Actividad N 7 Legislacion SST
Actividad N 7 Legislacion SST
Actividad N 7 Legislacion SST
NRC: 2136
SL17026-2016
Radicación N. °39333. Acta 43
Magistrada ponente:
CLARA CECILIA DUEÑAS QUEVEDO
Problema Jurídico
En ese contexto, debe dilucidar la Sala:
(I) Si la empleadora actuó con la diligencia y cuidado necesarios para garantizar la
seguridad y la integridad física de su trabajador.
(II) Si se configuró el nexo causal entre la muerte del trabajador y la culpa del
empleador, al no haberle suministrado un chaleco antibalas.
En este orden, no es materia de discusión que:
(I) Hernando Giraldo Osorio estuvo vinculado a la demandada a través de varios
contratos de trabajo desde el 8 de mayo de 1997 hasta al 19 de septiembre de
2003.
(II) Que el trabajador desempeñaba el cargo de guarda de seguridad.
(III) Que falleció a consecuencia de las lesiones propinadas con arma de fuego por
delincuentes que ingresaron a las instalaciones de la edificación sometida a
vigilancia de la empresa demandada.
(IV) Que la empresa le suministró dotación de un revolver calibre 38 largo para la
ejecución de sus labores.
(V) Que no le suministró un chaleco antibalas.
Resumen de la Sentencia
En este caso la Corte Suprema de Justicia falla en contra de la demandante, quien
dentro de sus argumentos precisó que conforme a los numerales 1 y 2 del artículo 57 del
CST y el artículo 56 del decreto 1295 de 1994, el empleador está en la obligación de evitar
que el trabajador sufra daño con ocasión de su trabajo y que la demandada no obró con
diligencia y cuidado frente a su trabajador, ya que, si entregó un arma de fuego en orden a
cumplir sus funciones, también debió suministrarle el correspondiente chaleco antibalas
con el fin de disminuir el riesgo al que estaba expuesto en sus labores de vigilancia.
Según los argumentos del fallo teniendo en cuenta la resolución 039 del 17 de
diciembre de 2003 la empleadora cumplió con las normas sobre riesgos laborales a los
cuales estaba expuesto Giraldo Osorio, las medidas de protección del lugar donde el
empleado prestaba sus servicios eran adecuadas, no se encontró demostrada la falta de
diligencia y cuidados necesarios para garantizar la seguridad e integridad física de su
trabajador.
La sociedad Seguridad Nacional Ltda. cumplió con las obligaciones que le imponen
los numerales 1 y 2 del artículo 57 del Código Sustantivo del Trabajo, así como las
previstas en los artículos 21, inciso 1 del artículos 56, 58 y 62 del Decreto 1295 de 1994,
debido a que, estaba suficientemente capacitado en el ejercicio del cargo de guarda de
seguridad, contaba con mas de 15 años de experiencia y había realizado todos los cursos
correspondientes a su área de trabajo, además, la empresa capacitaba a sus trabajadores en
escuelas especializadas; los supervisores pasaban revista cuatro veces al día en el puesto de
trabajo y le indicaban al vigilante la obligación de mantener cerrada la puerta de acceso y
con candado y al momento de lo ocurrido la puerta se encontraba abierta y el empleado
rompe los protocolos a pesar de contar con la experiencia y conocer las obligaciones del
cargo.
Por otro lado, se argumentó que en los Decretos 2535 de 1993, 356 de 1994, así
como el Decreto 1979 de 2001, a través de los cuales se expidió el manual de uniformes y
equipos para el personal de los servicios de vigilancia y seguridad privada, no se impone a
las empresas de vigilancia la obligación de dotar de chalecos antibalas a quienes se les
suministre armas de fuego y presten sus servicios en puestos fijos y esto tampoco se
encuentra establecido en las obligaciones especiales previstas en los artículos 56 y 57 del
Código Sustantivo del Trabajo.
Por todo lo anterior el corte concreto que no existió culpa patronal de parte de
Seguridad Nacional Ltda. en los hechos en los que perdió la vida su trabajador Hernando
Giraldo y que se equivocó el Tribunal al dar por demostrado que el nexo causal entre la
muerte del trabajador y la culpa del empleador estuvo dado por el hecho de haberle
suministrado un arma de fuego y no haberlo dotado de un chaleco antibalas, ya que, la
demandada demostró que: cumplió con las medidas para evitar riesgos laborales;
suministró a su trabajador los elementos de protección necesarios para cumplir con su
labor; capacitó al causante , y el sitio de trabajo contaba con las medidas de seguridad
necesarias para evitar riesgos, de modo que no está acreditada la culpa de la empleadora
que dé lugar a la condena de la indemnización plena de perjuicios reclamada.
Adicional a ello, el vigilante abre la puerta y abandona el puesto de trabajo porque las
personas que llegaron estaban disfrazadas de funcionarios públicos, manifestando que
debían arreglar un supuesto daño que se había generado en el sitio, por tal motivo el
vigilante se acerca y es ahí cuando se presenta el suceso que termina con su vida dejando a
su familia afectada tanto en el ámbito económico como psicológico.