Ética Cristiana

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Ética cristiana

El cristianismo representa una etapa decisiva en la historia del pensamiento humano su importancia
radica en que trae consigo un nuevo pensamiento del hombre y del mundo.

El cristianismo no es una filosofía, es una religión que procede del judaísmo; una religión revelada
por Dios y la única que pretende encerrar la verdad absoluta.

Recogiendo los elementos esenciales de la ética cristiana esta puede definirse como “aquella que
presupone la existencia de un ser divino, que ha dictado normas para el comportamiento moral, y
que la conducta humana es buena si se sujeta a esas normas y mala si las viola” de ahí que esta ética
se caracterice por su autoritarismo. Según la ética cristiana la perfección en la vida radica en el amor
a Dios, perfección que se logra cumpliendo fielmente con la ley divina.

El fundamento de la Ética

Su primer componente es la verdad, porque nadie se miente a sí mismo, la conversación interna o


en nuestras mentes es sincera, franca, veraz; de manera intencional no nos mentimos a nosotros
mismos; la verdad es la conformidad de nuestras expresiones a la esencia de las cosas, o a nuestro
entendimiento o comprensión de esas cosas.

Un segundo componente es la justicia o equidad, pues delante de la Ley de Dios todos los hombres
son iguales, y los iguales no tienen poder de autoridad entre ellos. No soy juez de mi prójimo.

El tercer componente es la bondad, porque nadie es difamador ni cruel consigo mismo. En resumen,
la ética es como una mesa de tres patas: Verdad, justicia y bondad. Cualquiera de estas columnas
que falte, la mesa se cae.

Alguno de los rasgos distintivos más importantes de la ética cristiana son los siguientes:

 La concepción cristiana de Dios: “El cristianismo es un sistema teísta; este es el primer


postulado: el Dios personal, ético y que se revela a sí mismo.” Es interesante notar que la
Biblia no es un tratado de teología solamente. Las grandes enseñanzas acerca de Dios son
presentadas junto a enseñanzas eminentemente prácticas. La Biblia se ocupa de revelarnos
quien y como es Dios. También dedica un lugar destacado a manifestar cual es el anhelo del
Creador para la existencia humana. Jesucristo demostró su Deidad a través de sus milagros
y también a través de su norma de conducta. La ética cristiana descansa sobre la revelación
Biblia acerca de la naturaleza, la justicia y el amor de Dios.

 La concepción cristiana del mundo: el término “Cosmovisión”, declara James Orr, quiere
decir literalmente “idea del mundo” y comprende “la idea más amplia que la mente pude
formarse de las cosas en el esfuerzo por comprenderlas, desde el punto de vista de alguna
filosofía o teología particular. Por tanto, al hablar de una “idea cristiana del mundo” implica
que el cristianismo tiene su propio punto de vista y su idea relacionada con él, y que esta
idea, cuando se desarrolla, constituye un conjunto ordenado.” El postulado básico del
cristianismo es que un Dios personal, Santo y eterno creó el universo en el cual vivimos, lo
sustenta y dirige. Esto se deduce de la propia revelación de Dios manifiesta en las Escrituras.
Si de algún modo podríamos resumir la Cosmovisión cristiana podríamos escoger la frase de
Pascal: “Jesucristo es el centro de todo, y la meta a la cual tiende todo”.

 La concepción cristiana del hombre: en cuanto a la naturaleza del hombre la Biblia la


relaciona estrechamente con la doctrina de Dios. Lo primero que nos dice la Palabra acerca
del hombre es que fue creado a imagen y semejanza de Dios. Así como Dios es personal y
ético también lo es el hombre. Pero la Biblia señala asimismo la malévola intervención de
Satanás quien es el creador y promotor del mal. El hombre cedió ante la tentación del
maligno y ahora se encuentra esclavizado por el pecado. El pecado es “una afrenta infinita
a la gloria divina” Dios se encargó que la conciencia del hombre acuse su maldad y luego,
para que no queden dudas, manifestó el bien y el mal en su ley. También tomó la iniciativa
en la salvación de la humanidad aun desde antes de la fundación del mundo. La muerte de
Cristo, prefigurada a través del sistema de sacrificios, concede al hombre la oportunidad de
obtener mediante la fe la reconciliación con Dios lo cual implica el perdón de todas sus
faltas. Sin embargo, esta concepción del hombre es opuesta a la opinión de filósofos y
científicos. Estos suelen pensar que el hombre es de por sí bueno. Su conducta
improcedente puede ser mejorada a través de la autodisciplina. Otras opiniones señalarán
que las manifestaciones malignas del hombre se deben a traumas originados tal vez en su
crianza y que, con la terapia adecuada, pueden ser superados. Este ideal choco, no obstante,
con la realidad ya que numerosos son los casos en que la maldad del hombre se manifiesta
de modo innegable.
La dignidad del hombre descansa, según la Biblia, en el hecho de haber sido creado a imagen
y semejanza de Dios. Su miseria en haber caído en el pecado. Estos son dos puntos
fundamentales de la doctrina bíblica brindan un sustento primordial a la ética cristiana.

En el desarrollo histórico del cristianismo pueden encontrarse las siguientes corrientes:

a) Cristianismo primitivo: comprende las sectas cristianas derivadas del judaísmo, hacen
énfasis en las enseñanzas morales de cristo. A diferencia del pensamiento griego, el ideal
de la vida cristiana esta lejos de un intelectualismo y de una metafísica, se caracteriza por
su espontaneidad y sencillez; la ética de jesus es una ética personalista. El bien solamente
es vivo en Dios; la norma es la voluntad de Dios. La ética del cristianismo primitivo se centra
en los Diez mandamientos, en practicas rituales (bautismo, comunión, matrimonio), en las
enseñanzas morales de cristo (caridad, humildad, etc). También se conoce como ética
pastoral cristiana, no se encuentran especulaciones filosóficas.

b) La patrística: a medida que el cristianismo se difunde, va siendo objeto de reflexiones y


debates entonces surge la necesidad de crear un cuerpo doctrinal capaz de explicar sus
dogmas  Padres de la Iglesia.
La etapa de la patrística o de los padres de la iglesia ha evolucionado, primero aparecen los
padres apostólicos como clemente romano, san Policarpo y san papias cuyas obras son
sencillas instrucciones que aspiran a perpetuar la fe y las costumbres cristianas.

Posteriormente aparecen los padres apologistas, quienes se caracterizan por defender el


dogma cristiano contra las primeras herejias. San Justino, Tertuliano, Taciano, entre otros.

Mas tarde los padres catequistas, interpretación un poco mas científica, la cual llega a
consolidarse para dar paso a la edad de oro de los padres de la iglesia. Durante esta época
se aspira a realizar una síntesis del pensamiento pagano o griego con el cristianismo. (como
lo hizo el genio de la patrística San agustin)

SAN AGUSTIN

Africano, Padre de la iglesia, representa la alianza de las letras humanas, la filosofía griega y la
cultura clásica con la inspiración divina. Su obra Las confesiones, es de singular importancia ya que
relata su conversión al cristianismo, puesto que antes había sido pagano. San agustin ha sido
llamado el filosofo de la interioridad puesto que dice “No salgas de ti mismo, en tu interior reside la
verdad”. El interior de un hombre es semejante a un templo, en el cual uno debe afanarse por
contemplar la luz de Dios. La ética de San agustin esta inspirada en la filosofía platónica  consiera
que el alma contiene una norma divina que le guía hacia la beatitud.

c) La escolástica: época de madurez de la filosofía cristiana, edad media. Proviene del saber
que era impartido en las escuelas y universidades el cual era un saber filosófico y teológico
encaminado a fundamentar y enseñar la doctrina de la iglesia como sistema científico.

SANTO TOMAS DE AQUINO

Nació en Italia, hijo de los condes de Aquino. Concilia la teología católica con la síntesis filosófica de
aristoteles. La más importante de sus obras es La suma Teológica, considerada una enciclopedia del
saber filosófico y teológico de la época. Según santo tomas todos los seres tienen un fin prefijado-
“El objeto propio de la voluntad es el fin y el bien; por consiguiente, todas las acciones humanas
necesariamente se ordenan a su fin.” El bien o el fin del hombre es Dios, objeto supremo de
conocimiento. Según santo tomas la obligación moral señala a Dios como fin de toda creatura; de
modo que cada ser lleva dentro de si una inclinación a lo divino. En cuanto a la conciencia moral,
Santo tomas dice que la ley natural humana es una participación de la ley eterna adecuada a la
creatura racional, y que la razón da a conocer. El intelecto abre de esta manera los ojos del alma, e
el intelecto ordena al hombre que tienda hacia Dios, aunque respetando su naturaleza de ser libre.
Toda inteligencia humana esta provista de una facilidad nativa, que se convierte en una disposición
permanente o habito.

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