Ciliados Paramecios
Ciliados Paramecios
Ciliados Paramecios
Los paramecios (género Paramecium) son protistas ciliados con forma ovalada, habituales en
aguas dulces estancadas con abundante materia orgánica, como charcos y estanques. Son
probablemente los seres unicelulares mejor conocidos y los protozoos ciliados más estudiados por
la Ciencia. El tamaño ordinario de las especies de paramecios está comprendido entre 0,05 y 0,33
milímetros.
Carecen de flagelos, pero los cilios son muy abundantes y recubren toda su superficie. A ellos les
corresponde proporcionar movimiento al organismo. La membrana externa absorbe y expulsa
regularmente el agua del exterior con el fin de controlar la osmorregulación, proceso dirigido por
dos vacuolas contráctiles.
Como muchos otros microorganismos, los paramecios se reproducen asexualmente por fisión
binaria o mitosis y (sexualmente) por conjugación.
Filo: Ciliophora
Clase: Oligohymenophorea
Orden: Peniculida
Familia: Parameciidae
Género: Paramecio
Müller, 1773
Gusanillo de cobra
La reproducción de los nematodos se puede dar por partenogénesis pero es bastante más habitual
que se reproduzcan sexualmente. En la mayoría de casos se pueden distinguir los dos sexos,
aunque algunas especies son hermafroditas. Durante el acto sexual, una espícula sale de la cloaca
del macho y se introduce en el poro genital de la hembra, por lo tanto se trata de una fecundación
interna. La hembra es capaz de gestar desde centenares de crías hasta varios millones, siempre a
través de la formación de huevos.
El ciclo de vida que tienen los nematodos depende de su hábitat y de si son formas libres o
parásitas. En las formas libres, normalmente efectúan unas cuatro mudas de piel a lo largo de su
vida. Se alimentan de materiales diversos, incluyendo algas, hongos, animales pequeños, materia
fecal y restos de otros animales. Tienen un papel importante en procesos de descomposición.
Entre las enfermedades en humanos causadas por los nematodos destacan la anisakiasis, que se
puede transmitir mediante la ingesta de pescado crudo, la triquinosis, la anquilostomiasis y la
elefantiasis.
Oscillatoria es uno de los organismos más conocidos entre las cianobacterias, seres sencillos,
primitivos y evolucionados a la vez, que hace más de tres mil millones de años patentaron la
fotosíntesis, el invento que ha permitido la vida a todos los habitantes del Planeta que dependen
del oxígeno, pues fueron ellas, fundamentalmente, quienes hicieron de nuestra atmósfera una
mezcla de gases respirable.
Cianobacterias como Oscillatoria, han sido testigos de la aparición, expansión, declive y extinción
de miles y miles de otros seres vivos que vivieron su periodo de gloria y de los que hoy, apenas se
sabe nada. Han sobrevivido a animales y plantas pequeños y grandes, seres conocidos y
desconocidos, más avanzados y preparados para un momento preciso, pero no corredores de
fondo, como esta lenta cianobacteria, que como casi todas las de su clase, no exigen casi nada,
apenas agua y luz. Quizá en esta absoluta austeridad radique la clave de su triunfo.
Oscillatoria se mueve como un péndulo de un reloj que posiblemente sólo se detendrá cuando la
Tierra se pare. Este vaivén lento y tan especial le ha valido el nombre, género que reúne a más de
doscientas especies. Pero Oscillatoria no sólo marca su paso a ritmo de péndulo, puede avanzar
abriéndose camino en el agua deslizándose como un ser con ánima ▷ .
Oscillatoria vive en las aguas tranquilas de lagunas y charcas, unas veces formando filamentos
aislados, en otras ocasiones intrincadas marañas flotantes. La fotografía de hoy se ha realizado en
una muestra recogida, gracias a Fernando, amigo y colega, en el pozo de de Tremeo, en
Rumoroso, cerca de Polanco, Cantabria. La toma se ha realizado a 400 aumentos empleando la
técnica de contraste de interferencia.
CONDYLOSTOMA, UN PARIENTE DE SPIROSTOMUM
Las finas listas de su traje corresponden a los surcos en los que se situan los cilios que le
ayudan a moverse con tanta elegancia y además, el de nuestra imagen tolera bien tanto las
aguas dulces como las salobres y, de hecho, procede de una laguna salada situada al norte
de la isla de Formentera, el Estany Pudent, donde convive con otros ciliados y algas que como
las anguilas pueden soportar aguas con distinta salinidad y es que además de atleta, nuestro
Condylostoma de hoy es un auténtico todoterreno del agua.
Será Vahlkampfia
Vahlkampfia limax es una ameba que vive en los estanques y turberas, generalmente sobre
los restos de algas y otra vegetación acuática que junto con las bacterias constituyen su
alimento.