Geología Jonathan

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GEOLOGÍA

La geología (del griego γεια, geo "Tierra" y λογος, logos


"Estudio") es la ciencia que estudia la forma interior del
globo terrestre, la materia que la compone, su mecanismo de
formación, los cambios o alteraciones que ésta ha
experimentado desde su origen, la textura y estructura que
tiene en el actual estado. Por lo que se denomina, dentro de
la Carrera de Licenciatura, la de "Ciencias Geológicas", esto
es, un compendio de diferentes ciencias o disciplinas
autónomas sobre distintos aspectos del estudio global de
nuestro planeta, y por extensión, del estudio del resto de los
cuerpos y materia del sistema solar (astrogeología o geología
planetaria).

PROCESOS GEOLÓGICOS.

Procesos Endógenos:

La separación de las grandes placas litosféricas, la deriva


continental y la expansión de la corteza oceánica ponen en
acción fuerzas dinámicas asentadas a grandes profundidades. El
diastrofismo es un término general que alude a los movimientos
de la corteza producidos por fuerzas terrestres endogénicas
que producen las cuencas de los océanos, los continentes, las
mesetas y las montañas. El llamado ciclo geotectónico
relaciona estas grandes estructuras con los movimientos
principales de la corteza y con los tipos de rocas en
distintos pasos de su desarrollo.

La epirogénesis afecta a partes grandes de los continentes y


de los océanos, sobre todo por movimientos verticales, y
produce mesetas y cuencas. Los desplazamientos corticales
lentos y graduales actúan en particular sobre los cratones,
regiones estables de la corteza. Las fracturas y
desplazamientos de rocas, que pueden medir desde unos pocos
centímetros hasta muchos kilómetros, se llaman fallas. Los
géiseres y los manantiales calientes se encuentran, como los
volcanes, en áreas tectónicas inestables.

Formación de las montañas


La orogénesis, o creación de montañas, tiende a ser un proceso
localizado que distorsiona los estratos preexistentes. Las
cordilleras se forman en zonas especiales de la corteza,
llamadas geosinclinales: Cuencas marinas donde se recogen gran
cantidad de sedimentos que proceden de la destrucción del
continente. En ésta zona de compresión de la corteza se
originan las grandes fuerzas necesarias para plegar los
materiales. Las montañas se generan en los bordes destructivos
de las placas de la litosfera, lo que explica la presencia de
pliegues, fallas inversas, volcanes y terremotos. La actividad
será mayor cuando más joven sea la cordillera.

Cratones

Los cratones se encuentran en las zonas centrales de los


continentes. Están formados por rocas que se consolidaron en
el arcaico, sobre todo, gneis, granito de anatexia y
esquistos. Son regiones muy estables. Los movimientos que se
producen son epirogénicos y el flujo térmico es muy reducido.
El calor que desprenden las rocas es muy escaso porque ya se
ha producido la desintegración de los elementos radiactivos
que contenían hace 2.000 o 3.000 millones de años. Las rocas
metamórficas y los granitos pueden estar cubiertos de
sedimentos. Los cratones están rodeados de regiones formadas
por rocas más jóvenes, resultado de procesos orogénicos.

Fallas

Líneas de fractura a lo largo de las cuales una sección de la


corteza terrestre se ha desplazado con respecto a otra. Su
aparición está asociada con los bordes entre placas que se
deslizan unas sobre otras y con lugares donde los continentes
se separan.

El movimiento responsable de la dislocación puede tener


dirección vertical, horizontal o una combinación de ambas.
Cuando la actividad en una falla es repentina y abrupta, se
puede producir un fuerte terremoto e incluso una ruptura de la
superficie formando una forma topográfica llamada escarpe de
falla.

Volcanes

Un volcán es una fisura en la corteza terrestre sobre la que


se acumula un cono de materia volcánica. Los volcanes se
producen por la efusión de lava desde las profundidades de la
Tierra. La mayoría de los volcanes son estructuras compuestas,
formadas en parte por corrientes de lava y materia
fragmentada.

Muchos volcanes nacen bajo el agua, en el fondo marino. El


Etna y el Vesubio empezaron siendo volcanes submarinos, como
los conos amplios de las islas Hawai y de otras muchas islas
volcánicas del océano Pacífico.

Los terremotos

Los teremotos o seísmo son sacudidas bruscas y breves de la


corteza terrestre. Éstos fenómenos se producen sobre todo en
los bordes de las placas litosféricas, alcanzando mucha más
violencia en las zonas de subducción donde las fricciónes son
muy intensas al tratarse de la introducción forzada de una
placa litosférica bajo otra. Otros terremotos se producen en
el interior de las placas litosféricas como es el caso de un
continente sometido a una fuerte tensión debido a la formación
de un orógeno en el borde de la placa de la que forma la
parte. También pueden provocarse por erupciones vulcánicas o
por la formación de fallas.

Procesos exógenos:

La tierra está sometida a una serie de procesos que tienden a


allanar relieves, a destruír rocas creando cosas nuevas, etc.
Todos éstos agentes actúan gracias a dos tipos fundamentales
de energía: La del Sol y la atracción de la gravedad. Los
ríos, las aguas subterráneas, los glaciares, el viento y los
movimientos de las masas de agua (mareas, olas y corrientes)
son agentes geomorfológicos primarios. Puesto que se originan
en el exterior de la corteza, estos procesos se llaman
epígenos o exógenos. Los agentes geológicos externos
intervienen en cuatro tipos de procesos:

Erosión o meteorización, en la que los agentes actúan sobre la


roca disgregándola y descomponiéndola. Existen dos tipo de
meteorización que pueden actuar simultaneamente o por
separado: Mecánica (separación física de fragmentos de roca,
puede realizarse por empuje del agente es sí por la acción de
otros fragmentos de roca arrasados) que es muy frecuente en
regiones con climas extremados: desiertos, montañas, etc.
Química (alteración de la composición de las rocas por
diversos productos que el agente transporta), puede ser
hidratación, hidrólisis, oxidación y carbonación.

Transporte de los materiales producidos en la erosión, bien


disueltos en agua o bien suspendidos y arrastrados por el
viento.

Sedimentación de materiales.

Formación de rocas sedimetarias a partir de los sedimentos


acumulados pro la intervención de procesos fisicoquímicos.

Acción geológica del viento

El viento erosiona mediante el impacto de los granos de arena


que lleva en suspensión. Las partículas suspendidas en el
viento, al ser lanzadas una y otra vez sobre las rocas van
gastando sus superficie a la vez que ellas se desgastan.Cuando
la roca afectada posee minerales de diferente resistencia se
pueden producir superficies alveoladas, escalonadas o con
tuneles.

Acción geológica de las aguas salvajes

Las aguas salvajes son aquellas que no tienen curso fijo; se


originan con el agua de lluvia o cuando se produce el deshielo
y el agua comienza a correr sobre el terreno, formano pequeños
hilos. Los materiales pcoc consolidados son atacados por las
aguas salvajes que van arrancanod pequeñas partículas y
tallando surcos que se agrandan hasta producir barrancos. En
ocasiones, el terreno empapado por una fuerte lluvia se
desliza en forma de avalanchas de tierra o desprendimientos de
piedras que pueden ocasionar grandes catástrofes. Al descender
por las laderas, las aguas salvajes se van encauzando hasta
incorporarse a una cauce determinado. Los torrentes son cauces
temporales que discurren por grandes pendientes; suelen
depositar los aluviones cuando alcanzan la llanura. Varios
depositos se pueden unir lateralmente formando acúmulos de
piedemonte.

Acción Fluvial

Los ríos son cauces permanentes de agua. La erosión fluvial


provoca el ahondamiento, ensanchamiento y alargamiento del
valle. El ahondamiento consiste en la profundización del tío
en su valle. Si está formado por rocas duras aparece una valle
muy estrecho. El ensanchamiento del calle se produco mediante
los meandros: Cuando en un río existen curvaturas iniciales,
éstas tienden a acentuarse ya que el agua se lanza contra la
orilla cóncava que va siendo excavada. En la orilla convexa se
depositan los materiales.

Acción de las Aguas Subterráneas

Las aguas subterráneas son las que circulan por el subsuelo.


Pueden ser de dos clases: Freáticas, que producen la
infiltración en el terreno del agua de lluvia, y, en menor
proporción las aguas Juveniles, formadas por el enfriamiento
de un magma en el interior de la corteza. La infiltración
depende de diversos factores: Topografía, cubierta vegetal, y
sobre todo, el tipo de roca. La acción geológica de las aguas
subterráneas se debe a su poder disolvente. Uno de sus
principales efectos es la alteración de las rocas por las que
discurren mediante procesos de meteorización química.

Acción de los glaciares

El enorme peso de los glaciares provoca una erosión muy


intensa. En su movimiento, el glaciar arranca fragmentos de
roca que quedan englobados en su masa y contribuyen a
erosionar el lecho. En las zonas que han estado sometidas a la
acción glaciar, las rocas se conocen como “rocas aborregadas”
por recordar a lo lejos un rebaño de borregos. Otra forma de
erosión originada por el glaciar es el “circo”, depresión de
paredes muy verticales y de forma semicircular. Los materiales
arrastrados y depositados por el glaciar reciben el nombre
genérico de “morrenas”. La fuerza de una glaciar es tan grande
que tritura los materiales convirtiéndolos en un prol muy fino
llamado “harina de roca” que se deposita en el frente del
glaciar. Cuando la masa del glaciaar desciende a latitudes más
cálidas se produce la fusión del hielo, formándose ríos.

Acción geológica del mar

Las aguas marinas también ejercen acciones destructoras,


desmenuzando y arrastrando los materiales tanto propios como
procedentes de los materiales gracias al oleaje, las
corrientes y las mareas. La acción erosiva del mar, abrasión,
es la principal responsable del modelaado de las costas. La
violencia del choque de las olas contra el acantilado hace que
el agua, ala penetrar por las grietas, actúe como una cuña
removiendo bloques de roca. Además arranca fragmentos sobre el
acantilado, aumentan la erosión. La abrasión contribuye a la
formación de los acantilados, superficies rocosas que al ser
erosionadas sobre todo en su base pueden desplomarse y
contribuir de este modo al retroceso de las costas. La acción
del oleaje a ambos lados de un promontorio pued ocasionar la
comunicación de aquéllos, formando un arco natural que, si se
derrumba, originará un islote costero. A diferencia de los
cantos rodados de los ríos, los cantos costeros tienden a ser
aplanados por el movimiento del vaivén de las olas. La
sedimentación puede dar origen, entre otros, a los siguientes
accidentes: las playas, las albuferas, los tómbolos y la
flecha litoral.

Placas Tectónicas:

La ciencia que estudia la disposición relativa de los


materiales en la corteza terrestre, así como los mecanismos
que la han originado, es la Tectónica. Una mejor comprensión
de la actividad sísmica ha sido posible con el descubrimiento
de que los grandes terremotos se producen por el movimiento de
las placas tectónicas de la Tierra. Además, casi todo lo que
podemos suponer sobre el manto y el núcleo terrestre se ha
deducido por el análisis del paso de ondas sísmicas por el
centro de la Tierra. Los logros más importantes en la
investigación de esta zona han sido posibles gracias al uso de
una técnica sonar desarrollada originalmente en sismología
para encontrar petróleo y gas, llamada perfilado sísmico por
reflexión.

La corteza de la Tierra está conformada por una docena de


placas de aproximadamente 70 km de grosor, cada una con
diferentes características físicas y químicas. Las placas
tectónicas se están acomodando en un proceso que lleva
millones de años y han ido dando la forma que hoy se conocen
como a la superficie del planeta, dando origen a los
continentes y los relieves geográficos en un proceso que está
lejos de completarse. Habitualmente estos movimientos son
lentos e imperceptibles, pero en algunos casos estas placas
chocan entre sí impidiendo su desplazamiento. Entonces una
placa comienza a desplazarse sobre o bajo la otra provocando
lentos cambios en la topografía. Si el desplazamiento es
dificultado, comienza a acumularse una energía de tensión que
en algún momento se liberará y una de las placas se moverá
bruscamente contra la otra rompiéndola y liberándose entonces
una cantidad variable de energía que origina el Terremoto.

Las deformaciones de las rocas se manifiestan frecuentemente


en una ondulación de las mismas que se denominan plegamientos.

Las placas superficiales

El globo terrestre presenta cinco grandes placas


superficiales:

 Eurasiática: Eurasia y una parte del norte del Atlántico.


 Americana: Engloba América y parte del Atlántico. Se
considera que está dividida en dos: La Norteamericana y
la Suramericana.
 Antártida: Comprende el sur del Indico.
 Índica: Incluye el continente australiano y el nordeste
del océano Índico.
 Pacífica: Formada por el océano Pacífico.
Los Plieques y el estilo tectónico
La asociación de ciertos tipos de pliegues define el estilo
tectónico de una región, se conocen tres tipos fundamentales:

 Estilo cerámico: Aparecen cordilleras que se caracterizac


por la falta de plieques propiamente dichos y la
presencia de grandes fallas que producen macizos y fosas
tectónicas.

 Estilo jurásico: Se caracteriza por la presencia de


pliegues paralelos y con inclinaciones suaves, asociados
a veces a fallas de la misma dirección.

 Estilo alpino: Se caracteriza po pliegues-falla y mantos


de corrimiento.

VULCANISMO

  El vulcanismo se produce cuando el material fundido del


interior de la Tierra sale a la superficie a través de
grietas, fisuras y orificios. A este material que sale se lo
denomina lava, se caracteriza porque se enfría rápidamente y
libera sus gases disueltos. Por otra parte, algunos de los
minerales de alta temperatura de consolidación se forman y se
separan del magma. De acuerdo a la viscosidad del material,
varían las características de la erupción volcánica.
  El material básico, que se caracteriza por su alta
temperatura, de aproximadamente 1000/1200°C, su bajo contenido
de sílice, su elevada fluidez y el rápido desprendimiento de
los gases, origina erupciones que no son explosivas. Por el
contrario, dan origen a erupciones donde predomina la fracción
líquida o lava.

  El material ácido, que es viscoso, muy rico en sílice, con


temperaturas de aproximadamente 600°C, origina erupciones muy
violentas, con gran desprendimiento de gases y de la fracción
sólida (piroclastos).

TERREMOTO

Un terremoto, también llamado seísmo o sismo (del griego


"σεισμός", temblor) o temblor de tierra[1] es una sacudida del
terreno que se produce debido al choque de las placas
tectónicas y a la liberación de energía en el curso de una
reorganización brusca de materiales de la corteza terrestre al
superar el estado de equilibrio mecánico. Los más importantes
y frecuentes se producen cuando se libera energía potencial
elástica acumulada en la deformación gradual de las rocas
contiguas al plano de una falla activa, pero también pueden
ocurrir por otras causas, por ejemplo en torno a procesos
volcánicos, por hundimiento de cavidades cársticas o por
movimientos de ladera.

TSUNAMI

Un tsunami[1] (del japonés tsu: ‘puerto’ o ‘bahía’, y nami:


‘ola’; literalmente significa ‘ola de puerto’), en ocasiones
denominado también maremoto es una ola o un grupo de olas de
gran energía y tamaño que se producen cuando algún fenómeno
extraordinario desplaza verticalmente una gran masa de agua.
Se calcula que el 90% de estos fenómenos son provocados por
terremotos, en cuyo caso reciben el nombre, más preciso, de
«maremotos tectónicos».

La energía de un tsunami depende de su altura (amplitud de la


onda) y de su velocidad. La energía total descargada sobre una
zona costera también dependerá de la cantidad de picos que
lleve el tren de ondas (en el maremoto del océano Índico de
2004 hubo 7 picos). Este tipo de olas remueven una cantidad de
agua muy superior a las olas superficiales producidas por el
viento.
DIASTROFISMO O TECTONISMO

El diastrofismo es el conjunto de muchos procesos y fenómenos


geofísicos de deformación, alteración y dislocación de la
corteza terrestre por efecto de las fuerzas internas. Es una
palabra derivada del griego y que significa "torsión".

Por oposición al catastrofismo, el diastrofismo explica las


deformaciones terrestres por fenómenos de curvatura y de
plegamiento extremadamente lentos. En ciertos casos se trata
de epirogénesis: el levantamiento o el hundimiento de la
corteza abarca extensiones muy grandes; el radio de curvatura
de las deformaciones se hace entonces muy grandes y los
declives tienen escasa pendiente. En otros casos, las
deformaciones son mucho más importantes, aunque netamente
localizadas. Se trata entonces de orogénesis, proceso que ha
dado lugar a la formación de grandes cordilleras. En la
epirogénesis el fenómeno fundamental es el ascenso o descenso
de grandes superficies; en la orogénesis, el plegamiento o
fractura.

La causa principal por la que se produce el diastrofismo es la


existencia de corrientes convectivas de magma en la
astenosfera, las que determinan el desplazamiento de las
placas tectónicas. El diastrofismo comprende tanto los
procesos responsables de la fusión de las rocas y la formación
de los magmas como los que participan en la consolidación y
cristalización de los minerales en dichos magmas, para
constituir las rocas magmáticas.

METAMORFISMO

Se denomina metamorfismo —del griego, μετά (meta=cambio) y


μορφή (morph=forma)— a la transformación sin cambio de estado
de la estructura o la composición química o mineral de una
roca cuando queda sometida a condiciones de temperatura o
presión distintas de las que la originaron o cuando recibe una
inyección de fluidos.[1] Al cambiar las condiciones físicas, el
material rocoso pasa a encontrarse alejado del equilibrio
termodinámico y tenderá, en cuanto obtenga energía para
realizar la transición, a evolucionar hacia un estado
distinto, en equilibrio con las nuevas condiciones.[2] Se llama
metamórficas a las rocas que resultan de esa transformación.[3]
Entre los factores que afectan el metamorfismo están:[4]
 La estructura (fábrica) y composición de la roca
original.
 La presión y la temperatura en la que evoluciona el
sistema.
 La presencia de fluidos.
 El tiempo.

Se excluyen del concepto de metamorfismo los cambios


diagenéticos que les ocurren a los sedimentos y a las rocas
sedimentarias a menores temperaturas y presiones, aunque es
muy difícil establecer el límite entre la diagénesis y el
metamorfismo.[5] En el extremo contrario, si se llega a
producir la fusión formándose un magma, la roca que resulte no
será metamórfica, sino magmática.[6] A veces las condiciones
dan lugar a una fusión sólo parcial y el resultado es una roca
mixta, una migmatita, con partes derivadas de la
solidificación del fundido y partes estrictamente
[7]
metamórficas.

Se distingue entre un metamorfismo progresivo, que ocurre


cuando la roca queda sometida a presiones y temperaturas más
altas que las de origen, y un metamorfismo regresivo (o
retrógado), cuando la roca pasa a condiciones de menor energía
que cuando se originaron.[

PLACA DEL CARIBE

La Placa del Caribe es una placa


tectónica con una superficie de 3,2
millones de km², que incluye una parte
continental de la América central
(Guatemala, Belice, Honduras, Nicaragua,
El Salvador, Costa Rica, Panamá) y
constituye el fondo del mar Caribe al
norte de la costa de América del Sur. La
placa del Caribe colinda con la Placa Norteamericana, la Placa
Suraméricana, y la Placa de Cocos.

Bordes
Como en la mayoría de bordes de placas tectónicas, en los
límites de la placa del Caribe hay una actividad sísmica
importante y en algunas zonas hay presencia de volcanes.

 El límite norte de la Placa del Caribe (LNPC) es en su


mayor parte una falla de rumbo o límite transcurrente
(como la falla de San Andrés en California, Estados
Unidos). La parte occidental del LNPC está constituida
por la falla de Motagua, que se prolonga hacia el este
por la zona de falla de las Islas Swan, la Fosa del
Caimán, la falla de Oriente al sur de la isla de Cuba y
el norte de la Española y la fosa de Puerto Rico.

 El límite este es una zona de subducción. Sin embargo,


dado que el límite entre la placa norteamericana y la
sudamericana aún se desconoce, no se sabe cual de las dos
placas (tal vez las dos) desliza bajo la placa del
Caribe. La subducción es responsable de las islas
volcánicas del arco de las Antillas Menores, desde las
Islas Vírgenes hasta la costa de Venezuela. En esta zona
hay 70 volcanes activos, ente ellos los de las Soufriere
Hills en Montserrat, Monte Pelée de Martinica, La Grande
Soufriere en Guadalupe, Soufrière Saint Vincent en San
Vicente y las Granadinas, y el volcán submarino Kick-'em-
Jenny que se encuentra a 10 km al norte de Granada.

VOLCANES DEL EL SALVADOR

Cerro Verde

El Cerro Verde es un volcán extinto ubicado en el Departamento


de Santa Ana, El Salvador, en la cordillera de Apaneca. Tiene
una altura de 2030 msnm y su cráter se encuentra erosionado y
cubierto por un espeso bosque nebuloso. Se estima que su
última erupción fue hace 25 mil años a. C.

En el Cerro Verde se encuentra el Parque Natural homónimo,


administrado por el Instituto Salvadoreño de Turismo; ofrece
miradores a los volcánes de Santa Ana, Izalco y al Lago de
Coatepeque, además de un orquidiario, paseo por el bosque y
escaladas al mismo Volcán de Izalco.

Volcán Chingo

Chingo es un volcán de 1.775 msnm que marca la frontera entre


Guatemala y El Salvador. Se sitúa en los municipios de
Atescatempa y Jerez, departamento de Jutiapa, Guatemala, y el
departamento de Santa Ana, El Salvador. Está cubierto de
bosques y maleza, pero para para marcar la división entre los
dos países, las inmediaciones del cráter se mantienen
recortadas. En la cima hay un monumento que marca la frontera
entre Guatemala y El Salvador.

Es un cono bien formado, del que no tiene registradas


erupciones en siglos recientes y que por eso se conoció
durante mucho tiempo como Cerro Chingo.

En el volcán puede observar parte de El Salvador, el Lago de


Güija que también es fronterizo, la costa sur y algunos
volcanes del oriente del país tales como el Volcán Suchitán.

Volcán de Santa Ana

El volcán de Santa Ana, ubicado en el departamento homónimo en


El Salvador, tiene una altura de 2.381 msnm y es el más alto
de este país.[1] Sus últimas erupciones ocurrieron en 1920, en
1904 y en 2005.[2]

Volcán de Santa Ana cubierto por nubes. En


sus faldas la orilla del Lago Coatepeque.

Forma parte de la cordillera de Apaneca, dentro de un bosque


nuboso montañoso tropical, en una región cafetalera a unos 65
kilómetros al oeste de la capital. Las principales actividades
de la región son la agricultura y el turismo.

En el mes de agosto de 2005 presentó la actividad típica de


muchos volcanes previa a una erupción. El sábado 1 de octubre
a las 8:00 (GMT-6) hora local, hubo una explosión en la que el
volcán expulsó por los cielos ceniza y rocas. Asimismo, un
alud de agua caliente comenzó a descender del cráter matando
al menos dos personas y forzando la evacuación de la zona de
San Blas.

Volcán de Izalco

Volcán de Izalco.
El Volcán de Izalco es el más joven de los volcanes de El
Salvador y uno de los más jóvenes del continente americano. De
acuerdo a la versión popular se originó en el año de 1770,
cuando un orificio en la falda del Volcán de Santa Ana comenzó
a despedir humo y cenizas. Sin embargo, el historiador Jorge
Lardé y Larín indica que sus orígenes se remontan al 19 de
marzo de 1722 cuando se formó «un nuevo cráter por donde
vomitó fuego, lava y cenizas»,[1] el cual hizo una importante
erupción en 1745.[1]

Por 196 años el volcán erupcionó casi sin cesar, tanto que sus
flamas se veían hasta el océano, esto dio lugar a que se
conociera con el sobrenombre de Faro del Pacífico. Su
actividad era tal que se formó un cono de 650 metros sobre la
llanura vecinal (1,952 msnm), con un cráter de 250 metros de
diámetro. Su última erupción regular ocurrió en el año 1958,
aunque en 1966 despertó de su inactividad con una pequeña
erupción lateral;[2] desde entonces se ha notado una
disminución gradual en actividad y temperatura de sus
fumarolas.

Volcán de San Miguel

El volcán de San Miguel está ubicado en el municipio de San


Miguel y a once kilómetros de la ciudad del mismo nombre en El
Salvador. Se levanta aislado de la cordillera de Chinameca.
Tiene una altura de 2129 msnm, siendo el tercer volcán más
alto del país. Presenta un cráter central de unos 800 metros
de diámetro y varios adventicios por los cuales ha expulsado
lava quemada. Además, su cono es considerado entre los mejores
formados de centroamérica.

Este volcán se considera entre los seis más activos de El


Salvador. Se calculan al menos 26 erupciones en los últimos
304 años, la más notable la del año 1787. Desde la fundación
de la ciudad de San Miguel en 1530, se cuentan ocho flujos de
lava a través de las fisuras del cono volcánico. La última
actividad eruptiva se produjo en 1976. La más reciente
actividad sísmica relacionada al volcán data del año 2006.

Volcán de San Salvador

El volcán de San Salvador está ubicado en el departamento


homónimo en El Salvador. Abarca los municipios de
Quezaltepeque, San Juan Opico, Colón y Santa Tecla en el
departamento de La Libertad; y Nejapa en el departamento de
San Salvador. Se encuentra a once kilómetros de la ciudad
capital de este país.

La prominencia consiste de dos masas: una llamada el Picacho


de 1959.97 msnm; y la otra conocida como el Boquerón de
1839.39 msnm que incluye un cráter de 1,5 km de ancho.
Alrededor de estas elevaciones se ubican otros cráteres
inactivos:

 La Joya.  Boqueroncillo.
 Puerta de la laguna.  Los chintos.
 El Jabalí. Volcán joven  El Playón.
e inactivo.  Laguneta la Caldera.
 Maar de Chanmico.

Las primeras erupciones del volcán de San Salvador fueron al


final de la período terciario y principios del cuaternario.
Por otro lado, en el interior del Boquerón existía una laguna
de origen desconocido, la cual se extinguió por ebullición
debido a los fenómenos eruptivos durante el terremoto de San
Salvador de 1917.[1] De acuerdo al historiador Jorge Lardé y
Larín, no se conocen referencias de su presencia durante la
colonización española por algún cronista, sino hasta 1807
cuando el Intendente Antonio Gutiérrez y Ulloa hizo mención de
una «pequeña laguna, árida en sus márgenes y formada de aguas
azufrosas».[1

VOLCÁN DE SAN VICENTE

El volcán de San Vicente está ubicado en los municipios de


Guadalupe y Tepetitán en el departamento de San Vicente; y San
Juan Nonualco y Zacatecoluca en el departamento de la Paz en
El Salvador. Se localiza aproximadamente a 60 kilómetros al
este de la ciudad capital San Salvador. Es el segundo volcán
de más altura de este país.

Consta de dos elevaciones: la más alta de 2.173 msnm con una


depresión en medio, reminiscencia de lo que fue un cráter; la
otra, de 2.083 msnm, que tiene forma de cono con un cráter
abierto hacia el este. En la base del volcán, al lado sur, se
ubican manantiales de aguas termales conocidos como los
infiernillos que emanan fuertes vapores y humo sulfúrico;
hacia el norte del volcán se extiende el Valle de Jiboa, una
de las zonas más ricas de cultivo en este país. De este volcán
se desconoce alguna erupción.

VOLCÁN DE USULUTÁN

El volcán de Usulután se encuentra situado cercano a la Sierra


Tecapa- Chinameca en el departamento de Usulután en El
Salvador. Es un volcán muy antiguo, forma parte de la planicie
costera en donde se localiza la ciudad del mismo nombre. Es
conocido por la Piedra encadenada. Se trata de una formación
rocosa en uno de los dos picos del volcán los cuales son muy
visibles por ser picos gemelos, que se localizan en la parte
más alta del volcán. No tiene cráteres, puesto que en pasado
su actividad volcánica lo destruyo, dejando totalmente
destruido en la actualidad apenas se observa.

CICLÓN TROPICAL

Ciclón tropical es un término meteorológico usado para


referirse a un sistema de tormentas caracterizado por una
circulación cerrada alrededor de un centro de baja presión y
que produce fuertes vientos y abundante lluvia. Los ciclones
tropicales extraen su energía de la condensación de aire
húmedo, produciendo fuertes vientos. Se distinguen de otras
tormentas ciclónicas, como las bajas polares, por el mecanismo
de calor que las alimenta, que las convierte en sistemas
tormentosos de "núcleo cálido". Dependiendo de su fuerza y
localización, un ciclón tropical puede llamarse depresión
tropical, tormenta tropical, huracán, tifón o simplemente
ciclón.

Huracán Cesar-Douglas

El huracán Cesar-Douglas fue la tercera tormenta en recibir


nombre de la temporada de huracanes en el Atlántico de 1996.
El huracán de categoría uno se formó a finales de julio en el
mar Caribe y golpeó a América Central con lluvias, matando a
67 personas y causando que los gobiernos locales declararan el
área como de desastere. Después de cruzar por América Central,
la tormenta se redesarrolló en el Pacífico del este como el
Huracán Douglas que formó parte de la Temporada de huracanes
en el Pacífico de 1996 alcanzando la categoría 4 en mar
abierto.

Huracán Mitch
El huracán Mitch fue uno de los ciclones tropicales más
poderosos y mortales que se han visto en la era moderna,
teniendo una velocidad máxima de vientos sostenidos de 290
km/h. Mitch pasó por América Central del 22 de octubre al 5 de
noviembre en la temporada de huracanes en el Atlántico de
1998. También causó miles de millones de dólares en pérdidas
materiales.[1]

Mitch se formó en el oeste del mar Caribe el 22 de octubre,[2]


y después de pasar por condiciones extremadamente favorables,
alcanzó rápidamente la categoría 5, el nivel más alto posible
en la escala de huracanes de Saffir-Simpson. Después de
desplazarse hacia el suroeste al mismo tiempo que se
debilitaba, el huracán golpeó Honduras como un huracán de
categoría menor. Se movió a través de Centroamérica hasta
alcanzar la bahía de Campeche para finalmente golpear Florida
como una tormenta tropical.[3]

Debido a su lento movimiento entre el 29 de octubre y el 3 de


noviembre, Mitch dejó cantidades históricas de precipitaciones
en Honduras y Nicaragua, con informes no oficiales de hasta
1900 mm. Las muertes ocasionadas por las catastróficas
inundaciones lo hicieron el segundo huracán más mortífero del
Atlántico,[2] cerca de 11.000 personas murieron y alrededor de
8.000 permanecían desaparecidas a finales de 1998. Las
inundaciones causaron daños extremos, estimados en 5 mil
millones de dólares (1998 USD, 6 mil millones 2006 USD).

Huracán Stan

El Huracán Stan fue la decimoctava tormenta tropical y el


décimo huracán de la temporada de huracanes del océano
Atlántico en 2005. Stan fue la segunda tormenta "S" desde que
el sistema de denominaciones de huracanes comenzó, el otro fue
la tormenta tropical Sebastien de 1995. Fue una tormenta
relativamente fuerte que, mientras se estableció como huracán
de Categoría 1 durante un corto período, causó inundaciones y
desprendimientos en los países centroamericanos de Belice,
Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, Nicaragua
además del sur de México durante los días 3, 4 y 5 de octubre
de 2005. Ocasionó por lo menos 1,620 muertes, un número
similar al producido por el Huracán Katrina, y muchos más
desaparecidos. En un momento, fuentes oficiales informaron que
el número de muertes aumentaría posiblemente hasta bien
pasados los 2.000, aunque el número total de fallecidos es
probable que nunca se conozca debido al alto grado de
descomposición de los cadáveres en el barro.

Tormenta tropical Agatha (2010)

La Tormenta tropical Agatha fue un débil aunque destructor


ciclón tropical en el Este del océano Pacífico. Primera
tormenta de la temporada de huracanes en el Pacífico oriental
de 2010 y la más mortal desde el huracán Paulina de 1997,
Agatha se originó en la zona de convergencia intertropical
(ZCIT), región ecuatorial donde convergen la humedad tropical
y se desarrollan numerosas tormentas eléctricas.

El sistema se organizó en las primeras horas del 29 de mayo,


convirtiéndose en depresión tropical y se disipó al día
siguiente, con vientos que alcanzaron los 75 km/h y una
presión mínima de 1000 hPa. Incluso antes de convertirse en
depresión, la perturbación había afectado los países de
América Central con lluvias torrenciales. Al tocar tierra con
intensidad de tormenta tropical, causó deslizamientos de
tierra e innmuerables ríos desbordados, cobró la vida de
varias decenas de personas, desplazando a cientos de miles y
provocando la destrucción de miles de hogares e
infraestructura.

En El Salvador, numerosas inundaciones ocurrieron mientras la


tormenta cruzaba el país. En San Salvador y otras cinco
ciudades, las autoridades urgieron a la población a evacuarse
hacia refugios debido a la inminente amenaza de inundación. [30]
La mayor caída de lluvia registrada en el país fue de 400 mm;
sin embargo, hubo más precipitaciones desde este reporte. [31] En
total, once personas resultaron muertas en el pais, dos
desaparecidas y más de diez mil evacuados.[32] El 30 de mayo el
presidente de El Salvador, Mauricio Funes declaró la
emergencia nacional debido al daño generalizado causado por la
tormenta.

TERREMOTOS EN EL SALVADOR

Terremotos notables en la historia de El Salvador incluyen:

Nombre Fecha Epicentro M Prof. Muertos


Terremoto de El 1576-05- Centro de El
Salvador de 1576 23 Salvador
Terremoto de El 1593 San Salvador
Salvador de 1593
Terremoto de El 1625 San Salvador
Salvador de 1625
Terremoto de El 1650 San Salvador
Salvador de 1650
Terremoto de El 1707 San Salvador
Salvador de 1707
Terremoto de El 1719-05- San Salvador,
Salvador de 1719 05 San Vicente
Terremoto de El 1776-05- El Salvador 7,9
Salvador de 1776 30 Mi
Terremoto de El 1859-12- Occidente de 7,6
Salvador de 1859 08 El Salvador Mi
Terremoto de El 1862-12- Occidente de 8,0
Salvador de 1862 19 El Salvador Mi
Terremoto de El 1951-05- Jucuapa, 6.2 10 400
Salvador de 1951 06 Chinameca
23:08
Terremoto de El 1965-05- La Libertad 6,3 125
Salvador de 1965 03
10:01 UTC
Terremoto de El 1986-10- San Salvador 5,7 7 km 1000 -
Salvador de 1986 10 1500
Terremoto de El 2001-01- Alta mar 7,7 60 km 944
Salvador de 2001 13
Terremoto de El 2001-02- Cojutepeque 6,6 10 km 315
Salvador de 2001 13

Astronomía

La astronomía (del griego: αστρονομία = άστρον + νόμος,


etimológicamente la "ley de las estrellas") es la ciencia que
se ocupa del estudio de los cuerpos celestes, sus movimientos,
los fenómenos ligados a ellos. Su registro y la investigación
de su origen viene a partir de la información que llega de
ellos a través de la radiación electromagnética o de cualquier
otro medio. La astronomía ha estado ligada al ser humano desde
la antigüedad y todas las civilizaciones han tenido contacto
con esta ciencia. Personajes como Aristóteles, Tales de
Mileto, Anaxágoras, Aristarco de Samos, Hiparco de Nicea,
Claudio Ptolomeo, Hipatia de Alejandría, Nicolás Copérnico,
Santo Tomás de Aquino, Tycho Brahe, Johannes Kepler, Galileo
Galilei, Isaac Newton, Immanuel Kant, Gustav Kirchhoff y
Albert Einstein han sido algunos de sus cultivadores.

Es una de las pocas ciencias en las que los aficionados aún


pueden desempeñar un papel activo, especialmente en el
descubrimiento y seguimiento de fenómenos como curvas de luz
de estrellas variables, descubrimiento de asteroides y
cometas, etc.
Gnomon

El gnomon es la pieza triangular de


este reloj de sol.

En origen, la palabra gnomon (en griego: guía o maestro) hacía


referencia a un objeto alargado cuya sombra se proyectaba
sobre una escala graduada para medir el paso del tiempo.

El gnomon o estilo se define como el objeto alargado que


arroja sombra, independientemente del ángulo que forme con el
cuadrante; estará inclinado respecto el plano horizontal con
un ángulo igual a la latitud del lugar donde se sitúe el reloj
de sol, y varía según los distintos tipos de relojes
(ecuatoriales, declinantes, etc.) En el hemisferio norte, el
caso más sencillo, la arista que proyecta la sombra está
orientada hacia el norte, quedando paralela al eje de rotación
de la Tierra

Eratóstenes de Cirene usó un gnomon para medir el diámetro de


la Tierra, con aceptable precisión.

Reloj de sol

Reloj de sol en St.


Rémy de Provence.

El reloj de sol es un instrumento usado desde tiempos muy


remotos con el fin de medir el paso de las horas, minutos y
segundos (tiempo). En castellano se le denomina también
cuadrante solar. Emplea la sombra arrojada por un gnomon o
estilo sobre una superficie con una escala para indicar la
posición del Sol en el movimiento diurno. Según la disposición
del gnomon y de la forma de la escala se puede medir
diferentes tipos de tiempo, siendo el más habitual el tiempo
solar aparente. La ciencia encargada de elaborar teorías y
reunir conocimiento sobre los relojes de sol se denomina
nomónica.

Ballestilla
Ilustración sobre el uso de la ballestilla tomada
de Navegación Práctica por John Sellers, (1672).

La ballestilla es un instrumento de navegación antiguo


utilizado para medir la altura del sol y otros astros sobre el
horizonte con el fin de utilizar la información así obtenida
en la navegación náutica.

Una descripción de la ballestilla que hizo un judío catalán


llamado Levi ben Gerson en 1342[1] parece ser la noticia más
antigua acerca de este instrumento.

La ballestilla es una vara de madera sobre la que se desliza


una vara cruzada más pequeña. El marino aplicaba el ojo en un
extremo del instrumento, dirigía éste hacia la estrella cuya
posición quería medir y deslizaba la vara cruzada hasta que la
parte inferior de ésta coincidía con el horizonte y la
superior con la estrella. La altura de la estrella (ángulo que
forma con el horizonte) se leía directamente en una graduación
grabada en la vara principal.

Los marinos —sobre todo los españoles y los portugueses—


usaban la ballestilla para determinar la latitud a la que se
encontraban midiendo la altura de la estrella polar sobre el
horizonte (la altura de Polares sobre el horizonte es una
buena medida aproximada de la latitud

Telescopio

Telescopio en el
Observatorio de Niza.

Se denomina telescopio (del griego τῆλε "lejos" y σκοπέω


"ver") al instrumento óptico que permite ver objetos lejanos
con mucho más detalle que a simple vista. Es herramienta
fundamental de la astronomía, y cada desarrollo o
perfeccionamiento del telescopio ha sido seguido de avances en
nuestra comprensión del Universo.
Gracias al telescopio —desde que Galileo en 1609 lo usó para
ver a la Luna, el planeta Júpiter y las estrellas— pudo el ser
humano empezar a conocer la verdadera naturaleza de los
objetos astronómicos que nos rodean y nuestra ubicación en el
Universo.

Sonda espacial

Una sonda espacial es un dispositivo que se envía al espacio


con el fin de estudiar cuerpos de nuestro Sistema Solar, tales
como planetas, satélites, asteroides o cometas.

Las sondas espaciales se suelen denominar también satélites


artificiales, si bien, estrictamente hablando, una sonda se
diferencia de un satélite en que no establece una órbita
alrededor de un objeto (ya sea la Tierra o el Sol), sino que
se lanza hacia un objeto concreto, o bien termina con una ruta
de escape hacia el exterior del sistema solar.

Satélite artificial

Satélite
artificial
Swift.

Un satélite es cualquier objeto que orbita alrededor de otro,


que se denomina principal. Los satélites artificiales son
naves espaciales fabricadas en la Tierra y enviadas en un
vehículo de lanzamiento, un tipo de cohete que envía una carga
útil al espacio exterior.Los satélites artificiales pueden
orbitar alrededor de lunas, cometas, asteroides, planetas,
estrellas o incluso galaxias. Tras su vida útil, los satélites
artificiales pueden quedar orbitando como basura espacial.

SISTEMA SOLAR

Sistema formado por el Sol, ocho planetas (después de la


recalificación de Plutón como planeta enano en agosto de
2006), planetas enanos, satélites, asteroides, cometas y
meteoroides, y polvo y gas interplanetario. Las dimensiones de
este sistema se especifican en términos de distancia media de
la Tierra al Sol, denominada unidad astronómica (UA). Una UA
corresponde a unos 150 millones de kilómetros. La frontera
entre el Sistema Solar y el espacio interestelar —llamada
heliopausa— se supone que se encuentra a 100 UA. Los cometas,
sin embargo, son los cuerpos más alejados del Sol, con órbitas
muy excéntricas, que se extienden hasta 50.000 UA o más.
El Sistema Solar era el único sistema planetario existente
conocido hasta 1995, año en que los astrónomos descubrieron un
planeta con una masa comparable a la de Júpiter, orbitando en
torno a la estrella 51 Pegasi, semejante al Sol. Más tarde,
los astrónomos detectaron otros dos planetas, de masas
superiores a la de Júpiter, que giraban alrededor de sendas
estrellas: 70 Virginis y 47 Ursae Maioris. En 1999, dos
equipos de astrónomos que trabajaron independientemente
anunciaron el descubrimiento del primer sistema
multiplanetario distinto del nuestro; se trataba de tres
planetas gaseosos orbitando alrededor de la estrella Ípsilon
Andromedae. En enero de 2000 se anunció el descubrimiento de
otros dos sistemas planetarios extrasolares. El sistema
planetario más parecido al Sistema Solar descubierto hasta el
momento es el formado por al menos dos planetas que giran en
torno a la estrella 55 Cancri. En junio de 2002 se anunció el
descubrimiento del segundo de estos planetas, que se encuentra
a una distancia de su estrella similar a la que existe entre
Júpiter y el Sol. Su órbita es algo elíptica, también
semejante a la de Júpiter. Desde que en 1995 se descubrió el
primer planeta fuera de nuestro Sistema Solar, se han
detectado ya más de doscientos de estos planetas.

EVOLUCIÓN DE LOS MODELOS DEL SISTEMA PLANETARIO

Las primeras teorías sobre el origen y funcionamiento del


Universo aparecen en la antigua Grecia:
 Para Anaximandro (siglo VII a.c.), la Tierra era de forma
cilíndrica y estaba rodeada de una neblina en la que de
forma ocasional se abrían agujeros (el sol, la luna y las
estrellas) y entonces se podía ver que más allá 
brillaban el fuego y la Luz.
 Filolao de Tarento (siglo V a.c.) formula la idea de una
Tierra esférica, único modelo capaz de explicar distintos
fenómenos observables.
 Platón (siglo IV a.c.) elaboró la Teoría Geocéntrica del
Universo, basada en los siguientes axiomas:
 La Tierra, esférica, ocupa el centro del Universo.
 Los cuerpos celestes son de carácter divino y se
mueven en torno a la Tierra con movimientos
circulares uniformes.
 La visión del Universo que daba Platón no explicaba las
observaciones de los rizos que los planetas describían en
el cielo. Para explicarlos, Eudoxo de Cnido (408-355
a.c.) amplía el modelo de Platón, introduciendo la teoría
de las esferas, según la cual cada astro es llevado en su
giro en torno a la Tierra por una esfera cuyos polos eran
llevados por otra esfera concéntrica con la primera que
giraba con velocidad uniforme (distinta de la de la
primera) alrededor de dos polos distintos de los
primeros. Eudoxo necesitó 27 esferas para explicar los
movimientos del Universo.
 Aristóteles (384-322 a.c.) aumentó el número de esferas
hasta llegar a 55. Las ideas aristotélicas sobre el
Universo explicaban los movimientos planetarios
suponiendo que los astros estaban en esferas
concéntricas. El Universo está constituido por dos
regiones esféricas separadas y concéntricas (el mundo
sublunar y el mundo supralunar). La Tierra ocupa el
centro en la región de los elementos, donde el elemento
fuego se sobrepone al aire, éste al agua y éste al
elemento tierra. Más allá en la esfera lunar se encuentra
la región etérea de los cielos, cuyo elemento es la
inalterable quinta esencia. Los movimientos aquí son
circulares y perpetuos.
Con el debilitamiento de Atenas, se inicia en la cultura
griega la etapa helenística o alejandrina. Con ella, el nuevo
astrónomo desarrollaba un verdadero programa de investigación
y valoraba la observación sistemática y cotidiana. Construyen
numerosos instrumentos, perfeccionan otros e inventan diversas
herramientas matemáticas que les permiten llegar a soluciones
concretas, expresadas mediante ecuaciones y magnitudes reales:
 Aristarco de Samos (310-230 a.c.) ideó métodos
matemáticos para calcular la relación entre los diámetros
de la Tierra y la Luna, la distancia entre la Tierra y la
Luna (en función del diámetro de la Tierra) y la
distancia entre la Tierra y el Sol (en relación a la
distancia entre la Tierra y la Luna). La imprecisión de
los instrumentos de medida utilizados le condujo a la
obtención de valores bastante inexactos, aunque los
métodos son absolutamente correctos. Mantenía la teoría
de un modelo heliocéntrico, con la idea de un Universo en
el que el centro del sistema planetario es el Sol en
torno al cual giran la Tierra y el resto de los planetas
excepto la Luna, que gira en torno a la Tierra. Esta idea
no llegó a cuajar porque era demasiado prematura para su
cultura.
 Erastótenes de Cirene (273-194 a.c.), sucesor del
anterior, ideó un método para medir la circunferencia
máxima terrestre y, por tanto, el diámetro de la Tierra.
 Hiparco de Nicea (siglo II a.c.) estudió el movimiento
del Sol, observando que no tiene siempre la misma
velocidad. Propuso un modelo según el cual el Sol se
mueve en un círculo, que llamó epiciclo; el centro del
epiciclo a su vez se mueve en torno a la Tierra,
describiendo otro círculo llamado deferente.  Calculó la
distancia Tierra-Luna, utilizando el diámetro de la
Tierra calculado por Erastótenes y la relación de
Aristarco.
Ptolomeo (siglo II d.c.) continuó el trabajo de Hiparco.
Construyó un modelo centrado en la Tierra, denominado
geocéntrico, que describió en su obra Almagesto. En esencia
describía el movimiento del Sol con una trayectoria
aproximadamente circular y período de un año. El movimiento de
los planetas tenía que justificarlo como un movimiento
compuesto, similar al de un punto animado de un movimiento de
rotación alrededor de un punto, que a su vez se desplaza en
una órbita circular alrededor de la Tierra. La órbita solar se
denomina eclíptica y la del planeta alrededor de su centro,
epiciclo. Estas suposiciones permitían predecir los eclipses
de Sol y de Luna, movimientos planetarios, etc.
Ptolomeo admitió que las observaciones de estos movimientos
podían ser también explicadas suponiendo la revolución
alrededor de la Tierra de 24 horas de este a oeste de la
esfera de las estrellas fijas, o al revés, de la Tierra de
oeste a este en el mismo tiempo.
El modelo geocéntrico dominó la astronomía hasta la aparición
de los escritos de Copérnico (1.473-1.543). El mismo año de su
muerte fue publicado su libro De revolutionibus orbium
caelestium. En él se proponía una nueva ordenación del
Universo conocido diferente de la del modelo de Ptolomeo.
En el modelo copernicano la Tierra pierde su privilegiado
lugar a favor del Sol. Nuestro mundo quedaba relegado a ser
uno más entre el resto de los planetas, y condenado, igual que
ellos, a moverse en una órbita circular alrededor del centro
del Universo: el Sol. Quizá la única distinción que le quedaba
a la Tierra en este nuevo orden era que poseía un satélite, la
Luna, que pasaba a moverse en círculos alrededor de ella.
La propuesta de Copérnico acaba con la inmovilidad de la
Tierra de una manera radical. No sólo afirma que la Tierra
tiene un movimiento de traslación alrededor del Sol, también
transfiere el movimiento de rotación de la esfera celeste a la
Tierra. Ésta es la que gira de oeste a este, provocando el
movimiento aparente en sentido contrario de las estrellas y el
movimiento diurno observable del Sol.
El sistema copernicano tenía a su favor una reducción del
número de epiciclos necesarios para describir el movimiento de
los planetas. El sistema era más simple. Sin embargo, no por
ello era más preciso que el anterior. Además, planteaba un
problema: si la Tierra se movía, ¿por qué el movimiento de la
Tierra era inobservable? Copérnico no tenía respuesta para
esta pregunta; en todo caso, ése era el movimiento natural de
la Tierra. Hubo que esperar hasta Galileo y sus estudios sobre
el movimiento para obtener una respuesta diferente.

Tycho Brahe (1.546-1.601) propuso un modelo geoheliocéntrico,


según el cuál la Tierra está en el centro del universo pero
todos los demás planetas (excepto la Luna) giran alrededor del
sol, y este alrededor de la tierra.
Giordano Bruno (1.548-1.600), una vez conocido el modelo
heliocéntrico y la enorme distancia entre la tierra y las
estrellas de la que hablaban por vez primera los astrónomos de
la época, llegó a la conclusión de que las distancias
cosmológicas son infinitas. Así, el universo es infinito, y el
sistema solar es uno más de otros sistemas parecidos o
mayores, cuyo número es ilimitado, según esto nuestro sol no
ocupa un lugar privilegiado en el universo, pues un universo
infinito carece de centro.
Galileo (1.564-1.642) construyó lentes para montar anteojos de
larga vista con los que se dedicó al estudio del cielo.
Observó infinidad de estrellas nunca vistas y la Vía Láctea se
le apareció como un conjunto de estrellas distribuidas en
profundidad. Ya no fue posible pensar en una esfera celeste
con los astros incrustados en ella. La Luna se le apareció con
su disformidad, suelo rugoso, valles, etc., iluminada por el
Sol. Comprendió inmediatamente que el brillo de la Luna es luz
prestada por el Sol. En 1.610 descubre los satélites de
Júpiter. Ya había algo de lo que la Tierra no era el centro.
Tras descubrir las manchas solares y observar las fases de
Venus, Galileo se convenció de la falsedad del sistema
geocéntrico de Ptolomeo. Confiando en sus protectores y en su
verdad, publicó en Florencia, en el año 1.632, su obra Diálogo
sobre los dos grandes sistemas del mundo. Un año después fue
procesado, abjuró de su teoría bajo amenazas y se le confinó
hasta su muerte en su domicilio, cerca de Florencia.

Johannes Kepler (1.571-1.630) colaboró con Tycho Brahe durante


los últimos años de vida de este último. Tycho Brahe le legó
un completísimo catálogo estelar con anotaciones de los
movimientos de los planetas, sobre todo de Marte. A partir de
estos datos y de sus propias teorías Kepler se percató de que
las teorías de Brahe no encajaban con una supuesta órbita
circular, aunque si con un modelo heliocéntrico. Llegó a la
conclusión de que los planetas giran entorno al sol
describiendo órbitas elípticas en vez de circulares y el sol
se sitúa en uno de focos de la elipse. Enunció entonces las
tres leyes que llevan su nombre sobre el movimiento de los
planetas, válidas para el movimientos de los planteas
alrededor del sol y para el movimientos de los Satélites
alrededor de un planeta.
Isaac Newton (1.642-1.727) definió las leyes de tipo
matemático iniciadas por Galileo. Sus estudios y disciplinas
abarcaron un gran número de disciplinas.

Newton aplicó las leyes de la dinámica al estudio de los


fenómenos naturales para elaborar su explicación de la
realidad. Supuso que el hecho de que la luna gire alrededor de
la tierra en lugar de salir despedida en línea recta se debe a
la presencia de una fuerza que la empuja hacia la tierra y la
hace describir una circunferencia. Llamó a esta fuerza
gravedad y supuso que actuaba a distancia, pues no hay nada
que conecte físicamente la tierra y la luna. Newton demostró
que hace caer un objeto sobre la tierra mantiene a la luna en
su órbita.

A partir de las leyes de Kepler, dedujo la ley de gravitación


universal: todo par de partículas se atraen con una fuerza
inversamente proporcional al cuadrado de su distancia y
directamente proporcional al producto de sus masas.

LEY DE LA GRAVITACIÓN UNIVERSAL DE NEWTON

La Ley de la Gravitación Universal de Newton establece que la


fuerza que ejerce una partícula puntual con masa m1 sobre otra
con masa m2 es directamente proporcional al producto de las
masas, e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia
que las separa:

donde es el vector unitario que dirigido de la partícula 1 a


la 2, esto es, en la dirección del vector , y es
la constante de gravitación universal, siendo su valor
aproximadamente 6,674 × 10−11 N·m2/kg2.

Por ejemplo, usando la ley de la Gravitación Universal,


podemos calcular la fuerza de atracción entre la Tierra y un
cuerpo de 50 kg. La masa de la Tierra es 5,974 × 1024 kg y la
distancia entre el centro de gravedad de la Tierra (centro de
la tierra) y el centro de gravedad del cuerpo es 6378,14 km
(igual a 6378140 m, y suponiendo que el cuerpo se encuentre
sobre la línea del Ecuador). Entonces, la fuerza es:
La fuerza con que se atraen la Tierra y el cuerpo de 50 kg es
490,062 N (Newtons,Sistema Internacional de Unidades), lo que
representa 50 kgf (kilogramo-fuerza,Sistema Técnico), como
cabía esperar, por lo que decimos simplemente que el cuerpo
pesa 50 kg.

Dentro de esta ley empírica, tenemos estas importantes


conclusiones:

 Las fuerzas gravitatorias son siempre atractivas. El


hecho de que los planetas describan una órbita cerrada
alrededor del Sol indica este hecho. Una fuerza atractiva
puede producir también órbitas abiertas pero una fuerza
repulsiva nunca podrá producir órbitas cerradas.
 Tienen alcance infinito. Dos cuerpos, por muy alejados
que se encuentren, experimentan esta fuerza.
 La fuerza asociada con la interacción gravitatoria es
central.

A pesar de los siglos, hoy sigue utilizándose cotidianamente


esta ley en el ámbito del movimiento de cuerpos incluso a la
escala del Sistema Solar, aunque esté desfasada teóricamente.
Para estudiar el fenómeno en su completitud hay que recurrir a
la teoria de la Relatividad general.

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