OTROS

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 4

PARTIDOS DE MASAS EN EL PERÚ, AMÉRICA Y EL MUNDO

El origen de los partidos políticos estaría en los procesos revolucionarios liberales,


iniciados en el último cuarto del siglo XVIII, con el precedente del parlamentarismo
inglés. El derecho a participar en la política que trajo consigo el triunfo de la soberanía
nacional generó la necesidad de articular las distintas posturas que aspiraban a estar
representadas en los parlamentos en torno a organizaciones políticas con objetivos
comunes. Así pues, los partidos terminaron por ser piezas básicas de la relación entre
el Estado y la sociedad o, al menos, de la parte de la sociedad con derecho al sufragio.

EN EL PERÚ Y AMÉRICA

La oligarquía en el Perú.- con la caída de la aristocracia en 1919, en el Oncenio, se


consolidan las empresas dedicadas a la agricultura, la minería, el comercio y las
finanzas; propiciando la inversión del capital extranjero, especialmente norteamericano,
que forjaron precisamente el progreso material del Perú a costa del hambre y la
explotación del pueblo.
Esto originó, no sólo movimientos de masas de obreros, campesinos e indígenas sino
el surgimiento de partidos políticos con ideología popular y nacionalista con orientación
a la integración continental y mundial; lo mismo que de una u otra forma les hacen frente
hasta 1984 en que nuevamente toman el poder político con el General Manuel A. Odría,
manteniéndose con otros gobernantes hasta 1968 en que triunfa el militarismo
reformista con el general Juan Velasco Alvarado.

El APRA.- “Alianza Popular Revolucionaria Americana”, fundada en México el 7 de


marzo de 1924 por el profesor líder sindical Victor Raúl haya de la Torre, bajo influencia
de las revoluciones rusa y mexicana contra el imperialismo.
Haya de la Torre nació en Trujillo el 22 de febrero de 1895, siendo universitario en San
Marcos. Participó en la lucha por la jornada de las 8 horas de trabajo; llegando a ser
líder no sólo en el movimiento universitario, sino también de los trabajadores contra la
dictadura de Leguía. Por eso era perseguido, capturado en 1923 fue deportado.
Después de viajar por EEUU y Europa e incluso Rusia, regresa al Perú recién en 1930,
su ideología política, entre otros puntos, proponía los siguientes principios, que en
algunos casos y con el tiempo se modificaron hacia lo tradicional:

 La independencia económica contra el imperialismo yanqui.


 La unidad política de América Latina bajo el APRA.
 Nacionalización de las tierras agrícolas mediante la aplicación de la reforma
agraria.
 Apoyo al desarrollo industrial, en base a materias primas propias.
 La educación laica o estatal, desde la escuela hasta la universidad.
 La reorganización política y la solidaridad con todos los pueblos y clases sociales
oprimidas del mundo.

El socialismo peruano.- fue fundado el 16 de septiembre de 1928 por José Carlos


Mariátegui, aunque después se llamó Partido Comunista Peruano, la intención era
agrupar a obreros y campesinos, pero después se integró gente de clase media y de la
pequeña burguesía. Entre sus principios propuestos tenemos:
Un programa económico basado en el nacionalismo y la industrialización, con mercados
y materias primas propias.
Unidad del proletariado a nivel mundial para enfrentar todo tipo de imperialismo y
explotación.
La educación de tipo de socialista para garantizar una vida política efectivamente
democrática e igualitaria.
Capacitar al proletariado por la lucha para el ejercicio del poder y del orden socialista.

La unión revolucionaria.- fue el partido político popular fundado por Luis Miguel
Sánchez Cerro después de derrocar al oncenio a fin de mantenerse en el poder y lo
conformaban mayormente gente de clase madia cansada de la dictadura leguísta, por
la crisis económica que vivían el país como consecuencia de la crisis mundial declarada
en Nueva Cork en 1929, crisis a lo que los partidos tradicionales no pueden hacer frente
por estar en desorganización. Hizo frente al aprismo y socialismo emergente,
imponiéndose en las elecciones de 1931.
Como gobierno representa el tercer militarismo, intentó solucionar, la crisis económica
y social con medidas aportadas por la “Comisión Kemmerer” y la “Ley de Emergencia”
para castigar severamente la violencia y otros desórdenes sociales; apoyó el
levantamiento de los pobladores del Trapecio de Leticia para seguir siendo peruanos,
preparándose para la guerra con Colombia.
Sánchez Cerro muere asesinado el 30 de abril de 1933, por lo que la
Unión Revolucionaria continuó bajo la conducción de Luis A. Flores sin mayor éxito en
la política por declararse opositor al General Oscar R. Benavides.

El PRI Mexicano.- El partido Nacionalista Revolucionario(PRI) nació con la revolución


mexicana como revolucionario y nacionalista, conducido por diferentes líderes o
gobernantes; porque la Constitución Política mexicana prohíbe la reelección de por
vida; destacan Vestuniano Carranza, Älvaro Obregón, Plutarco Elías Calle y Lázaro
Cárdenas.
Oficialmente nación con Elías Calle en 1929, consolidándose en 1934 como una
“Dictadura Institucional” que gobierna México hasta fines del año 2000 en que triunfa el
partido conservador de oposición con el presidente Vicente Fox.
Como principio tenía la unidad continental, excluyendo a los EEUU., mediante la
ciudadanía continental, la nacionalización de las riquezas naturales como el petróleo,
una política agraria con rumbo propio y una educación popular que fue ejemplo para
toda América Latina; la libertad religiosa le creó serios problemas por las revueltas de
los fanáticos “Cristeros”. El gobierno de Lázaro Cárdenas se caracterizó por ser popular,
dinámico e independiente que afrontó con éxito los conflictos internacionales; apoyando
al sindicalismo y desalojando a las compañías imperialistas de la explotación de los
recursos naturales mediante la nacionalización.

El sandinismo en Nicaragua.- el líder popular Cesar Augusto Sandino, desde 1926


dirigió una rebelión contra el imperialismo norteamericano que tenía intenciones de
apoderarse de Nicaragua; mantuvo en alto la soberanía nacional y el derecho de los
pueblos a elegir su propio destino, siendo ejemplo para todos los pueblos de América.
Después de logrado su propósito con la retirada de los soldados norteamericanos,
muere asesinado en 1934 pero el ejemplo de su lucha y los principios del sandinismo
prevalecen hasta nuestros días en su patria, siendo uno de sus éxitos la caída de la
dictadura de Somoza en la década de 1980.

El radicalismo Argentino.- el partido político ”Unión Cívica Radical”, toma el poder en


las elecciones de 1916 con Hipólito Irigoyen, desdeñoso de la Oligarquía argentina,
apoya a la masa trabajadora(obreros), nacionalizó el petróleo y otras riquezas naturales;
manteniendo neutralidad en la Primera Guerra Mundial.
Su antiimperialismo y nacionalismo constructivo y popular para lograr la unidad nacional,
dio lugar a la rebelión oligárquica en septiembre de 1930 con el general José Félix
Uburo.

EN EL MUNDO
INGLATERRA:
En el Parlamento inglés aparecieron los whigs y los tories, los primeros más partidarios
del mismo, frente a los segundos más vinculados a la Corona.
En 1832 se aprobó la Reform Act en Gran Bretaña, que fue la primera gran extensión
del sufragio en dicho país, incorporando al sistema político a toda la burguesía. Este
hecho generó que los viejos whigs tuvieran que organizarse de forma distinta,
transformándose en el Partido Liberal, con algunas reglas de disciplina interna y cierta
coherencia ideológica, para organizar las elecciones y generar adhesiones personales
hacia los líderes. Ese fue el espíritu que terminó por triunfar en los partidos políticos en
los Estados liberales europeos: organizaciones de cuadros, élites y comités, donde
primaban las fidelidades personales. En realidad, solamente funcionaban en los
períodos electorales y no estaban muy cohesionados.

FRANCIA:
El siguiente paso se dio en la Revolución Francesa, surgiendo grupos, destacando entre
ellos, los monárquicos constitucionales, los girondinos y los jacobinos, entre otros.

EUROPA:
La transformación de los sistemas políticos liberales en democráticos a finales del siglo
XIX, es decir, con el triunfo del sufragio universal, provocó un cambio radical en la
estructura de los partidos, porque el derecho a participar en política se había extendido
a todas las capas sociales, por lo que los partidos si querían acceder a cuotas de poder
ya no podían organizarse como antaño. En este sentido, es muy importante la llegada
de los partidos socialistas, profundamente interesados en incorporar a los obreros a la
vida política, dado el triunfo de las tesis reformistas sobre las revolucionarias en el
socialismo occidental. Estas formaciones fomentaron la educación política de las
masas, empleando los mítines, las casas del pueblo, la prensa y promoviendo la
afiliación. Al crecer de forma considerable, se estructuraron de manera distinta a como
lo habían hecho los partidos liberales. Se crearon estructuras burocráticas estables
frente a los cuadros y comités episódicos de los partidos liberales. Era el momento en
el que nacían los políticos profesionales frente al político liberal burgués que no recibía
remuneración por su trabajo político, dada su riqueza personal basada en la propiedad.
Los partidos socialistas primigenios eran de aparato, es decir, con una estructura
piramidal, basada en secciones o agrupaciones que conformaban un primer nivel.
Después, estaban en un segundo nivel las federaciones territoriales hasta el tercer nivel
o vértice, que estaba constituido por una comisión ejecutiva con una secretaría general,
elegidas por delegados de los niveles inferiores en los congresos.

El éxito organizativo y electoral de los partidos socialistas europeos generó una reacción
en los sectores políticos burgueses, conservadores, católicos y nacionalistas,
promoviendo la creación de partidos de masas, con estructuras parecidas a los de
aparato pero que no se dirigían a una clase social determinada. Este fenómeno
comenzó en el período de entreguerras, pero terminó por consagrarse después de la
Segunda Guerra Mundial Con el tiempo, los partidos socialistas terminaron por conjugar
el modelo de partido de aparato con el de masas, al dirigirse no sólo a la clase obrera.
Conviene tener en cuenta la existencia de los partidos únicos en los Estados totalitarios,
con estructuras rígidas, sin democracia interna, y con un líder indiscutible al que se rinde
culto y obediencia ciega. Aunque las ideologías que defendían eran distintas, en esta
categoría estarían los partidos fascistas y los comunistas de las dictaduras del
proletariado. Estos partidos generarían un gran aparato burocrático paralelo al del
Estado, aunque con claras interferencias del primero sobre el segundo.

Los nuevos partidos de aparato y de masas, con estructuras internas permanentes,


crecientes y complejas, necesitaban recursos para mantenerse. La financiación partiría
de las cuotas de afiliación de los militantes, pero terminaron por no ser suficientes. Con
el tiempo, los Estados ha tenido que realizar aportaciones proporcionales al peso
electoral de los partidos, cifrado en el número de escaños obtenidos en los parlamentos
y otras instituciones representativas. Una tercera fuente de financiación vendría de las
aportaciones o donaciones externas de particulares y empresas.
Por fin, hay que recordar la cuestión de la mujer en los partidos políticos. Su presencia
era inexistente en los partidos liberales, dado que, aunque terminara por imponerse el
sufragio universal sobre el censitario, la mujer no tenía derecho al voto ni a participar en
política. La lucha sufragista terminó por conseguir el derecho al sufragio, pero no
provocó una masiva incorporación de la mujer a la actividad política a través de los
partidos. Un sector importante de mujeres de la clase obrera se incorporó a los partidos
socialistas, pero tuvieron grandes problemas para tener protagonismo interno y acceder
a áreas de poder, con algunas excepciones. Tenemos que tener en cuenta que muchos
dirigentes socialistas eran contrarios a la presencia de la mujer en la política. Con el
tiempo, algunas formaciones políticas, generalmente en la izquierda, terminaron por
adoptar políticas de discriminación positiva en la elaboración de listas de cargos
orgánicos internos o en las listas electorales para garantizar la presencia femenina.

También podría gustarte