El documento proporciona información sobre la sinapsis nerviosa y la transmisión de señales en el sistema nervioso central. Explica que existen dos tipos principales de sinapsis: químicas y eléctricas, siendo las químicas las más comunes en el sistema nervioso central humano. Describe los componentes clave de la sinapsis química, incluidos los terminales presinápticos, las vesículas transmisoras, los receptores postsinápticos y los canales iónicos.
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El documento proporciona información sobre la sinapsis nerviosa y la transmisión de señales en el sistema nervioso central. Explica que existen dos tipos principales de sinapsis: químicas y eléctricas, siendo las químicas las más comunes en el sistema nervioso central humano. Describe los componentes clave de la sinapsis química, incluidos los terminales presinápticos, las vesículas transmisoras, los receptores postsinápticos y los canales iónicos.
El documento proporciona información sobre la sinapsis nerviosa y la transmisión de señales en el sistema nervioso central. Explica que existen dos tipos principales de sinapsis: químicas y eléctricas, siendo las químicas las más comunes en el sistema nervioso central humano. Describe los componentes clave de la sinapsis química, incluidos los terminales presinápticos, las vesículas transmisoras, los receptores postsinápticos y los canales iónicos.
El documento proporciona información sobre la sinapsis nerviosa y la transmisión de señales en el sistema nervioso central. Explica que existen dos tipos principales de sinapsis: químicas y eléctricas, siendo las químicas las más comunes en el sistema nervioso central humano. Describe los componentes clave de la sinapsis química, incluidos los terminales presinápticos, las vesículas transmisoras, los receptores postsinápticos y los canales iónicos.
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LEER CAPITULO 5 Y 7 ANTES DE LEER ESTO JAJAJA
Sinapsis del sistem a nervioso central
La información recorre el sistema nervioso central sobre todo bajo la forma de potenciales de acción nerviosos, llamados simplemente «impulsos nerviosos», a través de una sucesión de neuronas, una después de la otra. Todas estas actividades pueden clasificarse como funciones sinápticas de las neuronas. Tipos de sinapsis: químicas y eléctricas Hay dos tipos principales de sinapsis: 1) la sinapsis química 2) la sinapsis eléctrica. Casi todas las sinapsis utilizadas para la transmisión de señales en el sistema nervioso central del ser humano son sinapsis químicas. En ellas, la primera neurona segrega un producto químico denominado neurotransmisor (o muchas veces llamado sencillamente sustancia transmisora) a nivel de la terminación nerviosa, que a su vez actúa sobre las proteínas receptoras presentes en la membrana de la neurona siguiente para excitarla, inhibirla o modificar su sensibilidad de algún otro modo. Hasta hoy se han descubierto más de 40 sustancias transmisoras importantes. Entre las mejor conocidas figuran las siguientes: acetilcolina, noradrenalina, adrenalina, histamina, ácido y-aminobutírico (GABA), glicina, serotonina y glutamato. Por el contrario, las sinapsis eléctricas se caracterizan por la presencia de unos canales fluidos abiertos que conducen electricidad directamente desde una célula a la siguiente. La mayoría de ellos consta de pequeñas estructuras proteicas tubulares llamadas uniones que permiten el movimiento libre de los iones desde el interior de una célula hasta el interior de la siguiente. En el sistema nervioso central no se han encontrado más que unos cuantos ejemplos de uniones en hendidura. Sin embargo, los potenciales de acción se transmiten a través de ellas y de otras uniones semejantes desde una fibra muscular lisa hasta la siguiente en el músculo liso visceral y desde un miocito cardíaco al siguiente en el músculo cardíaco
Anatomía fisiológica de la sinapsis
La neurona está compuesta por tres partes fundamentales: el soma, que es el cuerpo principal de la neurona; el único axón, que se extiende desde el soma hacia un nervio periférico para abandonar la médula espinal, y las dendritas, que constituyen una gran cantidad de prolongaciones ramificadas del soma con unas dimensiones hasta de 1 mm de recorrido hacia las zonas adyacentes en la médula. Sobre la superficie de las dendritas y del soma de la motoneurona se hallan entre 10.000 y 200.000 diminutos botones sinápticos llamados terminales presinápticos, estando aproximadamente del 80 al 95% en las dendritas y sólo del 5 al 20% en el soma. Estos terminales presinápticos ocupan el extremo final de las fibrillas nerviosas originadas en muchas otras neuronas. En gran parte son excitadores: es decir, segregan una sustancia transmisora que estimula a la neurona postsináptica; sin embargo, otras son inhibidoras, y segregan una sustancia transmisora que inhibe a la neurona postsináptica. Las neuronas pertenecientes a otras porciones de la médula y el encéfalo se distinguen de la motoneurona anterior en los siguientes aspectos: 1) las dimensiones del soma celular 2) la longitud, el tamaño y el número de dendritas, que oscila desde casi 0 a muchos centímetros 3) la longitud y el tamaño del axón 4) el número de terminales presinápticos, que puede oscilar desde tan sólo unos pocos hasta llegar a 200.000. Estas variaciones hacen que las neuronas situadas en las diversas partes del sistema nervioso reaccionen de forma disparaje a las señales sinápticas llegadas y, por tanto, ejecuten muchas funciones diferentes. Terminales presinápticos. Los estudios efectuados sobre los terminales presinápticos con el microscopio electrónico muestran que poseen variadas formas anatómicas, pero en su mayoría se parecen a pequeños botones redondos u ovalados y, por tanto, a veces se les llama botones terminales, botones, pies terminales o botones sinápticos.. El terminal está separado del soma neuronal postsináptico por una hendidura sináptica cuya anchura suele medir de 200 a 300 angstroms. En él existen dos estructuras internas de importancia para la función excitadora o inhibidora de la sinapsis: las vesículas transmisoras y las mitocondrias. Las vesículas transmisoras contienen la sustancia transmisora que, cuando se libera a la hendidura sináptica, excita o inhibe la neurona postsináptica (excita si la membrana neuronal posee receptores excitadores e inhibe si tiene receptores inhibidores). Las mitocondrias aportan trifosfato de adenosina (ATP), que a su vez suministra energía para sintetizar más sustancia transmisora. Cuando se propaga un potencial de acción por un terminal presináptico, la despolarización de su membrana hace que una pequeña cantidad de vesículas viertan su contenido hacia la hendidura. Por su parte, el transmisor liberado provoca un cambio inmediato en las características de permeabilidad de la membrana neuronal postsináptica y esto origina la excitación o la inhibición de la célula, en función de las propiedades del receptor neuronal. Mecanismo por el que los potenciales de acción provocan la liberación del transmisor en los terminales presinápticos: misión de los iones calcio La membrana del terminal presináptico se llama membrana presináptica. Contiene una gran abundancia de canales de calcio dependientes de voltaje. Cuando un potencial de acción la despolariza, estos canales se abren y permiten la entrada en el terminal de un número importante de iones calcio. La cantidad de sustancia transmisora que sale a continuación hacia la hendidura sináptica desde el terminal es directamente proporcional al total de iones calcio que penetran. No se conoce el mecanismo exacto por el que estos iones propician su liberación, pero se piensa que es el siguiente. Cuando los iones calcio llegan al terminal presináptico, parecen unirse a unas moléculas proteicas especiales situadas sobre la cara interna de la membrana presináptica, llamadas puntos de liberación. A su vez, este enlace suscita la apertura de los puntos de liberación a través de la membrana, y así permite que unas pocas vesículas transmisoras suelten su contenido hacia la hendidura después de cada potencial de acción. En el caso de las vesículas que almacenan el neurotransmisor acetilcolina, existen entre 2.000 y 10.000 moléculas de esta sustancia en cada una y en el terminal presináptico hay suficientes vesículas como para transmitir desde unos cuantos cientos hasta más de 10.000 potenciales de acción. Acción de la sustancia transmisora en la neurona postsináptica: función de las «proteínas receptoras» La membrana de la neurona postsináptica contiene una gran cantidad de proteínas receptoras. Las moléculas de estos receptores poseen dos elementos importantes: 1) un componente de unión que sobresale fuera desde la membrana hacia la hendidura sináptica y donde se fija el neurotransmisor procedente del terminal presináptico. 2) un componente ionóforo que atraviesa toda la membrana postsináptica hasta el interior de la neurona postsináptica. Por su parte, este elemento se desdobla en dos clases: 1. un canal iónico que permite el paso de determinados tipos de iones a través de la membrana 2. un activador de «segundos mensajeros» que en vez de un canal iónico es una molécula que conduce hacia el citoplasma celular y activa una sustancia o más en el seno de la neurona postsináptica. A su vez, estas sustancias actúan como «segundos mensajeros» para aumentar o disminuir determinadas funciones específicas de la célula. Canales iónicos Los canales iónicos de la membrana neuronal postsináptica suelen ser de dos tipos: 1) canales catiónicos: dejan pasar iones sodio cuando se abren, pero a veces también cumplen esta función con el potasio o el calcio. 2) canales amónicos: permiten sobre todo el paso de los iones cloruro, pero también de minúsculas cantidades de otros aniones. Los canales catiónicos que transportan iones sodio están revestidos de cargas negativas. Esta situación atrae hacia ellos a los iones sodio dotados de carga positiva cuando el diámetro del canal aumenta hasta superar el tamaño del ion sodio hidratado. Pero esas mismas cargas negativas repelen los iones cloruro y otros aniones e impiden su paso. Con respecto a los canales amónicos, cuando sus diámetros alcanzan las dimensiones suficientes, entran los iones cloruro y los atraviesan hasta el lado opuesto, mientras que los cationes de sodio, potasio y calcio quedan retenidos, básicamente porque sus iones hidratados son demasiado grandes para poder pasar. Por tanto, una sustancia transmisora capaz de abrir los canales catiónicos se denomina transmisor excitador. A la inversa, la apertura de los canales aniónicos permite la entrada de cargas eléctricas negativas, que inhiben a la neurona. Así pues, las sustancias transmisoras que abren estos canales se llaman transmisores inhibidores. Sistema de «segundo mensajero» en la neurona postsináptica. Muchas funciones del sistema nervioso, como, por ejemplo, los procesos de memoria, requieren la producción de unos cambios prolongados en las neuronas durante segundos y hasta meses después de la desaparición de la sustancia transmisora inicial. Los canales iónicos no son idóneos para originar una variación prolongada en las neuronas postsinápticas, porque se cierran en cuestión de milisegundos una vez desaparece la sustancia transmisora. Sin embargo, en muchos casos, se consigue una excitación o una inhibición neuronal postsináptica a largo plazo al activar un sistema químico de «segundo mensajero» en el interior de esta misma célula, y a continuación será este elemento el que genere el efecto duradero. Existen diversos tipos de sistemas de segundo mensajero. Uno de los más frecuentes recurre a un grupo de proteínas llamadas proteínas G. Una proteína G está unida a la porción del receptor que sobresale hacia el interior de la célula. A su vez, la proteína G consta de tres elementos: un componente alfa (α), que es la porción activadora de la proteína G, y unos componentes beta (β) y gamma (ϒ) que están pegados al componente α y también al interior de la membrana celular adyacente a la proteína receptora. Al activarse por un impulso nervioso, la porción a de la proteina G se separa de las porciones β y ϒ y así queda libre para desplazarse por el citoplasma de la célula. Dentro del citoplasma, el componente α desprendido ejecuta una función o más entre múltiples posibles, según las características específicas de cada tipo de neurona, Receptores excitadores o inhibidores en la membrana postsináptica Algunos receptores postsinápticos, cuando se activan, provocan la excitación de la neurona postsináptica, y otros su inhibición. La importancia de poseer tanto el tipo inhibidor de receptor como el excitador radica en que aporta una dimensión añadida a la función nerviosa, dado que permite tanto limitar su acción como excitarla. Entre los distintos mecanismos moleculares y de membrana empleados por los diversos receptores para provocar la excitación o la inhibición figuran los siguientes. Excitación 1 . Apertura de los canales de sodio para dejar pasar grandes cantidades de cargas eléctricas positivas hacia el interior de la célula postsináptica. Esto eleva el potencial de membrana intracelular en sentido positivo hasta el nivel umbral para la excitación. Es el medio que se emplea más a menudo con diferencia para ocasionar la excitación. 2. Depresión de la conducción mediante los canales de cloruro, de potasio o ambos. Esto reduce la difusión de los iones cloruro con carga negativa hacia el interior de la neurona postsináptica o de los iones potasio con carga positiva hacia el exterior. En cualquier caso, el efecto consiste en volver más positivo de lo norm al el potencial de m em brana interno, que es excitador. 3. Diversos cambios en el metabolismo interno de la neurona postsináptica para excitar la actividad celular o, en algunas ocasiones, incrementar el número de receptores excitadores de la membrana o disminuir el de los inhibidores. Inhibición 1. Apertura de los canales del ion cloruro en la membrana neuronal postsináptica. Esto permite la difusión rápida de iones cloruro dotados de carga negativa desde el exterior de la neurona postsináptica hacia su interior, lo que traslada estas cargas al interior y aumenta la negatividad en esta zona, efecto que tiene un carácter inhibidor. 2. Aum ento de la conductancia para los iones potasio fuera de la neurona. Esto perm ite la difusión de_iones_positivos Jiada_eLexterior^lo que causa una mayor negalmdad-derr=- tro de lajieurona; esto representa una acción inhibidora. 3. Activación de las enzimas receptoras que inhiben las funciones metabólicas celulares encargadas de aum entar el número de receptores sinápticos inhibidores o de disminuir el de los excitadores.