Este poema expresa el profundo arrepentimiento y amor de un pecador hacia Jesús. El autor lamenta haber ofendido a un Dios tan santo y bueno, y ruega a Jesús que cambie su triste existencia y le permita amarle con la misma ternura y devoción con que otras figuras bíblicas como Agustín y Magdalena amaron a Jesús después de su conversión.
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Este poema expresa el profundo arrepentimiento y amor de un pecador hacia Jesús. El autor lamenta haber ofendido a un Dios tan santo y bueno, y ruega a Jesús que cambie su triste existencia y le permita amarle con la misma ternura y devoción con que otras figuras bíblicas como Agustín y Magdalena amaron a Jesús después de su conversión.
Este poema expresa el profundo arrepentimiento y amor de un pecador hacia Jesús. El autor lamenta haber ofendido a un Dios tan santo y bueno, y ruega a Jesús que cambie su triste existencia y le permita amarle con la misma ternura y devoción con que otras figuras bíblicas como Agustín y Magdalena amaron a Jesús después de su conversión.
Este poema expresa el profundo arrepentimiento y amor de un pecador hacia Jesús. El autor lamenta haber ofendido a un Dios tan santo y bueno, y ruega a Jesús que cambie su triste existencia y le permita amarle con la misma ternura y devoción con que otras figuras bíblicas como Agustín y Magdalena amaron a Jesús después de su conversión.
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DULCE JESUS MIO
Dulce Jesús mío Lagrimas sollozas
Oh si yo te amara Penas padecer Peque contra ti Serán por Jesús Pésame en el alma. Mi único placer Como te ofendí Renuncio del mundo Siendo tu tan santo Los falsos amores Has Señor que llore Fuera vanidades con amargo llanto. Fuera los errores Hermosura Mía Peque buen Jesús Que tarde te ame Peque hay de mí Que tarde mi Dios Peque Dios eterno La culpa deje. Peque contra ti Ojala mi Dios De amargo quebranto Ojala y te amara Llevo el pecho lleno Como otro Agustín Por haber pecado Asombro de gracia. Contra un Dios tan bueno. A una magdalena Pésame en el alma Tú la iluminaste Oh suma bondad Y de una mundana Heber ofendido En santa mudaste. Su gran majestad. Cambia Jesús mío Morirme quisiera Mi triste existencia Con vivo dolor Y hallaras en mi alma Con que se espirara Feliz complacencia. Jesús en tu amor. También margarita Tu eres infinito De cortana fue bondadoso y clemente Una pecadora puedes abrazarme Y heroica de fe. con amor ardiente. Porque yo mi Dios Muera yo Jesús No te he de querer muera yo de amor Con igual ternura que muera yo en tu gracia Consumo placer. que muera yo en tu amor Siendo Dios clemente Liberal y amante Has Señor que te ame Con amor constante.