Principio de Igualdad y No Discriminación
Principio de Igualdad y No Discriminación
Principio de Igualdad y No Discriminación
El derecho a la igualdad implica que todas las personas deben ser tratadas en forma
igual por parte del Estado. En consecuencia, todo trato diferente está prohibido, esté
trato desigual de los iguales se conoce como discriminación. Sin embargo, la realidad
demuestra que existen una serie de desigualdades en la sociedad, lo que obliga a adoptar
medidas orientadas a lograr que el derecho a la igualdad no se agote en su
reconocimiento formal (igualdad formal), sino que existan iguales oportunidades para
el ejercicio de los derechos fundamentales por parte de todas las personas (igualdad
material).
Existe un reconocimiento del derecho a la igualdad ante la ley, que en algunos casos se
aborda de manera conjunta con el derecho a la igualdad y en otros de forma autónoma.
Como se aprecia, este Artículo sólo hace referencia a dos aspectos relacionados con el
derecho a la igualdad: el derecho a la igualdad ante la ley; y la prohibición de
discriminación. Existen en consecuencia importantes omisiones y deficiencias en la
forma en que actualmente se reconoce el derecho a la igualdad en el ámbito
constitucional. Estas son: no existe un reconocimiento general del derecho a la igualdad,
sino sólo una referencia al derecho a la igualdad ante la ley, que es una de sus
manifestaciones; no existe una mención a la obligación del Estado de adoptar medidas
a efectos de lograr una igualdad material, a favor de las personas que se encuentran en
una situación de desigualdad.
Si bien estas omisiones no impiden que en los hechos la jurisprudencia precise los
alcances del derecho a la igualdad o que los órganos del Estado adopten medidas
tendientes hacia una igualdad material, sería adecuado que el texto constitucional
desarrolle en forma más adecuada ambos aspectos, pues constituye siempre la
referencia inicial para que las personas tengan un conocimiento adecuado sobre el
contenido y los alcances del derecho a la igualdad.
LA CONSTITUCIÓN DE 1993
Cuando se trata de definir el contenido y los alcances del derecho de igualdad ante la
ley, deben considerarse dos componentes primordiales:
3.2. La igualdad en la aplicación de la ley, que impone una obligación a todos los
órganos públicos (incluidos los órganos jurisdiccionales) por la cual éstos no
pueden aplicar la ley de una manera distinta a personas que se encuentren en
casos o situaciones similares. Pero incluso esta "igualdad ante la ley", como
derecho fundamental exigible por las personas, ha adquirido en su
interpretación y aplicación niveles importantes de debate acerca de cuáles
deben ser sus alcances y contenidos dentro del ordenamiento constitucional, la
actuación del legislador y el comportamiento de los órganos públicos para darle
cabal realización y cumplimiento. Si bien el principio de igualdad logró su
consagración jurídica por obra del pensamiento liberal, se trata de un concepto
cuyo contenido y alcances han seguido evolucionando y desarrollándose
históricamente.
Igualdad formal, por la cual todas las personas tienen derecho a que la ley los trate y se
les aplique por igual; frente a la igualdad sustancial o material, que impone más bien la
obligación de que la ley tienda además a crear igualdad de condiciones y oportunidades
para las personas.
Las razones por las cuales se produce una discriminación son de diferente tipo, ya sea
por motivo del sexo, raza, nacionalidad, ideas políticas o religión de las personas, por
citar sólo algunos. Por lo general, al prohibir la discriminación las normas
constitucionales suelen hacer mención expresa a varias de las razones por las cuales
ésta se produce, dejando siempre en claro que no se trata de una lista de motivos taxativa
sino meramente enunciativa. Así ocurre en la Constitución peruana de 1993, la cual
señala en su Artículo 2° inciso 2°: Nadie debe ser discriminado por motivo de origen,
raza, sexo, idioma, religión, opinión, condición económica o de cualquiera otra índole.
LA CONSTITUCIÓN DE 1993
NO DISCRIMINACIÓN
"Está prohibida toda forma de
discriminación por motivo de origen,
filiación, raza, género, características
Anteproyecto de Constitución genéticas, idioma, religión, opinión,
condición económica, discapacidad o de
cualquier otra índole, que tenga por
objeto o por resultado anular o
menoscabar el reconocimiento, goce o
ejercicio de los derechos de la persona."
Proyecto de Constitución "Está prohibida toda forma de
discriminación ( ... )"
Texto aprobado en el Congreso "Está prohibida toda forma de
discriminación, sea cual fuere su origen,
( ... )."
El texto aprobado hasta el momento no ha estado libre de críticas, pues hay quienes
afirman que, al no mencionar ninguna de las razones por las cuales se produce una
discriminación, se estaría produciendo un retroceso con relación a este tema. A favor
de la norma se ha argumentado que se trata de una salida inteligente ante el problema
que se originó por agregar nuevas situaciones de discriminación a las actualmente
señaladas en forma expresa en la Carta de 1993 y, en todo caso, será la jurisprudencia
la encargada de llenar el vacío normativo en el ámbito constitucional.
Eguiguren (página 95) nos dice: Cierto es que gracias a los cambios y avances
producidos a nivel de la realidad política y social contemporánea, reflejados en
convenios internacionales y reformas constitucionales, las formas más evidentes y
groseras de afectación al principio de igualdad y del derecho a no ser discriminado
han sido superadas, cuando menos en el terreno de las normas jurídicas. Pero las
cosas no son tan sencillas en la experiencia cotidiana, donde podemos asistir a
prácticas más sutiles o camufladas de discriminación, ya sea por ejemplo- a través
del establecimiento de regulaciones o requisitos aparentemente "neutrales" ( ... ).
Pueden expedirse leyes especiales porque así lo exige la naturaleza de las cosas,
pero no por razón de la diferencia de personas. De acuerdo con Bemales
(página 432), esta disposición recoge el principio jurídico de la generalidad y
de las condiciones de igualdad en la expedición de las leyes, lo que evita que
a través de éstas se concedan privilegios y estatutos de carácter personal. El
desarrollo de este tema estuvo ausente por bastante tiempo en la
jurisprudencia del Tribunal Constitucional. Ha sido con la sentencia
00011003-2003- AVTC, publicada el 31 de agosto del2003, en donde el
supremo intérprete de la Constitución ha precisado los alcances del Artículo
103° de la Carta de 1993.
El Estado promoverá las condiciones para que la igualdad sea real y efectiva y
adoptará medidas a favor de personas discriminadas o marginadas (subrayado
nuestro).
Como consecuencia de la reforma constitucional llevada a cabo a través de la
Ley 27680, publicada el 7 de marzo de 2002, el Artículo 191 o de la
Constitución señala:
La ley establece porcentajes mínimos para hacer accesible la
representación de género, comunidades nativas y pueblos originarios en
los Consejos Regionales. Igual tratamiento se aplica para los Concejos
Municipales.
La falta de una referencia expresa a las "acciones afirmativas" en el texto
de la actual Constitución ha dado lugar a que este tema esté presente en
el debate sobre la reforma constitucional, que, como ya dijimos, se
encuentra actualmente paralizado.
El siguiente cuadro nos muestra la manera en que este tema fue
planteado en el anteproyecto y el proyecto de reforma, así como el texto
aprobado hasta el momento:
REFORMA CONSTITUCIONAL
Artículo 1°, inciso 2.- ( ... ) El Estado promoverá
Anteproyecto de reforma las condiciones para que la igualdad sea real y
efectiva, además adoptará medidas positivas a
favor de grupos discriminados o marginados.
Artículo 2°, inciso 2.- ( ... ) El Estado y la sociedad
Proyecto de reforma promueven las condiciones y medidas positivas
para que real y efectivamente nadie sea
discriminado.
Artículo 2°, inciso 2.- ( ... ) El Estado y la sociedad
Texto aprobado en el Congreso promueven las condiciones y medidas positivas
para que real y efectivamente nadie sea
discriminado.
CONCLUSIÓN
Tratando de sintetizar lo expuesto, para señalar que la cláusula de igualdad ante la ley
no impide otorgar en determinadas circunstancias y bajo ciertos supuestos un trato
desigual, siempre que se den las siguientes condiciones:
Si concurren estas circunstancias, el trato desigual será admisible y por ello constitutivo
de una diferenciación constitucionalmente legítima; en otro caso, el otorgar un trato
desigual resultará una discriminación vetada por la Constitución .En conclusión, la
regla fundamental e insoslayable del principio de igualdad ante la ley (en ésta y en su
aplicación) y del derecho a no ser objeto de discriminación, no enerva la posibilidad de
que se admitan tratos diferenciados o distinciones, siempre que obedezcan a motivos
objetivamente sustentados y razonablemente justificados.
BIBLIOGRAFÍA
https://www.google.com/search?q=decalogo+del+abogado+peru&rlz=1C1CHBF_esPE855PE
855&source=lnms&tbm=isch&sa=X&ved=0ahUKEwiwrL-
4_bjlAhUvw1kKHWeBDDwQ_AUIEigB&biw=1536&bih=754#imgrc=3RfC_st2sRhkhM:
Sin embargo, en pleno siglo XXI, cuando se creía que el racismo debía estar extinguido
y que el Perú se iba asumiendo como un país pluricultural, el Ministerio de Cultura nos
recuerda que el 53% de la población considera que los peruanos son racistas o muy
racistas; y que incluso un 8% se percibe a sí mismo como tal, es decir, se perciben
“racistas” o “muy racistas”, conforme los resultados de la primera encuesta nacional
sobre Percepciones y Actitudes sobre Diversidad Cultural y Discriminación Étnica-
Racial.
Por eso, no solo en fechas como el Día Internacional para la Eliminación de la
Discriminación Racial (21 de marzo), saludamos los esfuerzos que contribuyen a la
construcción de un país sin discriminación.
Más aún, nuestro Código Penal tipifica como delito contra la humanidad a la
discriminación e incitación a la discriminación, castigando tales acciones con pena
privativa de libertad no menor de dos años ni mayor de tres. Si el hecho se realiza
mediante actos de violencia física o mental, a través de internet u otro medio análogo,
o si quien comete el hecho es servidor público, la pena privativa de libertad será no
menor de dos años ni mayor de cuatro, además de quedar inhabilitado.
DEDICATORIA