NOVENA
NOVENA
NOVENA
San Roque
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del primer día (viernes)
¡Espíritu Santo! ¡Señor de Luz! ¡Danos, desde tu
clara altura celestial, tu puro radiante
esplendor!
El Espíritu Santo
Sólo una cosa es importante: la salvación
eterna. Por lo tanto, sólo una cosa hay que
temer: el pecado. El pecado es el resultado de
la ignorancia, debilidad e indiferencia. El Espíritu
Santo es el Espíritu de Luz, de Fuerza y de
Amor. Con sus siete dones ilumina la mente,
fortalece la voluntad, e inflama el corazón con el
amor de Dios. Para asegurarnos la salvación
debemos invocar al Divino Espíritu diariamente,
porque “el Espíritu viene en ayuda de nuestra
flaqueza. Pues nosotros no sabemos cómo pedir
para orar como conviene; mas el Espíritu mismo
intercede por nosotros” (Rom 8,26).
Oración
Omnipotente y eterno Dios, que has
condescendido para regenerarnos con el agua y
el Espíritu Santo, y nos has dado el perdón de
todos los pecados, permite enviar del cielo
sobre nosotros los siete dones de tu Espíritu, el
Espíritu de Sabiduría y de Entendimiento, el
Espíritu de Consejo y de Fortaleza, el Espíritu de
Conocimiento y de Piedad, y llénanos con el
Espíritu del Santo Temor. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu Don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del segundo día (sábado)
¡Ven, Padre de los pobres. Ven, tesoros que
sostienes. Ven, Luz de todo lo que vive!
El don del Temor
El don del Santo Temor de Dios nos llena con un
soberano respeto por Dios, y nos hace que a
nada temamos más que a ofenderlo por el
pecado. Es un temor que se eleva, no desde el
pensamiento del infierno, sino del sentimiento
de reverencia y filial sumisión a nuestro Padre
Celestial. Es el temor principio de sabiduría, que
nos aparta de los placeres mundanos que
podrían de algún modo separarnos de Dios. “Los
que temen al Señor tienen corazón dispuesto, y
en su presencia se humillan” (Ecl 2,17).
Oración
¡Ven, Oh bendito Espíritu de Santo Temor,
penetra en lo más íntimo de mi corazón, que te
tenga, mi Señor y Dios, ante mi rostro para
siempre, ayúdame a huir de todas las cosas que
te puedan ofender y hazme merecedor ante los
ojos puros de tu Divina Majestad en el Cielo,
donde Tú vives y reinas en unidad de la siempre
Bendita Trinidad, Dios en el mundo que no tiene
fin. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu Don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del tercer día (domingo)
Tú, de todos los consoladores el mejor,
visitando el corazón turbado, da la gracia de la
placentera paz.
El don de Piedad
El don de Piedad suscita en nuestros corazones
una filial afección por Dios como nuestro
amorosísimo Padre. Nos inspira, por amor a Él,
a amar y respetar a las personas y cosas a Él
consagradas, así como aquellos que están
envestidos con su autoridad, su Santísima
Madre y los Santos, la Iglesia y su cabeza
visible, nuestros padres y superiores, nuestro
país y sus gobernantes. Quien está lleno del don
de Piedad no encuentra la práctica de la religión
como deber pesado sino como deleitante
servicio. Donde hay amor no hay trabajo.
Oración
Ven, Oh Bendito Espíritu de Piedad, toma
posesión de mi corazón. Enciende dentro mío tal
amor por Dios que encuentre satisfacción sólo
en su servicio, y por amor a Él me someta
amorosamente a toda legítima autoridad. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del cuarto día (lunes)
Tú, en la fatiga dulce alivio, refresco placentero
en el calor, solaz en medio de la miseria.
El don de Fortaleza
Por el don de Fortaleza el alma se fortalece ante
el miedo natural y soporta hasta el final el
desempeño de una obligación. La fortaleza le
imparte a la voluntad un impulso y energía que
la mueve a llevar a cabo, sin dudarlo, las tareas
más arduas, a enfrentar los peligros, a estar por
encima del respeto humano, y a soportar sin
quejarse el lento martirio de la tribulación aún
de toda una vida. “El que persevere hasta el fin,
ese se salvará”(Mt 24,13).
Oración
Ven, Oh Espíritu de Fortaleza, alza mi alma en
tiempo de turbación y adversidad, sostiene mis
esfuerzos de santidad, fortalece mi debilidad,
dame valor contra todos los asaltos de mis
enemigos, que nunca sea yo confundido y me
separe de Ti, Oh mi Dios y mi máximo Bien.
Amén
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del quinto día (martes)
¡Luz inmortal! ¡Divina Luz! ¡Visita estos
corazones tuyos y llena nuestro más íntimo ser!
El don del Conocimiento
El don del Conocimiento permite al alma darle a
las cosas creadas su verdadero valor en su
relación con Dios. El conocimiento
desenmascara la simulación de las creaturas,
revela su vacuidad y hace notar sus verdaderos
propósitos como instrumentos al servicio de
Dios. Nos muestra el cuidado amoroso de Dios
aún en la adversidad, y nos lleva a glorificarlo
en cada circunstancia de la vida. Guiados por su
luz damos prioridad a las cosas que deben
tenerla y apreciamos la amistad de Dios por
encima de todo. “El conocimiento es fuente de
vida para aquel que lo posee” (Prov 16,22).
Oración
Ven, Oh Bendito Espíritu de Conocimiento, y
concédeme que pueda percibir la voluntad del
Padre; muéstrame la nulidad de las cosas de la
tierra, que tenga idea de su vanidad y las use
sólo para tu gloria y mi propia salvación,
siempre por encima de ellas mirándote a Ti y
tus premios eternos. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del sexto día (miercoles)
Si tu apartas tu gracia, nada puro permanecerá
en el hombre, todo lo que es bueno se volverá
enfermo.
El don del Entendimiento
El Entendimiento, como don del Santo Espíritu,
nos ayuda a aferrar el significado de las
verdades de nuestra santa religión. Por la fe las
conocemos, pero por el entendimiento
aprendemos a apreciarlas y a apetecerlas. Nos
permite penetrar el profundo significado de las
verdades reveladas y, a través de ellas, avivar
la novedad de la vida. Nuestra fe deja de ser
estéril e inactiva e inspira un modo de vida que
da elocuente testimonio de la fe que hay en
nosotros. Comenzamos a “caminar dignos de
Dios en todas las cosas complaciendo y
creciendo en el conocimiento de Dios”.
Oración
Ven, Oh Espíritu de Entendimiento, e ilumina
nuestras mentes, que podamos conocer y creer
en todos los misterios de la salvación, y que por
fin podamos merecer ver la eterna luz en la Luz,
y en la luz de la gloria tener una clara visión de
Ti y del Padre y del Hijo. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del séptimo día (jueves)
Sana nuestras heridas, renueva nuestra fuerza.
En nuestra aridez derrama tu rocío. Lava las
manchas de la culpa.
El don de Consejo
El don de Consejo dota al alma de prudencia
sobrenatural, permitiéndole juzgar con prontitud
y correctamente qué debe hacer, especialmente
en circunstancias difíciles. El Consejo aplica los
principios dados por el Conocimiento y el
Entendimiento a los innumerables casos
concretos que confrontamos en el curso de
nuestras diarias obligaciones en tanto padres,
docentes, servidores públicos y ciudadanos
cristianos. El Consejo es sentido común
sobrenatural, un tesoro invalorable en el tema
de la salvación. “Y por encima de todo esto,
suplica al Altísimo para que enderece tu camino
en la verdad” (Ecl 37,15).
Oración
Ven, Oh Espíritu de Consejo, ayúdame y guíame
en todos mis caminos para que siempre haga tu
Santa Voluntad. Inclina mi corazón a aquello
que es bueno, apártame de todo lo que es malo
y dirígeme por el sendero recto de tus
Mandamientos a la meta de la vida eterna que
yo anhelo. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del octavo día (viernes)
Dobla la voluntad y el corazón obstinado, funde
lo que está helado, calienta lo que está frío.
Guía los pasos que se han desviado!
El don de Sabiduría
Abarcando a todos los otros dones, como la
caridad abraza a todas las otras virtudes, la
Sabiduría es el más perfecto de los dones. De la
Sabiduría está escrito: “todo lo bueno vino a mí
con Ella, y riquezas innumerables me llegaron a
través de sus manos”. Es el don de la Sabiduría
el que fortalece nuestra fe, fortifica la
esperanza, perfecciona la caridad y promueve la
práctica de la virtud en el más alto grado. La
Sabiduría ilumina la mente para discernir y
apreciar las cosas de Dios, ante las cuales los
gozos de la tierra pierden su sabor, mientras la
Cruz de Cristo produce una divina dulzura, de
acuerdo a las palabras del Salvador: “Toma tu
cruz y sígueme, porque mi yugo es dulce y mi
carga ligera”.
Oración
Ven, Oh Espíritu de Sabiduría y revela a mi
alma los misterios de las cosas celestiales, su
enorme grandeza, poder y belleza. Enséñame a
amarlas sobre todo y por encima de todos los
gozos pasajeros y las satisfacciones de la tierra.
Ayúdame a conseguirlas y a poseerlas para
siempre. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo. Amén.
Acto de consagración al Espíritu Santo
diario
Recibid ¡oh Espíritu Santo!, la consagración
absoluta de todo mi ser, que os hago en este
día para que os dignéis ser en adelante, en cada
uno de los instantes de mi vida, en cada una de
mis acciones, mi Director, mi Luz, mi Guía, mi
Fuerza, y todo el amor de mi Corazón.
Me abandono sin reservas a vuestras divinas
operaciones, y quiero ser siempre dócil a
vuestras santas inspiraciones.
¡Oh Santo Espíritu! Dignaos formarme con María
y en María, según el modelo de vuestro amado
Jesús.
Gloria al Padre Creador. Gloria al Hijo Redentor.
Gloria al Espíritu Santo Santificador. Amén.
Oración por los 7 dones del Espíritu Santo
Oh, Señor Jesucristo, que antes de ascender al
cielo prometiste enviar al Espíritu Santo para
completar tu obra en las almas de tus Apóstoles
y discípulos, dígnate concederme el mismo
Espíritu Santo para que Él perfeccione en mi
alma la obra de tu gracia y de tu amor.
Concédeme el Espíritu de Sabiduría para que
pueda despreciar las cosas perecederas de este
mundo y aspirar sólo a las cosas que son
eternas, el Espíritu de Entendimiento para
iluminar mi mente con la luz de tu divina
verdad, el Espíritu de Consejo para que pueda
siempre elegir el camino más seguro para
agradar a Dios y ganar el Cielo, el Espíritu de
Fortaleza para que pueda llevar mi cruz contigo
y sobrellevar con coraje todos los obstáculos
que se opongan a mi salvación, el Espíritu de
Conocimiento para que pueda conocer a Dios y
conocerme a mí mismo y crecer en la perfección
de la ciencia de los santos, el Espíritu de Piedad
para que pueda encontrar el servicio a Dios
dulce y amable, y el Espíritu de Temor de Dios
para que pueda ser lleno de reverencia amorosa
hacia Dios y que tema en cualquier modo
disgustarlo. Márcame, amado Señor, con la
señal de tus verdaderos discípulos y anímame
en todas las cosas con tu Espíritu. Amén.
Oración del noveno día (sábado)
Tú, en aquellos que siempre más te confiesan y
te adoran, en tus siete dones, desciende. Dales
alivio en la muerte. Dales vida Contigo en las
alturas. Dale los gozos que no tienen fin. Amén.
Los frutos del Espíritu Santo
Los dones del Espíritu Santo perfeccionan las
virtudes sobrenaturales al permitirnos
practicarlas con mayor docilidad a la divina
inspiración. A medida que crecemos en el
conocimiento y en el amor de Dios, bajo la
dirección del Santo Espíritu, nuestro servicio se
torna más sincero y generoso y la práctica de
las virtudes más perfecta. Tales actos de
virtudes dejan el corazón lleno de alegría y
consolación y son conocidos como frutos del
Espíritu Santo. Estos frutos, a su vez, hacen la
práctica de las virtudes más activa y se vuelven
un poderoso incentivo para esfuerzos aún
mayores en el servicio de Dios.
Oración
Ven, Oh Divino Espíritu, llena mi corazón con
tus frutos celestiales: caridad, gozo, paz,
paciencia, benignidad, bondad, fe,
mansedumbre y templanza. Que nunca esté yo
cansado en el servicio de Dios sino que, por
continua y fiel sumisión a tu inspiración,
merezca estar eternamente unido Contigo, en el
amor del Padre y del Hijo. Amén.
Padrenuestro y Avemaría, una vez. Gloria
Oración por los Siete Dones del Espíritu
Ven, Espíritu Santo, llena los corazones de tus
fieles y enciende en ellos la llama de tu amor.
Oh, Dios, que con la luz del Espíritu Santo
iluminas los corazones de tus fieles, concédenos
que guiados por el mismo Espíritu, disfrutemos
de lo que es recto y nos gocemos con su
consuelo celestial.
1.- Ven, Espíritu Santo, por tu don Sabiduría,
concédenos la gracia de apreciar y estimar los
bienes del cielo y muéstranos los medios para
alcanzarlos. Gloria
2.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de
Entendimiento, ilumina nuestras mentes
respecto a los misterios de la salvación, para
que podamos comprenderlos perfectamente y
abrazarlos con fervor. Gloria
3.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Consejo,
inclina nuestros corazones a actuar con rectitud
y justicia para beneficio de nosotros mismos y
de nuestros semejantes. Gloria
4.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Fortaleza,
fortalécenos con tu gracia contra los enemigos
de nuestra alma, para que podamos obtener la
corona de la victoria. Gloria
5.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Ciencia,
enséñanos a vivir entre las cosas terrenos para
así no perder las eternas. Gloria
6.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Piedad,
inspíranos a vivir sobria, justa, y piadosamente
en esta vida, para alcanzar el cielo en la otra
vida. Gloria.
7.- Ven, Espíritu Santo, por tu don de Temor de
Dios, hiere nuestros cuerpos con tu temor para
así trabajar por la salvación de nuestras almas.
Gloria
Oración
Oh Dios, que has unido las naciones en la
confesión de tu nombre, concédenos que los
que han renacido por el agua del bautismo,
tengan la misma fe en sus corazones y la
misma piedad en sus acciones.
Oh Dios, que enviaste el Espíritu Santo a los
apóstoles, oye las oraciones de tus fieles para
que gocen de la verdadera paz, quienes por tu
gracia, han recibido el don de la verdadera fe.
Te suplicamos, oh Dios, que tu Santo Espíritu
encienda en nuestros corazones esa llama que
Cristo trajo a la tierra y deseó ardientemente
fuera encendida.
Inflama, oh Señor, nuestros corazones con el
fuego del Espíritu Santo, para que te sirvamos
castos de cuerpo y limpios de corazón.
Enriquece, Señor, nuestros corazones
derramando con plenitud tu Santo Espíritu por
cuya sabiduría fuimos creados y por cuya
providencia somos gobernados.
Te suplicamos, oh Dios Todopoderoso y Eterno,
que tu Santo Espíritu nos defienda y habite en
nuestras almas, para que al fin, seamos los
templos de su gloria.
Te pedimos, Señor, que según la promesa de tu
Hijo, el Espíritu Santo nos lleve al conocimiento
pleno de toda la verdad revelada. Por Cristo
Nuestro Señor. Amén.