DE COBARDES A VALIENTES

La Biblia dice en Josué 1:7 que Dios habla con Josué antes de entrar a
lo que sería su llamado, conquistar la tierra de Canaán para Israel.
JOSUÉ 1:7 “7SOLAMENTE ESFUÉRZATE Y SÉ MUY VALIENTE,
PARA CUIDAR DE HACER CONFORME A TODA LA LEY QUE MI
SIERVO MOISÉS TE MANDÓ; NO TE APARTES DE ELLA NI A
DIESTRA NI A SINIESTRA, PARA QUE SEAS PROSPERADO EN
TODAS LAS COSAS QUE EMPRENDAS. ”
Si queremos prosperar en la vida tenemos que ser esforzados y
valientes, pero el diablo no quiere que tu seas valiente y para eso
utiliza un espíritu de cobardía que se oponga a tu valentía y a tu
esfuerzo.
Así que, hoy Dios quiere hablarnos de cómo podemos superar la
cobardía, que pudiera estar en nuestras vidas.
II INTRODUCCIÓN
Acompáñeme a la Biblia. En este pasaje el apóstol Pablo le está
mandando un mensaje a su discípulo Timoteo:
2ª Timoteo 1:5-7 “5trayendo a la memoria la fe no fingida que
hay en ti, la cual habitó primero en tu abuela Loida, y en tu
madre Eunice, y estoy seguro que en ti también. 6Por lo cual
te aconsejo que avives el fuego del don de Dios que está en ti
por la imposición de mis manos. 7Porque no nos ha dado Dios
espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio
propio. 8Por tanto, no te avergüences de dar testimonio de
nuestro Señor, ni de mí, preso suyo, sino participa de las
aflicciones por el evangelio según el poder de Dios,”
Timoteo era un hombre de una verdadera fe, seguro lo corroboraban
sus obras, porque la fe sin obra es muerta, así que convengamos que
Timoteo era un hombre de una fe con obras, pero Timoteo estaba
dejando de anunciar el evangelio por temor a los soldados romanos
que estaban persiguiendo, encarcelando y matando a quienes
predicaban a Cristo, y Timoteo, siendo joven, sintió temor y se estaba
acobardando.
Por eso el apóstol Pablo le dice: Aviva el fuego del don que Dios te dio
para anunciar a Cristo, y le da la razón de esto: Porque Dios nos ha
dado espíritu de amor, poder y dominio propio, para vencer a la
cobardía y poder usar nuestros dones para su reino.
Timoteo estaba siendo cobarde y había dejado de hacer aquello para
lo que Dios lo había llamado, y eso podría estarte pasando hoy, que
estés dejando de hacer aquello para lo que Dios te ha llamado.
Por eso el apóstol Pablo nos recuerda “las herramientas” que Dios
nos ha dejado para poder cumplir, a cabalidad, con todo aquello a
que tenemos que hacer, de aquí que el mensaje de hoy lleva por
título una pregunta: De cobardes a Valientes.
III HUYAMOS DE LA COBARDÍA
El diccionario define a la cobardía como el acto de dejar de hacer lo
que se tiene o lo que se quiere hacer por falta de valor y ánimo
La palabra griega para cobardía es Deilia que significa: Timidez o
temor causado por falta de fuerza moral.
Timoteo tenía el llamado para anunciar el evangelio y Dios le había
dado los dones necesarios para ello, a través de la imposición de las
manos de Pablo, pero un espíritu de cobardía, o sea, un espíritu de
timidez y temor se lo estaba impidiendo.
(NTV) 2ª Timoteo 1:7 “7 Pues Dios no nos ha dado un espíritu
de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina.”
EFECTOS DE LA COBARDÍA.
Uno de los efectos más tremendos de la cobardía lo encontramos en
el Libro de Levítico:
Levítico 26:36 “36Y a los que queden de vosotros infundiré en
sus corazones tal cobardía, en la tierra de sus enemigos, que
el sonido de una hoja que se mueva los perseguirá, y huirán
como ante la espada, y caerán sin que nadie los persiga. ”
La cobardía te hace imaginar las peores cosas contra ti mismo, hasta
cosas que no pudieran jamás impedirte avanzar, como el que se
mueva una hoja del árbol, te infundirá tal temor que huirás de ese
llamado y perderás las oportunidades, aunque nadie te ataque o te
persiga.
La cobardía te hace crear enemigos imaginarios en tu cabeza y son
los propios enemigos que tú creaste en tu mente y en tu corazón, los
que han detenido para no hacer eso que sabes bien que Dios te ha
dado dones para que lo lleves a cabo y con ello darle la gloria y honra
a él, extendiendo el territorio de su reino, pero por cobardía no los
has hecho.
La cobardía va a provocar una serie de miedos que te van a gritar que
no puedes, que eso es mucho riesgo, que para qué nos esforzarnos si
de todos modos nunca vamos a poder hacerlo, que nadie nos valora,
que nadie nos quiere y cosas semejantes a estas, que harán que no
nos movamos hacia donde Dios quiere.
VAMOS A VER COMO PODEMOS VENCER LA COBARDÍA.
IV. TRES ESPÍRITUS NOS HA DADO DIOS PARA VENCER A LA
COBARDÍA
Primero alejémonos del pecado y la desobediencia a Dios.
Muchas veces la cobardía es provocada por la desobediencia a Dios,
de hecho, ese verso de Levítico se refiere a una de las últimas
consecuencias de la desobediencia a Dios, (le encargo que lea
completo el capítulo 26 completo y Deuteronomio 28 del 15 en
adelante, ambos hablan de la consecuencia de la desobediencia a
Dios). Así que, para empezar a vencer ese espíritu de cobardía,
asegúrese de no estar en pecado ni desobedeciendo a Dios.
La palabra dice que Dios nos ha dado tres espíritus para combatir al
espíritu de cobardía: Nos ha dado el espíritu de amor, el de
poder y el de dominio propio, y vamos a analizarlos de atrás para
adelante, así que empecemos con el dominio propio.
¿CUÁL ES TU LLAMADO?
Quiero hacer un paréntesis para aclarar a que me refiero con tu
llamado. No estoy hablando de que tengas el llamado a ejercer
alguno de los cinco ministerios que Jesús dejó para su iglesia:
apóstol, profeta, evangelista, Pastor o maestro.
No, tú llamado es todo aquello que Dios haya puesto en tu corazón,
para lo cual debes saber y creer que te ha dado los dones necesarios
para hacerlo, con lo que vas a honrar a Dios, vas a glorificar a Dios,
cualquiera que sea ese llamado, si es estudiar en una universidad o
hacer una maestría, o poner u negocios, o alcanzar un puesto
importante, o casarte o tener hijos, o todos estos, los que sean, tú, si
eres un Cristiano entendido, vas a honrar a Dios con todo lo que
hagas, vas a testificar de Cristo en todo lo que hagas. Ese es tu
llamado.
1) ESPÍRITU DE DOMINIO PROPIO. –
El diccionario lo define como el dominio de sí mismo para no hacer
cosas que desagraden a Dios.
Dios nos dotó del dominio propio para defendernos y no pecar, pero
también para no hacer cosas de las que después nos arrepentiríamos,
como darle rienda suelta a la ira y al coraje, o la frustración, o la
tristeza o cualquier sentimiento negativo, el dominio propio nos
ayudará a no reaccionar en base a esas malas emociones.
No está mal que las tengamos de vez en cuando, pues somos seres
emocionales, pero no debemos dejarnos llevar por ellas. Y para eso
ya te dio Dios el espíritu de dominio propio a través del Espíritu
Santo.
(NVI) Proverbios 16:32(b) " ...Más vale el dominio propio que
conquistar ciudades"
DOMINIO PROPIO PARA EVITAR EL JUICIO FINAL.
Cuando el apóstol Pablo, estando encarcelado en Roma tuvo unos
minutos para predicar a Jesucristo delante de Félix, un gobernador
romano, Pablo usó el dominio propio para enseñar como evitar el
juicio final en el infierno:
Hechos 24:25 “25Pero al disertar Pablo acerca de la justicia,
del dominio propio y del juicio venidero, Félix se espantó, y
dijo: Ahora vete; pero cuando tenga oportunidad te llamaré.”
Usted sabe que Roma era una nación llena de ídolos y con mucha
depravación sexual, y por eso Pablo aprovechó para predicar como
evitar el juicio venidero usando el dominio propio.
2) ESPÍRITU DE PODER. –
Si el dominio propio es para no hacer cosas que nos detengan o
retrasen en lo que debemos hacer, el espíritu de poder es para
avanzar, para poder hacer lo que tenemos que hacer.
La palabra griega para poder es Dynamis y significa: Fuerza,
capacidad y habilidad. Así que tienes que creer que Dios ya te ha
dado la fuerza, la capacidad y la habilidad para hacer eso que está en
tu corazón y que sabes que Dios te lo ha puesto ahí y te ha dado un
llamado para hacerlo.
3) EL ESPÍRITU DE AMOR. –
Esta palabra griega es Ágape que define al amor a Dios, porque
es un amor sin condición. Es el amor que Dios tiene para nosotros y
que nosotros debemos tener para él
La Biblia enseña que todo lo que hagamos lo debemos hacer con
amor, si no, de nada serviría:
1ª Corintios 13:1-3 “1Si yo hablase lenguas humanas y
angélicas, y no tengo amor, vengo a ser como metal que
resuena, o címbalo que retiñe. 2Y si tuviese profecía, y
entendiese todos los misterios y toda ciencia, y si tuviese toda
la fe, de tal manera que trasladase los montes, y no tengo
amor, nada soy. 3Y si repartiese todos mis bienes para dar de
comer a los pobres, y si entregase mi cuerpo para ser
quemado, y no tengo amor, de nada me sirve.”
Sin amor nada somos, porque Dios es el amor, sin Dios no seríamos
nada, si hacemos cosas buenas y correctas, pero no lo hacemos por
amor a Dios de nada nos sirve, si dejamos de hacer cosas malas o
incorrectas, pero no lo hacemos por amor a Dios, no nos cuenta para
nada.
Por eso al espíritu de dominio propio y de poder, Dios nos puso
primero el espíritu de amor, para que todo lo que hagamos o dejemos
de hacer esté fundado en el amor a Dios.

V DESPERTAD A LOS VALIENTES

Ser valiente y no cobarde hará que en el tiempo de Dios él te use o él
ponga las condiciones para que salgas de tu cueva y vayas hacia ese
lugar de gobierno al que Dios te ha llamado, como le pasó a Gedeón.
El pueblo de Israel se escondía en cuevas, era humillado gravemente
por los madianitas que venían y estropeaban su cosecha y robaban
sus ganados, por eso ellos se escondían en cuevas. Era un tiempo de
escasez y humillación para Israel, pero Gedeón, a pesar de no estar
haciendo nada era un hombre valiente, por eso el Ángel de Dios se le
aparece y le dice:
Jueces 6:11-12 " 11Y vino el ángel de Jehová, y se sentó
debajo de la encina que está en Ofra, la cual era de Joás
abiezerita; y su hijo Gedeón estaba sacudiendo el trigo en el
lagar, para esconderlo de los madianitas. 12Y el ángel de
Jehová se le apareció, y le dijo: Jehová está contigo, varón
esforzado y valiente."
No importa si por ahora no estás haciendo lo que Dios te ha dicho,
puede ser un tiempo de reposo, de reflexión, de saber esperar los
tiempos de Dios, solo cuida de no estar siendo cobarde, que si hoy se
te apareciera el ángel de Dios pueda también decirte: varón esforzado
y valiente, mujer esforzada y valiente, es tu turno.
La valentía nos hace estar listos para cuando Dios ponga la
oportunidad.
PADRES VALIENTES DE UNA GENERACIÓN QUE HARÁ
PROEZAS.
Los que somos padres necesitamos vencer la cobardía y ser valientes
porque nuestros hijos son muy estimados a los ojos de Dios y
nosotros somos quienes les damos el primer impulso para que ellos
salgan a la vida a hacer el propósito que Dios tiene para ellos.
Salmo 127:4 " 3He aquí, herencia de Jehová son los hijos;
Cosa de estima el fruto del vientre. 4Como saetas en mano del
valiente, Así son los hijos habidos en la juventud."
No sé si estabas siendo cobarde en alguna área de tu vida, pero hoy
Dios quiere trasladarte al reino de los valientes.

VI. INVOCA EL ESPÍRITU DE AMOR, PODER Y DOMINIO

PROPIO
El apóstol Pablo le está hablando a Timoteo primero de su fe, le hace
recordar la fe activa que él tiene, porque lo demuestran sus obras y
las de su madre Eunice y su abuela Loyda. Después le aconseja avivar
los dones que Dios le ha dado para llevar cabo su llamado, para que
se valiente y no cobarde al enfrentar su llamado de vida.
Dios te ha dado dones especiales y únicos para que seas valiente y
lleves a cabo todo lo que Él ha puesto en tu corazón para hacer, y
para llevar a cabo tus propósitos, Dios te ha puesto un espíritu de
poder para que avances hacia la meta y un espíritu de dominio propio
para que no te desvíes o te dejes engañar por tus malos deseos y los
puedas resistir.
Pero todo esto cubierto por un espíritu de amor como el que Él
tiene por ti.
No sé qué has estado haciendo que a Dios no le agrada o que has
estado dejando de hacer que Dios te ha dicho que tienes que hacer,
por culpa de ese espíritu de cobardía que no viene de parte de Dios.
Hoy solo tienes que orar e invocar lo que Escrito está, que tú ya
tienes de parte de Dios ese espíritu de amor, aunque no lo sientas,
cree que ya lo tienes.
Ora y cree que tienes ese espíritu de poder que te da las fuerzas, la
capacidad y la habilidad para hacer eso que está en tu corazón,
sabiendo que viene de Dios.
Y ora para creer que Dios ya te ha dado todo el dominio propio que
necesitas para no pecar y desagradar a Dios, sino para detenerte y
dominar tus emociones y tus pensamientos.
VII MINISTRACIÓN
Oremos para recibir ese espíritu de amor, poder y dominio propio que
Dios nos ha dado para que junto con los dones especiales y únicos
que le ha dado a cada quien, podamos salir a hacer nuestro llamado
que Dios ha puesto en nuestros corazones.
No se te olvide que con todo lo que hacemos predicamos el evangelio,
damos testimonio de Cristo, honramos su sacrificio y ejercemos el
ministerio de la reconciliación, para que otros se reconcilien con Dios.
Amén.