Disolución Acuosa
Disolución Acuosa
Disolución Acuosa
Los tipos de disolución acuosa se clasifican de acuerdo al tamaño del soluto que se va a
combinar con el agua. Un proceso que se da durante la disolución es la dispersión, que se
define como la interposición mecánica de las partículas.
Las sales, como ya lo mencionamos antes, son un compuesto iónico que es de fácil disolución
con el agua. Esta disolución, debido a la carga dieléctrica constante y elevada que contienen
las sales, transforman a la solución en una solución conductora. Esto se genera cuando la sal
iónica entra en contacto con las moléculas de agua, que rodean a los iones más superficiales.
Cuando se genera esta disolución, la solución puede ser incolora o tener color, pero va a ser
siempre transparente.
Por último, algo que debemos tener en cuenta es la solubilidad de un componente, es decir la
capacidad de disolución e interacción que tiene. Cuando no se logra una correcta disolución,
que puede pasar cuando agregamos mayor cantidad de soluto que de disolvente, hablamos
de una disolución saturada, ya que no se logra la interacción esperada entre los dos
componentes.
Concepto de solubilidad
La solubilidad es capacidad que posee una sustancia para poder disolverse en otra. Dicha
capacidad puede ser expresada en moles por litro, gramos por litro o también en porcentaje
del soluto.
Generalmente, para hacer que el soluto se disuelva se suele calentar la muestra, de este
modo, la sustancia disuelta se conoce como soluto y la sustancia donde se disuelve el soluto
se conoce como disolvente.
Para todas las sustancias no valen los mismos disolventes, pues por ejemplo, en el caso del
agua usada como disolvente, es útil para el alcohol o la sal, los cuales se disuelven en ella
fácilmente, en cambio, no se disuelven en ella el aceite, o la gasolina.
Los caracteres, polar o apolar, son de gran importancia en la solubilidad, pues gracias a estos,
las sustancias variarán sus solubilidades.
Los compuestos que poseen menor solubilidad, son los que tienen menor reactividad, como
por ejemplo, las parafinas, compuestos aromáticos, o compuestos derivados de los halógenos.
La solubilidad de una sustancia es dependiente de la naturaleza, tanto del soluto como del
disolvente, así como también de la temperatura y presión a la que esté sometido el sistema.
La interacción de las moléculas del disolvente con las del soluto, para conseguir formar
agregados se conocen como solvatación, pero si el disolvente es agua, a este proceso se
conocerá como hidratación.
La solubilidad se ve afectada por diferentes factores, y ésta viene determinada por el equilibrio
de las fuerzas internas que existen entre los disolvente y los solutos. La temperatura o la
presión, son factores, que al romper el equilibrio, afectan a la solubilidad.
La solubilidad de los compuestos iónicos es algo compleja, pues en ella interviene más
factores. En la práctica es bueno saber algunas reglas para determinar la solubilidad o
también, la insolubilidad de las sustancias iónicas en la disolución acuosa.
Las reglas, obtenidas experimentalmente, hacen que las sustancias se puedan clasificar en:
Solubles, ligeramente solubles, o insolubles.
Solubles: Son las sustancias con una solubilidad superior a 0.02 moles de soluto por litro
de disolución
Ligeramente insolubles: son las sustancias que tienen una solubilidad aproximada de
0.02 moles por litro.
Insolubles: Son las sustancias que no llegan a tener una solubilidad de 0.02 moles por
litros, pero dado que esta solubilidad no es del todo nula, se suele conocer con el nombre
de poco solubles
.
Soluto Solvente Ejemplo
gas gas aire
liquido liquido Solución alcohólica (alcohol+agua)
solido solido Bronce (cobre+ estaño)
gas liquido Gaseosa (dióxido de carbono+agua)
gas solido (dióxido de carbono+carbon)
liquido gas Niebla (agua+aire)
liquido solido Amalgama (Mercurio+oro
Definición de pH
¿Qué es un ácido?
Un ácido es una sustancia que es capaz de liberar iones de hidrógeno en una solución.
Además, también se considera como ácido un compuesto molecular que puede recibir un
par de electrones.
La palabra ácido proviene del latín acidus, que significa ‘agrio’ o ‘afilado’, y se refiere al
sabor desagradable de ciertas sustancias (por ejemplo, el vinagre).
Sin embargo, es importante señalar que existen diversas teorías utilizadas para definir lo
que es un ácido.
Ácidos fuertes y débiles
Los ácidos se pueden considerar fuertes o débiles según como se disocien en un medio
acuoso, es decir, según la cantidad de iones de hidrógeno que liberan en una solución.
Un ácido es fuerte cuando se ioniza fácilmente, es decir, la gran mayoría de sus iones de
hidrógeno o protones son cedidos en solución. Estos ácidos son altamente corrosivos y
buenos conductores eléctricos.
Entre los ácidos fuertes están el ácido sulfúrico H2SO4, el ácido bromhídrico (HBr) y el
ácido clorhídrico (HCl).
En contraposición, los ácidos débiles son aquellos que no liberan una gran cantidad de
iones de hidrógeno y son menos corrosivos que los ácidos fuertes. Ejemplos de ácidos
débiles son el ácido carbónico (H2CO3) y el ácido acetilsalicílico (C9H8O4).
Propiedades de los ácidos
Son altamente solubles en agua.
Reaccionan con algunos metales.
Funcionan como conductores de corriente eléctrica.
Poseen sabor agrio (limón, por ejemplo).
Cambian el color del papel tornasol del azul al rojo.
Pueden destruir tejidos orgánicos.
Reaccionan con bases, produciendo agua y sal.
Las reacciones ácido-base son exotérmicas (liberan calor).
Ejemplos de ácidos
Ácido ascórbico (vitamina C).
Ácido cítrico, presente algunas frutas.
Ácido acético (vinagre y vino).
Ácido láctico, producido durante el ejercicio anaeróbico.
Ácido acetilsalicílico (aspirina).
Ácido clorhídrico (jugo gástrico).
Ácido sulfúrico.
¿Qué es una base?
Una base es una sustancia capaz de disociar iones de hidróxido en una solución,
contando con un pH superior a 7. También se considera como base una sustancia capaz
de donar un par de electrones, e incluye todas las soluciones alcalinas.
La palabra base proviene del griego basis y significa ‘ir‘ o ‘caminar’, mientras que alcalina
proviene latín alkali, que a su vez proviene del árabe Al-Qali, y significa ‘cenizas’,
particularmente aquellas provenientes de la madera quemada.
Así como con los ácidos, las bases han sido definidas de diferentes formas. Ambos
compuestos mantienen una estrecha relación debido a sus propiedades.
Bases fuertes y débiles
Las bases fuertes se ionizan completamente, cediendo sus iones de hidróxido a la
solución. Algunas bases fuertes son el hidróxido de litio (LiOH), el hidróxido de potasio
(KOH) y el hidróxido de sodio (NaOH).
En cuanto a las bases débiles, estas son aquellas que se disocian parcialmente. Ejemplos
de bases débiles son el amoníaco (NH3) y el bicarbonato de sodio (NaHCO3).
Propiedades de las bases
No reaccionan con los metales.
En disolución, conducen corriente eléctrica.
Poseen sabor amargo (jabonoso, como el cloro/lejía).
Cambian el color del papel tornasol del rojo al azul.
En disolución, son deslizantes al tacto.
Reaccionan con los ácidos, produciendo agua y sal.
Las reacciones ácido-base son exotérmicas (liberan calor).
Su pH es superior a 7.
Ejemplos de bases
Hidróxido de magnesio (leche de magnesia).
Hipoclorito de sodio (lejía, cloro).
Bicarbonato de sodio (polvo de hornear).
Tetraborato de sodio (bórax).
Amoníaco.
Hidróxido de sodio (soda cáustica).