Intoxicación Por Metales (TRABAJO)
Intoxicación Por Metales (TRABAJO)
Intoxicación Por Metales (TRABAJO)
Introducción
Por otra parte recientes estudios informan que hoy en día tenemos de 400 a 1.000 veces
más plomo en los huesos que hace 400 años, debido a la presencia de este metal en
alimentos y productos industriales. El plomo tiene graves efectos en diferentes órganos y
en el cerebro afecta el desarrollo y capacidad mental de los niños.
No obstante es importante considerar que los seres vivos requieren pequeñas cantidades
de estos metales, por ejemplo (cobre, zinc, hierro, etc.) para varias funciones biológicas. Sin
embargo una escasa o excesiva concentración de éstos pueden alterar procesos
bioquímicos y/o fisiológicos en el organismo . Y realmente lo que hace tóxico a los metales
pesados o son sólo sus características químicas, sino las concentraciones en las que pueden
presentarse, y más importante aún, el tipo de compuesto o metabolito que forman, por
ejemplo el metilmercurio . Además las interacciones entre los metales y sus efectos tóxicos
pueden complicar las enfermedades. Así por ejemplo, el cadmio interfiere con el zinc, cobre,
hierro, manganeso y calcio. Mientras que el cobre interactúa con el hierro, molibdeno,
azufre y zinc. Y el plomo con el calcio
Se llama metales a los elementos químicos situados a la izquierda y centro de la tabla del
sistema periódico. Se clasifican en metales alcalinos y alcalinotérreos de los grupos I y II A,
los metales de transición y los grupos III y IV A. Algunos elementos intermedios como el As
del grupo VA se estudian habitualmente junto a los metales. En todos estos grupos se
encuentran metales muy relevantes desde el punto de vista toxicológico.
El contacto humano con compuestos metálicos se produce a través del agua y los alimentos,
normalmente a dosis bajas, pero su toxicidad a lo largo de la historia se ha expresado sobre
todo por una exposición profesional en las actividades mineras y, más anecdóticamente, al
emplearse con fines homicidas. Los principales autores clásicos que se ocuparon de temas
toxicológicos describieron ya intoxicaciones crónicas por metales relacionados con la
minería de los elementos más tóxicos como el mercurio o el plomo. Por otra parte el semi-
metal arsénico ha sido uno de los tóxicos más empleados con fines suicidas y homicidas.
Por otra parte hay que recordar que la mayoría de los oligoelementos considerados
imprescindibles para el correcto funcionamiento del organismo en concentraciones traza
son metálicos: Fe, Cu, Mn, Zn, Co, Mb, Se, Cr, Sn, Va, Si y Ni. Algunos de los alcalinos (Na, K)
y alcalinotérreos (Ca) y el Mg son cationes de extraordinaria importancia para el correcto
funcionamiento celular y se encuentran en alta concentración. Una de las principales
funciones de los oligoelementos metálicos es formar parte de las denominadas
metaloenzimas en las que intervienen como coenzimas. En algunos casos, como el Zn,
estabilizan estados intermedios. En otros como el Fe o el Cu en la citocromooxidasa actúan
en reacciones redox como intercambiadores de electrones.
diferentes formas de vida. Los metales pesados no pueden ser degradados o destruidos,
pueden ser disueltos por agentes físicos y químicos y ser lixiviados. Algunos forman
complejos solubles y son transportados y distribuidos a los ecosistemas hasta incorporarse
en la cadena trófica (suelo, agua, plantas, semillas y forrajes), primordialmente aquellos
procedentes de áreas contaminadas. A continuación se indican posibles fuentes de
contaminación de los alimentos por metales pesados.
Cadmio
Es relativamente raro en la naturaleza se asocia al zinc. Es de color blanco ligeramente
azulado. Peso atómico 112 y densidad relativa 8. Tiene ocho isótopos estables y presenta
once radioisótopos inestables de tipo artificial.
Para la mayoría de los seres vivos la principal fuente de exposición al cadmio son los
alimentos y el agua, pequeñas partículas de cadmio son absorbidas por el aparato
respiratorio, especialmente en trabajadores de la industria del cadmio y en personas
expuestas al humo del tabaco. En animales, los rangos de absorción son muy diversos, pero
más bajos que en humanos. Las especies con dieta vegetal son los de mayor acumulación
de cadmio, debido a que los alimentos ricos en fibra como cereales, vegetales y papas
contribuyen a una mayor exposición.
La Organización Mundial de la Salud (2013) menciona que la presentación y severidad de
los signos, síntomas y alteraciones en el organismo se relaciona con las cantidades, el
tiempo de exposición y con la vía de entrada del metal. En exposición crónica se observa
anemia, disfunción renal, cálculos renales, osteoporosis, osteomalacia, trastornos
respiratorios, hipertensión, trastornos nerviosos (cefalea, vértigo, alteración del sueño,
tremores, sudoración, paresia, contracciones musculares involuntarias), pérdida de peso y
apetito, cáncer de próstata y pulmón. En intoxicación aguda hay neumonitis y edema
pulmonar, gastroenteritis, náuseas, vómito, dolor abdominal, diarrea, fallo renal, y
finalmente puede ocurrir aberraciones cromosómicas, efectos teratogénicos y congénitos.
En riñón (túbulos renales) se puede acumular hasta por 30 años.
Arsénico
Número atómico es 33, se distribuye ampliamente en la naturaleza, peso atómico 74. Tiene
17 nucleídos radiactivos. La forma metálica es con- ductor térmico y eléctrico fácil de
romper y de baja ductibilidad.
Los síntomas agudos aparecen de tres a cinco días después de exposición a niveles elevados
de arsénico, los síntomas incluyen incoordinación, ataxia, transcurridos unos pocos días
cerdos y aves pueden aparecer paralizados, aunque seguirán comiendo y bebiendo,
también hay ceguera y eritema cutáneo en animales albinos. Los terneros presentan
síntomas gastrointestinales.
Plomo
Número atómico 82, peso atómico 207, color azuloso, Forma muchas sales, óxidos y
compuestos organometálicos.
En la industria, los compuestos más importantes son óxidos y tetraetilo de plomo, forma
aleaciones con estaño, cobre, arsénico, bismuto, cadmio y sodio
Cobre
Número atómico 29, es un metal no ferroso. Su utilidad se debe a la combinación de sus
propiedades químicas, eléctricas, físicas y mecánicas, además de su abundancia. La mayor
parte del cobre del mundo se obtiene de los sulfuros minerales como la calcocita, covelita,
calcopirita, bornita y enargita. Tiene dos isótopos naturales estables 63Cu y 65Cu y nueve
isótopos inestables (radiactivos). De cientos de compuestos fabricados de manera
industrial, el más importante es el sulfato de cobre.
Mercurio
Número atómico 80 y peso atómico 200. Es un líquido blanco plateado a temperatura
ambiente. El mercurio forma soluciones- amalgamas con otros me- tales (oro, plata, platino,
uranio, cobre, plomo, sodio y potasio), se encuentra comúnmente como sulfuro, también
como rojo de cinabrio, en menor abundan- cia metalcinabrio negro y el menos común
cloruro de mercurio.
La tensión superficial de mercurio líquido es de 484 dinas/cm, seis veces mayor que la del
agua en contacto con el aire, por consiguiente no puede mojar la superficie con la cual esté
en contacto.
En el cuadro 2 se presenta algunos accidentes tóxicos por metales pesados.
Intoxicación masiva
con cadmio, por
1945 Japón consumo de arroz y 300 > 1.000
agua contaminada
Arsénico
El arsénico es un elemento natural de la corteza terrestre; ampliamente distribuido en
todo el medio ambiente, está presente en el aire, el agua y la tierra. En su forma inorgánica
es muy tóxico.
Cadmio
productos agrícolas, esto ha producido un progresivo aumento en su producción. El 5%
del metal es reciclado y debido a su notable movilidad, provoca una importante
contaminación ambiental. La población está expuesta al cadmio por diversas vías:
i) Oral, a través del agua y la ingesta de comida contaminada con este elemento
(hojas de vegetales, granos, cereales, frutas, vísceras animales y pescado). En
algunos países de Europa y Norte América la ingesta diaria de cadmio varía entre
10 y 40 µg/día.
iii) El cigarrillo, cuyo nivel de cadmio está asociado al suelo donde crece el tabaco.
Estudios realizados muestran que las concentraciones de cadmio en la sangre para
no fumadores varía entre 0,4 a 1,0 µg/L, mientras que en fumadores los valores
varían entre 1,4 a 4 µg/L.
iv) Finalmente, por vía dérmica, aunque las concentraciones absorbidas son muy
reducidas. El cadmio que ingresa por vía respiratoria o por vía oral, se transporta
a la sangre y se concentra en el hígado y el riñón. El cadmio tiene la capacidad de
acumularse en estos órganos vitales lo que produce daños irreversibles aún para
concentraciones reducidas. De otra parte el tiempo de permanencia en estos
órganos puede ser muy elevado. Así, el tiempo de vida media del cadmio en el
riñón puede alcanzar los 30 años. Al cadmio se le reconoce como uno de los
metales pesados con mayor tendencia a acumularse en las plantas. El cadmio
causa severos desequilibrios en los procesos de nutrición y transporte de agua en
las plantas. La favorabilidad de acumulación de cadmio en las plantas ha llevado a
considerarlas como potenciales candidatos para tareas de fitoremediación de este
metal.
Conclusiones:
A nivel global y local se identifica un creciente problema de contaminación por metales
pesados, que compromete severamente la salud, seguridad alimentaria y medio ambiente.
Los estudios demuestran que la leche de bovinos que pastorean e ingieren agua, pastos o
forrajes contaminados por metales pesados (Hg, As, Cd y Pb) influye sobre las
concentraciones de dichos elementos en la leche y carne. De igual manera las condiciones
de cultivo influyen en la concentración de metales pesados sobre las diferentes matrices
(aire, agua, suelo y plantas).
Los límites máximos permisibles de concentración de metales está muy bien establecido en
agua. Sin embargo aún falta por definir los límites de concentración y riesgo de Hg, As y Cd
en hortalizas, legumbres y cereales, para permitir estandarizar y consensuar los estudios de
contaminación que se están realizando, así como los efectos tóxicos y en ambiente.
Bibliografía
http://www.scielo.org.co/pdf/bsaa/v14n2/v14n2a17.pdf