Maxim Vengerov habla sobre la importancia de estudiar la parte de piano u orquesta al estudiar una obra para solista, ya que esto ayuda a encontrar la "magia" en la pieza y a comprender mejor la intención del compositor. También enfatiza la importancia de interactuar con los músicos que te acompañan y saber cuándo dar un paso atrás para dejar que otros se expresen, en lugar de siempre ser el centro de atención. Además, afirma que es un error pensar que el solista es lo único importante y que debes considerar y apre
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Maxim Vengerov habla sobre la importancia de estudiar la parte de piano u orquesta al estudiar una obra para solista, ya que esto ayuda a encontrar la "magia" en la pieza y a comprender mejor la intención del compositor. También enfatiza la importancia de interactuar con los músicos que te acompañan y saber cuándo dar un paso atrás para dejar que otros se expresen, en lugar de siempre ser el centro de atención. Además, afirma que es un error pensar que el solista es lo único importante y que debes considerar y apre
Maxim Vengerov habla sobre la importancia de estudiar la parte de piano u orquesta al estudiar una obra para solista, ya que esto ayuda a encontrar la "magia" en la pieza y a comprender mejor la intención del compositor. También enfatiza la importancia de interactuar con los músicos que te acompañan y saber cuándo dar un paso atrás para dejar que otros se expresen, en lugar de siempre ser el centro de atención. Además, afirma que es un error pensar que el solista es lo único importante y que debes considerar y apre
Maxim Vengerov habla sobre la importancia de estudiar la parte de piano u orquesta al estudiar una obra para solista, ya que esto ayuda a encontrar la "magia" en la pieza y a comprender mejor la intención del compositor. También enfatiza la importancia de interactuar con los músicos que te acompañan y saber cuándo dar un paso atrás para dejar que otros se expresen, en lugar de siempre ser el centro de atención. Además, afirma que es un error pensar que el solista es lo único importante y que debes considerar y apre
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Maxim Vengerov
La importancia de la asignatura de repertorio con piano
Ideas principales de cada uno de los extractos
En el primer extracto Vengerov comparte dos ideas: La primera es el hecho de que puedes obtener ideas para la interpretación de una pieza simplemente a partir de su base armónica. La segunda es que la parte orquestal de una obra sirve para ayudarnos a encontrar una especie de «magia» (según llama él) que, de otro modo, no encontraríamos, puesto que tocar solos nos lleva en la mayoría de casos a cometer errores. En el segundo extracto habla sobre la importancia del estudio previo de la partitura general antes del estudio técnico y práctico con el instrumento. Afirma que su organización del estudio consiste en, antes que nada, leer la partitura y estudiar los detalles, incluida la parte de piano u orquesta en caso de que la haya. Y solo una vez tiene la partitura bien aprendida coge el violín e intenta expresar las ideas que ha creado su mente y su percepción de la obra. En el tercer extracto el violinista habla sobre la importancia del lenguaje corporal, de saber mirar e interactuar con quien te acompaña. Afirma que, si como solista te preocupas de simplemente tocar bonito y eres capaz de rebajarte, mirar a la gente que te acompaña y participar con ellos, al final el otro se interesa. Y que debe ser trabajo del propio intérprete llamar su atención. De hecho, incide mucho en que se debe aprender a construir sobre lo que se tiene, y esto implica tener que rebajarse a uno mismo alguna vez. Hay que tener en cuenta que no siempre tenemos que estar llevando la carga de la música y lucirnos, sino que hay mucho más allá, mucha más música. A pesar de que sea una obra para solista puede haber momentos camerísticos e independientemente de lo que tengas en la partitura no siempre es tu momento de solo. Vengerov afirma que, aunque es el pensamiento común, no siempre somos los únicos solistas y, por tanto, no hace falta pasarse haciendo música e intentando ser musical, puesto que las otras personas deben poder expresarse también. Como solista, independientemente de si tienes melodía o acompañamiento, las otras personas implicadas en la música existen y hay que tenerlas en cuenta, aunque no sea todo el rato (tampoco hace falta). De hecho siente que, aunque el solista no tocase, podría disfrutar igualmente de la obra puesto que no solo hay música importante en la parte solista. Breve reflexión Personalmente creo que es imposible no darle la razón a Vengerov. Un compositor compone una obra, con sus respectivas voces (en el caso de) para concebirla como un todo, eso para empezar. Es como si fuera un puzzle: por mucho que puedas ver la imagen que se forma a medida que lo vas encajando, hasta que no están todas las piezas en su sitio no está completo. Siempre será importante escuchar el acompañamiento puesto que la armonía es una gran ayuda al llevar implícito todo el tema de progresiones, tensiones… y es que, si no empiezas a sacar las ideas de ahí, ¿de dónde? Vengerov se refiere a lo que se puede llegar a encontrar en el acompañamiento como una especie de «magia», yo lo llamaría «el trabajo del compositor». Respecto al tema del estudio, creo que me he ido concienciando durante estos años de superior de las lagunas con las que puedo llegar a aparecer en una clase de repertorio con piano y de la importancia que tiene solucionarlas cuanto antes, puesto que es lo básico para poder trabajar en la hora de clase. Me he dado cuenta de la diferencia que marca tocar acompañado sabiendo qué pasa más allá de tu parte: entrelazar tus frases con las del acompañamiento, ser capaz de tararear la música cuando tienes compases de espera, saber crear una conversación entre las diferentes voces… modifica completamente la experiencia y las percepciones, incluso tu nivel de seguridad y comodidad en el escenario. Y de hecho pienso que, dejando de lado la responsabilidad personal, quizá hay un fallo en nuestra educación previa, o algo que no cuaja puesto que, al menos desde mi experiencia, puedo decir que se ha aludido más bien poco a lo que tocar acompañado se refiere. Ya sea por no tener los medios adecuados, puesto que siempre estamos luchando por tener más tiempo con los profesores de repertorio o, en el mejor de los casos, tener más profesores; o porque quizá se subestima la dificultad y no se cae en que es una cosa a la que se debe dedicar tiempo, estudiar y practicar. Las ideas que comparte Vengerov en el tercer extracto son las que requieren más madurez musical o, al menos, es lo que siento personalmente. Puedes saberte entera la partitura, haber elegido hacia dónde dirigir la música y cómo estarán organizadas tus frases; pero ponerse en el escenario y saber transmitir de manera corporal, cuándo es tu turno o no, si tienes que dar más o menos de ti, saber lo que la obra puede dar por sí misma… me parece lo más complicado. Y ojalá algún día ser tan musical que Vengerov me diga que me estoy pasando.