Triangulo Del Fuego
Triangulo Del Fuego
Triangulo Del Fuego
Los Incendios
El hombre ha ido logrando, a través de la historia, un creciente dominio sobre las fuerzas de la
naturaleza. Sin embargo, éstas pueden escapar a su control, con devastadoras consecuencias.
Los incendios son uno de estos riesgos, que se acrecientan en nuestros días por el uso intensivo
de variadas formas de energía y porque la concentración en ciudades aumenta el riesgo de que el
fuego se propague.
El triángulo de fuego
Estas tres condiciones, en conjunto, forman lo que se conoce como el Triángulo del fuego:
oxígeno, combustible y calor, en proporciones adecuadas. Si falta uno de estos elementos o no
está en la proporción conveniente, no tendremos fuego.
Por otra parte, para que se inicie la combustión, es necesario que los materiales se encuentren en
forma de gases o vapores. La gasolina, que desprende vapores a temperatura ambiente, se
inflama con mucha facilidad, pero los materiales sólidos deben primero calentarse para que
desprendan vapores que puedan inflamarse. Sin embargo, esto no quiere decir que se vayan a
inflamar por sí solos, sino requieren una mayor temperatura para que se inflamen.
En consecuencia, podemos diferenciar, para cada material:
Una temperatura a la cual el material se gasifica (temperatura de gasificación).
Una temperatura a la cual el material ya gasificado se enciende (temperatura de ignición).
Cuando se ha logrado encender un fuego, con frecuencia puede mantenerse por si solo, sin
apagarse, hasta que sólo quedan cenizas.
Para explicar este aspecto del fuego, la ciencia actual agrega un cuarto elemento a los tres que ya
hemos visto: la reacción en cadena. Cuando el fuego es suficientemente intenso, aparecen llamas
y se libera mucho calor. Esto facilita que el oxígeno y los combustibles se combinen, con lo cual
hay nuevas llamas y más calor.
Esta reacción en cadena se repite mientras quede oxígeno y combustible, a menos que algo
interrumpa este circuito.
Es frecuente que en los incendios el origen sea un foco relativamente pequeño, que se transmitió
a otros objetos y lugares hasta terminar en un gran siniestro. Por eso, es importante saber en qué
forma se transmite el calor.
El calor se transmite de un objeto a otro en tres formas:
Por conducción
Se produce cuando un objeto está en contacto directo con otro. El calor del objeto más caliente
pasa hacia el más frío.
Por radiación
El calor de una llama se siente a cierta distancia del fuego mismo, debido que se transmite por
medio de ondas calóricas invisibles que viajan a través del aire. Por lo tanto, no es necesario que
un objeto toque el fuego para que se queme, porque el calor puede "saltar" de un lugar a otro a
través del aire.
Por convección
Cuando las ondas calóricas atraviesan un fluido (por ejemplo, aire, agua, aceite, etc.), parte de su
calor calienta ese fluido, el que entonces tiende a moverse hacia arriba. Esto significa que el calor
originado en un punto se propagará hacia otro lugar. A esto se denomina transmisión por
convección. Por ejemplo, si en un edificio de varios pisos se inicia un incendio en un piso bajo, el
fuego calentará el aire, el que subirá hacia los pisos superiores, arrastrando gases y humos y
extendiendo el incendio.
MÉTODOS DE EXTINCIÓN
Los métodos de extinción se basan en la eliminación de uno o más de los elementos del triángulo
del fuego y de la reacción en cadena.
Por enfriamiento
Este método actúa contra el calor, tratando de bajar la temperatura a un nivel en que los
materiales combustibles ya no puedan desprender gases y vapores inflamables. Uno de los
mejores elementos para lograr esto es el agua.
Por sofocación
En este caso, se trata de eliminar el oxígeno, con lo cual el fuego ya no puede mantenerse. El uso
de mantas para cubrir el fuego es una aplicación de este sistema. Las espumas especiales que
usan los Bomberos en fuegos de hidrocarburos (como petróleo o gasolina), también actúan de
este modo.
En este caso, tratamos de evitar que el combustible se encienda, alejándolo del lugar, impidiendo
que llegue hasta él o poniendo barreras para que el fuego no lo alcance. El fuego no puede
continuar, porque no tiene combustible que quemar.
Las paredes "cortafuegos", el cierre de las llaves de paso de combustibles, o el corte de la
vegetación antes de que llegue el fuego en un incendio forestal son formas de aplicar este
método.