Ensayo Del El Porfiriato

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Ensayo del el Porfiriato

Con la caída de Maximiliano, México recuperó a plenitud su soberanía. El


Presidente Benito Juárez se dedicó a reorganizar la administración civil y militar,
reduciendo el efectivo del Ejército. Insatisfecho con su situación política, el General
Porfirio Díaz lanzó el Plan de la Noria el primero de octubre de 1871, levantándose
en armas contra el gobierno Juarista, pero fracasó. Dicho Plan pugnaba por la “No
Reelección”. 

El 18 de julio de 1872, víctima de una angina de pecho, falleció el Licenciado Benito


Juárez, figura fundamental en la historia de México. A su muerte, el Licenciado
Sebastián Lerdo de Tejada asumió la presidencia por Ministerio de Ley. Su gobierno
transcurrió sin mayores incidentes hasta que pretendió reelegirse. 

El Plan de Tuxtepec fue lanzado el 1/o. de enero de 1876. Porfirio Díaz planteaba el
propósito de evitar la reelección de Lerdo de Tejada. 

El 20 de mayo de 1876, en Ica mole, tropas leales infringieron una terrible derrota a
los sublevados comandados por el General Porfirio Díaz, quien se vio obligado a
retirarse al sur de la República. A pesar de su derrota en Ica mole, el General
Porfirio Díaz continuó combatiendo a los lerditas. El 16 de noviembre de 1876, se
produjo la Batalla de Tecoac, enfrentándose Díaz con el Gral. Ignacio R. Alatorre;
durante el reñido combate, ambos bandos estuvieron cerca de la victoria, pero la
oportuna llegada de refuerzos porfiristas, al mando del Gral. Manuel González,
provocó la derrota de Alatorre.

Derrotadas en Tecoac sus mejores tropas, Sebastián Lerdo de Tejada no tuvo más
remedio que renunciar a la presidencia, la cual fue asumida, el 28 de noviembre de
1876, por el General Porfirio Díaz, quien había entrado triunfante a la Capital el 21
del mismo mes.

Al asumir la Presidencia el General Porfirio Díaz, se dio a la tarea de reestructurar el


Ejército; creó el Cuerpo Especial de Estado Mayor, que tenía como función formar la
Carta General de la República, redujo las unidades militares y las que quedaron las
profesionalizó. Impulsó la educación militar con la creación de la  Escuela Naval
militar, Escuela Militar de Aspirantes y la Escuela Militar de Esgrima.

El Porfiriato fue una etapa difícil e importante en México en la que Porfirio Díaz se
adueñó de la presidencia durante más de treinta años.

Desde noviembre de 1876 hasta mayo de 1911 tuvo México un solo jefe político, el
general Porfirio Díaz. Pero durante cuatro años de este largo período hubo otro
general en la presidencia de la República, Manuel Gonzáles, pero en realidad, la
jefatura política del país fue conservada por Díaz quien siguió durante su larga
gubernatura las mismas directrices políticas de Juárez y Lerdo:

Mantuvo e incluso acentuó, la secularización del estado; Promovió todo lo que pudo
el fomento material del país, y de una manera particular las obras públicas;

Procuró conciliar y unir a los diferentes sectores políticos; y se atuvo a la legalidad


constitucional, pero observando la constitución… a su manera.

Porfirio Díaz en efecto instauró una dictadura constitucional. La dictadura era real y
la constitución era la quimera o la fachada con la que pretendía ocultar la realidad.

Porfirio Díaz mantuvo cuidadosamente la fachada; pero por medio de mecanismos


caciquiles impuso en todas partes a sus candidatos y, a través de sus ministros y
agentes, impuso a los diputados, gobernadores etc., lo que debían hacer.

La dictadura de Díaz duró 31 años. En sus últimos tiempos reiteró que el país ya
estaba listo para la democracia, pero nunca hizo ningún intento real por abandonar
el poder. Cuando en 1910, con 80 años de edad, presentó nuevamente su
candidatura a la presidencia, el descontento de dichas acciones desató la rebelión
de Francisco I. Madero del 20 de noviembre de ese año, encendiendo así la mecha
de la Revolución Mexicana venidera. Habiendo sido derrotado militarmente y en el
terreno político, Porfirio Díaz renunció a la presidencia al año siguiente y abandonó
el país para siempre, poniendo así fin al período del Porfiriato.

El Porfiriato fue una dictadura, y como tal, centralizó el poder en la figura de Porfirio


Díaz, cuya voluntad suplantó las garantías establecidas en la Constitución de la
época, convirtiéndose en el motor y el volante del país entero. Esto fue posible
porque era sumamente popular entre la clase militar, así que reformó a su antojo al
ejército y subordinó a ellos a la policía federal y a una policía rural con las cuales
mantuvo el orden en todo el país. Esto no impidió que hubiera rebeliones,
levantamientos, protestas y conflictos, pero ninguno logró hacer tambalear
el gobierno.

En los años que se mantuvo logro grandes avances como:

La extensión del sistema ferroviario, el mayor medio de transporte en México. Las


rutas de ferrocarril recorrían el país, de la capital hacia la frontera norte y
de Veracruz. En su mayoría fueron atendidos por extranjeros, en concesiones por
determinado tiempo. Al principio, se concesionaron para ir cubriendo las deudas
externas, pues el gobierno hizo un arreglo con ellos para que una parte de sus
ganancias se considerara abono de la misma. Lo planeado era que una vez que se
cumpliera el plazo, las instalaciones y el servicio pasaran a manos del gobierno.
Para ello, el secretario de Hacienda, José Ives Liman tour, creó Ferrocarriles
Nacionales de México. Asimismo, con capitales locales, se hizo una red
independiente en la península de Yucatán, en la parte de las haciendas
henequeneras.

La electricidad, gracias a la cual un creciente número de empresas pudo montar


fábricas e industrias cuyo funcionamiento se mejoró debido a este avance o hubiera
sido impensable su existencia, como sucedió con todas las empresas del valle
de Orizaba.

La industria petrolera, que se volvió importante hacia finales de la época, y que


estuvo en manos de compañías extranjeras.

En refiere a la cultura y la educación, hubo fuertes corrientes renovadoras sobre


todo al final del Porfiriato, el positivismo continuó siendo el dueño absoluto del
campo cultural, pero en la primera década del siglo XX ganó un poco de terreno el
espiritualismo, la literatura abandonó el romanticismo y abrazó el modernismo.

Aumentaron las escuelas públicas significativamente, las escuelas privadas y


confesionales fueron desapareciendo para dar paso a la educación laica y pública.
Para 1910 el número de escuelas primarias oficiales era, por lo menos, tres veces
mayor que el de las particulares, pertenecientes en su mayor parte a las órdenes
religiosas.

Hubo avances en la educación y en la creación de museos y centros culturales, pero


también hay que decir que la mayoría de las ganancias en la industria pertenecían a
extranjeros.

 Durante la última etapa del régimen de Profirió Díaz, el país entro en crisis en todos
los ámbitos de la vida nacional; en el político, en el económico, en el social y en el
cultural. El gobierno dictatorial e inflexible de Díaz fue incapaz de enfrentarlos por lo
que surgieron levantamientos que finalmente llevaron al movimiento de
la Revolución Mexicana en 1910.

México bajo Porfirio Díaz, al igual que Estados Unidos y otros países en el
Hemisferio Occidental, se modernizó a finales del siglo XIX y principios del XX.

Tras treinta años en el poder, el General Porfirio Díaz, había logrado una aparente
estabilidad económica y social en México. Pero esto a consecuencia de la opresión
del pueblo, mismo que estaba muy descontento con el gobernante. 

Cuando Porfirio Díaz volvió a reelegirse, en el año de 1910, se sabía de antemano


que continuaría dando preferencia a los capitales extranjeros y a los grupos
nacionales que estaban de acuerdo con sus políticas, esto fue un factor más para el
descontento popular.

Había muchas razones por las que los porfiristas y sus administradores científicos,
que creían en gobernar de acuerdo a principios “científicos”, preferían concentrarse
en los avances económicos. La historia del México independiente había consistido
de numerosas revoluciones entre facciones políticas hambrientas de riquezas y
poder. Personalizando el régimen en una figura central, que ejercería por muchos
años, los científicos esperaban evitar la clase de conflictos que habían plagado y
dividido al país por décadas.

Conclusión

En ciertas etapas del Porfiriato los grandes avances fueron muy importantes para la
nación, cuando estos ni siquiera eran posibles. Demostrando que su mandato lo
estaba logrando.
En él hubo una gran visión para la nación pero al gobernar por tanto tiempo ya no
era un visionario si no un dictador con hambre de poder.

En los inició de su mandato en 1876 y culminó formalmente con su renuncia en 1911. En


total, el caudillo duró 31 años formalmente en el poder y 35 dirigiendo el destino de México,
5 de los cuales correspondieron al gobierno títere de Manuel González.

A un es incierto que pasaría si hubiera estado más tiempo en el poder una nueva esperanza
para México para poder hacerlo potencia mundial o terminar en decencia al ya no poder
tener control sobre la nación.

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