Amoris Laetitia - Resumen
Amoris Laetitia - Resumen
Amoris Laetitia - Resumen
(Síntesis)
LA ALEGRIA DEL AMOR
Sobre el amor en la familia Papa Francisco.
1. LA ALEGRÍA DEL AMOR: A pesar de las numerosas señales de crisis del matrimonio, <<el deseo
de familia permanece vivo, especialmente entre los jóvenes, y eso motiva a la iglesia>>, <<el
anuncio cristiano relativo a la familia es verdaderamente una buena noticia>>.
2. El camino sinodal permitió, ampliar nuestra mirada y reavivar nuestra conciencia sobre la
importancia del matrimonio y la familia.
3. En la iglesia es necesaria una unidad de doctrina. Además, en cada país o región se pueden
buscar soluciones a los desafíos locales.
4. Considere adecuado redactar una Exhortación Apostólica postsinodal que recoja los aportes de
los dos recientes Sínodos sobre la familia, que puedan orientar la reflexión, el diálogo o la
praxis pastoral.
5. Adquiere un sentido especial en el contexto de este Año Jubilar de la Misericordia, en primer
lugar, como una propuesta para las familias cristianas, que las estimule a valorar los dones
del matrimonio y de la familia, En segundo lugar, para que sean signos de misericordia y
cercanía allí donde la vida familiar no se realiza perfectamente
6. Recordare algunas cuestiones elementales de la enseñanza de la Iglesia sobre el matrimonio y
la familia, para dar lugar así a los dos capítulos centrales, dedicados al amor.
7. Esta Exhortación aborda, muchos y variados temas. Es probable que los matrimonios se
identifiquen más con los capítulos cuarto y quinto, que los agentes de pastoral tengan especial
interés en el capítulo sexto, y que todos se vean muy interpelados por el capítulo octavo.
CAPÍTULO PRIMERO
A LA LUZ DE LA PALABRA
8. Las dos casas que Jesús describe, construidas sobre roca o sobre arena, son expresión
simbólica de tantas situaciones familiares.
TÚ Y TU ESPOSA
¿Qué significa el matrimonio?
9. Cristo mismo evoca con intensidad: <<¿No habéis leído que el creador en el principio los creó
hombre y mujer?>> <<Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se reunirá a su
mujer y serán los dos una sola carne>>
10. Se preserva la trascendencia de Dios, puesto que es al mismo tiempo el Creador, la fecundidad
de la pareja humana es <<imagen>> viva y eficaz, signo visible del acto creador
11. Nos iluminan las palabras de san Juan Pablo II: << Nuestro Dios, en su ministerio más íntimo, no
es una soledad, sino una familia, puesto que lleva en sí mismo paternidad, filiación y esencia de
la familia que es el amor. Este amor, en la familia divina, es el Espíritu Santo>>.
12. Jesús nos remite Génesis, el capítulo 2, El primero es la inquietud del varón que busca <<ayuda
recíproca>>
13. El verbo <<unirse>> en el original hebreo indica una estrecha sintonía, una adhesión física e
interior, hasta el punto que se utiliza para describir la unión con Dios: <<mi alma está unida a
ti>> (Sal 63,9)
CAPÍTULO SEGUNDO
REALIDAD Y DESAFÍOS DE LAS FAMILIAS
31. El bien de la familia es decisivo para el futuro del mundo y de la iglesia. <<Las exigencias y
llamadas de Espíritu Santo resuenan también en los acontecimientos mismos de la historia>>
ALGUNOS DESAFIOS
DE LOS PADRES DE FAMILIA:
50. Además de las ya indicadas, muchos se han referido a la función educativa, que se ve
dificultada, porque los padres llegan a su casa cansados y sin ganas de conversar. Otros
indicaron que las familias suelen estar enfermas por una enorme ansiedad.
51. Notamos las graves consecuencias de esta ruptura en familias destrozadas, hijos desarraigados.
Ancianos abandonados, niños huérfanos de padres vivos, adolescentes y jóvenes desorientados
y sin reglas.
IDEOLOGÍAS ADVERSAS:
52. Nadie puede pensar que debilitar a la familia como sociedad natural fundada en el matrimonio
es algo que favorece a la sociedad.
53. En numerosos contextos, se está ampliamente difundiendo la praxis de la convivencia que
procede al matrimonio, así como convivencias no orientadas a asumir la forma de un vínculo
institucional. La fuerza de la familia <<reside esencialmente en su capacidad de amar y
enseñar a amar>>
54. La idéntica dignidad entre el varón y la mujer nos mueve a alegrarnos de que se superen viejas
formas de discriminación, y de que en el seno de las familias se desarrolle un ejercicio de
reciprocidad
55. La ausencia del padre marca severamente la vida familiar, la educación de los hijos y su
integración en la sociedad. Su ausencia puede ser física, efectiva, cognitiva y espiritual.
56. Una ideología, genéricamente llamada gender, <<niega la diferencia y la reciprocidad natural
de hombre y de mujer>>. Esta presenta una sociedad sin diferencias de sexo, y vacía el
fundamento antropológico de la familia. Somos llamados a custodiar nuestra humanidad, y eso
significa ante todo aceptarla y respetarla como ha sido creada.
57. No caigamos en la trampa de desgastarnos en lamentos autodefensivos, en lugar de despertar
una creatividad misionera. <<La iglesia siente la necesidad de decir una palabra de verdad y
esperanza (…) los grandes valores del matrimonio y de la familia cristiana corresponden a la
búsqueda que impregna la existencia humana>>.
CAPÍTULO TERCERO
LA MIRADA PUESTA EN JESÚS: VOCACIÓN DE LA FAMILIA
58. Porque <<nada hay más sólido, más profundo, más seguro, más denso y más sabio que ese
anunció>> y << toda formación cristiana es ante todo la profundización del Kerygma>>.
59. Nuestra enseñanza sobre el matrimonio y la familia no puede dejar de inspirarse y de
transfigurarse a la luz de este anuncio de amor y de ternura, para no convertirse en una mera
defensa de una doctrina fría y sin vida.
60. Este breve capítulo recoge una síntesis de la enseñanza de la iglesia sobre el matrimonio y la
familia.
LA FAMILIA Y LA IGLESIA
¿Por qué llamamos Iglesia doméstica a la familia?
86. En la familia ‘‘que se podría llamar iglesia domestica’’, madura la primera experiencia eclesial
de la comunión entre personas, en la que se refleja, por gracia, el ministerio de la Santa
Trinidad.
87. La Iglesia es familia de familias, constantemente enriquezca por la vida de todas las iglesias
domésticas. Cada familia se convierte, en un bien para la iglesia.
88. En su unión de amor los esposos experimentan la belleza de la paternidad y la maternidad;
comparten proyectos y fatigas, deseos y ficciones; aprenden a cuidarse el uno al otro y a
perdonarse mutuamente.
CAPITULO CUARTO
EL AMOR EN EL MATRIMONIO
89. En efecto, la gracia del sacramento del matrimonio está destinada ante todo << a
perfeccionar el amor de los cónyuges>>. Si no tengo amor, no soy nada
Los invitamos a reflexionar cada una de las características que describe San Pablo para el verdadero
amor:
NUESTRO AMOR COTIDIANO
90. Características del amor verdadero:
<<El amor es paciente,
Es servicial;
El amor no tiene envidia,
No hace alarde,
No es arrogante,
No obra con dureza,
No busca su propio interés,
No se irrita,
No lleva cuentas del mal,
No se alegra de la injusticia,
Sino que goza con la verdad.
Todo lo disculpa,
Todo lo cree,
Todo lo espera, todo lo soporta>> (1 Co 13, 4-7)
PACIENCIA
91. Makrothymei. Se muestra cuando la persona no se deja llevar por los impulsos y evita
agredir.
92. El amor tiene siempre un sentido de profunda compasión que lleva aceptar al otro como
parte de este mundo, también cuando de un modo diferente a lo que ya desearía,
ACTITUD DE SERVICIO
93. Jresteuetai, jrestos. Indica que el amor beneficia y promueve a los demás. Por eso traduce
como <<servicial>>.
94. El amor no es solo un sentimiento, sino que debe entender en el sentido que tiene el verbo
<<amar> en hebreo: es <<hacer el bien>>.
SANANDO LA ENVIDIA
95. Zeloi, significa que en el amor no hay lugar para sentir malestar por el bien de otro.
96. El amor nos lleva a una santidad valoración de cada ser humano, reconociendo a su
derecho a la felicidad.
SIN HACER ALARDE NI AGRANDARSE.
97. Perpereuotai, quien ama, no solo evita hablar demasiado de si mismo, sino que además,
porque esta, centrado en los demás, sabe ubicarse en su lugar sin pretender ser el centro.
98. La actitud de humildad aparece aquí como algo que es parte del amor, porque para poder
comprender, disculpar o servir a los demás de corazón, es indispensable sanar el orgullo y
cultivar la humildad.
AMABILIDAD
99. Asjemonei. El amor no obra con rudeza, no actúa de modo descortés, no es duro en el
trato. Sus modos, sus palabras, sus gestos, son agradables y no ásperos ni rígidos.
100. El amor amable genera vínculos, cultiva lazos, crea nuevas redes de integración,
construye una drama social firme.
DESPRENDIMIENTO.
101. Este himno al amor afirma que el amor <<no busca su propio interés>>, o <<no busca lo
que es de él>>.
102. <<pertenece más a la caridad querer amar que querer ser amado>> y que, de hecho, <<
las madres, que son las que más aman, buscan más amar que ser amadas>>.
PERDON
105. Logizetai to kakon, un perdón que se fundamenta en una actitud positiva, que intenta
comprender la debilidad ajena y trata de buscarle excusas a la otra persona, como Jesús
cuando dijo: <<Padre, perdónalos, porque no saben lo que hace>>.
106. <<la comunión familiar puede ser conservada y perfeccionada solo un gran espíritu de
sacrificio.
107. Hace falta orar con la propia historia, aceptarse a sí mismo, saber convivir con las propias
limitaciones, e incluso perdonarse, para poder tener esa misma actitud con los demás.
108. Si aceptamos que el amor de Dios es incondicional, entonces podremos amar más allá de
todo, perdonar a los demás aun cuando haya sido injustos con nosotros.
DISCULPA TODO
111. Se remarca con fuerza el dinamismo contracultural del amor, capaz de hacerle frente a
cualquier cosa que pueda amenazarlo.
112. Panta stegei. Puede significar << guardar silencio>>. Implica limitar el juicio, contener la
inclinación a lanzar una condena dura e implacable: <<No condenéis y no seréis
condenados>>.
113. El amor convive con la imperfección, la disculpa, y sabe guardar silencio entre los límites
del ser amado.
CONFIA
114. Esa confianza básica reconoce la luz encendida por Dios, o la abrasa que todavía arde
debajo de las cenizas.
115. Esa libertad, que hace posible espacios de autonomía, apertura al mundo y nuevas
experiencias, permite que la relación se enriquezca y no se convierta en un círculo
cerrado sin horizontes.
ESPERA
116. Panta elpizei. Implica aceptar que algunas cosas no sucedan como desea, sino que quizás
Dios. Saque algún bien de los males que ella no logre superar en esta tierra.
117. Aquí se hace presente la esperanza en todo sentido, porque incluye la certeza de una
vida más allá de la muerte.
SOPORTA TODO
118. Panta hypomenei. No consiste solo en tolerar algunas cosas molestas, sino en algo más
amplio: una resistencia dinámica y constante, capaz de superar cualquier desafío.
119. El ideal cristiano, y de modo particular en la familia, es amor a pesar de todo.
DIÁLOGO
136. El dialogo es una forma privilegiada e indispensable de vivir, expresar y madurar el amor
en la vida matrimonial y familiar.
137. Muchas veces uno de los cónyuges no necesita una solución a sus problemas, sino ser
escuchado.
138. Se trata de valorar su persona, de reconocer que tiene derecho a existir, a pesar de
manera autónoma y a ser feliz.
139. En ese estilo enriquecedor de comunión fraterna, los diferentes se encuentran, se
respetan y se valoran, pero manteniendo diversos matices y acentos que enriquecen el
bien común.
140. Cuando se puede amar a alguien o cuando nos sentimos amados por el, logramos
entender mejor lo que quiere expresar y hacernos entender.
141. Finalmente reconozcamos que para el dialogo valga la pena hay que tener algo que decir,
y eso requiere una riqueza interior que se alimenta en la lectura, la reflexión personal, la
oración y la apertura a la sociedad.
AMOR APASIONADO
142. Por algo será que un amor sin placer ni pasión no es suficiente para simbolizar la unión
del corazón humano con Dios: <<todos los místicos han afirmado que el amor
sobrenatural y el amor celeste encuentran los símbolos que buscan en el amor
matrimonio.
VIOLENCIA Y MANIPULACIÓN.
153. En esta época se vuelve muy riesgoso que la sexualidad también sea poseída por el
espíritu venenoso del <<usa y tira>>.
154. Por eso tenemos que reafirmar con claridad que << un acto conyugal impuesto al
cónyuge sin considerar su situación actual y sus legítimos deseos, no es un verdadero
acto de amor; y prescinde por tanto de una exigencia del recto orden moral en las
relaciones entre los esposos>>.
155. Cuando la preciosa pertenencia reciproca se convierte en un dominio, <<cambia
esencialmente la estructura de comunión en la relación interpersonal>>.
156. <<el amor excluye todo género de sumisión, en virtud de la cual la mujer se convertiría
en sierva o esclava del marido.
157. Recordemos que un verdadero amor saber también recibir del otro, es capaz de
aceptarse vulnerable y necesitado, no renuncia a acoger con sincera y feliz gratitud las
expresiones corpóreas del amor en la caricia.
MATRIMONIO Y VIRGINIDAD.
158. <<Muchas personas que viven sin casarse, no solo se dedican a su familia de origen, sino
que a menudo cumplen grandes servicios en su círculo de amigos, en la comunidad
eclesial y en la vida profesional>>.
159. Más que hablar de la superioridad de la virginidad en todo sentido, parece adecuado
mostrar que los distintos estados de vida se complementan, de tal manera que uno
puede ser más perfecto en algún sentido y otro puede serlo desde otro punto de vista.
160. Por lo tanto, << no se trata de disminuir el valor del matrimonio en beneficio de la
conciencia>>, y <<no hay base alguna para supuesta contraposición>>.
161. A su vez el amor el amor de los esposos tiene otros valores simbólicos, reflejo de la
Trinidad. Es un signo cristológico, en la encarnación en la Cruz y en la Resurrección.
Mientras la virginidad es un signo <<escatológico>> de Cristo resucitado, el matrimonio
es un signo <<histórico>> para los que caminamos en la tierra, un signo de Cristo terreno
que acepto unirse a nosotros y se entregó hasta darnos su sangre.
162. El celibato corre peligro de ser una cómoda soledad, que da libertad para moverse con
autonomía, para cambiar de lugares, de tareas y de opciones, para disponer del propio
dinero, para frecuentar personas diversas según la atracción del momento.