ACTITUD
ACTITUD
ACTITUD
Y su vida está
influenciando a alguien. Quizá sea un niñito, y aquel niñito pueda crecer para ser otro finney o Moody, o
quien sea. No sabemos. Pero su vida está influenciando a alguien más.
La gente Hispana es humilde, están dispuestos a recibir, recogen las migajas… Uds. vienen con
esa actitud y por eso es que son sanados, por eso es que son sanados, porque vienen con humildad;
cualquiera que venga todo inflado jamás recibirá algo de Dios, hay que ver cuan humillado puede estar
uno y entonces Cristo lo sana, lo salva y le dará el Espíritu Santo.
¿Saben Uds. qué sucedería esta noche en Phoenix si el Maestro estuviera aquí y dijera algo así? Pues
estallarían y se irían; pero aquel hombre no era ese tipo de persona, era humilde y lo más importante
para Él era que Cristo se acercara a Su hijo, pero uno ve gente que toma una actitud y suponen que
deben ser preferidos antes que los demás, esos no reciben nada de Dios; pero los que están dispuestos
a quedarse atrás, los que le dan la preferencia a otros, esos son los que reciben algo de Dios.
Mientras yo les presento a Cristo, Él estará en sus manos y Uds. tendrán que responder por
esa actitud que tomaron hacia Él; si lo aceptan o rechazan, Dios los hará responder por esa actitud en
este culto.
Nosotros siempre recibimos lo que esperamos, cuando la gente espera algo, generalmente recibe lo que
espera, es la actitud mental que se tenga. Recuerden esto y nunca lo olviden: La actitud mental correcta
hacia cualquier Promesa de Dios, hará que suceda. La actitud mental correcta hacia cualquier Promesa
de Dios.
EXPECTATIVAS 05-04-50
En esta noche me gusta la actitud del centurión, lo acabamos de leer. Él fue un hombre que se sintió
indigno y mientras Ud. se sienta igualmente indigno de la bendición que está pidiendo, está en las
mejores condiciones de recibirla. Pero cuando llega a un punto en el que Ud. cree que Dios le debe algo,
está equivocado. Nosotros estamos en deuda con Dios y no Él en deuda con nosotros. Estamos en deuda
con Dios.
Alguien me escribió una carta no hace mucho y Dios mío, me hicieron pedazos por el culto del Domingo
en la tarde. ¡Mi hermano! Era una dama y me dijo: “Yo fui a ver milagros, no a escuchar lo que sucedió
en la vida de alguien”. Hermana, con esa actitud nunca los verá hasta que ocurra uno en Ud. y sea
convertida. Correcto. Porque su corazón no está bien con Dios, su actitud hacia Dios así lo prueba.
Algunos se preparan mentalmente cuando asisten al culto y vienen a criticar cualquier cosa; bueno,
Satanás se asegurará de mostrárselo. Si viene determinado a ver lo bueno, va a encontrar algo bueno,
Dios se los mostrará. Es su actitud amado Cristiano.
Todos los que están aquí, ¿entienden Uds. lo que quiero decir cuando digo: la actitud correcta?
Su actitud mental correcta hacia las Promesas Divinas de Dios hará que ocurran. Tal vez Ud. no lo crea y
diga: “Mi fe es débil”. Yo no confesaría eso, no permita que el diablo lo sepa, diga siempre: “Tengo
buena fe y creo a Dios con todo mi corazón”. No testifiquen nada del diablo.
Eso es lo que deberíamos hacer siempre: Tratar de hacer algo para ayudar a otro; después de todo, esa
es la actitud Cristiana hacia las cosas.
Cuando Ud. rechaza a Jesucristo el Salvador y Dios, ya no tiene que ser juzgado porque ya fue juzgado;
su actitud hacia el Camino provisto por Dios lo ha juzgado.
Es la actitud suya hacia las cosas, no condene a los demás si hacen lo malo, sea bueno con ellos de todas
formas y pase por alto esas cosas, porque Dios tuvo que pasar por alto mucho de Ud. y de mí. Correcto.
Que Dios nos ayude a tener siempre esa actitud en nuestros corazones y Uds. oren por mí para que ya
no vuelva a mirar a la gente de esa manera, no importa lo que hagan; para que siempre los mire bien
porque son criaturas de Dios y Él envió a Su Hijo para ocupar el lugar de ellos. Como ministro estoy
agradecido que Él me haya perdonado y quiero que Él los perdone a ellos también. Así deberíamos
hacerlo.
TESTIMONIO 02-09-53
Daniel dijo: “Me voy a proponer en mi corazón sin importar cuánta presión me hagan, cuánto se burlen
y digan que soy un aleluya, eso no me molestará en lo más mínimo, voy a serle fiel a Dios sin importar lo
malo que pueda ocurrir”. Así es, cuando Ud. comienza con esa actitud llegará a alguna parte.
Jezabel, ese es un nombre que le da escalofríos a todos, el solo hecho de mencionar a Jezabel. Pero ese
era un nombre común como Marta, Rut, María o algún otro nombre; pero cuando escuchan el nombre
de Jezabel… todo por una mujer que tomó el camino equivocado.
Ahora, yo podría imaginarme a Jezabel... no fue por tener el nombre Jezabel lo que la hizo ser lo que
fue, no fue el nombre lo que hizo eso sino su actitud. Eso fue. Ese nombre no debería darnos escalofríos
tanto como la actitud que ella tomó… no fue su nombre sino su pecado lo que la convirtió en lo que fue.
Su nombre no lo convierte en lo que Ud. es, es su carácter lo que lo hace; su carácter lo moldea y lo
convierte en eso que Ud. es.
Dios quiere una iglesia sobre la que Él pueda poner Sus manos sin importar cuan pequeña sea. Donde
estén dos o tres reunidos en Mi Nombre, allí estaré Yo en medio de ellos. No es sólo decirlo. Ud. dirá:
“Nosotros nos reunimos en Su Nombre”. Pronunciar el Nombre de Jesús de palabra no es lo que Él quiso
decir tanto como la actitud con la que se reúnan, el ambiente de ese Nombre de Jesús. “Cuando se
reúnan en Mí Nombre pidan lo que quieran”. Ese es el motivo por el que viene, la actitud; es más bien
una actitud en vez de invocar un Nombre. Los pecadores pronuncian ese Nombre en la calle, lo maldicen
y todo lo demás; pero es el ambiente en el que Ud. se encuentre y la actitud con la que venga en el
Nombre de Jesús.
Cristo se encuentra con el hombre en distintas situaciones. Algunas veces se encuentra con el hombre
en grandes multitudes y otras veces en grupos reducidos, el número no significa que Cristo esté allí o no,
es más bien la actitud de la gente en ese grupo lo que determina tal cosa.
A ÉL O ELLA 15-12-56
No crea que Ud. puede ir, pecar y salirse con la suya; si lo hace y tiene esa actitud, eso demuestra que
Ud. no ha nacido de nuevo. ¿Lo entienden? Si todavía tiene el deseo en Ud. de hacer lo malo, entonces
todavía está mal. Porque Él ha perfeccionado para siempre a aquellos que…
Su actitud hacia Cristo producirá una tremenda impresión en lo que serán sus hijos. La vida que Ud. vive
delante de su familia dejará una impresión en lo que serán sus hijos. Porque la Biblia dice que Él visita la
iniquidad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y cuarta generación.
¿Saben Uds. lo que es una bendición? Hagan algo por alguien. Correcto. Si tienen un prójimo o alguien
que ha actuado injustamente con Uds., recuerden esto, jamás lo rechacen, llévenlo a Dios en oración y
se darán cuenta que tendrán una actitud distinta.
Si Ud. es sincero en su oración y se para hombro a hombro con él, aún cuando le ha hecho mal o
injustamente, lleve a ese hombre ante Dios y esté en la Presencia del Padre una vez y diga: “Padre, mi
prójimo ha actuado mal conmigo…”. Fíjense, cuando Ud. comienza a decirle lo malo que ha hecho, no
sólo lo ayudará a él sino a Ud. mismo también, se dará cuenta que él ha pasado por tentaciones y otras
cosas, eso cambiará su actitud hacia ese hermano y lo ayudará a él también. Siempre harán bien cuando
oren los unos por los otros.
Si nos damos cuenta, difícilmente hay una hora del día en que no hagamos algo que esté mal y no hay
pequeños o grandes, todos son grandes ante Dios. Entonces si el apóstol Pablo tenía que morir
diariamente, ¿cuánto más debemos morir nosotros diariamente?
Yo creo que si una persona ha hecho algo malo y está dispuesto a arreglarlo, la actitud Cristiana genuina
sería perdonar a esa persona. Hno. Graham yo creo que ahí es donde la gente en la iglesia falla hoy
tanto, en vez de intentar levantar a la persona nuevamente sólo tratan de alejarla más. Fíjese, cuando
nosotros estábamos en lo más bajo, Cristo vino y nos levantó, así que nosotros también deberíamos
tener ese mismo tipo de Espíritu.
Hoy no necesitamos tener grandes cosas materiales, ya las tenemos. Ni tampoco grandes iglesias o
grandes congregaciones ni programas radiales o de TV. Muchas de esas cosas no son necesarias. Hoy lo
que necesitamos es ser espirituales, humillarnos ante la Presencia de Dios, aunque no tengamos un
centavo y orar hasta que el espíritu en nosotros se satisfaga con la bondad de Dios, entonces el
avivamiento vendrá a nuestro corazón y cambiará la actitud y la atmósfera en que vivimos.
Ahora recuerden que es la persona enferma la que necesita atención o servicio, es el enfermo el que
requiere atención y cuando uno ve a un predicador... y no quiero limitarlo a los predicadores sino a
todos los miembros de la iglesia que requieren atención y dicen: “Yo soy alguien”. Recuerden que esa es
una persona espiritualmente enferma y necesita atención, necesita la atención del Espíritu de Dios que
les dé algo para sacarle esa actitud y sanarle de su egoísmo, de sus grandes ideas y de sus: “Yo soy
grande y tú no eres nada”. El Espíritu Santo nos hace a todos iguales.
Dios batalla mucho tratando de hallar a alguien con quien pueda lidiar y que permanezca humilde y
manso en su lugar hasta que Dios lo llame a hacer algo… Un hombre al que Dios pueda bendecir y que
siga siendo hombre, no un ángel o un dios; tan pronto el hombre es bendecido y se le da algo, quiere
convertirse en un dios o quiere llegar a ser un ángel, quiere llegar a ser una gran persona y dice: “Lo que
yo hago... Yo y yo y lo mío...” Cosas así. Esa es una actitud errada. Dios busca a alguien a quien pueda
bendecir y sobre quien pueda derramar las bendiciones y que mientras más Dios lo bendiga el hombre
se haga más pequeño.
Esta noche será historia mañana, si es que llega ese mañana; pero nuestra actitud hacia Cristo en esta
noche podría determinar lo que seamos en la historia mañana; así que comencemos esta noche bien el
culto humillándonos y poniendo a un lado todo peso que nos rodea, para que podamos correr con
paciencia la carrera que tenemos por delante.
Hay una Escritura en mi mente sobre Ocozías el hijo de Acab, que fue un mal rey en Israel. Acab se casó
con una pagana y la hizo reina, Jezabel, quien llevó a Israel a la idolatría. Acab fue lo que llamaríamos un
creyente a medias, creía sólo cuando había problemas, pero tan pronto salía de ellos, él se volvía a su
idolatría. Después de su muerte reinó en su lugar su hijo Ocozías en Samaria, mientras que Josafat
reinaba sobre Judá. Él no reformó nada sino que tomó la misma actitud de su padre y su madre de
adorar a Beelzebu el dios de Ecrón.
Un día mientras caminaba en su palacio en Samaria cayó de una ventana y se hizo daño y yo supongo
que enfermó a tal punto que los médicos ya no podían hacer nada por él, entonces envió a dos de sus
siervos escogidos para que fueran a otro lugar donde estaba Beelzebu y le preguntaran si iba a sanar o
no.
Recuerden que él era Israelita pero se había apartado de las Promesas de Dios. Cuando un supuesto
Cristiano toma la misma actitud que él tomó, no puede esperar más que problemas.
Ud. nunca echará fuera un demonio con una mala actitud, se necesita amor para hacerlo. El amor es la
fuerza más poderosa que hay en el mundo. Si se dan cuenta, el diablo siempre odia y el odio es del
diablo. Cuando la gente odia a alguien... recuerden que despreciar o aborrecer es un demonio terrible.
Uds. nunca deben hacer eso.
PREGUNTAS Y RESPUESTAS 23-12-59
Hay muchas ocasiones en que un ministro puede cometer un error. Si a un vecindario llega un precioso
hermano que está tratando de hacer lo correcto y de guiar bien al pueblo, el diablo hará todo lo que
pueda para mostrarle algo al incrédulo o al así llamado Cristiano de ese vecindario, para desprestigiar a
ese hombre. Uds. saben, la actitud del verdadero Cristiano es esconder todo lo que pueda de un
hermano, no comente sus cosas malas, diga sólo lo bueno. Sólo diga lo bueno que sepa de él. Si algo
está mal, deje eso tranquilo, de todas formas el pobrecito ya tiene suficiente contra él; no trate de
tomar un palo y hundirlo más en la zanja. La actitud Cristiana es levantarlo y sacarlo del hoyo, no traten
de hundirlo más porque ya está allí; intenten ayudarlo a salir.
Doctor Schoen”. Y él me dijo: “Hno. Branham, nosotros tenemos registros que cuando le decimos a una
persona que tiene una enfermedad o algo que lo puede matar, como una úlcera que está a punto de
estrangularse o tuberculosis, todo depende de la actitud que ellos tomen; si se desaniman mueren de
inmediato, pero si toman cierta actitud como decir: ‘Bueno, morir es parte de la vida o todo estará bien
si muero'. Eso retarda el proceso”. Yo pensé: “Si con una actitud mental así… ¿cómo será cuando el
Espíritu Santo toque a ese hombre internamente?”
Ese es uno de los mejores cirujanos y médicos que hay en todo el Sur y dijo: “Señor Branham, eso se
puede probar. Si un individuo puede llegar a un punto donde ni siquiera su mente sabe que tiene eso o
puede pensar que lo tiene pero no le presta atención, eso funciona si puede creerlo”.
El otro día hablaba con un grupo de médicos y uno me dijo: “Leí su libro sobre la Sanidad Divina”. Yo le
dije: “Supongo que lo criticó”. Y me dijo: “No señor, admito que Ud. tiene razón”. Le dije: “Gracias Antes
de orar por los enfermos, tenemos que hacer entrar a la gente en esa actitud, porque es la actitud la que
siempre produce resultados, la actitud que Ud. tenga hacia Dios. Una mujer tocó Su manto y fue sanada
de un flujo de sangre; pero un soldado escupió Su rostro y le puso una corona de espinas sobre su
cabeza y no sintió ninguna Virtud. Es su actitud. Lo que se necesita es la actitud y es igual esta noche
querido amigo, se necesita la actitud. Nosotros creemos que estamos en la Presencia de Jesucristo, pero
es su actitud la que produce los resultados. La mecánica está aquí y la dinámica también, si tan sólo Ud.
puede despegar Dios hará el resto.