CO, El Enemigo Invisible
CO, El Enemigo Invisible
CO, El Enemigo Invisible
El monóxido de carbono es muy común. Todo lo que se necesita para obtenerlo es quemar cualquier cosa o material que
contenga carbono, tal como madera, telas, carbón, gasolina, etc., sin que haya suficiente cantidad de oxígeno.
El carbono al quemarse forma primero monóxido de carbono y, posteriormente se convierte en bióxido de carbono si hay
suficiente cantidad de oxígeno presente. Pero el monóxido de carbono tiene que encontrarse caliente para mezclarse con el
oxígeno y formar bióxido de carbono. De tal manera que si el monóxido llega a enfriarse antes de entrar en contacto con el
oxígeno, entonces permanece monóxido de carbono.
Por eso es tan peligroso variar el regulador del paso de aire de los quemadores de gas. Si se acuesta uno a dormir teniendo en
la habitación uno de esos quemadores de gas funcionando, sin contar con un buena ventilación, es probable que nunca más se
despierte. Esto causa la muerte de un gran número de personas cada año. Si es necesario emplear calentadores (estufas) para
las habitaciones, es mucho mas seguro emplear calentadores (estufas) electricos.
El monóxido de carbono no es un veneno. Causa la muerte al privar a la persona de oxígeno. Esto es lo mismo que sucede
cuando una persona se ahoga o cuando recibe un choque eléctrico.
El organismo humano es una máquina que requiere oxígeno. En el metabolismo normal, el oxígeno que llega a los pulmones
con el aire respirado se combina con la hemoglobina de la sangre. La oxihemoglobina formada así es llevada por los glóbulos
rojos de la sangre a todos los tejidos del cuerpo donde el oxígeno es cambiado por bióxido de carbono, un producto
desechado. El bióxido de carbono a su turno es transportado lo regresa a los pulmones y expulsado en el aire exhalado.
EL monóxido, desafortunadamente, se combina con la hemoglobina cerca de 300 veces mas rápidamente que el oxígeno. Eso
significa que aun cuando se encuentre presente en el aire que respiramos, en concentraciones comparativamente bajas,
rápidamente reduce la capacidad de la sangre para transportar oxígeno y empieza la deficiencia de oxígeno de los tejidos.