Fisica de Ondas 2

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INTRODUCCIÓN

Las ondas electromagnéticas son ondas producidas por la oscilación o la


aceleración de una carga eléctrica. Las ondas electromagnéticas tienen
componentes eléctricos y magnéticos. La radiación electromagnética se puede
ordenar en un espectro que se extiende desde ondas de frecuencias muy
elevadas.

El espectro electromagnético está compuesto por rayos gamma, rayos X duros y


blandos, radiación ultravioleta, luz visible, rayos infrarrojos, microondas y ondas de
radio

  En la naturaleza, las fuerzas eléctricas se originan de dos formas. Primero está la


atracción o la repulsión eléctricas entre las cargas eléctricas (+) y (-). Es posible
definir una unidad de carga eléctrica como la carga que repele a otra carga similar
a la distancia de, podemos decir, 1 metro con la fuerza de la unidad de fuerza
utilizada (las fórmulas usuales lo definen con más precisión)..

Pero en segundo lugar están la atracción y la repulsión entre corrientes eléctricas


paralelas. Por lo que podremos definir la unidad de corriente como la corriente que
circulando por un hilo recto, atrae a una corriente similar que circule por un hilo
paralelo separado 1 metro, con la fuerza de la unidad utilizada, en cada metro de
la longitud de los hilos.

Unos de los mayores logros teóricos de la física en el siglo XIX fue el


descubrimiento de las ondas electromagnéticas. El primer trabajo realizo fue sobre
los fenómenos eléctricos y la velocidad de la luz.

Radiación electromagnética; ondas producidas por la oscilación o la aceleración


de una carga eléctrica. Las ondas electromagnéticas tienen componentes
eléctricos y magnéticos. La radiación electromagnética se puede ordenar en un
espectro que se extiende desde ondas de frecuencias muy elevadas (longitudes
de onda pequeñas) hasta frecuencias muy bajas (longitudes de onda altas). La luz
visible es sólo una pequeña parte del espectro electromagnético. Por orden
decreciente de frecuencias (o creciente de longitudes de onda), el espectro
electromagnético está compuesto por rayos gamma, rayos X duros y blandos,
radiación ultravioleta, luz visible, rayos infrarrojos, microondas y ondas de radio.
Los rayos gamma y los rayos X duros tienen una longitud de onda de entre 0,005
y 0,5 nanómetros (un nanómetro, o nm, es una millonésima de milímetro). Los
rayos X blandos se solapan con la radiación ultravioleta en longitudes de onda
próximas a los 50 nm. La región ultravioleta, a su vez, da paso a la luz visible, que
va aproximadamente desde 400 hasta 800 nm. Los rayos infrarrojos o `radiación
de calor. e solapan con las frecuencias de radio de microondas, entre los 100.000
y 400.000 nm. Desde esta longitud de onda hasta unos 15.000 m, el espectro está
ocupado por las diferentes ondas de radio; más allá de la zona de radio, el
espectro entra en las bajas frecuencias, cuyas longitudes de onda llegan a
medirse en decenas de miles de kilómetros.
Frecuencia
Término empleado en física para indicar el número de veces que se repite en un
segundo cualquier fenómeno periódico. La frecuencia es muy importante en
muchas áreas de la física, como la mecánica o el estudio de las ondas de sonido.
Las frecuencias de los objetos oscilantes abarcan una amplísima gama de valores.
Los temblores de los terremotos pueden tener una frecuencia inferior a 1, mientras
que las veloces oscilaciones electromagnéticas de los rayos gamma pueden tener
frecuencias de 1020 o más. En casi todas las formas de vibración mecánica existe
una relación entre la frecuencia y las dimensiones físicas del objeto que vibra. Por
ejemplo, el tiempo que necesita un péndulo para realizar una oscilación completa
depende en parte de la longitud del péndulo; la frecuencia de vibración de la
cuerda de un instrumento musical está determinada en parte por la longitud de la
cuerda. En general, cuanto más corto es el objeto, mayor es la frecuencia de
vibración. En todas las clases de movimiento ondulatorio, la frecuencia de la onda
suele darse indicando el número de crestas de onda que pasan por un punto
determinado cada segundo. La velocidad de la onda y su frecuencia y longitud de
onda están relacionadas entre sí. La longitud de onda (la distancia entre dos
crestas consecutivas) es inversamente proporcional a la frecuencia y directamente
proporcional a la velocidad. En términos matemáticos, esta relación se expresa
por la ecuación v = l f, donde v es la velocidad, f es la frecuencia y l (la letra griega
lambda) es la longitud de onda. A partir de esta ecuación puede hallarse
cualquiera de las tres cantidades si se conocen las otras dos. La frecuencia se
expresa en hercios (Hz); una frecuencia de 1 Hz significa que existe 1 ciclo u
oscilación por segundo. La unidad se llama así en honor del físico alemán Heinrich
Rudolf Hertz, el primero en demostrar la naturaleza de la propagación de las
ondas electromagnéticas. Las unidades como kilohercios (kHz) —miles de ciclos
por segundo—, megahercios (MHz) —millones de ciclos por segundo— y
gigahercios (GHz) —miles de millones de ciclos por segundo— se usan para
describir fenómenos de alta frecuencia como las ondas de radio. Estas ondas y
otros tipos de radiación electromagnética pueden caracterizarse por sus longitudes
de onda o por sus frecuencias. Las ondas electromagnéticas de frecuencias
extremadamente elevadas, como la luz o los rayos X, suelen describirse mediante
sus longitudes de onda, que frecuentemente se expresan en nanómetros (un
nanómetro, abreviado nm, es una milmillonésima de metro). Una onda
electromagnética con una longitud de onda de 1 nm tiene una frecuencia de
aproximadamente 300 millones de GHz.
Longitud de onda
Distancia entre dos puntos consecutivos de una onda que tienen el mismo estado
de vibración. Por ejemplo, la longitud de onda de las olas marinas es la distancia
entre dos crestas consecutivas o entre dos valles. La longitud de onda representa
un concepto fundamental en la resolución de cualquier tipo de movimiento
ondulatorio, y puede variar de valores muy grandes —por ejemplo, cientos de
metros para radioondas largas— a valores muy pequeños —por ejemplo, de
millonésimas de millón (10-12) para los rayos gamma. Las ondas en el agua o en
una cuerda están formadas por movimientos transversales de materia, en
dirección perpendicular a la dirección del movimiento de la onda. Las crestas y los
valles son aquellos lugares en los que el movimiento transversal es máximo. Una
onda de sonido, sin embargo, está compuesta por movimientos longitudinales de
las moléculas de aire —movimientos hacia adelante y hacia atrás en la dirección
del movimiento de la onda—, lo que constituye una serie de compresiones y
enrarecimientos sucesivos. La longitud de onda es la distancia entre dos
compresiones o enrarecimientos consecutivos.
Movimiento ondulatorio
Proceso por el que se propaga energía de un lugar a otro sin transferencia de
materia, mediante ondas mecánicas o electromagnéticas. En cualquier punto de la
trayectoria de propagación se produce un desplazamiento periódico, u oscilación,
alrededor de una posición de equilibrio. Puede ser una oscilación de moléculas de
aire, como en el caso del sonido que viaja por la atmósfera, de moléculas de agua
(como en las olas que se forman en la superficie del mar) o de porciones de una
cuerda o un resorte. En todos estos casos, las partículas oscilan en torno a su
posición de equilibrio y sólo la energía avanza de forma continua. Estas ondas se
denominan mecánicas porque la energía se transmite a través de un medio
material, sin ningún movimiento global del propio medio. Las únicas ondas que no
requieren un medio material para su propagación son las ondas
electromagnéticas; en ese caso las oscilaciones corresponden a variaciones en la
intensidad de campos magnéticos y eléctricos.
Tipos de ondas
Las ondas se clasifican según la dirección de los desplazamientos de las
partículas en relación a la dirección del movimiento de la propia onda. Si la
vibración es paralela a la dirección de propagación de la onda, la onda se
denomina longitudinal (ver figura 1). Una onda longitudinal siempre es mecánica y
se debe a las sucesivas compresiones (estados de máxima densidad y presión) y
enrarecimientos (estados de mínima densidad y presión) del medio. Las ondas
sonoras son un ejemplo típico de esta forma de movimiento ondulatorio. Otro tipo
de onda es la onda transversal, en la que las vibraciones son perpendiculares a la
dirección de propagación de la onda. Las ondas transversales pueden ser
mecánicas, como las ondas que se propagan a lo largo de una cuerda tensa
cuando se produce una perturbación en uno de sus extremos (ver figura 2), o
electromagnéticas, como la luz, los rayos X o las ondas de radio. En esos casos,
las direcciones de los campos eléctrico y magnético son perpendiculares a la
dirección de propagación. Algunos movimientos ondulatorios mecánicos, como las
olas superficiales de los líquidos, son combinaciones de movimientos
longitudinales y transversales, con lo que las partículas de líquido se mueven de
forma circular. En una onda transversal, la longitud de onda es la distancia entre
dos crestas o valles sucesivos. En una onda longitudinal, corresponde a la
distancia entre dos compresiones o entre dos enrarecimientos sucesivos. La
frecuencia de una onda es el número de vibraciones por segundo. La velocidad de
propagación de la onda es igual a su longitud de onda multiplicada por su
frecuencia. En el caso de una onda mecánica, su amplitud es el máximo
desplazamiento de las partículas que vibran. En una onda electromagnética, su
amplitud es la intensidad máxima del campo eléctrico o del campo magnético.
Comportamiento de las ondas
La velocidad de una onda en la materia depende de la elasticidad y densidad del
medio. En una onda transversal a lo largo de una cuerda tensa, por ejemplo, la
velocidad depende de la tensión de la cuerda y de su densidad lineal o masa por
unidad de longitud. La velocidad puede duplicarse cuadruplicando la tensión, o
reducirse a la mitad cuadruplicando la densidad lineal. La velocidad de las ondas
electromagnéticas en el vacío (entre ellas la luz) es constante y su valor es de
aproximadamente 300.000 km/s. Al atravesar un medio material esta velocidad
varía sin superar nunca su valor en el vacío. Cuando dos ondas se encuentran en
un punto, el desplazamiento resultante en ese punto es la suma de los
desplazamientos individuales producidos por cada una de las ondas. Si los
desplazamientos van en el mismo sentido, ambas ondas se refuerzan; si van en
sentido opuesto, se debilitan mutuamente. Este fenómeno se conoce como
interferencia. Cuando dos ondas de igual amplitud, longitud de onda y velocidad
avanzan en sentido opuesto a través de un medio se forman ondas estacionarias.
Por ejemplo, si se ata a una pared el extremo de una cuerda y se agita el otro
extremo hacia arriba y hacia abajo, las ondas se reflejan en la pared y vuelven en
sentido inverso. Si suponemos que la reflexión es perfectamente eficiente, la onda
reflejada estará media longitud de onda retrasada con respecto a la onda inicial.
Se producirá interferencia entre ambas ondas y el desplazamiento resultante en
cualquier punto y momento será la suma de los desplazamientos correspondientes
a la onda incidente y la onda reflejada. En los puntos en los que una cresta de la
onda incidente coincide con un valle de la reflejada, no existe movimiento; estos
puntos se denominan nodos. A mitad de camino entre dos nodos, las dos ondas
están en fase, es decir, las crestas coinciden con crestas y los valles con valles;
en esos puntos, la amplitud de la onda resultante es dos veces mayor que la de la
onda incidente; por tanto, la cuerda queda dividida por los nodos en secciones de
una longitud de onda. Entre los nodos (que no avanzan a través de la cuerda), la
cuerda vibra transversalmente. Las ondas estacionarias aparecen también en las
cuerdas de los instrumentos musicales. Por ejemplo, una cuerda de violín vibra
como un todo (con nodos en los extremos), por mitades (con un nodo adicional en
el centro), por tercios… Todas estas vibraciones se producen de forma
simultánea; la vibración de la cuerda como un todo produce el tono fundamental y
las restantes vibraciones generan los diferentes armónicos. En mecánica cuántica
la estructura del átomo se explica por analogía con un sistema de ondas
estacionarias. Gran parte de los avances de la física moderna se basan en
elaboraciones de la teoría de las ondas y el movimiento ondulatorio.
Propiedades
Las ondas electromagnéticas no necesitan un medio material para propagarse.
Así, estas ondas pueden atravesar el espacio interplanetario e interestelar y llegar
a la Tierra desde el Sol y las estrellas. Independientemente de su frecuencia y
longitud de onda, todas las ondas electromagnéticas se desplazan en el vacío a
una velocidad c = 299.792 km/s. Todas las radiaciones del espectro
electromagnético presentan las propiedades típicas del movimiento ondulatorio,
como la difracción y la interferencia. Las longitudes de onda van desde
billonésimas de metro hasta muchos kilómetros. La longitud de onda (l) y la
frecuencia (f) de las ondas electromagnéticas, relacionadas mediante la expresión
l·f = c, son importantes para determinar su energía, su visibilidad, su poder de
penetración y otras características
Teoría
El físico británico James Clerk Maxwell estableció la teoría de las ondas
electromagnéticas en una serie de artículos publicados en la década de 1860.
Maxwell analizó matemáticamente la teoría de los campos electromagnéticos y
afirmó que la luz visible era una onda electromagnética. Los físicos sabían desde
principios del siglo XIX que la luz se propaga como una onda transversal (una
onda en la que las vibraciones son perpendiculares a la dirección de avance del
frente de ondas). Sin embargo, suponían que las ondas de luz requerían algún
medio material para transmitirse, por lo que postulaban la existencia de una
sustancia difusa, llamada éter, que constituía el medio no observable. La teoría de
Maxwell hacía innecesaria esa suposición, pero el concepto de éter no se
abandonó inmediatamente, porque encajaba con el concepto newtoniano de un
marco absoluto de referencia espaciotemporal. Un famoso experimento realizado
por el físico estadounidense Albert Abraham Michelson y el químico de la misma
nacionalidad Edward Williams Morley a finales del siglo XIX socavó el concepto
del éter, y fue muy importante en el desarrollo de la teoría de la relatividad. De
este trabajo concluyó que la velocidad de la radiación electromagnética en el vacío
es una cantidad invariante, que no depende de la velocidad de la fuente de
radiación o del observador.
Luz Visible:
Rayos Gamma:
Radio y Televisión:
Colores:
Cuantos de radiación
No obstante, a principios del siglo XX los físicos se dieron cuenta de que la teoría
ondulatoria no explicaba todas las propiedades de la radiación. En 1900, el físico
alemán Max Planck demostró que la emisión y absorción de radiación se produce
en unidades finitas de energía denominadas `cuantos'. En 1904, Albert Einstein
consiguió explicar algunos resultados experimentales sorprendentes en relación
con el efecto fotoeléctrico externo postulando que la radiación electromagnética
puede comportarse como un chorro de partículas. Hay otros fenómenos de la
interacción entre radiación y materia que sólo la teoría cuántica explica. Así, los
físicos modernos se vieron obligados a reconocer que la radiación
electromagnética se comporta unas veces como partículas y otras como ondas. El
concepto paralelo que implica que la materia también puede presentar
características ondulatorias además de corpusculares fue desarrollado en 1925
por el físico francés Louis de Broglie.
Efecto Fotoeléctrico
Formación y liberación de partículas eléctricamente cargadas que se produce en
la materia cuando es irradiada con luz u otra radiación electromagnética. El
término efecto fotoeléctrico designa varios tipos de interacciones similares. En el
efecto fotoeléctrico externo se liberan electrones en la superficie de un conductor
metálico al absorber energía de la luz que incide sobre dicha superficie. Este
efecto se emplea en la célula fotoeléctrica, donde los electrones liberados por un
polo de la célula, el fotocátodo, se mueven hacia el otro polo, el ánodo, bajo la
influencia de un campo eléctrico. El estudio del efecto fotoeléctrico externo
desempeñó un papel importante en el desarrollo de la física moderna. Una serie
de experimentos iniciados en 1887 demostró que el efecto fotoeléctrico externo
tenía determinadas características que no podían explicarse por las teorías de
aquella época, que consideraban que la luz y todas las demás clases de radiación
electromagnética se comportaban como ondas. Por ejemplo, a medida que la luz
que incide sobre un metal se hace más intensa, la teoría ondulatoria de la luz
sugiere que en el metal se liberarán electrones con una energía cada vez mayor.
Sin embargo, los experimentos mostraron que la máxima energía posible de los
electrones emitidos sólo depende de la frecuencia de la luz incidente, y no de su
intensidad. En 1905, para tratar de explicar el mecanismo del efecto fotoeléctrico
externo, Albert Einstein sugirió que podría considerarse que la luz se comporta en
determinados casos como una partícula, y que la energía de cada partícula
luminosa, o fotón, sólo depende de la frecuencia de la luz. Para explicar el efecto
fotoeléctrico externo, Einstein consideró la luz como un conjunto de "proyectiles"
que chocan contra el metal. Cuando un electrón libre del metal es golpeado por un
fotón, absorbe la energía del mismo. Si el fotón tiene la suficiente energía, el
electrón es expulsado del metal. La teoría de Einstein explicaba muchas
características del efecto fotoeléctrico externo, como por ejemplo el hecho de que
la energía máxima de los electrones expulsados sea independiente de la
intensidad de la luz. Según la teoría de Einstein, esta energía máxima sólo
depende de la energía del fotón que lo expulsa, que a su vez sólo depende de la
frecuencia de la luz. La teoría de Einstein se verificó por experimentos posteriores.
Su explicación del efecto fotoeléctrico, con la demostración de que la radiación
electromagnética puede comportarse en algunos casos como un conjunto de
partículas, contribuyó al desarrollo de la teoría cuántica. El término efecto
fotoeléctrico también puede referirse a otros tres procesos: la fotoionización, la
fotoconducción y el efecto fotovoltáico. La fotoionización es la ionización de un gas
por la luz u otra radiación electromagnética. Para ello, los fotones tienen que
poseer la suficiente energía para separar uno o más electrones externos de los
átomos de gas. En la fotoconducción, los electrones de materiales cristalinos
absorben energía de los fotones y llegan así a la gama de niveles de energía en la
que pueden desplazarse libremente y conducir electricidad. En el efecto
fotovoltáico, los fotones crean pares electrón-hueco en materiales
semiconductores. En un transistor, este efecto provoca la creación de un potencial
eléctrico en la unión entre dos semiconductores diferentes.
La Radiación Electromagnética Como Onda
Se representa como un campo eléctrico y otro magnético, perpendiculares entre sí
y que están en fase. A la hora de interaccionar con la materia solo vamos a
considerar la componente eléctrica, ya que solo el campo eléctrico va a ser el que
va a interaccionar con los electrones de los átomos).
Se define matemáticamente como una onda polarizada, los parámetros que
definimos son:

A Amplitud Valor máximo del campo eléctrico

Tiempo que transcurre para que la onda pase


P Periodo entre dos puntos equivalentes

Frecuencia Es el inverso del periodo

Distancia entre dos puntos equivalentes


Longitud de onda consecutivos

El inverso de la longitud de onda. Se suele


k Numero de ondas trabar con este parámetro en Infrarrojo.

Velocidad de
v propagación V=

Cuando una onda cambia de medio, la onda varia su velocidad de propagación y,


por tanto, su longitud de onda (ya que hemos dicho que la frecuencia va a ser
constante para cada tipo de radiación). El máximo de velocidad de propagación va
a estar en el vacío y se va a definir como c siendo su valor 3 108 m/s. En el aire va
a ser un 0,03% menos, por que para efectos practico vamos a considerar la
misma.

Matemáticamente una onda se define como:


Y para un conjunto de ondas:
Cuando hablamos de la superposición de dos ondas, existen dos posibilidades. La
primera es que las dos ondas tengan igual frecuencia, pero distinta amplitud. La
segunda es que tengan igual amplitud pero distinta frecuencia, en este caso, el
resultado no va a ser una onda sinusoidal y el periodo resultante va a ser
inversamente proporcional a la diferencia de frecuencias de las dos ondas.
Dentro del estudio de las ondas, hablaremos de tres de los fenómenos más
importantes la difracción, la transmisión y la dispersión.
Difracción de ondas
El fenómeno de la difracción consiste en la desviación de un haz paralelo cuando
este cambia de medio o bien cuando pasa a través de rendija pequeña.
El interferometro de Young consta en dos rendijas paralelas, cuyo ancho es del
orden de la longitud de onda, los rayos que la atraviesan se proyectan sobre un
plano, en el cual hay claros y oscuros. Los oscuros se explican porque las ondas
se interfieren entre sí.
En este fenómeno es en el que se basa la espectroscopia de difracción de rayos
X. En vez de dos rendijas paralelas lo que se coloca es un sólido cristalino y se
estudian los claros y oscuros formados.
Transmisión de ondas
La velocidad con la que se propaga la radiación a través de cualquier sustancia va
a ser menor que la velocidad con la que se propaga en el vacío. Cuando atraviesa
un medio, las frecuencias emergentes e incidentes son iguales, y como la
frecuencia y la energía se relacionan a través de la formula, podemos afirmar que
la energía de una onda cuando atraviesa un medio no varía. Es decir no se
produce trasferencia permanente de energía.
Lo que ocurre realmente es el fenómeno de la polarización periódica de las
especies atómicas o moleculares del medio. Es decir, se produce una deformación
de las nubes electrónicas asociadas a los átomos. Existe una retención
momentánea de la energía, que se vuelve a emitir sin alteración.
Se define el índice de refracción como la relación existente entre la velocidad de la
luz en el vacío y la velocidad de la onda en el medio.
Dispersión de ondas
De todo lo dicho en el apartado anterior, hay que decir que realmente se pierde
una pequeña parte de energía que se dispersa en todas las direcciones del
espacio. Se pierde algo de energía al atravesar el medio, aumenta cuando
aumenta el tamaño de las moléculas del medio.
Existen tres tipos de dispersiones en función de la relación entre el tamaño de la
partícula y la longitud de onda de la radiación, estos tipos son:
 Rayligk. Moléculas o agregados de moléculas cuyo tamaño es
notablemente inferior a la longitud de onda de la radiación. Debido a este tipo de
dispersión se produce el color azul del cielo.
 Por moléculas grandes. Es producido por el efecto Tyndall. El tamaño de
las partículas es del orden de la longitud de onda de la radiación.
 Ramman. Lo que sucede es que parte de la radiación dispersada sufre
cambios cuantizados de frecuencia. Son el resultado de transiciones de energía.
Esto ha dado lugar a la espectroscopia de Ramman.
Se dice que una radiación esta polarizada cuando la oscilación del campo eléctrico
se produce en un solo plano. Existen sustancias que son capaces de polarizar las
radiaciones.
La Radiación Electromagnética como Corpúsculo
Se entendieron a través del efecto fotoeléctrico. Así que veremos en que consiste:
 Hezt. Observa como una chispa salta mas fácilmente entre dos esferas
cargadas si estas estaban iluminadas.
 Einsten. Realiza una serie de experimentos con el fototubo. Da una
explicación muy sencilla de lo observado por Hezt. Su teoría por simple y
revolucionaria no fue aceptada.
 Millikan. Experimenta con gotas de aceites cargadas. Es entonces cuando
es aceptada la explicación de Einsten.
¿Pero en que consiste el efecto fotoeléctrico? Consiste en un tubo donde de ha
hecho el vacío. Se colocan dos electrodos metálicos conectados a una fuente de
voltaje variable y a un amperímetro. Se hace incidir la luz sobre el electrodo
positivo y se observaba en el amperímetro una variación del voltaje. Se va
aumentando el voltaje, llega un momento que al incidir la luz no varia la corriente,
lo que sucede que los electrones que “salen” de la placa por el efecto de la luz no
son capaces de superar el voltaje en contra que hace la fuente. A este potencial
se le llama potencial umbral.
De todo esto se extraen dos conclusiones:
 Una luz de frecuencia constante brilla en el ánodo a potencial decreciente se
observa una corriente instantánea que es directamente proporcional a la
intensidad de la radiación.
 La magnitud del potencial umbral depende de la composición química del
cátodo y de la frecuencia de la radiación incidente.
Matemáticamente la energía umbral(eU0) se define como:
Donde w es él trabaja necesario para arrancar un electrón de una superficie
metálica.
Como hv coincide con la energía de un fotón, la ecuación anterior quedaría, una
vez trasformada en:
Según el modelo ondulatorio, el efecto fotoeléctrico no se produciría.
Absorción de la Radiación
Según la teoría cuántica las partículas tienen un numero limitado de energías
discretas. Por lo que la absorción de energía solo se va a producir cuando le
suministremos energías concretas, es decir, cuando le incidamos con una
radiación de frecuencia adecuada. Cada sustancia va a absorber una serie de
frecuencias concretas, no va a absorber todas las frecuencias, porque ya como
hemos dicho antes, no puede absorber todas las energías.
Existen tres tipos de absorción, la atómica, la molecular y la inducida por un
campo magnético.
Absorción atómica
La materia esta en forma atómica, para pasarla a forma atómica normalmente se
le aplica temperatura (por encima de 2000ºC). Cuando la radiación incide sobre el
átomo, se promocionan los electrones de la capa de valencia hacia niveles de
mayor energía.
Un ejemplo es el Na, aparecen dos líneas juntas cuyas absorbancias están a 589
y 589'6 nanometros que son las transiciones de 3s a 3p. También se produce otra
línea a 285 nm, que es él la radiación más energética y es el paso de 3s a 5p.
La zona ultravioleta-visible proporciona la energía suficiente para promocionar
electrones de la capa de valencia hacia estados de mayor energía. Para
promocionar electrones de capas inferiores es necesario radiaciones de mayor
energía.
Este tipo de absorción va a producir espectros de líneas de fácil interpretación.
Absorción molecular
La energía asociada a la banda de una molécula tiene tres componentes: Energía
electrónica, vibracional y rotacional. O lo que es lo mismo, cada estado electrónico
tiene asociado un estado vibracional y este a su vez un estado rotacional,
representados por líneas mas estrechas.
Una molécula tiene mas niveles de energías, mas estados electrónicos, por lo que
su estudio se hace mas complicado.
Los estado excitados tienen dos formas de volver a los niveles inferiores de
energía:
 Mediante relajación no radiante. No emite radiación, la energía puesta en
juego al pasar a un estado energético inferior, la trasforma en energía cinética que
cede a otras moléculas mediante choques.
 Fluorescencia. Emite energía en forma de radiación fluorescente.

Absorción inducida por un campo magnético


Los núcleos o los electrones se someten a un intenso campo magnético lo que
origina un cambio de spin, que provoca la creación de niveles adicionales de
energía.
Este tipo de absorción va a dar lugar a dos tipos de técnicas: La RMN (resonancia
magnética nuclear) que utiliza ondas de radio y la resonancia de spin electrónico
que usa ondas microondas.
Emisión de radiación
Antes de la emisión ha sucedido la absorción de la energía. El tipo de emisión va a
depender por tanto de cómo haya absorbido la energía la molécula. Los tipos de
absorción posibles son:
 Mediante bombardeo con electrones u otras partículas elementales. Se
promocionan los electrones de las capas internas, al volver al estado fundamental
va a radiar una frecuencia especifica para cada átomo, esta frecuencia es de la
zona de rayos X. Es utilizado para el análisis de sólidos. La técnica es la
espectroscopia de emisión de rayos X.
 Mediante exposición a una chispa, arco, llama o tratamiento
térmico. El tipo de analito va a ser el átomo. Se excitan los electrones de valencia
y al volver al estado fundamental emiten una radiación característica del átomo. Lo
que se obtienen son espectros sencillos de líneas, fáciles de interpretar. El
problema de esta técnica es que es no selectiva, es decir, se van a excitar todos
los electrones de valencia que contiene la muestra. La técnica es la
espectroscopia de emisión atómica.
 Mediante absorción de radiación electromagnética. Se produce una
excitación selectiva. Podemos excitar electrones de átomos, que nos dan lugar a
espectros de línea, o de moléculas, que dan lugar a espectros mas complicados.
La técnica es la fluorescencia atómica o molecular o la fosforescencia molecular.
 Emisión térmica. Radiación que se emite cuando los sólidos se calientan
hasta la incandescencia.
Fluorescencia y fosforescencia
Son dos formas de radiación. La fluorescencia es mas rápida, es inmediata. La
fosforescencia es un proceso mas complicado, la radiación se emite tras un cierto
tiempo.
Dentro de la fluorescencia se clasifican en resonantes y en no resonante. La no
resonante la longitud de onda con la que se produce la radiación es distinta de la
que se recoge.

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