Un Itinerario Formativo para Una Vida Religiosa Profética
Un Itinerario Formativo para Una Vida Religiosa Profética
Un Itinerario Formativo para Una Vida Religiosa Profética
2
ORDEN HOSPITALARIA DE SAN JUAN DE DIOS
PROYECTO DE FORMACIÓN
DE LOS HERMANOS
DE SAN JUAN DE DIOS
CURIA GENERAL
ROMA, 24 de OCTUBRE 2000
3
“Mas si acá venís,
tendréis que obedecer mucho
y trabajar mucho más
de lo que hasta aquí habéis trabajado:
y todo en cosas de Dios,
desvelándoos
por el cuidado de los pobres.
Aquí tenéis la puerta
siempre abierta:
me gustaría que vinieseis
dispuesto a mejorar cada día;
os lo digo como a hijo y a un hermano”.
4
ÍNDICE (Revisar la numeración de las
páginas)
Pág.
Siglas de los documentos citados 7
Presentación 9
Introducción 13
Capítulo primero
IDENTIDAD DEL HERMANO DE SAN JUAN DE
DIOS: MODELO FORMATIVO DE LA ORDEN
HOSPITALARIA 19
I. CARISMA Y ESPIRITUALIDAD 21
1. La vida consagrada en Hospitalidad 21
2. Rasgos esenciales del carisma y la
espiritualidad juandediana 22
3. Itinerario de nuestro Fundador 24
4. Cualidades y actitudes del Hermano de San
Juan de Dios 27
5. Fidelidad creativa de nuestro carisma 29
Capítulo segundo
5
OBJETIVOS, CRITERIOS, MEDIOS Y
CONTENIDOS DE FORMACIÓN 43
Capítulo tercero
FORMACIÓN INICIAL 61
ETAPAS FORMATIVAS 63
VI. PRENOVICIADO 65
PASTORAL VOCACIONAL 66
POSTULANTADO 71
VII. NOVICIADO 77
VIII. ESCOLASTICADO 83
6
Capítulo cuarto
FORMACIÓN CONTINUADA 89
X. FORMACIÓN DE FORMADORES 95
Glosario 97
7
SIGLAS DE LOS DOCUMENTOS CITADOS
Documentos de la Iglesia
AG Ad gentes, 1965.
ChL Christifideles laici, 1989.
CDC Código de derecho canónico, 1983.
CP Conferencia de Puebla, 1979.
CSD Conferencia de Santo Domingo, 1992.
DH Dolentium hominum, 1985.
DM Dives in misericordia, 1980.
DV Dei Verbum, 1965.
EN Evangelii nuntiandi, 1975.
EV Evangelium vitae, 1995.
FetR Fides et ratio, 1998.
GS Gaudium et spes, 1965.
Ivt In verbo tuo,1998.
LG Lumen gentium, 1964.
OPR Ordo professionis religiosorum, 1970.
OT Optatam totius, 1965.
PC Perfectae caritatis, 1965.
PI Potissimum institutioni, 1990.
RC Renovationis causam, 1969.
RH Redemptor hominis, 1979.
RPH Religiosos y promoción humana,1980.
SC Sacrosactum concilium, 1963.
SD Salvifici doloris, 1984
TMA Tertio millennio adveniente, 1994
UR Unitatis redintegratio, 1964.
VC Vita consecrata, 1996.
VFC Vida fraterna en comunidad, 1994.
LB Luis Bautista
1GL Primera a Gutiérrez Lasso
2GL Segunda a Gutiérrez Lasso
1DS Primera a la Duquesa de Sesa
2DS Segunda a la Duquesa de Sesa
3DS Tercera a la Duquesa de Sesa
8
Documentos de la Orden Hospitalaria
9
PRESENTACIÓN
1
Cf. VC 68
10
diversas lenguas. Por último, nuestro Proyecto Formativo es
presentado al Capítulo General celebrado en Granada, del 5
al 25 de noviembre de 2000.
11
También quiero hacer una llamada a la responsabilidad
de los Superiores Mayores, a los Formadores actuales y
futuros y a cada uno de los Hermanos para que el texto
presentado nos ayude a lograr el objetivo central de la
formación que es: “la preparación de la persona para la
consagración total de sí misma a Dios en el seguimiento de
Cristo, al servicio de la misión” 3 .
3
VC 65
4
Cf. C 6
5
VC 69
12
Nuestro Proyecto Formativo pretende servir de ayuda en
el proceso de identificación con el Cristo misericordioso al que
estamos llamados a seguir y a anunciar, al estilo de Juan de
Dios. Espero que ayude a todos, de manera particular a los
principales destinatarios, que son los formadores y los
formandos a comprender mejor lo que significa sentir la
llamada del Señor para decidirse a vivirla con gozo y
esperanza en la Orden Hospitalaria.
13
INTRODUCCIÓN
6
Cf. TMA 20
7
Cf. VC 68
14
Capítulo cuarto: Formación continuada.
15
7. Formar hoy como Hermano de San Juan de Dios
supone para nosotros:
8
Cf. PILES, P., Dejaos guiar por el Espíritu, 2.4.
16
salud y la Pastoral social debemos aportar
soluciones creativas en la forma de atender y
responder a las distintas situaciones de
enfermedad, pobreza e injusticia. Estas
realidades que generan exclusión y sufrimiento,
están en constante evolución en un mundo
diverso y cambiante 9 y son un reto que estamos
llamados a enfrentar con “la Nueva Evange-
lización, la promoción humana y la cultura
cristiana” 10 , desde la Nueva Hospitalidad.
e. Un verdadero interés por la cultura, el estudio
y la formación. La fidelidad a nuestra vocación
implica una llamada fuerte a la responsabilidad y
competencia en el propio trabajo. Formarse para
la misión supone trabajar por desarrollar y
cultivar los valores y talentos personales 11 . La
vida consagrada necesita, como medios que
refuerzan la formación integral de una apuesta
por la cultura, el conocimiento de los diversos
pueblos y una dedicación al estudio. En la
encíclica Fides et ratio, se nos recuerda la
necesidad de conjugar los avances de la
filosofía, las ciencias humanas y la técnica con
los postulados de nuestra fe 12 .
f. Una aplicación de la doctrina de la Iglesia a
la realidad concreta del mundo del
sufrimiento y de la marginación. Desde
nuestra opción de vida como Hermanos de San
Juan de Dios, podremos colaborar positivamente
a la evangelización y ser fieles al carisma de la
hospitalidad, en la medida que la formación de
9
Cf. MARCHESI, P., La Hospitalidad de los Hermanos de San Juan
de Dios hacia el 2000, 14
10
CSD 25
11
Cf. VC 37
12
Cf. FetR 68, 69, 76, 81, 89, 98
17
los Hermanos esté a la altura de las exigencias
de nuestro tiempo y sepamos llevar a cabo una
adecuada pastoral aplicada a cada momento y
situación. De esta manera, nos sentimos unidos
a la acción evangelizadora de la Iglesia,
mediante la aplicación de los documentos y
demás orientaciones de su Magisterio.
g. Una preparación de los candidatos para que
vivan la comunión con la Orden. Este espíritu
de comunión implica, además del estudio de la
figura del Fundador y de la historia de la Orden,
un conocimiento básico de:
la realidad y universalidad de la Orden,
nuestras Constituciones y Estatutos Genera-
les,
los documentos más significativos de nuestra
espiritualidad y misión hospitalarias,
los valores y exigencias de la misión,
la manera de compartir el carisma con los
colaboradores.
h. Una visión de futuro que nos ayude a asumir
nuevas responsabilidades. La integración de
nuevos Hermanos es la garantía del futuro de
nuestra Orden. Esto nos exige, por una parte,
emplear los medios necesarios para favorecer el
desarrollo de su proyecto vocacional y, por otra,
facilitarles los conocimientos prácticos que los
capaciten para asumir nuevas tareas al servicio
de la hospitalidad.
i. Una presencia significativa de la Orden desde
el respeto al pluralismo cultural. Nuestra
Orden está implantada en realidades muy
heterogéneas y plurales donde tenemos que
18
hacer presente el signo de San Juan de Dios. El
estilo de formación de la Orden debe
cuestionarnos sobre el sentido y la forma de
ejercer el carisma hospitalario en el mundo de
hoy e interpelarnos constantemente, sobre lo que
significamos como Hermanos y la novedad que
estamos llamados a aportar al mundo, a la
sociedad y a la Iglesia con espíritu de comunión
y participación.
j. Unas comunidades que sean expresión de los
valores esenciales de la vida consagrada en
hospitalidad. La razón de ser de nuestras
comunidades es la evangelización desde el
propio carisma. Ellas son el lugar donde
aprendemos a vivir el carisma hospitalario y a
contrastarlo con los contenidos de los
documentos de la Iglesia y de la Orden. Es en la
comunidad donde cada formando y cada
Hermano aprendemos a vivir con quienes Dios a
puesto a nuestro lado, con sus cualidades,
diversidades y límites 13 .
8. En síntesis, formar para ser Hermanos de San
Juan de Dios en el siglo XXI, significa asumir estos
compromisos para no correr el riesgo de perder la
riqueza y fecundidad de nuestro carisma, creando un
divorcio entre lo enseñado y lo vivido, entre la teoría y la
práctica, entre lo deseado y lo realizado.
13
Cf. VC 67
19
Capítulo primero
IDENTIDAD
DEL HERMANO DE SAN JUAN DE DIOS
MODELO FORMATIVO
DE LA ORDEN HOSPITALARIA
20
21
I.
CARISMA Y ESPIRITUALIDAD
14
Cf. VC 20
15
Cf. Jn 15, 16
22
12. Nuestra vida consagrada en hospitalidad tiene
como fin primordial el seguimiento de Jesús de Nazaret.
Su vida y su persona entregadas para la salvación de la
humanidad, nos interpelan e invitan a reproducir sus
mismos gestos y actitudes de servicio para con los
pobres, enfermos y necesitados. Nuestro Fundador fue
enriquecido por el Espíritu Santo con el carisma de la
Hospitalidad. Él fue invitado al seguimiento de Cristo y
enviado a poner su existencia al servicio del Evangelio
de la vida 16 , dando origen a la Familia Hospitalaria.
16
Cf. EV 27-28; 79-87
17
C 2a
23
servicio en favor de los demás como buenos
samaritanos.
24
mundo” 22 . Durante las etapas de formación, el Espíritu
nos va preparando para ser ungidos y enviados, como
Juan de Dios, a realizar la misión hospitalaria. Esas
experiencias y etapas que nuestro Fundador supo
integrar y recorrer son la base de la espiritualidad del
carisma fundacional, que hoy sigue teniendo el
dinamismo de siempre y que nosotros hemos de acoger
y vivir como vocación y misión.
22
1GL 1
23
Cf. C 2b, 3b
24
1 DS 13
25
VC 38
26
Cf. C 28a
25
3. ITINERARIO DE NUESTRO FUNDADOR
27
Cf. Lc 4, 18
26
d. Conmovido en la profundidad de su ser por la
misericordia de Dios, comienza un periodo nuevo
como experiencia unificadora de su vida, como
encuentro personal con Cristo y con los
hermanos.
e. La relación directa con los pobres, los enfermos,
los desplazados y abatidos lo fueron preparando
para que, por medio de la acción del Espíritu, a
través de la escucha atenta de la Palabra, la
predicación y acompañamiento de Juan de Ávila,
se sintiera impulsado a dedicar su vida a la
salvación de los demás, urgido por la caridad de
Cristo 28 .
f. Vive una dura e intensa experiencia en el
Hospital Real granadino, compartiendo el dolor,
la marginación y trato inhumano dado a los
enfermos, con quienes se hace solidario. En
aquella circunstancia nace su proyecto de
hospitalidad cuando manifiesta su deseo que es
a la vez una plegaria: “Jesucristo me traiga a
tiempo y me dé gracia para que yo tenga un
hospital, donde pueda recoger a los pobres
desamparados y faltos de juicio, y servirles
como yo deseo” 29 .
g. La situación social, las necesidades de los
pobres y enfermos de Granada, bajo la
inspiración del Espíritu Santo, mueven a Juan de
Dios a prepararse para la misión, y le inducen a
abrir su primer hospital en la calle de Lucena,
que fue ampliando según las necesidades,
trasladándolo después a la cuesta de Gomeles.
28
Cf. 2 Co 5, 14: “La caridad de Cristo nos urge”. PILES, P., La
Fuerza de la Caridad.
29
Cf. CASTRO, F., San Juan de Dios, Primicias Históricas..., cap. IX.
27
h. San Juan de Dios ejerce su hospitalidad en
relación continua con la persona que sufre a la
que intenta insertar en la sociedad.
i. Su dedicación a la misión, como expresión del
carisma recibido, la vive con tal pasión desde la
experiencia profunda del Misterio Pascual de
Cristo, que lo lleva a decir: “Estoy aquí
empeñado y cautivo sólo por Jesucristo” 30 .
j. Su carrera terrena concluye el 8 de marzo de
1550, cuando de rodillas y abrazado al crucifijo
entrega su alma al Creador.
k. De su vida nació la Orden Hospitalaria para
anunciar y hacer presente el Evangelio de la
misericordia en el mundo.
30
2GL 7
31
Cf. VC 37, 39
28
misericordia en la sociedad actual desde una fidelidad
creativa.
32
Cf. VC 60
29
defensores del ser humano y de su dignidad en
cualquiera de sus situaciones.
e. Personas en comunión con la Iglesia,
testimoniando nuestra pertenencia viva como
actitud mantenida con fidelidad por San Juan de
Dios 33 . Nuestro amor por la Iglesia de Jesús nos
exige el deber de invitarla, desde nuestro
carisma, a ser auténtica y a manifestar su opción
preferencial por los más pobres, los ignorados y
excluidos 34 .
f. Personas comprometidas con los colaboradores
para realizar unidos la misión como familia
hospitalaria.
g. Personas que integran vida y oración como
expresión de la propia espiritualidad
juandediana.
h. Personas identificadas con la vocación
hospitalaria y animadoras del carisma para
descubrir y vivir lo esencial de la vida
consagrada y ser fecundos en hospitalidad, con
fidelidad creativa 35 .
5. FIDELIDAD CREATIVA
DE NUESTRO CARISMA
33
Cf. 2DS 25
34
Cf. VC 82
35
Cf. C 23; VC 37
30
futuro está germinando en el presente 36 . Gracias a esa
fidelidad hoy podemos afirmar que “Juan de Dios sigue
vivo” 37 .
36
Cf. VC 110: “¡Vosotros no solamente tenéis una historia gloriosa
para recordar y contar, sino una gran historia que construir!”.
37
Orden Hospitalaria, Juan de Dios sigue vivo
38
VC 110
39
Cf. C 103b
31
estando cercanos a los pobres, enfermos y necesitados
que entran en el ámbito de nuestro carisma, para
anunciarles el Evangelio de la misericordia, teniendo en
cuenta la dimensión misionera de nuestra Orden y la
respuesta que estamos llamados a dar en la sociedad y
en la Iglesia 40 .
40
Cf. Orden Hospitalaria, Dimensión Misionera de la Orden
Hospitalaria, Cap. VIII; C 48b.
41
Cf. DCGB, III Líneas de acción de la Nueva Hospitalidad.
32
a. El Buen Samaritano, icono de nuestra
hospitalidad 42 .
b. La comunión con la Iglesia.
c. La centralidad de las personas que sufren.
d. La inculturación del carisma.
e. La respuesta a los nuevos tiempos.
42
Cf. Lc 10, 25-37
33
II.
HACIA UN MODELO
DE FORMACIÓN INTEGRAL
43
La vida consagrada se ha expresado, a lo largo de la
historia, con diversos paradigmas que la hicieron configurarse
con unos determinados perfiles:
34
experiencia de Dios a través de tres ejes o
“encuentros”, en los que se trata de armonizar:
35
35. Este modelo favorece en todo momento el
desarrollo armónico de todas las facetas de la persona y
la asimilación de los diversos contenidos formativos. Se
caracteriza por ser una formación integrada y en
proceso, personalizada y liberadora, inculturizada y
universal. En torno a este paradigma deben girar
nuestras propuestas formativas, tanto generales como
concretas, en cuanto a criterios, objetivos, medios y
contenidos.
44
Cf. VC 65
36
realidad de la misión, de la comunidad y la intimidad de
la persona.
45
Cf. VC 64
46
Cf. Fil 2, 6-11
37
42. El formador, mediante el acompañamiento
personal, entendido como proceso de personalización,
ayuda al formando a discernir la voluntad de Dios en la
propia vida.
38
2. CARACTERÍSTICAS DE NUESTRO MODELO
FORMATIVO
a. Integral
47
Cf. C 55 y 56
39
b. En proceso
c. Experiencial
48
Hch 10, 38
40
d. Personalizada
e. Gradual y diferenciada
f. Liberadora y profética
49
Cf. VC 65
41
de la libertad del hombre nuevo, superando miedos y
condicionantes que impidan vivir en libertad.
g. Universal
42
Capítulo segundo
OBJETIVOS, CRITERIOS,
MEDIOS Y CONTENIDOS
DE FORMACIÓN
43
III.
OBJETIVOS DE LA FORMACIÓN
1. OBJETIVO GENERAL
a. Pastoral Vocacional
b. Prepostulantado
44
humana y cristiana adecuada, en contacto con la misión
de la Orden Hospitalaria.
c. Postulantado
d. Noviciado
e. Escolasticado
f. Formación Permanente
g. Formación de Formadores
45
IV.
CRITERIOS GENERALES
DE FORMACIÓN
46
en lo íntimo de la persona, en la comunidad y en la
misión.
47
c. Consideremos la formación como un itinerario
dinámico, flexible, en proceso y completo a nivel
humano, cultural, espiritual y pastoral.
d. Clarifiquemos y purifiquemos las imágenes
distorsionadas de Dios, con el fin de
encontrarnos con el Dios revelado por
Jesucristo.
e. Adaptemos los objetivos y medios a la realidad
de cada persona teniendo en cuenta la
continuidad y complementariedad entre las
diferentes etapas formativas.
f. Despertemos y estimulemos en el formando su
conciencia evangélica y crítica, respecto a los
valores y antivalores de la cultura y frente a su
propia realidad personal 50 .
g. Valoremos el acompañamiento, tanto desde el
formador como desde la comunidad formativa,
especialmente en la formación inicial, para
conseguir la identidad y pertenencia a la Orden
Hospitalaria.
h. Potenciemos y favorezcamos un clima de
confianza mutua entre formandos y formadores
para facilitar el discernimiento vocacional, no
sólo durante la formación inicial, sino también en
los momentos importantes a lo largo de la vida.
50
Cf. VC 67
48
con la que establece vínculos de profunda comunión. A
su lado crece un “grupo de seguidores”, herederos de su
espíritu y carisma, a quienes podemos considerar los
co-fundadores de la Orden.
51
Cf. C 27a
52
VC 41
53
Cf. C 26
49
c. Educar y formar para mantener una actitud de
apertura que favorezca la amistad, el diálogo, la
fraternidad y la solidaridad, como elementos que
refuerzan la convivencia en comunidad.
d. Ser conscientes de nuestra pertenencia al
Pueblo de Dios, asumiendo las consecuencias y
compromisos derivados de la opción por la
Iglesia de comunión y participación.
e. Sentirse en profunda comunión con la Orden
compartiendo sus gozos, sufrimientos y
esperanzas.
f. Compartir el carisma y misión de San Juan de
Dios con los colaboradores.
54
Cf. C 40
50
b. Nos insertemos en las diversas culturas de los
países en que vivimos.
c. Estemos abiertos a los signos de los tiempos y a
las necesidades de las personas de la sociedad
actual, haciendo una lectura evangélica, en clave
hospitalaria y de liberación, de las realidades de
pobreza y enfermedad.
d. Apostemos por la humanización, que centra su
actuación en las personas atendidas y en la
promoción y defensa de la vida, de los derechos
y deberes del hombre y de la mujer.
e. Nos comprometamos con la evangelización de
todas las personas que, a través de la
Hospitalidad, entran en contacto con nosotros, y
nos dejemos evangelizar por ellas, convencidos
realmente de que “los pobres nos evangelizan”.
51
V.
MEDIOS FUNDAMENTALES
DE FORMACIÓN
1. LA PALABRA DE DIOS
52
2. LA IGLESIA
56
2DS 25.
57
Cf. SC 14
53
4. FIGURAS SIGNIFICATIVAS PARA LA ORDEN
5. LA ORACIÓN
58
Cf. VC 28; PI 20; C 25.
59
El Capítulo General de 1736 declara la fiesta del Patrocinio de la
Virgen María sobre la Orden Hospitalaria.
60
Santa Teresa de Jesús, Libro de la Vida, c 8,5
61
Cf. C 27-35: “Comunidad de fe y de oración”.
54
6. CONSTITUCIONES
62
Cf. VC 15.
55
pobres y castas, al servicio de la humanidad doliente y
del Reino, como lo vivió San Juan de Dios 63 .
8. LA COMUNIDAD
63
Cf. C 8a; VC 20-21.
64
Cf. C 27a.
65
Cf. VC 67.
56
e. crecer en responsabilidad mediante el servicio
personal.
f. acompañar a los formandos a través del diálogo
personal y comunitario del discernimiento.
g. acompañar la experiencia de oración y vida
espiritual de los candidatos y Hermanos.
h. potenciar las aptitudes y las capacidades
personales favoreciendo la creatividad y la
unidad en la diversidad.
9. FORMADORES
66
Cf. VC 66
67
Cf. VC 65
57
87. Gracias al estudio y a una formación adecuada a
los signos de los tiempos, contribuimos al desarrollo de
nuestra vocación y respondemos mejor a las exigencias
de nuestra misión hospitalaria y eclesial. Estudio y
formación se interrelacionan y son dinamismos que
debemos cultivar con esmero, abriendo el corazón y la
inteligencia al Espíritu. Es un deber adquirir el hábito del
estudio y autorresponsabilizarnos de la propia
formación.
12. ASCESIS
68
Cf. C 12c; 47, 103b
69
LB 11
58
estar disponibles para el servicio 70 . La entendemos
como una conversión constante al Evangelio y como
una llamada a ser más libres en el seguimiento de
Jesucristo, viviendo de manera transparente y
testimonial las exigencias del Reino.
13. ACOMPAÑAMIENTO
14. EVALUACIÓN
70
Cf. PI 36, 37, 38; VC 38
71
Cf. VC 66
59
también, comprobar si los formandos están preparados
para pasar a la etapa siguiente. En los programas de
formación y en los proyectos personales y comunitarios
es importante señalar los criterios y tiempos de
evaluación. Buena parte de la actividad evaluativa está
dentro de la dinámica del acompañamiento-
discernimiento y la revisión de vida.
60
Capítulo tercero
FORMACIÓN INICIAL
_____________________________________________
61
ETAPAS FORMATIVAS
a. Prenoviciado
Pastoral vocacional
Postulantado
b. Noviciado
c. Escolasticado
d. Formación continuada o permanente
e. Formación de formadores
72
Los contenidos que aparecen en cada una de las etapas de
formación tienen una finalidad orientativa, ya que en cada
país y centro de formación se tendrá que hacer la
adaptación curricular correspondiente, según sus
posibilidades y planes de estudios.
62
VI.
PRENOVICIADO
“«¿Qué buscáis?»…
“Maestro… ¿dónde vives?”...
«Venid y lo veréis».”
Fueron, pues, vieron dónde vivía
y se quedaron con Él aquel día” (Jn 1, 39)
73
Cf. C. 66a y EEGG 58b y 60. Basados en el Derecho propio de la
Orden sobre el Prepostulantado, proponemos lo siguiente:
63
PASTORAL VOCACIONAL
1. NATURALEZA
64
99. Cada uno de estos ámbitos de actuación de la
Pastoral Vocacional se circunscribe a los grupos de
jóvenes y adultos en los que es posible hacer presente
nuestro carisma. Parte de la pastoral vocacional se
inserta de lleno en una pastoral juvenil más amplia.
2. OBJETIVO GENERAL
3. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
65
a. Ayudar a los jóvenes a conocer y comprender
nuestra misión y estilo de vida: “sembrar” la
semilla de la Hospitalidad.
b. Motivar la presencia de los Hermanos en
distintos ámbitos juveniles y eclesiales.
c. Participar en grupos de pastoral vocacional
intercongregacional.
d. Difundir nuestra misión hospitalaria, a través de
los medios apropiados en cada lugar.
e. Implicar a cada comunidad y cada Hermano en
la pastoral, como mediación que somos para
otras vocaciones.
f. Propiciar una acogida fraterna y de hospitalidad
a las personas, sean éstas vocacionables o no.
g. Disponer de un plan provincial específico
relacionado con la pastoral vocacional
parroquial, diocesana y/o intercongregacional.
h. Crear y animar grupos o movimientos de
espiritualidad hospitalaria y de pastoral de la
salud en las parroquias.
66
a. Aplicar los criterios pedagógicos de la vocación:
Sembrar, acompañar, educar, formar y
discernir 75 .
b. Servirse de los recursos religiosos y
profesionales, aconsejables y requeridos por la
Iglesia y la Orden.
c. Facilitar experiencias en alguna de nuestras
comunidades, con el fin de que puedan vivir de
cerca nuestro estilo de vida.
d. Ofrecer un acompañamiento personalizado con
el Hermano o la persona responsable de la
pastoral vocacional 76 .
e. Orar personal y comunitariamente al Señor por
las vocaciones 77 .
6. CRITERIOS DE ADMISIÓN
AL POSTULANTADO
75
Cf. Ivt 32.
76
Cf. VC 64.
77
Cf. C 53d; VC 64.
67
y que sólo es posible llevarla a cabo con la
ayuda de Dios y de la Iglesia, a través de la
Orden.
c. Esté dispuesto y abierto a la formación y a
conseguir la preparación intelectual que se
requiere en la Orden, con el fin de poder vivir
con responsabilidad su propia vocación y asumir
las exigencias de los tiempos actuales.
d. Tenga un conocimiento adecuado de lo que
exige la opción por la vida consagrada y cómo
se desarrolla en nuestra Orden.
e. Capte el sentido del servicio a los enfermos y
necesitados, como la forma en la que
concretamos nuestra vocación y misión, al estilo
de San Juan de Dios.
f. Posea la capacidad de reconciliarse con su
historia personal y el entorno familiar y social.
g. Manifieste las condiciones psíquicas
intelectuales, morales y espirituales, y el nivel de
estudios suficientes para poder emprender el
itinerario formativo. Esto supone valorar en el
candidato la madurez, salud, afectividad,
autonomía, aceptación de sí y de los demás;
aptitudes para la vida comunitaria, experiencia
de fe, capacidad orante y sensibilidad por el
carisma 78 .
78
Cf. C 58
68
POSTULANTADO
1. NATURALEZA
69
e. Asumir el criterio de que “nadie puede ser
admitido sin una adecuada preparación” 80 y que
es preciso un suficiente nivel de madurez,
humana, afectiva y espiritual 81 para entrar en el
Noviciado. Se cuidará especialmente de que
esta madurez se adquiera y/o se acreciente en
el Postulantado.
2. OBJETIVO GENERAL
3. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
80
Cf. CDC 597, 2
81
Cf. RC 4 c, e
70
3.3. Encuentro con la misión:
Participar progresivamente en el servicio, propio de la
misión de San Juan de Dios, como respuesta a la
exigencia de fe que conlleva la opción vocacional.
4. MEDIOS
82
Cf. RC 11.III; CDC 642, 646; PI 43.
71
e. Adquirir la formación básica sobre vida
consagrada y sobre la Orden, así como otro tipo
de estudios.
f. Orientación básica para la elaboración del
proyecto personal de vida.
g. Propiciar de forma gradual la experiencia de
nuestra misión hospitalaria en el centro de
formación o en otras obras apostólicas.
5. CONTENIDOS
72
j. Fundamentos básicos de la vida cristiana según
el Catecismo de la Iglesia Católica: credo,
sacramentos, moral, liturgia.
k. Descubrimiento y manejo de la Biblia y de la
Liturgia de las Horas, como libros de oración.
l. Teología básica de la vida consagrada.
73
desarrollar la vocación de Hermano de San Juan
de Dios.
f. Estar iniciado en el carisma y misión de la Orden
y poseer las cualidades suficientes para
participar en este proyecto de hospitalidad.
g. Realizar el propio proceso formativo en los
distintos “encuentros”, de acuerdo a lo esperado
y señalado en esta etapa de iniciación.
74
VI.
NOVICIADO
“El que quiera venir en pos de mí,
niéguese así mismo,
tome su cruz cada día y sígame”.
(Lc 9, 23)
1. NATURALEZA
83
Cf. C 67
84
Cf. CDC 646
75
2. OBJETIVO GENERAL
3. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
76
3.4. Encuentro con Dios:
Realizar una experiencia fuerte de oración, personal y
comunitaria, y encuentro con Dios desde la
espiritualidad propia de la Orden.
4. MEDIOS
77
h. Participación diaria en la Eucaristía y
celebración frecuente del sacramento de la
Reconciliación.
i. Dedicar tiempo a la oración personal y
comunitaria, y a la lectura espiritual.
j. Referencia a María, modelo de consagración,
hospitalidad, sencillez y escucha de la Palabra.
k. Conocer los programas del Centro y la realidad
social, donde se encuentra insertado, con
apertura al trabajo en equipo y a las relaciones
con los colaboradores.
l. Dedicar un tiempo al trabajo donde pueda
ejercerse la hospitalidad.
5. CONTENIDOS
a. Formación humana
Identidad, amistad y madurez afectivo-sexual
Teoría y práctica del discernimiento cristiano
Teoría y práctica del acompañamiento
espiritual
Teoría y práctica del Proyecto de Vida
personal y comunitario.
b. Formación teológica
Oración personal y de grupo, métodos
Introducción a la Sagrada Escritura
Antropología teológica
Tratado de Dios
78
Formación ética y moral
Cristología
Introducción a la Liturgia.
d. Formación Hospitalaria
Regla de san Agustín
Constituciones y Estatutos Generales de la
Orden
Documentos de la Orden
Carisma y consejo evangélico de
hospitalidad
Historia de la Orden
Juan de Dios: su vida y sus cartas
Teología del sufrimiento.
79
b. Ser capaz de mantener relaciones
interpersonales maduras.
80
VII.
ESCOLASTICADO
“No me habéis elegido vosotros a mí
sino que yo os he elegido a vosotros,
y os he destinado para que vayáis y deis fruto,
y que vuestro fruto permanezca”
(Jn 15, 16).
1. NATURALEZA
85
C 69
86
Cf. CDC 659, 1; PI 59
81
misión 87 , que dispone a los escolásticos a prepararse
para la profesión solemne, con la cual se incorpora
definitivamente a Dios en la Orden.
2. OBJETIVO GENERAL
3. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
87
Cf. C 69-71; EEGG 75
82
3.1. Encuentro consigo mismo:
Consolidar su identidad personal como Hermano de San
Juan de Dios, integrando progresivamente en su vida el
trabajo, la misión y los estudios teológicos, profesionales
y pastorales.
4. MEDIOS
83
c. Acompañamiento espiritual, como medio para
estimular el crecimiento integral de los
Hermanos 88 .
d. Tareas de interiorización de los valores y
contenidos del carisma de la Orden.
e. Experiencias de trabajo hospitalario, según las
posibilidades de cada escolástico, participando y
comprometiéndose en las obras apostólicas y
con los colaboradores.
f. Reflexión compartida sobre los desafíos
presentes y futuros para dar una respuesta
desde nuestro carisma.
g. Encuentros comunitarios para el crecimiento
personal y de grupo contrastando distintas
realidades.
h. Elaboración del Proyecto de Vida Comunitario
para crear un clima de diálogo y de
comunicación.
i. Encuentros de Hermanos escolásticos, a nivel
provincial y/o interprovincial donde se abordan
temas de interés común.
j. Establecer ritmos de oración personal y
comunitaria que permitan leer la propia vida en
clave de fe.
k. Elaboración del proyecto personal,
contrastándolo con su formador.
l. Preparación adecuada y estudios relacionados
con el carisma, obteniendo los títulos oficiales
que les capacite para realizar la misión.
88
Cf. PI 63
84
5. CONTENIDOS
85
retirándose de las ocupaciones habituales” 89 . La
experiencia demuestra la importancia de tales “tiempos
fuertes” para una renovada experiencia de Dios y para
una síntesis personalizada que canalice y armonice
todas las dimensiones de la persona del joven religioso.
89
PI 64
90
Cf. C 70b y EE.GG 11
86
Capítulo cuarto
FORMACIÓN CONTINUADA
87
IX.
FORMACIÓN PERMANENTE
“Transformaos
mediante la renovación de vuestra mente,
de forma que podáis distinguir
cuál es la voluntad de Dios:
lo bueno, lo agradable, lo perfecto”
(Rm 12,2)
1. NATURALEZA
131. Los sujetos de esta formación somos todos los
Hermanos profesos solemnes, en cada fase de la vida,
llamados a buscar y amar a Dios con todo el corazón,
con toda el alma y con todas sus fuerzas, y al prójimo
como a nosotros mismos 91 .
132. En nuestra vida religiosa pasamos por etapas
significativas que debemos cuidar, especialmente: los
primeros años de la formación inicial en cada una de sus
etapas, la edad de la madurez; los momentos de crisis y
retiro progresivo de la acción. La vida propia de los
Institutos religiosos, y sobre todo su futuro, depende en
parte de la formación permanente de sus miembros. Es
deber de cada Instituto procurar los medios y tiempos
adecuados para que las personas se formen
adecuadamente 92 .
133. El ser humano es un sujeto perfectible y tiene
que responder a sus compromisos en el aquí y el ahora
de su existencia. No hay edad en que se pueda dar por
91
Cf. Dt 6,5; Mt 22, 37-39; C 72; VC 69
92
Cf. PC 18; PI 67
88
concluida la madurez de la persona. Lo piden los
cambios profundos y acelerados y la urgencia de dar
respuestas concretas y eficaces a las necesidades de
las personas, tiempos y lugares, así como los cambios y
avances en el campo hospitalario y asistencial 93 .
134. La formación ha de ser sistemática, integral,
acomodada a la capacidad de los miembros, espiritual y
apostólica, doctrinal y práctica. Por ello se ha de valorar
no sólo el estudio como enriquecimiento meramente
individual, sino la formación desde la experiencia de
vida en unión con la misión y fidelidad a la propia
vocación 94 .
2. OBJETIVO GENERAL
135. Actualizarnos en todas las dimensiones de
nuestra vida, para lograr dar una respuesta adecuada a
la misión específica que la Iglesia nos ha confiado 95 .
3. OBJETIVOS ESPECÍFICOS
136. Teniendo en cuenta las peculiaridades y
cualidades de cada Hermano, proponemos los
siguientes objetivos a trabajar durante toda la
vida y que comprenden todas las dimensiones de
la persona. Los mismos podrán ser adaptados en
cada caso 96 .
93
Cf. CDC 659, 1; GS 4
94
Cf. CDC 660-661; PI 66
95
C 72b
96
Para una visión más amplia se dispone del documento, la
Formación Permanente en la Orden, 1991.
89
3.1. Encuentro consigo mismo:
Profundizar en la realidad existencial del momento en
que vive cada Hermano con el fin de conseguir un
desarrollo integral de la persona que le permita la
aceptación de la propia historia como historia de
salvación, en una dinámica de conversión continua.
4. MEDIOS Y CONTENIDOS
137. Para que la Formación Permanente sea efectiva
y real hemos de poner en práctica los medios
adecuados, tales como:
90
a. Compartir la realidad y experiencias que vive
cada uno, dialogando con la sociedad y los
valores de los hombres y mujeres de hoy 97 .
b. Dedicación de tiempos fuertes de reflexión y
puesta al día en las áreas cultural y profesional,
con una buena base teológica, distanciándose
por algún periodo de las actividades.
c. Acompañamiento personal que ayude a integrar
la vida en todas sus manifestaciones.
d. Reflexión y estudio de nuestro carisma y
espiritualidad.
e. Estudio y conocimiento de los documentos
propios de la Orden.
f. Trabajar los Proyectos de Vida Personal y
Comunitario.
g. Apertura y colaboración con otros Institutos y
entidades eclesiales que ayudan a profundizar
en la formación.
h. Participar en grupos de oración y discernimiento
comunitarios o extra-comunitarios.
i. Cursos de actualización en pastoral: métodos de
trabajo, objetivos, relación de ayuda, elaboración
del duelo 98 .
j. La lectura evangélica de la vida y misión, a la
luz de la Palabra de Dios y en clave liberadora.
k. El conocimiento de la lengua y la cultura del
lugar donde se realiza la misión apostólica.
l. El contactar con organismos de la Iglesia y de la
diócesis relacionados con la Pastoral de la Salud
y la Pastoral Social.
97
Cf. VFC 43
98
Cf. VC 71
91
m. La preparación y actualización en temas de
moral social, ética y bioética.
n. Profundización en la Biblia, la teología y el
magisterio de la Iglesia 99 .
o. Realizar los Ejercicios espirituales, cursos de
actualización y otras actividades sobre la
dimensión contemplativa de nuestra vida.
99
Cf. PI 68
92
X.
FORMACIÓN DE FORMADORES
“Proclama la Palabra,
insiste a tiempo y a destiempo,
reprende... exhorta con toda paciencia y doctrina
(2Tim 4, 2)
1. NATURALEZA
100
Cf. VC 66
101
Cf. C 64
93
b. Estar abiertos a la acción de Dios en su propia
vida, manifestando en su modo habitual de
actuar que tienen la madurez propia de una
persona adulta en la fe.
c. Fomentar el amor y la fidelidad a nuestro
carisma y misión, en comunión con las
orientaciones de la Iglesia y de la Orden.
d. Secundar la acción del Espíritu Santo sobre los
formandos teniendo para con ellos las mismas
actitudes que Jesús tuvo para con sus
discípulos: confianza en sus esfuerzos,
comprensión en sus debilidades y siempre
espíritu de servicio.
2. OBJETIVO GENERAL
3. MEDIOS Y CONTENIDOS
94
c. Apertura a otros Institutos a nivel de estudios e
intercambio de experiencias intercongregacio-
nales.
d. Cursos y/o encuentros a nivel de la Curia
General o interprovinciales para abrir y compartir
nuevos caminos de hospitalidad.
95
GLOSARIO
Acompañamiento
Misión que realiza una persona con relación a otra que es
acompañada para conseguir que ésta realice el camino
personal de libertad acorde al proyecto de Dios sobre ella.
Acompañar es ponerse al lado de alguien, es compartir la
experiencia humana en dimensión de fe, es testimoniar,
orientar y caminar juntos. Como Jesús se puso al lado de los
102
discípulos de Emaús , el formador acompaña al hermano
“menor” recorriendo el camino para ayudarle a descubrir y
profundizar la realidad de su vocación 103 .
102
Cf. Lc 24,13-16
103
Cf. Ivt 34
96
Actitud
Rasgos y disposiciones que corresponde al ser de cada
Hermano y se manifiestan en su forma de actuar habitual.
Aptitud
Idoneidad, competencia y habilidad innata para algo. Es
la capacidad que tienen el formando o el Hermano para vivir
la misión hospitalaria con las exigencias inherentes al
carisma.
Asumir
Personalizar, interiorizar, hacer propio, vivir algo desde sí
y centrado en sí mismo. Aceptar y vivir en profundidad y
responsabilizarse, tanto de la etapa formativa como de las
demás etapas.
Carisma
Don del Espíritu Santo, que enriquece y dispone a una
persona y la capacita para un servicio en favor de los demás.
Carisma de la Orden
Don del Espíritu Santo, que nos comunica actitudes de
benevolencia y entrega, que nos configura con el Cristo
compasivo y misericordioso del Evangelio, para anunciar y
hacer presente el Reino con el servicio a los pobres, enfermos
104
y necesitados .
Criterio
Es la pauta o facultad para discernir; norma de actuación
que nos ayuda a asimilar y decidir las políticas de acción,
tanto en lo personal como a nivel de la Orden en relación a la
misión.
104
Cf. C 2ab
97
Cultura
Conjunto de valores, creencias, modelos de vida y
costumbres que dan a los pueblos su fisonomía o modo de
ser peculiar a lo largo de la historia 105 . Es la manera en la que
un grupo de personas vive, piensa, siente y se organiza,
celebra y comparte la vida. En toda cultura subyace un
sistema de valores, de significados, de visiones del mundo
que se expresan en el lenguaje, los gestos, los símbolos, los
ritos y estilos de vida.
Discernimiento
Ejercicio de juicio aplicado a los hechos que nos
preocupan o a los sentimientos que experimentamos, y que
determinan lo que es o no es la voluntad de Dios.
Se entiende también, como el ejercicio de intercambio y
reflexión con otras personas para descubrir la voluntad de
Dios, en relación a la vocación y el proceso formativo que
deseamos seguir, estando abiertos al Espíritu.
Ecumenismo
Trabajo de las distintas confesiones por la unidad de los
cristianos. Esfuerzo conjunto, que tiende a superar las
barreras y divisiones, para lograr la unidad en la verdad, la
106
justicia y la caridad .
Encuentro
Es la toma de conciencia y la experiencia de cercanía y
presencia de otra persona o realidad, por la que el sujeto se
105
Cf. CP 386; CSD 228
106
Cf. UR 4; V C 100
98
encuentra afectado existencialmente. Es tomar conciencia de
la presencia de Dios en la propia persona, en la comunidad y
en la misión.
Ecología
Se refiere al respeto, cuidado y preservación de los
recursos naturales, para favorecer un ambiente sano, que se
puede transmitir como herencia enriquecedora a las futuras
generaciones 107 .
Espiritualidad
Espíritu de la Orden
En general, lo utilizamos como sinónimo de carisma y
espiritualidad, pero se refiere también al modo de ser y de
actuar los Hermanos, al estilo de San Juan de Dios.
Estilo de vida
Se entiende el modo peculiar de vivir una persona o
grupo, lo que la distingue de acuerdo con su vocación 108 .
Evangelización
Anuncio de Jesucristo y su Buena Noticia, mediante el
testimonio, la proclamación de su Palabra y la celebración.
107
Cf. CP 1236. Es necesario, desde la formación, educar en la
conciencia ecológica, uno de cuyos principios básicos es la ética o
valor de la solidaridad.
108
Cf. El estilo de vida de los Hermanos de San Juan de Dios, Roma
1991, documento 4.
99
Fidelidad creativa
Capacidad y compromiso audaz y valiente para mantener
vivo el carisma de la hospitalidad en la Iglesia, según el
espíritu de San Juan de Dios, como respuesta a las
exigencias y necesidades del hombre y la mujer que sufren 109 .
Formación integral
Es el proceso formativo que favorece el desarrollo
armónico de todas las facetas de la persona y la asimilación
de los diversos contenidos formativos. Se trata de armonizar
la experiencia de Dios en la propia persona (experiencia de
filiación), en la comunidad (experiencia de fraternidad) y en la
misión (experiencia del Reino).
Gesto
Es la manifestación concreta del actuar de la persona,
que expresa y exterioriza cualidades de la misma. El gesto
manifiesta los rasgos de su personalidad. El gesto y la actitud
se correlacionan.
Identidad
Rasgos característicos de una persona o de una
organización, sin los cuales dejaría de ser ella misma. La
identidad expresa lo que somos y, al mismo tiempo, expresa
lo que nos diferencia de los demás.
Inculturación
Proceso de adaptación y asimilación de los valores,
tradiciones y costumbres propios de la sociedad en la que
vivimos.
Itinerario espiritual
Camino hacia el encuentro con Dios siguiendo a
Jesucristo y asimilando progresivamente sus sentimientos,
109
Cf. VC 37
100
animados por el Espíritu para vivir y encarnar su fe en una
vocación específica 110 .
Medios
Son los diversos recursos o acciones que empleamos
para alcanzar los objetivos que nos hemos propuesto.
Misión de la Orden
Es la realización del mandato de Jesús de anunciar el
Reino, con gestos y palabras, entre las personas enfermas y
necesitadas, al estilo de San Juan de Dios.
Forma de hacer dinámico el carisma recibido, con el que
se testimonia el Reino y el amor a Dios y a la persona
humana. La misión para el Hermano de San Juan de Dios es
un elemento fundamental de su ser consagrado, manifestando
así que el Cristo compasivo y misericordioso del Evangelio
111
permanece vivo entre los hombres .
Motivación
Son las razones que nos impulsan a actuar, como
personas o como comunidad, en una situación y realidad
concretas. Diríamos también, que son las razones que la
persona tiene para llevar a cabo una acción.
Objetivo
Es el fin que deseamos alcanzar y hacia el cual dirigimos
una decisión o una acción concreta. Parte del ideal,
expresado de modo claro y preciso, que indica a dónde se
desea llegar.
110
Cf. VC 65; Ivt 34
111
Cf. C 2b,5a
101
Opción
Se refiere a la libertad o facultad que tenemos de elegir,
después de analizar la realidad, teniendo en cuenta las
ventajas e inconvenientes 112 .
Paradigma
Equivale a modelo o ejemplo. Un paradigma es un
conjunto de ideas articuladas que permiten la interpretación
de la realidad. En la vida consagrada, entendemos por
paradigma los modelos o ejemplos pedagógicos que se han
vivido a lo largo de su historia, como los denominados:
“clásico”, “moderno”, “misionero” e “integral” 114 .
Perfil
Se refiere a un ideal, conformado por ciertos
“indicadores”, observables, referidos a las características,
actitudes y valores a nivel humano, cristiano y religioso, que
ya poseemos o nos proponemos alcanzar.
Pertenencia
Adhesión a una institución o grupo social, político o
religioso. La pertenencia a la Orden implica la identificación
con sus valores, tradición, carisma y espiritualidad a lo largo
de su historia.
112
Cf. CP 1299.
113
Cf. CSD 178; CP 1132
114
Cf. Capítulo primero, apartado II, n. 35-36 de este libro de
Formación.
102
Planificar
Elaborar un proyecto teniendo en cuenta objetivos,
metas, medios, actividades y personas responsables, para el
logro de una finalidad determinada.
Pluralismo
Actitud y método social, que acepta la diversidad de
opiniones, credos, ideologías, valores culturales y religiosos,
de manera que puedan convivir y dialogar siendo fieles a los
principios con respeto a las diferencias 115 . La pluralidad como
expresión de la vida y riqueza de la Orden, supera la
uniformidad, promueve la diversidad y reafirma la unidad.
Principios
Se refiere al ideal o ideas-fuerza que rigen nuestro
pensamiento y nuestra conducta personal y comunitaria.
Frente a la pluralidad de culturas, opiniones y valores,
estamos de acuerdo en principios fundamentales por los que
expresamos el carisma y la misión.
Programa
Es el desarrollo concreto y parcial de un plan. El
programa concreta los objetivos en orden a lograr su
cumplimiento en un tiempo y lugar determinados, precisando
responsables, actividades y medios.
Proyecto Personal
Es la expresión de un compromiso de vida, previamente
discernido, con el fin de responder a la propia vocación.
Forma parte de un plan y es fruto de una voluntad dinámica
que tiene en cuenta el contexto de cada persona.
Proyecto Comunitario
Es la expresión de un compromiso de vida de una
comunidad, previamente discernido, con el fin de responder a
la propia vocación y misión. Forma parte de un plan y es fruto
115
Cf. DH 2; GS 74
103
de una voluntad dinámica que tiene en cuenta la realidad que
se vive 116 .
Ratio Institutionis
Proyecto general de formación, inspirado en el carisma
de la Orden, para reforzar la identidad y espiritualidad de la
misma. La Ratio armoniza criterios y contenidos que favorece
la universalidad y la unidad, de acuerdo con las exigencias
culturales 117 .
Reino de Dios
Es el plan iniciado por Cristo, según la voluntad del
Padre, que anuncia con su vida de entrega y servicio a los
hombres. El Reino es la Buena Noticia de la Salvación que se
expresa a través de la justicia, el amor y paz. Como
Hermanos de San Juan de Dios y consagrados al Reino
estamos llamados a construirlo cada día, sirviendo al
Evangelio de la vida.
Refundar
Significa tener el coraje de interpelarnos y descubrir
continuamente la riqueza del carisma en sus orígenes y
actualizarlo en cada momento.
Ritmo personal
Se refiere a la dinámica que posee cada persona para
seguir y vivir los procesos dentro de nuestra vocación y
misión.
116
Cf. EEGG 26; El Proyecto de Vida, documento 3
117
Cf. VC 68
104
105