El documento resume la historia política de Honduras entre 1972 y 1982, un período de transición del poder militar a los civiles. Incluye los gobiernos de Ramón Ernesto Cruz (1971-1972), Oswaldo López Arellano (1972-1975), Juan Alberto Melgar Castro (1975-1978), la junta militar (1978-1980) y Policarpo Paz García (1980-1982). Cada régimen enfrentó desafíos económicos y sociales como reforma agraria, desastres naturales, corrupción y conflictos en Nicaragua que afect
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El documento resume la historia política de Honduras entre 1972 y 1982, un período de transición del poder militar a los civiles. Incluye los gobiernos de Ramón Ernesto Cruz (1971-1972), Oswaldo López Arellano (1972-1975), Juan Alberto Melgar Castro (1975-1978), la junta militar (1978-1980) y Policarpo Paz García (1980-1982). Cada régimen enfrentó desafíos económicos y sociales como reforma agraria, desastres naturales, corrupción y conflictos en Nicaragua que afect
El documento resume la historia política de Honduras entre 1972 y 1982, un período de transición del poder militar a los civiles. Incluye los gobiernos de Ramón Ernesto Cruz (1971-1972), Oswaldo López Arellano (1972-1975), Juan Alberto Melgar Castro (1975-1978), la junta militar (1978-1980) y Policarpo Paz García (1980-1982). Cada régimen enfrentó desafíos económicos y sociales como reforma agraria, desastres naturales, corrupción y conflictos en Nicaragua que afect
El documento resume la historia política de Honduras entre 1972 y 1982, un período de transición del poder militar a los civiles. Incluye los gobiernos de Ramón Ernesto Cruz (1971-1972), Oswaldo López Arellano (1972-1975), Juan Alberto Melgar Castro (1975-1978), la junta militar (1978-1980) y Policarpo Paz García (1980-1982). Cada régimen enfrentó desafíos económicos y sociales como reforma agraria, desastres naturales, corrupción y conflictos en Nicaragua que afect
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El retorno del reformismo y su proyecto político (1972-1979):
La tercera etapa del Estado desarrollista: La transición del poder militar a los civiles Ramón Ernesto Cruz (6 de junio de 1971 al 4 de diciembre de 1972) Después de la guerra entre Honduras y El Salvador en 1969, donde los militares perdieron credibilidad por su inoperancia, el sentimiento de unidad nacional que la misma guerra había provocado llevó a un proceso electoral y a un gobierno de unidad nacional en 1971. Así, las elecciones de abril de 1971 le dieron un dudoso triunfo a Ramon Ernesto Cruz, del 23%, superado en más del doble por el abstencionismo. El Gobierno de Ramon Ernesto Cruz fue acusado de incumplir el pacto, al no aplicar el programa de Reforma Agraria, incrementando así la protesta campesina. Finalmente, el pacto entre los dos partidos tradicionales no funcionó, lo cual hizo aparecer de nuevo en escena a los militares, quienes en 1972 vuelven a dar otro golpe de Estado, esta vez para continuar el proceso reformista con apoyo popular.
El régimen militar reformista
Oswaldo López Arellano (4 de diciembre de 1972 al 22 de abril de 1975) Inició el Plan de Desarrollo (1974-1978) con la profundización de la reforma agraria. No obstante, las reformas de carácter populista desalentaron a la inversión privada, lo que unido a desastres climatológicos produjeron una contracción del 10% en el sector agropecuario entre los años 1973 y 1975. Arellano asumió la organización de un plan de emergencia para contrarrestar los efectos del huracán Fifí, el cual golpeó duramente a Honduras a mediados de septiembre de 1974, generando importantes daños al norte del país. La catástrofe produjo pérdidas estimadas en 200 millones de dólares, correspondiendo más de la mitad a la industria bananera. Para hacer frente a la reconstrucción, Honduras debió endeudarse con 600 millones de dólares, tomados de diversos organismos financieros internacionales. La corrupción administrativa propicio su dimisión. Las consecuencias de los supuestos sobornos entre la United Brand y miembros del gobierno tuvieron severas consecuencias para Arellano, a quien le fue retirada la comandancia de las Fuerzas Armadas y sustituido en ese cargo por el General Juan Alberto Melgar Castro. Por la investigación, sería acusado formalmente el Ministro de Economía, quien sería liberado luego del pago de una fianza. La crisis del estado desarrollista El régimen militar y el consejo asesor General Juan Alberto Melgar Castro (22 de abril de 1975 al 7 de agosto de 1978) Su gobierno reprimió la base social que había sustentado al Reformismo entre 1972-1975. Varios dirigentes de la empresa campesina de Isletas fueron reprimidos y asesinados, la empresa sometida a control militar, los centros universitarios resultaron amenazados; así ocurre la quema del taller de publicaciones de la UNAH en 1976, entre 1976 y1977 se prohíben las protestas públicas de estudiantes y maestros. El 09 de marzo de 1976 Creó el Consejo Asesor de la Jefatura de Estado (CADEJE); con la intención de que coordinara los pasos hacia el régimen democrático, y que por otra parte supusiera una cierta legitimación del gobierno militar. El Consejo no fue bien aceptado ni por los partidos políticos tradicionales, que veían en el mismo una cierta forma de perpetuación del régimen militar, ni por amplios sectores del Ejército, que consideraba a este, organismo como algo que se interponía al control directo del Gobierno por parte del Consejo Superior de las Fuerzas Armadas, verdadero centro del poder en el país. En 1977, promulgó una nueva Ley Electoral que entraría en vigor el primero de enero del año 1978. En la nueva ley se contempla la existencia de un Tribunal Nacional de Elecciones compuesto fundamentalmente por miembros designados por los partidos políticos. No obstante, fue reemplazado en agosto de 1978 por una Junta Militar, debido a disputas internas de poder.
El gobierno de junta militar
(7 de agosto de 1978 al 27 de enero de 1982) Integrada por el Jefe de las Fuerzas Armadas, el Gral. Policarpo Paz García, el Comte. de la Fuerza Aérea, Cnel. Domingo Álvarez Cruz y el Comte. de la Fuerza de Seguridad Pública (FUSEP) el TC. Amílcar Zelaya Rodríguez. Este triunvirato organizaría las elecciones de la Asamblea Constituyente que lo elegiría como presidente el 20 de abril de 1980. Para el año de 1979 la economía hondureña se había desplomado y como consecuencia, los gobiernos militares estaban desgatados políticamente ya que, entre otras cosas, abandonaron el programa de reformas impulsado por ellos mismos en 1972 y se vieron envueltos en escándalos de corrupción, sobornos y tráfico de drogas.
El gobierno de Policarpo Paz García
(27 de enero de 1980-27 de enero de 1982) Policarpo Paz García fue designado Presidente de la República por las facciones políticas presentes en el parlamento, dándole un “voto de confianza” y de “reconocimiento” a las Fuerzas Armadas y a la Junta Militar hasta que se realizaran elecciones con participación popular. Durante su gestión, los organismos financieros internacionales otorgan a Honduras numerosos préstamos para la realización de obras públicas, como el emplazamiento hidroeléctrico “El Cajón” y el proyecto de Bajo Agua, los cuales estuvieron sospechados de encontrarse inmersos en prácticas corruptas, y aumentaron considerablemente la deuda externa. La situación en Nicaragua tuvo su repercusión en Honduras, donde se inició una campaña armada para contrarrestar a los elementos sandinistas que habían cruzado la frontera, y a las agrupaciones guerrilleras salvadoreñas que deseaban sumarse a las hostilidades. La respuesta de Paz García generó una gran cantidad de desapariciones y muertes en las calles de las ciudades fronterizas hondureñas. Ante la política dura iniciada por el gobierno, Honduras comenzó a recibir importantes fondos para asistencia militar y préstamos de diversa índole, además de la ayuda del gobierno estadounidense, el cual aportó desde dinero, armas y entrenamiento, hasta municiones y helicópteros. Convocó a elecciones para la Asamblea Nacional Constituyente, el 29 de noviembre de 1981. En enero de 1982, luego de un proceso electoral libre organizado pensando en la transición hacia la democracia, entrega el poder a Roberto Suazo, y se retira de la vida política activa