La Hipocrecia

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LA

HIPOCRECIA
INRODUCCION

Corría aproximadamente el año 49 d.C. y el apóstol Pablo tenía como 15 años


en el evangelio. Él y Bernabé apenas habían terminado su primer viaje
misionero cuando decidió escribirles a los creyentes de las 4 iglesias de los
gálatas, iglesias que ellos iniciaron durante aquel viaje.

En Gálatas 2 Pablo relata algo que el apóstol Pedro hizo mientras visitaba la
iglesia de Antioquía de Siria. Cuando Pedro llegó allá, y no se encontraban
judíos de la iglesia de Jerusalén alrededor de él, Pedro comía con los gentiles.
Pero, cuando algunos judíos enviados por Jacobo de la iglesia de Jerusalén
llegaron, Pedro se alejó y dejó de comer con los gentiles. Los otros judíos que
acompañaban a Pedro hicieron lo mismo, incluso Bernabé fue arrastrado por la
hipocresía de ellos. Ellos habían dicho que aceptaban a los gentiles en la
iglesia y que eran sus hermanos en Cristo. Sin embargo, por temor a los judíos
de Jerusalén, en su presencia no se permitieron comer con ellos.

(Hechos 10:28) dice que era abominable para un judío juntarse o acercarse a
un gentil. Cuando los judíos cristianos actuaron hipócritamente, incluido
Bernabé, Pablo resistió a Pedro cara a cara porque era de condenar.
Leámoslo en (Gálatas 2:11-14)

Hoy en día muchos no quieren acercase a los caminos del Señor, ya que por el
mal testimonio de ciertos “cristianos” la gente resta credibilidad al evangelio.
Es triste ver en nuestras iglesias tanta gente que dentro de ella aparenta
santidad y una buena relación con Dios, pero que en intimidad deja mucho que
desear.

Es hora que nos levantemos como hijos de Dios y pongamos en alto el Nombre
de Nuestro Señor no solo con palabras sino con hechos, las palabras se las
lleva el viento, pero los hechos son los que cuentan.

La Biblia dice que por nuestros frutos nos conocerá, además una fe sin obras
es muerta. Es por ello que en este programa hablaremos de un tema el cual
esperamos que Dios ministre nuestras vidas y nos ayude a hacer mejor las
cosas.

Vamos a iniciar Definiendo la Palabra “Hipocresía”

TRANSICIÓN
Pablo condenó la hipocresía de Pedro porque la hipocresía siempre debe
condenarse. En lo personal, creo que Pedro aprendió muy bien esta lección
aquel día, porque en su primera epístola, capítulo 2, versículos 1 y 2, Pedro
escribió:
“Desechando. . . hipocresía, desead. . . la leche espiritual no adulterada. . .
para que por ella crezcáis.”

Si uno desea crecer y madurar en su vida espiritual, tiene que desechar la


hipocresía. Si uno desea ser semejante a Jesucristo, tiene que desechar la
hipocresía porque Jesús no era hipócrita.

 Vemos en (Mateo 22:15 - 22) que la gente se admiraba del Señor


Jesucristo porque él no era hipócrita. Él nos ha dado un ejemplo muy
bueno que seguir. Si uno quiere crecer y madurar en su vida
espiritual, tiene que desechar la hipocresía.

 Además de darnos buen ejemplo, Jesucristo siempre condenó la


hipocresía.

 Mateo 15:1-11
Los fariseos y los escribas se quejaron de una cosa
insignificante, pero hipócritamente enseñaban a otros a no
proveer para las necesidades de sus padres, lo que sí es
asunto de importancia.

 Mateo 16:1- 4
Los fariseos y los saduceos le pidieron a Jesús que hiciera un
milagro para tentarle. No querían ver el milagro porque
quisieran creer en él y en su enseñanza, sino querían hacerle
impacientar, enojar o hablar mal. El Señor Jesucristo
reconoció su intención y no hizo ningún milagro para ellos.

 En Mateo 23:1-7, Jesús explica por qué los fariseos eran


hipócritas.
Ellos decían creer algo, pero no lo practicaban.
(Mateo 23:3) Ellos se quejaban de que los
discípulos de Jesús quebrantaran la tradición de los
ancianos de lavarse las manos antes de comer,
pero ellos mismos permitían a otros quebrar la
tradición de los ancianos de suplir la necesidad
económica de los padres.
Insistían en que otros hicieran cosas que ellos ni aun
pensarían hacer (23; 3) Esto parece semejante a los
pastores que exigen que los miembros den 20% de su
sueldo diezmo normal y 10% para el fondo de
construcción.

Actuaban públicamente como santos y justos, pero en


realidad no lo eran, fíjense en lo que Jesús dice acerca
de ellos (Mt. 23; 14, 23, 25,28) Esto es semejante a los
pastores que predican acerca de no ver la televisión
tanto para poder tener el tiempo para leer y meditar en la
Biblia y ellos mismos no leen la Biblia cada día.

Si uno desea crecer y madurar en su vida espiritual, desecha la hipocresía y


se asegura de que su motivación sea pura, santa y recta.
Jesús enseño sobre lo mismo en (Mt. 6; 1 -18).

 En lo que uno hace públicamente. (6; 1)


 En sus ofrendas. (6; 2 – 4)
 En sus oraciones. (6; 5 – 8)
 En sus ayunos. (6; 16 – 18)
¿QUE ES HIPOCRESÍA?

La hipocresía es el acto de fingir que se tienen cualidades, ideas y sentimientos


que en realidad no se tienen. La palabra proviene del latín tardío hypocrisis y
del griego hypokrisis, que significan acción de desempeñar un papel.
El que pretende o finge ser lo que no es. Es una transcripción del vocablo
griego hypokriteis, que significaba actor o protagonista en el teatro griego.
Breve Historia de la Palabra “Hipócrita”

La palabra hipócrita, en el idioma original, venía del mundo del teatro.


Significaba “hablar cubierto con una máscara”. Los actores que representaban
los papeles, se ponían una máscara a fin de que el público supiera, viendo la
máscara, qué carácter se estaban representando. Un mismo actor
representaba varios papeles en una misma función, y disponía de una variedad
de máscaras diferentes. Cuando hablaba la parte de uno, sostenía la máscara
correspondiente sobre su cara; cuando hablaba la parte de otro, cambiaba de
máscara, tomando la apropiada y hablando con su cara cubierta con ella. No
podía verse el actor mismo, sino tan
sólo a la máscara. La audiencia no
conocía al hombre; conocían tan solo
el papel que hacía.

Los actores solían ponerse diferentes


máscaras conforme al papel que
desempeñaban. De ahí que hipócrita
llegara a designar a la persona que oculta la realidad tras una «máscara» de
apariencias.
Los hipócritas pretenden que otros piensen que son buenos cristianos, cuando
realmente, sus corazones están llenos de pecados como amargura, orgullo,
mentira, rivalidad, adulterio, etc.

Aparentar lo que no se es produce un gasto inútil de energía y, como se basa


en la falsedad, es contrario al desarrollo del carácter y a la propia dignidad
personal, así como a la reverencia que debemos al prójimo.
El trabajo que el hipócrita hace para esconder lo que el es, le es mucho más
difícil que el tratar de hacer las cosas bien.
Un solo cristiano falso puede hacer más por retardar el progreso de la Iglesia
que lo que pueden hacer una docena de santos para extender el Reino. El
hipócrita llega a ser culpable ante el prójimo porque destruye la credibilidad del
evangelio de otros y aún hace que rechacen a Cristo.

La más grande artimaña del maligno consiste en hacer que los cristianos lleven
una vida de dos caras: que alaben públicamente a Dios pero a la vez se metan
en la crítica, la murmuración, el libertinaje y cosas similares. Satanás no se
preocupa porque usted profese el cristianismo, mientras no lo practique.

Si usted sólo aparenta tener fe sin acompañarla de obras, se parece a la


higuera que se secó y murió porque no dio frutos. La fe genuina incluye el dar
frutos para el reino de Dios. Cuando el hombre aparenta lo que no es, se ha
engañado asimismo y ha mentido a los demás. Por el amor de Dios, no vista la
ropa de la hipocresía. La vida futura es lo eterno, este mundo, sólo un instante.
Al cielo no entran los hipócritas. No venda el reino de la eternidad por un
segundo.

El que pretende o finge ser lo que no es. Es una transcripción del vocablo
griego hypokriteis, que significaba actor o protagonista en el teatro griego.

uno que asume la personalidad de otro, pretender, fingir, engañar, llevar una
máscara.

Lamentablemente hay muchas personas y hermanos que actúan, Ósea que se


ponen una máscara en su rostro.

Se presentan como amigos, pero realmente lo actúan.


1. Muchos cristianos, solo fingen ser cristianos.
La hipocresía es un pecado que a echo mucho daño a la obra del Señor, y lo
seguirá haciendo si no dejamos de actuar, Ósea sino dejamos de ser hipócritas
en nuestras vidas.

Debemos de quitarnos la máscara y demostrar lo que realmente somos para


poder agradar a Dios.
BREVE HISTORIA DE LA PALABRA “HIPÓCRITA”

La palabra hipócrita, en el idioma original, venía del mundo del teatro.


Significaba "hablar cubierto con una máscara". Los actores que representaban
los papeles, se ponían una máscara a fin de
que el público supiera, viendo la máscara,
qué carácter se estaban representando. Un
mismo actor representaba varios papeles en
una misma función, y disponía de una
variedad de máscaras diferentes.

Cuando hablaba la parte de uno, sostenía la


máscara correspondiente sobre su cara;
cuando hablaba la parte de otro, cambiaba
de máscara, tomando la apropiada y
hablando con su cara cubierta con ella. No
podía verse el actor mismo, sino tan sólo a
la máscara. La audiencia no conocía al
hombre; conocían tan solo el papel que hacía.

Los actores solían ponerse diferentes máscaras conforme al papel que


desempeñaban. De ahí que hipócrita llegara a designar a la persona que oculta
la realidad tras una «máscara» de apariencias. Los hipócritas pretenden que
otros piensen que son buenos cristianos, cuando realmente, sus corazones
están llenos de pecados como amargura, orgullo, mentira, rivalidad, adulterio,
etc.

Aparentar lo que no se es produce un gasto inútil de energía y, como se basa


en la falsedad, es contrario al desarrollo del carácter y a la propia dignidad
personal, así como a la reverencia que debemos al prójimo.

El trabajo que el hipócrita hace para esconder lo que él es, le es mucho más
difícil que el tratar de hacer las cosas bien.

Un solo cristiano falso puede hacer más por retardar el progreso de la Iglesia
que lo que pueden hacer una docena de santos para extender el Reino. El
hipócrita llega a ser culpable ante el prójimo porque destruye la credibilidad del
evangelio de otros y aún hace que rechacen a Cristo.

La más grande artimaña del maligno consiste en hacer que los cristianos lleven
una vida de dos caras: que alaben públicamente a Dios, pero a la vez se metan
en la crítica, la murmuración, el libertinaje y cosas similares. Satanás no se
preocupa porque usted profese el cristianismo… mientras no lo practique.

DEBEMOS DE ABORRECER LA HIPOCRESÍA.

 Nosotros debemos de odiar, Aborrecer la hipocresía. (Salmos.119:113).


No debemos de sentarnos, Andar con los hipócritas. (Salmos.26:4). Ya que
él hipócrita engaña como:
 Jacob que engaño a su padre. (Gen.27:19-24).
 David fingió ser loco. (1Samuel.21:13-15).

 La hipocresía arrastra a muchos al pecado. Como lo de Pedro. Gál.2:13-


14. Arrastro a Bernabé.

 Él hipócrita con su boca daña a su prójimo. (Prov.11:9). Por qué solo habla
mentiras, y solo habla por detrás de la persona, nunca habla de frente.

 No seamos como los hipócritas que describió Jesús en Mateo. Ellos hacían
muchas cosas para ser vistos por los hombres.

 Por eso cuando ayudemos que no lo sepa nadie. (Mat.6:2 - 3).


 Al igual cuando oremos. (Mat.6:5 – 6). Oremos para pedir a
Dios, no para ser visto por los hombres.

 También cuando ayunamos. (Mat. 6:16 -18). No andemos


enseñando que hemos ayunado.

 Al juzgar a otra persona fijémonos sino estamos cayendo en el


mismo pecado que él. (Mat. 7:5). Por que al estar en la misma
condición que él, y queremos juzgarle caemos en la hipocresía.

Muchos profesan honrar y alabar a Dios. (Mat.15:7). Pero la verdad es que su


corazón está lejos de Dios. Porque no se someten a la voluntad de Dios.
Muchos fingen su fe. (1Tim.1:5). Profesan ser cristiano y obedecer a Dios,
pero con sus hechos lo niegan. (Tito.1:16). Muchos por fuera parecen buenas
personas justa, pero que realmente no lo son. (Mat. 23:27- 28) Para poder
agradar a Dios debemos de desechar el pecado de la hipocresía. (1Pe. 2:1)
Porque si no hay un lugar preparado para los hipócritas donde será el lloro y
el crujir de dientes. (Lucas.12:51)

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