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Jaeger - Nobleza y Areté - Paideia PDF

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l.

NOBLEZA Y ARETÉ

LA EDUCACIÓN ES una función tan natural y universal de la comunidad


humana, que por su misma evidencia tarda mucho tiempo en llegar
a la plena conciencia de aquellos que la reciben y la. practican. Así,
�e 2-: sti primer rastro en la tradición literaria es relativamente tardío. Su
contenido es en todos los pueblos aproximadatnel!_!� el mismo y:_��, al
) W)-.'1 l

niisinotieiÜpo, moi-aly� piáctfoo:-Tal fue · también entre los_ griegos.'


Reviste enparte la forma dema:rid¡imientos, tales como: honra a los_
¿ (

dioses, honra a tu padre y a tu madre,respeta a:los extranjeros; en par­


5 te, · consiste en una serie de preceptos sobre la moralidad externa y
en reglas de prudencia para la vida, transmitidas oralmente a · través
íL
. l
de los siglos; en parte, en la comunicación de conocimientos y habi-
i lidades profesionales, cuyo conjunto, en la medida en que es transmi­
/ sible, designaron los griegos con _la palabra. fechné. Los preceptos
\ elementales de la recta conducta respecto a los dioses; ,los · padres y .1 ,f
• los extraños, fueron incorporados más tarde a las leyes escritas de los

·1
estados sin que se distinguiera eh ellas de un modo funaamental entre
f la moral y el derecho. El rico tesoro de la sabiduría
j ciado con rimitivas re las· e· 'con ucta encia·
l árrai a.dos 'en su ersticiones o u ares, e o,'' or' a a
uz e ' ía a través e una· anti u1s1ma- tra 1c1ón' ora en a oesía
rúra gnom1ca: e es10 o. . as · reg as·· e as_'-;!!rtes y _oficios· resis- ·
ían
� � naturalmente, en virtud de su proBia nat��aleza, á la �xposicióri �
escrita
- de sus secretos, eo_m. o· lo pone de manifiesto, por eJemplo; e,:µ·:
, lo que respecta a la - profesión médica, la colección de· . los _ escdt¿'g : •
. hipocráticos. · · · · · · i
,, . . De la ed_ucación, en este sentido, se distingue la fi:>rmación del J j
. hombre, mediante la creac10n· de u.n ·tipo 1 ideal íntimamente coherente \
y claramente �d�termmi§o. ' La educació · o_' es osible sin · ue se
�frezca al es 1r1tu'una imagen om re ta como ·de e ser. n e a
<,,
la uti 1 a es 1n 1 erente o, por o· menos, no· es esencia : Lo funda- 1
� mental en· ella es -xa.Mv, · es · decir; la belleza, en ·el sentido normativo
_;:,,; de la imagen, itnagen · anhelada; del ideal. El contraste entre· estos
dqs aspectos :·de la' educación puede'· perseguirse a través ·de la histo­
ri�; E� parte fundamental,'de: la naturaleza humana. _No ·_importan :las
palabras con que·Ios d�signemos.'- Pero es fácil ver que cuando· em­
pleamos 'las · expresiones educación y formación o cultura para desig­
nar estos Sf1iltidos históricamente . distintos; la 'educación. y la cultura
tienen raíces diversas.· La cultura se ofrece en ·.¡a fornia· entera del •
) hombre, en su · con
-== órtan'.l.lento externo .. 'en'· su·• a 'ostura J
inter�a; 1, una n1 otra nacen del azar, smo que son pro ucto de una
.
, disciplina consciente. Platón la comparó ya con el. adiestramiento
19
20 LA PRIMERA GRECIA NOBLEZA .Y 'ARETÉ: 21
de los perros de raza noble. Al principio esta educación se halla ba
reservada sólo a una pequeña clase de la sociedad, a la de los nobles. ( uso puramente moral, como expresión del más alto id�al caballeresco
El Kalos Kagathos griego de los tiempos clásicos revela este origen · unido a una conducta cortesana y selecta y el hero1smo guerre:o,
d e un modo ta n claro como el gentleman inglés. Amba s palabr 1 �xpresaría acaso el sentido de la palabra griega. Este· �echo nos 11;­
a s pro­
ceden del tipo de la aristocracia- caba lleresca . Pero desde el momento \lica de mi modo suficiente dónde ha y que buscar su origen Su ra1z
en que la sociedad · burguesa dominant e adoptó a quellas formas, la se halla en las concepciones fundamentales �e· la . 11obleza caballeresca .
'.

idea que las inspira se convirtió en un bien universal y en una nor­ + En el conce to de la areté se . concentra el ideal educador de. est e e-
. río o en su forma más pura. · ·
ma para todos. : · , .
, · Es u n hecho fundamental de la historia de la cultura que toda El· más · antiguo testimonio de la antigua cultura arist ocrat1ca he-
énica es Homero,· •si·, designamos por este nombre las . dos �andes

��dji¡g��;¡��f�����iiüt1��� � popeyas: la Ilíada y la Es p r nosf �, • l m1s�o tie��o,


.
f

a fuente histórica de la •vida de aquel tiempo jé,la expres10n po.et1ca ,l


Odisea. a a a

rlo �es e mb s p11l n-.


cultura conduce a la formación de c astas rígidas, el prin(?ipio . de permanente • de' sus i dea les. Es preciso considera �
. e foi:,mar, e el � es r image
a
hemos
d
·
tos . d e vista . En pi-i :mer l g r
la herencia que domina en ellas es corregido y compensado por la d el hom­
del mundo aristocrático, e i�vestigar despues como el ideal
u a d n u t a n

a scensión d e nuevas fuerzas procedentes d el pu eblo. E incluso cuan-


do un ca mbio violento arruina_ o d estru ye a la s clases dominantes, se
bre,.adquiere forma en los' pdemas homéricos y c?mo su estrecha es­
forma rápidamente, por la naturaleza . misma de las cosas, una clase fera , .'de validez originaria ' se ensancha y se conv¡er.te en • una �uer�a
director a que se constituye en nueva aris tocracia. La nobleza es la educadora '. de- una . amplitud mucho. ma yor. La marcha . d e la hist ori_:1
a co�s1-
de la edu cación se hace •paten te, en ,primer lugar,_ �e�1ante l
V f f9ente del proceso espiritual mediante el cual nace-· y se·-desarroiía \ es rrollo h�s onco e la vida
deración de conjunto., el fluctua'?-te
, la cul.:ura de una nación. La historia de la formación griega -el
y del: ·esfuerzo artístico• =para · etenüzar las nol'mas, ideales en que halla
d d a t d

acaecimiento d e l a es t ructuración de la personalidad nacional d el he­


sµ más. alta acuñación :el genio crea dor de ..cada �poca ,

\l
lenismo, d e tan alta impor tancia pa ra el mup.do entero- empieza . ,,<!�11 fI-7;,�f.4 ,, �s,., 1t8r,ª9º . cBn,J�ecue;r.wi� ppr, ��. �s1
en el mundo aristocrático de la Grecia primitiva con el nacimiento d e l -r �L c<;m��.Itt�
u n ideal. d efinido de hombre,superior, al c ua l aspira la selección de la
� coino en Tos siglos poste:nores, en s� mas a�� 10 sentid�, noso.!o

j P!!rn..:....4�1?Ígg,�r._J�. :J�x2�fop.cia .. hu mana, smo tamb1en , la su er10r.r◄r acl: . �e


raza. Puesto que la más antigua tradición escrita nos muestra . una • e 1oses e ,v or ra 1-
!Seres.no um nos como ·. nerz �
cultura arist ocrática que se levanta sobre la m asa popular, es preciso
¡. -�Z e J.9..S..C. . .. om re or inario, en c ambio� no
a
-.llQ e
a a a O!;l. O:

que la consideración his tórica tome en ella su punto de partida. Toda


.
. �!!!_ra posterior, _por muy a lto que se levante, y aunque cambie 1:!.U ( tiene areté, y si , � , ese avo procede acaso de una r�za de 1!lta es�1rpe,
��.!�nido, con!i_�r-�l;J: claro el sello de su origen. La educación no -�s le quita Zeus la: mitad . de su. ar'1té y no es ya el m�smo que �ra . · .!:1:1._
, otra ..�2.E.lª·-·q_l,!,e la forma ari. stocrática, progresivamente espiritualizad�, . areté es el. atributo prop;io . de la noblez:i,. Lo� ne os cons1der_ª:?n
111

de una na_ctón.
siempre 7aaestre�!.LY-.-· _ ue;r.:�.1!; Bohresah�nt�s como �a :pres'\lp_��?I!.
· .· . . · évidente, de. toda posici�n , dominante. Senorio y arete _se nallalia n m­
1

---Ñ-;;�i posible tomar·-li'Chisto'I'ia- • ··


de-la--palabra-·Paideia ---conrn hilo
.
conduc tor··¡úiriiestudiar. _el_�_rigeicde-1a�eélucact6"ñ-:griega,·-como .á..pri- separa blemente uñidos, La. raíz. de· la pal�bra es . la m1sma�CJ!llLill-�
·, mera vis ta· pudiera parecer, püesto"-qüéesta p alabr a ·n·o--ajjatece háéta , fil!LCJ"t'OS:, el su perla tiyo d7,distipg1,1ido y selecto, el cua l en plural era
el siglo v:1'.Ello es;·siñ--auaa,·· sólollll-azar·-delatraaicióñ: · Es posi- �1 co;;stante:mente -q.sado; par'a' designar, la . •no�leza. f,ra na _ tural para el
ble que si descubriéramo_s nuevas fuent es pudiéramos constatar usos ��ego,, que v�loraba el hombre por sus i:iptitudes,. considera r a l mun-
, más antiguos. Pero, evidentemente, no ganarí amos· nada con ello, pues del caballo 'l' 276, 374, también 'en PLAT., Pol. 335 B, ·dondf se
. .

los ejemplos más antiguos muestran clarament e que todavía al prin­ hatfa'· de la areté de los perros y los · caballos� 353: B, se habla de la. arete del
'2\treté

cipio del siglo v significaba simplemente la "crianza de los niños"; QjJt��--4.r�t..4..,"4.�.-·.lQJ�" .4!Q�_eE;',·_��,'":12��.:.....,...�,... . _ ; ·,..,.. -..-...· ..-· .._ · ....___ ,_,..,____ -·•--"··-· __..._ __.._,..... � .· ...
. '• · · ·
s. 322. · ·
nada parecido a l alto sentido que tomó más tard�. y que es el único
' 4 ..19.!?. grJ!?gº����mJ!!�il_cfü1E:._É!!!' ar�t_<Í�_!!,!!l;>r�."t.o_do t, 1:!���erz�,. 1:!na cap ,;ida!!:
a ..
que nos interesa aquí. El tema esencial de la historia de la educación A veces la· definen chtectamente; 'Ef vigor y 7a salud son ael cuerpo • Sa
�11 rie a es más bien el conce· to de. areté, ue se remonta a los. tiem os .
·, más . antiguos, . caste ano actua no ofrece un equivalente exacto •
gacidad y penetración·· areté del espíritu. Es difícil compaginar, estos hec�os, con
la explicación subjetiva ahora usual que_ hace deri�ar -la_ .'pli:l�bra de llQE�oo
'! rete

"complacer" (ver M. HoFFMANN,, Die e·thische Terminologie. bei. Homer, Hesiod


de 'Ia ,palabra .. La palabra •�virtud" en su acepcjóp no atenuada por el \ und den alten · Elegikerri · zmd lambographen, • T.u1?inga,· 19!4, p. ?2). E� vi;r�ad
1 El pasaje·· más antigut; EsQ;' Los sle.te 18. La palabra significa aquí todavía que areté lleva a menudo el sentido' de ·reconoc1m1ento so_mal, y VIene a significar
lo mismo , que 1:Qoép{¡. · · · · ( entonces ''respeto" : ''prestigio". Pero esto es· secundario y se debe ·al. fuerte
contacto ·social de' todas las valoracion'es del hombre en los primeros· tiempos.
22 LA .PRIMERA GRECIA NOBLEZA Y AREJ'É
do en general desde el mismo punto de vista. En ello . se funda el ción guerrera, un sentido "ético" inás general. AmJ:ias derivan de
empleo de la palabra en el reino. de las cosas no· humanas, así como la misma raíz: designan al hombre de calidad, para el cual, _ lo mismo
el enriquecimiento y la ampliación ·,del sentido del concepto en el cur­ en la vida privada que en la guerra, rigen determinadas normas de
so del desarrollo posterior. Pues ,es posible pensar distintas medidas conducta, ajenas al común de los hombres. Así,. el código de la no­
para la valoración de · la . aptitud de. un hombre según sea la tarea bleza. caballeresca tiene una doble· influencia en - la educación griega.
que debe cumplir. Sólo alguna vez, en los últimos libros, entiende Ho­ En la ética posterior de la ciudad heredó de ella, como una de . las
mero por areté las cualidades morales o espirituales.5 En general de­ más altas virtudes, la exigencia del valor, cuya_ ulterior designación,
sigha; de acuerdo con la modalidad de pensamiento de los tiempos "hombría", recuerda de un modo claro la identificación homérica del
primitivos, la fuerza y la destreza de los guerretos o · de los luchado­ valor con la areté humana. De otra parte, los más altos mandamien­
res, y ante todo el valc;>r heroico considerado no en nuestro ·sentido de tos de una conducta selecta proceden de aquella fuente. Como tales,
la acción moral y separada de la 'fuerza, sino íntimamente unido. valen mucho menos determinadas obligaciones, en el sentido de lm
· No es verosímil que la palabra areté tuviera, en el uso vivo . del moral burguesa, que una liberalidad . abierta a todos y una grandeza
lenguaje, al nacimiento de ambas epopeyas, sólo. la estrecha signifi� , en el porte total de 1� vida.
cación dominante en Homero. Ya la epopeya reconoce, al lado de , Característica esencial del noble es en Homero el sentido del de­
la areté, otras medidas de valor. Así, la Odisea ensalza, .sobre todo ber. Se le aplica una medida rigurosa y tiene el org-µllo. de ello. La
en su héroe principal, por encima del valor, que pasa a un lugar. fuerza educadora. de la nobleza se halla en . el hecho de despertar el
secundario, la prudencia y la astucia. Bajo el concepto de areté . .es sentimiento del deber frente al ideal, que se sitúa . así . sietnp:re a,nte
preciso comprender · otras· excelencias además de la fuerza denodada, los ojos .de los individuos. A este sentimiento puede apelar .i:malquiera.
como lo muestra, además de las excep'Ciones mencionadas; la poesía Su violación despierta. en los demás .el sentimiento . de .la "némesis",
de los tiempos más viejos.• La· significación de· la palabra en el len­ estrechamente vinculado a, aquél. Ambos son, en • Homero, conceptos
guaje ordinario ·penetra evidentemente en· el estilo de la poesía. Pero constitutivos del ideal ético de la aristocracia. El orgullo de, la :QO•
la areté, como ·expresión de la fuerza y el valor · heroicos, •se hallaba bleza, fundado .. en una larga série _ de progenitores ilustre¡,, se halla
fuerteIJ1ente enraizada en el lenguaje tradiciónal. de la· poesía heroica. acompañado del conocimiento de que esta preeminencia sólo puede
y ·esta significación . . debía .permanecer allí por largo tiempo. -Es na­ ser conservada mediante las virtudes por las cuales ha sido conquis­
tural que en la edad guerrera de las grandes migraciones el valor del tada. El nombre de aristoi conviene a un grupo numeroso. Pero, en
hombre fuera apreciadó ante todo· por aquellas cualidades y de ello este grupo, que se levanta por encima de la masa, hay una lucha para
hallamos analogías en otros pueblos. · También ef adjetivo &.ya:3-óc;, aspirar al premio de la areté. La lucha . y la viotoria son en ..el cono
que corespon:de al substantivo arete, aunque proceda de otra raíz, lle." cepto caballeresco. la •verdadera prueba del fuego de la virtud- huma­
'vaha. consigo la combinación de· nobleza:· y p:r:avura militar. _Significa na. No significan simplemente el vencimiento físico del adversario,
a veces noble, a veces valiente o habil ;. no. tiene apenas nunca el sen­ sino el mantenimiento de la· areté conquistada_ en .el rudo dominio de
tidlo posterior de "buerio" como no tiene 'areté el de vhtud moral. la natur.aleza. La palabra aristeia; empleada más ta:rd� para, los com-,
Esta: significación antigua se mantiene· aun en tiempos posteriores en bates singulares de los grandes héroes épicos, córresponde plenamente
expresiones formales tales como "n'ni:r:ió como un héroe esforzado".6 a aquella concepción. Su esfuerzo. y su vida . entera es, uµa luoha in­
En este sentido se halla con· frecuencia usado en inscripciones sepul­ cesante para la supremacía entre sus pares, una carrera p·ara alcanzar
crales y en relatos de batallas. No obstanté� todas · las palabras de este el primer premio. De ahí el goce inagotable en la narración poética
grupo 7 tienen en Homero, a pesar del predominio de su significa- de tales aristeiai. Incluso en la. paz se muestra el placer de la lucha,
ocasión de manifestarse en pruebas y juegos de varonil areté. Así. lo
Originariamente la palabra ha designado un valor objetivo del calificado en ella. vemos en la llíada, en los juegos realiz,ados en una corta pausa .de
Significa una fuerza que le es propia, que constituye su perfección. la guerra en honor de •Patroclo· muerto. •·.Esta rivalidad acuñó como
5 Así O., 641 ss. vemos que el buen juicio y la habilidad corporal y guerrera lema de la caballería el verso citado por· los educadores de todos los
se 'd.esignan con el. concepto colectivo "toda clase de, aretai". Es- característico tiempos ; 8 O.LEY UQLITT'E'\JELV xal 'lJ:ltELQOXOV eµµEvm· a'JJ...o)V, y abando­
que en la Odisea se emplee algunas• veces dreté en este amplio sentido.
···- -O O.VTJQ o.ya�ót;; ysvó�tevot;; ú.n:É�ave. nado. por el igualitarismo de la novísima sabiduría pedagógica.
.. . . 7:-Junto a o.ya�Ót;; se emplea; en este sentido, sobre -todo. éa�1'.ót;;; xaxót;; sig- En esta sentencia condensó el •poeta de un modo breve y certero
- nifica lo contrario. El lenguaje de Teognis y de Píndaro· muestra cómo estas
palabras más tarde siguen especialmente adheridas a la aristocracia. aunque no se podía mantener ya más si se tiene en cuenta que la nueva acuñación de
cambiando su sentido pl;lralelamente al desarrollo general de la cultura. Sin em­ los viejos ideales partió de sitio bien distinto.
bargo, esta limitación de la areté en la aristocracia, natural en la época homérica, 8 Z 208.
24 LA PRIMERA GRECIA NOBLEZA Y ARETÉ 25
. n los p ri­
la · conciencia pedagógica de la nobleza. Cuando Glauco se enfrenta f ntima mente vincula do con la areté se halla el honor E
con Diómedes en el ca mpo, ,de batalla y quiere mo strarse como su i p r bl d h bilid d y el mé��t o. Se gún la
meros tie mpos era nse a a e e la a a
es1on n�tural de
digno adV'ersario, enumera, a la manera de Homero, a · sus ilustres bella explicación de Aristóteles,11 el honor e� l a expr
a ntepa�ad�s y continúa : "Hippólocos me engendró, de él tengo mi la idea todavía no consciente par a ll e g a r al i d ea l de l a arete, al cual
q lo h b p ho nor p ar a asegurar
prosapia ; Cuando me · mandó a · Troya me advirtió con· insistencia aspira. "Es notor io ue s om res as iran al
así a ser h�m�ados por las _gente�
q ue luchara siempre para alcanzar el , precio de la más ·alta virtud su propio v alor, su areté. Aspiran
valer . �s1
humana y q ue fuera siempre, entre todos, el primero." No puede ex­ j uiciosas q ue los co�ocen y a c ausa , de su P, rop�o y real
s o mo lo a lto. M s el pensamien­
presarse d e un modo más bello cóm o el sentimiento de la noble emu­ reconocen el valor mi m co m s a ientra
i da en _la propia i n�imidad y , en­
lación infla ma ba a la j uventud heroica. Para el poeta del· libro once to filosófico posterior sitúa l a med
de la · Ilíooa era ya este verso una palabra alada. · A la · salida de seña a considerar el honor com o e l ref leJo del valor mterno en el
ió o l, homb re hom�ri?o adquiere e x�lusi­
Aquiles hay· una . escena de despedi da mu y análoga en la cual su pa­ espejo de la e stim ac n s cia el
en to de la soci edad
yamente conciencia de su v alor por el reconoc1m1
l
.f
dr� Peleo le hace la misma 8:�ver tenc�a .1)
. o de cl ª
En otro respecto es ta mbien la llia,d,a testimomo de 1a alta con­ a q ue pert enece. Era un prod � Y.,����,-��-;,P.;r.,iE.t .-:, i�f,i�,l,l•.
.8.�.
uct u a

c�e�cia educadora de la nobleza griega primiti;a.f Muestra cónio e l �e,;,ª:, ; ,susws e:mei� te s,r, ; ·• E- 1· honr!5 t� fi:los� b�o .a
e
por la opinión q� o ext r or,
indir del r o o
los tiempos posteriores puede presc
i
v1e1 0 · concepto·• guerrero· de' la areté no er a suficiente para los poetas ec n cimie nt e
no puede serle d el
nuevos : sirio 'qu�:·traía un:i, nueva i magen del,·homb re •i.J?_?i:fécto• p�ra aunq ue -de acuerdo ta mbién con Aristóteles-
la cual,� al · lado de · 1a acc10n, estaba la nob leza --del espu1tu, y solo todo indiferente. .,
�n la uriió_n :1e · am bas _ se ha lla�a· ·e l verda dero fin. -Y es de la ma yor Para Homero y el mundo de la nobleza _ de su ti
empo la 1:e gac10 n
humana . Los hero s. s e
del honor e ra, en cambio, l a mayor tra gedia
e
1mportancia :.que· este ideal sea expresado ·por el viejo Fénix, el. e du­
. E n . e llo d escan� aba
c ador de Aquiles, héroe, prototípico de los griegos. . En una hora des trataban entre sí con constante respeto y honra
cisiva · recuerda·· al j o ve n el fin para el cual , ha sido: educado: · · de honor a llos simp lemente msa­
su or den social en te ro. La sed
er en e
pe i id o cara ct erística de · los
"Pa ra aml:i as cosas, para pronuncia r palabras · y , para · realizar · ac­ cia ble sin que ello fuera una cul ar ad m ral
to q ue los más grand�s
ciones .'' '
. ' ·· · · ·, · . . . . . , ' , , . , : : . •· . , . ,. individuos. Es natural y se da por supues
d d un honor ca d� vez mas
· · No en 'v an o los gr ie gos pos te riore s vieron ya· en · esto s · v-er s os la héroes y los príncipes más poderosos eman an

más "viej a : formulación del idea l grie·go de· educació n, en s u esfuerzo A igü d cl m r honor debido . a, un
alto. Nadie te me e n la nt e ad re a a el

º·
para abrazar · lo humano· e n s u totalidad.1 Fue a menudo citado , en servicio presta do. La exi genc
ia de recompensa �s! para ellos, 1;1-n pun­
decisivo. El elog10 Y la
un período de cultura • refina da y 'retóricá, para elo giar la alegrí�- de to de vista s ubalterno y en modo alguno
�) o l f del honor 'J. el d?sh�n?r .
la acción • de los tiempos heroicos y oponerla ·al 'presente, pobre, en re probación (l,:mv� y 'l!JÓyo s n a uente
dos por la ettca filosof�ca
actos : y ríco ef pa labras. Pero puede también ser citado, a. la inversa ;
f
Pe ro el elogio y la censura fueron c onsidera
ho funda�ental de la v�da
para · demostrar , la ' prestancia, · espir itual· de la , , antigua · cultura aristo­ de los tiempos posteriores como el he c
i i l x is tencia de una medida
cr,á�ca. ' El d?�inio de la palabra sig nifica la sóberanía del espíritu � soci al mediante el cual se man f esta a e
s d ifícil, p ara · un . hoI?·
,!"emx 'p�onuncia la' sen tencia• en 1a recepción de Iá· legación de los de vaÍor en la comunidad de los hombres.12 �
Jefes · griegos ' por el · colérico Aquiles. · El poeta · fo opone a Odiseo, bre mo derno, representarse la absoluta p u }:l idad de la conciencia
h c
d,_ t:r los gr gos _ no hay concepto al­
maestro de la palabra, ·y• Ayax; el hombre de acció n. Median te este entre los griegos. En verda en e ie
nal. Sin e mbargo, el cono­
contraste pone de · relieve , del'· modo • más claro,· ' el -ideal.. de la más �uno parecido a nuestra concienci a perso
ción �nd i_s:p ens.�ble p ara la
noble, educació�; . personi�ica do en el· JIIás noble de, los 'héroes, Aquiles, cimiento d e a quel hecho es la presuposi
o _d l ho or y s? si�mficac10n e n la An­
ef rcado po
� r, Femx,; mediador ·_y tercer ·miembro -d� l'a embaj_a da_- De difícil inteli gencia del concep t e n
sp ira c1on al �onor Y a l,:i
a1u resul�� d� � : �o�o clarp · �u� la · palab ra arete, que egmvahó en tigüe dad. El· afán de distin?u�rse y l :i
. . timien to c i ti o como v anidad �eca�i­
a probación ap arecen al sen
:t

su· ace cion ori maria •. -tradicional • a destreza uerre ra no halló r s an


go viero e ella como la a�pirac10n
�b���c_l!_!__��ra t ra nsforn:mrs� en. e l con�epto e a �º? eza, q ue se for­ nosa de l a persona . Los
g ri e s n n
. l, don,de el �alor empieza.. En
ma d_4: - acuer_do c�n sus ma � altas · exigencias espirituales, tal como de l a persona a lo i deal y sobreper sona
la art!te heroica se p�rfecc10na
ocurrio en· la' ,ulteri or: e volución de su si gnifi cado. , · . cierto modo es posibl e afir mar que
d héro . S halla en el hombre mortal,
s ólo con la muerte f ísic
'
a el e e
su fama, e s
· . ·, ,
9 A 784. mis mo . Pe ro se perpet úa en
10 Así- la fuente griega de C1c., De or.' III 57, donde el verso (1 443) es es más, e s el hombre mortal
citado en este sentido. Todo el pasaje es mu; interesante• como :primer intento 11 .ARIST. Eth. Nic. A 3, 1095 b 26.
b 30.
de una historia de la educación• 12 ARIST.: Er.h. Nic. r 1, 1109
26 LA PRIMERA GRECIA NOBLEZA Y ARETÉ 27
decir, en la imagen de su areté, aun después de la muerte, tal como El afán de honor no es ya considerado por los griegos de los
le acompañó y lo dirigió en la vida. Incluso los dioses reclaman su tiempos posteriores como un concepto meritorio. Corresponde niejor
honor y se complacen en el culto que glorifica sus hechos y castigan a la ambición tal como nosotros la entendemos. Sin embargo, aun
celosamente toda violación de su honor. Los dioses de Homero son, en la época de la democracia, hallamos con frecuencia el reconoci­
por decirlo así, una sociedad inmortal de nobles. Y la esencia de la miento y la justificación de aquel afán, lo mismo en la política de
piedad y el culto griegos se expresan en el hecho de honrar a la di­ los estados que en la relación entre los individuos. Nada tan instructivo
vinidad. Ser piadoso significa "honrar lo divino". Honrar a los dio­ para la íntima comprensión de la elegencia moral de este pensamien­
ses y a los hombres por causa de su areté es propio del hombre . to como la descripción de la megafopsychia, de la magnanimidad, en
primitivo. la Ética de Aristóteles.15 El ensamiento ético de Platón de Aris­
Así se comprende el trágico conflicto de Aquiles en la llíada. Su tóteles se fundan, en mue os puntos, en a ética aristocrática e la
indignación contra los griegos y su negativa a prestarles auxilio no Grecia arcaica. Ello requeriría una interpretación lustóricadetallada�
procede de una ambición individual excesiva. La grandeza de su "C'atilosofía �sublima y universaliza los conceptos tomados en su ori­
afán de honra corresponde a la grandeza del héroe y es natural a ginaria limitación. Pero, con ello, se confirma y precisa su verdad
los ojos del griego. Ofendido este héroe en su honor se conmueve permanente y su idealidad indestructible. El pensamiento del siglo IV
en sus mismos fundamentos la alianza de los héroes aqueos contra es naturalmente más diferenciado que el de los tiempos homéricos y
• Troya. Quien atenta a la areté ajena pierde en suma el sentido mis­ no podemos esperar hallar sus ideas ni aun sus equivalentes precisos
mo de · la areté. El amor a la patria, que solventaría hoy la dificul­ en Homero ni en la epopeya. Pero Aristóteles, como los griegos de
tad, era ajeno a los antiguos nobles. Agamemnón sólo puede apelar todos los tiempos, tiene con frecuencia los ojos fijos en Homero y
a su poder soberano por un acto despótico, pues aquel poder no es desarrolla sus conceptos de acuerdo con su modelo. Ello demuestra
tampoco admitido por el sentimiento aristocrático que lo reconoce· sólo que se halla mucho más cerca que nosotros de comprender íntima­
como primus inter pares. En el sentimiento de Aquiles, ante la nega­ mente el pensamiento de la Grecia antigua.
ción del honor que se le debe por sus hechos, se mezcla también El reconocimiento de la soberbia o de la magnanimidad como una
este sentimiento de opresión despótica. Pero esto no es lo primor­ virtud ética resulta extraño a primera vista para un hombre de nues­
dial. La verdadera gravedad de la ofensiva es el hecho de haber de­ tro tiempo. Más notable parece aún· que Aristóteles viera en ella· no
negado el honor de una areté prominente.18 El segundo ran ejemplo una virtud independiente, como las demás, sino una virtud que las
l
de las trágicas consecuencias del honor ofendido es yax, eJ más presupone todas y "no es, en algún modo, sino su más alto orna­
grande de los héroes aqueos, después de Aquiles. Las armas del caído mento". Sólo podemos comprenderlo justamente si reconocemos que
Aquiles son otorgadas a Odiseo a pesar de los merecimientos superio­ el filósofo ha asignado un lugar a la soberbia areté de la antigua
res de aquél. La tragedia de ÁYax termina en la locura y el suicidio. ética aristocrática en su análisis· de la conciencia moral. En otra oca­
La cólera de Aquiles pone al ejército de los griegos al borde del sión 16 dice, incluso, que Aquiles y Áyax son el modelo de esta cua­
abismo. Es un problema grave para Homero si es posible reparar el lidad. La soberbia no es, por sí misma, un valor moral. Es incluso
honor ofendido. Verdad es que Fénix aconseja a Aquiles no tender ridícula si no se halla encuadrada por la plenitud de la areté, aquella
en exceso el arco y aceptar el presente de Agamemnón, como signo unidad suprema de todas las excelencias, tal como lo hacen Platón
de reconciliación a causa de la aflicción de sus compañeros. Pero que y Aristóteles sin temor, al us�r el concepto de Kalokagathia. Pero .el
el Aquiles de la tradición originaria no rechaza la reconciliación por pensamiento ético de los grandes filósofos atenienses permanece fiel
terquedad solamente, lo vemos en· el ejemplo de Áyax que, en el a su origen a.ristocrático al reconocer que la areté sólo puede hallar•
'infierno, no contesta a las palabras compasivas de su antiguo enemi­ su verdadera perfección en las almas selectas. El reconocimiento de
go y se vuelve silenciosamente "hacia las otras sombras en el oscuro la grandeza de alma como la más alta expresión de la personalidad
réino de la muerte" .14 Tetis' suplica a Zeus: "Ayúdame y honra a mi espiritual y ética se funda en Aristóteles, así como en Homero, en
hijo, cuya vida heroica fue tan breve. Agamemnón le arrebató el ho­ la dignidad de la areté.17 "El honor es el premio de la areté; es· el
nor. Hónrale, ¡oh Olímpico!" Y el más alto dios, en atención a tributo pagado a la destreza." La soberbia resulta, así, la sublimación
Aquiles, permitió que los aqueos, privados de su ayuda, sucumbieran
en la lucha y reconocieran, así, con cuánta injusticia habían privado
15 ARrsT. Eth. Nic. A 7-9, ver mi ensayo: "Der Grossgesinnte", Die Anti/ce,
de su honor al · más grande de sus héroes. vol. 7, pp. 97 ss.
18 A 412, B 239-240,, I 110, 166, II 59, pasaje principal I 315-322. 16 ARIST., Analyt. post. B 13, 97 b 15.
14 'A. ,543. ss. 17 ARIST., Eth. Nic. A 7, 1123 b 35.
NOBLEZA Y ARETÉ 29
28 LA PRIMERA GRECIA
alto goce que una larga existencia en indolente reposo; preferirá vi­
d? l::t areté. Pero de ello resulta también que la soberbia y la magna­
mm1dad es lo más difícil para el hombre. vir un año sólo por un fin noble, que una larga vida por nada;
preferirá cumplir UD1!_Ji.QlL�cci�E,___gr�nde y magnífic a, a una serie
Aqu� apr«':,h�ndemos la fundamental significación de la primitiva ·· ·
, .
et�ca aris�ocrat1ca para la formación del hombre griego. El pensa­ de p�queiieces insiguificante..:s.:
· -·-'En estas palabras se revela lo más peculiar y original del senti­
miento &"riego _ sobre el hombre y su areté se revela, de pronto, como miento de la vida de los griegos: el heroísmo. En él nos sentimos
en la_umd�d_de su desarrollo histórico. A pesar de todos los cambios
Y enriquE:c1m1e�tos que experimenta en el curso de los siglos siguien­ esencialmente vinculados a ellos. Son la clave para la inteligencia de.
te�, mal_?�ene siempre la forma que ha recibido de la antigua ética la historia griega y para llegar a la comprensión psicológica de esta
aristo, �rat1ca. En este . concepto de la areté se funda el carácter aris­ breve pero incomparable y magnífica aristeia. En la fórmula "apro­
.
tocratico del ideal de_ la edu,c,ación entre los griegos. piarse de la belleza", se halla expresado con claridad única el íntimo
Vamos a persegmr todavia aquí algunos de sus últimos motivos. motivo de la areté helénica. El� distingue�-��_ los tiempos de la Ci) 0 e
nobleza homérica, la heroicidad gnega del simple desprecio salv_tj_�
de .. Ia _ _:inu�Ite. Es la subordinación de lo físico a una más alta "be-
Para ello puede ser también Aristóteles nuestro guía. Aristóteles mues­
tra el esfuerzo h�mano hacia la perfección de la areté como producto
de un amor propio elevado a su más alta nobleza, la cptkau·da. Ello no lleza". Mediante el trueque de esta belleza por la vida, halla el im-
pulso natural del hombre a la propia afirmación su cumplimiento
más alto en la propia entrega. El discurso de Diótima, en el Sympo-
es un mero capricho de la especulación abstracta -si ello fuera así
su ?omparació� ?ºn la areté de los griegos primitivos sería sin dud�
e:�onea-.. Anstoteles, al def�nder ·y adherirse con especial predilec­ sion de Platón, sitúa en el mismo plano el sacrificio de dinero y
crnn a un. i?;ªl de am?r I?ropio, plenamente justificado, en consciente bienes, la resolución de los grandes héroes de la Antigüedad en el
. esfuerzo, la lucha y la muerte para alcanzar el premio de una gloria
contraposic10n con el JUICIO común en su siglo, ilustrado y "altruísta"
de�cub;re una de las raíces originarias d€l pensamiento moral de lo� perdurable y la lucha de los poetas y los legisladores para dejar a
la posteridad creaciones inmortales de su espíritu. Y ambos se ex-
griegos. Su alta estimación del amor propio, así como su valoración
plican por el poderoso impulso anhelante del hombre mortal hacia
�el �n�elo de honor y de la soberbia, proceden del ahond amiento la propia inmortalidad. Constituyen el fundamento metafísi co de las
f1losofico lleno de fecundidad en las intuiciones fundamentales de la 18 También
é!ica arist�crática. Entiéndase bien que el "yo" no es el sujeto físico, paradojas de la ambición humana y del afán de honor.
.
sm� _el mas alto ideal del hombre que es capaz de forjar nuestro Aristóteles conecta de un modo expreso, en el himno que se ha con-
esp1ntu Y que todo noble aspira a realizar en sí mismo. Sólo el más servado a la areté de su amigo Hermias -el príncipe de Atarneo,
o
alto amor a este yo en el cual se halla implícita la más alta areté es que murió por fidelidad a su ideal filosófico y moral-, su concept
filosófico de la areté con la areté de Homero y con los modelos de
capaz "de aprop�a:se la b�lleza". Esta frase es tan genuinamente
Aquiles y Áyax.19 Y es evidente que muchos rasgos, mediante los
�nega 1�e es d1f1c1l tradu�irla a. u� idioma moderno. Aspirar a la cuales describe la propia estimación, son tomados de la figura de
belle�;t ( que par:1 los gri?go� s1gmfica al mismo tiempo nobleza y
, _
sel?cc10n) Y ªP:opiarsela, s1gmfica no perder ocasión alguna de con­ Aquiles. Entre ambos grandes filósofos y los poemas de Homero, se
qmstar el prem10 de la más alta areté. extiende la no interrumpida serie de testimonios de la vida perdurable
Nuestro pensa­ de la idea de la areté, propia de los tiempos primeros de Grecia.
• ¿ Qué significa para Aristóteles esta "belleza"?
miento �e vuelve de pronto_ hac!a el refinado culto a la personalidad
de l?s tiempos . posteriores, haci:1 la característica aspiración del hu­
m�msmo �e! siglo XVIII a_ la hbre f?rmación ética y el enriquecí-
� m1ent'? e�p1ntual de la propia personalidad. Pero las propias palabras
de A�1stoteles muestran de un modo indubitable que lo que tiene ante
los �Jos son, por el_ contrario, ante todo, las acciones del más alto
heroismo moral. QmE:n se esti1?� a sí mismo debe ser infatigable en
la defensa de s�s am1g�s, sacrificarse en honor de su patria, aban­
donar gustoso dinero, bienes y honore!! para "entrar en posesión de
la belleza;•. La curiosa fr�se se repite con insistencia y ello muestra
,
hasta que punto, para Anstoteles, la más alta entrega a un ideal es
la prueba de un amor propio ep.altecido. "Quien se sienta impreg­ 18 PLAT., Symp. 209 C.
nado de la propia estimación preferirá vivir brevemente en el más 1» Ver mi Aristóteles (Berlín, 1923), p. 118.

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