La Discriminacion
La Discriminacion
La Discriminacion
La discriminación (del latín discriminatĭo, -ōnis) es toda aquella acción u omisión realizada
por personas, grupos o instituciones, que produce y reproduce desigualdades en el acceso a
recursos y oportunidades (como la salud, la alimentación, la educación o el empleo) en favor o
en contra de un grupo social y sus miembros.
La discriminación es el acto de separar o formar grupos de personas a partir de un criterio o
criterios determinados. Normalmente, la discriminación se utiliza para referirse a la violación
de la igualdad de derechos por cuestión social, racial, religiosa, orientación sexual o por razón
de género.
En filosofía moral se ha definido la discriminación como un trato o consideración
«desventajosa». Esta definición es comparativa. Una persona no tiene que ser dañada para
ser discriminada. Simplemente tiene que ser tratada «peor» que otros por razones arbitrarias.2
Los afectados en la mayoría de los casos son los individuos pertenecientes a las denominadas
minorías. Estas minorías son pequeños grupos dentro de una sociedad. Hay casos en que
estos grupos no son pequeños pero aun así son rechazados.
Formas de discriminación
Discriminación por edad
La discriminación por edad es aquélla que discrimina o estereotipa bajo la base de la edad de
un individuo. Consiste en una serie de creencias, normas y valores que son usados para
justificar la discriminación o subordinación, más frecuentemente dirigida hacia adultos
mayores o niños y adolescentes.
Discriminación religiosa
Esta discriminación puede manifestarse en la limitación al acceso a la enseñanza, servicios de
salud, o a cargos públicos e incluso los miembros de las comunidades religiosas pueden ser
encarcelados o asesinados debido a su afiliación o a sus creencias religiosas. Las Naciones
Unidas a lo largo de su historia ha luchado por defender la libertad de creencia como un
derecho humano, dejando plasmada la prohibición de la discriminación por motivos religiosos
en todos sus instrumentos básicos internacionales. Para este fin el Consejo de Derechos
Humanos de las Naciones Unidas ha designado a un «Relator Especial sobre la libertad de
religión o de creencias» a quien se le ha pedido que identifique obstáculos existentes e
incipientes que impiden el goce del derecho a la libertad de religión o de creencias, y formule
recomendaciones sobre los medios de superar tales obstáculos. Asimismo, ateos son
discriminados por negar a quienes afirman que existen dioses.
Tipos de discriminación.
Discriminación directa
La discriminación de quienes no pertenecen a un cierto grupo por el hecho de no pertenecer a
tal grupo o en la creencia de que quienes no pertenecen a no satisfacen alguna clase de
criterio moralmente relevante.
Discriminación indirecta
La discriminación de quienes no pertenecen a un cierto grupo X por un motivo distinto de los
que tienen lugar en el caso de la discriminación directa.
Discriminación cognitiva
Se distinguen dos tipos de discriminación (cognitiva y no cognitiva) en función de la actitud con
la que se realiza. Según esto, la discriminación cognitiva es aquella que se hace con respecto
de quienes no pertenecen a un cierto grupo X con base en la creencia de que un cierto criterio
moralmente relevante no es satisfecho por quienes no pertenecen a X. Esta puede darse tanto
en casos de discriminación directa como indirecta.
Discriminación no cognitiva
La discriminación de quienes no pertenecen a un cierto grupo X debida a una mera actitud no
cognitiva contraria a quienes no pertenecen a X (como puede ser el mero deseo de que les
vaya mal). Se da siempre bajo la discriminación directa.
Discriminación jerárquica
La discriminación de quienes no pertenecen a un cierto grupo X que implica que algunos o
todos los intereses de quienes no pertenecen a X cuenten menos que los de quienes sí
pertenecen a X. Esto se hace buscando algún tipo de segregación.
Discriminación reflexiva
Discriminación epistémica
La opinión de una agente X es considerada menos fiable epistémicamente que la de otros
agentes por los mismos motivos por los que tiene lugar alguna otra forma de discriminación. Si
consideramos que la opinión de un alguien es menos susceptible de ser correcta que la de
otro individuo simplemente por el hecho de que el primero forma parte de un cierto grupo que
sufre una cierta discriminación, sin más evidencias para considerar algo así, estaremos
incurriendo en un ejemplo de discriminación epistémica. Esto se da en los casos en los que se
considera más fiable la opinión o criterio de una persona adulta frente a la de otra de menor
edad, entre otros.