Ecografia Del Aparato Locomotor PDF
Ecografia Del Aparato Locomotor PDF
Ecografia Del Aparato Locomotor PDF
ERRNVPHGLFRVRUJ
Ecografía
del Aparato Locomotor
ERRNVPHGLFRVRUJ
La Habana, 2003
Edición: Lic. Maura Esther Díaz Antúnez
Diseño y emplane: D.I. José Manuel Oubiña González
ISBN 959-212-090-0
COLABORADORES
A D
Acetábulo: AC. Deltoides: Delt.
Acromion: Ac Derecho: Der.
Aductor menor:: Ad Mn. Desgarros: *
Aductor mayor Ad My. Diáfisis: D.
Arteria: Art Distal: dist.
Artritis reumatoidea: AR.
Astrágalo: Ast.
E
Epicóndilo: Epic.
B Epífisis: E.
Bíceps braquial: B Br. Epitróclea: Epit.
Bursa: B. Espacio articular: EA.
Bursa pretibial: BPT.
Bursa subacromial: BSA.
Bursa subdeltoidea: BSD. F
Bursa suprapatelar: BSP. Falanges: fal.
Fémur: Fem.
Fibras: Fb
C Fibrocartílago: Tc.
Calcáneo: Cal. Fosa olecraniana: FO.
Calcificación: Ca. Fractura: Fx.
Carpo: Carp.
Cartílago articular: C.
Cartílago trirradiado: Ct. G
Clavícula: Clav. Ganglios: G.
Colección: Col. Ganglión quístico: Gq.
Complejo capsuloligamentoso medial: LCM. Gemelo lateral :GL.
Cóndilo femoral lateral: CFL. Gemelo medial :GM.
Cóndilo femoral medial: CFM. Glúteo medio: Glúteo med.
Cóndilo tibial lateral: CTL. Glúteo mínimo: Glúteo min.
Cóndilo tibial medial: CTM. Grasa de Hoffa: GH.
Coracoides: Cor.
Cúbito: Cub.
Cuerno posterior menisco lateral: cpml H, I
Cuerno posterior menisco medial: cpmm Húmero: Hum.
Cuerpo del menisco lateral: cupml Infraespinoso: Ie.
Cuerpo del menisco medial: cupmm Izquierdo: Izq.
Cuerpo extraño: CE.
Cuerpo libre: Cuerp L.
L R
Labrum: Lab. Radio: R.
Ligamento colateral peroneo: LCP. Rampa condílea medial: RCM.
Ligamento coracocromial: Lig. C-A Rampa condílea lateral: RCL.
Ligamento humeral transverso: LHT. Recto anterior: RA.
Ligamento peroneoastragalino Recto interno: RI.
anterior: Lig.PAA. Redondo menor: Rm.
Ligamento transverso del carpo: LTC. Retináculo lateral: Ret Lat.
Lipoma: Lip. Retináculo medial: Ret Med.
Líquido: L.
S
M Sartorio: Sar.
Maléolo peroneo: Mal Per. Semimembranoso: SM.
Maléolo tibial: Mal. Tib. Semitendinoso: ST.
Masa: M. Sesamoideo: Sesam.
Media: med. Sinovial: S.
Menisco: Mn. Sóleo: Sol.
Metacarpiano: Metac. Sombra acústica: Sa.
Metacarpofalángica: MCF. Subescapular: SE.
Metatarsianos: metat. Supraespinoso: Se.
Miositis osificante: MO.
Músculo: Musc. T
Músculo braquial anterior: Br A. Tabique: Tab.
Músculo braquiorradialis: Br R. Tejido celular subcutáneo: TCS.
Músculo flexor cubital del carpo: Fcc. Tendón: T.
Músculo pronador redondo: Pr R. Tendón común de los epicondíleos: Ep.
Tendón común de los epitrocleares: Et.
Tendón común de los flexores plantares: FP.
N Tendón de Aquiles: TA.
Nervio ciático: NC. Tendón del cuádriceps: TC.
Nervio cubital: Nc. Tendón del tibial anterior: T Ant.
Nervio mediano: Nm. Tendón del tibial posterior: T Post.
Nódulo: N. Tendón extensor común de los dedos del pie: ECDP.
Tendón extensor propio primer dedo: EP1D.
Tendón patelar: TP.
O Tendón peroneo corto: TPC.
Oblicuo externo: OE. Tendón peroneo largo: TPL.
Oblicuo interno: OI. Tibia: Tib.
Trapecio: Trap.
Osteofitos: Ost.
Triángulo de Kager: TK.
Tríceps braquial: T Br.
Tumor: T.
P, Q
Patela: Pat.
V
Pectoral mayor: P May.
Vaina tendinosa: V.
Pectoral menor: P Mn.
Vasto intermedio: VI.
Peroné: Per.
Vasto lateral: VL.
Porción larga del bíceps. PLB.
Vasto medial: VM.
Proximal: prox.
Vellosidades sinoviales: Vs.
Quistes: Q.
Vena: V
CONTENIDO
En este capítulo solo nos vamos a referir a aquellas sas serosas: la subcoracoidea y la subescapular. Puede existir
estructuras del SOMA susceptibles de ser estudiadas con comunicación entre las 2 bolsas serosas y la cápsula articu-
la ecografía, especialmente de los planos musculoten- lar. Su función es la de facilitar la rotación interna.
dinosos. El músculo Se se extiende desde la fosa supraespinosa
hacia la extremidad posterosuperior del húmero donde ter-
mina en un poderoso tendón en la cara superior del troquiter;
HOMBRO. BRAZO su parte distal se adhiere a la cápsula. Es aductor del brazo.
El músculo Ie se origina en la fosa infraespinosa, ro-
HOMBRO dea al húmero y se inserta en el troquiter por debajo del
tendón del Se. No está adherido a la cápsula articular. Es
Planos musculotendinosos del hombro.
rotador externo y abductor del brazo.
Los músculos del hombro son potentes y aseguran una El músculo Rm se sitúa por debajo del anterior y tiene
precisión y estabilidad, muy importante en esta articula- la misma función que el Ie.
ción, que es la más móvil del organismo. Grupo muscular externo. Está constituido por un solo
Los músculos del hombro se dividen en 4 grandes grupos: músculo, el deltoides. Se origina de la clavícula, acromion
y espina del omóplato y se inserta en la parte media de la
Grupo muscular anterior. Está compuesto por 3 mús- cara externa del húmero. En su cara interna hay una bolsa
culos que son: el pectoral mayor, el pectoral menor y el muy amplia, que lo separa de la articulación y que puede
subclavio. Los 2 últimos forman el plano profundo, mien- comunicar con la cavidad articular. La principal función
tras que el pectoral mayor, que es el más superficial, se del deltoides es la abducción del brazo y en menor grado
extiende desde el tórax hasta el húmero terminando en el interviene en la anteropulsión y retropulsión.
labio anterior de la corredera bicipital. Su función es la de
ser aductor y rotador externo del brazo.
Grupo muscular interno. Está constituido por un solo BRAZO
músculo, el serrato mayor. Se sitúa por debajo de los mús-
Planos musculotendinosos
culos pectorales. Su función es mantener el omóplato fijo
al tórax. Está formado por 2 compartimientos: uno anterior y
Grupo muscular posterior. Es el que más nos intere- otro posterior.
sa. Lo componen 5 músculos, uno en la cara anterior: el
músculo subescapular (SE) y los restantes en la cara pos- Compartimiento anterior. Comprende 3 músculos:
terior: el músculo supraespinoso (Se), el infraespinoso (Ie), bíceps braquial, braquial y coracobraquial.
el redondo menor (Rm) y el redondo mayor (RM). Este El bíceps es el más superficial y se extiende desde el
último no será objeto de estudio porque no forma parte del omóplato hasta la extremidad superior del radio. Tiene una
manguito rotador del hombro (MR). porción corta que se inserta por arriba en la apófisis
El músculo SE se extiende desde la escápula y a través coracoides y una porción larga que lo hace en el rodete
de la cara anterior de la cápsula humeral,y termina por un glenoideo. Esta última, después de salir de la articulación,
tendón en la porción superointerna del troquín. Tiene 2 bol- desciende en un canal óseo, la corredera bicipital; luego
Existe un conducto osteofibromuscular en la región La celda profunda contiene a los metatarsianos y los
retromaleolar interna de la garganta del pie y en la región músculos interóseos que ocupan los espacios
plantar que contiene a los tendones del tibial posterior, del intermetatarsianos.
flexor común, del flexor largo del dedo grueso, los vasos y
nervios tibiales posteriores y las arterias y nervios plantares.
En realidad es un canal óseo transformado en un conducto Paquete vasculonervioso del pie
por la hoja profunda del ligamento anular interno por arri-
ba, y por el músculo y aponeurosis del músculo El paquete vasculonervioso profundo de la región dor-
aproximador del dedo grueso. sal del pie, está constituido por la arteria pedia (continua-
En la celda plantar media se pueden diferenciar, de la ción de la arteria tibial anterior), dispuesta en línea recta
superficie a la profundidad, 4 planos: desde la región intermaleolar hasta la extremidad poste-
. Primer plano. Está ocupado por el flexor corto de los rior del 1er. espacio interóseo, situada primero por fuera
dedos que va desde la tuberosidad interna del calcá- del tendón extensor propio y por dentro del músculo pedio.
neo y de la aponeurosis plantar a los 4 últimos dedos, Aparece acompañada de sus 2 venas satélites y de la rama
donde termina en sus tendones que se alojan en los interna del nervio tibial anterior.
canales sinoviales junto con los tendones de los mús-
culos flexores largo de los dedos. En la región de las BIBLIOGRAFÍA
falanges proximales de los II – V dedos, el tendón del
1. ANDERSON, J.E.: Grant’s Atlas of Anatomy, Williams & Wilkins
músculo flexor corto se divide en 2 partes, insertán- Co, Baltimore, 1983.
dose en la base de las falanges medias de los dedos 2. CLEMENTE, C.D.: Gray’s Anatomy, Lea Febiger, Philadelphia,
indicados. Acción: flexiona la 2da falange de los 4 úl- 1985.
timos dedos sobre la 1ra. falange y éstas sobre el 3. LANDSMEER, J.: Atlas of anatomy of the hand, Churchill
metatarsiano correspondiente. Livingstone, New York, 1976.
4. MOORE, K.: Clinically Oriented Anatomy, Williams Wilkins Co,
. Segundo plano. En este plano, y por encima del flexor Baltimore, 1980.
corto plantar, cursa el paquete vasculonervioso: arte- 5. PRIVES. y otros: Anatomía Humana, 4ta. ed., Ed. Mir, Moscú,
ria y nervio plantar externo. 1978.
. Tercer plano. Contiene al tendón del flexor largo de 6. ROUVIERES, H.: Anatomía Humana Descriptiva Topográfica,
t.3, Ed. Mir, Moscú,1961.
los dedos, su accesorio, los músculos lumbricales y el
7. SINELNIKOV, R.D.: Atlas de Anatomía Humana, Ed. Mir, Mos-
tendón del flexor largo propio del dedo grueso. El ten- cú, 1984.
dón del flexor largo está unido en su trayecto con el 8. TESTUT, L. : Traite d’anatomie humaine, Gaston Doin &
flexor largo del dedo grueso y se divide en 4 tendones Company, Paris, 1928.
terminales. El tendón accesorio del flexor largo o mús- 9. WILLIAMS,P.L.et.al.: Gray’sanatomy, 37 thed. Churchill
Livingstone, Edinburgh,1989.
culo cuadrado plantar va desde la cara inferior del
calcáneo al tendón del flexor corto de los dedos.
El sonido se refleja en las interfases entre estructuras fibrosos normales, calcificaciones o superficies óseas.
con diferente impedancia acústica (Partes blandas-hueso). . Ausencia del artefacto de sombra. Esto es debido
El ángulo de incidencia del haz de US debe ser de 90 gra- al empleo de un transductor de baja resolución, que
dos con respecto a las estructuras que se evalúan, para motiva, que cuando las calcificaciones son muy pe-
mantener la refracción al mínimo y lograr una reflexión queñas con relación al ancho del haz de US, no se
máxima, especialmente en el estudio de las partes blandas producen las sombras por detrás de las mismas.
(PB). El grado de absorción del haz de sonido es directa- . Artefacto de realce por aumento de la transmisión.
mente proporcional a su frecuencia. La ecogenicidad aumentada de los tejidos localizados
En los últimos años se han introducidos grandes avan- por detrás de estructuras que tienen una baja atenua-
ces técnicos con el fin de reducir los artefactos y obtener ción del sonido, provoca un realce de las mismas. Esto
una mayor información, con el objetivo de garantizar una ocurre en estructuras normales como los vasos o en
alta resolución de contraste (capacidad de diferenciar dos procesos patológicos como los quistes y las inserciones
estructuras hísticas de densidad casi similares), y una alta tendinosas inflamadas.
resolución espacial (capacidad de diferenciar entre es- . Artefacto por anisotropía. Es el artefacto en la
tructuras tisulares vecinas). Esto se conoce genéricamente ecogenicidad normal de estructuras como los tendo-
como Ecografía de alta resolución (USAR) y se obtiene nes y músculos, y se producen cuando se examinan
con ángulos que no son perpendiculares a los mismos.
con transductores entre 7.5 y 14 MHz, y que para el estu-
. Artefacto de sombra retroactiva. Se conoce también
dio de las partes blandas se prefieren los transductores
como sombra de ángulo crítico. Es la ausencia de ecos
lineales.
de retorno en las márgenes laterales de una superficie
La exploración ecográfica de los tejidos blandos per-
muy curva, como sucede en los bordes de un quiste o
mite la realización de los diferentes tipos de cortes incluso de un tendón.
con dirección oblicua o curva. De forma rutinaria se utili- . Artefacto de reverberancia. Se conoce también como
za la contracción o relajación de las estructuras músculo- artefacto en cola de cometa y es producido durante el
tendinosas y de los ligamentos, así como las maniobras de estudio Ecográfico de objetos metálicos o de cristal.
estrés. La compresión de los tejidos por el transductor nos Se ven bandas ecogénicas repetitivas que aparecen a
ofrece una información valiosa sobre la permeabilidad de intervalos iguales al grosor del objeto y que disminu-
las venas, grosor de la sinovial y la exploración de zonas yen por la distancia del mismo. De modo característi-
con aumento de la sensibilidad. co este artefacto cruza los límites tisulares. El aire
Se han descrito una serie de artefactos en la técnica también produce artefactos de reverberancia y provo-
Ecográfica, algunos de ellos (artefactos buenos) de gran ca una sombra posterior de ecos difusos.
utilidad en el estudio de las PB. Entre ellos tenemos:
NOTA. A continuación y comprendiendo los capítulos desde
. Artefacto de sombra. Se corresponde con una ausen- el 3 hasta el 8, se realizará un estudio con la ecografía, del aspecto
normal y las principales enfermedades de los músculos, ligamentos,
cia de señales por detrás de la lesión que se examina.
tendones, nervios periféricos, lesiones articulares, del periostio y de la
Puede ser producido por tejido cicatricial, septum cortical, aunque volveremos a insistir en sus aspectos principales en
los capítulos dedicados al estudio de las grandes articulaciones.
Tabla 2
US DMP MI
Tabla 3
US MIOPATÍA NEUROPATÍA
BIBLIOGRAFÍA
1. ABIRI, M.M. et. al.: “Osteomyelitis: Detection with ultrasound”. 13. ________.: “High-frequency ultrasound examination of the wrist
Radiology 169:795-797, 1988. and hand”. Skeletal Radiol 28:121-129, 1999.
2. AKMAN, I. et. al.: “Pyomyositis: Report of three patients and 14. BIRKBECK, D. and J.T. WATSON: “Obturator internus
review of the literature”. Clin Pediatr 35:397, 1996. pyomyositis”. Clin Orthop 316:221, 1995.
3. ARES, J. et. al.: Valor de la ecografía en las complicaciones 15. BODNER, G. et. al: Color doppler sonografía en los tumores de
musculares. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de partes blandas: criterios de malignidad. IV Congreso de la So-
Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre 21-24, 1998. ciedad lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor.
4. ARES, P. J. et. al.: Estudio ecográfico de las lesiones del múscu- Madrid, Octubre, 21-24, 1998.
lo rectus femoris en deportistas. IV Congreso de la Sociedad 16. _________.: Rupture of the medial gastrocnemius muscle: Diag-
lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Oc- nosis with ultrasound. IV Congreso de la Sociedad lnternacional
tubre 21-24, 1998. de Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre, 21-24.
5. ASPERIO, R. et. al.: Delayed muscle injuries in arterial 1998.
insufficiency: contrast-enhanced mr imaging 31P spectroscopy 17. BOHNDORF, K. et. al.: Musculoskeletal imaging : a concise
in rats. Radiology 220: 413-419, 2001. multimodality aproach, Thieme, New York, 2001.
6. AUERBACH, D.N. and A. BOWEN III: “Sonography of the leg 18. BRAHIM, F.and W. ZACCARDELLI.: “Ultrasound measurement
in posterior compartment syndrome”. AJR 136:407-408, 1981. of the anterior leg compartment”. Am J Sports Med 14:300- 302,
7. BARBER, B.A. et. al.: “Cryptococcus neoformans myositis in a 1986.
patient with AIDS: A case report”. Clin Infect Dis 21:1510, 1995. 19. BREIDAHL, W.H. et. al.: “Power Doppler Sonography in the
8. BARD, R.: The blizzard sign of intramuscular healing hemato- assessment of musculoskeletal fluid colections”. AJR 166:1443-
ma. Presented at 6th Annual Conference of Musculoskeletal 1446, 1996.
Ultrasound. Montreal, 1996. 20. BULLOUGH, P.G. and V.J. VIGORITA: Atlas of Orthopedic
9. BELLI L, et. al.: Ultrasound in tropical pyomyositis. Skeletal Pathology. Gower Medical Publishing, New York, 1984.
Radiol 21:107, 1992. 21. BUSCH C.H. et. al.: Imaging of atypical lipomas of the
10. BIANCHI, S. et. al.: “Diagnosis of tears of the cuadríceps tendon extremities: report of three cases. Skeletal Radiol 17:472. l988.
of the knee: value of sonography”. AJR 162:1137-1140, 1994 22. CAMPANI, R.: Sonografía doppler potenciada en el sistema
11. ________.: “Sonographic evaluation of intramuscular ganglia”. musculoesquelético. IV Congreso de la Sociedad lnternacional
Clin Radiol 50: 235-236, 1995. de Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre, 21-24,
12. ________.: “Sonographic evaluation of lipohemarthrosis: Clinical 1998.
and in vitro study” J Ultrasound Med 14:279-282, 1995. 23. CARDINAL, E. et. al.: “US of the snapping iliopsoas tendon”.
Radiology, 521,1998
En los tendones sin vaina sinovial, la tendinitis apare- Algunos trastornos metabólicos y sistémicos pueden
ce como un engrosamiento del tendón con hipoecogenicidad inducir diferentes tipos de tendinitis, como ocurre en el
focal o difusa. En la forma focal se puede ver aumento del hombro y la muñeca por depósito de hidroxiapatita. Tam-
sonido por detrás del tendón inflamado, así como forma- bién pueden ocurrir trastornos por depósito anómalo de
ción de sombras laterales debido al fenómeno de refrac- amiloide en los pacientes en hemodiálisis prolongada, que
ción, con un aspecto similar a una ruptura parcial. El DC producen tendones engrosados y heterogéneos.
1. AHOVUO, J. et al. “The diagnostic value of arthrography in 26. CRASS, JR, et al. “Ultrasonography of the rotator cuff: Surgical
rotator cuff tears”. Acta Orthop Scand, 55 220-223, 1984 correlation”. J Clin Ultrasound,12:487-491, 1984
2. AISEN, AM. et al. “Sonographic evaluation of the cartilage of 27. CRAVES, S. “Iliotibial tract friction syndrome in athetes”. Br J
the knee”. Radiology, 153:781, 1984 Sports Med, 12:69, 1978.
3. ANGERMANN, P. and D HOVAGAARD. “Chronic Achilles 28. DAS De S and P BALASUBRAMANIAM. A repair operation
tendinopathy in athletic individuals: results of nonsurgical for recurrent dislocation of peroneal tendons. J Bone Joint Surg
treatment”. Foot Ankle Int 20 304 – 306, 1999. (Br), 67:585-587, 1985
4. APRIN, H and N BROUKHIM. “Early diagnosis of acute rupture 29. DILLEHAY, GL. et al. “The ultrasonographic characterization
of the quadriceps tendon by arthrography”. Clin Orthop, 195:185- of tendons”. Invest Radiol, 19:338- 341, 1984
190, 1985 30. EICHELBERGER,RP. et al. “Peroneal tenography”. JAMA,
5. ASTROM, M. et al. “Imaging in chronic Achilles tendinopathy: 247:2587-2591, 1982.
A comparison of ultrasonography, magnetic resonance imaging 31. FERETTI, A. et al. “The natural history of jumper’s knee. Patellar
and surgical findings in 27 histologically verified cases”. Skeletal or quadriceps tendonitis”. Int. Orthop, 8:239-242, 1985.
Radiol 25:615, 1996. 32. FIAMENGO, SA. et al. “Posterior heel pain associated with a
6. BELTRAN, J. et al. “Rotator cuff lesions of the shoulder: calcaneal step and Achilles tendon calcification”. Clin Orthop,
Evaluation by direct sagittal CT arthrography”. Radiology, 167:203-211, 1982.
160:161-165, 1986 33. FORNAGE, B. et al. “Sonography of the patellar tendon:
7. BIANCHI, S. et al. “Diagnosis of tears of the quadriceps tendon Preliminary observations”. AJR 43:179- 182, 1984.
of the knee: Value of sonography”. AJR Am J Roentgenol 34. FORNAGE, B. “Achilles tendon: US examination”. Radiology
162:1137, 1994. 159:759-764, 1986.
8. BIANCHI, S. et al. “Evaluation of tibialis anterior tendon rupture 35. FORNAGE, BD. “The hypoechoic normal tendon: a pitfall”. J
by ultrasonography”. J Clin Ultrasound 22:564, 1994. Ultrasound Med, 6:19-22, 1987
9. BLEI, CL. et al. “Achilles tendon: Ultrasound diagnosis of 36. FORNAGE, BD and MD RIFKIN. “Ultrasound examination of
pathologic conditions”. Radiology, 159:765 –767, 1986. tendons”. Radiol Clin North Am, 26;87-107, 1988.
10. BOCK, E. et al. “Xeroradiography of tenomuscular traumatic 37. FREDDIE, H Fu. et al: Sports Injuries. Williams & Wilkins,
pathologic conditions of the limbs”. Diagn Imag Clin Med, Baltimore,1994.
50:235-248, 1981. 38. FULLERTON, GD. et al. “Orientation of tendons in the magnetic
11. BOUFFARD, JA. et al. “Sonography of tendons”. Ultrasound field and its effect on T2 relaxation times”. Radiology 155:433, 1985.
Quaterley, 1993. 39. GALLARDO, A. et al: El doppler energía. Un método útil en el
12. BOULEVARD, JA: Ecografía del tobillo. IV Congreso de la diagnóstico y control evolutivo de la tendinitis. IV Congreso de
Sociedad Internacional de Ecografía del Aparato Locomotor.
la Sociedad lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor.
Madrid, Octubre, 21-24, 1998.
Madrid, Octubre, 21-24, 1998.
13. BREIDAHL, WH. et al. “Power Doppler sonography in
tenosynovitis: Significance of the peritendineous hypoechoic 40. GÓMEZ, RP: Análisis ultrasonográfíco de la rotura y reparación
rim”. J Ultrasound Med 17:103, 1998. de los tendones. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de
14. BRETZKE, LA. et al. “Ultrasonography of the rotator cuff: nor- Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre, 21-24, 1998.
mal and pathologic anatomy”. Invest Radiol, 20:311-315, 1985 41. GUCH, A. et al: Vascularización de los miembros inferiores del
15. BRUCE, RK. et al. “Ultrasonographic evaluation for ruptured niño y la articulación de la cadera en los trastornos locales o
Achilles tendon”. J Am Pediatr Med Assoc., 72:15-17, 1982 sistémicos. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de
16. BUDE, RO. et al. “Heterozygous familial hypercholesterolemia: Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre, 21-24, 1998.
Detection of xanthomas in the Achilles tendon with US”. 42. HARDAKER, WT Jr. et al. Foot and ankle injuries in theatrical
Radiology 188:567, 1993. dancers. Foot Ankle, 6:59-69, 1985
17. BUDE, RO. et al. “Sonographic detection of xanthomas in nor- 43. HASSEKMANN, J et al. “A threshold and continuum of injury
mal-sized Achilles’ tendons of individuals with heterozygous during active stretch of rabbit skeletal muscle”. Am J Sports
familial hypercholesterolemia”. AJR Am J Roentgenol 170:621, Med, 23:65-73, 1995.
1998. 44. JOBE, FW and CM JOBE. “Painful athletic injuries of the
18. BYWATERS, EGL. “Lesions of the bursae, tendons and tendon shoulder”. Clin Orthop 173:117-124, 1983.
sheaths”. Clin Rheum Dis, 5:885, 1979. 45. KAINBERGER, FM. et al. “Injury of the Achilles tendon; diag-
19. CANOSO, JJ. “Aspiration of the retrocalcaneal bursa”. Ann nosis with sonography”. AJR, 155: 1031-1036, 1990.
Rheum Dis, 43:308-312,1979 46. KAINBERGER, FM. et al. “Ultrasound morphology of the
20. CEREZO, J. et al: Exploración ecográfica del tobillo y del pie. Achilles tendon and differential diagnosis”. Ultrasch Der Med ,
IV Congreso de la Sociedad lnternacional de Ecografía del Apa-
17:212-217, 1996.
rato Locomotor. Madrid, Octubre, 21-24, 1998.
47. KALEBO, P. et al. “Diagnostic value of ultrasonography in partial
21. CHUI, MT. “Shoulder ultrasound finds more than just cuff tears”.
Radiol Today, 5:20, 1988. ruptures of the Achilles tendon”. Am J Sports Med, 20:378 –
22. CHURCH, CC. “Radiographic diagnosis of acute peroneal tendon 381, 1992.
dislocation”. AJR, 129:1065-1068, 1977 48. KHAN, KM. et al. “Histopathology of common tendinopathies:
23. CLEMENT, DB.et al. “Achilles tendonitis and peritendonitis: update and implications for clinical management”. Sports Med,
Etiology and treatment”. Am J Sports Med, 12:179-187, 1984. 27:393-408, 1999.
24. COOPER, RR and S MISOL. “Tendon and ligament insertion. 49. KVIST, et al. “Vascular density at the myotendinous junction of
A light and electron microscopic study”. J Bone Joint Surg (Am), the rat gastrocnemius muscle after immobilization and
52:1-20, 1970. remobilization”. Am J Sports Med , 23:359-364, 1995
25. CRASS, JR. et al. “Sonography of the postoperative rotator 50. LAURAC, J. y otros : Echographie en pathologie musculaire et
cuff”. AJR, 146:561-564, 1986. tendineuse. Vigot, París, 1994.
Esta fase, que se produce a las 6 semanas siguientes ASPECTO PARTICULAR DE LAS LESIONES
a la lesión, está asociada a la organización del coágulo LIGAMENTARIAS
de fibrina y se caracteriza por la proliferación matricial
y celular. El espacio que existe entre los extremos del Veamos a continuación el aspecto particular de las le-
desgarro ligamentoso se llena de tejido friable de granu- siones de algunos ligamentos.
lación vascularizado, en el que predominan los - En las lesiones del ligamento humeral transverso
fibroblastos. el diagnóstico se basa en la no identificación del
tendón de la porción larga del bíceps dentro de la
corredera bicipital y su desplazamiento hacia la
FASE III (DE REMODELACIÓN) línea media por luxación del mismo.
- En las lesiones del ligamento coracoacromial del
Existe una disminución relativa de la celularidad
hombro el criterio ecográfico más frecuente es un
(fibroblastos y macrófagos) y de la vascularización de
BIBLIOGRAFÍA
1. ANDERSON, J.E.:Grant´sAtlas of Anatomy. Williams&Wilkins 14. HASTINGS, DE: The non-operative management of collateral
Co, Baltimore, 1983. ligament injuries of the knee joint. Clin Orthop 1980; 147:22- 28.
2. BELTRAN, J and AM MUNCHOW. “Ligaments of the lateral 15. HASTINGS, DE: Knee ligament instability—a rational
aspect of the ankle and sinus tarsi: an MR imaging study”. anatomical classification. Clin Orthop 1986; 208:104-107.
Radiology, (177); 453-58, 1990. 16. HENTZ, VR, et al.: Imaging studies of the cadaver hand using
3. BLOOM, W and DW FAWCETT: A Textbook of Histology, WB transmission ultrasound. Skeletal Radiol 1987; 16.474-480.
Saunders Co, Philadelphia,1980. 17. JACKSON, RW, and DJ DANDY: Arthroscopy of the Knee. New
4. BROWN, RR. et al. “Extrinsic and intrinsic ligaments of the York, Grune & Stratton, 1976.
wrist: normal and pathologic anatomy at MR arthrography with 18. KALEBO, P, et al.: Ultrasonography in the detection of partial
three-compartment enhancement”. Radio Graphics 18:667-674, patelar ligament rupture. Skeletal Radiol 1991;20:285-289.
1998. 19. LAINE, H, et al.: Real time sonography to diagnose soft-tissue
5. CAMPBELL: Cirugía Ortopédica (8.a ed.). t. 3. Ed. Panameri- sports injuries. Lancet 1984; 7: 55.
cana, Buenos Aires, 1995. 20. LAINE, HR, et al.: Ultrasound in the evaluation of the knee and
6. CASSCELLS, SW: Arthroscopy: Diagnostic and Surgical patellar regions. J Ultrasound 1987; 6:33-36.
Practice. Lea & Febiger, Philadelphia,1984. 21. LAWS, G and M WALTON: Fibroblastic healing of grade II
7. CLEMENTE, CD: Gray’s Anatomy. Lea & Febiger, Philadelphia, ligament injuries. Histological and mechanical studies in sheep.
1985. J Bone Joint Surg (Br) 1988; 70: 390-396.
8. DUBS-KUNZ, B: Sonographische Diagnostik van 22. LEE, JI, et al.: Medial collateral ligament injuries of the knee:
Rippenfrakturen. In: Ultraschalldiagnostik 1991. Springer, Ultrasonographic findings. J Ultrasound Med 15:621-625, 1996.
Berlin. Heidelberg, New York,1992. 23. LEFEVRE, E and L POURCELOT: Ecografía musculotendinosa.
9. FRANK, C et al. “Healing of the medial collateral ligament of Madrid. Ed. Masson SA, 1991:73-74.
the knee”. Acta Orthop Scand, 54:917-923, 1983. 24. MARCELIS, S, et al.: Peripheral Musculoskeletal Ultrasound At-
10. FRANKE, F. “Capsulo-ligament lesions of the knee joint. Early las. In Dondelinger RF (ed.): Stuttgart, Georg Thieme Verlag, 1996.
diagnosis. Primary therapy”. Zentralb-Chir, 114 (23); 1511-20. 25. MATHIS, G: Thoraxsonographie: Moglichkeiten und Grenzen.
1989. In: Ultraschalldiagnostik 1991. Springer. Berlin, Heidelberg,
11. GOLLEHON, DL. et al. “The role of the posterolateral and New York, 1992: 69-71.
cruciate ligament in stability of the human knee”. J Bone Joint 26. MONETTI, G: Ecografia musculo-tendinea e osteo-articolare.
Surg Am 69 733 – 742, 1989. Gnocchi Ed, 1994.
12. GUTIERREZ, F.O. y LL GONZÁLEZ. Ecografía en las lesio- 27. NICHOLAS, JA, and EB HERSHMAN: The Lower Extremity
nes deportivas. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de and spine in Sports Medicine. St Louis, CV Mosby Co, 1986.
Ecografía del Aparato Locomotor. 21-24 1998. 28. NOSZIAN, IM, and LM DINKHAUSER: Ulnar collateral
13. HASHIMOTO, B E et al.: Aplications of musculoskeletal ligament: diferentiation of displaced and nondisplaced tears with
sonography. J. Clin Ultrasound. 1999 jul-aug;27(6):293-318. US. Radiology 1995, 194; 61-63.
INTRODUCCIÓN TÉCNICA
En la mayoría de los pacientes con lesiones de los ner- Se prefieren los transductores lineales entre 3,5 y 14,0
vios, su evaluación se hace con la HC, el examen MHz. para el estudio de los nervios y deben examinarse a
neurológico y los estudios electrofisiológicos, los que, por lo largo de su curso anatómico con cortes longitudinales y
otra parte, tienen poca especificidad. Los métodos transversales. Los cortes transversales permiten diferen-
imagenológicos, sobretodo la TAC y la IRM, permiten ciarlo de los séptum fibrosos intramusculares que apare-
demostrar los tumores de origen nervioso, pero solo a ni- cen como ecos lineales. Las técnicas dinámicas con movi-
vel de los nervios de grueso calibre. En años recientes la mientos de flexión y extensión permiten distinguir las es-
ecografía se ha utilizado para el estudio de los nervios tructuras musculotendinosas movibles, de un nervio, que
periféricos. no se moviliza.
La ecografía con transductores entre 5 y 15 MHz. per-
mite visualizar, con alta precisión, la mayoría de los ner- ANATOMÍA ECOGRÁFICA NORMAL
vios, demostrando su estructura fascicular, es capaz de
reconocer alteraciones específicas, diferenciar entre tumo- Los nervios son cordones redondeados o aplanados con
res intraneurales y extraneurales y evaluar la extensión de una estructura interna compleja que recuerdan a un cable
eléctrico. Están compuestos por fibras nerviosas (axones,
la lesión y el seguimiento evolutivo del nervio interesado.
vainas de mielina y células de Schwann) agrupadas en fas-
Si bien los síndromes de compresión nerviosa se ba-
cículos. El tamaño y número de los fascículos de un ner-
san en un diagnóstico apoyado con la clínica y la
vio depende del nervio que se trate, de la distancia a partir
electromiografía, ellos no proporcionan una información
de su origen y de la presión a que está sujeto.
espacial del nervio ni de las estructuras que lo rodean, que Los fascículos están protegidos y fijados por una serie
suele ser la causa de estos síndromes. Además la Ecografía de cubiertas concéntricas y finas de tejido conectivo. Las
permite estudiar largos segmentos de los troncos nervio- fibras individuales están cubiertas por el endoneuro, cada
sos, así como realizar estudios estáticos y dinámicos. fascículo por el perineuro y el tronco nervioso por el
Una aplicación importante de la ecografía lo constitu- epineuro, que tiene una capa superficial y otra que se ex-
ye la evaluación de los síndromes de atrapamiento nervio- tiende hacia dentro. El epineuro es grueso y contiene teji-
so en determinadas regiones anatómicas. do colágeno laxo, fibras elásticas y vasos.
Los túneles osteofibrosos incluyen en el miembro su- En la ecografía un nervio normal aparece compuesto
perior al túnel del carpo para el nervio mediano (1/3 infe- de áreas lineales múltiples y paralelas (hipoecoicas),
rior) y cubital (1/3 superior), y al túnel de Guyón para el discontinuas, separadas por bandas hiperecoicas. En un
nervio cubital (1/3 inferior); mientras que en los miem- CT las líneas paralelas, hipoecoicas, se hacen redondea-
bros inferiores se incluyen el túnel del cuello peroneo para das con un fondo hiperecoico. Las estructuras hipoecoicas
el nervio peroneo común, el del túnel tarsiano para el ner- se corresponden a los fascículos longitudinales del nervio
vio tibial posterior y el de los espacios intermetatarsianos y las estructuras hiperecoicas al epineuro profundo. La
para los nervios interdigitales. membrana de Schwann es más ecogénica.
BIBLIOGRAFÍA
1. AWERBUCH, MS, et al.: Morton’s metatarsalgia due to 22. LEIJTEN, FSS, et al.: Ultrasound diagnosis of an intraneural
intermetatarso-phalangeal bursitis as an early manifestation of ganglion cyst of the peroneal nerve: Case report. J Neurosurg
rheumatoid arthritis. Clin Orthop 1982; 167: 214 – 221. 76:538, 1992.
2. BERTOLOTTO, M, et al.: Case report: Fibroma of tendon sheath 23. LEVINE, E, et al.: Malignant nerve-sheath neoplasms in
in the distal forearm with associated median nerve neuropathy: neurofibromatosis: distinction from benign tumors by using
US, CT and MR appearance. Clin Radiol 51:370, 1996. imaging techniques. AJR 1987;149:1059.
3. BUCHBERGER,W, et al.: High-resolution ultrasonography of the 24. MARCELIS, S, et al.: Peripheral Musculoskeletal Ultrasound At-
carpal tunnel J. Ultrasound Med.1991; 10: 531-537. las: In Dondelinger RF (ed.): Stuttgart, Georg Thieme Verlag, 1996.
4. BUCHBERGER, W, et al.: Carpal tunnel syndrome: diagnosis 25. MARTINOLI, C, et al.: Tendon and nerve sonography. Radiol
with high resolution sonography. AJR Am J Roentgenol 1992; Clin North Am 1999; 37:691 – 711.
159:793 – 798. 26. NAGAOKA, M and K SATOU: Tarsal tunnel syndrome caused
5. BUCHBERGER, W: Radiologic imaging of the carpal tunnel Eur by ganglia. J Bone Joint Surg Br 1999; 81:607-610.
J Radiol 1997; 25: 112-117. 27. NAKAMICHI, K and S TACHIBANA: Ultrasonographically
6. BUCHBERGER, W :Pre- and post-operative ultrasound evaluation assisted carpal tunnel release. J Hand Surg [Am] 1997; 22:853 – 862.
of the carpal tunnel. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de 28. NAKAMICHI, K and S TACHIBANA: Distance between the
Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998. median nerve and ulnar neurovascular bundle: clinical
7. CHEN, P, et al.: Nerve territory-oriented macrodactyly: Unusual significance with ultrasonographically assisted carpal tunnel
cause of carpal tunnel syndrome. J Ultrasound Med 15:661; 1996. release. J Hand Surg [Am] 1998; 23:870 – 874.
8. CHEN, P, et al.: Dynamic high-resolution sonography of the carpal 29. OLIVER, TB and I BEGGS. Ultrasound in the assessment of
tunnel AJR Am J Roentgenol 1997; 168:533 – 537.
metatarsalgia: a surgical and histologic correlation. Clin Radiol
9. CHINN, DH: Unusual ultrasonographic appearance of a solid
1998; 53:287 – 289.
schwannoma. J Clin Ultrasound 1982; 10: 243-245.
30. PHALEN, G S: The carpal tunnel syndrome: 17 years experience
10. CHIOU, HJ, et al.: Cubital tunnel syndrome: diagnosis by high-
in diagnosis and treatment of 654 hands. J. Bone Joint Surg.
resolution ultrasonography. J Ultrasound Med 1998; 17: 643 – 648.
(Am.) 1966; 48A: 211-228.
11. DUBUISSON, AS and A STEVENAERT: Recurrent ganglion
31. PUIG, S, et al.: Sonographic diagnosis of recurrent ulnar nerve
cyst of the peroneal nerve: Radiological and operative
compression by ganglion cyst. J Ultrasound Med 1999; 18: 433 – 436.
observations. Case report. J Neurosurg 84:280-283, 1996.
32. READ, JW: The basics of musculoskeletal ultrasound. Australas
12. DUNCAN,I, et al.: Sonography in the diagnosis of carpal tunnel
Soc. Ultrasound Med Bull 1:5-13, 1998.
syndrome. AJR Am J Roentgenol 1999; 173:681 – 683.
13. FESSELL, DP and MT VAN HOLSBEECK: Foot and ankle 33. REUTER, KL, et al.: Ultrasonography of a plexiform
sonography. Radiol Clin North Am 1999; 37: 831 – 858. neurofibroma of the popliteal fossa. J Ultrasound Med 1982;
14. FORNAGE, BD: Peripheral nerves of the extremities: imaging 1:209-211.
with US. Radiology 1988; 167: 179 – 182. 34. SHAPIRO, PP and SL SHAPIRO: Sonographic evaluation of
15. GLASER, E, et al.: Ultrasound imaging for carpal tunnel interdigital neuromas. Foot Ankle Int. 1995; 16:604-606.
syndrome. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de Ecografía 35. SHON, LC: Nerve entrapment, neuropathy, and nerve dysfunction
del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998. in athletes. Orthop Clin North Am 1994; .25:47 – 59.
16. GRAIF, M, et al.: Sciatic nerve: sonographic evaluation and 36. SILVESTRI, E, et al.: Echotexture of peripheral nerves:
anatomopathologic considerations. Radiology 1991; 181:405 – 408. Correlation between US and histologic findings and criteria to
17. HASHIMOTO, BE, et al.: Sonographic diagnosis and treatment differentiate tendons. Radiology 197:291, 1995.
of ganglion cysts causing suprascapular nerve entrapment. J 37. SOBIESK, GA, et al.: Sonographic evaluation of interdigital
Ultrasound Med 13:671, 1994. neuromas. J Foot Ankle Surg 1997; 36:364-366.
18. HRAZDIRA, P, et al.: Tumores del aparato locomotor. Explora- 38. SPINNER, RJ and RD GOLDNER: Snapping of the medial head
ción ecográfica. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de of the triceps and recurrent dislocation of the ulnar nerve: Anatomical
Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998. and dynamic factors. J Bone Joint Surg Am 80:239, 1998.
19. HUGHES, DG, et al.: Ultrasound appearances of peripheral nerve 39. SUGIMOTO, H, et al.: Carpal tunnel syndrome: evaluation of
tumors. Br J Radiol 59:1041, 1986. median nerve circulation with dynamic contrast - enhanced MR
20. JACOBSON, JA and MT vAN HOLSBEEKCK: Musculoskeletal imaging. Radiology 1994; 190:459 – 466.
ultrasonography. Orthop Clin North Am 29:135, 1998 . 40. VAN VUGT, RM, et al.: The current role of high-resolution
21. KING, AD, et al.: Sonography of peripheral nerve tumors of the ultrasonography of the hand and wrist in rheumatic diseases.
neck. AJR Am Roentgenol 169:1695, 1997. Clin Exp. Rheumatol 1998; 16:45 58.
BIBLIOGRAFÍA
1. ACEBES, J C, et al.: Utilidad de la ecografía en el control tera- 7. ANDONOPOULOS, AP, et al.: Baker’s cyst in rheumatoid
péutico evolutivo de los quistes de Baker. IV Congreso de la arthritis: An ultrasonographic study with a high resolution
Sociedad lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor. technique. Clin Exp Rheumatol 13:633-636, 1995.
Madrid, Octubre. 21-24, 1998. 8. BAR-ON, E, et al.: The use of ultrasound in the diagnosis of
2. ADAM, R, et al.: Arthrosonography of the irritable hip in atypical pathology in the unossified skeleton. J Pediatr Orthop
childhood. A review of 1 year’s experience. Br J Radiol 1986; 15:817-820, 1995.
59: 205-208. 9. BATTLE, E G, et al.: Reumatismos de partes blandas del miem-
3. AISEN AM, et al.: Sonographic evaluation of the cartilage of the bro inferior. Diagnóstico e Imagen en Reumatología. Hospital
knee. Radiology 1984; 153:781 - 784. General Universitario de Alicante. Alicante.1995.
4. ALASAARELA, EM and EL ALASAARELA: Ultrasound 10. BAUDRILLAERD, JC, et al: Synovial cysts of unusual location. Two
evaluation of painful rheumatoid shoulders. J Rheumatol cases and review of the literature. J Radiol 1986; 67-201 - 207.
21:1642-1648, 1994. 11. BEECKER, HK: Measurement of Subjective Responses. New
5. ALIBADI, P et al.: Hip arthrography, aspiration, block and York, Oxford University Press, 1959.
bursography, Radiologic Clinics of North America, 36:4, 673- 12. BENCARDINO, JT, et al.: Superior labrum anterior-posterior
690, jul 1998. lesions: diagnosis with MR arthrography of the shoulder.
6. ALLMAN, K et al.: Indirect MR arthrography of the unexercised Radiology 2000; 214:267 – 271.
glenohumeral joint in patients with rotator cuff tears. Invest 13. BIANCHI, S, and C MARTINOLI: Detection of loose bodies in
Radiol 1999; 34:435-440. joints. Radiol Clin North Am 1999 Jul;37(4) 679-90.
BIBLIOGRAFÍA
1. ABERNETHY, LJ, et al.: Ultrasound localization of subperiosteal 18. CHRISHANSEN, TG, et al.: Diagnostic value of ultrasound in
abscesses in children with late-onset osteomyelitis. J Pediatr scaphoid fractures. Injury 22:397, 1991.
Orthop 13:776, 1993. 19. CHRISTODOULOU, G, et al.: The use of sonography for
2. ABIRI, MM, et al.: Osteomyelitis: Detection with US. Radiology evaluation of the integrity and healing process of the tibiofibular
172:509, 1989. interosseous membrane in ankle fractures. J Orthop Trauma 9:98,
3. AL-CHALABI. A N: The role of ultrasound examination of the 1995.
hip in the diagnosis and management of the undisplaced 20. DANZIGER, MB, et al.: Fractures after femoral lengthening
subcapital fracture of the hip joint. IV Congreso de la Sociedad using the llizarov method. J Pediatr Orthop 15:220, 1995.
lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Oc- 21. DUBS, B: Ecografía de las fracturas de las costillas IV Congre-
tubre. 21-24 1998. so de la Sociedad lnternacional de Ecografía del Aparato Loco-
4. BERQUIST, TH, ed: Imaging of orthopedic trauma and surgery. motor. Madrid, Octubre. 21-24 1998.
Philadelphia: WB Saunders, 1986:181. 22. FORNAGE,BD and C NEROT: Sonographic diagnosis of
5. BLANE, CE, et al.: Radiographic imaging for llizarov limb tuberculoid leprosy. J Ultrasound Med 1987; 6:105-107.
lengthening in children. Pediatr Radiol 21:117 1991. 23. GITSCHLAG, KF, et al.: Disease in the femoral triangle:
6. BLOOM,W and DW FAWCETT: A Textbook of Histology. ed. Sonographic appearance. AJR 1982; 139:515-519.
II. Philadelphia, WB Saunders Co, 1980. 24. HARCKE, HT, et al.: Ossification center of the infant hip:
7. BOCK, GW, et al. The healed Segond fracture: a characteristic Sonographic and radiographic correlation. AJR 1986; 147:317-321.
residual bone excrescence. Skeletal Radiol 1994; 23:555-556. 25. HENTZ, VR, et al.: Imaging studies of the cadaver hand using
8. BOTTINELLI, O, et al.: Possible assessment with color Doppler transmission ultrasound. Skeletal Radiol 1987; 16:474-480.
ultrasonography: Normal bone healing process. Radiol Med 26. HOFFA, FA and J EMANS: Percutaneous drainage of
91:537, 1996. subperiosteal abscess: A potential treatment for osteomyelitis.
9. BOTTINELLI, O: Valor del doppler color en el callo óseo. IV Pediatr Radiol 26:879, 1996.
Congreso de la Sociedad lnternacional de Ecografía del Aparato 27. HOWARD,CB, et al.: Ultrasound in diagnosis and management
Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998. of acute haematogenous osteomyelitis in children. J Bone Joint
10. BRAAKS, J: Disorders of soff tissue. In: Sternberg S, ed. Diagnostic Surg Br 75:79, .1993.
surgical pathology. vol. 1. New York: Raven, 1989:161. 28. ILIZAROV,GA: The tension-stress effect on the genesis and
11. BROWER, AC, et al.: Frequency and diagnostic significance of growth of tissues. Clin Orthop 238:249, 1988.
periostitis in chondroblastoma. AJR 1990;154:309. 29. JACOBSON,JA, et al.: Wooden foreign bodies in soft tissue:
12. BROWN, I and S EUSTACE: Neonatal transphyseal detection at US. Radiology 1998; 206:45 – 48.
supracondylar fracture detected by ultrasound. Pediatr Emerg 30. JACOBSON, JA and MT VAN HOLSBEECK: Musculoskeletal
Care 13:410-412, 1997. ultrasonography Orthop Clin North Am 29:135, 1998.
13. CARSON, PL, et al.: Imaging soft tissue through bone with 31. JOSEPH, B, et al.: Measurement of tibial torsion by ultrasound.
ultrasound transmission tomography by reconstruction. Med Phys J Pediatr Orthop 1987; 7:317-323.
1977; 4:302-309. 32. KAISER, S and M ROSENBORG M: Early detection of
14. CLEVELAND, TJ and RJ PECK: Case report: Chronic subperiosteal abscesses by ultrasonography: A means for further
osteomyelitis demonstrated by high resolution ultrasonography. successful treatment in pediatric osteomyelitis. Pediatr Radiol
Clin Radiol 49:429, 1994. 24:336, 1994.
15. COMPANACCI, M, et al.: Parosteal osteosarcoma. J Bone Joint 33. LANGE, TA, et al.: Ultrasound imaging as a screening study for
Surg [Am] 1984;66:313. malignant soft-tissue tumors. J Bone Joint Surg 1987; 69A:100-105.
16. CRISTY, M: Active bone marrow distribution as a function of 34. LATTES, R: Tumors of the Soft Tissues. Washington DC, Armed
age in humans. Phys Med Biol. 26:389. 1981. Forces Institute of Pathology, 1982.
17. CHINN, DH: Unusual ultrasonographic appearance of a solid 35. MAH, ET, et al.: Ultrasonic features of acute osteomyelitis in
schwannoma. J Clin Ultrasound 1982; 10 243-245. children. J Bone Joint Surg Br 76:969, 1994.
Patología del tendón del subescapular (SE) Para el diagnóstico de las lesiones del SE (ruptura
parcial o total, degeneración, etc.) se prefiere actualmente
Si bien el estudio del tendón del Se es de gran impor-
tancia en la enfermedad del MR, no es menos cierto que la la IRM con artrografía en que se recomiendan cortes
ruptura del tendón del SE, en el curso de una ruptura del coronales oblicuos y cortes parasagitales, para detectar
MR, puede modificar el tratamiento; de ahí la importancia las alteraciones de señales del tendón y ver la salida del
de su reconocimiento. contraste inyectado en la articulación hasta el trocánter
Como ya hemos señalado el músculo SE se inicia en la menor. La atrofia muscular y la infiltración grasa son com-
superficie anterior de la escápula y se inserta en el trocánter plicaciones frecuentes de la ruptura del SE que aparece a
menor. Un grupo de sus fibras se extiende lateralmente las 6 semanas de ocurrido el accidente, y cuando interesa
para formar la pared medial del canal del bíceps y mez- a más de la mitad del área de sección muscular, se consi-
clarse posteriormente con el tendón del Se. En su parte dera como una contraindicación quirúrgica. Es frecuente
inferior el tendón del SE se hace más corto y cerca de su la asociación con lesiones del tendón de la PLB, sobre
inserción en el hueso, a este nivel, es puramente muscular. todo una subluxación medial.
Las lesiones tendinosas (degeneración, rupturas
degenerativas y traumáticas, etc.) predominan en su por- Tendinitis calcificada
ción craneal. La porción caudal solo se interesa en las le-
siones muy extensas o en aquellas que solo afectan a la En la tendinitis calcificada ocurre un depósito de calcio
porción inferior. Son muy raras las rupturas aisladas del en un tendón viable. Su incidencia oscila entre 2,7 y 20 % y
tendón, y lo frecuente es que se asocien a rupturas severas se cree debida a hipoxia transitoria, lo que lo hace suscep-
del MR o de su porción anterosuperior. tible al depósito de calcio. Las calcificaciones predominan
Como ya hemos visto la ruptura aislada es muy rara, en el tendón del Se, casi siempre por el depósito de
casi siempre de naturaleza traumática y ocurre luego de hidroxiapatita por un proceso degenerativo. Como com-
una rotación externa forzada con el brazo en abducción. plicación de los depósitos cálcicos en los tendones puede
También se asocia con luxación e inestabilidad anterior ocurrir una periartritis con bursitis adhesiva
recidivante del hombro. En la ecografía hay focos hiperecoicos, irregulares,
Lo más frecuente es que se trate de una ruptura exten- que pueden producir o no SA. Cuando no dan SA se pue-
sa del Se que se extiende al tendón SE, sobre todo en la den confundir con una ruptura del manguito, aunque es
lesión anterosuperior del MR que interesa con frecuencia muy raro la asociación de calcificación y ruptura del MR.
a las estructuras internas del MR (ligamento
coracohumeral, ligamento glenohumeral superior y las
bolsas vecinas a los tendones del Se y del SE). Patología articular
Las lesiones de la porción craneal del tendón del SE
Lesiones articulares inflamatorias
son difíciles de diagnosticar con la ecografía e incluso,
también en la cirugía, porque quedan ocultas por un tejido Las lesiones articulares del hombro han sido tratadas
cicatrizal que une los bordes rotos del tendón. dentro del subcapítulo dedicado a las articulaciones (ver
BIBLIOGRAFÍA
1. AHOVUO, J, et al.: Ultrasonography in lesion of the rotator cuff 7. BENCARDINO, JT, et al.: Superior labrum anterior-posterior
and biceps tendon. Acta-Radiol. 1983; 3: 253-255. lesions: diagnosis with MR arthrography of the shoulder.
2. AHOVUO, J: Single and double contrast arthrography in lesions Radiology 2000; 214:267 – 271.
of the glenohumeral joint. Eur J Radiol 1984; 4:237- 240. 8. BERND, Y and D KATTNAGEN: Ultrasonography of the
3. ALASAARELA,E et al.: Sonography and MRI in the evaluation shoulder. George Thieme Verlag (New York). 1990.
of painful arthritic shoulder. Br J Rheumatol 36:996-1000,1997. 9. BHAGIA, SM and MS ALI: Bankart operation for recurrent ante-
4. AlON, M, et al.: Bilateral suprascapular nerve entrapment rior dislocation of the shoulder using suture anchor. Orthopedics
syndrome due to anomalous transverse scapular ligament. Clin 2000; 23:589-591.
Orthop 234:31. 1988. 10. BIONDI, I and TF BEAR: Isolated rupture of the subscapularis
5. ALTCHECK,D W, et al.: Arthroscopic acromioplasty; Technique tendon in an arm wrestler, Orthopedics 11:647, 1988.
and results. J. Bone Joint Surg. 1990; 72 A; 1198-1207. 11. BRADLEY,M et al.: Ultrasound guided aspiration of
6. BACKER, K S and LA GILULA: The current role of symptomatic supraspinatus calcific deposits. Br J Radiol
tendinography and bursography. AJR 1990; 154: 129-133. 68:716-719, 1995
BIBLIOGRAFÍA
1. AWAYA, H et al.: Elbow synovial fold syndrome: MR imaging 10. FERRARA, MA and S MARCELIS: Ultrasound of the elbow. J
findings. AJR Am J Roentgenol 2001; 177:1377-1381. Belge Radiol 80:122-123, 1997.
2. BAKER, BE and D BIERWAGEN. Rupture of the distal tendon 11. FRAHM,R and B WIMMER: The search for joint loose bodies
of the biceps brachii. J Bone Joint Surg [Am] 1985; 67 : 414. in the elbow joint—conventional or CT arthrography. Radiology
3. BARR, LL and DS BABCOCK: Sonography of the normal elbow. 30:113-115, 1990.
AJR 1577:793,1991. 12. FRANKLIN, PD, et al.: Computed tomography of the normal
4. BRUNS, J and S LUSSENHOP: Ultrasound imaging of the elbow and traumatized elbow. J Comput Assist Tomogr 1988;12:817.
joint: Loose joint bodies and osteochondrosis dissecans. 13. HILL, NB et al.: Magnetic resonance imaging of injury to the
Ultraschall Med 14:58, 1993. medial collateral ligament of the elbow: a cadaver model. J
5. CEREZAL,L et al.: Imaging findings in ulnar-sided wrist Shoulder Elbow Surg 2000; 9:418-422.
impaction syndromes, RG RadioGraphics, 20:105-121, 2002. 14. HINDMAN, BW, et al.: Supracondylar fractures of the humerus:
6. CHEM, RK, et al.: Ultrasonography of the musculoskeletal prediction of the cubitus varus deformity with CT. Radiology
system. Radiol Clin North Am 32:275-289, 1994. 1988; 168: 513.
7. DAVIDSON, RS, et al.: Ultrasonographic evaluation of the elbow 15. HOBBY, J et al.: MR imaging of the wrist: effect on clinical
in infants and young children after suspected trauma. J Bone diagnosis and patient care, Radiology, 220:589-593, 2001.
Joint Surg. Am 76:1804, 1994. 16. KONERMANN, W and G GRUBER: Standard ultrasound
8. DE MAESENEER, M, et al.: Elbow effusions: Distribution of sections of the upper extremity—shoulder and elbow joint.
joint fluid with flexion and extension and imaging implications. Ultraschall Med 1998 Jun;19(3):130-8.
Invest Radiol 33:117-125, 1998. 17. LIM-DUNHAM,JE, et al.: Septic arthritis of the elbow in
9. DODELINGER, R: Atlas de ecografía musculoesquelética. children: The role of sonography. Pediatr Radiol 25:556-559,
Thieme Medical Publishers, 1997. 1995.
2B Osificación 50-59
demorada > 3M
Modificado de Donaldson JS, Pediatric Musculskeletal US, in Poznanski AK, Kirkpatrick JA Jr.
BIBLIOGRAFÍA
1. ABE, I et al.: Acetabular labrum: abnormal findings at MRI 3. ABRIL, J.C., et al.: Estudio ecográfico de la hipertrofia del car-
imaging in asymptomatic hips. Radiology 2000:216.576-81. tílago articular como primer signo de la enfermedad de Legg-
2. ABRIL, J. C, et al.: Hipertrofia del cartílago articular como pri- Calve-Perthes. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de
mer signo de la enfermedad de Legg-Calve-Perthes. IV Con- Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998.
greso de la Sociedad Internacional de Ecografía del aparato lo- 4. AGAMANOLIS, DP, et al.: Slipped capital femoral epiphysis: a
comotor Madrid, Octubre 21-24, 1988. pathological study. II. An ultrasound study of 23 cases. J Pediatr
Orthop 1985;5:47.
La cara superior del menisco es lisa y cóncava para Ligamento cruzado anterior (LCA)
obtener mayor contacto con el fémur. La inserción tibial
se hace a través de los ligamentos menisco- femoral y Los ligamentos cruzados son estructuras
meniscotibial (ligamentos coronarios). Sólo del 10 al 25 intracapsulares y extrasinoviales. El LCA es el estabiliza-
% de la periferia de los meniscos es irrigado por un plexo dor primario en el desplazamiento anterior de la tibia. Él
capilar, mientras que el menisco adulto es relativamente se inserta por arriba en la cara posteromedial del cóndilo
avascular. femoral externo y se extiende hacia adentro y abajo para
Cada menisco se divide en 2 cuernos y un cuerpo. Al terminar en el espacio intercondíleo entre las inserciones
corte sagital, los cuernos de ambos meniscos tienen una anteriores de los meniscos. Mide 11mm de ancho y entre
forma triangular con el borde externo convexo y el ápex 31 y 38 mm de largo. Funcionalmente está constituido por
dirigido al espacio intercondíleo. 2 haces de fibras: el haz anterior o anteromedial que es el
El cuerno posterior del menisco medial es mayor que su mayor y que se pone en tensión con la flexión de la rodilla,
cuerno anterior. Se puede ver una pequeña banda de grasa, mientras que el haz posterolateral (más corto) se tensa con
que rodea a la bursa entre el cuerno posterior del menisco la extensión de la rodilla. En la flexión las fibras
medial y la parte posterior de la cápsula que es ecogénica. anteromediales se tuercen sobre las fibras posterolaterales.
El menisco medial tiene forma de una letra C más abier- El LCA previene la traslación anterior de la tibia y se opo-
ta, es menos móvil y está unido a la capa profunda del ne a la traslación posterior del fémur. Es muy difícil su
LCM y a la cápsula, lo que lo hace más susceptible a las observación en la ecografía, no así con la IRM.
lesiones. Puede verse una pequeña bursa que separa el
cuerno posterior del menisco medial de la cápsula articu- Ligamento cruzado posterior (LCP)
lar (IRM).
Los cuernos anteriores no deben medir más de 6 mm El LCP se origina en el lado externo del cóndilo femoral
de altura. En su microestrucura los haces colágenos se interno, cruza al LCA y se inserta en la parte posterior de
disponen en 2 zonas: una circunferencial en el tercio peri- la fosa intercondílea de la tibia. Tiene un haz anterolateral
férico del menisco y otra transversal que une la zona y otro posteromedial que se tensan en flexión y extensión
circunferencial con el borde libre del menisco. respectivamente. En la flexión progresiva de la rodilla el
La unión meniscocapsular se sitúa en la periferia de la haz posteromedial pasa hacia delante y por debajo del haz
zona circunferencial y su función es resistir al estrés pro- anterolateral.
vocado por el peso. El LCP se considera un estabilizador central de la ro-
El menisco lateral, como ya hemos señalado, tiene for- dilla limitando el desplazamiento tibial posterior de la ti-
ma de una letra C cerrada y acondiciona al tendón poplíteo bia sobre el fémur. El LCP estabiliza la rodilla contra una
por detrás. Está separado del LCL, y su cuerno posterior excesiva angulación en valgo o en varo y se opone a la
tiene una inserción en el LCP y en el cóndilo femoral inter- rotación interna de la tibia sobre el fémur.
no, a través de los ligamentos meniscocapsulares poste- El LCP aparece como una estructura en banda grue-
riores. Este menisco, más móvil, cubre los 2/3 de la super- sa, extendido desde el espacio intercondíleo en el cóndilo
ficie articular de la tibia y tiene un hiato posterior de 1 cm. femoral interno por arriba, hasta la parte posterior del pla-
para el pase del tendón poplíteo. La función de este tendón tillo tibial por debajo. Tiene una porción horizontal y otra
es halar al menisco lateral hacia atrás con la rodilla en más vertical, unidos por una rodilla suave. Las lesiones
flexión. El músculo poplíteo puede rotar la tibia con la son menos frecuentes que las del LCA y raramente son
rodilla en extensión. aisladas. En la ecografía solo se visualiza parcialmente.
Ligamento cruzado posterior (LCP) El síndrome de la fricción iliotibial (rodilla del corre-
dor) es una fascitis debida a la inflamación de la fascia
El LCP se origina en la superficie lateral del cóndilo que forma el tracto iliotibial, que con los movimientos de
femoral interno y se inserta en el área intercondílea de la flexión y extensión, hacen que la banda choque con el cón-
porción proximal de la tibia, a 1 cm por debajo de la su- dilo lateral, especialmente en los corredores con excesiva
perficie articular. Tiene un curso sagitaloblicuo en su ½ pronación del pie. Es aconsejable realizar el estudio des-
distal en un plano paralelo y muy relacionado, con la por- pués del ejercicio en que se ve el engrosamiento de la fascia
ción proximal y posterior de la tibia. Su longitud prome- con disminución de su ecogenicidad. A veces la bursa ve-
dio es de 38 mm y su ancho de 13 mm. Su área de corte cina se distiende.
seccional disminuye hacia su porción distal y en la medi-
ción se incluye la grasa vecina y los ligamentos Síndrome de presión excesiva lateral
meniscofemorales.
Para su visualización se utiliza un transductor lineal El síndrome de presión excesiva lateral resulta de la
de alta resolución con el paciente en decúbito prono y la compresión de la articulación patelofemoral por un
rodilla en posición neutra. El transductor se sitúa en la retináculo lateral muy rígido o por un esguince de la arti-
fosa poplítea, longitudinal al trayecto del ligamento, cerca culación tibioperonea superior. Este síndrome puede
de su inserción distal en la tibia. Debe hacerse presión con sospecharse en la ecografía cuando se observa el retináculo
la porción proximal del transductor y con una ligera lateral muy rígido con los movimientos pasivos y activos.
angulación, para obtener un plano paralelo al ligamento.
Sólo se logra ver bien su porción distal, la que se afina LESIONES DE LOS MENISCOS
progresivamente. La medición del grosor del ligamento se Es conveniente insistir en el aspecto anatómico y
debe realizar a nivel de la inserción en la espina tibial, ecográfico normal de los meniscos. Los meniscos están
tomándose en cuenta su ecogenicidad y la definición de su compuestos de un cartílago semilunar unido en su perife-
contorno posterior. ria a la cápsula de la articulación de la rodilla. Los meniscos
El LCP, es uniformemente hipoecoico, con su borde son estructuras triangulares con un borde externo convexo
anterior íntimamente unido a la porción proximal de la y un borde interno cóncavo, habiéndose dividido en un
tibia. El contorno posterior es liso y bien delimitado de la cuerno anterior, el cuerpo y un cuerno posterior.
grasa intraarticular, que es hiperecoica. Se puede ver bien El menisco interno, más pequeño y fijo, en forma de
la porción de la cápsula que aparece como una línea una «C» abierta (más ancho por detrás), es asiento prefe-
hiperecoica entre la grasa articular y el músculo vecino, rente de las rupturas traumáticas.
que es hipoecoico. El menisco externo, más grande y móvil, en forma de
En los pacientes normales, el grosor oscila entre 3,7 y una «C» cerrada, soporta más carga y está más expuesto a
6,2 mm, con una media de 4,5 mm; la diferencia de grosor lesiones degenerativas y es de localización casi exclusiva
con el ligamento sano, siempre es menor de 1 mm. La le- de las malformaciones congénitas.
Condromalacia
Subluxación y luxación de la patela
En esta entidad hay reblandecimiento del cartílago
articular de la patela asociado a cambios degenerativos. La luxación transitoria de la patela ocurre con mayor
Puede ser primaria o idiopática o ser secuela de un trau- frecuencia en los adolescentes y en los adultos jóvenes que
ma. Predomina en los adolescentes y adultos jóvenes. realizan actividades deportivas y que resulta de un movi-
Como condiciones predisponentes se señalan: patela alta, miento giratorio con la rodilla en flexión. El fémur rota
un aumento del ángulo en valgus y una hipoplasia del hacia dentro con la tibia fija, mientras que la rodilla está
cóndilo femoral. La forma crónica se ha relacionado flexionada, lo que ocurre en una contracción del cuádriceps
con subluxación, aumento del ángulo Q, imbalance del que produce un desplazamiento lateral de la patela fuera
cuádriceps, un mal alineamiento postrauma, un síndro- de su surco, lo que predomina en los individuos que pre-
me de presión excesiva lateral o lesión del LCP. Tam- sentan un surco troclear poco profundo.
bién puede deberse a artritis inflamatoria, sinovitis e Entre los factores predisponentes se citan: patela alta,
infección. hipoplasia del cóndilo femoral lateral, genus valgus,
La ecografía con cortes semioblicuos, permite detec- recurvatum o una inversión lateral del tendón rotuliano o
tar las alteraciones del cartílago articular de la patela, que una patela displásica.
BIBLIOGRAFÍA
1. ACEBES,J C, et al.: Utilidad de la ecografía en el control tera- 16. COARI, G, et al.: Sonographic findings in haemodialysis:
péutico evolutivo de los quistes de Baker. IV Congreso de la Related chronic arthropathy. Eur Radiol 6:890-894, 1996.
Sociedad lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor. 17. DANDY,DJ: Arthroscopic Management of the Knee, ed 2. New
Madrid, Octubre. 21-24 1998. York, Churchill-Livingstone, 1987.
2. ACTON,CM, et al.: Synovial sarcoma: An unexpected 18. DE FLAVIIS L, et al.: Dynamic ultrasonography of capsulo-
ultrasound finding in a post partum patient. Australas Radiol ligamentous knee-joint traumas. J Clin Ultrasound 1988; 16;
40:452-453,1996. 487-498.
3. AISEN, AM, et al.: Sonographic evaluation of the cartilage of 19. DE FLAVIIS, L, et al.: Ultrasonic diagnosis of Osgood-Schlatter
the knee. Radiology 1984; 153:781- 784. and Sinding Larsen Johanson diseases of the knee. Skeletal
4. ANILLO, B. R: Valor del USAR en las afecciones de la rodilla. Radiol. 1989; 18; 193-197.
Trabajo de terminacion de Residencia. 1995. Habana Cuba. 20. DE MAESENEER,M, and F VAN ROY: Three layers of the
5. ARNOCZKY, SP, et al.: Microvasculature of the human medial capsular and supporting structures of the knee: MR
meniscus. AM J Sports Med 1982;10:90. Imaging-Anatomic correlation. Radiographics 2000, 20; 583-589.
6. BENCARDINO,J, et al.: Traumatic musculotendinous injuries 21. EDMONSON,AS, et al.: Campbell’s operative orthopaedics.
of the knee: diagnosis with MR imaging. RadioGraphics 2000; vol 2. St. Louis: CV Mosby, 1980:1408.
20:103 – 120. 22. ESLAVA,A, y M. CARMEN: Hallazgos en estudios
7. BIANCHI, S, et al.: Diagnosis of tears of the quadriceps tendon ecográficos de rodillas en pacientes con complicaciones des-
of the knee: Value of sonography. AJR Am J Roentgenol pués de cirugía artroscópica. IV Congreso de la Sociedad
162:1137-1140, 1994. lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid,
8. BIANCHI,S, et al.: Sonographic evaluation of intramuscular Octubre. 21-24 1998.
ganglia. Cun Radiol 50:235-236, 1995. 23. FIOCCO, U, et al.: Long term sonographic follow-up of
9. BIANCHI, S, et al.: Sonographic evaluation of tears of the rheumatoid and psoriatic proliferative knee joint synovitis. Br
gastrocnemius medial head (“tennis leg”). J Ultrasound Med J Rheumatol 35:155-163, 1996.
1998; 17:157-162. 24. FORNAGE, BD: Musculoskeletal Ultrasound New York,
10. BIANCHI,S et al.: Sonographic evaluation of lipohemarthrosis: Churchill Livingstone, 1995.
Clinical and in vitro study J Ultrasound Med 14:279-282, 1995. 25. FRITSCHY, D, and R WALLENSTEN: Surgical treatment of
11. BRAVO, SM, et al.: Pigmented villonodular synovitis. Radiol patellar tendinitis. Knee Surg Sports Traumatol Arthrosc 1:131-
Clin North Am 4:316, 1996. 133, 1993.
12. BRUKNER,P, and K KHAN: Clinical Sports Medicine. Sydney, 26. GEBHARD,F, and M AUTHENRIETH: Ultrasound evaluation
McGraw Hill, 1993. of gravity induced drawer following anterior cruciate ligament
13. CARPENTER, JR, et al.: Ultrasound evaluation of the popliteal lesion. Knee Surg Sports Traumatol Arthrosc 1999. 7 (3);
space: Comparison with arthrography and physical examination. 166-72.
Mayo Clin Proc 51:498,1976. 27. GIBBON, WW: Musculoskeletal ultrasound Bailliere’s Clin
14. CHALABI, N, et al.: Quistes del tendón rotuliano, diagnóstico Rheumatol 10:561-586, 1996.
y tratamiento mediante la ecografía. IV Congreso de la Socie- 28. GILHERT, TJ, et al.: Tennis calf or tennis leg. Orthopedics
dad lnternacional de Ecografía del Aparato Locomotor. Ma- 1996; 19: 179-184.
drid, Octubre. 21-24 1998. 29. GILSANZ,V and BH BERSTEIN: Joint calcification
15. COARI, G, et al.: Chondrocalcinosis: Sonographic study of the following intraarticular corticosteroid therapy. Radiology
knee. Clin Rheumatol 14:511-514, 1995. 1984, 151:647-649.
CORTES ANATOMORRADIOLÓGICOS Corte coronales. El aspecto depende del nivel del corte.
DEL TOBILLO Y PIE EN LOS PLANOS . En los CC posteriores se ve el tendón de Aquiles con
AXIAL, CORONAL Y SAGITAL. su inserción en el calcáneo. Los músculos peroneo corto
y flexor largo del 1er. dedo se sitúan por fuera del
Antes de empezar el estudio de la técnica ecográfica sóleo. Los tendones peroneos se localizan por debajo
del tobillo y pie, hemos considerado de interés el ofrecer del maléolo externo. El músculo flexor largo de los
una visión, en cortes anatomorradiológicos, de los dife- dedos y su tendón cursan superficialmente en direc-
rentes planos de esta región, aunque no todas las estructu- ción mediolateral al tendón del tibial posterior, en la
ras sean identificables en la ecografía. porción distal de la pierna. El tendón del tibial poste-
BIBLIOGRAFÍA
1. AWERBUCH,MS, et al.: Morton’s metatarsalgia due to 16. FORNAGE,BD and MD RIFKING: Ultrasound examination of
intermetatarso-phalangeal bursitis as an early manifestation of the hand and foot. Radiol Clin North Am 26:109, 1988.
rheumatoid arthritis. Clin Orthop 1982; 167: 214 – 221. 17. FRIEDRICH,JM and P SCHNARKOVSKI: Ultrasonography of
2. BARD, R: The blizzard sign of intramuscular healing hemato- capsular morphology in normal and traumatic ankle joints. J Clin
ma. Presented at 6th Annual Conference of Musculoskeletal Ultrasound 1993, Mar-Apr.21 (3); 179-187.
Ultrasound. Montreal 1990. 18. GIBBON, W and G LONG: Ultrasound of the plantar aponeurosis
3. BASSETT,FH et al.: Talar impingement by the anteroinferior (fascia). Skeletal Radiol 1999; 28:21 – 26.
tibiofibular ligament. J Bone Joint Surg Am 1990; 72:55-59. 19. GRASEL,RP, et al.: ACR imaging of plantar fascitis: edema,
4. BELTRAN, J and ZS ROSENBERG: Ankle and foot. In: Stark tears, and occult narrow abnormalities correlated with outcome.
DD, Bradley WG, eds. Magnetic resonance imaging. 3rd ed. St AJR Am J Roentgenol 1999; 173:699 – 701.
Louis, Mo: Mosby – Year Book, 1999; 873 – 929. 20. HATTRUP, SJ and KA JOHNSON. A review of ruptures of the
5. BENCARDINO.J, et al.: MR imaging in sports injuries of the Achilles tendon. Foot Ankle 1985;6:34.
foot and ankle. Magn Reson Imaging Clin N Am 1999; 7:131 – 21. JACOBSON, JA, et al.: Wooden foreign bodies in soft tissue:
149. detection at US. Radiology 1998; 206:45 – 48.
6. BLEI,CL, et al.: Achilles tendon: ultrasound diagnosis of 22. JORDAN, LK, et al.: Magnetic resonance imaging findings
pathologic conditions. Radiology 1986; 159: 765-767. in anterolateral impingement of the ankle. Skeletal Radiol
7. BOSSLEY,CJ, and PC CAIMEY: The intermetatarso-phalangeal 2000; 29:34-39.
23. KAINBERGER, FM, et al.: Injury of the Achilles tendon: diag-
bursa: its significance in Morton’s metatarsalgia. J Bone Joint
nosis with sonography AJR. 1990; 155: 1031-1036.
Surg Br 1980; 62:184 – 187.
24. KALEBO, P, et al.: Diagnostic value of ultrasonography in partial
8. BRASSEUR, J and M TARDIEU: Accurate use of imaging in
ruptures of the Achilles tendon. Am J Sports Med 20:378, 1992.
ankle sprain. BJR 1999 Apr. 82 (2); 63-68.
25. KALEBO, P, et al.: Soft tissue radiography, computed tomography
9. CARDINAL, E, et al.: Plantar fasciitis: sonographic evaluation.
and ultrasonography of partial Achilles tendon ruptures. Acta
Radiology 1996; 201:257 – 259. Radiol 31:565, 1990.
10. CHEN, YJ and SC LIANG: Diagnostic efficacy of ultrasonography 26. KERR,R and D HENRY: Radiologic case study: posterior tibial
in stage posterior tibial tendon dysfunction: Sonographic-surgical tendon rupture. Orthopedics 1989;12(10):1394.
correlation. J Ultrasound Med 16:417, 1997. 27. KOSKI, JM: Ultrasonography of the metatarso-phalangeal and
11. CHEUNG, Y, et al.:Normal anatomy and pathologic conditions talocrural joints. Clin Exp. Rheumatol 8:347-351, 1990.
of ankle tendons: Current imaging techniques. Radiographics 28. KOSKI, JM: Ultrasonography of the sub-talar and mid-tarsal
12:429, 1992. joints. Br J Rheumatol 31:553, 1992.
12. CHHEM, RK, et al.: Ultrasonography of the ankle and hindfoot. 29. LEDERMANN,H et al.: Pedal abcesses in patients suspected of
Can Assoc. Radiol 1 44:337-341, 1993. having pedal osteomyelitis: analysis with MR imaging,
13. DIAZ, G, et al.: Longitudinal split of the peroneus longus and Radiology, 224:649-655, 2002.
peroneus brevis tendons with disruption of the superior peroneal 30. LIN, J, et al.: An illustrated tutorial of Musculoskeletal
retinaculum. J Ultrasound Med 17:525, 1998. Sonography. Part III. Lower Extremity. Am.J Roentgenol 2000.
14. FESSEL, DP, et al.: US of the ankle: Technique, anatomy, and 175; 1313-1321.
diagnosis of pathologic conditions. Radiographics 18:325, 1998 31. LIN, J, et al.: Pigmented villonodular synovitis and related
15. FESSELL, DP and MT VAN HOLSBEECK: Foot and ankle lesions. The spectrum of imaging findings. AJR Am J Roentgenol
sonography. Radiol Clin North Am 1999; 37: 831 – 858. 1999, 172:191 – 197.
Condroma
Originados a partir de cartílago Osteocondroma
Condroblastoma
Fibroma condromixoide Condrosarcoma
Hemangioma Hemangiopericitoma
De origen vascular Linfangioma Hemangioendotelioma
Glomangioma Angiosarcoma
Fibrohistiocitoma maligno
Lipoma Fibrosarcoma
De tejido conectivo Fibroma desmoplásico Liposarcoma
Fibrohistiocitoma Mesenquimoma maligno
Sarcoma indiferenciado
Otros - Cordoma
Adamantinoma
La OMS plantea, que existe un grupo de lesiones que lesión benigna y una lesión maligna y para ello nos valemos
se incluyen bajo el capítulo de lesiones seudotumorales de los llamados patrones de presentación de los tumores óseos.
del esqueleto, pero que pueden confundirse con los tumo-
res óseos verdaderos y tomarse actitudes muy agresivas. PATRONES PARA LA CLASIFICACIÓN
Muchas de ellas se engloban dentro del grupo de las lla- DE LOS TUMORES ÓSEOS
madas “lesiones que no deben tocarse”. Entre ellas están:
Una vez que se ha detectado una alteración esquelética,
osteoma, fibroma no osificante (defecto fibroso cortical),
debemos tratar de caracterizarla, y además, establecer su
desmoide periostal, quiste óseo simple (juvenil), quiste óseo diagnóstico diferencial. Existen 2 máximas a tener en cuen-
aneurismático, granuloma eosinofílico, displasia fibrosa ta en el manejo de estas lesiones:
localizada, tumor pardo del hiperparatiroidismo, miositis . Dejar de tratar a una lesión aparentemente benigna,
osificante, y ganglión intraóseo (quiste óseo yuxtacortical). tratándose de un tumor maligno.
A la hora de analizar un paciente con un tumor óseo, . No indicar un tratamiento agresivo de una lesión ma-
es importante el valorar su historia clínica, realizar un ligna por haber realizado un diagnóstico erróneo de
examen físico completo, analizar las radiografías conven- un tumor benigno.
cionales, valorar los resultados de la ecografía con técnica
Doppler y en algunas ocasiones emplear la TAC o la IRM. Los tumores óseos se pueden clasificar, como ya hemos
El tratamiento previo de la lesión e incluso la toma de una señalado, de acuerdo con su tejido de origen, y estos a su
biopsia puede dificultar el diagnóstico inicial. vez, en benignos y malignos. Antes del análisis de las imá-
En el momento de analizar una lesión ósea tumoral el genes que nos ofrecen estas lesiones tumorales, debemos
primer paso debe ser el tratar de diferenciar entre una posible valorar una serie de factores, entre los cuales cabe citar:
Sinonimia
Fibromixosarcoma, fibrosarcoma mixomatoide, sar-
BENIGNOS
coma neurogénico Lipoma
Edad. Pueden encontrarse en cualquier grupo de eda- Formación benigna constituida, exclusivamente, por
des, aunque más frecuentes en la 3ra., 4ta. y 5ta. células maduras de tejido adiposo, sin atipia celular. Es
décadas, aunque son raros en los niños uno de los tumores más frecuentes de las partes blandas.
Sexo. Para algunos no hay predominio. Para Stout lo Los tumores con alto contenido de grasa son fácilmente
hay en el sexo masculino. detectados por la TAC, la IRM y la ecografía e incluyen a
Localización. Pueden aparecer en cualquier lugar del los lipomas, lipoblastomas, hibernomas y liposarcomas con
cuerpo, aunque las más frecuentes aparecen en la sus variantes.
piel, TCS., tejido musculotendinoso, periostio y ci- Los lipomas se presentan como masas homogéneas de
catrices. Se les puede encontrar frecuentemente tejido adiposo bien definidas, encapsuladas, trabeculadas,
Ecografía Ecografía
En estos casos se ve una masa hipoecogénica entre las Los lipoblastomas pueden ser focales o difusamente
capas musculares, a las cuales desplaza. infiltrativos (lipoblastomatosis), comportándose como una
Si bien la IRM, con la introducción de equipos de bajo postraumáticos, granulomas, trombosis venosa,
campo y magnetos abiertos, ha permitido incursionar en seudoaneurismas arteriales y fístulas
el intervencionismo del SOMA, la ecografía tiene múlti- arteriovenosas, donde es de gran valor el Doppler.
ples ventajas, habiéndose utilizado como: proceder diag- - La ecografía es útil también para evaluar la
nóstico y terapéutico. neoformación ósea precoz en el sitio de una frac-
tura durante un proceder de tracción con alam-
bres. Esta detección precoz permite definir el gra-
PROCEDERES DIAGNÓSTICOS do de tracción que debe realizarse y que se logra
INTERVENCIONISTAS CON LA ECOGRAFÍA visualizar muchas semanas previas a lo que se ve
en los rayos X. En la ecografía el callo se ve como
- Guía para realizar biopsia hística o aspiración
un foco ecogénico dispuesto en el plano
citológica.
longitudinal y que aumenta evolutivamente.
- Guía para las punciones con fines anestésicos,
sobre todo en la cadera.
- Biopsia de las lesiones osteolíticas y en los sitios PROCEDERES TERAPÉUTICOS
de insercionitis. INTERVENCIONISTAS CON LA ECOGRAFÍA
- Con el auxilio del Doppler color, la ecografía per-
mite obtener muestras de las lesiones activas y - Inyecciones articulares de corticoides.
además realizar un estudio evolutivo inmediato - Inyecciones de esteroides en bursas y vainas
para garantizar la demostración del material as- tendinosas, sobre todo en las artropatías
pirado o de cualquier complicación. inflamatorias crónicas.
- Para evaluar el estado posartroscopia y detectar - Tratamiento particular de las calcificaciones del
complicaciones, tales como neuromas MR, para su lavado y aspiración.
BIBLIOGRAFÍA
1. BLANE, CE, et al.: Radiographic imaging for llizarov limb 6. FARIN, PU, et al.: Rotator cuff calcifications: Treatment with
lengthening in children. Pediatr Radiol 21:117,1991. ultrasound guided percutaneous needle aspiration and lavage.
2. BODNER, G, et al.: Color doppler sonography of soft-tissue Skeletal Radiol 25:551,1996.
tumors: criteria of malignancy. Austria. 1998. 7. GILSANZ, V and BH BERNSTEIN: Joint calcification following
3. BRADLEY, M, et al.: Percutaneous ultrasound guided extraction intraarticular corticosteroid therapy. Radiology 1984, 151:647-649.
of non-palpable soft tissue foreign bodies. Arch Emerg Med 8. GRAY, RG and NLGOTTLIEB: Intra-articular corticosteroids.
9:181-184, 1992. An updated assessment. Clin Orthop 1983; 177:235.
4. BROPHY, DP, et al.: Technical report: Ultrasound guidance for 9. HOFFA, FA and J EMANS: Percutaneous drainage of
injection of soft tissue lesions around the heel in chronic subperiosteal abscess: A potential treatment for osteomyelitis.
inflammatory arthritis. Clin Radiol 50:120-122, 1995. Pediatr Radiol 26:879, 1996.
5. CARDINAL, E, et al.: Ultrasound guided interventional 10. JEE, WH, et al.: Superior labral anterior posterior (SLAP) lesions
procedures in the musculoskeletal system. Radiol Clin North of the glenoid labrum: reliabillty and accuracy of MR
Am 36:597-604, 1998. arthrography for diagnosis. Radiology 2001; 218:127-132.
Intervencionismo 191
11. JONES A, et al.: Importance of placement of intraarticular steroid 19. PEREIRA, PL, et al.: Interventional MR imaging for injection
injections. BMJ 307:1329-1330, 1993. of sacroiliac joints in patients with sacroiliitis. AJR Am J
12. LIN, J and DP FESSELL: An illustrated tutorial of Roentgenol 2000; 175:265-266.
Musculoskeletal Sonography. Part IV. Musculo-Skeletal masses, 20. RUBENS, DJ, et al.: Effective ultrasonographically guided
Sonographically Guided Interventios and Miscelaneous Topics. intervention for diagnosis of musculoskeletal lesions. J
American .Journal of Roentgenology 2000. 175; 1711-1719. Ultrasound Med 1997; 16:831-842.
13. LINDENBAUM, BL: Complications of knee joint arthroscopy. 21. SILVERMAN,SG, et al.: Interactive MR-guide biopsy in an
Clin Orthop 1981; 160:158.
open-configuration MR imaging system. Radiology 1995;
14. MARTÍNEZ MARTÍN, AA, et al.: Use of the suture anchor in modified
197:175-181.
open Bankart reconstruction. Int Orthop 1998; 22:312-315.
22. TAVERAS, JM and JT FERRUCCI: Radiology: Diagnosis—
15. MILLER, WT and RA RESTIFO: Steroid arthropathy. Radiology
1966; 86:652. Imaging— Intervention, vol. 5. Philadelphia, J.B. Lippincott,
16. NAIMARK, A and A BAUM. Injection of the subcoracoid bursa: 1987.
a cause of technical failure in shoulder arthrography. J Canad 23. VAN SONNENBERG, E, et al.: Sonography of thigh abscess:
Assoc Radiol 1989;40:170. Detection, diagnosis and drainage. AJR 1987; 149:769-772.
17. NEVIASER, RJ and TJ NEVIASER: The frozen shoulder: diag- 24. VAN VUGT, RM, et al.: Ultrasound guided synovial biopsy of
nosis and management, Clin Orthop 223:59, 1987. the wrist. Scand J Rheumatol 26:212-214, 1997
18. OGILVIE-HARRIS, DJ and E SCHEMITSCH: Arthroscopy of 25. YAO, L, et al.: Primary musculoskeletal neoplasms: effectiveness
the elbow for removal of loose bodies. Arthroscopy 9:5-8, 1993. of core-needle biopsy. Radiology 1999; 212:682 – 686.
Osteosonometría 193
Los equipos de ecografía utilizados en la densitometría transductores, el espesor del calcáneo, el espesor de las
tienen la capacidad de medir, además, la velocidad del so- partes blandas, etc.
nido en el calcáneo ( Speed Of Sound: SOS) y por tanto Todo esto se calcula realizando mediciones de calibra-
ofrecen una información estructural (con la BUA) y otra ción con fantoms en el caso de los sistemas secos y con el
información adicional sobre la porosidad, conectividad y tanque con agua en el caso de los sistemas húmedos. Con
grosor trabecular. estas mediciones y ciertas correcciones se llega a una mag-
En los inicios se emplearon equipos con sistemas de nitud bastante exacta de la velocidad del haz del US en el
agua para los estudios del calcáneo y en los últimos años calcáneo (SOS).
se han empleado los sistemas secos para su realización. Cabría preguntarse: ¿Es que el QUS ofrece una infor-
La introducción de algunos equipos con posibilidades mación diferente de la que aportan los equipos de
de variar o seleccionar el sitio del examen del calcáneo densitometría ósea? Esto es discutido en la literatura mun-
están en investigación y recientemente se han informado dial; no obstante, existen múltiples ventajas conocidas del
equipos de densitometría ecográfica que dan información empleo de la osteosonometría del calcáneo como son:
en los huesos largos (tibia) y otros que llegan hasta el es- . Fácil acceso.
tudio de la columna y del fémur. . Alto contenido de hueso trabecular del calcáneo.
Si bien los equipos de ecografía diagnóstica utilizan . Estudio en un hueso que soporta peso con participa-
transductores con frecuencias entre 2 y 14 MHz, los equi- ción importante en la osteoporosis, similar a la co-
pos con sistemas de QUS, generalmente miden a la BUA lumna vertebral.
utilizando transductores con un gran diámetro de apertu- . No usa radiaciones.
ra, significativamente mayor que la longitud de onda del . Es más económica.
ultrasonido. Para una velocidad del sonido de 1500 m/s y . El equipo puede trasladarse a la cama del paciente.
una variación de frecuencia entre 0,2 y 0,6 MHz, que es el
rango habitualmente utilizado para las mediciones del Como ya hemos señalado la mayoría de los equipos
BUA, la longitud de las ondas varía entre 7,5 mm y 2,5 comerciales que se utilizan en la osteosonometría del cal-
mm. La utilización de transductores más anchos (D = cáneo ofrecen mediciones del BUA y del SOS, habiéndose
20mm), reducen la dispersión del haz de ultrasonido cau- demostrado que estos 2 parámetros se correlacionan y que
sado por difracción y aumentan la señal del receptor. El por tanto su unión produciría un nuevo parámetro de me-
espacio frente al transductor se divide en 2 zonas, una cer- dición que mejora la medición y exactitud del diagnóstico.
cana al campo y otra lejana. Para un diámetro de 20 mm y Los sistemas “Lunar Achilles” correlacionaron estos
una longitud de onda entre 7,5 y 2,5 mm, la transición índices en un solo sistema dándole un valor a cada uno de
entre estas 2 zonas yace en una distancia que varía entre estos 2 parámetros para formar uno nuevo al que denomi-
13 y 40 mm. naron stiffness donde:
Para medir el BUA es necesario colocar cuidadosa-
mente el talón entre los 2 transductores, receptor y trans- “Stiffness” = 0,667 x BUA + 0,278 x SOS - 417
misor. Al transmitir un pulso corto de ultrasonido (0,5
microsegundos) y posteriormente recibirlo, se le procesa Otros sistemas como el que usamos, utilizan otra com-
con un analizador de frecuencia. Es necesario tomar en binación de BUA y SOS para formar otro parámetro al
cuenta el espesor del calcáneo, el efecto de la conforma- que denominan QUI o BQI donde:
ción del pulso, el perfil del haz y la atenuación en el tan-
que de agua. Al graficar la atenuación debida exclusiva- BQI = 0,41 x (BUA + SOS) – 571
mente al calcáneo, contra la frecuencia, nos encontramos
con una relación lineal. La pendiente, que está dada en Este índice tiene una correlación muy exacta con los
unidades de Db/MHz, es el índice que se denomina BUA. equipos DEXA (r = 0,85).
Los equipos convencionales con sistema QUS para Ahora bien, en relación con la pregunta realizada, hay
medir el BUA en el calcáneo, también ofrecen una nueva numerosos autores que plantean que la osteosonometría ofre-
información, al dividir la distancia de propagación (dis- ce una información diferente que las técnicas radiológicas,
tancia entre los transductores) por el tiempo de tránsito más relacionada con la calidad del hueso que con su densi-
del pulso, que es lo que se conoce como SOS. dad. Se cree que la BUA se relaciona con factores estructu-
Para medir la velocidad a través del calcáneo (SOS) rales tales como: porosidad, conectividad y grosor trabecular,
es necesario (en dependencia del sistema), tomar en cuen- mientras que la SOS se relaciona además de la densidad
ta varios factores como son: la distancia entre los ósea, con la elasticidad del hueso como tal.
Osteosonometría 195
4. Otras enfermedades en las cuales puede ocurrir 6. Mediciones evolutivas de la osteoporosis.
osteoporosis. - Evaluación del progreso de la enfermedad durante el
- Hemopatías graves. tratamiento.
- Mastocitosis. - Persistencia de osteoporosis con un tratamiento metó-
- Inmovilización prolongada. dico.
- Insuficiencia renal a término o pretérmino.
Los intervalos de chequeo dependen de la precisión
- Fracturas. del método de medición, la extensión de la osteoporosis y
- Osteogénesis imperfecta. del período entre la menopausia y el inicio del tratamiento.
- Sospecha radiológica de osteoporosis, especialmente
con fractura vertebral. CONTRAINDICACIONES
5. Ingestión de medicamentos que pueden producir una
osteoporosis. - Edema marcado en MI.
- Toma de esteroides por más de 3 meses. - Deformidad anatómica de la tibia.
- Fractura de la tibia.
- Postrasplantes.
- Tratamiento con fenobarbital o fenitoína por un tiem- Nota: siempre debe seleccionarse el tobillo en que no
po mayor de 1 año. exista lesión.
BIBLIOGRAFÍA
1. ABENDSCHEIN, W and GW HYATT: Ultrasonics and selected 13. CEPOLLARO,C, et al.: The combined use of ultrasound and
physical properties of bone. Clin Orthop 1970; 69: 294-301. densitometry in the prediction of vertebral fracture. Br J Radiol
2. AGREN, M, et al.: Ultrasound attenuation of the calcaneus: a 1997, 70:691-696.
sensitive and specific discriminator of osteopenia in 14. Consensus Development Statement: Who Are Candidates for
postmenopausal women. Calcif Tissue Int 1991; 48: 240-244. Prevention and Treatment for Osteoporosis Osteoporos Int 1997;
3. AGUADO, P, et al.: Déficit de vitamina D y postmenopausia en 7: 1-6.
una consulta reumatológica. REEMO 1997; 6:534. 15. CHAPUY, MC, et al.: Vitamin D3 and calcium to prevent hip
4. ALTADILL, A, et al.: Epidemiología de la fractura de cadera en fractures in elderly women N Engl J Med 1992; 327; 1637-1642.
Asturias Med Clin (Barc) 1995; 105: 281-6. 16. DAWSON-HUGHES, B, et al.: Effect of calcium and vitamin D
5. ANTICH, P P, et al.: Measurement of mechanical properties of supplementation on bone density in men and women 65 years of
bone material in vitro by ultrasound reflection: methodology and age or older. N Engl J Med 1997; 337:670-676.
comparison with ultrasound transmission. J Bone Miner Res 17. DELMAS, PD, et al.: Effects of raloxifene on bone mineral
1991; 6: 417- 426. density, serum cholesterol concentrations, and uterine
6. ASHMAN, R B, et al.: Elastic properties of cancellous bone: endometrium in postmenopausal women. N Engl J Med 1997;
37:1641-1647.
meausurement by an ultrasonic technique. J Biomech 1987;
18. DRETAKIS, E K, et al.: Broadband Ultrasound Attenuation of
20: 979-986.
the Os Calcis in Female Postmenopausal Patients with Cervical
7. BARAN, D T, et al.: Broadband ultrasound attenuation of the
and Trochanteris Fracture. Calcif Tissue Int 1995; 57: 419-424.
calcaneus predicts lumbar and femoral neck density in caucasian
19. DUBS, B: La importancia de la osteosonometría en el diagnóstico
women: a preliminary study. Osteoporos Int 1991; 1: 110-113.
de la osteoporosis. IV Congreso de la Sociedad lnternacional de
8. BARAN, D T: Quantitative ultrasound: a technique to target
Ecografía del Aparato Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998.
women with low bone mass for preventive therapy. Am J Med 20. EASTELL, R, et al.: Management of male osteoporosis: report
1995; 98:48-51. of the UK Consensus Group. Q J Med 1998; 98:71-92.
9. BAUER,D, et al.: Bone ultrasound predicts fractures strongly 21. EASTELL, R, et al.: The effect of raloxifene on incident vertebral
and independently of densitometry in older women: A prospective fractures in postmenopausal women with osteoporosis: 4-year
study. Arch Intern Med 1997; 157: 629-634. results from the MORE trial. J Bone Miner Res 2000; 15 5:229.
10. BAUER, D G, et al.: Quantitative ultrasound and vertebral 22. ETTINGER, B, et al.: Reduction of vertebral fracture risk in
deformity in postmenopausal women. J Bone Miner Res 1993; postmenopausal women with osteoporosis treated with
8: 353. raloxifene. Results from a 3-year randomized clinical trial. JAMA
11. BLACK, DM, et al.: Randomized trial of effect of alendronate 1999; 282: 637-689.
of risk on fracture in women with existing vertebral fractures. 23. FAN, B, et al.: Precision assessment: ultrasonic velocity
Lancet 1996; 348: 1535-1541. measurement of the mid-tibia versus other techniques. J Bone
12. CASEZ, J P, et al.: Bone mineral density at distal tibia using Miner Res 1995; 10 (suppl): 1.
dual-energy X- ray absorptiometry in normal women and in 24. FOLDES,A J, et al.: Ultrasonic measurement of the tibia: initial
patients with vertebral osteoporosis or primary evaluation of a novel approach. Proc. 4th Bath Conference on
hyperparathyroidism. J Bone Miner Res 1994; 12: 1851- 1855. Osteoporosis and Bone Mineral Measurement. Bath June 1994.
Osteosonometría 197
67. MCCLOSEY, E V, et al.: Assessment of broadband ultrasound 90. ROSS, P, et al.: Predicting vertebral deformity using bone
attenuation in the os calcis in vitro. Clin Sci 1990; 78: 221-225. densitometry at various skeletal sites and calcaneus ultrasound.
68. MILLER,GC, et al.: Ultrasonic velocity measurement through Bone March 1995; 16(3): 325-332.
the calcaneus: which velocity should be measured Osteoporos 91. Royal College of Physicians. Osteporosis. Clinical guidelines
Int 1993; 3. for prevention and treatment 1999 Publications Unit of Royal
69. MILLER, PD, et al.: Cyclical etidronate in the treatment of College of Physicians. London. UK.
postmenopausal osteoporosis: Efficacy and safety after seven 92. RYAN, P J, et al.: Postmenopausal vertebral osteoporosis: can
years of treatment. Am J Med 1997; 103: 468-476. dual energy X-ray absorptiometry forearm bone density subtitute
70. MORIS,M, et al.: Quantitative ultrasound bone measurements: for axial measurement? Br J Rheumatol 1994; 33: 546-549.
normal values and comparison with bone mineral density by 93. SARTORIS, D J: Clinical value of bone densitometry, AJR Am
dual x-ray absorptiometry. Calcif Tissue Int 1995; 57:6 – 10. J Roentgenol 1994; 163: 133-135.
71. MORITA, R, et al.: Quantitative Ultrasound for the Assessment 94. Scientific Advisory Board. Osteoporosis Society of Canada.
of Bone Status. Osteoporos. Int 1997: 7(suppL 3): 75.128-134. Clinical practice guidelines for the diagnosis and management
72. National Osteoporosis Fundation. Osteoporosis: Review of the of osteoporosis. Can Med Assoc J 1996; 155:1113-1129.
evidence for prevention, diagnosis, and treatment and cost- 95. SCHOTT, A M, et al.: Ultrasound measurement on os calcis:
effectiveness analysis. Osteopor Int 1998; (Supl 4): 51-58. precision and age-related changes in a normal female population.
73. NIH Consensus Conference. Optimal calcium intake. JAMA Osteoporos Int 1993; 3: 249-254.
1994; 272:1942-1948. 96. SEEMAN, E, et al.: Rapid and sustained effect of risedronate in
74. NORDIN, B E C, et al.: Relative contributions of years since reducing hip fracture risk in elderly women with osteoporosis. J
menopause, age and weigth to vertebral density in Bone Miner Res 2000; 15:s149.
postmenopausal women. J. Clin. Endocrinol Metab 992; 74: 97. SILVERMAN, SL: The clinical consequences of vertebral
20-23. compression fracture. Bone 1992; 13 (Sppl 2):27-31.
75. NOTTESTAD, Sh, et al.: The proportion of trabecular bone in 98. SMITH-BINDMAN, R, et al.: A comparison of morphometric
human vertebrae. J Bone Miner Res 1987; 2: 221-229 definitions of vertebral fracture. J Bone Miner Res 1991; 6:25-
76. OLMOS, JM, et al.: Incidencia de fractura de cadera en Cantabria. 34.
Med Clin (Barc) 1992; 99: 729-31. 99. SNOW-HARTER C M: Bone health and prevention of
77. O’NEILL, TW, et al.: The prevalence of vertebral deformity in osteoporosis in active and athletic women. Clin. Sports Med.
european men and women: The European Vertebral Osteoporosis 1994; 13: 389-404.
Study. J Bone Miner Res 1996; 11:1010-18. 100. SPADARO, J A, et al.: The contribution of cortical bone to
78. ORGEE, J, et al.: Tibial ultrasound velocity - a useful clinical osteopenic distal radius strength. 38th Ann. Meeting Orthp Res
measure of skeletal status. J Bone Miner Res 1994; 9(suppl. 1). Soc. Washington Febr 1992; 17-20.
79. ORGEE, J, et al.: Skeletal status of elderly women with and 101. STEGMAN,MR M R, et al.: Cortical ultrasound velocity as an
without vertebral deformity. J. Bone Miner. Re 1995; 10 (supp. indicator of bone Osteporos Int. 1995; 5: 349-353.
1). 102. TUPPURAINEN, M, et al.: Osteoporosis risk factors,
80. ORGEE, J, et al.: A precise method for the assessmet of tibial gynaecological history and fractures in perimenopausal women-
ultrasound velocity. Osteoporos Int 1996; 6: 1-7. the results of the baseline postal enquiry of the Kuopio
81. ORWOLL, E, et al.: Alendronate for the treatment of osteoporosis Osteoporosis Risk Factor and Prevention Study. Maturitas 1993;
in men. N Engl J Med 2000; 343:604-610. 17: 89-100.
82. PARFITT, A M: Trabecular bone architecture in the pathogenesis 103. TURNER, C H and M EICH: Ultrasonic velocity as predictor of
and prevention of fracture. Am J Med 1987; 82: 68-72. strenght in bovine cancellous bone. Calcif Tissue Int 1991; 49:
83. PERIS, P, et al.: Evolución de la masa ósea en pacientes con 116-119.
osteoporosis idiopática del varón asociada a hipercalciuria tra- 104. VESTERBY, A, et al.: Biologically meaningful determinants of
tados con tiazidas o etidronato. REEMO 2000; 9:59. the in vitro strenght of lumbar vertebrae. Bone 1991; 12: 219-
84. PERIS, P: Densitometría ósea 2000. Med Clin (Barc) 2000; 224.
114:540-2. 105. VESTERBY, A, et al.: Cortical bone: a major determinant for
85. POLS, HAP, et al.: Multinational placebo-controlled, randomized fracture risk in vertebral osteoporosis. J Bone Miner Res 1991;
trial of the effects of alendronate on bone density and fracture 6 (suppl): 274.
risk in postmenopausal women with low bone mass: Results of 106. VESTERBY, A, et al.: Cortical bone on iliac crest on patients
the FOSIT study. Osteoporos Int 1999; 9:461-468. with vertebral fracture osteoporosis. Calcif Tissue Int 1992; 50
86. PRINS,H S, et al.: The role of quantitative ultrasound in the (suppl 1): 21.
assessment of bone: a review. Clinical Physiology 1998; 18(1): 107. WEHRLI, FW, et al.: Chemical shift induced amplitude
3-17. modulations in images obtained with gradient refocusing. Magn
87. RESCH, H, et al.: Broadband ultrasound attenuation: a new Reson Imaging 3 157. 1987
diagnostic method in osteoporosis. Am J Roentgenol 1990; 108. WILSON, Al, et al.: Transient osteoporosis: transient bone
155: 825-628. marrow edema? Radiology 167:757, l988.
88. RHO, J H, et al.: Young´s modulus of trabecular and cortical 109. YU, W, et al.: Spinal bone mineral assessment in postmenopausal
bone material: ultrasonic and microtensile measurement, J women a comparison between dual x-ray absorptiometry and
Biomech 1993; 26: 111-119. quantitative computed tomography. Osteoporos Int 1995, 5:433-
89. ROCKOFF, S D, et al.: The relative contribution of trabecular 439.
and cortical bone to the strength of human lumbar vertebrae. 110. ZAGZEBSKY, J A, et al.: Ultrasound transmission measurements
Calcif. Tissue Res. 1969; 3: 163-175. through the os calcis. Calcif Tissue Int 1991; 49: 107-111.
BIBLIOGRAFÍA
1. EYERMAN, K: Técnicas de masaje. Ed. Urano, Barcelona 1988. 8. KOHLRAUSCH, W: Masaje muscular de las zonas reflejas. Ed.
2. FABRICIUS,P: Comunicación verbal. La Habana 1987. Toray-Masson. Barcelona, 1968.
3. FERRANDIZ, VL: Quiromasaje. Ed. Cedel, Barceliona 1989. 9. RUFFIER, JE: Tratado práctico de quiromasaje. Ed. Serveti.
4. GLANDlMAN, G: El masaje en el deporte. Ed. Sintes. Barcelona. 1978. Barcelona 1981.
5. HEAD, H: Trastornos sensitivos de la piel en casos de enferme- 10. TEECUARDEN, L: El masaje Japonés. Barcelona 1982.
dades viscerales. Berlín, 1998. 11. THOMAS, B: Masaje. Guía práctica. Ed. Folio. 1989.
6. INKELES, C: El nuevo masaje. Ed. Urano Barcelona. 1985. 12. VÁZQUEZ, J: El masaje terapéutico. Madrid 1985.
7. KELLGREN,, A: A propósito de la técnica del tratamiento ma- 13. WEST, O: Guía práctica de masaje, Barcelona, 1985.
nual checo. Berlin 1985.
Ilustraciones 209
Fig.2.3 a Colección Fig.2.3 b Calcificación
Fig.3 a Vista anatómica de la región anterior del muslo con el Fig.3 b Estudio ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
Fig.3 c Vista anatómica de la región anterior del muslo con el Fig.3 d Estudio ecográfico en CT de esa región.
transductor en corte transversal.
MÚSCULO NORMAL
Fig.3.1 c CT en SieScape del tríceps sural. Fig.3.1 d CT en SieScape del tríceps sural.
Ilustraciones 211
Fig.3.2 CT en SieScape del cuádriceps. Fig.3.3 CT del recto interno y del aductor mayor.
TRAUMA MUSCULAR
Fig.3.4 a CT en un desgarro parcial del cuadríceps. Fig.3.4 b CT (vista compuesta) que muestra un desgarro parcial
del cuadríceps.
Fig.3.4 c CT en SieScape. Desgarro parcial del cuadríceps. Fig.3.4 d CT en SieScape que muestra un desgarro parcial del
cuadríceps (SieScape CT).
Fig.3.4 g CT en SieScape. Desgarro parcial del cuádriceps. Fig.3.4 h CL en 3D de un desgarro parcial del cuádriceps.
Fig.3.5 CT en SieScape. Desgarro parcial del gastrocnemio. Fig.3.6 CT en un desgarro parcial del recto interno.
Ilustraciones 213
Fig.3.7 a CL en un desgarro parcial del pectoral mayor. Fig.3.7 b CL en SieScape. Desgarro parcial del pectoral mayor.
Fig.3.7 c CL en SieScape de un desgarro parcial del pectoral Fig.3.7 d CT en 3D. Desgarro parcial del pectoral mayor del mis-
mayor. La flecha señala las fibras musculares retraídas. mo paciente.
Fig.3.7 e CL en SieScape. Desgarro parcial del pectoral mayor. Fig.3.7 f CL en 3D de un desgarro parcial del pectoral mayor.
Fig.3.8 a CT en un paciente con ruptura casi total del oblicuo Fig.3.8 b CT del paciente anterior.
interno del abdomen.
Fig.3.9 a CL que muestra un pequeño dergarro parcial del recto Fig.3.9 b Cl en SieScape del paciente anterior.
abdominal anterior.
Ilustraciones 215
Fig.3.9 c CL. Ruptura casi total del recto abdominal anterior. Fig.3.9 d CL en SieScape en que se observa mejor la ruptura
muscular del recto anterior.
Fig.3.9 e Otra vista en SieScape del mismo caso. Fig.3.9 f Vista en 3D del mismo paciente.
Fig.3.10 a CT en SieScape. Desgarro parcial del gastrocnemio. Fig.3.10 b CL en SieScape del mismo caso.
Fig.3.12 a CT en SieScape. Desgarro parcial con gran hematoma Fig.3.12 b CL en SieScape. El mismo caso de la figura anterior.
del gastrocnemio.
Fig.3.13 a CL en SieScape. Ruptura total del recto anterior del Fig.3.13 b Otra vista en SieScape del mismo caso.
cuádriceps.
Ilustraciones 217
Fig.3.13 c CT en SieScape del caso anterior, donde se ve la au- Fig.3.13 d CT en SieScape, por encima del corte anterior, donde
sencia del recto anterior. se observa el cabo proximal del recto anterior roto.
Fig.3.14 a CT. Se ve el pectoral mayor normal. Fig.3.14 b CT que muestra la ruptura casi total del pectoral ma-
yor a nivel del borde axilar.
Fig.3.14 c CL del caso anterior donde se demuestra el origen de Fig.3.14 d CL donde se ve aún mejor la lesión del pectoral mayor.
la ruptura.
COLECCIONES EXTRAMUSCULARES
Fig.3.15 a CL. Colección intermuscular en la pantorrilla. Fig.3.15 b CL en SieScape del caso anterior, en que se puede
determinar la extensión de la colección.
Fig.3.15 c Otra vista en SieScape del mismo paciente. Fig.3.15 d CT en SieScape que muestra la relación de la colec-
ción hemática con las estructuras vecinas.
Ilustraciones 219
Fig.3.16 a CL. Colección extramuscular en la pantorrilla, que Fig.3.16 b CL en SieScape del mismo caso en que se dibuja todo
comunica con la piel a través de un trayecto fistuloso. el trayecto fistuloso.
Fig.3.17 a CL. Colección intramuscular postraumática. Fig.3.17 b CL en SieScape del caso anterior.
Fig.3.18 a CL en SieScape que muestra un quiste intramuscular Fig.3.18 b CT en SieScape del mismo caso en que se visualiza
postraumático. mejor el quiste.
Fig.3.19 c CT con transductor de 5 MHz que muestra una miositis Fig.3.19 d vista en 3D del caso anterior.
osificante.
Fig.3.20 a CT. Miositis osificante del cuádriceps. Fig.3.20 b CT. Miositis osificante del cuádriceps.
Ilustraciones 221
Fig.3.20 c CT en SieScape del caso anterior. Fig.3.20 d CL en SieScapedel mismo caso. Miositis osificante.
Fig.3.21 a CL fase inicial de una miositis osificante del cuádriceps. Fig.3.21 b CT en SieScape del caso anterior.
Fig.3.21 c CL en SieScape de una miositis osificante del Fig.3.21 d Vista en 3D del caso anterior. Miositis osificante.
cuádriceps.
Fig.3.22 a CL que muestra inversión de la ecoestructura muscu- Fig.3.22 b CL en SieScape del caso anterior.
lar normal.
Fig.3.22 c CT que muestra inversión de la ecoestructura muscu- Fig.3.22 d Vista de acercamiento del caso anterior. Miositis.
lar normal.
Fig.3.22 e CL en una miositis. Desorganización de la ecoestructura Fig.3.22 f CL en una miositis. Inversión de la ecoestructura mus-
muscular normal. cular.
Ilustraciones 223
Fig.3.23 a CL se aprecian 2 colecciones intramusculares. Absce- Fig.3.23 b CL. Vista magnificada de uno de los abscesos, con grue-
so de la región glútea. sos tabiques dentro de la cavidad.
Fig.3.24 a CT del bíceps braquial con una gruesa colección a su Fig.3.24 b Vista de magnificación del caso anterior. Polimiositis.
nivel.
Fig.3.25 a CT. Gruesa calcificación del cuádriceps en una miositis Fig.3.25 b CL en SieScape del caso anterior en que se ven las
osificante. calcificaciones (flecha).
SÍNDROME COMPARTIMENTAL
Fig.3.26 a SC en SieScape que muestra un aumento de volumen Fig.3.26 b CL en SieScape del caso anterior en que se aprecia
del sóleo y disminución focal de su ecogenicidad . mejor las alteraciones descritas.
Fig.3.26 c CT en SieScape del mismo paciente en que se mues- Fig.3.26 d CT en SieScape vecino al anterior con inversión de la
tran mejor las alteraciones que caracterizan a este sín- ecogenicidad muscular por síndrome compartimental.
drome.
Ilustraciones 225
Fig.3.27 CL comparativo, donde se observa un síndrome compartimental del músculo tibial anterior izquierdo (septum fibroadiposos
hiperecoicos y engrosamiento del músculo).
Fig.3.28 CL donde se observa un síndrome compartimental del gemelo medial caracterizado por engrosamiento de la membrana
musculoaponeurótica (x).
Fig.4.c Estudio ecográfico en CL de esa región posterior del tobi- Fig.4.d Estudio ecográfico en CL y con técnica de extendido de la
llo donde se visualiza (entre flechas) la inserción región posterior del tobillo donde se visualiza (entre fle-
fibrocartilaginosa del tendón de Aquiles. chas) todo el tendón de Aquiles y su inserción
fibrocartilaginosa.
ASPECTO NORMAL
Fig.4.1 a CT de la región anterior del hombro donde se ve al Fig.4.1 b Vista en SieScape del mismo paciente donde se abarca
tendón del SE, hipoecoico, que se inserta en el troquin. una mayor extensión de las estructuras anatómicas
músculotendinosas del hombro.
Ilustraciones 227
Fig.4.2 a CT posteroexterno del hombro donde se ve al tendón Fig.4.2 b Vista en SieScape del mismo paciente donde se visualiza
del Se, hipoecoico, de forma triangular. el tendón insertándose en el troquiter.
Fig.4.3 a CT posteroinferior del hombro donde se visualizan a los Fig.4.3 b Vista en SieScape del mismo paciente donde se ven aún
tendones del Ie y Rm, los que se insertan en el troquiter. mejor estas estructuras.
Fig.4.4 a CL de la región anterior del hombro donde se ve al Fig.4.4 b Vista en SieScape donde se aprecia la unión
tendón de la PLB, con un aspecto fibrilar y rodeado de musculotendinosa de la PLB.
una línea ecogénica que corresponde con su vaina sinovial
(flecha).
Fig.4.7 a CL del tendón patelar. Véase su aspecto fibrilar normal. Fig.4.7 b Vista en SieScape del mismo paciente donde se visualiza
al tendón patelar en toda su extensión.
Fig.4.8 a CT a nivel de la cara lateral del tobillo. Se observan Fig.4.8 b CL del mismo paciente con estudio de la cara medial
ambos tendones peroneos (T) como sendos nódulos del tobillo donde se define al tendón del flexor propio
ecogénicos, rodeados de un fino halo de baja ecogenicidad del 1er. dedo. Nótese su aspecto fibrilar normal.
que corresponde con líquido sinovial.
Ilustraciones 229
TENDINOPATÍAS INFLAMATORIAS
Fig.4.9 a CT a nivel del canal carpiano donde se observan todos Fig.4.9 b CC en 3D del mismo paciente en que se seleccionaron 2 de
los tendones que cursan por este canal rodeados de lí- los tendones donde se demuestra, aún mejor, las lesiones.
quido sinovial.
Fig.4.10 a CT en SieScape en la cara palmar de la mano que Fig.4.10 b CL en 3D del mismo paciente a nivel del 4to. dedo don-
muestra signos de tenosinovitis del flexor profundo del de se demuestra, aún mejor, lo anteriormente descrito.
4to. dedo.
Fig.4.11 a CT a nivel del canal carpiano donde se demuestra la Fig.4.11 b CL en SieScape del mismo paciente donde se define a uno
presencia de moderados signos de tenosinovitis. de estos tendones. Nótese que se visualiza la distensión de
la vaina con material ecogénico en su interior (flecha).
Fig.4.13 a CL a nivel de la cara dorsal del 3er. dedo de la mano Fig.4.13 b CT distal a la articulación MCF del 3er. dedo de la
derecha. Tenosinovitis. mano derecha del caso anterior.
Fig.4.13 c Doppler color del caso anterior. Fig.4.13 d Doppler color del mismo paciente.
Ilustraciones 231
Fig.4.14 a CL a nivel de la cara lateral del codo donde se observa Fig.4.14 b CL en SieScape del mismo paciente donde se logra defi-
un engrosamiento en la inserción de los tendones nir mejor al tendón engrosado y ecogénico, con gruesa
epitrocleares (T), con aumento de su ecogenicidad. calcificación.
Fig.4.14.c Otra vista en SieScape del mismo paciente. Fig.4.14 d CL en 3D del paciente anterior, donde se demuestra
aún mejor todo lo descrito.
Fig.4.15 a CL a nivel de la cara lateral del codo donde se observa Fig.4.15 b CL en SieScape del mismo paciente donde, además de
engrosamiento y ecogenicidad mixta del tendón común todo lo descrito, se demuestra la presencia de una calci-
de los extensores del carpo (T) por proceso inflamatorio ficación en proyección de la inserción tendinosa (flechas).
crónico agudizado.
Fig.4.17 a CT de la región anterior del hombro donde se demues- Fig.4.17 b CT en SieScape del mismo paciente donde además se
tra la distensión de la vaina del tendón de la PLB. pone de manifiesto toda la relación anatómica del ten-
dón de la PLB con las estructuras vecinas.
Fig.4.18 a CT de la región anterior del hombro con signos de Fig.4.18 b CC en 3D del mismo paciente donde se demuestra la
tenosinovitis de la PLB. distensión de la vaina sinovial, con engrosamiento de sus
paredes (flechas) .
Ilustraciones 233
Fig.4.19 a CT selectivo de la PLB a nivel de la región antero- Fig.4.19 b CL del paciente anterior donde se corrobora lo ante-
superior del brazo. Se definen signos importantes de riormente descrito.
tenosinovitis crónica con engrosamiento de las paredes
de la bursa(x).
Fig.4.20 a CT en la región anterior del hombro. Tenosinovitis Fig.4.20 b CT en la región anterior del hombro. Tenosinovitis
crónica (flecha) de la PLB. crónica de la PLB, La flecha señala la gran prolifera-
ción sinovial.
Fig.4.21 a CT a nivel de la región anterior del hombro que mues- Fig.4.21 b CT en SieScape del mismo paciente donde se ve aún
tra moderado engrosamiento del tendón de la PLB y mejor lo descrito anteriormente.
distensión de su vaina con abundante material espeso
en su interior.
Fig.4.23 a CL infrapatelar donde se ve al tendón patelar difusa- Fig.4.23 b CL en SieScape del mismo paciente donde se observa
mente engrosado, a predominio de su mitad proximal, al tendón patelar en toda su longitud, así como un área
con disminución de su ecogenicidad. de fibrosis próximo al origen del mismo (flecha)..
Ilustraciones 235
Fig.4.25 a CL de la cara medial del tobillo donde se definen sig- Fig.4.25 b CL en SieScape del mismo paciente donde se ve aún
nos de tenosinovitis del tendón del tibial posterior. mejor lo descrito anteriormente.
Fig.4.26 a CT de la cara lateral del tobillo donde se visualizan Fig.4.26 b CL del mismo paciente donde se evidencia mejor lo
ambos tendones peroneos engrosados y con distensión descrito anteriormente en el tendón del peroneo largo.
de su vaina sinovial.
TENDINOPATÍAS DEGENERATIVAS
Fig.4.27 a CL de la cara palmar del 4to. dedo de la mano con Fig.4.27 b CL en SieScape donde se ve aún mejor lo descrito an-
signos de una tenosinovitis crónica del flexor profundo, teriormente. La flecha señala la distensión crónica de la
con gran distensión de su vaina sinovial y abundante vaina sinovial.
contenido de material sólido.
Fig.4.30 a CT posteroexterno del hombro con pobre definición Fig.4.30 b CT posteroinferior del mismo paciente, con alteracio-
del tendón del Se, que se muestra muy ecogénico y con nes similares en el tendón del Rm, el que muestra una
presencia de 2 gruesas calcificaciones (flechas). gruesa calcificación en su inserción (flecha).
Fig.4.31 a CL a nivel de la cara lateral de la cadera donde se Fig.4.31 b CL del mismo paciente donde se observan aún mejor
observa engrosamiento con alteración de la ecogenicidad las lesiones.
del tendón del glúteo medio (flechas).
Ilustraciones 237
Fig.4.32 a CL suprapatelar donde se observa la presencia de un Fig.4.32 b CL en 3D del mismo paciente donde se definen aún
área ecogénica en la inserción del cuadríceps sugestiva mejor las alteraciones del tendón del cuadríceps ya des-
de una zona de fibrosis (flecha). critas.
Fig.4.33 a CL a nivel del borde posterior del tobillo donde se Fig.4.33 b Otro CL del mismo paciente, en que se define mejor la
observa engrosamiento del tendón de Aquiles por pre- lesión xantomatosa.
sencia de xantomas.
RUPTURAS TENDINOSAS
Fig.4.34 a CL en la cara dorsal, del metacarpo donde se aprecia Fig.4.34 b CL a nivel metacarpiano algo más proximal que el
engrosamiento del tendón extensor del 1er. dedo, con anterior, demostrándose ausencia del tendón en el inte-
retracción de sus haces por sección traumática. La vai- rior de su vaina.
na sinovial está distendida con presencia de material
ecogénico en su interior.
Fig.4.34 e CT del 1er. metacarpiano del mismo paciente donde Fig.4.34 f CL en 3D donde se ve mejor la ruptura tendinosa total
hay ausencia del tendón del flexor propio de este dedo y la vaina distendida con abundante material espeso en
en el interior de su vaina. su interior.
Fig.4.35 a CT a distintos niveles del tendón del flexor cubital del Fig.4.35 b CL en SieScape del mismo paciente donde se com-
carpo. En los cortes 1 y 2 se ve al tendón en el interior de prueba la ruptura total del tendón antes descrita (fle-
su vaina; en el corte 3 el tendón está ausente y en el cha).
corte 4 se observa el cabo distal retraído, por una rup-
tura total.
Ilustraciones 239
Fig.4.36 a CL a nivel de la cara lateral del codo donde se obser- Fig.4.36 b CL en SieScape del mismo paciente observándose al
van signos de desgarro parcial en el origen del tendón tendón en toda su longitud.
común del extensor del carpo.
Fig.4.37 a CL de la cara lateral del codo. Se observa desinserción Fig.4.37 b Otra vista similar a la anterior del mismo paciente.
humeral del tendón común de los extensores del carpo. Nótese la presencia de colección líquida (sangre) aso-
ciada a la retracción tendinosa (flechas).
Fig.4.38 a CT comparativo de la región anterior de ambos hom- Fig.4.38 b CL del mismo paciente donde se observa material
bros observándose la ausencia del tendón de la PLB del ecogénico dentro de la corredera, posiblemente en rela-
interior de la corredera bicipital en la imagen de la de- ción con la presencia de sangre o tejido de granulación,
recha por ruptura completa del tendón. El lado opuesto sin que se observe al tendón de la PLB.
es normal.
Fig.4.39 c CT en SieScape de la región posteroexterna del hom- Fig.4.39 d CT en 3D del mismo paciente donde se ven mejor las
bro. Nótese el aplanamiento del borde superficial del lesiones antiguas (intrasustancia) del tendón del Se (fle-
tendón del Se, por desgarro parcial antiguo. El tendón chas).
muestra áreas ecogénicas en su interior.
Fig.4.40 a CL de la región infrapatelar con signos de ruptura Fig.4.40 b CL en SieScape del mismo caso donde, además, se
parcial del tendón patelar y presencia de una colección visualiza al tendón en toda su longitud.
líquida vecina (flechas).
Ilustraciones 241
Fig.4.41 a CL suprapatelar donde se observa ruptura total del Fig.4.41 b CL en SieScape del mismo caso donde de ve aún mejor
tendón del cuadríceps. Hay distensión de la bursa lo descrito anteriormente (flechas).
suprapatelar con múltiples tabiques internos (flechas).
Fig.4.42 a CL en SieScape suprapatelar con signos de ruptura Fig.4.42 b CL en SieScape de la región infrapatelar del mismo
total del tendón del cuadríceps. paciente donde se demuestra el arrollamiento del ten-
dón patelar por ruptura del tendón cuadricipital.
Fig.4.43 a CT infrapatelar donde se demuestra la presencia de Fig.4.43 b CL del mismo paciente donde se demuestra lo descrito
un área hipoecoica en relación con una colección por anteriormente.
ruptura parcial del tendón patelar.
Fig.4.44 a CL a nivel de la región dorsal del 5to. dedo del pie Fig.4.44 b CL en SieScape del mismo paciente donde se demues-
donde se observa ruptura y retracción hacia arriba del tra todo lo anteriormente descrito (flecha).
tendón extensor profundo, asociado a una colección lí-
quida por delante.
Fig.4.45 a CL del tendón de Aquiles, donde se ve engrosamiento Fig.4.45 b CL en SieScape del mismo paciente donde hay una
marcado del mismo con gruesas calcificaciones mejor visualización de la lesión.
intrasustancia.
Ilustraciones 243
Fig.5 a Vista anatómica de la región medial de la rodilla con el Fig.5 b Estudio ecográfico en CL de esa región donde se visualiza
transductor en corte longitudinal. el complejo cápsulo ligamentoso medial (*).
ASPECTO NORMAL
Fig.5.1 CT a nivel de la región anterior del hombro donde se Fig.5.2 CL a nivel de la cara lateral de la rodilla donde se ve el
visualiza el ligamento humeral transverso a nivel de la ligamento colateral peroneo.
corredera bicipital.
Fig.5.3 a CT a nivel del carpo donde se ve el ligamento transverso Fig.5.3 b CT a nivel del canal de Guyon donde se observa el liga-
normal (flecha). mento transverso de aspecto normal (+).
Fig.5.4 a CL en el hombro donde se observa un engrosamiento Fig.5.4 b Otra vista del mismo paciente donde se ve mejor el
del ligamento coracoacromial asociado con distensión de ligamento engrosado (flechas).
la bursa subacromial. Hombro de choque.
Fig.5.5 a CL a nivel de la cara lateral de la rodilla donde se ve el Fig.5.5 b CL del retináculo lateral de la rodilla donde se observa
ligamento colateral con un área hipoecoica en su inser- un área hipoecoica cercana a la patela por desgarro par-
ción distal, por desgarro (flecha). cial (flechas).
Fig.5.5 c Vista en SieScape del paciente anterior donde se ve aún Fig.5.5 d Vista en 3D del mismo paciente en que se demuestra
mejor la lesión del retináculo (flecha) y su relación con distensión de la bursa y ruptura del retináculo (flechas).
la bursa suprapatelar distendida.
Ilustraciones 245
Fig.5.6 CL del retináculo medial de la rótula donde se observa Fig.5.7 CL del ligamento colateral peroneo con ruptura parcial
retracción del mismo por ruptura total (flechas). de sus haces en su porción distal (flechas).
Fig.5.8 a CT en que se aprecia engrosamiento del complejo Fig.5.8 b CL en SieScape del caso anterior. Ruptura parcial cáp-
capsuloligamentoso medial de la rodilla (flechas). sula-ligamentosa.
Fig.5.9 a CL del ligamento colateral medial de la rodilla donde se Fig.5.9 b Vista en SieScape del mismo paciente en que se ve aún
observa una calcificación en su origen (flechas) por le- mejor la lesión crónica calcificada (flechas).
sión crónica del mismo.
Fig.5.11 a CL. Ruptura del ligamento peroneoastragalino ante- Fig.5.11 b Otra vista en CL del mismo caso en que se visualiza
rior, con una gruesa calcificación. mejor la calcificación (flecha) del ligamento peroneo-
astragalino anterior.
Fig.5.12 a CL Ruptura parcial (flecha) del ligamento peroneo- Fig.5.12 b CT Ruptura total del ligamento peroneo-astragalino
astragalino anterior con un hematoma. anterior con un arrancamiento óseo (flecha) y hemato-
ma asociado (+).
Ilustraciones 247
Fig.5.13 CL Estudio comparativo. Distensión del ligamento peroneoastragalino anterior derecho. El lado izquierdo es normal.
Fig.6. a Vista anatómica de la región posterior del muslo con el Fig.6.b Estudio ecográfico en CL de esa región donde se visualiza
transductor en corte longitudinal. (entre flechas) al nervio ciático.
ASPECTO NORMAL
Fig.6.1 a CT a nivel del canal de Guyon donde se ve al nervio Fig.6.2 a CL del nervio ciático. Nótese su aspecto fibrilar nor-
cubital (+) inmediatamente por detrás del ligamento mal.
transverso en íntimo contacto con la arteria del mismo
nombre (flecha).
LESIONES INFLAMATORIAS
Fig.6.3 a CL del carpo donde se ve al nervio mediano con pérdida Fig.6.3 b Otra vista en CL del mismo caso (flecha).
de su ecoestructura normal y contornos mal definidos (+).
Fig.6. 4 a CL a nivel de la cara palmar del carpo. Nervio media- Fig.6.4 b CL a nivel de la cara palmar del lado contralateral.
no normal. Aplanamiento del nervio mediano por engrosamiento del
ligamento transverso.
Ilustraciones 249
ATRAPAMIENTO NERVIOSO
Fig.6.5 a CT a nivel del carpo donde se ve el engrosamiento del Fig.6.5 b CT por encima del canal del carpo donde se ve al nervio
ligamento transverso (flecha) y la deformidad que le mediano (flecha) englobado parcialmente por una masa
produce al nervio mediano. hipoecoica en relación con tejido de granulación.
Fig.6.5 c Otra vista transversal del paciente anterior. Fig.6.5 d Fig.6. Vista en SieScape del mismo paciente.
Fig.6.5 e CL por encima del canal carpiano donde se ve al nervio Fig.6.5 f Vista en SieScape del mismo paciente.
mediano mal definido y englobado por un área hipoecoica
(flechas).
TUMORES
Fig.6.7 a CL a nivel de la región posterior y tercio distal de la Fig.6.7 b CL en SieScape del mismo caso.
pierna. Neuroma del tibial posterior.
Fig.6.8 a CL a nivel del borde medial del pie donde se ve una Fig.6.8 b Otra vista en CL del mismo caso.
lesión nodular hipoecoica en proyección del nervio plan-
tar medial.
Ilustraciones 251
Fig.6.8 c CL en SieScape del paciente anterior. Neuroma plantar.
HOMBRO NORMAL
Fig.7.1 a.CT de la región anterior del hombro. Se ve al tendón Fig.7.1 b CT de la región posterolateral del hombro, con visuali-
del SE. zación del tendón del Se.
Fig.7.1 c Otra vista del caso anterior donde se ve la bursa Fig.7.1 d CT por debajo del anterior en que se ven los tendones
subacromial (flecha). del Ie y Rm.
Fig.7.2 a CL en la cara radial del codo, donde se define al hueso Fig.7.2 b Otro CL del mismo paciente en la cara radial del codo
subcondral de los extremos óseos de la articulación e en que se define mejor el bíceps braquial.
inmediatamente por delante de los mismos una fina ban-
da hipoecoica que corresponde al cartílago articular.
Entre el cartílago y el bíceps braquial se ve al tendón
epicodíleo, de mayor ecogenicidad.
Fig.7.2 c CT a nivel de la fosa olecraneana del codo donde se Fig.7.2 d CT en la región anterior del codo donde se ven las es-
define al cartílago articular como una fina banda tructuras musculares de la región y al cartílago articu-
hipoecoica vecina al hueso subcondral. lar.
Fig.7.2 e CL en SieScape en la cara cubital de la articulación Fig.7.2 f CL en SieScape en la cara radial del codo, donde se ven
donde se visualizan los músculos pronador redondo a los músculos braquiorradial, bíceps braquial, así como
braquial anterior, así como a la cortical de las extremi- a la cortical de los huesos que forman la articulación.
dades óseas de la articulación.
Ilustraciones 253
MANO Y MUÑECA NORNALES
Fig.7.3 a CT a nivel del canal carpiano donde se define el liga- Fig.7.3 b Otra vista similar del mismo paciente.
mento transverso (flechas) y por detrás algunos de los
flexores del carpo.
Fig.7.3 c CL a nivel del canal carpiano donde se define el nervio Fig.7.3 d CL más proximal, del mismo paciente.
mediano.
Fig.7.3 e CT a nivel del canal de Guyon donde se observan el Fig.7.3 f CT a nivel del canal de Guyon donde se observa el ner-
nervio y la arteria cubital (flechas) vio cubital (flecha), por detrás del retináculo flexor (+).
CADERA NORMAL
Fig.7.4 a CL en región anterior de la cadera de un niño donde se Fig.7.4 b CL en la cadera de un adulto donde se ve el cartílago y
ve el grueso cartílago y la línea de crecimiento. la ecogenicidad de la cortical vecina.
Fig.7.4 c CL del mismo paciente donde se ve la porción anterior Fig.7.4 d CT del mismo caso, para visualizar el labrum (flecha).
del labrum acetabular (flecha).
Ilustraciones 255
RODILLA NORMAL
Fig.7.5 a CL en la región anterior de la rodilla de un niño donde Fig.7.5 b CL de la región suprapatelar de un adulto, donde se ve
se ve la patela y sus tendones vecinos y por detrás la la inserción del cuadríceps y por detrás la grasa de la
tróclea femoral con su cartílago. región.
Fig.7.5 c CL infrapatelar en que se observa al tendón patelar y Fig.7.5 d CT de la región infrapatelar en que se visualiza al car-
por detrás a la grasa de Hoffa. tílago intercondíleo.
Fig.7.5 e CL en SieScape del tendón patelar del mismo caso que Fig.7.5 f CL en SieScape del mismo paciente, pero estudiando la
se visualiza en toda su extensión. rodilla opuesta para realizar mediciones comparativas.
Fig.7.6 a CL en SieScape de la región anterior del tobillo, para Fig.7.6 b CT del mismo caso. Se visualizan los tendones del tibial
visualizar al tendón del tibial anterior. anterior y del extensor común de los dedos.
Fig.7.6 c CL en la región anterior del tobillo a nivel de uno de los Fig.7.6 d CT a nivel de la región anterior del tobillo para visualizar
tendones extensores. los tendones extensores del pie.
Fig.7.6 e CT en la región anterior del tobillo. Otra vista de los Fig.7.6 f CT en SieScape del mismo caso. Se obtiene una visuali-
tendones extensores del pie. zación panorámica de los tendones.
Ilustraciones 257
Fig.7.6 g CL .en la región posterior del tobillo, para el estudio Fig.7.6 h CT del caso anterior, a nivel del tendón de Aquiles.
del tendón de Aquiles.
Fig.7.6 i CL en SieScape del caso anterior a nivel de la unión Fig.7.6 j CL más distal, en SieScape, del caso anterior.
musculotendinosa del Aquiles.
Fig.7.6 k CL en SieScape de la región posterior del tercio distal Fig.7.6 l Otro CL en SieScape del mismo caso en que se visualizan
de la pierna y tobillo para visualizar al músculo tríceps mejor estas estructuras.
sural y su tendón.
A B A B
Fig.7.7 CT suprapatelar en SieScape. Distensión de la bursa (B). Fig.7.8 CL infrapatelar en SieScape. Bursitis prepatelar (B). Es-
Esquema (A). quema (A).
A B
Fig.7.9 CT en SieScape de la región poplítea. Quiste de Baker Fig.7.10 CL comparativos en región aquiliana. Bursitis pre-
(B). Esquema (A). aquiliana bilateral.
Fig.7. 11 a CL de la región pre-patelar. Bursitis gotosa. Fig.7.11 b CL en 3D del mismo caso, en que se visualiza mejor la
bursitis.
Ilustraciones 259
Fig.7.12 a CT en SieScape de la región poplítea. Calcificación en Fig.7.12 b CC en 3D del mismo paciente, en que se visualizan
un quiste de Baker. mejor las calcificaciones (flechas).
Fig.7.14 CL en la región anterior del hombro. Tendinitis crónica Fig.7.15 CT en la región anterior del hombro. Bursitis crónica
de la PLB. Bursitis subdeltoidea crónica. calcificada.
Fig.7.16 CL infrapatelar. Bursitis crónica prepatelar (B). Esque- Fig.7.17 CT suprapatelar en SieScape. Derrame articular y
ma (A). sinovitis crónica (A). Esquema (B).
Fig.7.18 a CT suprapatelar. Bursitis crónica. Fig.7.18 b CL compuesto del mismo caso, donde se ve la prolife-
ración sinovial.
Fig.7.18 c CL en 3D del mismo caso. Fig.7.19 CC en 3D de la cadera. Sinovitis crónica con pro-
liferación sinovial.
Ilustraciones 261
Fig.7.20 a CT en SieScape en la región anterior del hombro. Fig.7.20 b CT en SieScape en la región posterolateral del hom-
Bursitis. bro del mismo paciente. Bursitis.
ALTERACIONES SINOVIALES
Fig.7.21 CL del compartimento medial de la rodilla. Sinovitis Fig.7.22 CT del carpo. Sinovitis.
Fig.7.23 a CL en la cara palmar del carpo. Proliferación sinovial Fig.7.23 b CL en SieScape del mismo caso, con mejor visualiza-
sin derrame articular. ción de la lesión sinovial.
LESIONES CARTILAGINOSAS
Fig.7.26 CL a nivel del compartimento posteromedial de la rodi- Fig.7.27 CL a nivel del compartimento posterolateral de la rodi-
lla. Lesión meniscal. (flechas) lla. Lesión meniscal profunda (flechas).
Fig.7.28 a CL en el compartimento medial de la rodilla donde se Fig.7.28 b CL en SieScape del compartimento medial de la rodi-
sospecha un quiste parameniscal. lla del mismo paciente donde se confirma el quiste
parameniscal.
Ilustraciones 263
Fig.7.29 a CL a nivel de la cara palmar del carpo. Lesión del Fig.7.29 b CL en la cara palmar del carpo, comparativa, del mis-
fibrocartílago triangular (flecha) mo caso.
PLICAS
Fig.7.30 CLO en región infrapatelar. Plica sinovial (flecha) sin Fig.7.31 CLO infrapatelar de ambas rodillas. Gran engrosamiento
signos inflamatorios. de la plica medio-patelar izquierda con afinamiento del
cartílago del CFM.
CARTÍLAGO ÓSEO
Fig.7.32 CT en SieScape en región infrapatelar derecha. Afina- Fig.7.33 CT comparativo en región infrapatelar. Afinamiento del
miento del cartílago articular hacia el cóndilo medial. cartílago articular del cóndilo lateral derecho.
Fig.7.34 a CT en SieScape en región suprapatelar. Presencia de Fig.7.34 b CT en SieScape en región suprapatelar del mismo pa-
cuerpos libres intraarticulares (flechas). ciente (B). Esquema (A).
Fig.7.35 a CT parapatelar medial. Cuerpo libre intraarticular Fig.7.35 b CL suprapatelar del mismo caso. Cuerpos libres
(flecha) intraarticulares.
Fig.7.36 CL en el compartimento medial de la rodilla. Cuerpo Fig.7.37 CL en región suprapatelar. Cuerpos libres
libre intraarticular (flechas) intraarticulares (flechas).
Ilustraciones 265
Fig.7.38 CL en el compartimiento medial de la rodilla. Masa com- Fig.7.39 CL en SieScape en el compartimiento medial de la rodi-
pleja intraarticular. lla. Cuerpo libre intraarticular.
Fig.7.40 CL en SieScape en región infrapatelar. Cuerpos libres Fig.7.41 CL en compartimiento lateral de las rodillas. Masa com-
intraarticulares (flechas) pleja intraarticular.
TUMORES
Fig.7.42 a CT en región infrapatelar. Masa intraarticular. Fig.7.42 b CT en SieScape del mismo caso en que se define mejor
la lesión.
MASAS EXTRAARTICULARES
Fig.7.44 CL en región lumbosacra. Gran masa tumoral que pro- Fig.7.45 CL en la región posterior del brazo. Tumor óseo con
duce invasión a las estructuras óseas vecinas. crecimiento extraóseo e invasión a los planos muscula-
res vecinos (flechas).
Fig.7.46 CL en la cara anterior del hombro. Tenosinovitis cróni- Fig.7.47 CL en región suprapatelar. Calcificaciones en la inser-
ca de la PLB. ción del cuádriceps (flechas).
Ilustraciones 267
Fig.7.48 a CL en la cara dorsal y radial del tercio distal del ante- Fig.7.48 b CL en la cara dorsal y radial del tercio distal del ante-
brazo. Ganglión quístico del extensor propio del pulgar. brazo del mismo caso.
Fig.7.49 a CL en cara palmar del 3er. dedo de la mano. Ganglión Fig.7.49 b CL del mismo caso, en que se visualiza mejor la situa-
quístico articular. ción del ganglión.
Fig.7.49 c CL. Otra vista del caso anterior. Fig.7.50 CL en la cara dorsal del carpo. Ganglión quístico articular.
Fig.7.53 CT en la cara palmar del carpo. Engrosamiento del li- Fig.7.54 CT a nivel de la región superior del hombro.
gamento transverso (flechas). Deshilachamiento del ligamento coracoacromial en su
mital distal (flechas).
Fig.7.55 a CL compuesto del compartimiento medial de la rodi- Fig.7.55 b CL compuesto del mismo caso. Calcificación del ex-
lla. Engrosamiento y desgarro parcial del complejo tremo proximal del complejo capsuloligamentoso.
capsuloligamentoso (flechas).
Ilustraciones 269
LESIONES ÓSEAS
Fig.8.1 a CL a nivel del tercio medio de la tibia. Engrosamiento Fig.8.1 b CT del mismo caso en que se visualiza mejor la zona de
cortical por periostitis en un maratonista (flecha). periostitis (flecha).
Fig.8.3 CL con técnica de SieScape a nivel del tercio inferior de Fig.8.4 CL a nivel de la cara dorsal de la muñeca. Interrupción
la pierna. Solución de continuidad en la superficie en la superficie cortical del escafoides (flecha).
cortical del peroné por fractura (flecha).
Fig.8.5 c CL prepatelar del caso anterior con transductor de 14 Fig.8.5 d CC en 3D de la patela del mismo caso, donde se ve aún
MHz. Se ve aun mejor la fractura (flecha). mejor el área de fractura.
Fig.8.6 CL a nivel de la muñeca. Fractura del tercio distal del Fig.8.7 CL del codo de un niño. Fractura por avulsión del cóndi-
radio, algo desplazada y con escasa colección vecina por lo humeral con escasa colección vecina por hematoma
hematoma fracturario (flecha). fracturario (flecha).
Ilustraciones 271
Fig.8.8 CL a nivel de 1/3 distal del antebrazo. Fractura del radio, Fig.8.9 CL a nivel de la región anterior de la rodilla (meseta tibial).
con cavidad seudoartrósica por retardo en la consolida- Presencia de cuerpos extraños metálicos (flechas dobles)
ción (flecha). por osteosíntesis a este nivel. Las flechas sencillas seña-
lan el artefacto en cola de cometa.
Fig.8.11 CL en la región lateral de la cadera. Gran colección Fig.8.12 CT del cóndilo femoral medial donde se observa des-
celular en íntimo contacto con la superficie cortical del trucción del hueso subcondral y colección celular aso-
coxal, la que se muestra muy irregular. Osteomielitis ciada.
(flechas).
Fig.8.15 a CL en SieScape del muslo. Interrupción de la cortical Fig.8.15 b CL en 3D del mismo caso en que se visualiza aun me-
del fémur con engrosamiento del periostio por metásta- jor la lesión.
sis a este nivel.
Fig.8.16 a CT a nivel del brazo. Hay pérdida de la cortical del Fig.8.16 b CC en 3D del mismo caso, donde se ve la invasión a la
húmero con infiltración en las partes blandas vecinas. médula ósea. Tumor óseo maligno.
Ilustraciones 273
Fig. 8.17 a CL en SieScape del brazo. Irregularidad de la cortical Fig. 8.17 b CL en 3D del mismo caso en que se visualizan aun
con extensión a las partes blandas vecinas (flechas). mejor las lesiones ya reportadas. Metástasis ósea de un
melanoma.
Fig. 8.18 a CL del esternón. Hay una lesión tumoral que expande Fig. 8.18 b CC con Doppler poder del mismo caso en que se apre-
la cortical del esternón. cian pequeños vasos intratumorales. Plasmocitoma.
Fig. 8.18 c CT a nivel del tórax óseo. Se aprecian lesiones Fig. 8.18 d CC en 3D del mismo caso. en que se visualiza la
tumorales que interesan el manubrio esternal y porcio- lesión osteolítica de la articulación esternocostal.
nes vecinas de las costillas que expanden la cortical. Plasmocitoma.
Fig. 9a Vista anatómica de la región anterior del hombro (corre- Fig. 9b Estudio ecográfico en CT de esa región.
dera bicipital) con el transductor en corte transversal.
Fig. 9c Vista anatómica de la región anterior del hombro (corre- Fig. 9d Estudio ecográfico en CL de esa región.
dera bicipital) con el transductor en corte longitudinal.
Fig. 9e Vista anatómica de la región anteromedial del hombro Fig. 9f Estudio ecográfico en CT de esa región.
(inserción del SE) con el transductor en corte transversal.
Ilustraciones 275
TENDÓN DEL SUPRASPINOSO.
Fig. 9g Vista anatómica de la región posterolateral del hombro Fig. 9h Estudio ecográfico en CT de esa región.
(Se). Con el transductor en corte transversal, en posi-
ción neutra.
Fig. 9i Vista anatómica de la región posterolateral del hombro, Fig. 9j Estudio ecográfico en CT de esa región.
con extensión y rotación medial del brazo (tendón del
Se) con el transductor en corte transversal
Fig. 9k Vista anatómica de la región posterolateral del hombro, Fig. 9l Estudio ecográfico en CT de esa región.
con oblicuidad inferior (tendones del Ie y del rmn) con
el transductor en corte transversal, en posición neutra.
Fig. 9m Vista anatómica de la región posterolateral con oblicui- Fig. 9n Estudio ecográfico en CT de esa región.
dad inferior del hombro, con flexión y rotación medial
del brazo, con el transductor en corte transversal.
HOMBRO NORMAL
Fig.9.1 a CT en vista anterior del tendón del subescapular (SE). Fig.9.1 b Vista en SieScape del caso anterior.
Fig.9.1 c CT en vista anterior. Corredera bicipital con el tendón Fig.9.1 d Vista en SieScape del mismo paciente donde se ve me-
de la porción larga del bíceps (flecha). jor la corredera bicipital (flecha).
Ilustraciones 277
Fig.9.1 e CL a nivel de la corredera bicipital. Tendón de la por- Fig.9.1 f CL en SieScape del caso anterior, con una visión más
ción larga del bíceps (flecha). completa del caso anterior (flecha).
Fig.9.1 g Vista posterior. CT del tendón del supraespinoso. Fig.9.1 h Vista en SieScape del mismo paciente.
Fig.9.1 i CSO de los tendones del infraespinoso y redondo menor. Fig.9.1 j Vista en SieScape del mismo caso.
Fig.9.2 a CT. Tenosinovitis de la PLB. Fig.9.2 b Otra vista del caso anterior en que se ve al tendón con
su vaina en la corredera bicipital con signos inflamatorios
(flecha).
Fig.9.2 c SieScape del mismo caso. Fig.9.2 d SieScape del mismo paciente en que se ve que hay par-
ticipación del tendón del Se.
Fig.9.2 e CS en 3D que muestra el engrosamiento de la sinovial Fig.9.2 f Vista en 3D en que se ven las alteraciones intrínsecas
peritendinosa. del tendón.
Ilustraciones 279
Fig.9.3 a CL en SieScape del tendón de la PLB con signos de Fig.9.3 b CT del caso anterior a nivel de la corredera.
peritendinitis.
Fig.9.4 a CSO. Gruesas calcificaciones a nivel del tendón del Se Fig.9.4 b Vista 3D del Caso anterior en que se demuestran mejor
(flechas). las calcificaciones tendinosas.
Fig.9.5 a CT. Sinovitis crónica de la PLB. Fig.9.5 b CL del caso anterior en que se observa el engrosamien-
to de la sinovial peritendinosa.
Fig.9.7 a CSO. Tendinitis crónica del Se que muestra lesiones Fig.9.7 b Otra vista del caso anterior en que se aprecia el engro-
nodulares ecogénicas intratendinosas (flechas). samiento de la sinovial (flechas) y de la bursa.
Fig.9.8 a CT. Tenosinovitis aguda con lesión hipoecoica Fig.9.8 b Otra vista del mismo paciente en que se ve participa-
intratendinosa y participación de la bursa. ción del tendón y de la vaina de la PLB.
Ilustraciones 281
Fig.9.8 c CSO. Vista del Se en que se aprecian calcificaciones Fig.9.8 d CT. Presencia de calcificaciones en el tendón del SE.
(flecha).
Fig.9.9 a CT de la PLB que muestra signos de tenosinovitis. Fig.9.9 b CT. Otra vista del caso anterior en que se ven aún me-
jor las lesiones.
Fig.9.10 a CL en SieScape de una tenosinovitis de la PLB. Fig.9.10 b CSO en SieScape del mismo paciente donde se de-
muestran alteraciones similares en el Se.
Fig.9.11 c CT. Tenosinovitis crónica de la PLB con participa- Fig.9.11 d CT en SieScape que muestra gruesa calcificación del
ción de la bursa subdeltoidea. tendón del SE.
Fig.9.11 e Otra vista en SieScape del caso anterior Fig.9.11 f CT. Moderada tenosinovitis de la PLB.
Ilustraciones 283
Fig.9.12 a CT. Ruptura completa que interesa a todo el plano Fig.9.12 b Otra vista en CT del mismo caso.
muscular posterior del MR.
Fig.9.12 c CT. Vista selectiva de la ruptura del Rm del mismo Fig.9.12 d CT en que se ve la participación del SE del mismo
paciente. caso.
Fig.9.13 a CT. Ruptura parcial del SE con reacción de la bursa Fig.9.13 b Otra vista del mismo caso en que se ve la colección
vecina. intratendinosa del SE.
Fig.9.14 c SieScape que muestra una ruptura parcial del SE ve- Fig.9.14 d SieScape en corte más posterior del caso anterior, que
cina a la corredera bicipital (flecha). muestra una ruptura parcial del Ie (flecha).
Fig.9.15 a CT de una ruptura parcial del tendón del Se que apa- Fig.9.15 b SieScape del mismo paciente.
rece engrosado.
Ilustraciones 285
Fig.9.16 a CT de la región anterior del hombro donde se ven sig- Fig.9.16 b CT posteroexterno del mismo paciente donde se ve
nos de una tenosinovitis de la PLB. gruesa calcificación del tendón del Se.
Fig.9.17 a CT. Gruesa calcificación del tendón del Se. Fig.9.17 b Vista en SieScape del mismo caso.
Fig.9.17 c Otra vista en SieScape del paciente anterior donde se Fig.9.17 d CT posteroexterno en SieScape donde se ve gruesa
ve aún mejor la calcificación. calcificación en la inserción del Ie.
Fig.9.19 a CT en región anterior del hombro donde se ve la pre- Fig.9.19 b Otra vista del mismo caso.
sencia de una colección líquida a nivel de la inserción
del SE, por desgarro parcial.
Fig.9.19 c CT en SieScape del caso anterior. Fig.9.19 d Otra vista en SieScape del mismo paciente con un des-
garro parcial del SE.
Ilustraciones 287
Fig.9.20 a CT donde se define gruesa calcificación intrasustancia Fig.9.20 b Imagen en SieScape del mismo caso.
del tendón del Se (flechas).
Fig.9.21 a CT donde se ven signos de desgarro parcial, Fig.9.21 b Vista en SieScape del caso anterior donde se ve gruesa
intrasustancia, del tendón del Se. calcificación en proyección de la inserción del Ie.
Fig.9.21 c CT del tendón del Se donde se ven signos de lesiones Fig.9.21 d Vista en SieScape del Ie y Rm del mismo paciente don-
crónicas intrasustancia. de se observan lesiones similares en el Rm.
Fig.9.22 c Otra vista del tendón del Se del paciente anterior. Fig.9.22 d Vista en SieScape del mismo paciente.
Fig.9.23 a CT posterolateral donde se ve lesión crónica del ten- Fig.9.23 b CT en SieScape donde se ve calcificación del tendón
dón del Se. del SE.
Ilustraciones 289
Fig.9.23 c CT en SieScape del mismo paciente. La flecha ilustra Fig.9.23 d Otro CT más anterior, en SieScape del mismo paciente.
la lesión del subescapular
Fig.9.24 a CL de la corredera bicipital donde se ven marcados Fig.9.24 b CT del mismo paciente donde se ve el engrosamiento
signos de tenosinovitis crónica de la PLB. del tendón de la PLB, distensión de su vaina y engrosa-
miento sinovial en su interior.
Fig.9.25 a CT posterior donde se ve engrosamiento y gruesa cal- Fig.9.25 b CT anterior donde se ven moderados signos de una
cificación en el tendón del Rm (flecha). tenosinovitis de la PLB en el mismo paciente.
Fig.9.27 a CT posterolateral donde se observan gruesas calcifi- Fig.9.27 b CT posterolateral del mismo paciente donde además,
caciones en proyección del tendón del Se (flecha). se ve distensión de la bursa subacromial.
Fig.9.27 c CT posterolateral del paciente anterior, donde se ve Fig.9.27 d Otra vista posterolateral con rotación medial del ante-
que la inserción del tendón también está calcificada. brazo para ver la región musculotendinosa, cubierta, en
vistas anteriores, por la sombra acústica del acromion.
Ilustraciones 291
Fig.9.27 e CT posterolateral donde se ve gruesa calcificación que Fig.9.27 f Vista en 3D del caso anterior.
cubre prácticamente todo el tendón del supraespinoso.
Hay ligera distensión de la bursa subacromial.
Fig.9.27 g Reconstrucción en 3D a nivel de la corredera bicipital Fig.9.27 h Otra reconstrucción en 3D del mismo caso con muy
donde se ve una gruesa calcificación del tendón de la PLB. buena visualización del tendón de la PLB.
Fig.9.28 a CT a nivel del tercio superior de la corredera bicipital Fig.9.29 a Orta vista anterosuperior del mismo paciente donde
donde se ve al tendón de la PLB cubierto, en su región se ve mejor la relación del ligamento coracoacromial con
anterior, por una banda ecogénica que corresponde al la bursa subacromial.
ligamento humeral transverso (flechas).
Fig.9.30 a CT de la articulación glenohumeral, donde se ve una Fig.9.30 b CT posteroinferior en SieScape del mismo paciente
colección líquida a nivel de la porción posteroinferior
del labrum, que abomba ligeramente el contorno pro-
fundo del Rm.
Ilustraciones 293
SINOVIAL
Fig.9.32 a CT anterior donde se observan signos de distensión de Fig.9.32 b CT posterolateral donde se ve distensión de la bursa
la bursa subacromial con abundante material espeso en subacromial sin proliferación sinovial.
su interior (proliferación sinovial)
Fig.9.33 a CL donde se observa distensión de la bursa subacromial Fig.9.33 b CT anterior del mismo caso, donde se ven estucturas
con material ecogénico en su interior. Por detrás se situa nodulares que penden de las paredes de la bursa
el tendón de la PLB. subacromial.
Fig.9.33 c CT del mismo paciente. Fig.9.33 d CT algo más abajo donde se ve mayor distensión de la
bursa subacromial.
ARTROPATÍAS
Fig.9.35 a CT con marcada distensión articular y contorno óseo Fig.9.35 b CT del mismo paciente, donde se ve mejor la irregula-
subcondral irregular. ridad del hueso subcondral (flechas).
Fig.9.35 c Otra vista en CT del mismo paciente (flechas). Fig.9.35 d CT posterosuperior, donde se ve marcada irregulari-
dad del hueso subcondral (flechas), engrosamiento del
cartílago articular y derrame articular.
Ilustraciones 295
TUMORES
Fig.9.36 a CT con presencia de una masa tumoral compleja Fig.9.36 b CL anterosuperior del mismo caso, donde se ve la re-
intraarticular, anterior al tendón del SE. lación de la masa tumoral con las estructuras vecinas.
Fig.9.36 c Otra vista en CT del mismo paciente. Fig.9.36 d CT donde se observa gran distensión articular y la
presencia de una masa tumoral en su interior asociada
a derrame articular.
Fig.9.36 e CL donde se ve la relación de la masa tumoral con el Fig.9.36 f CT anterior donde se demuestra la presencia de
tendón de la PLB. adenopatías metastásicas.
Fig.10 c Vista anatómica de la región anteromedial del codo con Fig.10 d Estudio ecográfico en CL de esa región donde se
el transductor en corte longitudinal. visualizan los músculos pronador redondo, braquial an-
terior y las superficies articulares del húmero y del
cúbito.
Fig.10 e Vista anatómica de la región anterior del codo con el Fig.10 f Estudio ecográfico en CT de esa región.
transductor en corte transversal.
Ilustraciones 297
Fig.10 g Vista anatómica de la región posterior del codo con el Fig.10 h Estudio ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
Fig.10 i Vista anatómica de la región posterior del codo con el Fig.10 j Estudio ecográfico en CT de esa región.
transductor en corte transversal.
NORMAL
Fig.10.1 a CL de la cara lateral del codo normal, donde se visualiza Fig.10.1 b Otra vista del mismo paciente, que muestra aún me-
el tendón de origen de los extensores. jor, el origen del tendón común de los extensores del
carpo (*).
Fig.10.1 e CL del compartimiento lateral donde se observa el Fig.10.1 f CL en SieScape del mismo paciente.
cartílago articular (C).
Fig.10.1 g Otra vista en SieScape del mismo paciente donde se Fig.10.1 h Otro CL en SieScape del mismo paciente, pero estu-
definen mejor el músculo braquiorradial por delante y diado por su compartimiento medial donde se ve el mús-
el bíceps braquial por detrás. culo pronador redondo (superficial) y más profundo al
braquial anterior.
Ilustraciones 299
Fig.10.1 i CL por la cara posterior donde se observa la inserción Fig.10. j CT por la cara posterior del mismo caso a nivel de la
del tendón del tríceps braquial en el olécranon. fosa olecraneana, ocupada por grasa. A este nivel se de-
fine muy bien al cartílago articular.
TENDINITIS
Fig.10.2 a CL a nivel del compartimiento lateral donde se de- Fig.10.2 b CL a nivel del compartimiento lateral. Se aprecia
muestran ligeros signos de tendinitis a nivel del tendón marcado engrosamiento del tendón común de los
común de los extensores del carpo (epicondilitis) (fle- extensores del carpo, con engrosamiento y distorsión de
chas). su patrón normal. Predomina la baja ecogenicidad.
Fig.10.3 a CL del compartimiento lateral del codo donde se ob- Fig.10.3 b CL en SieScape del mismo paciente, con una mejor
serva un área hipoecoica debida a una epicondilitis cró- visualización de la epicondilitis.
nica agudizada (flecha).
Fig.10.5 a CL a nivel de la cara medial del codo donde se observa Fig.10.5 b Otro CL del mismo paciente en que se pueden estu-
engrosamiento del tendón común de los músculos diar mejor las estructuras vecinas.
epitrocleares (*).
Fig.10.5 c CL en SieScape del caso anterior, donde se ve mejor el Fig.10.5 d Otro CL en SieScape del mismo paciente donde se
tendón epitroclear engrosado. ofrece una vista panorámica.
Ilustraciones 301
Fig.10.6 a CL a nivel en la cara lateral del codo. Hay engrosa- Fig.10.6 b CL en SieScape del mismo paciente donde se ve, aún
miento del tendón común de los músculos epicondíleos mejor, todo lo anteriormente descrito.
con una gruesa calcificación intrasustancia (flechas).
Fig.10.7 a CL en la cara radial, donde se ve engrosamiento del Fig.10.7 b CL en SieScape del mismo paciente. Las flechas seña-
tendón común de los músculos epicondíleos, de lan las microcalcificaciones.
ecogenicidad mixta y presencia de microcalcificaciones
(flecha).
Fig.10.8 a CL en la cara radial del codo donde se observa engro- Fig.10.8 b CL en 3D del mismo paciente, donde se ve aún mejor
samiento de aspecto inflamatorio crónico del tendón el engrosamiento tendón común de los extensores del
común de los extensores del carpo. carpo.
Fig.10.9 CL a nivel de la cara radial donde se aprecia engrosa- Fig.10.10 CL a nivel de la cara radial donde se observa ruptura
miento del tendón común de los extensores del carpo, casi total del tendón común de los extensores del carpo.
definiéndose un área hipoecoica en su origen en rela- Nótese el área nodular ecogénica, que corresponde al
ción con una colección líquida por desgarro parcial. cabo tendinoso retraído. Las pequeñas zonas hipoecoica
son colecciones hemáticas.
Fig.10.11 a CL a nivel de la cara lateral del codo donde se ve la Fig.10.11 b Otra vista en CL del mismo paciente, donde se ve el
desinserción del tendón común de los extensores del cabo tendinoso retraído y la colección hemática.
carpo, rodeado de una colección hemática.
Ilustraciones 303
Fig.10.12 a CL en la cara cubital del codo donde se aprecian Fig.10.12 b Otro CL de la cara cubital del mismo paciente.
signos de desgarro parcial del tendón común de los mús-
culos epitrocleares.
BURSAS
Fig.10.13 a CT a nivel de la cara anterior del codo donde se ve una Fig.10.13 b CL del mismo paciente donde se ve la imagen descri-
imagen ecolúcida, de bordes bien definidos y contenido ta anteriormente, que era producido por una bursa
acelular, vecina al paquete vasculonervioso de la región. distendida.
Fig.10.14 a CL a nivel de la cara posterior del codo, donde se ve, Fig.10.14 b CT del mismo paciente en que se confirma el diag-
por detrás de la inserción del tendón del tríceps braquial, nóstico de un higroma del codo.
una estructura hipoecoica, con múltiples y gruesos tabi-
ques en su interior.
Fig.10.15 a CL a nivel de la cara radial del codo, donde se obser- Fig.10.15 b Reconstrucción en 3D del mismo caso, donde se ve
va distensión de la cápsula articular, por abundante mejor la distensión de la cápsula articular y el engrosa-
material espeso y escasa cantidad de líquido claro. miento de la sinovial.
Fig.10.16 a CL en la región posterior del codo, donde se observan Fig.10.16 b CT en la cara cubital del mismo paciente, donde se
pequeñas calcificaciones en la fosa olecraneana (flecha). observa distensión de la cápsula articular, con múlti-
ples y pequeños cuerpos libres en su interior (flechas),
asociado a engrosamiento sinovial.
Fig.10.17 a CT a nivel del epicóndilo medial del húmero, donde Fig.10.17 b Otra vista en CT a nivel del epicóndilo medial del
se ven varios cuerpos libres intrarticulares (flechas). mismo paciente.
Ilustraciones 305
Fig.10.18 a CT a nivel de la cara posterior del codo, donde se ve Fig.10.19 CL a nivel de la cara cubital donde se ve distensión de
una gruesa calcificación en la fosa olecraneana (flechas). la cápsula articular, engrosamiento sinovial y varios cuer-
pos libres.
FRACTURAS
Fig.11 a Vista anatómica de la región dorsal de la muñeca con el Fig.11 b Estudio ecográfico en CT de esa región donde se
transductor en corte transversal. visualizan los tendones extensores por detrás del
retináculo extensor (flechas).
Fig.11.1 a CT a nivel del canal carpiano donde se define el liga- Fig.11.1 b Otra vista similar del mismo paciente.
mento transverso (flechas) y por detrás algunos de los
flexores del carpo.
Fig.11.1 c CL a nivel del canal carpiano donde se define el nervio Fig.11.1 d CL más proximal del nervio mediano en el mismo pa-
mediano. ciente.
Ilustraciones 307
Fig.11.1 e CT a nivel del canal de Guyon donde se observan el Fig.11.1 f CT a nivel del canal de Guyon donde se observa el nervio
nervio y la arteria cubital (flechas). cubital (flecha), por detrás del retináculo flexor (*).
Fig.11.1 g CL a nivel del carpo donde se visualiza el fibrocartíla- Fig.11.1 h Otra vista en CL del mismo paciente donde se ve me-
go triangular por detrás del flexor cubital del carpo, jor el fibrocartílago triangular (flecha).
interpuesto entre el cúbito y el piramidal (flecha).
LESIONES LIGAMENTARIAS
Fig.11. 2 a CT a nivel de la cara palmar del carpo donde se nota Fig.11.2 b CT a nivel de la cara palmar del carpo del mismo pa-
engrosamiento del ligamento transverso, en un paciente ciente en que se definen aún mejor los datos anteriores.
con un síndrome del túnel carpiano. Nótese la presencia
del nervio mediano inmediatamente por detrás del liga-
mento transverso (flecha).
Fig.11. 5 a CL en la cara palmar del carpo, donde se observa Fig.11.5 b CL a nivel de la cara palmar del carpo donde se ve un
deformidad y ecogenicidad heterogénea del fibrocartí- área hipoecoica en proyección del fibrocartílago trian-
lago triangular por lesión del mismo (flecha). gular sugestiva de lesión (flecha).
Fig.11.6 a CL a nivel de la cara palmar del carpo, donde se ob- Fig.11.6 b Otro CL a nivel de la cara palmar del carpo del caso
serva deformidad y alteración en la ecogenicidad del fi- anterior, donde se define un área hipoecoica,
brocartílago triangular (flecha). longitudinal, que divide en 2 al fibrocartílago triangu-
lar (flecha).
Ilustraciones 309
LESIONES TENDINOSAS
Fig.7 a CT a nivel de la cara palmar del carpo, donde se observa Fig.11.7 b CL a nivel de la cara palmar del 4to. dedo de la mano
distensión de la vaina de los tendones flexores. del mismo paciente donde se define mejor la distensión
de la vaina del tendón del flexor profundo.
Fig.11.8 a CT a nivel de la cara palmar del metacarpo, donde se Fig.11.8 b CT selectivo en la cara palmar del 4to. dedo, donde se
ve distensión de la vaina del tendón flexor profundo del demuestra, aún mejor, lo anteriormente descrito.
4to. dedo.
Fig.11.8 c Reconstrucción en 3D del mismo caso, donde se ve aún mejor Fig.11.8 d Reconstrucción en 3D, en vista sagital, del mismo caso.
la distensión de la vaina del tendón flexor del 4to. dedo.
Fig. 11. 10 a CT a nivel de la cara palmar del carpo, donde se ve Fig.11.10 b CL a nivel de la cara palmar de uno de los tendones
distensión de la vaina de los tendones de los flexores con flexores del caso anterior donde se aprecia distensión de
desplazamiento anterior del ligamento transverso. su vaina y presencia de material espeso en su interior.
Fig. 11.10 c CT en SieScape del mismo caso en que se aprecian Fig.11.11 CT a nivel de la cara palmar del carpo, donde se de-
aún mejor las lesiones ya descritas. muestra distensión de la vaina de los tendones flexores
de los dedos, con ligero desplazamiento hacia delante
del ligamento transverso.
Ilustraciones 311
Fig.11.12 a CL en la cara palmar del 3er. dedo de la mano en que Fig.11.12 b CL en la cara palmar del 3er. dedo de la mano
se aprecia distensión de la vaina por tenosinovitis. contralateral del mismo paciente, que es normal.
Fig.11.13 a CL en la cara palmar del 1er. dedo de la mano donde Fig.11.13 b CT del mismo caso que confirma los hallazgos ya
se ve al extensor largo del pulgar engrosado, ondulado y referidos. Tenosinovitis de Quervain.
con un material espeso a su alrededor (flecha).
Fig.11.14 a CL en la cara palmar del 3er. dedo donde se ven los Fig.11.14 b CT del caso anterior. Se observa al tendón ecogénico
fascículos longitudinales del flexor propio engrosados y y con un halo hipoecoico que lo rodea. Tenosinovitis
ecogénicos. estenosante.
Fig.11.15 a CT a nivel de la cara palmar del carpo donde se ob- Fig.11.15 b CL a nivel de la cara palmar del carpo del mismo
serva distensión de la vaina de los tendones de los flexores paciente, donde se ve distensión de la cápsula articular
de los dedos y de la cápsula articular, con engrosamien- y engrosamiento sinovial.
to sinovial.
Fig.11.16 CL a nivel de la articulación escafoidesemilunar, don- Fig.11.17 a CL a nivel de la articulación metacarpofalángica del
de se observa distensión de la cápsula articular y engro- 1er. dedo con distensión de la cápsula articular y engro-
samiento de la sinovial. samiento sinovial.
Ilustraciones 313
GANGLIÓN QUÍSTICO
Fig.11.18 a CL a nivel de la cara dorsal del carpo, donde se ve Fig.11.18 b Otro CL del mismo caso, en que el aspecto de la le-
distensión de forma sacular, de la vaina correspondien- sión sugiere un ganglión quístico.
te al extensor propio del 1er. dedo.
Fig.11.18 c CL en SieScape del mismo paciente donde se apre- Fig.11.18 d CL en SieScape del mismo caso, en que se visualiza la
cian varios tabiques en el interior del ganglión (flecha). relación del ganglión con las estructuras vecinas.
Fig.11.18 e CT selectivo del mismo caso, donde se ve al tendón Fig.11.18 f CT en SieScape donde se puede ver el tendón ecogénico
rodeado por líquido y presencia de material sólido en su e irregular (flecha).
interior.
Fig.11.19 a CL a nivel de la cara palmar del 2do. dedo, donde se Fig.11.19 b CL ampliado del mismo caso, donde se ve mejor el
observa la presencia de un quiste en proyección del ten- ganglión quístico.
dón del flexor, por un ganglión quístico.
Fig.11.20 CT a nivel de la cara palmar del 1er. dedo de la mano. Fig.11.21 CL a nivel de la cara palmar del carpo. Ganglión
Gangliones quísticios del flexor propio. radiocarpiano.
Ilustraciones 315
LESIONES ÓSEAS
Fig.11.22 CL a nivel de la cara radial del carpo donde se observa Fig.11.23 CL a nivel de la cara dorsal del carpo donde se observa
solución de continuidad de la cortical del radio por frac- solución de continuidad, por fractura, de la cortical del
tura del mismo (flecha). escafoides (flecha).
Fig.11.24 a CL a nivel de la cara dorsal del carpo donde se obser- Fig.11.24 b CT a nivel de la cara dorsal del carpo donde se obser-
va solución de continuidad de la cortical del escafoides va solución de continuidad por fractura, de la cortical
por fractura del mismo (flecha). del escafoides (flecha).
Fig.11.25 CL comparativo a nivel de la cara dorsal del carpo donde se observa solución de
continuidad, por fractura, de la cortical del escafoides derecho. Escafoides izquierdo
normal.
Fig.11.26 a CL a nivel de la cara palmar del carpo donde se defi- Fig.11.26 b CL del lado contralateral donde se ve al nervio medial
ne al nervio mediano normal (flecha). mal definido, engrosado y ecogénico, en una paciente
operada de un neuroma a este nivel.
Fig.11.27 a CL a nivel de la cara palmar del carpo donde se ve al Fig.11.27 b CT de la cara palmar del carpo del mismo caso, don-
nervio mediano desplazado y comprimido por la disten- de se ve que los tendones que forman parte del conteni-
sión de las vainas tendinosas vecinas. do del canal carpiano muestran su vaina distendida.
Fig.11.28 a CT de la cara palmar del carpo donde se aprecia que Fig.11.28 b CL del mismo caso, donde se ve al tendón mal definido.
el nervio mediano se encuentra comprimido y desplaza-
do por engrosamiento del tendón vecino.
Ilustraciones 317
Fig.11.29 a CT a nivel del canal de Guyón observándose al nervio Fig.11.29 b CT a nivel del canal de Guyón contralateral donde se
cubital normal. observa engrosamiento del ligamento transverso.
Fig.11.30 a CL a nivel de la cara palmar del carpo, donde se Fig.11.30 b CT a nivel de la cara palmar del carpo donde se ob-
observa al nervio cubital mal definido, de bordes irre- serva la compresión que sobre el nervio mediano ejer-
gulares y aumentado en ecogenicidad. cen los tendones vecinos, los que se encuentran engrosa-
dos, con distensión de su vaina.
ARTROPATÍAS
Fig.11. 32 CL en la cara palmar del 2do. dedo de la mano. Cuer- Fig.11. 33 CL en la región hipotenar de la mano. Cuerpo extraño
po extraño (+) de origen vegetal en el TCS. (flecha) de origen vegetal en los músculos hipotenares.
Fig.11. 34 a CL en la región tenar de la mano. Cuerpo extraño Fig.11.34 b CL del mismo caso con técnica de SieScape.
(flecha) de origen vegetal en el TCS.
LESIONES TUMORALES
1. Aparato Locomotor. Madrid, Octubre. 21-24 1998.
Fig.11.35 a CL a nivel de la cara dorsal del carpo donde se ve Fig.11.35 b CL en SieScape del mismo caso. En que se aprecian
distensión de la cápsula articular por la presencia de mejor las alteraciones.
masas sólidas en su interior, en un paciente con insufi-
ciencia renal, en tratamiento crónico con hemodiálisis.
Ilustraciones 319
Fig.11.35 c CT de la cara dorsal del carpo del mismo paciente. Fig.11.35 d CT en SieScape del caso anterior. Las alteraciones de
este paciente estaban en relación con el depósito de
amiloide.
Fig. 12 a Posición del lactante para el estudio ecográfico de la Fig. 12 b CT donde se muestra la ecoestructura normal de la
cadera. cadera de un lactante.
Fig. 12 c Posición del lactante para el estudio ecográfico de la Fig. 12 d CL donde se muestra la ecoestructura normal de la
cadera. cadera de un lactante.
Fig.12 f y 12 g
Ilustraciones 321
Fig. 12 H Cadera normal en un RN. CT neutral. Cabeza femoral Fig. 12 I CC en flexión, del caso anterior. La cabeza femoral está
(c) cartilaginosa situada de modo simétrica por encima situada normalmente en el acetábulo. El cartílago
del cartílago triradiado (flecha). triradiado se señala con una flecha abierta y el labrum
con una flecha sólida.
Fig.12 J Se ve el núcleo epifisario superior del fémur osificado Fig.12 k Vista coronal en flexión de una cadera subluxada. Hay
que produce una sombra acústica. La flecha abierta se- aumento de la ecogenicidad del labrum y del pulvinar
ñala el labrum fibrocartilaginoso. (flecha). La cabeza femoral cartilaginosa está subluxada
en sentido súperolateral. El labrum aparece hiperecoico
(flecha inclinada).
Fig. 12 l A. Cadera normal en un RN. Vista cornal en flexión. La Fig. 12 l B Cadera normal en un RN. Vista coronal transversa en
cabeza femoral redondeada está situada dentro del flexión. La cabeza aparece bien situada dentro de la co-
acetábulo, ambos de aspecto normal. El acetábulo cu- pilla en forma de U formada por la metafisis femoral
bre en cerca de un 50% a la cabeza femoral lo que se ósea.
demuestra por una línea trazada a nivel del borde late-
ral del ilium.
Fig. 12 m B. CT en flexión con maniobra de estrés. Hay distorsión Fig. 12 m C. Vista coronal flexionada del labio posterior del
de la metafisis proximal del fémur (M) y del acetábulo (A). acetábulo con maniobra de estrés. La cabeza femorall (c)
aparece subluxada posteriormente en relación con el la-
bio posterior (flecha).
Fig. 12 m D. Vista coronal en flexión y abducción con el arnes. Fig. 12 n A. Vista coronal en flexión que muestra la cabeza luxada,
La cabeza aparece mejor situada en el acetábulo. súpero-lateral. Hay falta de contacto entre la cabeza
femoral y el acetábulo óseo.
Ilustraciones 323
Fig. 12 n B. Vista coronal en flexión. La cabeza femoral (G) apa- Fig. 12 n C. Vista coronal en flexión del labio posterior del
rece luxada en sentido superolateral. acetábulo. Hay una luxación posterior de la cabeza (fle-
cha). Se señala el labio posterior (A).
NORMAL
Fig.12.1 a CL de la articulación coxo-femoral. De atrás a delante Fig.12.1 b CL en SieScape, donde se ven mejor la cabeza y el
se observa la porción extrarticular y anterior de la ca- cuello femoral, así como la cápsula articular (flechas).
beza femoral y porción vecina del acetábulo; el triángu-
lo ecogénico por delante del espacio articular que co-
rresponde con el labrum glenoideo y en un plano mas
anterior los músculos de la región.
TENDINOPATÍAS
Fig.12.2 a CL a nivel del trocánter mayor, donde se observa engro- Fig.12.2 b CL (compuesto) a nivel de la cara lateral de la articula-
samiento difuso del tendón del glúteo medio (flechas), con ción de la cadera, donde se ve engrosamiento del tendón
ecogenicidad no homogénea. Hay una pequeña calcifica- del glúteo medio (flechas), con ecogenicidad disminuida.
ción en la inserción del tendón.
Fig.12.3 a CL a nivel de la región anterior de la articulación de Fig.12.3 b CT a nivel de la articulación de la cadera del mismo
la cadera, donde se ve, inmediatamente por detrás de la paciente, donde se define mejor la bursa, así como su
vena femoral, una estructura hipoecoica de bordes bien comunicación con la cavidad articular.
definidos por distensión de la bursa.
Ilustraciones 325
Fig.12.4 a CL a nivel de la cara lateral de la articulación de la Fig.12.4 b CL en SieScape del mismo caso.
cadera, donde se observa distensión de la bursa
trocantérica.
LESIÓN DE LA SINOVIAL
Fig.12.5 a CL a nivel del receso anterior de la articulación de la Fig.12.5 b Otro CL similar al anterior, pero con mayor reacción
cadera donde se ve distensión de la bursa ilio-pectínea, sinovial producto de una epifisiolisis (flecha).
con contenido homogéneo.
Fig.12.6 aCL a nivel del receso anterior de la articulación de la Fig.12.6 b Otro CL similar al anterior.
cadera donde se ve distensión de la bursa ilio-pectínea,
con material espeso en su interior.
ARTRITIS SÉPTICA
Fig.12.7 a CL a nivel de la cadera, donde se ve distensión de la Fig.12.7 b CL a nivel de la cara lateral de la cadera del mismo
cápsula articular, con engrosamiento sinovial caso, donde se ve aún mejor lo anteriormente descrito.
Fig.12.7 c Reconstrucción 3D donde se observa distensión de la Fig.12.7 d Reconstrucción 3D de la cadera contralateral donde se
cápsula articular, con engrosamiento de la sinovial y ele- observa distensión de la cápsula articular con prolifera-
mentos celulares en suspensión. ción sinovial y alteración en la morfología de la cabeza.
Ilustraciones 327
Fig.12.8 a CL de la región anterior de la cadera observándose Fig.12.8 b CL de la cadera contralateral del mismo paciente donde
ligera distensión de la cápsula articular, con prolifera- se observa mayor distensión de la cápsula articular, con
ción sinovial y escasa cantidad de líquido. predominio de la proliferación sinovial.
Fig.12. 8 c CL en SieScape de la región anterior de la cadera, Fig.12.8 d CL en SieScape de la región anterior de la cadera,
donde se define escasa cantidad de derrame articular y donde se ve distensión de la cápsula articular por de-
proliferación sinovial. rrame articular.
Fig.12.9 a CL de la región anterior de la cadera donde se obser- Fig.12.9 b CL en SieScape de la región anterior de la cadera del
van calcificaciones intracapsulares, sin derrame articu- mismo caso, donde se comprueba lo ya descrito.
lar (flecha).
Fig.12.10 a CT comparativa de ambas caderas, donde se obser- Fig.12.10 b CL de la cadera derecha del paciente anterior, donde
van cuerpos libres Intrarticulares en el lado derecho. se ven aún mejor las calcificaciones (flechas). Gota.
COXOARTROSIS
Fig.12.11 a CL a nivel de la región anterior de la cadera obser- Fig.12.11 b Otro CL del mismo paciente donde se ve, aún mejor,
vándose la presencia de osteofitos a nivel del cuello el osteofito (flecha).
femoral (flecha).
Ilustraciones 329
Fig.12.12 a CL a nivel de la región anterior de la cadera, donde Fig.12.12 b CT a nivel de la articulación de la cadera del mismo
se observa presencia de osteofito en posición subcapital paciente, donde se ve otro osteofito a nivel del espacio
(flecha). articular.
Fig.12.12 c CL en SieScape del mismo caso. La flecha ilustra la Fig.12.12 d CL en 3D del mismo paciente donde se ve, aún mejor,
exostosis. lo descrito anteriormente.
Fig.12.13 a CT donde se muestra la ecoestructura normal de la Fig.12.13 b CT del mismo caso con la aplicación del programa de
cadera de un lactante. Graf.
Fig.13.a Vista anatómica de la región anterior de la rodilla y el Fig.13.b Estudio ecográfico en CL de esa región.
muslo con el transductor en corte longitudinal.
Fig.13.c Vista anatómica de la región anterior de la rodilla y el Fig.13.d Estudio ecográfico en CT de esa región.
muslo con el transductor en corte transversal.
Ilustraciones 331
Fig.13.e Vista anatómica de la región anterior de la rodilla con el Fig.13.f Estudio ecográfico en CL de la región medial, las flechas
transductor en corte longitudinal medial. señalan al complejo cápsulo-ligamentoso medial (LCM).
Fig.13.g Vista anatómica de la región anterior de la rodilla con el Fig.13.h Estudio ecográfico en CL de la región lateral, las flechas
transductor en corte longitudinal lateral. señalan al ligamento colateral lateral.
Fig.13.i Vista anatómica de la región posterior de la rodilla con Fig.13.j Estudio ecográfico con técnica de SieScape de esa región.
el transductor en corte longitudinal.
Fig.13.1 a CL del tendón cuadríceps normal. Fig.13.1 b CL. Tendón patelar normal.
Fig.13.1 c CT en SieScape del tendón cuadríceps. Fig.13.1 d CL del tendón cuadríceps normal.
Fig.13.1 e CT. En SieScape. Tendón patelar normal. Fig.13.1 f CL en SieScape. Tendón patelar normal.
Ilustraciones 333
LESIONES TENDINOSAS
Fig.13.2 a CL. Tendinitis aguda del cuádriceps. Fig.13.2 b CL en SieScape en una tendinitis del cuádriceps.
Fig.13.3 CL en una fibrosis de la inserción del cuádriceps. Fig.13.4 CL en un paciente con una tendinitis patelar difusa.
Fig.13.5 CL en SieScape en una tendinitis patelar difusa. Fig.13.6 CL en SieScape en una tendinitis patelar con desgarro
parcial.
LIGAMENTOS
Fig.13.8 a CL. Complejo capsuloligamentoso medial normal. Fig.13.8 b CL. Complejo capsuloligamentoso medial normal. Vista
de acercamiento.
Fig.13.9 a CL de un desgarro parcial del complejo cápsulo- Fig.13.9 b CL en SieScape en un desgarro parcial (flecha) del
ligamentoso medial. complejo capsuloligamentoso medial.
Ilustraciones 335
Fig.13.10 a CL en un desgarro del retináculo medial. Fig.13.10 b CT en SieScape del caso anterior.
Fig.13.11 a CL en un desgarro del retináculo lateral. Fig.13.11 b CL en SieScape del caso anterior.
Fig.13.11 c CL en SieScape de un desgarro del retináculo lateral. Fig.13.11 d CL en 3D de un desgarro del retináculo lateral.
Fig.13.13 a CL. Ruptura y calcificación del complejo Fig.13.13 b CL en SieScape con ruptura y calcificación del com-
capsuloligamentoso medial. plejo capsuloligamentoso medial.
Fig.13.14 a CL con desgarro parcial del complejo capsu- Fig.13.14 b CL en 3D que muestra mejor el desgarro parcial del
loligamentoso medial (flecha). complejo capsuloligamentoso medial (flecha).
Ilustraciones 337
Fig.13.15 a CL a nivel de la fosa poplitea derecha, donde se ve al Fig.13.15 b CL en SieScape del mismo paciente, donde se define
segmento distal normal del LCP. aun mejor la extensión del ligamento.
Fig.13.15 c CL del segmento distal del LCP contralateral del Fig.13.15 d CL en SieScape, donde además de lo descrito ante-
mismo paciente donde se demuestra engrosamiento del riormente, se ven áreas de fibrosis (ecogénicas) del LCP
mismo. en su inserción en la tibia.
COLECCIÓN EXTRAARTICULAR
Fig.13.16 a CL. Colección extrarticular de la rodilla. Fig.13.16 b CT del caso anterior, con una colección extrarticular
de la rodilla.
BURSAS
Fig.13.18 CL en SieScape que muestra una bursitis prepatelar. Fig.13.19 CL en una bursitis pretibial.
Fig.13.20 a CL en la región prepatelar donde se observa disten- Fig.13.20 b CT de la región patelar donde se demuestra lo ante-
sión de la bursa prepatelar con contenido espeso y una riormente descrito. Las flechas señalan dos gruesas cal-
gruesa calcificación (flecha) hacia su extremo inferior. cificaciones.
Ilustraciones 339
Fig.13.20 c CL en SieScape del caso anterior, donde además se Fig.13.20 d Otro CL en SieScape donde se ve mejor la relación
puede ver la relación de la bursa con los tendones del de la bursa con la expansión prepatelar del cuádriceps.
aparato extensor. Hemobursa postraumática
Fig.13.22 a CT en SieScape. Quiste de Baker con calcificación. Fig.13.22 b CC en 3D de un Quiste de Baker con calcificación.
Fig.13.24 a CT en SieScape Quiste de Baker comunicante. Fig.13.24 CL en SieScape. Quiste de Baker con paredes engrosa-
das.
Fig.13.25 a CL en una bursitis traumática prepatelar. Fig.13.25 b CL en 3D. Bursitis traumática prepatelar. La flecha
señala la fractura del extremo distal de la patela.
Ilustraciones 341
CUERPOS LIBRES
Fig.13.26 a CT. Bursitis suprapatelar con calcificación. Fig.13.26 b CT en SieScape. Bursitis suprapatelar con calcificación.
Fig.13.26 c CL. Bursitis suprapatelar con calcificación. Fig.13.26 d CL. Bursitis suprapatelar con calcificación.
Fig.13.26 e CL en SieScape. Bursitis suprapatelar con calcifi- Fig.13.27 CL en una bursitis suprapatelar con calcificación.
cación.
Fig.13.28 a CT a nivel de los cóndilos femorales con visualización Fig.13.28 b CT en SieScape que muestra, aun mejor el cartílago
del cartílago articular normal de la rodilla. articular normal.
Fig.13.29 a CT. Afinamiento del cartílago del CFM. Fig.13.29 b CT. Lado contralateral normal.
Fig.13.30 a CT en SieScape. Irregularidad y afinamiento del car- Fig.13.30 b CT. Engrosamiento de aspecto inflamatorio del car-
tílago de los cóndilos femorales de la rodilla derecha. tílago del cóndilo femoral medial de la rodilla izquierda
del mismo paciente.
Ilustraciones 343
PLICA SINOVIAL
Fig.13.31 a CL en SieScape. Plica sinovial medio-patelar (fle- Fig.13.31 b CL en SieScape. Plica sinovial medio-patelar (flecha)
cha) con afinamiento del cartílago del CFM. con afinamiento del cartílago del CFM.
Fig.13.32 CL. Plica sinovial medio-patelar normal. Fig.13.33 CL. Plica sinovial medio-patelar engrosada con afina-
miento del cartílago del CFM.
Fig.13.34 a CL. Vista comparativa de ambas rodillas: Engrosa- Fig.13.34 b CL. Plica sinovial medio-patelar normal.
miento de la plica medio-patelar izquierda.
Fig.13.36 a CT. Plica sinovial medio-patelar engrosada y afina- Fig.13.36 b CL en SieScape. Plica sinovial medio-patelar engro-
miento del cartílago del CFM. sada y afinamiento del cartílago del CFM.
Fig.13.37 CL. Plica Suprapatelar en paciente con una sinovitis Fig.13.38 CL. Plica medio-patelar y engrosamiento del cartílago
postraumática. del CFM.
Ilustraciones 345
LESIÓN DE LOS MENISCOS
Fig.13.39 a CL. Cuerno posterior del menisco medial normal. Fig.13.39 b CL. Vista selectiva del cuerno posterior del menisco
medial normal.
Fig.13.40 CL. Lesión del cuerno posterior del menisco medial Fig.13.41 CL. Vista comparativa de ambas rodillas con lesión del
(flecha). cuerno posterior del menisco medial derecho (flecha).
Fig.13.42 CL. Quiste parameniscal lateral. Fig.13.43 CL en SieScape. Lesión meniscal (flecha), con quiste
parameniscal medial.
Fig.13.46 a CL. Lesión del cuerno posterior del menisco lateral Fig.13.46 b CL en 3D del caso anterior
(flecha).
Fig.13.47 a CL de un menisco medial suturado (flecha). Fig.13.47 b CL. en que se ven puntos de sutura hasta la piel
(flechas).
Ilustraciones 347
SINOVITIS
Fig.13.48 a CL. Derrame articular con proliferación sinovial y Fig.13.48 b CT en SieScape. Derrame articular sin proliferación
grueso tabique en el interior de la bursa suprapatelar sinovial.
(flecha).
Fig.13.49 a CL. Derrame articular con proliferación sinovial y Fig.13.49 b CL. Derrame articular con proliferación sinovial (+)
grueso osteofito (flecha) a nivel del polo superior de la a predominio de la pared posterior dela bursa.
patela.
Fig.13.50 a CL. Derrame articular con proliferación sinovial. Fig.13.50 b CL. Otra vista del caso anterior.
Fig.13.52 a CT. Derrame articular con proliferación sinovial. Fig.13.52 b CT en SieScape. Derrame articular con prolifera-
ción sinovial.
Fig.13.52 c CT en SieScape. Derrame articular con proliferación Fig.13.52 d CT en SieScape. Otra vista del caso anterior.
sinovial del mismo paciente.
Ilustraciones 349
Fig.13.53 a CT Derrame articular con proliferación sinovial y Fig.13.53 b CT en SieScape del caso anterior.
grueso tabique (flechas).
Fig.13.54 a CL Derrame articular con proliferación sinovial. Fig.13.54 b CL en 3D del paciente de la figura anterior.
Fig.13.55 a CL Sinovitis crónica en un paciente con AR que mues- Fig.13.55 b CT en SieScape. Derrame articular postraumático
tra una calcificación (flecha). en otro paciente.
Fig.13.56 a CL. Estrechamiento del espacio articular medial Fig.13.56 b CL en SieScape. Estrechamiento del espacio articu-
(flechas). lar medial.
Fig.13.57 a CL. Estrechamiento del espacio articular medial con Fig.13.57 b CL en 3D en que se ve mejor el estrechamiento arti-
gruesos osteofítos. cular y los osteofitos.
Fig.13.57 c CL en SieScape del caso anterior. Fig.13.57 d CL en 3D. Signos de Osteoartritis con presencia de
osteofitos.
Ilustraciones 351
LESIONES ÓSEAS
Fig.13.58 a CL. Osteocondroma próximo al cóndilo tibial lateral Fig.13.58 b CL en SieScape que muestra mejor el osteocondroma.
(flechas).
Fig.13.59 a Cl en una fractura patelar. Fig.13.59 b CL en que se muestra la rótula contralateral normal.
Fig.13.60 a CL en SieScape. Fractura patelar. Fig.13.60 b CL en 3D. Fractura patelar señalada por las flechas.
LESIONES EXTRAARTICULARES
Ilustraciones 353
TUMORES INTRAARTICULARES
Fig.13.63 a CT de la rodilla con una masa intraarticular. Fig.13.63 b CT en SieScape de la masa intraarticular de la figu-
ra anterior.
Fig.13.64 a CT. Tumor intraarticular. Fig.13.64 b Técnica Doppler Color de la lesión Intraarticular
anterior.
Fig.13.67 a CT. Tumor intraarticular Fig.13.67 b CT en SieScape del tumor intraarticular de la lesión
anterior. Sarcoma sinovial.
Fig.13.68 a CT de una tumoración en íntima relación con la Fig.13.68 b CL del caso anterior en que se ve la irregularidad del
cortical de la tibia. periostio. Sarcoma parostal.
Ilustraciones 355
Fig.14 a Vista anatómica de la región dorsal del tobillo con el Fig.14 b Estudio Ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
Fig.14 c Vista anatómica de la región dorsal del tobillo con el Fig.14 d Estudio Ecográfico en CT de esa región.
transductor en corte transversal.
Fig.14 e Vista anatómica de la región lateral del tobillo con el Fig.14 f Estudio Ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
Fig.14 i Vista anatómica de la región posterior del tobillo con el Fig.14 j Estudio Ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
Fig.14 k Vista anatómica de la región dorsal del pie con el Fig.14 l Estudio Ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
Ilustraciones 357
Fig.14 m Vista anatómica de la región plantar del pie con el Fig.14 n Estudio Ecográfico en CL de esa región.
transductor en corte longitudinal.
NORMAL
Fig.14.1 a CL en SieScape de la región anterior del tobillo. Ten- Fig.14.1 b CT del mismo caso. Se visualizan los tendones del
dón del tibial anterior. tibial anterior y del extensor común de los dedos.
Fig.14.1 c CL en la región anterior del tobillo a nivel de uno de los Fig.14.1 d CT a nivel de la región anterior del tobillo. Tendones
tendones extensores anteriores. extensores del pie.
Fig.14.1 g CL .en la región posterior del tobillo. Tendón de Fig.14.1 h CT del caso anterior.
Aquiles (TA).
Fig.14.1 iCL en SieScape del mismo paciente a nivel de la unión Fig.14.1 j CL más distal del caso anterior.
músculo-tendinosa del Aquiles.
Ilustraciones 359
Fig.14.1 k CL en SieScape de la región posterior del tercio distal Fig.14.1 l Otro CL en SieScape del mismo caso en que se ve el
de la pierna y tobillo. Tríceps sural y su tendón común. tendón de Aquiles.
TENDINITIS Y TENOSINOVITIS
Fig.14.2 a CL en SieScape. Tenosinovitis de los flexores del pie. Fig.14.2 b CL en SieScape del mismo paciente.
Fig.14.5 a CL con tenosinovitis crónica del tibial posterior. Fig.14.5 b CT del caso anterior.
Fig.14.6 a CT. Tenosinovitis de los peroneos. Fig.14.6 b CT del caso de la figura anterior.
Ilustraciones 361
Fig.14.7 CL. Tenosinovitis del flexor del 2do.dedo del pie derecho. Fig.14.8 CT. Tenosinovitis de los flexores del 2do. Y 3er dedos del
pie izquierdo.
Fig.14.9 CL. Tenosinovitis crónica del extensor con calcificacio- Fig.14.10 CT con tenosinovitis crónica del extensor.
nes y sinovitis interfalangica del 1er dedo.
Fig.14.12 c CL a nivel de la articulación tibio-escafoidea del mis- Fig.14.12 d CL a nivel de la articulación tibio-escafoidea obser-
mo paciente, donde se observa engrosamiento y pérdida vándose signos de desgarro del ligamento deltoideo, en
del patrón normal del ligamento deltoideo. su componente anterior.
SINOVITIS
Fig.14.13 a CL. sinovitis crónica del tobillo. La flecha indica el EA Fig.14.13 b CL. Otro aspecto de una sinovitis crónica del tobillo.
estrechado.
Ilustraciones 363
Fig.14.13 c CL. Sinovitis crónica del tobillo. Fig.14.13 d CL. en un paciente con una sinovitis crónica del tobillo.
Fig.14.13 e CL. Sinovitis crónica del tobillo. Fig.14.14 CL. Otro paciente con una sinovitis crónica del tobillo.
Fig.14.15 a CL. Sinovitis crónica del tobillo. Fig.14.15 b CL. Otro aspecto de una sinovitis crónica del tobillo.
Fig.14.17 CL. en SieScape de un paciente con una sinovitis Fig.14.18 CL en SieScape de un paciente con una sinovitis cróni-
crónica del tobillo. La flecha señala una de las calcifi- ca del tobillo con una calcificación (flecha).
caciones (flecha).
Fig.14.19 a CL. Articulación metatarso-falángica normal. Fig.14.19 b CL. Sinovitis metatarso-falángica del 2do dedo.
Ilustraciones 365
Fig.14.20 CL. Sinovitis crónica de la articulación tibio-tarsiana. Fig.14.21 Cl. Sinovitis crónica de la articulación tarso-
metatarsiana.
TUMORES
Fig.14.22 CT. Tumor en el trayecto del nervio tibial posterior. Fig.14.23 CL. Tumor óseo del tarso.
Fig.14.24 a CL. Otra vista del tumor óseo del tarso. Fig.14.24 b CL. Tumor óseo del tarso.
Fig.14.25 a CL. Granuloma a cuerpo extraño. Fig.14.25 b CL en SieScape. Se ve mejor el granuloma a cuerpo
extraño.
Fig.14.25 c CL. Otra vista del granuloma a cuerpo extraño. Fig.14.25 d CL. Otra vista del mismo paciente.
Ilustraciones 367
Fig.15.1 a CT. en SieScape de un tumor del pectoral mayor con Fig.15.1 b CL. en SieScape del caso anterior con las característi-
características de benignidad. cas de un tumor benigno.
Fig.15.2 a CL. Tumor benigno del aductor mayor. Fig.15.2 b CL en SieScape del caso anterior.
Fig.15.2 c CL. en SieScape del tumor benigno del aductor mayor. Fig.15.2 d CT en SieScape del mismo caso.
Fig.15.4 a CT en un tumor maligno del muslo con extensas áreas Fig.15.4 b CT. con vista de magnificación del caso anterior.
de necrosis.
Fig.15.4 c CT. de una composición fotográfica del mismo paciente. Fig.15.4 d Vista de magnificación que muestra la extensa área de
necrosis tumoral. Fibrohistiocitoma maligno.
Ilustraciones 369
Fig.15.5 a CT. de un Rabdomiosarcoma del recto interno. Fig.15.5 b CL en SieScape del caso anterior.
Fig.15.5 c SieScape en CL del paciente con el Rabdomiosarcoma Fig.15.5 d Otra vista en SieScape del mismo paciente.
del recto interno.
Fig.15.6 a Corte en que se aprecia una recidiva tumoral. Fig.15.6 b CL. en SieScape del caso anterior.
Fig.15.8 a CL. de una tumoración del cuadríceps de contornos Fig.15.8 b DC del caso anterior que muestra un gran número de
bien definidos. No hay lesión ósea. vasos intratumorales y un Espectro patológico.
Fibrohistiocitoma maligno.
Fig.15.9 a CT de un tumor sólido del vasto intermedio. Fig.15.9 b DC del caso anterior que muestra vasos intratumorales.
Ilustraciones 371
Fig.15.9 c Otra vista del mismo paciente que demuestra su origen Fig.15.9 d Imagen en 3D en que se ve la extensión longitudinal
en el vasto intermedio. de la tumoración.
Fig.15.9 e DC que muestra un gran flujo vascular dentro del tumor Fig.15.9 f DC del mismo caso que muestra el aspecto patológico
del espectro.
Fig.15.10 a CT en la cara posterior del brazo. Gran masa tumoral Fig.15.10 b CL en SieScape de la región posterior del brazo del
intramuscular. mismo caso.
Fig.15.10 e Doppler color del caso anterior donde se ve la escasa Fig.15.10 f CL en 3D del mismo caso. Tumor maligno del brazo.
vascularización del tumor.
Fig.15.11 a CL de la región anterior del muslo. Tumor mixto Fig.15.11 b CL en SieScape de la región posterior de la pierna.
intramuscular.
Ilustraciones 373
TUMOR INTRAMUSCULAR.
Fig.15. 11 c CL en Siescape del caso anterior. Fig.15. 11 d CL en 3D del mismo paciente. Sarcoma indiferenciado
MASAS EXTRAMUSCULARES
Fig.15.12 a CT del muslo donde se visualiza un nódulo ecogénico Fig.15.12 b CL en SieScape del caso anterior, donde se ve aún
y bien definido en el TCS, con el aspecto de un lipoma. mejor su fina pared.
Fig.15.12 c Cl en SieScape del tercio superior del brazo donde se Fig.15.12 d CL en 3D. Lipoma.
observa un nódulo ovalado entre el TCS y el deltoides.
Fig.15.13 c Otra vista del mismo paciente en que se comprueba su Fig.15.13 d CL en SieScape que muestra aún mejor la localiza-
naturaleza extramuscular. ción y extensión del tumor.
Fig.15.14 a CL de la región dorsal del hombro donde se observa Fig.15.14 b CL con Doppler color del mismo caso en que se ve que
tumor extramuscular. la tumoración aparece pobremente vascularizada.
Ilustraciones 375
Fig.15.15 a CL. Infiltración linfomatosa de las partes blandas del Fig.15.15 b CT en SieScape del caso anterior que demuestra aún
tórax en íntima relación con la pleura. mejor la infiltración tumoral en un linfoma (LNH).
Fig.16 a Trayecto de la aguja lejos de la lesión. Fig.16 b Se ve el trayecto de la aguja acercándose a la lesión.
PACIENTE NORMAL
Fig.17 a
Ilustraciones 377
PACIENTE CON OSTEOPENIA
Fig.17 b
Fig.17 c
Ilustraciones 379
FIG.18 c Pacientes estudiados.