Carnaval de Cajamarca
Carnaval de Cajamarca
Carnaval de Cajamarca
Una de las Tradiciones más populares y alegres de nuestro país son los Carnavales. El
carnaval es una celebración pública que tiene lugar inmediatamente antes de la cuaresma
cristiana, con fecha variable (desde finales de enero hasta principios de marzo según el
año), y que combina algunos elementos como disfraces, desfiles, y fiestas en la calle.
Este carnaval nos trae inconfundibles melodías e ingeniosas y humorísticas letras. Sus
coplas inprovisadas y matarinas contienen también versos pícaros y amorosos, cantados a
contrapunto.
El Domingo
Coplas de carnaval se escuchan en cada esquina de Cajamarca. El color toma por asalto
las calles. El carnaval ha llegado con su carga de alegría, festejo, música y originales
disfraces. Nadie se salva de un baldazo de agua, de los tintes y un buen trago de chicha
de jora.
Una situación que se repite año tras año y que reviste especial interés para los
cajamarquinos celebrarla a lo grande. Es su fiesta. Sería un insulto para ellos el no salir a
las calles, guitarra en mano y visitar a su vecino para cantarle alguna ingeniosa copla. Es
que en cada cajamarquino existe un coplista innato: Cuando bebo me emborracho / que
hasta no sé qué hacer/ abrazo a una y a otra / creyendo que es mi mujer. Tres días que
transforman radicalmente la ciudad.
Nadie se resiste al embrujo de la celebración, pues cada barrio tradicional como San
Pedro, San Sebastián, Cumbemayo, La Merced, Dos de Mayo, San José y Pueblo Nuevo,
dejan en libertad a sus Patrullas y Comparsas, compuestas íntegramente por gran
cantidad de jóvenes entusiastas. Ellos tienen la festiva misión de visitar cada rincón de la
ciudad, bailando, y mostrando la colorida originalidad de sus disfraces.
El Clon
El punto culminante es la entrada del Ño Carnavalón. Este festivo personaje, que marca
el final del carnaval, y baja a la ciudad acompañado de comparsas, patrullas, cabezones,
llenando el espíritu de alegría, huayno, marineras y cashuas, junto con alguno que otro
ritmo moderno. Algo característico del corso carnavalesco son las Comparsas de payasos.
Por lo menos sesenta carros alegóricos de cada barrio e instituciones desfilan por las
principales calles de la ciudad y la Plaza de Armas. Las reinas reciben el aplauso y silbidos
de admiración del público apostado en la calles. Son cinco horas donde nadie se mueve
de su lugar, que es reservado con una necesaria amanecida. Luego que termina el desfile,
cada barrio reúne a sus habitantes v celebra su propia Unsha, un cortamonte al mejor
estilo cajamarquino, regadas de coplas y copas. Pero la fiesta tiene que terminar.
Martes de Carnaval
Miércoles de Ceniza
Se realiza el entierro de Ño Carnavalón en los Baños del Inca. Allí, ante todo el pueblo
cajamarquino, se lee el testamento de este personaje. En este documento deja picarescos
y sarcásticos bienes a las autoridades y personajes del lugar, lo que causa la hilaridad total
entre los presentes. Después de leerse el testamento se procede a quemar al Ño
Carnavalón entre el "Llanto" desconsolado de sus viudas. "Pero estamos seguros que el
próximo año volverá para alegrarnos nuevamente la vida, cantando quizá: A mi guitarra la
quiero/ más que el chicharrón caliente/ porque con mi guitarra/ tomo chicha y aguardiente.