GuiaPractica TetanosNeonatal
GuiaPractica TetanosNeonatal
GuiaPractica TetanosNeonatal
tétanos neonatal
Guía práctica
Segunda edición
S ALU
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V I MU ND
I
2005
Se publica también en inglés con el título: Neonatal Tetanus Elimination. Field Guide
ISBN 92 75 11602 4
ISBN 92 75 31602 3
NLM WC370
Prefacio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ix
1. Antecedentes . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
1.1 Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
1.2 Estrategia del programa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
1.3 Gestión del programa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
1.4 Sistemas de información . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
4. Definición de casos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
4.1 Caso probable . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
4.2 Caso confirmado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
4.3 Caso descartado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
iii
iv ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
5. Vigilancia . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14
5.1 Identificación de las zonas de alto riesgo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
5.2 Notificación desde los lugares donde se detectan casos . . . . . . . . . . . . . 17
5.3 Detección activa de casos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
5.4 Retroinformación . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
6. Investigación de casos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
6.1 Introducción . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
6.2 Investigación del caso . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
6.3 Uso del formulario para la investigación de casos . . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 34
Cuadros
Cuadro 1. Métodos para reducir las oportunidades de vacunación
perdidas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
Cuadro 2. Esbozo de los elementos que deben considerarse
en el seguimiento del programa . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 29
Cuadro 3. Plan de vacunación recomendado para las mujeres en edad
fértil que no han sido previamente vacunadas . . . . . . . . . . . . . . . 31
Cuadro 4. Plan de vacunación recomendado para los niños . . . . . . . . . . . . . 31
Cuadro 5. Eficacia de la vacuna con toxoide tetánico,
por dosis administrada . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 32
Figuras
Figura 1. La incapacidad para succionar, debida a los espasmos
de los músculos masticadores . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8
Figura 2. El niño muestra los primeros síntomas de rigidez generalizada
y trismo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8
Figura 3. Opistótonos (espalda arqueada) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 8
Figura 4. Después del tratamiento . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Figura 5. Los espasmos cesan gradualmente y la rigidez
generalizada desparece . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Anexos
Anexo 1. Líneas generales de un plan de acción para la eliminación
del tétanos neonatal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 39
Anexo 2. Flujograma del sistema de información sobre
el tétanos neonatal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 41
Anexo 3. Situación actual de los casos de tétanos a nivel nacional por
municipio o distrito (formulario) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 42
Anexo 4. Diagnósticos finales de los casos descartados
de tétanos neonatal (formulario) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 43
Anexo 5. Lista detallada de casos de tétanos neonatal (formulario) . . . . 44
Anexo 6. Formulario para la investigación de casos de tétanos neonatal . . 45
Anexo 7. Carné o tarjeta de vacunación contra el tétanos . . . . . . . . . . . . . 48
Anexo 8. Indicadores seleccionados para la evaluación del programa . . . 49
Anexo 9. Informe mensual de vigilancia activa (formulario) . . . . . . . . . . . 50
SOBRE LAS GUÍAS PRÁCTICAS DE INMUNIZACIÓN
vii
PREFACIO
El propósito primordial de esta guía práctica para la eliminación del tétanos neonatal
es ofrecer a quienes ya han logrado reducir a cero la incidencia de esta enfermedad,
así como a los médicos y otros miembros del personal de salud que trabajan para al-
canzar ese objetivo a nivel nacional, estatal o local, un enfoque progresivo para orga-
nizar y llevar a cabo actividades de control y eliminación. Se destacan en esta obra
los progresos hechos por los sistemas de vigilancia en cuanto a la detección y con-
trol de zonas de alto riesgo, y la ejecución de actividades especiales de inmunización
dirigidas a las mujeres en edad fértil que viven en ellas. El objetivo de estas medidas
es complementar los procedimientos rutinarios, tales como la administración de la
vacuna triple contra la difteria, la tos ferina y el tétanos (DPT) a los lactantes y a los
niños, y de toxoide tetánico y diftérico (TD/Td) a los escolares y a las mujeres em-
barazadas. No se proporciona información detallada sobre la higiene de los proce-
dimientos del parto y el puerperio, ya que este tema se trata más a fondo en otros
documentos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Gran parte de la información contenida en esta guía, ya presentada en su prime-
ra edición*, se obtuvo directamente de documentos técnicos preparados por la Orga-
nización Panamericana de la Salud (OPS) y otras oficinas regionales de la OMS. Se
consultaron además diversos documentos y publicaciones, y se aprovechó la expe-
riencia de campo de quienes han logrado avanzar en la eliminación de la enferme-
dad. Algunas de estas obras se indican al final. Los anexos contienen modelos de for-
mularios que pueden utilizarse tal como se presentan o adaptarse a las necesidades
específicas de cada programa.
* Guía práctica para la eliminación del tétanos neonatal. Cuaderno Técnico No. 35. Washington,
DC: Organización Panamericana de la Salud; 1993.
ix
1. ANTECEDENTES
1.1 Introducción
En muchos países del mundo, el tétanos neonatal ha sido la causa de más de la mi-
tad de las defunciones por enfermedades prevenibles por vacunación y de cerca de
14% de las muertes neonatales. Se estima que en la década de 1970 más de 10 000
recién nacidos morían anualmente por esta enfermedad en las Américas. El tétanos
neonatal se puede prevenir por medio de la vacunación o utilizando procedimientos higiénicos en
el parto y el puerperio.
En 1989, la Asamblea Mundial de la Salud aprobó una resolución en la que ins-
taba a eliminar el tétanos neonatal en todo el mundo para el año 1995. Esta reso-
lución fue apoyada por el Consejo Directivo de la OPS. A fin de alcanzar ese objeti-
vo, los ministros de salud de los Estados Miembros de la OPS han iniciado
actividades programáticas específicas con el apoyo de la Organización y de varios
organismos internacionales. El fortalecimiento de la lucha contra el tétanos neona-
tal debe encuadrarse en el marco general de la intensificación de las actividades del
Programa Ampliado de Inmunización (PAI) y de los programas de salud de la fami-
lia y la comunidad; asimismo, es necesario aprovechar los conocimientos adquiri-
dos durante las campañas de erradicación de la poliomielitis y la eliminación del sa-
rampión. El programa de eliminación del tétanos neonatal como problema de salud
pública difiere de otros programas de erradicación, tales como los de la viruela y la
poliomielitis, porque siempre existe la posibilidad de un retorno de la enfermedad,
incluso después que el número de casos haya bajado a cero. Por ello, es de suma im-
portancia que los programas sean sostenibles en el tiempo.
1.2 Estrategia del programa
El tétanos neonatal se puede controlar más rápidamente si las actividades y los re-
cursos se concentran en las zonas geográficas de alto riesgo. La identificación de los
municipios o localidades de alto riesgo permite que las autoridades sanitarias sepan
dónde se debe aplicar la estrategia principal del programa, que consiste en vacunar
a todas las mujeres en edad fértil al menos con dos dosis de toxoide tetánico y dif-
térico. Es necesario aclarar que aun cuando en este informe a veces se mencione solo
el toxoide tetánico, se recomienda la administración de toxoide tetánico y diftérico,
ya que si bien la inmunidad contra el tétanos se logra con toxoide tetánico, es con-
veniente aprovechar la oportunidad para administrar ambos toxoides. Para alcanzar
la meta de eliminación del tétanos neonatal es necesario intensificar los componen-
tes principales de las estrategias del PAI y de los programas de salud de la familia y la
comunidad.
1
2 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
Con fines operativos, se considera que la eliminación del tétanos neonatal como
problema de salud pública se logra cuando todos los municipios de un país tienen
tasas anuales de tétanos neonatal inferiores a 1 por 1 000 nacidos vivos. Sin embar-
go, se debe analizar cuidadosamente este criterio antes de aplicarlo en el terreno, ya
que, por ejemplo, si un municipio de 1 000 000 de habitantes y alrededor de 30 000
nacimientos anuales notificara 29 casos de tétanos por año podría considerarse que
está cumpliendo con el criterio de eliminación establecido, pero esto en la práctica
sería inaceptable. Asimismo, en municipios con muy baja densidad poblacional se
podría plantear la situación opuesta. Por esta razón, si bien se ha definido el crite-
rio de eliminación, lo aconsejable es evaluar el logro de la meta o los progresos rea-
lizados en tal sentido en función de las características particulares de cada país y
municipio.
Para alcanzar el objetivo de eliminación del tétanos neonatal se recomienda que
los países tomen las medidas siguientes:
necesarios para adoptar las medidas pertinentes (véase el Anexo 2). La información
obtenida por medio del sistema de vigilancia se resumirá en informes regulares y
prácticos que se distribuirán a todo el personal de salud responsable, así como a los
encargados de la gestión del programa.
Como mínimo, hay que recopilar ciertos datos, analizarlos y preparar informes
nacionales. Esa información comprende los siguientes aspectos:
Sin embargo, la forma esporulada es muy resistente al calor y a los antisépticos co-
rrientes. Las esporas pueden sobrevivir de 10 a 15 minutos en autoclave a 121 °C, y
son relativamente resistentes a los fenoles y otras sustancias químicas. Las esporas
solo germinan en medios anaerobios. Si no están expuestas a la luz solar, pueden
persistir en el suelo durante varios meses e incluso años.
2.4 Reservorio
Los bacilos están muy dispersos en el medio ambiente y en las heces de ciertas espe-
cies animales y de personas infectadas, por lo tanto, el suelo fertilizado con abono
puede ser muy infeccioso. En las zonas agrícolas, muchos adultos normales pueden
ser portadores fecales. El suelo contaminado con heces presenta gran concentra-
ción de esporas. También pueden encontrarse esporas en el polvo de la calle y en la
superficie de la piel.
2.5 Transmisión
La transmisión generalmente se produce por infección cuando se corta el cordón
umbilical en condiciones antihigiénicas o cuando el muñón umbilical se manipula
incorrectamente, en particular cuando se “cura” o se colocan “apósitos” o “emplas-
tos” con sustancias contaminadas con esporas tetánicas (por ejemplo, estiércol).
2.6 Incubación
El período de incubación del tétanos neonatal es el tiempo que transcurre desde el
comienzo de la infección hasta la aparición del primer síntoma, que por lo general
es el trismo. En los neonatos, la infección se produce poco después del nacimiento.
Por lo común, el período de incubación es de seis días, con límites de tres a 28 días.
2.7 Transmisibilidad
El tétanos no se transmite directamente de una persona a otra.
2.8 Susceptibilidad e inmunidad
Los niños nacidos de madres inmunes adquieren una inmunidad transitoria que
dura alrededor de cinco meses. Sin embargo, si un niño nace antes de que hayan pa-
sado 15 días desde que la madre recibió la segunda dosis o una dosis subsiguiente,
no estará protegido porque la vacuna no habrá tenido tiempo para estimular la pro-
ducción de anticuerpos. En la madre (y también en los niños a partir de las 6 sema-
nas de edad), se puede lograr un grado considerable de inmunidad con dos dosis de
toxoide tetánico adsorbido administradas con un intervalo de cuatro semanas
como mínimo. La serie primaria de dos dosis debe reforzarse con una tercera dosis
aplicada de seis a 12 meses después de la segunda. Se cree que con tres dosis de to-
xoide tetánico la inmunidad dura por lo menos cinco años, en tanto que cinco do-
sis confieren inmunidad de por vida.
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 7
3. ASPECTOS CLÍNICOS
3.1 Patogénesis
En el neonato, la puerta de entrada del bacilo es casi siempre el lugar donde se cor-
ta el cordón umbilical. En presencia de tejido necrótico y posiblemente de otros mi-
croorganismos, las esporas germinan y los bacilos se multiplican en el sitio de la ino-
culación primaria, y se produce la toxina tetanospasmina, que es la causa de los
síntomas y signos. La toxina se propaga por la sangre y los vasos linfáticos. Al pare-
cer, avanza primero por los nervios motores principales y después por la médula es-
pinal. Las manifestaciones clínicas características del tétanos se deben al efecto de
la tetanospasmina en el sistema nervioso central. Se presentan espasmos, como el
trismo, porque la toxina permite la excitación de las células nerviosas de muchos
grupos musculares, por lo general en forma simultánea. Pueden producirse convul-
siones y el sistema nervioso autónomo puede resultar afectado.
3.2 Cuadro clínico
Hay tres clases de tétanos básicamente diferentes según el cuadro clínico: 1) local,
2) cefálico y 3) generalizado. El tétanos neonatal es un tipo de tétanos generalizado
y se examina en detalle en este manual; las otras dos formas, que son más comunes
en los niños mayores y en los adultos, no serán tratadas aquí.
A menudo, la incapacidad para succionar, que se manifiesta por lo general entre el
tercero y el décimo día de vida, es el primer signo en el neonato. A pesar de los esfuer-
zos que hace el lactante, los espasmos del músculo masetero (mandíbula superior e
8 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
El daño cerebral debido a las dos primeras categorías puede provocar espastici-
dad, movimientos corporales extraños o espasmódicos y convulsiones. Los recién
nacidos que sufren lesiones cerebrales caen a menudo en estado de estupor o coma
y por lo general comienzan a sufrir convulsiones hacia el final del primer día de vida.
La contusión, que por lo común es un traumatismo secundario relacionado con el
parto de nalgas u otras dificultades obstétricas, se produce en particular en los ni-
ños de gran tamaño nacidos a término. Con frecuencia, los síndromes de lesión ce-
rebral producen laxitud de la boca y la lengua; puede faltar el reflejo de succión y es
posible que ya desde el primer día de vida el niño no logre tragar. Ninguno de estos
trastornos produce trismo, pero el tétanos sí.
La infección más importante del período neonatal es la meningitis, a menudo
acompañada de septicemia. La meningitis neonatal puede deberse a infecciones
causadas por estreptococos del grupo B, Escherichia coli, Listeria monocytogenes o mi-
croorganismos de los géneros Klebsiella, Enterobacter y Serratia. Las dos primeras re-
presentan 70% de las infecciones bacterianas neonatales sistémicas. Los lactantes
con meningitis neonatal pueden presentar letargo, convulsiones, episodios de ap-
nea, rechazo a los alimentos, hipotermia o hipertermia y, a veces, dificultad respira-
toria durante la primera semana de vida o después. Un síntoma frecuente es el
abombamiento de la fontanela.
Las infecciones causadas por estreptococos del grupo B pueden afectar a los ni-
ños nacidos con peso bajo cuyas madres tuvieron complicaciones obstétricas. Los
síntomas pueden aparecer en forma temprana, durante las primeras 48 horas de
vida, o tardía, entre 10 días y cuatro meses después del nacimiento. A menudo la ap-
nea es el primer signo, y puede haber neumonía con insuficiencia respiratoria.
En todos esos casos no hay trismo y las convulsiones son diferentes de las provo-
cadas por el tétanos: tienden a producirse con movimientos espasmódicos más cor-
tos y menos rápidos, que a menudo afectan solo a una parte del cuerpo. En el téta-
nos neonatal no se observa abombamiento de la fontanela.
Los trastornos metabólicos incluyen hipoglucemia, frecuente sobre todo en los ni-
ños pequeños o hijos de madres diabéticas, e hipocalcemia, con dos momentos de
máxima incidencia durante el período neonatal: el primero a los dos o tres días de
vida (en los niños nacidos con peso bajo y a menudo después de un traumatismo
obstétrico), y el segundo a fines de la primera semana de vida o principios de la se-
gunda. Suelen ser niños de gran tamaño, nacidos a término, que consumen voraz-
mente leche con una relación calcio-fósforo inferior a la óptima, como la leche de
12 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
vaca. La tetania hipocalcémica del recién nacido puede producir convulsiones y a ve-
ces laringoespasmo, pero las convulsiones son diferentes de las del tétanos; por lo ge-
neral, se observan también temblores o contracciones espasmódicas de los múscu-
los. No provoca trismo ni la rigidez generalizada característica del tétanos. Los
lactantes con tetania parecen encontrarse bien entre un episodio convulsivo y otro.
Investigaciones prácticas. En el curso de las investigaciones, en especial de casos
no hospitalizados, el diagnóstico debe realizarse en forma retrospectiva sobre la
base de la información que proporciona la madre. La validez de la información que
se obtenga de esta forma dependerá de la capacidad y voluntad de la persona en-
trevistada para responder, así como del tacto, los conocimientos y la habilidad del
encuestador.
Las preguntas básicas que hay que hacer a la madre se relacionan con las siguien-
tes características de la historia del niño:
• ¿Nació vivo?
• ¿Dónde nació: en la casa o en un establecimiento de salud?
• ¿Quién atendió el parto: una persona capacitada o una sin capacitación?
• ¿Tuvo la madre otros hijos que murieron en circunstancias semejantes?
• ¿Se desarrolló el niño normalmente durante los primeros días de vida?
• ¿Podía mamar durante ese período?
• ¿Dejó de mamar?
• ¿Presentó algún otro problema de alimentación entre el tercero y el decimo-
quinto día de vida, o cuando comenzó la enfermedad?
• ¿Presentó rigidez generalizada, trismo o risa sardónica?
• ¿Tuvo espasmos o convulsiones que aumentaron en frecuencia e intensidad?
• ¿Qué razón dio la madre de la muerte del niño?
3.4 Laboratorio
La confirmación del diagnóstico mediante estudios de laboratorio es difícil. Es po-
sible intentar aislar los microorganismos sembrando material del muñón umbilical
en un medio de cultivo adecuado. En la mayoría de los casos no se aíslan microor-
ganismos del sitio de la infección. No existe ninguna anomalía específica caracterís-
tica del tétanos que pueda observarse en el laboratorio. El diagnóstico es clínico y no está
sujeto a confirmación bacteriológica.
3.5 Complicaciones
1) Laringoespasmo: espasmo de las cuerdas vocales o de los músculos de la respi-
ración que obstaculiza la función respiratoria.
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 13
3.6 Tratamiento
El tratamiento generalmente consiste en la administración de antitoxina tetánica y
relajantes musculares, y en alimentación intravenosa.
Control de los espasmos musculares. El paciente debe permanecer en un cuarto
silencioso y oscuro, donde se hayan reducido al mínimo todos los posibles estímu-
los auditivos, visuales, táctiles y de cualquier otro tipo. En primer lugar, se deben ad-
ministrar medicamentos apropiados para reducir el número y la gravedad de los es-
pasmos. Se ha comprobado que el diazepam (Valium) resulta eficaz para controlar
los espasmos y la hipertonía sin deprimir los centros corticales.
Tratamiento con antitoxina. Una vez lograda la sedación adecuada, se adminis-
tra una sola dosis (de 3 000 a 6 000 UI) de inmunoglobulina antitetánica humana
por vía intramuscular. Si no se dispone de inmunoglobulina sérica humana se debe
aplicar antitoxina tetánica a los pacientes que no presenten reacciones de hipersen-
sibilidad al suero de caballo. La antitoxina se administra por vía intravenosa e intra-
muscular (la mitad de la dosis por cada vía).
Tratamiento antimicrobiano. El antimicrobiano de elección es el Metronidazol
oral (o intravenoso) (30 mg/kg/día, con intervalos de seis horas; máximo de 4
g/día), y se da con el objeto de disminuir las formas vegetativas del C. tetani. La pe-
nicilina G parenteral (100 000 U/kg/día) es un tratamiento alternativo. Se reco-
mienda dar tratamiento por 10 a 14 días.
Tratamiento de la herida. Después que el paciente ha recibido sedantes y antitoxi-
na, se debe limpiar y desbridar completamente la herida.
Tratamiento de sostén. Se debe disponer de oxígeno. Durante las primeras etapas
de la enfermedad se evitará la alimentación oral debido al riesgo de broncoaspira-
ción. El gota a gota intravenoso continuo permite suministrar agua, electrólitos, glu-
cosa y aminoácidos.
14 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
4. DEFINICIÓN DE CASOS
A efectos de la notificación, se ha adoptado una definición normalizada de caso clí-
nico a nivel nacional. La categoría “caso probable” es especialmente útil cuando los
informes provienen de parteras tradicionales. Los informes basados en un examen
hospitalario se consideran como casos básicamente confirmados.
4.1 Caso probable
Se consideran como probables los siguientes casos:
• Todo lactante que haya tenido una enfermedad con las características del té-
tanos en el primer mes de vida, y que haya llorado y se haya alimentado nor-
malmente durante los dos primeros días de vida.
• Toda muerte de un neonato que succionaba y lloraba normalmente durante
las primeras 48 horas de vida.
5. VIGILANCIA
Es imprescindible establecer un sistema de vigilancia epidemiológica, o mejorarlo
cuando ya se cuenta con él, al mismo tiempo que se intensifican las medidas de con-
trol. En su forma más básica, la vigilancia puede llevarse a cabo mediante un examen
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 15
de los registros de defunción. Sin embargo, como existe la posibilidad de que los re-
gistros estén incompletos, este método se utilizará únicamente como complemento
de otros mecanismos de vigilancia y notificación más activos. En las zonas clasifica-
das inicialmente como de bajo riesgo de tétanos neonatal, la mejora del sistema de
vigilancia confirmará esa clasificación o bien proporcionará información adicional
sobre la presencia de la enfermedad, lo que llevará a redefinirlas como zonas de alto
riesgo. En las zonas que ya han sido clasificadas como de alto riesgo, el sistema per-
mitirá determinar el efecto de las medidas de control.
Los centros asistenciales que notifiquen casos de la enfermedad deben distinguir
entre el tétanos neonatal y el no neonatal. Estas categorías de la enfermedad se in-
dicarán por separado en los informes. En algunas zonas de alto riesgo tal vez se pue-
da realizar la vigilancia mediante sitios centinelas, y un representante del PAI nacio-
nal podría inspeccionarlos con regularidad. Teniendo en cuenta la procedencia de
los pacientes neonatos en una zona determinada, se pueden establecer áreas de ser-
vicio o zonas de influencia de los hospitales (véase el apartado 5.2), así como las áreas
del país que no informan casos (áreas silenciosas). Para que un sistema de vigilancia
epidemiológica funcione eficazmente, deberá obtener información semanal positiva
y negativa, es decir, cada unidad notificadora le enviará semanalmente la notifica-
ción de la presencia o ausencia de casos. Esto es muy importante para facilitar la de-
finición de las zonas de alto riesgo y mejorar la vigilancia.
5.1 Identificación de las zonas de alto riesgo
Las medidas de vigilancia deben centrarse en las zonas de alto riesgo, es decir las zo-
nas del país que tienen una incidencia anual de tétanos neonatal superior a 1 caso
por 1 000 nacidos vivos. La clasificación de un municipio o distrito como de “alto”
o “bajo” riesgo no es permanente; se efectúa para orientar las acciones de prevención
y vigilancia y puede modificarse en función de las nuevas pruebas halladas. Así, por
ejemplo, si la incidencia nacional es de 0,5 casos anuales por 1 000 nacidos vivos, to-
dos los municipios con una incidencia superior a la nacional pasan a ser municipios
de riesgo, aun cuando su tasa anual sea inferior a 1 caso por 1 000 nacidos vivos.
En un estudio realizado en 11 países de América del Sur en 1992, se observó que
de 2 212 localidades solo 191 (9%) presentaban alto riesgo de tétanos neonatal y
contribuían con 79% del total de los casos notificados en esos países. En lo que ata-
ñe a la distribución de casos notificados entre las zonas urbanas y rurales, en el mis-
mo estudio se observó que 58% de estos casos se habían producido en zonas urba-
nas en las que la población dispone de servicios de prevención y de atención
prenatal y del parto.
Los datos sobre tétanos neonatal obtenidos regularmente por medio de los siste-
mas nacionales de información sobre morbilidad y mortalidad suelen ser suficientes
para detectar zonas de alto riesgo. Siempre que sea posible, esas zonas se indicarán
16 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
a nivel de distritos o municipios. Las zonas de alto riesgo tendrán prioridad y serán clasifi-
cadas como municipios en fase de ataque, es decir, municipios que deberán contar con un
buen sistema de vigilancia epidemiológica y donde se realizarán acciones intensivas
de vacunación con objeto de alcanzar a la brevedad posible coberturas con TD2 su-
periores a 90%. En particular, deben iniciarse campañas para administrar a todas las
mujeres en edad fértil por lo menos dos dosis de toxoide tetánico y diftérico cuan-
to antes, y continuar con el esquema de cinco dosis cuando no existen anteceden-
tes de vacunación por medio del programa regular. Es necesario identificar los ca-
sos que no se notifican por medio del sistema nacional de vigilancia regular. Se han
utilizado varios criterios para definir los municipios o localidades de alto riesgo, en-
tre los cuales cabe señalar los siguientes:
• Uno o varios casos de tétanos neonatal notificados en cada uno de los últi-
mos tres años.
• Incidencia de la mortalidad o la morbilidad por tétanos neonatal superior al
promedio nacional en cualquiera de los tres años precedentes.
• Zonas con datos dudosos sobre la incidencia.
• Zonas con datos dudosos sobre las coberturas de vacunación con DPT, Td,
o con ambas.
Además, en el futuro, todo municipio o localidad que no haya sido clasificado an-
tes como de alto riesgo será ubicado dentro de esa categoría si notifica uno o varios
casos. Cuando en ese municipio de alto riesgo se hayan alcanzado coberturas de va-
cunación con Td2 superiores a 90% y, por medio de un buen sistema de vigilan-
cia, se compruebe que la incidencia de tétanos neonatal es inferior a 1 por 1 000
nacidos vivos, se lo clasificará como municipio en fase de mantenimiento, esto es,
un municipio donde se lleva a cabo una adecuada vigilancia epidemiológica y se to-
man medidas para mantener las altas coberturas de vacunación alcanzadas. La cla-
sificación de los municipios en fase de ataque o de mantenimiento no es definitiva
sino que tiene un valor operacional y se destina a orientar las acciones de elimina-
ción de la enfermedad. El municipio puede ser reclasificado en cualquiera de las fa-
ses en función de las pruebas epidemiológicas.
Áreas silenciosas. Los municipios o localidades sobre los cuales haya datos dudo-
sos en cuanto a la incidencia de la enfermedad o la cobertura de vacunación de las
mujeres en edad fértil, o donde los partos tengan lugar sobre todo fuera de un hos-
pital y nunca se hayan notificado casos, se considerarán como áreas posiblemente
“silenciosas” en relación con el tétanos neonatal. En estos sitios habrá que intensi-
ficar la detección de casos por medio de tareas tales como el examen de los regis-
tros hospitalarios, entrevistas casa por casa, encuestas comunitarias, etcétera.
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 17
• Cada centro asistencial debe designar a una persona y a uno o dos suplentes
para que lleven un registro de los casos probables y los comuniquen a las
autoridades de salud encargadas de la vigilancia (puede ser la misma persona
que notifica otras enfermedades prevenibles por vacunación, enfermedades
infecciosas, o ambas).
• En los hospitales, el médico o el personal de enfermería asignado deberán ins-
peccionar los pabellones de enfermedades pediátricas e infecciosas, además
de examinar los registros cada mes.
• El sistema de vigilancia incluirá por lo menos una fuente de notificación o uni-
dad notificadora designada en cada municipio o localidad (o unidad geopolíti-
ca pequeña equivalente). Estas fuentes deben presentar como mínimo un infor-
me semanal de la presencia o ausencia de casos probables de tétanos neonatal.
• En cada nivel del sistema de salud se debe llevar algún tipo de registro que po-
sibilite seguir la pista de todos los casos probables notificados y conocer el re-
sultado de los exámenes o investigaciones. Puede usarse una lista detallada,
como la que se presenta en el Anexo 5, o bien una diferente.
• Cada centro asistencial deberá recibir instrucciones para que notifique de in-
mediato los casos probables de tétanos neonatal a los coordinadores locales
o estatales de las actividades de vigilancia. Los funcionarios estatales presen-
tarán informes regulares (semanales) a las autoridades nacionales, y estas in-
formarán a la oficina del PAI de la OPS cada seis meses.
• Los funcionarios a cargo de la vigilancia del programa deberán efectuar visitas
reiteradas para establecer y observar todos los niveles del sistema de notificación.
• Un epidemiólogo u otro miembro del personal especialmente preparado in-
vestigará todos los casos probables para tratar de confirmar el diagnóstico y
detectar posibles fuentes de infección. (Por ejemplo, si una partera tradicio-
nal asistió un parto, se la visitará para determinar si ha recibido capacitación
apropiada, si emplea procedimientos higiénicos, etcétera.)
• Cada caso probable deberá identificarse con un número único que se usará
toda vez que se haga referencia al caso. Este número figurará en el informe e
incluirá ciertas claves de identificación, como T para tétanos, una clave co-
rrespondiente al país o estado, y el año (por ejemplo, T ELS 92-001).
18 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
6. INVESTIGACIÓN DE CASOS
6.1 Introducción
Todos los casos notificados, siempre que sea posible, deben ser investigados por
personal del servicio municipal, provincial, estatal o nacional especialmente prepa-
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 19
rado. Es necesario confirmar todo diagnóstico de tétanos neonatal efectuado por per-
sonas que no estaban capacitadas para hacerlo. Se investigarán todos los casos pro-
bables registrados en los hospitales, ya que se puede obtener información del expe-
diente médico de los pacientes hospitalizados o de los archivos del hospital. Todas
las preguntas pertinentes a la investigación de casos en los servicios de salud tam-
bién deberían hacerse en los casos que se encuentren en la comunidad. Se hará lo
posible para determinar la razón por la cual el recién nacido contrajo el tétanos.
Con este objetivo, se debe dar respuesta a los siguientes interrogantes:
7.2 Informes
A fin de que las actividades de control resulten beneficiosas, es necesario organizar
los datos sobre los casos e informar al respecto. Todos los informes tendrán las si-
guientes secciones: 1) introducción, 2) descripción de los casos, 3) análisis de los
datos, 4) métodos de vigilancia, 5) actividades de control, 6) problemas detectados
y 7) conclusiones y recomendaciones.
Se presentarán informes periódicos resumidos con los siguientes datos:
ción dirigidos a las zonas de alto riesgo se señalarán las localidades de máximo ries-
go y las actividades que deberán llevarse a cabo. En particular, en el plan deberá de-
tallarse la forma en que se extenderá la cobertura de vacunación y se mejorará la hi-
giene de los procedimientos de atención del parto y el puerperio.
8.3 Determinación de la cobertura con toxoide tetánico
Para la determinación válida de la tasa de cobertura con toxoide tetánico y diftérico,
el uso de las estadísticas regulares de los servicios de salud presenta algunos proble-
mas. Como se administran varias dosis de toxoide tetánico y diftérico con interva-
los diferentes durante los 30 años de vida reproductiva de la mujer, y continuamen-
te hay mujeres que ingresan en este grupo y otras que salen, por razones prácticas
se debe tener en cuenta solo la segunda dosis aplicada durante cada período de tres
años. Al cabo de un año, las dosis de TT2 administradas durante el primer año del
período precedente ya no deberán considerarse y se reemplazarán con las dosis apli-
cadas durante el año que ha concluido. Cuando se haya administrado la segunda
dosis de toxoide tetánico y diftérico a la totalidad de las mujeres en edad fértil, la
meta consistirá en administrar la tercera, cuarta o quinta dosis.
8.4 Actividades de vacunación
Las principales beneficiarias de la vacunación deben ser las mujeres en edad fértil (por lo común,
las mujeres de 12 ó 15 años a 45 años de edad). Al administrar toxoide tetánico a las mu-
jeres en edad fértil se inmuniza al grupo que más lo necesita. Se ha comprobado que
la vacunación de las mujeres en edad de procrear (embarazadas y no embarazadas)
disminuye considerablemente la incidencia del tétanos neonatal.
Vacunación de mujeres
La vacunación de las mujeres en edad fértil es el método más sencillo para contro-
lar el tétanos neonatal. Las mujeres que no hayan sido vacunadas deben comenzar
con una serie de dos dosis de toxoide tetánico aplicadas con un intervalo no menor
de cuatro semanas, una tercera dosis entre 6 y 12 meses después, una cuarta al año
de la tercera y una quinta al año de la cuarta.
Para las mujeres que tengan antecedentes documentados de haber completado
su serie primaria de vacunación con DPT o toxoide tetánico, basta con una dosis de
refuerzo cada diez años. A las mujeres embarazadas que carezcan de una documen-
tación que muestre que han recibido las dosis adecuadas se les debe administrar la
primera dosis cuanto antes durante el embarazo, y la segunda a más tardar tres se-
manas antes de la fecha prevista del parto. Las mujeres que hayan recibido dos do-
sis de toxoide tetánico y diftérico en un embarazo anterior, se deberán aplicar una
tercera dosis en el nuevo embarazo. La tercera dosis confiere protección durante
cinco años.
24 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
indican en el cuadro 1.
Vacunación de las mujeres Se necesitan pocos recursos adicionales
Además, el personal de salud debe que llevan a su hijo a vacunar Hay probabilidades de que las mujeres con hijos
examinar sus propios procedimientos, queden embarazadas otra vez
puesto que quizá sean también una de
las causas por las que se pierdan mu- Vacunación de las mujeres Se necesitan pocos recursos adicionales
que acuden a una sesión Permite vacunar a algunas mujeres antes del primer
chas oportunidades de vacunación. Por de vacunación con sus hijos embarazo
ejemplo, algunos miembros del perso- o sin ellos
9.3 Indicadores de la vigilancia Cuadro 2. Esbozo de los elementos que deben considerarse
1) Notificación completa: al menos 80% en el seguimiento del programa
de las unidades notificadoras de- Enfoque de la vigilancia Frecuencia
ben elevar informes semanales de
Capacitación
la presencia o ausencia de casos, Planificación Anual
según el modelo presentado en el Ejecución Trimestral
Evaluación Semestral
Anexo 9.
2) Oportunidad: al menos 80% de los Plan de acción
Actualización Semestral
casos captados deben notificarse Vigilancia Trimestral
dentro de las 24 horas de su de-
Sistema de vigilancia
tección. Notificación Inmediata, si hay casos
Semanal, haya o no casos
3) Investigación: al menos 80% de to- Hospitales Trimestral
dos los casos probables deben in-
vestigarse completamente dentro Abastecimiento de vacunas Trimestral
2) Todos los departamentos o regiones de salud deben llevar un registro para vi-
gilar la cobertura de vacunación en los municipios o localidades.
3) En las zonas de alto riesgo, la vacunación con Td2 a Td5 debe alcanzar una
cobertura de 90% o más de las mujeres de 12 ó 15 a 45 años de edad.
El cálculo exacto de las coberturas de vacunación con toxoide tetánico de las mu-
jeres en edad fértil es muy complejo y por ello, con el objeto de orientar las acciones
de los países y municipios se han empleado estimaciones de cobertura. En el grupo
de las mujeres en edad de procrear, que es el destinatario del programa de vacuna-
ción, cada año se incorporan las mujeres que cumplen 12 años y salen las que cum-
plen 46 años, por lo que se recomienda llevar un registro anual de las mujeres de 12
a 45 años de edad que reciben Td1, Td2, Td3, Td4 o Td5. De este modo, es posible
estimar la cobertura sumando las dosis aplicadas en años anteriores y luego divi-
diéndolas entre el grupo destinatario, o bien hacer cálculos más complejos en los
que se tomen en cuenta las mujeres que entran y las que salen del grupo. A los fines
de los programas de control y eliminación del tétanos neonatal, la experiencia ha
demostrado que basta con hacer estimaciones de la cobertura utilizando como nu-
merador el total de mujeres vacunadas desde el inicio de las acciones y como deno-
minador el número de mujeres del grupo beneficiario que vive en la zona.
9.6 Indicadores de la higiene del parto
Todos los partos deben ser asistidos por personal médico o parteras debidamente
capacitadas. Debe notificarse el porcentaje de partos asistidos en estas condiciones.
notificados de tétanos neonatal disminuyó en 70% entre 1989 y 1991, y en 98% en-
tre 1989 y 2003.
10.2 Plan de vacunación, contraindicaciones y reacciones adversas
En el cuadro 3 se presenta el plan de vacunación recomendado para las mujeres en
edad fértil, incluidas las embarazadas. No hay ninguna contraindicación para admi-
nistrar simultáneamente otras vacunas
de bacterias y virus vivos e inactivados. Cuadro 3. Plan de vacunación recomendado para las mujeres
Los intervalos indicados en el cuadro se en edad fértil que no han sido previamente vacunadas
refieren al tiempo mínimo aceptable Dosis Plan
entre vacunaciones; no existen interva-
los máximos. TT1 o Td1 En el primer contacto o cuanto antes durante el embarazo
rus vivos e inactivados sin ningún TT4 o Td4 De uno a cinco años después de la tercera dosis o durante
problema. un embarazo posterior
En la mayoría de los países de las TT5 o Td5 De 1 a 10 años después de la cuarta dosis o durante
Américas, se vacuna a los 2, 4 y 6 meses un embarazo posterior
de edad. El esquema del cuadro presen-
ta los intervalos mínimos, de cuatro semanas, que deben respetarse entre las prime-
ras dosis.
La vacuna es inocua y eficaz incluso para las personas que padecen una enferme-
dad aguda leve. No hay indicios de que esté contraindicada para las mujeres emba-
razadas.
En los países donde se ha propagado la infección por el virus de la inmunodefi-
ciencia humana (VIH), se deben administrar los antígenos del PAI según los planes
normalizados. Estas recomendaciones son válidas tanto para
las personas con infección asintomática por el VIH, como Cuadro 4. Plan de vacunación
para las que presentan el cuadro clínico (sintomático) de recomendado para los niños
SIDA. (Sin embargo, las personas infectadas por el VIH que Dosis Plan
presenten síntomas no deben ser vacunadas con BCG.)
Las vacunas adsorbidas actuales son sumamente eficaces DPT1 A las 6 semanas de edad
e inocuas, y provocan solo reacciones locales leves que por lo DPT2 A las 10 semanas de edad
general desaparecen solas y no requieren ningún tratamien-
to. Aunque en los años cuarenta se notificaron reacciones DPT3 A las 14 semanas de edad
anafilácticas agudas, se cree que fueron causadas por la pre-
DT A los 5 años de edad
sencia de agentes sensibilizantes provenientes del medio de
32 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
En los lugares donde no sea posible mantener la cadena de frío, se deberá prepa-
rar un programa detallado y exacto para vacunar al grupo destinatario en un plazo
de 30 días sin depender de la cadena. Como el toxoide tetánico es muy estable a 37 °C
durante tres o cuatro semanas, no se necesita la cadena de frío en los programas de
corta duración. Sin embargo, cuando la vacuna no se use deberá conservarse en
condiciones apropiadas, como se indicó en párrafos anteriores, a fin de mantener
su potencia.
10.5 Abastecimiento de las vacunas
El éxito del programa depende absolutamente de la distribución eficaz y en canti-
dad suficiente de vacunas en buen estado. A fin de garantizar que las vacunas estén
disponibles en los centros de vacunación los días previstos, es imprescindible con-
tar con sistemas de distribución eficientes. Para que no se interrumpan las activida-
des de vacunación, se mantendrán reservas de vacunas a nivel nacional o regional
que puedan usarse cuando se necesiten.
No se deben conservar vacunas vencidas. Debe tenerse en cuenta el uso de los últimos
meses a fin de determinar si la vacuna restante podrá utilizarse antes de su fecha de
caducidad.
34 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
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36 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
Introducción
En esta sección se deberá explicar brevemente la razón por la cual se está fortale-
ciendo el programa de control del tétanos neonatal.
Antecedentes
Descripción geográfica de la zona: país, estado, distritos.
Características demográficas: mujeres en edad fértil, población general, número
de nacidos vivos, tasa de fecundidad, distribución de la población urbana y rural.
Indicadores de salud: tasas de mortalidad de lactantes y materna; procedimien-
tos utilizados en el parto, cobertura de atención prenatal y de vacunación (datos sepa-
rados, si están disponibles en relación con las embarazadas); número de parteras tra-
dicionales, porcentaje de partos domiciliarios y de partos asistidos por parteras
tradicionales; cálculo de la demanda de servicios de salud sobre la base de la cober-
tura de vacunación con la primera y la tercera dosis de DPT, y con BCG.
Magnitud del problema: número de casos, tasa por 1 000 nacidos vivos; propor-
ción de defunciones por tétanos neonatal en nacidos vivos; costo estimado del tra-
tamiento de los niños con tétanos neonatal.
Descripción epidemiológica de los casos de tétanos neonatal investigados: distri-
bución geográfica; descripción del lugar del parto (dónde se produjo y por quién fue
asistido); atención prenatal, estado de vacunación y edad de la madre; número de
partos y embarazos anteriores de la madre.
Política actual de control del tétanos neonatal: población destinataria, plan de
vacunación y estrategias de vacunación.
Movilización social: material educativo sobre el tétanos neonatal; tipo de partici-
pación de los medios de comunicación.
Justificación del plan de acción
Principales problemas observados y prioridades señaladas.
Objetivos del plan
Grupos destinatarios específicos y resultados previstos.
Actividades prioritarias que se iniciarán o considerarán
Hay que proponer varias actividades, con una descripción y explicación breve de
cada una. Se considerarán las siguientes: 1) nuevas actividades de vigilancia (encuestas,
40 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
Lista detallada Ante la primera Los datos iniciales de los casos notificados se Actualización manual de las listas.
de los casos detección incorporan en una lista detallada de variables Resúmenes estadísticos basados en las listas.
notificados de un caso de interés, que se actualiza a medida que se
recopilan nuevos datos en la investigación.
Formulario o ficha Ante un caso Caso investigado por el personal de salud. Formularios o fichas revisados, depurados y completados
de investigación probable El personal de salud local conserva una copia por el personal de salud en el nivel local.
de casos de la ficha hasta el final de la investigación, Base de datos sistematizada a nivel nacional
completa los datos y los envia al nivel superior. con la información completa de cada caso notificado.
Informe de las Semanal Cada unidad notificadora debe informar Base de datos sistematizada con el listado de unidades
unidades que semanalmente la presencia o ausencia de casos notificadoras y las fechas respectivas de notificación
notifican casos de tétanos neonatal. semanal, para confirmar si cumplen con la notificación
y detectar las áreas silenciosas.
Lista detallada de
casos de tétanos
neonatal en la región
Informe de notifica-
ción semanal de los
países
Base de datos de
casos confirmados de
tétanos neonatal de la
región
42 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
Período de a
Jurisdicción
TOTAL
a
MEF: Mujeres en edad fértil.
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 43
PAÍS
TOTAL
ANEXO 5. Lista detallada de casos de tétanos neonatal
44
a Se considera migrante a la madre de un recién nacido con tétanos que ha vivido menos de un año en la localidad donde se produjo el parto.
b Si no corresponde, colocar NC.
c Fuente de notificación: R = regular, BA = búsqueda activa, M = médico (particular), H = hospital (público o privado), F = farmacia, P = público general, O = otra.
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 45
Fecha de nacimiento
EXPEDIENTE MÉDICO
No. _______________
Nombre del padre
CENTRO ASISTENCIAL
Nombre de la madre __________________
__________________
Dirección
__________________
Pueblo/Ciudad Localidad/Municipio Urbano Rural
Estado/Provincia País
¿Succionaba y lloraba normalmente durante por lo menos los dos primeros días de vida? Sí No
Fecha de hospitalización
Fecha de hospitalización
(continuación)
Edad de la madre No. de embarazos anteriores No. de hijos vivos No. de hijos muertos
Nombre Dirección
Nombre Dirección
Describa las condiciones de higiene y los instrumentos que se usaron para cortar el cordón umbilical
Embarazadas
No embarazadas
* MEF: Mujeres en edad fértil. Usualmente de 14 a 39 años. Este grupo de edad es diferente en algunos países.
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 47
(continuación)
Teléfono
COMENTARIOS (por ejemplo, razones por las cuales no se administró la vacuna, superficie sobre la cual tuvo lugar el parto,
etcétera)
48 ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
Apellidos:
Nombres:
Año de nacimiento:
Dirección:
Distrito:
Departamento o estado/provincia:
Antecedentes de vacunación con DPT/DT durante la infancia
Número de dosis:
Fecha de la última dosis
No se sabe:
Toxoide tetánico para adultos
Fecha de aplicación
Primera dosis:
Segunda dosis:
Tercera dosis:
Cuarta dosis:
Quinta dosis:
ELIMINACIÓN DEL TÉTANOS NEONATAL: GUÍA PRÁCTICA 49
JURISDICCIÓN:
CRITERIOS PERÍODO
Instrucciones: en la columna “No.”, indique el número de casos nuevos probables (P) y confirmados (C) de tétanos neonatal notificados cada mes; en la columna “Notificación
oportuna”, coloque una marca si el informe fue presentado puntualmente, o una “T” si fue entregado tarde.
Meses
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 TOTALES
UNIDADES
QUE
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
No.
50
NOTIFICAN
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
oportuna
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
Notificación
ORGANIZACIÓN PANAMERICANA DE LA SALUD
TOTAL