Breve Historia de La Policía Nacional Civil

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Breve historia de la Policía Nacional Civil

La Policía Nacional Civil (PNC), surge luego de la firma de los Acuerdos De Paz
en 1996, sobre la reestructuración de las fuerzas policiales contemplada en el
acuerdo sobre fortalecimiento del poder civil y la función del Ejército en una
sociedad democrática, constituye una reforma que pretende garantizar una
institución policial que respete y proteja los bienes y derechos de todos los
ciudadanos guatemaltecos.

La Policía Nacional Civil sustituye a la Policía Nacional (PN) que los Acuerdos
de Paz exigieron su disolución, y la Ley de la Policía, contempla la organización
y funcionamiento de una única fuerza policial y reconoce la existencia de
diversas etnias y culturas, que deberán estar representadas en el nuevo cuerpo
policial en el cumplimiento de su misión.

La seguridad pública es un servicio esencial de competencia exclusiva del


Estado y para ese fin se crea la Policía Nacional Civil. El nuevo modelo descansa
sobre el principio de que la policía es defensora de la vida y bienes de los
ciudadanos, por lo tanto sus derechos y libertades.

La Policía Nacional Civil es una institución profesional y jerarquizada. Es el único


cuerpo policial armado con competencia nacional cuya función es proteger y
garantizar el ejercicio de los derechos y las libertades de las personas, prevenir,
investigar y combatir el delito, mantener el orden público y la seguridad interna.

La Ley de la Policía Nacional Civil, se basa en el Decreto Número 1197 del


Congreso de la República de Guatemala, emitida a los cuatro días del mes de
febrero de 1997.

El mando supremo será ejercido por el Presidente de la República, a través del


Ministro de Gobernación. El funcionamiento de la Policía Nacional Civil estará a
cargo de su Director General, bajo la inmediata y exclusiva autoridad del Ministro
de Gobernación. En cada departamento y con sujeción a las directrices del
Ministerio de Gobernación, el Gobernador supervisará la actuación de la Policía
Nacional Civil.

La escala jerárquica de dirección, que corresponde a los siguientes grados:


• Director General.
• Director General Adjunto y
• Subdirectores Generales

Escala Jerárquica de oficiales superiores que corresponde a los siguientes


grados:

• Comisario General de Policía


• Comisario de Policía
• Subcomisario de la Policía

Escalara jerárquica de Oficiales Subalternos, que corresponde a los siguientes


grados:

• Oficial Primero de Policía


• Oficial Segundo de Policía
• Oficial Tercero de Policía

Escala Básica, que corresponde a los siguientes grados:

• Inspector de Policía
• Subinspector de Policía
• Agente de Policía Nacional Civil.
Tradiciones guatemaltecas
Guatemala ofrece tradiciones formadas con el paso de los siglos, desde el
legado Maya, la cultura de sus antepasados en el mundo prehispánico, seguido
por las tradiciones de la época colonial, con gran influencia del catolicismo, y las
nuevas de la época contemporánea, hasta las denuncias contra políticos
corruptos, todo fusionado en este país de contrastes.
Entre las manifestaciones de mayor tradición se encuentra:
Semana Santa o Semana Mayor
Esta se celebra cada año entre marzo y abril. Es un período de 7 días que
comienza el Domingo de Ramos y termina el Domingo de Resurrección.
La Semana Santa está precedida por la Cuaresma que se refiere al tiempo de
preparación donde se recuerda los 40 días de Jesucristo en el desierto.
Los religiosos proponen que este tiempo sea utilizado para la oración y reflexión,
a fin de revisar sus acciones y los cambios que debe tener para acercarse más
a Dios y cumplir con sus mandamientos.

Procesión de Jesús Nazareno de La Merced – Antigua en Viernes Santo – foto


por Maynor Marino Mijango
Durante la Semana Santa, el católico cumple con diversos actos, como
procesiones, escenificación del drama de la muerte y pasión de Cristo, sobre
calles ornamentadas con alfombras, cargadores vestidos de cucuruchos y
cortejos se desplazan al ritmo de marchas fúnebres.

Procesiones famosas que atraen a devotos y turistas nacionales y extranjeros


son: En Antigua Guatemala, la del Señor Sepultado de San Felipe, el Viernes
Santo; y la del Cristo Yacente de la Escuela de Cristo, en La Antigua Guatemala,
el Viernes Santo.
En la Capital, la del Nazareno de la Iglesia de San José, el Domingo de Ramos;
la de La Reseña, del Templo de La Merced, el Martes Santo; y la del Cristo
Yacente o Cristo del Amor del Templo de Santo Domingo, el Viernes Santo.
Los penitentes se someten a actividades como símbolo de su auto sacrificio y,
en el día Viernes Santo, los fieles guardan ayuno y se abstienen de comer carne
de ganado vacuno y porcino.
El jueves, viernes y sábados Santos para los guatemaltecos son días de asueto
con pago de sueldo obligatorios para todos los trabajadores guatemaltecos,
según el Artículo 127 del Código de Trabajo.
Las Posadas
Son celebraciones populares con las que se rememora la andanza de San José
con la Virgen María próxima a dar a luz al niño Jesús. Fue iniciada por el
Hermano Pedro en Santiago de Guatemala, a imitación de lo que hacía fray José
de Moreira durante la víspera de Navidad, dentro del convento en las celdas del
noviciado.

Las Posadas en Guatemala. Fotografía tomada del sitio web


todopormiguate.com
Cada año al iniciarse la noche del 24 de diciembre, el Hermano Pedro
acostumbraba sacar una procesión con las imágenes de la Virgen María y del
Patriarca San José, que iban vestidos en traje de peregrinos.
En ella participaban los niños de su escuela que, vestidos de pastores, llevaban
velas encendidas, farolillos, instrumentos musicales como pitos de caña y barro,
chinchines, tambores, conchas de tortuga, castañuelas y panderetas.
También iban cantando villancicos, coplas y sones de pascua. Al llegar al
Hospital de Nuestra Señora de Belem, otros pastorcitos salían a recibir a los que
pedían posada. El recorrido concluía en una sala, frente a un Nacimiento
elaborado por el Hermano Pedro, el cual estaba adornado con frutas. Entre ellas
naranjas, limas, manzanillas, melocotones, piñuelas, granadillas, toronjas,
también hojas de pacaya y figurillas de barro.
Al concluir la procesión, los participantes recibían una refacción, consistente en
algún tamalito o chuchito, pan dulce y ponche; después continuaban cantando
villancicos hasta media noche cuando se dirigían a la iglesia de San Francisco
para asistir a la Misa del Gallo, explica el historiador Horacio Cabezas.
Huelga de Dolores
Son actividades diversas que culminan con el desfile bufo que realizan los
estudiantes de la Universidad de San Carlos, el Viernes de Dolores de cada año.
Fue iniciado por estudiantes de la Facultad de Medicina, en marzo de 1898,
durante el Gobierno de Manuel Estrada Cabrera, para presionarlo a incrementar
y mejorar las escuelas públicas.
La primera manifestación satírica pública de los huelguistas contra personajes
del Gobierno aconteció el 1 de abril de 1898. Entre los principales elementos
simbólicos de la huelga figuran: el periódico No Nos Tientes, la insignia o
distintivo La Chabela, el canto La Chalana (1922), los boletines, la Velada
Estudiantil en el Cine Lux y el Desfile Bufo. La Chabela, nahual de los
huelgueros, fue creada en 1921 a iniciativa de Joaquín (la Chinche) Barnoya,
Epaminondas Quintana y Hernán Martínez Sobral, quien fue el que hizo su
primer dibujo, un esqueleto femenino bailando.
En 1903, el Gobierno de Estrada Cabrera impidió su realización y la policía
reprimió a los estudiantes de la Facultad de Derecho, cuando intentaban salir a
las calles; en tal ocasión murió Bernardo Lemus. En 1908, el Gobierno prohibió
la circulación del No Nos Tientes.
El Desfile Bufo volvió a establecerse a la caída de la dictadura de Estrada
Cabrera. En marzo de 1931, al mes y medio de instalado Jorge Ubico Castañeda
en el poder, los universitarios invitaron a colegas salvadoreños para participar en
el desfile, pero la policía cargó contra los huelgueros, les propinó una paliza,
encarceló a un buen número de ellos e impidió que se realizara manifestación
alguna.
Algunos estudiantes tuvieron que marchar a otros países a concluir sus estudios.
El año siguiente, Ubico cambió el calendario académico y trasladó el período de
vacaciones a los meses de marzo y abril; ello, con el objeto de evitar la
celebración de la huelga, la cual pudo salir a la calle hasta en 1945, después de
transcurridos los 14 años que duró la dictadura ubiquista. El reinicio de su
celebración fue un logro de los estudiantes Francisco (Chico) Luna Ruiz, el Loco
Alvarado, Jesús Guerra Morales y Chichicúa López Urzúa.
El Palo Volador
Es una danza mesoamericana, que se realiza en demanda de lluvia y fertilidad
de los suelos. Antes de cortar el árbol, del cual proviene el eje o palo en torno al
cual giran los danzantes, se realizan ciertos rituales preparatorios, consistentes
en abstinencia sexual, ayuno y libaciones.
Palo Volador, Cubulco, Baja Verapaz – foto por German Velasquez
En la parte superior del palo se coloca una armazón giratoria, de cuyas esquinas
se desprenden cuatro cuerdas que sirven para atar, de los pies a los bailarines,
quienes se lanzan al vacío y van descendiendo, dando vueltas alrededor del
palo, engalanados con plumas y máscaras que representan aves, chalchigüis,
monedas y cascabeles con ayacastles sonoros como chinchines o maracas.

El jefe de la danza, llamado el mico, es el primero en subir al palo o mástil para


dirigir, desde arriba, el ritual, con toda suerte de monerías. Luego lo hacen los
bailarines, quienes, después de atarse la cuerda a la cintura, se dejan caer con
los brazos extendidos y las piernas enlazadas a la cuerda, en un descenso
circular en el que las vueltas se van ensanchando.
Abajo, la danza es acompañada con el tun o teponaxtli, flautas y caracoles. Esta
ceremonia se practica todavía en Chichicastenango, en Joyabaj y Cubulco, en
Guatemala, y en algunos lugares del sur de México. A la llegada de los
conquistadores españoles a Mesoamérica, los danzantes iba con trajes hechos
con plumas de aves, representando águilas, búhos, cuervos, guacamayas,
quetzales, calandrias, etc. Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán fue el primer
cronista colonial que se refirió a esta danza detalladamente, en la Recordación
Florida. Con posterioridad, Rafael Landívar la describió en la Rusticatio
Mexicana.
La Carrera de Cintas
Según el cronista huehueteco Fermín Herrera, para los pobladores, el que haya
un muerto durante la carrera es presagio de que será buen año en la salud y
habrá abundancia, razón por la cual, de ocurrir, no sería una tragedia sino un
motivo más para celebrar.
Esta actividad conocida también como Juego de Gallos o Corrida de Cinta, se
desarrolla luego de una ceremonia en la cual la cofradía pide permiso a los
santos y a la Madre Tierra para poder correr, esto incluye la entrega de la sangre
de un gallo como ofrenda que en ocasiones se mezcla con la sangre de los
jinetes al caerse de los caballos.

La Carrera de Cintas, Todos Santos Cuchumatán – foto por Fernando Calmo


Vestidos con el traje ceremonial que incluye sombrero con plumas de colores,
pañuelos coloridos y cintas rojas, uno a uno esperan su turno para ingresar a la
pista, la cual es controlada por miembros de una cofradía.

Los jinetes deben prepararse física y espiritualmente, pero además, con


suficientes recursos económicos, pues quienes se atreven a montar uno de los
300 caballos que son llevados de las comunidades asentadas en los
Cuchumatanes, deben pagar ya sea por todo el día Q1 mil 800, por una hora
Q400 o de Q25 a Q50 por una vuelta, además de sufragar el pago de la marimba
para la noche previa al evento.
Herrera refirió que de la calidad del caballo depende el precio que se debe pagar,
aunque hay algunos montadores que durante años pagan todo el día y eligen el
mismo animal, con el que llegan a desarrollar una amistad al unirse durante la
carrera.
Elvis López, contratista de animales, explicó que los caballos han sido cuidados
por dos meses antes de participar en esta actividad, pues durante la carrera
sufren desgaste físico que requiere preparación, porque la mayor dificultad es
que los jinetes montan ebrios.
Barriletes Gigantes
Según la cosmogonía de los indígenas kaqchiqueles los barriletes representan
un lazo de comunicación entre los muertos (los santos) y los vivos.
Para los habitantes de Santiago, Sacatepéquez el primero de noviembre día de
todos los Santos, tiene poca relación con los santos de la iglesia católica y se
enfoca casi por completo en los muertos del inframundo, en sus antepasados.
Es un día de un ritual tradicional que inicia a la salida del sol del primero de
noviembre; en el cual las familias esparcen flores en las casa y se ponen
ramilletes en las ventanas, con el afán de guiar a las animas muertas el camino
a su hogar y con eso hacerles saber que siguen siendo bienvenidos y no se les
ha olvidado.
La tradición oral cuenta, que ese día las almas de los antepasados son liberadas
por veinticuatro horas en donde los espíritus tienen la libertad de volver a sus
hogares, a sus seres cercanos, a lo que vivieron y a sus descendientes.
Los vivos deben de estar preparados y es por ello que adornan con flores, ya
que, si los espíritus no encuentran buena recibida por parte de sus familias, éstos
pueden causar daños a las cosechas, enfermedades o atentar contra los vivos.
Por ésta razón, es que los pobladores al darse cuenta que espíritus malignos
invadían el camposanto y las viviendas donde vivieron y convivieron, decidieron
en una manifestación abstracta elevar lienzos de papel, que al chocar con el
viento indicarían a los espíritus el camino al cielo y se alejaría la molestia.
Por lo que los lugareños dedicaron largo tiempo a elaborar los objetos que
derivaron en barriletes o cometas.
Actualmente, los barriletes actúan como mensajeros verdaderos ya que a
muchos de estos se les coloca un mensaje o telegrama que se prende a la cola
de una pita, que con cada jalón va subiendo al cielo.
Anualmente se lleva a cabo el “Festival de Santiago, de Barriletes Gigantes”
dicha festividad da inicio a las cuatro de la mañana, del día primero de
noviembre, los barriletes son llevados al camposanto y son terminados de armar;
los barriletes voladores son elevados durante todo el día y a las cuatro de la tarde
los bajan, al día siguiente a las cuatro de la mañana, regresan al camposanto
con velas para que los espíritus que han estado con ellos puedan regresar a sus
hogares.
Cuando está terminando la festividad los niños destruyen los barriletes, lo cual
es una señal hacía los espíritus que la visita terrenal ha terminado y tienen que
regresar al cielo. Los barriletes que se han mantenido en tierra se elevan para
que así los espíritus de los ancianos, ayuden a quienes aún no encuentran la
subida al cielo. Al bajar los barriletes, son quemados en el cementerio, con la
esperanza que el humo guie a regresar al cielo a cualquier espíritu vagabundo.
Barriletes Gigantes – foto por Maynor Marino Mijangos.

Dada la relevancia que tiene ésta hermosa tradición ancestral, que data de los
años de 1900-1910, el Ministro de Cultura y Deportes declara ésta festividad el
30 de octubre de 1998, como Patrimonio Cultural de Guatemala. El 15 de
diciembre de 2005 también recibe por parte del Presidente de la República Oscar
Berger el Galardón de la Orden Nacional del Patrimonio Cultural.
Durante 35 años consecutivos cada primero de noviembre en Santiago
Sacatepéquez se lleva a cabo el Festival de Barriletes Gigantes.
En el cual varios grupos de pobladores participan en un concurso de creatividad
y vuelo. La preparación para dicho festival inicia aproximadamente cuatro meses
antes del primero de noviembre, en donde generalmente se trabajan de cinco a
seis horas diarias para determinar el tamaño, diseñar los adornos, hacer los
trazos y ejecutar el diseño.
El tamaño de los barriletes varía desde los pequeños de un metro de diámetro
hasta los más grandes que sobrepasan los 16 metros de diámetro, todos son
elaborados con papel de china y su armazón es de caña de bambú o de tallos
de castilla, la cual es una planta similar al trigo; el pegamento que se usa es
natural elaborado con harina de yuca mezclada con trozos de cáscara de limón
y agua. Los cables para las pitas son de maguey. Las colas del barrilete son de
tela tejida.
Cada año es dedicado a un tema distinto, bien puede ser un tema político,
religioso o cultural.
Durante la celebración del Festival se elevan al cielo los barriletes de menor
tamaño, siendo éstos los que participan en la categoría de elevación; mientras
los más grandes son exhibidos y se califica en éstos el diseño, el colorido y el
tema.
El primero de noviembre es un día lleno de rituales que es acompañado por
música de marimba, comida típica y miles de guatemaltecos con deseo de
preservar la tradición del vuelo de barriletes.
Quema del Torito

La Quema del Torito – foto por Gabriel Castroconde


Esta tradición celebra un tema relacionado con la ganadería y sus capataces. La
trama de la danza narra la historia del capataz de una hacienda que prohíbe a
los vaqueros lidiar con un toro, por lo que estos optan por emborrachar al jefe
para poder hacerlo.
La trama culmina con la muerte del capataz por el toro más bravo.
La Quema del Torito se originó cuando los españoles, después de la conquista,
introdujeron los juegos pirotécnicos para las celebraciones religiosas.
Esta tradición se puede apreciar en muchos lugares del país y es celebrada por
diferentes culturas guatemaltecas.
El Torito consiste en una armazón de alambre o madera cubierta con cohetes,
canchinflines y estrellitas.
Para la celebración, esta armazón es colocada sobre los hombros de un hombre,
luego se encienden los juegos pirotécnicos; y el Torito es transportado entre la
gente quienes lo torean y corren para evadir ser alcanzados.
Gastronomía
Los tamales son una tradición gastronómica de los mayores deleites y que
constituye el plato principal de la tradicional cena de Navidad. Aunque estos
también los guatemaltecos tienen por tradición comer tamales menos elaborados
cada sábado del año.
El ponche es una bebida elaborada con frutas cocidas, que al igual que los
tamales se consume en temporada de fin de año.
El fiambre es una de las mayores expresiones de la tradición guatemalteca;
representa la pluriculturalidad y multiculturalidad de nuestra raza. Su origen es
de la época colonial, sus ingredientes y textura se pueden describir como una
ensalada, que puede llegar a tener más de 50 ingredientes y aunque no exista
una única receta, podemos clasificar su contenido en cuatro grupos: carnes,
embutidos, verduras y quesos, además varios tipos de aderezo. Se celebra el 1
de noviembre en el Día de Todos los Santos.

fiambre – modaatomica blogspot com


Una tradición extinta
El Paseo de Santa Cecilia era un desfile o mascarada encabezado por las
autoridades edilicias y de la Audiencia de Guatemala, para conmemorar la fecha
del asentamiento de la ciudad de Santiago de Guatemala, en Almolonga (22 de
noviembre de 1527), así como la rendición de los señores cakchiqueles.
El 21 de noviembre, el Pendón Real era exhibido frente al Palacio del
Ayuntamiento. A eso de las cuatro de la tarde, un escuadrón de indígenas de
Ciudad Vieja, descendientes de tlaxcaltecas, con sus vestimentas guerreras y
con arcos adornados con plumas de quetzal, encabezaba el paseo. Seguía el
Alférez Real, en un corcel ricamente enjaezado, portando el Pendón. Iba
acompañado por las autoridades edilicias y los vecinos. Se dirigían al Palacio de
los Capitanes Generales, donde el Presidente se unía a la comitiva. Luego se
trasladaban a la Catedral y, en las gradas del Altar Mayor, el Maestro de
Ceremonias recibía el Pendón y lo colocaba al lado del Evangelio. Concluido el
rezado de las Vísperas, la comitiva se dirigía al Palacio de los Capitanes
Generales y al Palacio del Ayuntamiento, donde era expuesto en uno de los
arcos bajos.
Al comienzo y retorno del Paseo, el escuadrón de indígenas realizaba salvas con
sus arcabuces. Luego se distribuía refrescos y dulces entre los concurrentes. El
día siguiente había misa cantada y, al concluir, era representada la Fiesta o
Danza del Volcán. También había juegos de pólvora, cera y cañas.
El primer Paseo de Santa Cecilia fue realizado en 1557, en que Bernal Díaz del
Castillo fue el que lo portó. En 1578, el Ayuntamiento de Santiago de Guatemala
acordó que volviera a celebrarse durante la víspera de la fiesta de Santiago de
Apóstol. Sin embargo, la decisión no se prolongó, pues en años posteriores
continuó celebrándose el 21 de noviembre. En 1611 participaban alrededor de
6,000 indígenas.
A partir de 1657 se suspendió la celebración de juegos, pues el año anterior
había habido alborotos y pleitos; sólo se continuó la actividad religiosa. No se
tiene conocimiento cuándo tal costumbre fue restablecida. En 1797, el pendón
real fue portado por el Marqués de Aycinena.
Aunque las Cortes de Cádiz prohibieron desfiles celebrando la conquista
española, los indígenas de Ciudad Vieja lo continuaron realizando. José (Pepe)
Batres Montúfar incluyó en su poema El Relox detalles picarescos sobre el
Paseo de Santa Cecilia.
Signo de puntuación
Los signos de puntuación delimitan las frases y los párrafos, establecen la
jerarquía sintáctica de las proposiciones para conseguir estructurar el texto,
ordenan las ideas y las jerarquizan en principales y secundarias, además
eliminan ambigüedades.

La puntuación varía según el estilo de escritura; sin embargo, las diferencias de


estilo que se puedan presentar no eximen a nadie de cumplir con ciertas normas
mínimas y de evitar errores generalmente considerados como inaceptables. De
ahí la importancia de conocer y aplicar las normas básicas de la puntuación.

No obstante, hay que advertir que más allá de cualquier norma establecida, los
signos de puntuación componen también la arquitectura del pensamiento escrito.
En este sentido, y tal y como sucede en poesía desde hace más de un siglo, no
existen normas exactas para reglamentar el correcto uso de los signos en las
partituras, tanto narrativas como poéticas. En términos de principios y
parámetros, los signos de puntuación entrarían a formar parte de los parámetros
del lenguaje, y en consecuencia se sitúan en un proceso de constante evolución
y son variables, por lo tanto pueden depender de otros factores.

Si la finalidad última es la comunicación, podría resultar paradójico encontrarnos


con licencias ortográficas que no respetan el modo convencional de escritura y
que, sin embargo, expresan a la perfección los conceptos y los ritmos internos,
invisibles de otra manera.

Como ejemplo de variable «en el extremo» se situarían los cambios en las


formas de escritura que están imponiendo los nuevos medios de comunicación,
chat, blog, SMS... que más que atacar a las viejas estructuras del lenguaje
realizan de él un uso específico, adecuado a la velocidad y otras características
del medio en cuestión; incluso cuando lo correcto es respetar el uso de los signos
de puntuación y evitar la degradación de la lengua española por modismos.

1 Signos principales
1.1 Punto «.»
1.2 Coma «,»
1.3 Punto y coma «;»
1.4 Dos puntos «:»
1.5 Comillas: simples «'» y dobles «"»
1.6 Paréntesis «( )», corchetes «[ ]» y llaves «{ }»
1.7 Signos de interrogación «¿» y «?»
1.8 Signos de exclamación «¡» y «!»
1.9 Puntos suspensivos «...»
1.10 Guion «-»
1.11 Raya «—»
Punto final: siempre se coloca al final, cerrando un texto o enunciado. No es
correcta la denominación punto y final, creada por analogía de las correctas
punto y seguido y punto y aparte.
Punto y seguido: separa enunciados dentro de un párrafo. Quiere decir que se
continúa escribiendo a continuación del punto; la primera letra escrita en este
caso irá en mayúscula. Por ejemplo: «Historia de España. El descubrimiento de
América». Se denomina punto y seguido, nombre más lógico y recomendable
que el también usual de punto seguido.
Coma «,»
La coma ( , ) es un signo de puntuación que señala una breve pausa dentro del
enunciado. Se emplea para separar los miembros de una enumeración o
sucesión, ya sean palabras o frases, salvo los que vengan precedidos por alguna
de las conjunciones y, e, o, u o ni. Por ejemplo:
—María volvió a casa, hizo los deberes, cenó y se fue a la cama.
—Mi casa tiene muebles, mesas y cuatro camas.
Hay tendencias que admiten su uso para separar dos miembros independientes
de una oración, haya o no conjunción entre ellos, siempre y cuando sean
realmente independientes; pues, si no, estaríamos en el caso anterior:
—Los soldados saludaban, la gente aplaudía y los niños no paraban de cantar.
También se utiliza para delimitar o aislar una aclaración o inciso (palabras u
oraciones incidentales):
—Nacho, mi primo, acaba de conseguir su primer empleo.
Las locuciones conjuntivas o adverbiales, sea cual sea su posición, van
precedidas y seguidas de coma, tales como: en efecto, es decir, en fin, por
consiguiente.
Indicar que una o varias palabras han sido suprimidas por razones gramaticales
o de estilo
Punto y coma «;»
Artículo principal: Punto y coma
El punto y coma (;) es un signo de puntuación; gramaticalmente, se utiliza para
unir dos oraciones relacionadas en una sola frase:

—María estaba apenada por el examen. + María tendrá que estudiar más. =
María estaba apenada por el examen; tendrá que estudiar más. —Está lloviendo
mucho. + No podemos ir caminando. = Está lloviendo mucho; no podemos ir
caminando.

Generalmente se puede sustituir por construcciones del tipo:

—María estaba apenada por el examen y tendrá que estudiar más. —No
podremos ir caminando porque está lloviendo mucho.
También sirve para separar los elementos de una enumeración cuando se trata
de expresiones que incluyen comas:

—Había que estar en contacto con la naturaleza; dejar entrar el cielo, el mar y el
viento; dormir sobre tablones, sobre el suelo; sentarse en sillas medio rotas.

Además, se usa delante de las conjunciones o locuciones como pero, más,


aunque, sin embargo, por tanto y por consiguiente cuando los períodos tienen
cierta longitud:

—Creemos en la creatividad y la ruptura de los opresores cánones antiguos


como medio de vida; no obstante, somos conscientes de que es necesario
mantener un mínimo de tradición en nuestros trabajos.

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