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Capítulo II.

La Música en las Emociones

II.1 ¿Como influyen los sentimientos plasmados de una canción en un individuo?

Para hablar más acerca del tema, comenzaremos hablando sobre “El efecto liberador de la
música en las emociones” pues aún hoy la ciencia se debate sobre por qué la música está
tan directamente conectada a nuestras emociones. Esto último debido a que nadie sabe por
qué la música tiene un efecto tan potente en nuestras emociones, pero gracias a estudios
recientes ya contamos con algunas claves.

Nos gusta la música porque nos hace sentir bien. ¿Y esto por qué sucede?

En 2001, los neurocientíficos Anne Blood y Robert Zatorre de la Universidad McGill en


Montreal demostraron que las personas que escuchan música placentera activa regiones del
cerebro llamadas límbicas y paralímbicas, que están conectadas a respuestas eufóricas,
como las que experimentamos con el sexo, la buena comida o las drogas adictivas.

Estas respuestas proceden del impulso generado por el neurotransmisor conocido como
dopamina.

II.1I ¿Se pueden identificar las emociones en una canción?

Los científicos llevan años comprobando que la música es un lenguaje universal. Con unas
canciones se estimulan ciertas zonas en cualquier cerebro humano independientemente de
la capacidad entender sus letras. Se usa la música como terapia emocional o se
recomiendan canciones para trabajar con los adolescentes. Pero siempre se ha cuestionado
si algunos conceptos más complejos derivan de cada cultura específica. ¿Es confeccionada
igual una lista de Spotify sobre emociones en Occidente que en Oriente? ¿Se espera la
misma reacción cuando se etiqueta una lista de reproducción de YouTube en todas las
partes del mundo? ¿Cómo afecta la música a las emociones? Un estudio liderado por la
Universidad de California ha decidido investigarlo hasta encontrar algunas conclusiones.

Los expertos decidieron hacer dos experimentos diferentes con personas de China y
Estados Unidos con músicas de ambos países. En total, más de 2.000 personas participaron
en test para señalar qué tipo de sentimientos les producían las canciones. Los científicos
pudieron catalogar 13 diferentes emociones que despierta la música: diversión, alegría,
erotismo, belleza, relajación, tristeza, sueño, triunfo, ansiedad, miedo, molestia, desafío y
'energizante'.

Los resultados permitieron diseñar un mapa de melodías y reacciones. Es el poder de la


música sobre las emociones. Con 'Las cuatro estaciones' de Antonio Vivaldi no hubo dudas:
es una partitura que hace sentirse con energía a las personas. Con 'Somewhere over the
Rainbow' el sentimiento principal era el de felicidad, con la banda sonora de Psicosis era el
turno para el miedo y cuando escucharon heavy metal aseguraron sentirse desafiados.

Las 13 emociones que produce la música:

 Alegría.
 Ansiedad.
 Belleza.
 Desafío.
 Diversión.
 'Energizante'.
 Erotismo.
 Miedo.
 Molestia.
 Relajación.
 Tristeza.
 Triunfo.
 Sueño.

II.1II ¿Cómo reacciona el cerebro ante distintos géneros musicales?

Hoy en día la música es una parte muy importante en la vida de muchas personas, pues hay
canciones que siempre nos hacen recordar buenos momentos, pasarla bien, e incluso nos
llegan a hacer sentir mejor, ya que muchas veces ocupamos la música para expresar
nuestros sentimientos. Todos tenemos un gusto diferente por la música, ya sea por un artista
o un género en especial, es por esto que el día de hoy, hablaremos sobre los efectos que
tienen algunos tipos de música en nuestro cerebro.

Música Académica

Muchos piensan que este tipo de música nos vuelve más inteligentes, pues déjame decirte
que esto es un mito, sin embargo, la música académica le proporciona el cerebro un mejor
ambiente para desarrollar ideas, al igual que hace más eficiente la capacidad de aprendizaje
y de memoria, ya que sus efectos pueden ser incluso similares a los de la meditación.

Rock

Esta música en general se destaca por tener la capacidad de inyectar de cierta manera
adrenalina en el cerebro, algunos estudios incluso han relacionado a este género musical
con un incremento en la resistencia física a la hora de hacer ejercicio, principalmente en las
etapas de acondicionamiento físico y fuerza.

Jazz y Blues

Estos géneros un tanto parecidos entre sí, ayudan a la relajación del cuerpo y la mente en
momentos de angustia o de tristeza, a diferencia de la creencia popular, este tipo de música
no te pondrá triste, pues en realidad logrará hacerte pasar un momento más agradable, ya
que los efectos de escucharla pueden ser similares a los del tabaco cuando se fuma un
cigarro.

Electrónica

Este estilo musical se caracteriza por lograr estimular las hormonas energéticas que
promueven la actividad constante, debido a esto en la mayoría de los lugares donde alguien
suele ir a bailar se encuentra con este tipo de música, pues sus efectos se pueden comparar
con los de algunos energizantes y bebidas vitamínicas.

Reggaetón

Sus efectos en el cerebro son parecidos a los del rock y la música electrónica, contrarios a
la música clásica pues sus ritmos repetitivos hacen que la concentración sea más difícil, sin
embargo, la energía que este tipo de música transmite puede ser ideal para hacer ejercicio o
bailar.

Salsa

Con el estilo alegre que caracteriza a este tipo de música, la salsa produce dopamina y
adrenalina en el cerebro, logrando activar nuestro cuerpo por lo que es uno de los géneros
musicales más idóneos para bailar pues sus efectos logran liberar el estrés, aumentar la
capacidad cardiorrespiratoria y mejorar la coordinación y el equilibrio.

Referencias:
 Chichón, M.J.; Lacárcel, J.; Lago, P.; Melguizo,F.; Ortíz, T.; Sabbatella,P.;
(1999): Música
 y Salud: Introducción a la Musicoterapia II”. Madrid. Universidad Nacional
de Educación a Distancia.
 Despins, Jean Paul (1989): “La música y el cerebro”. Barcelona. Ed.Gedisa.
 Elías, M.J.; Tobías, S.E.; Friedlander, B.S. (1999): “Educar con inteligencia
emocional”.
 Barcelona. Plaza y Janés Editores S.A.
 Gaynor, Mitchel L. (2001): “Sonidos que curan”. Barcelona. Urano.
 Goleman, Daniel (1966): “La inteligencia emocional”.
 (1998): “La práctica de la inteligencia emocional”. Barcelona. Edit. Kairós.
 Hargreaves, David (1986): “The Developmental Pschology of Music”.
Cambrigde University Press. Traducción (1.998): “Música y desarrollo
psicológico”. Barcelona. Edi. Graó.

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