Ciclos Combinados

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 11

INSTITUTO TECNOLOGICO SUPERIOR

DE ALVARADO

INGENIERÍA MECANICA

Materia:
SISTEMAS DE GENERACIÓN DE ENERGÍA

Semestre-Grupo:
8° UNICO

Producto Académico:
RESUMEN

Tema:
CICLOS COMBINADOS BRAYTON-RANKING

Presenta:
YARITZA OLIVER FLORES (156Z0127)
LIZBETH ARELI CRUZ LARA (156Z0116)
LUIS FERNANDO ISLAS MAYORGA (156Z0121)

Docente:
ING. ROBERTO PEÑALOZA RIVERA

H. Y G. ALVARADO, VER. 05 DE JUNIO DE 2019

JAIRO OCHOA MARTÍNEZ


CICLO COMBINADO GAS – VAPOR
EL CICLO DE LA TURBINA DE GAS
La turbina de gas de un ciclo combinado gas – vapor es una turbina de gas de ciclo
abierto y termodinámicamente es una aplicación del ciclo Brayton. La evolución que
sigue el fluido se muestra en el diagrama T-S de la siguiente figura y consta
básicamente de las siguientes etapas:
 Una etapa de compresión, efectuada por una máquina térmica denominada
compresor, lo más isentrópica posible.
 Una etapa de aportación de calor a presión constante.
 Una etapa de expansión, realizada en una máquina térmica denominada turbina,
lo más isentrópica posible.
 Una etapa de cesión de calor a presión constante.
Elementos constitutivos principales de las turbinas de gas. Representación gráfica del
trabajo en: a) ciclo ideal isentrópico; b) ciclo real; c) aproximación al ciclo de Carnot a
partir de las temperaturas medias de foco caliente y frío de un ciclo real.
Tecnológicamente la aportación de calor puede efectuarse, bien mediante un proceso
de combustión en el interior de la máquina, en lo que se denomina la cámara de
combustión de la turbina de gas, o aportando gas caliente y a presión combinado con
un proceso externo (gasificación integrada de carbón, lechos fluidos presurizados, etc.)
La cantidad de calor 𝑄𝐶+ aportada en el foco caliente, viene dad por la siguiente
expresión:
3
𝑄𝐶+ = ∫ 𝑇𝑑𝑆
2
Y la cantidad de calor cedida en el foco frio viene dada por la siguiente expresión:
4
𝑄𝐹− = ∫ 𝑇𝑑𝑆
1

El rendimiento de la turbina de gas puede expresarse también en función de los saltos


de entalpía de las máquinas que la componen y de la energía aportada en forma de
combustible, según se muestra de forma simplificada en la fórmula siguiente
𝑊̇𝑇 − 𝑊̇𝐶 (𝑚̇𝑎 + 𝑚̇𝑓 )(ℎ30 − ℎ40 ) − 𝑚̇𝑎 (ℎ20 − ℎ10 )
𝜂𝑇𝐺 = =
𝑚̇𝑓 𝐻𝑐 𝑚̇𝑓 𝐻𝑐
Donde W T es la potencia generada en el proceso de expansión, Wc la potencia
necesaria para comprimir el aire, mf la masa de combustible introducida en la cámara de
combustión por unidad de tiempo, 𝐻𝑐 el poder calorífico inferior a presión constante
del combustible, 𝑚̇𝑎 la masa de aire y ℎ10 , ℎ20 , ℎ30 , ℎ40 son las entalpías de parada' de
cada uno de los puntos por los que evoluciona el fluido en el ciclo.
Es importante destacar que las turbinas de gas empleadas en ciclos combinados gas-
vapor se diseñan optimizadas para obtener una elevada densidad de potencia y el
óptimo de eficiencia del conjunto del ciclo combinado. Si las turbinas de gas, para una
misma temperatura en la cámara de combustión tuvieran relaciones de compresión en
el compresor' más elevadas, el rendimiento de la turbina de gas aumentaría —al
aumentar la temperatura media de aportación de calor y al disminuir la temperatura media
del foco frío— pero la temperatura en el escape disminuiría, tal y como se desprende
de la Figura 2. Para compensar la tendencia a la disminución en las temperaturas de
escape —perjudicial para la recuperación de calor en la caldera—, existen turbinas de
gas en las que la combustión se realiza de forma secuencial —véase Figura 2.5—. En
estas turbinas, las mayores relaciones de compresión en el compresor, junto con el
empleo de expansiones escalonadas, dan lugar a mayores rendimientos en el conjunto
del ciclo combinado. La combustión secuencial supone por tanto un incremento en la
temperatura media del foco caliente, el mantenimiento de cargas parciales de la
temperatura de los gases de escape, una mayor recuperación de calor en la caldera y
un mejor rendimiento del ciclo combinado en esas condiciones.
EL CICLO DE LA TURBINA DE VAPOR
El ciclo de las turbinas de vapor corresponde al ciclo Rankine y es la aplicación
tecnológica del ciclo de Carnot para el caso de que el fluido motor sea un fluido
condensable y durante su evolución se produzcan cambios de fase. De forma
simplificada, y para el ciclo básico, la evolución del fluido sigue las siguientes etapas:
 Una etapa de expansión del fluido en fase vapor, realizada en una máquina
térmica denominada turbina de vapor y lo más isentrópica posible.
 A la salida de la turbina de vapor, una cesión de calor residual del vapor a presión
constante en un dispositivo llamado condensador. En este dispositivo se realiza la
condensación total del mismo y su paso a fase líquida.
 Una o varias etapas de elevación de la presión del fluido. El proceso se realiza
con el fluido en fase líquida, con bombas y fuera de la zona de cambio de fase.
Ésta es una de las principales diferencias con el ciclo de Carnot ya que, en
sentido estricto, para obtener la máxima eficiencia sería necesario realizar la
compresión de un fluido bifásico, con la dificultad tecnológica que ello conlleva.
 Una etapa de aportación de calor a presión constante. El fluido realiza una etapa
de calentamiento previo en fase líquida, un proceso de cambio de fase y una
elevación posterior de la temperatura del vapor en lo que se denomina
sobrecalentador —motivada por la necesidad de disminuir la humedad en el
vapor en las últimas etapas de expansión de laturbina—. Esto último constituye
la segunda particularidad del ciclo de Rankine y otra diferencia fundamental con
el ciclo de Carnot.

El fluido motor empleado suele ser agua desmineralizada, fundamentalmente por su


facilidad de manejo, reposición y abundancia, aunque conceptualmente no es el único y
podrían emplearse otros fluidos tales como mercurio o fluidos orgánicos. La estructura
básica de un ciclo agua-vapor en su versión más sencilla, así como la evolución del
fluido en un diagrama T-S, se esquematiza en la Figura
Representación en diagrama T-S del ciclo de las turbinas de vapor y de los equipos
principales necesarios para su realización.
El rendimiento del ciclo de la turbina de vapor puede expresarse también en función de
los saltos de entalpía de las máquinas que la componen y de la energía aportada en la
caldera, según se muestra de forma simplificada en la fórmula siguiente
𝑊̇𝑇 − 𝑊̇𝐵 𝑚̇𝑉 (ℎ3 − ℎ4 ) − 𝑚̇𝑉 (ℎ2 − ℎ1 )
𝜂𝑇𝑉 = =
𝑄̇𝐶+ 𝑄̇𝐶+
Donde 𝑊̇𝑇 es la potencia generada en el proceso de expansión en la turbina de
vapor, 𝑊̇𝐵 la potencia necesaria para el bombeo del fluido, 𝑚̇𝑉 la masa de vapor que
circula en el ciclo por unidad de tiempo, 𝑄̇𝐶+ el calor que pasa al ciclo por unidad de
tiempo a través de las paredes de los tubos de la caldera, y ℎ1 , ℎ2 , ℎ3 , ℎ4 , son las
entalpias de los puntos de evolución del fluido en el ciclo.
Ciclos de turbinas de vapor con recalentamientos intermedios
El proceso de expansión en la turbina de vapor, con el fin de obtener el mayor salto
entálpico posible y limitado por la temperatura del foco frío y la presión de
condensación, finaliza en condiciones normales en la zona de equilibrio líquido-vapor,
con la consiguiente aparición de humedad en las intimas etapas de expansión. Esto
representa un problema de conservación de la aerodinámica del álabe e incluso de su
integridad, obligando a realizar revisiones periódicas y sustituciones frecuentes de las
piezas dañadas en las últimas ruedas de las turbinas.
Las turbinas de vapor modernas admiten de un 16% a un 18% de humedad en las
últimas ruedas sin que el deterioro de los álabes sea importante. Es sin embargo un
hecho que, incrementos de presión en la caldera o disminuciones en la presión de
condensación llevan aparejados incrementos en el porcentaje de humedad presente.
Para reducir la humedad en el escape, la solución adoptada en las centrales térmicas
convencionales consiste en el recalentamiento del vapor una vez que se ha realizado
en la turbina la expansión parcial del mismo.
Con el recalentamiento, a la vez que se consiguen incrementos significativos de
potencia, puede mejorarse el rendimiento si se aumenta la temperatura media del foco
caliente. Esto es generalizable para el ciclo agua-vapor en centrales térmicas de ciclo
combinado.
La existencia de recalentamiento en un ciclo combinado viene definida por
consideraciones termo económicas, no justificándose la complicación que representa
su instalación en la central cuando las potencias de la misma son pequeñas o su
periodo de amortización muy largo. En la actualidad, las centrales de ciclo combinado
se construyen con un único recalentamiento, aunque una de las mejoras en el
rendimiento del ciclo agua-vapor —el empleo de presiones supe críticas— podría
conllevar desarrollos con doble recalentamiento.

Representación en diagrama T-S de un ciclo de turbina de vapor con recalentamiento


intermedio
LOS CICLOS COMBINADOS GAS-VAPOR
Con las bases de partida expuestas, se puede definir un ciclo combinado como el
acoplamiento de dos ciclos termodinámicos individuales, uno que opera a alta
temperatura y otro con menores temperaturas de trabajo. El calor residual del proceso
de generación de trabajo neto en el ciclo de alta temperatura se aprovecha en su
mayor parte en un intercambiador de calor para producir trabajo en un ciclo
termodinámico de baja temperatura.
La idea de combinar un ciclo que opera a alta temperatura con otro de temperaturas de
trabajo más bajas no es nueva. Emmet, a principios de siglo xx (1925), desarrolló la
idea de obtener trabajo con la combinación de dos ciclos de Rankine: uno con fluido
motor mercurio y otro con agua. Fue sin embargo el pleno desarrollo de las turbinas de
gas como elemento productor de potencia y el acoplamiento de éstas a un ciclo de
Rankine agua-vapor lo que ha permitido el desarrollo de los ciclos combinados que
conocemos hoy día.
En la práctica, el término ciclo combinado se reserva de folina casi universal a la
conjunción en una única central de dos ciclos termodinámicos,

Ciclo combinado básico. Elementos constitutivos principales.


Brayton y Rankine, que trabajan con fluidos diferentes: gas y agua-vapor. El ciclo que
trabaja con aire-gases de combustión (Brayton) opera a mayor temperatura que el ciclo
cuyo fluido es agua-vapor (Rankine) y ambos están acoplados por el intercambiador de
calor gases/agua-vapor, que es la caldera de recuperación de calor. La unión
termodinámica de estos ciclos conduce generalmente a la obtención de un rendimiento
global superior a los rendimientos de los ciclos termodinámicos individuales que lo
componen.
La justificación de los ciclos combinados reside en que, desde un punto de vista
tecnológico, resulta difícil conseguir un único ciclo termodinámico que trabaje entre las
temperaturas medias de los focos caliente y frío usuales. Es por ello que, como solución
de compromiso, se acude al acoplamiento de dos ciclos: uno especializado en la
producción de trabajo con alta eficiencia en rangos altos de temperaturas de trabajo
(Brayton) y otro para temperaturas medias-bajas (Rankine). La eficiencia global del
ciclo combinado gas-vapor vendrá determinada por las eficiencias individuales de los
ciclos Brayton y Rankine que lo componen, así como por la capacidad para realizar un
adecuado trasvase del calor residual presente en el escape del ciclo Brayton al ciclo de
Rankine por medio de la caldera de recuperación de calor.
Ciclos combinados. Expresión del rendimiento

En la Figura 2.12 se muestran de manera esquemática los flujos de energía


existentes entre los distintos elementos que componen un ciclo combinado gas-vapor.

La expresión del rendimiento del ciclo térmico de alta temperatura —turbina de


gas— viene dado por la expresión

𝑊̇𝑇𝐺
𝜂𝑇𝑉 =
𝑄̇𝑇𝐺
+
Esquema térmico básico y de flujos de energía de un ciclo combinado gas-vapor.
Rendimiento de los ciclos combinados gas-vapor con postcombustión
Las calderas de recuperación de calor para un ciclo combinado gas-vapor pueden
diseñarse de forma que, en lugar de ser puramente convectivas y recuperar el calor de
los gases de escape del ciclo de alta, permitan una combustión suplementaria. El
combustible en esos casos puede ser o no el mismo que el empleado en la cámara de
combustión de la turbina de gas, y cuando se emplea este sistema se dice que el ciclo
combinado admite postcombustión. Desde el punto de vista termodinámico, la principal
diferencia con los ciclos combinados sin postcombustión es que no todo el calor se
aporta en la parte de alta temperatura del ciclo.
El rendimiento total de un ciclo combinado con postcombustión para un esquema típico
en una configuración 1 x 1 (una turbina de gas y una turbina de vapor), y de los
elementos individuales que lo componen viene dado por la expresión siguiente
𝑊̇𝑇𝐺 + 𝑊̇𝑇𝑉
𝜂𝐶𝑂𝑀𝐵 =
𝑄̇𝑇𝐺
+
+ 𝑄̇𝐶𝑆
+

Donde 𝑊̇𝑇𝐺 es el trabajo producido en la turbina de gas, 𝑊̇𝑇𝑉 el producido en la turbina


de vapor, 𝑄̇𝑇𝐺
+
el calor aportado en la cámara de combustión de la turbina de gas y 𝑄̇𝐶𝑆
+

el calor aportado a la caldera en los quemadores de combustión suplementaria.


En la práctica, la postcombustión en un ciclo combinado gas-vapor significa, aparte del
empleo de calderas con diseños no optimizados, que el aprovechamiento de la energía
aportada en los quemadores de postcombustión corresponde al ciclo de Rankine, con
la consiguiente pérdida de rendimiento. No obstante, la postcombustión desde un punto
de vista económico puede estar justificada en los casos en que se necesite dar picos
de potencia bien retribuida de forma rápida. Asimismo, la postcombustión puede ser un
recurso útil cuando el ciclo combinado funciona como cogeneración suministrando
cantidades de vapor variable a procesos industriales, cuando existe un off-gas en un
proceso industrial cercano, etc.

También podría gustarte