que si r, s > M

ˆ  p1
p
(11.2.1) kfr − fs kp = |fr − fs | dµ ≤ .

por tanto existe una subsucesión de (fn ) (la cual denotaremos por (gn )) tal que

1
kgn − gn+1 kp ≤ .
2n

Para todo n∈N (Ejercicio, demostrar que lo anterior siempre se puede hacer para
sucesiones de Cauchy). Denimos


X
g = |g1 | + |gk+1 − gk |
k=1

que es un límite de funciones medibles, por tanto g es medible y no negativa.


Aplicando el Lema de Fatou llegamos a que

ˆ ˆ n
X
!p
g p dµ ≤ lim |g1 | + |gk+1 − gk | dµ.
n→∞
k=1
11.2. TEOREMAS DE COMPLETUD 159

Usando la desigualdad de Minkowski llegamos a que

ˆ  p1
p
kgkp = g dµ

ˆ n
X
!p ! p1
≤ lim |g1 | + |gk+1 − gk | dµ
n→∞
k=1
n

X
= lim |g1 | + |gk+1 − gk |

n→∞
k=1 p
 
X n
≤ lim kg1 kp + |gk+1 − gk | 

n→∞
k=1 p
n
X
= kg1 kp + lim |gk+1 − gk |

n→∞
k=1 p
n
X
≤ kg1 kp + lim kgk+1 − gk kp
n→∞
k=1
n
X 1
≤ kg1 kp + lim
n→∞ 2k
k=1
= kg1 kp + 2

por lo qur g ∈ Lp (X, A, µ) y por lo que vimos en el nal de la sección anterior,


g es nita a.e., es decir E := {x ∈ X : g (x) = ∞} tiene medida cero, denimos la
función
(
g (x) x ∈
/E
f (x) :=
0 x ∈ E.
Entonces f ∈ Lp (X, A, µ). Como

n−1
X
|g| ≥ |g1 | + |gk+1 − gk |
k=1
n−1
X
≥ |g1 | + |gk+1 | − |gk |
k=1
= |gn | ,
y
p p
|f − gk | ≤ (2max {|f | , |gk |})
p p
≤ 2p (|f | + |gk | )
p p
≤ 2p (|g| + |g| )
p
< 2p+1 |g| ,
usando el Teorema de convergencia dominada de Lebesgue llegamos a que
ˆ ˆ
p p
0= |f − g| dµ = lim |f − gn | dµ
n→∞
11.2. TEOREMAS DE COMPLETUD 160

por lo que
0= lim kf − gn kp .
n→∞
Por la Ecuación (11.2.1) y la desigualdad del triangulo sabemos que existe un
momento M ∈N tal que si k>M n es sucientemente grande
y
ˆ  p1
p
kfk − gn kp = |fk − gn | dµ ≤

y aplicando el Lema de Fatou sobre gn llegamos a que


ˆ ˆ
p p
|f − fn | dµ = lim |f − fn | dµ
n→∞
ˆ
p
≤ lim |f − gn | dµ
n→∞
ˆ
p
≤ lim |f − gn | dµ
n→∞
≤ .
 
Para todo  > 0 y por tanto fn converge a f en el espacio Lp (X, A, µ) , k_kp . 

Teorema 271. El espacio normado (L (X, A, µ) , k_k∞ ) es un espacio de


Banach (espacio normado completo).


Demostración. Sea (fn ) una sucesión de Cauchy en (L∞ (X, A, µ) , k_k∞ ),
por lo que para >0 existe un momento M ∈N tal que si r, s > M
kfr − fs k∞ ≤ 
por lo que existe un conjunto de medida cero Nr,s tal que si x∈
/ Nr,s entonces

|fr (x) − fs (x)| ≤ .


S
Denamos N := Nr,s que es una unión numerable de conjuntos
(r,s)∈((M,∞)∩N)2
de medida cero, por lo que N tiene medida cero y para toda x∈
/ N y r, s > M
|fr (x) − fs (x)| ≤ .
S
Ahora si denimos N := N n1 nuevamente este conjunto tiene medida cero
n∈N
y si x∈
/N entonces para todo n ∈ N existe un momento M ∈ N tal que si r, s > M
1
|fr (x) − fs (x)| ≤ .
n
por lo que la sucesión (fn (x)) es de Cauchy en R para todo x ∈
/ N , por lo que
converge en R, si denimos la función

(x)x ∈
(
lim fn /N
f (x) := n→∞
0x ∈ N,
las funciones fn convergen uniformemente a.e. a f, entonces para =1 sabemos
que existe k ∈ N tal que
|f (x) − fk (x)| ≤ kf − fk k∞ < 1
en consecuencia

|f (x)| ≤ |fk (x)| + |f (x) − fk (x)| ≤ kfk k∞ + 1


11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 161

a.e., y por tanto f es acotada a.e., es decir f ∈ L∞ (X, A, µ) y por ser convergencia
uniforme a.e. llegamos a que

lim kf − fn k∞ = 0.
n→∞


11.3. Tipos de convergencia, en Lp y en medida


En esta sección estudiaremos la relación entre distintos tipos de convergencia,
tenemos convergencia uniforme, puntual y en la norma k_kp , además de introducir
nuevos tipos de convergencia, lo importante de esto es obtener información de con-
vergencia a partir de otras convergencias, de tal manera que dependiendo de la
sucesión, el saber si esta converge se pueda atacar de distintas manera dependiendo
el caso particular.

Teorema 272. Sea (X, A, µ) un espacio de medida tal que µ (X) < ∞, si
(fn ) es una sucesión en Lp (X, A, µ)
 que converge uniformemente
 a f , entonces
f ∈ Lp (X, A, µ) y (fn ) converge en Lp (X, A, µ) , k_kp a f.
Demostración. La prueba es inmediata ya que por la convergencia uniforme
tenemos que f es medible y por tanto
ˆ ˆ
p p
|fn − f | dµ ≤ kfn − f k∞ dµ
p
= kfn − f k∞ µ (X) ,
que tiende a cero cuando n tiende a innito. 
Ejemplo 273. Dar un contraejemplo que que el teorema anterior es falso cam-
biando la hipótesis de convergencia uniforme por convergencia puntual.

Sin embargo, veamos que agregando la hipótesis de dominancia, se puede de-


bilitar la hipótesis de convergencia uniforme a convergencia a.e. puntual y quitando
la hipótesis de que µ (X) < ∞
Teorema 274. Sea (X, A, µ) un espacio de medida, si (fn ) es una sucesión
en Lp (X, A, µ) que converge puntualmente a.e. a f , si existe g ∈ Lp (X, A, µ)
tal
 que |fn | ≤ g para  todo n ∈ N, entonces f ∈ L (X, A, µ) y (fn ) converge en
p

Lp (X, A, µ) , k_kp a f .
p
Demostración. Es inmediato que |f | ≤ g p a.e., como g ∈ Lp (X, A, µ), se
p
sigue que f ∈ L (X, A, µ), además
p p p
|fn − f | ≤ 2p (|fn | + |f | )
p
≤ 2p+1 |g|
p
que es integrable, por lo que |fn − f | es integrable y por el Teorema de convergencia
dominada de Lebesgue concluimos que
ˆ ˆ
p p
lim |fn − f | dµ = lim |fn − f | dµ
n→∞ n→∞
ˆ
= 0dµ
=0
11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 162

 
y por tanto (fn ) converge en Lp (X, A, µ) , k_kp a f. 
1
 
Ejemplo 275. Defínase inductivamente los conjuntos
1  1 1 2 A1 := [0, 1], A2 := 0, 2 ,
A3 := 2 , 1 , A4 := 0, 4 , A5 := 4 , 4 ,..., sea la función fn = χAn , demuestra que
p
las funciones ,fn convergen en L (X, A, µ), pero no convergen a ni una función a.e..
Ahora deniremos un dos nuevos tipos de convergencia.

Definición 276. Sea (fn ) una sucesión de funciones medible, (fn ) convergen
en medida a la función medible f si

lim µ {x ∈ X : |fn (x) − f (x)| > } = 0


n→∞
para todo  > 0.
Diremos que (fn ) converge casi uniformemente a f si para toda  > 0 existe un
conjunto E medible tal que µ (E) <  y la convergencia de (fn ) en f es uniforme
fuera de E.
Primero veremos un resultado clásico, el cual dice que es suciente la conver-
gencia a.e. para tener convergencia casi uniforme si el espacio total tiene medida
nita.

Teorema 277. (Teorema de Ergorov) Si µ (X) < ∞ y (fn ) es una sucesión de


funciones medibles que convergen a.e. a la función f , entonces f es medible y (fn )
converge casi uniforme a f .
Demostración. Supondremos que la convergencia se da en to X (¾por que
se puede suponer esto?). Sea  > 0, denimos el conjunto
[  1

E (m, k) := x ∈ X : |fn (x) − f (x)| ≥ .
k
n≥m
T
Claramente E (m, k) ⊃ E (m + 1, k) y E (n, k) = ∅ debido a la convergencia
n∈N
en todo X, además µ (E (1, k)) ≤ µ (X) < ∞, por lo que
!
\
0 = µ (∅) = µ E (n, k)
n∈N
= lim µ (E (n, k))
n→∞

tomemos una sucesión
S nk de enteros tal que m (E (nk , k)) < 2k+1
, si denimos
E := Ek entonces
k∈N
∞ ∞
X X 
µ (E) ≤ µ (Ek ) < =
2k+1
k=1 k=1
1
y six∈ / E entonces x ∈
/ Ek para todo k ∈ N por lo que |fs (x) − f (x)| < k para
todo s > nk lo que demuestra la convergencia uniforme. 
Es posible obtener el mismo resultado del Teorema de Ergorov pero suponiendo
dominancia por alguna función en Lp (X, A, µ) .
Teorema 278. (Teorema de Ergorov con dominancia) Sea (fn ) es una sucesión
de funciones medibles que convergen a.e. a la función f , entonces f es medible y
sea g ∈ Lp (X, A, µ) tal que |fn | ≤ g para toda n ∈ N, entonces (fn ) converge casi
uniforme a f .
11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 163

Demostración. Nuevamente podemos suponer la convergencia puntual en


todo X, observemos que por la desigualdad |fn | ≤ g obtenemos

|fn − f | ≤ |fn | + |f | ≤ 2g.


Si denotamos el conjunto

A (k) := {x ∈ X : |fn (x) − f (x)| ≥ }


entonces
A (k) ⊂ {x ∈ X : 2g ≥ }
y por tanto
[
A (k) ⊂ {x ∈ X : 2g ≥ }
k≥1
además observemos que
ˆ ˆ
1 p 1 p
(2g) dµ ≥ p (2g) dµ
p  {x∈X:2g≥}
1
≥ p p µ ({x ∈ X : 2g ≥ })
 
[
≥ µ A (k) .
k≥1

Por otro lado  


\ [
µ A (k) = 0
n≥1k≥n
!
S
debido a que (fn ) converge casi donde quiera a f, además µ A (k) <∞ por
k≥1
lo que
 
[
lim µ  A (k) = 0.
n→∞
k≥n

Repitiendo la demostración del Teorema de Ergorov terminamos la prueba. 


Proposición 279. La convergencia casi uniforme implica la convergencia a.e..
Demostración. Por el Teorema de Ergorov obtenemos que la convergencia
a.e. implica la convergencia casi uniforme. Supongamos que (fn ) converge casi uni-
forme a f , de esto se sigue que para todo n∈N existe un conjunto En medible tal
1
que µ (En ) < n y hay convergencia uniforme fuera de En , denamos
\
E= Ek .
k∈N

Por la denición de E,
1
µ (E) ≤ µ (Ek ) <
k
para todo k ∈ N, por tanto µ (E) = 0, además si x ∈ / E , entonces x ∈
/ Ek para
algun k ∈ N y tenemos la convergencia de fn (x) en f (x), lo que demuestra la
c
convergencia en E y por tanto la convergencia a.e.. 
11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 164

Corolario 280. Si el espacio total tiene medida nita, la convergencia casi


uniforme es equivalente a la convergencia a.e..
Ejemplo 281. Demuestra con un contraejemplo que la hipótesis de que el
espacio total tenga medida nita es necesaria para el Teorema de Ergorov.
Ahora veremos que en general la convergencia casi uniforme implica la conver-
gencia en medida.

Proposición 282. Sea (fn ) una sucesión que converge casi uniformemente a
f , entonces converge en medida a f
Demostración. Sea  > 0, sabemos que existe un conjunto M ∈ A tal que
µ (M ) <  y la convergencia en M c es uniforme, es decir que existe un momento
N ∈ N tal que si k > N , |fk (x) − f (x)| <  si x ∈ M c . Por lo que
{x ∈ X : |fn (x) − f (x)| > } ⊂ M
y por tanto

lim µ ({x ∈ X : |fn (x) − f (x)| > }) ≤ 


n→∞
para toda  > 0, con lo que concluimos que

lim µ ({x ∈ X : |fn (x) − f (x)| > }) = 0.


n→∞

Observemos ahora que al igual que la convergencia casi uniforme, la convergen-


cia en Lp (X, A, µ) implica convergencia en medida.

Proposición 283. Sea (fn ) una sucesión en Lp (X, A, µ) que convergen en


L (X, A, µ) a f , entonces (fn ) convergen en medida a f .
p

Demostración. Sea

En (a) := {x ∈ X : |fn (x) − f (x)| ≥ a} .


Entonces el conjunto En (a) es medible y
ˆ
p p
kfn − f kp = |fn − f | dµ
ˆ
p
≥ |fn − f | dµ
En (a)
ˆ
≥ ap dµ
En (a)
= µ (En (a)) ap .
Por la convergencia en Lp (X, A, µ) concluimos que µ (En (a)) tiende a cero y
por tanto obtenemos la convergencia en medida. 

Ejercicio 284. Dar contraejemplo de que la convergencia en medida no implica


en Lp (X, A, µ).
Ahora sera conveniente agregar un nuevo concepto, el cual es necesario intro-
ducir debido a que la convergencia en medida no viene de ni un tipo de norma.
11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 165

Definición 285. Sea (fn ) una sucesión de funciones medibles, (fn ) es de


Cauchy en medida si

lim µ ({x ∈ X : |fn (x) − f (x)| > }) = 0


n,m→∞

para todo  > 0.


Es inmediato que si las funciones (fn ) convergen en medida entonces son de
Cauchy en medida, ya que para >0
n o
{x ∈ X : |fn (x) − fm (x)| > } ⊂ x ∈ X : |fn (x) − f (x)| >
2 o
[n 
x ∈ X : |fm (x) − f (x)| > .
2
Proposición 286. Sea (fn ) una sucesión de funciones medibles y de Cauchy
en medida, entonces existe una subsucesión que converge a una función f casi
uniformemente (casi donde quiera) y en medida.
Demostración. Tomemos una subsucesión (gn ) de (fn ) tal que
 
1 1
µ x ∈ X : |gk+1 (x) − gk (x)| > k ≤ k,
2 2
Ak := x ∈ X : |gk+1 (x) − gk (x)| > 21k y sea Bk :=
 S
denotemos por An , ob-
n≥k
servemos que

X 1
µ (Bk ) ≤ µ (An ) ≤
2k−1
n≥k
T S
por lo que B= Bn tiene medida cero, además si x∈
/ Bn entonces x∈
/ An ,
n≥1 n≥k
por lo que si i ≥ j ≥ k obtenemos que
|gj (x) − gi (x)| ≤ |gj+1 (x) − gj (x)| + |gj+2 (x) − gj+1 (x)| + ... + |gi (x) − gi−1 (x)|
1 1 1
≤ j + j+1 + ... + i−1
2 2 2

X 1 1
< n
= j−1 .
2 2
n≥j

Con lo anterior obtenemos que la sucesión (gn (x)) es de Cauchy para todo
x∈
/ B, denamos la función
(
lim gn (x)x ∈
/B
f (x) := n→∞
0x ∈ B.
Observemos que para x∈
/ Bk s > k obtenemos que
y

|f (x) − gs (x)| = lim gn (x) − gs (x)

n→∞
= lim |gn (x) − gs (x)|
n→∞
1
< ,
2s−1
1
lo que es convergencia uniforme fuera de Bk , 2k−1
pero µ (Bk ) ≤
, es decir tenemos
convergencia casi uniforme (y por tanto a.e.), ahora veamos que esta convergencia
también es en medida.
11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 166

1
α,  > 0, seleccionamos k
Sean natural tal que
2k
< min (α, ) . Sea j ≥ k
observemos que si x ∈ X es tal que

|f (x) − gj (x)| ≥ α
entonces
1
|f (x) − gj (x)| >
2k
usando la desigualdad del triangulo obtenemos que

1
|f (x) − gk (x)| + |gk (x) − gj (x)| >
2k
despejando y usando las desigualdades previas llegamos a que

1 1 1 1
|gk (x) − gj (x)| > − |f (x) − gk (x)| ≥ k − k−1 = k−1
2k 2 2 2
y por tanto

{x ∈ X : |f (x) − gj (x)| ≥ α} ⊂ Bk−1


con lo que

1
µ ({x ∈ X : |f (x) − gj (x)| ≥ α}) ≤ µ (Bk−1 ) ≤ <
2k−1
para j≥k y por tanto obtenemos la convergencia en medida. 

Corolario 287. Si (fn ) es una sucesión de Cauchy en medida, entonces existe


una función f que es medible y a la cual las fn convergen en medida. Además la
función f es única a.e..
Demostración. Por la Proposición anterior sabemos que existe una subseuce-
sión (fnk ) que converge en medida a la función medible f, veamos que toda la
sucesión converge en medida a f.
Observemos que

|f (x) − fn (x)| ≤ |f (x) − fnk (x)| + |fnk (x) − fn (x)|


entonces
n αo
{x ∈ X : |f (x) − fn (x)| > α} ⊂ x ∈ X : |f (x) − fnk (x)| >
2 o
[n α
x ∈ X : |fnk (x) − fn (x)| >
2
de lo que se sigue inmediatamente la convergencia en medida, veamos ahora que es
única a.e., supongamos que (fn ) converge en medida a una función medible g.
Observemos que

|f (x) − g (x)| ≤ |f (x) − fn (x)| + |fn (x) − g (x)|


entonces
n αo
{x ∈ X : |f (x) − g (x)| > α} ⊂ x ∈ X : |f (x) − fn (x)| >
2
[n αo
x ∈ X : |fn (x) − g (x)| >
2
para toda n ∈ N y de esta manera

µ ({x ∈ X : |f (x) − g (x)| > α}) = 0


11.3. TIPOS DE CONVERGENCIA, EN Lp Y EN MEDIDA 167

1
para todo por α > 0, por lo que (intercambiando α por
n y uniendo conjuntos de
medida cero) concluimos que

µ ({x ∈ X : |f (x) − g (x)| > 0}) = 0.



Ejercicio 288. Dar un ejemplo en el que convergencia en medida no implique
en Lp (X, A, µ).
Ahora veamos que bajo alguna hipótesis la convergencia en medida implica la
convergencia en Lp (X, A, µ).
Proposición 289. Sea (fn ) una sucesión de funciones en L (X, A, µ) que
p

convergen en medida a una función f y sea g ∈ Lp (X, A, µ) tal que |fn | ≤ g ,


entonces f ∈ Lp (X, A, µ) y (fn ) convergen en Lp (X, A, µ) a f .
Demostración. Supongamos que las funciones (fn ) no convergen a f, en-
tonces existe una subsucesión (gn ) de (fn ) y >0 tal que

kf − gn kp > 
para tono n ∈ N, pero sabemos que (gn ) (gnk ) que converge
tiene una subsucesión
en medida y a.e. a una función h, f = g a.e., por lo que (gnk )
es inmediato ver que
p
converge a f a.e. y por ser dominadas, estas convergen en L (X, A, µ) a f, lo que
es contradictorio con que kf − gn kp >  para todo n ∈ N. Por tanto las funciones
(fn ) convergen en Lp (X, A, µ) a f . 
Con lo anterior podemos resumir lo visto con tres tablas en la que a.e. es
convergencia casi donde quiera, Lp convergencia en Lp (X, A, µ), a.u. convergencia
uniforme y m en medida y en la esquina superior izquierda pondremos que hipótesis
se supone, las columnas y lineas serán etiquetadas por los distintos tipos de conver-
gencia si ponemos  en la la x columna y signica que la convergencia x implica que
una subsucesión converge en y, si ponemos  en la la x y la columna y signica
que la convergencia x implica la convergencia y.

a.e. a.u. m Lp
a.e. ×
a.u.  × 
m   ×
Lp    ×
µ (X) < ∞ a.e. a.u. m Lp
a.e. ×  
a.u.  × 
m   ×
Lp    ×
p
|fn | ≤ g ∈ L a.e. a.u. m Lp
a.e. ×   
a.u.  ×  
m   × 
Lp    ×
Capítulo 12

Cargas

12.1. Descomposición de Hanh


En cuestiones aplicadas, uno puede necesitar medidas que no tengan que ser
estrictamente no negativas, por ejemplo en distribuciones de cargas eléctricas, in-
spirado en esto denimos el siguiente concepto.

Definición 290. Sea un espacio medible (X, A) una carga es una función
ϑ : A −→ R tal que
c1) ϑ (∅) = 0,
c2) No existen A, B ∈ A tales que ϑ (A) = ∞ y ϑ (B) = −∞,
c3) Si An ∈ A para todo n ∈ N y Ai ∩ Aj = ∅ para todo j 6= i entonces
 
[ X∞
ϑ  An =
 ϑ (An ) .
n≥1 n=1

Un ejemplo de estas son cualesquiera dos diferencias de medidas, un resultado


importante sera demostrar que estas son las únicas.

Definición 291. Sea un espacio medible (X, A) y ϑ una carga


a) P ⊂ X es llamado positivo si para todo A ⊂ P , A ∈ A, ϑ (A) ≥ 0,
b) N ⊂ X es llamado negativo si para todo A ⊂ N , A ∈ A, ϑ (A) ≤ 0,
a) O ⊂ X es llamado nulo si para todo A ⊂ O , A ∈ A, ϑ (A) = 0.

Sea f ∈ L1 (X, A, µ), tal que f cambia de signo, entonces denimos para todo
E∈A ˆ ˆ ˆ
ϑ (E) := f dµ = f + dµ − f − dµ,
E E E
por se ϑ una diferencia de medidas es una carga, se deja al lector observar que
P := f −1 (0, ∞], N := f −1 [−∞, 0) y O := f −1 {0} son respectivamente positivo,
negativo y nulo.

Proposición 292. Sea un espacio medible (X, A) y ϑ una carga entonces si


E, F ∈ A, E ⊂ F y |ϑ (F )| < ∞ entonces |ϑ (E)| < ∞ y ϑ (F \ E) = ϑ (F ) − ϑ (E).
Demostración. Sabemos por la aditividad de la carga que

ϑ (F ) = ϑ (E ∪ F \ E) = ϑ (E) + ϑ (F \ E) ,
como|ϑ (F )| <∞ tenemos que ϑ (E) , ϑ (F \ E) ∈ R y por tanto

ϑ (F \ E) = ϑ (F ) − ϑ (E) .

168
12.1. DESCOMPOSICIÓN DE HANH 169

Proposición 293. Sea un espacio medible (X, A) y ϑ una carga, sea En ∈ A


tal que son una familia monótona (creciente o decreciente) para n ∈ N, entonces
!
= lim ϑ (En )
[
ϑ En
n→∞
n∈N

de ser una sucesión creciente y si existe k ∈ N tal que |ϑ (Ek )| < ∞


!
= lim ϑ (En )
\
ϑ En
n→∞
n∈N

de ser (En ) una sucesión decreciente.


Demostración. La prueba es a misma que para las medidas, se le deja a
lector vericar esto. 

Proposición 294. Sea un espacio medible (X, A) y ϑ una carga, Si Bn para


n ∈ N es una familia de conjuntos positivos, negativos o neutros, entonces
S
Bn
n∈N
es positivo, negativo o neutro respectivamente.
Demostración. Solo lo demostraremos para el caso en que los Bn son nega-
tivos, los demás son análogos.
Veamos primero que B1 ∪ B2 es negativo, por la aditividad de la carga tenemos
que para todo E ∈ A, E ⊂ B1 ∪ B2
ϑ (E) = ϑ (E ∩ (B1 \ B2 )) + ϑ (E ∩ (B2 \ B1 )) + ϑ (E ∩ (B1 ∩ B2 ))
por ser B1 y B2 negativos tenemos que

ϑ (E ∩ (B1 \ B2 )) , ϑ (E ∩ (B2 \ B1 )) , ϑ (E ∩ (B1 ∩ B2 )) ≤ 0,


es claro que por inducción obtenemos que la unión nita de conjuntos negativos es
n
S
negativo. Sea An = Bk , la faminila An es creciente por tanto para todo E ∈ A,
S k=1 S
E⊂ Bn , entonces E = (An ∩ E) y
n∈N n∈N
n
!
[
ϑ (E) = lim ϑ (An ∩ E) = lim ϑ Bk ∩ E ≤0
n→∞ n→∞
k=1

por tanto la unión numerable de conjuntos negativos es negativo. 

Con lo anterior podemos demostrar el teorema de descomposición de Hanh.

Teorema 295. (Teorema de descomposición de Hanh) Sea un espacio medible


(X, A) y ϑ una carga, entonces existe un conjunto P ∈ A tal que es positivo y su
complemento N := P c es negativo, P no es necesariamente único.
Demostración. Supondremos que −∞ < ϑ (E) ≤ ∞ para todo E ∈ A, si ϑ
toma el valor −∞, la demostración sera directa tomando −ϑ.
Sea α := inf {ϑ (E) : E es negativo} , observemos que el ∅ es negativo, por lo
que esta bien denido α, ahora sea An una sucesión de conjuntos negativos tal que

α= lim ϑ (An ) .
n→∞
12.1. DESCOMPOSICIÓN DE HANH 170

S
Por la proposición anterior N := An es negativo, por denición de α, α ≤
n∈N
ϑ (N ), pero An ⊂ N por lo que

ϑ (N ) = ϑ (N \ An ) + ϑ (An ) ≤ ϑ (An )
ya que N \ An es negativo por ser subconjunto de un conjunto negativo, con esto
ϑ (N ) ≤ α y por tanto ϑ (N ) = α.
llegamos a que
c
Demostraremos que P := N es positivo. Supongamos que no, Entonces existe
E ⊂ P tal que ϑ (E) < 0, claramente E no es negativo, ya que de ser lo, N ∪ E
sería negativo y
ϑ (N ∪ E) = ϑ (N ) + ϑ (E) < ϑ (B) = α
lo que es contradictorio con la denición de α. Sea k1 el menor natural tal que existe
E1 ⊂ E , E1 ∈ A y ϑ (E1 ) ≥ k11 , además estamos suponiendo que −∞ < ϑ (E) < 0
por lo que 0 < |ϑ (E)| < ∞ usando la Proposición 292 tenemos que |ϑ (E1 )| < ∞ y
en consecuencia
1
ϑ (E \ E1 ) = ϑ (E) − ϑ (E1 ) ≤ ϑ (E) − < 0.
k1
Repitiendo los argumentos para E obtenemos que E \ E1 no es negativo, den-
imos el natural k2 como el menor natural tal que existe E2 ⊂ E \ E1 , E2 ∈ A y
ϑ (E2 ) ≥ k12 , inductivamente construimos conjuntos En contenidos en E , ajenos
1 1
tales que ϑ (En ) ≥
kn para n ∈ {1, 2, ..., s}, donde kn es el menor natural tal que
n
Er contiene un subconjunto de medida mayor o igual que k1n .
S
E\
r=1
Por la aditividad de la carga obtenemos que
∞ ∞
!
X 1 X [
≤ ϑ (En ) = ϑ En < ∞
k
n=1 n n=1 n∈N
S
la ultima desigualdad se debe que En ⊂ E y |ϑ (E)| < ∞.
S n∈N
Deamos B := E \ En , observemos que
n∈N
! !
[ [
ϑ (B) = ϑ E \ En = ϑ (E) − ϑ En ≤ ϑ (E) < 0,
n∈N n∈N

además B es negativo, ya que si existe F ⊂ BS tal que ϑ (F ) > 0, entonces existe


1
natural l tal que ϑ (F ) ≥ l , como F ⊂E\ En se sigue que l ≥ kn para todo
n∈N
n ∈ N por denición de los kn , pero kn tiende a innito si n tiende a innito (ya

1
P
que
kn < ∞) por lo que es contradictorio. Por tanto B es negativo y ajeno a
n=1
N , con lo que concluimos que ϑ (N ∪ B) < α que es contradictorio, por tanto P es
positivo. 
Un detalle que podría parecer que trae complicaciones es la no unicidad del
conjunto positivo y negativo P, N , veamos que la unicidad casi se da, en sentido la
diferencia simétrica debe ser un conjunto nulo.

Proposición 296. Sean P1 y P2 conjuntos positivos obtenidos por medio de la


descomposición de Hanh, entonces si Ni := Pic para i ∈ {1, 2} entonces P1 4P2 y
N1 4N2 son nulos.
12.2. DESCOMPOSICIÓN DE JORDAN 171

Demostración. Sea A ⊂ P1 4P2 , entonces

ϑ (A) = ϑ (A ∩ (P1 \ P2 )) + ϑ (A ∩ (P2 \ P1 )) ,


como A ∩ (P1 \ P2 ) ⊂ P1 y A ∩ (P2 \ P1 ) ⊂ P2 tenemos que ϑ (A) ≥ 0, pero por
otro lado tenemos que A ∩ (P1 \ P2 ) ⊂ N2 y A ∩ (P2 \ P1 ) ⊂ N1 entonces ϑ (A) ≤ 0,
por tanto ϑ (A) = 0. 

12.2. Descomposición de Jordan


En esta sección demostraremos que toda carga es la diferencia de dos medidas,
este es conocido como el teorema de descomposición de Jordan.

Definición 297. Sea (X, A) un espacio medible y µ1 , µ2 dos medidas, diremos


que son mutuamente singulares si existe conjunto medible A tal que µ1 (A) = 0 =
µ2 (Ac ). Ser mutuamente singulares lo denotaremos por µ1 ⊥µ2 .

Es claro que si µ1 ⊥µ2 entonces µ2 ⊥µ1


Proposición 298. Sea (X, A) un espacio medible y µ1 , µ2 , µ3 tres medidas
tales que µ1 ⊥µ3 y µ2 ⊥µ3 entonces µ1 + µ2 ⊥µ3 .
Demostración. Sea Ai medible tal que µi (Ai ) = 0 = µ3 (Aci ) para i ∈ {1, 2},
entonces
µ1 + µ2 (A1 ∩ A2 ) ≤ µ1 (A1 ) + µ2 (A2 ) = 0.
Por otra parte
c
µ3 ((A1 ∩ A2 ) ) = µ3 (Ac1 ∪ Ac2 ) ≤ µ3 (Ac1 ) + µ3 (Ac2 ) = 0.
Con lo que concluimos que µ1 + µ2 ⊥µ3 . 
Ejemplo 299. En el ejemplo que ya habíamos estudiado, dado un espacio de
medida (X, A, µ) y dos funciones medibles no negativas f, g tales que f (x) 6= 0
entonces g (x) = 0, si denimos las funciones
ˆ
µ1 (E) := f dµ
E
y
ˆ
µ2 (E) := gdµ
E
para todo E ∈ A, Es inmediato ver que µ1 ⊥µ2 , tomando al conjunto

A := {x ∈ X : f (x) = 0}
.

Teorema 300. (Descomposición de Jordan) Sea (X, A) un espacio medible y


ϑ una carga, entonces existen dos medidas µ1 y µ2 tales que µ1 ⊥µ2 , una de las dos
es nita y ϑ = µ1 − µ2 .
Demostración. Usando la descomposición de Hanh, sabemos que existe un
conjuntoP positivo de ϑ tal que su complemento es negativo. denamos la función
ϑ+ : A −→ R tal que
ϑ+ (E) = ϑ (P ∩ E) ,
por ser P positivo ϑ+ ≥ 0 y
+
por ser ϑ carga ϑ es una medida. Análogamente
− c
ϑ (E) = −ϑ (P ∩ E)
12.3. EL TEOREMA DE RADON-NIKODÝM 172

es una medida (por ser P c negativo).


Demostrar que ϑ ⊥ϑ− es inmediato
+
ya que

ϑ (P ) = ϑ (P ∩ P ) = 0 = ϑ (P c ∩ P ) = ϑ− (P ) .
+ c c

Como ϑ no puede valer innito y menos innito para dos conjuntos medibles,
se sigue que ϑ+ o ϑ− es nita. Por último observemos que para E ∈ A,
c
ϑ (E) = ϑ ((P ∩ E) ∪ (P ∩ E))
= ϑ (P ∩ E) + ϑ (P c ∩ E)
= ϑ+ (E) − ϑ− (E) .
Con lo anterior terminamos la prueba. 
Observemos que no existe un regreso para el teorema de Jordan, uno puede
tomar cualesquiera dos medidas µ1 y µ2 que no sean singulares y su resta es una
carga. Por otro lado veamos que la descomposición de Jordan no depende de la
selección de la descomposición de Hanh. Sean P1 , P2 dos conjuntos obtenidos a
partir de la descomposición de Hanh, entonces sabemos que P1 ∆P2 es nulo, por lo
que
ϑ (P1 ∩ E) = ϑ (P1 ∩ E) + ϑ (E ∩ (P2 \ P1 ))
= ϑ (E ∩ (P2 ∪ P1 ))
= ϑ (P2 ∩ E) + ϑ (E ∩ (P1 \ P2 ))
= ϑ (P2 ∩ E) ,
de manera análoga se demuestra que

ϑ (P1c ∩ E) = ϑ (P2c ∩ E) .
Ejemplo 301. Sea un espacio de medida (X, A, µ) y una función f medible,
entonces la descomposición de Jordan para
ˆ
ϑ (E) := f dµ
E
son ˆ
µ1 (E) := f + dµ
E
y
ˆ
µ2 (E) := f dµ.
E

12.3. El Teorema de Radon-Nikodým


El Teorema de Radon-Nikodým nos dirá cuando dos medidas denidas en la
misma σ−álgebra esta una denida a partir de la otra por medio de una integral,
por el Corolario 249 sabemos que una condición necesaria es que si µ1 esta denida
a partir de una integral con respecto a µ2 , entonces µ1 es absolutamente continua
con respecto a µ2 , esto sera denotado por µ1  µ2 y signicaba que si E es medible
y µ2 (E) = 0 entonces µ1 (E) = 0. Veremos que bajo otra hipótesis, esta condición
es suciente.

Lema 302. Sean µ1 y µ2 dos medidas nitas en es espacio medible (X, A),
entonces µ1  µ2 si y solo si para toda  > 0 existe δ > 0 tal que si E ∈ A y
µ2 (E) < δ entonces µ1 (E) < .
12.3. EL TEOREMA DE RADON-NIKODÝM 173

Demostración. ⇐) Supongamos que para toda  > 0 existe δ > 0 tal que si
E ∈ A y µ2 (E) < δ entonces µ1 (E) < . si µ2 (E) = 0, entonces µ1 (E) <  para
toda  > 0, es decir µ1 (E) = 0, por tanto µ1  µ2 .
1
⇒) Supongamos que existe  > 0 tal que S existe En medible, µ2 (E) < n y
2
µ1 (En ) >  para todo n ∈ N, denimos Fn := Ek , entonces
k≥n

X 1
µ2 (Fn ) ≤ µ2 (Ek ) =
2n−1
k=n

además la familia Fn es decreciente, por ser µ1 y µ2 nita concluimos que


!
\
µ2 Fk = lim µ2 (Fn ) = 0
n→∞
k=1
y

!
\
µ2 Fk = lim µ2 (Fn ) ≥ .
n→∞
k=1
por lo que µ2 no es absolutamente continua con respecto a µ1 , por contrapositiva
terminamos la demostración. 

El lema anterior sera usado para demostrar el teorema de Radon-Nikodým,


aunque el lema es para medidas nitas, nuestro objetivo sera demostrar el teorema
para medidas σ -nitas.
Teorema 303. (Radon-Nikodým) Sea (X, A) un espacio medible y µ1 , µ2 me-
didas tales que µ1  µ2 y ambas son σ -nitas, entonces existe una función f ∈
M + (X, A) tal que
ˆ
µ1 (E) = f dµ2
E
para todo E ∈ A, además a función f es única a.e..
Demostración. Primero supongamos que tanto µ1 y µ2 son nitas. Sea r > 0
una constante y consideremos la carga µ1 − rµ2 , Sea P (r) el conjunto positivo
c
generado por la descomposición de Hanh y N (r) := P (r) es un conjunto negativo.
Denamos los conjuntos

A1 = N (r)
e inductivamente
k
[
Ak+1 := N ((k + 1) r) \ An .
n=1
Es claro que los conjuntos Ak con k natural son disjuntos por pares y Ak ⊂
N (kr), además
k
[ k
[
N (nr) = An ,
n=1 n=1
por lo anterior se sigue que

k
[ k
\
Ak = N (kr) \ N (nr) = N (kr) ∩ P (nr) ,
n=1 n=1
12.3. EL TEOREMA DE RADON-NIKODÝM 174

en consecuencia Ak ⊂ N (kr) y Ak ⊂ P ((k − 1) r), es decir para todo B ⊂ Ak


medible

(12.3.1) (k − 1) rµ2 (B) ≤ µ1 (B) ≤ krµ2 (B) .


Denamos


!c ∞
!c ∞
[ [ \
F := An = N (nr) = P (nr) ,
n=1 n=1 n=1

por tanto F es medible y F ⊂ P (nr) para todo n ∈ r, por lo que

0 ≤ nrµ2 (F ) ≤ µ1 (F ) ≤ µ1 (X)
para todo n ∈ N, con lo que concluimos que µ2 (F ) = 0. Por hipótesis sabemos que
µ1  µ2 , entonces µ1 (F ) = 0.
Consideremos la función

X
fr (x) := (k − 1) rχAk
n=1

que es el límite puntual de funciones medibles, por lo que es medible, además usando
(12.3.1) obtenemos que para todo conjunto E medible
ˆ ˆ
fr dµ2 = ∞
S
fr dµ2
E (F ∩E)∩ An ∩E
n=1
∞ ˆ
X
= fr dµ2
n=1 An ∩E

X∞
= (k − 1) µ2 (An ∩ E)
n=1
X∞
≤ µ1 (An ∩ E)
n=1
= µ1 (E)

X
= µ1 (An ∩ E)
n=1
X∞
≤ kµ2 (An ∩ E)
n=1
X∞ ˆ
= (fr + 1r) dµ2
n=1 An ∩E
ˆ
= ∞
S
(fr + 1r) dµ2
(F ∩E)∩ An ∩E
n=1
ˆ
= (fr + 1r) dµ2
ˆE
= fr dµ2 + rµ2 (E) .
12.3. EL TEOREMA DE RADON-NIKODÝM 175

Denamos la función gn := f2−n para todo n ∈ N, por tanto para todo conjunto
E medible ˆ ˆ
gn dµ2 ≤ µ1 (E) ≤ gm + 2−m µ2 (X)
E E
paro todo m, n naturales, por lo que obtenemos que
ˆ ˆ
gn dµ2 ≤ µ1 (E) ≤ gm dµ2 + 2−m µ2 (X)
E E
y
ˆ ˆ
gm dµ2 ≤ µ1 (E) ≤ gn dµ2 + 2−n µ2 (X)
E E
si suponemos que m≥n restando las desigualdades anteriores concluimos que
ˆ
gm − gn dµ2 ≤ 2−n µ2 (X)


E

lo anterior para cualquier conjunto E medible, en particular E puede ser donde el


integrando es positivo y a parte donde es negativo, por lo que combinando esas dos
desigualdades llegamos a que
ˆ
|gm − gn | dµ2 ≤ 2−n+1 µ2 (X) ,
E

L1 (X, A, µ2 ), que es un espacio completo,


por lo que es una sucesión de Cauchy en
por esto las funciones gn f en L1 (X, A, µ2 ) y por tanto
convergen a una función
también en medida y alguna subsuseción de (gn ) converge a.e. a f , esto implica que
f ∈ M + (X, A). Más aun para todo conjunto E medible
ˆ ˆ ˆ

gn dµ2 − f dµ2 ≤
|gn − f | dµ2

E E
ˆ E

≤ |gn − f | dµ2

por lo que
ˆ ˆ
lim gn dµ2 = f dµ2
n→∞ E E
≤ µ1 (E)
ˆ 
≤ lim gn dµ2 + 2−n µ2 (X)
n→∞
ˆ E

= f dµ2
E
es decir ˆ
µ1 (E) = f dµ2
E
para todo conjunto E medible. ´
La unicidad def es inmediata usando el resultado de que
E
hdµ2 es cero y h
no negativa en E implica que h es cero a.e. en E.
Ahora veamos el caso donde µ1 y µ2 son σ -nitas. Sea Dn ⊂ Dn+1 ⊂ X
medibles para todo n natural tales que

µ1 (Dn ) , µ2 (Dn ) < ∞


12.4. TEOREMA DE DESCOMPOSICIÓN DE LEBESGUE 176

y

[
X= Dn ,
n=1
(se deja al lector comprobar que se puede tomar esta familia Dn ), aplicamos el
caso nito para cada Dn , es decir existe una función fn tal que para todo conjunto
medible E ⊂ Dn ˆ
µ1 (E) = fn dµ2 ,
E
por la unicidad a.e. y fn es cero fuera de Dn , tenemos que fn+1 = fn a.e. en Dn ,
bajo un cambio de las funciones fn a.e., podemos suponer que fn = fn+1 en Dn .
Por lo anterior las funciones fn son monótonas crecientes, por lo que se puede usar
el teorema de convergencia monótona, si f = lim fn entonces
n→∞
ˆ ˆ
f dµ2 = lim fn dµ2
E n→∞ E
= lim µ1 (E ∩ Dn )
n→∞

!
[
= µ1 (Dn ∩ E)
n=1
= µ1 (E) .
La unicidad es el mismo argumento que en el caso nito. 

12.4. Teorema de descomposición de Lebesgue


En esta sección veremos una aplicación del teorema de Radon-Nicodým, pero
previo a su demostración necesitamos demostrar un lema.

Lema 304. Sea v y µ medidas tales que µ  v y v ⊥ µ, entonces µ = 0.


Demostración. Por hipótesis sabemos que existe un conjunto A tal que
c
v (A) = µ (A ) = 0
pero debido a que µv
µ (A) = v (A) = 0,
por lo que µ (X) = 0 y por tanto µ es la medida cero. 
Definición 305. Sea (X, A) un espacio medible, denimos la variación total
de una carga ϑ como ϑ+ + ϑ− , donde las medidas ϑ+ , ϑ− son las obtenidas a partir
de la descomposición de Jordan, la cual denotaremos por |ϑ|.

Es inmediato ver que si |ϑ| = 0 entonces la carga es la medida cero.

Teorema 306. (Teorema de descomposición de Lebesgue) Sean µ1 y µ2 dos


medidas σ -nitas, entonces existen dos medidas λ1 y λ2 tales que λ2  µ2 , λ1 ⊥ µ2
y µ1 = λ1 + λ2 . Las medidas λ1 , λ2 son únicas.
Demostración. Supongamos que µ2 y µ1 son nitas. Denamos v := µ1 +µ2 ,
se le deja al lector demostrar que suma de medidas σ -nitas es σ -nita. Además
µ1  v y µ2  v , usando el Teorema de Radon-Nikodým obtenemos que existen
dos funciones f, g ∈ M + (X, A) tales que
ˆ
µ1 (E) = f dv
E
12.4. TEOREMA DE DESCOMPOSICIÓN DE LEBESGUE 177

y ˆ
µ2 (E) = gdv,
E
para todo conjunto E medible.
Denamos los conjunto A := g −1 ({0}) y B := g −1 ((0, ∞)), construimos las
medidas λ1 y λ2 tales que
λ1 (E) = µ1 (E ∩ A)
y
λ2 (E) = µ1 (E ∩ B) .
Observemos primero que

λ1 (Ac ) = µ2 (∅) = 0 = µ2 (A)


por tanto λ1 ⊥ µ2 . Ahora supongamos que µ2 (E) = 0 para un conjunto E medible,
entonces ˆ
gdv = 0,
E
lo que signica que v (E ∩ B) = 0, por lo que

λ2 (E) = µ1 (E ∩ B) = 0
ya que por construcción µ1  v , con lo que obtenemos que λ2  µ2 . Es evidente
que µ1 = λ1 + λ2 , por lo que solo falta demostrar la unicidad de las medidas λ1 y
λ2 .
0 0 0 0
Supongamos que µ1 = λ1 + λ2 , λ1 ⊥ µ2 y λ2  µ2 , se sigue que
0 0
λ1 − λ1 = λ2 − λ2 ,
donde lo anterior esta bien denido por estar en el caso nito. Observemos que si
P , N := P c es a descomposición de Hanh entonces

0
 0
+  0
−
λ1 − λ1 (E) = λ1 − λ1 (E) + λ1 − λ1 (E)

 0
  0

= λ1 − λ1 (E ∩ P ) − λ1 − λ1 (E ∩ N )
0 0
= λ1 (E ∩ P ) − λ1 (E ∩ N ) + λ1 (E ∩ N ) − λ1 (E ∩ P )
0
≤ λ1 (E) + λ1 (E) ,

0 0
análogamente λ1 − λ1 (E) ≤ λ2 (E) + λ2 (E) para todo E medible, entonces si

0
µ2 (E) = 0 implica que λ2 (E) = λ2 (E) = 0 por lo que

0
λ1 − λ1 (E) = 0,


0
es decir λ1 − λ1  µ2 . Por otro existen conjuntos A y B tales que λ1 (A) = 0 =

0
c c
µ2 (A ) λ1 (B) = 0 = µ2 (B ) por lo que
y

0 0 c
λ1 − λ1 (A ∩ B) ≤ λ1 (A ∩ B) + λ1 (A ∩ B) = 0 = µ2 ((A ∩ B) )


0

0
por tanto λ1 − λ1 ⊥ µ2 , por el lema anterior tenemos que λ1 − λ1 = 0, de lo que

se sigue que
0 0
λ1 − λ1 = λ2 − λ2 = 0
con lo que terminamos el primer caso.
12.5. TEOREMA DE REPRESENTACIÓN DE RIESZ 178

El caso donde las medidas no son nitas se le deja al lector, la idea es usar la σ-
adictividad de las medidas de manera parecida al Teorema de Radon-Nicodým. 

12.5. Teorema de representación de Riesz


Ahora estudiaremos otra aplicación del teorema de Radon-Nikodým. Recorde-
mos primero algunos conseptos.
Sea (X, k_k) un espacio normado, por L (X) denotamos los operadores contin-
uos (acotados) con imagen contenida en los reales (Ver sección 3.5, 3.6) la norma
que se le da al espcio vectorial L (X) es

kLk := sup kL (x)k .


kxk≤1

Observemos que gracias a la desigualdad de Hölder y la linealidad de la integral


si1 ≤ p ≤ ∞ y q es tal que p1 + 1q = 1 (p = 1, q = ∞ y viceversa), entonces dado
(X, A, µ) un espacio medible, dos funciones f ∈ Lp (X, A, µ) , g ∈ Lq (X, A, µ)
entonces f g ∈ L (X, A, µ), por lo que podemos denir la función lineal

Gf : Lq (X, A, µ) −→ R
denida como ˆ
Gf (g) := f gdµ

es lineal (por la linealidad de la integral) y esta bien denida para toda f ∈


Lp (X, A, µ), además si kgkq ≤ 1 obtenemos que
ˆ

|Gf (g)| = f gdµ ≤ kgkq kf kp ≤ kf kp

es decir el operador lineal Gf ∈ L (Lq (X, A, µ)).


Con lo anterior podemos construir una innidad de operadores lineales, uno
puede preguntarse por la existencia de operadores que no se puedar representar
como una integral, el objetivo de esta sección sera decir que bajo algunas hipótesis
estos seran todos.

Lema 307. Sea G un operador lineal en L (Lq (X, A, µ)), entonces existe dos
operadores G , G− ∈ L (Lq (X, A, µ)) tales que
+

G = G+ − G−
y para toda función g ∈ Lq (X, A, µ) tal que g ≥ 0 entonces
G± (g) ≥ 0.
Demostración. Sea g ∈ Lq (X, A, µ) tal que g ≥ 0, entonces denimos

G+ (g) := sup {G (f ) : 0 ≤ f ≤ g, f ∈ Lq (X, A, µ)} ,


claramente G+ (g) ≥ 0 ya que por ser G lineal, G (0) = 0. Observemos que si c>0
entonces
G+ (cg) = sup {G (f ) : 0 ≤ f ≤ cg, f ∈ Lq (X, A, µ)}
= sup {G (cf ) : 0 ≤ cf ≤ g, f ∈ Lq (X, A, µ)}
= c [sup {G (f ) : 0 ≤ f ≤ g, f ∈ Lq (X, A, µ)}]
= cG+ (f ) .
12.5. TEOREMA DE REPRESENTACIÓN DE RIESZ 179

c = 0 es inmediato que G+ (cg) = cG+ (g). Sean f, g ∈ Lq (X, A, µ) tales que


Si
f, g ≥ 0, entonces si h1 , h2 ∈ Lq (X, A, µ) son tales que 0 ≤ h1 ≤ f, 0 ≤ h2 ≤ g ,
podemos tener la siguiente desigualdad

G+ (f + g) = sup {G (h) : 0 ≤ h ≤ f + g, h ∈ Lq (X, A, µ)}


≤ sup {G (h1 + h2 ) : 0 ≤ h1 ≤ f, 0 ≤ h2 ≤ g, h1 , h2 ∈ Lq (X, A, µ)}
= sup {G (h1 ) + G (h2 ) : 0 ≤ h1 ≤ f, 0 ≤ h2 ≤ g, h1 , h2 ∈ Lq (X, A, µ)}
≤ sup {G (h1 ) : 0 ≤ h1 ≤ f, h1 ∈ Lq (X, A, µ)}
+ sup {G (h1 + h2 ) : 0 ≤ h2 ≤ g, h2 ∈ Lq (X, A, µ)}
= G+ (f ) + G+ (g) .

Por otro lado, si h1 , h2 ∈ Lq (X, A, µ) son tales que 0 ≤ h1 ≤ f, 0 ≤ h2 ≤ g


+
entonces por la denición de G obtenemos

G (h1 + h2 ) = G (h1 ) + G (h2 ) ≤ G+ (f + g)

tomando el supremo concluimos que G+ (f ) + G+ (g) ≤ G+ (f + g) y por tanto


+ + +
G (f + g) = G (f ) + G (g).
q
Si la funcion g ∈ L (X, A, µ) y no es mayor o igual que cero denimos

G+ (g) = G+ g + − G+ g − ,
 

es fácil ver que por la linealidad de G+ para constantes no negativas y funciones


+
no negativas la función G denida en general es lineal. Ademas por denición si
g≥0 entonces G+ (g) ≥ 0.
Denimos

G− := G+ − G
que por ser diferencia de lineales es lineal, es claro que

G = G+ − G−

y si g≥0 entonces

G− (g) = G+ (g) − G (g)


= sup {G (f ) : 0 ≤ f ≤ g, f ∈ Lq (X, A, µ)} − G (g)
≥ G (g) − G (g)
= 0.

Solo nos falta demostrar que los operadores G+ y G− son acotados (continuos),
observemos que
+ +
G = sup G (g)
kgkq ≤1

= sup |sup {G (f ) : 0 ≤ f ≤ g, f ∈ Lq (X, A, µ)}|


kgkq ≤1

≤ kGk

ya que si 0≤f ≤g entonces kf kq ≤ kgkq ≤ 1. Por ser G− diferencia de operadores


lineales acotados, este también es acotado. 
12.5. TEOREMA DE REPRESENTACIÓN DE RIESZ 180

Teorema 308. (Teorema de representación de Riesz) Sea (X, A, µ) un espacio


σ−nito y G ∈ L L1 (X, A, µ) , entonces existe una función g ∈ L∞ (X, A, µ) tal


que
ˆ
G (f ) = f gdµ

para toda función f ∈ L1 (X, A, µ), además kGk = kgk∞ y si G (f ) ≥ 0 para toda
f ≥ 0 entonces g ≥ 0.

Demostración. Primero supondremos que µ (X) < ∞ y que G (f ) ≥ 0 para


toda f ≥ 0, denamos la medida µ0 en A tal que

µ0 (E) := G (χE )

µ0 (∅) = G (0) = 0, además como χE ≥ 0 entonces µ0 (E) = G (χE ) ≥ 0.


claramente
Tomemos En ∈ A para todo natural n tal que En ⊂ En+1 para todo n. Sea
S
A= En , claramente las funciones χEn convergen puntualmente a χA , sabemos
n∈N
que la convergencia puntual en espacios de medida nita con dominancia (χA ≥
χEn ) implica convergencia en L1 (X, A, µ), por lo que G (χEn ) −→ G (χA ) por la
continuidad del operador G, por tanto

!
[
0
µ En = µ0 (A)
n∈N
= G (χA )
= lim G (χEn )
n→∞
0
= lim µ (En ) .
n→∞

Además si An son ajenos para n ∈ {1, 2, ..., k}

 
k
!
[
µ0 An = G χ
 
k
S 
n=1 An
n=1
k
!
X
=G χAn
n=1
k
X
= G (χAn )
n=1
k
X
= µ0 (An ) .
n=1
12.5. TEOREMA DE REPRESENTACIÓN DE RIESZ 181

Por tanto µ0 es nitamente aditiva, Ahora si tomamos An ∈ A ajenos dos a dos


k
S
y denimos Ek = An usando las dos ultimas desigualdades llegamos a que
n=1
∞ ∞
! !
[ [
µ0 An = µ0 En
n=1 n=1
0
= lim µ (En )
n→∞
 
n
[
0
= lim µ  Aj 
n→∞
j=1
n
X
= lim µ0 (Aj )
n→∞
j=1

X
= µ0 (Aj ) .
j=1
0
Por lo anterior µ es una medida, además si µ (E) = 0 entonces
0
µ (E) = G (χE ) = G (0) = 0
0
por lo que µ  µ. Usando el teorema de Radon-Nikodym sabemos que existe una
función g ∈ L∞ (X, A, µ) no negativa tal que
ˆ ˆ
G (χE ) = µ0 (E) = gdµ = χE gdµ,
E
por linealidad si ψ es una función simple en L1 (X, A, µ)
ˆ
G (ψ) = ψgdµ.

Recordemos que toda función f ∈ L1 (X, A, µ) no negativa, tiene una sucesión


de funciones simples y medibles ψn que es monótona creciente y converge pun-
tualmente a f , por la continuidad de G y el teorema de convergencia monótona
concluimos que
G (f ) = lim G (ψn )
n→∞
ˆ
= lim ψn gdµ
n→∞
ˆ
= f gdµ.
Es inmediato de la última igualdad que si f cambia de signo entonces
ˆ
G (f ) = f gdµ.

Supongamos ahora que µ es σ -nita, sea Xn ⊂ Xn+1 una colección de conjuntos


medibles tales que µ (Xn ) < ∞, por el primer caso podemos encontrar funciones
gn ∈ L∞ (X, A, µ) tal que
ˆ
G (f χXn ) = f χXn gn dµ

para toda f ∈ L1 (X, A, µ) , es inmediato observar que gn (x) = gn+1 (x) para toda
x ∈ Xn (despues de cambiar las funciones gn en un conjunto de medida cero) y
12.5. TEOREMA DE REPRESENTACIÓN DE RIESZ 182

además las funciones gn son crecientes y convergen a una función g ≥ 0. Por tanto
por la continuidad de G y convergencia dominada (|f χXn gn | ≤ |f g|) obtenemos que
G (f ) = lim G (f χXn )
n→∞
ˆ
= lim f χXn gn dµ
n→∞
ˆ
= f gdµ.

Si G es arbitraria, por el Lema anterior G = G+ − G− , a cada una aplicamos


el primer caso y obtenemos que
ˆ
+
G (f ) = f g + dµ

y
ˆ

G (f ) = f g − dµ

si denimos g = g+ − g− concluimos que


ˆ
G (f ) = f gdµ.

Nos falta demostrar que kGk = kgk∞ .


Por la desigualdad de Hölder obtenemos que para toda f ∈ L1 (X, A, µ) con
kf k1 ≤ 1
ˆ

f gdµ ≤ kf k kgk ≤ kgk
1 ∞ ∞

por lo que kGk ≤ kgk∞ , ahora se n ∈ N entonces existe un conjunto medible E tal
que µ (E) > 0 y gE ≥ kgk∞ − n1 , sea µ(E)
1
χE sgn (g) ∈ L1 (X, A, µ), donde
(
1 si g (x) ≥ 0
sgng (x) =
−1 si g (x) < 0.
más aun
1

µ (E) χ E sgng = 1

1
y
ˆ   ˆ
1 1 1
χE sgng gdµ = χE |g| dµ ≥ kgk∞ −
µ (E) µ (E) n
para todo n natural, por tanto kGk = kgk∞ . 

Teorema 309. (Teorema de representación de Riesz) Sea (X, A, µ) un espa-


cio y G ∈ L LP (X, A, µ) , con 1 < p < ∞ entonces existe una función g ∈


Lq (X, A, µ) donde p1 + 1q = 1 tal que


ˆ
G (f ) = f gdµ

para toda función f ∈ Lp (X, A, µ), además kGk = kgkq y si G (f ) ≥ 0 para toda
f ≥ 0 entonces g ≥ 0.
12.5. TEOREMA DE REPRESENTACIÓN DE RIESZ 183

Demostración. El caso µ (X) < ∞ es análogo al caso nito en la demostración


anterior, por lo que de manera también análoga se demuestra el caso σ -nito, pase-
mos al caso en general.
Sea fn ∈ Lp (X, A, µ) tal que kfn kp = 1 y
 
1
G (fn ) ≥ kGk 1 − ≥ 0.
n
Observemos que ˆ
|fn | dµ < ∞
entonces los conjuntos
 
1
Xfn (m) := x ∈ X : |fn (x)| ≥
m
S
es nito y el conjunto Xfn := Xfn (m) es el conjunto donde fn no se anula y es
m∈N S
σ -nito, se deja de ejercicio al lector que X0 := Xfn es σ - nito por ser union
n∈N
numerable de conjuntos σ -nitos.
Sea A ⊂ X0c tal que µ (A) < ∞, entonces
1
kfn ± tχA kp ≤ (1 + tp (µ (A))) p
para t ≥ 0, más aun

G (fn ) ± G (tχA ) ≤ |G (fn ± tχA )|


de o que se sigue que
 
1 1
|G (tχA )| ≤ kGk kfn ± tχA kp − G (fn ) ≤ kGk (1 + tp (µ (A))) p + 1 − ,
n
despejando a t > 0 llegamos a que
 1

kGk (1 + tp (µ (A))) p + 1 − n1
|G (χA )| ≤
t
lo anterior para todo n ∈ N por lo que
 1

kGk (1 + tp (µ (A))) p
|G (χA )| ≤ .
t
Se puede mostrar que si t tiende a cero
 1

kGk (1 + tp (µ (A))) p
t
|G (χA )| = 0
tiende a cer (Por ejemplo usando la regla de L'Hospital's) por lo que
de lo que concluimos que si f X0 entonces G (f ) = 0
es una función que se anula en
(aproximando con funciones simples y usando continuidad de G) por lo que estamos
en el caso σ−nito, podemos encontrar una función g para X0 tal que se anula en
X0c y por la linealidad de G concluimos que
ˆ
G (f ) = f gdµ.

También podría gustarte