C 1018
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Aprender
co n músic a
po pula r
Libro de teoría
JUAN DIEGO GÓMEZ CORREA
a rmo n í a
Aprender
co n músic a
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Colaboración, FREDDY GUERRA
© Universidad Distrital Francisco José de Caldas
© Facultad de Artes —ASAB
Primera edición, Abril de 2017
ISBN: 978-958-5434-35-6
El sonido que produce un cuerpo cuando vibra nunca está solo. Simultáneamente, con este, llamado
sonido fundamental o parcial Nº 1, vibran otros parciales. Al conjunto de estos sonidos se le denomina
serie armónica.
El ejemplo 1.1 es una representación gráfica de la serie armónica. Los parciales están enumerados así: el
parcial Nº1 es el sonido fundamental; y por encima de este resuenan: el parcial Nº 2 a la 8ª, el parcial Nº 3
a la 5ª justa (compuesta), el parcial Nº 4 a 2 octavas de distancia, el parcial Nº 5 a la 3ª mayor (compuesta)
y así sucesivamente hasta el parcial Nº 16.
El ejemplo 1.1 ilustra cómo los cinco primeros parciales de la serie conforman una triada mayor. Se
trata de una sonoridad compuesta por un sonido fundamental (parcial Nº 1) al que se le superponen un
intervalo de 5ª justa compuesta, (parcial Nº 3) y otro de 3ª mayor compuesta, (parcial Nº 5). A partir de
ahora consideraremos la triada como la unidad fundamental de la armonía.
Una vez comprendida la naturaleza de la triada procederemos a enlazar o encadenar triadas construidas
a partir de diferentes sonidos fundamentales. A dichos enlaces de triadas los denominaremos progresiones
armónicas.
Como muestra el ejemplo 1.1, y basados en la serie armónica, la triada más cercana a la construida sobre
el parcial Nº 1 (C) es aquella formada a partir del parcial Nº 3 (G).
El encadenamiento o progresión entre estas dos triadas se denomina progresión fundamental y se repre-
senta con las cifras I-V-I donde el número romano equivale a la fundamental de cada triada.
2.2. IV en la cadencia
La armonía es un lenguaje y como tal presenta momentos en los que se quiere culminar una idea para
dar lugar a otra nueva o sencillamente para finalizar parcial o definitivamente un discurso. Estos “signos
de puntuación” o de articulación en la música se denominan cadencias. A la progresión de acordes que
conforman una cadencia la llamaremos progresión cadencial.
En el ejemplo 2.2, compases 7-9 tiene lugar la progresión cadencial: IV-Im-V-I. Aquí puede verse cómo
I es aproximado desde la 5ª inferior con el encadenamiento IV-I y enseguida desde la 5ª superior V-I.
Imagina
Imagina que no hay cielo
Es fácil si lo intentas.
Ni un infierno allá abajo,
Sólo el firmamento por encima de nosotros.
2.9. IV expande I
El ejemplo 2.9 está basado en el encadenamiento I–IV–I. Ya se estudió antes cómo la fundamental de
IV se sitúa a la 5ª inferior con respecto a I, lo cual, según la serie armónica, constituye una relación hasta
cierto punto artificial entre estos dos acordes. No obstante, la relación de 5ª se presenta creando un fuerte
vínculo armónico entre los acordes de I y IV.
Puede decirse también que el papel de IV en el ejemplo 2.9 consiste en expandir la armonía de tónica.
Una cuidadosa mirada a la conducción de voces muestra que el bajo realiza un salto de 5ª entre funda-
2.10 IV expande V
El ejemplo 2.10 está basado en la progresión I-V-IV-V-I. En este caso, IV funciona como acorde de bor-
dado de V. Dicho de otra manera, la progresión fundamental I-V-I se ha expandido mediante el uso de
IV como acorde de bordado. Es necesario recordar que en el encadenamiento V-IV-V las voces superiores
deben moverse en sentido contrario al bajo para evitar las 5ªs y 8ªs paralelas.