Informe Contaminacion Desechos Toxicos y Solidos
Informe Contaminacion Desechos Toxicos y Solidos
Informe Contaminacion Desechos Toxicos y Solidos
PRESENTADO POR:
Sánchez, José
La palabra basura significa algo despectivo, algo que carece de valor y de lo que hay
que deshacerse. De esta manera, lo que alguna vez fue útil, se convierte en un estorbo
y es causa del problema de cómo desechamos lo que consumimos o producimos. La
cantidad de basura que se genera en los hogares ha ido en aumento. Las personas, por
no contar con programas de orientación para el manejo de los desechos sólidos, en vez
de reciclar la basura la tiran o la queman. El hecho de arrojar la basura ha aumentado la
proliferación de insectos, roedores y microorganismos patógenos, trayendo como
consecuencia un gran número de enfermedades que afectan tanto a los niños como a
los adultos. Un mal sistema de gestión de las basuras, produce un deterioro del entorno
debido a la contaminación del aire, del agua y del suelo. Cuando se carece de un manejo
apropiado de los desechos sólidos, se está arriesgando la salud de la gente.
Los desechos sólidos tóxicos pueden ser causa de varios efectos nocivos sobre la
salud de los seres humanos y otras especies de animales. En general, los desechos
sólidos tóxicos pueden deteriorar desde los suelos, pasando a la cadena alimenticia y
acabar llegando, por supuesto, al hombre.
Las dioxinas son los desechos tóxicos que peores consecuencias causan para el ser
humano y el resto del entorno animal y vegetal. No existe otro desecho tóxico peor que
las dioxinas.
Las dioxinas se caracterizan por estar diseñadas usando partículas de cloro, que
como hemos dicho anteriormente se acumulan en el cuerpo en las zonas de grasas e
influir en todo nuestro sistema hormonal. El cuerpo no puede eliminarlas.
Con apenas dos ppm (partes por millón) de dioxinas es posible ya producir erupciones
cutáneas, jaquecas, mareos, vómitos y malestar generalizado.
Muchos estudios con animales demuestran que al entrar en contacto con las dioxinas
pueden provocarles cáncer, alteraciones en los riñones y otros órganos vitales, así como
deformaciones congénitas.
Los fenoles son desechos tóxicos de baja consideración que pueden provocar
irritación ocular e irritación cutánea. En ocasiones, ante una elevada exposición al fenol
puede ocasionar incluso la muerte por daño en los riñones.
Se trata de un tóxico bastante irritante que en dosis elevadas puede llegar a causar
trastornos digestivos y diarreas.
Fósforo (p), es un elemento necesario para la vida, pero como ya hemos comentado
anteriormente sobre los fosfatos, en exceso hace proliferar la flora, y daña todo el
ecosistema acuático.
Son desechos derivados del petróleo. Al igual que los fosfatos, impiden la buena
penetración del sol sobre las zonas acuáticas afectando a todo el ecosistema. También
puede provocar irritaciones en la piel y los ojos.
El problema del mercurio es que por medio de algunas bacterias acuáticas, este
mercurio se puede transformar en metilato de mercurio. Y esta nueva molécula en caso
de ser injerida por el ser humano o por un animal, se queda concentrada sin poder ser
expulsada. A veces en zonas donde ha existido una fuga de mercurio, éste se acumula
en animales marinos como el marisco o el pescado contaminado.
Si este mercurio llega a la cadena alimenticia de una embarazada y por tanto al feto,
es posible causarle daños cerebrales y anormalidades en el correcto desarrollo de sus
neuronas.
En las ciudades hemos estado expuestos y aún lo seguimos pero en menor medida,
gracias al plomo añadido a los combustibles y gasolinas que aumentaban su rendimiento.
Así mismo muchas cañerías antiguas siguen siendo de plomo.
El plomo (Pb), se comporta en los huesos de forma similar a como lo hace el calcio,
y en épocas de deficiencia de calcio, es capaz de llegar a la corriente sanguínea y
comenzar a contaminarnos.
Entre las principales causas aparece la industrial ya que son las grandes fábricas
quienes producen los desechos que luego llegan a parar al medio ambiente.
La demanda por parte de la sociedad de varios productos los cuales su desarrollo
depende de la utilización de productos químicos altamente tóxicos.
El mal manejo de las materias resultantes de los procesos químicos las cuales al ser
desechadas se convierten en residuos contaminantes.
Existe una relación directa entre la contaminación del aire y las enfermedades
respiratorias como el asma. La exposición a los residuos peligrosos de las emisiones
irrita las membranas mucosas de la boca y la garganta. Un estudio de 2008 publicado
en los Anales de la Academia de Ciencias de Nueva York encontró que los individuos
que viven más cerca de sitios de desechos peligrosos tienen un mayor riesgo de
desarrollar enfermedades respiratorias.
Los riesgos de vivir cerca de sitios de residuos peligrosos no se detienen con mayor
riesgo de enfermedad respiratoria. Un estudio de 2004 publicado en la revista Archives
of Environmental Health encontró un riesgo elevado de desarrollo de las cardiopatías
congénitas en los hijos de mujeres embarazadas que viven dentro de una milla (1,61
km) de un sitio de desechos peligrosos. La amenaza también es más inocua. Las
emisiones de automóviles también tienen un mayor riesgo de ataque cardíaco y
accidente cerebrovascular por el engrosamiento de las arterias. Las emisiones de
combustibles fósiles contienen varias toxinas consideradas residuos peligrosos no
específicos por la EPA. A los residuos peligrosos no específicos son una fuente que no
es fácilmente identificable.
El problema es común en las grandes ciudades de este vasto país, pero no exclusivo
de China. Es una 'migraña global', un reto en la gestión de viveros humanos de gran
tamaño. Como Shanghai, que con sus 19 millones de habitantes generó en 2007 un
volumen de basura capaz de llenar cinco veces la torre Jinmao, el tercer edificio más alto
del mundo.
CONCLUSIÓN
Se debe brindar una capacitación referente a la higiene, de tal manera se evitaría todo
tipo de enfermedad y contaminación ambiental.
Con un buen manejo de estilos de vida saludable se logra una calidad de vida y un
bienestar físico, mental e intelectual.