Contrato de Obra A Suma Alzada Ibac3
Contrato de Obra A Suma Alzada Ibac3
Contrato de Obra A Suma Alzada Ibac3
La característica que identifica al contrato a suma alzada es que el contratista recibe como
retribución por la obra, por todo concepto, un precio fijo pactado.
Este precio abarca todas las prestaciones, trabajos y provisiones que sean necesarios para ejecutar y
concluir la obra contratada, en los términos especificados y acordados entre las partes. Por lo tanto,
a cambio de este monto fijo, el contratista debe entregar al comitente la obra pactada totalmente
terminada. Es decir, existe un principio de inalterabilidad, que es la esencia del pacto de obra a
suma alzada: obra por retribución. Ambas estipulaciones esenciales del contrato quedan convenidas
y fijadas, y las partes las reputan contractual mente y por consenso como equivalentes y justas.
En esta modalidad de contrato, las partes convienen en establecer una equivalencia entre el valor de
la obra terminada (el íntegro del trabajo del contratista concretamente convenido y especificado) y
el precio (retribución) pactado. Por lo tanto, el contratista no puede cobrar ninguna cantidad
adicional por todo lo que ejecute con el propósito de terminar la obra, sin excepción, según los
alcances contratados de la obra. Todos los costos incurridos por el contratista son de su exclusiva
cuenta y riesgo.
Ventajas
Todas las ofertas tienen la misma base, es decir, se oferta lo mismo por cada uno de los
licitadores, por tanto son comparables.
El comitente se asegura un costo más o menos cierto o al menos con muy pequeño
porcentaje de variación, ya que los riesgos de posibles variaciones son asumidos por el
constructor e incluidos en el precio ofertado.
Desventajas
Por esta forma de contratación "se estipula que los distintos trabajos de que estará
compuesta la obra, serán llevados a cabo mediante el pago de precios asignados a cada
unidad técnica de estructura o bien cantidad técnica unitaria de obra de mano".
Asimismo, establece que el precio total de la obra se fija ARTÍCULO por ARTÍCULO y
solo puede determinarse a la terminación de los trabajos de acuerdo con la cantidad
ejecutada, por ejemplo la construcción de un muro 'a tanto el metro’.
Por otro lado, existen dos tipos de contratos por precios unitarios:
Según se designe la medida total o número de piezas
Que no contenga esta designación.
Este tipo de contrato exige, para ser razonablemente aceptable para el Comitente, una
estrecha vigilancia del Constructor por parte del Comitente y supone habitualmente un
coste superior en la obra ejecutada que el que se conseguiría con otro tipo de contrato
Por otra parte el constructor se encuentra totalmente coaccionado en su trabajo, no
pudiendo tomar decisión alguna, sin el previo permiso del Director Técnico o de la persona
que represente al Comitente, lo cual dificulta gravemente su propia programación de
trabajo. Además la tramitación administrativa de los pagos suele resultar complicada
debido a la multitud de comprobaciones y papeleo que requiere su autorización. No es
aconsejable por lo tanto este tipo de contrato, más que en casos de emergencia y siempre de
manera provisional y parcial hasta conseguir la firma de otro contrato más conveniente.
Como es lógico, existen además multitud de tipos de contratos que contemplan diferentes
variantes a las mencionadas más arriba. Entre ellos los contratos al coste más un beneficio
fijo, los contratos con beneficio en función del coste alcanzado, etc.
Se prevé y a titulo excepcional la posibilidad de retribución a precio alzado, sin existencia
de precios unitarios
Se regula con detalle la aplicación de la revisión de precios
Se regula la constitución y posibilidades de las fianzas o garantías exigidas para los
contratos
Antes de la firma:
En el momento de la Firma:
Esta publicación está dirigida a personas naturales que deben realizar alguna construcción
en un lote o vivienda y requiere contratar los servicios profesionales de un Maestro de
Obra, con quien se realiza un contrato, que en muchas ocasiones es de tipo verbal.
Los contratos verbales tienen múltiples inconvenientes, entre los cuales podemos listar
como los más preocupantes:
El alcance de los trabajos puede variar según la pericia y el mayor conocimiento del
Maestro.
El valor contratado por la Obra aumenta fácilmente y en algunos casos parece un sin
fondo.
El tiempo de la Obra se demora más de la cuenta y de lo pactado en el inicio.
No se tiene claridad de la independencia laboral, esto significa que en caso de que
un obrero demande al Maestro, este también podrá demandar al CONTRATANTE
(a nosotros) y nos veremos obligados en incurrir en situaciones como ir a una
Oficina del Ministerio del Trabajo y responder por sueldos, prestaciones e incluso
por indemnizaciones.
No existe un respaldo a futuro para que el Maestro responda por Garantías de
estabilidad de la obra o por el mismo cumplimiento.
Un contrato verbal se puede convertir en un contrato laboral tipo indefinido y dará
posibilidades a reclamaciones salariales, prestaciones sociales, ...
Para evitar estos malestares futuros, debemos esforzarnos en dejar muy en claro el alcance
de la obra, la forma como se va a realizar las compras y los pagos y dejar todo por
ESCRITO.
Recomendaciones:
Luego de revisar el contrato, incluir los datos según la obra específica a realizar,
impriman dos copias, las hacen firmar ambas por el Maestro y le entregan una.