Psiquiatria Forense
Psiquiatria Forense
Psiquiatria Forense
FILIAL HUARAZ
FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS POLITICAS
Curso:
Criminalística
Ciclo: IV
Docente:
Mg. Chávez Salazar Manuel Jesús
Integrantes:
- Saavedra Flores Tomas V.
- Otros
- Otros
PSIQUIATRIA FORENSE
RESUMEN
La Psiquiatría como parte de la Medicina, es una ciencia que estudia el comportamiento normal y
anormal del individuo, su tarea es realizar el estudio, diagnóstico, tratamiento y prevención de
trastornos del comportamiento y patologías mentales, en las que influyen factores genéticos, físicos,
químicos, psicológicos y socio ambientales.
La participación del médico psiquiatra es objetiva, ejecutando su tarea a través del instrumento
básico como es la entrevista psiquiátrica y el examen mental, valiéndose en oportunidades de
instrumentos de apoyo como las pruebas psicológicas y otras fuentes de información.
La Psiquiatría Forense implica nociones médicolegales psiquiátricas, donde la psiquiatría clínica se
transforma en un lenguaje aplicable a un fin común, colaborar en las diferentes áreas jurídicas:
penal, civil, familia, laboral, respondiendo a los cuestionamientos de las autoridades judiciales,
siendo el médico psiquiatra denominado "perito" y debiendo de emitir un informe escrito en el cual
se establece la capacidad mental de la persona evaluada, lo que la autoridad competente podría
considerar como un elemento en el proceso, para orientar su conducta jurídica.
El perito al emitir su evaluación podría intervenir nuevamente en el proceso al ampliar o adicionar
el documento emitido, o su participación activa en el debate; esto a solicitud del despacho. La
Psiquiatría Forense implica posibles aplicaciones que involucran cuidados de la salud en el trabajo
hasta Justicia Criminal y Seguridad Pública.
INDICE
Contenido Paginas
INTRODUCCIÓN 1
CAPITULO I
CAPITULO II
CAPITULO III
CONCLUSIONES
ANEXOS
INTRODUCCIÓN
La asociación de los términos "Medicina" y "Legal" sorprende a primera vista. Tal asociación
resulta menos misteriosa al recordar que el juez está encargado, en nombre de la sociedad, de hacer
respetar los derechos del hombre. En muchas circunstancias, estos derechos tienen un carácter
biológico o psicológico.
Para evitar juicios oscuros, condenas abusivas, errores judiciales, el juez, técnico del derecho,
precisa ser informado por personas que estudian los fenómenos biológicos, patológicos y
psicológicos.
La medicina legal judicial tiende un puente entre el pensar jurídico y el biológico. Es una disciplina
particular que presta concurso necesario a la ejecución de la ley.
Cuando emprende el estudio del criminal, de sus reacciones antisociales, de sus actos y de sus
consecuencias médicas y biológicas, de su identificación, de su responsabilidad penal, de su
reeducación, en medicina legal judicial y criminógena.
Cuando aporta su contribución y métodos para resolver dificultades surgidas en la aplicación y
funcionamiento de las leyes sociales, es medicina legal social.
Cuando se ocupa de los derechos y deberes profesionales del médico, es medicina legal profesional,
complemento necesario de la medicina clínica.
La medicina legal judicial para satisfacer sus complejas y múltiples actividades se vale de
conocimientos patológicos, toxicológicos, psiquiátricos, biológicos, criminológicos, sexológicos,
así como también los correspondientes al derecho, jurisprudencia, sociología, etc. Utiliza también
métodos, técnicas y medios muy variados de la anatomía normal o patológica, de la microscopia, de
la clínica, de la serología, de la entomología, de las ciencias físicas y químicas.
Es por ello que hoy el tema que nos ocupa es la Psiquiatría Forense, un auxiliar muy valioso de la
Medicina Legal, y en consecuencia un arma en las manos del Juez para que a la hora de esclarecer
un asunto escabroso, pueda estudiar detenidamente el informe de los psiquiatras forenses y al dictar
su sentencia sea lo más justo y equitativo posible.
Para que el Juez pueda determinar la responsabilidad penal de un imputado es indispensable que
tenga en cuenta la conjunción de dos condiciones que son: 1º. La Inteligencia o discernimiento, que
nos dará la noción del bien y del mal. 2º. La libre voluntad o libertad, que permite escoger entre el
bien y el mal. Toda causa que prive de una u otra condición suprime la imputabilidad.
Capítulo I
MARCO TEORICO
1.1. Historia de la Psiquiatría
La historia de la Psiquiatría, siendo parte de la historia general de la Medicina, se diferencia de las
demás ramas médicas en cuanto que por su objetivo, la conducta perturbada del hombre, participa
también de la historia de las otras ciencias humanas y contacta con la historia del pensamiento, de la
cultura y de las sociedades. Como parte de la historia de la medicina, ha seguido las vicisitudes del
arte de curar y del conocimiento científico a través de los tiempos y las edades.
Tales conceptos amplios o reducidos de la enfermedad mental según los tiempos y las filosofías,
han delimitado también una frontera difusa acerca de quién debe ocuparse y tratar estos problemas
(sacerdote, chamán, médico, brujo, filósofo, etc).
Los trastornos psiquiátricos siempre han afligido a la humanidad, tanto como las enfermedades
físicas. Desde los tiempos o los pueblos primitivos, usualmente se ha encontrado que los médicos o
quienes hacen sus veces, han utilizado su arte para tratar la enfermedad mental igual que lo han
hecho con la enfermedad física. Este concepto de la enfermedad mental, que se agranda o se
estrecha según los tiempos y las edades, refleja por una parte el modo de pensar prevalente en un
momento y una sociedad determinados, lo mismo que la carencia suficiente de conocimientos
científicos pertinentes y adecuados sobre muchos aspectos del comportamiento humano normal o
perturbado y se ha prestado obviamente a abusos y arbitrariedades.
Se ha hecho nacer la medicina científica a partir de Hipócrates (460-355 A.C.), él introdujo el
método clínico empírico, se alejó de las creencias mágicas sobre la enfermedad y fundamentó las
bases ético científicas de la medicina. Entre los numerosos aciertos del "Padre de la Medicina" hay
que contabilizar para la Psiquiatría varios logros: él hizo considerar por primera vez las
enfermedades mentales como enfermedades "naturales" excluyéndolas de la consideración de
sobrenaturales, concepción que hasta entonces predominaba, y por lo tanto las redujo al ámbito
médico, con capacidad para ser curadas también por métodos médicos, introdujo el concepto y
conocimiento de los "temperamentos", es decir, lo que hoy llamaríamos constitución o carácter o
idiosincrasia, fue el precursor en la necesidad de hacer historias clínicas, en la utilidad de observar
al paciente, en seguirlo y de acompañarlo críticamente a lo largo de su enfermedad, en mantener
una relación respetuosa médico-paciente, en la observación psicosomática y en la correlación entre
emociones, salud y enfermedad. Fue el primero que consideró el cerebro como el asiento de los
sentidos y de la vida intelectual.
Sólo desde el final del siglo XVIII o comienzos del XIX, en que surgió la psiquiatría científica en
su forma actual, la medicina occidental aceptó encargarse plenamente del problema de las
enfermedades mentales y reclamar para sí el cuidado de asilos y manicomios. Esta situación llegó a
su mayor auge a mediados de este siglo en que, en la mayor parte de los países, el movimiento de
salud mental estaba en manos de médicos.
A partir del siglo XX, la [psiquiatría] comienza a auxiliar al poder judicial, desarrollando tareas
periciales. Entre 1992 y 1993 fue reconocida oficialmente como subespecialidad por la American
Board of Psychiatry & Neurología.
La Psiquiatría fue durante mucho tiempo un campo disputado por la filosofía (incluida la
psicología), la teología, el mito y la superstición y después por la ciencia: la medicina y la biología.
1.2. Historia de la Psiquiatría Forense
En este proceso que se origina en el ocaso del siglo XIX y las primeras décadas del XX, la
psiquiatría forense, a la zaga de su ciencia madre, aferrada en su mayor parte a la raigambre
organicista, no puede evitar sin embargo, ser infiltrada en forma paulatina por la revolución
encarnada en quienes otorgando una supremacía y autonomía cuasi absoluta al mundo psi, osaban
hasta negar la interrelación soma-psi, olvidando en ello al propio maestro Freud y algunos de sus
dichos.
La interpretación de Lacan sobre el crimen de las hermanas Papin y el aluvión de estudios y
comunicaciones que siguieron a Freud desde aquél famoso estudio sobre el magistrado Schreber.
Azorados, no pocos contemplaban el hecho de que se tornaba posible, no solo incursionar en la
mente de los criminales, sino también en la psiquis de quienes los juzgaban en aparente estado de
razón. La escuela inglesa por su parte, a partir de M. Klein, aportó también esquemas hipotéticos
que demostraron a algunos inquietos pensadores, que se entreabrían ciertamente novísimos senderos
exploratorios para la interpretación y comprensión de la conducta antisocial del hombre y -también-
de lo antisocial encubierto como social.
Con la segunda guerra mundial adquirieron renovada importancia las diversas psicologías. De tal
manera, en el Tribunal de Nüremberg, aparecen como asesores, figuras de psicólogos y también una
actividad psiquiátrico forense de importancia, como en el caso del examen de Rudolf Hess cuya
capacidad para estar en juicio es y ha sido motivo de continua controversia dentro y fuera de la
especialidad. Ello condujo al nacimiento de la psicología forense, cristalizada en los cuerpos
periciales judiciales de la especialidad, pero no sin subsistir en el trasfondo ese enfrentamiento entre
los organicistas - lamentablemente freudófobos- y los psicologistas -psiquiatrófobos-.
Los primeros parámetros que utiliza la psiquiatría forense, se originan en un mundo científico de
neta raigambre positivista, con arrastre empero -al menos para la lectura e interpretación del mundo
psi- de categorías claramente escolásticas -en especial aristotélico-tomistas- ya que no otra cosa es
hablar de facultades intelectuales y volitivas, con una clara minusvaloración de lo afectivo.
1.3. Marco Conceptual
1.3.1. Figuras Jurídicas Relacionadas con la Psiquiatría Forense:
Salud y/o enfermedad mental: permite establecer si una persona es sana mentalmente
para asumir su responsabilidad por los actos que realiza; también establece el tipo de
anomalía psíquica, que lo puede eximir de responsabilidad penal.
Criminología: El hombre, en cuanto ha cometido o es capaz de cometer delitos, es
objeto de la criminología. Prescindiendo de las relaciones que guarda con las leyes, la
criminología se ocupa del estudio del delincuente, el delito y la pena; contempla el
delito como un hecho natural, abstraído de la realidad jurídica. Una de las tareas
fundamentales que vincula la criminología con la psiquiatría forense, es el estudio de la
personalidad del delincuente.
Personalidad: determina la forma de ser y la conducta de una persona e identifica sus
“tendencias” o rasgos de personalidad que explican su conducta o actuación en al acto
delictivo que se le imputa o atribuye.
Peligrosidad (rehabilitación): Permite establecer la peligrosidad social y el grado de
reincidencia delictual.
Imputabilidad en casos especiales: retardo mental leve, intervalo lucido, psicosis
controlada.
Simulación: Delimita, mediante el diagnóstico psiquiátrico estados patológicos reales,
reacciones adaptativos (normales) y reacciones carcelarias con simulación de
enfermedades físicas y mentales.
Validación del testimonio: establece el grado de credibilidad de las declaraciones,
especialmente en personas que cambian de versión o se retractan de una denuncia.
Necropsia Psicológica: Es la reconstrucción socio-psico-patológica post mórtem de la
vida mental de una persona es decir, después de fallecida o en algún periodo de su
vida, para establecer salud mental, grado de indefensión, personalidad, etc. En casos de
muertes dudosas (suicidio, homicidio o accidente).
Valoración del daño psíquico: En casos de maltrato psicológico, delitos contra la
humanidad, violencia sexual, de privación sensorial, etc.
Estudio de la responsabilidad profesional de los psiquiatras y psicólogos: Negligencia,
impericia e imprudencia en el ejercicio profesional del psiquiatra y psicólogo.
Perfil sexual: Establece la conducta sexual, variantes, disfunciones o trastornos
sexuales de una persona, especialmente en delitos contra la libertad sexual.
Capacidad sexual: Capacidad para relacionarse con otras personas (sexualmente) y
poder procrear.
Diagnostico psiquiátrico a través de: Escritura, imágenes, pinturas, etc.
Estudios de trastorno de la identidad sexual: Determinación del sexo psicológico,
transexualismo en la adolescencia y adultez, para reasignación sexual y cambio de
identidad.
1.3.2. Concepto de Psiquiatría
Se ocupa de los aspectos menos tangibles, más subjetivos del ser humano enfermo, como su
conducta, sus motivaciones, las alteraciones de su pensamiento, de sus afectos, de los
problemas de desajuste o desadaptación de la personalidad a su medio cultural y social
cuando son provocadas por causas patológicas. En algunas enfermedades mentales y
precisamente las más importantes y las más graves, como las esquizofrenias y las
enfermedades afectivas maniaco-depresivas, no han podido descubrirse ni comprobarse
causas físicas, ni las perturbaciones bioquímicas halladas han sido bien comprendidas.
Tampoco los conocimientos psicológicos y sociales pretenden explicarlas son concluyentes.
Es una rama de la medicina, es responsable del estudio, el diagnóstico, el tratamiento y la
prevención de los trastornos del comportamiento humano. El comportamiento anormal
puede estar determinado o modificado por factores genéticos, físicoquímicos, psicológicos
y sociales.
Posee un área propia, un campo delimitado de estudio y tiene así mismo sus propias
técnicas de diagnóstico y tratamiento. Por ser una ciencia que estudia el comportamiento
humano, normal y anormal, causado por enfermedades, esta ciencia debe disponer de
medios idóneos para conocer, comprender y corregir las muy variadas modalidades de las
alteraciones de la conducta, del afecto y del pensamiento e inclusive de la adaptación
personal y social. Esto significa que la Psiquiatría se relaciona con aquellas características
del ser humano que no son exclusivamente biológicas ni pueden evaluarse únicamente por
medios físicos.
1.3.3. Concepto de Psiquiatría Forense
Es una subespecialidad de la psiquiatría. Se define como la aplicación de la psiquiatría
clínica al derecho, con el objetivo de establecer el estado de las facultades mentales, con el
propósito de delimitar el grado de responsabilidad penal y capacidad civil del individuo. Su
aplicación abarca contextos legales entre los que se incluyen materias penales, civiles,
laborales, correccionales, regulatorias y legislativas. Además de la evaluación y
diagnóstico, la psiquiatría forense brinda tratamiento integral a las personas en conflicto con
la ley, sean estos adultos o menores de edad.
Se enuncia mediante un dictamen, por regla general escrito, en el cual, y a requerimiento
del juez, el médico examina, analiza, considera y llega a determinadas conclusiones,
basándose en fundamentos e interpretaciones científicas en relación con la personalidad del
encausado y los hechos expuestos en la instrucción sumarial.
Ciencia que usando los procedimientos y los conocimientos de la Psiquiatría y de las
Neurociencias, da un diagnóstico sobre la forma de ser de los individuos y sus conductas en
relación a unos hechos y de acuerdo a las necesidades del derecho en todas sus vertientes.
Es el conjunto de nociones médico-legales-psiquiátricas que tienen importancia en el
Derecho (penal, civil, laboral, canónico) y que se relacionan con algunos aspectos de la
capacidad mental y psíquica.
Estudia el Estado Mental de una persona y su relación con el delito. Estudia los fenómenos
psicológicos, psicopatológicos o psiquiátricos y establece la probable relación con un acto
supuestamente delictivo.
Concluyendo, la psiquiatría forense es la rama de la medicina que se encarga del estudio del
Estado Mental de una persona y su relación con el delito. Es decir, estudia los fenómenos
psicológicos, psicopatológicos o psiquiátricos y establece la probable relación con un acto
supuestamente delictivo.
1.4. Campo de la Psiquiatría Forense
1.4.1. Psiquiatría Forense Penal
El nuevo Código Penal le pide a la Psiquiatría Forense, el asesoramiento en torno de la
imputabilidad del inculpado, por tanto, su aplicación sobre el delincuente, la delictogénesis
y la consiguiente imputabilidad, entendida como el conjunto de facultades psíquicas
mínimas que debe poseer un sujeto autor de un delito para ser declarado culpable del
mismo.
No basta el hecho de cometer un delito, para que un individuo se responsabilice de dicha
acción, hay necesidad de una serie de características psicológicas que lo hagan imputable.
(Capacidad de: libertad, del deber, de la responsabilidad, del autocontrol y de la
motivación) El hecho de tener imputabilidad penal, capacidad de culpabilidad, lleva
implícita la responsabilidad de sus actos y por tanto la pena.
La capacidad de culpa está en directa relación a reunir requisitos psicobiologicos mínimos,
el conocimiento de parte del autor del carácter de lo prohibido de su hacer y la no
exigibilidad de un comportamiento distinto. "Ambas tienen un lado negativo, la existencia
de una fuerza irresistible excluye la acción. La absoluta imprevisibilidad anula la relación
psicológica con el resultado; la causa de legítima defensa autoriza la comisión del hecho
prohibido, las facultades psíquicas del autor disminuidas o anuladas causan la imputabilidad
parcial o total".
Dentro de este apartado, es la Psiquiatría forense quien debe esclarecer los conceptos que
permitan inculpar o no al presunto delincuente y surgen así todas las variantes psiquiátricas
y jurídicas de: trastorno mental transitorio, miedo insuperable, arrebato, obcecación,
enajenación mental, trastornos de la percepción, que hablan de las atenuantes y eximentes,
en la capacidad de culpa. (Posibilidad de asumir la condena, parcial, total o ninguna).
1.4.2. La Psiquiatría clínica
Se ocupa de las enfermedades mentales y de las alteraciones del comportamiento que se
consideran anormales, morbosas o patológicas. Pero la Psiquiatría, como especialidad
médica, tiene características propias que la distinguen de las demás áreas de la medicina y
no ha alcanzado el grado de precisión y objetividad de otras cuyo campo lo constituyen
enfermedades mejor conocidas en cuanto a sus causas, entre ellas las lesiones que las
producen, fácilmente identificables en los órganos y los tejidos, o que originan
modificaciones bioquímicas y funcionales en el organismo que pueden comprobarse por
medio de técnicas de laboratorio o de exámenes de imágenes radiológicas o de ultrasonido y
otras pruebas objetivas y concretas. El (la) Psiquiatra clínico realiza una anamnesis, una
exploración minuciosa, emite un diagnóstico, elabora un pronóstico y establece un
tratamiento, mientras que el (la) Psiquiatra Forense tiene la misión después del diagnóstico
y el pronóstico, de indicar lo que es más importante desde el punto de vista legal, es decir,
cómo la alteración psíquica influye sobre la facultad de conocimiento de la penalidad del
hecho y sobre la capacidad de actuar de acuerdo con este conocimiento.
1.4.3. La Psiquiatría Legista
Elabora el informe sobre el estado de salud mental de un acusado, lo que engloba dos
cuestiones fundamentales: si reconoce el valor de sus actos y si es capaz de actuar conforme
a ese conocimiento, en ocasiones valoración del potencial delictógeno. Como consecuencia
de ello puede inferirse una anulación o una disminución de su imputabilidad,
estableciéndose por los juristas la existencia de una eximente completa, incompleta o una
atenuante de la responsabilidad criminal. Así como el médico legista da un dictamen muy
objetivo y concreto, como la descripción de unas heridas, o de unas lesiones, o una
autopsia, el o la perito Psiquiatra legista emite su dictamen sobre aspectos tales como la
capacidad en lo civil o la responsabilidad en lo penal. Más exactamente, no emite su
concepto directamente sobre estos temas sino sobre determinados estados morbosos
psíquicos que pueden alterar la capacidad de obrar razonablemente (en lo civil). O bien el
(la) perito Psiquiatra dictamina acerca de un posible vicio de consentimiento que puede
haber existido en el momento de contraer matrimonio (en derecho canónico).
1.5. Psiquiatría Forense Especial
1.5.1. Psiquiatría forense especial penal: Estudios de imputabilidad en menores de edad, retardo
mental leve, trastorno mental transitorio, deprivación sensorial (secuestros), deprivación
socio cultural (síndrome acultural).
1.5.2. Psiquiatría forense especial civil: Divorcio por causal (sevicia, impotencia sexual,
homosexualidad, fármacodependencia, etc.), ludopatías. Síndrome de alienación parental,
en casos de custodia o patria potestad.
1.5.3. Psiquiatría forense especial militar: Trastorno de Estrés Post Traumático, Psicosis
Reactivas Agudas.
1.5.4. Psiquiatría forense especial en derecho canónico: Fenómenos Místicos.
1.5.5. Psiquiatría forense especial en derecho administrativo: Estrés laboral, acoso sexual.
1.5.6. En cuanto al Derecho Laboral, para demostrar la existencia de una causa psíquica en un
accidente de trabajo y para valorar como incapacidad una secuela psíquica en un accidente.
También en la investigación de la simulación de enfermedad mental.
1.5.7. La Psiquiatría Forense y la investigación
En las últimas décadas, la investigación en Psiquiatría Forense se está convirtiendo en algo
cada vez más complejo. Todos los ejemplos de exámenes que se han llevado cabo y que
han sido incluidos dentro de la Psiquiatría Forense son los siguientes: el grado de
peligrosidad y riesgo de que vuelva a cometerse un acto delictivo - inherente a cualquier
delito grave- , el grado de culpabilidad, la necesidad de determinar los hechos y actos
valiosos para el forense especialista en comportamiento, la necesidad de llevar a cabo
evaluaciones en el campo de la psicoterapia forense como las terapias cognitivas ofrezcan
éstas o no perspectivas útiles, los exámenes neurobiológicos de personas que padecen
trastornos del comportamiento, los modelos de examen epidemiológico diseñados para
avanzar en determinados temas clínicos, la valoración de la adicción clínica.
1.6. Propósito de la Psiquiatría Forense.
Su propósito es obtener evidencias, mediante la administración de la principal prueba diagnóstica,
la Entrevista Psiquiátrica y ayudarse con la administración de pruebas psicológicas y/o
psicopatológicas, para así poder elaborar un informe que con claridad y dentro de la terminología
del derecho pueda ser recogido por los distintos sistemas jurídicos, para su ilustración. Así pues
podríamos hablar de que el objeto de la psiquiatría forense es el hombre, en su relación con la
Justicia. El derecho mediante su método inductivo, habla del acto y sus consecuencias y la
Medicina con su método deductivo; del hombre, sus conductas y su psiquismo. Hasta hace poco las
demandas del Derecho a la Medicina, se limitaba a los casos criminales y hoy en día se ha ampliado
a los más diversos ámbitos de aplicación de ésta y cada uno tiene sus peculiaridades.
1.7. Ámbito de la Psiquiatría Forense
Como rama de la medicina, la psiquiatría forense es predominantemente diagnóstica, no
recuperativa. Es por ello que es triplemente compleja:
Por su naturaleza: la psiquiatría estudia fenómenos poco comprendidos y considerados
subjetivos.
Por su carácter social: los fenómenos psicológicos son vivenciados de formas diferentes
de acuerdo al grupo social en que vive el individuo que los experimenta.
Por su espíritu jurídico: estudia fenómenos cuya realización puede ir en contra de las
normas legales vigentes en una sociedad.
1.8. Rol de la psiquiatría forense
La psiquiatría forense cumple diversos roles, dependiendo del área del derecho al cual sea aplicada.
Derecho civil: En materia de derecho civil, la psiquiatría forense se encarga de los aspectos
mentales o psicopatológicos relacionados en causas de indemnización, y las eventuales
secuelas o daños psíquicos determinados por un perito.
Derecho de familia: En materia de derecho de familia, la psiquiatría forense se ocupa de
asuntos relacionados a custodia y tuición de los hijos, violencia intrafamiliar, determinación
de las habilidades parentales de los progenitores, etc.
Derecho penal: En el ámbito penal, cumple un rol específico en la evaluación de la
imputabilidad y peligrosidad. En este ámbito también se incluyen las evaluaciones
periciales en causas de responsabilidad médica y mala praxis.
Derecho laboral: En relación al derecho laboral, la psiquiatría forense se encarga de
situaciones relativas a la internación involuntaria, derecho a recibir o rechazar tratamientos,
consentimiento informado, grado de discapacidad laboral, etc.
Ámbito penitenciario y correccional: En este ámbito, se encarga de evaluaciones
presentenciales, beneficios carcelarios, reinserción y rehabilitación social, evaluación y
atención clínico-psiquiátrica de personas privadas de libertad, etc.
1.9. Contribución de las Disciplinas Criminológicas en la "praxis" del derecho penal
En el trabajo criminológico se impone una primera instancia a cargo de la psiquiatría forense, que
inicialmente separa los delincuentes enfermos de la mente de aquellos que no lo están. Inimputables
los primeros, no les corresponde sanción penal, sino medidas de seguridad curativa cuando son
peligrosos. Los segundos, imputables, son acreedores de sanciones punitivas según escalas
establecidas por el Código Penal.
Es deber de la psiquiatría forense mantener actualizados los conocimientos acerca de las
enfermedades mentales, las nuevas corrientes doctrinarias y los modernos métodos de las ciencias
auxiliares constituyentes de grupos de trabajo, planteando simultáneamente fuentes de observación,
cuyo material reunido será objeto de una síntesis conceptual respecto de la personalidad del
encausado.
1.10. Metodología de la Psiquiatría Forense
Cada delito, cada hombre delincuente, constituye un hecho cuyo interés antropológico radica no en
lo que tiene de general, sino en su singularidad e irrepetibilidad. La tarea del forense es la de
singularizar el caso, aprehenderlo en su comprensión individual y articularlo con las normas legales.
De surgir una duda en la mente del perito, éste debe recordar que el índice de falibilidad en esta
materia es muy elevado, y que no siempre lo asertivo y lo rotundo se identifican con la realidad.
La gran tarea de la psiquiatría forense penal, tan importante como delicada, tiene como centro de
atracción el concepto de enfermedad mental. Pues bien —y esto lo desarrollaremos más
ampliamente cuando tratemos el tema—, los componentes biológicos son tributarios del método
causal explicativo, y los culturales del método valorativo, pues las dolencias mentales no sólo se
cumplen en el recinto corporal sino que se realizan en el espacio social, acarreando un disvalor que
constituye el índice de importancia y gravedad.
Esta feliz simbiosis metodológica tiene su réplica en la fórmula mixta de la imputabilidad legal,
compuesta por un apartado psiquiátrico y un apéndice psicológico que, con certera visión
antropológica, establece una relación indisoluble entre cuerpo y espíritu.
El estudio psiquiátrico forense parte del núcleo metodológico serio aportado por la psiquiatría
general para responder a una necesidad social orientada por el derecho.
1.11. Diagnóstico y psiquiatría: la entrevista psiquiátrica y el examen del estado mental
1.11.1. La ENTREVISTA es el principal instrumento utilizado por el Psiquiatra para conocer al
(la) paciente y la naturaleza de su problema. La comprensión de la salud y la enfermedad
del (la) paciente procede principalmente de la narración que éste hace de su vida anterior,
sus actitudes y emociones y el desarrollo de sus síntomas. Se pone mucho énfasis en animar
al (la) paciente a que narre su historia con sus propias palabras.
El diagnóstico y pronóstico se basan en estos datos y en la información adicional obtenida a
partir de los familiares del paciente, el examen físico, los tests psicológicos y cualesquiera
otros exámenes especiales.
1.11.2. Examen del estado mental
La distinción entre historia y examen es incluso menos nítida en psiquiatría que en
medicina general. La mayor parte (y frecuentemente la totalidad) del examen del estado
mental se efectúa mientras se realiza la historia. Se valora el aspecto, comportamiento,
fluidez de la conversación, contenido del pensamiento, anomalías de percepción, el afecto y
las funciones cognitivas.
1.12. ¿Cómo se forma una opinión objetiva médico/psiquiátrica?
Un (a) experto (a) médico(a) es un(a) doctor(a) en medicina que tiene los requisitos de experiencia
clínica y atestados académicos para formar una opinión médica objetiva con un grado razonable de
certeza médica.
Un (a) Psiquiatra Forense es un (a) médico (a) que integra experiencia clínica, conocimientos de
medicina, salud mental, y neurociencias para formar una opinión objetiva e independiente. Hechos
relevantes son reunidos y analizados como parte de un proceso de examinar hipótesis alternativas
para formular una opinión experta médico-psiquiátrica. Esta opinión experta puede ser
efectivamente comunicada a través de un reporte escrito, una declaración o en un testimonio en la
Corte. Las aplicaciones de la Psiquiatría Forense son muy amplias van desde cuidados de la salud
en el trabajo hasta Justicia Criminal y Seguridad Pública.
¿Es un(a) Psiquiatra Forense la misma cosa que un (a) Psicólogo (a) Forense? No. Los o las
Psiquiatras son médicos (as) con un entrenamiento especial en el entendimiento, diagnóstico y
tratamiento de los trastornos mentales. Esto incluye evaluaciones y tratamientos biológicos,
psicoterapia, y problemática social y familiar. Un (a) psicólogo (a) a nivel de doctorado son
profesionales en su propia rama y pueden hacer pericias especiales en tópicos usualmente no
estudiados en detalle por los Psiquiatras (como las pruebas psicológicas).
1.13. La Prueba Pericial Psiquiátrica
Lat. PROBE. Honradamente. Por considerar que obra con honradez quien prueba lo que pretende.
PROBANDUM: Aprobar, experimentar, paternizar, hacer fe. “Acción y efecto de probar razón con
la que se demuestra una cosa”
Entendida como actividad, la prueba equivale entre otras expresiones a: manifestar, justificar,
demostrar o hacer patente la certeza de un hecho, confirmar, corroborar, verificar, aclarar,
esclarecer, averiguar o cerciorar.
La prueba como fenómeno metajurídico, es siempre la misma: confirmación de una afirmación;
verificación de una averiguación…., la prueba, al convertirse en un fenómeno judicial o procesal,
no modifica su carácter ni su naturaleza; el fenómeno no probatorio sigue siendo idéntico…. Entre
la prueba extrajudicial y la judicial, la diferencia está en el sometimiento de ésta última a unas
normas de procedimiento. Pero su naturaleza sigue siendo la misma.
Fundamentos jurídicos y médicos legales
Para la Psiquiatría Forense, el problema de la imputabilidad es uno de los más importantes y de
mayor interés práctico.
La peritación psiquiátrica tiene como objetivo fundamental establecer la relación de causalidad
psíquica entre una persona (individuo) y sus acciones, es decir establecer la IMPUTABILIDAD
como requisito previo de la responsabilidad y de la culpabilidad en caso de hechos delictivos.
Siendo la imputabilidad un concepto estrictamente jurídico es necesario conocer el campo de su
aplicación y las circunstancias que hacen necesarias su comprobación en la práctica judicial.
DELITO: En la noción del delito debe distinguirse:
Un Aspecto objetivo: circunstancias (modalidades).
Aspecto subjetivo: Delincuente (persona que lo realiza), que condiciona y modifica el
delito.
El delito no es una creación artificial, sino una forma de conducta humana. No puede concebirse un
delito sin un delincuente, sin una persona que reúna las condiciones exigidas por la Ley para poseer
la capacidad de cometer acciones delictuosas. Las nociones de objetivo, subjetivo, delito y
delincuente, están interrelacionados de tal forma que no puede separarse sino sólo desde el punto de
vista didáctico o académico.
Aspecto Objetivo: El Delito puede definirse con la existencia de una sanción penal: La
noción jurídica del Delito lo da la Ley mediante la amenaza de una pena. Sin ley que lo
sancione no hay delito. "Delito es la acción prohibida por la Ley bajo la amenaza de una
pena".
Contenido:
Es un acto humano (acción u omisión). Los hechos de los animales o casos fortuitos ajenos
al obrar humano no son delito.
Es antijurídico: es decir, ha de estar en oposición con una norma jurídica, debe lesionar o
poner en peligro el interés jurídicamente protegido, además ha de corresponder a un tipo
legal (figura delictiva) definido y conminado por la Ley con una pena. Ha de ser
antijurídico y típico "Nullum Crimen, Nulla Poena, Sine Lege".
El acto ha de ser Culpable, imputable a Dolo (intención de cometerlo) o a culpa
(negligencia)
La ejecución o la omisión del acto debe estar sancionada con una pena. Sin pena no hay
delito.
Si concurren estos elementos (acción, antijuridicidad, tipicidad, culpabilidad y punibilidad) hay
delito. De la reunión de estos elementos resulta la noción sustancial de Delito: Acto típico,
antijurídico, culpable y sancionado con una pena.
Aspecto subjetivo: No se concibe un delito sin delincuente, es éste el que constituye el
aspecto subjetivo del delito.
La persona del delincuente no debe descuidarse en el estudio del delito, ya que de su naturaleza va a
desprenderse el concepto de culpabilidad (Aspecto subjetivo).
Imputabilidad
Es el conjunto de condiciones psicobiológicas de las personas requerido por las disposiciones
legales vigentes para que la acción sea comprendida como causada psíquicamente y éticamente por
aquellas.
La imputabilidad se refiere a un modo de ser del sujeto, a un determinado estado espiritual del
mismo, y a un conjunto de condiciones psíquicas existentes en él en el momento de la ejecución de
un hecho antijurídico, que le capacita para responder del mismo ante la sociedad.
Se requiere sólo las condiciones mínimas, de aquellas que son absolutamente necesarias para que
una persona pueda responder de sus actos.
Condiciones:
Un Estado de Madurez Mínimo, fisiológico y psíquico, en el Perú se establece a los 18 años
de edad.
Plena Conciencia de los actos que se realiza, es decir que se dé cuenta de lo que hace
(inteligencia y pensamiento), en otras palabras que tenga la capacidad de razonar.
Capacidad de Voluntariedad. (Voluntad)
Capacidad de Libertad.
Desde el punto de vista psicopatológico, puede resumirse en:
1. Que en el momento de la comisión del hecho posea la Inteligencia, el discernimiento de sus
actos (razone, piense).
2. Que goce de la libertad de su voluntad y de su libre albedrío, es decir, de la facultad de
poder escoger entre los diversos motivos de conducta que se presenten en su mente y de
determinar libremente la potencia de su voluntad.
3. La conciencia, la inteligencia, pensamiento y la voluntad son las bases psicológicas de la
imputabilidad penal, cuando se hayan abolido o estén gravemente perturbadas, la
imputabilidad no existe.
Por esta razón, toda alteración mental que afecte estas funciones psicológicas es causa de
inimputabilidad, único concepto que le está permitido usar al médico en sus dictámenes periciales,
por ser de raigambre psíquica, o mejor psicopatológica.
La imputabilidad representa la capacidad para delinquir, ya que sin ella como requisito no puede
existir delito (capacidad de pena, según los españoles).
Imputabilidad como capacidad de culpabilidad: se entiende como un estado de la persona dotada de
conciencia y libertad, que la hace susceptible de ser declarada responsable y culpable de las
acciones u omisiones penadas por la Ley, así como de cumplir las sentencias dictadas por los
tribunales.
Responsabilidad y Culpabilidad
Como hemos dicho, delito es todo acto atípico, antijurídico, culpable y sancionado con una pena.
En la culpabilidad sobresale el aspecto subjetivo de la acción delictiva, en relación íntima con la
personalidad del delincuente y sus condiciones anímicas en el momento de la infracción.
El concepto de culpabilidad, exclusivamente jurídico, tiene su fundamento psicológico basado en
los previos de Imputabilidad y Responsabilidad.
Definición de Responsabilidad.- Es el deber u obligación jurídica que incumbe al individuo
imputable de dar cuenta de los hechos que realiza y de sufrir sus consecuencias jurídicas.
En otras palabras: El estado Imputable es propio del individuo durante toda su vida, o en un período
limitado de ella, anterior a la comisión de un hecho delictivo e independiente de él.
La responsabilidad, en cambio, nace en el momento de su perpetración como una realidad jurídica,
como una obligación que se le va a exigir.
Por lo tanto, desde el punto de vista jurídico, mientras la imputabilidad es una posibilidad, la
responsabilidad es una realidad.
Definición de Culpabilidad.- Es el juicio de reprobación por la ejecución de un hecho u acto
contrario a lo ordenado por la Ley.
Resulta así claramente que la Imputabilidad es el requisito previo para que puedan existir
Responsabilidad y Culpabilidad.
Estos dos últimos conceptos son de naturaleza estrictamente jurídica, no así el primero, que posee
un substrato biopsíquico. De ahí el consejo, de que el perito sólo utilice y se pronuncie sobre el
concepto de imputabilidad, que es el único que entra en el campo de su competencia, absteniéndose
de hablar de responsabilidad.
Informe Pericial Psiquiátrico mal llamado “Pericia psiquiátrica”: Es un documento de carácter
científico, que expresa la opinión que emiten los médico especialistas en psiquiatría sobre el estado
mental de un individuo o una persona determinada.
Características de la Peritación psiquiátrica:
a) Es ordenada por la Ley.
b) Se realiza en una persona que se encuentra en un proceso judicial: penal, civil, etc.
c) Es realizada por médicos especialistas en psiquiatría.
Sirve como elemento de juicio a la Ley para pronunciarse acerca de la responsabilidad o
irresponsabilidad de un individuo o persona frente a un hecho delictivo o su capacidad o
incapacidad para el ejercicio de sus derechos civiles.
Evaluación Psiquiátrica: El protocolo de evaluación psiquiátrica consta de las siguientes partes:
I.- FILIACIÓN:
Nombres y Apellidos Dominancia
Lugar y Fecha de Nacimiento
Edad Diminutivo ("Alias")
Estado Civil
Grado de Instrucción
Procedencia
Ocupación
Domicilio
Documento de Identidad
Religión Informante
Capitulo II
IMPUTABILIDAD E INIMPUTABILIDAD
El Código Penal, no hace mención directa de la Imputabilidad, definiéndola, por el contrario, de
forma negativa, es decir, se limita a señalar las causas de Inimputabilidad, para la cual se siguen, en
forma general, tres criterios:
Biológico: Cuando se hace mención a enfermedad mental o situación anormal.
Psicológico: Cuando se alude explícitamente a las consecuencias puramente psicológicas de estos
estados.
Biopsicológico o Mixto: Cuando se reúnen ambos criterios
Causas de Inimputabilidad: CAPITULO III. CAUSAS QUE EXIMEN O ATENUAN LA
RESPONSABILIDAD PENAL. ART. 20 Código Penal. Numerales del 1 al 11.
La enfermedad mental es causa de inimputabilidad por cuanto es capaz de afectar la conciencia de
la realidad, Inteligencia, pensamiento y voluntad.
2.1. IMPUTABILIDAD
Esquizofrenia: En la fase agua, cualquiera sea su forma, no existe imputabilidad, porque estos
enfermos son incapaces de conocer las consecuencias de sus actos y por ello de quererlos o
inhibirlos, en tanto que en las fases de remisión, residual o cuando se encuentran clínicamente
compensados, se dan parcial cuenta de los actos que realiza, dependiendo de los procesos mentales
tomados.
Delitología: Los esquizofrénicos delinquen tanto en los inicios de la enfermedad, llamada Fase o
Período Médico Legal de la enfermedad, como cuando la enfermedad está plenamente instaurada.
Los delitos son absurdos y extraños por su modo de ser y la situación social del individuo.
La génesis delictiva de los esquizofrénicos es doble: el automatismo y la impulsión: el automatismo
es una acto sin motivación en tanto que la impulsión es un acto con motivación delirante, que con
frecuencia da lugar a la auto y heteroagresividad.
Los delitos pueden ser: homicidio, lesiones, contra el patrimonio.
El homicidio de los esquizofrénicos consiste en un acto absurdo, impremeditado, insólito,
psicológicamente incomprensible, que no produce ninguna repercusión afectiva.
Las lesiones causadas por los esquizofrénicos ofrecen matices similares a los del homicidio:
Ausencia de motivación, perfecta lucidez durante el acto, aparente perversidad, impasibilidad,
nunca niegan el hecho, dando explicaciones infantiles y absurdas.
En los delitos contra la propiedad se aprecia a menudo la inutilidad del hecho, hurtos o robos de
alimentos que no consumen y de objetos inservibles o inútiles.
Peligrosidad: Es variable dependiendo del tipo de esquizofrenia y la fase en que se encuentre.
Psicosis Maniaco-Depresiva. En la fase aguda, debido al intenso trastorno de la afectividad tienen
anulada la voluntad y presentan trastornos del curso y contenido del pensamiento por lo que no son
capaces en absoluto de inhibir sus tendencias a la acción antisocial y no tienen una normal
comprensión de los hechos.
Delitología: El enfermo más cercano a la normalidad es más peligroso por cuanto puede actuar con
mayor libertad, premeditación, con una conducta más intencional y acción más coordinada. En la
Hipomanía es donde existe mayor actividad delictiva. En la fase depresiva puede ocurrir homicidio
o incendio inclusive suicidio.
Los tipos de delitos incluyen: escándalo público, exhibicionismo, abusos deshonestos, estupro,
resistencia, desacato a la autoridad, malversación de fondos públicos, propios o de la familia, delitos
contra la vida, el cuerpo o la salud, estafas o falsificaciones.
En cuanto al homicidio ocurre el llamado “libericidio” seguido de suicidio porque el melancólico no
mata por odio sino por amor, para evitar supuestos sufrimientos de sus allegados más queridos.
Peligrosidad: Es relativa, incrementándose en los depresivos por el libericidio o suicidio.
Paranoia: La valoración representa un problema. El paranoide conoce la significación antisocial o
ilegal de sus actos: Piensa en ellos, medita, lucha contra su tendencia morbosa y cree que su forma
de pensar es la única acertada y conveniente, que el error está en la sociedad que no le ofrece
garantías suficientes para su defensa. A veces tiene una concepción errónea de la realidad, por
percepción defectuosa o siendo la percepción de los hechos correcta, llega a conclusiones falsas, por
estar en razonamiento predeterminado por su trastorno del humor, patológicamente engendrado e
invencible por el razonamiento o lógica de los demás.
El paranoide actúa "por deber", que es patológico. En estos casos es necesarios investigar la
relación causa efecto entre el contenido del Sistema Delirante y el hecho antijurídico.
Delitología: El paranoide es un delincuente en potencia, actúan en forma solitaria, de forma que
debe dudarse seriamente del diagnóstico cuando existen cómplices; incurre a veces en crímenes
múltiples. En general los delitos están en relación con las ideas delirantes. Es difícil diferenciar
entre un delito paranoide y delito pasional, la diferencia está en la conducta posdelictiva: el
delincuente pasional siente pesar, arrepentimiento y , a veces realiza actos de autodestrucción.
Peligrosidad: Está en relación directa con el sistema delirante.
2.2. TRASTORNO MENTAL TRANSITORIO
Es todo aquel trastorno, de causa inmediata, necesaria y fácilmente evidenciable, de aparición más o
menos brusca, de duración, en general, no muy extensa, que termina con la curación sin dejar
huella, siendo producido por el choque psíquico de un agente exterior, cualquiera que sea su
naturaleza (física o psíquica), de intensidad suficiente para perturbar de manera acusada o anular
totalmente la razón y voluntad del sujeto con una cierta anormalidad psíquica o estado patológico
leve anterior, sin peligro justificado de que pueda volver a reproducirse y no buscado a propósito
para delinquir.
Son estados de perturbación pasajera de las facultades mentales, son trastornos de poca duración,
que terminan por la curación definitiva, sin peligro de reaparición.
En el estudio médico-legal del trastorno mental transitorio obliga a distinguir dos posibilidades de
resonancia forense muy distinta:
El trastorno mental transitorio espontáneo
El trastorno mental transitorio provocado o buscado de propósito. (“actio liberae in causa”)
Trastorno Mental Transitorio Espontáneo:
Jurídicamente el concepto de trastorno mental transitorio no tiene el mismo valor que visto por el
psiquiatra.
Definición: Es el estado de perturbación mental pasajero y curable, debido a causas ostensibles
sobre una base patológica probada, cuya intensidad llega a producir la anulación del libre albedrío.
Características:
1. Que haya sido desencadenado por una causa inmediata y fácilmente evidenciable.
2. Que su aparición haya sido brusca, o al menos, rápida.
3. Que su duración haya sido breve.
4. Que cure igualmente en forma rápida, por una curación completa, sin secuelas y sin
probabilidades de repetición.
5. Que haya surgido sobre una base patológica probada en el sujeto en que se manifestó.
6. Que la intensidad del trastorno mental sea origen de una anulación completa del libre
albedrío e inconsciencia, no bastando la mera ofuscación.
Ejemplos:
Embriaguez (especialmente la patológica).
Delirio febril.
Estado psíquico producido por anestesia
Psicosis exógenas: infecciosas, tóxicas, metabólicas, traumáticas.
Trastorno Mental Transitorio Provocado o Buscado a Propósito (“Actio Liberae In Causa”)
Para que el trastorno mental transitorio cause efecto eximente es preciso que no haya sido buscado
de propósito para delinquir. Por lo tanto el que con ánimo de cometer un delito se coloca en dicha
situación y hallándose en ella, perpetra el hecho, no podrá ser declarado exento de responsabilidad.
Ejemplo:
- Trastorno mental de origen tóxico: P.B.C., cocaína, marihuana.
- Embriaguez.
2.3. ALTERACIONES DE LA CONCIENCIA
EMBRIAGUEZ
"El alcohol es amigo del crimen." La embriaguez intensa anula por completo en el sujeto la
capacidad de conocer e inhibir. Desde el punto de vista jurídico, algunos autores, distinguen:
EMBRIAGUEZ AGUDA EMBRIAGUEZ CRÓNICA: O ALCOHOLISMO
En esta se han producido lesiones cerebrales que
Embriaguez Fortuita: No ha sido querida, ni prevista, pues
dificultan el funcionamiento mental, que el sujeto entra
el sujeto ignora los efectos de la bebida o la naturaleza del
en la condición de enajenado. Ejemplo:
líquido ingerido (embriaguez patológica).
Alucinosis alcohólica
Embriaguez Voluntaria. Se conocen los efectos de la
Delirio alcohólico
bebida y se bebe voluntariamente, aunque no se desea que
Celotipia alcohólica
den origen a problemas judiciales.
Esto también es aplicable a otras intoxicaciones
Embriaguez Intencional. Se llega a ella intencionalmente
exógenas que conducen a cuadros similares de
para cometer un delito bajo su influencia, buscando la acción
embriaguez: Cocainismo, P.B.C., Marihuana, Fármacos,
facilitadora del alcohol o la anulación de las inhibiciones.
etc.
La existencia demostrada de los estímulos capaces de producir Cualquier persona puede reaccionar de la
anomalías psíquicas en el agente de la infracción. misma manera.
Que estas anomalías tengan como contenido un estado pasional No hay arrepentimiento del hecho.
de furor o cólera (arrebato) o de ofuscación o turbación
permanente (obcecación), capaz de disminuir la inteligencia o Personalidad Predispuesta: explosivos, pasivo-
la voluntad. agresivos, paranoides, etc.
Que las causas determinantes de los estímulos procedan de la Que los estímulos no sean repudiados por la
víctima. norma socio-cultural que rige la convivencia
del ente social.
La reacción es inmediata.
No se consideran: La enemistad, el rencor y el
Lucidez de conciencia natural acaloramiento de la riña.
Capitulo III
PERSONALIDAD Y LEY
3.1. PERSONALIDAD
Es la forma de ser propia de cada individuo. Las conductas que se repiten ante estímulos similares
se llaman patrones de conducta o Rasgos.
CLASIFICACIÓN:
Existen diversas formas de clasificar la personalidad y los Trastornos de Personalidad, intentaremos
señalar las formas más comunes señalando los rasgos propios de cada uno de ellos.
2. Disimulación. 6. Metasimulación.
3. Sobresimulación 7. Presimulación
.
4. Hipersimulación.